Qué Quiere Una Mujer - Serge André_001

andre-01 4/14/03 12:28 PM Page 3 psicología y psicoanálisis DIRIGIDA POR OCTAVIO CHAMIZO . andre-01 4/14/03 12:28 PM Page 4 traducción de MARGARITA GASQUE y ANTONIO MARQUET . andre-01 4/14/03 12:28 PM Page 5 ¿QUÉ QUIERE UNA MUJER? por SERGE ANDRÉ siglo veintiuno editores . LAVALLE 1634. 11 A.v. DELEGACIÓN COYOACÁN. BUENOS AIRES. s.a.v. MÉXICO. parís título original: que veut une femme? derechos reservados conforme a la ley impreso y h echo en méxico / printed and made in mexico . s. siglo xxi editores argentina. D.a. 1995 © éditions du seuil. 2002 © siglo xxi editores. CERRO DEL AGUA 248. ARGENTINA portada de marina garone primera edición en español.andre-01 4/14/03 12:28 PM Page 6 siglo veintiuno editores. d e c. s. 04310. de c. C1048AAN.a.F. isbn 968-23-2367-3 primera edición en francés. andre-01 4/14/03 12:28 PM Page 7 a la que sabe mentirme. ... .Esta página dejada en blanco al propósito. hace patente la dif erencia. Se trata más bien de un velo inmate rial. proponiendo la respuesta que. en la medida en que se interpone entre la mujer y ella mis ma. se impone a la pregunta inicial: ¿qué quier e una mujer? Por enigmática que sea. Desde su primera publicación. en la Fondation Universitaire. que estuvo agotada durante varios años. SERGE ANDRÉ junio de 1994 [9] . convoca indirectamente al análisis a su deber d e bien-decir y. Nada he modificado para la presente edición. entre su identidad y su cuerpo. esta respuesta no es otra cosa que la constat ación de la eterna virginidad de la mujer. 1987). en Navarin en l986. supo hacer resonar ese silencio: Giulia Sissa. entre la palabra de donde deriva su deseo y el silencio donde se perpetúa su goce.andre-01 4/14/03 12:28 PM Page 9 PREFACIO Esta obra. varios autores intentaron trabajar el mismo tema . según creo. dur ante el año 1982-1983. basándose en el famoso ejemplo de la pitonisa. si no la oposición. Virginidad que nada tiene que ver con l a existencia de la membrana anatómica del himen. pero no irreal. entre dos modos de proclamación de la verdad: el oráculo y el veredicto. mejor que los psicoanalistas. presenta la versión escrita y abr eviada de un seminario que impartí en Bruselas. Permítaseme rendir aquí homenaje a quien. cuyo lib ro Le corps virginal (Vrin. Sin embargo. ninguno respondió al desafío que lancé en el último capítulo de este libro. andre-01 4/14/03 12:28 PM Page 10 Esta página dejada en blanco al propósito. . Quizás lo notemos mejor hoy en día: mientras el saber se acumula.que se caracter iza habitualmente por su ausencia de efecto de verdad. para las mujeres. ni limitarse a lo que llevaría consigo la convicción o la cre encia del sujeto (así como la del psicoanalista). sino ella misma la que verificaría su eficacia. tal saber ya no tiene efecto alguno sobre nadie. El saber psicoanalítico no funciona. en el momento en que Freud acentuará la importancia. a propósito de la feminidad. Además. la promesa de una nueva relación c on el saber --el saber tal como se descifra en el inconsciente-. no una creencia. lo verdadero se delata mejor en el error.andre-01 4/14/03 12:28 PM Page 11 1 ¿QUÉ PUEDO SABER DE ESO? ¿Qué asegura la pertinencia de la intervención del psicoanalista? Lacan lo dice: un sa ber colocado en posición de verdad. disponible.. que compromete nuestra subjetividad. es necesario precisar qu e la importancia que se otorga al término "verdad" no puede confundirse con el reg istro de la exactitud. en posición de verd ad. Como Freud lo mostró en su estudio sobre el lapsus. si l a verdad no puede decirse sino en una estructura de ficción --lo que ilustra por sí mismo el mito de Edipo-. sino como punto umbilical. Lo que se trata de obtener es una certeza. El dispositivo psicoanalítico c onlleva. sino a lo que circunscribe como imposible de decir. laguna. de la relación p rimordial con la madre. Por otra parte. [11] . 1 A lo "prehistórico" lo veremos surgir o resurgir. La aparente abstracción de esta fórmula no debe oc ultarnos lo que conlleva de inaudito. y esta certeza es adyacente no a lo qu e dice la ficción. desbordante y accesible a todos . el descubrimiento y la puesta en acto de un saber que nos afecta. r epresentación faltante. no es esta ficción la que constituye en sí el término del p roceso analítico. por el contrario. es decir. Recordemos a este respecto las construcciones a las que Freud se entrega con el Hombre de l os Lobos y el recurso que lo lleva a formular la noción de una realidad "prehistóric a" del sujeto.1 La verdad es finalmente el encuentro siempre fallido con un real que no alcanza a nombrarse en el discurso. pues. por funcional que sea. El psicoanálisis no pe rmite saber todo. como lo afirma la sabiduría ancestral. de Freud a Lacan. y en la teoría de la castración la respuesta que el inconsciente elabora fre nte a la imposibilidad de decir que encarna el sexo femenino. Tomando esto en cuenta. Las líneas que siguen tienen la ambición de mostrar cómo. Respuesta que. Lacan nos invita a comprend er que esta falla no es del orden de una imperfección que los progresos de la inve stigación permitirían colmar. pues ambas postulan que la mujer sería como un escondite que oc ultaría algo. La castración es la construcción por la cual el ser humano busca decir la falta. porque el inconsciente dice "no-todo". Grupo Editorial Grijalbo. la muerte. ilustra que la falta no puede decirse como tal. pero. seres hablantes. dependi entes del significante. Perrier y Granoff. Le désir et le féminin. el psicoanálisis ha cons eguido designar en la feminidad la figura mayor. si. La primera confirmación que el psicoanalista realiza es que el humano siempre desea hablar de lo que no puede decir (la mujer. en colmarla. ¡hay que decirlo! ¿Qué significa "ser u na mujer"? He aquí la Pregunta por excelencia. Aubier-Montaigne [El problema de la perversión en la mujer.y el odio a la mujer como mistificación --mentira. Crítica. sino que constituye la clave de la estructura misma de l saber.). el padre. puesto que ninguna evidencia nos of rece su apoyo cuando se trata de saber lo que es un hombre. Barcelona. de ese "no -todo". Conviene entonces dar forma afirmativa a nuestra proposición: el psicoanáli sis permite saber "no-todo". . de una manera u otra. uno nunca está seguro de el lo. pues el inconsciente no dice todo. Decir la falta ya consiste. De ahí la inevitable oscilación entre el culto a la mujer como misterio --enigma -. ¿Cómo podría ser de otra manera si somos. e tc. "el inconsciente está estructur ado como un lenguaje"? El psicoanalista no puede adherirse de ninguna manera a l a fórmula de Wittgenstein según la cual "aquello de lo que no se puede hablar hay qu e callarlo".andre-01 4/14/03 12:28 PM Page 12 12 ¿QUÉ PUEDO SABER DE ESO? sino en la medida en que opera como saber agujereado por una falla central --lo que determina el estatuto de la verdad como decir a medias. En cuanto a lo que e lla puede desear. y sin duda original. por este mismo hecho. nuestra vía de investigación se define por una máxima im posible: aquello de lo que no se puede hablar. Pero estas dos posiciones no hacen más que mantener el desconocimiento de lo que constituye la verdadera cuest ión de la feminidad.2 2 Cf. como lo formula Lacan. 1980]. sigue siendo una ficción. Sigmund Freud. para Freud. en Obras completas. " n'importe quoi". Notaremos que estas teorías sexuales infantiles tienen una importancia tal que. Henos aquí pues. PUF ["Sobre las teorías sexuales infantiles". al órgano en tanto que atrapado en la dialéctica del deseo. Él subraya en efecto. más allá de la materialidad de la carne. Freud escribe que "se extravían de ma nera grotesca". propiciando una especie de funcionamiento alucinatorio del pensamiento: "Si el varoncito lle ga a ver los genitales de una hermanita. sus manifestaciones evidencian que su p rejuicio ya ha adquirido fuerza bastante para doblegar a la perPierre Guiraud.. Las constataciones que es posible efectuar mediante la ob servación. Partiremos pues.en un inventario que muestra hasta qué punto el ser hablante se afana en significar que el sexo es metáfora. "zizi". el significante se introduce en lo real. "Les theories sexuelles infantiles". según Freud. De éstas. L a vie sexuelle. pues lo que se trata de discernir no es una diferencia de los órganos o de los cromosomas que determinan nuestra configuración. dentro de esta relación. en Obras completas. van bastante más allá de un error. Esta realidad --como lo afirmará Freud desde 1908--4 reconoce un solo órgano. donde vendrán a alojarse las primeras teorías sexuales infantiles. "análogas a las soluciones calificadas de `geniales' qu e los adultos intentan dar a los problemas que plantea el mundo y que sobrepasan el entendimiento humano". "formulaire".5 En otras palabras. D ictionnaire érotique. Buenos Aires. que designa en ese momento de su obra con el término "pene". carecen para no sotros de consecuencias. Payot. de una mentira o de una disimulación. "callibistri". "berlingot". tanto del exterior como del interior del cuerpo humano. que la percepción misma se somete a estas teorías. "un no-saber (eine Umwissenheit) que nada puede mitigar". I] que la percepción. Amorrortu]. 5 Se subrayará en las elaboraciones del proyect o del "Esquisse d'une psychologie scientifique" (1895) [Sigmund Freud. y así pues "inte rpretado" por el significante. sino una di ferencia de los sexos --designando con esta palabra..andre-01 4/14/03 12:28 PM Page 13 ¿QUÉ PUEDO SABER DE ESO? 13 El genio de Freud consiste en haber señalado que las consideraciones anatómicas nada ayudan en este punto. en el centro de la cuestión de la relación entre saber y verdad.-. 4 3 . escribe. IX. Desde el comienzo hay una ignorancia. pero que no obstante contienen "un fragmento de pura verdad" y s on. de este punto: la realidad del sexo es diferente de la del órgano anatómico. está organi zada por las representaciones. vol. "Proyecto de psicología". vol. El Dictionnaire érotique de Pierre Guiraud3 ilustra la multiplicidad de los nombres que el uso corriente de la lengua francesa prop orciona al sexo --"abricot". de que sin duda estuvo presente y luego fue removido. para retomar un términ o lacaniano. La vie sexuelle. La castración constituye así eso que excluye --o. lo que viene a ocupar el lugar en el que se elaboraban las teorías sexual es infantiles. PUF 6 . en 1923. ya sea la ausencia. coh onestan (beschönigen) la contradicción entre observación y prejuicio mediante el subte rfugio de que aún sería pequeño y ya va a crecer. como si la percepción no funcionara. "La organización genital infantil (Una interpolación en la teoría de la sexualidad"). es la castración misma. todavía es chiquito. es decir. Freud escribe: "Desconocen esa falta. a modo de consuelo y conciliación: "El. es reconocida como falo (de menos) y no como s exo femenino. no hay más que un solo sexo. eso que forcluye. La falta de pene se entiende como resultado de una castración. creen ver un miembro a pesar de todo.al sexo femenino como tal." Quince años más tarde. el pene." Y agrega más adelante: "Al parecer. [ Sigmund Freud. en Obras completas. En 1923." Valoremos el deslizamiento que se produce así de 1908 a 1923. y aho ra se le plantea al niño la tarea de habérselas con la referencia de la castración a s u propia persona. si es reconocida. La tesis de 1908 decía que no había más que un solo sexo.6 lejos de cuestionar nuevamente la existencia de una ignorancia fundamental d el sexo femenino. llegan a la co nclusión. pero la encubre haciendo de la falta un modo de existencia del falo.andre-01 4/14/03 12:28 PM Page 14 14 ¿QUÉ PUEDO SABER DE ESO? cepción. de enorme importancia afectiva. pero cuando ella sea más grande l e crecerá. cuando vuelve sobre esta primera aproximac ión.. el falo. pp. Mie ntras que en 1908.. la acentúa aún más y agrava el alcance de los extravíos de la teoría. con ello nunca se descubren los genitales femeninos. pu es con el descubrimiento de la primacía del falo. siempre pres ente pero no necesariamente "saliente": desarrollado en los niños y "en vías de desa rrollo" en la niña. el niño no constataba en absoluto la falta. no comprueba la falta del miembro. Di cho de otra manera. La castración hace de la ausencia un resto de la presencia. Hablando de los niños que descubren las partes genitales femeninas. y después. lo que constituye el centro del saber del que el psicoanalista espera efectos de verdad. En el artículo de 1923 sobre "L'organisation génitale infantile". vol. pero éste tiene dos modos de manifestación: ya sea la presencia. 141-150]. sino que regularmente dice. Lo que significa que la falta de pene. la tesis del sexo único se mantiene. en 1923 la constata (puesto que la niega y experimenta una contr adicción). poco a poco. pero matizada. XIX. Por ello. se revela sin embargo incapaz de p roporcionar la clave que permitiría salir de ella. Se comprenderá también la razón de la s dificultades y contradicciones con las que Freud deberá enfrentarse en los dos g randes artículos de 1931 y 1932 sobre "La feminidad" y "La sexualidad femenina". en Obras completas. de que él se tope c on pared en "Análisis terminable e interminable": la teoría de la castración. vol. La pregunta de la verdad del saber analítico se halla en7 "La vagina es apreciada aho ra como albergue del pene. Si esta concepción ha molestado. para ella también el sexo femenino permanece no descubierto. es porque no se ha evaluado su sutileza. Ahora bien. Cuando Freu d concluye que el sexo femenino nunca es descubierto. recibe la herencia del vientre materno" [Sigmund Freu d. con un saber en falta (el de la castración). de saber si se puede. en consecuencia.8 Pues la cuestión que se plantea. mejor aún. y termina lacónicamente su a rtículo sobre "La organización genital infantil" asentando la perpetuación de esta ign orancia hasta la edad adulta en la equivalencia significante entre la vagina y e l seno materno.andre-01 4/14/03 12:28 PM Page 15 ¿QUÉ PUEDO SABER DE ESO? 15 es un embellecedor (es el sentido propio de "beschönigen"). en suma. adquiere conocimiento de su sexo con la ayuda del significante fálico. "La organización genital infantil". Y. XIX. como sexo femenino. y que se agudiza particularmente cuando la práctica freudiana se dirige a las mujeres. Basta con observarlos para darse cuenta de que los pequeños se entregan muy precozmente a exploraciones que no dejan duda sobre su conocimi ento de la anatomía.7 no interpreta que el niño y la niña no tengan conciencia de la mate rialidad de la vagina. p. o. a nivel significante. produce una paradoja. es también el punto de anclaje del mito de Edipo sobre el cual Fre ud se propone fundar su práctica. pedazo del cuerpo. ella también ve un falo disminuido o castrado. lograr que la verd ad surja de un ser que viene a encarnar la falta en sí misma: el ser femenino. la teoría de la castr ación no es solamente la creencia que el neurótico instala en el lugar de un imposib le de soportar. La vagina es bien conocida como órgano. dice Freud. un eufemis mo (sentido figurado). 149]. . Se observará que la niña no está menos sujeta que el niño a esta lógica del eufemismo: ella también. uno no se sorprenderá. 8 De sarrollaremos este punto más adelante. Se trata. Pero el descubrimiento freudiano implica que estas constataci ones no son significadas en el inconsciente como oposición de dos sexos complement arios. pero no es recon ocida. aunque p ermita explicar la construcción de la neurosis. partenaire del psicoanalista ¿No es ésta. esposa del Sr. K. la pregunta misma que la histérica plantea al psicoanalista? Al interrogar a su manera irónica la pote ncia del padre y su capacidad de desear.. K. El sujeto del psicoanálisis es histérico . corre peligro de ser descubierta. y Dora por su parte se siente precipitada. De ahí el asomo del desafío --entre esperanza y despecho-. y negándose por otro lado a la posición de objeto sexual que le asigna el fantasma masculino.). K. Dora se rebela contra esta humillación. habrían sellado un pacto en el cual ella es el objeto?9 Esta interrogante..andre-01 4/14/03 12:28 PM Page 16 16 ¿QUÉ PUEDO SABER DE ESO? tonces directamente vinculada al modo en el que la feminidad se toma en cuenta. o. La histérica. Apunta al límite del mito edípico y del poder del falo. pero Fre ud no lo comprende en 1899. excede ampliamente el campo de una clínica de la neurosis. de quien él quiere a toda costa que reconozca su posición de objeto sexua l para un hombre (Sr. más exac9 Recordemos que la joven Dora había ido a consultar a Freud por instig ación de su padre. como Lacan lo subrayó después de Freud. . desposeída de su aura de misterio. cuando la pregunta de Dora apunta más bien hacia el eni gma que representa para ella la otra mujer (Sra. Es jus tamente lo que ella exige que le explique: ¿verdaderamente se deja engañar por el pa dre? Y. ¿sabe él lo que es y lo que quiere una mujer? Recordemos el fracaso de Freud con Dora. K. y al empujarla hacia el Sr. no hace sino repetir el fantasma de Dora: ¿su padre y el Sr. El discurso de la h istérica tiene como función demostrar que el mito edípico y la lógica del falo desconoce n la existencia de la mujer como tal. rebajada al rango de un puro objeto de inter cambio entre su padre y el Sr. y amante del padre de Dora). La posición de Dora se sostiene en el culto de una feminidad m isteriosa encarnada en el cuerpo de la Sra. la histérica sostiene un cuesti onamiento que desborda ampliamente las relaciones intersubjetivas de su novela f amiliar. ese cuerpo es su pregunta. por la cual la histérica intenta atrapar su ser más allá de lo que ella pueda ser para un hombre. K. K. En efecto.que marca a menudo su relación transferencial con el analista. finalmente. K. La Sr a. el proceso analítico implica la histerización del sujeto. K. sujeto a la histeria. "Les fantasmes hystériques et leur relation à la bisexualité". vol. y otro con carácter femenino. la única. en efecto. en el artículo de Freud sobre "Las fantasías histéricas y su relación con la bisexualidad. Tiene su punto de pa rtida hacia 1908. Más allá de la lógica fálica de la castración. si intenta imponer a la histérica la sentencia que enunci a el inconsciente. "¿Cuál es el objeto de mi deseo?"-a confrontarse con su falta en el saber concerniente a la feminidad. la neurosis base. El fantasma histérico es. Freud. pa ra nombrar lo femenino como tal. R etoma esta tesis al año siguiente en "Apreciaciones generales sobre el ataque histér ico". particularment e demostrativo. En este sen tido. constituye un hilo c onductor de lectura en los desarrollos de Freud y de Lacan. 137-148]. Ella protesta. Pues el análisis conduce inevitablemente al sujeto por el desfiladero de sus demandas --"¿Quién soy?". el proceso analítico revel a en efecto al sujeto que el objeto causa del deseo --el objeto de la pulsión sexu al-. Esta función del fantasma. es porque la histérica la plantea como una protesta. Es en el fantasma donde el sujeto busca dar figura de mujer a ese objeto. . por otra parte. el sujeto e s incitado a una división imaginaria donde él se sitúa a la vez en uno y otro lugar de los partenaires en la relación sexual. que L acan elevará al rango de estructura de discurso. contra la división subjetiva que le impone la impotencia del saber. en nombre d e la Mujer. desde este punto de vista. uno con carácter masculino. pero el soporte de esta representación es una mirad a o un escíbalo. n o serán sino variaciones o dialectos de la histeria.11 Cabe preguntarse sobre el alcance que debe darse al término de 10 S. sobre la cual el inconsciente permanece mudo. pp. si el analista hace de amo. Esta protesta puede aferrarse en el análisis. lo que quiere decir que la sexualidad del ser humano no está originalmente vinculada a una diferenciación de los sexos. la histeria constituye. Frente a la falta de un significante de lo femenino."10 En él establece que detrás de todo síntoma histérico siempre hay dos fantasmas sexuales.andre-01 4/14/03 12:28 PM Page 17 ¿QUÉ PUEDO SABER DE ESO? 17 tamente. en Ob ras completas. Névrose.es fundamentalmente asexuado. las otras neurosis. en tanto que remp lazo de una relación sexual imposible de significar como tal. psy chose et perversión ["Las fantasías histéricas y su relación con la bisexualidad". Si esta pregunta conlleva un desa fío. IX.