DESARROLLODE CAPÍTULOS Las políticas públicas en educación, ciencia y tecnología han de llevar a sistematizar la producción de innovaciones vinculadas a las necesidades sentidas de grupos sociales y orientados por estos, quiénes le darían sentido social a la investigación y la ciencia. El aspecto más relevante de las políticas públicas es sin duda la posibilidad de la participación activa, organizada y permanente de la comunidad que va desde la toma de decisiones de la política para resolver un problema que nos afecta, hasta la evaluación de la misma, a fin de, mejorar y cualificar. Las políticas públicas en educación, ciencia y tecnología, pueden llegar a ser las portadoras de una cultura de la racionalidad democrática que tiene como premisa gobernar con sentido de lo público para el bien común. Ideas Fundamentales 1. LA CONSTRUCCIÓN DE LO PÚBLICO EN LA SOCIEDAD DEL CONOCIMIENTO 1. LA CONSTRUCCIÓN DE LO PÚBLICO EN LA SOCIEDAD DEL CONOCIMIENTO Asistimos a profundas transformaciones sociales y ambientales que son el resultado de los más recientes cambios en las esferas de la producción, la urbanización planetaria y las resignificaciones culturales: Todo ello de la mano de la revolución científico-técnica en las comunicaciones, la robótica, la genética y la informática. Saltos increíbles se han producido en la generación de productos y servicios, acelerándose los tiempos de circulación y consumo, la información y la toma de decisiones políticas. Una transacción financiera se hace en segundos, la compra de empresas se hace a través de una decisión tomada por los indicadores de las bolsas de valores, las guerras se dirigen a distancia y las opiniones políticas son moldeadas en segundos por los noticieros y los centros de opinión. Pero todo ello no ha resuelto los problemas más antiguos de la humanidad: El hambre, las enfermedades, las guerras. Parece que esta civilización ha llegado a una encrucijada, en dónde el inmenso conocimiento acumulado no permite resolver los problemas masivos y cotidianos. La sociedad que se originó en el modo de producción capitalista evidencia crisis difíciles de resolver; la más estructural de ellas es la llamada crisis civilizatoria Vega, R (2009). Esta se mueve en los planos de soporte de la sociedad contemporánea: La energía, la alimentación, el agua, el ambiente, entre otros. Pero también penetra en la esfera cultural tanto a niveles públicos como privados: Ya es lugar común hablar de la crisis de la familia, de los valores y de las identidades. Siendo las comunicaciones y las tecnologías de la información potentes factores de socialización de sentidos, que cuestionan y tensionan sus propias regulaciones: ¿Deben ser responsabilidad de los estados o son un segmento más de disputa del mercado? Por su capacidad de incidencia en la vida social, la sociedad del conocimiento exige la construcción y consolidación de políticas que permitan orientar las acciones que se deben tejer en torno a la ciencia, la tecnología y la educación, entendiendo que esto pasa por el fortalecimiento de la participación de la ciudadanía en el diseño de estas políticas, dado que como afirma Javier Echavarría, tras las contradicciones existentes entre desarrollo científico y su vínculo con la sociedad, “la sociedad desde hace tiempo reclama el derecho de entrar en el núcleo dónde se toman las decisiones sobre tecnociencia”. Echeverría (2005). En ese sentido, se hace fundamental discutir desde los diversos escenarios que propicia la escuela y la vida social, qué es una política pública, cómo se participa en la definición de éstas y cómo; a la luz de los retos que impulsa el paradigma del desarrollo científico técnico, se puede involucrar la ciudadanía en su respectivo impulso? , más aún en el contexto colombiano que exige una reflexión minuciosa en torno a sus necesidades particulares. 2 Políticas Públicas: Educación, Ciencia y Tecnología | www.cvudes.edu.co 1.1. LA CONSTRUCCIÓN DE LA ESFERA DE LO PÚBLICO Respecto a la primera pregunta, el autor hace énfasis en que lo público encuentra correspondencia con los espacios de producción de saber, como también con los lugares en los que se interpreta, en dónde encuentran convivencia los conocimientos que provienen del lado científico como de los estudios y prácticas de tipo social, constituyéndose así como un campo de estructuras-estructurantes que definen sus principales rasgos. Es en esta reflexión dónde cabe cuestionarse sobre las diferencias y cercanías entre lo público-privado, en tanto constituyen, a la luz de la tradición liberal dos arenas escondidas y diferenciadoras, pero que para el abordaje que se pretende realizar en este módulo, tienen relevancia en términos de la participación e interpelación de un campo de disputa, como lo es la definición de una política pública. En ese sentido, la construcción de lo público, tal y como lo afirmaría Lozano (2005), a propósito de la lectura que realiza de Hanna Arendt y Jurgen Habermas, no se constituye como una esfera, ámbito o mundo contrapuesto a lo privado, dado que ambas se relacionan en espacios específicos de la producción de un campo común que es la esfera social; sin embargo los elementos diferenciadores de éstas se encuentran en las relaciones público-privadas que en ese campo se tejen en dónde cobran relevancia los intereses particulares de los sujetos que ahí participan. Adrián Darmohraj en su ensayo sobre La relación público- privado, una vieja discusión para nuevas perspectivas, afirma que la diferenciación de ambas encuentran un lugar específico, y este es el contexto en el que se desenvuelven. Darmohraj (2011). Las diversas investigaciones que se han dado respecto a la concepción de lo público, le han apuntado de manera tendenciosa a desligarlo del mundo de lo privado. Por ello se han identificado: Dos lógicas de lectura sobre el fenómeno público, que han señalado trayectorias importantes de investigación: Una lo define en términos de esferas o ámbitos (esfera pública/ esfera privada) y otra que se orienta a caracterizarlo en términos de relaciones (relaciones público-privadas). Lozano (2005). Sin embargo, la lectura que propone Alejandro Lozano (2005) frente a dicha concepción, sitúa dos puntos importantes para tener en cuenta en la discusión, que se recogen a continuación a manera de preguntas: ¿Desde qué lugares se produce lo público? ¿Cuál es el papel del Estado en la definición de éste? 3 Políticas Públicas: Educación, Ciencia y Tecnología | www.cvudes.edu.co Respecto a la segunda pregunta, el Estado cumple un papel dentro de la definición de lo público, primero porque en sí mismo es un saber, que junto al saber de lo público definen y perpetúan un escenario de acción como es lo público-político, implementando sobre el engranaje institucional una serie de referentes que constituyen el imaginario de la comunidad estado; por tanto el Estado figura como un “saber que se segmenta y especializa e impone sentidos, prácticas e imaginarios sobre el fenómeno público” Lozano (2005). El Estado cobra así sentido como lugar de lo público, en tanto aspectos como el derecho y la administración se especializan en brindar servicios y gestionar sus propios recursos para la comunidad, que impulsan la constitución de los espacios públicos, lugares idóneos de la participación del ente estatal con la comunidad, en dónde se debate y se definen aspectos del mundo de lo privado, es el lugar en el que se evidencian las opresiones y las exclusiones a las cuáles somete el régimen estatal comprendido desde lo público. Vale la pena resaltar que la primera pregunta permite ahondar en una crítica a la visión de lo público-estatal. Esto es, que existe la posibilidad de constituir un saber de lo público con base en las acciones de los movimientos y organizaciones sociales sean estas del campo hegemónico o subalternas, con sus disputas concretas, desde sus denuncias y exigencias particulares, que desconocen al Estado como el lugar único que da valor a lo público, y que promueven una apropiación colectiva para la realización de lo público- político para la participación e incidencia en las decisiones de la sociedad. A todo lo público no estatal, Lozano (2005) lo denomina “contra-públicos”. En últimas, lo público está determinado por el lugar de enunciación en el que se configura como un campo de saber, como también por las interpretaciones que de éste se haga respecto a las relaciones y vínculos existentes entre lo público-privado, lo público-estatal y lo público-contra-público. 4 Políticas Públicas: Educación, Ciencia y Tecnología | www.cvudes.edu.co 1.2. ¿QUÉ ES UNA POLÍTICA PÚBLICA? Existen diversas teorizaciones sobre lo que se comprende como política pública; las tradiciones académicas le han apuntado a definirla como una herramienta para la solución de problemáticas concretas, que buscan optimizar la eficiencia del gobierno y su aparato estatal, proponiendo un mecanismo en el que se plantean objetivos, fines y medios para la resolución de estos. Sin embargo, los enfoques que se han venido construyendo en el seno de la Ciencia Política, le han apuntado a dar una visión más amplia, una visión que no sólo compromete la acción del gobierno, sino de diversos actores institucionales público-privados para el diseño y la implementación de éstas Roth (2003). Con esto, es importante resaltar algunos de los enfoques teóricos que se le ha dado por lo menos desde el pasado siglo al estudio de las políticas públicas, reconociendo que la trayectoria académica e investigativa que ha primado es la norteamericana y europea, de acuerdo con los aportes de Hernández, G (1999): Public choice Welfare economics Teorías de clase, neomarxismo Estatismo o la sociedad producto del Estado Neoinstitucionalismo Las dos primeras, hacen referencia al diseño de políticas y al posterior análisis de éstas basándose en dos variables que lo son la racionalidad y el costo-beneficio, en dónde la intervención del mercado se mide por medio de los mecanismos con los que dota a los individuos para incidir en las decisiones sociales, ambos enfoques, basados en la economía, suponen la racionalidad y la eficiencia en el manejo de los recursos; el papel del Estado (como ente racional) es el de corregir los errores del mercado, dado que este no cuenta con las suficientes capacidades para la autorregulación, lo cual le impide el manejo eficiente de los recursos para solventar las necesidades de los individuos y las propias. 1- A propósito, la definición que Roth aporta sobre esta: Una política pública designa la existencia de un conjunto conformado por uno o varios objetivos colectivos considerados necesarios o deseables y por medios y acciones que son tratados, por lo menos parcialmente, por una institución u organización gubernamental con la finalidad de orientar el comportamiento de actores individuales o colectivos para modificar una situación percibida como insatisfactoria o problemática. 1 5 Políticas Públicas: Educación, Ciencia y Tecnología | www.cvudes.edu.co El tercer enfoque, sigue la tradición marxista con respecto a la comprensión de las estructuras de clase, puesto que esta analiza la implementación de las políticas desde la visión de intereses específicos ligados al poder, y establece al aparato estatal como el que diseña las políticas pero basado en los intereses de clase para implementarlas. La administración y gestión pública sólo favorecen los intereses de las clases que controlan el diseño de las mismas y que intervienen en los procesos económicos. Como enfoque para el análisis, esta tradición permite cuestionar la estructura rígida de producción de políticas públicas, a saber objetivos- recursos-resultados, que miden linealmente el cumplimiento de unas u otras, pero que no contemplan de manera estructural los problemas existentes en la sociedad para dar una solución coherente desde el Estado. El cuarto enfoque se basa en el papel de las organizaciones sociales y las instituciones políticas, en dónde se concibe al Estado como un ente autónomo, capaz de definir e implementar políticas, sin embargo, este enfoque no contempla la existencia de otras variables que van más allá de la acción estatal, como lo es el derecho y la economía que también inciden políticamente en el diseño e implementación de las mismas. De ahí que el papel de las organizaciones sociales sea el de actuar en complemento a las definiciones estatales. Finalmente, el neoinstitucionalismo Parsons (2007) busca combinar el rol de las instituciones, como estructuras históricas, con el contexto social en el que estas se encuentran, evidenciando la pertinencia de su acción con base al desempeño que puedan alcanzar frente a los actores que inciden en tal contexto. En la interacción de este enfoque se evidencian tres puntos transversales: a. La incidencia de los actores está atravesada por las instituciones. b. Las instituciones determinan la actividad política. c. Las instituciones están determinadas por la historia. Después de mencionar los enfoques que se han planteado para la creación, implementación y análisis de políticas públicas, es importante mencionar la clasificación que Roth (2006). Propone sobre estos, basándose principalmente en los actores que inciden en cada uno de ellos: a. Desde el Estado b. Desde las Instituciones c. Desde la Sociedad d. Mixtas Lo que propone este autor, con la definición de política pública, es la interacción entre los distintos actores en el proceso de consolidación de una política, para lo cual mencionaría el Ciclo de la Política Pública, como un proceso en dónde se encuentran, formulan, actúan y evalúan su participación y su incidencia en ésta. El Ciclo tiene los siguientes pasos: 6 Políticas Públicas: Educación, Ciencia y Tecnología | www.cvudes.edu.co Identificación del problema Formulación de soluciones Toma de decisiones Implementación Evaluación Este esquema, en torno al diseño e implementación de políticas públicas, se relaciona mucho con el que propone el modelo sistémico, desde el cuál el mundo político forma un subsistema con estructuras, actores y reglas y frente a las presiones, solicitudes y estímulos, y dónde el sistema reacciona con una política pública como respuesta. Los input, corresponden a las demandas de los actores, y los output son los productos que genera la dinámica de retroalimentación entre las necesidades de quiénes conforman el sistema: Las soluciones que este brinda, su cristalización son las políticas públicas. Este esquema cobra validez, en tanto la interacción entre actores evidencian que el Estado y el aparato institucional que a este cobija, no tienen los suficientes mecanismos para solventar las demandas de la sociedad, lo cual se manifiesta con la ausencia de formas adecuadas de mantener la gobernabilidad; por tanto cobran un papel relevante las acciones que emprende la sociedad civil, manifestada en organizaciones o movimientos, que buscan incidir en la resolución de las principales problemáticas que el Estado, aun cuándo se esfuerce, no puede solventar. “El Estado y sus instituciones encuentran obstáculos serios en su pretensión de regir los destinos de la sociedad y se enfrenta a una crisis de gobernabilidad”, aportado por (Roth, 2003). Finalmente, y en contraposición a la forma lineal de formulación de políticas públicas, en dónde el principal actor es el Estado o el mercado, la perspectiva que brinda el ciclo de análisis de políticas públicas, posibilita la participación y la incidencia de la sociedad civil en el diseño del programa de acción que más allá de solucionar problemas y carencias sociales, pone en el centro la interacción dentro de las actividades políticas a los actores sociales para retroalimentar demandas y resultados que derivarían de las necesidades e intereses que se presenten. 7 Políticas Públicas: Educación, Ciencia y Tecnología | www.cvudes.edu.co Al hablar de participación ciudadana, se hace referencia a los mecanismos con los que los ciudadanos buscan incidir de manera permanente, directa o indirectamente sobre las actividades públicas que afectan su vida como actores de una comunidad política. Esta noción toma relevancia cuando se identifica que la democracia representativa inicia su agotamiento por la ilegitimidad de las instituciones del Estado, como de las organizaciones políticas (partidos políticos), que ha generado un ambiente de desconfianza y apatía por parte de la sociedad frente a sus funciones y estructuras, exigiendo la redefinición y la apertura de nuevos caminos hacia la comprensión de la democracia, poniendo una tarea al sistema político, de encontrar una fórmula para que el conjunto de la sociedad incida en las definiciones de las estructuras, políticas, económicas, sociales- culturales, que ahí se constituyen. 1.3. PARTICIPACIÓN CIUDADANA Durante el texto hemos hablado de ciudadano y ciudadanía como actores centrales bien sea en la formulación de las políticas públicas, bien como sujetos que las cuestionan o que hacen caso omiso de ellas; y el Estado para construir de forma alternativa. Pero ¿Qué significan cada una de esas categorías? Ciudadanía se puede considerar como el ejercicio de los derechos de los ciudadanos en un sistema político con características democráticas. La acción ciudadana contemporánea está basada en la inclusión social, la autorregulación y el bienestar público, es base y fundamento de la legitimidad y la representación política en una sociedad. Es un concepto dinámico como las sociedades, sus formas de organización y sus dinámicas culturales. El concepto de ciudadanía está íntimamente ligado, por un lado, a la idea de derechos individuales y, por el otro, a la noción de vínculo con una comunidad particular. Ciudadano es el sujeto de derechos, por lo cual tiene la posibilidad de participar activamente en las decisiones políticas de la comunidad de la que hace parte, a través de las herramientas creadas para tal fin. A su vez se hace responsable del cumplimiento de deberes que propenden por el bienestar común y el interés público. 2-- Para este concepto se tendrá en cuenta el aporte realizado por Elizabeth Jelin, quién concibe al ciudadano como el miembro de una comunidad política, que adquiere deberes y derechos en tanto sea reconocido por la misma. Además se caracteriza por el nivel de incidencia que tenga más allá de la esfera pública, en tanto denuncia los hechos que perjudican a la comunidad política, y emprende acciones para la transformación de ellos. En últimas, él y la ciudadana son sujetos politizados que contribuyen en la conformación de la dimensión de la ciudadanía. JELIN, Elizabeth. Igualdad y diferencia: Dilemas de la ciudadanía de las mujeres en América Latina. 2 8 Políticas Públicas: Educación, Ciencia y Tecnología | www.cvudes.edu.co De esta manera, es imperativo aportar en la redefinición de estas nociones, y aportar elementos para el fortalecimiento de la participación ciudadana como una forma de empoderamiento de la comunidad, acercándonos a la concepción que Orozco (2001) realiza sobre estos dos puntos: Al hablar de democracia nos referimos a la capacidad de un grupo o nación de gobernarse a sí mismo mediante procedimientos que garanticen la participación de los ciudadanos para libremente elegir tanto su forma de gobierno como a quiénes les representa en Orozco (2001). Así pues, de esta definición se pueden esgrimir dos puntos importantes: ¿Cuáles son los límites de la democracia? ¿En dónde cabe el cuestionamiento sobre la participación política cómo y para qué? Con esto se ratifica, que la democracia no inicia ni tiene fin en la existencia del Estado, debe entenderse como la capacidad que tienen los actores que comparten un territorio común y una identidad política de definir formas y mecanismos en los que se logre concretar la realización del bienestar común. ¿Por qué se configura la participación ciudadana como una variable que define los niveles de democratización y gobernabilidad de una comunidad política? Para el mismo Orozco, la ciudadanía, la democracia y la participación política configuran todo orden político, y que por tanto deben ser defendidos y apropiados como un bien común, “como un valor que le corresponde a la humanidad y un recurso que la habilita para realizar el libre ejercicio de sus funciones” (Orozco, 2001). Para profundizar en este argumento, a continuación se presentan algunas tipificaciones que Juan Joaquín Brunner hace sobre la participación ciudadana, en dónde la incidencia de actores como el Estado, el mercado, y la sociedad civil (organizaciones, movimientos, entre otras) configuran uno de esos tipos, pero que respecto a los fines y objetivos políticos adquieren un papel protagónico, así como también por las necesidades que se manifiestan en la comunidad. Son cinco los tipos que caracterizan según Bruner (1997). 9 Políticas Públicas: Educación, Ciencia y Tecnología | www.cvudes.edu.co a. Participación comunitaria: La ciudadanía que se involucra en ésta, tiene por objetivo fortalecer el vínculo entre instituciones públicas con individuos, con el fin de contribuir en la recomposición de tejido social de comunidades débiles, sin embargo el rol político que cumplen no es el de empoderar a los sujetos para incidir en tales actividades. Organizaciones eclesiales, ambientales, culturales y de caridad son las principales protagonistas de esta forma de participación. b. Ciudadanía extendida: Esta forma de ciudadanía busca generar formas renovadas de la acción colectiva. Brunner es enfático al mencionar que los movimientos, organizaciones o redes que se constituyen buscan llevar las problemáticas de tipo privado hacia un escenario de encuentro y denuncia, que es el terreno de lo público, busca como la primera, recomponer el tejido social, pero pasando por el involucramiento en las realidades existentes. “estas buscan en común desprivatizar las causas de sus miembros, ejercer una critica público-moral de lo establecido y promover nuevos estilos de interacción de sus miembros a la sociedad” (Brunner, 1997). Estado y sociedad civil, son los actores principales, configurando rasgos de cultura política determinados para los actores en emergencia. c. Ciudadanía informativa: El papel de los medios masivos de comunicación, como los principales surtidores de la “información”, dentro de una sociedad en la que las instituciones han perdido vigencia, se convierten en un punto de referenciación de las realidades; la corriente de opinión que estos generan no opera en favor de la participación para la decisión, dado que las interpretaciones que se hacen de la realidad son múltiples, abusando de la excesiva confianza que la sociedad imprime sobre los medios, estos legitiman por medio de los datos y la información, las acciones del estado y el mercado (no hay interacción). 10 Políticas Públicas: Educación, Ciencia y Tecnología | www.cvudes.edu.co d. Participación de mercado: En esta forma de participación, el actor principal es el mercado con el individuo consumidor, este vínculo es mediado por las relaciones crediticias que ahí se tejen. Cuatro tipos de ciudadanías se encuentran aquí: Ciudadano consumidor, ciudadanía crediticia, ciudadanía de los derechos del consumidor y la ciudadanía de masas. La sociedad adquiere relevancia cuando los individuos se involucran en la dinámica de la compra de bienes materiales que les permite su satisfacción, generando estándares de vida, imágenes y estereotipos, en últimas una cultura material. e.Ciudadanía deliberativa: El ámbito de comprensión en el que se desenvuelve este tipo de ciudadanía, está atravesado por dos situaciones: 1. La recepción de la información que provienen de los medios masivos de comunicación, 2. La interacción con los actores de la esfera pública. Estas le llaman a actuar frente a hechos e intereses que conciernen a la generalidad de la ciudadanía, por lo cual están convocados a tomar partido en los escenarios en los que se definen y orientan las acciones que afectan a la sociedad. Existe un temor frente a este tipo, y es que no es un ejercicio completamente autónomo, pues se constriñe a las disposiciones propias de las instituciones del Estado. Con esta tipificación, llegamos a las siguientes conclusiones: El campo de la participación política adquiere relevancia cuando se logra vincular en la esfera pública a la sociedad civil (movimientos, organizaciones, redes), que más allá de tener un interés por entrar a manejar las esferas de poder, buscan incidir de manera permanente en la construcción y decisión de los planes de acción para las comunidades políticas, esto no excluye que otros actores como el mercado y el Estado puedan interactuar, pero lo que se pretende es privilegiar la acción del ciudadano deliberante y decisor. El carácter de ciudadano que se puede adquirir, depende de las fisuras, contradicciones y manifestaciones propias de la cultura política imperante en la sociedad; el ideal del ciudadano es el del ciudadano empoderado, autónomo, capaz de decidir y participar crítica y conscientemente en los escenarios de la esfera pública. Sin embargo, los matices son variados, y corresponden también a la forma en que se da el relacionamiento con los otros actores: Estado-ciudadanía, Estado-mercado- ciudadanía, ciudadanía-mercado. Así como también de las concepciones que se tengan sobre el vínculo entre lo público y lo privado, porque puede en algunas ocasiones, confundirse la acción ciudadana, con lo que han dicho es: “Llevar al mundo de lo público, las carencias del mundo de lo priva. Pastor (2009). 11 Políticas Públicas: Educación, Ciencia y Tecnología | www.cvudes.edu.co 1.4. POLÍTICAS PÚBLICAS, INFORMACIÓN Y CONOCIMIENTO La construcción participativa, concertada y consensuada de las políticas públicas son un factor central en la estructuración de formas democráticas de gobernabilidad y convivencia, ya sean estas realizadas sobre dimensiones de la vida social que permiten el bienestar individual y colectivo, o bien, como es nuestra discusión sobre aspectos aparentemente inmateriales que definen el sentido social, como es el caso del acceso al conocimiento y la información. En este sentido, hay que reconocer que alrededor de la producción de saber y conocimiento se han formado estructuras de poder rígidas, muchas de ellas convertidas en segmentos del mundo de los negocios que tienen un peso significativo en la vida social. La gran mayoría de los centros de investigación están ligados o son financiados por corporaciones transnacionales y los medios de información y transmisión de datos son grandes monopolios privados. Esta situación genera una amenaza a la democracia del conocimiento, acercándonos muchas veces a la dictadura de los medios y a fenómenos tales como la manipulación mediática. Ignacio Ramonet se ha referido a la concentración de los medios y la información como “latifundios mediáticos” y asegura que: En una democracia, cuando un sólo sector tiene demasiado poder en cualquiera de los aspectos de la vida, pero sobre todo en la vida económica y mediática, es obvio que se crea un desequilibrio. Porque la economía es determinante, y los medios controlan la mente, hacen la opinión pública, de acuerdo con Ramonet (2012). Es para corregir esta situación dónde el Estado- ciudadanía, a través de la formulación, análisis e implementación de políticas públicas deben intervenir. Esta intervención se vuelve central al momento de comprender que la información y el conocimiento son formadores tanto de opinión como de sentidos de vida, los cuáles transitan hoy por la escuela y los sistemas educativos. En este sentido la discusión incluye varias aristas: La del acceso democrático al conocimiento y la información, los contenidos, la propiedad de los medios y las políticas que regulan todos los anteriores. Si aceptamos la forma Estado-ciudadanía como la construcción social que puede representar los intereses comunes – es decir no particulares-, éste se convierte en el sujeto que debe por un lado garantizar el acceso (acciones positivas) a través de la inversión en infraestructura, la construcción de centros informáticos, la producción y realización audiovisual, las plataformas de circulación de datos, entre otras; y por otro impedir la monopolización privada de los medios y el conocimiento. El Estado no puede en este caso delegar, esas funciones en los entes privados, porque estamos que la información - conocimiento es el soporte fundamental de la actual sociedad. 12 Políticas Públicas: Educación, Ciencia y Tecnología | www.cvudes.edu.co LECTURAS RECOMENDADAS Baño, R. Consideraciones sobre la participación ciudadana, tendencias en acción. Recuperado de: http://www.eurosur.org/FLACSO/confere2.htm Brunner, J. (1997). Ciudadanía y participación, notas para la discusión. Recuperado de: http://mt.educarchile.cl/mt/ jjbrunner/archives/Ciud%2Bpart.pdf Vega, R. (2009). Crisis civilizatoria. Recuperado de: http://www.herramienta.acom.ar/revista- herramienta-n-42/crisis-civilizatoria TÉRMINOS CLAVES 1. Política 2. Pública 3. Ciencia 4. Tecnología 13 Políticas Públicas: Educación, Ciencia y Tecnología | www.cvudes.edu.co