l Trastorno Específico del Lenguaje (TEL) afecta distintas dimensiones del lenguajeexpresiva y comprensivamente en él los individuos pueden presentar "problemas del procesamiento del lenguaje o de abstracción de la información" a causa de problemas en la memoria de trabajo. El diagnóstico de esta alteración requiere un conjunto de criterios de exclusión que aseguran que el lenguaje sea el único aspecto alterado y esta alteración no sea atribuible a otra causa como, por ejemplo, CI deficiente. A su vez, el Procesamiento Auditivo (Central) se define como la eficiencia y efectividad con que se utiliza la información auditiva, Debido a que este procesamiento afecta de3sde la más mínima señal auditiva percibida, hasta transiciones complejas de sonidos en la cadena sintagmática es que se vuelve tan relevante para la interpretación de los mensajes lingüísticos, además, el lenguaje, por ser una función superior, influye la forma en que son percibidos e interpretados los sonidos, por ende lenguaje y procesamiento auditivo (central) se influyen mutuamente. Una de las teorías que explicaría el TEL, señala que éste es causado por un procesamiento deficiente de la información auditiva. Por años, ha sido controversial el descubrir si éste correspondería a un déficit de procesamiento auditivo específico para los sonidos del lenguaje o si es un cuadro más generalizado en lo que a audición se refiere. El presente trabajo realiza una breve revisión de las definiciones y explicaciones de cada uno de los trastornos abordados y de las posibles asociaciones que se han establecido entre ambos. Trastorno específico del lenguaje El trastorno específico del lenguaje (TEL), corresponde a un conjunto de alteraciones que afecta a distintas dimensiones del lenguaje tanto en el aspecto expresivo como comprensivo (Ampuero). La American Speech-Language-Hearing Association (ASHA, 1980), define TEL como "Un trastorno de lenguaje en que se observa una anormal adquisición, comprensión o expresión del lenguaje hablado o escrito. El problema puede implicar a todos, uno o alguno de los componentes fonológico, morfológico, semántico, sintáctico o pragmático del sistema lingüístico". En él, los individuos pueden presentar "problemas del procesamiento del lenguaje o de abstracción de la información significativa para el almacenamiento y recuperación por la memoria a corto plazo". (Baez & Cabeza) . En la actualidad se utiliza un criterio de exclusión para el diagnóstico de TEL, ya que se considera que este trastorno del lenguaje no debe ser explicado por alteraciones asociadas (Rinkert, 2006). Uno de los criterios para la identificación de TEL incluye: . Capacidad lingüística: Puntuación en los test de lenguaje de -1,25 desviaciones estándar o más bajo; riesgo de devaluación social. . CI no verbal: CI manipulativo de 85 o más alto. . Audición: Supera por medio de un screening los niveles convencionales. . Otitis media con serosidad: Sin episodios recientes. . Disfunción neurológica: Sin evidencia de ataques, parálisis cerebral, ni lesiones cerebrales; ausencia de medicación para control de ataques. . Estructura oral: Ausencia de anomalías estructurales. . Motricidad oral: Supera el screening empleando ítems evolutivamente apropiados. . Interacciones físicas y sociales: Ausencia de síntomas de una interacción social recíproca alterada y de restricción de actividades (Aguado, 2004). A estos criterios se le añaden otros referidos a la discrepancia entre la edad lingüística y la edad cronológica o el CI no verbal, como la realizada por Stara y Tallal en 1981( Aguado, 2004). Clasificación del trastorno específico del lenguaje En la actualidad la clasificación más utilizada en la clínica, es la propuesta por Rapin y Allen, quienes separan los trastornos en tres grandes categorías: -Trastorno expresivo que incluye: -Trastorno de la programación fonológica: Se caracteriza por la fluidez de producción con articulación confusa, mejoría de la calidad articulatoria en tareas de repetición de elementos aislados (fonemas, sílabas, etc). La comprensión no se encuentra alterada o es muy leve. -Dispraxia verbal: Se caracteriza por la incapacidad masiva de fluencia, grave afectación de la articulación, enunciados de dos palabras que no mejoran con la articulación repetida. Comprensión normal o cercana a la normalidad. -Trastorno expresivo/receptivo. -Trastorno fonológico-sintáctico: Se caracteriza por presentar una fluidez verbal alterada, al igual que la articulación, sintaxis deficiente, variabilidad de dificultades de comprensión, aunque ésta es mejor que la expresión. -Agnosia auditiva-verbal: Se caracteriza por la presencia de sordera verbal, fluidez verbal perturbada, comprensión lenguaje oral afectado o ausente, expresión ausente o limitada de palabras, articulación gravemente alterada y comprensión normal de gestos. -Trastorno de procesamiento de orden superior. -Trastorno semántico-pragmático: Se caracteriza por presentar desarrollo inicial del lenguaje más o menos normal, articulación normal o con pequeñas dificultades, habla logorréica, enunciados gramaticales, grandes dificultades de comprensión, falta de adaptación del lenguaje al entorno y probable ecolalia o perseverancia. -Trastorno léxico-sintáctico: Habla fluente con ocasionales problemas de evocación, articulación normal o con ligeras dificultades, sintaxis perturbada, comprensión normal de palabras sueltas y deficiente comprensión de enunciados (Aguado, 2004). Existen varios enfoques que buscan explicar el TEL. Entre ellos encontramos el enfoque lingüístico, que intenta explicar el TEL desde la Teoría modular de adquisición del lenguaje, el enfoque biológico, que postula la existencia de factores genéticos y alteraciones neurológicas que podrían explicar el carácter persistente del trastorno y el enfoque cognitivo, donde encontramos la hipótesis de superficie, la hipótesis de enlentecimiento generalizado, la hipótesis de déficit en la memoria de trabajo y en la memoria procedural y finalmente la hipótesis del déficit en el procesamiento auditivo central, la cual desarrollaremos en esta revisión. El procesamiento auditivo (central) (PA(C)) fue definido en 2005 por la American Speech-Language-Hearing Association (ASHA) señalando que éste, consiste en la eficiencia y efectividad con la que el Sistema Nervioso Central (SNC) utiliza la información auditiva. El PA(C) se relaciona así, con el procesamiento perceptual de la información auditiva en el SNC y la actividad neurobiológica que subyace a tal proceso y que da origen a los potenciales auditivos electrofisiológicos. El PA(C) incluye los mecanismos que subyacen a las siguientes habilidades (ASHA, 2005): - Localización y lateralización sonora: habilidad para localizar un sonido en el espacio. - Discriminación auditiva: habilidad necesaria para distinguir variaciones entre sonidos consecutivos, por ejemplo en la cadena sintagmática. - Reconocimiento de patrones auditivos: reconocimiento de patrones como intensidad, duración y frecuencia. - Aspectos temporales de la audición, incluyendo: resolución temporal, enmascaramiento temporal, integración temporal y ordenamiento temporal. - Desempeño auditivo en presencia de señales competitivas: Reconocer un sonido cuando otros sonidos "contaminan esa señal". - Desempeño auditivo con señales acústicas degradadas: Reconocer, por ejemplo, mensajes incompletos. Si bien quedan fuera de la definición, habilidades como la conciencia fonológica, atención auditiva y memoria para la información auditiva, síntesis auditiva, comprensión e interpretación de la información presentada auditivamente y destrezas similares pueden ser dependientes o estar asociadas con una función auditiva central intacta, de modo que son consideradas funciones neurocognitivas superiores y/o relacionadas al lenguaje; éstas, constituyen los mecanismos top-down (de arriba a abajo) que interactuarán con los mecanismos bottom-up (de abajo a arriba) para construir lo que el oyente percibirá de hecho (Bellis, 2003). Mecanismos top-down hace referencia a funciones superiores como lenguaje, atención y memoria, que influirán en la forma en que determinado estímulo acústico es interpretado corticalmente - de ahí up (arriba) -, a su vez, mecanismos bottom-up se refiere a todas aquellas transformaciones que sufre la señal acústica mientras viaja al SNC. A raíz de que no se puede desconocer el procesamiento más periférico de la señal acústica, es decir, bottom-up, es que surge la controversia sobre lo central que es en realidad el procesamiento auditivo y de ahí que el consenso que la ASHA llama a utilizar sea la denominación PA(C). Los factores top-down determinarán, en parte, el buen o mal resultado del PA(C) que haga un sujeto de determinado estímulo acústico; por ejemplo, cualquier alteración de memoria, sobretodo en la memoria de trabajo, dejará a quien la padezca imposibilitado para atender a cualquier estímulo por el tiempo necesario para que éste sea conscientemente percibido, por lo tanto, sus destrezas auditivas se presentarán con un pobre desempeño, pero no porque la función en sí esté alterada, sino más bien, porque la información con la que deben trabajar se halla pobremente fijada desde el punto de vista de la atención. Auerbach et al. (1982) propusieron la teoría de que el PA ocurre en un nivel pre-fonémico, es decir, a nivel de las características acústicas (p. ej. aspectos temporales y frecuenciales) del estímulo auditivo y que posteriormente la señal se somete al procesamiento del lenguaje (PL) en un nivel fonémico (p. ej. distinguir un fonema de entre un grupo de ellos en la coarticulación); actualmente existe suficiente evidencia científica para demostrar que estos procesamientos ocurren más bien en forma simultánea y no lineal como esta teoría propone, sin embargo, a la hora de relacionar PA(C) y TEL, es un postulado que resulta clarificador sobre cómo este tipo de procesamiento influye en el lenguaje y viceversa. El déficit en el procesamiento auditivo (central) (DPA(C)) es definido por la ASHA en el 2005 como: "la dificultad en el procesamiento perceptual de la información auditiva en el sistema nervioso central", que se demuestra en el pobre desempeño en una o más de las habilidades del procesamiento auditivo. Además señala que éste déficit en el procesamiento neural de los estímulos auditivos puede relacionarse con dificultades en el lenguaje, el aprendizaje y funciones comunicativas, coexististiendo con estos trastornos, sin ser resultado de ellos (ASHA, 2005). Los sujetos que presentan un trastorno del procesamiento auditivo (central), generalmente tienen algunas manifestaciones comportamentales, que pudieran estar indicando la presencia de DPA(C), aunque la presencia de estas características, por sí solas, no son suficientes para diagnosticar DPA(C), nos pueden orientar en la evaluación de las habilidades auditivas en la clínica. Estas características son (Cañete, 2006): . Dificultades en el aprendizaje de la lecto-escritura. . Dificultad en seguir instrucciones verbales. . Alteración en la adquisición del lenguaje (errores sintácticos, dificultad en comprender conceptos verbales) y dificultades articulatorias. . Reiterada petición de repeticiones cuando la información es puramente auditiva. . Aumento del tiempo de latencia en la emisión de respuestas a estímulos auditivos. . Dificultades en la memorización de mensajes auditivos. . Entre otros Es importante destacar que estas características no son explicadas por alteraciones auditivas periféricas, pudiendo existir en muchos de estos sujetos umbrales auditivos dentro de rangos normales. Así mismo, debe descartarse la presencia de otras alteraciones como enfermedades neurológicas, daño cerebral, retraso del desarrollo neurológico, trastornos neurológicos, otitis a repetición en la infancia, además de variantes socio ambientales, como deprivación de experiencias auditivas, ya que puede tener efectos perjudiciales sobre el normal desarrollo de las vías auditivas que produciría alteraciones en la maduración de las funciones auditivas centrales (Jutras, 2007). Además, diversos autores han planteado modelos para realizar una clasificación de los sujetos con DPA(C), como por ejemplo el modelo Bufallo, en el cual se dividen las siguientes categorías (Jutras, 2007) a) Déficit en decodificación: Los sujetos con problemas a este nivel, tienen dificultades en el procesamiento rápido de la información auditiva y tienden a responder más lento. b) "Tolerance-Fading Memory" (tolerancia de desvanecimiento de la memoria): Los individuos de esta categoría presentan dificultades para entender el habla en situaciones auditivas adversas, junto con problemas en la memoria a corto plazo y reducción de la tolerancia al ruido. c) Déficit en la integración: Incluye dificultades en la integración auditiva y de otro tipo de información, como la visual. d) Déficit en la organización: Los individuos con problemas a este nivel, tienden a fallar en tareas de secuencias. Evidencias sobre el Trastorno Específico del Lenguaje y el Déficit en el PA(C). Como se mencionó anteriormente, dentro de las teorías explicativas del TEL, se encuentra la teoría del déficit en el procesamiento auditivo de la información. Los niños con TEL muestran déficits perceptivos, bien documentados a nivel conductual, para estímulos verbales y no verbales, especialmente si estos estímulos ocurren en secuencias rápidas. (Miller, Kail, Leonard & Tomblin, 2001). Existen varios estudios que han intentado encontrar evidencia empírica sobre este tema, pero aún no se ha podido establacer si existe una relación entre el DPA(C) y el TEL, o si alguno de estos déficits participan independientemente en el desarrollo del TEL. En relación a esto se han desarrollado dos hipótesis explicativas del TEL. La primera, llamada "Hipótesis del cerebro atípico", mantiene que el cerebro de los niños con TEL no estaría óptimamente conectado para el lenguaje, por lo que la organización cerebral de los niños con TEL sería distinta a la encontrada en niños normales, debido a factores genéticos. La segunda hipótesis, sería la del "Retraso Madurativo", que mantiene que las diferencias electrofisiológicas en las respuestas auditivas de los niños con TEL, frente a niños control, son indicadores de una inmadurez del desarrollo neuronal más que diferencias estables de la estructura cerebral. Debido a esto las diferencias en la lateralización de niños con TEL receptivo y niños con desarrollo normal reflejan algún retraso en la maduración de la transmisión interhemisférica. (Idiázabal & Samperas-Rodriguez, 2008) Respecto a esto, Bishop et. al. consideraron en su estudio dos aspectos importantes en la explicación del TEL. El primero corresponde a la heterogeneidad del cuadro y el otro punto es que no se ha prestado mucha atención a los aspectos maduracionales del procesamiento auditivo. Ellos estudiaron a 16 jóvenes con TEL y 16 jóvenes del grupo control, mediante el uso del ERPs (potencial auditivo de evento relatado). Sus resultados indican que los PEC auditivos de los niños con TEL eran más parecidos a los de los niños más jóvenes del grupo control, que a los de su misma edad. Además se confirma que los niños con TEL conforman un grupo heterogéneo, donde sólo algunos presentaron PEC alterados y otros no. (Dorothy, Bishop, Genevieve & Mc Arthur, 2005) Mc Arthur et. al. también confirmaron la heterogeneidad del TEL y pudieron observar que los niños con TEL expresivo era más parecidos a los controles, mientras que los niños con problemas receptivos diferían significativamente con los resultados del grupo control.(Mc Arthur & Bishop, 2005). Dentro de las investigaciones que han intentado identificar si existe relación entre TEL y DPA (C), encontramos el estudio de Tallal et. Al quienes utilizaron la denominada "Tarea de repetición auditiva" . En dicho trabajo se comparó el desempeño entre un grupo de niños control y un grupo de niños con TEL, en una tarea que implicaba la escucha de dos tonos breves, uno de 100 Hz y otro de 305 Hz, los cuales se presentaron consecutivamente con distintos intervalos de tiempo entre ellos. Los niños fueron entrenados para señalar el orden de la presentación de los tonos, presionando teclas en un tablero que indicaban la escucha de un tono alto o bajo. Los resultados de dicho estudio mostraron que, en el grupo de niños control, existió una correcta identificación de los tonos cuyos intervalos de presentación fuesen inferiores o superiores a 300 ms, en cambio, en el grupo de niños con TEL, si bien eran capaces de identificar correctamente los tonos, cuando el intervalo de tiempo era superior a 300 ms, no lograban completar la tarea con éxito si el intervalo era menor a este tiempo. (Dlouha et al., 2005) El uso de estudios electrofisiológicos, mediante los potenciales evocados auditivos (PEC), puede ser un método útil para evaluar la percepción auditiva y del lenguaje en niños con TEL a diferentes niveles de procesamiento. A través de este exámen se puede obtener un índice de la respuesta cerebral ante estímulos auditivos en tiempo real. Los componentes P1, N1 y P2 de esta prueba han sido un importante foco de atención para los investigadores, porque representan las etapas más tempranas del procesamiento en la corteza auditiva. (Idiázabal & Samperas-Rodriguez, 2008). Tonnquist - Ühlen observaron las diferencias en latencia, amplitud y topografía del componente N1 del potencial evocado auditivo tardío, entre un grupo de niños con trastorno severo de lenguaje y un grupo de niños control, ambos entre 9 y 15 años de edad. En relación a la latencia, sólo hubo diferencias significativas después de estimular en el oído derecho, por lo que se considera que para esta variable, no existen diferencias significativas. Sin embargo se observó que en el grupo control, existe una correlación entre edad y latencia de N1, disminuyendo esta con la edad, en cambio en el grupo de niños con trastorno de lenguaje no existe esta correlación. En cuanto a la amplitud y a la morfología, no existen diferencias significativas entre ambos grupos, ni correlación con la edad. (Tonnquist, Uhlén, Borg, Persson & Spens, 2005). Mc Arthur et. al. compararon adolescentes y jóvenes con TEL de 13 años de edad , con otro grupo de adolescentes con TEL de mayor edad (17 años) , con un grupo control, mediante el registro de PEC auditivos, utilizando como estímulo tonos puros de 25 y 250 ms, vocales y tonos complejos no armónicos. Encontraron que ls componentes N1 - P2 y N2 de los PEC para los tonos puros estaban alterados en ambos grupos de niños con TEL. Del mismo modo encontraron alteraciones en el procesamiento cognitivo de tonos no armónicos y vocales en ambos grupos de niños con TEL en comparación al grupo control.(Mc Arthur & Bishop, 2005) El estudio con MMN ha sido de particular interés en el contexto del déficit del procesamiento auditivo. La onda conocida como MMN es un componente independiente-que aparece 80-250 ms después de la aparición de un estímulo auditivo en adultos sanos. El sujeto oye una secuencia de estímulos auditivos y la reacción neurofisiológica a la secuencia se obtiene a pesar de estar realizando una actividad o tarea no relacionada, como leer un libro o ver una película, permitiendo así una idea del procesamiento auditivo del sujeto, cuando no está mediando la atención activa en tareas relacionadas con el procesamiento (Rinkert, 2006). Kopirlathi y Lang examinaron a un grupo de 14 niños con disfasia y a un grupo de 12 niños controles, de entre siete y trece años de edad, por medio del ERPs y el MMN. En sus resultados encontraron que los niños disfásicos presentaban un peak de amplitud de frecuencia significativamente disminuído. Además la duración del MMN mostraba diferencias significativas entre ambos grupos, sólo para estímulos con alto contraste entre ellos (50 / 500 mseg) (Korpilathi & Lang, 1994). Uwer et al fueron los primeros en examinar el procesamiento del estimulo oral en TEL usando sílabas consonate-vocal. Los niños con TEL mostraron una atenuación significativa en la amplitud de MMN en comparación con los registro de los niños controles, sin alteraciones del lenguaje. En un estudio más reciente hecho por Shafer et al (2005) se encontraron diferencias significativas entre niños con TEL y niños controles, cuando se estudiaron dos vocales contrastantes. Según lo referido en el estudio de Shafer, hubo una negatividad tardía "LN", pero no MMN tempranos en los niños con TEL. (Rinkert, 2006) En adición al procesamiento de tonos y palabras significativas, este estudio incorpora lo siguiente: El rango del déficit gramatical que muestran los niños con TEL, puede ser atribuido al pobre entrada lexical, con morfemas gramaticales y palabras funcionales de bajas características preceptúales afectadas. Pero el déficit gramatical puede ser también consecuencia de una inhabilidad general para extraer y usar las reglas gramaticales. Los niños con TEL muestran déficit específicos en la generación de reglas abstractas, mostrando en general un déficit nolingüístico en la generación y la aplicación de reglas. (Rinkert, 2006) La extracción de reglas del ambiente acústico, es una función esencial del sistema auditivo, particularmente para la adquisición del lenguaje. MMN ha sido aplicado para examinar la habilidad de extraer reglas abstractas fuera del foco de atención, esto contribuye a comprender esta función. En este paradigma, MMN ha sido observado en niños, adultos y recién nacidos, pero aún no ha sido ocupado para estudiar la habilidad de extraer reglas en niños con TEL. (Rinkert, 2006). Muchos estudios de trastornos de lenguaje, como el realizado por Tallal sugieren la existencia de una codificación auditiva anormal que jugaría un papel importante en la disrupción de las habilidades del lenguaje consideradas normales. Esto, presumiblemente contribuyen a la anormal percepción de las pistas acústicas cruciales que están contenidas en las señales del habla. En relación a esto, McAnally demostró que existe una anormal percepción y un trastorno cortical y subcortical, en el procesamiento auditivo neural de los estímulos verbales y no verbales en un grupo de niños y adultos que presentan alteraciones del lenguaje. (Wible, Nicol & Graus, 2005). En un estudio realizado por Wible et al se utilizó potenciales evocados auditivos de tronco cerebral, en respuesta a un discurso, en un gran grupo de niños con y sin alteraciones del lenguaje. Se demostró que los potenciales en el grupo de niños con alteraciones del lenguaje, eran menos fuerte. Esto se interpreta como reflejo de la disminución de la sincronía de la generación y/o la transmisión, desde el cuero cabelludo, y el posterior registro de la actividad neural subyacente, probablemente originados en el lemnisco lateral o en el coliculo inferior (Wible, Nicol & Graus, 2005) Conclusión Si bien el TEL es cada vez más difundido, los problemas que éste conlleva para una gran cantidad de niños y familias nos obliga a otorgar urgencia al hecho de encontrar una explicación consensuada de su origen y su relación con diferentes alteraciones que se han observado en estos niños. A lo largo de esta revisión hemos explorado distintos enfoques, teorías e investigaciones acerca de la relación existente entre el trastorno específico del lenguaje y el procesamiento auditivo. Es interesante el hecho de que en años de experimentación y análisis todavía no se logre un consenso en el tema y posiblemente demore encontrar una respuesta. Nos llama la atención la innumerable evidencia acerca de la asociación entre ambos, y es aun más interesante que, a pesar de ella, aún no se descifre su significado. Es por esto que consideramos importante el seguir con las investigaciones, no sólo en niños, si no en su entorno y también en los adultos que lo padecen. Esto es importante ya que el TEL es una condición y sería un gran aporte el conocer más acerca de las dificultades que permanecen en el tiempo y sus variaciones, pues podrían conducirnos al encuentro de las tan anheladas respuestas y junto con esto, permitir un mejor pasar a quienes se ven directamente afectados por esta dificultad. Publicado por Pazen 18:23 Además de los criterios ‘estándar’ para efectuar el diagnóstico de este cuadro, los niños que presentan TEL- Gramatical, no pueden evidenciar problemas simultáneos de la producción del habla, de€ciencias pragmáticas o impedimentos no-verbales34. El planteamiento acerca del in€nitivo opcional propuesto por Rice y cols.8 es la explicación lingüística más prominente acerca de las di€cultades morfosintácticas que evidencian los niños con TEL hablantes del inglés. Esta teoría sugiere que, alrededor de los tres años, los niños con desarrollo típico del lenguaje realizan producciones verbales usando el in€nitivo opcional, cuando las formas €nitas de los verbos en inglés son opcionales La explicación del in€nitivo opcional sugiere que los niños con TEL no reconocen la naturaleza obligatoria de la morfología temporal de los verbos en inglés y consideran el uso de los in€nitivos como ‘opcional’13. Los resultados evidenciaron que los niños con TEL tenían mayor di€cultad con la morfología temporal en relación a los otros dos grupos. Especí€camente en el presente en tercera persona singular “s” El enfoque lingüístico El planteamiento acerca del in€nitivo opcional propuesto por Rice y cols.8 es la explicación lingüística más prominente acerca de las di€cultades morfosintácticas que evidencian los niños con TEL hablantes del inglés. Esta teoría sugiere que, alrededor de los tres años, los niños con desarrollo típico del lenguaje realizan producciones verbales usando el in€nitivo opcional, cuando las formas €nitas de los verbos en inglés son opcionales9-11 (ej. “daddy swing/ daddy swings”). Con frecuencia se ha observado que los niños con TEL mantienen el uso del in€nitivo opcional (revelando sus di€cultades con los morfemas gramaticales) en edades en las que la mayor parte de los niños con desarrollo típico ya dominan las obligaciones morfológicas del lenguaje12. La explicación del in€nitivo opcional sugiere que los niños con TEL no reconocen la naturaleza obligatoria de la morfología temporal de los verbos en inglés y consideran el uso de los in€nitivos como ‘opcional’13. Rice y sus colegas han comprobado la explicación del in€nitivo opcional a partir de diversas investigaciones experimentales. Por ejemplo, Rice et al.8, Rice y Wexler13, y Cleave y Rice14, investigaron si los niños con TEL hablantes del inglés tenían más di€cultad con la morfología temporal o con la morfología notemporal al compararlos con sus pares con desarrollo típico por edad y por desarrollo de lenguaje (mismo promedio de morfemas por frase). Los resultados evidenciaron que los niños con TEL tenían mayor di€cultad con la morfología temporal en relación a los otros dos grupos. Especí€camente en el presente en tercera persona singular “s” (ej. David swings); en el tiempo pasado regular “ed” (ej. played), en el verbo auxiliar “do” (ej. she did) y en la cópula/auxiliar “be” (ej. she is). Paralelamente los niños con TEL no evidenciaron di€cultades inusuales en la morfología no temporal de verbos en inglés, tal es el caso del morfema “s” para el plural regular (ej. three dogs); las preposiciones “in” y “on”, ni el progresivo –“ing” (ej. talking). Cleave y Rice14 estudiaron el uso de la cópula verbal contraída y no contraída con el verbo auxiliar “ser” (en un ejemplo del inglés: “He is” y He’s). similar a la de los niños con desarrollo típico del lenguaje. Ellos encontraron que los niños con TEL producen más errores con la cópula no contraída al mismo tiempo que utilizan la forma contraída con una frecuencia En diversas investigaciones efectuadas para probar el planteamiento del in€nitivo opcional para el TEL se seleccionaron los niños con criterios de inclusión similares a los utilizados en el proyecto de Rice y Wexler13. Lo anterior es problemático, porque tales criterios no fueron del todo estandarizados y es posible que no fueran su€cientes. Por ejemplo, se reclutaron niños con TEL diagnosticados por fonoaudiólogos en el proyecto anterior de Rice et al.8, quienes no el proyecto anterior de Rice et al.8, quienes no siempre utilizaron los mismos instrumentos de evaluación por lo que el diagnóstico de trastorno de lenguaje dependía además del juicio de cada profesional. Así, dos de los niños que participaron en el proyecto de Rice y Wexler13 recibieron puntajes dentro de una desviación estándar bajo el promedio en el Test of Language Development- Primary15 (TOLD:P-3) y sin embargo, se incluyeron en el grupo experimental de TEL. Además, no se incluían los niños con problemas severos de articulación. Otro aspecto que puede criticarse, fuera de los criterios de inclusión de los participantes, es el uso de un diseño experimental de grupo, tal como lo emplearon estos investigadores. De este modo, un análisis de los resultados del proyecto de Rice y Wexler13 reveló que los errores de tan solo unos cuantos sujetos del grupo con TEL modi€caron el promedio del grupo experimental. En otras palabras, es posible que sólo unos pocos niños del grupo con TEL hayan tenido di€cultades inusuales con la morfología relacionada con el tiempo verbal y que otros no las tuvieran. El estudio de Rice y Wexler13 reveló que algunos de los niños en el grupo experimental de Trastorno Especí€co del Lenguaje produjeron morfemas temporales por encima del promedio de los dos grupos de control. Es posible que estos hallazgos indiquen que sólo un subgrupo de los niños con Trastorno Especí€co del Lenguaje presentaba di€cultades con la morfología temporal. Esto sugeriría que es posible usar este tipo de tareas como un eventual marcador clínico de alta especi€cidad pero baja sensibilidad. Otros estudios de Rice y su equipo16-21,han trabajado sobre la misma muestra de la investigación de Rice y Wexler13 para el estudio de factores relacionados con el uso extendido del in€nitivo opcional. De modo similar, en otras investigaciones realizadas por estos investigadores se han mantenido criterios similares de inclusión para los grupos experimentales de niños con TEL8,14,22,23. La amplitud en los criterios de inclusión no considera la posibilidad de que sólo un subgrupo de niños con TEL puede manifestar este tipo de errores en la morfología del pasado verbal. Procesamiento