Justicia Tierras
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JUS1ICIA \ PAZ1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS \amile Salinas Abdala Juan Manuel Zarama Santacruz Centro de Memoria listórica. Consejo Directi·o. Mivi.tro ae ]v.ticia , aet Derecbo: Ruth Stella Correa Palacio Mivi.tra ae íavcacióv ^aciovat: María lernanda Campo Mivi.tra ae Cvttvra: Mariana Garcés Córdoba Director aet De¡artavevto .avivi.tratiro ¡ara ta Pro.¡eriaaa ´ociat: Bruce Mac Master Directora ae ta |viaaa .avivi.tratira í.¡eciat ¡ara ta .tevcióv , Re¡aracióv ívtegrat ae ta. 1íctiva.: Paula Ga·iria Director Ceverat Gonzalo Sanchez Gómez ..e.ore. ae ta Direccióv Maria Lmma \ills Paula Andrea Ila ívre.tigaaore. aet Crv¡o ae Mevoria íi.tórica Martha Nubia Bello, Andrés Suarez, César Caballero, lernan Gon- zalez S.J., I·an Orozco, León Valencia, María Victoria Uribe, Nubia lerrera, Patricia Linares, Pilar Riano, Rodrigo Uprimny, Jesús Abad Colorado. Directores 1écnicos Direccióv ¡ara ta Cov.trvccióv ae ta Mevoria íi.tórica: Martha Angélica Barrantes Reyes Direccióv ae .rcbiro. ae Derecbo. ívvavo.: Ana Margoth Guerrero de Otero Direccióv ae Mv.eo ae ta Mevoria: Juan Carlos Posada Gonzalez Direccióv .cverao. ae ta 1eraaa: Ál·aro Villarraga Sarmiento Direccióv .avivi.tratira , íivavciera: Sonia Stella Romero ]efe ae Ofciva ..e.ora ]vríaica: César Rincón Covvvicaciove. , Peaagogía: Mauricio Builes, Luis Carlos Manjarrés, Diego Jaramillo, Salomón Lcha·arría Ptaveacióv: Natalí de la Vega íqvi¡o ae traba;o Direccióv ¡ara ta Cov.trvccióv ae ta Mevoria íi.tórica: Ana Lyda Campo, \illiam lernando Mancera Sanchez, Diana Ca- mila Orjuela Villanue·a, Luis Carlos Sanchez Diaz, Ronald Ldward Villamil Car·ajal, Vladimir Melo Moreno ..i.tevte. ae Direccióv Ceverat: Laura Quiroz, Ldisson Calderón. La in·estigación base para el presente iníorme se desarrolló en el marco del Grupo de Memoria listórica de la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación, competencias retomadas por el Centro de Memoria listórica en su nue·a condición de Lstablecimiento Pú- blico, creado por el artículo 146 de la ley 1448 de 2011, que tiene por objeto reunir y recuperar todo el material documental, testimonios orales y por cualquier otro medio relati·os a las ·iolaciones cometi- das como consecuencia de las iníracciones al derecho internacional humanitario o de ·iolaciones gra·es y maniFestas a las normas inter- nacionales de derechos humanos ocurridas con ocasión del connicto armado interno. La etapa de publicación y di·ulgación del iníorme se realiza en cum- plimiento de las íunciones del Centro de Memoria listórica. Documento elaborado en el marco del componente Contribución de las ·ersiones libres al Derecho a la Restitución de Bienes Patrimo- niales ,1ierras y 1erritorios, de las Víctimas del proyecto: Analisis socio jurídico de las ·ersiones libres de los desmo·ilizados en los pro- cesos de justicia y paz. Una contribución a la realización del derecho a la ·erdad histórica y al cumplimiento del deber de memoria del Lsta- do y la sociedad` ,Socio-judicial Analysis oí the Personal Accounts oí Demobilized Persons Under Law 9¯5: GPSl 09-019`,, Fnanciado por el Gobierno de Canada, a tra·és de la Organización Internacional para las Migraciones ,OIM,, con la participación de los consultores: Nubia lerrera Ariza Patricia Linares Prieto \amile Salinas Abdala leydi Patricia Baldosea José Manuel Jaramillo Juan Manuel Zarama Santacruz !"#$%&'$(&)% +%,-"%$(&.%$/ 0$"$ /$1 2&#"$(&.%-1 3!+24 Misión en Colombia 5-6- 7- 2&1&)% Marcelo Pisani 5-6- 7- 2&1&)% 879:%,. Alejandro Guidi ;.."7&%$7." 7-/ <".#"$=$ 7- >-&%,-#"$(&)% (.% ?%6.@:- ;.=:%&,$"&. Camilo Leguízamo ;.."7&%$7."$ 7- <".A-(,.1 María Ángela Mejía 2.%&,."$ 7- <".A-(,.1 Adriana Correa Lsta publicación es posible gracias al generoso apoyo del pueblo de Canada. Los contenidos son responsabilidad de sus autores y no ne- cesariamente renejan las opiniones de la Lmbajada de Canada. © 2012, Centro de Memoria listórica © 2012, Organización Internacional para las Migraciones -Misión en Colombia-. +BCDE 9¯8-958-5¯6-081-3 Impreso en Colombia - Printed in Colombia Primera edición en Colombia, septiembre de 2012 © Diseno de cubierta: Publicaciones Semana Lste es un documento público cuyo texto completo se podra con- sultar en: www.centrodememoriahistorica.go·.co ;"F7&,.1 6.,.#"GH(.1E Portada. loto de Jesús Abad Colorado © lotos internas: Jesús Abad Colorado © Lste iníorme es de caracter público. Puede ser reproducido, copiado, distribuido y di·ulgado siempre y cuando no se altere su contenido, se cite la íuente y,o en cualquier caso se disponga la autorización del Centro de Memoria listórica como titular de los derechos morales y patrimoniales de esta publicación. Se excluye de esta autorización el material íotograFco senalado con Copyright ©. JUS1ICIA \ PAZ 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS 9 CON1LNIDO Introducción......................................................................................... 13 ;$0I,:/. JK Lstructuras de la Casa Castano.......................................................... 23 1. La Casa Castano............................................................................. 25 1.1. Bloques Seleccionados............................................................... 2¯ 1.2. Bloques en el Uraba Chocoano-Antioqueno......................... 29 1.2.1. Bloque Llmer Cardenas......................................................... 30 1.2.1.1. Comandante del BLC: lreddy Rendón lerrera............. 32 1.2.2. Bloque Bananero..................................................................... 32 1.2.2.1. Comandante del BB: José L·er Veloza García............... 34 1.2.2.2. Comandante del lrente Alex lurtado: Raúl Lmilio lasbún.......................................................................... 34 1.2.3. Gran Bloque Norte en la Región del Caribe y Norte de Santander....................................................................................... 35 1.2.3.1. Bloque Córdoba................................................................... 36 1.2.3.1.1. Comandante del BCo: Sal·atore Mancuso................... 3¯ 1.2.3.2. Bloque Norte....................................................................... 39 1.2.3.2.1. Comandante del BN Rodrigo 1o·ar Pupo................... 42 1.2.3.2.2. lernan Giraldo Serna..................................................... 43 1.2.3.3. Bloque Montes de María..................................................... 44 1.2.3.3.1. Comandante del BMM: Ldward Cobos 1éllez............ 46 1.2.3.4. Bloque Catatumbo............................................................... 4¯ 1.2.3.4.1. Comandante del BCa: Sal·atore Mancuso................... 49 ;$0I,:/. LK 1ierras y 1erritorios en los que licieron Presencia las ACCU..... 51 2. Características Particulares de las Regiones............................... 51 2.1. Intereses Generales.................................................................... 53 2.1.1. Consolidación 1erritorial....................................................... 53 2.1.2. Apropiación De 1ierras \ 1erritorios................................. 56 10 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS 2.2. Desplazamiento, Abandono y Despojo de 1ierras.............. 59 2.3. Concentración de la 1ierra y Contrarreíorma Agraria`... 66 2.4. Restitución de 1ierras y 1erritorios........................................ ¯1 ;$0I,:/. MK Las Re·elaciones Sobre Ll Abandono \ Despojo De 1ierras..... ¯5 3. Causas y BeneFciarios del Despojo y Abandono de 1ierras.. ¯¯ 3.1. Inconsistencias en las Versiones............................................ ¯8 3.2. Desplazamiento Líecto Colateral............................................ 80 3.3. lines Según Políticos o Militares............................................. 81 3.3.1. La Visión de los Líderes Políticos......................................... 81 3.3.2. La Visión de los Comandantes Militares............................. 85 3.4. Determinadores y Usuíructuarios del Despojo y Abandono lorzado........................................................................... 89 3.4.1. Acaparamiento de 1ierras por Miembros Visibles de las AUC.......................................................................................... 89 3.4.2. Otros Agentes Lconómicos BeneFciarios del Destierro.. 92 3.5. Lxtradiciones y Verdad............................................................ 95 3.6. Lntrega de Bienes para la Reparación................................... 101 3.6.1. Bienes Oírecidos y Lntregados........................................... 102 3.¯. Mancuso y la Lntrega de Bienes............................................ 104 3.8. Aprendizajes de la Ley 9¯5 para la Restitución.................... 110 ;$0I,:/. NK Ll Despojo: ,Lstrategia de la Lmpresa Criminal·.......................... 115 4. Ll Modus Operandi de La Casa Castano................................... 116 4.1. La Lmpresa Criminal................................................................ 123 4.1.1. Propósito Criminal................................................................. 124 4.1.2. ReconFguración Cooptada del Lstado`........................... 125 4.1.3. Asociación con Agentes Lconómicos................................. 129 4.1.4. Narcotización de las AUC..................................................... 131 4.1.5. Apoderamiento y Despojo de 1ierras................................. 132 4.2. Casos de Despojo y Legalización........................................... 136 4.2.1. Despojo en Jiguamiandó y Cur·aradó................................. 136 11 CON1LNIDO 4.2.2. Proyectos Producti·os Por La Paz ,Legalización del Despojo·...................................................................................... 146 4.2.2.1. De Sal·atore Mancuso........................................................ 14¯ 4.2.2.2. De Ll Aleman`.................................................................. 148 4.2.3. Despojo en Procesos de Justicia y Paz................................ 153 4.2.3.1. Chi·olo: Despojo en Zonas de Jorge 40`..................... 153 4.2.3.2. 1ulapas: Despojo en Zonas de Ll Aleman`.................. 160 4.2.3.3. Predios apropiados por lasbún en Uraba...................... 162 ;.%(/:1&.%-1 A >-(.=-%7$(&.%-1.............................................. 165 8O"-P&$,:"$1........................................................................................ 1¯3 8%-Q.1.................................................................................................. 1¯5 Anexo 1. Desmo·ilizaciones Autodeíensas Campesinas de Córdoba y Uraba.......................................................................... 1¯5 Anexo 2. Lstructuras Paramilitares y Miembros.......................... 1¯¯ Anexo 3. Masacres y Víctimas en las Zonas Seleccionadas........ 180 Anexo 4. Población Desplazada por Departamento de Llegada 1999 - 2011.................................................................... 181 Anexo 5. Inmuebles Rurales Oírecidos y Recibidos Ln Ll lRV.......................................................................................... 181 Anexo 6. Simulaciones y Predios de Mancuso.............................. 184 Anexo ¯. Los Pactos en las Regiones Seleccionadas.................... 185 Anexo 8. La Parapolítica en las Regiones Seleccionadas............. 185 Anexo 9. Bienes PPP y Sal·atore Mancuso ................................ 18¯ >-/$(&)% 7- ?1@:-=$1 Lsquema No. 1. Lstructura Organizacional de los Bloques Seleccionados........................................................................ 28 Lsquema No. 2. Lstructura Organizacional del Bloque Norte.. .. 41 Lsquema No. 3 Abandono y Despojo de 1ierras........................... 68 >-/$(&)% R- 2$0$1 Mapa No. 1. Georreíerenciación de las ACCU................................24 Mapa No. 2. Georreíerenciación de los Bloques Seleccionados...25 12 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Mapa No. 3. Presencia de las ACCUN Ll Uraba......................... 2¯ Mapa No. 4. Lxpansión de las ACCU Ln Ll Caribe y Norte De Santander....................................................................... 36 Mapa No. 5. Georreíerencia Del Bloque Norte........................... 40 Mapa No. 6. Georreíerenciación del Bloque Montes de María. 45 Mapa No. ¯. Georreíerenciación Del Bloque Catatumbo.......... 49 Mapa No. 8. Georreíerenciación de las ACCU Ln La Región Del Caribe.......................................................................................... 54 Mapa No. 9. Georreíerenciación y Corredores de 1raFco de Droga............................................................................................. 55 Mapa No. 10. Georreíerenciación y Zonas de Despojo y Abandono lorzado........................................................................ 5¯ Mapa No. 11 Masacres por departamento 2001-2011................ 58 Mapa No. 12. Georreíerenciación \ Concentración De La 1ierra 2000-2009................................................................... 6¯ Mapa No. 13. Despojo Ln Ll Departamento De Magdalena.... 156 Mapa No. 14. Región Carbonííera en el Departamento del Cesar.............................................................................................. 159 Mapa No. 15. Ventas íorzadas y íalsas en el Uraba........................ 161 Reíerencias............................................................................................ 191 13 IN1RODUCCIÓN Ll presente documento hace parte del propósito del Grupo de Me- moria listórica -Centro de Memoria listórica a partir de la Ley 1440 de 2011 conocida como la Ley de Víctimas-, de elaborar y di·ulgar un relato sobre el connicto armado en Colombia y de sus eíectos a partir de distintas ·erdades y memorias, entre ellas las que emanan de las ·ersiones libres de los desmo·ilizados de los grupos paramilitares postulados en los procesos de la Ley 9¯5 de 2005 -conocida como la Ley Justicia y Paz- en la re·elación de la ·erdad sobre las causas, res- ponsables y usuíructuarios del abandono íorzado, la ocupación ilegí- tima y el despojo de tierras y territorios, así como de su contribución a la reparación integral de las ·íctimas a tra·és de la restitución de sus bienes patrimoniales, particularmente de sus inmuebles rurales. La in·estigación se desarrolló en el marco del Componente Con- tribución a las ·ersiones libres al Derecho a la Restitución de Bie- nes Patrimoniales ,tierras y territorios, de las Víctimas`, del Proyecto Analisis socio jurídico de las ·ersiones libres de los desmo·ilizados en los procesos de la Ley de 9¯5 de 2005 - Una contribución a la rea- lización del derecho a la ·erdad histórica y al cumplimiento del deber de memoria del Lstado y la sociedad`, apoyado por la embajada de Canada y la Organización Internacional de Migraciones ,OIM,, bajo la coordinación del director del Grupo de Memoria listórica. Ll analisis se delimitó a la contribución de los miembros de los si- guientes grupos de las denominadas Autodeíensas Campesinas de Córdoba y Uraba ,ACCU, -gestadas por la Casa Castano: en Uraba, los bloques Llmer Cardenas ,BLC,, y Bananero ,BB,, y en las regio- nes de la costa Atlantica y el departamento de Norte de Santander, el gran Bloque Norte ,GBN, del que hicieron parte los bloques Montes de María ,BMM,, Córdoba ,BCo, y Catatumbo ,BCa, y el conocido 14 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS como Bloque Norte ,BN, que operó en la zona norte del Caribe co- lombiano. Para este Fn se tu·ieron en cuenta las ·ersiones de los postulados, entregadas directamente por las íuentes oFciales ,Unidad de Justicia y Paz de la liscalía General de la Nación y 1ribunales de Justicia y Paz,, así como de las recibidas de organizaciones deíensoras de de- rechos humanos, periodistas, ·íctimas, abogados y ser·idores públi- cos, dadas las diFcultades para obtenerlas de las instancias oFciales. Ln particular, se analizaron las ·ersiones libres rendidas por los ex comandantes desmo·ilizados que íueron postulados a la Ley 9¯5 de 2005: lreddy Rendón lerrera, comandante del BLC, L·er Veloza García, comandante del BB, Ldwar Cobos 1éllez, comandante del BMM, Sal·atore Mancuso, comandante del Gran Bloque Norte, y Rodrigo 1o·ar Pupo, comandante del BN, así como de algunos de los integrantes de esas estructuras. De manera complementaria se tu·o en cuenta el seguimiento de medios de comunicación al proceso judi- cial de la Ley 9¯5 de 2005, en especial de medios especializados como el que realiza el portal de VerdadAbierta.com Ll analisis que se presenta a lo largo de este texto no se limita exclu- si·amente a lo declarado en las ·ersiones libres, dado que se trata de piezas judiciales que pueden estar mediadas por razones como no auto incriminarse, el temor de retaliaciones de los socios y aliados, o por otros intereses, de una parte, y a que no son suFcientes para con- textualizar la inescindible relación entre el desplazamiento íorzado y otras ·iolaciones de derechos humanos e iníracciones al Derecho Internacional lumanitario ,DIl, y los intereses sobre las tierras, te- rritorios y recursos naturales, de la otra. Ls por ello que también se tu·ieron en cuenta declaraciones y pro- nunciamientos de otros desmo·ilizados de regiones diíerentes a las seleccionadas o que no hacen parte del proceso de la Ley 9¯5 de 2005, testimonios rendidos en procesos judiciales ordinarios y relatos obtenidos en entre·istas a postulados y no postulados en carceles co- lombianas y de Lstados Unidos ,Sal·atore Mancuso, lernan Giraldo y L·er Veloza,. De igual íorma se realizaron entre·istas personales y por medios electrónicos con algunos abogados de los postulados. 15 IN1RODUCCIÓN Paralelamente se re·isaron las pro·idencias de la Corte Suprema de Justicia y de los 1ribunales de Justicia y Paz, pronunciamientos de la liscalía y de los organismos de control, y diíerentes estudios e in·es- tigaciones de entidades públicas y académicas. Lstas y otras íuentes se conírontaron y complementaron con entre·istas con ·íctimas y ser·idores públicos, especialmente de las ·inculadas a los casos que se exponen en este documento. La presente in·estigación parte de la premisa según la cual se esta- blece que un proceso de justicia transicional necesita determinar la ·erdad judicial, pero dentro del reconocimiento de sus limitaciones en perspecti·a de garantía de no repetición, conocimiento del pasado y entendimiento del presente. Por esta razón, el Grupo de Memoria listórica se ha planteado como un desaíío central la reconstrucción de la ·erdad histórica, esto es, una ·erdad que permita conocer la magnitud de la ·iolencia ·i·ida, de los danos causados y de los eíec- tos generados en la comunidad. Ln este sentido, las ·ersiones libres y los testimonios de los ·ictimarios cobran un especial ·alor, en tanto constituyen una pieza íundamental para la diíícil tarea de reconstruc- ción de la memoria histórica, amén de que las ·ersiones libres de los postulados son el principal apoyo probatorio en los procesos de Justicia y Paz. Adicionalmente las ·ersiones y los testimonios han nu- trido los procesos que adelanta la Corte Suprema de Justicia contra ser·idores públicos por el delito de concurso para delinquir en lo que se ha conocido como la parapolítica`. Con base en lo anterior, en este documento se intenta dar cuenta de cómo los integrantes de los grupos paramilitares que se desmo·iliza- ron en el marco de los acuerdos con el Gobierno Nacional -desmo- ·ilizados-, y que íueron seleccionados a acceder a la pena alternati·a de maximo ocho anos, pre·ia la rendición de ·ersiones libres -postu- lados y ·ersionados- han aportado a uno de los aspectos sustanciales de la denominada Ley de Justicia y Paz: la re·elación de la ·erdad sobre el despojo de tierras y territorios 1 componente de la reparación 1 Ln el presente documento se utiliza la expresión tierras` sin perjuicio de las diíeren- tes relaciones que se ejercen sobre ellas: indi·iduales, asociati·as y colecti·as por parte de campesinos y grupos étnicos. 16 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS integral de las ·íctimas y de las garantías de no repetición de gra·es crímenes de derechos humanos. Ln ese sentido, este trabajo con·erge con in·estigaciones que se han adelantado desde centros académicos o de pensamiento para apor- tar al esclarecimiento de las circunstancias en las cuales se originó y desplegó el íenómeno de la apropiación ·iolenta de tierras, con inter·ención directa de grandes estructuras armadas conocidas como paramilitares`, en particular de las uniFcadas por la Casa Castano. A lo largo del proceso los postulados han aportado ·aliosos elemen- tos para aproximarse al voav. o¡eravai de la Casa Castano coníormada por los hermanos lidel, Carlos y Vicente, quienes impartieron las directrices militares, políticas y económicas para la uniFcación de los grupos de autodeíensas creados o Fnanciados por élites sociales y económicas en distintas regiones del país, y su expansión y consoli- dación a tra·és de la creación de las ACCU y luego de las AUC, y con ello a la lógica y al patrón del abandono íorzado y despojo de tierras y territorios y de su legalización. La Casa Castano adquiere importancia cuando se ·uel·e una pieza cla·e en la estrategia de control territorial y, por ende de seguridad de las exportaciones de muchas empresas bananeras, grandes proyectos de in·ersión y del acaparamiento de tierras en los ·alles del Sinú, San Jorge y la cuenca del Atrato. Ln esta estrategia, bajo el discurso de combatir la sub·ersión y sus supuestas redes de apoyo, se conjugan las estructuras de los hermanos Castano, redes narcotraFcantes, jeíes militares en la zona, autoridades ci·iles locales y departamentales, po- líticos de las ·iejas estructuras clientelistas o emergentes, y grandes empresarios, ganaderos y terratenientes. Lse modelo ·iolento que resultó exitoso en Uraba íue la base de la expansión hacia el norte de la costa Caribe, lo mismo que en las in- cursiones en el nororiente de Antioquia, Norte de Santander, Magda- lena Medio, Valle, Cauca y la Orinoquía, entre otras regiones del país, encontrando poderosos socios legales e ilegales, para cuyos intereses resultaban útiles las estructuras armadas. Lo anterior es ampliamente corroborado en las re·elaciones de des- mo·ilizados, postulados y de otros integrantes de las AUC, así como 1¯ IN1RODUCCIÓN en las condenas contra ser·idores públicos por concierto para delin- quir, las que han permitido de·elar la empresa criminal del parami- litarismo, caracterizada por: i, la existencia de un propósito criminal común, ii, la reconFguración cooptada del Lstado` ,Garay, 2010, de la que emana la parapolítica` y la parainstitucionalidad ci·il y militar`, iii, las alianzas con agentes pri·ados -`paraeconomía` y pa- raempresarismo`-, i·, la mutación a un cartel del narcotraFco -`pa- ranarcotraFco` o narcoparamilitarismo`-, y ·, el abandono íorzado y despojo sistematico, masi·o y ·iolento de tierras. La coníormación de lo que podría llamarse la quíntuple alianza` integrada por paramilitares, políticos y ser·idores públicos ci·iles, éli- tes locales económicas y empresariales, y por narcotraFcantes muta- dos en paramilitares ,narcoparas`, o no, con un propósito común y compartido de reíundar la patria e imponer un nue·o orden social, político y económico, hace iníructuosa la tarea de deFnir si en su ori- gen predominó el impulso anti insurgente o los intereses de amparar negocios con las armas, en particular el narcotraFco y el control de tierras, territorios y recursos naturales. La reacción írente a la presen- cia ·iolenta de la guerrilla, condujo a la asociación con el narcotraFco y la dimensión del negocio ilegal dio lugar a la ampliación de ope- raciones económicas. De esta íorma, el discurso anti insurgente se ·uel·e íuncional a la complicidad de autoridades con el narcotraFco, y las estructuras paramilitares se oírecen como aliados eFcaces para ganaderos, terratenientes, empresarios y otros sectores en el empe- no de controlar y explotar territorios. Así las cosas al amparo de las dictaduras locales del terror se ambientaron toda suerte de negocios lícitos e ilícitos, entre ellos el acaparamiento de tierras para la puesta en marcha de proyectos agroindustriales, íorestales, de ganadería in- tensi·a y de minería. Al respecto, las re·elaciones en el marco del proceso de Justicia y Paz denotan que inherente al propósito criminal de reconFgurar el Lstado se encontraban los intereses económicos sobre las tierras, territorios y recursos naturales, los que como ha senalado la Corte Constitucional son causa y eíecto de la ·inculación entre |.| actores armados o no armados, legales e ilegales |.|`, en el desplazamiento íorzado ,Auto 18 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS 004 de 2009,, y, por ende, de la contrarreíorma agraria` ·iolenta que se expresa en el aumento de la concentración de la tierra y de los usos del suelo, ampliamente documentada por el Grupo de Memoria listórica en ·arios de sus iníormes, entre ellos, La tierra en disputa. Memorias del despojo y resistencias en la costa Caribe`. Bajo ese propósito criminal, signado por la comisión de gra·es, ma- si·as y sistematicas ·iolaciones de derechos humanos, la captura del Lstado y el animo de reíormar aspectos sustanciales de la Carta Po- lítica, entre ellos el reconocimiento, respeto y protección de los dere- chos de los grupos étnicos, la biodi·ersidad ambiental, y el acceso a tierras para el campesinado con el Fn de pri·ilegiar el uso de terrenos para impulsar grandes proyectos de desarrollo económico, surge la necesidad de preguntarse si existió una estrategia macrocriminal para despojar y apropiarse de tierras y territorios y para su legalización en las regiones de control y dominio paramilitar, así como quienes la de- terminaron y se beneFciaron de ella. De las ·ersiones libres, testimo- nios y otras declaraciones en torno a la moti·ación de recuperar las tierras en zonas de dominio guerrillero, los intereses económicos que subyacían a la expansión de la Casa Castano y el dominio y reparto del Botín de Guerra`, así como de la in·itación que íormulan ·arios ex comandantes a con·ocar no sólo a las estructuras armadas en el esclarecimiento de la ·erdad ·erdadera` sobre el acaparamiento de la tierras, la usurpación de la propiedad agraria, la ·iolencia y el des- plazamiento`, parece iníerirse la existencia de un plan criminal para apoderarse de tierras. Pero sin lugar a dudas, de la re·isión y el analisis de los seis casos que se comentan en este documento emanan los elementos comunes que marcaron la expansión económica del íenómeno paramilitar engen- drado por los hermanos Castano y sus socios, a partir del despojo de los territorios colecti·os de las comunidades negras de Jiguamiandó y Cur·aradó: 1, la toma militar y el desplazamiento a sangre y íuego en coníabulación con miembros de la luerza Pública, 2, la apropiación a la íuerza o íraudulenta y la compra a menos precio de grandes ex- tensiones de tierras, 3, la implementación de proyectos económicos de gran escala en asocio con agentes pri·ados legales e ilegales, y 19 IN1RODUCCIÓN públicos y 4, el repoblamiento para ejercer control social en los terri- torios liberados de la guerrilla. De esos elementos que se repiten y reFnan en los Proyectos Produc- ti·os para la Paz de los ex comandantes Sal·atore Mancuso y lreddy Rendón lerrera, así como de los casos de despojo que in·olucran a este último y a Rodrigo 1o·ar Pupo y Pedro lasbún Mendoza que han sido objeto de decisiones judiciales en los procesos de Justicia y Paz se pueden extraer las características de lo que podría denominarse la empresa de legalización del despojo` en la que íue íundamental la participación de ser·idores públicos y de agentes económicos pri·a- dos legales e ilegales. Al hablar de una empresa criminal de despojo y legalización se parte de la premisa de que en un determinado momento de la escalada de ·iolencia, se conFguró un patrón de conducta en el que inter·inieron múltiples actores, que cumplían papeles di·ersos pero eran íunciona- les al modelo de acumulación de riqueza basado en el apro·echamien- to de la ·iolencia. Unos se encargaban de la acción directa armada, de la cadena del terror en contra de comunidades, poblaciones y líderes, otros concurrían desde el poder político y económico como socios, y otros brindaban su apoyo militar e institucional. Pero, igualmente, estan los cómplices in·isibles que se apro·echaron y apro·echan del circuito ·iolento de apropiación. Si bien, estos no inter·ienen en las acciones ·iolentas, e incluso no necesariamente conocen los detalles de las conductas criminales, sí participan en los eslabones mas renta- bles de la cadena depredadora y del botín de guerra. La comprensión y proíundización de estos elementos es una tarea impostergable y esencial para la aplicación de la Ley de Víctimas en aras de saldar la deuda con los desposeídos que íueron desterrados y pri·ados de sus derechos patrimoniales, y de e·itar que se consolide el despojo y la ocupación ilegítima, sin perjuicio de que se trate del ala militar de la empresa criminal o de sus socios y aliados, así como de los que se apro·echaron de la ·iolencia para acceder a terrenos e implementar proyectos agroindustriales y íorestales. A partir de lo anterior, este texto pretende mostrar la necesidad e importancia de hacer e·idente que uno de los principales desaííos 20 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS que aíronta el proceso especial de la Ley 9¯5 de 2005 y de la Ley de Víctimas, es el deber de encontrar la ·erdad histórica desde las ·er- siones y testimonios de los postulados y de otros miembros del para- militarismo, sobre los autores intelectuales y responsables del destie- rro así como de sus usuíructuarios directos e indirectos, presupuesto íundamental para implementar eíecti·amente políticas de restitución a ía·or de quienes íueron ·íctimas de ·iolaciones de sus derechos de propiedad y posesiones. Sin embargo, los incipientes resultados de Justicia y Paz y las dila- ciones y trabas para iniciar la aplicación de la restitución de tierras de las ·íctimas, en parte por los mó·iles e intereses de los aliados de las estructuras de la Casa Castano, e·idencian que esas normas no son suFcientes para identiFcar los responsables y usuíructuarios de las ·iolaciones de los derechos patrimoniales y para identiFcar y recuperar las tierras expoliadas y legalizadas por la empresa criminal. Combatir y re·ersar sus actuaciones demanda adoptar y ejecutar me- didas complementarias y articuladas, entre ellas una Política Criminal Integral que permita in·estigar, judicializar y sancionar eíecti·amen- te a todos los responsables y extinguirles el dominio de los bienes, sin perjuicio de que se trate de armados o no, legales o ilegales, y del procedimiento que se les aplique ,justicia ordinaria ci·il, militar o transicional,. Simultaneamente, se requieren acciones encaminadas a e·idenciar las responsabilidades políticas, morales y éticas de los alia- dos legales de la causa criminal y a imponer las respecti·as sanciones políticas y sociales. Así las cosas, el presente texto consta de cuatro capítulos. Ln el pri- mero de ellos se hace una bre·e caracterización, contextualización y georreíerenciación de la Casa Castano y de las Autodeíensas Campe- sinas de Córdoba y Uraba ,ACCU,, los bloques y írentes que estruc- turalmente las coníormaban, y una indi·idualización de los coman- dantes seleccionados. Una ·ez identiFcados los postulados, junto con los grupos en los que operaban, en el capítulo segundo se realiza -igualmente de manera general- una caracterización de las regiones y territorios en los que hicieron presencia las ACCU y sus intereses sobre ellos. Al determi- 21 IN1RODUCCIÓN nar los íactores generales del comercio local y regional, y las potencia- lidades y riquezas de los territorios, es posible trazar los nexos entre desplazamiento de los habitantes de las regiones en que hicieron pre- sencia las ACCU y los íenómenos de concentración de la tierra. De igual manera, es posible aproximarse a dos de los grandes retos de la Ley de Víctimas, esto es, la protección y deíensa de la ·ida y los bie- nes de los reclamantes y la asesoría y acompanamiento integral írente a terceros que se opondran a sus reclamaciones alegando su buena íe en las compra·entas realizadas en zonas que íueron azotadas por la ·iolencia paramilitar, y en las que persisten grupos armados ilegales integrados por desmo·ilizados que ·ol·ieron a delinquir y por miem- bros de las AUC que no se desmo·ilizaron ni entregaron las armas, aliados con los Senores de la Droga` y, en ocasiones, con las guerri- llas, los que ademas de mantener el narcotraFco brindan seguridad a los acaparadores de tierras y de proyectos de desarrollo. Posteriormente, en el capítulo tercero de esta in·estigación se analiza la contribución de los miembros desmo·ilizados de las ACCU al es- clarecimiento de la ·ulneración de los derechos patrimoniales -tierras y territorios- de las ·íctimas, a la re·elación de los intereses y moti·a- ciones que deFnieron el destierro, y de los beneFciarios del despojo, así como los eíectos negati·os de la extradición en la materia. Lste analisis se complementa con el balance en el oírecimiento y entrega de bienes por parte de los postulados para cumplir con el derecho a la restitución de sus ·íctimas, como componente del derecho a la reparación y con el restablecimiento de los derechos patrimoniales de las mismas. Se prosigue a analizar si el despojo hizo parte de las estrategias ma- crocriminales` de un aparato de poder constituido para imponer un orden social, político, económico y cultural sustentado en el destierro ·iolento ,capítulo cuarto,. Ln esta parte, a partir de las re·elaciones expuestas en el capítulo tercero, los íallos de la Corte Suprema de Justicia en los procesos de concierto para delinquir y la descripción de seis casos, se intenta identiFcar las dimensiones de la ·ulneración de las tierras y territorios en los ambitos económicos, institucionales y políticos. 22 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Para Fnalizar se presentan algunas conclusiones y recomendacio- nes`, seguidas de las secciones abre·iaturas`, anexos`, y una rela- ción de cuadros, esquemas y mapas`, para terminar con una completa sección de reíerencias`. Jesús Abad Colorado © 25 CAPÍ1ULO I LS1RUC1URAS DL LA CASA CAS1ANO Con el Fn de contextualizar el aporte de las ·ersiones de los desmo- ·ilizados-postulados al esclarecimiento de la ·erdad sobre la apropia- ción ilegal e ilegítima de tierras y territorios, y con ello a la restitución a sus propietarios y poseedores, a continuación se describiran las es- tructuras de la Casa Castano seleccionadas para esta in·estigación y las zonas en que operaron. Según las in·estigaciones adelantadas por la Unidad de Justicia y Paz de la liscalía General de la Nación ,lGN o liscalía, dentro del marco del proceso de Justicia y Paz, las ACCU gestadas por la Casa Castano, se desmo·ilizaron en diecinue·e bloques autodenominados ,anexo 1. Desmo·ilizaciones Autodeíensas Campesinas de Córdoba y Uraba,: 1, Bloque Suroeste Antioqueno, 2, Bloque Occidente An- tioqueno, 3, Bloque léroes de 1olo·a, 4, Bloque Mineros, 5, Bloque Norte, 6, Bloque léroes de Granada, ¯, Bloque Llmer Cardenas, 8, Bloque 1olima, 9, Bloque Bananero, 10, Bloque Calima, 11, Blo- que Cacique Nutibara, 12, Bloque Centauros, 13, Bloque léroes del Chocó y PacíFco, 14, Bloque Montes de María, 15, Bloque La Moja- na, 16, Bloque Córdoba, 1¯, Bloque Catatumbo, 18, Bloque 1ayro- na, y 19, Bloque léctor Julio Peinado Becerra, los que operaban en ·arias regiones del territorio colombiano ,mapa No. 1,. 26 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Lsta in·estigación, con base en la clasiFcación elaborada por la liscalía, pese a que como se ·era a lo largo del texto, las autodeno- minaciones dadas a los bloques al momento de las desmo·ilizaciones no corresponden necesariamente con los nombres que ostentaban y con los que operaban antes de ellas. A continuación se describiran los bloques seleccionados que hicieron presencia en los departamentos de Córdoba, Sucre, Bolí·ar, Magdalena, Cesar y Norte de Santander, así como en la región del Uraba ,mapa No. 2,. 1, Ll Bloque Llmer Cardenas, comandado por lreddy Rendón lerrera. 2, Ll Bloque Bananero, comandado por L·er Veloza García. 3, Ll Bloque Montes de María, comandado por Ldward Cobos 1éllez. 4, Los bloques Córdoba y Catatumbo, comandados por Sal·atore Mancuso. BL. NORTE F. RESISTENCIA F. HECTOR JULIO PEINADO B. CATATUMBO F. MONTES DE MARIA B. LA MOJANA B. CORDOBA B. ELMER CARDENAS F. HEROES DE TOLOVA B. CALIMA B. HEROES DE CHOCO Y PAC B. CENTAUROS B. TOLIMA B. MINEROS B. NOROCCIDENTE ANTIOQUEÑO B. BANANERO B. SUROESTE ANTIOQUEÑO F. HEROES DE GRANADA F CACIQUE NUTIBARA Georeferenciación CESAR GUAJIRA ATLANTICO META BOYACA BOLIVAR CORDOBA NORTE DE SANTANDER VICHADA VALLE TOLIMA NARIÑO PUTUMAYO RISARALDA CALDAS ARAUCA CAQUETA CUNDINAMARCA CASANARE CHOCO CAUCA SUCRE GUAVIARE ANTIOQUIA MAGADALENA SANTANDER Fuente: FGN, 2010 - b Accu MAPA NO. 1. Georreíerenciación de las ACCU 2¯ CAPÍ1ULO 1 5, Ll identiFcado como Bloque Norte, comandado por Rodrigo 1o·ar Pupo. Ln esa línea, en primer lugar se hace alusión a la Casa Castano y en seguida a las citadas estructuras. 1. LA CASA CAS1ANO Las desmo·ilizadas Autodeíensas Campesinas de Córdoba y Uraba, creadas en 1994, íueron el principal grupo paramilitar que precedió a la coníormación de las denominadas AUC en 199¯ 2 . Ln palabras de Sal·atore Mancuso, uno de sus mas importantes comandantes, el origen de la Casa Castano se dio cuando 2 Las desmo·ilizaciones colecti·as de los grupos paramilitares se sustentaron en los acuerdos de Ralito y de latima, suscritos el 15 de julio de 2003 y el 12 y 13 de mayo de 2004, respecti·amente. MAPA NO. 2. Georreíerenciación de los bloques seleccionados Fuente: FGN, 2010 - b 28 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS |.| los Castano querían la retoma de Córdoba, Uraba, el eje banane- ro y la salida al mar que exigía coordinación y concentración de íuerzas, hombres, armas y municiones. Se estaban creando las bases conceptua- les y operati·as de lo que serían las autodeíensas campesinas de Córdoba y Uraba ,Mancuso, 2006,. Una ·ez, los hermanos Castano y sus aliados consolidan el control y dominio de la Casa Castano en el departamento de Córdoba y en el Uraba chocoano-antioqueno, Carlos Castano tomó la decisión de extender su accionar al norte del país y encarga a Sal·atore Mancuso, quien narró: |.| Carlos Castano ideó una estrategia y me dijo: Mancuso usted ·a a ampliar la cobertura de las autodeíensas y ·amos a crear el Bloque Norte, ese Bloque Norte debe usted irse a coníormarlo multiplicando las CONVIVIRLS en todas las areas y recibiendo apoyo de los írentes de autodeíensas que estan en el area, porque en determinado momento esas CONVIVIR que estan demandadas se ·an a caer y tendran que des- embocar en su mayoría en las autodeíensas, entonces arranco yo con la misión de multiplicar las CONVIVIRLS en todo el norte de Colombia` ,íbiaev,. Ln 1994, la Casa Castano creó las ACCU que se con·irtieron en el grupo paramilitar mas grande y organizado de Colombia 3 , el que, ademas de las regiones estudiadas para este documento, se extendió a otros territorios del país, entre ellos los llanos Orientales. Bajo el liderazgo de Vicente Castano y el acompanamiento de L·er Veloza, Líraín Pérez Cardona, alias 400` y Jesús Ignacio Roldan Pérez, co- nocido como Monoleche`, entre otros miembros de la Casa Casta- no, coníormaron los Bloques Centauros, léroes del Llano y léroes del Gua·iare. Al igual que en la región Caribe y en Ll Catatumbo, su entrada y presencia íue apoyada por sectores políticos, militares y económicos, tal y como lo describe la Corte Suprema de Justicia en la sentencia contra el ex gobernador del departamento del Gua·iare, en la que se narra la reunión realizada en la Fnca Ll Venda·al, municipio de Paratebueno, de propiedad de Nebio Lche·erry, primo de López 3 VerdadAbierta: Bloques Sinú y San Jorge. 29 CAPÍ1ULO 1 Cada·id ,Ver: CSJ, 2011 - Óscar de Jesús López Cada·id, ex goberna- dor del departamento del Gua·iare,. Ln 199¯ la Casa Castano promo·ió la coníormación de las Auto- deíensas Unidas de Colombia, las que suscribieron los acuerdos con el Gobierno Nacional tendentes a su desmo·ilización y desarme a cambio de beneFcios jurídicos, políticos y económicos. Dichos acuer- dos dieron lugar a la expedición de la Ley 9¯5 de 2005 y a sus decretos reglamentarios. JKJK C/.@:-1 1-/-((&.%$7.1 Ln este aparte, con base en la iníormación de la liscalía, se carac- terizaran los bloques y comandantes de las autodeíensas de Córdoba y Uraba tomados para esta in·estigación ,esquema No. 1 y anexo 2. Lstructuras paramilitares y miembros,. Ln primer lugar se abor- dan los bloques que hicieron presencia en la región del Uraba y en seguida en los que actuaron en la región del Caribe y en Norte de Fuente: FGN, 2010 - b MAPA NO. 3. Georreíerenciación de las AUC 30 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Santander. Ln el anexo 1. Desmo·ilizaciones Autodeíensas Campe- sinas de Córdoba y Uraba se relacionan las íechas y los lugares en donde se desmo·ilizaron. Como ya se mencionó, esta in·estigación parte del supuesto de que, si bien la iníormación de la liscalía permite aproximarse a la estructura paramilitar de las ACCU que sera objeto de analisis, es preciso reconocer que su utilidad es limitada toda ·ez que los nom- bres con los que se desmo·ilizaron ·arias de las estructuras de la Casa Castano son diíerentes a los que realmente utilizaban, y a que la pre- sencia territorial y la estructura militar de los bloques era muy ·ariable e irregular, contrario a la pretensión de Castano, razón por la cual Sal·atore Mancuso aFrma que las AUC eran una Coníederación de lederaciones. Al respecto este ex comandante expresó que, Bloque Elmer Cárdenas Bloque Bananero AUTODEFENSAS CAMPESINAS DE CÓRDOBA Y URABÁ Bloque Calima Freddy Rendon Herrera, alias EL ALEMAN Ever Veloza García, alias “HH” Bloque Héroes de Montes de María Edwar Cobos Tellez, alias DIEGO VECINO Bloque Córdoba Bloque Catatumbo Salvatore Mancuso Gómez, alias MONO MANCUSO Bloque Norte Rodrigo Tovar Pupo, alias JORGE 40 Fuente: FGN, 2010 - b LSQULMA NO. 1. Lstructura organizacional de los bloques seleccionados 31 CAPÍ1ULO 1 |.| los organigramas y estatutos |.| reílejaban un esquema de íun- cionamiento ideal, precisamente el que el comandante Carlos Castano deseaba que conocieran los colombianos pero que en la realidad jamas existió y menos operó, por cuanto íue imposible aplicarlos en razón al caracter íuertemente íederalizado de la organización. Ademas, lo iníor- mal primaba sobre lo íormal e inclusi·e la propia jurisdicción territorial de cada uno de los bloques era sumamente indeíinida y coníusa ,Man- cuso, 2006 y 2011,. Pese al caracter íuertemente íederalizado`, de las ACCU y espe- cialmente de las AUC -tema al que se hace alusión en el capítulo cuarto-, los bloques se caracterizaban así, según lo expresó Sal·atore Mancuso: |.| un bloque estaba coníormado por dos írentes o mas. Un írente, por dos companías o mas, que son 160 hombres. Una companía, por dos grupos que son cada grupo de ochenta hombres o mas. Un grupo, por dos secciones cada una de cuarenta hombres o mas. Una sección, por dos escuadras que son ·einte hombres o mas. Una escuadra, por dos equipos cada uno de diez hombres o mas. \ cada equipo o comando tenía cinco hombres ,Mancuso, 200¯,. JKLK C/.@:-1 -% -/ S"$OG (T.(.$%.U$%,&.@:-V. Ln la región del Uraba cordobés-chocoano-antioqueno, la presen- cia de la Casa Castano se dio inicialmente a tra·és de grupos que actuaron primero bajo las órdenes de lidel y luego de Carlos Castano en San Pedro de Uraba. A estos, así como al Bloque léroes de 1olo·a y a las estructuras de Vicente Castano en 1itiribí, Angelópolis y Ama- ga, que consolidaron una especie de herradura de control territorial alrededor del denominado Lje Bananero` en el Uraba ,mapa No. 3,, se les responsabiliza, entre otros crímenes, del abandono íorzado y de la apropiación ·iolenta y íraudulenta de territorios colecti·os de grupos étnicos y de predios de particulares ,Ver: despojo en Jigua- miando, Cur·aradó y 1ulapas, y despojo en zonas de Ll Aleman` y predios apropiados por lasbún,. 32 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS A continuación se analizaran las estructuras del Bloque Llmer Car- denas, bajo el mando de lreddy Rendón lerrera, alias Ll Aleman, y del Bloque Bananero, liderado conjuntamente por L·er Veloza Gar- cía, alias ll` y el empresario bananero Raúl Lmilio lasbún, alias Pedro Ponte`. JKLKJK C/.@:- W/=-" ;G"7-%$1 Ll bloque comenzó sus operaciones como el grupo Los Belen- gues` íundado por Carlos Ardila, alias Carlos Correa`, que poste- riormente se con·irtió en el grupo de Las Deíensas`, el que a su ·ez se transíormó en el grupo La ¯0`. Ln 1998 se autodenominó Blo- que Llmer Cardenas`, en reconocimiento a uno de sus miembros, muerto en 199¯. Ll BLC, como lo senala la liscalía siempre operó bajo las directi·as de la Casa Castano, pese a que en algunas oportu- nidades alias Ll Aleman` maniíestó lo contrario. Mapa elaborado a partir del mapa de la Vicepresidencia de la República, 2006. MAPA NO. 4. Presencia de las ACCU en el Uraba 33 CAPÍ1ULO 1 La región del Uraba se di·idió entre ·arios grupos, al BLC co- rrespondían algunos de los municipios de la margen izquierda del río Sinú, y otros municipios del norte de Uraba y una parte de la ju- risdicción de 1urbo. Así las cosas, el Bloque Llmer Cardenas estaba compuesto por cinco írentes: 1, Gabriel Auai. 2, Costanero. 3, Norte Salaquí. 4, 1anela y 5, Pa·arandó. Según lreddy Rendón lerrera, el BLC se originó como parte de las autodeíensas campesinas de Córdoba y Uraba, pero se transíormó en |.| un mo·imiento social y político de caracter regional que miraba los intereses nacionales de los colombianos`, denominado Por una Uraba Grande, Unida y en Paz` ,Rendón, 200¯,, del que hacía parte el Proyecto de Alternati·idad Social ,PASO,, cuya continuidad íue una exigencia para su desmo·ilización ,Ver: PPP de Ll Aleman`,. Ll mo·imiento Por una Uraba Grande, Unida y en Paz` se enmar- caba en los siguientes principios: 1, Libertad: real de cada uno de los colombianos para realizarse como ser humano y como ciudadano. 2, Democracia: real incluyente y participati·a como contexto ideal para el ejercicio de las libertades y el cumplimiento de las responsabilida- des. 3, Lquidad: la justicia como equidad entendida al mismo tiempo como una meta social y un medio para la realización de todos los principios de su marco ideológico., y 4, Seguridad: para posibilitar la con·i·encia armónica ,publicado en su pagina web, 4 . BLC contaba con una bandera color blanco ,paz, y ·erde ,esperanza, que tenía el logo compuesto por los tres colores de la bandera nacional con la inscripción BLC AC a su alrededor. Ll 12 de íebrero del 2003, la comandancia del BLC iníormó al Go- bierno su decisión de marginarse del proceso que se iniciaba con las AUC, alegando que las condiciones de las zonas donde operaban no permitían a·anzar hacia una solución negociada, pues dentro del gru- po armado no existía un consenso sobre las garantías del proceso de desmo·ilización. Sin embargo, el 8 de septiembre de 2005 declaró el cese de hostilidades y aceptó hacer parte del proceso. De la totalidad 4 La pagina web www.acube.org operó hasta la íecha de su desmo·ilización. 34 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS de hombres y mujeres desmo·ilizados del BLC el 84° eran aírodes- cendientes, el 3° indígenas y el resto mestizos ,MAPP-OLA, 200¯,. JKLKJKJK ;.=$%7$%,- 7-/ C?;E X"-77A >-%7)% Y-""-"$ Ll Aleman`, comandante y representante del bloque 5 , en las au- diencias de ·ersión libre, relató su origen campesino en AmalF, An- tioquia, en 19¯4. 1ras su experiencia como ayudante de un camión cer·ecero, arribó al Uraba chocoano y se instaló en el municipio de Necoclí. A sus ·eintidós anos, conoció a Carlos Castano quien lo per- suadió en 1995 de ·incularse a las autodeíensas 6 . Comentó también que el apodo de Ll Aleman` es el resultado de su obsesión por el orden y la disciplina, pero también es conocido como José Alíredo Berrío`, Puma 4` o Quique`. Ll 15 de agosto de 2006, Rendón lerrera, hermano de Daniel, alias Don Mario`, Jairo Rendón, alias German Monsal·e` o Don German` y lernando, alias Pipe` o Loratuerta`, también miembros de las ACCU, se desmo·ilizó en la ·ereda Ll 1igre, municipio de Ungía, Chocó. Actualmente se encuen- tra recluido en la carcel de Itagüí en Medellín, Antioquia. JKLKLK C/.@:- C$%$%-". Lste bloque estu·o compuesto por dos grupos o írentes: el gru- po de 1urbo, comandado por L·er Veloza García ¯ y el lrente Alex lurtado, a cargo de Raúl Lmilio lasbún Mendoza, alias Pedro Bo- nito` o Pedro Ponte`. 1u·o presencia en el denominado eje bana- nero que comprende los municipios de 1urbo, Apartadó, Chigorodó y Carepa y una parte de Mutata, en Antioquia, con lo que obtu·o el control territorial de zonas aledanas al océano Atlantico, desde donde se dedicaba a traFcar drogas ilícitas y armas a tra·és de los puntos de 5 Resolución 280 de 2005 de la Presidencia de la República. 6 VerdadAbierta: Ll Aleman`, lreddy Rendón lerrera`. ¯ Mediante las resoluciones 233 y 300 de 2004 de la Presidencia de la República, se reconoció a Veloza, conjuntamente con Sal·atore Mancuso e I·an Roberto Duque, su calidad de miembros representantes de las Autodeíensas Unidas de Colombia ,AUC,. 35 CAPÍ1ULO 1 embarque que existen para el banano. Veloza García ha contado que del golío de Uraba -de 1ie hasta 1urbo y de 1ie hasta Puerto Lscon- dido- salían embarcaciones cargadas de cocaína ,Veloza, 200¯-a,. Ll grupo de Veloza García comenzó a operar en 1995 en Uraba, especíFcamente en 1urbo en el corregimiento de Ll Dos, como parte del Grupo de los Veinte, zona en la que se encontraba alias Doble Cero`. Según Veloza, su misión inicial consistía en e·itar los ceses y huelgas de los trabajadores de las empresas bananeras ,Veloza, 2011,. Ln el ano 1996, Pedro Bonito`, se posesionó como comandante del lrente Alex lurtado, en homenaje a uno de sus miembros íallecido en el ano 2000, dicho írente adquirió el control de la zona compren- dida entre Currulao y la Panamericana, y montó un aparato urbano paralelo al grupo de Chigorodó ,Veloza, 2011,. lacia Fnales del ano 1996 y principios de 199¯, lasbún Mendoza asumió el mando y Veloza García, conocido como lernan ler- nandez` o ll` íue trasladado al suroccidente del país con el Fn de crear el Bloque Calima. La mayoría de los miembros del BB contaban con entrenamiento armado por parte de di·ersos grupos guerrilleros. A pesar de la in- dependencia y mando de orden que tenían los comandantes Veloza García y lasbún Mendoza, ambos dependían de las órdenes directas de los hermanos Castano Gil, y su misión principal consistía en brin- dar seguridad` a la zona agroindustrial` a cambio de contribucio- nes de sectores relacionados con el banano y de otros grupos`, lo que propició |.| la penetración del paramilitarismo en los di·ersos sec- tores sociales, especialmente en el sector empresarial` 8 . Ln esta línea, Veloza García ha declarado que |.| en coordinación con la luerza Pública, y con el respaldo de ·arias empresas bananeras, íueron auto- res de múltiples masacres y asesinatos de quienes ellos consideraban eran guerrilleros` 9 . 8 VerdadAbierta: Bloque Bananero`. 9 VerdadAbierta: Jeíe - l l`, José L·er Veloza García`. 36 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS JKLKLKJK ;.=$%7$%,- 7-/ CCE 5.1F WP-" Z-/.'$ [$"(I$ ll`, en las audiencias de ·ersión libre relató su nacimiento como campesino en 1rujillo, Valle, en el ano 196¯. lue criado en este mu- nicipio junto a sus diez hermanos. 1ras su experiencia como conduc- tor de camión en Acacías, Meta, conoció a alias Gabriel`, quien lo ·inculó a la Casa Castano. lacia 1994, llegó al Uraba con el llamado Grupo de 1urbo, los ·einte íundadores de las autodeíensas en la zona del Uraba antioqueno, en 1995 íue ascendido a comandante del Blo- que Bananero y el 25 de no·iembre de 2004 se desmo·ilizó junto con cien o ciento ·einte miembros del lrente Alex lurtado y cuarenta del grupo comandado por Vicente Castano. Ln la actualidad se encuen- tra recluido en una carcel de Nue·a \ork, Lstados Unidos. Por sus declaraciones, en especial las relacionadas con la Fnancia- ción de empresas bananeras y ganaderas, y con la complicidad de la Brigada 1¯, que han dado origen a la apertura de ·arias in·estigacio- nes, ll.` ha sido considerado como el paramilitar que |.| mas ha contribuido al esclarecimiento de la ·erdad sobre los crímenes come- tidos por el paramilitarismo` ,CCJ, 2008,. JKLKLKLK ;.=$%7$%,- 7-/ X"-%,- 8/-Q Y:",$7.E >$\/ ?=&/&. Y$1O\% Raúl Lmilio lasbún, preso en Itagüí, Antioquia, da cuenta de su origen pro·eniente de una íamilia de terratenientes, reconocida como pionera en la siembra de banano para exportación 10 . Ln este senti- do, según él, su ·inculación con las ACCU se debió a su interés por recuperar las tierras que eran de propiedad suya o de su íamilia. Ln sus ·ersiones narró que actuó en la clandestinidad, y que sus apor- tes operati·os en materia de cuotas y Fnanciación íueron decisi·os debido a su experiencia con el manejo de Fncas y sus relaciones con los empresarios. Para ll`, esta razón sumada a su negati·a a con- tinuar bloqueando las acti·idades sindicales y las reclamaciones de 10 VerdadAbierta: Ll tortuoso camino de la restitución de tierras`. 3¯ CAPÍ1ULO 1 los trabajadores bananeros, íueron la causa de que se le en·iara al sur occidente para dirigir el Bloque Calima ,Veloza, 2011,. JKLKMK ["$% C/.@:- D.",- -% /$ "-#&)% 7-/ ;$"&O- A D.",- 7- B$%,$%7-" Con la consolidación de la Casa Castano en el departamento de Córdoba y en el Uraba, Carlos y Vicente Castano decidieron esparcir- se y encargaron a Sal·atore Mancuso, jeíe del lrente Sinú y Córdo- ba, la creación del Bloque Norte, |.| con el objeto de expandir la organización a otras areas del departamento de Córdoba y los demas departamentos de la costa norte del país`, tal y como lo relata el pro- pio Mancuso: |.| asumí como comandante de este bloque desde ese entonces y permanecí en esta posición hasta mi desmo·ilización, a partir de allí la comandancia íue asumida por Jorge 40` cuando yo me desmo·ilicé. Ll Bloque Norte creció de tal íorma que algunos de sus comandantes a mi cargo adquirieron autonomía total a partir de algunas épocas, no obs- tante lo cual se quiso conser·ar su estructura organica mas no íuncional, para eíectos de mantener su presentación política ,Mancuso, 200¯,. A partir de estas declaraciones se puede entre·er que los bloques que hicieron presencia en la región del Caribe y el Norte de Santan- der constituían una unidad denominada Bloque Norte, pero que íun- cionalmente estaba íraccionada en ·arios grupos, írentes o bloques, incluyendo un grupo que tenía esa misma denominación ,mapa No. 4,, los que si bien obedecían a la Casa Castano, con el crecimiento económico y militar de sus íuerzas, íueron alcanzando autonomía y auto sostenimiento. Ahora bien, para los intereses de la presente in·estigación, es pre- ciso senalar que el Gran Bloque Norte se desmo·ilizó en ·arias es- tructuras, de las cuales son objeto de este documento los bloques Córdoba, Norte, Montes de María, y Catatumbo. A continuación se analizara el contexto y georreíerenciación en la que actuaron dichos grupos bajo las directrices generales de las ACCU. 38 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS JKLKMKJK C/.@:- ;)"7.O$ Ll llamado Bloque Córdoba -Bloque Sinú y San Jorge-, contaba con grupos urbanos que hacían presencia en los municipios princi- pales del departamento de Córdoba ,Mancuso, 2006-a,, en los que también se encontraban los bloques Llmer Cardenas, léroes de 1o- lo·a, comandado por Diego Murillo Bejarano, alias Don Berna` o Adolío Paz`, las estructuras de los Castano, el Bloque Mineros, de alias Cuco Vanoy`, el grupo de Ja·ier Piedrahita` ,Mancuso, 200¯. Ver: CSJ, 2011-c - Ál·aro Alíonso García,, y el Bloque Montes de María, comandado por Ldwar Cobos. Ln este orden de ideas, es preciso mencionar la importancia que tenía el departamento de Córdoba pues desde el Nudo de Paramillo, la Casa Castano en·iaba órdenes a los diíerentes comandantes de la región. Ls por ello sumado a que era la cuna de Sal·atore Mancuso-, que aparentemente tu·o un trato diíerencial. Al respecto el citado extraditado dice: Mapa elaborado a partir de la versión libre de Salvatore Mancuso (Mancuso, 2007j. MAPA NO. 4. Presencia de las ACCU en el Caribe y Norte de Santander 39 CAPÍ1ULO 1 |.| en Córdoba íue un manejo diíerente, en Córdoba a la gente no se le cobraba impuestos. \o nunca cobré impuestos, diíerente a lo que se hacía en las diíerentes regiones del país, entonces Córdoba tu·o un manejo sui generis, yo nunca quise apretar o maltratar a la población, yo siempre asumí la responsabilidad de todo el manejo junto con los Castano ,Mancuso, 200¯,. Después de Mancuso, el comandante al mando era Jairo Andrés Angarita, alias Andrés`, quien, a su ·ez, contaba con sus segundos al mando alias Pedro` y alias 08`. Lste Bloque |.| se mo·ía en el sur del departamento de Córdoba, particularmente en Montelíbano, Puerto Libertador, 1ierralta y Valencia, hasta los límites con el Uraba antioqueno, pero disponía adicionalmente de un grupo urbano que actuaba en Montería y Cereté` ,íbíaev,. La desmo·ilización del BCo, se realizó sin su comandante que se presentó con el Bloque Catatum- bo. JKLKMKJKJK ;.=$%7$%,- 7-/ C;.E B$/P$,."- 2$%(:1. Sal·atore Mancuso, alias Ll Mono`, Ll Mono Mancuso` o 1ri- ple Cero`, es hijo de un inmigrante italiano y una colombiana. Na- ció el 1¯ de agosto de 1964 en Montería, departamento de Córdoba, terminó sus estudios de primaria y secundaria, cursó hasta séptimo semestre de Ingeniería Ci·il en la Uni·ersidad Ja·eriana y se íormó como Administrador Agropecuario en la Lscuela de lormación 1éc- nica Agrícola. Ln 1994 Mancuso conoció a los Castano, un ano después de la muerte del mayor del Ljército \alter lratini, a quien caliFcó como su maestro y amigo` ,íbíaev,. Según Mancuso, |.| me recluté a las autodeíensas por marica`, por impetuoso, por inmaduro. 1enía ·eintiocho anos y a esa edad uno no le tiene miedo a nada ,Mancuso, 2011,. AFrma, que íue |.| reclutado y entrenado por el Lstado, bajo una política de segu- ridad nacional` madre del paramilitarismo de Lstado. \o soy hijo legíti- mo de esa in·ención para hacerle írente a un íenómeno comunista que combinó todas las íormas de lucha y estu·o a punto de hacer colapsar al país ,Mancuso, 2009,. 40 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Con el tiempo se con·irtió en uno de los principales comandantes de las ACCU 11 , condición que íue reconocida por él mismo en los siguientes términos: |.| íui el hombre mas importante en las autodeíensas después de la casa Castano, Vicente y Carlos Castano, dentro del entorno de las auto- deíensas campesinas de Córdoba y Uraba` ,Mancuso, 2006,. Así pues, como ya se mencionó, Mancuso íue encargado de la tarea de expandir las estructuras paramilitares, conjuntamente con alias Ll Proíe`. Sobre el particular, el ex comandante senaló que: |.| hubo momentos que tu·e responsabilidad en Sucre, hubo mo- mentos que tu·e responsabilidad en Bolí·ar, hubo momentos en que tu·e responsabilidad en el Cesar, hubo momentos en que también tu·e responsabilidades en Norte de Santander y tu·e responsabilidades en Córdoba ,Mancuso, 2006-a,. A partir de su innuencia y poder en la Casa Castano, 1riple Cero` se consolidó como uno de los mayores capos en el negocio del narco- traFco, y con el dinero que obtenía conseguía armas 12 y munición para las estructuras que dirigía. De hecho, durante la primera imputación de cargos realizada el 13 de marzo de 2009 13 , |.| la liscalía documentó cómo desde 1996 y hasta 2004, el hoy ex paramilitar en·ió mas de 119 mil kilos de cocaína a laití, República Dominicana, Puerto Rico, Venezuela, México, londuras, Guatemala y Lstados Unidos |.| Ll Mono Mancuso` aceptó que el despacho del estupeíaciente hacia el extranjero se realizaba desde puertos del golío 11 Mediante las resoluciones 233 y 300, de 2004, de la Presidencia de la República, se reconoció a Sal·atore Mancuso su calidad de miembro representante de las Autode- íensas Unidas de Colombia. 12 Sal·atore Mancuso reconoció que |.| su organización compró mas de diez mil armas de largo alcance pro·enientes de Bulgaria, Venezuela y Centroamérica, que en- traron al país por los puertos de Buena·entura y Uraba, con el supuesto apoyo de miembros del Ljército` ,Mancuso, 2006-a,. 13 La lGN le imputó a Sal·atore Mancuso masacres como la de Ll Aro y el Catatumbo, reclutamiento de menores, asesinatos a personas protegidas, desapariciones íorzadas y traFco de armas. 41 CAPÍ1ULO 1 de Morrosquillo, Uraba, Bolí·ar, Atlantico y La Guajira, con el apoyo de narcotraíicantes como Orlando lenao y labio Ochoa, entre otros 14 . Después de su desmo·ilización, Ll Mono Mancuso` íue postula- do por el Gobierno como elegible para los beneFcios contemplados en la Ley 9¯5 de 2005 15 , y comenzó a esclarecer hechos relacionados con el apoyo de militares en la organización de las autodeíensas y con los íenómenos de parapolítica`, paraeconomía` y parainstitucio- nalidad`. Igualmente, sus oírecimientos de entrega de predios han dado lugar a algunos de los pronunciamientos dentro del proceso de Justicia y Paz en materia de medidas cautelares y de extinción de dominio, y han permitido hacer seguimiento a los Proyectos Produc- ti·os para la Paz, a la restitución directa de tierras de la hacienda Costa de Oro, a de·elar el ocultamiento de predios a tra·és de la simulación -léase testaíerrato- y a la aplicación del Principio de Oportunidad, como se describe en el capítulo tercero. JKLKMKLK C/.@:- D.",- Como ya se mencionó, el Gran Bloque Norte íue la estructura ideada por la Casa Castano para darle unidad a los diíerentes grupos de las ACCU que hacían presencia en la región Caribe. Sin embargo, en el proceso de desmo·ilización se denominó como Bloque Norte al dirigido por Rodrigo 1o·ar Pupo, alias Jorge 40`, segundo coman- dante que reemplazó a Mancuso para eíectos solamente políticos`, puesto que no ejercía mando sobre otros comandantes como Rodri- go Mercado Peluío, alias Cadena` y Vecino` ,Mancuso, 200¯,. Al respecto 1o·ar Pupo maniíestó que desde |.| íinales del 98 |.| me con·ertí en el segundo hombre del Bloque Norte de las autodeíensas, hasta la desmo·ilización de Sal·atore, que es cuando asumo el mando de lo que quedaba del Bloque Norte sin des- mo·ilizar ,1o·ar, 200¯,. 14 ít Movo Mavcv.o`, Sal·atore Mancuso. ,Mancuso, 2006-a,. 15 Mancuso reconoció que al momento de postularse para el proceso de Justicia y Paz tenía |.| dos sentencias condenatorias, una por cuarenta anos y otra por 135 meses, tengo medida de aseguramiento en cinco o seis procesos y unas cincuenta in·estigacio- nes` ,Mancuso, 2006,. 42 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS La zona de innuencia directa de Jorge 40`, en las que impulsó la toma militar, la toma social`, para coníormar lo que él mismo de- nominó los estados de autodeíensa` ,CSJ, 2011-d CSJ, 2011-d - José Domingo Da·ila Armenta,, íueron los departamentos de Atlantico, Magdalena, La Guajira y Cesar ,mapa No. 5,. Ll poderío militar, económico, social y político de la Casa Castano en la región norte del litoral se consolidó con la derrota militar del grupo Los Chamizos, íundado a mediados de los ochenta del siglo pasado por el extraditado lernan Giraldo Serna, alias 1aladro` o Ll Patrón`, el que se denominó Autodeíensas Campesinas del Mag- dalena y La Guajira antes de hacerse conocer como lrente Resistencia 1ayrona, nombre con el que se desmo·ilizó. Según Giraldo, el grupo Los Chamizos surgió para deíenderse de las guerrillas que asolaban el departamento del Magdalena y operó en corregimientos y ·eredas de la Sierra Ne·ada de Santa Marta ,Guachaca, Ll Mamey, Machete Pelado y Quebrada del Sol, y en Santa Marta ,Giraldo, 2011,. Fuente: FGN, 2010-b. MAPA NO. 5. Georreíerencia del Bloque Norte 43 CAPÍ1ULO 1 Ln el empoderamiento de la Casa Castano y la consolidación del Bloque Norte, bajo las ordenes de Jorge 40` se contó con el concur- so del grupo Los Rojas, dirigido por Adan Alberto Rojas Ospino, y de las Autodeíensas Unidas de Santander y Sur del Cesar ,AUSAC,, entre otros grupos. De este último, desmo·ilizado bajo el nombre del lrente léctor Julio Pineda Becerra, hacían parte Guillermo Cristan- cho Acosta, alias Camilo Morantes`, y alias Juancho Prada`, quie- nes al igual que Giraldo y Rojas íueron pioneros en la coníormación de grupos de autodeíensa ,esquema No. 2,. Algunos de los comandantes de las estructuras bajo el mando de Jorge 40` íueron el mayor retirado del Ljército, Da·id lernandez Rojas, alias 39`, quien dirigió el grupo Martires del Cacique de Upar, Oscar José Ospino Pacheco, alias 1olemaida`, John Jairo Lsqui·el Cuadrado, alias Ll 1igre` y Alcides Mattos 1abares, alias Ll Sama- rio`, que comandaron el lrente Juan Andrés Ál·arez, y alias Lnrique López, alias Omega`, miembro de los lrentes Resistencia Motilona y 1ayrona. LSQULMA NO. 2. Lstructura organizada del Bloque Norte Fuente: FGN, 2010-b. Bloque Norte de las ACCU Bloque Norte de las ACCU Frente Guerreros de Baltazar Frente Adalvis Santana Frente Martires de Valledupar desmovilizado como David Hernández Rojas Frente William Rivas desmovilizado como Bernardo Escobar Frente Contra insurgencia Wayuu Grupo Tomas Guillen Frente Resistencia Motilona Frente Resistencia Chimila Frente Juan Andrés Alvarez Frente José Pablo Díaz 44 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS La desmo·ilización del Bloque Norte se produjo en dos jornadas en el ano 2006: la primera el día 8 de marzo en el corregimiento Chi- mila, en Ll Copey, departamento del Cesar, en la que participaron miembros de la íuerza de choque` ,880, y de la íuerza social-plan producti·o` de Atlantico, Magdalena y Cesar ,1.335,. Dos días des- pués, el 10 de marzo, se desmo·ilizaron los restantes miembros 1.220 y 1.325, respecti·amente en el Caserío Ll Mamón, Vereda La Mesa, Valledupar, Cesar 16 . JKLKMKLKJK ;.=$%7$%,- 7-/ CDE >.7"&#. ].P$" <:0. Jorge 40`, relató que nació el 19 de no·iembre de 1960, en el seno de una íamilia de clase media-alta de Valledupar, capital del departa- mento del Cesar, y que en su ju·entud quiso con·ertirse en oFcial del Ljército Nacional, pero ante la imposibilidad de continuar la carrera militar se graduó de técnico en administración pecuaria ,1o·ar, 200¯,. Al Fnalizar sus estudios en el ano 1982, regresó a su región para desempenarse en la ganadería y la agricultura, con·irtiéndose en un importante ·ocero y miembro de los diíerentes gremios políticos, sociales y empresariales. Ln el ano 1988, se desempenó como jeíe de la OFcina de Control de Precios de la Alcaldía del municipio de Valledupar, y en la Secretaría de lacienda ,1o·ar, 200¯,, durante la administración de Rodolío Campo Soto, ex director del Instituto de Desarrollo Rural ,INCODLR,, en la segunda Administración de Uri- be Vélez. Después de hacer un recorrido en el sector gremial en el ambito económico, una corta carrera política en el departamento del Cesar, y de ser colaborador de la guerrilla en una condición que él mismo denominó como paraguerrillero` ,1o·ar, 200¯,, alias Jorge 40` in- gresó a las ACCU. Primero, en el ano 1995, como un colaborador` y después como combatiente` en el ano 1998 ,íbíaev,. Ln palabras de Mancuso. 16 De coníormidad con la resolución 99 de 2005, 1¯ de 2006, y 41 de 2006 de la Presi- dencia de la República. 45 CAPÍ1ULO 1 |..| Rodrigo 1o·ar Pupo, se inicia |..| como un representante de los ganaderos` y en |..| la medida que ·a a·anzando se ·a in·olu- crando hasta que adquiere el mando total del grupo`, con autonomía e independencia ,Mancuso, 2006-a,. Ln las pocas ·ersiones libres en las que participó, declaró que ejer- ció |.| soberanía en el ¯0° de ·arios departamentos de la costa Atlantica`, en los que desplegó una estrategia para la |.| toma militar, la toma social y por consiguiente la estructuración de unos estados de autodeíensa`, que incluía en primer lugar el copa- miento militar` de las zonas dominadas por la guerrilla, y en segundo lugar la íormación de un acumulado social` o de soberanía comunitaria` entre las comunidades y los paramilitares, imponiendo un modelo |.| de gestión de los asuntos públicos regionales e incluso nacionales ,CSJ, 2011-d CSJ, 2011-d - José Domingo Da·ila Armenta,. Ll 10 de marzo de 2006, Jorge 40` se desmo·ilizó y empezó a ren- dir su ·ersión libre a partir del 3 de julio de 200¯. No obstante haber coníesado mas de seiscientos crímenes, incluyendo la desaparición íorzada de siete in·estigadores del Cuerpo 1écnico de In·estigación de la liscalía en el ano 2000 1¯ , y de ser pieza cla·e para de·elar los ·ínculos con la parapolítica contenidos en su computador 18 , el Go- bierno colombiano lo extraditó el 13 de mayo de 2008. De manera similar a Mancuso y otros ex comandantes, entre ellos alias ll` y Ll Patrón`, 1o·ar Pupo esta ·inculado a un proceso que se adelanta en Lstados Unidos por manuíacturar y distribuir cocaína e ingresarla a ese país 19 . JKLKMKLKLK Y-"%G% [&"$/7. B-"%$ Caldense de origen campesino migró a la Sierra Ne·ada de Santa Marta en donde creó el grupo Los Chamizos`. Según él, |.| la 1¯ ít 1iev¡o: Jorge 40` reconoció desaparición de ¯ in·estigadores del C1I durante audiencia de Justicia y Paz`. 18 Ver: ´evava.cov: Ll Computador de Jorge 40``, septiembre 2 de 2006. 19 Ll proceso se adelanta bajo el nombre USA ·. Giraldo-Serna, et al., Case •: 1:04-cr- 00114-RB\-9. Ln: International luman Rights Law Clinic ,IlRLC,, 2010. 46 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS comunidad no sólo lo percibía como un jeíe paramilitar, sino también como un líder comunitario, especíFcamente, el de mayor notabilidad en la Sierra Ne·ada de Santa Marta`. Su poder en la zona, deri·ado del negocio del traFco de drogas ilícitas y su amistad con las íamilias mas representati·as de la región, le permitieron tener gran injerencia en los asuntos públicos y pri·ados. Se dice que |.| nadie podía de- cidir si lernan no daba la orden`, lo que se relaciona con la ·ictoria |electoral| de ·arios de los políticos apoyados por él, entre ellos la del ex gobernador del Magdalena, Da·ila Armenta ,CSJ, 2011-d,. JKLKMKMK C/.@:- 2.%,-1 7- 2$"I$ Ln 1996 nació el Bloque Montes de María a partir de la decisión conjunta entre los hermanos Castano y Sal·atore Mancuso de |.| crear un grupo paramilitar en la región` 20 , con |.| ·arios polí- ticos y empresarios locales quienes se reunieron en la íinca Las Canarias |.|` ,Mancuso, 2008,. Lsta estructura paramilitar íue posible gracias a la réplica del mode- lo en el Uraba. Por un lado, el apoyo |.| de reconocidos integrantes de la dirigencia política local y acaudalados ganaderos del centro y norte del departamento` y duenos de Fncas que cancelaban cuotas para cubrir sus gastos ,1SDJ, 2010 y CSJ, 2010-c - Ál·aro Alíonso García,, y por el otro a la creación de las CONVIVIR y a la uniFca- ción de grupos de autodeíensas que existían en la región, entre ellos, Los Carranceros en el golío de Morrosquillo, nombre asociado pre- suntamente a Víctor Carranza, y el grupo de José María Barrera, alias Chepe Barrera` en la isla de San lernando y Mompox 21 . Inicialmente, el BMM |.| íue conocido como Bloque Sucre-Bolí·ar y es a alias Diego Vecino` a quien Mancuso le entrega la comandancia del mismo, que en el ano 2002, con el proceso de expansión, coníorma los tres íren- tes del Bloque Montes de María: golío de Morrosquillo comandado 20 1eraaa.bierta: Lstructuras paramilitares: ubicación geograFca. Autodeíensas de Montes de María, Bloque Norte`. 21 Lntre·ista con ·íctimas y postulados en Valledupar. 4¯ CAPÍ1ULO 1 por Rodrigo Mercado Peluío, alias Cadena` con innuencia en San Onoíre, Sincelejo, Corozal, Betulia, Ll Roble, Sampués, Los Palmitos, 1olú, Co·enas, San Antonio de Palmito, 1olu·iejo, O·ejas, Morroa, Chalan, Colosó, San Antero, Chinú, San Andrés de Sota·ento, Purí- sima, Chima y Momil. Canal del Dique al mando de Uber Lnrique Banquez Martínez, alias Juancho Dique`, en María La Baja, Arjona, 1urbaco, Ll Carmen de Bolí·ar, San Jacinto, San Juan Nepomuce- no, Bayunca, San Lstanislao, Calamar, Mahates, Arroyohondo, San Cristóbal, Sopla·iento, Arenal, Villanue·a, Clemencia, Santa Catalina, Guamo, Santa Rosa y la ciudad de Cartagena. Por último los de Sa- banas de Bolí·ar y Sucre comandados por \illiam Ramírez Castano, alias Roman`, en Magangué, Galeras, Zambrano, San Pedro, Buena Vista y Sincé ,mapa No. 6, 22 . ,Ver también: 1SJP, 2010-a y CSJ, 2011- g - Ldwar Cobos 1éllez y Uber Lnrique Banquez Martínez,. 22 VerdadAbierta: Lstructuras paramilitares: ubicación geograFca. Autodeíensas de Montes de María, Bloque Norte`. Mapa elaborado a partir de la versión libre de Salvatore Mancuso (Mancuso, 2007). MAPA NO. 6. Georreíerenciación del Bloque Montes de María 48 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS JKLKMKMKJK ;.=$%7$%,- 7-/ C22E ?7^$"7 ;.O.1 ]F//-' Diego Vecino` 23 , como se le conoce a Cobo 1éllez, nació en Bu- caramanga, Santander, el 25 de julio de 1968. Ls hijo de Luis lelipe Cobos ,íallecido, y Azaneth 1éllez de Cobos y es el tercero de cuatro hermanos. Cursó la primaria en el Instituto San José y el bachillera- to en la Academia Militar General Santander y en el colegio Aurelio Martínez Mutis de Bucaramanga, prestó ser·icio militar obligatorio y estudió seis semestres de Administración Agropecuaria en la Uni·er- sidad de Malaga, departamento de Santander 24 . Ln 1994 |.| llegó a Sucre como administrador de Las Melenas, una hacien- da en la zona del golío de Morrosquillo donde a tra·és de las con- tro·ertidas cooperati·as de seguridad, CONVIVIR, se inició en el paramilitarismo` 25 . A lo largo del proceso de Justicia y Paz se e·idenció que |.| su amistad con Sal·atore Mancuso y Carlos Castano, con quie- nes mantenía constantes con·ersaciones, hizo posible que se identiíicara con la ideología antisub·ersi·a, sus íines, objeti·os y métodos, circuns- tancia que permitió que en el ano 1998, ingresara como miembro de las autodeíensas 26 y luego, en 1999, recibiera la comandancia del Bloque Montes de María de parte de Sal·atore Mancuso, con total autonomía sobre el mismo 2¯ . Cobos 1éllez se desmo·ilizó el 14 de julio de 2005 y íue postula- do por el Gobierno Nacional para acceder a los beneFcios de la Ley 9¯5 de 2005. Dentro de dicho proceso rindió sus ·ersiones libres en Barranquilla y Bogota, y continuó en el proceso a pesar de haber sido solicitado en extradición por el Gobierno de los Lstados Unidos. Su 23 Lste nombre ·iene de su ·ecindad en Montería con Mancuso, quien le llamaba Ve- cino` ,Mancuso, 2011,. 24 1eraaa.bierta: Diego Vecino`, Ldwar Cobos 1éllez`. 25 íbíaev. 26 lolio 6€ cuaderno original solicitud de audiencia íormulación de cargos ,1SJP, 2010,. 2¯ Diego 1ecivo`, íarar Cobo. 1ette¸. Op. cit. 49 CAPÍ1ULO 1 extradición íue negada el 12 de íebrero de 2010 por la Corte Suprema de Justicia 28 , instancia que estimó que sus delitos debían ser juzgados en Colombia dentro del proceso de Justicia y Paz 29 . Una ·ez agotada la etapa de ·ersión libre realizada entre el 1¯ de junio y el 12 de septiembre de 2008, la lGN le íormuló cargos en la audiencia realizada el 18 de junio de 2009. Así pues, el proceso prosiguió con la audiencia de control de legalidad íormal y material de los cargos imputados, que se lle·ó a cabo entre el 18 de agosto y el ¯ de octubre de 2009. linalmente, el 2¯ de abril de 2011 íue con- denado por la Corte Suprema de Justicia, junto con •ber Banquez Martínez, alias Juancho Dique`, por la masacre y el desplazamien- to de la población de Mampujan, San Cayetano e Isla Múcura. Así las cosas, Diego Vecino` y Juancho Dique` son los dos primeros desmo·ilizados-postulados condenados en Frme en el marco de la Ley 9¯5 de 2005 30 . JKLKMKNK C/.@:- ;$,$,:=O. Ll llamado BCa |.| se coníormó en 1999 a tra·és de distintos destacamentos para- militares en·iados por la Casa Castano desde Córdoba, que entraron al departamento por el sur del Cesar |.|. Por su compromiso con el nar- cotraíico progresi·amente se con·irtió en uno de los mas importantes bloques de las AUC` 31 . Según Sal·atore Mancuso, la decisión de Carlos Castano de ingre- sar a la región de Ll Catatumbo consistía en obligar al Ljército de Li- beración Nacional a participar en las negociaciones de paz ,Mancuso, 28 Lsta íue la segunda ·ez que la Corte negó la extradición de un jeíe paramilitar ·in- culado en el proceso de Justicia y Paz. Ln agosto del 2009 negó la extradición de Luis Ldgar Medina llórez, alias Comandante Chaparro`, desmo·ilizado del Bloque Resis- tencia 1ayrona de las AUC. 29 1eraaa.bierta: Corte Suprema niega extradición de Diego Vecino``. 30 Ln el documento de Linares y lerrera se detalla el proceso adelantado contra alias Diego Vecino` y alias Juancho Dique`. 31 1eraaa.bierta. Lstructuras Paramilitares: ubicación geograFca. Bloque Catatumbo B. Norte`. 50 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS 2011,. Sin embargo, justiFcó la entrada a esa región como la manera de |.| quitarle las Fnanzas de las que se abastecía la guerrilla y |.| ,de, quitarle el íortín político militar y económico` ,Mancuso, 2006- a,. Lo anterior es ratiFcado por Jorge I·an La·erde Zapata, alias Ll Iguano`, quien narró que |.| Rodrigo Doble Cero` le iníormó que era uno de los seleccionados por la Casa Castano para ir a la región del Catatumbo a sacar la guerrilla y apoderarse de los medios de Fnan- ciación que tenía la sub·ersión` ,1SJP, 2010-b Jorge I·an La·erde,. Ln el proceso de la Ley 9¯5 de 2005, el 1ribunal de Justicia y Paz describió que: |.| el 15 de marzo de 1999 Carlos Castano anuncia en el periódico ít 1iev¡o que ·an a tomar el control del oriente de Colombia ,Norte de Santander y Arauca, para desplazar al Ljército de Liberación Nacional y otros írentes sub·ersi·os |.| ,íbíaev,. Ll Bloque estaba |.| coníormado por tres írentes: 1ibú, al mando de alias Mauro`, Bloque Mó·il, comandado por alias lelipe` y el lrente lronteras dirigi- do por alias Ll Iguano` |.|` ,íbiaev,. Dichos írentes hicieron presencia en Ll 1arra, lacarí, San Calixto, 1eorama, 1ibú, Sardinata, Puerto Santander, Ll Zulia, Cúcuta, China- cota, Pamplona y Rangon·alia, Los Patios, Villa del Rosario, San Ca- yetano y otros municipios del departamento de Norte de Santander ,mapa No. ¯,. La magnitud de este grupo y de sus acciones íue tal que Mancuso senaló en audiencia de ·ersión libre: |.| yo realmente con exactitud no conozco todos los municipios que se manejaban pero el íenómeno de autodeíensa íue tal, en la región íue un íenómeno social sociológico, ahí se extendieron por no sé cuarenta o cincuenta municipios, no sé cuantos tendra pero operaban por todas las regiones de casi ,todo, el Norte de Santander arrancando desde Cúcuta ,Mancuso, 2006-a,. Al igual que los demas, este bloque se coníormó como una réplica del modelo urabeno, bajo las órdenes directas de la Casa Castano. Al respecto, Mancuso senaló lo siguiente: 51 CAPÍ1ULO 1 |.| Carlos dice, me da la orden, y me en·ía al comandante Camilo` con unos hombres de Uraba para que se reentrenaran en zonas bajo mi mando. Ln ese momento, yo entreno las tropas que ya son gente expe- rimentada que eran doscientos, doscientos y pico de hombres en ese momento cuando ingresaron al Catatumbo, y en mayo de 1999, si mal no recuerdo, estu·ieron listas ,Mancuso, 2006-a,. JKLKMKNKJK ;.=$%7$%,- 7-/ C;$E B$/P$,."- 2$%(:1. Ll BCa era comandado por 1riple Cero`, sin embargo, |.| su principal responsable militar íue el ex capitan del Ljército, Armando Alberto Pérez Betancur, alias Camilo` ,íbiaev,. Lntre otros de sus integrantes se encontraban Ll Iguano` y Aramis Machado Ortiz, alias Cabo Machado`, condenados dentro del proceso de la Ley 9¯5 de 2005. Ll Iguano`, quien inició su acti·idad paramilitar a los diecisiete anos bajo las órdenes de Carlos Castano, reconocido por desaparecer Fuente: FGN, 2010-b. MAPA NO. ¯. Georreíerenciación del Bloque Catatumbo 52 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS gente en los hornos crematorios 32 y condenado por el asesinato I·an Villamizar Luciani, -ex Deíensor del Pueblo de Norte de Santander, cometido en 2001-, se reFrió en las ·ersiones libres a los grupos lo- cales que promo·ieron la llegada y consolidación de la Casa Castano a ese departamento ,p. ej. Los Polleros,, así como al apoyo recibido de la Policía y de la luerza Pública ,1SJP, 2010-b - Jorge I·an La·erde, 33 . Por su parte, Cabo Machado`, ex miembro del Ljército Nacional, inicialmente hizo parte de las Autodeíensas Unidas de Santander y Sur del Cesar, donde ejerció íunciones de instructor militar y urba- no` en las escuelas militares ubicadas en las haciendas La Ucrania y La Sonora`, localizadas en Pailitas, Cesar ,1SJP, 2011 - Aramis Ma- chado Ortiz, 34 . Ll Bloque Catatumbo íue el primero en anunciar en la ceremonia de desmo·ilización la entrega de inmuebles urbanos y en suministrar iníormación sobre predios rurales supuestamente utilizados como apoyo logístico 35 , tema que se aborda en el capítulo cuarto. 32 1eraaa.bierta: Cabo Machado`, de militar a instructor de paras` del Catatumbo`. 33 1eraaa.bierta: Cómo los paras se tomaron el poder en Norte de Santander`. 34 Ln la cuarta sentencia de la Ley 9¯5 de 2005, el 1ribunal de Justicia y Paz lo condenó por apoyar la íuga los alias Ll Iguano` y Gusta·o 18` del pabellón Disco del patio 16 de la Carcel Modelo de Cúcuta, y por traFcar armas dentro de dicho establecimiento, le impuso una pena alternati·a de seis anos y la inhabilitación para ejercer derechos y íunciones públicas por diez anos ,1SDJ, 2011 - Aramís Machado Ortiz,. 35 1eraaa.bierta: liscalía comenzó imputación de 112 crímenes a Sal·atore Mancuso`. Jesús Abad Colorado © 55 CAPÍ1ULO II 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LOS QUL lICILRON PRLSLNCIA LAS ACCU Ln este capítulo se hace relación a los intereses económicos, mili- tares y políticos en las regiones seleccionadas, esto es: el Uraba, la región Caribe y el Norte de Santander. Ln primer lugar, se precisa- ran algunas particularidades de las regiones utilizadas por los grupos paramilitares para propiciar su crecimiento y expansión. Ln segundo lugar, se alude a los intereses sobre las tierras, los territorios y los recursos naturales en las distintas regiones en que hicieron presencia los grupos nacidos de las directrices de la Casa Castano descritos en el capítulo primero, y a los eíectos de su expansión y de sus crímenes en el abandono íorzado y despojo de las tierras y territorios. Por último se hace una bre·e descripción de la política de restitu- ción de tierras y territorios en la que se ha comprometido el Presi- dente Juan Manuel Santos y se mencionan algunos de sus principales riesgos y desaííos. !" $%&%$'(&)*'+$%* ,%&'+$-.%&(* /( .%* &(0+12(* Con relación a las tierras en que hicieron presencia los bloques o írentes de las ACCU de la Casa Castano, ademas de sus condiciones y potencialidades económicas y localización estratégica, es rele·an- te destacar su caracter especial por comprender territorios étnicos de pueblos indígenas y de comunidades aírodescendientes. Algunas de estas tierras y territorios estan superpuestas con zonas de reser·a íorestal de la Ley 2a de 1959, y en ·arias zonas con terrenos que ha- cen parte del Sistema Nacional de Áreas Protegidas como los Parques Nacionales Naturales, los Santuarios de launa y llora y las Áreas Naturales •nicas. Ln el Uraba chocoano, antioqueno y cordobés habitan pueblos in- dígenas y comunidades aírodescendientes en territorios reconocidos 56 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS o no como reser·as y resguardos indígenas y territorios colecti·os de las comunidades negras. Varios de ellos se traslapan con los Parques Nacionales Naturales ‚atíos y Paramillo. Lste último -ubicado al sur del departamento de Córdoba y al noroccidente del departamento de Antioquia- íue el punto estratégico para el asentamiento y expansión de la Casa Castano, y pese a que es el habitat natural del pueblo em- bera katio y a que íue el primero, declarado en 1994 como sitio de pa- trimonio natural mundial por la Organización de las Naciones Unidas para la Lducación la Ciencia y la Cultura ,UNLSCO,, íue utilizado como corredor de los paramilitares y punto militar estratégico para el BLC y el BB, bajo las órdenes de Veloza y lasbún. Ln la región del Catatumbo localizada en el departamento de Norte de Santander, se superponen el Parque Natural Nacional Catatumbo con el resguardo Motilón Bari, habitado por indígenas y campesinos. Con respecto al territorio de innuencia del BN, comandado por Mancuso y 1o·ar Pupo, en los departamentos de Cesar, Magdalena y La Guajira se localizan los territorios ancestrales de los pueblos indí- genas kogui, arhuaco ,ika,, wiwa ,arsario,, kankuamo, yukpas y chimi- las, algunos de ellos reconocidos íormalmente a tra·és de resguardos, y otros en proceso de constitución o ampliación. Ln La Guajira ade- mas, habita el pueblo wayuu, que representan del 45° de la población del departamento y sobrepasa los quinientos mil habitantes ,DANL, 2005,. Ln la zona de innuencia directa del Bloque Norte en la región nor- te del litoral Caribe se encuentra el Parque Nacional Natural Sierra Ne·ada de Santa Marta, localizado en la intersección entre los depar- tamentos de Magdalena, Cesar y La Guajira. Lste parque íue apro- ·echado inicialmente por el Bloque Resistencia 1ayrona y luego por Jorge Cuarenta`, quien al igual que Giraldo, lo utilizó como centro de operación y punto estratégico para controlar el corredor de droga de la Sierra Ne·ada de Santa Marta que desemboca en el mar Caribe 36 , 36 La importancia económica de la región deri·a de la extracción de hidrocarburos, de la producción de culti·os ilícitos de coca, del traFco ilegal de gasolina de contrabando desde Venezuela y la producción agropecuaria de baja escala`. ,1SDJ, 2010-b - Jorge I·an La·erde,. 5¯ CAPÍ1ULO 2 en donde se ubican los parques Sierra Ne·ada de Santa Marta e Isla de Salamanca y el Santuario Los llamencos, este último aíectado por el lrente Contrainsurgencia \ayuu, que luego se íusionaría con el BN. 1odas estas regiones íueron escenario del terror paramilitar que causó el desplazamiento de los nati·os y la ocupación, y en algunos casos, la apropiación ·iolenta de territorios colecti·os de indígenas y aírodescendientes. LKJK +%,-"-1-1 #-%-"$/-1 La importancia económica de la región íue consustancial a los pro- pósitos de la Casa Castano de consolidar el control de territorios, libe- rados de las guerrillas, para pro·eerse de recursos a partir del negocio de las drogas ilícitas, la explotación de recursos naturales, la produc- ción agropecuaria a gran escala y el contrabando de armas y gasolina, entre otros productos ,Ver: 1SDJ, 2010-b Jorge I·an La·erde,. LKJKJK ;.%1./&7$(&)% ,-""&,."&$/ Una de las características principales que saltan a la ·ista, respecto a la presencia que tu·ieron las ACCU, es que su expansión en la región del Caribe no íue accidental o íortuita, pues como se e·idenció ante- riormente, íue el producto de las directrices establecidas por la Casa Castano, supuestamente para combatir las guerrillas, pero principal- mente asociadas al animo de consolidar subregiones como los golíos en el Uraba, Montes de María, la Sierra Ne·ada de Santa Marta, los ·alles del Alto Cesar y del Alto Ranchería o Pro·incia de Padilla, los ·alles alu·iales de los ríos Sinú y alto San Jorge, las llanuras del Mag- dalena, y la Península de la Guajira ,mapa No. 8,. Controlar esta región tenía una signiFcati·a innuencia dado que allí se ubicaban economías nacionales, locales y regionales en los sectores ganadero, agrícola, agroindustrial y minero, que aportaron recursos al crecimiento y expansión de la Casa Castano. Lo anterior no quiere decir que los paramilitares hayan permeado necesariamente todos los mercados y sectores, ni tampoco que hayan contado siempre con la colaboración ·oluntaria de todas las empresas de los di·ersos sectores de producción. 58 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS MAPA NO. 8. Georreíerenciación de las ACCU en la región del Caribe Fuentes: FGN, 2010-b e lGAC, Regiones Naturales, 2010 37 . Otro de los íactores rele·antes que saltan a la ·ista respecto a la presencia y dominio de las ACCU en el norte del país, es su nexo con el control de corredores estratégicos para el mercado de drogas ilícitas, el contrabando y el control de rutas, acti·idades a tra·és de las cuales obtenían cuantiosos recursos Fnancieros. Lllo explica por qué los principales corredores de droga ubicados en la región Caribe, el Uraba chocoano-antioqueno y la zona del Catatumbo, estu·ieron bajo el control de la Casa Castano ,mapa No. 9,. 3¯ Ll mapa puede ser consultado en: http:,,190.254.22.44,mapasƒdeƒcolombia, IGAC,Regnatu5.pdí 59 CAPÍ1ULO 2 Al obser·ar los anteriores mapas, el segundo de ellos reíerido a las zonas priorizadas para la ayuda de Lstados Unidos a Colombia en la Política Pública de Consolidación 1erritorial 38 , se comprende graFcamente cómo operaban los medios de Fnanciación ilegal que pro·enían del mercado de la droga. Por una parte, se tiene que el co- rredor de Uraba ,|raba corriaor, esta ubicado en la zona donde hacían presencia el BB y el BLC, es decir en el golío del Uraba chocoano-an- tioqueno salida al océano Atlantico y al mar PacíFco. Por otra parte, el corredor de Montes de María ,Movte. ae María corriaor, era controlado precisamente por el bloque que lle·a su mismo nombre, así como ocurre con el corredor Catatumbo ,Catatvvbo corriaor, en el departa- 38 Ver entre otros: directi·a presidencial 01 de 2009, decreto 2933 de 2010 y artículos 26 y 195 de la Ley 1150 de 2011, Plan Nacional de Desarrollo, 2010-2014. MAPA NO. 9. Georreíerenciación y corredores de traFco de droga Elaborados a partir del mapa oficial de la FGN, 2010-b y del mapa del Plan de Choque y Zonas de Consolidación (Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, MADR, 2010). 60 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS mento de Norte de Santander, en la írontera con Venezuela 39 . linal- mente, el corredor de la Sierra Ne·ada de Santa Marta ,´ierra ^eraaa ae ´avta Marta corriaor, era controlado por el conocido Bloque Norte. Ademas de lo anterior, la Casa Castano controlaba otros corredo- res secundarios como el de las sabanas de San Ángel, Magdalena y Cesar, los cuales se utilizaban -y utilizan- para el transporte de hoja de coca desde el sur de Bolí·ar hasta los puertos al norte de la Sierra Ne·ada, y a la península de La Guajira 40 . Asímismo, el control sobre el departamento de La Guajira le permitía |.| realizar las operacio- nes de contrabando que íacilitan el la·ado de dinero y el ingreso de la gasolina ·enezolana barata` 41 , requerida para la producción de drogas ilícitas, entre otros Fnes. LKJKLK 80".0&$(&)% 7- ,&-""$1 A ,-""&,."&.1 Sin lugar a dudas, ademas de los intereses de control territorial an- tes descritos, la expansión de la Casa Castano estaba directamente ·inculada con el interés de apropiarse de tierras, territorios y recursos naturales, pero, es claro que no íueron los únicos que lo hicieron en la medida en que el a·ance del proyecto político-paramilitar o los Fnes de la empresa macrocriminal, les oírecía a sus socios las condiciones para enriquecerse y usuíructuar los réditos de su accionar ·iolento y criminal. Al eíecto, la Corte Constitucional ha senalado dentro de las causas del desplazamiento íorzado, los intereses económicos sobre las tie- rras y territorios 39 Al respecto debe recordarse que el |.| emporio económico era controlado por el Bloque Norte que participó en todos los eslabones del negocio de la cocaína: los culti- ·os de plantaciones ubicados en nue·e municipios, laboratorios para el procesamiento en 1ibú, Aguachica, Sardinata, area metropolitana de Cúcuta y la comercialización por el Magdalena, la costa Atlantica y la írontera colombo-·enezolana` ,1SDJ, 2010-b - Jorge I·an La·erde. Rad. Op. cit.,. 40 Centro de Medios Independientes de Colombia: Los nue·os grupos armados de Colombia: el caso de la costa Caribe`, por International Crisis Group, 200¯. 41 íbíaev. 61 CAPÍ1ULO 2 |.| por parte de los actores armados interesados, o bien en la reali- zación directa de megaproyectos agrícolas y de explotación de recursos naturales, o bien en el apoyo a ciertas empresas y actores económicos que desarrollan estos proyectos, y con los cuales se han asociado para lucrarse con los beneíicios de tales acti·idades ,Corte, 2009,. Las situaciones e intereses mencionados se dieron en las regiones en que actuaron los bloques antes descritos, como se obser·a en los siguientes mapas en los que se muestran las zonas en que hicieron presencia, y su coincidencia con las regiones en las que se ha e·iden- ciado y documentado el abandono íorzado y el despojo de tierras ,mapa No. 10,. De esta íorma es posible identiFcar el nexo entre las regiones con abandono o despojo de tierras y territorios, y las ·iolaciones masi·as y sistematicas a los derechos humanos e iníracciones al Derecho In- ternacional lumanitario que dispararon el éxodo íorzado, entre ellas los homicidios selecti·os y de conFguración múltiple, las masacres, Elaborados a partir de los mapas de la FGN, 2010-b y del MADR, 2010. MAPA NO. 10. Georreíerenciación y zonas de despojo y abandono íorzado 62 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS las amenazas, los accidentes por minas antipersona, las desaparicio- nes íorzadas, el reclutamiento y la utilización ilícita de ninos, ninas y adolescentes ,Deíensoría del Pueblo, 2010,, acentuadas írente a los pueblos indígenas y las comunidades aírodescendientes, como lo ha descrito ampliamente la Corte Constitucional 42 . Prueba de ello, son las coníesiones en los procesos de la Ley 9¯5 de mas de 35 mil hechos criminales, entre ellos 23 mil homicidios, 10.264 desplazados, 3.2¯2 desparecidos íorzadamente, ¯9 casos de ·iolencia sexual que in·olucran a 46.106 ·íctimas en el marco del proceso de Justicia y Paz ,liscalía, 2012,, y 894 masacres ,liscalía, 2012-a,. Ln el mapa No. 11 se registran los casos de masacres por depar- tamento consolidado en el periodo comprendido entre el 2001 y el 42 La realidad íactica de los territorios colecti·os es descrita por la Corte Constitucional en ·arios de los autos expedidos en desarrollo de la sentencia 1-025 de 2004, entre ellos los autos 004 y 005 de 2009, y el auto 092 de 2008, en el que se expone la situación de las mujeres indígenas y aírodescendientes. Fuente: Verdad Abierta. Estadísticas de masacres, Abril 4 de 2012. Disponible en: http://www.verdadabierta.com/component/content/article/173-estadisticas/3828-estadisticas-masacres MAPA NO. 11. Masacres por departamento 2001-2011 63 CAPÍ1ULO 2 2011 ,anexo 3. Masacres en las zonas seleccionadas,. A partir de las estadísticas, es posible concluir que la mayor cantidad de masacres íueron cometidas durante la época de auge paramilitar entre 1999 y 2003, haciendo que este actor armado sea responsable del 58° de los casos. Los departamentos mas críticos son Antioquia ,158,, Valle del Cauca ,83, y Norte de Santander ,51,, precisamente aquellos en los que las ACCU tu·ieron mayor presencia y centraron su expansión territorial. Sin pretender mencionar los nombres de todas, las estructuras de la Casa Castano son responsables de las masacres de londuras y La Negra, Uraba ,1988,, Saiza, Córdoba y el Catatumbo, Norte de San- tander ,1999,, Repelón, Atlantico ,2001,, Ll Salado, Bolí·ar y Ciénaga Grande, Magdalena ,2000,, Chengue, Sucre ,2001, y Bahía Portete, La Guajira ,2004,, entre otras. Solo entre los anos 2001 y 2002 se perpetraron doscientas treinta y una en las regiones seleccionadas en las que perdieron la ·ida mas de mil quinientas personas ,Vicepresi- dencia, 2011,. LKLK R-10/$'$=&-%,._ $O$%7.%. A 7-10.9. 7- ,&-""$1 Colombia se disputa con Sudan el primer lugar con mayor número de personas en situación de desplazamiento. A diciembre de 2011, mas de 4.¯ millones con datos oFciales y cerca de 5.5 millones se- gún la Consultoría para los Derechos lumanos y el Desplazamiento ,CODlLS,. Del total de población desplazada por departamento de llegada ,3.8¯5.98¯,, el 46,4° corresponde a personas pro·enientes de Antioquia, Atlantico, Bolí·ar, Cesar, Chocó, Cordoba, La Guajira, Magdalena y Norte de Santander. Mas del 40° son mujeres, el 11° aírodescendientes y el 2° son indígenas, sin contar con iníormación de Atlantico ,anexo 4. Población desplazada en zonas seleccionadas,. Ll gran impacto de los bloques de la Casa Castano en el desplaza- miento y despojo y abandono de tierras, se e·idencia en los iníormes de la Comisión de Seguimiento a la Política Pública de Atención a la Población Desplazada y del Proyecto de Protección de 1ierras y Patrimonio ,PP1P, de Acción Social, ahora del Ministerio de Agri- cultura y Desarrollo Rural. 64 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Ln la 1ercera Lncuesta Nacional de VeriFcación realizada por la Uni·ersidad Nacional a solicitud de la Comisión, se indica que por lo menos al 40.¯° de los grupos íamiliares desplazados abandona- ron, ·endieron íorzadamente o les íueron arrebatadas sus tierras. Ln concreto, |.| 434.100 íamilias desplazadas debieron abandonar o íueron despojadas de sus tierras` ,Comisión, 2011,, |.| de las cuales mas del 50° migraron de los departamentos de Antioquia y Chocó ,Región 1a,, Atlantico, Bolí·ar, Sucre, Córdoba ,Re- gión 2a,, Magdalena, Cesar, La Guajira y Norte de Santander ,Región 3a, ,Comisión, 2011, 43 . Ln lo que respecta al area aíectada, del total de las 6.638.195 hec- tareas reportadas por la Comisión de Seguimiento -en la que no se incluyen los territorios colecti·os de indígenas y aírocolombianos ni los predios superiores a 9¯ hectareas-, que representa el 15.4° de la superFcie agropecuaria del país mas de la mitad ,el 52.25° equi- ·alente a 3.469.064 hectareas, corresponden a las reíeridas regiones ,Comisión, 2011,. Lo anterior coincide con los estudios eíectuados por el PP1P, de los que se desprende que el 40° del total de la población desplazada ,1999-2009, corresponde a propietarios, ocupantes y poseedores de predios en los departamentos del Caribe, Cesar y Norte de Santander. Si a estos departamentos se agregan Meta y Antioquia se llega al 6¯° del total de la población desplazada en todo el país ,Acción Social- PP1P, 2010,. Ll area de los predios abandonados u ocupados ilegal- mente solamente en la Costa Norte puede sobrepasar las 2 millones de hectareas, tomando como reíerencia el total nacional de predios abandonados entre 1994 y 2010 según los registros del PP1D que a diciembre de 2010 identiFcaban el abandono y despojo de mas de 8,4 millones de has ,íbíaev,. 43 Las otras regiones de la 1ercera Lncuesta., son la 4a ,Cauca, Narino, Putumayo, Caqueta y Distrito de Buena·entura,, la 5a ,Distrito Capital de Bogota, Boyaca, Caldas, Cundinamarca, luila, Quindío, Risaralda, 1olima, Santander y Valle del Cauca,, y la 6a ,Amazonas, Arauca, Casanare, Guainía, Gua·iare, Meta, Vaupés y Vichada,. 65 CAPÍ1ULO 2 Si se mira en íunción de los 350 mil predios abandonados o des- pojados en todo el país, según los calculos del PP1P, también se hace e·idente la estrecha relación entre la expansión de la Casa Castano y el destierro íorzado. Ln eíecto, el 25° de los predios se ubican en los departamentos de la costa Caribe, Cesar y Norte de Santander y al incluir Chocó, Antioquia y Meta se llega al ¯0° del total ,íbíaev,. Ln el mismo, con base en el Registro •nico de 1ierras Abando- nadas, por lo menos una tercera parte de los 150 municipios mas aíectados en íunción de la extensión de tierras abandonadas` ,íbí· aev,, se localizan precisamente en los departamentos en el que se expandieron y consolidaron los bloques de las ACCU objeto de este documento, y del total de la superFcie registrada como abandonada en el SIPOD-RUPD ,4.3 millones de hectareas,, el 46° corresponde a los departamentos de Antioquia, Bolí·ar, Cesar, Córdoba, Chocó, Norte de Santander, Sucre, La Guajira y Atlantico ,Acción Social- PP1P, 2010,. De otra parte, el PP1P de Acción Social -ahora del MADR- senala que: en el 52° de los 150 municipios mas aíectados por el abandono y despojo de tierras ,¯8 municipios,, existen territorios colecti·os de indígenas y aírocolombianos`, especialmente en los citados departa- mentos ,íbíaev,. Ll destierro ademas de ser una maniobra de ·aciamiento de po- blaciones para consolidar territorios y corredores estratégicos, recon- quistar parcelas adjudicadas por el Lstado y atesorar tierras, también íue una estrategia para apropiarse de zonas ricas en recursos natura- les, y,o de zonas en las que se planeaban o ejecutaban proyectos de desarrollo y de su plus·alía. Ciertamente, en las regiones en que mas se aumentaron los índices de concentración se produjeron cambios considerables en las íor- mas de explotación de la tierra y uso del suelo. Ln especial, se cau- só la sustitución de culti·os transitorios 44 propios de la economía 44 Ln la 1ercera Lncuesta.`, se registra que en las regiones 1a y 2a existían mayor número de hectareas sembradas con culti·os que íueron abandonadas o despojadas, 23.4° y 19.2°, respecti·amente. Ln la región 3a era el 16° ,Comisión de Segui- miento, 2011,. Asímismo, el 66, ¯¯ y 68° de los hogares desplazados abandonaron animales, en las regiones 1a, 2a y 3a, respecti·amente ,Comisión de Seguimiento, 2011,. 66 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS parcelaria` ,lajardo, 2010, por culti·os permanentes ,‚almano·itz, 2006,, y la adaptación para grandes proyectos de desarrollo ,Ver: Despojo en Jiguamiando y Cur·aradó y Chi·olo: despojo en zonas de Jorge 40`,. Ademas, las zonas de expolio de tierras y territorios coinciden con regiones en las que se ejecutan o planean grandes pro- yectos de desarrollo, entre ellos de explotación minera ,íerroníquel en Córdoba, carbón en La Guajira y Cesar y oro en Bolí·ar,, agroindus- tria para oleaginosas y agro combustibles ,Uraba, Sucre, La Guajira, Cesar y Norte de Santander,, agroíorestería ,Uraba, Montes de María -Sucre y Bolí·ar- y Córdoba,, ganadería extensi·a ,Uraba, Córdoba, Sucre, Bolí·ar y Magdalena,, y construcción de iníraestructura por- tuaria ,Chocó, La Guajira y Magdalena,, ·ial ,Ruta del Sol,, de riego y energía ,represas Urra en Córdoba y Ranchería en La Guajira, y poliductos y reFnerías ,Bolí·ar,. Ln algunas regiones, el destierro se relaciona con las expectati·as de íuturos proyectos, como por ejem- plo, la construcción de la ·ía Panamericana que conectara a Colombia con Panama ,Ver: Despojo en Jiguamiando y Cur·aradó,. Así pues, en las regiones en que los bloques gestados por la Casa Castano hicieron presencia, se presentaron signiFcati·os cambios en los usos del suelo, ía·orecidos por el abandono íorzado y el expo- lio de terrenos públicos ,baldíos, y pri·ados, colecti·os ,territorios étnicos,, asociati·os ,entre ellos los entregados por el Lstado en co- mún y proindi·iso, e indi·iduales, con el consecuente aumento en el atesoramiento de tierras y territorios y de los recursos naturales que se encuentran en ellos por parte de miembros de los grupos parami- litares y sus aliados. A la par que se aterrorizaba a los pobladores de esas regiones con la perpetración de masi·as y sistematicas ·iolacio- nes a los derechos humanos e iníracciones al Derecho Internacional lumanitario, ser·idores públicos íacilitaban el expolio y su legaliza- ción. Justamente, la legalización del despojo de predios de particula- res, Fscales, baldíos de la Nación y parques nacionales, por parte de autoridades públicas ,despojo administrati·o y judicial, es el principal hallazgo de las in·estigaciones adelantadas por la Superintendencia de Notariado y Registro ,SNR, en Uraba, Montes de María, Meta y Ll Catatumbo, y en el Parque Nacional Natural 1ayrona ,SNR, 2011, 2011-a, 2011-b, 2011-c y 2011-d,. 6¯ CAPÍ1ULO 2 Ln estas regiones esa Superintendencia ha documentado amplia- mente las maniobras y modalidades empleadas para la apropiación ilegítima de tierras y territorios y ha identiFcado algunos de sus res- ponsables directos e indirectos y sus usuíructuarios, ya sea de manera simultanea con la comisión de las gra·es y masi·as ·iolaciones de derechos humanos y del derecho internacional humanitario -despojo material- ,Ver: Despojo en Jiguamiandó y Cur·aradó, o con poste- rioridad al destierro y al ·aciamiento de los territorios ,despojo admi- nistrati·o y judicial,. Ln particular, ese organismo se ha reíerido a los compradores ma- si·os de predios en zonas que íueron el epicentro del accionar de la organización criminal del paramilitarismo -algunas de las cuales co- inciden con las íocalizadas para la Política Nacional de Consolidación y Reconstrucción 1erritorial 45 y con las macro regiones de la Política de Restitución- ,Salinas „ otros, 2012,, entre los cuales se encuentran los ilegales ,miembros acti·os y organicos de las AUC, y los legales ,personas naturales y grupos empresariales que adelantan proyectos de desarrollo económico,. Dentro de los primeros, se mencionan a los supuestos testaíerros o determinadores del despojo en la región del Uraba, entre ellos a Otoniel Segundo loyos Pérez y a lumberto Artehortúa Salinas, miembros del BLC ,Ver: PPP de alias Ll Ale- man`, y a Sal·atore Mancuso ,SNR, 2011, 2011-a, 2011-b y 2011-c,. Lntre los segundos, se hace reíerencia a empresarios ·inculados al proyecto palmicultor de Vicente Castano en el Uraba y al londo Ganadero de Córdoba ,Ver: Despojo de Jiguamiandó y Cur·aradó y PPP de alias Ll Aleman`,. Ln la región de Montes de María se documenta las compras masi·as de cerca de treinta mil hectareas por parte de Ál·aro Ignacio Lche·erría Ramírez y de su empresa 1ierras de Promisión, los hermanos Andrés lelipe, Daniel y Ricardo Arango Botero y Amauri Raíael Piniche, así como de las empresas Reíoresta- dora del Caribe S.A. y Cementos Argos S.A. del Grupo Lmpresarial Antioqueno ,representadas por Valentín lederico Viera lernandez 45 Ln las zonas de la Política de Consolidación 68 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS y María Isabel Lche·erry Car·ajal, respecti·amente,, las socieda- des anónimas Agropecuaria Carmen de Bolí·ar S.A., Agropecuaria Ll Génesis S.A. ,representadas por Manuel José Medina Munetón,, Consorcio Agroindustrial del Norte S.A., Agropecuaria Montes de María S.A., Mar De 1iguas e In·erquímica - In·esa S. A., y la lidu- ciaria liducor S. A. ,SNR, 2011-b,. Ln las in·estigaciones sobre el íenómeno de compra·entas masi·as en esta región se ha demostrado, ademas de ·iolaciones a la Ley Agraria y a las medidas de protección de tierras, el apro·echamiento del estado de necesidad de los ·ende- dores, ya sea por no contar con los recursos para poner a producir las tierras abandonadas por la íuerza durante ·arios anos o por el temor de perderlas ante la inminencia de procesos ejecuti·os y rema- tes como consecuencia del no pago de créditos y otras obligaciones, tarea encomendada a la Central de In·ersiones S. A. Al respecto, son írecuentes las denuncias de que entidades operadoras del cobro de la cartera íacilitaron las listas de los deudores a los interesados en adqui- rir predios a precios bajos 46 . Como compradores masi·os de mas de ocho mil hectareas en la región de Ll Catatumbo se registran a las companías C\PAG y Lco- palma, entre cuyos socios se encuentra la íamilia Gutiérrez Pinerez, las sociedades de responsabilidad limitada Bioagroindustrial y Gana- dería de Puerto Rico y las sociedades anónimas In·ersiones Palma de Oriente y Palmeros AFliados de Colombia ,SNR, 2011-d,. La mayor parte de las transacciones e·idenciadas por el ente rector de notariado y registro, algunas de las cuales son objeto de in·estiga- ción y acciones por parte de la liscalía y otras instancias estatales, han recaído principalmente en predios adjudicados por el Lstado, pese a las prohibiciones legales de adquirir mas de una Unidad Agrícola 46 Ver: Ll 1iempo, Minagricultura tiene en la mira a los Montes de María y La Silla Vacía: Las tierras de la posguerra`, Así se concentró la tierra en Montes de María` y ,Para quién se desmina· 69 CAPÍ1ULO 2 lamiliar en ·igencia de la Ley 160 de 1994 4¯ , eliminadas en la Ley 1450 de 2011 48 , y en territorios étnicos no obstante su caracter cons- titucional de no enajenables ,artículo 63, CP,. Pero, de igual íorma, se han realizado desconociendo la Constitución y las leyes, sobre baldíos de la Nación, como se documenta en el iníorme de la citada Super- intendencia sobre la OFcina de Notariado de San Martín 49 . 1al es el caso del predio Las Palmeras, en San Juan de Arama, Meta, adquirido por la empresa Palmar de Vista lermosa a tra·és del englobamien- to de dos terrenos adjudicados por el Lstado y de un baldío ,SNR, 2011-c,. Precisamente, situaciones como esta y las identiFcadas en el Parque 1ayrona son la razón por la que esa entidad se haya reíerido al despojo al Lstado, por parte de bandas jurídicas` especializadas en burlar la ley 50 . A lo expuesto se suman las compras realizadas por empresas ex- tranjeras en zonas que íueron bastiones de los paramilitares y sus aliados, que ademas de poder ser desconocedoras de los derechos de las ·íctimas agudizan la concentración de la tierra. Si bien, se trata de una tematica reciente, existen casos documentados por congresistas y entidades públicas en los que se e·idencia las adquisiciones del Gru- po brasilero Mónica Semillas S.A. y de la empresa italo-espanola Po- ligrow S. A. en Puerto Gaitan y Mapiripan, departamento del Meta, a tra·és de Fguras como la constitución de ·arias Fliales para la compra de mejoras y de superFcies que exceden la Unidad Agrícola lamiliar, y 4¯ Ll artículo ¯2 de la Ley 160 de 1994 prohibía expresamente adquirir la propiedad so- bre terrenos inicialmente adjudicados como baldíos, cuando las superFcies sobrepasan los límites maximos de la Unidad Agrícola lamiliar, y aportar a sociedades o comuni- dades, la propiedad de predios adjudicadas como baldíos, si con ellos dichas sociedades o comunidades consolidan la propiedad que excedan la UAl. 48 La Ley que aprobó el Plan Nacional de Desarrollo 2010 - 2014 permite adquirir directamente predios adjudicados por el Lstado que superen diez Unidades Agrícolas lamiliares y con autorización de una Comisión Lspecial, de la que hace parte el Minis- terio de Agricultura, en extensiones superiores. 49 La propiedad de los baldíos adjudicables solamente se adquiere mediante título tras- laticio de dominio otorgado por el INCODLR en terrenos que no superen la UAl. 50 ít Paí.: Ll mayor despojado es el Gobierno Nacional`. ¯0 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS la posible adquisición de baldíos sin adjudicar, con el Fn de implantar proyectos agroindustriales de soya y palma, respecti·amente. Similar situación se presenta en la hacienda Bellacruz, localizada en el sur del departamento del Cesar, en la que el desplazamiento sangriento de los titulares de derechos sobre predios que hacen parte de esa hacienda, en 1996, dio lugar a la condena de uno de los miembros de la íamilia Marulanda, Carlos Arturo Marulanda, ex embajador. Recientemente, la empresa Dolce Vista Inc, con socios colombianos y extranjeros ,lacienda la llores y Grupo Synergy, encabezados por los empresa- rios Carlos Murgas, ex ministro de agricultura en la administración de Andrés Pastrana Arango, íundador de la lederación Nacional de Cul- ti·adores de Palma y conocido como el Zar de la Palma` y German Líromo·ich, boli·iano-brasilero, propietario de A·ianca, entre otros negocios en Colombia,, adquirió el terreno denominado La Gloria que hacía parte del citado inmueble para la siembra de palma 51 . LKMK ;.%(-%,"$(&)% 7- /$ ,&-""$ A `(.%,"$""-6."=$ $#"$"&$a 1radicionalmente Colombia es uno de los países con mayores ín- dices de concentración de la tierra a ni·el mundial. Precisamente, los departamentos del norte del país objeto de este estudio, se han carac- terizado por la tradicional existencia de grandes extensiones de tierras en manos de pequenas y poderosas élites regionales -latiíundistas- y de una gran masa campesina arrendataria y jornalera -campesinado sin tierras- o microíundista. Lsta bipolaridad ha sido la causa de las constantes luchas de mo·imientos sociales agrarios rei·indicatorios de la distribución equitati·a de la tenencia de la tierra, desde los anos treinta ,Ley 200 de 1936, 52 , pasando por la década de los sesenta, setenta y ochenta del siglo pasado, de una parte, y de la denominada contrarreíorma agraria`, de la otra. 51 1eraaa.bierta.cov, 1ierra prometida en La Bellacruz`. 52 Lsta ley surge de la sentencia de la Corte Suprema de Justicia, de abril de 1926, en la que exigió la presentación de los títulos originarios para acreditar la propiedad de la tierra, llamada la prueba diabólica`, y del acto legislati·o No. 1€ de 1936 que consagra la íunción social de la propiedad ,Ver: Machado, A., 2009 y CNRR-GMl, 2010-a,. ¯1 CAPÍ1ULO 2 Ln el período comprendido entre el ano 2000 y 2009, el índice GINI nacional que reneja la tenencia de la tierra se incrementó en un 2.5°, particularmente a partir del ano 2005 -en el que se expidió el marco normati·o de Justicia y Paz- en el 5¯° de los municipios del país ,Ibanez y Munoz, 2009,. Si bien debe reconocerse que los íactores de este íenómeno pueden ser muy di·ersos, lo cierto es que en la primera etapa del periodo en que la concentración se agudizó ,2000-2005,, los grupos gestados y agrupados por la Casa Castano reportaron su mayor crecimiento y expansión ,mapa No. 12,. A partir de ese último ano, que coincide con la expedición de la Ley de Justicia y Paz, se han e·idenciado los íenómenos de compras masi·as de tie- rras acompanadas de múltiples practicas íraudulentas, en las regiones deshabitadas por el accionar paramilitar ,Montes de María, el Uraba, Ll Catatumbo y en el sur y centro del departamento del Meta,, a los que se hizo reíerencia antes, a tra·és de los cuales se ha incrementado la concentración de la propiedad tradicional y emergente y del uso de las tierras. MAPA NO. 12. Georreíerenciación y concentración de la tierra 2000-2009 Fuentes: FGN, 2010-b e Ibáñez, A y Muñoz, 2009. ¯2 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Lo anterior guarda relación con los hallazgos de la Comisión de Se- guimiento: de las 6.6 millones de hectareas perdidas o abandonadas, el ¯9.3° corresponden al periodo 1998-2008, el resto se distribuye en el periodo 1980-199¯, el 15.4, entre 2009 y junio de 2010, el 5.4° ,Comisión, 2011,. Lste último dato demuestra que con las desmo·ilizaciones y el pro- ceso de Justicia y Paz no sólo no se desmantelaron las estructuras paramilitares, sino que desplegaron sus capacidades de adaptabilidad y resiliencia para continuar operando en ·astas regiones del país. Los nue·os` grupos armados coníormados por paramilitares desmo·ili- zados y no desmo·ilizados, e integrantes de las maFas del narcotraF- co, que en algunas zonas del país se han aliado a las guerrillas, deno- minados euíemísticamente por el Gobierno Nacional como Bandas Criminales` ,BACRIM,, tales como Las Águilas Negras`, Los Rastrojos`, Ll Ljército Re·olucionario Anticomunista de Colombia ,LRPAC,` y Los Urabenos`, entre otras, continúan cometiendo ·io- laciones a derechos humanos y son causantes de nue·os destierros y de las amenazas y asesinatos de los reclamantes de territorios y tierras. La existencia y persistencia de dichos grupos, así como la coníor- mación de otros que se autodenominan ejércitos anti restitución de tierras`, es quizas el mayor obstaculo al compromiso del presidente Santos de restituir las tierras a los desposeídos en el marco de la Ley de Víctimas ,Ley 1448 de 2011,. Fuente: (Ibidem). 1980 - 1997 1998 - 2008 2009 - junio 2010 Total entre 1980 y junio de 2010: 6.638 195 hectáreas. LSQULMA NO. 3. Abandono y despojo de tierras ¯3 CAPÍ1ULO 2 De otra parte, |.| la estrecha asociación entre el atesoramiento de la tierra y el desplazamiento íorzado` ,Salinas, 2010,, se reneja en que en el período 2000-2009, los predios de mas de quinientas hectareas que ·einte anos antes ocupaban el 32° de la tierra útil, se extendie- ron al 62° y se encuentra en manos no mas del 4° de propietarios ,Ibanez, 2009,, concentración que se dio a la par de que uno de cada cuatro campesinos íuera expulsado de sus tierras o territorios. Ln términos de la Unidad Agrícola lamiliar ,UAl,, el acapara- miento de tierras también es e·idente: |.| para 2009 se obser·a que mientras el 10.5° del total de hectareas estan en la categoría de microíundio y corresponden al 80.5° de los predios y al ¯8.3° de los titulares de derechos, el 52.2° de hectareas estan en la gran propiedad con 0,9° de los predios y 1.1° de los pro- pietarios,poseedores ,Acción Social-PP1P, 2010,. De esta íorma, los incipientes logros de las írustradas reíormas agrarias 53 , íueron objeto de una covtrarreforva agraria mediada por gra·es ·iolaciones de derechos humanos de campesinos, indígenas y aírodescendientes perpetradas por los grupos paramilitares, con el apoyo de agentes legales públicos y pri·ados 54 . Lste contexto nacio- nal se hace e·idente en las regiones seleccionadas para este texto, 53 Ley 135 de 1961 ,crea el Instituto Colombiano de Reíorma Agraria y desarrollo Rural, INCORA, y Ley 160 de 1994, que tiene como objeti·o principal, en el marco de la Constitución de 1991, garantizar el acceso a la propiedad de la tierra a los sectores mas ·ulnerables del campo, entre ellos los campesinos, los grupos étnicos y las mujeres y, por ende, a disminuir la desigualdad y e·itar la concentración de la propiedad de la tierra ,artículos ¯€, 58, 61 a 63, C. P., entre otros,. 54 La contrarreíorma agraria ha sido ampliamente documentada por el Grupo de Me- moria listórica en ·arios de sus iníormes, entre ellos, ía 1ierra ev Di.¡vta. Mevoria. aet ae.¡o;o , re.i.tevcia. ev ta co.ta Caribe, así como por los hallazgos y denuncias de organi- zaciones de derechos humanos y de ·íctimas, de organismos internacionales como el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, las instancias del proceso de la Ley 9¯5 de 2005 ,Unidad de Justicia y Paz de la liscalía, 1ribunales de Justicia y Paz, Corte Suprema de Justicia y las extintas Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación y Comisiones Regionales de Restitución de Bienes, y por entidades estatales como la Corte Constitucional, el Proyecto de Protección de 1ierras y Patrimonio de Acción Social y la Superintendencia de Notariado y Registro. ¯4 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS principalmente en los departamentos de Córdoba y Sucre, en donde se titularon y adjudicaron tierras en gran parte como eíecto de las luchas campesinas en los anos sesenta, setenta y ochenta del siglo pasado ,Ver: CNRR-GMl, 2010-a,. Ln dichos departamentos como en otras regiones del país, la covtrarreforva agraria se dio a tra·és de la íuerza y el destierro y desmantelamiento de ·eredas y corregimientos ,pueblos íantasmas`, 55 . Muestra de ello es que en los municipios de la región del Uraba cerca de 430 mil hectareas íueron abandonadas íorzosamente, de las cuales casi el diez por ciento íueron objeto de despojo administrati·o y judicial según los iníormes de la Superinten- dencia de Notariado y Registro. De esta manera se estructuró un patrón criminal de despojo en el que connuyeron los elementos que caracterizan los seis casos que se describen mas adelante, y para cuya legalización se desplegaron soFsticadas estrategias como las compras íorzadas y íraudulentas, la re·ersión de adjudicaciones de parcelas del INCORA,INCODLR, la apropiación ilegal e ilegítima de baldíos y territorios étnicos, y las compras masi·as con el concurso y la complicidad de ser·idores pú- blicos, pese a contrariar las leyes en materia de los derechos de pro- piedad y posesión. Lse patrón y las estrategias de desposesión de las tierras de los pobladores del campo, respondían a los propósitos del apropiarse del botín de tierras abandonadas y despojadas por la íuerza y la ·iolen- cia, y de su legalización por parte de la empresa criminal engendrada por la Casa Castano, en la que el atesoramiento de tierras, territorios, recursos naturales y otros negocios no puede aislarse del cometido delicti·o de reíundar el Lstado e imponer un nue·o orden social, cul- tural, económico y político, en pro·echo de sus miembros acti·os y de sus aliados, el que ademas de ser íuente de ingresos permitía la·ar las ganancias obtenidas de acti·idades ilícitas. 55 Ll 1iempo: 42 pueblos íantasmas`, septiembre 30 de 2001 y ACNUR, Los pue- blos íantasmas en Colombia`. ¯5 CAPÍ1ULO 2 LKNK >-1,&,:(&)% 7- ,&-""$1 A ,-""&,."&.1 Ln respuesta a la imperiosa obligación de re·ersar y reparar las gra·es, masi·as y sistematicas de los derechos a la propiedad y po- sesión de las ·íctimas y en el marco de las ordenes de la Corte en la Sentencia 1 025 de 2004 y sus Autos de Seguimiento, el gobierno de Juan Manuel Santos ,2010-2014, deFnió la restitución de tierras y te- rritorios colecti·os de los grupos étnicos como una de sus principales banderas en la búsqueda de la unidad nacional. Para ello impulsó la expedición de la Ley de Víctimas, en la que se creó una jurisdicción especial` que nexibiliza los procedimientos legales ·igentes 56 . Paralelamente, en el Plan Nacional de Desarrollo 2010-2014 Pros- peridad para todos` ,Ley 1450 de 2011,, se incorporan estrategias y acciones para la Política de Atención y Reparación a las Víctimas del Delito de Desplazamiento, entre ellas las relacionadas con la resti- tución de las tierras y territorios, y se deFnen las cinco locomotoras del crecimiento económica ,agro, minería, iníraestructura, ·i·ienda e 56 i, Ll Reconocimiento de la calidad de ·íctimas a las personas desterradas y pri·adas de sus derechos patrimoniales, aíectados entre el 1 de enero de 1991 y el término de ·i- gencia de la ley ,10 anos,, lo que constituye un trato discriminatorio írente a las demas ·íctimas a las que se les reconoce su derecho a la reparación a partir del 1… enero de 1985 ,artículos 3 y ¯6,, ii, La creación de un marco de justicia denominada transicional que comprende procesos y mecanismos judiciales o extrajudiciales` a cargo de ins- tancias administrati·as - la Unidad Administrati·a Lspecial de Gestión de Restitución de 1ierras Despojadas ,UALGR1D,, y sus dependencias regionales- y judicial -jueces y magistrados- con la íunción de establecer los derechos de las ·íctimas, así como la buena íe de los opositores, iii, Las acciones especíFcas para la restitución ordenadas por el magistrado o los jueces ,restitución jurídica y material del inmueble, compensa- ción en especie con un predio equi·alente o dineraria cuando la restitución jurídica y material sea imposible o cuando el despojado no pueda retornar al mismo, y el pago de compensaciones a ía·or del opositor que ocupa el predio que se demuestre su buena íe exenta de culpa, i·, Las presunciones de derecho y legales, entre ellas la ausencia de consentimiento o causa ilícita, la inexistencia de la posesión, la ilegalidad de actos administrati·os que legalizan el despojo, y la ·iolación del derecho al debido proceso en decisiones judiciales, así como la in·ersión de la carga de la prueba a ía·or de las ·íctimas, ·, La no interrupción de los plazos de prescripción y titulación de baldíos por causa del desplazamiento, y ·i, La implementación, mejoramiento e interoperabilidad de los sistemas de iníormación en torno al Registro de 1ierras Despojadas a cargo de la UALGR1D. ¯6 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS inno·ación,. Para la primera, el Ministerio de Agricultura y Desarro- llo Rural esta íormulando el proyecto de ley que presentara al Con- greso de la República, en el que se contempla el derecho de superFcie y la coníormación de zonas de desarrollo empresarial y el apoyo a proyectos agroindustriales en tierras del Lstado y en superFcies que superen la Unidad Agrícola lamiliar, a ía·or de conglomerados inte- grados ·ertical y horizontalmente que desarrollen proyectos a gran escala 5¯ , en los que se ·inculan a los pequenos productores, ·íctimas o no, a tra·és de alianzas. Lstas iniciati·as legislati·as constituyen, en conjunto, un a·ance signiFcati·o respecto a las problematicas de destierro ,despojo, aban- dono y concentración de tierras y de su uso descritas anteriormente,, pues dan cuenta de una ·oluntad política interesada en cumplir con el deber estatal de reparar a las ·íctimas y de cerrar la brecha entre lo urbano y lo rural. Pero, igualmente, plantean grandes desaííos y ries- gos, entre ellos, los cambios en la tenencia y en el uso de las tierras en las regiones en que se implantó el régimen del terror de la empresa criminal, a tra·és de la puesta en marcha de iniciati·as económicas en las que se ·incularon empresarios y ser·idores públicos miembros o aliados de la causa criminal del paramilitarismo y otros con Fnes de lucro y beneFcio propio. lrente a esa realidad es de esperarse que un gran porcentaje de los nue·os ocupantes de predios abandonados íorzadamente en los que se adelantan proyectos agroindustriales, íorestales y mineros, entre otros -·arios de ellos asociados a los Proyectos Producti·os por la Paz que se describen mas adelante-, intentaran beneFciarse de Fguras como el le·antamiento de la prohibición de adquirir mas de una Uni- dad Agrícola lamiliar, los contratos de uso de la Ley de Víctimas 58 y 5¯ De largo plazo, como la palma y los íorestales y semipermanentes como la soya y el maíz. 58 Mediante estos contratos el ocupante que desarrolle proyectos agroindustriales producti·os` en el predio que reclama la ·íctima podra continuar apro·echandolo siempre que demuestre su buena íe exenta de culpa. Ln caso contrario, éste sera entre- gado por la Unidad de Restitución a un tercero para que siga desarrollando el proyecto a cambio de que le entregue lo producido con el Fn de destinarlo a programas de repa- ración colecti·a ,Artículo 99 de la Ley 1448 de 2011,. ¯¯ CAPÍ1ULO 2 el derecho de superFcie 59 y el ·uelo íorestal, para ·alidar y legalizar su ocupación. Para ello, algunos alegaran la buena íe y otros, proba- blemente, acudieran al uso de la íuerza y la ·iolencia o de practicas íraudulentas para impedir la restitución o para establecer alianzas con las ·íctimas sin garantizar la simetría entre las partes y la equitati·a distribución de sus rendimientos 60 . Por su parte, a los compradores masi·os de tierras a los que se aludió anteriormente, tienen la obligación legal y ética de acreditar no sólo su buena íe y demostrar que ésta se encuentra exenta de culpa, particularmente cuando éstas se localizan en zonas que es de público conocimiento la ocurrencia de desplazamientos, masacres y otras ·iolaciones de derechos humanos. Al eíecto, como se senala en el iníorme presentado por los Representantes ponentes del proyecto de Ley de Víctimas: |L|s muy diíícil presumir buena íe ,., en las regiones de desplaza- miento`, y, es contradictorio alegar el principio de buena íe en los e·en- tos en que se adquirieron tierras muy baratas a una población que huye bajo el impacto del terror, o a sus usurpadores`, sin perjuicio de que mediante cadenas de testaíerrato o de otros artilugios se intente ocultar su origen espurio ,Camara, 2010,. Así las cosas, la aplicación de manera desarticulada de la Ley de Víctimas y de otras iniciati·as legislati·as ,ley de desarrollo rural y reíorma del Código Minero, entre otras, en las que se pri·ilegian los proyectos de las locomotoras para el crecimiento económico, sin es- clarecer la licitud, legitimidad y legalidad de sus orígenes - propieta- rios y socios y recursos-, puede ser el golpe mortal al compromiso de saldar la deuda con las ·íctimas y puede constituirse en el mecanismo para legitimar y legalizar el andamiaje de despojo y legalización ideado y expandido por la Casa Castano y sus aliados. 59 Ll elemento común de estas dos modalidades es que el dueno del proyecto no es el propietario del predio. 60 Al respecto, es pertinente recordar que desde agosto de 2011 han sido asesinados mas de una docena de personas que reclamaban sus tierras. Mauricio Builes © ¯9 CAPÍ1ULO III LAS RLVLLACIONLS SOBRL LL ABANDONO \ DLSPOJO DL 1ILRRAS Las estructuras de las ACCU de la Casa Castano descritas en el capí- tulo primero, hicieron presencia en las regiones del Uraba cordobés, chocoano y antioqueno, en el Caribe y en Norte de Santander, las que, por sus condiciones geograFcas y sociales, poseían un gran potencial de explotación económica -lícita e ilícita-, causa de los íenómenos de desplazamiento masi·o de sus habitantes y del abandono y despojo de sus inmuebles rurales, y del incremento signiFcati·o en la concen- tración de la tenencia y usos de la tierra y de los recursos naturales. A continuación, se expone las re·elaciones de los desmo·ilizados selec- cionados de las ACCU -que actualmente se encuentran postulados a la Ley de Justicia y Paz-, así como de otros de sus integrantes al esclarecimiento de la ·erdad sobre el despojo y abandono íorzado de tierras. Para empezar, debe decirse que en las ·ersiones libres a las que se tu·o acceso no son muy signiFcati·as las contribuciones a la ·er- dad, en relación con la identiFcación de los autores intelectuales de la usurpación de tierras y territorios de las ·íctimas y de baldíos de la Nación así como de los usuíructuarios directos e indirectos del plan criminal contra los pobladores de las regiones de dominio paramilitar. Lo anterior porque en la mayoría de los casos, los ·ersionados des- mienten o des·alorizan las denuncias de las ·íctimas y los cargos con- tra ellos, o los grupos que comandaban relati·as al desplazamiento y a la apropiación, ocupación ilegal o despojo de las tierras abandonadas. De esta manera, como senala la Comisión Colombiana de Justicia: |.| Ln sus coníesiones los paramilitares han re·elado muy poco sobre la estrategia del desplazamiento íorzado como una íorma de 80 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS usurpar las tierras, tampoco han reconocido completa y adecuada- mente su responsabilidad y no han brindado iníormación que permi- ta conocer la cadena de testaíerrato coníormada para la usurpación de los bienes ,CCJ, 2010,. A pesar de esta constante, en las ·ersiones libres analizadas es po- sible encontrar elementos y reíerencias que permiten relacionar los objeti·os de la Casa Catano -esto es, recuperar y consolidar territo- rios y neutralizar` poblaciones senaladas como bases de apoyo de las guerrillas-, con las estrategias criminales empleadas para aduenarse de tierras, territorios y recursos naturales en beneFcio de la Casa Cas- tano, sus integrantes y sus aliados miembros de la quíntuple alianza delicti·a. Las ·ersiones libres, sumadas a los testimonios rendidos por in- tegrantes de las estructuras paramilitares en los procesos judiciales contra ser·idores públicos y las re·elaciones en entre·istas y otros escenarios, contribuyen a mostrar elementos de la lógica y del patrón del destierro - abandono, usurpación, concentración de tierras, terri- torios y recursos naturales-. Las ·ersiones libres también dan cuenta del voav. o¡eravai de la Casa Castano en Córdoba y Uraba y en casi todo el país, ampliamente contextualizado en las sentencias de jus- ticia y paz y en las de la parapolítica`, en particular lo relacionado con las múltiples íuentes de Fnanciamiento así como de las prolijas destinaciones de las ingentes utilidades obtenidas principalmente del narcotraFco y del erario público, las que superaban con creces las demandas de la guerra, y que íueron cardinales a los íenómenos de la parapolítica`, la paraeconomía`, la parainstitucionalidad`, la pa- raeconomía`, el paraempresarismo`, el paranarcotraFco` y el nar- coparamilitarismo`. Ln seguida se describira el aporte de los ·ersionados a la ·erdad so- bre el patrón criminal de apropiación de tierras y territorios y de su le- galización, así como los eíectos de la extradición en el esclarecimiento de la magnitud de las ·iolaciones perpetradas contra los propietarios, poseedores y ocupantes de terrenos en las zonas que controlaron, y 81 CAPÍ1ULO 3 en la realización del derecho a la ·erdad de las ·íctimas, como com- ponentes del derecho a la reparación integral. Con este Fn, se tendran en cuenta en primer lugar las ·ersiones de los ex comandantes y otros miembros que hicieron parte de las es- tructuras seleccionadas. Ahora bien, bajo el entendido de que las ·er- siones son piezas judiciales y que en esa medida, pese a lo ordenado en la Ley 9¯5 de 2005 en torno al deber de los postulados de re·elar la ·erdad, son insuFcientes en tanto que -en muchas ocasiones- los relatos son parciales o sesgados por múltiples razones, tales como no auto incriminarse, mantener alianzas y,o no exponerse ante el poderío de socios y cómplices, desmo·ilizados o no 61 , el analisis que se presenta a lo largo de este texto no se limita exclusi·amente a lo declarado en las ·ersiones libres. Por esa razón, se tu·ieron en cuenta otras íuentes y se realizaron entre·istas con ·íctimas y con postulados en Colombia y en Lstados Unidos ,Sal·atore Mancuso, lernan Giraldo y L·er Veloza,, y con sus abogados, así como con ser·idores públicos. Posteriormente, se hace un bre·e recuento de la entrega de bienes para la reparación por parte de los postulados. De manera especial se comenta la entrega de bienes por parte de Mancuso que ademas de arrojar luces sobre las diFcultades en la materia re·elan los artilu- gios para esconder las tierras. Para Fnalizar este capítulo, con base en lo anterior, se senalan algunos aspectos que ameritan ser tenidos en cuenta en la aplicación de la Ley de Víctimas. 3" $%-*%* 4 5(2(6+$+%&+1* /(. /(*,171 4 %5%2/121 /( '+(&&%* Si bien es cierto que las ·ersiones libres y testimonios de integran- tes de las AUC, desmo·ilizados o no, dentro y íuera del proceso de Justicia y Paz, han sido decisi·as en el destape de la parapolítica` y la parainstitucionalidad`, ci·il y militar, no sucede lo mismo con la 61 Varios de los postulados, entre ellos Mancuso, se han reíerido al temor de contar todo lo que saben por las amenazas y agresiones sobre sus íamiliares y allegados. 82 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS re·elación de la ·erdad sobre el despojo y expolio de tierras por parte de agentes legales ,paraeconomía` y paraempresarismo`,, y mucho menos, por los ilegales ,narcoparas` y narcotraFcantes,, en parte por el reiterado ocultamiento del crimen de desplazamiento y su relación con la apropiación y atesoramiento de tierras y territorios y recursos naturales. A ello se suman las inconsistencias entre las ·ersiones de los mismos postulados a lo largo del proceso de Justicia y Paz, y las diíerencias en la ·isión del despojo y ocupación de tierras y en su justiFcación, según se trate de comandantes políticos o militares, y las extradiciones de los principales ex comandantes en menoscabo del derecho a la ·erdad. No obstante, al conírontar ·ersiones y otras íuentes, es posible identiFcar así sea de manera somera, algunos de los agentes determinadores 62 y cómplices, así como algunos de los ía- ·orecidos del expolio y de la ocupación arbitraria y ·iolenta de tierras y territorios. Lstos son los temas que se abordan a continuación. MKJK +%(.%1&1,-%(&$1 -% /$1 P-"1&.%-1 Ls común que en las primeras ·ersiones los postulados justiFca- ran el accionar de las estructuras paramilitares en la lucha contra las guerrillas y que se negaran a exponer sobre la existencia de intereses económicos de sus miembros y aliados en las tierras y territorios, sin embargo, a lo largo del proceso de Justicia y Paz esta postura tiende a modiFcarse. Algunos ejemplos de ello son las ·ersiones de Rendón lerrera y Veloza García. Ll primero aFrmó en ·arias ocasiones que su grupo, el BLC, no tenía intereses económicos en la región del Uraba chocoano-antioqueno puesto que las moti·aciones eran estric- tamente sociales` y por tal moti·o su interés |.| no eran ni tierras para desarrollar grandes proyectos agroindustriales, ni regiones para poder explotar oro, nada de esas cosas, ningún interés personal o estratégico como económico` ,Rendón, 200¯,. Para reaFrmar estas 62 Según la Corte Suprema de Justicia: Ll determinador sabe que esta lle·ando al deter- minado a la realización de una conducta punible y ésta actúa con conciencia de lo que esta haciendo y de la determinación` ,CSJ, sentencia de 3 de junio de 1983, Rad.1983, citada en el íallo de condena contra Sal·ador Arana Sus ,CSJ, 2009,. 83 CAPÍ1ULO 3 declaraciones, el ex comandante recordó que su grupo operaba con independencia de la Casa Castano, de tal manera que sus lineamientos correspondían a los citados principios de libertad, democracia, equi- dad y seguridad` del Proyecto de Alternati·idad Social ,PASO,, com- ponente del mo·imiento Por un Uraba Grande, Unida y en Paz` ,Ver: PPP de Ll Aleman`,. Ln ese sentido, Ll Aleman` maniíestó: |.| que se in·estigue si aquí hubo desplazamiento y allí a unas ter- ceras personas apro·echaron y compraron tierras, que se in·estigue quiénes son, no tengo yo un centímetro de tierra en esa zona, tan sólo entregué mil hectareas de tierra a esos campesinos ,Rendón, 200¯-d,. Lo aFrmado no se a·iene a lo también re·elado por Rendón le- rrera en el sentido de que compró predios en el golío de Uraba para responder a intereses económicos de Vicente Castano Gil ,Rendón, 2010 y 200¯-d, y propios. 1ampoco con las re·elaciones sobre la im- plementación de proyectos producti·os liderados por él y su herma- no, ni con las in·estigaciones que se adelantan en su contra por el des- pojo de tierras en la región de 1ulapas ,Ver: PPP de Ll Aleman` y 1ulapas: Despojo en zonas de Ll Aleman`,, ni con las denuncias de íorzar a los miembros de la Cooperati·a de 1rabajadores Agrarios de Blanquicet y Macondo para que ·endieran sus predios La Lsperanza y Nue·a Vida a alias Napo`, quien supuestamente íue el administra- dor de la Fnca Napoles de Pablo Lscobar 63 . Similar situación se presenta con alias ll`, ex comandante del los Bloques Bananero y Calima. Ln las primeras ·ersiones su explica- ción sobre el accionar de las ACCU se reíería a la lógica del connicto armado y a la necesidad de combatir la sub·ersión ,Veloza, 200¯-a,. Por tal moti·o, cuando la liscalía le indagaba sobre casos en los que las ·íctimas denunciaban el despojo y la apropiación de sus tierras, 63 Lste caso ha sido ampliamente documentado por la Comisión Interecleresial de Jus- ticia y Paz, y por la Comisión Colombiana de Juristas, que representa a los integrantes de la Cooperati·a de 1rabajadores Agrarios ante instancias judiciales nacionales y ante la Corte Interamericana de Derechos lumanos. Ver: CCJ, 2011. 84 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Veloza García respondía que desconocía los casos y que tal no era una política criminal de su grupo, por lo cual no asumía responsabi- lidad por orden de mando`. Posteriormente, en audiencias de ·er- sión libre y en los procesos ante la Corte Suprema de Justicia, antes y después de su extradición, el ex comandante militar ha de·elado los intereses de los socios y aliados de las ACCU, en la apropiación de tie- rras principalmente en la región de Uraba, donde según él se íacilitaba el despojo y la ocupación por la precariedad en la tenencia de la tierra y la dilación del Lstado para titular territorios colecti·os a los grupos étnicos ,Veloza, 2011,. MKLK R-10/$'$=&-%,. -6-(,. (./$,-"$/ Preponderantemente en las ·ersiones libres de la mayoría de los postulados a la Ley de Justicia y Paz de las ACCU, se justiFcan los desplazamientos como una consecuencia ine·itable de los enírenta- mientos propios del connicto armado. Ln especial, Rendón lerrera, Cobos 1éllez y Veloza García, sostu·ieron inicialmente que el des- plazamiento íorzado de millones de colombianos íue un eíecto cola- teral del combate a la insurgencia y a los que consideraban sus bases sociales en las distintas regiones del país. Lste último en las primeras audiencias de ·ersión libre, reconoció que las tierras y demas bienes quedaban abandonados como eíecto del éxodo generado por los gru- pos paramilitares: |.| cuando nos preguntaron que ,si, nosotros lideramos el desplaza- miento desde luego que sí lo generamos de muchas maneras, lo genera- mos porque |.| quien queda en medio de los combates es el campesino ,el que, |.| abandonan ,sic, sus propiedades y todas sus cosas ,Veloza, 200¯-h,. Sin embargo, negaba la intención de apoderarse de las tierras, así: |.| si ordenamos que tenían que salir obligadamente, le ordenamos ,sic, que tenían que desplazarse pero no lo ordenamos por quedarnos con las tierras de ellos, ni por sacarlos y apropiarnos de las cosechas, ,sino, por tratar de proteger la población en ese momento ya que los combates eran muy intensos y después estas poblaciones regresaron |.| ,Veloza, 2008-ll,. 85 CAPÍ1ULO 3 No obstante, en ·ersiones posteriores admitió que sí existió el des- tierro a ía·or de los despojadores legales`, entendiendo dentro de estos a miembros de los sectores que los promo·ieron, constituyeron y organizaron, y a los que los apoyaron militar, Fnanciera y política- mente. MKMK X&%-1 1-#\% 0./I,&(.1 . =&/&,$"-1 De las ·ersiones y declaraciones de los postulados a Ley 9¯5 de 2005, se e·idencia que existen diíerencias entre los que íungieron como comandantes políticos de los encargados de las labores milita- res en la re·elación de las ·erdaderas causas del desplazamiento, y de su relación con el despojo y la ocupación ilegal de tierras y territorios. Al respecto, según Mancuso, pese a la existencia de la Coníedera- ción de lederaciones, los comandantes en las distintas estructuras de las ACCU ejercían los siguientes roles: Ll comandante político |.| era el encargado de mantener la orien- tación política de los diíerentes integrantes del bloque o írente` |.| y debía tener |.| cierta trayectoria en el manejo militar, político y social, manejo de masas y poder de con·ocatoria`, el comandante militar tenía a su cargo la planeación y el mando de las operaciones` y era adiestra- do en las escuelas de capacitación militar y política, y al comandante de íinanzas le correspondía |.| recoger y suministrar el dinero necesario para el íuncionamiento de cada bloque o írente`, para lo cual debía |.| gra·ar las economías de las regiones y garantizar el ílujo de recursos` ,Mancuso, 200¯,. MKMKJK b$ P&1&)% 7- /.1 /I7-"-1 0./I,&(.1 Para Mancuso, la lucha contra la sub·ersión, uniíormada o contra |.| sus bases sociales, les permitió a ganaderos y hacendados de las zonas de dominio de los bloques de la Casa Castano, regresar y recu- perar` las propiedades que habían abandonado por causa del accionar de las guerrillas y de su inFltración en el INCORA` ,íbiaev,. Ln la entre·ista realizada en Lstados Unidos, el ex comandante se reFrió extensamente a los connictos de tierras en Colombia, ·arios de ellos, según sus palabras, deri·ados de políticas estatales erraticas. Ln- tre estas mencionó la entrega de tierras de reíorma agraria a campesi- 86 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS nos, sin brindarles recursos para ponerlas a producir y la creación del PPN Paramillo desde un escritorio en Bogota`, desconociendo los derechos de quienes tenían propiedades y mejoras. Pero, a su juicio, los mayores responsables de los connictos sobre tierras y de lo que él denomina el segundo gran despojo de la época moderna` son las guerrillas nacidas de la alianza entre liberales y comunistas` las que a su juicio utilizaron diíerentes modalidades, entre ellas |.| permear a los mo·imientos agrarios para organizar un Lstado de íacto y apo- derarse de las tierras sacando a sus propietarios y asentando en ellas a sus bases sociales` ,Mancuso, 2011, con el apoyo del INCORA, enti- dad, que en palabras de él era manejada` por los grupos sub·ersi·os ,íbíaev,. Como ejemplo mencionó la in·asión por parte del LPL del predio Costa de Oro, al que se hace reíerencia mas adelante. Según 1riple Cero`, precisamente |.| ese segundo despojo íue lo que nos tocó ·i·ir, padecer y combatir a las autodeíensas con el apoyo del Lstado` 64 ,íbiaev,. De acuerdo con Mancuso, una ·ez liberados` los territorios se llamaba a los duenos` de las tierras que habían sido desplazados por la insurgencia para que decidieran si querían o no regresar ,Mancuso, 2011,. Algunos ·endieron ·oluntariamente, otros las recuperaron y otros apro·echaron para comprar a precios deprimidos` para be- neFciarse de los proyectos que impulsaban las ACCU tendientes a recuperar económicamente los territorios, superando el atraso y el ol·ido` al que habían sido condenados por el accionar de las gue- rrillas` ,íbíaev,. Con base en lo expuesto, alias Ll Mono` aFrma que no todos los reclamantes de tierras son ·erdaderamente ·íctimas, puesto que la mayoría ·endía ·oluntariamente. Sin perjuicio de sus aFrmaciones para justiFcar la recuperación` del segundo despojo y negar la apropiación ilegítima e ilegal de tierras, Mancuso, a tra·és de sus abogados -en la diligencia de restitución de la hacienda Costa de Oro-, pidió perdón` y admitió su responsabilidad por el des- plazamiento, intimidación y despojo de las parcelas. Asímismo, ha 64 Como el primer gran despojo que no tu·o solución`, se reFere al periodo de La Violencia` en los anos cincuenta del siglo †† ,Mancuso, 2011,. 8¯ CAPÍ1ULO 3 reconocido que en sus inicios en la Casa Castano adquirió predios en la zona de 1ulapas para montar un campamento paramilitar llamado La 24` 65 , y que |.| Guido Vargas íue un muchacho comisionista de la región que me presentaron los comandantes Castano para que íuese el encargado de comprar las tierras en la zona` 66 , las que se |.| compraban a menosprecio por ser terrenos localizados en zo- nas deprimidas por causa de la guerrilla` 6¯ ,Mancuso, 2011,. Otras de las re·elaciones de 1riple Cero` se relacionan con el per- íeccionamiento de la Casa Castano de las practicas de inFltración de entidades que utilizan las guerrillas`. Ln sus palabras, la estrategia consistía en: |.| iníiltrar a la liscalía, iníiltrar al Ljército, iníiltrar a la Policía, iníiltrar al DAS 68 , iníiltrar al alto gobierno, a los gobiernos departamen- tales, a los gobiernos locales, a las juntas directi·as de las empresas` ,Mancuso, 200¯,. De esta estrategia no escaparon las entidades con competencia en materia de derechos de propiedad sobre la tierra ,Incoder y OFcinas de Notariado, Catastro y Registro, y las que Fnancian acti·idades en el campo ,tales como las alcaldías, las corporaciones ambientales, el Banco Agrario, el Instituto Colombiano Agropecuario y linagro,. Ademas de la captura de instituciones para el despojo y su lega- lización, Sa·atore Mancuso se ha reíerido al uso del testaíerrato` o la simulación 69 , comúnmente empleado por las élites económi- cas con Fnes de e·adir impuestos, para ocultar la identidad de los 65 Veloza narró que los nombres de los predios obedecían a las írecuencias de radio y que de igual manera se denominaba a los encargados de administrarlas ,Veloza, 2011,. 66 Re·ista Cambio: Los cheques chimbos` de Mancuso`. 6¯ Lntre los predios sobre los que Mancuso ha reconocido su responsabilidad en el des- pojo y las ·entas íorzadas se encuentran las Fncas Ll Perro o Santa Llena, Bola de lilo, Ll Deseo, Manantiales, Ll 1esoro No. 3, La Ilusión, Las Gardenias y Nue·a Australia. 68 La ·inculación de las AUC con el DAS se hizo e·idente con la condena de su ex di- rector Jorge Noguera y quien íue gerente regional de la primera campana presidencial de Uribe. Ver: Semana.com, La conexión DAS-AUC`. 69 Ll testaíerrato consiste en prestar el nombre para adquirir bienes con dineros pro·e- nientes de los delitos de narcotraFco, secuestro extorsi·o y extorsión ,artículo 326 de la Ley 599 de 2000,. 88 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS despojadores y de los predios ,Mancuso, 2011, ¯0 , tema que se aborda en el capítulo cuarto. Para el ideólogo del modelo económico de la Casa Castano, alias \arumo`, las tierras eran parte del Botín de Guerra`, descrito así por alias Pedro Bonito`: |.| cuando ya se entra a una zona y sé que x` persona es guerrillero y tiene una Fnca, las propiedades, todo lo que yo le pueda descubrir a ese senor hacen parte |.| de los acti·os del írente o del comandante que maneja la zona` ,lasbún, 2008-d,. Ln este sentido, lasbún, a quien Vicente Castano le encomendó la retoma de Uraba`, ha narrado ·arios casos en los que se apoderaron de las tierras de personas asesinadas y amenazadas a las que acusaban de ser guerrilleras, las que terminaron en poder de alias Ll Proíe`. Por ·ía de ejemplo, alias Pedro Bonito` contó que después |.| de que íue dado de baja el senor Miguel Penaranda, el senor Vicente Castano toma posesión de las tierras` ,lasbún, 2008-d,. 1ambién se reFrió al despojo de una Fnca de cuatrocientas a quinientas hectareas en Blanquicet, en la que |.| don Vicente hizo una casa alla, cam- pesina muy bonita. Siempre que iba donde nosotros al sector de la Panamericana, siempre llegaba a esa Fnca` ,íbíaev,. Pero, igualmente, lasbún se apropió de tierras ,Ver: Predios apropiados por lasbún en Uraba,. Ln comunicación dirigida al presidente Juan Manuel Santos, sus- crita por Rendón lerrera, lasbún, Cobos, Arnubio 1riana Botalón y Rodrigo Pérez Álzate se in·ita al Gobierno a sentar en el banquillo no sólo a la punta del iceberg del íenómeno paramilitar`: las estructu- ras armadas`, sino también de quienes participaron de la parapolí- tica`, la paraeconomía` y la parainstitucionalidad``, entre ellos: |.| políticos, empresarios, íuncionarios de alto ni·el, grandes contratis- ¯0 Ll artículo 1¯66 del Código Ci·il consagra la acción de simulación, Fgura que se asimila a una mentira concertada` ,Ver: Rocha, De la prueba en derecho`, Bogota 196¯, para ocultar el objeto, la causa o las personas ,testaíerros o simuladores, que inter·ienen en un negocio o en una empresa, los que pueden tener Fnes lícitos o ser·ir como empresas de íachada` para cometer actuaciones delicti·as ,artículos 44 de la Ley 365 de 199¯, 3 de la Ley 333 de 1996 y 2 de la Ley 365 de 199¯,. 89 CAPÍ1ULO 3 tas, in·ersionistas extranjeros y miembros de la luerza Pública` ,Ren- dón y otros, 2011,. A juicio de los suscriptores de la carta, sólo así se podra conocer la ·erdad ·erdadera` sobre el |.| acaparamiento de la tierra, la usurpación y concentración de la propiedad agraria, la ·iolencia y desplazamiento en el campo, y la consiguiente injusticia social contra el campesino` ,íbiaev,. Lsta postura se asimila a la ·isión de los comandantes militares so- bre la apropiación de tierras que se describe a continuación. MKMKLK b$ P&1&)% 7- /.1 (.=$%7$%,-1 =&/&,$"-1 Para algunos de los comandantes militares detras del ·aciamiento y el control de territorios, subyacían intereses económicos de los socios de la quíntuple alianza que caracterizó la expansión del íenómeno paramilitar. Sobre este tema ·arios de los postulados entre·istados maniFestan la disyunti·a en la que se encuentran: no coníesar y con- tar lo que saben y perder la pena alternati·a de la Ley 9¯5 y la opor- tunidad de reincorporase a la sociedad o re·elar y perder su ·ida o la de íamiliares por las retaliaciones de autores intelectuales y del apo- deramiento de tierras y territorios y de los que se beneFciaron con el despoblamiento y destierro producido por el accionar de la empresa paramilitar. Sin embargo, ·arios de los ex jeíes militares, entre ellos, alias ll` y Alcides Mattos 1abares, alias Ll Samario`, se han atre·ido a ha- blar y en sus ·ersiones y declaraciones coinciden en senalar que en su cauti·erio han comprendido que detras del discurso de combatir a las guerrillas existía un interés económico en los territorios y en los recursos naturales, por parte de los comandantes políticos de la Casa Castano y de sus aliados. Alias ll, que adquirió el cargo de comandante luego de escalar ·arias posiciones militares dentro de la estructura paramilitar, ·incula los desplazamientos y demas ·iolaciones de derechos humanos e in- íracciones al Derecho Internacional lumanitario con la recuperación y estabilización económica de las regiones, lo que a su ·ez permitía la apropiación y acumulación de tierras y territorios por parte de los paramilitares y de sus socios. 90 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Ln este sentido, Veloza maniíestó que la ·erdadera misión del de- nominado Bloque Bananero era recuperar el cien por ciento de la economía de la región del Uraba, la que para el líder de la expansión económica de la Casa Castano, alias Ll Proíe` era considerada como la punta de oro` de Latinoamérica debido a su gran potencial estra- tégico por constituir una zona rica en recursos naturales y tierras, y que por tener acceso a los dos mares -`se sacaban drogas y se entra- ban armas`-, por comprender el límite con Panama y por la expecta- ti·a de la construcción de la ·ía La Panamericana ,Veloza, 2011,. Al respecto Veloza García declaró que: |.| Vicente ha dicho |.| que la carretera con Panama algún día tie- ne que ser un hecho y ·a a pasar por ahí. Lntonces por eso el objeti·o de montar ese proyecto ahí, ya que si se montaba la Panamericana |.| quedaría muy íacil para exportar y a muy bajo costo exportar ese aceite y esa manteca hacia el exterior ,Veloza, 2008-o,. Agrega alias ll` que Vicente Castano impulsó el proyecto pal- micultor en |.| la época en que el gobernador de Antioquia era Ál·aro Uribe Vélez, quien anos después como presidente de la Repú- blica promo·ió la construcción de la Panamericana` ,íbíaev,. De igual íorma, narra que el ingreso del Bloque Calima -Fnanciado inicialmente por harineros y azucareros del Valle` y luego con re- cursos de narcotraFcantes` ,íbiaev, y ·er también CSJ, 2011-k Juan Carlos Martínez Sinisterra,-, tenía como objeti·o limpiar` la zona de la Ley Paez para que algunos empresarios y otros actores utilizaran las ·entajas tributarias ,Veloza, 2011,. Dicha estrategia se adelantó con el conocimiento de políticos de la región, entre ellos el ex gober- nador del Cauca Juan José Chaux, in·estigado por la parapolítica ¯1 , a quien ·incula con su extradición. Veloza aFrma que: |.| si nosotros ,los desmo·ilizados, no con- tamos la ·erdad, la guerra se ·a a seguir repitiendo en el tiempo`, y que sólo |.| con las denuncias de los ex comandantes es posible ¯1 1eraaa.bierta: A juicio ex gobernador Juan José Chaux por parapol‡tica``. 91 CAPÍ1ULO 3 determinar quiénes tienen las tierras` ,Veloza, 2011,. A la pregunta: ,Ln manos de quién estan las tierras ahora·`. Responde: De los mismos empresarios y bananeros que con sangre han logrado mantener su emporio económico en la región de Uraba` ,Veloza, 2009- b, y |.| de los promotores de la consolidación y expansión de la Casa Castano` ,Veloza, 2011,. Ln esa línea, maniFesta que el |.| combustible de la guerra no íue sólo el narcotraíico sino tam- bién la economía lícita`, pues era e·idente que |.| había empresas` ,que, estaban detras de la guerra` ,íbiaev,. De esta manera, tal y como se anunció arriba, en el transcurso del proceso de la Ley 9¯5 de 2005, Veloza ha cambiado su posición y ha reconocido la intencionalidad de los miembros de la Casa Castano ampliada de quedarse con las tierras de las personas íorzadas a huir, y se ha reíerido al empleo de medios coerciti·os tendientes a quebran- tar la ·oluntad de los legítimos pobladores de las zonas de expansión de las ACCU, con el Fn de obligarlos a ·ender sus propiedades, po- sesiones y tenencias por precios irrisorios en beneFcio de agentes legales e ilegales: |.| si hay presión para comprar esas tierras y hay presión para que los campesinos abandonaran esas tierras ¯2 , entonces sí hay una presión por medio de las armas para poder que |.| muchas personas compra- ran tierras a bajo precio ,Veloza, 200¯-h,. Mas aún, el ex comandante del BB senaló que: |.| los obligamos a ·ender las cosas baratas, sí los obligamos a aban- donar sus tierras, los obligamos a abandonar su entorno íamiliar y su modo de obrar, el habitat normal de ellos era el campo |.| para mi con- cepto íueron compradas bajo presión y íueron compradas no a ·oluntad de los campesinos sino por necesidad ,sic, ,íbiaev,. ¯2 Ln particular se hace reíerencia a tierras ubicadas en la zona de San Pedro de Uraba, Mulatos, San Onoíre, San Vicente y La Sinagoga. 92 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Ll apro·echamiento del estado de indeíensión de los legítimos titu- lares, es corroborado así por Veloza García: |.| los hicimos desplazar, porque no les permitimos regresar a las zonas, si llegaba alguna persona entonces yo les decía les pago esa tierra a cincuenta mil o a cien mil pesos la hectarea porque ese es el ·alor si quieren, si no la quieren perder toda, la gente íirmaba la escritura |.| ,Veloza, 2008-d,. Similar postura han tenido otros comandantes, entre ellos, alias Ll Samario` ex jeíe del lrente Juan Andrés Ál·arez del BN, quien ha aFrmado que el ·erdadero objeti·o de la masacre en la parcelación de Ll Prado, en la Jagua de Ibirico, departamento del Cesar, no íue eliminar la amenaza guerrillera -como lo planteó lugues Rodríguez, alias Comandante Barbi`, al ordenar el desplazamiento de los cam- pesinos- sino apropiarse de tierras llenas de carbón` ¯3 . Al Comandante Barbi`, terrateniente cesariense amigo de Jorge 40` se le ·incula al ingreso de los paramilitares en ese departamento, así como al despojo de tierras que habían sido adjudicadas por el Ls- tado a campesinos y desplazados, en las parcelaciones de Mechoacan y Ll Prado, apro·echando su estrecha relación con íuncionarios del INCODLR, entidad a la que le decían lincoder` ¯4 . Se dice que la empresa In·ersiones Rodríguez luentes de propiedad de su íamilia es propietaria de cerca de ·eintisiete mil hectareas localizadas en la mina Ll Descanso concesionada a la multinacional Drummond ¯5 . Rodrí- guez se encuentra libre en Lstados Unidos, luego de un proceso de negociación con el Gobierno de ese país por delitos de narcotraFco y coníormación de redes de la·ado de acti·os. Los citados comandantes no son los únicos que se han reíerido al despojo por parte de los miembros y socios de la Casa Castano. ¯3 Lntre·istas en la carcel de Valledupar y de VerdadAbierta: La ·ersión de Samario sobre la Drummond y los paras`. ¯4 Lntre·ista realizada a ·arios de los postulados de Justicia y Paz en la carcel de Va- lledupar, con postulados recluidos en carceles de Barranquilla, Montería y Valledupar. ¯5 Ll 1iempo: 1ercera parte de mina de carbón mas grande de Latinoamérica es de un paramilitar`. 93 CAPÍ1ULO 3 1ambién alias Doble Cero`, antes de su asesinato, contó cómo, a diíerencia de las compras de las mejores tierras realizadas por nar- cotraFcantes en la década de los ochenta del siglo ††, en el Valle del Cauca, en los ·alles del Magdalena y del Sinú y en regiones del Litoral Caribe, donde se pagaron precios innados` deFnidos por elites ansiosas de desligarse del campo` ,Ci·ico, 2009,, los aliados en el narcotraFco: paramilitares maFosos y |.| algunos miembros inescrupulosos de las AUC y de sus allegados` adquirieron tierras baratas` de los desplazados ,íbíaev,. Ln esa entre·ista alias Doble Cero` aFrmó que: |.| en el Norte del Valle |.| hay municipios completos que son de una persona o dos`, entre ellas mencionó a Diego Montoya y lernando Gómez, alias Rasguno`, de quienes se quedaron con las tierras de sus pobladores a los que íorzaron a desplazarse o a ·ender ,Ci·ico, 2009,. MKNK R-,-"=&%$7."-1 A :1:6":(,:$"&.1 7-/ 7-10.9. A $O$%7.%. 6."'$7. Ln este aparte se comentan las ·ersiones relacionadas con quie- nes íueron los despojadores -determinadores o autores intelectua- les-, los cómplices y los que se beneFciaron del abandono íorzado de tierras deri·ado del desplazamiento y otras ·iolaciones de derechos humanos perpetradas por los grupos paramilitares. MKNKJK 8($0$"$=&-%,. 7- ,&-""$1 0." =&-=O".1 P&1&O/-1 7- /$1 8S; A partir del rango de patrulleros` y mandos bajos` que ocupa- ban la mayor parte de los desmo·ilizados-postulados, de una parte, y del reducido número de bienes inmuebles entregados al londo de Reparación de Víctimas, de la otra -capítulo cuarto-, pareciera que los acumuladores de las tierras íueron los comandantes y miembros del Lstado Mayor de las AUC consolidadas a partir de la Casa Casta- no, ya íuera para su propio pro·echo o para engrosar las arcas de la guerra. No obstante, la identiFcación de los bienes, en especial de los inmuebles rurales de los integrantes directos del paramilitarismo -en- 94 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS tendiendo por estos de manera restricti·a a los que se desmo·ilizaron y se postularon a la Ley 9¯5 de 2005, sin perjuicio de que se tratara de paramilitares en el negocio de las drogas ,paranarcos`, o de los Senores de la Droga` que engrosaron sus Flas ,narcoparas`, ¯6 -, se limita a los que han oírecido o entregado bienes al londo de Repara- ción de Víctimas y a aquellos otros sobre los que se surten procesos de extinción de dominio por narcotraFco y la·ado de acti·os o a los que han mencionado en algunas declaraciones y ·ersiones libres ¯¯ . Veloza García y Rendón lerrera recurrentemente se han reíerido a Vicente Castano, alias Ll Proíe` o \arumo`, como el gran acapara- dor de tierras en la región de Uraba y en otras zonas del país. Ll pri- mero contó sobre la obsesión de Castano de apoderarse de terrenos en los llanos Orientales con el Fn de |.| ocupar la mayor extensión territorial para su deseado culti·o de palma`. Ln el proceso contra el ex gobernador del Gua·iare senaló: |.| Pachito Casanare` era el encargado de comprar tierras en Vichada y Casanare |.| Pachito` era empleado del senor López Cada·id ,CSJ, 2011 - Oscar de Jesús López Cada·id, ex gobernador del departamento del Gua·iare,. Ll ex gobernador del Gua·iare íue condenado por asociarse con Vicente Castano, líder del Bloque Centauros, con Manuel de Jesús Pi- raban, alias Jorge Pirata`, ex comandante del Bloque independiente de los Llanos Orientales, y por ser socio de Oli·ero Guerrero Castillo, alias Cuchillo`, creador del LRPAC y del hermano de Ll Aleman, ¯6 Lntre los primeros se encuentran Carlos Mario Jiménez, alias Macaco`, y alias Ju- lian Bolí·ar`, ex comandantes del Bloque Central Bolí·ar, y los hermanos Mejía Múne- ra, desmo·ilizados del Bloque Central Bolí·ar y el lrente Vencedores de Arauca, res- pecti·amente. Lntre los segundos Diego Montoya, alias Don Diego`, jeíe del Cartel del Norte del Valle, y lernando Gómez Bustamante, alias Rasguno`, Fnanciadores del Bloque Calima y de campanas políticas ,Ver: CSJ, 2011-k - Juan Carlos Martínez Sinisterra,, y grandes concentradores de tierras. ¯¯ Lste es el caso, por ejemplo, de los bienes anunciados en la comunicación dirigida por lrancisco Ja·ier Zuluaga Lindo, alias Gordolindo` -narcotraFcante que se des- mo·ilizó con el Bloque PacíFco-, a Lduardo Pizarro, en su calidad de presidente de la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación, en íebrero de 200¯ ,Ln: Se le incautaron 110 propiedades con Fnes de extinción, a·aluadas en ·einte mil millones de pesos`. Ln: VerdadAbierta: A juicio ex gobernador., Op. Cit.,. 95 CAPÍ1ULO 3 lernando Rendón La·erde, alias Pipe` o Loratuerta`, en la empre- sa denominada Lxploración y Lxportación Minera del Llano Ltda. A estos predios se suman los descritos en las declaraciones de otros miembros de esa organización, postulados a la Ley 9¯5 de 2005, entre ellas las ·ersiones sobre doce mil hectareas localizadas en los depar- tamentos del Meta y Gua·iare de ex miembros del Bloque Centauros de las AUC, que íue comandado por Vicente Castano y Miguel Arro- yabe, y del Bloque de los Llanos y Gua·iare, las que actualmente son disputadas por el hermano de Ll Aleman`, Daniel Rendón lerrera, alias Don Mario`, el contador del Bloque Centauros, y por Dumar de Jesús Guerrero, alias Carecuchillo`, hermano del íallecido ex co- mandante del LRPAC, alias Cuchillo` y Manuel de Jesús Piraban, alias Jorge Pirata`, entre otros de los integrantes de los írentes y blo- ques que operaron en la región oriental de Colombia ¯8 . Ln cuanto a 1o·ar Pupo, en el proceso de Justicia y Paz se ha probado la conni·encia con ser·idores públicos para apoderarse de Fncas de campesinos senalados como miembros de la guerrilla en los departamentos del Magdalena y del Cesar, a tra·és de amenazas, ase- sinatos y desplazamientos y las compra·entas por debajo del precio real, así como de medianos y grandes propietarios: |.| Fnca que le gustaba era Fnca que pasaba a sus manos` ¯9 , las que ocultaba a tra·és de una cadena de testaíerros, entre los cuales se encuentran ·arios de sus abogados y personas cercanas` 80 . Varios de las ·íctimas que han solicitado a Jorge 40` la de·olución de sus tierras aFrman que íueron desalojadas por Augusto Castro Pacheco, alias 1uto` ,CJJ, 2011-d - José Domingo Da·ila Armenta,. Lntre otros desmo·ilizados de las Autodeíensas Unidas de Colom- bia mencionados por Veloza y Mancuso como acaparadores de tierras se encuentran Monoleche` y los narcoparas`, extraditados a Lsta- dos Unidos, Ramiro Vanoy, alias Cuco Vanoy` o el Senor del Bajo ¯8 VerdadAbierta.com, ,Quién miente entre Don Mario` y Pirata`· y Don Mario` dice que 4 mil hectareas de palma estan en poder de paras`. ¯9 Lntre·istas con postulados en la carcel de Valledupar. 80 íbíaev. 96 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Cauca, quien aparentemente por su experiencia en las minas de esme- raldas en Muzo, Boyaca, comandó el Bloque Mineros, Carlos Mario Jiménez, Macaco`, exjeíe del Bloque Central Bolí·ar y Diego ler- nando Murillo, alias Don Berna`, ex comandante del grupo léroes de 1olo·a ,Mancuso y Veloza, 2011,, quienes, junto con lrancisco Ja·ier Zuluaga, se encuentran entre los postulados que han oírecido mayor número de bienes al londo de Reparación de Víctimas y a los que se les han incautado bienes que estan aíectados a procesos de extinción de dominio por narcotraFco 81 . Algunos de los citados coinciden con los senalados por el asesinado ex comandante militar Doble Cero` en la entre·ista con el periodista Aldo Ci·ico: Macaco` ,cincuenta mil hectareas,, Don Berna` ,cua- renta y cinco,, Mancuso ,·einticinco mil hectareas,, Cuco Vanoy` ,·einticuatro mil, y Monoleche` ,·einte mil, ,Ci·ico, 2009,, para un total de ciento sesenta y cuatro mil hectareas. MKNKLK !,".1 $#-%,-1 -(.%)=&(.1 O-%-H(&$"&.1 7-/ 7-1,&-"". De las ·ersiones y las re·elaciones en los procesos de Justicia y Paz, en los procesos de parapolítica` y paraeconomía` ante la justicia ordinaria y en los hechos documentados sobre practicas de despojo administrati·o y judicial a lo largo de la geograíía del país ,parainsti- tucionalidad`,, algunos de los cuales han dado lugar a decisiones de la liscalía en el marco de la Ley 9¯5 de 2005, se puede deducir que entre los mayores beneFciarios de la pri·ación ·iolenta de los derechos de 81 Días antes de la extradición de Macaco, la liscalía iníormó sobre la incautación de 25 inmuebles que Fguraban a nombre de sus íamiliares. Ln 2008, ese organismo se- naló que a Mancuso se le habían incautado bienes que Fguraban a nombre de ·arios de sus testaíerros, entre los cuales se mencionó a ‚enia Gómez, Sor 1eresa Gómez, Benito Osorio, lunpazcor y al íallecido Assis Solar. A Diego Murillo, quien antes de su extradición maniíestó no tener bienes para reparar a las ·íctima se le incautaron ocho inmuebles localizados en Valle del Cauca y Antioquia y a alias Gordolindo`, quien esta in·estigado por sus nexos con los narcotraFcantes que integran el llamado Clan Ochoa y con Diego Montoya, se le incautaron 110 bienes ubicados en Cauca, Antioquia y Cundinamarca ,Ver: Salinas, 2008,. 9¯ CAPÍ1ULO 3 propiedad y posesiones de las ·íctimas se encuentran políticos, ba- naneros, ganaderos, agricultores y empresarios. entre otros. Algunos de íorma directa, en especial los miembros acti·os y organicos de la causa paramilitar que planearon, Fnanciaron e hicieron parte del propósito de reíundar la patria`, así como de las acciones criminales para lograrlo, sin perjuicio de que no tu·ieron que desmo·ilizarse pues nunca se mo·ilizaron` ,1SJP, 2010-a -Ldwar Cobos 1éllez y Uber Lnrique Banquez Martín,. Precisamente, esta es la razón por la cual la Corte Suprema de Justicia estimó que quienes ·aliéndose de su íunción, participaron en la empresa criminal deben responder penalmente por los crímenes de lesa humanidad perpetrados por los comandantes y grupos que hacían parte de la asociación criminal`, es decir de quienes incurrieron en concierto para delinquir agra·ado, condenados o no ,CSJ, 2009 Sal·ador Arana Sus,. Ln ese sentido, ll` se ha reíerido en ·arias oportunidades a los despojadores legales`, es decir, empresarios cómplices o que se ía- ·orecieron del accionar paramilitar ,Veloza, 2011,. Por su parte, Jairo Castillo Peralta, alias Pitirri` ha declarado que |.| mientras unos iban matando, otros comprando y otros legalizando` 82 . Ll testigo de ·arios de los procesos de parapolítica narró dos encuentros con Mario Uribe Lscobar -condenado por la Corte Suprema de Justicia por sus nexos con la parapolítica ,CJJ, 2011-c - Mario Uribe Lscobar,- en los que participaron ex jeíes paramilitares como Lder Pedraza Pena, alias Ramón Mojana`, y en los que se deFnió la estrategia para adquirir tierras entre Caucasia y Majagual, zona agropecuaria que comparten los departamentos de Antioquia, Sucre y Bolí·ar. Lntre los predios seleccionados se encuentra La Alemania, en Onoíre, Sucre 83 , propie- dad que presuntamente íue despojada por Cadena` a cincuenta y dos íamilias que la reclaman, de las cuales, a mayo de 2010, quince de sus miembros habían sido asesinadas según el Mo·imiento de Vícti- mas de Crímenes de Lstado 84 . 82 Ver: http:,,i·an-cepeda.blogspot.com,2010ƒ12ƒ01ƒarchi·e.html 83 Ver: Re·ista Cavbio: Primo en problemas`. 84 Lntre·ista con ·íctimas. 98 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS La acumulación en la tenencia de las tierras a menos precio y me- diante el englobe de predios de terratenientes, hacendados y otros auspiciadores y colaboradores de las ACCU, también ha sido descrita por ·ersionados. Mancuso comenta el caso de un ganadero de Cór- doba que posee mas de 150 mil hectareas compradas al amparo del terror que causaron guerrillas y paramilitares, y a quien aFrma haberle sal·ado la ·ida cuando Carlos Castano ordenó asesinarlo por ·ínculos con los sub·ersi·os ,Mancuso, 2011,. Lntre los englobadores` se ha mencionado a Santander Cohen, ·inculado a la masacre de Ll Salado y recordado por extender |.| de íacto los límites de sus propiedades` ,CNRR-GMl, 2010-a y CCJ, 2010,. Pero, indiscutiblemente el caso mas representati·o de empresarios, terratenientes, políticos y ganaderos que se apropiaron de tierras de las que habían sido desalojados sus legítimos titulares, es el de las comunidades negras de Jiguamiandó y Cur·aradó en el Bajo Atrato. Asímismo, otros actores económicos se ía·orecieron directamen- te e indirectamente con el accionar paramilitar. Lntre los primeros se cita írecuentemente a Víctor Carranza, el Zar de las Lsmeral- das`, considerado como uno de los mayores terratenientes del país, de quien se dice que hace ·arios anos celebró haber llegado al millón de hectareas 85 . Varios de los postulados, entre ellos Mancuso y los hermanos lredy y Daniel Rendón se han reíerido al apoyo Fnanciero y a los permisos obtenidos de Carranza para operar en sus zonas de innuencia. LspecíFcamente, Daniel Rendón narró el recorrido por Mesetas, departamento del Meta, con el objeti·o de di·isar unas tie- rras donde Carranza quería in·ertir` 86 . Lntre los segundos, se pueden encontrar algunos de los comprado- res masi·os de tierras en las regiones deshabitadas como eíecto de las gra·es ·iolaciones de derechos humanos perpetradas por los grupos 85 La Silla Vacía: Cinco cosas que podra hacer Santos por las ·íctimas en ·ez de mar- char`. 86 1eraaa.bierta. 1ierras: ,la otra guerra paramilitar en los Llanos·`. 99 CAPÍ1ULO 3 uniFcados por la Casa Castano. Como se senaló, es un deber moral y legal de las personas naturales y jurídicas que adquirieron tierras en estas zonas probar en los procesos judiciales de restitución que regula la Ley de Víctimas su buena íe exenta de culpa` y la existencia del justo título del derecho`, ya sea para rei·indicar sus derechos sobre los predios o para ser beneFciarios de los contratos de uso o de las compensaciones en los casos en que se ordene la restitución a ía·or de las ·íctimas ,artículos 88, 91, 98 y 99 de la Ley 1448 de 2011,. MKcK ?Q,"$7&(&.%-1 A P-"7$7 Ll 13 de mayo de 2008, el Gobierno colombiano tomó la decisión de extraditar a catorce ex jeíes de los grupos paramilitares desmo·i- lizados y postulados a la Ley 9¯5 de 2005, entre ellos cuatro de los seleccionados para esta in·estigación que hicieron parte del Lstado Mayor de las Autodeíensas: Mancuso, 1o·ar Pupo y Giraldo Serna 8¯ . Unos días antes había sido extraditado Veloza. Contra ellos se ade- lantan procesos en Lstados Unidos por conspiración y por manuíac- turar y distribuir cocaína con el propósito de introducirla a ese país 88 . Sin lugar a dudas, su extradición limita las posibilidades de conocer 8¯ Procesos: USA ·. Castano-Gil, et al., Case •: 1:02-cr-00388-LSl-2. District oí Co- lumbia, \ashington, D. C., USA ·. Garcia, Case •: 1:0¯-cr-002¯4- \lP-1, a,k,a. USA ·. Giraldo-Serna et al., Case •: 1:04-cr-00114-RB\-1, y a,k,a. USA ·. Giraldo-Serna et al., Case •: 1:04-cr-00114-RB\-9. District oí Columbia, \ashington, D. C., respec- ti·amente. Ln: IlRLC, 2010. 88 Los otros de los excomandantes extraditados corresponden a narcotraFcantes que mutaron a paramilitares y cuyos grupos hicieron parte de la coníederación de íedera- ciones que representaron las AUC. Lntre estos se encuentran: Carlos Mario Jiménez Naranjo, a,k,a Macaco`. USA ·. Naranjo, et al., Case •: 1:05-CR-00235-RMC ,Dis- trict Court oí Columbia. \ashington, D. C. y USA ·. Naranjo, et al., Case •: 8:02-cr- 00482-JD\-LAJ-1. Middle District oí llorida, 1ampa, Guillermo Pérez Alzate, a,k,a Pablo Se·illano`. USA ·. Perez-Alzate et al., Case •: 8:02-cr-00482-JD\-LAJ-1. Middle District oí llorida, 1ampa, lrancisco Ja·ier Zuluaga Lindo, a,k,a Gordo Lindo`. USA ·. Bernal-Madrigal, et al., Case •: 0:99-cr-06153-‚MM-24. Southern, District oí llorida, lt. Lauderdale, Diego lernando Murillo Bejarano, a,k,a Don Berna`. USA ·. Murillo-Bejarano, et al., Case •: 1:03-cr-01188-RMB-1. Southern Dis- trict oí New \ork, loley Square Ln: IlRLC, 2010. 100 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS quiénes son los responsables y usuíructuarios del abandono íorzado y el despojo de tierras, territorios y recursos naturales en las regio- nes en que ejercieron control las estructuras paramilitares, lo que se conFgura en una modalidad de impunidad contra los perpetradores directos e indirectos de gra·es delitos de lesa humanidad, situación que hace mas compleja y diíícil la labor de restituirles los predios a las ·íctimas. Lo anterior se ·e agra·ado en la medida en que, como lo senala Mancuso, pese a la ·oluntad de íuncionarios colombianos y de Lsta- dos Unidos, NO L†IS1L UN 1RA1ADO DL COOPLRACIÓN JUDICIAL LN1RL LS1ADOS UNIDOS \ COLOMBIA que per- mita dar continuidad al proceso de Justicia y Paz` ,Mancuso, 2009-a - mayúsculas en texto el original,. Según el ex comandante del Bloque Norte, quien ha participado como testigo en ·arios procesos de la parapolítica, con su extradición intempesti·a e inexplicable` ,Mancuso, 2011,, se truncó la posibili- dad de aportar en la construcción de la ·erdad y la memoria. Si bien, Sal·atore Mancuso maniFesta su compromiso con el proceso de Jus- ticia y Paz, decidió continuar parcialmente en el mismo, aduciendo que no existen condiciones de seguridad para su entorno íamiliar: |.| toda mi íamilia y mis tres hijos ·i·en en Colombia` ,íbiaev,, |.| a mi padre y a mi hijo mayor les negaron la reno·ación del sal·oconducto para portar armas`. Lstas y otras renexiones las ha expuesto en comunicaciones en·iadas a íuncionarios colombianos e internacionales, de las cuales aFrma no ha obtenido respuesta ,íbi· aev,. Ln la remitida en septiembre de 2009, ademas de cuestionar el proceso de la Ley 9¯5 de 2005 y de íelicitar a la Corte Suprema de Justicia por negar la extradición de otros integrantes de las ACCU, expone así las razones de su decisión de no continuar participando en las audiencias de ·ersiones libres |.| mientras no se brinden las garantías y seguridades judiciales ne- cesarias para cumplir y hacer cumplir los presupuestos íormales y mate- riales de la Ley 1ransicional de Justicia y Paz, y mientras no se brinden las condiciones de seguridad íísica requeridas, para nuestras íamilias, desmo·ilizados, testigos, simuladores y demas personas que corren pe- 101 CAPÍ1ULO 3 ligro como consecuencia del proceso judicial de las AUC`, suspendo, por condiciones ajenas a mí que me hacen humanamente imposible continuar participando y cumplir con las exigencias de las diligencias judiciales de Justicia y Paz y Justicia Ordinaria, excepto, las diligencias de medida de aseguramiento, imputación y audiencia de conciliación y juzgamiento sobre los hechos ya declarados ,Mancuso, 2009-a,. 1anto Mancuso como Veloza se sienten traicionados por la extra- dición, la que a su juicio contrariaba el Acuerdo de Ralito, y reiteran que con su salida del país los silenciaron y se truncó la posibilidad de dar a conocer la ·erdad completa sobre el íenómeno del paramilita- rismo en Colombia. Al respecto, el ex comandante del gran Bloque Norte senalo que: |.| no hay interés en saber la ·erdad` -y que- |.| desde el gobierno se reescribe la historia con base en sus pro- pios intereses` ,Mancuso, 2011,, pues |.| no se quiere reconocer la responsabilidad política del Lstado en el surgimiento y crecimiento de las autodeíensas`, ni |.| que existió una política de Lstado que permitió su existencia`. A su juicio, |.| en el proceso de Justicia y Paz se esta parcelando la ·erdad`, y no |...| ·a a haber paz` con una ·erdad parcelada` y parcializada`` ,íbiaev,. Por su parte, Veloza maniíestó en la entre·ista realizada en la carcel de Nue·a \ork: \o siempre me he sentido traicionado por el Co- misionado de Paz` ,Veloza, 2011,, con quien aFrma tu·o diíerencias por el ingreso de los narcoparamilitares al proceso que se adelantó con el Gobierno Nacional, entre ellos, los extraditados lrancisco Ja- ·ier Zuluaga Lindo, alias Gordolindo`, alias Macaco` y Juan Carlos Sierra Ramírez, alias Ll 1uso`, desmo·ilizados de los bloques Pa- cíFco, Central Bolí·ar y léroes de Granada, respecti·amente, y por |.| las desmo·ilizaciones íalsas` de personas que nunca pertenecie- ron a las autodeíensas` ,íbíaev,. Veloza contó también que cuando se desmo·ilizó no tenía orden de captura, pero que sin embargo lo capturaron, lo extraditaron y lo maltrataron`. Según él, la extradición se debió mas al temor de que continuara hablando sobre Juan José Chaux Mosquera que del gene- ral Rito Alejo porque |.| era mas gra·e que hablar de Rito Alejo, por eso, mi orden de captura se dictó a las tres y me capturaron a las 102 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS cuatro, no por Rito Alejo sino por Chaux Mosquera` ,Veloza, 2011,, de quien dijo era miembro del Bloque Calima y que íue él quien se lo presentó a Carlos Castano ,íbiaev,. Ln la entre·ista realizada a ll`, ex comandante de los bloques Calima y Bananero, contó que él había impulsado un Proyecto Pro- ducti·o para la Paz y la erradicación de culti·os de coca en predios de su propiedad, en lo que in·irtió recursos propios y recibió Fnancia- miento de una organización no gubernamental japonesa -cuyo nom- bre omitió-, para la construcción de dieciséis ·i·iendas entre Carepa y AmalF. Sin embargo, según ll`, el Gobierno colombiano no le ha reconocido esta contribución aíectando su deíensa en el proceso judicial que se le adelanta en Lstados Unidos 89 . Giraldo Serna y Mancuso coinciden en maniíestar que se sienten apenados con las ·íctimas por no poder responderles sobre la suerte de sus íamiliares, debido al estado de incomunicación en el que se en- cuentran, y les endilgan a las autoridades la responsabilidad de íaltar a sus compromisos y deberes ,Mancuso y Giraldo, 2011,. Ln palabras de alias Ll Mono`, |.| se me sigue impidiendo reunirme con quienes íueron mis hom- bres y con las ·ictimas para reconstruir las circunstancias de tiempo, modo y lugar que me exige la ley |.| ,Mancuso, 2009-a,. De otra parte, Giraldo Serna, ex comandante y íundador del lrente Resistencia 1ayrona, maniíestó las diFcultades causadas por la extra- dición para restituir los dos únicos predios sobre los que aceptó el despojo por parte de integrantes de su grupo. Se trata de los predios La Paz y San Carlos, que suman 223 hecta- reas, localizados en el corregimiento de San Pedro de la Sierra, mu- nicipio de Minca, departamento del Magdalena, que íueron de·uel- tos a ·einticuatro íamilias asociadas a la Cooperati·a Agropecuaria 89 Ln la entre·ista senaló que mediante derecho de petición había solicitado un ejem- plar de la publicación de la re·ista del Ministerio del Interior de 2005, en la que se registraban los proyectos que íueron conocidos por la MAPP-OLA y UNODC. Sin embargo no ha tenido respuesta. 103 CAPÍ1ULO 3 San Carlos ,COOAGROSAC Ltda,. Lstas íamilias, adjudicatarias del INCORA, íueron desplazadas dos ·eces, la primera por la guerrilla y la segunda, en 2001, por paramilitares del lrente 1ayrona, hecho que íue admitido por Giraldo Serna alias Ll Patrón`, Norberto Quiroga y José Daniel Mora López, alias 101` o Guerrero`, quien ademas coníesó ser el responsable del desplazamiento y de cobrar 35 millo- nes de pesos mensuales a una comunidad gnóstica ,CSJ, 2011-b - lernan Giraldo Serna, Norberto Quiroga Po·eda y José Daniel Mora López - restitución directa,. Por su parte, alias Jorge 40` que desempenó una importante labor en la expansión de la Casa Castano, rechazó con ira` su extradición a Lstados Unidos y dijo que con ella se traicionó el Proceso de Paz que la organización AUC mantu·o con el gobierno del presidente Ál·aro Uribe 90 . Por esta razón, desde su salida íorzada del país, el ex coman- dante del Bloque Norte no ha participado en audiencias de ·ersión libre en el proceso de Justicia y Paz, ni en los procesos de la parapolí- tica. Ademas se ha negado a conceder entre·istas a representantes del Congreso de la República, organizaciones de ·íctimas, organismos internacionales e instancias como el Grupo de Memoria listórica de la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación 91 . Como se desprende de lo expuesto anteriormente, la extradición de los principales comandantes de las Autodeíensas de Córdoba y Ura- ba transmutados en narcotraFcantes ,paranarcos`, tiene múltiples repercusiones negati·as en el esclarecimiento de la ·erdad sobre el expolio, los despojadores ilegales y legales y la concentración de tie- rras y territorios en menoscabo de los derechos a la ·erdad y a la res- titución de las ·íctimas. Lsta situación se agra·a, especialmente írente a los Senores de la Droga`, los socios ilegales de la Casa Castano que 90 ^oticia.21.cov: La ira de Jorge 40` al ser extraditado`. 91 Su abogado estadounidense, Da·id Zapp, no consintió en que íuera entre·istado por los consultores del Grupo de Memoria listórica. Similar respuesta les dio a los miembros del Congreso delegados para entre·istar a los extraditados -entre ellos Pie- dad Córdoba e I·an Cépeda- y a los delegados de la MAPP-OLA ,Lntre·istas con el abogado Zapp, el representante a la Camara, I·an Cepeda y íuncionarios de la Misión,. 104 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS promo·ieron y Fnanciaron su expansión y consolidación, ya sea que se hayan desmo·ilizado ,narcoparas`, o no en la medida en que, los primeros, con su salida íorzada del país dejaron de participar en los procesos de la Ley 9¯5 de 2005, y a que estos y a los narcotraFcantes en general en los procesos ante la justicia de los Lstados Unidos no se les exige coníesar las ·iolaciones de derechos humanos, en especial las relacionadas con los crímenes que produjeron desplazamientos como parte del plan de apropiarse o consolidar su dominio sobre tierras y territorios. No de·elar el apoyo, promoción y Fnanciación acti·a y consiente de los Senores de la Droga` al íenómeno paramilitar atenta contra los derechos de las ·íctimas a la restitución, especialmente por las negociaciones que realizan con las autoridades estadounidenses para disminuir sus penas, entre las que se incluye la entrega de bienes y, es- pecialmente, contra el esclarecimiento de la inescindible relación en- tre el negocio de las drogas y el la·ado de acti·os mediante la apropia- ción de tierras, territorios y recursos naturales y su concentración. La impunidad de los Senores de la Droga` en el despojo y apropiación de tierras, hace in·iables re·ertir la concentración de la tierra y con ello la búsqueda y puesta en marcha de garantías que contribuyan a la resolución y no repetición de las ·iolencias y connictos en el campo. Al respecto, parte del íracaso del proceso de Justicia y Paz es conse- cuencia de no haberse puesto sobre la mesa el tema del narcotraFco, lo que se e·idencia en la no inclusión de todos los socios de la em- presa paramilitar en las negociaciones entre el Gobierno nacional y los paramilitares. De esta íorma, no se les exigió a los Senores de la Droga` el desmonte del narcotraFco y de sus redes de la·ado de acti- ·os ·ía in·ersiones lícitas`, iníormación sobre sus socios legales` y la entrega de todos sus bienes legales e ilegales para la reparación de las ·íctimas. Una de las consecuencias de esta omisión es la multipli- cación y poder de las BACRIM, integradas por desmo·ilizados o no de las estructuras paramilitares que, ademas de mantener el íructííero negocio de las drogas ilícitas, tienen como objeti·o sal·aguardar las tierras, territorios y recursos adquiridos a sangre y íuego, en poder de integrantes de la quíntuple alianza criminal. 105 CAPÍ1ULO 3 Ln esta línea, Mancuso y otros ex comandantes, se han reíerido a las limitaciones y ·acíos de la Ley 9¯5 de 2005, especialmente en lo que se reFere a la ausencia de un tratamiento especial para los aliados del paramilitarismo, ci·iles y militares, a quienes no se les aplica la pena alternati·a. A juicio de Mancuso, el proceso de Justicia y Paz, ademas de no brindar seguridad jurídica para los desmo·ilizados-pos- tulados -como ejemplo cita la extradición-, impide conocer la ·erdad sobre el íenómeno de las autodeíensas e in·olucrar a todos los que hi- cieron parte de él. Ls por ello que ha senalado la necesidad de contar con un marco normati·o especial que permita esclarecer los ·ínculos de empresarios, políticos y militares en las ·iolaciones de derechos humanos, el que no puede reducirse exclusi·amente a la penalización de las acciones, sino que debe incorporar otros mecanismos para to- dos los que apoyaron, Fnanciaron, auspiciaron o hicieron parte de las estructuras de la Casa Castano. Ln su propuesta que aFrma se dirige a acabar con la espiral de ·iolencia` y así alcanzar la paz y la reconcilia- ción, diíerencia el tratamiento que se debe dar a los que participaron en crímenes de lesa humanidad y a los que no. Para los primeros el componente carcelario no debería exceder de un ano y a los segundos sólo se les debería imponer sanciones económicas y sociales ,trabajo social,, una ·ez asuman su responsabilidad y oírezcan sus disculpas a las ·íctimas. Ln sus palabras qué sacamos si los metemos a todos en las carceles·` ,Mancuso, 2011,. MKdK ?%,"-#$ 7- O&-%-1 0$"$ /$ "-0$"$(&)% Las re·elaciones sobre la apropiación de tierras y territorios por parte de los miembros acti·os y ·isibles de las estructuras de la Casa Castano y de sus aliados no guardan relación con su entrega para la reparación de las ·íctimas. Lo anterior se hace rele·ante en los casos de los desmo·ilizados-postulados al proceso judicial de la Ley 9¯5 de 2005. Coníorme a la llamada Ley de Justicia y Paz y la sentencia C-360 de 2006, los desmo·ilizados-postulados debían y deben entregar los bienes legales e ilegales al londo de Reparación de las Víctimas ,lRV- 106 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Acción Social, 92 , condición esencial para garantizar el restablecimien- to de los derechos patrimoniales de las ·íctimas, y así obtener la pena alternati·a pre·ista en la Ley 9¯5 de 2005, entre cinco a ocho anos. Ln consecuencia, los postulados no pueden alegar derechos sobre los bienes despojados ni sobre los de procedencia ilícita -la·ado de acti·os, narcotraFco o enriquecimiento ilícito-, y las autoridades de- ben perseguir y recuperar los unos y los otros, los primeros con Fnes de restituirlos a sus legítimos titulares, y los segundos para eíectos de extinguirles el dominio mal habido. MKdKJK C&-%-1 .6"-(&7.1 A -%,"-#$7.1 Algunos postulados entregaron bienes o iníormación sobre ellos durante las desmo·ilizaciones, y otros tantos a lo largo de las ·ersio- nes libres. Dentro de los primeros, en el iníorme en·iado por el Alto Comisionado para la Paz a liscalía, se mencionan |.| 59 bienes in- muebles en la región de Ll Catatumbo e iníormación sobre 334 pre- dios rurales, equi·alentes a 25.601 hectareas ,OACP, 2006,. De estos últimos, el Bloque Catatumbo aportó iníormación sobre 105 Fncas ubicadas en el municipio de La Gabarra, departamento de Norte de Santander ,OACP, 2004,. Ln palabras de Mancuso |.| se entregaron tierra, casas, lanchas, mulas |.| que quedaron relacionados en un acta de entrega que se le hizo al Gobierno Nacional` ,Mancuso, 2006,. 92 Lste londo íue escindido en dos mediante la Ley de Víctimas: el primero, que con- ser·a el mismo nombre a cargo de la Unidad Lspecial de Atención y Reparación Inte- gral de Víctimas, y el segundo, el londo de Restitución de 1ierras Despojadas a cargo de la Unidad Lspecial de Restitución de 1ierras Despojadas, adscrita al Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, entidad que inició sus labores a partir de enero de 2012 ,artículos 166 a 169 y 1¯0 de la Ley 1448 de 2011,. Sin embargo, los decretos regla- mentarios de la Ley 9¯5 de 2005 ,decretos 4¯60 de 2005 y 3391 de 200¯,, establecieron la posibilidad de restituir directamente las tierras a las ·íctimas, así como implementar proyectos producti·os en los que participaran ·íctimas, población desplazada y ·icti- marios. 10¯ CAPÍ1ULO 3 1o·ar Pupo también oíreció entregar cerca de tres mil hectareas entre los municipios de Ll Plato y Chi·olo, y doce mil hectareas en el municipio de la Jagua de Ibirico, departamento de Cesar ,Ver: Chi- ·olo: despojo en zonas de Jorge 40`,, sin embargo en audiencia de ·ersión libre maniíestó que al momento de su desmo·ilización no contaba con ningún bien inmueble a su nombre, pues como causa de un proceso de di·orcio sus bienes pasaron a su ex cónyuge e hijos ,1o·ar, 200¯-a,. Ln el transcurso del proceso de Justicia y Paz los postulados han oírecido mas bienes de los que eíecti·amente han sido entregados al londo de Reparación 93 , e incluso algunos de los bienes que constan en las actas de entrega suscritas por los postulados, Acción Social y la liscalía no han ingresado realmente al londo 94 . La contribución de los postulados seleccionados se reduce al oírecimiento de entregar 39 terrenos rurales, relacionados en el anexo 5. Bienes inmuebles rurales oírecidos y recibidos en el lRV, distribuidos así: ! Del gran Bloque Norte: de Sal·atore Mancuso, ·eintitrés, de Rodrigo 1o·ar Pupo, seis, de L·er Veloza García, diez, de Ldwar Cobos 1éllez, cinco, del lrente Resistencia 1ayrona aportados por Martín Penaranda Osorio, alias Martin` o Ll Burro`, y Norberto Quiroga Po·eda, alias Cinco Cinco. ! Del Bloque Llmer Cardenas: de lreddy Rendón lerrera, die- ciséis, de Llkin Jorge Castaneda, alias lermógenes Maza`, uno, y un predio mas de Otoniel Segundo loyos Pérez, alias Ll Cabo Ri·era` o Ll Lnano` ,1ulapas: despojo en zonas de Ll Ale- man`,. 93 A mayo de 2011 los desmo·ilizados-postulados habían oírecido 453 inmuebles ru- rales pero sólo 91 constaban en actas, los demas se encontraban en proceso de ·eriF- cación` ,liscalía, 2011 y 2011-a,. 94 Durante el proceso de la llamada justicia transicional`, algunos de los comandantes de la Casa Castano han entregado helicópteros, ·ehículos, semo·ientes, mercancías y dinero, apartamentos, urbanizaciones y lotes y han oírecido inmuebles rurales para la reparación de las ·íctimas, sin embargo no todos han ingresado al londo debido a diíerentes situaciones, entre ellas, presentar deudas por di·ersos conceptos -multas, impuestos, ser·icios públicos- y estar en procesos ordinarios de extinción de dominio. 108 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS A la escasa ·oluntad de los postulados de entregar bienes, se suma la no identiFcación y persecución de las inmuebles de narcotraFcan- tes y agentes legales que concertaron e hicieron parte del proyecto paramilitar. Ln eíecto, a ninguno de los parapolíticos` condenados por concierto para delinquir se les ha exigido reparar a las ·íctimas con sus bienes lícitos e lícitos y entregarlos al londo de Reparación, es mas ni siquiera se les ha exigido el pago de las multas impuestas en las sentencias. 1ampoco han ingresado a ese londo los bienes de los Senores de la Droga` con los que se aliaron y que participaron ac- ti·amente en el acaparamiento de tierras, incluso de los que mutaron a paramilitares para eíectos de su desmo·ilización y acceso a la pena alternati·a pre·ista en la Ley 9¯5 de 2005. MKeK 2$%(:1. A /$ -%,"-#$ 7- O&-%-1 Ll encargado de la expansión de la Casa Castano ha alegado per- manentemente su compromiso con el proceso de paz que dio lugar a la desmo·ilización de las Autodeíensas Unidas de Colombia, y de manera especial se ha reíerido a su ·oluntad de entregar bienes para la reparación de sus ·íctimas, pero ha responsabilizado a distintas entidades de impedírselo. Como se senaló antes, este ex comandante suscribió actas de en- trega correspondientes a ·eintitrés inmuebles rurales, a los que se suma el oírecimiento del restaurante í`ívoteca en Barranquilla, de la empresa Inclusol S. A., que hacía parte de su sociedad con Giorgio Sale, ·inculada a la maFa italiana denominada Ndrangheta` 95 . De igual manera oíreció entregar el ·olumen de madera apro·echable de los culti·os íorestales ,·uelo íorestal, en predios localizados en los departamentos de Córdoba y Bolí·ar, algunos de los cuales íueron receptores de recursos públicos, mediante la entrega de CertiFcados de Incenti·o lorestal 96 . 95 Ver: Ll Lspectador, ,Prendera su ·entilador Giorgio Sale·` 96 Lntre los beneFciarios del CertiFcado de Incenti·o lorestal se encuentran Adelaida Soíía y Martha lelena Dereix Martínez y Augusto Castro, alias 1uto`. 109 CAPÍ1ULO 3 Con excepción de la Fnca que el postulado se comprometió a de- ·ol·er directamente al reclamante, y el baldío Club 100 localizado en la isla Múcura del archipiélago de San Bernardo, departamento de Córdoba ,CSJ, 200¯ - Sal·atore Mancuso,, el magistrado de Control de Garantías ordenó aíectar los bienes oírecidos con medida caute- lar de embargo, y dispuso que quedaran a disposición del londo de Reparación de Víctimas, coníorme al artículo 15 del decreto 4¯60 de 2005. Pese a ello, solamente ·eintitrés propiedades constan en actas de recepción, lo que no signiFca que eíecti·amente hayan ingresado al londo, debido principalmente a la oposición de Acción Social de re- cibir predios aíectados por contratos de arrendamiento destinados al programa Proyectos Producti·os por la Paz ,PPP, 9¯ , creado para rein- corporar a los desmo·ilizados, que se comenta en el capítulo cuarto. Lsta postura íue rechazada por la Corte Suprema de Justicia ,CSJ, 2011-m - Sal·atore Mancuso - medidas cautelares,, al reiterarle a la administradora del londo de Reparación de Víctimas recibir todos los bienes entregados por el postulado, incluyendo los predios des- tinados para los PPP, decisión ratiFcada en la segunda instancia del proceso contra Zapata La·erde, en la que se dispuso pri·ilegiar la reparación de las ·íctimas y, por ende, disponer la extinción de domi- nio y la monetización de los inmuebles Nue·a Delhi, Villa Nue·a y la Guaina ,1SJP, 2010-b y CSJ, 2012-a - Jorge I·an La·erde,. Según Mancuso, los contratos de arrendamiento entre sus testa- íerros, entre los cuales ha mencionado a Aaram Asías Solar y a la Asociación Agroempresarial de 1ierralta ,ASOA1CO,, íue la íórmu- la que encontraron los asesores del Gobierno para sal·ar` al Alto Comisionado de in·estigaciones por entregar recursos públicos sin que mediaran compromisos entre los supuestos duenos de las tierras y los desmo·ilizados, campesinos y desplazados ,Mancuso, 2011,. Ln un comunicado público senaló que, 9¯ Los PPP íueron presentados por el Alto Comisionado al Consejo de Ministros, en octubre de 2005 y se iniciaron a partir de diciembre de ese ano. 110 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS |.| han maniíestado que yo realicé una serie de maniobras íraudu- lentas a tra·és de unos contratos de arrendamiento sobre algunos de los bienes que oírecí en mayo de 200¯, con el íin de e·adir la obligación que tengo de reparar. Lsta es una de las razones por las cuales ACCIÓN SO- CIAL, dependiente del Gobierno, se ha negado a recibir los bienes y este argumento íue utilizado por el Ljecuti·o para intentar justiíicar mi extra- dición, siento que es por ello que no han recibido todos los bienes y han colocado todo tipo de obstaculos para hacerlo. Sin embargo, la ·erdad es que los contratos de arrendamiento reíeridos, lULRON SUGLRIDOS \ SUSCRI1OS POR LL GOBILRNO NACIONAL, en cabeza de la Oíicina del Alto Comisionado para la Paz, tal como consta en el acta de íecha 26 de marzo de 200¯, suscrita por algunos íuncionarios de esa dependencia, la cual anexo en la presente diligencia ,Mancuso, 2009-a - mayúsculas en el texto original,. La negati·a de Acción Social ha dado lugar a que Mancuso solicite a diíerentes autoridades que intercedan para que le reciban los bienes, o le autoricen ·enderlos y entregar el monto recaudado al lRV, en los siguientes términos: |.| si ACCIÓN SOCIAL sigue desconociendo el deber y la obliga- ción de recibir tal como lo había ordenado la honorable Corte Suprema de Justicia ,sic,, se me permita entonces proceder a ·ender directamente dichos bienes y poder demostrar que Sˆ 1ILNLN VOCACIÓN DL RLPARACIÓN y poder alimentar de esa íorma el patrimonio de las ·íctimas ,Mancuso, 2009 - a mayúsculas en el texto original,. De igual íorma, Mancuso ha responsabilizado a las entidades de Justicia y Paz, y particularmente a Acción Social, de la pérdida del ·alor comercial de los bienes oírecidos y de su ocupación por terce- ros pertenecientes a las llamadas Bandas Criminales`, o personas que aducen haber sido despojados de ellos 98 , en menoscabo de las ·íctimas reales 99 ,Ver: 2010-b - Sal·atore Mancuso - recurso de queja,. 98 Según el ex comandante de la Casa Castano, la posición de Acción Social es la causa de que en las Fncas se instalaran las nue·as bandas criminales, los que han talado los culti·os íorestales para sembrar coca ,Mancuso, 2011,. 99 Ls el caso de los predios Ll Chimborazo, Ll Bongo y La Lsperanza. 111 CAPÍ1ULO 3 Otro caso que cita Mancuso para mostrar su responsabilidad con la Ley 9¯5 es la restitución directa de 99 parcelas que hacen parte de la hacienda 100 Costa de Oro 101 de 1.425 hectareas, la que según Man- cuso le íue arrebatada a la íamilia Guerra 1ulena ,Mancuso, 2011,. La ·ersión del ex comandante no coincide con la de las ·íctimas que de- nunciaron el desplazamiento por hombres al mando de Roldan Pérez, alias Monoleche`, bajo las órdenes de lidel y Carlos Castano Gil 102 , quien posteriormente se la ·endió` a Mancuso. Sal·atore Mancuso, el hombre de conFanza de los hermanos Cas- tano ha sido el postulado que con mayor insistencia ha solicitado la aplicación del Principio de Oportunidad para sus testaíerros, conduc- ta que -como ya se mencionó- hizo ,,hace·, parte de las practicas comúnmente empleadas por la empresa criminal constituida por la Casa Castano y sus aliados para ocultar el origen o los mismos bienes, y así legalizar su usurpación: la·ar acti·os pro·enientes o destinados a acti·idades delicti·as 103 , realizar in·ersiones en pro·echo propio o ajeno ,enriquecimiento ilícito y receptación 104 , o la combinación de todas las anteriores 105 . 100 Ll otro postulado que entregó predios directamente a las ·íctimas con el a·al de la liscalía es Baldomero Linares, alias Guillermo 1orres`, ex comandante de las Auto- deíensas Campesinas de Meta y Vichada. 101 Ubicada entre el municipio de 1ierralta y Montería, en Córdoba. 102 CNRR: Lntrega directa de bienes inmuebles`. 103 Resguardar, in·ertir, transportar, transíormar, custodiar o administrar |.| bienes que tengan su origen mediato o inmediato en acti·idades de |.| extorsión, enriqueci- miento ilícito, traFco de armas |.| o ·inculados con el producto de los delitos objeto de un concierto para delinquir, relacionado con el traFco de drogas tóxicas, estupeía- cientes o sustancias psicotrópicas, o les dé a los bienes pro·enientes de dichas acti·i- dades apariencia de legalidad o los legalice, oculte o encubra la ·erdadera naturaleza, origen, ubicación, destino, mo·imiento o derecho sobre tales bienes o realice cualquier otro acto para ocultar o encubrir su origen ilícito` ,artículo 323 de la Ley 599 de 2000,. 104 Practica ejercida por una persona que sin ser parte de las acti·idades lícitas se dedica a adquirir, poseer, con·ertir o transíerir |.| inmuebles que tengan su origen mediato o inmediato en un delito`, o realizar |.| cualquier otro acto para ocultar o encubrir su origen ilícito` ,artículo 44¯ de la Ley 599 de 2000,. 105 Ll 1iempo.com: Monoleche` senala a cincuenta testaíerros entre empresarios y ga- naderos de Montería, Antioquia y Valle y CNRR paras no tienen plata, sus testaíerros la ocultan`. 112 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Coníorme a lo re·elado por Mancuso, generalmente los testaíerros eran personas y empresas reconocidas que contaban con capacidad de operación y contactos, que actuaron de buena íe`, por amistad personal o aFnidad con los grupos paramilitares o porque íueron obligadas ,Mancuso, 2011,: |.| lo llamas y lo amedrentas y le di- ces: me lo cargas o me lo cargas`, y no le queda otra opción que hacerle` 106 . Ls por ello, que de manera recurrente, 1riple Cero` ha solicitado la aplicación de dicho principio para sus simuladores, entre los que, ademas de Aaram Assias 10¯ , ha mencionado a Benito Osorio Villadiego, Celso Alíredo Salazar, y a su ex mujer, Martha lelena Dereix, los dos últimos supuestamente le administraban predios en el Guamo, Bolí·ar y en Córdoba. Ln octubre de 2011, Sal·atore Mancuso in·ocó nue·amente la apli- cación del mencionado principio a ía·or de su ex esposa, con el Fn de entregar quince predios a·aluados en once millones de dólares` y el ·uelo íorestal de 510 hectareas sembradas de acacias, en ocho inmuebles localizados en 1ierralta, Córdoba 108 . De los inmuebles rurales oírecidos siete ya íueron incautados por narcotraFco y en- tregados a la extinta Dirección Nacional de Lstupeíacientes para su administración: La luente, La Gloria, Los Almendros, Buenos Aires, Ll Guayabo, La Dicha y Las Delias. Precisamente, la íalta de claridad normati·a sobre la destinación de los bienes de los desmo·ilizados- postulados, permite que se les ·incule simultaneamente a procesos ordinarios de extinción de dominio por narcotraFco y al proceso de reparación de las ·íctimas regido por la Ley 9¯5 de 2005. Líecto de lo anterior es que a junio de 2012, del total de los bienes oírecidos por Mancuso solamente a tres se les había decretado la ex- tinción de dominio dentro del proceso de la Ley 9¯5 de 2005: Carare y San José del Guamo en Ll Guamo, departamento de Bolí·ar, y Viz- 106 Perdón, mil ·eces perdón`: Sal·atore Mancuso. Op. cit. 10¯ íbíaev. 108 Ll 1iempo: Busca el principio de oportunidad a cambio de entregar bienes para la reparación de ·íctimas` y VerdadAbierta: Lx esposa de Mancuso solicitara principio de oportunidad`. 113 CAPÍ1ULO 3 caya en 1ierralta, departamento de Córdoba, para reparar a las ·íc- timas de las actuaciones del Bloque Catatumbo ,tsjp, 2010-b - Jorge I·an La·erde,. Sin embargo, en el íallo de segunda instancia la Corte Suprema de Justicia, en aras de robustecer el londo de Reparación de Víctimas, decretó la extinción de dominio sobre los predios San José de 1ierralta, Pro·idencia, Lsperanza Uno, Villa Amalia, Las Palmas, lacienda Pollo lrio, lacienda Cumbia 3, Villa Rosa, Nue·a Delhi, Villa Nue·a, la Guainia y Ll Bongo, así como sobre L`Lnoteca de Atlantico y la sociedad Incusol ,CSJ, 2012-a - Jorge I·an La·erde,. Ln esta pro·idencia se re·ocó la orden de extinción de dominio sobre el predio San José del Guamo, pues se demostró que este inmueble re- clamado por su titular se había coníundido con otro de igual nombre localizado en 1ierralta, Córdoba ,CSJ, 2012-a - Jorge I·an La·erde,. Algunos de esos bienes, como se mencionó antes, estan asociados a los proyectos producti·os para desmo·ilizados y otros como se des- cribe en seguida a re·ertir el testaíerrato. De igual íorma, en la segunda instancia del proceso contra La·erde de junio de 2012, la Corte Suprema de Justicia decretó la extinción de dominio del predio Ll Cortijo, el que, en 2011, había ordenado de·ol- ·er a Sal·atore Mancuso D`Angiolella, padre del hombre de conFan- za de la Casa Castano comandante ,csj, 2011-o - Sal·atore Mancuso y 2012-a - Jorge I·an La·erde,. De manera adicional, Mancuso íue pionero en acudir a la moda- lidad de deshacer el testaíerrato regulada en los decretos reglamen- tarios de la Ley 9¯5 de 2005 109 , como eíectos de los acuerdos con el Gobierno para des·irtuar los eíectos de las sentencias de la Corte Constitucional, particularmente la reíerida a la obligación de los pos- tulados de entregar todo los bienes en su poder. 109 Ll artículo 14 del decreto 3391 de 2006, dispone en su tercer inciso: Cuando los bienes de origen ilícito de los miembros del grupo armado ilegal no Fguren íormal- mente a nombre de los mismos o no se encuentren en su poder, estos deberan realizar los actos dispositi·os necesarios para deshacer la simulación y proceder a su entrega con destino a la reparación de las ·íctimas ,resaltado en italicas íuera de texto,. 114 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS A tra·és de esa modalidad se buscaba re·ersar las actuaciones para ocultar las tierras y territorios adquiridos de manera ilegal e ilícita, me- diante donaciones, compra·entas y íormalización de transacciones, tal y como lo documenta la Superintendencia de Notariado y Registro en cinco predios ,Villa Amalia, Carare, San José de Ll Guamo, Ll Bongo y Ll Chimborazo, que suman cerca de 1.¯00 hectareas, locali- zados en el municipio de Ll Guamo, Bolí·ar ,anexo 6. Simulaciones en predios de Mancuso,. 1res habían sido adquiridos mediante sen- tencia judicial a ía·or de Lscolastica Sierra Vda. de Guzman y Gusta- ·o Guzman Sierra en 1859 ,San José de Ll Guamo y Ll Bongo, y Da- niel Contreras en 198¯ ,Carare,, uno íue adjudicado por el INCORA en1991 a Julio Sir \epes ,Villa Amalia, y Chimborazo es el resultado de un englobe de cinco predios realizado por Luz Llena Palacios de Pineda en 2004 ,Jacamar, 200 hectareas, La Lsmeralda, 130 y tres que se denominan Mata Perro, 20, 80 y 38 hectareas,. A Fnales de 1999, Carare, Ll Bongo y Villa Amalia íueron adqui- ridos por I·an Darío Arrieta Sanchez, quien se los enajenó a Celso Alíredo Salazar Castaneda, el que en 200¯ los donó a Mancuso. La Fnca San José de Ll Guamo, Boli·ar íue comprada en mayo de 1998, por la Sociedad Amín Ál·arez y Cía. S en C, a tra·és de su representante legal, Amaury Amín Pretelt, miembro de una Frma de abogados en Montería. Lsta sociedad le transFrió el dominio a Carlos Arturo Posada Petro, radioaFcionado de esa ciudad registrado en el Ministerio de Comunicaciones, quien en 200¯ se la ·endió a 1riple Cero` por ¯0 millones. Como se senaló antes, se re·ocó la orden de extinguirle el dominio con el Fn de que íuera restituido directamente a quien lo reclamó ,CSJ, Jorge I·an La·erde, 2012-a y 1SJP, 2010-b-,. Lse mismo ano, Luz Llena Palacios Pineda legalizó por escritura pública los supuestos acuerdos celebrados entre su esposo Jairo Pi- neda y Mancuso, sobre los terrenos englobados en el predio Chim- borazo. Posteriormente, Salazar Castaneda, a tra·és de su apoderado, Arrieta Sanchez, los donó a Mancuso. Con base en lo expuesto se obser·a: ! La existencia de la cadena de testaíerrato en las transacciones, particularmente en los que el ·endedor ,Arrieta Sanchez, es el 115 CAPÍ1ULO 3 mismo apoderado de quien le compró ,Salazar Castaneda,. Lste último donante de los tres predios a Mancuso. ! Los ·ínculos entre los tres actores que inter·ienen en las mu- taciones sobre el predio San José. 1odos son de Montería. ! La posible usurpación de un predio de reíorma agraria ,Villa Amalia, sobre el que se decretó la extinción de dominio y su mo- netización por la Corte Suprema de Justicia. MKfK 80"-%7&'$9-1 7- /$ b-A gec 0$"$ /$ "-1,&,:(&)% De lo expuesto anteriormente se puede concluir que, pese a las re·elaciones sobre la apropiación y acumulación de tierras por parte de integrantes de las estructuras de la Casa Castano, la contribución eíecti·a de los desmo·ilizados - postulados en la identiFcación de las tierras y las ·íctimas, así como su entrega para la reparación de las ·íc- timas es incipiente e insuFciente, lo que demuestra la ausencia de una ·erdadera ·oluntad de cumplir en la materia. Ademas, los alegatos de Ll Mono Mancuso` arrojan importantes re·elaciones sobre las ma- niobras empleadas para ocultar las tierras arrebatadas a particulares y al Lstado mediante la ·iolencia y el empleo de la maquinaria de la legalización del despojo. De igual íorma, e·idencian las complejida- des que caracterizan la identiFcación, protección y recepción eíecti·a de los bienes para la reparación de las ·íctimas, y la materialización de la acción de extinción de dominio contra los expoliadores legales e ilegales y contra los usuíructuarios del accionar paramilitar, aspectos que son esenciales para asegurar el éxito de la política de restitución de tierras y territorios pre·ista en la Ley de Víctimas. Ls e·idente que el éxito de la Ley de Víctimas esta asociado al co- nocimiento y a la superación de las limitaciones relacionadas con el íracaso de la Ley 9¯5 de 2005, las que a julio de 2012 se maniFestan en la existencia de dos sentencias en Frme luego de surtirse todas las etapas del proceso judicial, incluyendo el incidente de reparación 110 , y 110 Ll incidente de reparación del proceso contra Ldgar Ignacio lierro llórez alias Don Antonio` íue anulado parcialmente ,CSJ, 2012-b - Ldgar Ignacio lierro llores y Andrés Mauricio 1orres León,. 116 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS de menos de una docena de decisiones en materia de los derechos de propiedad y posesiones de las ·íctimas, ·arias de ellas mencionadas en este documento. Sin pretender abarcar todas las limitaciones, es pertinente e·aluar y adoptar medidas írente a la exigua capacidad y íalta de coordina- ción entre las agencias estatales encargadas de identiFcar, recuperar, administrar y proteger los bienes ilícitos y lícitos de los perpetradores de múltiples crímenes contra la humanidad 111 , ya sea de los que en- tregaron las armas y hacen parte del proceso de Justicia y Paz, como de aquellos que no se desmo·ilizaron o que no íueron postulados a dicho proceso, así como de sus aliados y beneFciarios de su accionar militar. Al respecto ·ale senalar que la incapacidad de la desaparecida Agen- cia Presidencial de Acción Social en la administración y custodia de los bienes entregados por los postulados y en la gestión para concre- tar los oírecimientos realizados por ellos, asimilable a las de la extinta Dirección Nacional de Lstupeíacientes para administrar y disponer de los bienes en procesos de extinción de dominio por enriqueci- miento ilícito, la·ado de acti·os y narcotraFco, son consustanciales a la no recuperación de los predios de las ·íctimas, a las carencias de recursos para la reparación y a la impunidad. Ls por ello que se requiere adoptar correcti·os con el Fn de que no se replique en las dos nue·as Unidades que crea la Ley de Víctimas, de suerte que los 111 Lntre las entidades con íunciones en la materia se encuentran: La liscalía - Unidad de La·ado de Acti·os y Lxtinción de Dominio y la Unidad Llite de Persecución de Bienes de Justicia y Paz, y La Central de In·ersiones -CISA y el Ministerio de Justi- cia y de Derecho recientemente que reemplazan a la extinta Dirección Nacional de Lstupeíacientes ,Ley 1453 de 2011,. 1ambién tienen competencias en esas materias el INCODLR, la Superintendencia de Notariado y Registro, las oFcinas de catastro, notariado, registro, la Unidad linanciera de La·ado de Acti·os del Ministerio de la- cienda y las Unidades Administrati·as Lspeciales Atención y Reparación Integral a las Víctimas y de Gestión de Restitución de 1ierras Despojadas. A las dos últimas se les otorgaron íunciones de la desaparecida Acción Social, entre ellas la administración de los dos íondos pre·istos en la Ley de Víctimas -el de reparación y el de restitución de tierras- ,Ley 1448 de 2011,. 11¯ CAPÍ1ULO 3 londos que deben administrar cuenten con los recursos requeridos para la reparación y la restitución. Complementariamente, se requiere una eíecti·a articulación entre la denominada justicia transicional en materia penal` pre·ista para in·estigar, juzgar y sancionar a los armados desmo·ilizados que cum- plan con los requisitos senalados en la Ley 9¯5 de 2005 -entre ellos la entrega de sus bienes lícitos e ilícitos para la reparación- con su homóloga en materia ci·il ,Ley 1448, de 2011,. A su ·ez, este marco jurídico de justicia transicional` ,penal y ci·il, requiere ser articula- do con la justicia penal ordinaria encargada de las in·estigaciones de parapolítica`, paraeconomía`, parainstitucionalidad ci·il y militar` y narcotraFco, y de extinguir el dominio de los bienes adquiridos de acti·idades delicti·as ,enriquecimiento ilícito y traFco de drogas, en- tre otras,. Sin embargo, no se conoce como se enlazaran los actuales proce- sos de la justicia penal y militar con los denominados procesos de la justicia transicional` deri·ados de la Leyes 9¯5 de 2005 y 1448 de 2011. De esta manera se corren los riesgos: de adelantar procesos de restitución de tierras que desconozcan las in·estigaciones adelanta- das en los procesos penales ordinarios, militares y,o de transición, generar connictos de competencias entre las instancias responsables, duplicar esíuerzos y desoptimizar la racionalidad en la in·ersión de recursos, situaciones que menoscabarían los derechos de las ·íctimas, particularmente en materia de ·erdad, justicia, reparación y garantías de no repetición. Adicionalmente, la satisíacción del derecho a conocer y el deber de re·elar la ·erdad sobre el destierro de los habitantes del campo y de identiFcar y sancionar a los responsables, no parece estar dentro de los objeti·os de la Ley de Víctimas, a diíerencia de lo pre·isto en la ley 9¯5 de 2005 y en la Ley Ordinaria Penal, en las que se exige -por lo menos- conocer la ·erdad judicial. Como se ha expuesto en este tex- to, estas últimas, pese a sus limitaciones, han contribuido a de·elar la relación entre la comisión de gra·es crímenes de derechos humanos e iníracciones al derecho internacional humanitario, con los intereses económicos sobre las tierras y las alianzas concertadas en torno a 118 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS ellos. Ls por ello que se requiere su complementariedad y el dialo- go nuido entre sus operadores. Sólo de esta manera se a·anzara en concretar la interdependencia entre el derecho inalienable a la repara- ción integral, a tra·és de la restitución de los bienes, la indemnización y la compensación de los danos suíridos, con la realización de los derechos también inalienables a la ·erdad y a la justicia. Ln palabras de la Corte ello implica, de una parte: |.| conocer la autoría del crimen, los moti·os y las circunstancias de tiempo, modo y lugar en que ocurrieron los hechos delicti·os, y, íi- nalmente, el patrón criminal que marca la comisión de los hechos crimi- nales`, así como conocer |.| si el delito que se in·estiga constituye un crimen de guerra o un crimen de lesa humanidad` \, de la otra: |.| la obligación |estatal| de in·estigar, juzgar y condenar a los res- ponsables`, |.| sin distinguir si se trata de particulares o ser·idores públicos, |.|`. ,Corte, 200¯,. linalmente, los reiterados ajustes y cambios en materia de bienes de las instancias estatales de la Ley 9¯5 e·idencian las urgencias de ca- pacitación y entrenamiento en el entramado complejo normati·o que regula los derechos sobre la tierra y territorios en Colombia, el que se acentuara sin lugar a dudas con las reclamaciones que íormulen los grupos étnicos y las mujeres. Jesús Abad Colorado © 121 CAPÍ1ULO IV LL DLSPOJO: ,LS1RA1LGIA DL LA LMPRLSA CRIMINAL· La expansión y crecimiento de las estructuras de la Casa Castano, ideóloga y creadora de las ACCU y las AUC en las regiones objeto de este documento ,capítulo primero, y la caracterización de las regio- nes que hicieron presencia las ACCU, así como de la contrarreíor- ma agraria` mediada por la íuerza y la ·iolencia en beneFcio de los asociados a la quíntuple alianza, de una parte, y las ·ersiones de los postulados y otras declaraciones sobre los mó·iles del despojo y sus posibles autores intelectuales y usuíructuarios, así como el balance en rojo en la entrega de tierras para la reparación en el proceso de la Ley 9¯5 ,capítulo tercero, y la caracterización de las regiones que hicieron presencia las ACCU ,capítulo segundo, junto con las ·ersiones de los postulados y otras declaraciones sobre los mó·iles del despojo ,capí- tulo tercero,, permite acercarse a la lógica económica territorial que determinó su expansión en el Uraba, la región Caribe y el Norte de Santander. Lsta per·ersa lógica económica de contrarreíorma agra- ria` mediada por la íuerza y la ·iolencia en beneFcio de los asociados a la quíntuple alianza, se ía·oreció de las ía·orables condiciones geo- graFcas de las regiones seleccionadas y su gran potencial de explo- tación económica de caracter lícito e ilícito. Ln este escenario, élites políticas y económicas, integrantes de la íuerza pública y maFas del narcotraFco, solicitaron, promo·ieron, Fnanciaron o comandaron sin necesidad de ser miembros organicos de las estructuras paramilitares, su presencia y expansión por todo el país. Con base en lo anterior, surge la pregunta sobre la existencia o no de una estrategia macrocriminal de despojo de tierras y territorios y de su legalización, y de cómo participaron y se beneFciaron de ellas los aliados de la quíntuple alianza delicti·a gestada por la Casa Castano: paramilitares, políticos y otros ser·idores públicos ci·iles ,parapolí- 122 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS tica` y parainstitucionalidad ci·il`,, militares ,parainstitucionaliad militar`,, élites locales políticas, económicas y empresariales ,parae- conomía` y paraempresarismo`,, y narcotraFcantes transíormados en paramilitares o no ,paranarcotraFco` o narcoparamilitarismo`,. Lspecialmente cuando la simbiosis de dichos íenómenos y su rela- ción con la reconFguración del Lstado no puede desligarse de Fnes de enriquecimiento propio o ajeno y reírendación de estatus sociales y políticos encubiertos bajo la retórica de eliminar la sub·ersión. Para responder a esta pregunta, en el presente capítulo, en primer lugar se hace una bre·e descripción de la Casa Castano y de su ex- pansión. Ln seguida se comentan los elementos que caracterizaron la empresa criminal íorjada por los hermanos Castano. A continuación, en torno a dichos elementos, se hace reíerencia al modelo del despojo de los títulos colecti·os de aírodescendientes de las cuencas de los ríos Cur·aradó y Jiguamiando. Con base en ese modelo y en los ele- mentos que dan cuenta de un patrón de ·aciamiento y atesoramiento de tierras y del uso de la maquinaria estatal para montar una empresa de legalización del despojo` tendente a íormalizar` las tierras adqui- ridas o las tierras recuperadas`, en tercer lugar, se alude a los Proyec- tos Producti·os por la Paz de alias 1riple Cero` y alias Ll Aleman`, y en seguida, se comentan los casos de la apropiación de tierras y territorios en los que se han adoptado decisiones judiciales en los procesos de Justicia y Paz que in·olucran a Jorge 40`, Ll Aleman` y Pedro Bonito`. Para Fnalizar se íormulan algunas renexiones sobre la restitución de tierras en la Ley de Víctimas. 4. LL !"#$% "'()*+#, DL LA CASA CAS1ANO Los tres hermanos Castano Gil: lidel, Carlos y Vicente, originarios de AmalF, un pequeno pueblo de Antioquia, padecieron el asesinato de su padre, supuestamente a manos de la guerrilla de las luerzas Armadas Re·olucionarias de Colombia ,lARC,, en 1980, así como la pérdida del predio paterno Ll lundidor, localizado cerca de Sego·ia. Lstas situaciones, según Carlos Castano, moti·aron a lidel a con·er- tirse |.| en lo que íue hasta el día de su muerte |.| una maquina de hacer plata` y un antisub·ersi·o hasta los tuétanos` que no tenía escrúpulos` para obtener ingresos para la guerra y su enriquecimien- 123 CAPÍ1ULO 4 to personal ,Aranguren, 2009,. Ln este aían de riqueza y poder íue socio de Pablo Lscobar a quién después combatió con Los Pepes`, cercano a políticos y empresarios y amigo de ex militares israelíes. A Fnales de los anos ochenta, lidel Castano coníormó con recur- sos propios pro·enientes de acti·idades de narcotraFco, contrabando, robo de caballos, mercancías y madera, entre otros ,Romero, 2003,, y con el apoyo Fnanciero y logístico de ganaderos de Valencia y 1ierral- ta 112 y de militares 113 , el grupo Los 1angueros` o Autodeíensas del Mono López`, -nombre con el que es conocido el ex gobernador de Córdoba in·estigado por parapolítica y acusado de ser uno de los sus- criptores del Pacto de Ralito, que tenía entre sus cometidos reíundar la patria`- 114 , en cuya íormación participó Sal·atore Mancuso, quien |.| consiguió las armas con ayuda del Ljército y nacieron Los 1an- gueros, autodeíensas comandadas por lidel Castano, que tomaron el nombre de la íinca Las 1angas, que Castano le había usurpado a una íamilia antioquena |.| 115 . A la muerte de lidel Castano, íundador de la Casa Castano, el lega- do a sus hermanos, Carlos y Vicente, no sólo consistió en transmitir- les su obsesión antisub·ersi·a y de ser un hombre rico` ,Aranguren, 2001: p. 82,, sino que también los preparó para controlar los territo- rios recuperados de las guerrillas y generar recursos e in·ertirlos. Al respecto, Carlos Castano y Carlos Mauricio García, alias Doble Cero` se reFeren la tactica de lidel |.| comprar tierras y hacer tra- bajo social`, como estrategia para ejercer poder social y económico en las regiones que controlaban ,Aranguren, 2002,. Se calcula que el íundador de la Casa Castano llegó a poseer mas ·einte mil hec- tareas en Córdoba y Uraba ,Romero, 2003,. Ln terrenos de uno de sus predios, Las 1angas, según narró García, impulsó un proceso de reíorma agraria integral` ,Ci·ico, 2009, para lo que constituyó la 112 1eraaa.bierta: Los Castano, Los 1angueros` y el origen del Bloque Bananero en el Uraba`. 113 1eraaa.bierta: Rambo`, lidel Castano`. 114 Los Castano, Los 1angueros` y el origen del Bloque Bananero en el Uraba`, op. cit., y detenido Jesús María López Gómez, ex gobernador de Córdoba. 115 1eraaa.bierta: Ll Mono Mancuso`, Sal·atore Mancuso`. 124 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS lundación para la Paz de Córdoba ,lunpazcor,, administrada por Sor 1eresa Gómez Ál·arez, actualmente in·estigada por sus ·ínculos con la apropiación ilegítima e ilegal de tierras, la que beneFció a miembros acti·os de la Casa Castano y a empresarios e instituciones como el londo Ganadero de Córdoba, tal y como se describe mas adelante. Ln palabras de Carlos Castano: Al entregarle tierra a mas de cinco mil íamilias y muchos ex guerrille- ros del grupo LPL, sin duda captabamos íuerza social, y íuerza social es poder ,Aranguren, 2001: p. 82,. Las tierras íueron cedidas a ex guerrilleros del Ljército de Libera- ción Popular ,LPL, después de las desmo·ilizaciones de ese grupo y de su reinserción bajo el Mo·imiento Lsperanza, Paz y Libertad, y a miembros de Los 1angueros` de lidel Catano. Ante la arremetida de las lARC que no se hicieron parte de los acuerdos de paz de 1991, se recrudeció el accionar de la Casa Castano en la región y algunos miembros del LPL entraron a engrosar las Flas comandadas por li- del, y íueron los que según alias ll` ,Veloza, 2011, deFnieron mu- chas de las acciones criminales perpetradas contra los habitantes de las regiones en que operó el autodenominado Bloque Bananero`. Asesinado lidel, Carlos Castano, a quien llamaban Ll Pelado` se dedicó a períeccionar el discurso antisub·ersi·o con el apoyo de per- sonas amparadas en la legalidad como Rodrigo García 116 , ex presi- dente del londo Ganadero de Córdoba, a quien llamaba su segundo padre` ,Aranguren, 2001,, e ilegales como Doble Cero`, el ex co- mandante del Bloque Metro, a quien le íue encargada la íormación político-militar de los integrantes de las Autodeíensas Campesinas de Córdoba y Uraba, creadas en 1994, el mismo ano en que se posesionó Ál·aro Uribe Vélez como gobernador de Antioquia ,Romero, 2003,. Su hermano, Vicente Castano, conocido como Ll Proíe` o \a- rumo`, desmo·ilizado con el Bloque Centauros, se encargó de la ges- tión empresarial y Fnanciera de la Casa Castano, que incluía la apro- piación de predios urbanos y de tierras a precios irrisorios, mediada 116 lue capturado en 2009 y íalleció en enero de 2011. 125 CAPÍ1ULO 4 por el terror y la íuerza, y la promoción de negocios lícitos e ilícitos ,Mancuso, 2011,. Ls así como bajo el liderazgo de los citados tres hermanos se con- solida el poder de la Casa Castano en el Uraba chocoano, cordobés y antioqueno, a tra·és de los grupos que la integraron. Ll liderazgo de los hermanos Castano íue decisi·o en la expansión de los grupos paramilitares, debido a su determinante contribución en la íorma- ción y en el íortalecimiento de los principales grupos de autodeíensas campesinas en el litoral Caribe y en Norte de Santander, entre otras zonas de la geograíía nacional. Particularmente, a Vicente Castano se le identiFca como uno de los líderes de la apropiación ilegítima de bienes muebles e inmuebles ,Mancuso y Veloza, 2011, en el Uraba ,Ver: despojo en Jiguamiandó y Cur·aradó y 1ulapas: Despojo en zonas de Ll Aleman`, y en otras regiones del país, en especial la de los llanos Orientales, algunos de los cuales se encuentran en proceso de extinción de dominio ante la Unidad de Lxtinción de Dominio y La·ado de Acti·os, como Montecasinos, la residencia de los herma- nos Castano en Medellín ,CSJ, 2011-i - José Ignacio Roldan Pérez - extinción de dominio,. Luego de la muerte de lidel Catano, la estrategia de expansión y crecimiento de la Casa Castano íue liderada políticamente por Carlos Castano y económicamente por alias Ll Proíe`, a quien alias Veci- no` denominó el cerebro de la expansión paramilitar` 11¯ . Sal·atore Mancuso, ganadero de Córdoba, comandante del Bloque Córdoba y quien según Castano, le dio estatus social` a la Casa Castano ,Aran- guren, 2009,, íue el encargado de buscar los apoyos de las élites regio- nales establecidas y emergentes, entre ellas |.| íamilias prestantes y representati·as, con liderazgo económico y político` ,CSJ, 2010-g - Jorge de Jesús Castro Pacheco,. Mancuso lo describe de la siguiente manera: |.| una estrategia que consistió en duplicar el exitoso modelo de au- todeíensas creado por los hermanos Castano en el Uraba antioqueno y 11¯ 1eraaa.bierta: Vicente Castano íue el cerebro de la expansión para`` ,Vecino,. 126 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS en Córdoba, ya con mi participación, hacia el resto de la costa Atlantica, por eso nos dimos a la tarea de ubicar y reclutar adeptos en otros de- partamentos que compartieran nuestra con·icción antisub·ersi·a, y que tu·ieran una o ·arias de las características del períil requerido por nues- tra organización para que íungieran como líderes en diíerentes matices propicios para el objeti·o que en esa época nos alentaba: la expansión de nuestro mo·imiento con la correspondiente liberación de los territorios costenos que en ese momento se encontraban en manos de la guerrilla |.| ,Mancuso, 200¯,. Consolidada la Casa Castano con sus aliados en el departamento de Córdoba y en el Uraba chocoano-antioqueno, Carlos Castano le asig- na a Sal·atore Mancuso ampliar su cobertura y coníormar el Bloque Norte, mediante la multiplicación de las CONVIVIRLS ,íbiaev,. Se- gún Mancuso, en la coníormación de las CONVIVIRLS en Uraba se contó con el apoyo de personalidades locales y nacionales, entre ellas Pedro Juan Moreno, ex secretario de la Gobernación de Antioquia y ex asesor del presidente Ál·aro Uribe Vélez 118 , de quien aFrma com- partía la ideología de las autodeíensas, y lerman Arias Ga·iria, ex superintendente y ex personero de Bogota 119 . Ls a tra·és de las Coo- perati·as de Vigilancia al amparo de la normati·a que propiciaba la organización militar de los ci·iles, se estrechan y íortalecen las alian- zas entre la Casa Castano con élites políticas y ser·idores públicos 120 , tal y como se ha e·idenciado en los procesos de Justicia y Paz y de la parapolítica, en los que se ha mencionado, entre otras a las CONVI- VIRLS Papagayo`, en la que se consignaban las contribuciones de los empresarios del eje bananero de Uraba, la Nue·o Amanecer`, de Ja·ier Piedrahita, denunciado por su cercanía a los Ochoa Vasquez, 118 1eraaa.bierta: Según Mancuso Pedro Juan Moreno ayudó a las AUC a montar CONVIVIR en Uraba y los guardados` de Mancuso`. 119 1avgvaraia íiberat: lerman Arias Ga·iria me dio la licencia para crear mi CON- VIVIR`: Mancuso`. 120 Para mayor iníormación sobre las CONVIVIR ·er: entre otras la sentencia de la Corte Suprema de Justicia que condenó a alias Diego Vecino` y Juancho Dique` ,CSJ, 2011-g Segunda instancia. Ldwar Cobos 1éllez y Uber Lnrique Banquez Martí- nez,. 12¯ CAPÍ1ULO 4 Siete Cueros` y Guayacanes`, de José María Barrera, alias Chepe Barrera`, lorizonte` y Guaymaral`, de Sal·atore Mancuso, Abi- be`, de Monoleche`, Los Arrayanes, de Juan lrancisco Prada Mar- quez, alias Juancho Prada`, Orden y Desarrollo`, de Salomón leris Chadid, alias 08`, y, presuntamente, las del esposo de Lnilce López, alias La Gata`. La Casa Castano creó, en 1994, las ACCU, que se extendieron por toda la geograíía del país, gracias al apoyo de élites políticas, sociales, económicas y maFosas, con los que compartían intereses, tal y como lo describió Mancuso: |.| empiezan a ser un mo·imiento de miles de hombres y con una presencia territorial que abarcaba una tercera parte del país. Sin que per- dieran su caracter de ilegal, tu·ieron que mutar para sobre·i·ir en su nue·a íorma, y esa no pudo ser otra distinta a la autonomía de quienes ejecutaban la lucha antisub·ersi·a ejercida en los territorios que cada quien iba liberando y ocupando, para lo cual era imprescindible la li- bertad administrati·a, disciplinaria, íinanciera, política ,Mancuso, 2006,. Ll animo expansionista de la Casa Castano dio lugar a la creación en 199¯ en las Autodeíensas Unidas de Colombia ,AUC, robusteci- das, de un lado, por el ingreso de narcotraFcantes y del otro por la inmersión de las estructuras de la Casa Castano en el negocio de los narcóticos, la captura de rentas públicas, la apropiación y ocupación ilegal y ·iolenta de tierras y territorios, y la puesta en marcha de pro- yectos agroindustriales, íorestales y mineros -temas a los que se hace reíerencia mas abajo-. De las AUC hicieron parte las Autodeíensas Campesinas del Magdalena Medio ,ACMM, y las Autodeíensas Cam- pesinas del Casanare ,ACC,, ademas de otras estructuras ·inculadas directamente al narcotraFco, entre ellas las que coníormaron el Blo- que Central Bolí·ar ,BCB,. Ln julio de 2001, el encargado de la expansión militar, Sal·atore Mancuso, con·ocó a políticos y otras personalidades a la reunión en Santa le de Ralito, 1ierralta, departamento de Córdoba, en la que se suscribió el Pacto de Ralito, que catapultó la empresa criminal del paramilitarismo y la alianza entre dirigentes políticos regionales y íun- cionarios, y ganadero y terratenientes de Córdoba, Sucre, Bolí·ar y 128 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Magdalena y los líderes paramilitares de las AUC ,Don Berna`, Jor- ge 40`, Diego Vecino` y Mancuso, entre otros,, con el Fn de con- solidar un mo·imiento político que ocupara espacios en el Congreso de la República para írenar los posibles acuerdos en las negociaciones con las lARC que adelantaba el gobierno de Andrés Pastrana Aran- go. Ln palabras de Mancuso: No compartíamos la idea de una nue·a constituyente` ,Mancuso, 2011,. Ll objeti·o del acuerdo suscrito en la Fnca de 08`, consistía en reíundar la patria` y construir |una| nue·a Colombia`, a tra·és de un nue·o contrato social de Ralito`, aovae toaa ¡er.ova tieve aerecbo a ta ¡ro¡ieaaa. Lntre los Frmantes estaban los ex gobernadores condenados por sus ·ínculos con los paramilitares de Sucre, Sal·ador Arana, y de Cór- doba, Jesús María López, y los ex congresistas -también condena- dos- de Magdalena, Alíonso Campo Lscobar y José María Imbeth, de Córdoba, Juan Manuel López Cabrales, y de Sucre y Jorge Luis leris Chadid, entre otros. Lste Pacto, así como otros suscritos antes y después -entre ellos Chi·olo, Pi·ijay, Casanare, Singapur, Barranco Loba y Caldas- ,anexo ¯. Los pactos de la empresa criminal,, les permitieron a las estructuras íorjadas por la Casa Castano inter·enir en el manejo de lo público y en los procesos electorales, a tra·és de sus propios candidatos y de partidarios de la causa paramilitar ,captura del estado, para imponer un nue·o pacto social`, en torno a lo que Jorge 40` denominó los estados de autodeíensa` y Ll Mono Mancuso` el Clamor Campe- sino Caribe`, tal y como lo ha descrito la Corte Suprema de Justicia en sus sentencias contra ser·idores públicos condenados por concierto para delinquir, algunas de las cuales se mencionan a lo largo de este texto. Lste acople íue determinante en la deFnición de los Acuerdos de Santa le de Ralito suscritos entre el Gobierno y las AUC en diciem- bre de 2002 y julio de 2003 que dieron lugar a la desmo·ilización de treinta y un mil seiscientos sesenta y cuatro de sus integrantes, en lo que se presentó como un proceso de paz. 129 CAPÍ1ULO 4 1anto en el con·encimiento a los líderes de las AUC para entrar en el proceso de negociación, como en los citados Acuerdos íue predo- minante la labor de \arumo`, desmo·ilizado del Bloque Centauros, y de 1riple Cero`. Lstos excomandantes íueron protagonistas en la selección y en la postulación a la Ley 9¯5 de los miembros represen- tantes de cada una de las estructuras de las AUC. Paradójicamente, los hermanos Carlos y Vicente que gestaron, expandieron y consolidaron la empresa criminal no hacen parte del proceso de Justicia y Paz. Ll primero renunció a su comandancia político-militar luego de la Frma del Pacto de Ralito, supuestamente por que se opuso a que los nar- coparas` hicieran parte de los acuerdos con el Gobierno. Por su ho- micidio en el ano 2004 íue condenado su hermano Vicente. La muer- te de Vicente, aún no aclarada ni conFrmada, se ha explicado como eíecto de disputas de poder entre distintas íracciones de los grupos paramilitares y el temor de ciertos sectores de que los in·olucrara en el accionar paramilitar. Ln los dos hechos aparentemente participó Monoleche`, yerno de Sor 1eresa Gómez Ál·arez, la cunada de los hermanos Castano, compradora de tierras para la Casa Castano. NKJK b$ -=0"-1$ ("&=&%$/ Para contextualizar los alcances de la empresa criminal que se ex- pande a partir del modelo de los hermanos Castano Gil y que se proyecta al ni·el nacional con el contrato social de Ralito`, es íun- damental acudir a los íallos de la Corte Suprema de Justicia en los procesos de parapolítica, en los cuales se han condenado a senadores, representantes y gobernadores, entre otros íuncionarios de elección popular, la mayoría de ello oriundos de las regiones objeto de esta in·estigación 121 . 121 Senadores en procesos de parapolítica entre 2006 y 2010. Senadores: Antioquia ,9,, Sucre ,5, Norte de Santander ,4,, Atlantico ,4,, Bolí·ar ,3,, Cesar ,2,, Magdalena ,2, y Representantes: Magdalena ,6,, Cesar ,3, y Sucre ,3,. Ln total: 41 ,Ln: http:,,www. ·erdadabierta.com,component,content,article,1¯3-estadisticas,3826-estadisticas- parapolitica,. 130 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Dichas condenas se han sustentado en la teoría de la concurren- cia de personas en el delito y los aparatos organizados de poder` 122 , con base en la cual se ha demostrado la réplica de la Casa Castano en la ampliación de las zonas de dominio y control paramilitar. Pri- mero, militarmente, con apoyo y asesoría de miembros de la luerza Pública y el íortalecimiento de los grupos de autodeíensas y de quie- nes los Fnanciaban ,CONVIVIRLS`, y luego con la concurrencia de agentes públicos y pri·ados consolidandose así la empresa crimi- nal, caracterizada por: i, la existencia de un propósito criminal co- mún, ii, la reconFguración cooptada del Lstado` ,Garay, 2010,, iii, la concertación y alianzas con agentes pri·ados, i·, la metamoríosis de las autodeíensas a un cartel del narcotraFco, y ·, el apoderamiento y despojo sistematico, masi·o y ·iolento de tierras, tal y como se detalla en seguida 123 . NKJKJK <".0)1&,. ("&=&%$/ Coníorme a la Corte Suprema de Justicia el íenómeno paramilitar corresponde a aparatos organizados de poder que se concertaron con agentes públicos y pri·ados, legales e ilegales, con un propósito crimi- nal de reíundar la patria`, esto es, de imponer |.| un modelo de gestión de los asuntos públicos locales, regionales e incluso nacionales paralelo y multipartidista |.| ,CJJ, 2011-d - José Domingo Da·ila Armenta,. Con esa Fnalidad delicti·a, según, dicho organismo, |.| era designio de los grupos paramilitares arrasar ciudadanos u or- ganismos que se opusieran a consolidar su poder y expansión y, por ello, dentro de sus acti·idades ordinarias ejecutaron múltiples conductas cri- minales, entre otras caliíicadas como delitos de lesa humanidad -tortura, 122 1ambién conocida como autoría mediata en aparatos organizados de poder con instrumento íungible pero responsable o autor tras el autor. 123 A lo largo del proceso de la Ley 9¯5 se han compulsado 11.821 copias a la justicia ordinaria con el Fn de que se adelanten las respecti·as in·estigaciones contra 9.596 par- ticulares, 999 políticos, 916 miembros de la luerza Pública y 33¯ ser·idores públicos ,liscalía, 2012-a,. 131 CAPÍ1ULO 4 desapariciones íorzadas, desplazamiento íorzado, etcétera-, y ataques a la dignidad de las personas |.| 124 ,CSJ, 2010-e - Ál·aro Araujo Castro,. Ls decir, para el logro del propósito común de reíundar la patria`, militar, política y económicamente, pactado en Santa le de Ralito, se planeó y ejecutó de manera sistematica y generalizada un plan crimi- nal` contra la población ci·il ,1SJP, 2010-b - Jorge I·an La·erde,, del cual hacía parte la estrategia de tierra arrasada -el desplazamiento, el abandono de tierras y territorios- y, por consiguiente su apropiación a sangre y íuego y su legalización con la aquiescencia y colaboración de múltiples socios legales e ilegales. NKJKLK `>-(.%H#:"$(&)% (..0,$7$ 7-/ ?1,$7.a Ll otro elemento que caracteriza la empresa criminal es la reconF- guración cooptada del Lstado`, la que según Garay „ otros consiste en: La acción de organizaciones legales e ilegales que mediante practicas ilegítimas, buscan modiíicar desde adentro, el régimen político de ma- nera sistémica e iníluir en la íormación, modiíicación, interpretación y aplicación de reglas de juego y de políticas públicas, para obtener be- neíicios sostenibles para su propio pro·echo y de manera sostenible y lograr que sus intereses sean ·alidados política y legalmente, así como legitimados socialmente en el largo plazo, aunque éstos no obedezcan al interés rector del bienestar social ,Garay „ otros, 2010:220,. 124 La Corte senala los siguientes tres elementos que caracterizaron la estructura de los grupos paramilitares: 1,. Lxistencia de una organización integrada por una pluralidad de personas sustituibles antes o durante el e·ento criminal las cuales mantienen una relación jerarquica con sus superiores. Aquellas personas pueden o no tener cierta pre- disposición a la comisión de delitos, 2,. Control ,dominio, de la organización por parte del hombre de atras y a tra·és de ella de sus integrantes sustituibles. Dicho control puede maniíestarse bajo distintas modalidades: a tra·és de la creación de la organiza- ción, el no control del mismo pudiendo hacerlo dada su posición o a tra·és del impulso sostenido de la misma con medidas dirigidas a autorizar sus actuaciones ilícitas. Ln to- dos estos supuestos se e·idencia, por parte del hombre de atras, un dominio del riesgo -que es el aparato de poder- de producción de actos ilícitos, y, 3,. Conocimiento de la organización o aparato de poder y decisión de que sus miembros ejecuten o continúen ejecutando hechos ilícitos penales` ,CSJ, 2010-e - Ál·aro Araujo Castro,. 132 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Son propios de la reconFguración estatal los siguientes elemen- tos ,íbíaev,: i, la existencia de intereses que transcienden el ambito económico ,acumulación de riqueza, y que incluyen la búsqueda de disminuir el riesgo de exposición penal ,ser identiFcado, in·estigados, juzgados y sancionados,, ii, la utilización de métodos criminales ,ase- sinatos, amenazas, sobornos, entre otros,, iii, la apetencia de incidir en las decisiones de todas las entidades del Lstado, y i·, la concu- rrencia de intereses de actores legales e ilegales. Así las cosas, en la empresa paramilitar el designio de reíundar el Lstado` no pro·enía exclusi·amente de los miembros de las estructuras armadas sino de ellos y de sus aliados legales. Ls así como la toma maFosa de todos los poderes e instancias de decisión del Lstado` ,CSJ, 2009-b Jorge Lliecer Anaya,, se dió espe- cialmente a tra·és de la parapolítica`, esto es el copamiento de los espacios políticos, mediante el apoyo en la elección de personas de su absoluta conFanza 125 y de seguidores, amigos o socios de la causa paramilitar, que se a·inieron a un concierto para delinquir ,anexo 8. La parapolítica, 126 , alguno de los cuales |.| si bien íungían como ·oceros de partidos u organizaciones polí- ticas legalmente reconocidas, realmente hacían parte de la cúpula de los grupos paramilitares y en tal condición hacían parte de la cater·a líder o directorio de mando -comandancia suprema- que disenaba, planiíica- ba, proyectaba, íorjaba e impulsaba las acciones que debía desarrollar la empresa criminal en aras de consolidar su a·ance y obtener mas réditos dentro del plan disenado ,CSJ, 2009-C - Ricardo Llcure Chacón, 12¯ . 125 Lntre ellas Lleonora Pineda Arcia y Miguel Alíonso de la Lspriella ,Mancuso, 2009- c,. 126 Que se expresaba a tra·és de mo·imientos como el de Pro·incia Unida` ,1o·ar Pupo,, Clamor Popular` ,Sal·atore Mancuso,, y Por una Uraba Grande, Unida y en Paz` ,Rendón lerrera,. 12¯ La Corte Suprema dispuso que se in·estigara los crímenes de lesa humanidad ,CSJ, 2009-e Sal·ador Arana Sus, ex gobernador de Sucre, y los delitos de desplaza- miento íorzado ,CSJ, 2011- Oscar de Jesús López Cada·id y 2010-c Ál·aro Alíonso García,, desaparición íorzada y homicidio ,CSJ, 2010-c, homicidio y masacres ,CSJ, 2009-í - Gonzalo García Angarita,. Ademas ordenó in·estigar a los congresista|s|- paramilitar|es|` por todos los delitos cometidos por los paramilitares ,CSJ, 2010-c - Ál·aro Alíonso García, 2010-g - Jorge de Jesús Castro Pacheco y 2010-í - lernando Molina Araujo, ex gobernador del Cesar,. 133 CAPÍ1ULO 4 A su ·ez, la cooptación dio lugar al íenómeno de la parainstitucio- nalidad ci·il`, ya sea con íuncionarios que eran organicos` y com- partían los planes y Fnes de la empresa criminal ,CSJ, 2010-g Jorge de Jesús Castro Pacheco y 2011-e José Domingo Da·ila Armenta,, o de aquellos que ser·ían a sus intereses a cambio de di·idendos econó- micos y de boniFcaciones 128 , entre otras contraprestaciones. De esta manera, como lo ha senalado el citado 1ribunal se montó una gigan- tesca iníraestructura de corrupción` ,CSJ, 2009 Sal·ador Arana Sus, que permitió destinar recursos del erario público y capturar entidades para el logro del propósito criminal de reíundar el Lstado` 129 , el que incluía, entre otros aspectos: i, desmontar reíormas de la Constitu- ción de 1991 y e·itar que como eíecto de posibles negociaciones con las guerrillas se pactara una nue·a Constituyente` ,Mancuso, 2011,, ii, impulsar la adopción de iniciati·as legislati·as y de políticas públi- cas que ía·orecieran sus intereses militares, económicos y políticos, entre ellos la Ley 9¯5 de 2005,, y iii, apalancar recursos públicos y ac- ceder de manera preíerente a los incenti·os, estímulos y demas bienes y ser·icios del Lstado para sus iniciati·as económicas 130 . 128 Alias Vecino` contó que los ingresos deri·ados de entidades locales y de otras íuentes |.| los utilizaron en pago de nómina |.| así como iníormantes |.| ,y pagos a, autoridades que colaboraron` con las AUC` ,1SJP, 2010-a - Jorge I·an La·erde,, y alias Cabo Machado` se reFrió a los pagos a integrantes de la luerza Pública` ,1SJP, 2011 - Aramis Machado Ortiz ,. 129 Ll condenado Cobos 1éllez, ex comandante del Bloque Montes de María con- tó como entregó |.| a los tres írentes de este bloque, de junio de 2004 a julio de 2005 como subsidio para los gastos, la suma de tres mil no·ecientos millones de pe- sos ,‰3.900.000.000.,, írente a cuatrocientos ·eintitrés millones ochocientos mil pesos ,‰423.800.000, recibidos de las diíerentes alcaldías municipales |.| ,VerdadAbierta: Así se robaron el golío de Morrosquillo`,. 130 Lntre los beneFciarios del Programa Agro Ingreso Seguro ,AIS, se encuentran Ma- rio Uribe Lscobar y, aparentemente, lumberto de J. Builes, ex congresistas condena- dos por parapolítica. 1ambién íueron receptoras de AIS, las empresas Clamasan S. A., y Agrícola Ll Retiro S. A., cuyo representante, Santiago Gallón lenao, aceptó haber Fnanciado a las AUC y esta ·inculado al proceso de Chiquita Brands ,Re·ista Semana: lasta Mario Uribe se beneFció con Agro Ingreso Seguro,. 134 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Adicionalmente, agentes de la luerza Pública ,acti·os y retirados, como miembros acti·os de las estructuras íormaron doctrinaria y militarmente a los comandantes políticos y militares en el propósito criminal de reíundar la patria`, y otros armaron y colaboraron con estructuras criminales ,parainstitucionalidad militar`,. Lsta maqui- naria se aceitaba con las boniFcaciones y pagos de altas sumas de dinero a miembros de la luerzas Armadas y de Policía a cambio de que omitieran sus deberes constitucionales y legales de controlar y combatir estructuras delicti·as como las paramilitares. Ln esta línea, Raíael García 1orres, ex íuncionario del Departa- mento Administrati·o de Seguridad ,DAS, y testigo en los procesos de parapolítica narró que |.| el aumento de seguridad no signi- Fcaba la existencia una política de seguridad equitati·a írente a los dos grandes actores del connicto generadores de ·iolencia`, puesto que se |.| se pasaron por alto los grupos paramilitares del Bloque Norte`, y se eíectuaban reuniones o se conocía donde localizarlos con reconocidos líderes paras` ,CSJ, 2010-g - Jorge de Jesús Castro Pacheco y 2011-n - Jorge Aurelio Noguera Cotes,. Al respecto, el 1ribunal de Justicia y Paz reiteró que: |.| desde la Corte Interamericana de Derechos lumanos, hasta au- toridades judiciales del orden nacional han demostrado que entre las autodeíensas y,o paramilitares y la luerza Pública hubo colaboración recíproca con la íinalidad de íacilitar el actuar del grupo armado orga- nizado al margen de la ley. Son múltiples los casos que se han puesto de presente y que muestran como algunos miembros del Ljército -no la Institución- íacilitaron las incursiones a poblaciones, que terminaron en masacres ,1SJP, 2010-a - Jorge I·an La·erde,. Sobre el particular y partiendo de la obligación internacionalmen- te adquirida por el Lstado colombiano en ,sic, in·estigar y sancionar las gra·es ·iolaciones a los derechos humanos y con el interés de cui- dar del buen nombre de la luerza Pública`, el 1ribunal Supremo de Justicia, exhortó a la liscalía a: |.| coníormar una Unidad Lspecial para la in·estigación, persecu- ción y captura, dentro de un plazo razonable, de aquellos miembros de 135 CAPÍ1ULO 4 las luerzas Armadas que participaron en los ataques cometidos contra la población ci·il, con cuyo actuar han deshonrado el buen nombre de sus instituciones, ocasionando la pérdida de coníianza en las mismas` ,1SJP, 2011-a - Ldgar Ignacio lierro llores, Andrés Mauricio 1orres León, y Léster María Gonzalez Romero,. NKJKMK 81.(&$(&)% (.% $#-%,-1 -(.%)=&(.1 Como lo senaló la Corte Suprema de Justicia, las autodeíensas cam- pesinas y los delitos que cometían respondían a intereses de grupos económicos -ganaderos principalmente- decididos a combatir abier- tamente el accionar de la guerrilla` ,CSJ, 2009 - Sal·ador Arana Sus,, a cambio del pago de contribuciones, las que se siguieron aportando a las estructuras uniFcadas por la Casa Castano. Dichos aportes de manera íorzada ,extorsiones, o consentida -expresa o tacitamente- íueron sustanciales al dominio paramilitar 131 . Son incontables las empresas que se han mencionado en las ·er- siones como contribuyentes de las AUC, incluyendo multinacionales como Chiquita Brands, condenada a pagar una multa de ·einticinco millones de dólares al 1esoro de Lstados Unidos por Fnanciar grupos terroristas. Lsta era una de las empresas del Grupo de los Veinte` coníormado por bananeros de Uraba, que consignaban a la CONVI- VIR Papagayo |.| tres centa·os de dólar por cada caja de banano exportado para Fnanciar a las autodeíensas` ,lasbún, 2008-b, 132 . Por su parte, Libardo Duarte, alias Bam Bam`, en el proceso que se adelanta por el asesinato de tres sindicalistas ante la Corte del Distrito del estado de Alabama, Lstados Unidos, aFrmó que él se enteró |.| a tra·és de Omega que la Drummond tenía un importante acuerdo con las AUC, y que la Drummond le pagaba a las AUC cerca de 131 Los aportes podían consistir en dinero o en especie: gasolina, pro·isiones, ·ehículos y Fncas en las que se instalaban con pleno consentimiento de sus propietarios |.| no eran Fncas de la organización pero sí eran Fncas de gente colaboradora de la organiza- ción ,Veloza, 200¯, palmicultores, ganaderos, entre otros` ,Lntre·ista con postulados en la carcel de Valledupar,. 132 Ver: 1eraaa.bierta: Los paras y los negocios del banano y la palma. Ll dinero del banano sir·ió para Fnanciar la guerra`,. 136 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS quinientos mil dólares al mes` 133 . Ln la sentencia que condena a alias Cabo Machado` se mencionan como aportantes del BCa a las si- guientes empresas: 1LRMO1ASAJLN, COO1RANSC•CU1A, 1ejar de Pescadero, NORGAS, Gaseosas La lrontera ,Postobón,, Lstación de Ser·icio San Raíael, Arrocera Gal·ez, Carbones La Mirla, lerretería Ll Palustre, INDUCARGA, COLMINAS y Canolimón` ,1SJP, 2011 - Aramis Machado Ortiz,. Pero esta no íue la única contribución de los agentes económicos- miembros de gremios económicos ,algunos ganaderos, agricultores de extensión y terratenientes`,, entre otros-, en lo que se ha denomi- nado la paraeconomía` ,1SJP, 2011-a - Ldgar Ignacio lierro llores, Andrés Mauricio 1orres León, y Léster María Gonzalez Romero,. ,paraeconomía`,. Ln la medida en que muchos de ellos íueron los protagonistas de la altísima representación que tu·ieron los grupos paramilitares en los órganos de elección popular y en la instituciona- lidad pública en todos los ni·eles, ingresaron o se apro·echaron de la maquinaria estatal para lograr sus Fnes particulares y ía·orecerse con los despojos de tierras y la captación de dineros ilegales` de la empresa criminal ,1SJP, 2011-a - Ldgar Ignacio lierro llores, Andrés Mauricio 1orres León, y Léster María Gonzalez Romero,. Ln eíecto, la mayoría de los condenados por parapolítica` eran y son terrate- nientes, ganaderos, agroindustriales, o pertenecen a las elites pudien- tes de las regiones en que íueron elegidos, algunos de los cuales no sólo simpatizaban con la causa paramilitar sino que eran miembros acti·os de ella y, por lo tanto, determinadores de sus acciones crimi- nales o eran íamiliares de organicos` de las AUC ,CSJ, 2010-g - Jorge de Jesús Castro Pacheco y 2009 Sal·ador Arana Sus,. De esta manera, puede aFrmarse que el poder adquirido les permi- tió adoptar o por lo menos incidir en decisiones de política en el ni·el nacional, regional y local. Si bien, no existen analisis sobre la inciden- cia de los parapolíticos` en la adopción de leyes, como lo describe 133 Ver: 1eraaa.bierta: Los nexos de la Drummond y los paras según Bam Bam``. 13¯ CAPÍ1ULO 4 Ungar ,2010,, entre los deíensores de normas procli·es al despojo y de economía agraria`, se encuentran ·arios de los in·estigados y condenados por la Corte por concierto para delinquir 134 . \, por supuesto, empresarios, ganaderos, banqueros, terratenientes, entre otros íungieron como testaíerros por amistad con los ex co- mandantes, aFnidad con la causa criminal o por satisíacer su animo de lucro rein·irtiendo recursos ilegales en negocios legales, entre ellos la compra de tierras y la puesta en marcha de proyectos turísticos, mineros, agrícolas, ganaderos, íorestales y agroindustriales ,paraem- presarismo`,. NKJKNK D$"(.,&'$(&)% 7- /$1 8S; Como se expuso antes, los ·ínculos de la Casa Castano con las maFas del narcotraFco que propiciaron su crecimiento, expansión y consolidación territorial 135 , desFguraron su discurso antisub·ersi·o para tornarlas en un cartel mas de la droga que en una primera ins- tancia gra·aba culti·os y corredores estratégicos para el control de las rutas de la cocaína, el mercado de armas y el contrabando, entre otras acti·idades ilegales 136 , y que posteriormente, ingresaba directamente cargamentos de drogas a Lstados Unidos y otros países. La sociedad con los Senores de la Droga`, otro de los miembros de la quíntuple alianza, reconocidos como acaparadores de tierras y autores de la contrarreíorma agraria en los anos ochenta del siglo pasado ,Reyes, 2009,, tanto de los que mutaron y se desmo·ilizaron 134 Lntre ellas la que redujo los términos para adquirir la propiedad de predios poseídos, así íuera a tra·és de la ·iolencia y la íuerza, la Ley de Agro Combustibles, la Ley de Saneamiento de la lormalización de la Propiedad Inmueble, y la que creó el Programa Agro Ingreso Seguro, así como de la aplicación del Lstatuto de Desarrollo Rural y la Ley lorestal desde su expedición hasta la íecha que íueron declaradas inconstitucio- nales por la Corte, y el le·antamiento de la prohibición de adquirir mas de una Unidad Agrícola lamiliar 135 Ll ¯0° de los recursos de los írentes del Bloque Montes de María pro·enían del narcotraFco ,1SJP, 2010-a - Ldwar Cobos 1éllez y Uber Lnrique Banquez Martínez,. 136 Ver: http:,,www.·erdadabierta.com,·ictimarios,los-jeíes,301-la-caceria. 138 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS a nombre de las AUC ,narcoparas`, como de los que no ingresaron públicamente a ellas, justiFcada por la necesidad poder Fnanciarnos y mantenernos ·igentes dentro del connicto` ,Mancuso, 2006-a, y de desFnanciar a las guerrillas` ,1SJP, 2010-b - Jorge I·an La·erde,, permitió acrecentar las íortunas de algunos de los miembros de las estructuras de la Casa Castano, y con ello adquirir tierras y territorios para implementar o in·ertir en acti·idades legales ,proyectos agroin- dustriales, explotación de recursos naturales y obras de iníraestructu- ra, entre otras,, a tra·és de las cuales la·aban los recursos y las tierras obtenidas de manera ilegal y ·iolenta. La narcotización` de la Casa Castano íue causa de di·isiones en- tre sus íundadores, justamente las discrepancias entre los llamados pura sangre` y los narcoparacos` ,Ci·ico, 2009, o narcoparamilita- res -`paras buenos` y paras malos`- parecen ser la principal moti- ·ación de los homicidios de Carlos Castano y de alias Doble Cero` quien libró una cruenta guerra contra el Bloque Cacique Nutibara, comandado por alias Don Berna`. Según alias 1riple Cero`, Carlos Castano aceptó el apoyo de narcotraFcantes para combatir a la gue- rrilla en el sur de Bolí·ar, y en el sur y oriente del país no sólo para obtener recursos Fnancieros sino también para demostrar que había grupos que eran peores que los comandados por él ,Mancuso, 2011,. NKJKcK 80.7-"$=&-%,. A 7-10.9. 7- ,&-""$1 Ln esa simbiosis de legales e ilegales y como se desprende de las ·ersiones libres de los postulados en el proceso de Justicia y Paz, y en las declaraciones y re·elaciones de otros de los integrantes de las AUC a las que se hizo reíerencia en el capítulo dos, existen elementos sustanciales que hacen e·idente los intereses económicos latentes en el destierro de los habitantes de las zonas en que ejercieron domi- nio las estructuras paramilitares engendradas por la Casa Castano así como de algunos de los acaparadores de tierras ,miembros acti·os y asociados,. Lo anterior permite iníerir que existió una estrategia ma- crocriminal dirigida a íorzar el abandono de tierras y su apropiación ·iolenta y íraudulenta por parte de la empresa criminal integrada por las AUC y demas miembros de la quíntuple alianza. 139 CAPÍ1ULO 4 Al respecto, en ·arias de las pro·idencias de la Corte Suprema de Justicia y de los 1ribunales de Justicia y Paz se ha hecho reíerencia al apoderamiento ·iolento de tierras, mediante hechos de barba- rie` que incluyeron no solo el destierro de múltiples propietarios, de cuyos predios íueron despojados, sino el empleo de amenazas, constrenimiento y demas íormas de ·iolencia íísica y psicológica para quitarles sus bienes, ya sin pagarles precio alguno, ya haciéndolo por un ·alor irrisorio` ,CSJ, 2012-b -Ldgar Ignacio lierro llores y An- drés Mauricio 1orres León,. De manera particular, en la sentencia contra el gobernador del departamento del Gua·iare, se e·idencia el concurso entre miembros acti·os y organicos de los grupos paramili- tares con ser·idores públicos para despojar tierras con Fnes de lucro y propósitos económicos ,CSJ, 2011 -Óscar de Jesús López Cada·id,. A partir de la anterior caracterización de la empresa criminal puede concluirse que el desplazamiento íorzado era parte de las conductas delicti·as para el logro del propósito criminal mutuo y compartido por múltiples agentes legales e ilegales. Ln esa medida, y con base en lo re·elado en las ·ersiones libres y en otros pronunciamientos de los miembros de la Casa Castano uniFcada y ampliada, no es posible ais- lar el apoderamiento y la concentración de tierras del animo concerta- do de reíundar la patria` por parte de los integrantes de la quíntuple alianza, sin perjuicio de las moti·aciones y justiFcaciones de cada uno de ellos: Para los empresarios que los auspiciaron y Fnanciaron se trataba de razones de seguridad para operar y extender sus acti·idades económicas. Para los Senores de la droga` era la íorma de consolidar rutas, la·ar acti·os y alcanzar poder y reconocimiento social y político ,Ver: Duncan, G., 200¯ y Reyes, A. 2009,. Para los militares que los íormaron, les colaboraron o hicieron parte de ellos era la manera de combatir a la insurgencia y de consolidar los territorios liberados. \, Fnalmente, para las élites regionales tradicionalmente ligadas al poder político y a la tenencia de la tierra ,terratenientes,, se constituía en la oportunidad de recuperar los predios que habían perdido como con- secuencia de las luchas de los mo·imientos campesinos de mediados del siglo ††, y los que habían ·endido al Lstado para procesos de 140 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS reíorma agraria debido a causas como la extorsión de las guerrillas o a la pérdida de su ·alor económico por eíectos de la apertura de los anos 90, así como de atesorar tierras y recursos naturales ,CNRR- GMl, 2010-a,. Sin bien no existe una respuesta sistematizada a la pregunta de si existió un plan macrocriminal para apoderarse de las tierras y terri- torios despoblados con la comisión de crímenes atroces y delitos de lesa humanidad, al amparo del propósito de reconFgurar el Lstado e imponer un nue·o orden económico, social, cultural y político. Lsta pregunta parece responderse en las mismas ·ersiones en las que ex comandantes han admitido que la recuperación de territorios impli- caba también recuperar` Fncas y terrenos que habían sido ·endidos por sus propietarios para programas de reíorma agraria ,Mancuso, 2011,, en las que senalan que detras de la retorica de combatir la sub- ·ersión estaba la concurrencia de ·oluntades` ,CSJ, 2009 Sal·ador Arana Sus, para apropiarse de terrenos en zonas con potencial para la explotación de recursos naturales ,alias Ll Samario` y alias ll`,, y en las que cuentan de reuniones en las que se planearon estrategias para apoderarse de tierras ,alias Pitirri`, reíeridas en el capítulo ter- cero. Lstas re·elaciones guardan relación con el llamado antes citado de los seis ex comandantes a sentar en el banquillo no sólo a |.| las estructuras armadas`, sino también a políticos, empresarios, íun- cionarios de alto ni·el, grandes contratistas, in·ersionistas extranjeros y miembros de la íuerza pública` ,Rendón „ otros, 2011,, como re- quisito indispensable e ineludible para esclarecer la ·erdad ·erdade- ra` ,íbiaev, sobre el destierro y su relación con la concentración de la tierra como eíecto del expolio sistematico y masi·o. Asimismo, los casos que se describen en seguida permiten ·islum- brar que, ademas de un patrón de apropiación de tierras, territorios y recursos naturales, se coníormó lo que podría denominarse la em- presa criminal de despojo y legalización`, engendrada por Vicente Castano que se esparció por todo el país a la par que se expandían las estructuras uniFcadas por la Casa Castano y se producía lo que 141 CAPÍ1ULO 4 Garay „ otros han descrito como la reconFguración cooptada del Lstado` 13¯ . De la deFnición antes citada pueden extraerse los siguientes com- ponentes aplicables a la lógica de usurpación y legalización de tierras y territorios por parte de la empresa criminal antes reíerida, los que son comunes a los casos que se comentan mas adelante: ! írevte at ca¡tor: Asociación entre empresas y grupos económi- cos legales locales, regionales y nacionales, e ilegales ,narcotraF- cantes y paramilitares, para cometer o determinar desplazamien- tos y apropiarse de las tierras y territorios desocupados 138 . ! írevte at ca¡tvraao: InFltración en instancias ejecuti·as, legislati- ·as y judiciales, órganos de control, y otros organismos estatales, la luerza Pública y en las entidades con íunciones en el desarrollo económico y social y en la propiedad de la tierra y, por ende en su legalización, así como en el apalancamiento de los proyectos que se instalaban en los íundos expoliados. ! írevte a to. veaio. ev¡teaao.: La ·iolencia, el terror, el soborno, el apro·echamiento del estado de necesidad de las ·íctimas, la co- rrupción, el Fnanciamiento de partidos políticos y de candidatos con el animo de incidir en las decisiones y apropiarse de recursos para imponer un modelo de desarrollo económico en los territo- rios abandonados íorzosamente. ! írevte at ¡ara qve: Adquirir poder político para innuir en el di- seno y la adopción de las normas y regulaciones aFnes al propó- sito de beneFciarse económicamente y de legalizar y íormalizar el expolio y usuíructo de las tierras para el enriquecimiento propio de los integrantes de las estructuras armadas del paramilitarismo 13¯ Lntendida como |.| la acción de indi·iduos, grupos o Frmas, en el sector pú- blico y pri·ado, que innuyen en la íormación de leyes, regulaciones, decretos y otras políticas del Gobierno, para su propio beneFcio como resultado de pro·isiones ilícitas y no transparentes de beneFcios pri·ados otorgados a íuncionarios públicos` ,Banco Mundial, 2000,. 138 La Corte Constitucional ha indicado que los intereses económicos sobre territorios y recursos, por parte de actores armados o no armados, legales e ilegales asociados |.| es una de las principales causas de desplazamiento íorzado` ,Corte, 2009 y 2009-a,. 142 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS y de sus aliados -poder económico-, adquirir estatus social y la·ar las rentas ilícitas e ilegales ,López, 1010,. Ln otras palabras y como se desprende de los siguientes casos, en el despoblamiento de territorios y en la consecuente apropiación ilegal e ilegítima de tierras y en su legalización, ya íuera para los miembros y seguidores de la causa paramilitar, o de otros que usuíructuaron los réditos de sus acciones criminales, connuyeron agentes públicos y pri·ados, legales e ilegales signados por el aían de enriquecimiento y,o empoderamiento político, económico y social. NKLK ;$1.1 7- 7-10.9. A /-#$/&'$(&)% A continuación se describiran seis casos de despojo y de su legali- zación en las regiones de dominio de las estructuras de las AUC. Ln primer lugar, por ser pionero y contener los elementos que deFnieron y guiaron el plan criminal de apoderarse de tierras y recursos natu- rales, se alude al despojo de los territorios colecti·os de las comuni- dades negras de Jiguamiandó y Cur·aradó. Ln seguida se comentan los Proyectos Producti·os para la Paz de Mancuso y Rendón, en los que bajo el discurso de oírecer oportunidades laborales a los desmo- ·ilizados se permitió destinar las tierras abandonadas o compradas íorzadamente a las ·íctimas del desplazamiento a la implantación de iniciati·as producti·as, en las que se e·idencian los elementos del plan criminal de legalizar el expolio y de e·adir el deber de reparar a los aíectados. Ln tercer lugar, se hace reíerencia a los casos que han sido objeto de decisiones en el marco del proceso de la Ley 9¯5 de 2005, los que contienen ·arios de los citados elementos en especial el em- pleo de la maquinaria estatal administrati·a y judicial para la empresa criminal de despojo y legalización. NKLKJK R-10.9. -% 5&#:$=&$%7) A ;:"P$"$7) Ll expolio de los territorios de las comunidades aírodescendientes desterradas de las cuencas de los ríos de Jiguamiandó y Cur·aradó permite sugerir que desde mediados de los anos no·enta del pasado siglo se íraguó un plan criminal dirigido la usurpación y ocupación ·iolenta de tierras y territorios por parte de la empresa criminal y en 143 CAPÍ1ULO 4 beneFcio de los miembros de la quíntuple alianza, la que luego se ·olcó a su legitimación a tra·és de la empresa de legalización del des- pojo, con la coníabulación entre autoridades y autodeíensas` ,1SJP, 2010-a - Ldwar Cobos 1éllez y Uber Lnrique Banquez Martínez,, y a la que se sumaron agentes pri·ados y narcotraFcantes. La concepción de ese plan criminal se relaciona con los perFles de los tres hermanos Castano: lidel, Carlos y Vicente descritos anterior- mente. Como se senaló, a la muerte de lidel sus hermanos se dedica- ron a continuar su labor: en tanto Carlos se encargó de períeccionar y ·isibilizar el discurso antisub·ersi·o de las ACCU y de íorjar el pro- yecto político-militar de las AUC, Vicente Castano, alias Ll Proíe`, desde la sombra, lideró la expansión y consolidación económica de la Casa Castano, la que incluía el apoderamiento de tierras y territo- rios mediante la íuerza de la ·iolencia para implementar proyectos producti·os, tal y como lo han narrado ·arios de los desmo·ilizados ,capítulo primero,. Ls alias \arumo`, el cerebro` de la expansión económica de la causa paramilitar, quien haciendo honor a su homónimo el proíesor \arumo de la lederación de Caíeteros 139 , desarrolló la siembra masi·a de palma aceitera en los territorios desalojados por las comunidades negras de Jiguamiandó y Cur·aradó en la región de Uraba. Ln esa iniciati·a ·arios de los elementos del micro modelo de lidel Castano íueron adoptados por su hermano Vicente, entre ellos: 1, la toma militar y el desplazamiento a sangre y íuego, 2, la apropiación a la íuerza o íraudulenta y la compra a menos precio de grandes extensio- nes de tierras, 3, la implementación de proyectos económicos y 4, la necesidad de esconder y la·ar los recursos obtenidos de acti·idades ilegales e ilícitas, y 5, el repoblamiento para ejercer control social en los territorios liberados de la guerrilla. 139 Casualmente, el proíesor \arumo es el emblema del Ser·icio de Lxtensión de la le- deración Nacional de Caíeteros, cuya Fnalidad es desarrollar e implementar |.| pro- gramas técnicos, sociales, económicos, ambientales y gremiales` con los caFcultores. 144 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Pero, sin lugar a dudas, Ll Proíe \arumo` períeccionó y soFsticó el modelo de lidel al lograr la participación acti·a de actores pri·a- dos en la implementación de los proyectos agroindustriales de gran escala, la coníormación de asociaciones y empresas comerciales y el concurso de la institucionalidad estatal requerida, así como la alianza con los Senores de la Droga`. Ln palabras de alias Ll Proíe`, |.| yo mismo conseguí los empresarios para in·ertir en esos pro- yectos que son duraderos y producti·os. La idea es lle·ar a los ricos a in·ertir en ese tipo de proyectos en diíerentes zonas del país. Al lle·ar a los ricos a esas zonas llegan las instituciones del Lstado. Desaíortunada- mente las instituciones del Lstado sólo le caminan a esas cosas cuando estan los ricos. lay que lle·ar ricos a todas las regiones del país y esa es una de las misiones que tienen todos los comandantes 140 . J4 b$ ,.=$ =&/&,$" A -/ 7-10/$'$=&-%,. $ 1$%#"- A 6:-#. Ln el habitat de los consejos comunitarios aírocolombianos de Cur·aradó y Jiguamiandó 141 , que rodean al municipio de Carmen del Darién en Chocó y el corregimiento de Belén de Bajira 142 , mu- nicipio Mutata en Antioquia ,Ver: CIJP, 2005,, se adelantó la lla- mada Operación Génesis`, dirigida por el ex general Rito Alejo del Río, en ese entonces comandante de la Brigada †VII 143 , el 24 al 2¯ de íebrero de 199¯, la que se justiFcó como una actuación propia de las íuerzas armadas contra el lrente 5¯ de las lARC. Ln las declaraciones de desmo·ilizados - postulados, se ha re·ela- do la complicidad entre las ACCU y miembros del Ljército en la ejecución de dicha operación. Concretamente, el ex comandante 140 Re·ista ´evava: labla Vicente Castano`. 141 La descripción de este caso se basa, entre otros documentos, en artículos de medios de comunicación ,CIJP, 2005 y Salinas, 2011,. 142 Los departamentos de Chocó y Antioquia entraron en una disputa legal por la per- tenencia de Belén de Bajira, como municipio del primero, o corregimiento del segundo. Ln: Varela, \., Antioquia y Chocó se enírentan en una miniguerra` por palma de aceite, oro, níquel, cobre y petróleo`. 143 Ll ex general Rito Alejo del Río, es actualmente in·estigado por las declaraciones de ·arios ex jeíes paramilitares, en especial del comandante del Bloque Llmer Cardenas. Ver: VerdadAbierta, 1utela írena juicio a Rito Alejo del Río`. 145 CAPÍ1ULO 4 del BLC, lreddy Rendón lerrera ha narrado el encuentro en el que participaron integrantes de la Brigada †VII y de los paramili- tares, en el que ademas de con·enirse los detalles de la operación que se realizarían por tierra y aire`, se acordó que los paramilitares la apoyarían a tra·és de doce de su hombres que íungieron como guías 144 . L4 b$ $0".0&$(&)% A (.=0"$ $ =-%.1 0"-(&. 7- #"$%7-1 -QU ,-%1&.%-1 7- ,&-""$1 Ll eíecto directo de dicha operación, que podría catalogarse como un íenómeno de parainstitucionalidad militar`, íue el desplaza- miento masi·o de cerca de cuatro mil habitantes de la región, que se reíugiaron en Panama o se desplazaron hacia 1urbo y Mutata, y del despojo masi·o de 22 mil hectareas 145 . Ll Aleman` ha conta- do, que con posterioridad a la migración íorzada, Vicente Castano programaba unos paseos` para identiFcar los terrenos aptos, los que ponía al cuidado de sus administradores` 146 , a quienes les encargaba la tarea de íormalizar su adquisición. 3, b$ &=0/-=-%,$(&)% 7- 0".A-(,.1 -(.%)=&(.1 7- #"$% -1($/$ -% $1.(&. (.% $#-%,-1 0"&P$7.1 A 0\O/&(.1 Ln los territorios desocupados por la íuerza se implementó el mo- noculti·o de palma, proyecto agroindustrial a gran escala de tardío rendimiento que demandaba recursos signiFcati·os. Ls así como Vicente Castano logró la participación en diíerentes sociedades comerciales de ricos` -terratenientes, ganaderos, bananeros 14¯ , madereros y íamilias prestantes locales antioquenos y cordobeses, principalmente 148 , entre ellos ‚athia Sanchez, representante legal 144 1eraaa.bierta: Doce paramilitares íueron guías del Ljército en operación Génesis: Ll Aleman``. 145 Las comunidades de Cur·aradó, Cacarica y Domingodó, hablan de por lo menos ·eintidós mil hectareas que les han sido arrebatadas por los hombres del Bloque Llmer Cardenas`. Ln: 1eraaa.bierta, Victimarios - Bloque Llmer Cardenas`. 146 Lntre los denominados administradores` se han mencionado a alias Palillo`, alias Mó·il 8` o Napo`, alias 55` y sor 1eresa Gómez Ál·arez. 14¯ Ln: elmundo.com Uraba debe mirar otras posibilidades`. 148 Reri.ta ´evava: La palma maldita`. 146 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS de la empresa URAPALMA y esposa de lernan Gómez lernan- dez, político y cordobés, amigo de Carlos Castano ,Aranguren, 2001,, el empresario bananero Raúl lasbún y el tobb,.ta Rodrigo Zapata 149 ,Veloza, 2011,, quienes anos mas tarde se desmo·iliza- ron con los alias de Pedro Bonito` y Ricardo` como integran- tes organicos de los bloques Bananero y Calima, respecti·amente ,paraeconomía`,-, así como de empresarios de otras zonas del país, entre ellos los propietarios de URAPALMA y de GRADLSA 150 que instaló la planta extractora del aceite de la palma en Mutata, Chocó ,paraempresarismo`,. Adicionalmente, \arumo` concertó el apoyo de políticos com- prometidos con el proyecto paramilitar, algunos de los cuales se encuentran condenados o estan siendo in·estigados por concierto para delinquir. 1al es el caso del ex gobernador del Cauca por el Partido Liberal, Juan José Chaux Mosquera, tío de María lernanda Zúniga, ex presidente de lINAGRO -entidad que entregó recur- sos para la siembra de palma-, hija del dueno de URAPALMA, Antonio Nel Zúniga Caballero, empresario y político del Magda- lena ,parapolítica`,, ·inculado a la adquisición de predios dentro del Parque Nacional Natural 1ayrona. Ll proyecto palmicultor íue impulsado en la leria Uraba ·ibra en la región, la palma aíricana y sus aportes al desarrollo de la región`, por la Asociación de Lmpresarios Lxitosos por la Paz, entidad que 149 Vinculado a la organización de la reunión en Palacio en la que participaron el asesi- nado ex paramilitar, Antonio López alias Job`, la íuncionaria del DAS, Marta Leal y el ex gobernador del Cauca y ex embajador Juan José Chaux, con el Fn de hacer segui- miento a las acti·idades del magistrado que in·estigaba los casos de parapolítica, I·an Velasquez, reunión que es objeto de in·estigaciones en la liscalía actualmente. Ver: \\\.radio.com Secretario de Palacio niega acercamiento con el paramilitar Rodrigo Zapata`. 150 Reconocida empresa palmicultora del Magdalena y beneFciaria de recursos de la cooperación de Lstados Unidos, tiene el 50° de sus bienes en proceso de extinción de dominio por conductas relacionadas con el traFco de drogas ilícitas ,ít 1iev¡o: Lmpresa de Macaco` se coló` entre beneFciarias de plata del Plan Colombia`, marzo de 2009. 14¯ CAPÍ1ULO 4 íue presidida por Luis Ignacio Guzman Ramírez, ex subdirector de la Corporación para el Desarrollo Sostenible del Uraba ,COR- POURABÁ,, encargado 1¯ ·eces de la gobernación de Antioquia en el periodo 1995-199¯, de Ál·aro Uribe Vélez 151 , quién en 200¯ lo nombró cónsul en Miami, Lstados Unidos. Guzman Rodríguez ha sido senalado por Ll Aleman` como uno de los compradores de tierras en Uraba 152 , y ha sido un acti·o participante en repre- sentación de los palmicultores en los encuentros realizados con las comunidades aírodescendientes para dar cumplimiento a las órdenes de la Corte de restituirles sus territorios colecti·os 153 . De esta íorma, alias Ll Proíe` cooptó la institucionalidad encar- gada de apoyar, autorizar y Fnanciar este tipo de iniciati·as: Go- bernación de Antioquia, CORPOURABÁ y CODLClOCÓ en lo local y regional, y lINAGRO y el Banco Agrario ,presidido en la época por Juan B. Pérez, quien entre los anos 2002 a 2006, coordinó los PPP, en lo nacional, así como la institucionalidad a tra·és de la cual se legalizó el despojo -INCORA,INCODLR, oFcinas de notariado, catastro y registro- ,parainstitucionalidad` ci·il,. Adicionalmente, URAPALMA, uno de los socios de la em- presa criminal 154 del despojo y su legalización, gestionó recursos de la cooperación de Lstados Unidos ,Salinas, 2006,. Según alias ll` ,Veloza, 2011,, por sus contactos con ser·i- dores públicos de alto ni·el, Rodrigo Zapata, cercano a Vicente Castano Gil y considerado el canciller`, de las Autodeíensas Uni- das de Colombia 155 , íue el encargado de gestionar el Incenti·o de 151 Ver: hoja de ·ida de Luis Ignacio Guzman Ramírez. Ln: http:,,www.ignacioguz- man.com, 152 1eraaa.bierta: Nos quieren extraditar cuando empezamos a hablar de políticos y empresarios`. 153 Ll Lspectador: Ln la ruta de los Castano`. 154 Caracot Raaio: Palmicultores detenidos tenían una empresa criminal: liscalía`. 155 1eraaa.bierta: Canciller de las AUC, postulado a Justicia y Paz`. Se le ha ·inculado a la estrategia de desacreditar a la Corte Suprema de Justicia, conjuntamente con el ex gobernador del Cauca, Chaux Mosquera y con el desmo·ilizado y asesinado Antonio López, alias Job`. Su postulación íue aceptada en 2010. 148 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Capitalización Rural reíormado durante la gestión de Carlos Mur- gas en la Cartera e Agrícultura, y los créditos ante lINAGRO y el Banco Agrario 156 , así como de legalizar las tierras en el INCODLR y en las oFcinas de notariado y registro en Antioquia, Atlantico y Bolí·ar, mediante múltiples y ·ariadas artimanas entre ellas írau- des, íalsedad de documentos ,resoluciones, escrituras y poderes,, englobes de terrenos por accesiones y compras bajo amenazas y a personas íallecidas, algunas de las tipologías empleadas por la empresa de legalización del despojo`. Justamente, al único con- denado de los ·einticuatro empresarios madereros, palmicultores y ganaderos 15¯ in·estigados en lo que se ha conocido como Ll primer capítulo de la paraeconomía`` 158 , el gerente de la empresa Ll Palmar S. A., se le comprobó haber comprado tierras a un occi- so que aumentaron descomunalmente su tamano por el íenómeno de la accesión, Fgura que había desaparecido del ordenamiento jurídico en 19¯1. 156 Ln las in·estigaciones se ha mencionado a Carlos Daniel Merlano Rodríguez, alias Doctor Merlano` como el abogado encargado de realizar los estudios de títulos y gestionar los préstamos oFciales para el proyecto. 15¯ ‚atia Patricia Sanchez Mejía, representante legal de la empresa URAPALMA, Ga- briel Jaime Sierra Moreno, gerente y representante legal de la empresa Palmas de Cur- ·aradó, Ja·ier José Daza Pretel, ex representante legal de URAPALMA, Sor Lnid Ospi- na Rendón, representante legal y accionista mayoritaria de la empresa AGROPALMA, Claudio Adolío lregni Ochoa, representante legal de la empresa In·ersiones lregny Ochoa, I·an Patino Patino, gerente de Ll Palmar, y Raúl Alberto Penagos Gonzalez, representante legal de la empresa Sel·a lúmeda. 1ambién se adelantan in·estigaciones contra Raúl Alberto Penagos Gonzalez, Antonio Nel Zúniga Caballero, Claudio Adol- ío Guillermo Ochoa Pino, léctor Duque Lche·erry, Juan José Palacios Palacios, Jorge Luis Santo Ortega. Dentro de los asegurados se encuentran: Danilo José Pacheco de la loz, Ja·ier Morales Lstrada, Mario León Villa Pacheco, Carlos Daniel Merlano Rodrí- guez, Remberto Manuel Ál·arez Vertel, Mario Alberto Vélez Giraldo, Jiu·anni Suescún López, Luis Alberto llórez Pérez, José Miguel Ruiz Cossio y Manuel Gregorio Denis Blandón. Igualmente estan ·inculados los ex paramilitares lermes José Munoz Gon- zalez y Jesús Ignacio Roldan Pérez, alias Monoleche`, postulado a la Ley 9¯5 de 2005. Ln: Ll Lspectador, Ll primer capítulo de la paraeconomía``, y ít 1iev¡o: Lntre los llamados a juicio hay políticos, empresarios y ex paramilitares`. 158 Ll primer capítulo de la paraeconomía`. Op. cit. 149 CAPÍ1ULO 4 Adicionalmente, es preciso senalar que ademas de la alianza entre militares y paramilitares en la Operación Génesis`, Ll Proíe` no solo logró que la luerza Pública brindara seguridad al monoculti- ·o de palma sino que las operaciones de los integrantes de la Casa Castano pasaran desapercibidos y pudieran mo·erse con plena li- bertad en la región ,parainstitucionalidad` militar,. N4 b$ %-(-1&7$7 7- -1(.%7-" A /$P$" /.1 "-(:"1.1 .O,-%&7.1 7- $(,&P&7$7-1 &/-#$/-1 - &/I(&,$1 Ll proyecto palmicultor, ademas de íacilitar el apoderamiento de las tierras y territorios ,Botín de Guerra`, y su legalización, era íuncional a los Fnes de in·ertir los recursos deri·ados de extorsio- nes y gra·amenes al negocio de las drogas, entre otras íuentes de recursos de la Casa Castano y de sus socios, en particular de los Senores de las Drogas`. Al respecto alias Doble Cero` en entre- ·ista a Ll 1iempo, relató que la expoliación sangrienta y corrupta en la región de Uraba se hizo con dinero supuestamente prestado por entidades de íomento agroindustrial`, lo que hacía parte de una cadena de la·ado de dineros del narcotraFco, desplazamiento íorzado, muerte y ·iolencia` 159 . c4 ?/ "-0.O/$=&-%,. 0$"$ -9-"(-" (.%,"./ 1.(&$/ -% /.1 ,-""&U ,."&.1 /&O-"$7.1 7- /$ #:-""&//$ Para la puesta en marcha del megaproyecto de palma se repobló la región con personas pro·enientes de otras regiones del país, a quienes se las ·inculó a la ocupación y explotación de los territo- rios despojados a las comunidades negras, generando que a su re- torno se encontraran con terceros que alegan derechos sobre ellos. La connuencia de los actores antes resenadas y las maniobras em- pleadas dieron lugar a que la Unidad de Derechos lumanos de la liscalía concluyera que en el Uraba se había instaurado una espe- cie de justicia pri·ada parainstitucional`, la que era eFcaz para los propósitos de Reíundar el Lstado y re·ersar a·ances de la Consti- tución de 1991, en especial los relacionados con el reconocimiento de los grupos étnicos y de sus derechos colecti·os al territorio, el 159 ít 1iev¡o: Lntre·ista a Rodrigo o Doble Cero``. 150 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS acceso a la propiedad de la tierra por parte de los campesinos y a su redistribución equitati·a para e·itar la concentración ,reíorma agraria,, y la protección y conser·ación de zonas de especial re- le·ancia ambiental y cultural como el Uraba ,Artículos ¯, 8, 63 y 55 1 de la Carta Política,, temas a los que se hizo reíerencia en el capítulo segundo. Varios de los elementos del modelo de despojo en Uraba íueron replicados por el propio Vicente Castano en otras regiones del país, principalmente en los departamentos de los llanos Orientales, entre ellos Casanare, como consta en la sentencia que condenó al ex gobernador del Gua·iare. De igual íorma, bajo las ordenes de alias \arumo` se implantó en Mapiripan, y en municipios ·ecinos de los departamentos del Meta y del Gua·iare la siembra de palma en cuatro mil de las doce mil hectareas que como se expresó en el capítulo tres son dispu- tadas por ·arios de los ex comandantes de los bloques y írentes de las AUC en los Llanos Orientales y miembros del LRPAC 160 . Un porcentaje de esas tierras ,baldíos o compradas íorzosamente, íueron tituladas a la cooperati·a, cuyo representante según Don Mario` hacía parte de la nomina del Bloque Centauros` y es asi- duo ·isitante de Pirata` 161 . Asimismo, el modelo de despojo de Ll Proíe` íue replicado por otros ex comandantes, entre ellos Macaco` del Bloque Central Bolí·ar en Simití, sur de Bolí·ar, donde a tra·és de la Cooperati·a Promotora Agraria para la Sustitución de Culti·os Ilícitos en el Sur de Bolí·ar ,COPOAGROSUR,, gestionó y obtu·o recursos na- cionales y de la cooperación de Lstados Unidos ,161 mil dólares, para los culti·os de palma, en predios que ademas de ser reclama- dos por sus presuntos propietarios, íueron entregados por el ex comandante del Bloque Central Bolí·ar al londo de Reparación 160 1eraaa.bierta.com, ,Quién miente entre Don Mario` y Pirata`· y Don Mario` dice que 4 mil hectareas de palma estan en poder de paras`. 161 1eraaa.bierta.cov, Don Mario` dice., Op. Cit. 151 CAPÍ1ULO 4 de Víctimas de la Ley 9¯5 de 2005 162 , cuya administración le íue encomendada al Programa de Desarrollo y Paz por el Gobierno de Santos. linalmente, no sobra mencionar que pese a que el despojo de Jiguamiandó y Cur·aradó, es el caso emblematico de la estrate- gia criminal de desplazamiento y demas ·iolaciones de derechos humanos para desocupar regiones y apropiarse de tierras, las ac- tuaciones encaminadas a de·ol·er los territorios colecti·os a las comunidades aírodescendientes no se han deri·ado del proceso de Justicia y Paz. Ln eíecto, las principales decisiones sobre este des- pojo han emanado de la Unidad de Derechos lumanos de la lis- calía y de la Corte Constitucional en seguimiento de la Sentencia 1 025 de 2005 ,Autos 005 de 2009, del 18 de mayo y 384 de 2010, entre otros,, y de la Corte Interamericana de Derechos lumanos ,Caso comunidades de Jiguamiandó y Cur·aradó Vs. Colombia - Medidas Pro·isionales, 163 . Igualmente, la persecución de los bienes de Vicente Castano y de sus herederos no hace parte de las actuaciones de las instancias de la Ley 9¯5 de 2005 - Unidad y 1ribunales de Justicia y Paz de la liscalía y Acción Social- sino de la Unidad de La·ados de Ac- ti·os y de Lxtinción de Dominio de la liscalía y de la Central de In·ersiones que asumió las labores de la Dirección Nacional de Lstupeíacientes, situación que hace mas in·iable su destinación y aíectación a la reparación de sus ·íctimas ,Ver: CSJ, 2011-g - Co- bos 1éllez y Uber Lnrique Banquez Martínez y 2011-i José Igna- cio Roldan Pérez - extinción de dominio,. 162 ít 1iev¡o: Lmpresa de Macaco` se coló` entre beneFciarias de plata del Plan Co- lombia`, y Lntre·ista con un íuncionario de la Procuraduría de Santander. 163 Ver: Resoluciones del 6 de marzo de 2004, 1¯ de no·iembre de 2004, ¯ y 15 de mar- zo de 2005, 5 de íebrero de 2008, 1¯ de no·iembre de 2009, 3 de mayo y 30 de agosto de 2010, ¯ de junio y 25 de no·iembre de 2001 y 2¯ de íebrero de 2012, entre otras. 152 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS NKLKLK <".A-(,.1 <".7:(,&P.1 0." /$ <$' h/-#$/&'$(&)% 7-/ 7-10.9.i La puesta en marcha de los Proyectos Producti·os para la Paz ,PPP, 164 , ideados por Sal·atore Mancuso e impulsados por Luis Car- los Restrepo, ex Alto Comisionado para la Paz 165 en la administración de Uribe Vélez ,Mancuso, 2011,, si bien se incluyó en los decretos reglamentarios de la Ley 9¯5 de 2005 como una modalidad de repa- ración a las ·íctimas, su objeti·o principal consistía en generar alter- nati·as económicas para la reinserción de los desmo·ilizados de las estructuras paramilitares, lo que ademas permitía controlar los terri- torios recuperados de las guerrillas ,Mancuso, 2011,. Ln 200¯, la OFcina del Alto Comisionado para la Paz hizo entrega a la Alta Consejería para la Reintegración Social y Lconómica de las Personas y Grupos Alzados en Armas de la iníormación relacionada con treinta y cinco PPP que estaban en ejecución, distribuidos así: diez y seis en Antioquia, ocho en Córdoba, tres en Casanare, tres en Santander, dos en Sucre y uno en cada uno de los siguientes depar- tamentos: Norte de Santander, Caldas y Cundinamarca. Por causas como la entrega de capital semilla sin que se iniciaran los proyectos y su in·iabilidad técnica y Fnanciera ,ideas proyecto`,, la íalta de cla- ridad sobre los destinatarios de los proyectos, los operadores ,ope- radores de papel`, y los propietarios` de las tierras ,testaíerrato,, la Alta Consejería ordenó suspender el apoyo a los PPP, a Fnales de ese ano 166 . A continuación se describen los PPP impulsados por los ex co- mandantes de Sal·atore Mancuso y alias Ll Aleman`, los que contie- nen las siguientes características comunes al micro-modelo de lidel 164 Los PPP íueron presentados por el Alto Comisionado al Consejo de Ministros, en octubre de 2005 y se iniciaron a partir de diciembre de ese ano. 165 La OACP, el PRVC y el Departamento Administrati·o de la Presidencia suscribieron el Con·enio No. 019, de mayo 2¯ de 2005, para entregar a cada desmo·ilizado como capital semilla`, la suma de dos a dos millones y medio de pesos. 166 Ver: Salinas, 2006 y 2008. 153 CAPÍ1ULO 4 Castano mejorado por su hermano Vicente 16¯ : i, disponer de extensas superFcies en las zonas liberadas` por las estructuras de Casa Cas- tano y sus aliados, ii, ·incular empresarios al Fnanciamiento y dota- ción de tierras ,algunos de ellos identiFcados como testaíerros,, iii, acceder a la institucionalidad pública para la obtención de créditos, incenti·os y otros beneFcios y recursos estatales - londo de Paz ,ca- pital semilla 168 , y entidades como el Banco Agrario, linagro, el Ser·i- cio Nacional de Aprendizaje y el Incoder, entre otras entidades-, i·, gestionar y obtener recursos de la cooperación internacional, e ·, in- ·olucrar, a tra·és de asociaciones sin animo de lucro, la participación de desmo·ilizados írecuentemente íoraneos de las regiones en que se desarrollaban ,repoblamiento,. NKLKLKJK <<< 7- B$/P$,."- 2$%(:1. Ln el lanzamiento de los Proyectos Producti·os para la Paz en Cór- doba, autoridades gubernamentales, ex comandantes y empresarios se comprometieron en garantizar |.| un proceso exitoso de rein- corporación a la ·ida ci·il` de 2.480 integrantes del Bloque Córdoba y de 1.851 del Bloque léroes de 1olo·a ,OACP, 2005,. Sin embargo, Mancuso aFrma que se trató de una estrategia ideada y liderada por él con el objeti·o de erradicar los culti·os de uso ilícito y con ello las íuentes de Fnanciamiento de las guerrillas. Los predios para la puesta en marcha de los proyectos ganade- ría intensi·a y siembra de acacia ,2.000 has, y cacao, en los muni- cipios de 1ierralta y Valencia, controlados por las AUC íueron 16¯ Lntidades como la Procuraduría ad·irtieron que los PPP podían conducir a la legali- zación y legitimación del despojo y a hacer mas compleja la restitución de las tierras y la reparación de las ·íctimas ,Salinas, 2006,. Igualmente se senaló que se trataba de inicia- ti·as de auto reparación` ,Sanchez, 2006, y de reconciliación íorzada ,Salinas, 2008,. 168 A cada desmo·ilizado que participó en estos proyectos se le entregaron entre dos y dos y medio de millones de pesos como capital semilla. 154 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS entregados u oírecidos por Aaran Assias Soler 169 , testaíerro de Man- cuso, y otros empresarios de ese departamento, entre ellos Pedro Ghisays y Leopoldo Anaya 1orres ,anexo 9. Bienes PPP y Sal·atore Mancuso,. A la par, se coníormaron ·arias asociaciones de desmo·ili- zados, entre ellas la Asociación Subregional de Productores de Cacao, de la cual hacia parte la OFcina del Alto Comisionado. Como se senaló en el capítulo anterior los predios en los que se pusieron en marcha los proyectos producti·os de cacao, íorestales, caucho y ganadería íueron posteriormente oírecidos por Mancuso para la reparación de sus ·íctimas, lo que le implicó entre otras situa- ciones reconocer la existencia de testaíerros y deshacer los actos con los cuales intentó ocultar su propiedad sobre los terrenos. Ademas, se e·idenció que -aparentemente bajo el objeti·o de justiFcar la entrega de recursos del erario públicos ,capital semilla y certiFcado de incenti- ·o íorestal, entre otros,-, se suscribieron contratos de arrendamiento de largo plazo entre los presuntos propietarios y las asociaciones de desmo·ilizados, causa por la cual no han ingresado al londo de Re- paración de Víctimas. Mas alla de la insistencia de Mancuso para que le sean recibidos estos bienes a la que se hizo alusión en el capítulo anterior, existen as- pectos sin aclarar, el principal de ellos relacionado con el origen de los predios y la íorma como se adquirieron en una zona de dominio para- militar y, por ende, la ·inculación de estos proyectos a la legalización del atesoramiento de tierras mediadas por el apoyo de entidades del Lstado y en la que se ignoran los derechos de los titulares legítimos. NKLKLKLK <<< 7- `?/ 8/-=G%a Ll siguiente caso, permite mostrar los alcances de las alianzas entre las estructuras de la Casa Castano y sectores políticos ,parapolíti- 169 Ln los PPP en las Fncas Villa Nue·a, La Guaira y Pro·idencia en 2006, Fguraban como propietarios Anaya 1orres y Assias Soler, quienes en un documento Frmado el 3 de íebrero del 2006, maniíestaron su intención de transíerir sus propiedades con el propósito de que se lle·aran a cabo los proyectos producti·os ,Mancuso, 2011 y Ver- dadAbierta, Ll Pajaro y los primeros días del grupo de Mancuso. 155 CAPÍ1ULO 4 ca`,, así como la inFltración en entidades públicas ,parainstitucio- nalidad`, con Fnes de obtener recursos nacionales e internacionales para la implementación de iniciati·as económicas impulsadas por lí- deres paramilitares encubiertas bajo propósitos sociales en terrenos que como eíectos del accionar militar íueron objeto de abandono y ·entas íorzadas 1¯0 . Como se indicó en el primer capítulo, Rendón lerrera ha justiFca- do la existencia del BLC como un mo·imiento social y político de caracter regional` ,Rendón, 200¯,, dotado de un marco ideológico y bandera, entre cuyos objeti·os se encontraba la implementación del Proyecto de Alternati·idad Social`, por parte de los denominados Promotores de Desarrollo Social`, miembros del bloque entrenados en practicas de cooperati·ismo, elaboración y gestión de proyectos, acercamientos con comunidades y líderes políticos y comunales, e incidencia en procesos sociales y electorales para alcaldías y concejos e instancias nacionales. Ls así como alias Ll Aleman` y sus hom- bres innuyeron en los procesos electorales ,Congreso 1¯1 , alcaldías, asambleas y concejos municipales, en alianza con el Mo·imiento La Nue·a lorma de hacer política`, adscrito al Partido Cambio Radical, con la Fnalidad de posicionar su propio mo·imiento Por una Uraba Grande, Unida y en Paz` ,CSJ, 2010-h lumberto de Jesús Builes Correa,. Mediante el Proyecto de Alternati·idad Social` y bajo el lema |d|e jornaleros ·ulnerables a empresarios sostenibles` se impulsaron pro- yectos producti·os de caucho, palma, platano, íorestales y ganadería, 1¯0 La descripción de este caso es realizada con base en la sentencia de la CSJ 2010-k - Ramón Antonio Valencia Duque y VerdadAbierta: La telarana de los paras en Uraba`. 1¯1 Ln el Senado, Darío Quintero Villada, empresario, reemplazado por lumberto de Jesús Builes Correa, y en la Camara, Darío Á·ila Peralta, quien se desempenó como secretario pri·ado de Ál·aro Uribe Vélez, cuando íue gobernador de Antioquia ,1995- 199¯,. 1ambién íue beneFciario del apoyo electoral de alias Ll Aleman`, Ramón An- tonio Valencia Duque, asesor de ASOCOM•N, asociación liderada por John Jairo Rendón, hermano del comandante del BLC. 156 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS en los que participaron desmo·ilizados y ganaderos y otros agentes económicos de la región del Uraba 1¯2 . Ln esta línea, en el ano 2002, se creó la Asociación Comunitaria de Uraba y Córdoba ,ASOCOM•N, 1¯3 , liderada por el hermano de Ll Aleman`, John Jairo Rendón lerrera, alias German Monsal·e` o Don German`, extraditado a Lstados Unidos por sus ·ínculos con el ingreso de drogas ilícitas a ese país. Lsta asociación a la que la Corte Suprema de Justicia denominó el instrumento liderado por German Monsal·e` al ser·icio del Bloque Llmer Cardenas` ,íbiaev,, presentó a la Alta Consejería Presidencial para el Plan Colombia el proyecto 1ulapas lorizonte de Lsperanza`, el que gracias a las gestiones del ex congresista, Ramón Antonio Valencia, del mo·imiento Lquipo Colombia, condenado por ¡ara¡otítica, íue receptor de recursos del Programa de lamilias de Guardabosques para erradicar culti·os de uso ilícito en los municipios de 1urbo y Necoclí 1¯4 , en la época que Victoria Lugenia Restrepo, lo dirigía ,CSJ, 2010-k Ramón Antonio Valencia Duque,. Al respecto, Veloza García aFrma que el apoyo gu- bernamental a los proyectos de Ll Aleman` se debió a sus ·ínculos personales con íuncionarias del Programa lamilias de Guardabos- ques ,Veloza, 2011, 1¯5 . 1¯2 Ver: Bloque Llmer Cardenas-BLC de Autodeíensas Campesinas ,2004,. Modelo de negociación centrado en un Proyecto de Alternati·idad Social ,PASO,. Propuesta al Gobierno Nacional, no·iembre de 2004, y Acción Social: Guardabosques de Uraba: de jornaleros ·ulnerables a empresarios sostenibles`. 1¯3 ASOCOM•N íue receptora de distinciones internacionales ,Inno·ación Social`, patrocinada por la Comisión Lconómica para América Latina y el Caribe-lundación \. ‚. ‚ellogg,, y nacionales ,Orden de la Democracia Simón Bolí·ar`, que otorga la Camara de Representantes,. 1¯4 A tra·és de una unión de la que hicieron parte ademas de ASOCOM•N, la Uni·er- sidad de Manizales y la empresa Lstrategias y Desarrollo en cuyas instalaciones tenía su oFcina Valencia Duque. 1¯5 Victoria Lugenia Restrepo ha sido in·estigada por sus relaciones con Juan lelipe Sierra y Guillermo Valencia Cossio, ex director de liscalías de Medellín, condenado por ·ínculos con paramilitares, entre ellos Daniel Rendón, alias Don Mario`, otro hermano de Ll Aleman`. 15¯ CAPÍ1ULO 4 ASOCOM•N también íue beneFciaria de apoyos del INCODLR, Acción Social ,Acción Social, 200¯,, del Ministerio de Agricultura, la corporación ambiental, CORPOURABÁ, la Gobernación de Antio- quia y de entidades municipales. Ademas, la asociación de alias Don German` estableció alianzas con empresas instaladas en la región, entre ellas Multiíruits, pro·eedora de platano a la multinacional Del Monte, a tra·és de su Flial C. I. CONSLRBA S. A. ,CORPOURABÁ, 2006,. MUL1IlRUI1S, empresa que íue dirigida por Juan Manuel Campo, congresista cesarense por el Partido Conser·ador 1¯6 , esta relacionada con practicas irregulares en materia de tierras en torno al predio de su propiedad Ll Atra·esao, sobre el que se han e·idenciado ·arias ano- malías ,·enta dentro de los dos anos siguientes a su titulación como baldío, compra por Llmer Cardenas un mes después de su muerte y adquisición por uno de los socios de MUL1IlRUI1S antes de que lo comprara la empresa,, así como por la alianza con el destituido representante del Consejo Comunitario de las Comunidades Negras del Cacarica, para destinar mas de ·einte mil hectareas a la siembra de platano, la que íue abortada por el Ministerio del Interior, razón por la que Del Monte canceló el contrato con MUL1IlRUI1S. Ll liquidador de MUL1IlRUI1S, Luis Alíonso Jaramillo Munoz, íue asesor de la Incubadora Lmpresarial de Producción y Comerciali- zación Agropecuaria, INCUAGRO, empresa creada por el programa Presidencial Contra Culti·os Ilícitos que recibió recursos del Banco Interamericano de Desarrollo ,BID, y de la OFcina de las Nacio- nes Unidas contra la Droga y el Delito ,UNODC,. INCUAGRO íue socio mayoritario de seis empresas creadas en 2005 ,cuatro de reío- restación, entre ellas Ll Indio y La Gironda y dos de caucho, PRO- CAUClO y Caucho San Pedro,. Las cuatro empresas mencionadas se beneFciaron de la cooperación de la Agencia para el Desarrollo Internacional ,USAID, en el marco de los programas de sustitución de culti·os de coca. 1¯6 Ver: CCAJAR: Un alto dirigente de Uribe beneFciado de los paramilitares`. 158 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Las citadas companías de caucho íueron destinatarias de recursos del londo Ganadero de Córdoba en la época en que lo presidía Be- nito Osorio Villadiego 1¯¯ , quien posteriormente íue encargado de la Gobernación de Córdoba y destituido a los 1¯ días por sus ·ínculos con los paramilitares 1¯8 . Actualmente es in·estigado por la compra de cuatro Fncas a uno de los testaíerros de Mancuso, el citado ganadero Aaram Asías Solar, y por la alianza con Sor 1eresa Gómez Ál·arez 1¯9 , en la apropiación íraudulenta y ·iolenta de mas de mil hectareas de tierras en Uraba, a tra·és de lunpazcor, asociación que aparentemen- te actúo como una empresa de íachada` para adquirir tierras y la·ar acti·os. Dentro de los predios adquiridos se encuentran las mas de quinientas hectareas cedidas a PROCAUClO URABÁ y Caucho San Pedro en el municipio de 1urbo. Ln conclusión, el presente caso reneja cómo a tra·és de iniciati·as producti·as auspiciadas y apoyadas por ser·idores públicos y en las que se contó con recursos públicos y de la cooperación internacional se intentó borrar las huellas de la apropiación y ocupación de tierras adquiridas como eíectos de amenazas, asesinatos, desplazamientos y otras gra·es ·iolaciones de derechos humanos, en el marco de una 1¯¯ ít í.¡ectaaor: Se entregó el eslabón perdido y Superintendencia de Notariado y Registro detecta irregularidades en compra·enta de tierras en Uraba`. Lntre los íundos adquiridos por el londo, ademas de los citados antes, se encuentran: Ln Necoclí: Brisas de la Islita, Ll Descanso, Gracias a Dios, Las Delicias, Los Recuerdos de Llla, La Glo- ria, Companía, Ll Canón 2, Las llores, llorisanto, Si se Mira, Mi Dicha, Ll Por·enir, San Gabriel, La lloresta, Ll Lngano, y en 1urbo: San lrancisco, Peor es Nada, Piénsalo Bien, Mirasol, La Lsmeralda y La Unión. Por el despojo se iniciaron in·estigaciones contra 12 notarios de la región de Uraba. 1¯8 ít 1iev¡o: liscalía ordena mas capturas por nexos de empresarios con paramilita- res`. 1¯9 Gómez Ál·arez actuó como apoderada en las adquisiciones del londo Ganadero de Córdoba de los predios Ll Campamento, Ll Martirio, La Zulia, Ll laro y La Lsperanza, localizados en Necoclí, y de La Unión, Así es la Vida, en 1urbo. Otros íundos adqui- ridos por el londo son: Ln Necoclí: Brisas de la Islita, Ll Descanso, Gracias a Dios, Las Delicias, Los Recuerdos de Llla, La Gloria, Companía, Ll Canón 2, Las llores, llorisanto, Si se Mira, Mi Dicha, Ll Por·enir, San Gabriel, La lloresta, Ll Lngano, y en 1urbo: San lrancisco, Peor es Nada, Piénsalo Bien, Mirasol, La Lsmeralda y La Unión. Por el despojo se iniciaron in·estigaciones contra 12 notarios de la región de Uraba. 159 CAPÍ1ULO 4 estrategia de legalización del despojo, en la que juegan un papel pro- tagónico agentes pri·ados. NKLKMK R-10.9. -% 0".(-1.1 7- 5:1,&(&$ A <$' Al igual que en los proyectos de los hermanos Rendón lerrera, los siguientes casos que corresponden a los mas a·anzados en las in·estigaciones de la liscalía y en las actuaciones de las instancias judiciales 180 , demuestran el uso de la maquinaria estatal para legalizar las tierras adquiridas en las zonas donde se habían perpetrado gra- ·es crímenes, en beneFcio directo de miembros de las estructuras seleccionadas. Ln el primero se e·idencia ademas la lógica de la re- cuperación` de predios que habían sido entregados por el Lstado a labriegos senalados de ser bases sociales` de las guerrillas, el segun- do despojo`, con la que ex comandantes como Mancuso justiFcan la apropiación de tierras, a la que se hizo reíerencia en el capítulo dos. NKLKMKJK ;T&P./.E 7-10.9. -% '.%$1 7- `5."#- Nja Ln el municipio de Chi·olo, Magdalena se suscribió el Pacto del mismo nombre ,septiembre de 2000,, el que junto con el de Pi·ijay ,no·iembre de 2001,, condujeron, a nombre de la Pro·incia Unida por una mejor opción de ·ida`, a la elección de José Domingo Da- ·ila Armenta, ex gobernador del Magdalena y ex representante a la Camara por el Partido Con·ergencia Ciudadana, y de los senadores por Colombia Vi·a Dieb Malooí y Jorge de Jesús Castro, entre otros congresistas, así como de ·arios acaldes 181 , condenados o in·estiga- dos por concierto para delinquir. 180 Lllo se debe al acompanamiento a las ·íctimas por parte del Proyecto de Protección de 1ierras y 1erritorios de Acción Social, la Comisión Nacional de Reparación y Re- conciliación y la Comisión Regional de Restitución de Bienes de Antioquia. Los casos íueron priorizados por la liscalía e incorporados en el Plan de Choque de Restitución y lormalización`, liderado por el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural de la administración 2010-2014, como preambulo a la aplicación de la Ley de Víctimas. 181 De municipios como Pi·ijay, San Ángel, Algarrobo, Zapayan, Salamina, Remolino, Chi·olo y Arigauní. 160 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Ln el primero de esos municipios se localizan 3¯ y 18 parcelas que integran los predios Ll Lncanto y Bejuco Grande, con una extensión de cerca de 1.500 hectareas 182 , las que dieron lugar a la primera de- cisión de Justicia y Paz, mediante la cual se ordenó re·ocar los actos administrati·os a tra·és de los cuales les expropiaron legalmente` las tierras a beneFciarios de reíorma agraria arrebatadas en 1991 por ordenes de Jorge 40` ,CSJ, 2011-a Rodrigo 1o·ar Pupo - re·ocatoria títulos INCODLR,. Según 1olemaida`, en los anos ochenta el LPL promo·ió la in·a- sión de Fncas en la región, razón por la cual la íamilia Duque Barros le ·endió al INCORA ·arios terrenos entre ellos el predio La Palizua, con Fnes de reíorma agraria 183 . Posteriormente, ingresó el LLN que secuestró, en 1996, al ganadero Richard Botero, integrante de una íamilia latiíundista de la región y íundadora de una CONVIVIR. Bo- tero íue liberado por Mancuso y 1o·ar Pupo. Lste último tomó po- sesión de la zona, en 199¯ y en palabras de Ospino Pacheco: Reunió a todos los jornaleros y les dio un ultimatum: se ·an o se mueren` 184 . Con esta orden, los asesinatos de miembros de la comunidad 185 y otros actos de intimidación, los pobladores de la otrora hacienda La Pola coníormada por las Fncas La Pola, Ll Lncanto y Bejuco Prieto huyeron, dejando sus tierras o entregandolas al precio Fjado por Jorge Cuarenta` 186 . Ln audiencia de ·ersión libre de marzo de 2011, Ospino Pacheco narró que 1o·ar Pupo se instaló en el predio La Pola donde operó el campamento del Bloque Norte y que las Parcelas que iban quedando solas, 40 las íue tomando` 18¯ . Posteriormente, el 182 Lste caso se reconstruye con base en las entre·istas realizadas con representantes de la ·ereda Ll Lncanto, municipio de Chi·olo, postulados en la carcel de Valledupar y en La Picota en Bogota, entre ellos alias 1olemaida`, íuncionarios del PP1P, la CNRR, y la liscalía que participaron en el grupo de trabajo coníormado por el ex ·iceFscal, y con iníormación de los medios de comunicación. 183 Con·ersación en la carcel Modelo en Bogota. 184 ít Pitóv: 1olemaida` explicó cómo Jorge 40` se con·irtió en el mas temido terra- teniente del Magdalena. 185 Lntre ellos el asesinato de Joaquín lernandez Buel·as, primer adjudicatario. 186 Lntre·istas con ·íctimas. 18¯ 1olemaida` explicó.`. Op. cit. 161 CAPÍ1ULO 4 ex comandante del Bloque Norte se enamoró` de la hacienda Ll Pa·o de doce mil hectareas la que compró` a los ganaderos Bedoya y en donde construyó lujosas instalaciones e implantó culti·os de teca. Ln 2003, a la par que se adelantaban las negociaciones para la des- mo·ilización de las Autodeíensas Unidas de Colombia, Jorge 40` contrató un tramitador` para que con ser·idores del INCODLR legitimaran las tierras expoliadas, como consta en la iníormación del íamoso computador hallado en 2009 en San Ángel, en el que aparece los archi·os: Listas de parcelas a legalizar`, o Pendientes de legali- zar a los muchachos`. luncionarios del INCORA,INCODLR, desconociendo hechos notorios como el desplazamiento íorzado y la ·iolencia en la zona, re·ocaron los títulos de los parceleros iniciales, con el argumento de que habían sido abandonadas y las re adjudicaron a personas cercanas al ex jeíe del Bloque Norte, entre ellas a Mireya Pertuz su cocinera, y paramilitares como Vargas Contreras, alias Raía 50`. Situación en la que ademas se contó con el concurso de ser·idores de notariado y registro y de otras entidades territoriales. La desmo·ilización de Jorge Cuarenta` y de sus hombres del BN, moti·ó a las ·íctimas a retornar a sus parcelas. Dicha moti·ación se reíorzó después de la audiencia realizada en Barranquilla en julio de 200¯ 188 , en la que maniíestó que les de·ol·ería |a las ·íctimas| las tierras que él y sus hombres les habían quitado` ,1o·ar, 200¯, 189 , en especial las comprendidas en las cerca de 3.000 hectareas que íorma- ban parte del campamento del bloque ,mapa No. 13,, así como con el mensaje en·iado a sus hombres y testaíerros en el que senalaba que debían de·ol·erle las tierras a los campesinos y |que| si había algún paramilitar en la zona, los campesinos tenían que denunciarlo` 190 . No obstante lo anterior, al ·ol·er a la región, las ·íctimas se topa- ron con una realidad muy distinta a la prometida. Sus Fncas habían 188 Ante una petición escrita realizada por las ·íctimas en la que solicitaban la de·olu- ción de sus tierras, Rodrigo 1o·ar Pupo respondió que éstas podían ser consideradas como de·ueltas al momento de su desmo·ilización cuando íueron entregadas al Go- bierno Nacional ,1o·ar Pupo, 200¯-b,. 189 1eraaa.bierta: Dos ·eces despojados`. 190 íbíaev. 162 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS sido tecniFcadas con soFsticados acueductos para dar de beber a los animales, estaban protegidas con cercas eléctricas, sembradas de teca y las cuidaban hombres armados` 191 . Pese a ello, la comunidad de Ll Lncanto ingresó a la ·ereda, recuperando once de los 3¯ predios adjudicados 192 , las que íueron objeto de las medidas de protección de tierras del Decreto 200¯ de 2001, gracias al acompanamiento del Proyecto de Protección de 1ierras y Patrimonio y de otras agencias nacionales e internacionales. A partir de lo expuesto y de las pruebas recolectadas, la liscalía solicitó al 1ribunal de Justicia y Paz de Barranquilla que suspendiera el poder dispositi·o de quienes Fguraban como titulares de los predios, como medida cautelar para e·itar que íueran objeto de transacciones. 191 1eraaa .bierta: Justicia y Paz congela bienes de testaíerros de Jorge 40``. 192 Lntre·ista con representantes de la ·ereda Ll Lncanto. Mapa elaborado a partir de las denuncias de las víctimas y la base de datos de la CNRR, sede Barranquilla. MAPA NO. 13. Despojo en el departamento de Magdalena 163 CAPÍ1ULO 4 Ln enero de 2011, la Corte Suprema de Justicia le ordenó al INCO- DLR re·ocar las segundas adjudicaciones y titular nue·amente a los legítimos propietarios. Lsta orden ha sido cumplida de manera parcial por la citada entidad, la que ademas gestionó ante la OFcina de Ins- trumentos Públicos de Plato, Magdalena, la inscripción y cancelación de las respecti·as anotaciones ,CSJ, 2011- a Jorge 1o·ar Pupo - re·o- catoria títulos, INCODLR,. Actualmente, las parcelas de Ll Lncanto y Bejuco Prieto se en- cuentran ocupadas por: i, las ·íctimas, adjudicatarios iniciales del INCORA que regresaron -aunque el título Fgura a nombre de los se- gundos beneFciarios del INCODLR-, ii, los segundos adjudicatarios del despojo administrati·o, y iii, terceros no beneFciarios, quienes compraron al segundo grupo de adjudicatarios. Ln estas condiciones, ·íctimas, desmo·ilizados y campesinos reclaman la legítima propie- dad de las tierras, unos con resoluciones de adjudicación ·igentes, otros con resoluciones de adjudicación iniciales y su condición de desplazamiento y los últimos con documentos que acreditan las com- pra·entas 193 . Ll caso de Chi·olo es tan sólo una muestra de las miles de hectareas de tierra que íueron apoderadas por los miembros y aliados del BN con el apoyo de los ser·idores del INCODLR, notariado y registro y autoridades locales en los departamentos de Magdalena 194 y Cesar 195 . 193 Lntre·ista con líder de las ·íctimas de las ·eredas de Bejuco Prieto y Parapeto, mu- nicipio de Chi·olo, departamento de Magdalena. 194 De coníormidad con la in·estigación adelantada por VerdadAbierta, en los trece municipios en que hizo presencia Jorge Cuarenta`, el INCORA,INCODLR re·ocó o declaró la caducidad de 134 títulos, mediante los cuales se había otorgado el derecho de propiedad a igual número de íamilias. Lntre los municipios mas aíectados se en- cuentran Chi·olo, Ariguany, Pi·ijay y San Ángel 195 La liscalía in·estiga al ex gerente del Incora - Magdalena, José lernando Merca- do Polo, entre otros íuncionarios de esa entidad, así como al registrador de Ll Plato, Carlos Penaranda Massón, al notario de Ariguani, Armando Andrade Palacio, y a los exconcejales de Chi·olo, Mileth Villa Zabaleta, y de lundación, José Norberto Bedoya Prada ,Ln: 1eraaa.bierta. liscalía abre in·estigación a íuncionarios del INCORA, INCODLR`,. De igual íorma ese organismo in·estiga a Carlos Reyes, ex director del Incoder - Cesar, inhabilitado por la Procuraduría. 164 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Ln el primero, pese a las actuaciones de la liscalía de Justicia y Paz que ordenó capturar al entonces gerente del INCODLR y a otros íuncionarios de esa institución, e in·estigar al registrador seccional de Ll Plato y al notario de Ariguani, son incipientes los a·ances para restituir los derechos de los parceleros de otros predios que hacían parte de la gran hacienda La Pola ,La Palizua, La 1olua, Vista ler- mosa y Villa Cruz,, así como para identiFcar quienes determinaron el accionar militar del Bloque Norte, y quienes se beneFciaron apode- randose de las tierras de las ·íctimas, entre los que se han mencionado a Neyla Alíredina Soto Ruiz, alias La Sombrerona` 196 , Miguel Castro Gnecco, alias Don Armando`, el empresario ganadero y tesorero del Bloque Norte, Saúl Se·erini, y el desmo·ilizado Augusto Castro Pacheco, alias 1uto` 19¯ , amigo personal de Jorge 40` y hermano de Jorge de Jesús Castro Pacheco -condenado por parapolítica-, y de la alcaldesa suscriptora de los Pactos del Magdalena ,CSJ, 2010-g - Jorge de Jesús Castro Pacheco,, y quien ademas íue receptor de recursos del CertiFcado de Incenti·o lorestal. Ln el departamento del Cesar se han documentado el despojo en las parcelaciones de Ll Prado y Mechoacan, en la Jagua de Ibírico y su destinación a la explotación minera, en las que se obser·a el mismo patrón criminal de despojo y legalización que en las otras regiones de los casos expuestos ,mapa 14,. 196 1eraaa.bierta: Sucedió en la república independiente de La Sombrerona``, y Ver- dadAbierta: Ll INCORA 40 y sus ladrones. 19¯ RC^ R.DíO: Orden de captura contra Augusto Castro Pacheco, alias 1uto Cas- tro``. 165 CAPÍ1ULO 4 Como se senaló antes, el despojo en el predio Ll Prado es ejemplo para algunos de los comandantes militares de los intereses económi- cos que subyacían al discurso de combatir las guerrillas del empre- sario lugues Rodríguez. Pese a ello, la orden de de·ol·er el predio adquirido por el Incora para ubicar a las cuarenta y ocho íamilias deportadas de Venezuela que lo reclaman, íue dictada por la justicia ordinaria en el íallo que condenó a cuarenta anos de prisión a Luis lernando Andrade Ospina, alias Ll Llanero`, ex miembro del Blo- que Norte. Sin embargo, no es claro como se cumplira la orden judi- cial debido a que sobre ese predio, desconociendo los derechos de las íamilias, el propio INCODLR, bajo la dirección de Rodolío Campos Soto -inhabilitado por la Procuraduría por el manejo de los recur- sos de Agro Ingreso Seguro-, suscribió un contrato de permuta con PRODLCO S. A., Flial de la multinacional carbonera GLLNCORL. Fuente: Gobernación del Cesar, “Exposición de resultados del grupo profesional”, presentación en power point, de diciembre de 2012. MAPA NO. 14 Región carbonííera en el departamento del Cesar 166 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Al igual que en el Prado, en las parcelas de Mechoacan, en las que se repitió el mismo patrón antes mencionado, se extrae carbón por parte de la empresa estadounidense Drummond. NKLKMKLK ]:/$0$1E 7-10.9. -% '.%$1 7- `?/ 8/-=G%a La rele·ancia del caso Las 1ulapas, municipio de 1urbo, Antioquia ,Mapa 14,, se debe a que demuestra nue·amente la intencionalidad primigenia de la Casa Castano y de sus aliados de apoderarse del bo- tín de las tierras y territorios en zonas despobladas como eíecto de la comisión de crímenes atroces como las masacres de La Chinita, La Cunas, Ll Oso, Ll Aracatazo y Policarpa perpetradas por Los 1an- gueros` bajo las ordenes de lidel Castano, entre 1994 y 1995, y de cómo operó la empresa para su legalización ,parainstitucionalidad`,. Pese a que inicialmente, Rendón lerrera negó haberse apropiado de tierras, a lo largo del proceso reconoció que la ·ereda 1ulapas es una región donde hubo muchos desplazados` y en la que se adqui- rieron a la íuerza y con maniobras íraudulentas ,Rendón, 200¯, -cerca de cuarenta mil hectareas según la Superintendencia de Notariado y Registro-. Ll Aleman` destinó cerca de 250 millones de pesos pro·enientes de los impuestos que cobraba a todas las acti·idades en la región, incluyendo las de narcotraFco, para adquirir predios a menos precios y otros artilugios con destino a su Proyecto Paso, ,Rendón, 2011,. Con ese propósito delicti·o le ordenó a Dairon Mendoza Caraba- llo, alias Rogelio` o Ll Águila` buscar un tramitador` y a alguien que con·enciera a los campesinos para que ·endieran. Ll primero íue Antonio Meléndez, asesinado en 2008, que aparentemente contó con el apoyo de Lucely Contreras Martínez, encargada de la Notaría de Apartadó, actualmente in·estigada por las irregularidades de esa oFcina. Ll segundo íue Guido Vargas, el comprador de los hermanos Castano y de Mancuso. 16¯ CAPÍ1ULO 4 Mapa elaborado a partir de las denuncias de las víctimas y la base de datos de la CNRR, sede Barranquilla. MAPA NO. 15. Ventas íorzadas y íalsas en el Uraba Meléndez arregló los documentos mediante los cuales los titula- res de Ll Carmelo y La Lsplendorosa le transFrieron los predios a Benjamín Al·arado Bracamonte, quien los enajenó a loyos Pérez y Atehortúa Salinas, reconocidos compradores masi·os de tierras en esa región 198 . La liscalía e·idenció que los poderes con los que se ade- lantaron las transacciones eran íalsos ,no coincidían las Frmas ni las huellas,, que en dos casos los titulares de los predios habían muerto antes de Frmar las escrituras, y que de las quince íamilias, trece habían 198 loyos Pérez Fgura como comprador de los predios La Cabana, No lay como Dios y La Lsperanza, y Atehortúa de Costa Azul, Ll Delirio, Mi Ranchito, Dios se Sabe y Ll Rosario localizados en 1urbo. Ln ·arias de las transacciones Lljah Zuniga presentó poderes en los que se estipulaba mi apoderado queda ampliamente íacultado para la Frma de la escritura de ·enta a la persona que el elija` ,SNR, 2010-a,. 168 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS sido íorzados a ·ender y dos habían sido objeto de ·entas íalsas 199 . Ln las transacciones actuaron como comisionistas Carlos Alberto Graja- les Gómez, Jorge Lljach Zuniga 200 y labian Roldan Villa, in·estigados por el delito de concierto para delinquir. Los quince terrenos 201 que hacen parte de dos Fncas La Lsplendo- rosa con una extensión de ¯08 hectareas, actualmente a nombre de lumberto León Atehortúa Salinas, alias Juan Diego` 202 , y Ll Con·e- nio de 34¯ hectareas a nombre de Otoniel Segundo loyos, alias Ll cabo Ri·era` o Ll Lnano` ,Rendón 200¯-b,, integrantes de citado bloque, íueron oírecidos por el ex comandante del BLC al londo de Reparación de Víctimas. Lstas dos Fncas hacían parte de una mas grande, compuesta por doscientos predios de mas de ocho mil hec- tareas ,CSJ, 2010-j lreddy Rendón lerrera - cancelación de títulos,. Con base en estos hechos y luego de las diíerentes interpretaciones por parte de la liscalía y el magistrado de control de garantías de Jus- ticia y Paz, la Corte Suprema de Justicia ordenó la cancelación de los títulos y la entrega de los terrenos a sus legítimos titulares. NKLKMKMK <"-7&.1 $0".0&$7.1 0." Y$1O\% -% S"$OG Dentro del proceso que se adelanta contra Pedro Bonito`, quién como se relató antes, explicó que ingresó a los grupos paramilitares para recuperar predios de su íamilia y para quien era ·alido apropiar- 199 CNRR, 1ribunal de Justicia y Paz citó a nue·as audiencias para cancelación de títulos íraudulentos`. 200 Lljach Zuniga actuó como apoderado en las compras de predios realizadas por una de las compradoras masi·as de tierras en 1urbo, Zulma \ibi Romero Cerquera ,pre- dios Ll Por·enir, Nue·a Australia, Nue·a Lstrella, La lortuna, Ll Principio y Siloé, ,SNR, 2010-a,. 201 No hay como Dios, La Prima·era, La Paz, La Lsperanza, La Cabana, Ll Delirio II, Costa Azul I y II, La Jordania, Mi Ranchito, Ll Rosario, Nue·o Paraíso y Dios sí Sabe. 202 Lncargado de organizar las reuniones entre Ramón Antonio Valencia Duque y alias Ll Aleman`, particularmente de la realizada en la Fnca la Virgen del Carmen, y de re·isar el correo electrónico de este último ,CSJ, 2010-k - Ramón Antonio Valencia Duque,. 169 CAPÍ1ULO 4 se de los predios del Botín de Guerra` arrebatados a pobladores que tildaron de guerrilleros, la Corte Suprema de Justicia ordenó la cancelación de los registros dolosos a tra·és de los cuales se apropió de los inmuebles rurales Casa Mía 1, Ll Alto de los Almendros 2 y Campo lermoso o Ll Roble 3, localizados en la ·ereda Los Cedros, Corregimiento Bajira, Municipio de Mutata, Antioquia de propiedad de los hermanos Conrado de Jesús y lernando Cardona liguita. Lste último aparece Frmando las escrituras dos anos después de que íuera asesinado por miembros del írente Alex lurtado ,CSJ, 2011-í Raúl Lmilio lasbún Mendoza - cancelación títulos íraudulentos,. La de·olución de estos predios, que estu·o truncada durante cerca de dos anos por la interpretación del magistrado del 1ribunal encargado del proceso, íue realizada por la liscalía en agosto de 2011. Ln la sentencia se describen ·arios de los elementos del patrón de usurpación antes mencionados: Vaciamiento de la zona median- te la íuerza y la ·iolencia, compra·entas íraudulentas, adquisiciones posteriores de los predios despojados por parte de terceros, en este caso Jaime de Jesús López Lche·erri y los miembros de la sociedad Palmas y Ganado S. A. ,PALMAGAN,, que recibieron como aporte social los predios arrebatados a las ·íctimas, y actuaciones irregulares de ser·idores de la liscalía en Uraba, Antioquia y de la Notaría de Carepa. 1¯0 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS 1¯1 CONCLUSIONLS \ RLCOMLNDACIONLS Acercarse a la ·erdad del despojo y apropiación de tierras como estrategia del paramilitarismo, parte de analizar el voav. o¡eravai de la Casa Castano íormada por lidel, Carlos y Vicente, en cuyo conoci- miento han sido íundamentales las ·ersiones libres, los testimonios y demas declaraciones, así como las denuncias de organizaciones no gubernamentales y académicas que dieron lugar a las in·estigaciones y condenas por parapolítica`. A partir de este analisis, es posible determinar los ·ínculos entre paramilitares y narcotraFcantes con sectores legales, la inFltración y cooptación de entidades públicas y la coníabulación con ser·idores públicos, ci·iles y militares. Dichas re·elaciones son un reíerente importante para la recons- trucción de los intereses y causas que subyacían al destierro ·iolen- to, elemento sustancial para la deFnición y ejecución de políticas de reparación integral y de restitución. Sin embargo, no son suFcientes para conocer los autores, determinadores, cómplices y beneFciarios, en parte por tratarse de ·ersiones que pueden ser parciales o sesgadas, medidas por el temor o que son ampliamente cuestionados en su ·e- racidad y credibilidad por pro·enir de delincuentes, y en parte por los eíectos de la extradición dadas las decisiones de los ex comandantes, las trabas jurídicas y logísticas y, especialmente las negociaciones de los Senores de la Droga` -particularmente de los que no se desmo- ·ilizaron-, que obtienen sustanciales rebajas de sus penas a cambio de iníormación de rutas y narcotraFcantes, y la entrega de bienes incluidos los despojados, sin que se les requiera por sus crímenes de derechos humanos. 1¯2 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Sin perjuicio de lo anterior, dichas re·elaciones arrojan iníorma- ción sobre el nexo causal entre las ·iolaciones y gra·es crímenes de derechos humanos y de lesa humanidad y los Fnes lucrati·os y de enriquecimiento de sus protagonistas y, por lo tanto, sobre los intere- ses en apropiarse y atesorar grandes extensiones de tierras y recursos naturales. Ln esa medida se hace e·idente que la comprensión integral so- bre la apropiación ·iolenta y íorzada de tierras, territorios y recursos naturales demanda ·islumbrar los di·ersos mó·iles que guiaban el íenómeno paramilitar según los requerimientos de los socios de la quíntuple alianza, los que se amparaban bajo el discurso antisub·ersi- ·o y la coordinación de operaciones de seguridad. Algunos de ellos se reFeren a la Fnalidad de recuperar` predios abandonados por eíec- tos del accionar de las guerrillas, las crisis y el abandono del campo, y los que habían ·endido al Lstado para procesos de reíorma agraria en respuesta a los mo·imientos campesinos de mitad del siglo pasado. Otros al interés de consolidar el control de territorios para Fnes que ·an desde dominar los culti·os de coca, la producción de cocaína y las rutas del narcotraFco y otros negocios ilegales como el contrabando de armas e insumos, pasando por el animo de acceder o perpetuarse en el poder político y capturar rentas públicas en beneFcio propio, hasta el de in·ertir y esconder los ingentes recursos deri·ados de ac- ti·idades lícitas e ilícitas a tra·és de la puesta en marcha de iniciati·as económicas ,proyectos agroindustriales, ganaderos, mineros, de iníra- estructura y turismo, entre otros,. Lstos mó·iles no pueden desligarse de los hallazgos de la liscalía y la Corte Suprema de Justicia en torno al propósito criminal de la empresa íorjada por la Casa Castano y sus aliados de reíundar la pa- tria e imponer un nue·o orden económico, social, militar y político signado por un plan criminal que incorporaba entre otros crímenes atroces asesinatos y masacres para producir el desplazamiento de los pobladores del campo y con ello el abandono de sus bienes patrimo- niales, en especial de aquellos campesinos beneFciarios de los inci- pientes procesos de reíorma agraria, los que íueron estigmatizados como parte del proyecto guerrillero y contra los que se adelantó una estrategia de recuperación` de las tierras entregadas por el Lstado. 1¯3 CONCLUSIONLS Ln ese propósito criminal que incluía el desmonte de aspectos sus- tanciales de la Constitución de 1991, el a·ance del proyecto paramili- tar les oíreció a sus miembros organicos y aliados las condiciones para enriquecerse en las que la apropiación de tierras era y es un elemento común justiFcado desde su negocio o acti·idad. Bajo el reclamo de seguridad empresarios se apro·echan del mercado ·iolento de tierras para ampliar o iniciar nue·as acti·idades económicas, y generar ma- yores utilidades. Los narcotraFcantes ,paranarcos` y narcoparas`, consolidaron y aseguran rutas, adquirieron estatus social o aspiran a hacerlo y entraron en el circuito de la legalidad la·ando acti·os con propiedades muebles e inmuebles y con acti·idades económicas ·in- culadas a ellos. Lsta última Fnalidad coincide con la de terratenientes, ganaderos y representantes de otros sectores que accedieron a cargos de elección popular y otros empleos públicos, lo que les permitió apropiarse de rentas públicas e incidir en la adopción de decisiones legales y administrati·as que ademas de legalizar el despojo les íacilitó adquirir recursos, permisos y otros incenti·os para la puesta en mar- cha de proyectos de desarrollo en las tierras acumuladas y recupe- radas`, en menoscabo de los derechos de campesinos y campesinas, pueblos indígenas y comunidades aírodescendientes, beneFciarios de programas estatales de dotación de tierra. No obstante lo anterior, siguen siendo incipientes los a·ances en re·elar la relación y, por ende, la responsabilidad de todos los in·o- lucrados ,condenados e in·estigados o no, en la ·ulneración de los derechos patrimoniales de las ·íctimas. Ln especial, toda·ía existen muchas ·erdades por ser rele·adas en torno al desplazamiento y el consecuente abandono, despojo y concentración de la tierra y del uso del suelo exacerbados por un modelo de desarrollo sesgado a ía·or de proyectos de desarrollo económico como los agroindustria, la gana- dería extensi·a, la minería, el turismo, la Fnca raíz y la iníraestructura a gran escala con alta demanda de capital y tierras. Ln eíecto, los íallos judiciales constituyen importantes aportes que permiten comprender la expansión y consolidación del íenómeno paramilitar instado por élites económicas y sociales, con el concurso de ser·idores públicos y militares, e instrumentos legales como las 1¯4 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Con·i·ir. Sin embargo, el esclarecimiento de estos nexos no ha sido suFciente para determinar quiénes son los ganadores del abandono íorzado y del expolio, de·elar y perseguir la cadena de testaíerrarto y receptación a tra·és de la cual se ocultan, y desmontar las estrategias y maquinarias criminales empleadas en la concentración de la tierra y de sus usos. De esta manera subsiste el deber inaplazable de responder, ¿qvieve. .ov to. gavaaore. aet botív ae ta. tierra. , otro. vegocio. ae.¡o;aao. ev et varco ae to. e.taao. ae avtoaefev.a. Con base en las re·elaciones de ex comandantes y ex integrantes de las estructuras gestadas por la Casa Castano puede senalarse que dentro de los ganadores del despojo se encuentran, en primer lugar, los propios paramilitares, que las utilizaron para desarrollar proyectos económicos a tra·és de testaíerros, ·inculando empresarios y apa- lancando recursos públicos. Pero no íueron los únicos. 1al y como se desprende de las ·ersiones y testimonios, de una parte, y de los hallazgos de las instancias de la Ley 9¯5 de 2005, organizaciones so- ciales y de ·íctimas y entidades públicas como la Superintendencia de Notariado y Registro, entre otras, también se apropiaron del botín los socios legales de la empresa criminal. Ls por ello que las in·estigaciones de Justicia y Paz deben alimen- tarse y complementarse con: i, las pruebas y re·elaciones obtenidas en los procesos de parapolítica` adelantados por la Corte Suprema, ii, las condenas internacionales y las in·estigaciones nacionales -aún incipientes- por ·ínculos de empresarios y multinacionales en el íe- nómeno de la paraeconomía` y el paraempresarismo`, i·, los pro- cesos de responsabilidad disciplinaria, Fscal y penal contra ser·idores públicos causantes del despojo o de su legalización parainstitucio- nalidad militar y ci·il`, ·i, los procesos penales por enriquecimiento ilícito y narcotraFco, ·ii, los procesos de extinción de dominio que aíecten bienes de ser·idores públicos, particulares y narcotraFcantes ,paranarcos` y narcoparas`,, y ·ii, de las in·estigaciones sobre las tipologías del despojo material y jurídico ,administrati·o y judicial, que adelantan instancias públicas y pri·adas, especialmente en regio- nes en las que se han presentado compras masi·as de tierras con pos- terioridad a la comisión de crímenes sistematicos y masi·os. 1¯5 CONCLUSIONLS Lo anterior exige la puesta en marcha de una política criminal in- tegral que no se reduzca a la determinación de la ·erdad judicial de uno de los socios de la empresa criminal 1 : los postulados a la Ley de Justicia y Paz. La magnitud, sistematicidad y masi·idad de los críme- nes contra los pobladores del campo y la existencia de una empresa criminal de despojo y de su legalización, impone el deber de acabar y combatir los altos ni·eles de impunidad. Lsto quiere decir que no es suFciente condenar a los miembros militares del paramilitarismo y a los ser·idores de elección popular con los que concertaron, ni perse- guir exclusi·amente los bienes de paramilitares, narcoparamilitares y narcotraFcantes sin recuperar los bienes de los demas socios legales de la quíntuple alianza criminal. Ln este sentido, al identiFcar todos los actores comprometidos en la empresa criminal así como sus intereses y moti·aciones, es posible construir, en cla·e de no repetición, una memoria histórica que acom- panada de iniciati·as de reparación, re·erse el despojo y la ocupación ilegítima de las tierras abandonadas, y posibilite las condiciones para el pleno ejercicio del derecho a la propiedad de tierras y territorios de las ·íctimas, de manera que se quiebre la lógica del desplazamiento y el despojo. 1 Una política criminal integral debe propender como mínimo a ,i, esclarecer los he- chos de desplazamiento y apropiación de tierras y de territorios étnicos con Fnes eco- nómicos legales ,proyectos de desarrollo, e ilegales ,narcotraFco, contrabando, etc.,, ,ii, identiFcar el patrón de las ·iolaciones y la cadena de delitos, ,iii, desarticular las estructuras delincuenciales del íenómeno macrocriminal ampliamente descrito por la Corte en la sentencia C-3¯0 de 2006 y en las sentencias de la Corte Suprema de Justicia contra ser·idores públicos condenados por concierto para delinquir, ,i·, identiFcar, juzgar y aplicar las respecti·as sanciones penales, ci·iles, administrati·as, Fscales y dis- ciplinarias, según corresponda, a los responsables del destierro, sin perjuicio de que se trate de agentes legales o ilegales, ,·, penalizar conductas prohibidas en la legislación agraria antes de la Ley del Plan relacionadas con la adquisición de tierras adjudicadas por el Lstado que superen el tamano de la Unidad Agrícola lamiliar y la ocupación ilegítima de baldíos, así como las transíerencias sobre ellos, ,·i, in·estigar y sancionar a los jueces que proFeren sentencias de pertenencia sobre baldíos y territorios étnicos y ambientales y ·ii, ejercer las acciones de repetición contra los ser·idores públicos que participen directa o indirectamente en el despojo o a su legalización y contra los miem- bros de los grupos armados al margen de la ley` ,Salinas „ otros, 2012,. 1¯6 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS De manera complementaria y ante la e·idencia de la participación directa de los aliados legales del íenómeno paramilitar en las sistema- ticas y masi·as expoliaciones de tierras y territorio, la acción cons- titucional de extinción de dominio no puede limitarse a perseguir y recuperar los bienes de los agentes ilegales ,paramilitares y narco- traFcantes,, maxime cuando no se ha demostrado su eFcacia. Por el contrario, urge reíormarla y extenderla a los bienes de los agentes legales públicos y pri·ados que concertaron con ellos y a los que se beneFciaron de sus acciones, especialmente en los casos en que no puedan acreditar la buena íe y el origen lícito de sus incrementos patrimoniales ,enriquecimiento ilícito,, actuaron como testaíerros, auspiciaron, íacilitaron o íormalizaron el despojo contra el Lstado o utilizaron iníormación pri·ilegiada para apropiarse de las tierras ,Artículo 2 de la Ley ¯92 de 2002 modiFcado por el artículo ¯2 de la Ley 14¯4 de 2011,. Adicionalmente, ante la contundencia de los hechos que demues- tran la existencia de una empresa criminal para legalizar la acumula- ción ·iolenta y íraudulenta de tierras y territorios, la implementación de la Ley de Víctimas exige contar con mecanismo idóneos y suF- cientes para garantizar la ·ida e integridad personal de las ·íctimas y la protección y deíensa de sus bienes, y para des·irtuar las oposi- ciones de terceros a sus demandas de restitución. La impunidad, así como la puesta en marcha de proyectos económicos en territorios y predios abandonados por la íuerza, son los principales obstaculos para re·ersar la concentración a sangre y íuego. La persistencia de los grupos ilegales que brindan protección a los ganadores del éxodo íorzado guarda estrecha relación con la creación de los autodenomi- nados ejércitos anti restitución` y con el incremento de asesinatos y amenazas contra líderes y reclamantes, incluso en las regiones íoca- lizadas para la aplicación de la Política Nacional de Consolidación y Reconstrucción 1erritorial. Asimismo, las grandes in·ersiones con recursos de dudosa proce- dencia en proyectos económicos de gran escala en predios abandona- dos o despojados hacen pre·er que existira un gran número de opo- sitores dispuestos a alegar la buena íe en su adquisición. Así las cosas, 1¯¯ CONCLUSIONLS las autoridades administrati·as y judiciales encargadas de la aplicación de la acción de restitución deben ser rigurosas y no coníormarse con la acreditación de la buena íe sino demandar que se demuestre íeha- cientemente que esta exenta de culpa. A la íecha pareciera que las medidas pre·istas en la política de res- titución no son del todo suFcientes para de·ol·er material y jurídi- camente las tierras y los territorios a los desposeídos, situación que puede hacerse mas compleja con la puesta en marcha de la política de desarrollo rural en la que se pri·ilegian los criterios de crecimiento económico y producti·idad y la reacti·ación del mercado de tierras, por medio de i, programas masi·os de íormalización, ii, la autoriza- ción de adquirir amplias extensiones de tierras adjudicadas por el Ls- tado sin la limitación de la Unidad Agrícola lamiliar, iii, la entrega de baldíos para coníormar zonas de desarrollo empresarial, i·, el dere- cho real de superFcie, y ·, los contratos de uso de la Ley de Víctimas. Sobre el particular, los elementos de los Proyectos Producti·os para la Paz y su semejanza con los empleados en el plan criminal disenado y aplicado por Vicente Castano, especialmente el uso de la maquinaria estatal administrati·a y judicial para la empresa criminal de despojo y legalización, hacen pre·er la necesidad de establecer mecanismos que impidan que la íormalización de la propiedad rural y las Fguras antes mencionadas, sean íuncionales a la legalización del despojo y al usu- íructo ilegítimo e ilegal de las tierras abandonadas por las ·íctimas. linalmente, ante el alto porcentaje de ser·idores públicos ci·iles y militares in·estigados y las condenas contra congresistas por vvtrir, bacer ¡arte cov¡artir o bevefciar.e aet ¡ro¡ó.ito crivivat ae refvvaar ta ¡a· tria, la reparación de las ·íctimas y de la sociedad demanda impulsar procesos para que también sean declarados política y socialmente responsables. Su in·estidura hace mas gra·oso su concurso en la em- presa criminal y, por ende, deben establecerse los mecanismos que impidan que puedan acceder nue·amente a cargos públicos y heredar sus íortines a sus íamiliares. Omitir este deber, amén de condenar a la impunidad el expolio y su eíecto en la concentración de la tierra, generaría una especie de amnistía de responsabilidad ci·il |política y moral|, de quienes, se ·alieron de sus cargos y poder para auspiciar, 1¯8 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Fnanciar o promo·er el proceso macrocriminal` y,o para beneFciar- se de él ,Corte, 2006,. 1¯9 ABRLVIA1URAS !"#$ &'()*+*,-$ .$,$ "$ /*0(#*1,$203( 4'20$" 5 62'(3702$ 8* "$) 9*,)'($) 5 :,;.') !"<$8') *( !,7$) !&/ !)'20$203( !1,'*7.,*)$,0$" 8* =0*,,$"#$ &3,8'>$ !4?!=&? !;#'8*@*()$) &$7.*)0($) 8* &3,8'>$ 5 A,$>B !&&A !;#'8*@*()$) &$7.*)0($) 8*" C$18$"*($ C*80' !&CC D$(8$) &,070($"*) D!&/EC D"'F;* D$($(*,' DD D"'F;* &$#$#;7>' D&$ D"'F;* &3,8'>$ D&' D"'F;* G"7*, &B,8*($) D6& D"'F;* HI,'*) 8* C'(#*) 8* C$,-$ DHCC D"'F;* J',#* DJ D"'F;* 4;, 8* D'"-K$, D4D &'"*2#0K' 8* !>'1$8') L')I !"K*$, /*)#,*.' &&!L!/ &'70)03( J$20'($" 8* /*.$,$203( 5 /*2'(20"0$203( &J// &'70)0'(*) /*10'($"*) 8* /*)#0#;203( 8* D0*(*) &//D &'70)03( 8* 4*1;070*(#' $ "$ 9'"-#02$ 9M>"02$ 8* !#*(203( $ "$ 9'>"$203( N*)."$<$8$ &'70)03( O &'70)03( 8* 4*1;070*(#' &'()#0#;203( 9'"-#02$ &9 &'();"#',-$ .$,$ "') N*,*2P') H;7$(') 5 *" N*)."$<$70*(#' &?NH64 &',#* &'()#0#;20'($" &?/=6 &',#* 4;.,*7$ 8* L;)#020$ &4L N*.$,#$7*(#' !870(0)#,$#0K' 8* "$ 9,*)08*(20$ N!9/6 N*.$,#$7*(#' !870(0)#,$#0K' 8* 4*1;,08$8 N!4 N*.$,#$7*(#' J$20'($" 8* 9"$(*$203( NJ9 N*.$,#$7*(#' !870(0)#,$#0K' 9,').*,08$8 4'20$" N!94 N0,*2203( J$20'($" 8* 6)#;.*@$20*(#*) NJ6 6+I,20#' 8* Q0>*,$203( J$20'($" 6QJ 6+I,20#' /*K'";20'($,0' !(#02'7;(0)#$ 8* &'"'7>0$ 6/9!& 6+I,20#' 9'.;"$, 8* Q0>*,$203( 69Q R,*(#* !"*S H;,#$8' R!H 180 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS R0)2$"-$ :*(*,$" 8* "$ J$203( R:J O RE4&!QT! 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Desmo·ilizaciones Autodeíensas Campesinas de Córdoba y Uraba 182 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS D"'F;* C'(#*) 8* C$,-$ h 681$, &'>') =*""*< h ZNE6:? 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En: www.altocomisionadoparalapaz.gov.co 183 ANLXOS !"#$%&#%$'" C.*-$, =2+'" <-",$8'&+.0," &$)$ &$)#$k' R08*" &$)#$k' Z/$7>'Z !)*)0($8' &$,"') &$)#$k' Z6" 9*"$8'Z !)*)0($8' U02*(#* &$)#$k' Z6Q 9,'@*Z ' Zo$,;7'Z N*)7'K0"0<$8' D"'F;* &*(#$,;,') 5 );.;*)#$7*(#* $)*)0($8' 6@,$-( 9I,*< &$,8'($ Z[\\] N*)7'K0"0<$8' D"'F;* &*(#$;,') L*)M) E1($20' /'"8B( ZC'('"*2P*] 4', =*,*)$ :37*< m"K$,*< J' *)#B *( L;)#020$ 5 9$< &$,"') C$;,020' :$,2-$ ZN'>"* &*,'] 6S 2'7$(8$(#* 8*" D"'F;* C*#,' $)*)0($8' D2.E%," :, 2'" =FFG ,0 2' $,6+H0 :, G$'-I D"'F;* 6"7*, &B,8*($) R,*885 /*(83( H*,,*,$ Z6" !"*7B(]W ZL')I !"@,*8' D*,,-']W Z9;7$ [] ' Zj;0F;*] &$,"') !,80"$ Z&$,"') &',,*$] 40( 0(@',7$203( L$0,' /*(83( Z:*,7B( C'()$"K*] ' ZN'( :*,7B(] J' *)#B *( L;)#020$ 5 9$< 6"p0( L',1* &$)#$k*8$ ZH*,731*(*) C$<$] ?#'(0*" 4*1;(8' H'5') 6" &$>' /0K*,$] ' Z6" 6($('] N$0,'( C*(8'<$ &$,$>$""' Z/'1*"0'] ' Z6" m1;0"$] H;7>*,#' Q*3( !#*P',#M$ 4$"0($) ZL;$( N0*1'] N$(0*" /*(83( H*,,*,$ ZN'( C$,0'] N*)7'K0"0<$8' D"'F;* &*(#$,;,') D"'F;* D$($(*,' 5 &$"07$ 6K*, U*"'<$ :$,2-$ ZH_H_] ' ZH*,O (B( H*,(B(8*<] Z9*8,' D'(0#'] ' Z9*8,' 9'(#*] 6S#,$80#$8' D"'F;* D$($(*,' /$M" 670"0' H$)>M( Z9*8,' D'(0#'] ' Z9*8,' 9'(#*] ANLXO 2. Lstructuras paramilitares y miembros 184 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS J$'0 D2.E%, C.$#, :, 2'" =GFG D"'F;* &3,8'>$ 4$"K$#',* C$(2;)' Z6" C'('] ' Z=,0."* &*,'] 6S#,$80#$8' 4$"'73( R*,0) &P$808 Z\e] J' *)#B *( L;)#020$ 5 9$< L$0,' !(8,I) !(1$,0#$ Z!(8,I)] !)*)0($8' H*,(B( 8* L*)M) R'(#$"K' 4B(2P*< Z6" 9B+$,'] D"'F;* C'(#*) 8* C$,-$ 68V$, &'>') =I""*< ZU*20('] ' ZN0*1' U*20('] &'(8*($8' *( L;)#020$ 5 9$< A>*, 6(,0F;* D$(F;*< C$,#-( ZL;$(2P' N0F;*] &'(8*($8' *( L;)#020$ 5 9$< /'8,01' C*,2$8' 9*";@' Z&$8*($] 4;.;*)#$7*(#* $)*)0($8' L$0,' &$)#0""' 9*,$"#$ Z90#0,,0] J' *)#B *( L;)#020$ 5 9$< D"'F;* J',#* /'8,01' ='K$, 9;.' 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R0:S6,0'" =T$.:,"&,0:+,0#," !(#0'F;0$ [ee_ecb cc_`ii e_abi [f_b[f !#"B(#02' a\_\ic D'"-K$, gfe_``g `cg_\f` g_geb fi_[ae &*)$, `g`_[\f `\\_e\a i_fef e_afb &P'23 ac_\gf ``\_gec [_cia bb_ice &3,8'>$ ``c_ggb ia_gge g_ieg ff_ege Q$ :;$+0,$ bf_ce\ gc_c[i i_\\i `\_aae C$18$"*($ ffa_\f[ ``b_a[b f_aea ff_c\` J',#* 8* 4$(#$(8*, `[b_[a[ c`_afg `_cag `_bb` 4;2,* `g`_``e cc_`ii g_`bg `[_ef\ ='#$" `_e\a_`ga e\\_[fg [f_afe f\i_b[` ;.#'2 0'&+.0'2 N?OP@?BOP U."#%2':. =&#' 7,"&$+/&+H0 :,2 D+,0 G-+&'&+H0 V%0+&+/+. !"#':. 68V$, &'>') =I""*< ee R_ Q$ 9,'K08*(20$ &3,8'>$OD'"-K$, /*20>08' ea R_ /$>' Q$,1' /*20>08' a\ R_ ='"'8$ a` R_ 4$( /'F;* /*20>08' af R_ Q$) 6)#,*""$) /*20>08' 6K*, U*"'<$ :$,2-$ f[q R_ H$#' :,$(8* 6>I+02'O!(#0'F;0$ 4*2;*)#,' fbq R_ Q$ C$,1$,0#$ 4*2;*)#,' fcq R_ 6" 40"*(20' 4*2;*)#,' fiq R_ 4$( C$,0(' 4*2;*)#,' feq R_ 9'2;($ 4*2;*)#,' faq R_ H02'#*$) 4*2;*)#,' g\q R_ 6" N0$7$(#* 4*2;*)#,' ANLXO 5. Inmuebles rurales oírecidos y recibidos en el lRV ANLXO 4. Población desplazada por departamento de llegada 1999-2011 luente: Codhes. Ln: http:,,www.·erdadabierta.com,component,content, article,1¯3-estadisticas,3829-estadisticas-de-desplazamiento 188 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS g`q R_ 6" 4$"$80#' 4*2;*)#,' gfq Q'#* 4*2;*)#,' ggq R_ 9*k$ Q0)$ 4*2;*)#,' R,*885 /*(83( H*,,*,$ [iq R_ Q$ 6).*,$(<$ =;,>'O!(#0'F;0$ 4*2;*)#,' [eq R_ J' H$5 &'7' N0') 4*2;*)#,' [aq R_ Q$ &$>$k$ 4*2;*)#,' b\q R_ Q$ 9$< 4*2;*)#,' b`q R_ 6" N*"0,0' ` 4*2;*)#,' bfq R_ 6" N*"0,0' f bgq R_ Q$ 9,07$K*,$ 4*2;*)#,' b[q R_ L',8$(0$ 4*2;*)#,' bbq R_ 6" /')$,0' 4*2;*)#,' bcq R_ J;*K' 9$,$-)' 4*2;*)#,' biq R_ C0 /$(2P0#' 4*2;*)#,' beq R_ N0') )- 4$>* 4*2;*)#,' baq R_ J' H$5 &'7' N0') J'_ f 4*2;*)#,' c\q R_ &')#$ !<;" 4*2;*)#,' c`q R_ &')#$ !<;" J'_ f 4*2;*)#,' igq R_ U0)#$ H*,7')$ ' Q$ U*,,$F;*,$ J*2'2"-O!(#0'F;0$ 4*2;*)#,' 6"p0( L',1* &$)#$k*8$ O D6& `iq R_ 6" :$""0($<' N$>*0>$O!(#0'F;0$ 4*2;*)#,' ?#'(0*" 4*1;(8' H'5') 9I,*< O D6& [f R_ Q$ E";)03( 4$( L;$( 8* A,$>BO !(#0'F;0$ /*20>08' /'8,01' ='K$, 9;.' gb 9_ Q',*($ ` &',,*1070*(#' 8* C0(2$O4$(#$ C$,#$O C$18$"*($ /*20>08' gc 9_ Q',*($ f /*20>08' gi 9_ 4$(#$ 6"*($ /*20>08' ge 9_ D*""$ U0)#$ ^JB.'"*)d /*20>08' ga 9_ Q$ Q$>,$(<$ ^!"70O ,$(#*d /*20>08' [\ 9_ /*7'"0(' /*20>08' C$,#-( 9*k$,$(8$ ?)',0' i`q R_ 4$( E)08,' 4$(#$ C$,#$O C$18$"*($ 4*2;*)#,' J',>*,#' j;0,'1$ 9'K*8$ `aaq R_ Q') C*""') &',,*1070*(#' 8* C$2P$2$OC$18$"*($ 4*2;*)#,' 189 ANLXOS 4$"K$#',* C$(2;)' :37*< ` R_ U0""$ !7$"0$ 6" :;$7'OD'"-K$, 4*2;*)#,' f R_ 6" &P07>',$<' 4*2;*)#,' g R_ &$,$,* 4*2;*)#,' [ R_ 4$( L')I 4*2;*)#,' b R_ 6" D'(1' 4*2;*)#,' ei R_ Q$) 9$7.$) 4*2;*)#,' f[ 9_ 4$( L')I &',,*1070*(#' 4$(#$ R* 8* /$"0#'W C;(020.0' =0*,,$"#$O &3,8'>$ /*20>08' 9_ 6" 6)2'(808' /*20>08' 9_ U0""$ /')$ /*20>08' b` 9_ 9,'K08*(20$ U*,*8$ 4$( Q',*(<'W C;(020.0' =0*,,$"#$O &3,8'>$ /*20>08' bf 9_ U0<2$5$ /*20>08' bg 9_ Q$ 6).*,$(<$ f &',,*1070*(#' 4$(#$ C$,#$W C;(020.0' =0*,,$"#$O&3,8'>$ /*20>08' b[ 9_ Q$ 6).*,$(<$ ` /*20>08' bb 9_ C0 /*@;10' /*20>08' e\ R_ J;*K$ N*"P0 C;(020.0' =0*,,$"#$O &3,8'>$ 4*2;*)#,' e` R_ U0""$ J;*K$ 4*2;*)#,' ef R_ Q$ :;$0,$ 4*2;*)#,' eg R_ 6" &',#0+' 4*2;*)#,' e[ R_ Q$ :"',0$ 4*2;*)#,' eb R_ 9$< U*,8* 4*2;*)#,' ei R_ Q$) 9$7.$) 4*2;*)#,' ab R_ 9'""' R0$' 4*2;*)#,' ac R_ 9'""' &;7>0$ g 6" :;$7'OD'"-K$, 4*2;*)#,' luente: Actas de entrega de bienes del londo para la Reparación de las Víctimas y las actas de bienes recibidos en diligencia de secuestro, a enero de 2012. Ln: DAPS ,2012,. Ln: http:,,www.accionsocial.go·.co,contenido,con- tenido.aspx·catIDŠ455„conIDŠ166¯„pagIDŠ9441 Consulta el 1€ de enero de 2012. 190 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS V . : . ' : E % + " + & + H 0 = W . U $ . / + , # ' $ + . . $ + 6 + 0 ' 2 X , 0 : , : . $ = W . X , 0 # ' F . * / $ ' : . $ = W . 8 , 0 # ' F . * / $ ' : . $ = W . 7 , " 4 ' & , $ " + * % 2 ' & + . 0 ; + # % 2 ' $ = / . : , $ ' : . = & # . E ( 2 ' , $ ` a a ` L ; " 0 ' 4 0 , o * . * ) L ' , 1 * E K B ( N ; F ; * / * ) # , * . ' ` a a a h ( ' K _ E K B ( N $ , 0 ' ! , , 0 * # $ 4 B ( O 2 P * < ` a a a O ( ' K & * " ) ' ! " @ , * O 8 ' 4 $ " $ < $ , & $ ) # $ k * 8 $ f \ \ i O $ > , 0 " 4 $ " K $ # ' , * C $ ( 2 ; ) ' E K B ( N $ , 0 ' ! , , 0 * # $ 4 B ( 2 P * < N ' ( $ 2 0 3 ( 4 * ( # * ( 2 0 $ ` a e i N $ ( 0 * " & ' ( # , * , $ ) N $ K 0 ) ! ( # ' ( 0 ' D , $ K ' Q ' , $ ` a a a h ' 2 # _ E K B ( N $ , 0 ' ! , , 0 * # $ 4 B ( O 2 P * < ` a a a O ( ' K & * " ) ' ! 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S i m u l a c i o n e s y p r e d i o s d e M a n c u s o l u e n t e : S N R , 2 0 1 1 - c . 191 ANLXOS C.*-$, 5%6'$ =W. !"#$%&#%$' /'$'*+2+#'$ &P0K'"' &P0K'"'W C$18$"*($ f\\\ D"'F;* J',#* h ZL',1* [\Z /$"0#' 4$(#$ R* 8* /$"0#'W &3,8'>$ f\\` !A& ^ZN'( D*,($ZW ZL',1* [\ZW ZN0*1' U*20O ('] 5 C$(2;)' 90K0+$5 90K0+$5W C$18$"*($ f\\f D"'F;* J',#* h ZL',1* [\] 40(1$.;, j;0>83W &P'23 f\\g D"'F;* 6"7*, &B,8*($) h Z6Q !"*7B(] C.*-$, 5%6'$ =W. !"#$%&#%$' /'$'*+2+#'$ D$,,$(2' Q'>$ D$,,$(2' Q'>$ f\\g D"'F;* &*(#,$" D'"-K$, h EKB( /'>*,#' N;F;*W $"0$) Z6,(*)#' DB*<] &$"8$) f\\g D"'F;* &*(#,$" D'"-K$, h EKB( /'>*,#' N;F;*W $"0$) Z6,(*)#' DB*<] &$)$($,* f\\g !;#'8*@*()$) &$7.*)0($) 8* &$)$($,* O HI2#', :*,7B( D;0#,$1'W $"0$) ZC$,#-( Q"$(')] h J' 8*)7'K0"0<$8$) Y,$8+:.$ /Z-2+&. F'$6. 7,/'$#'*,0#. U'$#+:. Y+#%'&+H0 [%$S:+&' U'&#. :, \'2+#. 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Y+#%'&+H0 [%$S:+&' U'&#. :, \'2+#. &0,' /$7-,*< 90(<3( 4 D'5$2B &'()*,K$8', m"K$,' !,$;+' 4 &*)$, !"$) 6F;0.' &'"'7>0$ & H*,($(8' C'"0($ : &*)$, Q0>*,$" & C$;,020' 9070*(#' 4 &*)$, 9$,#08' 8* "$ A & 681$, A"0)*) =3,,*) / &P'23 9$,#08' &$7>0' /$802$" & ?80( 4B(2P*< / &P'23 9$,#08' 8* "$ A & 6"*'(',$ 90(*8$ / &3,8'>$ C'K070*(#' 9'.;"$, A(08' & r R,*885 4B(2P*< / &3,8'>$ Q0>*,$" & r L*)M) C$,-$ Q3.*< : &3,8'>$ Q0>*,$" r L;$( C$(;*" Q3.*< &$>,$"*) 4 &3,8'>$ Q0>*,$" & r Q;-) &$,"') ?,8')1'0)#0$ / &3,8'>$ &'()*,K$8', ! r C01;*" 8* "$ 6).,0*""$ / &3,8'>$ &'"'7>0$ N*7'2,B#02$ & r /*10($"8' C'(#*) / &3,8'>$ &$7>0' /$802$" & r !"@'()' &$7.' 6)2'>$, / C$18$"*($ &'()*,K$8', & r 6(,0F;* /$@$*" &$>$""*,' !8;I( 4 C$18$"*($ 9$,#08' Q0>*,$" &'"'7O >0$(' & R;$8 /$.$1 / C$18$"*($ E L',1* 8* L*)M) &$)#,' 9$2P*2' 4 C$18$"*($ &'"'7>0$ U0K$ & L',1* Q;-) &$>$""*,' / C$18$"*($ !.*,#;,$ Q0>*,$" & J' L')I N'70(1' NBK0"$ !,7*(#$ : C$18$"*($ & l$,*""5 9$#,020$ Q$,$ U*(2* / C$18$"*($ &$7>0' /$802$" & =,0(' Q;($ : C$18$"*($ Q0>*,$" & /02$,8' !,0*" 6"2;,* 4 J',#* 8* 4$(#$(8*, &'"'7>0$ N*7'2,B#02$ & m"K$,' :$,2-$ 4 4;2,* &'"'7>0$ N*7'2,B#02$ & 6,0p C',,0) =$>'$8$ / 4;2,* &'"'7>0$ N*7'2,B#02$ & 193 ANLXOS Y,$8+:.$ /Z-2+&. F'$6. 7,/'$#'*,0#. U'$#+:. Y+#%'&+H0 [%$S:+&' U'&#. :, \'2+#. L',1* 6"0*2*, !($5$ H*,(B(8*< : 4;2,* C'K070*(#' J$20'($" 9,'1,*)0)#$ & L',1* Q;0) R*,0) &P$808 / 4;2,* &'"'7>0$ N*7'2,B#02$ & r 4$"K$8', !,$($ : 4;2,* Q0>*,$" & r &'(K*(20'(*) 4*($8',t 4 &'(8*($8't & /*.,*)*(#$(#*t / !>);*"#'t ! :'>*,($8',t : 9,'2*)' $,2P0K$8't 9!_ E(K*)#01$8't E ANLXO 9. Bienes PPP y Sal·atore Mancuso U$,:+." U$.1,&#. ]$,' U$.1,&#':' ,0 ^' ]$,' 7,",*-.2"." ,0 _ Q$ R"',*)#$ &$2$' `_b\\ f\\ `c\_\\\_\\\ 6" N0";K0't H$20*(8$ "$ R"',*)#$ ' =,*) &','($) &$;2P' `_b\\ fb[_\\\_\\\ J;*K$ N*"P0 R',*)#$"*) O!2$20$ f_\\\ b\e ga[_\\\_\\\ R0(2$ U0<2$5$ `fb R"',*) !,,0>$ ' "$ 6)2;*"$ `f\ 9,*80' &;7>0$ g\ J;*K$ N*"P0 :$($8*,-$ f[\ fbe_\\\_\\\ U0""$ J;*K$ 4_E_ 4_E_ 4_E_ 4_E_ Q$ :;$0,$ 4_E_ 4_E_ 4_E_ 4_E_ 9,'K08*(20$ 4_E_ 4_E_ 4_E_ 4_E_ ='#$" b_f[\ `_g\\ `_\cc_\\\_\\\ &'(K*(20'(*) 40( 0(@',7$203( 4_E_ luentes: Alta Consejería para la Reintegración, ASOA1CO, la sentencia del 1SJO contra Jorge I·an La·erde y la entre·ista a Mancuso. 194 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS 195 &(.%$+82 /( (*9-(:%* Lsquema No. 1. Lstructura organizacional de los bloques seleccionados Lsquema No. 2. Lstructura organizacional del Bloque Norte Lsquema No. 3 Abandono y despojo de tierras &(.%$+82 /( :%,%* Mapa No. 1. Georreíerenciación de las ACCU Mapa No. 2. Georreíerenciación de los bloques seleccionados Mapa No. 3. Presencia de las ACCU en el Uraba Mapa No. 4. Lxpansión de las ACCU en el Caribe y Norte de Santander Mapa No. 5. Georreíerencia del Bloque Norte Mapa No. 6. Georreíerenciación del Bloque Montes de María Mapa No. ¯. Georreíerenciación del Bloque Catatumbo Mapa No. 8. Georreíerenciación de las ACCU en la región del Caribe Mapa No. 9. Georreíerenciación y corredores de traFco de droga Mapa No. 10. Georreíerenciación y zonas de despojo y abandono íorzado Mapa No. 11. Masacres por departamento 2001-2011 Mapa No. 12. Georreíerenciación y concentración de la tierra 2000-2009 Mapa No. 13. Despojo en el departamento de Magdalena Mapa No. 14. Región carbonííera en el departamento del Cesar 196 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS 19¯ RLlLRLNCIAS Z?>B+!D?B b+C>?B R?B2!Z+b+k8R!B U <!B]Sb8R!B 28D;SB!_ B8bZ8]!>?_ 8b+8B `2!D! 28D;SB!a ,2009-b, Declaración rendida el 1 de mayo de 2009 desde \as- hington D. C. ,2008, Audiencia del 30 de enero de 2008 ,200¯-c, Audiencia del 26 de no·iembre de 200¯. ,200¯-a, Audiencia del 16 de enero de 200¯. ,200¯, Audiencia del 15 de enero de 200¯. ,2006-a, Audiencia del 20 de diciembre de 2006. ,2006, Audiencia del 19 de diciembre de 2006. Presentación Power Point ,200¯,. Ln: http:,,www.cipcol.org,·pŠ338. Y8BClD 2?DR!k8_ >8lb ?2+b+!_ 8b+8B `<?R>! C!D+]!a ,2010, Audiencia del 4 de junio de 2010. ,2008-d, Audiencia del 21 de agosto de 2008. ,2008-c, Audiencia del 20 de agosto de 2008. ,2008-b, Audiencia del 6 de agosto de 2008. ,2008-a, Audiencia del 24 de julio de 2008. ,2008, Audiencia del 23 de julio de 2008. >?DRmD Y?>>?>8_ X>?RRn_ 8b+8B `?b 8b?2oDa ,2011, Audiencia de Versión Libre del 10 de íebrero de 2011. ,2010, Audiencia del 4 de junio de 2010. Conjunta con Raúl las- bún. ,200¯-e, Audiencia del 30 de octubre de 200¯. ,200¯-d, Audiencia del 24 de octubre de 200¯. ,200¯-c, Audiencia del 11 de julio de 200¯. 198 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS ,200¯-b, Audiencia del 10 de julio de 200¯. ,200¯-a, Audiencia del 6 de junio de 200¯. ,200¯, Audiencia del 5 de junio de 200¯. ]!Z8> <S<!_ >!R>+[!_ 8b+8B `5!>[? Nja ,200¯-a, Audiencia del 4 de julio de 200¯. ,200¯, Audiencia del 3 de julio de 200¯. Z?b!k8 [8>;p8_ ?Z?>_ 8b+8B `YYa ,2009-c, Audiencia del 13 de íebrero de 2009. ,2009-b, Audiencia del 11 de íebrero de 2009. ,2009-a, Audiencia del 22 de enero de 2009. ,2009, Audiencia del 21 de enero de 2009. ,200-p, Audiencia del 25 de septiembre de 2008. ,2008-o, Audiencia del 24 de septiembre de 2008. ,2008-n, Audiencia del 11 de septiembre de 2008. ,2008-n, Audiencia del 10 de septiembre de 2008. ,2008-m, Audiencia del 29 de agosto de 2008. ,2008-ll, Audiencia del 15 de agosto de 2008. ,2008-l, Audiencia del 14 de agosto de 2008. ,2008-k, Audiencia del 11 de julio de 2008. ,2008-j, Audiencia del 10 de julio de 2008. ,2008-i, Audiencia del 9 de julio de 2008. ,2008-h, Audiencia del 11 de junio de 2008. ,2008-g, Audiencia del 10 de junio de 2008. ,2009-í, Audiencia del 9 de junio de 2008. ,2008-e, Audiencia del 29 de mayo de 2008. ,2008-d, Audiencia del 28 de mayo de 2008. ,2008-c, Audiencia del 2¯ de mayo de 2008. ,2008-b, Audiencia del 28 de marzo de 2008. ,2008-a, Audiencia del 2¯ de marzo de 2008. ,2008, Audiencia del 6 de marzo de 2008. ,200¯-h, Audiencia del 28 de no·iembre de 200¯. ,200¯-g, Audiencia del 2¯ de no·iembre de 200¯. ,200¯-í, Audiencia del 26 de no·iembre de 200¯. 199 RLlLRLNCIAS ,200¯-e, Audiencia del 8 de no·iembre de 200¯. ,200¯-d, Audiencia del ¯ de no·iembre de 200¯. ,200¯-c, Audiencia del 6 de no·iembre de 200¯. ,200¯-b, Audiencia del 31 de octubre de 200¯. ,200¯-a, Audiencia del 30 de octubre de 200¯. ,200¯, Audiencia del 28 de mayo de 200¯. ?D]>?Z+B]8B ;!D <!B]Sb8R!B ,2011, lebert Veloza García. Lntre·ista en el Metropolitan Co- rrectional Center, Nue·a \ork, N. \. Realizada el 16 de mayo de 2011. ,2011, Sal·atore Mancuso. Lntre·ista en Northern Neck Regional, \arsaw, VA. Realizada el 18 de mayo de 2011. ,2011, lernan Giraldo Serna. Lntre·ista con en Northern Neck Regional, \arsaw, VA. Realizada el 18 de mayo de 2011. Lntre·istas con postulados de Justicia y Paz en la Carcel Pico- ta, entre ellos Óscar Ospino Pacheco, alias 1olemaida` y Luis Lduardo Zuluaga Arcila, alias Macyi·er`. Realizadas el 12, 14 y 19 de agosto de 2010. Lntre·istas con desmo·ilizados del Bloque Norte de las ACCU postulados al proceso de Justicia y Paz en la Carcel Judicial de Valledupar, entre ellos Alcides Mattos 1abares, alias Ll Samario`, John Jairo Lsqui·el Cuadrado, alias Ll 1igre`, Lsneider Santiago Gonzalez, alias Medio ‚ilo` y lernan de Jesús lontal·o San- chez, alias Ll Pajaro`. Realizada el 24 de marzo de 2011. Lntre·ista con Alcides Mattos 1abares, alias Ll Samario`. Reali- zada el 29 de julio de 2011. R!;S2?D]!B R?B2!Z+b+k8R!B U <!B]Sb8R!B BLOQUL LLMLR CÁRDLNAS - BLC ,2004, Moaeto ae ^egocia· cióv Cevtraao ev vv Pro,ecto ae .ttervatiriaaa ´ociat ;P.´O) - Pro¡ve.ta at Cobiervo ^aciovat, no·iembre de 2004. 200 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS 28D;SB!_ BK ,2009-a, Carta abierta ae ´atratore Mavcv.o aovae .e vavife.ta .obre ]v.· ticia , Pa¸ , ta e·traaicióv. Consultada el 13 de septiembre de 2010, Ln: http:,,lapazencolombia.blogspot.com,2009,09,carta-abier- ta-de-sal·atore-mancuso.html ,2009, Covvvicacióv airigiaa ¡or Mavcv.o at Pre.iaevte .traro |ribe 1e· te¸ ae.ae í.taao. |viao., del 22 de marzo de 2009. RLNDÓN „ O1ROS ,2011, Comunicación dirigida a Gusta·o Petro Urrego, ex senador de la República y a I·an Cepeda Castro, representante electo a la Camara, suscrita, entre otros por lreddy Rendón lerrera, Jorge I·an La·erde Zapata, Rodrigo Pérez Al- zate, Ldwar Cobos 1éllez, Jesús Ignacio Roldan, Ál·aro Sepúl- ·eda Quintero, Arnubio 1riana Mahecha y Raúl Lmilio lasbún. Comunicación disponible en: http:,,www.lasilla·acia.com,sites, deíault,Fles,media,docs,16480,CartaLxParasAPetroCepeda- ComentadaJuanita.pdí ?D]>?Z+B]8B ;!D Zp;]+28Bq Lntre·ista con líder de las ·íctimas de las ·eredas de Bejuco Prieto y Parapeto, municipio de Chi·olo, departamento de Magdalena. Realizada el 1¯ de íebrero de 2011. Lntre·ista con representante de la ·ereda Ll Lncanto, municipio de Chi·olo, departamento de Magdalena. Realizada el 1¯ de íebre- ro de 2011. Lntre·ista con representante de comunidad de La Palizua, muni- cipio de Chi·olo, departamento de Magdalena. Realizada el 1¯ de íebrero de 2011. Lntre·ista con ·íctimas de las ·eredas Ll prado y Mechoacan, mu- nicipio de la Jagua de Ibirico, departamento del Cesar. Realizada el 23 de marzo de 2011. ·ío. vovbre. ae ta. ríctiva. , to. tvgare. ae reati¸acióv ae ta. evtreri.ta. vo .ov ¡vbticaao. ¡or votiro. ae .egvriaaa. 201 RLlLRLNCIAS !]>8B ?D]>?Z+B]8B lebrero 2¯ de 2010. Gusta·o Gallón de la Comisión Colombiana de Juristas Marzo 1€ de 2010. Ana María Díaz, Omaira Gómez, latima Ls- parza, Alejandra Vega, Leonid Á·ila y \anet Delgado, de la Comi- sión Colombiana de Juristas. Marzo de 2010. Alirio Uribe del Colecti·o de Abogados José Al- ·ear Restrepo. Marzo 15 de 2010. Consultores Grupo Memoria listórica. Marzo 30 de 2010. Alíredo Serrano, periodista y autor libro Los paracos. Abril ¯ de 2010. I·an Cepeda, representante a la Camara. Abril 16 y 26 de 2010. Luis Gonzalez, jeíe Unidad Nacional de liscalías para la Justicia y la Paz. Abril 15 de 2010 en Valledupar. Antonio Cal·o, coordinador sede Cesar de la CNRR. Abril 15 de 2010, en Valledupar. Coordinador del PP1P de Acción Social. Abril 2¯ de 2010. Luis Gonzalez, jeíe UNJP. Abril 28 de 2010. Carlos Gordillo, Fscal de UNJP. Abril 30 de 2010. Aldo Cí·ico, periodista. Mayo 4 de 2010. Rosa Margarita Correa, encargada de la liscalía General de la Nación en materia de bienes patrimoniales dentro del proceso de la Ley 9¯5. Junio 3, 5, 23 y 30 de 2010. lernando Pareja, ·iceFscal general de la Nación y Luis Gonzalez, jeíe UNJP, Jheniíer Mojica llórez, delegada del Ministerio de Interior y de Justicia, lermes Ardila Quintana, jeíe de la Unidad Nacional Antiterrorismo, Margari- ta Correa, delegada de la Jeíatura de la Unidad de Justicia y Paz, Daisy Jaramillo y lilton Correa, Fscales de la Unidad de Justicia y Paz, Sandra María Rojas, deíensora regional Antioquia, Paola 202 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Cada·id, encargada del Componente de Restitución de Bienes de la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación, sede An- tioquia, y Patricia Buritica, miembro de la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación de Colombia. Mayo 2¯ de 2010. Gonzalo Sanchez, coordinador AMl de la CNRR. Junio 23 de 2010. María 1eresa Ronderos, de Verdad Abierta. Agosto 1¯ de 2010. Miembros de la GIZ y de la Comisión Nacio- nal de Reparación y Reconciliación. Agosto 19 de 2010. Pilar Vasquez y Gladis Celeide Prada, de la GIZ. No·iembre 8 de 2010. Carlos Alberto Suescun Barón y Mayra Jo- hanna 1enjo lurtado, miembros de la U1L del Representante a la Camara \ilson Arias. No·iembre 15 de 2011. Antonio García y Carlos Suarez, abogados de lreddy Rendón y Sal·atore Mancuso. lebrero 20 de 2011. Lntre·ista con íuncionarios de la Procuradu- ría en Bucaramanga. Marzo 23-25 de 2011. Antonio María Cal·o Sil·a, coordinador de la Sede Regional Valledupar de la CNRR. Se ·isitó la Carcel Judi- cial de Valledupar para entre·istar a los desmo·ilizados del Bloque Norte de las ACCU postulados al Proceso de Justicia y Paz. Marzo 24 de 2011. Raíael Noriega, in·estigador del C1I de la lGN. Mayo 5 de 2011. Da·id Zapp, abogado de Rodrigo 1o·ar Pupo. Mayo 12 y 3 y junio 9 de 2011. Marcelo Ál·arez y Daniel Millares, MAPP-OLA 2?R+!B R? ;!2SD+;8;+mD ACNUR, \\\.ACNUR.ORG ío. ¡vebto. favta.va. ev Cotovbia. Ln: http:,,www.acnur.org,index.php·idƒpagŠ¯334. 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Ln: http:,,www.elpilon. com.co,inicio,°L2°80°98tolemaida°L2°80°99-explico- como-°L2°80°98jorge-40°L2°80°99-se-con·irtio-en-el- mas-temido-terrateniente-del-magdalena,, marzo 21 de 2011. LL 1ILMPO, \\\.LL1ILMPO.COM 206 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS ßv.ca et ¡rivci¡io ae o¡ortvviaaa a cavbio ae evtregar bieve. ¡ara ta re¡ara· cióv ae ríctiva.. Ln: http:,,www.eltiempo.com,justicia,ex-espo- sa-de-mancuso-pedira-principio-de-oportunidadƒ10403968-4 12 ¡vebto. favta.va.. ´e¡tievbre ²0 ae 2001. Ln: http:,,www.el- tiempo.com,archi·o,documento,MAM-66¯813 ív¡re.a ae Macaco` .e cotó` evtre bevefciaria. ae ¡tata aet Ptav Co· tovbia. Ln: http:,,www.eltiempo.com,archi·o,documento, CMS-532¯46¯ ívtre to. ttavaao. a ;vicio ba, ¡otítico., ev¡re.ario. , e· ¡aravitita· re.. Consulta del 18 de abril de 2011. 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Sitvacióv Regi.trat ae ¡reaio. rvrate. ev to. vvvici¡io. ae .¡artaaó, .rbotete., ^ecoctí, ´av Pearo ae |raba, ´av ]vav ae |raba , 1vrbo - Regióv |raba .vtioqvevo, agosto de 2011. ,2011-b, Situación Registral de Predios Rurales en los Montes de María - presentación en power point-, 2011. ,2011-c, ´itvacióv regi.trat ae ¡reaio. rvrate. ev ta ofciva ae Regi.tro ae ív.trvvevto. Pvbtico. ae ´av Martiv - Meta, agosto de 2011. ,2011-d, Para qve to. cotovbiavo. recv¡erev .v tierra. ívforve ^orte ae ´avtavaer, 2012. 1RIBUNAL SUPLRIOR DLL DIS1RI1O JUDICIAL DL JUS1ICIA \ PAZ-1SJP ,2011-a, Ldgar Ignacio lierro llores, Andrés Mauricio 1o- rres León, y Léster María Gonzalez Romero. Lxpediente 110016000253 -200681366. M.P. Léster María Gonzalez Rome- ro. Bogota, D.C., ¯ de diciembre de 2011. ,2011,. Aramís Machado Ortiz. Lxpediente 11001600025300¯82¯90. M. P. Alexandra Valencia Molina. Bo- gota, D. C., 29 de junio de 2011. ,2010-b,. Jorge I·an La·erde. Lxpediente 110016000253200680281. M. P. Uldi 1eresa Jiménez López, Bogota, D. C., 2 de diciembre de 2010. ,2010-a,. Ldwar Cobos 1éllez y Uber Lnrique Banquez Mar- tínez. Lxpediente 1100160002532006800¯. M. P. Uldi 1eresa Jiménez López, del Bogota, D. C, 29 de junio de 2010. ,2010,. Audiencia de legalización de cargos. Ldwar Cobos 1é- llez y Uber Lnrique Banquez Martínez, del 25 de enero de 2010. VICLPRLSIDLNCIA DL LA RLPÚBLICA-Obser·atorio del Programa Presidencial de Derechos lumanos y Derecho Internacional lu- manitario-VICLPRLSIDLNCIA ,2009,. Diagnóstico de la situación de los municipios habita- dos por las comunidades aírocolombianas priorizadas por la 232 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS lonorable Corte Constitucional en el departamento de Cho- có`. 2009. Ln: http:,,www.derechoshumanos.go·.co,Obser- ·atorio,documents,2010,DiagnosticoAíro,Choco.pdí ,2006,. 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Ley 1312 de 2009. Por medio de la cual se reíorma la Ley 906 de 2004, en lo relacionado con el principio de oportunidad`. Diario Of· ciat No. 4¯.405 de 9 de julio de 2009. Artículo 2€. Ley 9¯5 de 2005. Por la cual se dictan disposiciones para la rein- corporación de miembros de grupos armados organizados al margen de la ley, que contribuyan de manera eíecti·a a la consecución de la paz nacional y se dictan otras disposiciones para acuerdos humanita- rios`. Diario Ofciat No. 45.980, julio 25 de 2005. Ley ¯93 de 2002. Por la cual se deroga la Ley 333 de 1996 y se esta- blecen las reglas que gobiernan la extinción de dominio. Diario Ofciat No 45.046 de 2¯ de diciembre de 2002. 234 1ILRRAS \ 1LRRI1ORIOS LN LAS VLRSIONLS DL LOS PARAMILI1ARLS Ley 685 de 2001. Por la cual se expide el Código de Minas y se dictan otras disposiciones. Diario Ofciat No. 44.545 de 8 de septiem- bre de 2001. Ley 599 de 2000. Por la cual se expide el Código Penal`. Diario Ofciat No. 44.09¯ de 24 de julio del 2000. Ley 1448 de 2011. Por la cual se dictan medidas de atención, asis- tencia y reparación integral a las ·íctimas del connicto armado inter- no y se dictan otras disposiciones`. Ley 1450 de 2011. Por la cual se expide el Plan Nacional de Desa- rrollo 2010-2014`. Ley 1453 de 2010. Por medio de la cual se reíorma el Código Pe- nal, el Código de Procedimiento Penal, el Código de Iníancia y Ado- lescencia, las Reglas sobre Lxtinción de Dominio y se dictan otras disposiciones en materia de seguridad`. Ley 1454 de 2011. Por la cual se dictan normas organicas sobre: ordenamiento territorial y se modiFcan otras disposiciones`. Decreto 200¯ de 2001. Por el cual se reglamentan parcialmente los artículos ¯…,1¯ y 19 de la Ley 38¯ de 199¯, en lo relati·o a la oportuna atención a la población rural desplazada por la ·iolencia, en el marco del retorno ·oluntario a su lugar de origen o de su reasentamiento en otro lugar y se adoptan medidas tendientes a pre·enir esta situación`. Septiembre 24 de 2001. Decreto 4¯60 de 2006. Por el cual se reglamenta parcialmente la Ley 9¯5 de 2005`. Diario OFcial No. 46.13¯, de 30 de diciembre de 2005. Decreto 3391 de 2006. Por el cual se reglamenta parcialmente la Ley 9¯5 de 2005`. Diario Ofciat No. 46.406, de 29 de septiembre de 2006.
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