SAN JUAN GABRIEL PERBOYRE.UNA SEMILLA DE ETERNIDAD Jean-Yves Ducourneau, C.M. CEME, Salamanca, 1997 1.- EN LA ESCUELA DE LOS CAMPOS Una historia milenaria esmalta el Quercy. Sus valles ondulantes presentan por sí solos el trabajo atrevido de una naturaleza rebelde. Ya desde tiempo muy remoto, los hom bres domaron a su manera este terreno pedregoso y salvaje. Los densos robledos dan la útil sombra cuando el sol de julio despliega sus rayos ardientes. Los numerosos palomares de tejados piramidales prestan buen cobijo a los pájaros contra las violentas lluvias. Las protuberantes praderas nutren con su verdegueante hierba los pequeños rebaños de ovejas, verdaderos tesoros para los labradores. A una veintena de kilómetros de Cahors, está ubicado el viejo pueblo de Montgesty. Su iglesia, anclada noblemente en medio de las viejas casas, es, como en otras partes al comienzo del siglo XIX, el pulmón de la vida de los habitantes y el reflejo de una actividad espiritual intensa. Para llegar a la hacienda de los Perboyre, hay que tomar un largo sendero hasta el lugar llamado "El Puech". La alquería aneja al pueblo se deja rodear de unas tierras ingratas, salpicadas de bellas y feraces parcelas y de un suave color rojizo. El chasquido de la rueda de moler cascando las nueces rivaliza con el balido habitual de los corderos en busca del pasto y los gorjeos estridentes de los gorriones que revolotean. La vivienda es de puro estilo quercinés: una alquería como la que tienen todos los vecinos. Rodeada de robles, de nogales, de pequeñas praderas y de un poco de viñedo para el vino cotidiano, es el lugar privilegiado de una familia unida y cristiana. Juan Gabriel nació en El Puech, en 1802. El día de su nacimiento guardará tal vez para la historia un cariz enigmático. Según el registro municipal, nació el 15 de Nivoso del año 10 de la República, es decir, el 5 de enero de 1802. Ahora bien, Juan Gabriel pretendió siempre haber nacido el 6 de enero, día de la Epifanía. ¿Estaría él equivocado sobre su propia fecha de nacimiento` Siempre queda que fue bautizado al día siguiente de nacer, en la iglesita de Montgesty, como era costumbre hacerlo en aquella época. Juan Gabriel es el mayor de ocho hijos. Tiene como hermanas a Juana, nacida en 1805, que se casará; a Marieta, nacida en 1809, que pedirá ser admitida en el Carmelo, pero morirá en el momento de su entrada; a Antonieta, nacida en 1815, que ingresará en las Hijas de la Caridad y partirá para China en 1847 y a María Ana, nacida en 1817, igualmente, Hija de la Caridad y yue asistirá en 1889, a las fiestas de la beatificación de su hermano. Juan Gabriel tiene también tres hermanos: Luis, nacido en 1807, que será sacerdote de la Congregación de la Misión; Juan Santiago, nacido en 1810, primero, 1 hermano y luego, a su vez, sacerdote de la Misión y, finalmente. Antonio, nacido en 1813, que asegurará la sucesión del padre en la hacienda familiar. En el mundo rural, la vida se rige por el día y las estaciones. Los campos y los rebaños son el tesoro inapreciable de los campesinos del Quercy. Cada cual sabe el valor de las cosas y tiene respeto al trabajo cumplido. La familia Perboyre no es la menos favorecida. Vive como en otras partes del trabajo de la hacienda, y este trabajo trae sus frutos. Así, se consume mucha legumbre del huerto, y se hace harina del maíz. Se tiene algunas aves de corral y un cerdo, sin olvidar los numerosos nogales que proporcionan el aceite de nuez. El pan, compuesto de harina de trigo y de centeno, se amasa y cuece cada quince días. Pedro Perboyre, el padre de Juan Gabriel, es también productor de vino, a la vez, para consumo familiar y para venta en el contorno. Se recupera el agua de lluvia para los animales y para las necesidades diarias de la familia, pero para el agua potable hay que andar hasta la fuente, a un kilómetro de distancia. Hijo como los otros, con la responsabilidad del mayor, Juan Gabriel va con sus hermanos y hermanas a la escuela del pueblo de Montgesty, desde Todos los Santos hasta cerca de Pascua. El padre, que sabe leer, permite así a sus hijos que sigan el mismo camino. En efecto, la escuela no es todavía obligatoria. El párroco, entonces verdadera piedra angular de la vida de los pueblos, se esfuerza bien que mal, en contratar a un maestro a quien utiliza también como canto], y sacristán. Al atardecer, los niños vuelven a casa guiados por el mayor. No olvidan tampoco el catecismo diario que se considera como una materia de clase con todos los derechos. Así, los hijos Perboyre se instruyen y se forman todos en una fe católica, sólida. Hay costumbre de rezar con la madre y con toda la familia. Se dice de Juan Gabriel que es particularmente asiduo a la oración y a las lecciones de catecismo, que no duda en recitar u los niños vecinos. Al decir de los habitantes, su piedad impresiona o sorprende. El párroco, corno maestro de obra, tampoco se equivoca en esto. Cuando los niños hacen su primera comunión hacia la edad de catorce años, o incluso dieciséis -tal es la costumbre galicana de entonces-, el párroco permite a Juan Gabriel comulgar, por primera vez, a los doce años. El niño se agrega en su ímpetu espiritual, desde el día siguiente, a la cofradía del santísimo Sacramento, muy extendida entonces por esta comarca rural. La existencia campesina es escuela de la vida. Con los ojos abiertos sobre la naturaleza, que se domina respetuosamente, se crece en madurez, más aprisa que en otras partes, ya que la vida es austera y, a veces, difícil y penosa. Los años de Juan Gabriel son, a pesar de todo, años de una infancia feliz. De hecho, él guardará hacia ella, durante toda su vida, un afecto sin límites y un respeto infinito a sus padres, como era la costumbre de la época. La na t ur al e za esculpe los caracteres de los hombres. Los burila con sus caprichos y sus alegrías, como el agua salvaje de los torrentes traza los valles. Así, a imagen de esta dama sólida en las fallas ocultas, Juan Gabriel posee un carácter forjado como una roca, consolidado por una voluntad férrea. No obstante, se le dice reservado y, a veces, lo siente como un obstáculo que le impide relacionarse con facilidad. Entonces, saca de su hondura, de sus manantiales, agua para regar su naturaleza huraña. Dirá en carta a su joven hermano Santiago que trabaje sobre si mismo: "Desearía que hicieras algunos esfuerzos para ser menos taciturno, más abierto. Si no trabajas pronto en dominar tu carácter sobre este punto, tendrás más tarde dificultades insuperables para hacerte sociable y de un trato agradable. Por mi parte, sé lo que me cuesta” 2 2.- LOS GÉRMENES DE UNA LLAMADA Juan Gabriel tiene un tío sacerdote. Toda la familia está orgullosa de él. El hermano mayor de Pedro, Santiago Perboyre, "el tío Santiago", como se le llama, es sacerdote de la Congregación de la Misión. A su tiempo, fue destinado al seminario de Albi, como profesor, pero los desórdenes revolucionarios agitaban los espíritus y dividían al clero. Con otros muchos, Santiago permaneció fiel a Roma y rechazó la Constitución Civil del Clero. Vino a ser así "sacerdote refractario". A los ojos de la familia, no deja de ser, con todo, un héroe de la fe católica. Después de unos años difíciles y delicados, durante los cuales tuvo que esconderse a menudo, volvió la paz religiosa y fue enviado al seminario menor de Montauban, dirigido por los PP. Paúles, para la formación de los futuros sacerdotes. La influencia que Santiago Perboyre ejerce sobre la familia es inmensa. Él recibirá, en el pequeño pensionado de Montauban, a dieciocho de sus sobrinos y primos de los que varios llegarán al sacerdocio. Juan Gabriel no piensa en el sacerdocio para sí mismo. Por lo demás, nadie en la familia sueña en ello, ya que es muy necesario que el mayor tome el relevo del padre en las labores del campo. Es la costumbre y, en el campo, los habitantes tienen la vida difícil. Evidentemente, el niño había participado en la escuela y en el catecismo con éxito. El párroco del pueblo hasta le había confiado la clase en su ausencia. Todos están contentos de él. Pero ha recibido ya, se cree, la educación suficiente para empezar una vida de adulto responsable. Se da como seguro que el padre de familia retendrá con él a Juan Gabriel. Se determina, al contrario, que el segundo hijo, Luis, pueda aprovecharse de la educación ofrecida en el seminario menor de Montauban. Luis siente despertar el deseo de seguir las huellas del tío Santiago, pero el chaval no tiene todavía diez años. Con todo, irá como pensionista. Para un chavalín, acostumbrado al calor del lar familiar, es una dura perspectiva. Pedro y su mujer María son conscientes de ello. Para habituar al hijo a la separación bastará enviar con él a Juan Gabriel, por unas semanas, el tiempo en que Luis se haga a las cuatro paredes imponentes de su nueva vida montalbanesa. En aquel otoño de 1816, los trabajos de los campos no requieren ayuda especial y, por consiguiente, la ausencia del mayor no será demasiado difícil de soportar. Hay acuerdo en que Juan Gabriel siga algunos cursos de francés, de historia y de matemáticas, durante su estancia en Montauban. El 8 de mayo de 1817, por primera vez, escribe a su padre y tiene así ocasión de mostrarle algunos resultados indicativos de su nuevo saber: "Quisiera escribirle, pero como nunca he escrito una carta ni aun leído, no me atrevo a coger la pluma para ello. Lo hago hoy por primera vez. Es muy justo, mi queridísimo padre, que tenga usted las primicias de mi pequeño saber" El padre sabe que la vuelta de su primogénito es para pronto. El trabajo en la propiedad va a exigir su presencia. Se presenta, pues, en Montauban, en el domicilio del tío Santiago, para llevarse al adolescente a casa. Entretanto, el Consejo de profesores del seminario menor ha deliberado y es claro que, para ellos, Juan Gabriel debe quedarse, ya que manifiesta cualidades eminentes para el estudio y la reflexión. Se proyecta incluso para él el acceso a las órdenes. Orgulloso de su primogénito, pero un tanto triste, Pedro Perboyre deja, en efecto, a su hijo en Montauban y se vuelve solo al Puech. Juan Gabriel es inscrito en el curso de latín y, el 16 de junio de 1817, escribe con cierta seguridad a su padre: “He consultado a Dios para saber el estado que debía abrazar para 3 ir con seguridad al cielo. Después de muchas plegarias, he creído que el Señor quería que entrara en el estado eclesiástico”. Pidiendo la aprobación del padre, que sabe lo necesita, no pierde el hilo de los quehaceres de este mundo, a veces, indispensables para vivir bien los quehaceres del cielo: "Si es de su agrado que continúe, necesito hacerme unos hábitos. Tenga la bondad de enviarme el dinero para comprarlos, creo que la bolsa de ¡ni tío izo esta lo bastante provista para hacerme un anticipo. " Los padres de Juan Gabriel, resignados, pero confiando en la Providencia visiblemente actuante, aceptan ver al muchacho caminando hacia la vocación sacerdotal. Juan Gabriel necesitará hacer esfuerzos particulares y constantes para ponerse al nivel de estudio de sus condiscípulos a los que sólo supera en edad. 3.- LOS CAMPOS DE MISIÓN En el transcurso del otoño de 1817, se predicó una gran misión en Montauban. Era un momento esencial en la evangelización de las ciudades y de los campos. En la misión, se escuchaba la apología de las virtudes cristianas y largas homilías bien hechas sobre un tema particular para cada día. Aquella vez, asistieron los alumnos del seminario menor. Un día, escuchaban un apasionante sermón del abate de Chiezes. Juan Gabriel había sentido en su corazón la llama vibrante de la llamada de Dios: "Seré misionero". Al ir a hacer partícipe de su alegría a su querido tío, se topa con una risa un tanto burlona. Juan Gabriel iba a cumplir dieciséis años y apenas está en clase de 5.°. Para el tío, la urgencia no está en eso, sino en la recuperación escolar. La llamada parece ya sólidamente anclada en el corazón del adolescente, en estado de búsqueda. Quedará aguardando el momento oportuno para que esa llamada resplandezca en el gran día de la misión. Los esfuerzos que hace Juan Gabriel son considerables. A los dieciséis años cumplidos, está ya en clase de 2.° y ha superado en parte su retraso. Confía sus preocupaciones espirituales a san Francisco Javier, patrón de las Misiones. Poco a poco se hace en él la luz: ¡no sólo será misionero sino que, además, irá a China! Insistiendo una vez más ante su tío, Juan Gabriel impetuoso, se hace persuasivo. El tío Santiago hubiera querido ir él mismo a China. Aquel país inmenso representa entonces el ideal misionero, como lo había sido más o menos Madagascar, en tiempos de san Vicente de Paúl, para sus primeros compañeros: dar su vida por la causa de Dios, en tierras lejanas e "infieles" (término que se emplea fácilmente para definir las tierras sin conocimiento del Evangelio). Santiago percibe ahora, en la mirada clara y segura de su sobrino, una señal manifiesta de la acción de Dios. Informa de ello a sus superiores y es así, con la mayor naturalidad del mundo, como el joven es admitido oficialmente, el 15 de diciembre de 1818, en el Seminario Interno (Noviciado) de la Congregación de la Misión (PP. Paúles). Debido a los desórdenes recientes de la Revolución francesa y de sus heridas aún abiertas, los miembros de la Congregación siguen dispersos. La Sociedad Misionera de san Vicente de Paúl ha conocido una seria persecución y se levanta poco a poco de sus ruinas y de los ultrajes sufridos. Así, se autoriza al joven Perboyre para que haga su noviciado allí, en Montauban, bajo la responsabilidad del tío Santiago. Juan Gabriel proseguirá igualmente sus estudios aún no acabados. Se le confía además el cuidado de dar clase a algunos niños. A fuerza de voluntad y con la ayuda de Dios, Juan Gabriel se pone seriamente a la tarea, sin dificultad. El compañero que tiene de noviciado ve ya en él "el ideal de la per fección de un novicio—. Sostenido por la fuerza tranquila y eficaz de un san Vicente, bien anclado como él, en sus almadreñas campesinas, Juan Gabriel fija su vida en la de Cristo y, lejos de 4 los arabescos del romanticismo, se forja una sólida espiritualidad doctrinal, apoyada en maestros tales como san Buenaventura, san Bernardo y santa Teresa. En esta escuela de la vida, aprende a amar a Dios por él mismo y a avanzar por amor para vivir plenamente de su misericordia salvadora: "Si pensáramos en el amor que Dios nos tiene y en la pena que le causa el pecado, creo que esta consideración sería más que suficiente pura inspirarnos un gran horror de éste". En la flor de los diecinueve años, Juan Gabriel seguro de su formación clásica, animada de un espíritu recto y de su gran conocimiento de la sagrada Escritura, es llamado a la emisión de los votos, en el seno de la Congregación de la Misión, el día 28 de diciembre de 1820. Le hace falta ahora profundizar en la formación teológica. Los superiores convocan, pues, a Juan Gabriel para esta nueva etapa. Antes de aquel largo viaje hacia la capital, el tío Santiago permite a su sobrino hacer escala durante dos cortos días, en el seminario mayor de Cahors, para ver a sus padres y darles un abrazo caluroso. Luego, llega la hora de tomar sitio en la diligencia que, en casi cuatro días, lo traslada a París. Las calles adoquinadas de la gran ciudad parecen enlazarse unas a otras. Los gritos de los vendedores de fruta y hortalizas, en los puestos irisados de colores vivos y cambiantes, pujan por encima del ruido escandaloso que producen las ruedas gigantes de la diligencia recorriendo los bulevares resbaladizos. El pequeño provinciano de Montáesty abre unos ojos de pasmo ante aquella capital que, hasta entonces, sólo era un nombre aprendido y recitado en la escuela. El largo viaje termina ante las puertas del Hotel de Lorges, en la calle de Sevres, convertido desde 1817 en Casa-Madre de los PP. Paúles. La casa, aunque imponente, rivaliza en indigencia, según declaraciones del futuro P General, Sr. Étienne, con el establo de Belén. Los miembros de la Congregación, que la habitan en aquella época, son venerables ancianos gastados por los caminos, a veces penosos, de la misión, pero verdaderas piedras de refundación de la "Pequeña Compañía", como gustaba llamarla san Vicente. La enseñanza que se imparte en el seminario está basada mayormente sobre la reflexión tomista. Juan Gabriel aprende mucho del "Doctor Angélico". Ciencia y piedad se completan y deben respaldarse una a otra, ya que la una sin la otra viene a ser caduca y estéril o una simple ilusión. Santo Tomás muestra ser un buen maestro para conocer mejor a Dios, amarlo mejor y servirlo mejor, de suerte que el propio san Vicente lo había tomado como ejemplo. La humildad y la oración son también profesadas y vividas. Ellas son el medio sencillo y eficaz para procurar un mejor conocimiento de Dios y de su voluntad y, en consecuencia, avanzar en santidad. El 3 de abril de 1824, Juan Gabriel recibe el subdiaconado. Esta nueva etapa le abre las puertas al rezo del breviario que él considera ya, junto a la misa, como "dos medios poderosos de salvar las almas". Se interroga también sobre su propia santificación mediante una pregunta que suena a realismo: "¿Cómo es que rezando todos los días el breviario no somos más santos?" Juan Gabriel acaba ahora su ciclo de teología. Ha crecido espiritualmente y ha adquirido una madurez real. No obstante, a sus ventidós años, es demasiado joven para ser llamado al presbiterado. Hay que encontrarle un apeadero para los dos años de espera. Esto se hace en el colegio de Montdidier, en la Somme. Para un discípulo de san Vicente de Paúl el departamento de la Somme representa muchísimo. Es como un manantial misionero inagotable. Fue, en efecto, en Folleville, 5 de manos del arzobispo de París. le indicará además: "Encontrarás en el Tratado de la Existencia de Dios de Fenelón y en el de El Conocimiento de Dios y de sí mismo de Bossuet más metafísica. 6 . ¿Cómo -se preguntan. No obstante. Una gran alegría inunda el corazón del joven subdiácono. que es bajo de estatura. y es muy comprensible. de carácter reservado. el número de alumnos era de unos doscientos. El diácono discípulo de san Vicente lo es por antonomasia. los días comienzan a las cuatro v no acaban nunca hasta las nueve o diez de la noche. unas colectas y moviliza a los alumnos para que den algo de su persona y de su tiempo a aquellos necesitados. Juan Gabriel recibe. donde hay tantas escuelas como maestros!" Y tratando de volver a centrar el pensamiento de su hermano menor y de promover en él lo bien fundado de la filosofía tomista. Bañado. v. la ordenación diaconal en la iglesia de San Sulpicio. y pone a Dios. De ahí que escriba a su joven hermano Luis: "¡No es pequeña tarea ser profesor de filosofía en un tiempo donde cada uno tiene su sistema. pues. Se le oye decir. en el centro mismo de la historia. Aquel 28 de dicho mes. pero que él juzga demasiado orgullosa para ser siempre verdadera. El P.° con sólo 8 alumnos. ya influyentes en su época. Era el primer colegio paúl abierto después de la Revolución.pueblecito de esta llanura picarda. A la llegada de Juan Gabriel. al ser llamado a París para recibir allí el diaconado. a poder encargarse de una clase numerosa? Desde los primeros meses.va él. en 1617. Dewailly era el director y el P. La impresión que ha causado Juan Gabriel a su llegada no ha sido efectivamente de las mejores. de Quelen. Se confía al joven una clase de 6. Juan Gabriel afronta gustoso la filosofía cartesiana que hace la alegría del espíritu francés. Vivier.° sabe hacerse respetar y apreciar. la más reflexiva. A la vuelta del curso escolar de 1825. Juan Gabriel sabe que el colegio asiste. sin más hipótesis. Organiza entonces. cosa que tiene unas penosas consecuencias sobre su correspondencia personal que acusa desgraciadamente retraso. El diácono es el servidor de los pobres. el novel profesor de la clase de 6. sana metafísica. para completar estas ayudas. nuestras ocupaciones nos fueran bastante a menudo a prolongarlas hasta medianoche". no está ausente del mundo de su tiempo ni de su investigación intelectual. Desde el retiro de entrada. que en todas las filosofías del mundo". no obstante. al respecto: "Vengo de hacer lo que hacía nuestro santo Fundador" (Vicente de Paúl). De ahí que escriba a su padre: "Para nosotros. sobre todo. Paúles. Mons. Pedro Vivier el superior. sus opiniones. Montdidier poseía un colegio regido desde 1818 por los PP. cuya inauguración tuvo lugar el 1 de febrero de 1825. el P. cercana a la casa de los PP. es escogido por sus mismos alumnos como director de la pequeña congregación que acaban de crear al estilo de la de los mayores: la Congregación de los Santos Ángeles. para su gusto. superior del colegio de Montdidier. de santo Tomás de Aquino que permite mejores circunvoluciones del pensamiento. rayano en lo taciturno. El joven y fogoso profesor pasa sus jornadas trabajando por despertar las conciencias a la divina Providencia. reconocido de nuevo por la Universidad. en el mes de mayo de 1825. mediante buenas obras. donde el célebre gascón predicó su primer sermón de la Misión. por las diversas corrientes de pensamiento. a presos indigentes y a algunas personas vecinas en necesidad. Paúles. Prefiere. confía al nuevo diácono el curso de filosofía. si hay que dar crédito a ciertos pequeños rumores que han llegado a mis oídos.. en un seminario mayor. en París. Juan Gabriel sabe. repetirá casi literalmente las palabras de Vicente: "Si hubiera comprendido. pero al presente sé que no seré enviado allá”. de la calle del Bac. A unos pasos de la catedral. quisieran retenerlo. Paúles fueron expulsados de él en 1791 y vuelven en 1820.esperanza de ir a Montauban. En las altas instancias. no hubiese podido jamás consentir que se me impusieran las manos”. En París. por un ejemplo tomado de lo vivo.000 habitantes.Flour. sólo el joven Luis asiste a la imposición de manos. Se conmemora el aniversario de la ordenación sacerdotal de san Vicente de Paúl. Se podrá leer en sus archivos. que partirá para China en 1829. El 23 de septiembre de 1826 es un gran día. Finalmente. se recordará durante largo tiempo. y de Pedro Juan Martín. Al día siguiente. Luis Guillermo Dubourg. en cuyo interior se guardaban todavía los restos del santo Fundador. se decide que Juan Gabriel. Los PP. La familia Perboyre habita demasiado lejos para poder desplazarse. esta misma ordenación presbiteral en la capilla de la CasaMadre de las Hijas de la Caridad. a quien acaban de decir que vaya preparándose serenamente para recibir. fiesta de nuestra señora de la Merced. tres jóvenes van a recibir. que Juan Gabriel "había dado u las jóvenes generaciones.. en 1835. recibe de manos del Superior General. sin embargo. ¡Hace . a su vez. el nuevo sacerdote celebra en acción de gracias su primera misa. pues. un alto concepto de la belleza moral de un alma y de la grandeza de un carácter". en la Alta Auvernia.. 4.En la historia del colegio de Montdidier.. ¡y no está ya lejos el día en que el Señor debe imponer sobre mi cabeza el yugo del sacerdocio! ¡Será el día más grande de mi vida!. grande para elegir unos ministros tan indignos! ¡Usted sabe que poco había merecido yo este insigne favor". que. Es igualmente previsible un próximo destino. en breve. Recibe a Juan Gabriel poco después de su ordenación porque hay que preparar el comienzo de curso en octubre. e incluso. tiene la oportunidad de volver al colegio de Montdidier para celebrar también allí la Eucaristía. después de su ordenación. sea destinado a la enseñanza. de manos de Mons. mi queridísimo padre. un sacerdote de 35 años de edad. Fiel a su vocación de paúl. sus superiores han sido tajantes: "Parece que voy a ser cambiado. antes de recibir el sacerdocio. sucederá a Juan Gabriel como subdirector del Seminario Interno en París.falta que la misericordia de Dios sea más. mi tío ha hecho las más vivas instancias para tenerme. pero recién nominado para la sede de Montauban. este movimiento filantrópico. sería destinado a un sitio próximo al Quercy". especialmente por parte de su tío Santiago que siente ya la fatiga de los años y al que bien quisiera él dar una respuesta positiva: "Había tenido -escribe a su padre. En Montdidier. su superior es el P. en el altar donde reposa el cuerpo de san Vicente. En esta ocasión. lo que es un sacerdote a los ojos de la fe. domingo 24 de septiembre. la ordenación presbiteral. más tarde. que se le requiere de varios lugares. escribe a su padre: "Se ha determinado. desde el mes de agosto. obispo de Nueva Orleans. Ahora. Próximo al sacerdocio. Juan Gabriel es acompañado de Juan Bautista Torrette. 140. se yergue el seminario mayor confiado a la Congregación de la Misión desde 1674. Unos días más tarde. el destino para el seminario mayor de Saint. Grappin. Confinado en una 7 . El fin del año escolar va a traer un descanso bien merecido al joven diácono.PROFESOR Y SEMBRADOR Saint-Flour es un pueblecito de unos 5. cualesquiera que sean”. levantado a la gloria». creído en el inundo.. se ve distinguido con la responsabilidad de la enseñanza de la teología dogmática. Al cabo de doce días pasados en Montauban y tres en Cahors. por aquí. grande es el misterio de la piedad: Él ha sido manifestado en la carne. sin duda alguna. especialmente en lo que concierne a los textos de san Pablo. al fin. a la residencia del tío Santiago. Cuando el Papa Gregorio XVI haga saber más tarde. 8 . se hace más apremiante para Juan Gabriel el deseo de ver a su familia: "He escrito ya a París pidiendo permiso para ir a veros. visto de los ángeles. -cuidan tanto de mi”. Este tiempo bendito de las vacaciones se acaba.16). Trippier. pero tampoco le perjudica en nada. en 1832. Es. Con esta ocasión.habitación exigua. me siento muy cansado". de atacar jamás a la Santa Sede. durante su estancia. Se muestra contrariado por las ideas galicanas que considera nefastas para la Iglesia. (l Tm 3. justificado en el Espíritu. no lo interpela. las Damas Ursulinas a las que voy a decir la misa todos los día. hele de nuevo en El Puech con sus hermanos Santiago y Antonio. que las ideas de Lamennais están condenadas. El año escolar le resulta pesado: "Aunque no esté enfermo. terminado el año escolar. especialmente. fallecida el año anterior. cuando éste defiende las libertades de los cristianos. pero: "No hay grandes visos de que nuestro vino sea colorado. a la sazón en París. a su calidad de enseñante. Se le puede oír decir a sus alumnos: "Guardémonos mucho. posible durante el verano de 1827. Espero que no me sea negado”. reconozcámosle toda la autoridad que ella se atribuye en todas las cuestiones. deja huella en sus alumnos por su conocimiento bíblico. Paúles acaba de llamar a París al P. por el solo desarrollo del texto siguiente de la primera Carta a Timoteo: «Y. Io encuentran bueno. Juan Gabriel se plegará a ello. La paradoja. Vuelve a ver a todos sus conocidos. trata de vender en el lugar el vino de la propiedad. Ha obtenido permiso para volver al Puech.. Juan Gabriel y su compañero de ruta llegan a Montauban. No obstante. La enseñanza que imparte quiere ser de una fidelidad ejemplar a la autoridad eclesiástica. Con fecha de diciembre de 1827 escribe al Rector de la Academia de Clermont: "El Superior General do los PP. A pesar de su juventud. la de la enseñanza. mi tío. A instancias del Sr. No creamos nunca que ella se excede en sus poderes al tomar decisiones. proclamado a los gentiles. Tras una estancia en Carcasona y en Montolieu como huésped de los cohermanos. sin decir palabra: "Roguemos a Dios que nos preserve de replicar jamás a las palabras del Soberano Pontífice. asiste a una entrega de premios de fin de curso en el seminario menor y. simpatiza con las ideas de Lamennais. que parece surgir de esta aprobación. Conservando las preocupaciones de la hacienda familiar y de sus asuntos corrientes. Uno de sus seminaristas se complacerá en recordarlo: "Me acuerdo siempre -son sus palabras. en la Casa-Madre-. Esta vida trepidante del joven profesor exige descanso. se ve rodeado de atenciones: "No podrías imaginarte qué rápidamente me he repuesto -escribe a su hermano Luis. que llegan acompañándolo desde Montauban. y va a postrarse ante la tumba de su hermana Marieta. y Juan Gabriel retorna a Saint-Flour. Señores. pero el transporte ofrece demasiadas dificultades”. Hace ya casi siete años que Juan Gabriel no pone los pies en la hacienda familiar. El programa de este primer año tiene como tema los Tratados de Gracia y de la Encarnación. Situado en Saint-Flour. según declaraciones.de la magnífica introducción que nos hizo al Tratado de la Encarnación. Él es a quien Jesús dijo: Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia y las puertas del infierno no prevalecerán contra ella” -. de filosofía. la ley estipulaba que la Iglesia sólo tenía autorización para abrir un único seminario menor por departamento. que tiene la suerte de formarse en literatura.. perderías tu tiempo y todos tus esfuerzos". "Estoy consumido de trabajo. Con pluma cansada escribe a su hermano Luis que se queja de falta de noticias: "Obligado a dar cuatro o cinco clases o repeticiones por día. no le pasa la mínima falta. pero se mantiene firme para salvaguardar su autoridad. Juan Gabriel Perboyre es nombrado superior del Pensionado eclesiástico de SaintFlour. le asegura. No sé dónde acabará un malestar general que siento hace tiempo y que es progresivo". Juan Gabriel se alegra de la elección misionera de su hermano menor: "Sólo podría aprobar y admirar tu bella resolución de ir a evangelizar a los chinos. Apoyado por unos. el mismo Superior me ha puesto al frente del pensionado que el P. de llenarte bien de su espíritu”. mofado por otros. la constante oposición del Colegio Real que espera ver el final del Pensionado. y por todas partes a la vez. El poder de un misionero está en la. Al comienzo del año escolar. cuando pueden serle útiles". Y contemplando su propio camino con una mirada melancólica: "Temo mucho.. Indirectamente su joven hermano Luis pone de nuevo bálsamo en su corazón.. humilde pedagogo de provincia. todos los días. a ser siempre de todos y de todo. Trippier dirigía. y ya existía uno en el cantón de Mauriac.obispo de Saint-Flour. Se le dan como colaboradores dos sacerdotes diocesanos. En efecto. ¿cómo podría Yo irme de tiempo en tiempo a recrearme contigo en París?" Ansioso de una buena educación para todos deplora la obligación que tienen sus jóvenes de seguir los cursos en el colegio de la ciudad —donde ven. A los veinticinco años. el P.. piensa dimitir. en el colegio de Montdidier y en el seminario mayor de Saint-Flour". quien le escribe con algunas faltas de ortografía y para con el que se muestra siempre indulgente. a pesar de que le faltaba el reconocimiento. en calidad de director. las sobrecargas de trabajo. Obligado. Los superiores de París habían confiado al joven Luis el cuidado de ocuparse de algunos jóvenes paúles chinos. fuerza de Dios”. en octubre de 1827.. Esta cifra irá en aumento los años siguientes para acercarse pronto a los ciento cuarenta. se cuenta con treinta y seis pensionistas que prosiguen sus estudios en el Colegio Real de Saint-Flour y se alojan en el Pensionado. Le escribe: "Al volver a leer tu carta. haber ahogado por mi infidelidad los gérmenes de una 9 . de otro modo. Agotado. las bajezas más abominables". mi querido hermano. a fin de revestirte únicamente de Jesucristo. que el nuevo director se complacerá en llamar seminario menor. el temor de los padres ante la juventud del nuevo director. pero es tan importante para él escribir bien que no debe despreciar los avisos de un tal aristarco. de ecónomo etc. etc. Juan Gabriel no sabe ya qué hacer. lo cual es insuficiente de cara a la amplitud de la tarea y a las dificultades que no dejan de surgir: la precariedad de los recursos. sin dejar de recordar lo esencial a sus ojos: " En todas las cosas. Con su trato siente la llamada a seguirlos en su lejano país. ¡ay!. habiendo sido profesor de las clases inferiores. y no duda en reprenderlo de una manera que ofendería a muchos. trabaja únicamente para agradar a Dios. sobre todo. Me encuentro extremadamente fatigado de espíritu y de cuerpo». En cuanto a su hermano Luis. de matemáticas y de teología en el seminario menor de Montauban. Se interesa mucho por la de su joven hermano Antonio.. que queda en Montgesty. de penetrarte bien. y prosigue: “Trata. Siento que no es muy halagador para un escritor de la capital recibir lecciones de mí. Tengo cinco años de ejercicio en la enseñanza. de destruir enteramente en ti todos los restos del hombre viejo. he notado algunas faltas de ortografía que voy a señalarte. sin duda. Desea de una manera cada vez más apasionada. que comienza a expresar abiertamente."' Aquí de nuevo. el Z de mayo de 1831. es una llamada a renovar la confianza en Dios. Y. París conoce la Revolución de julio. La partida para China se hace esperar. que Jesucristo rescató con su sangre". han tomado sitio a bordo del barco los jóvenes cohermanos chinos y cinco sacerdotes de la Sociedad de las Misiones Extranjeras de París. Obtenme de su misericordiosa bondad el perdón de mis miserias y el espíritu de nuestro santo estado. prosigue de una plumada animosa: "En Dios solo. Juan Gabriel se lamenta de su separación próxima. Recibe unas letras de su hermano. Juan Gabriel está en "trances de muerte". nuestro único recurso. Se teme que los restos de san Vicente sean arrojados al Sena. 10 . por largo tiempo. Aunque no esté muy lejos de tomar tu misma ruta. siempre abierto a Dios. emprender el mismo camino misionero: "Anhelo ardientemente -le escribe en agosto de 1830-. que va a sacrificar su vida por la salvación de las almas. después de pronunciar estas últimas palabras: "Dejo un hermano sacerdote que vendrá un día a reemplazarme". no estoy bastante dispuesto ni bastante decidido por mi mismo para embarcar este año”. y que me dé la fuerza para seguirla". el cual es consciente de las consecuencias de aquella partida sin retorno: "Puedo enviar un nuevo adiós a ese hermano que va a alejarse de nosotros. y en la flor de la juventud ha sido juzgado maduro para el cielo. que puede fallar en tales momentos: "¡Qué dolorosa noticia para ustedes. hasta el momento de saber que su joven hermano.. a fin de que llegue a ser un buen cristiano. Un viento glacial llegó del sur y la fiebre se apoderó de Luis. El miedo se apodera de mucha gente de Iglesia. así como la de los "ángeles tutelares de las regiones infieles". “pero la fe trae consuelo”. Murió en el mar. como si quisiera reconfortarlo. para toda la familia! Una corta vida ha tenido para él todo el premio de una larga carrera. Invoca sobre él la bendición de Jesús y de "la Reina de los ángeles ". La noticia no llegará a Francia hasta comienzos de 1832. valiéndose del tiempo como de una herramienta. Le falta ahora germinar para que arraigue y produzca un brote evangélico en el corazón de Juan Gabriel. que me haga conocer su voluntad. y me de la fuerza para corresponder a ella. Pídele que me haga conocer su voluntad. se encargará de ello. Luis sigue en París. La Providencia. ¡que Él lo sea eternamente!" Con Luis. Luis no había de ver las costas de la misteriosa y fascinante China. Luis se embarca por fin. el barco tuvo que hacer escala en Saint-Denis de la isla Bourbon (hoy La Reunión) bajo un calor inusitado para los occidentales. Durante el verano de 1830. para mí. tener ocasión de verte antes de tu partida para China. En marzo de 1831. La Providencia de Dios es muy dulce.vocación semejante u la tuya. Su carta. Juan Gabriel alaba el coraje de su hermano. el 3 de diciembre de 1830. e infinitamente más misericordiosa de lo que nosotros podernos concebir. dispuesto a partir para China. nuestra esperanza. Ajustémonos a Dios solo en su servicio". La llamada ha sido escuchada. a fin de que le obtengan "inmensos éxitos en el establecimiento del reino de Dios. Él es nuestro todo. en El Havre. Lleva consigo una última carta de su hermano. Ruega u Dios que me perdone los pecados.. Juan Gabriel escribe entonces a su padre tras el anuncio del fallecimiento. Se cambió de buque para poner rumbo hacia la isla de Java. un buen sacerdote y un buen misionero. mezclando tristeza y esperanza. mira hacia atrás y parece decepcionado de sí mismo: "Temo no haber sido fiel a la vocación que el Señor me ha dado. muy admirable para con sus servidores. se encuentra seguro: "Que el Señor continúe favoreciendo con su divina protección a ti y a todos los hijos de san Vicente. candidato a la admisión. Entre los candidatos al ingreso en la Congregación de la Misión. pero también. Durante el verano de 1832. lo encuentra en el despacho del Ecónomo General de los PP. viene a ser. a Juan Gabriel se le confía el cargo de subdirector del Seminario Interno de la Congregación. el mismo día. Es la última vez que ve a sus padres y a sus amigos de Montgesty. Juan Gabriel se alegra de su nombramiento como subdirector del Seminario Interno. que aprecia mucho al fogoso director de su Pensionado. tan difícilmente aceptada. Paúles. y ha marcado para siempre la historia y la tierra de esta diócesis de la Alta Auvernia. aprenderé a morir?" La muerte de Luis. Un sacerdote. Bajo su aspecto frágil. Santiago le objeta que su salud da rápidamente signos de fatiga. sin hablar del clima difícil de soportar y. bien rodado ya por la experiencia de Saint-Flour. está tomada. 5. reclama otra pedagogía. y aún no he aprendido a vivir ¿Cuándo. por consiguiente.UNA ESPIRITUALIDAD DEL DON FÉRTIL "Mi nuevo empleo es más favorable que el antiguo a mi salud que ahora va bastante bien". como el director titular es un sacerdote de edad y achacoso. su justo sitio. lo ha conocido pronto y llega a apreciarlo viendo en él un santo. pues. Se trata ahora de un alumnado muy diferente del que habitaba el Pensionado eclesiástico anterior y que. sacerdotes de todas las edades. Son momentos más tristes que loa precedentes. le manifiesta su deseo ahora ya maduro.Tal vez. para retenerlo en su diócesis. al fin. ¡Cuál no es su sorpresa al saber que está en presencia de su futuro subdirector! Este sacerdote. pero teniendo en cuenta también sus cualidades intelectuales y pedagógicas. coge la pluma para escribir a su tío Santiago: "No dudo de que Luis goce ya de la gloria celeste. en París. El obispo de SaintFlour. como una luz que proporciona una certeza a Juan Gabriel: irá a China. Por los pasillos de san Lázaro. pues. el peso del cargo va a recaer sobre las espaldas de su adjunto. P. se esconde en realidad una voluntad resisten te a toda prueba y un carácter de acero. ¡Que no se me encuentre digno de ir a llenar el puesto que él deja vacante! ¡Ay. no dice palabra y tiene un aire modesto y retraído. se dice de Juan Gabriel que respeta a todos.. no menos considerable. que han pasado como un sueño. pero que es difícil de doblegar. con algunas clases de sagrada Escritura. Al volver a Saint-Flour. formar las nuevas generaciones de misioneros. sin embargo. del riesgo. emplea todos los medios de persuasión posibles. En efecto. en Montauban. se encuentran algunos jóvenes llegados de los seminarios mayores diocesanos. cuando juzga que debe ser firme e 11 . aunque en vano. tiene que desplegar todo su carisma y su energía para afirmarse. deseosos de agregarse a la Compañía. Dado su estado de salud. finalmente. Va a ver a su tío.. y lo toma por un hermano coadjutor. En efecto. A los treinta años. Su primera misión es. tengo ya más de treinta años. no debernos tener miedo a morir por Él”. Allí está -se estima-. vestido muy sencillamente. trece años mayor que él. Juan Gabriel. puesto que Dios ha querido morir por nosotros. se encuentra con una carta de sus superiores de París. cualesquiera que sean los peligros y persecuciones.. todavía poco numerosos por entonces. pasa una temporada en El Puech. pero su decisión. de la muerte por persecución: "Es todo lo que yo deseo -habría replicado entonces-. Juan Bautista Étienne. Es un puesto de primer plano el que le han confiado. Juan Gabriel ha permanecido casi seis años en Saint-Flour. tiene por único fin fomentar las relaciones y transformar una cierta oposición en estima recíproca. tan particular y esencial a la Compañía. Juan Gabriel se esfuerza por centrar su enseñanza en Cristo. no conozco otro más excelente Y barato que nuestro propio corazón y el de Jesús”.. más trabajará en purificarse". más deseara salir de este mundo y reunirse con su Dios. Con este fin. Dejarse invadir por el espíritu de Cristo sin otra preocupación que unirse a El sencillamente: "Muchas personas se ven en dificultad para encontrar libros de meditación que les convengan. verdadero teólogo de la Encarnación y en la recta línea de sus predecesores. sabiendo dominar rápidamente su vivacidad. Todo es hecho con convicción y profundidad. que es el corazón el que debe hacerla más bien que el espíritu". y cuyas Reglas estipulan que debe: "revestirse del espíritu de Jesucristo. único camino de vida: "Cristo es el gran Maestro de la ciencia. porque Jesucristo es mi vida. No tema ni la enfermedad ni la muerte. sino el Modelo... no hasta con conocerlo. Tengo confianza de que Jesucristo será glorificado en mi cuerpo.. Preocupado siempre por la educación de sus hermanos. Aprende finalmente a jugar con la antipatía que experimentan algunos hacia él. aunque fustigadora.. Por mi parte. Por su función. dejando brotar el manantial divino y la legitimidad del carisma de la Compañía fundada por san Vicente.inquebrantable en sus decisiones.. Siguiendo al fundador. 19). por controlar su carácter. el lugar donde se trabaja "en la propia perfección". y hace todo lo posible. porque Él no sólo es la Luz. en reñida lucha. siente con dolor profundo la contrariedad y el reproche. Juan Gabriel se da cuenta de la responsabilidad que le incumbe. sea por la vida. y cuanto mas experimente este deseo.. San Vicente había dicho que un hombre de oración es capaz de todo. Un día. Juan Gabriel impulsa el necesario espíritu de oración por el ejercicio de la meditación. El joven subdirector inculca este espíritu a los novicios: "No olvidemos. Introvertido.. 12 . el realismo de la búsqueda del cielo: "No olvides que el negocio de la salvación es el negocio del que debemos ocupamos ante todo.. -prosigue-. "a ejemplo de nuestro Señor". sea por la muerte cono siempre. cuando nos ponemos en oración. No podemos llegar a la salvación sino por la conformidad con Jesucristo". Las numerosas pláticas y conferencias de formación que él da van en este sentido. ¡no comprendo cómo se me soporta! ¡Si se me conociera. Pura mí. lo socorre sin fallar. hay que imitarlo. No obstante. si perdiese su alma?" En este mismo sentido escribirá a otros miembros de su familia. Puede ser incisivo en sus réplicas y en otras respuestas.. Antonio. Una sola cosa hay importante: conocer y amar a Jesucristo. tan vivo es de temperamento. no duda una vez más en recordar al más pequeño. Solo Él da la verdadera luz. Y concluye así su carta: "Cuanto más pura sea su alma. Juan Gabriel debe ser una fuente de ejemplaridad para sus novicios. sin duda alguna. como si tal apoyo le concerniera también hasta el más alto grado: "¡Ánimo!. a fin de "predicar el Evangelio a los pobres y ayudar a los eclesiásticos". da esta respuesta a un seminarista que le confiesa sin rodeos tener algunas dificultades para apreciarlo: "Tiene usted mucha razón -le dice-. el Ideal. Cuando uno de los suyos experimenta dificultad en avanzar por la vía vicenciana o tiene algunos problemas de salud.para ser.. se tendrá de mí una opinión más triste todavía!" Esta clase de respuesta. Según esto. según lo que aguardo y la esperanza de que no seré confundido. diga solamente: «Yo sé que esto se trocará en mi salvación. y la muerte me es una ganancia»" (Flp 1. por encima de todo y siempre". Y tomando de nuevo el Evangelio: "¿De qué le serviría al hombre ganar el universo. Aquella tierra se presenta como el prototipo de las tierras que hay que evangelizar. dibuja.. pero los superiores han decidido otra cosa. lo que acontece al andar-. sobre todo. que la vocación vicenciana de entonces sólo deja presagiar tres caminos posibles: la formación en los seminarios. cansado 13 . y ganar el cielo. año en que Juan Gabriel era él mismo novicio. un aumento sensible de candidatos al sacerdocio dentro de la Compañía y. Él sabe muy bien. Se le oía decir: "¡Qué bello final el del P. Juan Enrique Baldus quien se embarca a su vez. Clet! ¡Qué dicha para nosotros. Juan Bautista Towette. y lo que es más todavía. con un deseo creciente de estos novicios por las misiones extranjeras. La China hace palpitar el corazón del misionero. fallecido en 1820. Le trasmite estas palabras de pesar: “Presumía de poder ir a reunirme con usted más tarde. y un antiguo alumno del colegio de Montdidier. en los seminaristas. Ellas se extienden hasta China ya que. San Vicente atrae muchas bendiciones sobre su familia. mostrando los recuerdos que se acababan de recibir. Los novicios habían percibido el aire de este deseo cuando su subdirector les hablaba de un paúl mártir de China. dos cohermanos: un paisano suyo de Fiseac. nada tiene. participando en el anuncio de su Palabra. Francisco Regis Clet. Participar en un tal misterio fecundante es el deseo secreto de Juan Gabriel.. mucho que mi salud se fortalezca y que pueda ir a China. Se ha podido notar. Juan Gabriel trata de pedir para sí mismo el envío a China. Juan Gabriel aprovecha la ocasión para escribir a su compañero de ordenación. Clet! Pidan a Dios que termine Yo como él". mi indignidad parecen prohibirme para siempre ese bello destino. presentado como una verdadera figura emblemática: el P. es decir. que hay que evangelizar. futuro obispo igualmente. de tiempo en tiempo. es el P. Quien nada intenta. El misionero que parte con este espíritu revela al hombre la sabiduría misteriosa de Dios que se visibiliza. sin que se la pueda detener. Sus costas lejanas atraen a los hombres de Dios. En septiembre de 1833. a fin de predicar allí a Jesucristo y morir por El". En marzo del año siguiente. en las mentes en formación. pues. que. he aquí la vestimenta del P. trasladará los restos de Juan Gabriel a Ningpo. Está hecho para la formación de los jóvenes y su estado de salud no le permite esperar una ida a tierra de misión. Comprometerse para la misión de Cristo es dar su vida como Él. se embarcan para las misiones de China. por haberlo experimentado en su propia carne. una teología del martirio como don perfecto. No soporta ya ver a sus cohermanos partir sin él. futuro obispo. durante este breve período.. si tuviésemos un día la misma suerte!" Se le podía oír precisar más: "Pidan.Juan Gabriel ha sido subdirector del Seminario Interno de la Congregación de la Misión desde el otoño de 1832 hasta la primavera de 1835.. si no parte para China. Secundaré lo mejor que pueda las vocaciones que se manifiesten para China. Francisco Javier Danicourt. Se trata de vivir a fondo el don de sí hecho a Dios. con destino en Macao (paso obligado de los misioneros). las misiones populares en Francia y la llamada de la misión "ad Gentes". exclamaba: "¡He aquí la vestimenta de un mártir. que no cesa de invocar a los santos para emprender su mismo camino. Luego. Hay que ir más allá de los mares para llevar a Cristo a los "infieles". José Mouly. ve usted llegar dignos misioneros". pero la poca solidez de mi salud y. la idea de un desconocido fascinante que hay que descubrir. Es evidente que este tercer camino es el más atractivo para la mayoría de los jóvenes candidatos. en 1860. tanto la aventura -en el sentido etimológico del término. El hijo mayor de los Perboyre tiene la impresión de fracasar en su vida. que pasará más de treinta años en Extremo Oriente. Y. además. terminaba por decir.. Desarrolla sin complejo. a quien Juan Gabriel atribuyó siempre esta gracia. Semejante misión comporta riesgos demasiado importantes: el viaje es largo y peligroso. bien pudiera ser que la salud del P. diciéndole sencillamente: "Te ruego que aceptes esta Medalla. en este día de gracia. Domingo Salhorgne. y. siguiendo el parecer del médico. fiesta de la Presentación de Jesús en el Templo y de la Purificación de María. negativo. desaparecido antes de tocar las costas chinas. cansado de aquel tesón fuera de lo normal. no puede menos de constatar espiritualmente los hechos: "¿Ven ustedes lo que es la oración. sin duda. el médico de casa cambia de parecer. Ciertos seminaristas quieren tomar inmediatamente el mismo camino.de esperar a las puertas del muelle: "Van va catorce años que pido ir a China. La Casa-Madre se anima de pronto. Con el corazón ardiente de una alegría nueva." Habíamos resuelto no dejarlo partir. y el medio que él ha escogido es la China. sino que la aceptes como un recuerdo de una persona que te tiene muchisimo cariño". con sorpresa de todos. ¿Qué quiere de él. Y he ahí que un día. el futuro misionero de China anuncia sin tardar la noticia a su tío: "Dios acaba de . "Hay que trabajar por encima de todo en hacerse santos". todo exulta y canta. es muy poca cosa.. Están asombrados de semejante decisión. el clima. por eso.. pero sabes que soy pobre y que he hecho voto de pobreza. De madrugada. Ha meditado infinidad de veces sobre el sentido de una vida entregada a Dios en tierras lejanas. Está en su alma la memoria viva de su hermano Luis. por tal causa.. Se habla de ello en los largos y fríos pasillos de la casa. Estamos a 2 de febrero de 1835.. afirma el médico. no había pegado ojo en toda la noche. de todos modos.LA SALIDA HACIA LOS CAMPOS DEL MUNDO La oración es la única fuerza que le queda a Juan Gabriel. Acordémonos de la muerte de su hermano Luis. su salud. a menudo ineluctables. Se dice que fue presa de remordimientos y que. Juan Gabriel es un buen subdirector de novicios. Cuando El se dignó darme la vocación para el estado 14 . el P. sin embargo. te pido que no consideres el valor de la cosa en sí misma. el Señor'? Hay en su corazón ese deseo profundo de seguir las huellas misioneras de sus cohermanos que ya partieron. cede al fin: Juan Gabriel puede ahora dirigirse al Superior General. más que un fin: ganar el cielo. Todo su ser se interroga en aquella noche oscura de fe. Su director de conciencia. Tenía esta vocación antes de ser misionero. Para él.favorecerme con una gracia muy preciosa y de la que yo era muy indigno. que surge como efecto de la última negativa de verlo partir tan lejos. difícil de soportar. A un primo que está de paso. Le Go. da sin más su consentimiento. no queriendo poner obstáculo a la Providencia. El asunto no queda en secreto. Étienne. el P. excepto el del Ecónomo General. es frágil e incierta. ni a la vocación misionera seguramente cierta de su subdirector de novicios y. Perboyre se robusteciera con el largo viaje y el cambio de aire. Después de todo. Hay necesidad de él. Su combate no tiene. Otros reclaman ya un recuerdo de su responsable. sin embargo. Juan Gabriel le da una Medalla Milagrosa de la calle del Bac. 6. Pero he aquí que sus fervientes súplicas ante Dios nos han cambiado a todos y sin saber cómo". P. y sobre sus consecuencias. La decepción es grande cuando la negativa de ir a la misión de China se hace oír de boca de su director de conciencia: seis meses de insistencia encarnizada para una negativa claramente expresada. Juan Gabriel es libre para salir hacia China. Entré en san Lázaro sólamente para esto". El Superior General. El parecer del Consejo es. pues. a la vez. el mismo barco que. No se domeña el océano como se domeña la naturaleza. Juan Gabriel está dispuesto para los adioses a sus cohermanos y a sus novicios. y a su hermana Antonieta. sacerdote. pero todos cayeron también de rodillas y le pidieron su bendición". cuando se le presente la ocasión. debo mucho a la santisima Virgen". Peschaud. Los preparativos de la partida se aceleran. Hija de la Caridad. Y prosiguiendo con seguridad. a Batavia (hoy Yakarta). con todo. más acostumbrados a pisar el suelo pedregoso que las olas turgentes. pero. como escribe a su tío. 4).eclesiástico. en París. el P. diácono. los misioneros tienen todo su tiempo para celebrar la misa el domingo. apenas pudo decirles unas palabras. Juan Santiago. eran. fue la esperanza de poder predicar a los infieles la Buena Noticia de la salvación. el principal motivo que me determinó a responder a su voz. y José Perry. Juan Gabriel aguarda a subir al barco en El Havre. la oportunidad de volver a ver con gran alegría a su joven hermano. José Gabet. armado con diez cañones y cincuenta fusiles para responder a los eventuales ataques de los corsarios. a la sazón hermano coadjutor en la Congregación. Juan Gabriel pone esta travesía bajo la protección de Luis: "Mi alma se elevó al momento a él con confianza. espantosas y admirables. lo que me hace creer que. más que los furores del mar es magnífico Yavhé en las alturas»" (Sal 93/92. pide ayuda al tío: “Acabo de escribir. y se lo deja. Tenga usted a bien. 7. en este asunto. cuando el viento tiene a bien levantarse. o incluso para alabar al cielo: "¡Oh. hoy han sido escuchados mis deseos. La salida se hace el sábado 21 de marzo. en tres meses.a mis padres. delante y detrás de nosotros. y la idea de las misiones de China ha hecho palpitar siempre mi corazón. presa de la emoción. y mis ojos se inundaron de lágrimas". Espero que ellos sabrán hacer este sacrificio como buenos cristianos. y está presto a afrontar los mares con unos misioneros a bordo. a pesar de todo. había conducido al P. Todos "llenos de alegría y de coraje". Desde entonces. Es imposible volver una vez más a Puech. Los últimos adioses se dan en el patio de entrada de la CasaMadre. no tardan en transformar el navío en ambulancia. Uno de ellos. De hecho. se puso de rodillas para pedirles perdón de sus malos ejemplos y de las penas que les hubiera podido ocasionar. jamás había perdido completamente de vista esta perspectiva. Juan Enrique Baldus. encerrándonos en profundos abismos.. y el pequeño quercinés en exclamar: "No era del todo inútil acordarse de que sufrir es la mitad del misionero". formadas por olas espumantes. Se pide para Juan Gabriel y sus cohermanos la bendición de Dios y de sus ángeles. escribe todavía: “Voy.LA CHINA: UNA TIERRA QUE HAY QUE LABRAR En compañía de cinco sacerdotes de las Misiones Extranjeras y de dos de sus cohermanos. y no podíamos dejar de gritar: «Más que los bramidos de Ias aguas tumultuosas. la huella de Dios: "Las altas montañas. al fin. El arrogante navío. pero en él se puede ver. Tiene. a cada instante. se elevaban casi a pico. leva anclas. a partir con dos de nuestros jóvenes cohermanos y varios sacerdotes de las Misiones Extranjeras". Pues bien. consolarlos y ayudarlos con sus buenos consejos". Preocupado por la pena previsible de sus padres. que. Cuando la gran extensión azul detiene sus caprichos y descansa por fin. mi querido tío. deben embarcar en el Edmond. Fue el día de la Purificación cuando se me concedió el permiso de ir a la misión de China. el año anterior. luego. qué dichoso se siente 15 . partir. contará más tarde: "Juan Gabriel quiso dar su adiós a los seminaristas. "Se confesaron casi todos”. Salhorgne. Pero no entra en Macao quien quiere. le responderá que él no es lo bastante rico para vivir como gran señor. con sus equipajes. una factoría comercial. Los marinos están por ello un tanto conmovidos. que conocieron con sorpresa que todavía esto y vivo". mi salud inspiraba inquietudes a unas personas demasiado caritativas. al encontrarse de tiempo en tiempo con la compañía de nuestro Señor"! Aprovechan este tiempo bendito para hacer descubrir a la tripulación los misterios de la fe. a menudo. Danicourt. Jamás he visto tan bien la diferencia del «servus” pagano (esclavo) y del «domesticus” cristiano (doméstico). se las habría encontrado vivas en el fondo de China". Con tal que ellos sigan siendo siervos de la gleba. una frágil embarcación se arrima al Roya¡-George. y bendito sea el Señor que me ha conducido y traído Él mismo aquí". además. en Batavia.uno en este vasto desierto del océano. el 26 de . Los misioneros hacen una visita al Prefecto Apostólico y al párroco de la ciudad. Juan Gabriel aprecia la vida de esta comunidad. El P. llegamos a buen puerto. el RoyalGeorge. el imponente navío fondea en la rada de Macao.. miserables y harapientos. con olas rugientes y amenazantes. en cambio. y aguardan pacientemente la reanudación del viaje. Es la primera etapa. Una hora y media más tarde. una carta que indica bien su dolor: "La conducta de los europeos ha dado una falsa idea del cristianismo. 16 . El misionero paúl queda impresionado por ello. Ahora. Hacen suyo lo de "buen corazón quebranta mala ventura".. importa poco al gobierno holandés que se hagan católicos".. que ocultarse para acceder a la costa. a sus ojos. Celebran con ellos la fiesta de los santos apóstoles Pedro y Pablo. Hacerse todo a todos no parece ser la divisa cristiana de los colonos europeos. exclama: "Aquí estoy. hay que cambiar de embarcación porque el Edmond se dirige hacia Java. junio. el 29 de agosto. escribe Juan Gabriel a su Superior General. P. En el momento de una escala en Malasia. Hable a un malayo de hacerse cristiano. Se trata de una estricta posesión portuguesa. Juan Gabriel y sus compañeros se interesan por los autóctonos musulmanes. Aparte de una tempestad impetuosa. Perboyre.. "Lo más pronto -escribe Juan Gabriel a su hermano Juan Santiago—. se dispone a partir el 5 de julio. puesta bajo la autoridad del virrey de Goa. Y. escribiendo al Superior General. Se sorprenden de la presencia del P. pero todo va bien para él: "A mi salida de Francia. Hay. Su gobernador no duda en expulsar a los misioneros católicos de nacionalidad extranjera. los misioneros paúles abrazan a su "digno superior. P. unos tres meses después de nuestra salida de Francia". pues. franquearon todos el umbral de la residencia. Tal fue el caso en la fiesta de san Vicente (entonces. tal es la consigna por la que debía darle mi primera señal de vida en Macao. Durante la noche. todos en perfecta salud". no ha habido hecho notable durante esta travesía. y es así como ponen pie en tierra. y a su excelente colaborador. ambos holandeses. invita a los misioneros a situarse en ella. Danicourt” y a los "buenos chinos. P. tras el paso del cabo de Buena Esperanza. Y por fin: "No habiendo cesado Dios de protegernos en todo el curso de nuestra navegación. y no puede dejar de escribir al Superior General. Finalmente. Más cómodo que el anterior. A la llegada. Torrette. ha de hacer. llegaremos a Macao para Natividad". Se aprovechan de ella para hacer algunas excursiones y celebrar la eucaristía en tierra. numerosas escalas. el 19 de julio). de la Procura de los PP. ejemplar: "Si las santas prácticas del antiguo san Lázaro hubieran podido perderse en Francia. Paúles de Macao. El segundo navío. P. el francés y el inglés". autor de numerosas publicaciones. Su familia del Puech. Durante tres meses.La Procura. Clet no lo habló. la miseria aprieta a los seres más frágiles con sus garras de acero. viven como en otras partes y. comprueba Juan Gabriel. se dan además. están muy contentos de haber sacrificado todo para traer la luz de la fe a los infieles". Él indica además. a veces. Torrette. pero no se recoge en casa a un mendigo. Se han establecido en su lugar algunas estructuras de ayuda y servicios de acogida para los más pobres y los vagabundos. Pero desecha al punto su temor: “Dicen que el P. Sólo las viudas o también las mujeres jóvenes que se ocupan de sus padres ancianos gozan de un respeto que se estima merecido. por miedo a verlo morir allí y traer así la ruina a la familia. reclutado mediante un difícil examen. es ir a la muerte.. El hombre tiene muchos privilegios pero la condición femenina no es muy regocijante. sino en hacer la voluntad de Dios. es donde se aprende el chino. sino con una gran dificultad. Nankín y Pekín. y allí. Comprende que la administración está extraordinariamente jerarquizada. de teología y de latín a los seminaristas chinos. Las niñas son. "Nos ha hecho falta volvernos niños y ponernos al a. Allí. se deposita el correo. se apresura a pedir al P. en París. Dispone de tiempo libre suficiente para conocer su historia pasada y la presente. Todo es bueno para servir de medio de comunicación: las piernas. Las carreteras están mal conservadas. que no es por ello menos difícil de aprender". pues. Hija de la Caridad. Han establecido allí la Iglesia. escribe a su hermana Antonieta. quinientos millones de hombres y mujeres pueblan este inmenso país. de un diccionario latino-chino. han erigido asimismo un seminario: el colegio de san José. desde el emperador. c. y educan al mismo tiempo a los jóvenes de Macao a los que enseñan entre otras cosas. el carro o también. Torrette que le deje a Juan Gabriel para dar lecciones de francés en sus clases. En noviembre de 1835. o mejor. verdadero hijo del cielo y padre de sus súbditos. en la que Juan Gabriel no deja de pensar. desde 1669. incluso no existen. el superior de aquella comunidad de cinco cohermanos. Aquí. entre ellas. cursos de filosofía. Leite. cuya larga vida apostólica ha sido coronada con la gloriosa palma del martirio". Juan Gabriel comprende que desplazarse en China es una verdadera aventura. Los portugueses mantienen su presencia en Macao. Mis precedentes me dan algunos rasgos de semejanza con él. la carreta. recibe estas palabras reconfortantes: "No crean. y "por la gracia de Dios. “Preparan y forman misioneros chinos para las tres diócesis de Cantón. sirve de enlace entre Francia y China.. Allí. Visitador (Provincial) para todos los paúles de China. La comida servida en las posadas hace retroceder a más de un 17 . el junco. tal vez. Y más adelante: "Ustedes saben bien que nuestra dicha no consiste en tener toda suerte de consuelos en este mundo. Él misionero podrá sin problema continuar su difícil aprendizaje del chino bajo los buenos auspicios del P Gonzalves. Mis cohermanos llegados a este país. b. Ojalá pueda yo asemejarme hasta el fin a este venerable cohermano. hasta víctimas de infanticidio y de abandono para dejar el sitio al muchacho. el mulo. no hay ni a ni b ni ninguna otra letra del alfabeto en la lengua china. que estos últimos tienen más facilidad para aprender el latín que él para iniciarse en su idioma: "Creo que va a costarme mucho tiempo aprender esta lengua". aunque tengan que sufrir algunas fatigas. el palanquín. con pleno éxito". el nuevo misionero tiene tiempo de interesarse por ese gran país de China. En Macao. Aunque es muy difícil censar esta población. Pueden ser recogidas entonces en orfanatos. como en otras partes. de la que se encarga el P. en servirlo v en hacer que lo sirvan tanto como nos sea posible". y se inicia uno en la vida local. cuyo obispo reside en Goa. hasta el menor funcionario de base. que ir a China. donde tendré el placer de ver a los cohermanos que tenemos allí. Juan Gabriel se siente dispuesto. a recorrer las rutas de la misión. a cada instante. Ahora. Después de atravesar esta provincia y la del Kiang-si. de París. de una gran paz. Cuando estalle la guerra del opio (1839-1842) entre la marina inglesa y las defensas costeras chinas. Del interior de la región del Houpé. Le hace además esta confidencia: “No sé que me está reservado en la carrera que se abre ante mí -sin duda. Pero es claro para todos que. El joven sacerdote no está. lugar de m destino". Torrette. en unos tres o cuatro meses. y Juan Gabriel da esta noticia a su Superior General. son hombres a los que amo más que temo. -escribe una vez más a su hermana-. viviendo sólo de un poco de arroz y de algunas hierbas". hasta para los catequistas autóctonos. llegaré. La misión es peligrosa por prohibida y fuera de la ley. su superior. hacía tiempo. Rameaux conoce bien a Juan Gabriel. la persecución crecerá y se extenderá como un reguero de pólvora y de sangre a buen número de europeos presentes en suelo chino. el P. al Houpé.aventurero. cuando se va a predicar a un Dios crucificado? ¡Que Él me haga gustar las dulzuras de su cáliz de amargura! ¡Que Él me haga digno de mis predecesores con los que me voy a reunir". el envío de un sacerdote a fin de asegurar el servicio religioso en el Honan.ahí está el pan cotidiano del misionero. ni a los mandarines. por parte del comisario imperial Lin Zexu. "Si tú pudieras obtener su conversión. Y ¿qué se puede desear mejor.. 8. Rameaux responsable de la misión urgía. Ambos tienen la misma edad. Así lo ha juzgado el P. ni a sus soldados”. Se ordenaron sacerdotes el mismo año. Dios mediante. en 1826. “goza. “Esta misma noche me embarco para el Fokien en un junco conducido por cristianos. y tu hermano te debería su felicidad" -pide a su hermana en la misma carta-. Cuatro meses han pasado desde la llegada de Juan Gabriel a Macao. Estamos a 19 de diciembre de 1835. Te aseguro que ni temo siquiera al emperador. casi abandonado desde el martirio de Francisco Regis Clet. según él. Está dispuesto. muchas cruces. Juan Gabriel puede comprobar que: "nuestros buenos cohermanos se mueren de fatiga. dada la prohibición de entrada en suelo chino para todo europeo no empleado en la Corte. A quien más teme de hecho es a sí mismo. Posee ya las bases esenciales de la lengua china. se alimentan muy mal. Va a dejar Macao por el Houpé. conflicto causado por la confiscación y la destrucción de grandes cantidades de esta droga. El emperador Tao Koung (18201850) tiene el poder de arrestar a los misioneros y de condenarlos a muerte. que son también 18 .LOS SURCOS DE LA RUTA El P. todavía dispuesto al martirio. Nuestros misioneros van prosperando de día en día". En cuanto a la religión católica. si no los vuelve a enviar a Macao o los destierra a una provincia lejana. en el interior de China. una persecución es siempre posible. Se afirma en su forma de ser y conoce la mentalidad indígena: "No vayas a figurarte que. en 1820. le harías un gran servicio. sin embargo. y. sabe por haberlo aprendido y enseñado. de hecho. ¿quién puede estarlo? Con todo. el paso casi obligado de un don total del Evangelio a las tierras "infieles". que es. por el momento. un día u otro. Este conocimiento mutuo debía simplificar muchas cosas in situ. tengo a todos los chinos a mis talones y que ellos sólo piensan en matarme. Toman. Delamarre. previsores. que. "Al puente (del junco).. donde trabajan. Haré una parada en el Fokien. en casa de nuestro cohermano. sino más bien en una persecución. el Sutchuen. y Juan Gabriel precisa: "No nos faltan ni ejemplos ni motivos para animarnos y sostenernos”. Bordeando la costa para garantizar la seguridad... para hacer dos o trescientas leguas por el continente.. Sus rutas son comunes hasta el Houpé. para compartir sus trabajos. Por tanto. tal vez mas de dos meses. Precisaré para esto. los marineros también los imitaban. con las precauciones tomadas en caso de peligro. y los momentos de oración. las pequeñas y frágiles embarcaciones se agrupan al anochecer. En el junco.. Y prosigue: "Veis a poca distancia de vosotros. A la menor alerta. que se desliza entre una flotilla de múltiples sampanes. allí nacen. pues. por la noche. llegan al Fo-kien. en referencia a su inculturación forzada: "Si pudieras verme ahora. acompañado de un sacerdote de las Misiones Extranjeras.. difícilmente desemboca en un reconocimiento oficial.. no hay más que un alojamiento donde se hacinan con la única posibilidad de mantenerse allí en cuclillas.” Parte el 21 de diciembre. pero lejos de tierra. ante la posible aparición de cualquier elemento extraño que pueda amenazar o inquietar la seguridad de los sacerdotes. Al pasar cerca. Reposan en aquella barca. mientras los barcos paganos. Vivir clandestinamente en un país hostil.. luego. para proteger a los misioneros. el P. te ofrecería un espectáculo interesante con mi disfraz chino. unos contra otros. La comodidad no es la preocupación primera del navegante y de su tripulación. no lo haré de un tirón y por diligencia. porque el monzón es contrario y los navíos chinos van muy lentamente. Juan Gabriel toma la pluma y escribe a Juan Bautista Torrette.. allí viven y allí mueren". su Provincial. Y concluye volviendo a centrar todo: "Es por ahí como hay que comenzar a hacerse todo a todos: ¡que podarnos así ganarlos para Jesucristo. a uno o a dos hombres que creeríais que bailan sobre las aguas. de cuchara y de tenedor. en un puerto para pasar allí la noche con toda tranquilidad. Laribe". Con el ejemplo de los jefes del barco. a fin de pasar desapercibidos y de protegerse.. siempre al acecho de nuevas presas. hacían descender al mar la llama de sus supersticiones. una larga carta sobre su periplo. Viajaré a pie. El misionero queda subyugado ante el espectáculo diario de aquella vida indígena que bulle por doquier: "El mar está cubierto en ciertos sitios de innumerables barcas de pescadores. en caso de un ataque de piratas.. mi cabeza rapada. mi larga coleta y mis bigotes. un junco de madrugada. Rameaux y Baldus en el Hnupé. en la residencia del Vicario Apostólico. El largo viaje puede comenzar. Después de esto. Así.. el P. Continúa su carta con una brizna de humor. balbuciendo mi nueva lengua. y dormir hasta en el entablado. otra en el Kiang-si. Antes de la salida. el nuestro hacía subir hacia el Señor del cielo el incienso puro de la verdadera fe". Dicen que no represento mal a un chino". que nos rodeaban.perseguidos. apostándose delante. íbamos a la entrada de la noche a rezar nuestro rosario. Juan Gabriel se apresura a redactar unas letras para su hermano Juan Santiago: "Me voy a Juntar con los PP. Los pescadores no salen de allí ni siquiera al final del día. que debe llegar a su destino. sentado o acostado. se cierra con fuerza la puerta. se han escondido ya bajo las mantas. comiendo con los palillos que sirven de cuchillo. está toda la familia. descubrís que tienen bajo los pies una especie de balsa compuesta de cuatro 0 cinco ramas de 19 . Allí. las descripciones de los puertos: "simplemente un abrigo al pie de una montaña". o en barca.. uno ya no se sorprende de oír que cinco millones de chinos habitan las aguas del mar. cuya tripulación es cristiana. A final de febrero de 1836.. "Aquel día. de la causa del P. Es la época en que se descubre la cabeza para andar a gusto. por fin. precisa Juan Gabriel. Hemos de confesar que hay hombres que hacen depender de muy poca cosa esta pobre vida en la que. al lugar donde el P. los cristianos andan con la cabeza erguida. dominico y Vicario Apostólico. durante los cuales los misioneros han jugado al escondite con las autoridades locales. Tras una visita al seminario y de un descanso bien merecido en un barrio cristiano. bien conocidas de los mandarines. donde los paganos son minoría. incluso considerables. "Nos hacían atravesar las ciudades a paso de carrera ". El sol castiga ya la tierra. El buen obispo los obsequia incluso con un pequeño resto de vino de Burdeos. ellos aportan todo". nos dirigirnos en una barquita. pero. porque teníamos que pasar delante de una aduana. Se habla de la Congregación de la Misión y de los amigos comunes. y muchas. tranquilizados por las respuestas dadas al «¿Quién vive?».. A los más suspicaces de los indígenas los guías responden que son mercaderes de té. y su experiencia. donde todo es cristiano. Y. es concebible que haya localidades. 20 . que van a servir "de correo y de portadores de equipaje " para la región llamada el Kiang-si. Carpena. Juan Gabriel se complace en comprobar que. El P. tuvimos que admirar un nuevo rasgo de la Providencia sobre nosotros. Las rocas de piedra reflejan los primeros rayos calurosos de primavera sobre los caminos sinuosos. sin embargo. teníamos que pasar una aduana establecida para examinar las mercancías que se transportan de una provincia u otra. echamos el ancla por última vez. Hay siete u ocho grandes iglesias abiertas a todos. Para evitar los peligros que se temían en la ruta recorrida por los misioneros antes de nosotros. La vigilancia de los aduaneros no faltó. nos dispensaron de la inspección”.bambú. los dos hombres deben reanudar la ruta. Después de esperar algún tiempo la subida de la marea para remontar el río. Ambos misioneros son bien recibidos por Mons. tras un periplo de quince días. en medio de una noche obscura. con grande y grata sorpresa nuestra. por tanto. Por esto. pero nuestros europeos están obligados a seguir cubiertos para disimular su apariencia un tanto diferente a la de la población local y su clara cabellera. en tales distritos. de las comarcas vecinas y. llegan a un pueblo cristiano donde los correos foquineses los confían a la dirección de otros. Asimismo. por fin. se los mira con curiosidad y burla. así como los dos seminarios". En las ciudades no se detienen... He aquí.. más hábiles que los otros". acompañados de cuatro cristianos del país. De ahí que. En un país donde todos tienen los ojos rasgados. acompañados de su correo y tapados todavía con nuestra manta. Laribe tenía la misión". habíamos seguido otra diferente. que no pueden hablar en su lengua. Clet en vistas a que sea declarado venerable. Todo nuestro contrabando estaba en nuestras personas. la tez aceitunada y los cabellos negros y lisos. Ella nos hizo llegar justamente. sin temer nada. en aquel lugar. Parten al amanecer del 15 de marzo. hacia la residencia del Vicario Apostólico del Fo-Kiert. nos deslizábamos muy de prisa hacia adelante para no ser revisados por unos hombres. mientras los correos presentaban nuestro equipaje a los aduaneros. que no se imaginaban poder degustar en aquella tierra china. a quienes su empleo vuelve muy suspicaces. Laribe tiene la misma edad que Juan Gabriel y. la cruz de Cristo está sólidamente plantada: “La floreciente Iglesia del Fo-Kien se compone de cuarenta mil cristianos. la llegada pintoresca al Fo-Kien: “Hacia las 6 de la tarde. "Antes de entrar en el Kiang-si. 11 para ir de Kien-Claarzg-fou al Houpé. lo honraba con su amistad y con sus visitas (. parándose aquí o allí. Poco a poco se ganó la confianza. Ambos son acompañados por un correo del P. los cristianos pertenecen en general. a la clase pobre. Llegó a China al mismo tiempo que el P. Aunque en esta provincia. tan sólo doscientos cristianos. a este propósito. "cuando las grandes lluvias. Después de un alto de una jornada en Han-Keou. 21 . fue destinado a la misión de Kiang-si. Se nos considera mercaderes fakineses. el 27 de abril de 1836. es originario de la diócesis de Cahors. capital del Houpe".como él. cuenta a su tío en una larga carta: "Cierto día estaba yo en Clra-Yurzg en medio de una joven y ferviente cristiandad. Laribe lo acompaña hasta la ciudad de Kien-Tchang-fou. "este excelente cohermano. entre ellos. Un cristiano de Sutchuen había llegado para ejercer su comercio en esta ciudad. y cuanta esperanza tenía de hacer aún numerosas conquistas para la fe”. avanzan sin demasiado descanso. a algunos particulares con una fortuna considerable". A golpe de navegación y de marcha. Delamane que se les había adelantado tres días. Juan Gabriel. Todos los años se bautiza un buen número de adultos. y se informa del camino de su destino.. y atracan en el muelle de Han-Keou (Hankow). a unos sesenta kilómetros. entre ellos a algunos ricos negociantes. como fino observador de la situación. de inmediato. Tiene enfrente a Otrtchang-fóu. “Han-keou es una de las ciudades más comerciantes y mayores de la China. Después de ocho días de navegación por aquellas aguas amenazadoras. es decir. en una comunidad cristiana toda dichosa y satisfecha de recibir la bendición de un sacerdote. que hace la alegría de los cristianos y la felicidad de los sacerdotes que trabajan con él". Los paganos que nos conducían debieron. es como un mar". Es preciso todavía recorrer los cuatrocientos kilómetros que los separan del norte del Houpé. Francisco Regis CIet. Baldus. El trabajo no falta. en plena noche y bajo un chaparrón. encontrar muy natural que hablásemos continuamente nuestra propia lengua. Así. el P. Juan Gabriel vuelve a empuñar su bordón de peregrino. el P. pensando nada menos que en llegar a ser su apóstol. como en las otras. el afecto y la estima de los paganos. constata que "en el Kiarag. Sobre las fértiles riberas hay casi dos millones de habitantes y. llegan por fin. transporta a lo lejos sobre una tierra inculta una nueva semilla para fecundarla. sin embargo. extiende sus aguas gigantescas ante los ojos atónitos de los europeos. el 8 de abril.). la vía del río es la más segura y la más cómoda. El buen tiempo permite avanzar fácilmente al grupo. Vuelve a encontrarse allí al P. pues. El Yang-tse-kiang. Rameaux. a buscar un cargo de mandarín". Juan Gabriel puede iniciarse sin aguardar a la misión en la escuela del P. Debe su origen a ese azar de la Providencia que. y se tiene una gran esperanza de verlas extender.si. en 1832. Luego. En Han-Keou el P. Y subraya con cierto asombro: "Uno de ellos ha salido muy recientemente para Pekín. Laribe. y. Cuando Juan Gabriel decide proseguir su larga ruta. acompañado esta vez por un catequista que su cohermano. particularmente en este periodo fuerte de la Semana Santa. que ellos tomaban por la del Fo-kien".. el majestuoso "río azul". que es paisano suyo. En cuanto al misionero paúl que había contemplado en su tiempo las reliquias del P. se cuenta. sin la habilidad de los hombres. que entienden poco la lengua de esta provincia. ha enviado allí para el bautismo de niños. nuestra peregrinación con dos correos del Kiang-si. Delamarre se separa de Juan Gabriel. se desborda. Luego. se ve rodeado de numerosos hijos espirituales. la francesa. Me contaba (…) cómo el mandarín. se perfilan disposiciones favorables al cristianismo. “Es la que tomamos al reanudar. Rameaux. no puede dejar de recordar que está en los lugares mismos donde aquel mártir dio su vida por Jesucristo. y ahora. Ambos pasan furtivamente por la ciudad de Kou-tchen. que prosigue: "Por fin. con todo. a su tío Santiago. nuestra residencia. dichosos de volverse a encontrarse. que Juan Gabriel ha aprovechado para revisar su chino y catequizar a sus compañeros de ruta. y. muy cumplidores. al escuchar de diversos lados. Juan Gabriel recobra fuerzas contemplando aquella naturaleza embelesante: “Usted no percibe en todo su entorno sino altas montañas que lo encierran en un estrecho recinto donde la naturaleza vive completamente sola. tan solo en torno de su cuerpo cuelgan unos andrajos menos propios para cubrirlo que para hacer resaltar la más extrema miseria a la que puede ser reducido un hombre. Rameaux y un cohermano chino me recibieron con los brazos abiertos”. los dos aguerridos misioneros han de proseguir su trabajo.El 7 de mayo. ¿No es a ellos a quienes se debe buen número de mártires y de apóstatas. Juan Gabriel está molido. doblé la cima de la terrible montaña. y. Baldus. para una última etapa de montaña. donde el P. Me sentaba en todas las piedras que encontraba: luego. parece confortar al misionero extenuado. Luego. se queda gratamente sorprendido hacia las nueve de la noche. Y constatando la molestia de aquel momento. tras largos y agotadores kilómetros recorridos a pie. pues? De pequeñas cabañas ocultas bajo los árboles. me ponía de nuevo a trepar a veces con las manos. el pequeño grupo tiene la dulce alegría de ver al P. prosiguiendo el camino que la Providencia me había marcado". no oye usted otra cosa que el chirrido de los insectos o el canto de los pájaros". Asimismo. acompañado ahora. de verse rodeado por cuatrocientas o quinientas personas que han venido a oír la misa y la Palabra de Dios. porque los mandarines. trepado con los dientes. “Son tan pobres como no había visto jamás. de sólo el dueño de la barca. oculta en un bosquecillo de bambúes.. por la mañana. se muestran allí temibles. Hay que beber en el manantial del coraje para atravesarla y. pero del otro lado de su medalla dorada por la locura envilecedora de los hombres. rezar el rosario y hacer el viacrucis. a pie. Otros no van a misa porque no tienen ni siquiera un semejante vestido. al que se levanta y empuja hacia adelante". constreñía a los más débiles a un violento sufrimiento inmerecido. dos días después. era el momento de tratar de ganarla. que guardan sus pobres rebaños en los alrededores. continúa: “Mi pobre guía se limitaba a prestarme el servicio que se presta a tan pobre jamelgo. Después de un nuevo periplo de ocho días por agua. en caso de necesidad. aún más asombrado el domingo. en las sinuosidades de la montaña". así como la ruina de alunas iglesias? La montaña esta ante ellos. susceptible de preparar los corazones a la infinita misericordia del Señor. En años anteriores. ¿De dónde salen. 22 . que evangelizan los dos en el distrito.. Rameaux. aunque se había ofrecido sin éxito a Juan Gabriel un caballo para aliviarlo. La solicitud de los cristianos. mientras que Juan Gabriel puede tomar un descanso en casa de un buen viejo médico chino. el canto de la oración. Si usted irle permite hablar así. me acordé de que llevaba sobre mí una crucecita en la que le estaba aplicada la indulgencia del viacrucis. hubiera. Todos volverán a verse en la residencia de la comunidad. deja el río el 26 de junio. insolente de poderío. La soledad habría podido invadir el corazón del misionero. La pobreza era el pesado bagaje común de esta humanidad vestida de harapos. la misma dicha de abrazar al P. y en la ladera opuesta. Espiritualmente podía llegar a ser un tesoro inestimable. Muchos no están vestidos. Quedan juntos algún tiempo. escribe: “Al verla elevarse ante nosotros. encontré. pero "como usted no ha descubierto casas. “La iglesia y la residencia. cuya compañía me era tan grata como útil. no fue de muy larga duración. Rameaux destina al nuevo misionero al Ho-nan para ir a reforzar el equipo que allí trabaja. Él ha aprendido y observado mucho.. Envíele algunas botellas de vino de Burdeos o de Frontignan. misionero y catequistas pasan montañas y valles. Un poco más lejos. con los calores. que... Escribe al P. Bajo un calor insoportable. El P. Me separé de ellos hacia la mitad de julio. después de Han-Kenu. que pasan por palacios en el lugar. Recorriendo a grandes pasos los difíciles caminos de China. de manera que obtenga la corona inmarcesible". El 12 de julio. a descansar a la residencia de Tcha-Yuen-Keou. por otra parte. una especie de agotamiento que le quita el apetito. se ven todavía las ruinas de una escuela y las de una iglesia dedicada a María. en alusión al silencio circundante.. a lomo de mulo. están construidas de tierra. contenerse de alabar las cualidades de su cohermano: "La cristiandad del Houpé había sido desolada por la persecución y probada por calamidades de todo género. Hacia medianoche del día cuarto la expedición llega. y escribía una vez más: "si he venido de tan lejos. El P. llegamos a Luo-HoKeou.. otros antes de él.. "Mi estancia en medio de cohermanos. a una posada. y no tienen otro pavimento que el suelo batido. han lavado ya con sangre de mártires... por fin. algunos años antes. que su salud no era un obstáculo mayor. que temía perder su título si no lo hacía. Torrette: "Usted no puede cambiar los superiores sino en casos de urgencia. "Al día siguiente. se pone de nuevo en camino.perecieron muchos de miseria. tiene la desagradable sorpresa de haber molestado al posadero que lo trata lisamente de avaro. y atraviesan llanuras agradables. Recomiéndele moderación en el trabajo. 9.. su alma se iba burilando en el crisol misterioso de la fe y en el testimonio que ha de dar en aquella vasta China. ni más techo que las ramas de bambú que sostienen el tejado". que son nuestros mortales enemigos". La respuesta del interesado no se hace esperar. ha logrado probarse a sí mismo. Baldus termina su larga correría misionera y viene. fue capturado Francisco Regis Clet. Esta casa. La comunidad se compone de una veintena de personas: los misioneros. por fin. será la mejor medicina". Rameaux. El superior de la misión proyecta nombrar en su lugar a Juan Gabriel responsable de la comunidad. Lo mejor que tienen es maíz y alforfón”. Hay algunos cristianos pero sólo podemos verlos en las barcas. a mediodía. Han pasado seis largos meses desde la salida de Francia de Juan Gabriel. sufre alguna vez. desgraciadamente destruida por orden de un mandarín. muy comprensibles. aunque experimentará a menudo ciertas molestias. Dios quiera que corra en ella. para presentarme en el Ho-nan. uno de los más importantes del Houpé. El P. para no caer en manos de los antiguos apóstatas. donde debía continuar mis estudios al lado de dos cohermanos chinos que se encontraban en aquella provincia". es indudablemente para correr todavía en esta arena. es el sitio de vida y de renovación que aprecian todos. Con el cansancio.LOS CAMPOS DE LA PRUEBA El P. Juan Gabriel no puede. lugar de comercio. cubiertas con paja. no habiendo hecho el francés honor a la sopa de pasta ofrecida en la cena. Poco a poco. Ramenux 23 . que Juan Gabriel se complace en llamar "la Cartuja". Los que no mueren viven casi de nada. a su vez. tal vez. Juan Gabriel. a la residencia de Nayang-fou donde. Una noche llegan. los catequistas y cinco jóvenes estudiantes que aprenden el latín. Los brazos de la misión de Dios se abren a él. sin embargo. vería una gran gracia que Dios nos otorgaría. saliendo de su guarida como lobo en busca de presa: “Tenemos fatigas y algunas penas que soportar. rebuscar unas espigas para ponerlas al lado de las grandes gavillas de mis cohermanos. heme aquí lanzado también en una nueva carrera. Realista ante la adversidad siempre posible. es una cosa más deseable que temible". La misión no aguarda. En este momento preciso de su existencia comprendió haber llevado al sitio que Dios le ha fijado en su Providencia. ni siquiera que alcance esta cifra. recuerda con razón que "la conversión de la China depende también de las oraciones que los cristianos de Europa pueden hacer. a fin de tener una pequeña parte en su recompensa”. Apenas quiere emplearse en la tarea de la misión. afirma además que "si tuviéramos que sufrir el martirio. y a cicatrizar las heridas todavía sangrantes. citando una vez más. razón ninguna para cambiar de superior. casi palabra por palabra.por ella". bien a pesar de eso. que exige un prolongado aliento. rescatadas al precio de su sangre”. Los misioneros se dan en cuerpo y alma al Evangelio. pero sienten que se acerca el cansancio. por fin. pues. pero estoy muy espantado por lo escrito: «El hombre sólo recogerá lo que ha ya sembrado». Juan Gabriel. que él estima de primera urgencia. son entre la muchedumbre de los paganos como unos pececillos en el mar.falta ganarse el cielo con el sudor de su frente".. plantada en tierras infieles y regada con la sangre de los mártires!?" Esa cruz va a comenzar secretamente a llevarla. voy a poner manos a la obra. oído cien mil confesiones y bautizado treinta y un adultos". y la experiencia ha demostrado que había menos fundamento de lo que se suponía". hace casi una veintena de años". en la era del Padre de familia. Quisiera. Es la que pedía con insistencia.. Hay algunas razones para creer que es la que Dios me destinaba a recorrer. Y acordándose de las reacciones negativas de unos y de otros. De 24 . y a emplear todos mis pobres medios en procurar su gloria y la salvación de las almas. Dispersados por toda la superficie del imperio. en una novena que hice a san Francisco Javier. ¿Se acuerda entonces de aquella frase que había escrito en la época de sus estudios en Montauban: ¡Qué bella es esa cruz. y habrá recorrido al menos trescientas leguas misionando. puede ahora aplicarse a su tarea misionera. lleno de confianza. iban llorando. siente prisa por recoger sus frutos o habla ya de otra cosecha: "Yo que acabo de poner la mano en el arado. escribe a su padre: "Y luego. en París: "En cuanto a mí. y escribe estas palabras al Asistente General de la Congregación. hace buena . tiempo de sembrar la Palabra: "Ahora.. Es. Pero la principal razón que ponían por delante era la de mi falta de salud. es víctima de una epidemia de fiebre maligna que lo clava funestamente en la residencia. Todo está presto para fortalecer el corazón de Juan Gabriel. Y. Para el autor de este testimonio no hay. El número de los cristianos de China no me perece que se eleve por encima de doscientos veinte mil. "El Padre de familia ha enviado a su viña un número bastante bueno de obreros. pero las hay por doquier”. ¿qué puedo deciros si no es que estoy desde ahora asociado a aquéllos de los que está escrito: «Al ir. Sin olvidar la necesaria participación del hombre en la construcción del Reino de Dios. añade: "Es verdad que usted y mis otros directores me disuadían del proyecto. El crisol del sufrimiento físico va a recordarle súbitamente su fragilidad. esparciendo su semilla» No sé si es por presentimiento de una mala cosecha. Desde aquel momento.apareció en medio de ella como un ángel consolador Por su celo extraordinario. pero sabiendo.. No habían pasado meses desde su llegada. a su maestro Vicente de Paúl. ¿Cuándo sucederá que una poca levadura penetre esa enorme masa? Es el secreto de Aquél que tiene los tiempos en su poder". llego a reparar las antiguas brechas. a quien nos dimos prisa en comunicar la misma noticia. Ante tal infortunio. Wang. Tiene bajo su responsabilidad a tres cohermanos chinos. Juan Pe. Rnnwamti. no aparece por la residencia. El segundo cohermano. y de una persecución que ha llevado consigo una multiplicación de apóstatas. y precisa: "como no debía ir demasiado rápido en el ejercicio del ministerio en mi nueva lengua. Song. pero cada uno. luego continúan más al 25 . el 30 de diciembre-. al sur del Houpé. El primero explica y hace recitar el catecismo a los niños. dos distritos de unas 300 almas. Ciertamente. Song y el P. pero el grano sembrado muy escaso y disperso. Tuvo que atravesar cuatro o cinco arroyos donde le llegaba el agua hasta la cintura. Toda la provincia del Ho-nan está bajo la responsabilidad de estos misioneros. luego. Se vio obligado a ir andando. más lejos. El tiempo y los caminos eran tan malos que ni carros ni monturas podían llegar allá. que. "Hay en China cerca de cuarenta sacerdotes europeos y alrededor de ochenta sacerdotes chinos". a consecuencia de una corrección del P. luego. lo que renovó su mal o dolor de piernas del que había sido aliviado con la ayuda de unos médicos chinos". Con la ayuda de Dios. El campo es vasto. Torrette que. Pe ya mencionado. que ha tenido también un fuerte acceso de fiebre. el P. por primera vez. escribe Juan Gabriel a un amigo sacerdote de París. en los alrededores. Tras cinco semanas de ausencia. lo envié a administrara un enfermo a tres leguas (6 kms. cuenta Juan Gabriel.septiembre a diciembre de 1836. Trabajan allí hasta mayo. salen de nuevo para evangelizar las cristiandades de Nantchang. En marzo de 1837. visita a los enfermos en unas situaciones poco cómodas. En razón del hambre desgarradora que ha diezmado una parte no despreciable de la población. debe de haber hablado de este asunto. siente la urgencia de aquella santa necesidad: las ovejas están cruelmente faltas de pastores. la misión decaía. en las montañas. tienen la alegría de tomar un poco de descanso y de conmemorar el Año Nuevo chino. cuando llegó ayer un correo a anunciarnos el comienzo de una persecución en nuestra región de las montañas de Kou-tchen. con ocasión de la fiesta de santo Tomás. algunos dulces momentos de calma durante los cuales puede cómodamente volver a emprender el estudio de la lengua local bajo la égida del P. Él conoce. Pe y yo. El pueblo cristiano es un "pequeño resto. permanece en la residencia para reponerse y administrar allí los sacramentos. se retiró lejos. algunas localidades de aproximadamente 250 fieles y. en primer lugar. las condiciones de la misión son extremadamente fatigosas para todos. pero ya el enemigo acecha. el P. solapado: "Estábamos todos a la obra -escribe Juan Gabriel al Superior General de la Congregación. confiadas en un primer momento a los paúles portugueses que padecían una falta cruel de obreros. Hay que levantarla de nuevo. que mis piernas vinieron a ser como dos cañas secas". el P. saldremos de nuevo para ir a visitar otra cristiandad. los aledaños de la residencia de Tsinkiakang con sus 80 cristianos. "Un día. los cohermanos le administran incluso los últimos sacramentos. aguanta interminables tormentos que abaten su cuerpo extenuado: "Estaba tan derretido en sudores. En cuanto al P. y.de casi 600 personas. Están. Wang. El P. P. después de largos meses. ha predicado en chino. a pesar de que cuatro misioneros y doce catequistas hayan sido denunciados ante el mandarín". no tendrá muy grandes consecuencias. Escribe al P. Rameaux. y puede acometer su trabajo de misionero. Nada debe detener a los peregrinos de Dios: "Mañana. a su manera. sin embargo. su joven cohermano chino.). esperamos. la salud de Juan Gabriel no inspira ya temor en diciembre. sólo confesé una docena de personas a quienes comprendí bien“. Luego. se contenta con decir que “si uno esta ávido de privaciones y de mortificaciones. con una puntada de humor muy campesina: "saque la consecuencia práctica para otra vez". ha tenido que huir y esconderse con algunos sacerdotes en una caverna. confirmaciones. nos ponemos a oír confesiones. el cuadro de nuestra posición y de las distancias respectivas de los distritos que hemos recorrido". De ahí que. A continuación. formando un tribunal de examen.norte: "Visitamos primeramente el distrito de Loavhien que no lo había sido hacía cinco o seis años".. No queriendo ennegrecer el cuadro en lo concerniente a las paradas necesarias para reparar fuerzas durante un tal recorrido. Rameaux. matrimonios. Juan Gabriel menciona a continuación. ya que se debe a todas aquéllas de las que está encargado. relata con unos detalles minuciosos. Otros misioneros se han ido más lejos. nos hacíamos recitar por todos. Aquel año. de Autun. Las fiebres causan estragos y el P. de penetrar más adelante en los campos de la prueba. hubiese sido doblemente bienvenido en medio de una tan grande miseria". Aquí está. Juan Gabriel se detiene un largo momento en el contenido de la misión.. nuestro primer cuidado era preparar una lista exacta de todos los cristianos grandes y pequeños. hay con qué hacer una santa fortuna ". Así. recordando la urgencia del Reino de Dios: "El misionero no puede permitirse una larga estancia en cada cristiandad. aquel mismo obispo que lo había recibido a su llegada. poco más o menos. Bautismo de adultos. Al contrario: "el pobre P. según el número y la necesidad de los cristianos". La prueba de la escasez de obreros se experimenta más duramente aquí que en otras partes. vamos a dar otras en las diócesis de Albi. se intenta resistir. del Puy. en seguida. pero contenido. son demasiado extensos. Después de esto y el bautismo de los niños. sin que los viejos se ruborizasen de dar ejemplo en esto a los más jóvenes. que llevaba sólo cuatro días en casa. Los grandes e insoportables calores de julio han echado su capa de plomo sobre la región. Todos están afligidos por ello. Mons.. como en los seminarios. Baldus" no va bien del todo. los novicios pueden leer: "Llegados a cada misión. a fin de estar más en situación de cumplir nuestro deber para con todos. diez. La revisión dura ocho. 26 .. Damos allí primeramente algunas misiones. a pesar del miedo efectivo. de Orleans. En una larga y apasionante carta. Bien que mal. de Versailles y de Amiens. debe partir de inmediato para llevar los auxilios de la religión a sus fieles. Escribiendo a su director actual.. a las montañas. buenos y malos. un cierto número reciba la sagrada comunión. puede todavía sensibilizar a los jóvenes reclutas en la evangelización de China. La apostasía de numerosos cristianos y el destierro de los que han permanecido fieles a la cruz de Jesús se juntan a los sufrimientos.. el catecismo. es el quehacer de los últimos días". todos los días. Tales visitas les exigen en total cuatro largos meses. La violencia de la persecución no ha podido reprimir el impulso misionero. nuestro punto de partida en la diócesis de Cahors. quince días. admisión en alguna cofradía. Las iglesias han sido destruidas o saqueadas. Fatigado y desbordado. públicamente. lo que es la vida local y la manera de abordarla: "Supongamos el lugar de nuestra residencia y.. En cuanto a los campos de la misión. Juan Gabriel notifica al P.. Juan Gabriel y sus cohermanos son informados de que una persecución ejerce su rigor en el Fo-kien. Carpena. necesita ayuda: "Si usted hubiera podido darnos a uno de aquellos cohermanos llegados el año pasado. Juan Gabriel se acuerda entonces de su paso por la subdirección del noviciado. Torrette que su superior va mucho mejor que antes: "El vino que le ha mandado le ha hecho bien y el café le ha causado placer". Después de algunas bonitas descripciones dignas de las más bellas postales sobre aquella naturaleza salvaje regada de ríos impetuosos. luego "nos volvimos hacia los que están al norte del río Amarillo". Luego. ¿ha hecho. le confía el sector de Tcha-Yuen-Keou. la Providencia los tiene de tal manera preparados y tan claramente designados. de los que tuvo conocimiento el año anterior. Rameaux llama a Juan Gabriel a Houpé. tenemos la dicha de ser los misioneros una pobre gente de los campos". La somete. En cuanto a los misioneros del Ho-nan. la elección? De hecho. Le he pedido ya que acepte mi dimisión y se la pido con más insistencia”. Hoy están en manos de los paganos. en junio de 1836. así como sobre la del P. La posición de estos dos queridos y venerables cohermanos está ya hecha. La carta. que ya ha dado su parecer hace algún tiempo. solo les falta la mitra". "asimismo se encontrarían tal vez. Voy a llamarlo al Houpé para que vaya aprendiendo". Laribe". una persecución que ha hecho huir a los cristianos de las ciudades: "Desde la época del emperador Kanhi. presintiendo que algo se está tramando a sus espaldas. Mons. los cristianos tenían iglesias en muchas ciudades. Carpena. Rameaux.. no teman (las dificultades) sino. siguiendo sus planes más o menos secretos. son en número. Juan Gabriel tiene su idea particular sobre esto. tiene bajo su dependencia el Kiangsi. El obispo del Kokien. “El P. pues. del fervor de los fieles. A1 final de este período de visitas. desea otra cosa. que en esto no se puede hacer propiamente ninguna elección. sobre la nueva organización. El superior.. ¡Le cedo de muy buena gana el superiorato y hasta la mitra!. dice: "Aquí. sin embargo. se encuentran casi todos en el campo. otra allí”. en enero de 1838. Su nuevo distrito "abarca una extensión de dos o tres leguas de largo y de un poco menos de ancho. sobre todo. además. al presente. en este campo. Parece entablarse un diálogo de sordos cuando Juan Gabriel.. No obstante. Él también ha escrito de nuevo a su Visitador: "Ahora. pues. Rameaux. Se trata de dividir en dos una vasta región. Esta carta.. donde la sagrada mesa sea tan frecuentada como 27 . a los ojos de los cohermanos.. Nada es sencillo entonces. párroco de Catus (pueblo cercano a Montgesty) da cuenta. más bien. escribe al P.. dispersos en pequeños lugares". no podía terminar de otra manera que con una llamada: "Que aquéllos. en el Ho-nan. de tal manera esparcidos que no hay nada entre ellos que semeje un pueblecito. Francisco Rameaux será consagrado obispo el 1 de marzo de 1840. sino formar obreros para los campos del mundo. Durante el otoño y el invierno de 1837. las ambicionen. y los cristianos. Ante esta seguridad cierta. agotado por el largo viaje. ¡Que no pueda usted enviarnos un buen número de Franciscos Javier para esta China que tantos necesita!" No le queda ya a Pedro Juan Martín. y yo tengo mucha para no recibirlo". y quiere deshacerse del mismo en favor de la Congregación de la Misión. Hay una casa aquí. son los cristianos del sur y del noroeste de esta región los que reciben con los brazos abiertos la visita de sus pastores. sucesor de Juan Gabriel en el Seminario Interno. el señor Caviole. de sus seminaristas que tengan la vocación de venir a juntársenos. el P. y. Los cristianos que lo componen. es lo normal que continúe siendo su padre. prosiguen sin obstáculo su labor. habiendo reflexionado casi al detalle. concluye en una segunda carta: "En cuanto a Ios dos candidatos destinados a los dos puestos. alrededor de dos mil. como en Francia. Rameaux ha levantado de sus ruinas la misión del Houpé. Luego. dirigida a su primo. adonde él había llegado al borde de la asfixia. a su Visitador: "La mitra pende sobre la cabeza del P.sin nombrarla. el P. Y tomando una vez más las palabras de san Vicente de Paúl. me hago viejo (¡treinta y seis años!). y en medio de los que se encuentran muy pocos paganos. pocas parroquias en Francia. Torrette sobre los proyectos de reorganización eclesial. se permite responder: "El P... El P.. aquel sitio cercado de imponentes montañas. Él no tiene razón para renunciar a su cargo. de un estilo no inocente. y Bernardo Laribe lo será el 13 de mayo de 1845.. Torrette. Perbaore es el hombre. para realizar las numerosas visitas aún por comenzar. un millar de piadosos fieles llenando y rodeando. Si a alguno le repugnara reconocer en tal lugar una iglesia. hacer diecisiete visitas misioneras en las cristiandades circunvecinas. Desea recibir con la misma ocasión artículos para la liturgia y algunas "Medallas Milagrosas”. este humilde recinto. de "mi efecto de la Medalla Milagrosa "que le place contar al Asistente General de la Congregación. aquel rosario de desdichados. incluso bajo la lluvia y la nieve. hasta la de Pentecostés de 1839. de quien el misionero quercinés dice al que quiera entenderlo. no viéndome morir de la misma manera que ellos". Sabiendo que. como fue de semejante acción. partiendo del latín. no dejan de ser un buen consuelo. los cristianos del lugar me presentaron a una mujer joven atacada de enajenación mental. Juan Gabriel invita a su párroco a olvidarla para descubrir por las palabras. y cuya desnudez sólo estaba cubierta por un poco de paja medio podrida. hay una soberbia iglesia románica que fue.. Yo continuaba mi ruta en silencio. Juan Gabriel se siente a su vez miserable. No. Interesado por su formación espiritual. yo le rogaría que la viera allí donde ella está. detrás de la cual hay una colgadura que se extiende por encima. Es. no obstante. me suplicaban que no le negara un consuelo que tanto 28 . subraya al respecto. Perboyre se sostiene y trepa por las montañas como una cabra". Pide asimismo que se le proporcionen algunos ejemplares del diccionario latino-chino del P. que hace "por sí solo la labor de tres buenos misioneros". entregado al remordimiento de sobrevivir a aquellos desafortunados. indispuesto y sufriendo de los ojos. al Padre de misericordia. con una mesa que sirve de altar.. Ellos se acuerdan. este misionero es acompañado en sus correrías por sus colegas chinos que. Juan Gabriel puede. desde la fiesta de la Natividad de María de 1838. aunque van "a su tren". Rameaux. en su tiempo. Evidentemente. cohermano portugués. que tocan con el dedo la hondura del mensaje evangélico dirigido a los más pobres. Juan Gabriel recuerda con agrado esta imagen fuerte: "Me sucedió llevar el santo Viático a cabañas donde me encontraba al enfermo yaciendo en tierra. por otra parte. lanza la idea de hacer traducir para ellos. En la angustia personal. Hacer que esta Iglesia viva es una gran alegría para los misioneros. diciéndome que ella deseaba ardientemente confesarse y que. sin olvidar un poco de rapé y otros pequeños objetos para eventuales regalos. Mis grandes e innumerables miserias espirituales no dejan lugar para la duda de que no sea de aquéllos de quienes se dice: «Que son abominables y reprobados para toda clase de bien». amén de otras obras de Bossuet que había dejado a su llegada en Macao. que llevan a menudo sobre sí los estigmas de Cristo sufriente. Los medios de combatir tal miseria inhumana son demasiado irrisorios de cara a la amplitud de la llaga. y las "Elevaciones sobre los Misterios". que debe de ser igualmente admirable y eternamente dichosa en el seno mismo de Dios”. de este modo.. y sus ojos descubrirán las piedras preciosas destinadas a componer esta iglesia de inefable belleza. lo que es una iglesia en China: "El suelo desnudo... En el curso del año. hasta despreciable.aquí”. Escribe a su hermano de París estas pocas líneas: “La debilidad de mi temperamento y mis enfermedades de las que tú conoces una parte me hacen físicamente incapaz de grandes trabajos. que “con su débil salud el P. incapaz. yo no soy más un hombre de maravillas en China que en Francia". P. El P. la vida de san Vicente de Paúl. Rameaux. este mismo hombre frágil quien reemplaza al P. encerrado entre cuatro paredes de tierra y cubierto por un tejado de paja. en forma de dosel. en Catus. Juan Aladel: "Mientras misionaba en una cristiandad de Ho-nan. Gonzalves. un antiguo priorato. el misionero sólo puede confiar al Dios de amor. A pesar del trabajo cumplido y de la confianza que tienen en él los superiores.. es decir. . que ofrecen poca esperanza.. Ias hernias no son raras ". bien tan precioso en tierra de misión. no ocultaba las molestias y preocupaciones debidas a su frágil salud: “Comprendo cada más la inutilidad de todos los gustos que he ocasionado a la Congregación. a veces. en septiembre de 1838. No entra. En cambio. es una de las preocupaciones mayores de lo misioneros.este año. tanto el alivio del cuerpo como la salud del alma”.. orgulloso de aquellos azares misteriosos de la Providencia. haciéndose espontáneamente todo a todos. tiene además la inmensa alegría de verlo caminar hacia el bautismo "todo gozoso y doblemente feliz. poseían una salud a toda prueba. Ella dispondrá de otra manera cuando el tiempo de la gran misericordia llegue para esta pobre China". El equipo en que trabaja Juan Gabriel ha conocido muchas pruebas en este sentido.. Juan Gabriel debe rendirse a la evidencia: se habían esforzado en vano por sembrar la Palabra. de haber encontrado. El P. porque tenía mucho de que reponerse. desgraciadamente.. Juan Gabriel. Juan Gabriel hace notar además: "Nuestra escuela no tiene. Juan Bautista Torrette. Baldus ha debido hacer un alto en pleno trabajo y retirarse a la residencia. después de treinta años de apostatar. Juan Gabriel olvida casi sus "enfermedades" como las fiebres frecuentes o también una hernia que le hace sufrir sin tregua. La salud.. Rameaux ha sufrido la pérdida sensible de la vista... juntándose a aquel hombre en su miseria enfermiza. El P. Por ejemplo -escribe. más aspirantes al estado eclesiástico que los niños. De París. él sabe dar gracias a Aquél que puede todo por "las riquezas de su misericordia. Perboyre le ofrece un viejo braguero que lo alivia un poco y le permite volver a andar y hasta correr. por los frutos que pueden recogerse a manos llenas. es decir. Ninguna medicina china llega a ello y. en los designios de la Providencia. que las vocaciones se multipliquen más. y un buen número de catecúmenos prepararse a recibir pronto la misma gracia. no obstante. El P. entre otros. Siempre preocupado por la cosecha en el huerto del Señor. Torrette le ha enviado un braguero que. sino también de ver volver al redil muchas ovejas perdidas hacia mucho tiempo. que reúne su pequeño rebaño disperso. Para aliviarlo. Ella no comprendía entonces el alcance del santo remedio que recibía. En cuanto a Juan Gabriel.anhelaba. cruel en sus cifras. Sólo los cohermanos chinos. no era apropiado. sin duda. sin duda. le di una Medalla de la Inmaculada Concepción. desde hace veinte años que estoy a su cargo. sin embargo. por el momento. De golpe. P. la puse bajo la protección especial de la santisima Virgen. en 29 . pero comenzó desde aquel momento a sentir su virtud. el misionero se apresura a pedir a París el envío gratuito de otros bragueros. hechos al difícil clima y a las no menos chocantes maneras de vivir y de alimentarse. No era vano. con sangre de los cristianos. a la vez. tanto cuanto Dios me soporte en este mundo". hacerse todo a todos. Al despedirla. cuatro o cinco días después estaba cambiada. Curar una hernia viene a ser un viacrucis sin fin. recibe otro que se adapta mejor. Esta enfermedad. un viejo al borde de la tumba que. le ofrece la oportunidad de unirse a un pagano tocado del mismo mal. Alabando la bondad del Dios Amor. la cual durará.. Se confesó de nuevo y recibió la sagrada comunión con los sentimientos más vivos de alegría y de fervor”. regar los campos. y el comprobante está ahí. quema el ídolo al que había quemado tantas veces incienso con su familia".. el P.. “en China. y le aseguro que ahí está una de mis mayores penas. para una gente que había sacrificado toda su vida por el Reino de Dios... hemos sido consolados y edificados no solamente de ver a ocho adultos recibir el bautismo con fervor. Al dar noticias a su Visitador. Juan Gabriel está comiendo con Juan Enrique Baldus y el padre italiano. Mediante el tráfico. por orden del virrey. En aquel período de turbulencias. mientras recupera las fuerzas físicas y espirituales. Su superior inmediato. los cristianos huyen por doquier. pedir refuerzos: "Me parece que. Hasta entonces. tal personal sería el número necesario de obreros en nuestra situación presente". quienes. y la comunidad estalla en múltiples estrellas esparcidas. en medio de todos. Otros cristianos angustiados llegan. residente en Ou-Tchang-Fou. No obstante. A lo sumo. todo sofocado. sin duda. estimando que está todavía muy fatigado. este otoño de 1839. Después. uno de los catequistas presentes en la fiesta se apresura a tranquilizar a los sacerdotes: “Los mandarines debían de dirigirse a otra parte. tiene por cometido arrestar a los misioneros. Wang. la casa ofrece un remanso de paz reconfortante. Rizzolati. Cansado de gastar el cuerpo y el espíritu en la misión. Gabriel acepta y se queda. Rizzolati y Baldus ponen los pies en polvorosa. debe salir de nuevo para el Ho-nan de donde tiene la responsabilidad en cuanto Vicario General. franciscano. se acerca corriendo hacia ellos y advierte a la comunidad reunida de la aproximación de una banda armada que no parece tener buenas intenciones. las misiones se reanudarán según el estado de salud de cada uno. No obstante. las cosas iban mal para los europeos. a sus ojos demasiado descuidados. El contrabando del opio batía. Perboyre podrá hacer algunas visitas acá o acullá. enviado como provicario para visitar las cristiandades del Ho-nan. en la residencia del Houpé con el P Baldus y el paúl chino. 10. Hay que huir de prisa. La tropa. se ofrece para sustituirlo. Juan Gabriel aspira a más descanso. En consecuencia. y escapan a toda velocidad a través del bosque de bambúes.500 fieles afluyen de todos los rincones de la misión hacia la iglesia. La inquietud desaparece entonces y la comida continúa serenamente. se pararían a tornar un refrigerio según su costumbre". Sale por la puerta trasera y se va a esconder en el bosque. preside la celebración en medio de los cantos de acción de gracias y de una demostración ferviente de fe. que había tenido miedo antaño de las amonestaciones de su superior. Rameaux. si fuéramos cinco europeos con cinco chinos para el Houpé y el Ho-nan. y se iría a hacer la cosecha de Dios. Como padece de las piernas. El P. en las inmediaciones de la casa.LA MIES SEGADA Se aproximan las grandes fiestas de la Natividad de María. ciertos mandarines se declararon entonces. y se intentaba por todos los medios hacerlo cesar. La fiesta está en su culmen.este contexto. Llega el 15 de septiembre. a avisar a los misioneros. abiertamente contra los cristianos. Aquel mediodía. y 30 . que desencadena al presente la persecución en la parte norte de su provincia: el Houpé. el P. introducían en el suelo sagrado una "secta extranjera". cuando un cristiano. Los soldados pueden estar allí de un instante a otro. el odio de los chinos contra los occidentales. Terminada la misa.. no puede correr. Los PP. conducida por mandarines. La calma es desgraciadamente de corta duración. las autoridades imperiales lanzaron una persecución contra los cristianos. El P. Todo esto sucedía sin contar con el virrey Tcheo. el P. los ingleses habían atizado. pues. Más de 1. además. en efecto. Juan Gabriel se retrasa echando el cerrojo a la puerta de la iglesia. Víctimas del terror. a su vez. Apoyados por su jerarquía. cada uno se regocija participando fraternalmente en los numerosos ágapes que ofrecen las aportaciones de todos. de pleno sobre las costas de China. Rizzolati. El misionero ora. aquellos evadidos vuelven a encontrar al P. es injuriado y golpeado hasta que indica el escondite de los misioneros. Todo transcurre muy rápido. se roba. Bien que mal. los soldados lo cargan de cadenas en el cuello. se cruza con un cristiano que quería enterarse de la situación. Lo empujan atropellándolo para hacerlo correr durante cuatro largos kilómetros. fatigado por la huida. Al límite de sus fuerzas. Llegada la noche. Los mandarines y los soldados han rodeado la casa y las alturas vecinas. El grupo armado ha logrado capturar al misionero. desgarrando el cielo y traspasando las cumbres para llegar a los oídos de los cristianos escondidos en los alrededores. no hay ya nadie en la residencia. que ofrece más seguridad. En la mañana del 17 de septiembre. cuatro cristianos logran escaparse. Se saquea. en traje de paisano. El furor se apodera del grupo. que había logrado esquivar a sus perseguidores. Juan Gabriel se recorta entonces un poco la barba para parecer menos europeo. Los supervivientes son llevados como prisioneros. Mediante la amenaza. Su alegría salvaje se hace oír como un eco. Aprovechando el sueño de los carceleros. Después de dejar casi desnudo a su prisionero francés. y se pone a guiar a los soldados hacia el lugar donde se oculta Juan Gabriel que no puede huir. Los soldados echan fuera también a algunos cristianos diseminados aquí y allí. obtuvieron de los jóvenes cristianos los nombres de los lugares donde residían los misioneros. a quien cuentan los dolorosos acontecimientos de la jornada pasada. que reside a unos pasos de allí. intervienen y lo disuaden por la fuerza. Los fugitivos están a dos kilómetros de la residencia saqueada. el señor Hang. de este modo. padre de otro catequista. pero los enviados del mandarín. Se los maltrata. Al nacer el alba del día siguiente. Juan Gabriel es encerrado en una habitación por la noche. El P. Hace etapa en una posada llevada por un pagano. Un catequista intenta interponerse. derriban con vehemencia la puerta de la iglesia. lo atan y lo insultan. los esbirros. donde se encontraban ya otros cristianos cautivos. El misionero lo disuade: "Es demasiado peligroso". En su huida. servirá por el momento de escondite. El espeso bosque. se produce accidentalmente un incendio. porque el bosque se detiene justo al borde de un acantilado abrupto e infranqueable. se derrumba bajo las amenazas. Baldus había escapado también de la 31 . Contrariados los soldados. Los hombres de los mandarines le echan mano. Se rehace allí un momento. y que no han tenido tiempo de huir. Se le arresta. pero sus pies y sus manos permanecen sólidamente atados. La tropa se para al fin. pero ello no impide a la banda armada degollar el ganado y darse un festín con las provisiones de la comunidad. escondidos o todavía en oración. ambos se van juntos a unos centenares de metros más lejos. Cuando la escolta armada llega a las puertas de la misión. Perboyre decide llegar a la casa de uno de sus catequistas. hay que encontrar un refugio más seguro. y algunos mueren bajo los golpes. Juan Gabriel se abre camino a través de las ramas altas de los cortantes bambúes. Ly-Tsou-Hoa. bordeado de un impenetrable bambudal. Es entonces cuando arrestan a un catequista llamado Kouan-Lao-San. con un anciano.organizaron una caza del hombre. Durante el saqueo de la residencia. no antes de haber intentado sin éxito librar de las cadenas a su misionero. se llevan los objetos sagrados como prueba. preparaban una expedición militar pura arrestarlos. y. Aterrado. luego. el P. La jornada pasa sosegadamente en aquel refugio afortunado. a su vez. en las manos y en los pies. a la vivienda de un primo. el mandarín da orden de conducir a los prisioneros a la subprefectura de KouTcheng-Hsien. haber dejado largarse a su compañero. el desafortunado misionero es arrastrado ante la autoridad local. Se le impone entonces el régimen común de los detenidos. Se le manda renegar de su fe y él rehúsa. completamente debilitados por las torturas y las dos noches de insomnio ya vividas. Los interrogatorios se asemejan. y ante unos sufrimientos indecibles. Sucio. con destino a Ou-TchangFou. Se hace rápidamente. el paúl había confiado el provicario italiano a un catequista conocido. recupera su ropa. Ahora bien. Pide ver al desgraciado prisionero. En ruta. un taburete de madera para sentarse. Se trata. Así. pagano. de manera que sus pies no puedan descansar en el suelo. lo cuelgan por los brazos. que se dispone también a subir con sus compañeros a una barca. Un largo y penoso viaje de más de doce horas. por la mañana. al que se le atan los pies. y el mandarín hace incluso que le quiten sus pesadas cadenas. Reconoce su denominación china: Toung-Wen-Siao. Se le ponen de nuevo sus cadenas para hacerle saber oficialmente su arresto. un notable del pueblo. sin embargo. Sienten. Para aliviarlo un poco. ironía de la suerte. Los soldados vuelven a llevar a Juan Gabriel a la posada. Rizzolati. Le está igualmente prohibido cortarse el pelo y afeitarse la barba. no obstante. Declarado culpable. los famosos "satélites". y él responde con coraje cuando no hay riesgos de denuncia para sus amigos cristianos. Al día siguiente. A petición propia. a marchas forzadas. Dos esbirros son encargados de esta misión. se le otorga. de los soldados y de los enviados de los mandarines. El mandarín le recuerda la prohibición para todo europeo. notificando la captura de prisioneros. Tras una etapa de noche. Juan Gabriel es preguntado sobre su identidad. Sin embargo. Juan Gabriel va a comparecer ante dos tribunales. aguarda a Juan Gabriel y a sus compañeros de miseria. está en aquel momento en aquella misma posada. Ante el estado lamentable del misionero. Un extranjero ha sido arrestado. Prisionero. El mandarín de Kou-tcheng estaba en el pueblo de Kouanintang donde se hallaba la posada. Se lo viste con una larga camisa roja y se le encadena de pies y manos.soldadesca. Se lo fuerza a arrodillarse. se declara europeo. a la vez. y le notifica entonces el delito de que se le acusa: ha entrado ilegalmente en China para propagar una religión no reconocida. solicita del mandarín autorización para alquilar un palanquín donde transportar al desgraciado. que se hacía llamar Ly. desconfiando por razón de las cuatro evasiones anteriores. Las órdenes no tardan en llegar. hacen una parada en una posada y se jactan de haber echado mano a un extranjero que había tomado el nombre de Toung-Wen-Siao. del P. ese Ly. a fin de limitar los desplazamientos y los gestos. Antes de huir solo. Los mandarines envían al virrey de Ou-Tchang-Fou un acta oficial. y. militar uno y civil el otro. debía pasar toda la noche. Además. de poner pie en aquel territorio imperial. tirado por su coleta. hay que definir el delito de inculpación. una gruesa cadena le rodea el cuello. el tribunal militar lo hace conducir a la prisión donde permanece más de un mes. con la ropa hecha jirones. en un poste de la hospedería. en efecto. el cortejo de detenidos y encadenados llega la tarde del 19 de septiembre a la subprefectura. El virrey recuerda a sus mandarines la ley del país: pena de muerte para todo europeo sorprendido dentro del Imperio. con quien se podía contar. que se ha calificado allí de secta. sacerdote de Jesucristo y enviado a China para propagar esta religión. atado. comprobando que sus pies y sus manos estaban horriblemente hinchados por las cadenas demasiado apretadas. pena de muerte para todo 32 . que no ha permitido a Juan Gabriel recuperar algunas fuerzas. Con aire de ironía. los carceleros traban durante la noche los pies de los malhechores a un cepo de madera para evitar toda evasión. sufriente y miserable. Luego. el tiempo para que compareciera cuatro veces delante de diversos tribunales. con una cierta mofa. reprende con rudeza al misionero: "¿Qué puede ganar adorando a su Dios?" La respuesta es inmediata: “ La salvación de mi alma. El presidente le reprocha haber hecho un largo viaje para venir a China. van a ser sometidos a tortura a la espera de su sentencia. 11. afirma sin temblar: "Yo sólo me preocupo de mi alma y no de mi cuerpo: no terno en absoluto. como vosotros. incluso si se trata de un pueblo entero. Viendo que no tenía ya nada que esperar del prisionero. contesta entonces el sacerdote. Así es como se ordena el traspaso de Juan Gabriel hasta la prefectura de SiangYang-Fou. a fin de que ellos conozcan al verdadero Dios. Agresivo. añade: "¿Por qué ese Dios no vino en vuestro socorro cuando se os arrestó?" "Dios.predicador europeo o chino de esa "secta impía". ante las intimidaciones de tortura. Juan Gabriel comparecía ante el tribunal del departamento. replica:c “¡Insensato! ¿Ha visto alguna vez el paraíso?" Y.LA MUELA DEL MARTIRIO La primera comparecencia tiene lugar delante del tribunal de la ciudad. condenados. al contrario. Previsores. Dos días de marcha son necesarios para llegar allá. estando trabados entre sí por una larga barra de hierro. A su llegada. ¡he ahí el infierno!” . donde debe ser juzgado de nuevo por una autoridad superior. No se sorprende del rechazo categórico del sacerdote. cayendo sobre las espaldas o el pecho. y destierro para todo adepto cristiano. En tales condiciones. atado de pies y manos. los detenidos son separados y repartidos por diversos lugares de encarcelación. y posean la felicidad en el cielo". permite estos su sufrimientos en este mundo. o llevar una vida pobre. Entonces. Poniendo en práctica aquella 33 . que se llama cristianismo. Y. ellos no pueden avanzar sino a cortos pasos. con un sufrimiento intolerable. por su culpa. Éste está presidido por el mandarín gobernador que dirige una vez más al misionero las preguntas a las que ha respondido antes. Casi treinta kilómetros separan el lugar donde se halla encarcelado del pueblo donde va a ser juzgado. a su calabozo. el mandarín de aquel segundo tribunal llama inmediatamente al misionero a pisotear un crucifijo puesto en tierra. en tono burlón. a fin de que podamos merecer la felicidad en el cielo". Juan Gabriel ha sido mantenido prisionero durante casi un mes. sentado como un príncipe. El misionero se encuentra en una prisión que se asemeja a una infecta cloaca en la que se amontonan hombres encadenados y desfigurados. en una de esas siniestras celdas. el mandarín. el Tchefou. ¡he ahí el paraíso! Ser. Al oír esta réplica. se dirige a todos los prisioneros cristianos inmóviles: "Yo voy a enseñaros lo que es el paraíso y lo que es el infierno: ser colmado en esta vida de riquezas y de honores. recrimina acerba y duramente a los europeos que se introducen en China para enriquecerse a costa del Imperio. Un proceso largo y doloroso se instruye para triturar al hombre de Dios bajo la muela de la injusticia y del sufrimiento. el cielo adonde espero subir después de mi muerte". el juez irritado redarguye que numerosos chinos. los castigos con que me amenaza". se le envía. Luego. Los prisioneros permanecen atados y con cadenas al cuello. y no insiste. Al día siguiente.. cuando habría debido quedarse en Europa para predicar su religión: "Nuestra religión debe ser enseñada a todas las naciones v propagada incluso entre los chinos. él mismo. ¿El infierno? Es estar por tierra. y sus mejillas están espantosamente tumefactas. sufriendo como vosotros". fraternales. encadenados y maltratados como estáis?" Extremando la lógica de su pensamiento.. son presentados entonces los objetos de culto y las vestiduras litúrgicas. con voz a la vez sarcástica y violenta. exasperado por no conseguir nada. Pero el mandarín. el terrible mandarín. Dos semanas más tarde.teoría materialista. La sangre le brota de la boca. Tal suplicio. que sigue encadenado a la columna. lo que se apresura a desmentir enérgicamente el prisionero. Toung-Wen-Siao. en sus correrías. declara Juan Gabriel. en manera alguna. recibe cuarenta latigazos asestados con odio. bajo la violencia de los golpes. que llamaban Hangtsé. Como pruebas. los sacerdotes se hacen acompañar por hombres. el mandarín le oye afirmar: "¡Puede estar bien seguro de que jamás renunciaré a mi fe!" Entonces. insinuando que las vírgenes religiosas cristianas viven de forma inmoral con los sacerdotes. en interminables tormentos. comprobando de nuevo que no obtendría nada de aquel misionero colmado de una evidente fuerza interior. a sus discursos y supercherías?" Y persiste todavía interrogando a sus prisioneros que no pueden responder: "¿Hay un paraíso para él? ¿No es un infierno para vosotros? ¿De rodillas. Dicho esto. lo devuelven a la prisión. claro está. El mandarín. para hacerle abjurar la religión cristiana. pero los discursos que allí se oyen no son. en adelante. Gan (Juan Enrique Baldus) y. antes de regresar penosamente a la prisión de Siang-Yang-Fou. hace descubrir las piernas del misionero. afirmando que. Una última confrontación entre el mandarín y el misionero tiene lugar en Siang-YangFou. perfectamente informado. El mandarín prosigue su interrogatorio. concluye orgullosamente repitiendo lo que el mandarín precedente ya había expresado: "¿El paraíso? Yo os lo voy a decir: es estar sentado en un trono como yo. luego. Fue la más dolorosa y cruel de todas. Juan Gabriel responde escuetamente: "Ignoro dónde están”. Le tiran entonces al sacerdote del cabello y lo atan a una de las numerosas columnas de la sala. impedido por sus cadenas de hierro. El sacerdote. ejerciendo presión sobre su coleta. hace colgar al sacerdote por los dos pulgares y su trenza de cabellos a una especie de viga colocada por encima de su cabeza. a la vista de todos los prisioneros que no pueden ocultar su dolor y sus lágrimas. convierte al prisionero en un juguete desarticulado en manos de los soldados que sacuden la cabeza del desgraciado. 34 . como una iglesia de tres naves. y duró una larga media jornada.. bajo una lluvia de sarcasmos e insultos. Rameaux). ¿Daríais crédito. lo hacen arrodillarse sobre cadenas. La sala de la audiencia es espaciosa. se dirige a los otros detenidos cristianos. amurallados en un silencio de miedo: "El infierno y el paraíso que os han predicado no existen". Sin la más mínima piedad ante aquel espectáculo. El pobre hombre permanece así. Juan Gabriel es citado ante el Tribunal Supremo de Finanzas. Insistiendo más. le ordena que no mienta porque sabe que tres europeos están presentes en el sector: Mou-Tao-Yen (el P. El juez comienza por preguntar al prisionero si sabe de otros sacerdotes europeos: "Yo he venido solo a la región”. O aún: "Ved su figura. y le ordena que se arrodille ante todos sobre unas cadenas puestas en tierra. El juez pretende que aquellos ornamentos sirven para hacerse adorar por el pueblo cristiano. el Leangtao. el juez inicuo ordena azotarlo con una gruesa correa. de lo que se defiende Juan Gabriel: "Yo no me propongo otro fin que rendir a Dios con los cristianos el culto que le es debido". durante más de cuatro horas. tras el arresto de que fueron víctimas Juan Gabriel y su pequeño rebaño. El largo calvario de Siang-Yang-Fou duró poco más de un mes. Es así como. es llevado de nuevo. los desdichados prisioneros cristianos fueron encaminados a la capital de la provincia: la ciudad de Ou-Tchang-Fou. rechazan tal impostura. Ahora. deben ser castigados con el destierro. algo más tarde. con simples multas o algunas palizas. arrancar todo el grano sembrado y hacerlo sangrar a muerte. que no tienen en absoluto derecho a entrar en el territorio.. El P. una vez juzgados. sin tocar la del alma. y a denunciar a sus cohermanos. a arrasar el campo del Evangelio y a dejar crecer la cizaña. pendiente de la viga hasta la caída de la noche. disfrazado de mercader. porque su cargo puede serles quitado o no renovado. Los mandarines están encargados de proceder al arresto de los cristianos. que lo que su sacerdote acaba de soportar está directamente ligado a su negativa a renegar de su fe. claro está. Esta vez. dirá: "Lo que he sufrido en Siang-Yang-Fou era directamente por la religión". Juan Gabriel se ponga a escribir. Llegada la noche. los mandarines se mostraban muy circunspectos con los arrestos. se refugiaron en barcos-viviendas pertenecientes a cristianos y dispuestos para la huida. vivir clandestinamente. el virrey da orden expresa de dirigir a los cristianos ya arrestados a Ou-Tchang-Fou. sin embargo. y se deja a Juan Gabriel en la incapacidad de hablar o de alimentarse. Éstos son devueltos en seguida a sus celdas. no hay ninguna vacilación posible. Algunos han abjurado bajo los golpes. dispersos los sacerdotes. a su celda. en su alma y en su conciencia. se desterró de Ou-Tchang-Fou. si no es la compasión de sus hermanos cristianos quienes saben ahora. Se contentaban. o incluso. OuTchang-Fou. Los dignatarios se deciden a obedecer las órdenes: el virrey está muy determinado a arrancar las espigas de la mies cristiana. apuntando a los sacerdotes y a los catequistas. pues. Rizzolati. La pesada muela del martirio había comenzado su trabajo de rotura del cuerpo. para ser allí encarcelados y juzgados por la instancia superior. aunque se deja de buen grado una cierta libertad a las mujeres. otros tenían aún algún temor secreto a detener a todo un pueblo. que. Los cristianos tuvieron que huir. dejando todos sus bienes en el lugar. si el gong de la urgencia sonara a toque de caza.LA CIZAÑA Y EL BUEN GRANO La persecución ha estallado en la provincia de Kou-Tcheng bajo orden del virrey. esconderse. Así es como. pero muchos. Pero los cristianos se respaldan y se advierten mutuamente de cara a ese viento de muerte que sopla sobre el territorio. la persecución se extendió a todo el Houpé. 12. En cuanto a loa misioneros. porque algunos tenían amigos o parientes cristianos.El mandarín deja la sala de la audiencia con sus soldados. empujados por el ejemplo patético que tienen ante sus ojos. cambiar de provincia. De ordinario. Cuando. Todos lo saben. muy a menudo. El desafortunado grupo 35 . que podían pasar más fácilmente desapercibidos. Al final del mes de noviembre. Le quedaba a las autoridades locales purificar el suelo imperial de aquella "secta impía". son merecedores de la pena de muerte. han podido escapar de las garras de los mandarines. EL virrey ordena pesquisas. durante tres semanas. Las familias se encuentran. Los paúles chinos. después de hacer torturar a la treintena de prisioneros cristianos. en la prisión. Hanyangiou y. en las tres ciudades adyacentes: Hankow. sin que sea objeto de ningún cuidado. divididas en la adversidad. pues. todo manchado de sangre ya seca. Los carceleros. se conmueven. Tras una rápida comparecencia ante un mandarín de segundo orden. hacen que Juan Gabriel sirva de ejemplo para sembrar el pánico entre los misioneros europeos. apenas tienen la posibilidad de mantenerse limpios porque. ante su rostro siempre sereno y dulce. Los malhechores duermen en la misma humedad penetrante del suelo. Mediante esta injusta medida. al mismo tiempo. Uno de los presentes se arrodilla de pronto y pide perdón por haber apostatado bajo los efectos de la tortura. que Juan Gabriel deba comprobar que uno de los dedos de su pie se pudre y la piel de sus piernas se seca. en la barca. Un clamor de 36 . reservado a los grandes criminales. traza sobre el arrepentido el signo de la cruz. tan profundo es el dolor. depositario de la misericordia de Cristo. caminan penosamente bajo el peso de sus cadenas. prenda de reconciliación y del amor de Dios recobrado. los ojos bajos. Las barras que los traban entre sí les impiden considerablemente sus movimientos que se vuelven lentos e inseguros. Se llamaba Fam-Tsé-Sin. hace sobre ellos un gesto de bendición y los invita a ser fuertes en su debilidad. que desgarran la piel de los pies y de las manos. parecía como perdido en una profunda meditación”. Uno de los compañeros de cautividad dirá más tarde del misionero: "Yo lo vi de lejos. sin poder evitar las diversas infecciones que atacan sus pies debilitados. También ellos. el más horrible de todos. Múltiples insectos y escorpiones pululan en abundancia por el suelo y las paredes grises y húmedas. Los prisioneros. la reconciliación. pero ya no renegará de su fe. de pie. será sometido de nuevo a la tortura. reintegrado así a la comunión eclesial. la basura cubre el suelo de toda la prisión. permanecen sólidamente encadenados unos con otros. tenidos por insensibles. vestidos con el sayo rojo de los culpables. así amontonados. Aquel hombre.toma entonces sitio dentro de unas barcas sobre el río Hankian para remontar hasta la metrópoli. El misionero francés tendrá su sitio al lado del basurero. en medio de los satélites. Los prisioneros. Todos los cautivos conservan sus cadenas. Rizzolati. torturado en su carne. obligándolos a permanecer de pie. Los soldados los reagrupan primeramente en una posada. permanecerán firmes en su fe y serán desterrados a otra provincia. hacen una descripción deplorable de la escena. Una noche. éste aprovecha la ocasión para exhortarlos a mantenerse firmes en su fe. para colmo de desdichas. sin embargo. periplo en cuyo transcurso los guardianes privan a veces a sus prisioneros de alimento. Están sucios y miserables con su cabellera hirsuta y su barba salvaje. condenado inicuamente por haber anunciado la Buena Noticia del Amor del Padre. Su rostro parece no expresar ya nada. El triste cortejo llega a Ou-Tchang-Fou al comienzo de diciembre. Unos. Los olores provocados por su podredumbre impiden una respiración normal y sana. Él está ahora en comunión con los sufrimientos de Cristo. De ahí. El penoso viaje dura nueve días. y nadie puede rebullirse sin infligir un sufrimiento a su vecino y despertar a la chusma. Al dejarlos encadenados en torno al misionero. los soldados conducen a Juan Gabriel hasta la prisión del Tribunal Supremo de los Crímenes. De todos modos. a su vez. Inútil gritar su cólera en aquel lugar sin nombre: todo lo que le queda a Juan Gabriel es la oración y la meditación. los mandarines expresan abiertamente su deseo de deshonrar la religión cristiana y. El misionero. Cristianos clandestinos se encuentran próximos al paso de la tropa.figura apacible y sonriente. deciden liberar sus pies de las infernales trabas. Juan Gabriel. la . que han sido enviados por el P. Juan Gabriel es aislado en otra barca. Otros tres siguen su ejemplo y piden. encargado de registrar la identidad de los prisioneros. más tarde. El misionero ha venido allí para: "hacer. la punta de lanza de un magnífico movimiento de apoyo a los prisioneros. En esta ocasión. los primeros detalles de la persecución que devasta el Houpé.. La segunda cuestión del mandarín quiere ser muy clara. El mandarín parece apiadarse de su suerte. Juan Bautista Étienne. Durante su internamiento en Ou-Tchang-Fou. está acompañado de otros prisioneros cristianos. dirá más tarde: "Los cristianos y y yo no nos atrevíamos a pegar 37 .golpeadlo.conocer a Dios y no para amasar fortuna o buscar honores entre los hombres". El P. Deja en la región. va a emprender su nueva misión en el Kiangsi y en el Tchekiang. ¿lo ha visto?". Cada vez que cede. pero nada en sus respuestas pudo dar pie para semejante hipótesis. que acaba de saber su elevación al episcopado a su paso por Hankow. El arresto de Juan Gabriel es en aquel entonces conocido de todos. y que ha puesto en cadenas al P Perboyre. el martirio. mal de su agrado. El P. Pregunta al prisionero si no tiene pesar de lo que ahora le sucede. a ejemplo de la Iglesia primitiva. pero por compasión para con sus pobres piernas.. un madero. asegura Juan Gabriel. los fuerza a cejar y. bajo la dirección del P. sin duda. queda conmovido por la crueldad del destino. que ya lo practicaba. De un número superior a sesenta. Aquel servicio que yo quise rendirle. y. El primero de aquellos tribunales es el Tribunal Supremo de Justicia. todo esto. Tien Sin Ly Siang.recriminaciones. Rizzolati que viene a ser. Todo pesar expresado por el misionero hubiera sido interpretado por el mandarín como una negación de su fe. todavía en la clandestinidad. El criado de la misión. la mayoría ha renegado de la fe. Tal favor me hubiera. Menos de una semana más tarde. por haberlo oído de boca de los testigos ocultos aquí y allí."'. y no hubiese engañado por ella a los chinos".y. tan solo diez han confesado constantemente su fe en Jesucristo". a los paúles chinos. "¡Injuriadlo . en marzo de 1840. si no estuviese imbuido de esa falsa doctrina. ha emitido un juicio un tanto severo respecto a ellos: "Entre los cristianos. El presidente comienza por hacer precisar a Juan Gabriel su razón de estar en China. Aparece en ellos. Con una cierta desolación en el corazón. que administraba. El mandarín hace traer al momento un misal y se burla de la palabra del sacerdote: "Su palabra no quiere decir nada v sería digno de piedad. Yang. "Nuestros libros santos. sin duda. "Pero a ese Dios a quien adora. Se sabía. a reponer las ataduras. los soldados se arrojan sobre él y lo muelen a golpes. Dios no me juzgó digno de él". Juan Gabriel es convocado cuatro veces ante los tribunales. Éste responde que tal pensamiento no es el suyo y que lo que le acaece a su cuerpo es para él “un gran honor". que proviene de los otros detenidos y un ruego del interesado de no ser favorecido. lo que había vivido el pobre misionero y sus desdichados compañeros de galera. Persuadido de su victoria. indudablemente caído en suerte. Me encontraba entonces en nuestras misiones del Honan. comparece por segunda vez. en cierto modo. nos ofrecen la verdad tanto como nuestros ojos". ironiza él entonces. comprobando que sus sufrimientos son debidos a la predicación de aquel prisionero extranjero. con su sayo rojo de condenado y las cadenas en pies y manos. paúl chino. que llaman el Ganzafou. de sostenerlos para que su fe no vacile. Perboyre quien debía ir allá. Escribirá al P. le valdrá. estas palabras llenas de dolor: "Habrá recibido. que vendrá a ver más tarde a Juan Gabriel en su prisión. bien sea por el frío o por el cansancio. con los brazos en alto. Era el P. y la tristeza de no volver a ver a Juan Gabriel. les ordena. El tal "Socorro a los Prisioneros" trata bien que mal de visitar a los detenidos cristianos. Yo no tuve la suerte de hallarme expuesto a la misma suerte en aquel momento. el presidente del tribunal condena a Juan Gabriel a arrodillarse y a sostener durante largas horas. había tomado la resolución de hacer yo mismo aquella campaña. Rameaux. con la idea de conservarlo como reliquia. y pedirán públicamente perdón. y comienzan entonces a hacerlo andar hacia el crucifijo. Yo simulé el gesto de hacerlo. la lleva a su rostro en lágrimas y a sus labios tumefactos y lo abraza con amor. toma la cruz. . Tien-Sin-Ly-Siang. de rodillas. lo intima a andar por encima. El mandarín lanza entonces al suelo quince fichas. un crucifijo. En aquel comienzo del mes de enero de 1840. Comienza por interrogar a Juan Gabriel sobre las localidades que él ha visitado. dando muestra de plegarme a la orden del mandarín. y. El rigor de aquel alto personaje es demasiado conocido para que los mandarines no lo respeten. se arrodilla ante el Cristo en el suelo. renegar de ella públicamente. algunos reconocerán su falta. y que morirá en prisión. algunos prisioneros se sienten constreñidos a golpear al sacerdote que. El interrogador vuelve a tomar la palabra a fin de saber si los misioneros administran un remedio a los cristianos. me ordenó tirarlo.. El mandarín. lo hace llevar de nuevo a su repugnante celda. ordenando así a sus esbirros infligir al desdichado. Trabajo perdido. frente a la adversidad bárbara de ciertos mandarines y de los soldados orgullosos de su dominio. impidiéndoles así apostatar. Bajo el miedo y la amenaza. Los soldados levantan al desdichado. durante un mes. una orden del virrey había llegado al mandarín. presidente de aquel tribunal. se llama al misionero a comparecer una vez más. y medita concretamente en la Pasión de Cristo. Se acuerda de la traición de Judas y de la misericordia de Jesús para con él. No obstante. Juan Gabriel se libera de sus carceleros. el mandarín. considerando al sacerdote al límite de sus fuerzas. Se trataba de hacer confesar al sacerdote francés que había entrado ilegalmente en el territorio del Imperio Celeste. al suelo. Por aquella "mala" respuesta. y que debía. le dará un indicio sobre la presencia de otros misioneros y catequistas. quince correazos. De rodillas junto a él. El P. que recibe en castigo diez correazos. piensa. Se trata ahora. impotente para sacar ya nada de él por el momento. juez me ordenó arrancarle los cabellos. Juan Gabriel vuelve a ver también a sus amigos que han guardado la fe..a nuestro misionero. “como tú quieras». mientras tanto. encolerizado. Entonces. que había propagado allí una religión extranjera. El. "Ninguno".. del Tribunal Supremo de los Crímenes. el cabeza de la familia cristiana que le dio asilo la noche de su huida alocada. Tien Sin Ly Siang acabará por renegar de su fe. el sacerdote es arrojado al suelo. El mandarín muestra a continuación el santo óleo: "¿No es éste el remedio?" Juan Gabriel levanta de nuevo la cabeza y exclama sin más detalles: "No es un remedio". agotado por los malos tratos y el cansancio. Ninguno de nosotros pegó al misionero”. en consecuencia. En una súbita recuperación de vigor. Cuando sean puestos en libertad. me dijo. 38 . ante un tribunal. encuentra todavía la fuerza interior para rogar por ellos. que lo traban. Perboyre asume todo el alcance de su sufrimiento por la fe. El juez. pedí al venerable siervo de Dios en voz baja permiso para tomar uno de ellos. posé la mano sobre la cabeza del misionero y tomé uno de sus cabellos que escondí al punto en mi manga. luego la del anciano Ly-Tse-Ling. El presidente del tribunal va a dedicarse sutilmente a esta tarea. En cuanto a Juan Gabriel. Al mismo tiempo. el prisionero no dice palabra. Esto.. y recibe sobre sus nalgas desnudas veinte golpes de bambú que lo hacen gritar de dolor. Le parece comulgar como nunca con el misterio del don perfecto de la vida por amor al Padre. Algún tiempo antes. responde el sacerdote. Vuelve a ver en su alma las defecciones de sus hermanos cristianos: la de su propio sirviente. El virrey lograría así arrojar el descrédito y la vergüenza sobre el cristianismo. a pesar de las pesadas cadena. porque querían acusarlo de faltas de mala conducta que se oponían a su doctrina. un soldado arroja con desprecio. Llamado junto a los moribundos. El mandarín lo hace. les saca los ojos”. dice: “Usted es un criminal y un desvergonzado. las débiles fuerzas que le quedan. El mandarín no se da por vencido. Pero también aquí. cuando su ceguera le quita la vista del buen grano. Los soldados le abren los párpados para forzarlo a mirar al presidente: "Entonces. de manera que se pueda balancear su cabeza de derecha a izquierda. porque el juez sigue persuadido del subterfugio. ¿confiesa usted ahora?" Con firmeza. se esfuerzan en hacerle pisotear el crucifijo. piensa él. deja actuar sin decir palabra. Tomando de nuevo en sus manos el santo óleo. y ordena para castigarlo por aquella negativa. sin más dilación. 39 . se pone a insinuar sobre el crucifijo gestos obscenos que hacen entonces gritar de nuevo y aún más fuerte al sacerdote torturado. el mandarín marca con su sello. al fin.. desnudar de nuevo al nivel de las piernas y ordena que le asesten treinta golpes de fusta de bambú sobre los muslos. medio muerto en el suelo frío de la sala de de audiencia. que llegó a verlo poco después. con los brazos en alto. juzgada insolente. El P. Juan Gabriel no tiene ya fuerza para enderezar su cabeza ni abrir sus ojos. Uno de los verdugos.. y se descubre el braguero que lo protege de la hernia: "¡He aquí el instrumento de su arte mágica! ".Volviendo de su sorpresa. Reuniendo. Juan Gabriel se ve en la obligación de explicarle las razones de usar aquel braguero. son ustedes quienes pisotean la cruz!" El presidente mira la escena con cierto cinismo. Juan Gabriel. Los europeos sacan los ojos a los moribundos". entonces. En esto. se organiza una nueva comparecencia ante el Tribunal Supremo de los Crímenes. su fracaso es manifiesto. los sicarios del mandarín lo agarran de nuevo. pretexto para aterrorizarlo y reavivar sus heridas todavía muy dolorosas. Nada puede quebrantar al hombre interior que habita ahora en el prisionero. Se le pregunta si reconoce. una vez más. el flagelado responde con una negativa que le vale otros diez golpes de fusta. Pero la espantosa injuria infligida por el mandarín crucifijo. Aquella respuesta. pero en vano. De manera inexorable. según los ritos chinos. y. agotado. que sea atado por los pulgares a una columna. he ahí lo que causa mi dolor . luego asperja su cabeza para conjurar la mala suerte. Y amenazándole de nuevo: “¡Le haré sufrir otros tormentos si no lo confiesa!" El prisionero guarda silencio. vale al acusado diez golpes de roten. Juan Gabriel se pone a gritar con voz segura: “¡Yo no quiero! No soy yo. recibe esta confidencia: "los sufrimientos que soporto en mi cuerpo son poca cosa. furioso. El catequista Fong. Trata entonces al sacerdote de mago y. a hierro rusiente. bajo una lluvia de invectivas. Se efectúa un reconocimiento del prisionero. lo hace arrastrar a la prisión. Perboyre no quiere ni enterarse de tales acusaciones y permanece amurallado en su silencio. reanuda su interminable interrogatorio. ¿Tendría aquel hombre algún sortilegio para resistir a todas aquellas torturas sin confesar? Tal es la impresión que tiene ahora la gente del tribunal frente a una tan gran resistencia. Aquí está. manda degollar un perro para hacer beber la sangre al acusado. las nalgas del prisionero yacente. responde Juan Gabriel. El mandarín lo acusa entonces de mala conducta con los cristianos. luego.y lo que me es intolerable”.. A los dos días. Ante la protesta de Juan Gabriel. los crímenes que le son imputados.. El mandarín furioso hace flagelar de nuevo sus nalgas ensangrentadas con otros quince golpes de bambú. el daño que hará quebrar al prisionero. exclama triunfante el mandarín. Está persuadido de ganar aquel combate contra aquello que cree ser la cizaña. tirándole de los cabellos. "No tengo nada que añadir a lo que he dicho". prosigue: "Usted miente. empleaban sólo hombres para el servicio doméstico. Perboyre se encomendó en voz alta a nuestras oraciones". incluso quedó lleno de admiración por ella. cubierta de sangre. Existe otro test para comprobar los actos de conducta inmoral de un individuo. lo que trae como consecuencia una nueva paliza con un grueso bambú. hace mostrar los ornamentos requisados en el saqueo de la residencia de la misión. Juan Gabriel. El mandarín del tribunal decide aplicarlo en Juan Gabriel para probar así. aquellas que. permanecían vírgenes por la fe. A pesar de aquel fracaso. Ningún signo de vida emana ya del supliciado. Con esta mira. y el mandarín que la interrogó. provocando horribles sufrimientos. Se les había preguntado muchas veces. El pobre hombre ha perdido toda capacidad de expresarse. Yang. Ante la negativa constante a reconocer una falta que no ha cometido. Mediante una pequeña propina dada a los carceleros. de vez en cuando. ordenan a los tres visitantes que dejen la prisión. porque los misioneros. Esta vez. llega sin problema hasta él para recibir su confesión. El mandarín deja la sala del tribunal. se apresura a tomar medidas para socorrer al infortunado. reconociéndolos culpables de propasarse con las mujeres cristianas y. Pregunta al condenado: “¿De quién son y para qué sirven?" El sacerdote sólo puede responder: "Son los míos y me sirven en las fiestas para los sacrificios en honor del Dios verdadero". demasiado desconfiados. Informado de esta santa demanda. ironiza todavía el mandarín ante aquel espectáculo bárbaro. Juan Gabriel se enfrenta de nuevo a aquel juez inicuo que le había infligido tantos sufrimientos. todo conmovido. quienes. delante de todos. pues. debe hacerse pasar por un mercader que conoce al detenido. Una vez más. de enderezarse y de abrir los ojos. que no ha guardado su castidad. Fue. incluso había tenido que sufrir un test de virginidad al uso del país. Una vieja mujer cristiana logra reconocer al misionero de rostro desfigurado por los numerosos golpes y chorreando sangre. Sólo es ya una piltrafa humana. Los soldados. Rizzolati le envía rápidamente al joven P. ante médicos competentes. el prisionero guarda silencio. al que Juan Gabriel no conoce. el mandarín está muy decidido a obtener confesiones de conducta inmoral. El P.El mandarín tenía por misión arrojar el oprobio sobre los misioneros. El catequista Andrés Fong sorprende a los guardianes ocupados en limpiar su ropa en jirones. Se comprobó que -aparte de las de más edad que. el P. considerando muy próxima su última hora. en particular. si estaban al servicio de los misioneros. fieles a su voto de castidad. en un momento de lucidez. prudentes. además. 40 . Una de aquellas mujeres era Ana Kao. los soldados lo golpean con una gruesa rama de bambú que desgarra la piel de la espalda. "Está usted bien ahora?. luego. y es preciso transportar al sacerdote en una cesta de roten para llevarlo de nuevo a la prisión. corre a contar aquella visión insoportable al P. "La virgen Ana Kuo ¿es vuestra criada?". "Eso es una farsa. El desdichado es suspendido de una columna. quien. Se le ponen sobre la cabeza unas hierbas. a dos dedos de la muerte. imposible tacharla de conducta inmoral. tomaban la ropa blanca de sus sacerdotes para lavarla-. el paúl que llega con dos compañeros cristianos. los mandarines mantenían prisioneras en sus calabozos a vírgenes cristianas. Yang precisará más tarde que: "Al separarnos de él. En un impulso de compasión. pide ver a un sacerdote. Para acercarse a la prisión. La conversación es rápida. que había proclamado su adhesión a Cristo. Rizzolati. no había criadas a su servicio. el prisionero es entonces atado por los cabellos a una cuerda de la que se tira con la ayuda de una polea. Unos días más tarde. El refinamiento de la crueldad consiste en levantar el cuerpo y dejarlo caer violentamente al suelo. los someten a una pamema de examen médico para llegar a la conclusión de que ha conservado su inocencia. el P. que no soportó siendo estudiante haber sido superado por los resultados de un concursante que profesaba tal religión.replica el mandarín.tomar el poder. y ejerce el poder del soberano Juez". se verán una quincena de veces. 13. tal hecho se verificará en Juan Gabriel. libera las almas de las cadenas espirituales. hay una secta de penitentes austeros. ahora. de los que importan su religión. Juan Gabriel accede y ejecuta la orden recibida. Queriendo burlarse de él. es la persecución masiva de los responsables: los sacerdotes extranjeros. se pone la pesada casulla dorada y su rostro sucio deja de súbito transparentar una bella majestad radiante que impresiona a los miembros del tribunal. A pesar de las llamadas a la tolerancia del emperador Tao Kouanji. llamada "Nenúfar Blanco". en el momento de la obtención del doctorado. Se le atribuye.Y. opuestos en todo. decide convocar a aquel sacerdote y acabar con él. rebeldes a las confesiones. morirían de agotamiento. testigo de Cristo en las torturas y administrador de los sacramentos divinos! . Reconociendo su fracaso. El mandarín. El virrey toma entonces el asunto en sus manos. sienten llegar su última hora. El único medio que encuentra a su disposición. en suelo imperial. 41 . subrayando que sabiduría de Dios y locura de los hombres son siempre el lote extraño de los cristianos. y que juzga efectivamente radical. Creen reconocer en el hombre del Dios de Jesucristo una nueva encarnación divina de Buda. destinada a los culpables. Estupefactos. sólo puede confiarlo a la autoridad superior. Furioso por los míseros resultados de sus mandarines de cara a Juan Gabriel. pero sabe que el mandarín tiene derecho a equivocarse. Hay quienes piensan además que él fue el inventor sádico de un medio nuevo de tortura: una silla erizada de púas. Cuando la imagen de aquella singular escena llegue a oídos del P. muy decidido a llevarlo a término. El mandarín y los guardias no comprenden nada. se hará el instrumento de muerte que derramará la sangre del grano de Dios en medio de la cizaña floreciente. siguen fijos en una actitud expectante. he aquí al dios Fouo vivo”. Algunos lanzan gritos: “¡Es el dios Fouo. Con un infinito respeto. es un medio para hacerse adorar por los cristianos".. en particular. a veces. Los dos hombres. Muy conmovidos. guarda su rabia en el corazón hacia aquella gente adicta a tales creencias extranjeras y que pueden un día -piensa. y siempre celoso de su autoridad. comprobando que no puede obtener nada de su prisionero. va aún más lejos: "Es así como quiere apoderarse de China". se precipitan de rodillas ante el sacerdote a fin de pedirle la absolución. de una vez por todas. el mandarín ordena al sacerdote que se revista de sus ornamentos. Rizzolati. unos días después. virrey. en dos meses. En cuanto a los dos cristianos que recibieron la absolución en el tribunal. el horrible hecho de infligir personalmente trato cruel a los que hacía arrestar. porque. Enemigo declarado de los europeos y.EL GRANO QUE SANGRA TCHOW-THIEN-TSIO no quiere a los cristianos. y dejan actuar al misionero. por desgracia. y. Comprobando la finura de los bordados dorados. Dicen en la región. que aspira nada menos que a destronar al emperador. de rodillas sobre cadenas y juzgado por un hombre. cierra el proceso. escribirá: "¡Qué hermoso ver aquel sacerdote. Hoy. él se impone el deber cíe detener su avance. proseguirá: "El. en su prisión. Juan Gabriel sólo puede desmentir tal proposición. dos cristianos que han resistido anteriormente a los suplicios y que. Se ha visto igualmente al virrey descender de su trono e ir en persona a infligir otros tormentos al desdichado prisionero. En represalia. herido por semejante ignominia. se ata salvajemente a Juan Gabriel a una viga para molerlo a golpes de bambú. salta nuevamente de su silla presidencial y se arroja con furia sobre su pobre víctima. A su vez. El enemigo de los cristianos. conmovidos de verlo en tal estado. recobrando sus energías. Los soldados incluso incitan al virrey para que haga poner sobre sus pantorrillas una viga de madera y a saltar encima. No ha echado sobre su espalda la responsabilidad de uno solo de aquellos crímenes infames de los que. Perboyre a su prisión. En otras comparecencias. en medio de una acerba diatriba. Y sin aguardar más. no la encontrará hasta haber agotado los tormentos más atroces”. le pregunta si los colores utilizados no han sido compuestos con los ojos sacados a los chinos. jamás ha renegado de su fe. declara: "Mátame”. Encontrando insuficiente el suplicio. Se empuja entonces al pobre hombre que cae de rodillas sobre unas cadenas y trozos de teja. Dirigiéndose luego al sacerdote. con todo y con eso. presenta a Juan Gabriel un ídolo y le promete la libertad. Nada ha sido ahorrado a Juan Gabriel quien. también inhumanas. Los ojos no se abren. Tchow-Thien-Tsio mira con curiosidad un cuadro que representa a María. no es más que escayola”. después de haber atado piedras a sus pies. subraya. el cínico presidente de aquel tribunal inicuo hace grabar con un punzón de hierro sobre la frente de su prisionero estos caracteres: "KiuoFei" (lo que significa: "secta abominable"). por sus siniestros experimentos. Pareciéndole que los golpes no son suficientemente violentos. Los soldados no han escatimado los golpes de fusta o de bambú. la de sentar al condenado en un taburete sobrealzado. se obtienen las confesiones más disparatadas. responde: "¿Cómo voy a injuriar a mi Dios. es sólo una enorme llaga abierta que deja manar sangre. mi Creador y mi Salvador”. tratan de aliviarlo y de prodigarle algunos cuidados. para azotarla él mismo. Todo está claro. El misionero. El prisionero no se tiene en pie. el misionero es forzado a arrodillarse. con tales crueldades. vuelve a la vida y reabre sus ojos. El virrey queda estupefacto ante la impasibilidad del misionero europeo. encerrado en un silencio mortal. Haciendo acopio de su coraje. hace de nuevo moler a palos al desdichado. como la de levantar su cuerpo a lo alto y dejarlo caer de nuevo con todo su peso. Rehusando declararse vencido por aquel hombre miserable. Se teme por lo que le queda de vida. se le acusaba. sin razón. Durante tres días. que. Los labios no musitan sonido alguno. No esperando ya nada de su violencia. y la cubre de besos enteramente regados con lágrimas. el misionero está entre la vida y la muerte. Sabe desgraciadamente. Los guardianes. Luego. Yo le haré padecer durante largo tiempo los dolores más agudos. Juan Gabriel ha sido la víctima inocente de atrocidades sin nombre. convertido en una especie de muñeco desarticulado. 42 .Al comparecer ante el virrey. si lo adora. sin defensa. para hacer más presión sobre sus piernas heridas. El hombre de Dios rechaza repetidas veces aquella sórdida teoría. o también. no quiero ni querré jamás rebajarme a tal acto". el virrey quiere forzar al sacerdote a pisotear un crucifijo. le promete un final de vida a la altura de lo que él cree ser su esperanza: “Es vano su deseo de morir prontamente. como lo había hecho ya. Cada día será torturado con nuevos suplicios y esa muerte que desea. "Después de todo. el virrey hace volver al P. Se postra entonces ante la cruz. de manera que el peso provoque dolores espantosos en las articulaciones. trazando con vuestra mano. marcado con la señal de infamia. por consiguiente. habiéndolo edulcorado para no atraerse las iras del emperador. la virgen Ana Kao. será de corta duración. El virrey.Es la hora de que el virrey anuncie a los condenados el veredicto del Tribunal Supremo. la doctrina del «Maestro del cielo». tratar todavía de salvaros: renegad de vuestra fe y. no obstante. y serán puestos en libertad. entre ellos. y los otros deben ser desterrados y entregados a la esclavitud. debe sufrir la estrangulación por haberse introducido en China y haber predicado en ella. debes ser estrangulado. el virrey presenta a cada uno el documento que estipula el terrible veredicto: "Firmad vuestra propia condena. Wen-Siao. Y. vueltos más humanos respecto a los cristianos. Los otros diez culpables y. Uno tras otro. La sanción caerá unos meses más tarde: será destituido y enviado al exilio. los otros condenados hacen la misma confesión. que no reprimen sus villanías. El 15 de julio de 1840. Sólo el emperador Tao-Kouang podía ratificarla y hacerla ejecutable. el 27 de agosto siguiente. el sacerdote exclama: “¡Antes morir que negar mi fe!". tras imperial deliberación. Comprobando entonces la fraternal solidaridad cristiana que brilla en pleno día. si no. y hace conducir de nuevo los condenados a la prisión. aflojan un poco su vigilancia y permiten las visitas. el que se llama Toung-Wen-Siao es condenado a la estrangulación. sobre esta hoja. como en casos parecidos. y recuperando la inspiración que se le conoce. vuelve 43 . son convocados para escuchar la enfática sentencia: "Tú. Los guardianes. una cruz”. comenzando por el sacerdote. se llena de compasión hacia sus compañeros de infortunio que son entonces presas de admiración. un día. Todo queda clarificado. serán enviados a la esclavitud. Juan Gabriel sigue pudriéndose en su sórdida prisión. se acercan al registro y diseñan la cruz demandada. se pide gracia. Según la ley. la sentencia final. denunciado al emperador a causa de su tiranía y su ignominiosa crueldad por algunos mandarines. enriqueciéndose a costa de los chinos. De este modo. aquella cruz que bien podría ser la Cruz de Cristo. que recibe el correo del emperador el 11 de septiembre siguiente. en voz alta. tendréis el castigo que merecéis". A la vista de aquella relación. como jefe de cofradías religiosas. haber seducido y engañado a un gran número de hombres. tras él. firmada por mano de Tao-Kouang: "El europeo TnunK-Wc n-Siuo. a los que no juzgaban tan peligrosos. Los treinta y cuatro restantes. u condición que ofrezcan garantías". Será. Su dicha. Durante aquel tiempo. al punto. con todo. los consejeros del emperador del País Celeste extienden la requisitoria. El virrey pronuncia entonces. vais a ser enviados al destierro. Y vosotros que no habéis cesado de resistir a las órdenes de vuestros superiores y no habéis querido en modo alguno renunciar a vuestra fe. habiendo sido fieles a su fe de bautizados. Juan Gabriel Perboyre y algunos prisioneros cristianos. La sentencia será ejecutada inmediatamente. Los carceleros perciben en aquel condenado un tanto particular un ser diferente. está muy contento de haber obtenido lo que deseaba desde el comienzo de aquel asunto. sin la menor dilación. Sin dudar. están exentos de castigos. veréis libres. El virrey. pero el régimen se hace ahora más humano. en efecto. No es como los otros prisioneros de derecho común. que ha entrado clandestinamente en China para propagar una falsa religión. Quiero. se ciñe solamente a subrayar la culpabilidad evidente del europeo. A veces. llega el expediente a la autoridad imperial. sabiendo que está condenado a una muerte próxima. que han renunciado a su error. Ha arrastrado en su locura a numerosos culpables de los que algunos afortunadamente han apostatado y para los cuales. Tchow-Thien-Tsio no tenía poder para ejecutar aquella decisión judicial. para que él mismo relate sus sufrimientos. usted conocerá otros detalles. Por esta fecha. en el alba de su muerte. he recibido ciento diez golpes de pant-tse. muy desagradable y repugnante para un débil estóma go europeo. Los soldados lo dejan pasar y se apartan para que los dos hombres puedan hablar y rezar juntos. saluda en mi nombre a todos los cristianos de Tchavuenkou. Cuando llegué a Kou-7cheng. el P. 44 . Su corazón de misionero se dirige todavía. con el deseo de tener un testimonio de sus tormentos. a partir del 20 de agosto de 1840. el P. No obstante. nosotros cuidaremos de él!" Sorprendido de aquella cálida actitud. visto su estado de salud y el parecer del médico. estando sus fuerzas muy recuperadas. arroz y unas hierbas saladas. hacia los parroquianos que ha conocido y amado. fue directamente a causa de la religión. públicamente". es la última de Juan Gabriel: “Las circunstancias del tiempo y del lugar no le permiten escribir con largos detalles. Juan Gabriel. Juan Gabriel no puede por el momento alimentarse de otra cosa que de agua. lo que sufrí en Siung-Yung-Fcna. con provisiones de pan. por no querer pisotear la cruz. y esto. Yang vuelve junto al P. el carcelero se apresura a dar garantía al joven visitante diciéndole que. Yo ya no los veré. Diles que no teman esta persecución. Dándose enteramente a Él. va hacia su muerte con un corazón anegado en Dios. En Siang-Yung-Fou. Pero estoy contento de morir por Cristo". En efecto. no un fracaso estúpido o una victoria del mal. Esta carta. y. Juan Gabriel oye esta expresión: "¡No tema. llevando con qué mejorar la comida ordinaria. el germen del Evangelio incubado en la sangre de los apóstoles. sin que le sea necesario un disfraz. ropa. Ellos tampoco me verán porque ciertamente seré condenado a muerte. en casi todos. el misionero rechaza toda distinción. no cesaba de pedirle. sufrí cuatro interrogatorios. vino. donde fui bien tratado por el Tcheu-Hien (subprefecto) todo el tiempo de mi estancia. como san Vicente. El carcelero se niega diciendo que uno de sus amigos ha pasado ya y ha dado dinero que aún no ha sido gastado. Entre los casi veinte cristianos. durante uno de los cuales permanecí toda una media jornada. Rizzolati que lo envía de nuevo a la prisión. Así. cuando el catequista Ou-Kiang-Te va a verlo. En Ou-Tchang-Fou. En el momento de la salida de su joven visitante. la persecución habría estallado rápidamente en todo el Imperio). Más adelante. le dice que dé firmeza a sus hermanos con estas palabras inspiradas en san Pablo: “Cuando regreses. Juan Gabriel. con las rodillas desnudas sobre cadenas y colgado del instrumento de suplicio «hantse». Rizzolati. Que tengan confianza en Dios. En Ou-Tchang-Fou. Usted puede informarse más ampliamente por otras vías. A partir de entonces. entregando su vida por la Vida. con el auxilio de la divina gracia. instrumentos de escritura. Andrés Yang. por medio del P. trata de hacer penitencia y reclama el régimen común. los dos tercios han apostatado. El grano sangrante que los verdugos someterán a muerte será de hecho. escrita en latín. el catequista Fong va todos los días a la prisión. Su preparación para el último viaje puede continuar. he padecido más de veinte interrogatorios. por la cruz que lleva en sí. será objeto de toda su atención. le proporciona. sufrí allí dos interrogatorios. Yang y Andrés Fong. a quien él aprecia muy particularmente. desde el momento en que se reponga de sus heridas. sino una siembra discreta de la Palabra de Jesús sobre aquella tierra en gestación del Espíritu Santo. Sin embargo. y.a visitarlo el P. mantas y dinero. he sufrido diversas torturas porque no quería decir lo que los mandarines deseaban saber (si yo hubiese hablado. Una vez curado de sus heridas. a partir de aquel momento. se apresta para hacer de ella. Luego. aprieta la cuerda casi hasta la sofocación. a la hora de su Pasión. Se trata de la signatura sellada con lacre. Uno de ellos se convertirá por ello. La tercera vez. la afloja de nuevo. Cerca de mediodía. sujetando sus brazos al corto palo transversal del patíbulo ya levantado. Juan Gabriel. contemplando en silencio el rostro del mártir que refleja paz y serenidad. un correo del emperador llega al palacio del virrey. que significa "la montaña roja". como Jesús. Las piernas del desdichado son dobladas hacia atrás y atadas juntas. la cabeza de los cinco desdichados condenados que acompañan al misionero. de rodillas. Intrigada por los muchos gritos de los guardianes. Luego. como sucede normalmente en parecidos suplicios. Tchow-Thien-Tsio despacha sin tardanza un mensajero a la prisión para sacar a los condenados. sin más dilación. Perdido en medio de aquella multitud ruidosa de paganos. a paso de carrera. Entonces. Colgado apenas a unos centímetros del suelo.14. su bienamado Maestro. más tarde. Todos tienen las manos atadas a la espalda. Los torturadores quitan el sayo rojo al sacerdote y sólo le dejan unos calzones. Le atan las manos a la espalda. 45 . el recuerdo del martirio de Juan Gabriel Perboyre. El de Juan Gabriel reza simplemente: "Kiao Fea" (secta abominable). Juan Gabriel inclina la cabeza y entrega el espíritu. El "Gólgota" de Juan Gabriel lleva el nombre de Tcha-Hou. Se accede a él franqueando una de sus puertas. Parece respirar todavía. el verdugo afloja la presión permitiendo así al torturado recobrar su aliento. Uno de ellos contó: "Cuando.LA HORA DE LA COSECHA Aquella mañana del viernes 11 de septiembre de 1840. A tenor del mensaje. de pie detrás de la cruz. se abisma en una oración profunda. una multitud de curiosos comienza a juntarse al tropel y a correr con él. Hacen salir de los siniestros calabozos a cinco detenidos a los que se debe cortar la cabeza. según la reglamentación vigente. la ejecución debe ser inmediata. El lugar del suplicio está fuera de la ciudad de OuTchang-Fou. mediante un corto bambú. está presente un cristiano. un esbirro asestó al ajusticiado un violento puntapié en el vientre. y mantienen bien fijo un largo palo de bambú portador de un letrero con el motivo de la sentencia de muerte. Ellos notan también aquella serenidad. al cristianismo. pues. El inquietante destacamento llega ahora al sitio previsto. El grano que ha sufrido va a ser triturado. la orden de cortar. Unos paganos se acercan a su vez. y al P. El cortejo de muerte se dirige. Los ojos no aparecen desorbitados. destinado a la estrangulación. Para asegurarse de su muerte. la que llaman Tcha Hou Men. Algunos testigos oculares referirían. Por tres veces. Algunos vieron brillar una cruz en el cielo. hacia el lugar del suplicio final. Juan Gabriel está como de rodillas sobre su cruz. suavemente. pasa alrededor del cuello del condenado una cuerda que lo sujeta contra el madero. Por segunda vez. que aprueba la condena a muerte por estrangulación de Tuung-Wen-Siao. aprieta con vigor la cuerda y la mantiene tensa hasta que la muerte acaba su obra. Durante aquel tiempo. lo hizo en el Huerto de los Olivos. luego. Numerosos soldados y esbirros de los tribunales rodean a los prisioneros que mantienen la cabeza baja. es una víctima ofrecida a la vista de la muchedumbre de curiosos. y algunos quedan desconcertados. Los cuatro mandarines dan. el verdugo. Cada condenado va vestido con el sayo rojo. cuatro mandarines siguen la escena en nombre del virrey. Ha llegado la hora de la cosecha. por razón del color de su suelo. como signo de su culpabilidad. aprieta poco a poco la garganta del condenado. Un poco aparte de aquel tumulto. al año siguiente. Juan Gabriel Perboyre.. tendido sobre una cubierta. Antes de dejar los lugares del suplicio. apareció en los cielos.y en ausencia del P. cristianos y paganos. la cabeza reposando sobre un cojín y lo recubren con otra cubierta. Francisco Maresca. y algunos exclamaron: «Ahí esta el signo de los cristianos. se vio brillar aquella misma cruz sobre el cementerio donde reposaba Juan Gabriel. Monseñor interrogó además a los cristianos que habían conocido al P. el oficio de difuntos. hizo una encuesta en regla. que viaja hacia el Chensi para recibir allí la consagración episcopal. Hecho esto. Ellos abrazaron efectivamente el cristianismo y el P. extienden un velo fino sobre el rostro del muerto. la pequeña comitiva deposita al llorado misionero en la tumba cavada al lado de las de tres jesuitas y muy cerca de Francisco Regis Clet que lo había 46 . Todo se realiza sin dificultad y los cristianos recuperan el cuerpo de su sacerdote. religioso misionero de la Sagrada Familia de Nápoles. Rizzolati les administró el bautismo. envía a su criado acompañado por el catequista Andrés Fong. Aquella noche. y en el mismo punto del cielo por un gran número de testigos. Finalmente. mediante una suma de dinero. quiero servir al Maestro del cielo". llevan el féretro al cementerio sito en la Montaña Roja. un féretro lleno de tierra por el del mártir. Muchos paganos fueron también testigos de aquel prodigio. asombrado del gran número y de la importancia de los testimonios. una cruz grande. Maresca. Algún tiempo más tarde. así como las vestiduras que los soldados acceden a entregar. Los dos hombres. como lo exige la costumbre. Andrés Fong. Iuminosa y perfectamente trazada. Puestos en contacto con los soldados de guardia que deben retirar el cuerpo muy de mañana y enterrarlo con los de los otros condenados en una fosa común y. anunciando una bella jornada. que fue vista en la misma época. Las mujeres pasan la noche y la jornada confeccionando bellas vestiduras para el difunto con las telas de seda compradas por el P. ayudado por cuatro jóvenes cristianos. apareció en los cielos. habitando en diversas cristiandades muy distantes unas de otras. para tratar de recuperar el cuerpo de aquél a quien llaman ya abiertamente "mártir de la fe". Pero luego. ayudados por algunos cristianos. camino del cementerio. Fue percibida por un gran número de fieles. Apunta ya la aurora del domingo.fue martirizado. que acaba de saber la terrible noticia. que aquellos testigos habitaban en distritos muy alejados unos de otros y que no habían podido tener ninguna comunicación entre sí. de la misma forma y del mismo tamaño. Los soldados regresan llevando consigo las vestiduras del mártir y dejando toda la noche su cuerpo expuesto a la curiosidad de los transeúntes. uno de los mandarines dio orden de cubrir el cuerpo de Toung-Wen-Siao con un velo. Cuando Monseñor supo el hecho que acabo de referir. renuncio a los ídolos. se celebra a intención de aquél al que consideran como un santo. ponen en marcha una eficaz transacción. no lo dio de primeras gran fe. Rizzolati. y las cuerdas que habían servido para el suplicio. el P. luminosa y perfecta en su forma. colocan al mártir en un féretro mayor. Avanzan lentamente hasta la ubicación de las tumbas cristianas. y todos declararon que ellos lo habían mirado siempre "como un gran santo”. Rápidamente. Luego. se dedican al aseo fúnebre. Unas siluetas se mueven muy de mañanita. Visten el cuerpo de Juan Gabriel con un gran lienzo de algodón y luego con una larga túnica y un bonete negro. por la que comprueba que una cruz grande. Perboyre. a fin de impedir una conmoción popular de excesiva amplitud. Finalizada aquella procesión con gestos lentos y llenos de respeto. con la esperanza de la luz eterna. logran cambiar. Luego. Tras su martirio. el cuerpo con los ritos ordinarios en uso para todo bautizado: una aspersión con agua bendita y una sencilla plegaria. Francisco Regis Clet y Juan Gabriel. y los dos paúles franceses. los cristianos organizan un banquete funerario.. hecho grandes instancias. su cohermano. Rizzolati comprueba con pena que el P. no se desplazó ningún sacerdote. Rameaux y Perboyre. voy a ir tal vez. Juan Enrique Baldus. fue a causa del arresto de P. Juan Bautista Torrette: "Si usted me preguntara lo que dicen de los PP. Sé que la razón de su exterior físico no entraba en esto”. y cuya suerte envidiaba en ciertos momentos. las expresiones rezuman amargura: "Son las propias palabras del P. sobre quien en Macao ponía usted tanta confianza y esperanza.. En menos de treinta años. entre ellos. aquella provincia china del Houkouang ha sido bañada con la sangre de tres mártires de la fe. pues. un camino de conversión..precedido en el martirio. los cristianos han mostrado repugnancia a tenerlo. Rameaux que decía que cuando uno no sabía moverse mejor. Triora. que vivió a fondo el ideal evangélico. El camino terrestre del pequeño misionero quercinés acaba en tierra china. No era cuestión de tener piernas sino de ser más avisado”. veinte años antes. No pudiendo ya frenar su pensamiento. los hombres descubren en aquel hombre ordinario. humanamente hablando porque era un merengue y por su sola necedad. un signo válido todavía hoy y para cada uno de nosotros. invitando a algunos paganos. y según todos los demás europeos y chinos. por los méritos de estas santas víctimas. y los cristianos saben 47 . otorgar la paz a esta región perturbada por esta violenta persecución y quebrantar el odio de los enemigos de la religión cristiana!" La comunidad cristiana no tarda en venerar la memoria de su último mártir. tocados en su carne. usado muchas tretas. En su dolor. relee la historia y da algunos elementos de reflexión interesantes a su superior. Una ola de testimonios se expande como el mar. el cual lo llevará todavía más lejos a través de nuestra historia.fue apresado. En varios sitios. a fin de tener a otro europeo también. Según el que escribe. no sé lo que disgustaba en el a los chinos. que refresca una tierra demasiado seca. europeos: un italiano.UN SIGNO QUE GERMINA Quince días después de la ejecución de Juan Gabriel.. a la familia guardiana del cementerio. exclama: “¡Plegue ti Dios. el P. Consciente de ir a contra corriente de la opinión general de aquel entonces. Mons. ¿cree que solo tendría elogios que escribiros de parte de los cristianos y cohermanos? Para sólo hablar del último. respetando la costumbre local y para evitar toda sospecha. Algunos comienzan junto a los cristianos. franciscano. no obstante. Esta carta severa es diferente de todo lo que se puede oír ya sobre el mártir. continúa con ágil pluma: “Todo el mundo está de acuerdo en decirlo. Enterraron. Otro camino comienza. Otros comparan a Juan Gabriel con sus dioses. Si él . no había que venir u China.. que se hallaba presente. un signo de la presencia actuante de Dios. En cuanto al cansancio que pesaba sobre Juan Gabriel. pero de todos los europeos que yo he visto en China. el P. Muchos paganos quedan conmovidos por el coraje extraordinario manifestado por Juan Gabriel frente a los múltiples sufrimientos soportados y a su muerte.. 15. prosigue: "¡Ay.. Perboyre. no he conocido a ninguno cuyas formas fueran menos de su gusto". Perboyre no es el primer mártir. Por prudencia. si la persecución ha sido tan violenta. demasiado lejos!. Baldus. Lo había recibido con la mayor deferencia. Todos sus bienes quedan confiscados en castigo de los suplicios espantosos que hacía padecer a sus prisioneros. Mons. su reserva bien conocida. tuvo una visión durante su enfermedad. una blanca y la otra roja. El poder de Dios se dejaba tocar con la punta de los dedos. algún tiempo más tarde. y yo bien quisiera cambiarme con él". su retraimiento comprobado. La mano de Dios no tarda en hacer crecer el grano de la semilla. desde el anuncio del martirio heroico del misionero francés. estoy bien persuadido de que no es culpable ante Dios. ten piedad de mí! ¡Oh Jesús. no hubiera tenido complicación… Semejantes acontecimientos. se durmió en la muerte. Muy pronto. Pero es. transformado. y que le había hecho guardar la fe para soportar los numerosos sufrimientos padecidos. como una acción de la Providencia en respuesta al martirio. a pesar de las condicione. hay siempre algo que causan dolor". higiénicas de la prisión. durante el período de la tortura. en caso parecido. No era ya el mismo misionero. Ramaeaux. Perboyre. hora de la muerte de Cristo. La primera señal percibida por los cristianos. este pastor se acordará de la acogida que le había dispensado Juan Gabriel. Con firmeza. El enfermo se acordó entonces de las invocaciones de los cristianos que había escuchado: "¡Oh Dios. Juan Gabriel quien ha sufrido hasta el fin. como se recibía a un obispo. Sobre la última. Asistido en su agonía por la comunidad cristiana. burlando las leyes del Imperio.repetirlo: «El P. pero cuando en esto entra su culpa. Rizzolati parece desbordado por los acontecimientos. Moderándose un poco y reconociendo en Juan Gabriel una fe profunda. Se evoca también la que se vio encima del cementerio. con ocasión de su visita a la residencia. Los cristianos meditan en la pasión de su sacerdote mártir. pide que se modere un poco aquel impulso popular y no se anticipe a una posible decisión de la Santa Sede. Algunos recuerdan también la belleza y la serenidad que invadieron su cuerpo en el momento de su trágica muerte. la enfermedad lo golpeó de nuevo. cuando es sola la Providencia la que los determina. particularmente. Rizzolati. se acuerdan también de la fuerza espiritual que había invadido a aquel hombre. todo aquello había dejado lugar a un vigor increíble. a mediodía. Se cuenta que el pagano que lo había transportado en el palanquín. no tienen nada de molesto para los cristianos. su Señor y Maestro del cielo. con todo. Mons. En aquella región vulnerada. ten piedad de mí". se encontraba muy mal. 48 . y ha muerto en el patíbulo plantado en tierra pagana como una semilla. cuando se le notaban las rápidas curaciones de las heridas ensangrentadas. Su timidez natural. desapareció la visión y vino una mejoría. concluye: "No obstante. Más tarde. se hizo catecúmeno y recibió el bautismo. fue primeramente la destitución del cruel y sanguinario virrey por el emperador Tao-Kouang. Dispuesto para el gran viaje. estaba Juan Gabriel invitándolo a trepar por la blanca. conociendo la bella alma del P. Evidentemente. que había ejercido sin saberlo el ministerio de Simón de Cirene. Aquel rico personaje de nombre Lieou-Kiou-Lin. Vio dos escalas. La veneración crece a una velocidad que nadie controla. Sin tardanza. los cristianos comienzan de nuevo a esperar y a prosperar bajo la dirección de su nuevo obispo. los fieles llaman al sacerdote difunto "el gran mártir". Parecía transfigurado. el 11 de septiembre de 1840. en China. a pesar de la tenaz oposición del demonio allí presente. hasta los paganos se conmovieron por ello. El signo de la presencia divina se revela en el mundo y. Luego. Otros evocan todavía lo que parece ser el primer milagro del mártir. se vuelve a hablar de aquella cruz percibida en el cielo en el momento en que el mártir entregó su espíritu a Dios. Toda la familia se une a sus palabras y. se recibe la noticia del martirio de Juan Gabriel con emoción. Exponerse es temerario. se atiene a todos los datos. con miras a una eventual introducción de su causa.Demasiado tarde. En el Puech. desde que está en China.. Se dice aquí y allí. En las altas instancias. Él. Laribe aportan en ella una valiosa contribución. la devoción otorgada a los otros mártires. nos han expresado de manera bien viva cuánto deseaba el martirio. Confesó su fe con su sangre. A continuación. que hay que emprender sin dilación la recogida de informaciones sobre este mártir. 8. como Cristo lo hizo por sus hermanos. que se gloriaban de aquella Palabra del Salvador: “El que pierda su vida por mi causa. había gritado al virrey que quería verlo postrarse ante un ídolo. le permitió tan sólo realizarse mostrando una cierta 49 . Su renombre atraviesa los océanos. El Papa Gregorio XVI. Juan Gabriel entraba en aquel cortejo de hombres y de mujeres que lavaron su sangre con la sangre del Cordero. Se afirmará que la causa de la muerte del P. bien para no exponer su propia debilidad: pero cuando se encuentra enfrentado a la lucha. El P. el odio contra Dios y su Cristo.. que aquel final tan deseado. hay actividad. dio su vida. Se comienza a contar la vida del "gran mártir" por doquier. La tumba del mártir se convierte rápidamente en un lugar de peregrinación. al que se consideraba tan débil y de frágil naturaleza. la salvará" (Mc. era necesario que se manifestara. al P. En Francia. es el vicario M. Y Dios no quitó nada de su carácter. El trabajo. no podemos sustraernos a ella. que estará acabado en 1845.. enterado de la muerte del misionero. con un sentimiento de orgullo mezclado de tristeza. exclama: "Qué haría yo lamentándome? Sus cartas. Al afrontar la prueba del martirio. bien para ahorrar un crimen a Ios infieles. no se sorprenden en demasía de aquel trágico final. 35). comunica al P. una cobardía”. de los que el principal es éste: ¿Es Juan Gabriel un mártir de la fe? La definición del mártir es clara: "El cristiano no debe exponerse por sí mismo a la persecución. no comprometerse. Su madre. pero al mismo tiempo. le quedaba aceptar la muerte por amor a Cristo: "Mátame!. y abiertamente expresado. por parte del opresor. General de la Congregación de la Misión. no creería amar verdaderamente a un hijo. sabiendo que él ya ha colmado sus deseos". Se recuerda los lugares de su paso. Conociendo los riesgos a los que se exponen los misioneros de China. ¿Por qué había de dudar en hacer a Dios el sacrificio de mi hijo? La santísima Virgen ¿no sacrificó generosamente el suyo por nuestra salvación? Por otra parte. Perboyre fue realmente la fe en la persona de Cristo. el más difícil de los testimonios: siguiendo a Cristo. como los testigos de la Iglesia primitiva. Etienne encomienda entonces a quien le ha conocido bien. pero quedan asombrados de la fuerza con que aquel sacerdote supo resistir las numerosas torturas.. Laborderie quien anuncia la terrible noticia de la muerte del hijo mayor. Mas para recibir la palma del martirio. si me afligiera. con coraje admirable y sin poder contener algunas lágrimas. el cuidado de llevar a buen término tal investigación. Rizzolati y el P. Rameaux. corresponde bien al personaje. el odio contra la Iglesia o el deseo de forzar a cometer acciones que entrañaban pecado. superando en visitas. Él ofreció el más bello. no bastaba a Juan Gabriel con sufrir o incluso morir por la le. Mons. Los límites de la provincia del Houkouang son ampliamente franqueados. supo demostrar que fue justamente de su debilidad. evoca recuerdos de la infancia y de la juventud de Juan Gabriel. de donde Dios le permitió sacar su fuerza. Juan Bautista Etienne. cuando lleguen a París. Francisco Regis Clet. que fue un tiempo su compañero. Delaplace. con sus alegrías. y dan testimonio todavía para la gente que llega a recogerse ante ellas de esos signos que germinan en el mundo. debidos a las agitaciones acaecidas en la Ciudad Eterna. se organiza en Roma un proceso apostólico restringido.LA COSECHA INACABADA La piedad de los fieles es algo notable. sin almidonar sus defectos en el catálogo. El proceso de beatificación fue realizado simultáneamente en Francia y en China. Todo se ha convertido en un patrimonio sagrado recordando al mártir y su paso entre loa hombres. Étienne. en China. Dios no pide que miremos a Juan Gabriel como una persona extraordinaria. y será precisamente el 6 de enero de 1860. Juan Gabriel ha conocido el mismo camino. Para completarlo. el Santo Padre promulgaba el decreto de beatificación y el 10 de noviembre del mismo año. paúl.plenitud humana. se decide en China la institución de un nuevo proceso apostólico. una numerosa asistencia se encontraba en Roma. los instrumentos de su suplicio. a fin de que los futuros sacerdotes se acuerden de los que los han precedido en la fe. la Congregación encargada de la causa de beatificación dio un juicio positivo. hace santo a un hombre con sus plegarias y otros exvotos. Una importante delegación de la diócesis de Cahors había realizado igualmente el largo desplazamiento. Está confiada al seminario mayor regional de Wuhan. Se dedican 50 . sucesor de Mons. así como su hermana María Ana. para ser allí expuestos en la capilla de la Casa-Madre de los PP. sus penas. Ella es la que. Rizzolati se había expresado poco después de la muerte del misionero paúl en estos términos: “El venerable siervo de Dios. sería digno por sus virtudes del honor de los altares". sus miedos y sus sueños. 16. P. en 1879. Sus tumbas. La fiesta regocijaba todos los corazones. El 30 de mayo siguiente. por orden del General. siguen allí. la documentación estuvo al fin completa y preparada para el estudio. Paúles y expuestos así a la veneración popular. como una reliquia. El "gran mártir" llegó a ser en aquel momento el beato Juan Gabriel. y que permiten a Dios sembrar su Palabra para su mayor gloria. y de Mons. Perbovre.. Sus vestiduras. Spelta. los restos de Juan Gabriel y de su predecesor en el martirio. Después de algunos imprevistos. al pie de sendas pequeñas imágenes. Estaban presentes el hermano menor de Juan Gabriel. sino que lo veamos con lo que él fue durante toda su vida. En 1862. de los dones y de las cualidades. abstracción hecha de su martirio. El Papa León XIII lo confirmaba solemnemente el 12 de junio de 1888. cincuenta años después del día comúnmente dado como el del nacimiento del mártir. Santiago Perboyre. En numerosos países donde la familia vicenciana realiza su trabajo. Entre 1886 y 1888. y el P. Hoy. sus cartas han pasado de la condición de simple objeto a la de "reliquias". son exhumados en presencia de Mons. Mons. todavía. a veces. para la celebración. El 23 de mayo de 1858. El 12 de marzo de 1889. Laribe. Hoy. en el interior de la Capilla Sixtina. Rizzolati. asaz frecuentemente abultado. hace igualmente lo necesario para que sobre la tumba del mártir sea colocada una estela. se posee la estela de su tumba. P. una última reunión precisaba entonces que la Iglesia podía proceder con toda seguridad a la beatificación tan esperada de Juan Gabriel Perboyre. por aquellos años. P. se organizan cantidad de celebraciones de acción de gracias. Hija de la Caridad. Su ejemplo nos estimula. guardó por mucho tiempo. Él fue un ser vivo. lo vi levantarse del suelo y arrebatado en éxtasis. estando en el seminario de san Lázaro. ha estudiado dos curaciones consideradas como milagrosas y. a su manera. por intercesión del beato Juan Gabriel Porboyre. su entusiasmo nos provoca. Juan Gabriel no es una estatua de iglesia. un misionero de la familia de san Vicente de Paúl. con una vidriera a gloria de Juan Gabriel. De ahí que. los cardenales y los obispos confirman aquella conclusión. El año 1994. para escuchar la llamada del Señor: "Id. el beato. El recuerdo de lo que fue su vida puede así leerse en el rostro sereno del beato. 51 . La Congregación para la Causa de los Santos. Aubert. Fallecido el 7 de julio de 1887. que parece sufrir el desafecto de los más jóvenes. Uno de los seminaristas del beato mártir no pudo juntarse a aquella multitud jubilosa. encargada del proceso. cuando en el momento de la consagración. los teólogos se reúnen a su vez. su santidad nos hace dinámicos. una conclusión médica precisa sin réplica el carácter milagroso de tal curación. sacerdote profeso de la Congregación de la misión de san Vicente de Paúl. cuya fiesta se celebra cada año el 11 de septiembre. los fieles pueden encontrar en la iglesia de santa Ana. Nuestro nuevo santo nos invita y hasta nos empuja a proseguir la misión de la cosecha. semilla de Eternidad. temiendo que yo revelara aquello de lo que había sido testigo. El 4 de abril. hoy. el P. Guardé silencio hasta después de su martirio". curada a los 38 años de una "neuritis polirradicular degenerativá”. En una iglesia rural. en su corazón. una capilla lateral dedicada a loa beatos Perboyre y Clet. perfecta y duradera de sor Gabriela Isoré”. construida por el P. con su sayo rojo de condenado.. de vuelta a la sacristía. día aniversario de su martirio. mientras él viviera. en Roma. El campo es inmenso y los braceros no responden a la llamada. A cada uno de nosotros. realizado por Dios. durante su sesión ordinaria. Acabado el santo sacrificio. Perboyre me hizo prometer un secreto inviolable acerca de este hecho. sacerdote de la Misión. ayudaba a misa a Juan Gabriel.a poner de relieve las grandes virtudes de aquel misionero muy apreciado durante su ministerio en Francia. numerosas imágenes de Juan Gabriel están expuestas a la veneración de los fieles. un precioso recuerdo. una gran celebración tiene lugar en la iglesita de Montgesty que resuena con la gloria de "su" Juan Gabriel. En las iglesias del Lot.. El 21 de febrero de 1995. Este año de 1996 ve acabar largos sumarios en vistas a la canonización. y ratifican aquella decisión. el siervo de Dios quedó alarmado en su humildad. corresponde llegar a ser. en la plaza de san Pedro de Roma. en el caso de curación repentina. totalmente comprometido en el servicio de sus hermanos. Hoy. refiere: "Un día. El 2 de junio de 1996. en particular. Juan Pablo ll declara: "Resulta cierto que ha habido milagro. Pedro María Aubert. siguiendo a Cristo. haced discípulos de todas las naciones" (Mi 28. los mayores siguen aferrados a su beato mártir. 19). Con la ayuda de Dios. se convierte en san Juan Gabriel Perboyre. él nos empuja a recorrer los campos del mundo. En medio de muchos otros. y que realizó en China su gran deseo de dar su vida por Cristo. A su vez. la de sor Gabriela Isoré. es signo del Amor de Dios que colma la vida de un hombre. en China como en Europa. representado como mártir. Cada año. un cristiano. o en el resto de la tierra. Él nos hace una señal.