Hush, Hush – Narrado Por Patch CiprianoHush, Hush Narrado por Patch Cipriano Advertencia: Esta obra es originalmente de Becca Fitzpatrick. Se tomaron sus personajes y la trama para crear este Fan Fiction. MARY ANN GRINTON Hush, Hush – Narrado Por Patch Cipriano SINOPSIS Ya estaba harto de vagar por las calles sintiéndose como una pluma en el aire. Quería sentir, quería más que nada ver la vida de la misma forma de los humanos. Quería ser como ellos. Para lograrlo, su único objetivo era matar a la descendiente de Chauncey Lengais: Nora Grey. Pero para su sorpresa, ese objetivo se ve obstaculizado por nada más y nada menos que por su Corazón. Entre los planes de Patch no estaba enamorarse, así que ahora tendrá que elegir entre seguir siendo un ángel caído y proteger a la mujer que ama, o aventarla a la muerte, para conseguir un cuerpo humano. MARY ANN GRINTON Hush, Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Uno. Coldwater, Maine. Me senté pesarosamente en mi mesa de siempre, casi al final del salón de clase. Fijé la vista en la pizarra, donde un par de muñecos desnudos reposaban debajo de un par de letras que decían "Bienvenidos a la Reproducción humana (Sexo)". Sonreí para mis adentros. Esta clase sería completamente aburrida, ya que, al fin y al cabo, no me enseñaría nada que no supiera ya. Una chica que repentinamente se había quedado boquiabierta en la puerta llamó mi atención. Era Nora. La contemplé fijamente como hacía siempre, desde que había decidido entrar al instituto. Sus labios ligeramente entreabiertos dejaron escapar un suspiro. Un estremecimiento me recorrió el cuerpo al mirar su boca, y una vez más, me imaginé mordiendo suavemente su labio inferior. Soñé como sonaría el gemido de placer al salir de su boca… Sus manos aferrándose a mi cabello, en clara señal de que le agradaba. Sacudí levemente la cabeza para desechar esas imágenes, y me removí algo inquieto en mi mesa, mientras seguía contemplándola, pero esta vez con mi mirada fija en sus ojos. Esos ojos grises que me ponían tan… Su amiga apareció a su lado. Le susurró algo a Nora entre dientes, y ella soltó una media sonrisa. Mis ojos bajaron nuevamente a sus labios, y contemplé de nuevo aquella boca. Vamos, Jev. Concéntrate en tu único Objetivo: Matar pensé. Pero era difícil concentrarse en matar a alguien te atraía como nunca nadie te ha atraído antes. Observé de mala gana como Vee tomaba lugar junto a ella un par de mesas por delante de mí. Si tan solo yo pudiera sentarme a su lado… — ¡Equipo, a sus asientos! —Dijo aquel hombre que se hacía llamar entrenador, luego de haber hecho sonar esa cosa que le colgaba del cuello. Desde que lo había MARY ANN GRINTON Aléjate rugí en mi mente. Maldije para mis adentros. ¿Y qué es la ciencia? — ¡Un aburrimiento! —dijo alguien del fondo. Contuve una risa. —Dilo con tus propias palabras—le dijo a ella. tocando la parte superior de este con suavidad. Su lengua se abrió paso entre sus labios. y suspiré. No podía permitir que ella tuviera ese grado de influencia sobre mí. Decidí dejar de prestar atención. alguien que nunca volvería a ver. Parecía que se fuera tragado el libro y estuviera escupiendo las palabras que sabía que eran correctas. y se inclinó hacia ella. —Puede que no se les haya ocurrido. tenía la clara impresión de que para él. MARY ANN GRINTON . Tuve que contener el impulso de lanzarme sobre ellas y llevarme a Nora lo más lejos posible de su personalidad tan desfachatada. y su patética compañera que pensaba que era la reina del mundo solo porque había perdido su virginidad con un chico excitantemente misterioso. —El conocimiento alcanzado por medio de la observación y la experimentación— Contestó Nora. que el sexo es mucho más que una visita de quince minutos al asiento de atrás de un coche. Dirigí mi mirada nuevamente hacía Nora. Me exasperaba lo que había sucedido entre ellos… ¿Cómo esa chica había entregado su pureza a un completo desconocido a la primera? R ixon ni siquiera tuvo que pedirlo dos veces. Cerré mis puños con fuerza. el "entrenador" le había hecho una pregunta. Aún me sentía algo incómodo cuando Rixon me recordaba aquello. y no quería ponerme de mal humor tan pronto por la mañana. la Biología y el Basquetbol tenían la misma forma de enseñanza. El hombre se acercó a su mesa. Por lo general me frustraba la inmadurez de algunas personas. chicos. Otro estremecimiento se abrió paso por mi cuerpo. Hush – Narrado Por Patch Cipriano visto. Demasiado cerca. Con solo pensar que Nora pudiera hacer lo mismo con cualquier chico que se le cruzase… —El estudio de algo—La voz de Nora interrumpió mis pensamientos y me trajo de vuelta a la realidad. El hombre aquel se dio cuenta. El sexo es ciencia. — ¿Qué más? —insistió. asegurándome que Vee no lo recordaba porque había introducido en su cabeza la imagen de una persona diferente.Hush. Al parecer. —Oh. quiero ser humano y necesito que te suicides" ¿En qué demonios estás pensando. Recordé los motivos por los que estaba en Coldwater. Un sonido agudo y chirriante se escuchó en toda la sala." Regresé al presente y ahogué un suspiro. — ¿me estás diciendo qué…? —Siempre puedes enamorarla—dijo él. Ella tiene que hacer el sacrificio por voluntad propia. Desvié la mirada de aquellas tres personas. Él me miró con una sonrisa jugando en la comisura de sus labios mugrosos. y me concentré en dibujar unos garabatos en el pedazo de papel que reposaba sobre mi mesa. claro. o no tendría caso—respondió él. El "entrenador" llamaba al orden a la clase. descendiente de Chauncey. Contuve el impulso de vomitar. —Los humanos son capaces de morir por amor—dijo él. Vee tú también) se irán al fondo. ¿Es sumamente sencillo. no? Solo tengo que aparecer frente a ella y decirle: "Oye. ¿tengo que matar al descendiente de Chauncey? — pregunté. Jev. Reí sarcásticamente.Hush. Gánate su confianza y mátala pensé con frustración. Barba? ¿Crees que morirá solo porque un ángel caído se lo pide? —le pregunté. "—Así que… para ser humano. Necesitaba ganarme a Nora lo más pronto posible. Ponme junto a Nora. Hace años que no sentía ni una pizca de simpatía por nadie. Estupendo. ¿Podrías por favor atravesarte el pecho con esta daga? Es que verás. Ahora Gruñí en la mente del entrenador. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Tienes que matarla. Voluntariamente. —Quiero que todos los que estén sentados del lado izquierdo del pupitre (éste es el lado izquierdo) se cambien a los del asiento de adelante. Lo quería con todo mí… ¿Ser? Cámbiame de mesa. Los de primera fila (Si. —No exactamente. Quería un cuerpo humano. MARY ANN GRINTON . rasgando el papel y comencé a escribir. Me estremecía con solo mirarlos. tomé una hoja de mi cuaderno. Hush – Narrado Por Patch Cipriano No sabía exactamente que sentí al tener la oportunidad de sentarme junto a Nora. Nora tenía la mirada levantada. Volví a estremecerme. también algo de obsesión al querer tocarla y todavía no poder. hasta que su mirada se posó en mí. -le gusta la poesía. —Hola. Era fácil. MARY ANN GRINTON . aunque no pudiera sentirlos físicamente. Soy Nora—me dijo. mientras lo escribía. chica. Y para mi satisfacción. Nora Grey. Permanecí mirándola mientras el entrenador explicaba lo que había que hacer. pero la contuve. quería un informe detallado sobre toda la información que tenía de Nora. Vengo a matarte pensé. observé que giraba su rostro para observarme. La observé fijamente. Con mi visión periférica. este trabajo me haría mantener los ojos alejada de ella un par de minutos.Hush. y mucha lujuria por tener tan cerca su cuerpo. -columnista de la revista digital del instituto. -Su música favorita es barroca -Solo hace ejercicios cuando hay buen clima. Ella parecía incómoda. y me senté. Al parecer. —Y además. puede hablar—susurré. y le mostré una ligera sonrisa. para después dirigirse a la pizarra frente a ella. sin saber exactamente que tenia ella tan diferente a las demás. Ya lo sé. El entrenador continuó hablando. Una sonrisa amenazaba con dibujarse en mi rostro. Maldición. — ¿Qué escribes? —preguntó. estudiando a todas las personas que daban vuelta a su alrededor. Cuando el entrenador terminó de hablar. Ella me devolvió la mirada un poco titubeante por unos segundos. y ni mencionar el deseo de cubrir sus labios con los míos. Un poco de desesperación por matarla y obtener mi cuerpo cuanto antes. Lancé de mala gana mi cuaderno en la mesa junto a ella. Ella me sonrió. Hush, Hush – Narrado Por Patch Cipriano Se acercó a mí, pero no lo suficiente. Intentaba ver lo que había escrito. Doblé el folio por la mitad, acercándole más a mí, instándola a que se acercara aún más por sus intentos de leer. — ¿Qué has escrito? —quiso saber. Se estaba exasperando. Me encantaba. En un intento por más exasperación, tomé su hoja, la arrugué entre mi puño y la arrojé al cesto de la basura. Funcionó. Enojada sacó otra página de su cuaderno, y preparó su lápiz para escribir. — ¿Cómo te llamas? —me preguntó. Sonreí. Su rostro estaba ligeramente rojo por la cólera. Me imag inaba su cara de un tono escarlata si supiera lo que quería hacer con ella. — ¿Tú nombre? —insistió. Mi nombre es Jev pensé. Pero no vi necesario recordarle esa información. Además, hace años que nadie me llamaba de esa forma. —Llámame Patch. Lo digo en serio. Llámame—me insinué. Guiñe un ojo al decirlo, y contemple con satisfacción como se ruborizaba un poco más. — ¿qué haces en tu tiempo libre? —preguntó. —No tengo tiempo libre. —Supongo que esta tarea lleva nota, así que ¿por qué no me lo pones fá cil? Me recliné en el respaldo de la silla, y crucé mis dedos por detrás de mi cabeza. Era posible que ella no hubiera captado el doble significado de sus palabras. — ¿Quieres que te lo ponga fácil? Otra insinuación. No entendía completamente lo que est aba sucediendo, pero me agradaba. Me gustaba ver como se sonrojaba, ver como se enojaba. Y Aún más, me encantaba verla asustada. Si tan solo me recordaras… pensé, irónicamente, MARY ANN GRINTON Hush, Hush – Narrado Por Patch Cipriano recordando el momento en que tuve que borrar su memoria, luego de haberla conocido en aquel restaurante. —En mi tiempo libre… hago fotos—dije, pensativo. Observé con incredulidad como escribía "Fotografía" en su hoja. —No he terminado—dije—tengo una colección bastante completa de una columnista de la revista digital que cree en la alimentación orgánica, que escribe poesía en secreto y que se estremece de sólo pensar que tiene que escoger entre Stanford, Yale y… ¿Cómo se llama esa grande que empieza con H? —Me miraba sorprendida, con la mandíbula colgándole. Contuve una carcajada. —Pero al final no irás a ninguna de ésas. —Ah, ¿no? Me resultaba placentero hacerla sentir incómoda, pero ya había perdido el rubor. Quería que lo recuperara. Metí la mano debajo de su asiento y la arrastré más cerca de mí. Su cara se tornó roja de nuevo, pero fingió que no le importaba la proximidad. —Y aunque consiguieras entrar en las tres universidades, las despreciarías por considerarlas un cliché del éxito—continué—Pontificar es la tercera de tus tres grandes debilidades. — ¿Y cuál es la segunda? —preguntó, algo molesta. —No confías en nadie—lo pensé mejor—Rectifico: Solo confías en las personas equivocadas. — ¿Y la primera? —Te empeñas en tener todo controlado. Pude sentir como se estremecía. Pero vi que claramente no estaba dispuesta a dejarse intimidar por mí. Casi reí. Ya lo veríamos. — ¿Duermes desnuda? —pregunté. Conocía la respuesta, por supuesto. Antes de entrar al instituto, hubo varias noches en las que iba a espiarla a su casa. —Claro, a ti te lo voy a contar. —Sonreí. MARY ANN GRINTON Hush, Hush – Narrado Por Patch Cipriano — ¿Has ido al psicólogo alguna vez? —No. —Mintió. También conocía la respuesta a esa pregunta. — ¿Has hecho algo ilegal? —Pues Claro que no. ¿Por qué no me haces una pregunta normal? Cómo… qué música me gusta—dijo ella, algo irritada. —No voy a preguntarte lo que puedo adivinar. — ¿Sabes qué tipo de música me gusta? —Barroca. Cuando se trata de ti todo tiene que ver con el orden, el control. Apuesto a que tocas… ¿El chelo? —pregunté, conociendo también la respuesta. —Error. Dsk. Dsk. Resultaban patéticos sus intentos por mentir. Trate de no reír. Miré una vez más sus labios, tratando de no dejarme llevar por el impulso de acercarme y besarla aquí mismo. Deseché ese pensamiento inmediatamente. Una vez más, como ya había pasado en varias ocasiones, contemple el acto de matarla. Algo se removió inquieto dentro de mí. Déjate de babosadas, es la única forma de ser humano pensé, antes de saber si realmente esas emociones se debían a que no deseaba matarla. — ¿Qué es eso? —le pregunté, dirigiendo mi atención a la marca en su muñeca. Sabía lo que era, por supuesto. Ella se alejó, como si repudiara mi contacto. Me sorprendí. —Una marca de nacimiento. —Parece una cicatriz. ¿Eres suicida, Nora? —la miré. Esperaba que contestara "Si, soy suicida y estoy esperando que un ángel caído venga a pedirme que me mate para él" pero sabía que eso no pasaría. — ¿Padres casados o Divorciados? —Vivo con mi madre. — ¿Y tú padre? MARY ANN GRINTON No quería lastimarla… aún. con voz queda. podía sentirlo. Ese tema parecía lastimarla. a por mi moto. observando su mano. ¿Qué me estaba pasando? Era justo como ese día en el restaurante… Cuando tenía la necesidad de… —Espera—escuché llamarla a mis espaldas. Y estaba ansioso por esa llamada. —Yo también—le dije. Me encontré pensando en cuanto había suf rido esta chica antes de que yo apareciera… Si tan solo yo pudiera… El timbre de salida me devolvió a la realidad. — ¡Un momento! —Continué Con el bolígrafo aun en la mano. Ésas son cosas personales. caminando— ¡Patch! Aún no tengo nada sobre ti. me acerqué a ella y escribí en su palma mi número telefónico antes de darme cuenta realmente de lo que estaba haciendo. — ¿Cómo murió? —Lo mataron. Di media vuelta y me encaminé al estacionamiento. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Murió el año pasado. si no te importa—dijo. Sabía que llamaría. tarde o temprano. Estaba incomoda. —Esta noche estoy ocupada—dijo ella. —Tiene que ser duro. Me levanté del asiento rápidamente antes de que me pusiera a consolar a la pelirroja. —le dije.Hush. MARY ANN GRINTON . medio disculpándome. Pero por primera vez no me sentía feliz con esa situación. Fingí estar indignado.Hush. me refiero—dijo él. ¿Aún enojado por lo de la amiga de aquella pelirroja? Tuvo suerte de que fuera su amiga. Rixon dio unos pasos hacia el Arcángel. —dijo. Me recuerda los viejos tiempos—le respondí. escupiendo sangre. me has roto un diente. La verdad es que estaba bien buena. observando su altura. La pelirroja. Por cierto. —Imbécil. —Sí. —Me pregunto que tendrá esta instalación. Dejé de contemplar el cielo y bajé de un salto del Arcángel. —No veo como puede importarte lo que haga—le dije. de verdad. Enarqué las cejas. —Me gusta ver todo desde arriba. La noche estaba fresca y tediosa. y no ella misma. —Ya. Mi intención era romperlos todos—medio gruñí. que te mantiene sobre ella tanto rato— dijo una voz detrás de mí. Medio sonrió. —Que mal. MARY ANN GRINTON . No le di tiempo siquiera de pestañear. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Dos Ya había anochecido. Rixon salió disparado unos cuantos metros hacia atrás. suponía que era algo como eso. ¿Dónde has estado? ¿Acostándote con meseras otra vez? —preguntó. eché el brazo hacia atrás y con toda la fuerza que tenía aterricé el puño en su mandíbula. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —No sé qué mierda es lo que te está pasando… Cada vez que menciono a la pelirroja o a su amiga te pones… activo. Sonrió burlonamente. Lo golpee en las costillas. eso es lo que pasa. Y si tienes intenciones de tocarla. que voy a matarte con mis propias manos. ¿de acuerdo? Si vuelves a acercarte a ella. —Que tú… ¿Qué has dicho? —exigí. MARY ANN GRINTON . si quieres acostarte con ella. y me levante. te juro entonces. ¿Qué pasa Patch. —Bueno. golpee su cabeza contra el suelo. —Mierda. te arrancaré los ojos. tardaré semanas en curarme. Patch. Rixon reía. Pues bien. Consulté mi reloj y me di cuenta que Nora no me había llamado aún. pero estaba nervioso—Ella es mía. la mandíbula. aún cuando fuera una estupidez. Sí. con la sangre comenzando a hervir. Llamará. Me alejé de él en dirección a la salida del Delphic. Si te atreves siquiera a mirarla.Hush. Arremetí contra él. Una sonrisa que daba a entender que no te arrepentías de nada de lo que habías hecho. —Escucha bien lo que te voy a decir. ¿Por qué no lo había hecho? De seguro estaba tratando de reprimirse. Lo solté. el estomago. Lo inmovilicé bajo mi cuerpo. riendo. como si la idea de aquello fuese completamente ridícula. Esto alejará a las chicas—dijo él. En cualquier minuto darían entrada a los humanos al parque. Lo miré incrédulo. te gusta? —preguntó. ¿Te ha quedado claro? No te quiero cerca de ella—gruñí. —Te dije que estaba bien buena—fue lo que dijo. Me subí a mi Ducati Streetfighter y aceleré en dirección al salón de Bo. limpiando mis manos ensangrentadas. rasgué cada centímetro de su piel con mis golpes. porque no voy a volver a repetirlo —dije. te arrancaré las piernas. pues… Está bien. pensé. pensé. dejaré de espiarla en las noches mientras se desnuda—dijo él.. donde seguro me esperaba algo bueno. apretando su garganta con fuerza. Hush, Hush – Narrado Por Patch Cipriano Al llegar al lugar, me adentré en él colocando un billete de veinte dólares en la mano del portero. Seguí mi camino sin detenerme dándole a entender que se quedara con el cambio. Bajé a la sala de billares, y me encontré con que un grupo de tipos que creían tener apariencia mortal me esperaba. Sonreí para mis adentros al ver sus rostros. Pensaban que me intimidaban. —Buenas noches, caballeros—dije, sonriendo ante la palabra "Caballeros" —Vaya, Albert nos ha dicho que eras realmente peligroso, pero no te ves lo suficientemente fuerte para serlo. ¿Seguro que sabes jugar Billar? Esto no es un juego de muñecas—dijo el más grandote. No entendí exactamente que tenía que ver la fuerza con el juego, pero reí incrédulamente con su suposición de que no era "fuerte". —Algún día dejaré que te hagas tus propias ideas—prometí. Tomé el taco de billar de siempre, y lo preparé para la jugada. —Y bien… ¿De qué estamos hablando? —pregunté. —Un yate—dijo uno de ellos. —Pensé que habría algo más valioso. —dije. — ¿qué más puedes querer? —preguntó otro de ellos. Dirigí mi mirada al fondo, donde un grupo de mujeres se encontraban observándonos. Bueno, observándome a mí, para estar claros. Les sonreí. Entre ellas se encontraba una pelirroja de mediana estatura, sus cabellos estaban claramente con un falso rizado. Contuve un gemido de sorpresa. Me recordaba a… Nora. Volví a revisar mi teléfono y no había llamadas aún. — ¿Y bien? —preguntó el mismo tipo de hace un rato. —No importa. El yate es suficiente—dije, volviendo al juego. —Bueno, ¿Qué apostaras tú? —preguntó otro de ellos. MARY ANN GRINTON Hush, Hush – Narrado Por Patch Cipriano —No creo que sea necesario apostar nada, ya que no seré yo quien pierda. Pe ro si tanto quieren saber… una Ducati Streetfighter—dije. —Prepárate a perderla entonces. Sonreí. Era agradable apostar contra alguien tan arrogante. Hacía que el juego se tornara un poco divertido. Mi teléfono sonó. — ¿Si? —contesté, sin mirar el número. —Llamo para ver si podíamos quedar esta noche. Dijiste que estabas ocupado, pero… Tuve que utilizar todo mi autocontrol para no explotar en carcajadas. —Nora. —Contesté, con un suspiro de alivio y diversión. — Creí que no llamarías nunca—Le dije, recordándole sus palabras. —Bien. ¿Podemos quedar o no? —preguntó. —Resulta que no puedo—dije, observando a lo tipos que me miraban frustrados. — ¿No puedes o no quieres? —preguntó, exasperada. —Estoy en medio de una partida de billar—dije, conteniendo la risa aún—Una partida muy importante. — ¿Dónde estás? —En el salón de Bo. No es la clase de sitio que frecuentas—dije. Me pregunto si tu testarudez te traerá aquí, pensé. —Entonces hagamos la entrevista por teléfono. Tengo un par de preguntas… Colgué. Tenía poco tiempo para terminar la partida antes de que Nora llegara. —Bien, terminemos con esto—dije. Unos 30 minutos después, ya era dueño del yate. Y Nora aún no aparecía. MARY ANN GRINTON Hush, Hush – Narrado Por Patch Cipriano Otro grupo de tipos fornidos se acercó para apostar un Ferrari Italia Turbo 480. Estaba a punto de hacer el tiro ganador, cuando escuché mi nombre. — ¡Patch! El taco resbaló entre mis dedos clavándose en la mesa. Mierda. Inmediatamente entré en la mente de todos los que me rodeaban, haciéndoles ver que había ganado. No quería perder mi Ducati. Fijé mi atención nuevamente en Nora, y observé que el Portero estaba tratando de sacarla del lugar. Sonreí. —Está conmigo—le dije al tipo, notando que la sujetaba. Suéltala, Rugí en su mente. Pareció desconcertado un segundo, y aflojó su agarré. Ella se aprovechó de eso y se acercó a mí, liberándose de los pétreos brazos de aquel hombre. Un estremecimiento recorrió mi cuerpo al verla, y seguí sonriendo. —Perdona por colgarte. La cobertura aquí no es muy buena—dije. Me di cuenta de que teníamos demasiado público. Miré a nuestros espectadores y les di a entender que aquí sobraban. Uno a uno, se fueron alejando del lugar. El último de ellos chocó con Nora, y la hizo trastabillar. Tuve que apretar los puños y concentrarme en mantener la calma para no saltarle encima aquí mismo y partirle el cuello. Sacudí la cabeza dándome cuenta de lo que había pensado. ¿Qué estaba pasando conmigo? — ¿Bola Ocho? —Preguntó. — ¿Cómo están las apuestas? Sonreí. ¿Entablando una conversación? —No Jugamos por dinero. ― Qué mal. Iba a apostar todo lo que tengo en tu contra. ―Levantó su trabajo, dos líneas ya completas―. Unas pocas preguntas rápidas y me voy. MARY ANN GRINTON ¿Cuántos puros por noche? ¿Uno? ¿Dos? ― No fumo. El rojo llenó sus mejillas. MARY ANN GRINTON . ―Dijo. ¿Tú sueño más anhelado? ―preguntó.Hush. Puse una mano en mi mandíbula como si estuviera pensando. ― Eso no es gracioso. pero te hizo ruborizar.. la haría ruborizar. El mejor mexicano en la ciudad. ― Asumo que contribuyes a la atmósfera. Escribió "Si. apoyándome en el palo de billar―. ― No. ¿Cánc er de pulmón? ¿Se supone que eso es profético? Se abanicó con el trabajo. Solo tenía un sueño en la cabeza últimamente. ― ¿Religión? Bueno. No lo pensé mucho. ― ¿Trabajas? ― Limpio mesas en el Borderline. ―Dijo. ― Religión no. Y. colocando el papel entre la bola ocho y la morada lisa. usando la rodilla como tablero de escritura. ― Besarte. fuma puros" en la línea tres. ― Mm-hmm. Pero casi esperaba que la hiciera. ― ¿Cretino? ―Leí en voz alta. ― Espero que no te favorezca. ―Dije. Se sentó sobre la mesa.. Culto. para mi agrado. no recordaba lo bien que se sentía. Cruzó las piernas. esa no era mi pregunta favorita. Hace mucho que no sonreía verdaderamente. ― Estás jugando sucio. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Fijé mi mirada en el papel. sonriendo ante lo que había hecho. ― No me estás seduciendo. ― Todavía no he empezado. creyó que mentía. ― ¿Estás negando haber suspendido? ― Te estoy diciendo que no fui al instituto el año pasado. La proximidad envió chispas ardientes a mi estomago. Nunca creería en la verdad de mis palabras. Saltó de la mesa y me encaró. ¿Cuántas veces has suspendido la biología de segundo año? ¿Una? ¿Dos? ― Vee no es mi portavoz.. sin mucho éxito. ― ¿No has ido a la escuela. Bajé el taco de billar y le hice señas para que se acercara. ― Crees que estoy mintiendo. Había planeado seducirla para que confiara en mí antes. Nunca antes he ido a la escuela. tal y como hacen los niños cuando quieren contar un secreto. nunca? Si eso es cierto. ― Y resulta que tengo necesidad de sacrificar a una mujer sana. ― Vee me dijo que vas en último curso. que no creo que la tengas. pero si estás lista ahora.Hush. ¿qué te decidió a venir este año? ― Tú. ¿Otro secreto? No es tan aburrida como esperaba. ― ¿Faltaste sin autorización? Tenía la necesidad de responderle sinceramente. y tienes razón. ―Una vez más. MARY ANN GRINTON . ― ¿Un secreto? ―Dije en tono confidencial―. Miré su rostro y contuve una sonrisa.. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ― ¿Perteneces a un culto? ―parecía sorprendida. Sabía qué pensaría que me estaba burlando de ella. No se acercó. ― Me lo pones fácil. Nora. ―Incliné la cabeza a un lado. Su cuerpo me correspondía. No sin estremecerse ligeramente. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Sabía que eso la haría sentir asustada. Esos fríos ojos gris pálido son sorprendentemente irresistibles. Y quería. Me arrepentí luego de haberlo dicho. siempre dejaba claro que era lo que le molestaba y lo que no. Ella era como un libro abierto. ― Tus ojos. Me voy. Era la verdad. mi actitud era sarcástica y engreída. Eso la mantendría alejada. Antes de que pudiera llevar a cabo lo que quería. noto el suave fruncimiento de este al decir cierta palabra… ― Repite "provocarme". Provocarme. Mirando sus labios―. pero solo un poco. de alguna manera. Su puse que para una humana. si quería besarla. Más de lo que deberías. Me acerqué a ella lo suficiente como para que solo hiciera falta una inclinación.Hush. ― Esa no es una respuesta de verdad. ― ¿Hacer qué? ― Esto. MARY ANN GRINTON . estudiándola desde un nuevo ángulo. Mi mirada que estaba meticulosamente en sus labios. se alejó. y así no pondría tantos peros a la hora de matarla. Pareces saber exactamente qué decir para ponerme incómoda. pero no quería que saliera corriendo… quería mantenerla allí. ― Admites que lo haces a propósito. ―Dijo―. Bien. Y esos labios sensuales atraen como un imán. Tu boca se ve provocadora cuando lo dices. Me miró como intentando deducir por qué actuaba así. ― Pareces saber mucho sobre mí. ― Eso es suficiente. Hush, Hush – Narrado Por Patch Cipriano ― Hemos terminado. Termina tu partida de billar. ―me entregó con brusquedad el palo de billar. No lo tomé. Quería que se quedara. ― No me gusta sentarme a tu lado. ―Dijo―. No me gusta ser tu compañera. No me gusta tu sonrisa condescendiente. ―Noté como su cuerpo me decía que estaba mintiendo―. No me gustas tú. ―Dijo, tratando de convencerse más a si misma que a mí, y empujó el palo contra mi pecho. ― Me alegro de que el Entrenador nos pusiera juntos. ―Dije. Pensando en el tipo que se hacía llamar "Entrenador" ― Estoy trabajando para cambiar eso. ―Replicó. Sonreí ante la idea de que lo intentara. Sabía que el entrenador accedería a su petición, pero si yo influía en su mente, o en la de Nora, eso no pasaría. Mi mirada se desvió a su cabello, y estirando mi mano, dejé caer al suelo lo que tenía allí. ― Un papel. ―le expliqué. Observaba mi muñeca. ― Ese es un desafortunado sitio para una marca de nacimiento. ―Dijo. Mierda. Bajé la manga casual pero perceptiblemente sobre la muñeca. ― ¿La preferirías en algún lugar más privado? ―pregunté, tratando de distraerla. Funcionó. ― No la preferiría en ningún sitio. ―Parecía nerviosa―. No me importaría si no la tuvieras en absoluto. ―Realmente estaba nerviosa―. No me importa tu marca de nacimiento, punto. Bien. Ya tenía suficiente. ― ¿Alguna pregunta más? ―Pregunté―. ¿Comentarios? ― No. ― Entonces te veré en bio. La vi vacilar, como si quisiera decir algo más. Luego de que se lo pensara mejor, salió disparada hacia la salida. La observe fijamente hasta que la vi desaparecer. MARY ANN GRINTON Hush, Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Tres Llegué al Delphic cerca de medianoche. Una fina lluvia caía sobre mí, ciñéndome la ropa al cuerpo, y el cabello al cráneo. Subí al Arcángel en un intento desesperado de poder pensar con claridad, de despejar mi mente. Desde que Nora había salido del Salón de Bo., No había dejado de pensar en ella. No entendía que me sucedía, pero cada vez qu e imaginaba las diferentes formas en las que ella podía morir, mi cuerpo se estremecía. No era que lo sintiera, porque no puedo sentir ningún tipo de sensaciones, pero lo sentía a un nivel emocional. Era como si fuese mi alma (Si es que tenía una) la que t emblara al solo pensar en la muerte de esa chica. Recuerdo la primera vez que la vi, en su habitación, justo el primer día que comencé a observarla a diario. Había pensado que no había chica como ella. Era muy guapa, si, pero no era en eso en lo que me había fijado. Tenía carácter, y actitud. Me había dado cuenta que era fuerte, al menos emocionalmente. Y eso me gustaba. "Ya era tarde. La mayoría de las personas se encontraban durmiendo a estas horas de la noche, pero ella no lo estaba. Se encontraba sentada en el suelo, reposando la espalda en su cama, con la vista perdida en una pequeña caja plateada que sostenía en su regazo. Su cabello estaba suelto, y los alborotados rizos caían a cada lado de su cara. Tenía la cabeza baja, como si estuviera llorando. Su cuerpo daba sacudidas, como cuando tratas de contener los sollozos. La miré fijamente. No podía creer que ella fuera la descendiente que necesitaba para llevar a cabo el sacrificio. No tenía ningún parecido con Chauncey… Lo que me hacía preguntarme si tal vez, había sido un error. Entonces mi mirada se posó en su muñeca, y contuve un gemido. Era ella. De eso no había duda. Lástima. ¿Lástima? ¿Lástima por qué? Pensé. Luego sacudí la cabeza. MARY ANN GRINTON Hush, Hush – Narrado Por Patch Cipriano La rama donde me encontraba emitió un ruido, y ella levantó la vista. La miré a los ojos, aún cuando sabía que ella no podía verme. Se encontraba confundida… y contemple con gran curiosidad como su rostro estaba completamente seco. Pero sus ojos reflejaban dolor y angustia. Suspiró y regresó su mirada a unas fotografías que sostenía. —Lo siento, padre. Yo tenía… yo tenía que haber estado contigo… Yo… yo tuve que acompañarte—susurró, cerrando los ojos con fuerza. Sus puños se cerraron con fuerza, tiró las fotos dentro de la caja y la cerró de un golpe. Se levanto, y secó una pequeña lágrima que había logrado escaparse. —No voy a llorar—susurró, tratando de convencerse a sí misma. —No voy a llorar, no lo haré. Una parte dentro de mí se removió inquieta. Quería entrar, consolarla y decirle que todo estaba bien, que allí estaba yo con ella. Pero esa era mi parte débil, y yo no era débil. Traté de regodearme de su sufrimiento, y lo logré. Imaginando mis carcajadas al momento de sacrificarla. Me estremecí, pero lo ignoré. Bajé del árbol de un salto y me encaminé al D elphic. No tenía medio de transporte en ese entonces. Estaba deseando ansiosamente que llegara el inicio de clases, momento en el cual se activaría mi plan para asesinarla." Seguía pensando en ella cuando me encaminé a los túneles, en dirección a mi casa. Al llegar, me quité la ropa y me metí entre las sabanas. No era que yo necesitara dormir, pues los ángeles caídos no duermen técnicamente. Pero mi cuerpo si lo necesitaba. Así que cerré los ojos, y me sumergí en mis pensamientos… que eran sobre Nora. El "Entrenador" estaba malgastando saliva hablando aún sobre lo que él creía que era el sexo. Yo no le prestaba atención, estaba concentrado en mi compañera, la cual estaba concentrada en algo más. Observé como escribía "Poco dispuesto a cooperar con el trabajo. Demuestra escaso interés por el trabajo en equipo". Contuve una risa. Eso era cierto… en parte. No me interesaba trabajar con nadie. Nadie, que no fuera ella. MARY ANN GRINTON trata de desviar la atención a su cuerpo. MARY ANN GRINTON . esperando su respuesta. Sonreí para mis adentros. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Seguí observándola… parecía preocupada. ― ¿Qué cualidades te atraen de un posible compañero? ―dijo. esperando a que ella me dijera por qué tomaba esas cosas. y la estudié. así que sonreí abiertamente. Se ruborizó. ― ¿Podría repetirme la pregunta? ―dijo ella. Ella parpadeó sorprendida. Se los metió a la boca. ― ¿Nora? El entrenador se encontraba frente a Nora. Metió una mano en su mochila y sacó dos comprimidos de algo que tenía un asqueroso color gris. y articulé las palabras "Estamos esperando" para que se diera prisa. y algo confundida. ― ¿De un posible compañero? ―Venga. y movió sus manos. lo cual pareció irritar al entrenador. Me recliné en la silla. ―Pues piénsalo ahora. eso ayudaría―dijo el entrenador. sí. ruborizada. ― ¿Quiere que haga una lista de las características de un…? ―De un posible compañero. curioso. esperando su respuesta. que cuando está nerviosa. Los inmaduros que la rodeaban soltaron una pequeña risa. Enarqué las cejas. no tenemos toda la tarde. nos interrumpieron. Me había dado cuenta. ―Nunca lo he pensado―respondió al fin. Una parte de mí sabía que lo haría. exasperado. Pero como no.Hush. Me miró. y rápido. y los tragó. más para mí mismo que para los demás. Miré de reojo a Nora. ― ¿Vulnerable? ¿Y eso? ―preguntó. Vulnerable―dije. Patch. pero de igual forma escucharon. indulgente. ―dijo ella. pero me vi interrumpido por Vee. Reí. y explicó lo que parecía el motivo de su pregunta. haciendo énfasis en "Son" y no decir "somos". la cual volvió a ruborizarse. ―La complejidad de la atracción (Y reproducción) entre los humanos. Atractiva. al parecer hablaba de mí. MARY ANN GRINTON .Hush. y luego se apartó. ―Inteligente. ―El problema de la atracción entre humanos. El entrenador la miró. es uno de los rasgos que nos diferencian de otras especies―dijo. Tuve que hacer un esfuerzo enorme para no mandarla a callar a gritos. Cambié de posición. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Entré en la mente del entrenador para que se dirigiera a mí. sobre-protector y un poquito perverso―dijo. es que nunca sabes si esta será correspondida―dije. ―Excelente observación―dijo el entrenador. ―Los humanos son vulnerables―dije. Nadie se dio cuenta―Porque se les puede hacer daño. rico. ―Guapísimo. pero estaba mirando al entrenador escribir mis cualidades en la pizarra. Ya que ella no recordaba a Rixon. ―Tu turno. ― ¿Esto tiene algo que ver con el tema que estamos estudiando? Porque en el libro de texto no dice nada sobre las características que debe reunir el compañero ideal. Luego le pidió las cualidades que busca en un chico. Abrí la boca para contestar. Le di un rodillazo a Nora. y lo hizo. girando mi cuerpo levemente en dirección a Nora. todos los alumnos estuvieran prestando atención a una de sus clases. ¿Cómo averiguarías si es una presa accesible o. pero me gusta coquetear con ella. Parecía realmente feliz de que por primera vez. Otra vez se sonrojó. morenas. Estúpido. Ahora viene lo más importante. algunas de pelo azabache. ―Los vasos sanguíneos del rostro de Nora se están dilatando y tiene la piel caliente. Un minuto después. Patch. Más de lo sanamente posible. pelirrojas. ―No estoy sonrojada―dijo. Has encontrado a una chica que es tu tipo. Rubias. mientras que otras parecen tímidas. deseando que fuera el hombre que tenía en frente la persona que debería matar. y no la chica que tenía a un lado. pero no sabe manejarse―dije. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Resoplé. Era un problema. en cambio. quiere que te largues? Pensé. Recordé entonces la primera vez que hablé con Nora realmente… ―La estudiaría. Algunas son habladoras. Ella no me lo va a contar a la primera. Le gusta recibir atención. ¿Me mira de frente? ¿Aguanta la mirada y luego la aparta? ―miré de reojo a Nora― ¿Se muerde el labio y juega con su pelo. ―Estupendo. sin pensar. ¿De otras especies? Yo era "De otra especie" y la forma de atracción era exactamente igual a la de los humanos. Imaginemos que estás en una fiesta. y le di otro rodillazo. Me preguntaría qué piensa y qué siente. ―Muy bien. como está haciendo Nora en este momento? Más coqueteos. y se sonrojó un poco más. mi nombre me trajo de vuelta a la realidad. ― ¡Muy bien! ―exclamó el entrenador.Hush. MARY ANN GRINTON . ―Ella es una presa―dije. ¿Cómo le comunicarías tu interés? ―Me acercaría y le hablaría―dije. Siguió hablando de estupideces mientras yo me perdía en mis pensamientos. por lo que tendré que prestar atención. Observé a Nora con más intensidad. Ves a muchas chicas de diferentes formas y tamaños. Sabe que la están cortejando. ¿Ridículo? Bueno.Hush. Sonó el timbre. por favor? ―solicitó Vee. Coloqué mi mano en el respaldo de su silla. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ―Está nerviosa―dije. Resoplé bajito. saliendo por la puerta. Eso pareció molestarla y devolverla a la realidad. La miré a los ojos con toda la intensidad posible que pude reunir. ―Mañana. para desviar la atención de su rostro a su figura. ―Se acaricia el brazo. por supuesto. Sin que se diera cuenta Nora. Repitamos cuando quieras―dije. ―Ha sido divertido. Justo en ese momento. Son sus puntos fuertes. solicitando que saliera inmediatamente. Casi solté una carcajada. como si eso fuese lo más normal del mundo. ―Esto es ridículo―dijo. Él lo hizo. Arrimó su silla más adelante. pensé. Levantó la barbilla. sino a McConaughy. Me alejé de ella. tomé su lugar entrando en la mente de todos. Ambos perdidos en el otro. ― ¡Ahí lo tienen! Así funciona el proceso Biológico―dijo el entrenador. y me perdí en las profundidades de sus ojos grises. ella no hablaría con él. entre en la mente del entrenador. simulando que ya me iba. y eché mi silla hacia atrás. simulando dignidad. no me viera a mí. asegurándome de que solo yo lo escuchara. Por eso. sin mi influencia. MARY ANN GRINTON . destrocemos esa dignidad que queda. Sabía también que él haría lo que le pidiera. sin decir palabras en realidad. ― ¿Ahora podemos hablar de sexo. Lo sabía. "Vulnerable" dije. Quizás a su piel. dejando caer mi mano. Hablaría conmigo. Ella me devolvía la mirada sin decir nada. para que todo aquel que mirara hacía donde me encontraba. Lean el capítulo siete y vengan preparados para un debate―respondió él. Sabía que Nora vendría a hablar con él sobre mí. ¿Qué puedo hacer por ti? ―le pregunte. ―A mí me gusta la nueva disposición. dibujando un partido mientras sentía a Nora acercarse. Cuando estuvo frente a mí. y levanté la vista para observar una copia del código de conducta del instit uto y los derechos de los estudiantes sobre la mesa. contuve las ganas de soltar una risotada. ―La norma dice que ningún alumno debería sentirse amenazado dentro del colegio―dijo. Aunque claro. admirando el trabajo que había hecho. Estaba seguro. Sabía jugar muy bien su juego. Después de todo. Nora dejó caer algo en la mesa. Sin ninguna duda. ―Quiero decirle que la nueva disposición en clase y el nuevo plan de trabajo me incomodan―dijo ella. Tuve que morderme la lengua para no reír. no sería común que el entrenador se riera de ella en estas circunstancias. que milagrosamente alguien haya dibujado un marcaje perfecto en el libro sería extraño para el entrenador. Pero luego de que mi malditamente perfecto ingenio le diera la victoria. pero ¿Amenazada? ¿Por mí? MARY ANN GRINTON . y no quería que acudiera a un personal de rango mayor. con total serenidad. ¿Se sentía amenazada? ¿Por qué? Bueno. yo la había asustado en algunas ocasiones. ―Dime. tampoco me preocupaba imitarlo a la perfección. y obtuve una postura mucho más cómoda en lo que a mí respectaba: empujando la silla hacía atrás y entrelazando las manos detrás de mi nuca. olvidaría ese hecho. así que me entretuve con él. Sería un poco más problemático tener que fingir ser la directora o alguien de igual importancia. Sentí como si me fuera abofeteado. Nora. Enarqué las cejas.Hush. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Cuatro Sobre el escritorio había un libro de jugadas. de la misma forma que el entrenador lo hubiera hecho. El truco que puse en su mente se haría cargo de todo. Me costó un montón no mostrar signos de mi incertidumbre. Casi tanto como este marcaje hombre a hombre que estoy preparando para el partido del sábado―dije. ¿Qué? ¿Tener que compartirla? ¿No sentarme más a su lado? ¿Tener que soportar como Vee la lanzaba a los brazos de un desconocido solo porque si? Estaba loca. Al parecer no lo había notado. Hush – Narrado Por Patch Cipriano De pronto desee haberla tratado mejor desde un principio. E imaginé nuevamente mis labios sobre los suyos. Yo le echaré un cable―dijo. porque continuó―Me ocuparé de la tutoría de cualquier alumno de Biología si vuelve a sentarme al lado de Vee. y cerré los puños con fuerza para contenerme de abalanzarme sobre ella y… hacer cosas indecorosas. ― ¿Te sientes amenazada? ―pregunté. ¿Cómo era que de pronto quería evitarme a toda costa? ¿Por qué? ― ¿Lo has visto hoy? Estaba implicado en la clase. no esperó a que siguiera hablando. Bufé ligeramente.Hush. Pero aun así. una parte de mí no lo quería. Casi. ―Eso queda descartado―dijo. Afortunadamente. eso está mejor. ―Es lo que pasa cuando no puedes mirar a tu lado y encontrarte con la respuesta correcta―dije. pero ha sido sentarlo a tu lado y… ¡bingo! Su calificación en esta asignatura va a mejorar―Aunque tampoco era que me interesara la asignatura en absoluto. ―miré el reloj. ―El problema de Vee es la falta de constancia. ―Patch podría necesitar un tutor. Mierda. Y quisiera proponer una solución. ¿Algo más? MARY ANN GRINTON . ―Y la de Vee va a empeorar. ―me limité a decir. Bueno. En todo el año no le había oído decir una sola palabra. pero ¡maldita sea! ¿Por qué? Mientras más rápido se hiciera a la idea de que era peligroso para ella. ―Guardé silencio. Casi me sacó la lengua. mejor. ―De momento seguiremos así. ―Me siento incómoda. Bueno. ―Llego tarde a una reunión. el entrenador ya debería estar por regresar. La incomodidad siempre es más fácil de controlar pensé. Me quedé congelado.Hush. No es conmigo con quien tienes problemas―dijo. recuerda los viejos tiempos. ―Pensé que no te atraía el arcángel―le dije. y lo de darle clases particulares a Patch iba en serio. ―Esperemos unas semanas a ver qué pasa―Tendría que enamorarla demasiado pronto―Ah. pero no tenía nada más a lo que aferrarse. ―dijo. ¿Pero qué mierda? ¿Cómo Rixon conocía su nombre completo? ―Vaya. y comencé a caminar en su dirección con los puños cerrados. ―Solo estaba probando que se siente. Tienes razón. Me detuve. Me giré para ver a Rixon bajar del Arcángel. ― ¿Te suena el nombre de Nora Grey? ―preguntó de pronto. deja tus celos niño malo. restándole importancia. Comencé a caminar en dirección a mi casa. Se encogió de hombros. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Pareció pensarlo. pero lejos de notar algo. sino? Se encogió de hombros. ―Vaya. Me giré sobre mis talones. Demasiado cerca. Subí a mi Ducati y aceleré en dirección al Delphic. Cuento contigo. ―Creo que es el nombre de esa pelirroja que tanto te gusta. y el ceño fruncido. Me levanté del escritorio y salí del aula en dirección al estacionamiento. justo cuando observaba al entrenador pasar por el otro pasillo. ― ¿Con quién entonces. Es su nombre. MARY ANN GRINTON . ¿No? ―dijo él. hasta que apareces. Los escuché hablando sobre ella. y un ataque. ― ¿Ataque? ¿Qué ataque? ―pregunté. ―Rixon. y que lo más probable es que la atacaran hoy en la biblioteca. ―Quiero llevarme un libro―le dije. Me encaminé hacía donde se encontraba la bibliotecaria. ―Chicos. Mierda. venga ¿A dónde vas? ¡Patch! ―gritaba. MARY ANN GRINTON . bueno. Al parecer saben que ella y su amiga estarán allí. Soltó unas carcajadas. La bibliotecaria enarcó una ceja. Dos. tenía que tener un motivo. y aceleré en dirección a la biblioteca. ―Quienes son… ¿Quiénes? Me estaba exasperando. Llegué a la biblioteca justo a tiempo.Hush. ―Vale. uno de historia―respondí. No podía permitir que algo le pasara a Nora. ―dijo él. Volvió a encogerse de hombros. Y… oye. ―Eh. Si estaba en la biblioteca. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ―No sé quiénes son. tranquilo. y todo parecía Normal. más te vale que digas todo lo que sabes si no quieres hacerle una visita de urgencia al odontólogo más cercano. ― ¿Qué libro? ―preguntó. Corrí de nuevo hacía mi Ducati. Me quedé pasmado. a mi parecer. Lo único que escuché fue que ya habían encontrado a Nora Grey. Nora se encontraba en una de las me sas junto a Vee. vale. No todavía. No le presté atención. y me escondí junto al coche de Vee. Bueno. estaba de regreso con un libro en las manos. allí hay un chico (Creo que es un chico) extraño. Ella se ruborizó. El que sea―le dije. Me prepare para irme―Espera. MARY ANN GRINTON . de seguro Rixon había escuchado mal. Me lo entregó. ― ¿Notas a alguien extraño? ¿Alguien que tenga pinta de estar siguiendo a alguien más? Vi la clara decepción en su mirada. Bingo. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Ahora enarcó las dos cejas. Salí de la biblioteca. ―Lo siento. Ella asintió. ― ¿Algo más que te pueda ofrecer? ―preguntó. cortando su ensoñación. y nuestros dedos se rozaron. Pude sentir como su cuerpo se estremecía. ―Mira detrás de mí―le dije. ― ¿Tu número? ―pregunté. no…―dijo. Me sonrió esperanzada. ―Sí. señalando las tarjetas. Pasaron unos largos minutos en lo que la desesperación me carcomía hasta que al fin las vi llegar. Tomé una tarjeta―Tal vez un día te llame. Tiene una sudadera con capucha que le cubre el rostro―dijo.Hush. maldita sea. ― ¿Nombre del libro? Bueno. supongo que sí―le dije. en la oscuridad. Miré unas tarjetas que reposaban en el escritorio. esperando. este era el efecto que causaba en las mujeres. Sí. sin embargo comenzó a barrer la biblioteca con sus ojos. ―Da igual. Unos pocos minutos luego. ruborizada. Enarqué las cejas ante su insinuación. Solo deme un puto libro. y solté media sonrisa. y me recorrió el cuerpo entero un escalofrío. Si estaba detrás de Nora. MARY ANN GRINTON .Hush. Y no era humano. Echó a correr antes de que pudiera ver quién era. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Luego de que Nora y su amiga desaparecieran. o de entrar en su mente siquiera. lo vi. Vamos. ―Vaya. Debería considerar más a fondo el hecho de que Nora no debería importarme en lo más mínimo. Solo esperaba que el perseguidor de Nora no fuera quien yo estaba imaginando. Casi. Se levantó del sillón donde se encontraba. MARY ANN GRINTON . pero no tuve tiempo. Jev. Nora no llegó a su casa.Hush. y los Nefilim. salvo su sacrificio. Pero sentía curiosidad. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Cinco Intenté seguirlo. luego de la biblioteca? La respuesta era tan obvia que casi reí. ¿A dónde mierda se había ido esta chica? No tenía tiempo para andar de niñera salvándola de todo el peligro que la rodea. El Delphic. Su casa. Me equivoqué. ¿Por qué alguno de ellos seguirían a Nora? Bajé de un salto del árbol donde me encontraba a la espera. ―Venga. cierra el pico―le espeté. y no estaba de humor para las bromas de Rixon. por más que estuve por media hora esperándola. subí a mi moto y aceleré al Delphic. Aceleré la moto a todo lo que daba. Perdí su rastro al instante en que siguió el Neón. Tuve que hacer un esfuerzo para llegar a los túneles sin ser visto. y los únicos que poseían la capacidad de correr a esa velocidad eran los ángeles caídos. Piensa rápido me dije. Bueno. ¿A dónde podría ir N ora a estas horas. estaba repleto de personas. ¿Me visita la realeza? ―dijo Rixon al verme llegar. y se acercó a mí con una mirada acusatoria. como de costumbre al anochecer. ¿Por qué la seguirían? ¿Qué habría hecho esta chica como para que fuese lo suficientemente fuerte y provocar un ataque? Su perseguidor no era humano. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ― ¿De dónde has sacado el Yate que está a la orilla del río? Venga. ―Lo gané en Bo. ―Es mi sitio. levemente sorprendidas. La verdad es que no me sorprendía que aún no se dieran cuenta que la única materia que cursaba era Biología. Entré al salón de clases. Su mejor amiga. ―Lo quiero―dijo él. las chicas se vuelven locas en los Yates. ―Venga. Ambas me miraron. ―Si en algún momento te pido que siguas a alguien. A mi si. no importaba. ¿Vale? Llegué al instituto justo a tiempo para biología. cuando debería estar en otras clases. Vee.Hush. Abrí la boca para decirle que se buscara su propio Yate. y pude escuchar a Nora. Y me gusta tener el sexo asegurado. si no te importa―le dije. cuando se me ocurrió algo mejor. somos amigos ¿No? Y cada vez que vas a jugar billar regresas con algún juguete nuevo. ―Tú dirás. Sonreí. no me vayas a decir que no es tuyo porque encontré allí una copia de las llaves de tu Ducati―me acusó. lo seguirá s sin preguntar. ―Vale. Pero teniendo en cuenta lo estúpidos que llegaban a ser los humanos. pero solo con una condición―le dije. Me devolvió la sonrisa. ―Patch es lo que menos me preocupa. bueno. MARY ANN GRINTON . No te hará falta. estaba sentada a su lado. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Esperé paciente a que Vee se pusiera de pie y se colgara la mochila al hombro.Hush. ¿Una noche dura? ―le pregunté en un susurro. pero no presté mucha atención mientras discutía los puntos de un cuestionario que teníamos que llenar. Jev. ―Te vi en la biblioteca―susurró de vuelta. Observé que Nora tenía el ceño levemente fruncido. ―Se llama ducharse―dijo. ―Y te desnudas. Matar. Conozco el ejercicio―le dije. Pero no podía soportar tanta lentitud. me senté. Eso pareció incomodarla. esforzándose por parecer concentrada en el examen. Esta no era precisamente mi forma de concentrarme. El entrenador tomó su lugar en la clase. La im agen de Nora dándose una ducha mantenía mi mente ocupada. Cuerpo humano. queriéndole gritar "Mueve ese asqueroso culo lejos de Nora ¡Ahora!" Cuando finalmente se largó. y parecía iniciar una guerra en su interior. y estaba estirando sus dedos para lo que supuse sería liberarse de un calambre. ―Estás guapa. prosiguió―Utilizas jabón. Me recliné en la silla con las piernas estiradas. Me gustaba ese ligero olor a fresas. ―Pareces cansada. Contrólate. Como no contesté. pero antes de que pudiera cambiar el tema. ―Gracias―respondió. ―Y además hueles bien―agregué. No parecía ningún perfume… solo su olor natural. champú y agua caliente. sonó la campana. Sacudí levemente la cabeza para tratar de despejar esas imágenes. Ya vuelven las cursilerías. Sacrificio. como siempre―le dije. Estirando mi brazo le indiqué el pasillo. Era perfecto. Se ruborizó levemente. MARY ANN GRINTON . y comencé a acalorarme. porque no tenía intenciones de responder a sus preguntas . ―Después de la biblioteca. Me incliné. ―Pareces un poco nerviosa. MARY ANN GRINTON . Hush – Narrado Por Patch Cipriano Claro.Hush. Algo dentro de mí se removió inquieto al notar que Nora se había puesto nerviosa. era adivina. ―El punto culminante de mi noche―mentí. ― ¿Me estabas siguiendo? Eché la cabeza atrás y reí por lo bajo. me miró y sonreí. mientras respondía algunas pre guntas del cuestionario. dejando caer el bolígrafo al suelo. Me limité a observarla. fingiendo estar preocupado. ¿Qué te ocurre? ―le pregunté. debí imaginar que Sherlock Holmes notaría mi presencia. Nora. lo tomé y se lo devolví. ― ¿Me estás siguiendo? ―insistió. ― ¿Por qué iba a seguirte? ―Dímelo tú. ―Fui a sacar un libro―respondí. ¿Qué. Como intuyendo que la miraba. Se quedó en silencio unos segundos. además de detective? ― ¿Qué estabas haciendo allí? ―insistió. Lo cual era estupendo. pero conteniendo con todas mis fuerzas las ganas de reí rme. ¿Adónde fuiste? ―preguntó. Chica lista pensé. El entrenador llamó su atención y Nora volvió a concentrarse en el examen. ― ¿Por qué lo preguntas? ― ¿Me seguiste? Lo intenté. lo cual me pareció altamente aburrido. yo hablé de ti. Y maldije para mis adentros. ¿No estás de acuerdo? Esperé que protestara por lo de "Vulnerable" pero no lo hizo. En contra de mi voluntad. atractiva. ― ¿No lo somos? ―No es una novedad. Nora me detuvo. Ni en broma. ―Que no somos… compatibles. Lástima. ― ¿Le dirás al entrenador que nos cambie de sitio o no? ―Paso. mi corazón se agitó. Si le explicas la situación… ― ¿La situación? ―la interrumpí. el adulado profesor complació a Vee en cuanto a su clase sobre el sexo. vulnerable. Empiezas a gustarme. Vaya. Me senté en el borde del escritorio.Hush. para mí sí lo era. Y finalmente. Creo que el entrenador consideraría cambiarnos de sitio si tú se lo pides. ― ¿Qué pasa? ―Sé que no quieres sentarte a mi lado más de lo que yo quiero sentarme a tu lado. cuando estaba dispuesto a marcharme. porque era cierto. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Finalmente. ― ¿Podemos hablar? ―preguntó. ―Dije: inteligente. ―Pues retíralo. MARY ANN GRINTON . ¿Qué no se enteraba de nada? ―Cuando el entrenador me solicitó mi lista de atributos deseados en un compañero. Hush. Nora? ―No. sonriendo algo tensa. me alejé en dirección al estacionamiento. y le hice un guiño. No voy a tentar a mi suerte. Y como un demonio invocado. pregunté: ― ¿Alguna otra cosa. Con el pulso repentinamente nervioso. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Nora me estaba empezando a… en realidad era algo más que gustar. Nora negó. Nos vemos mañana―dijo. y tú lo sabes―dijo. Luego de un par de cometarios entre ellas que me hicieron reír. Vee apareció. ―Lo esperaré con ansias―dije. ―Me temo que podría acabar sentado al lado de Vee. ― ¿Interrumpo algo? ―preguntó. ―Creo que estarías mejor con otro compañero. MARY ANN GRINTON . y no encontraba forma de evitarlo. La mañana con Nora en el instituto me había dejado algo pensativo. y continué con mi tranquila inspección al techo. y por una fracción de segundo. ― ¿Qué pasa. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Seis La tarde transcurría de lo más brutal. Me revolví en mi cama. oficialmente habría muerto en un par de horas. Pero no. ¿Por qué no podía sacármela de la cabeza? Desde que coqueteamos en aquel restaurante. En una noche en el billar ganaba lo que podría ganar en dos meses en el Borderline. quise que fuera ella. mientras observaba el techo de mi habitación. ¿Qué puede tener ella de especial? Suspiré frustrado. y colgué. ―Veré que puedo hacer―dije. ¿Por qué pensaba que no éramos compatibles? Supuse que al mirarla y describir las cualidades que busco en una compañera. pero ¿qué pasa con eso? Todas las mujeres me atraen. la primera vez que la vi… ¡Mierda! Me había atraído. ¿Trabajar? ¿Para qué seguir trabajando en el Borderline? Desde que había entrado a jugar en Bo. Si fuese humano. por supuesto. Frank? ―contesté. Cipriano―gruñó. ¿Acaso lo ignoraba? ¿Me ignoraba ella a mí? ¿Por qué no podía yo ignorarla a ella? Maldición.Hush. porque no voy a volver a salvarte el culo . y estos fuesen capaces de morir de aburrimiento. MARY ANN GRINTON . ― ¿Qué pasa? ¡Como me preguntas qué carajos pasa! ¿Por qué no has venido a trabajar? ¡Te he salvado el culo muchas veces! ¡Me debes un millón de favores! Más te vale presentarte hoy. Me atrae. se habría dado cuenta que hablaba de ella. Siempre lo ha hecho. no me hacía falta ningún trab ajo. No era Nora.. Mi teléfono sonó con una llamada entrante. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Pero ni siquiera apostando podía dejar de pensar en Nora. Pero. Es mía. El momento en el que Nora me preguntó si la estaba siguiendo… Aquellos nervios… No se refería al hecho de que estaba en la biblioteca… O bueno. en el último Jeshván. y tomé las llaves de mi Ducati para ir a mi tan aborrecido trabajo. Si se atrevía a colocarle las manos encima a Nora… lo mataría. nadie puede tocarla. por supuesto que lo sabría. por supuesto. Ella sabía. pensé. Ya investigaría sobre Chauncey más adelante… MARY ANN GRINTON . ¿No? Después de todo. Aunque tal vez lo era. así que deja de pensar en ella como si lo fuera. Pero no iba a dejar que la tocara. ¿Sería posible que ya hubiese descubierto el paradero de su descendiente. estaba en Francia. fácilmente podría hacerme con otro. debería haber entrado en su mente y descubrir sus pensamientos. ¿Qué mierdas estás pensando Jev? Esa chica no es tuya. Y entonces recordé lo que me había contado Rixon. y que quería de ella. Debería haber intuido lo que estaba pasando. ¿Quiénes podrían ser? Fue entonces cuando una revelación se abrió paso en mi cabeza. y acabar con él para siempre. Nadie toca lo que es mío. iba a volverme humano por un sacrificio que haría ella. pero no era solamente eso. Me saqué los pantalones de una patada. Me importaba una mierda quedarme sin Nefilim que poseer. que la matara él primero. ¿Dónde estaba Chauncey? La última vez que lo vi. Y lo sabría. Entré a darme una ducha y despejé un poco mi mente. sentí un torbellino explotar en mi cabeza. y supiera el poder que tenía ella? Si no era Chauncey… ¿Quién más? Y si fuera Chauncey… Tenía que saber que por las venas de Nora corría el poder de hacerme humano. tal vez sí. A menos. Me contuve de darle un golpe a la pared y me maldije por ser tan imbécil. Mientras el agua caía sobre mi cuerpo. A la mierda todo. Me calcé mis botas negras de nuevo.Hush. y la verdad es que necesitaba sacármela de la cabeza. y arrojé la camisa al suelo. me coloqué una camiseta negra y un par de jeans ajustados. Salí de mi casa pensando en Nora. negros también. No. claro. sentía que algo iba tras ella. ¡debería haber prestado más atención. Al salir. joder! Tenía que descubrir quien la seguía. algo peligroso. pero haz algo. Supe que era ella antes de verla. ―No quiero―le dije. haciéndolo girar entre mis manos. Antes de saber lo que estaba haciendo. me encontré caminando en su dirección. O haz lo que se te dé la gana. y fui a la barra a entregar el pedido. Cogí un paño y comencé a limpiarla. ¿No tienes bastante con verme cinco días a la semana? ¿También te apetece por la noche? ―pregunté. Me senté en el sitio de Vee. entregándome un delantal―Atiende las mesas. Entregué los pedidos. no me había visto. al llegar a su lado. Odiaba esto. enojado porque las personas pudieran causar tantos desastres. no quería hablar conmigo. mientras me colocaba el delantal. Patch.Hush. Atendí un par de mesas que estaban ocupadas. Entonces la sentí. ―Lamento esta desafortunada coincidencia. porque yo si quería hablar con ella. Yo lo seguí de mala gana. MARY ANN GRINTON . Hush – Narrado Por Patch Cipriano Llegué al Borderline justo cuando Frank me llamaba por centésima vez. Ten―dijo. Mierda. Genial. Contuve la risa al ver que estaba en un apuro. pero igual me sorprendí al girarme y verla sentada en una de las mesas del fondo. mientras marcaba el número de nuevo. Bueno. contéstame―susurró. ―Vaya. por favor. te dignaste a trabajar. vaya. Y entró. Al parecer. Apoyé los brazos en la mesa y cogí su vaso. esperaba que no notara que estaba nervioso. Lástima. y fui a otra mesa desocupada que estaba asquerosamente sucia. Se sobresaltó. y se giró para encararme. Mi pulso se aceleró ridículamente. ―Oh. ¿Qué no podía esperar? ―Maldita sea. sus labios. Agitó su cabello. Mis ojos se desviaron a. que tal y como a mí. ―dije. ángel. Ángel. Eso me gusta. Me incliné sobre la mesa. como siempre. y quise saber qué pensaba. ―Se ruborizó levemente. con la voz entrecortada. Definitivamente. Sonreí con todas mis ganas. y me di cuenta. mi roce le había afectado. Pero no llegaría a admitir eso. Noté la exquisita suavidad de sus labios. Pero no me atreví a preguntarlo― Un momento. Y menos a solas. supongo que no se dio cuenta. Bueno. ¿Por qué lo hacía? ― ¿Me estás invitando a salir? ―Te estás volviendo una engreída. No pienso salir contigo. Ni una cita. y por milésima vez. MARY ANN GRINTON . ―Pues no me gusta. después de todo. ¿acabas de llamarme "Ángel"? ―Ajá. ―Pues así se queda. ¿Cómo se lo pedía? ― ¿No deberías estar trabajando en lugar de confraternizar con los clientes? Sonreí. Resopló. ―Lo que a ti te guste me trae sin cuidado. Me encantaba. por supuesto. Nora casi nunca usaba maqu illaje. ella tenía algo. tratando de fingir indiferencia. ―Así está mejor.Hush. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ―Ese asiento está ocupado―dijo ella. Mucho mejor. en realidad. Esto tenía que ser obra de Vee. La ignoré. siempre se me ocurría algo. ― ¿Qué haces el domingo por la noche? ―pregunté. me imaginé besándola. Pero noté. frotando sus labios con mi pulgar para retirarle esa cosa pegajosa de los labios. porque bostezó. ― ¿Te dan miedo todos los chicos… o solo yo? Me puso los ojos en blanco. ―Quiero estar a solas contigo―dije. por supuesto. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ―En cualquier caso. y jamás había visto un bostezo tan falso. Hay una fiesta en la costa. MARY ANN GRINTON . ―En cualquier caso. tú empezaste! No puedo ir a esa fiesta. Pude ver su sorpresa. aceptaría. ―Bueno. y no podía ser más cierto. ¡Bingo! Había confesado. tengo clase al día siguiente. aunque era mentira. ―dije. Fin de la historia. como te he dicho. ― ¿Te hago sentir incómoda? Me miró fijamente unos segundos. Supuse que al imaginar estar rodeada de otras cientos de personas. Patch. Estaba nerviosa. no quiero ser grosera pero… ―Sí. ― ¿Por qué tienes clase al día siguiente o porque te da miedo estar a solas conmigo? ―Las dos cosas. ― ¡Bueno. pensé que podíamos ir. Bajó la mirada y tomó un poco de agua. lo sabía. no me dejan salir por las noches si al día siguiente tengo clase―dijo. ―Escucha. Contuve una risa. te aseguro que no iré―dijo. ¿Por qué me invitas a mí? Bien. y luego parpade o ligeramente confundida. ―Qué pena.Hush. lo de la fiesta no había funcionado. ¿De qué estábamos hablando? ―De ti. ya lo veo. ―Lo siento. Y si tanto te interesa esa fiesta. ―Si esto tiene que ver conmigo… y el sexo opuesto… Vee ya me ha soltado ese rollo. ―Olvidaba que eres un experto en mis supuestas expectativas―se mofó. ― ¿Y qué dice la sabia Vee? ―No entiendo por qué estas tan interesado. ―Por ejemplo. ―No eres muy reservada. Ni tímida. Rió. Ella se puso aún más nerviosa. No necesito oírlo dos veces. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ― ¿De mi? ―De tu vida personal. ―Porque no estás dispuesta a conocerme.Hush. La miré fijamente unos segundos. y su rubor se intensificó. Nora. ―No quiero hablar más sobre mí. ―Creo que deberías regresar al trabajo―dijo. Solo necesitas una buena razón para esforzarte por conocer a alguien. pero contesté con la verdad: ― ¿Interesado? Estamos hablando de ti. Sonreí. ― ¿sabes? Me gusta pensar que no hay un solo chico en el instituto que esté a la altura de tus expectativas. MARY ANN GRINTON . ―Eso no es cierto―se defendió. y me encantó ese sonido. Bueno. yo tampoco lo entendía al fin y al cabo. ―Crees saber todo de todo el mundo. estoy fascinado. no sé mucho acerca de ti. Tienes que irte. No tenía nada. Sus palabras crearon imágenes en mi cabeza.Hush. No has engañado a todo el mundo. ni tarjeta de vacunación. descifrándola. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Y de pronto eso me molestó. Mierda. ocultando mi irritación. ―Estoy seguro de que eso es ilegal―dije. Voy a averiguar que tramas y te dejaré al desnudo. ― ¿Me estás diciendo que temes que te contagie de algo? ―Te estoy diciendo que te veo venir y quiero que lo sepas. ―eres peor. MARY ANN GRINTON . ―Ni tú―replicó. ―Es lo que más deseo. ―Tu carpeta estaba vacía. Me quede observándola fijamente. ― ¿Por qué me miras así? ―No eres para nada lo que esperaba. ―Hay viene Vee. ¿Por qué ella era así? ¿Qué la hacía tan diferente a las demás? ―He husmeado en tu archivo de estudiante. Volvió a ruborizarse. ―Está bien. Él y yo éramos algo así como lo que se consideraba hermanos. Me miró un tanto enojado unos segundos. Pero me quedé en silencio. ―Necesito que investigues el paradero de Chauncey Langeais.Hush. ― ¿Qué pasa si me niego? ―Quiso saber. Suspiré. Maldijo por lo bajo y se puso de pie. ―No veo cómo es eso necesario. y comenzó a silbar una melodía. el muy maldito. quería ser el líder de la cátedra de los siete. curioso por saber el motivo de ese favor. al fin habló. Bufé. Y lo necesito ahora―le dije a Rixon. solo que él cayó del cielo primero que yo. y fui a sentarme en una de las sillas sobrantes en la mesa en la que él estaba minutos atrás. ¿Qué pasa con ese favor? ¿Lo harás o no? Se echó hacia atrás en la silla y me observó de arriba abajo. Ambos fuimos Arcángeles alguna vez. Rixon tenía sed de poder. Quería ocupar mi lugar. ¿Qué tengo que hacer? ―Preguntó. ―Tendré mi maldito yate de vuelta―rugí. Rixon enarcó una ceja. Se quedó un par de segundos observando el paisaje. ― ¿No te enseñaron a tocar antes de entrar? ―preguntó. Y caímos por diferentes motivos. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Siete ― ¿Recuerdas el trato que hicimos por el yate? Necesito un favor. No seas idiota. mientras sopesaba la respuesta que daría. con un cubierto a medio camino de su boca. Estaba poniendo a prueba mi paciencia. segundos después de atravesar la puerta de su casa. Luego de unos interminables tres minutos. La cátedra de los siete eran un grupo de arcángeles poderosos MARY ANN GRINTON . esperando su respuesta. acercándose a la ventana y corriendo las cortinas. Necesitaba sentir… el calor de un cuerpo humano. ―Deberías ser un poco más abierto. Y aunque mi cuerpo no podía sentir. Si yo era cerrado. Y sin más nada que agregar. Sonreí. Una leve carcajada por su parte. ―Te veré en el Delphic a eso de las 9:30pm. ―le dije. Jev. Realmente no estaba enamorado de esa chica.Hush. Hush – Narrado Por Patch Cipriano que se encargaban de mantener en la tierra todo bajo control. Todo sea por el sexo en yate―dijo. hace tantos años. ― ¿Así como tú conmigo? Otra carcajada. Un alma cruel que se había perdido hace cientos de años. mi alma lo percibía. hielo. El cielo tenía esa perfecta tonalidad naranja y rosa digna del crepúsculo. En el cielo todo era frío. ―Vale. uno de la cátedra de los siete. Rixon era una tumba. Un control que Rixon había destruido hace más de doscientos años. ―Necesito la información para esta misma tarde. ― ¿Puedo preguntar por qué? ―pidió. te haré ese favor. hice mi camino lejos de allí. Yo solo… necesitaba salir de la rutina unos minutos. Salí de aquella cueva aún con el sol reflejándose en el horizonte. Esa chica humana era capaz de calentar mi alma. ―No. cuando caí del cielo… "―No está permitido enamorarse de una humana. Suspiré mientras recordaba aquel día. Estaba atardeciendo. Asintió. humedad. ― ¿Qué vas a hacer? ―pregunté. MARY ANN GRINTON . Patch. Eso deberías saberlo―Rugió Rafael. Subí a la moto. y los ruidos que estas hacían en la noche) se mudó a las afueras de la ciudad.Hush. y fui hacia una de las máquinas para jugar Nosferatu. Así." Regresé a la realidad sintiendo la llegada de un nuevo mensaje de texto a mi teléfono celular. Casi solté una carcajada al ver el remitente. y faltaban pocos minutos para que Rixon llegara con la información que le había pedido que me consiguiera. Rixon solía vivir en los túneles. sentí su presencia allí. Volví a sonreír. y aprovechando la oportunidad de que su amiga no me había visto. ¿Dónde estás? Necesito hablar contigo inmediatamente. Se puso nerviosa. Tonta Nora. y me coloqué mi gorra de béisbol que traiga en el bolsillo del pantalón para que nadie me notara. Desde ese día supe lo que era dormir con tranquilidad. MARY ANN GRINTON . Nora. Metí la mano en el bolsillo de mis pantalones y extraje el aparato. un par de segundos luego de haber comenzado a jugar. Sin embargo. Sentí que alguien me observaba. Salí de entre las sombras sigilosamente para que nadie me notara. La miré en el mismo momento en que ella me miró. que se alejaba con la capucha de su sudadera puesta. arcángel. Dile adiós a tus alas. El líder de los siete no puede dar ese ejemplo al resto de la comunidad angelical. la arrastró al otro lado de la habitación. Solo logré ver la espalda de un tipo alto. Me arremangué las mangas de la camiseta hasta los codos. Apagué el equipo y volví a guardarlo en mis pantalones. Era mi favorito. Era un juego de terror en el que tienes que asesinar un montón de cosas. pero luego de unos sutiles enfrentamientos por chicas (sus chicas. y entré al salón de videojuegos. Ya había anochecido. la encendí y aceleré en dirección al Delphic. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Los otros seis arcángeles restantes se agruparon a mí alrededor. y al instante llevé a mis ojos en esa dirección. comencé a jugar mientras esperaba la llegada de Rixon. y sonreí. Le resté importancia al asunto. con una llama de furia en su mirada. ―Te desterraremos. donde no podía verla con mucha facilidad. igual que yo. esta vez para mis adentros. Dabria. ¿Qué has averiguado. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Quise concentrarme de nuevo en el juego. porque inmediatamente dijo algo y se retiró. me detuve. Miré a todas partes esperando encontrarlo. te lo pondré de esta manera: Si respondes a mi pregunta. ¿Te parece? ¿Qué quieres saber? ¿Cuándo pensabas decirme que ibas a convertirte en humano matando a la descendiente de Chauncey? Me quede sin decirle nada unos segundos. pero al ver que Nora y Vee se acercaban a dos chicos. vaya. lo más importante de todo: Chauncey sabe lo que está sucediendo. Inmediatamente busqué con la mirada al tipo con capucha. lo sabría. Y muy puntual. Y liberarse del juramento de lealtad. Se tardó más de lo normal en entregarle la bebida a Nora. por si se te complica eso del enamoramiento (Si. Ahora. Después de todo. Solo que luego de matarla. Ahora. deberás ligar tu sangre con la de ella. Claro. te diré todo lo que sé. Va tras Nora. debería agregar Que gracioso. amigo mío. Pero te lo digo hermano. y es mucho más directo.Hush. les entregó unas bebidas. tal vez no. pero no lo vi. Rixon? Vaya. Comenzaré a creer que realmente te gusta esa chica habló la voz de Rixon en mi cabeza. ¿Qué demonios? ¿Una cita doble? Mataría a Vee. puedes matarla. ya sé que tienes que enamorarla). prepárate para escuchar lo que barba me ha dicho: No necesariamente tienes que esperar a Jeshván. había sido yo quien lo mando a investigar en un principio. dado que Nora estaba tan emocionada como una jirafa en un zoológico. realmente Está bien. Muy bien. Casi todos los ángeles caídos lo saben ya. Gracias. ¿no? No pensaba decírtelo. Me percaté de nuevo en la presencia de aquel tipo de sudadera con capucha. directo al grano. No debería sorprenderme. Se ha corrido el rumor de que quieres ser humano. Así que… ha venido a Coldwater para ahorrarte el trabajo. Tuvo que sentir mi mirada sobre él. bien. o hacer que Nora haga el sacrificio voluntariamente. No debería sorprenderme el hecho de que hubiese descubierto todo. O bueno. Lo haría. también es factible el sacrificio propio. ¿Sería posible que…? No. que era un poco más bajo pero igualmente alto. ¿Quién era ese hombre? El otro chico. Rixon Todo sea por el… MARY ANN GRINTON . ― ¿Es cierto eso? ―Dijo Elliot. Se encontraban en la mesa de Hockey. podía escucharlos con claridad. ―Es… MARY ANN GRINTON . Ella se reclinó contra la mesa del fútbol. ―Oye. mirando a Nora de una manera que decía que no estaba sorprendido. Sonreí. Miré a Vee. ¿cierto? ―Lo dudo―seguía tratando de evitarme. ―No es eso―Quiso corregir Nora. y tuve que contener una carcajada. Ya. y continué estudiando a Nora. Me sentía… ¿Humano? ―Patch ha dejado bien claro que quiere ser para Nora algo más que compañero de biología― continuó Vee ―Y nadie puede culparlo. ―Patch es el compañero de biología de Nora―Continuó diciendo Vee. ―Elliot y yo seremos el equipo blanco. Tenía mis sentidos aturdidos y agudizados. Ese es él. como tratando de evitar el tema. Nora cerró los ojos. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Sexo salvaje y fácil en el yate. y tuve que apretar los puños para no destrozar su mente en cuestión de segundos. a pesar de las súplicas silenciosas de Nora de que se callara. y escuchando. lo sé Y allí mi conversación se vio interrumpida. intentando que su conversación pareciera privada. Nora. antes de concentrarse de nuevo en su amiga. pero ella susurró tan alto. ―Jmmm―Dijo Nora. Estaba ruborizada.Hush. Me señaló. Que él ya lo sospechaba. a pesar de ello. ¿no es ese Patch? ―Dijo Vee. ―Él sigue mirando para acá―Vee dijo bajando la voz. Me encantaba verla así. Se acercó más a Nora. ― Allí. y esta me devolvió la mirada por unos segundos. que era absurdo no escuchar ―Se está preguntando qué haces aquí con…―Vee balanceó su cabeza hacia Elliot. ― ¿Quieres que hable con él? ―Le preguntó Elliot. pero nadie lo notó. ―Le explicaré que no estamos buscando problemas. imbécil. ―Déjame hablar con Patch―dijo Elliot. pero este chico suena como un arrastrado―dijo Elliot―Dame dos minutos con él―Él comenzó a caminar. Claro. Oh. claro. como si sintiera el peligro que correría ese chico si se atrevía siquiera a mirarme. pareciendo decepcionada.Hush. ―De otra manera. haciendo eco de mis pensamientos. ven a hablar conmig o. ―Sí. Patch podría volverse violento ¿Recuerdas la última vez? ¿La última vez? ―Sin ofender. ¿Qué…? ― ¿Por qué no jugamos? ―Preguntó Nora en voz alta y tiró la bola al centro de la mesa. Eso estaba hecho. MARY ANN GRINTON . ven a hablar con Patch deseé. quizá se cayó en el inodoro―dijo Vee. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ―Peor que eso―Vee continuaba con su drama que amenazaba con partirme de risa―Nora sospecha que él la está siguiendo. pero ella cambió el tema. Me quedé paralizado. ―Gran idea―dijo Vee. Pues ya tendría tiempo de asustarte. ― ¿Qué le pasó a Jules? ―Dijo. ¿Arrastrado. Nora se veía dubitativa. ―Se ha ido por mucho tiempo. ―Mala idea. y alejarlo de Nora. La policía está a punto de intervenir. Veamos cómo termina todo esto. yo? Hijo de puta. Le diré que estas aquí conmigo y que si tiene algún problema lo puede discutir conmigo. Flexioné mis dedos y me preparé para darle la paliza de su vida. Incluso estuve a punto de ser yo quien se acercara a su mesa. ―Él no me asusta―dijo Elliot. Hush. señalando con la cabeza imperceptiblemente hacia la mesa de fútbol. podría ponerse otra vez violento. Frotó sus manos en sus jeans varias veces. sí. que viniera Nora. ―Él es nuevo. ―Béisbol. Me están esperando… ―Lo he visto antes―dije. Cuando llegó a mi consola. Qué suerte tiene―La miré con doble intención. ― ¿Cuál es su nombre? ―Pregunté. Yo estaría feliz de partirte los dientes. Maldita sea. cosa que no me resultaba fácil mientras sentía la mirada de ella por todo mi cuerpo. ―Primera semana en la escuela y ya hizo amigos. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ―No―Dijo Nora. ¿Crees que puedas pararte tras de mí y darme un par de instrucciones? Bombas explotaron en la pantalla y cuerpos gritando navegaron en el aire. Como si no lo supiera ya. Mira. la golpeó por el lado para llamar mi atención. ―Elliot. Déjame lidiar con esto. Se acaba de transferir. La primera vez que le hablé a Nora en su mente. Cuando la miré. casi MARY ANN GRINTON . ― ¿Estás segura? ―Dijo Elliot ―Estaría muy feliz de hacerlo. Nora. Bueno. Nora estaba completamente nerviosa. recordando de pronto el juego de béisbol en la escuela. Presioné los botones con demasiada fuerza mientras alejaba de mi mente los pensamientos calientes. ―Parece ser mi especialidad. pensándolo mejor. tratando de controlarse. ―Creo que es mejor si se lo digo yo. dije: ― ¿Pac-Man? ¿O es Donkey Kong? Una lenta sonrisa se expandió en mi rostro. ―Podría tener un lado tenebroso y peligroso del cual no conocemos. agarrándolo por la manga para detenerlo. eh. debo hacer esto rápido. para no entretenerme demasiado con sus piernas. déjalo que venga. ―Fulminó a Vee con la mirada. ―Él. Regresé mi atención al juego por una fracción de segundos. Maldita Vee. ―Si yo gano―Continué. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Se quedó en silencio. yo me encargo de lo demás. Era fácil que esta chica me gustara. ―No puedo―Me dijo. ―Estoy aquí con otra persona. ―Nora―Gritó Vee. Golpeó mi brazo. ―Ellos podrían creer que estamos flirteando. ―Le dirás a Elliot que pasó algo. Y eso era justamente lo que estábamos haciendo. esperando a que replicara por su indirecta. Una parte de mí analizaba las palabras que Rixon había dicho hace unos momentos. Hacia la multitud en dónde solo podía ver mesas de billar. y sin tener intenciones de alejarme de ella. Le dirás que ya no estarás libre esta noche. ― ¿Y si yo gano? La observé de la cabeza a los pies. como si no hubiese escuchado a Vee. ―Una mesa de billar―la tenté.Hush. Podía matar a Nora. Mierda. Ve y ocúpala. ―Cuidado―dije en voz baja. ―Ve hacia los billares. pelear con Elliot? Podría ser una opción. Se cruzó de brazos. ― ¿Quieres jugar? ―Incliné mi cabeza hacia más allá de los videojuegos. ―No creo que debamos preocuparnos por eso. y sentí chispas eléctricas quemar allí donde había tocado. ―Si tengo que hacerlo… Se acaba de vaciar una mesa. Elliot me está ganando. pero luego se mordió el labio. esperando lucir severa y un poco exasperada. ― ¿Qué vas a hacer. MARY ANN GRINTON . ―Ven aquí. podía hacerlo ahora mismo y obtener lo que deseaba. Sonreí. y supe que estaba sopesando mi propuesta. Se la dejé pasar. interrumpiendo. Pero estaba comenzando a necesitar algo… algo que solo tenía ella. MARY ANN GRINTON . ― ¿Hacer qué? ―No hagas eso―Me advirtió―No finjas que no lo estás haciendo. observando su miedo y disfrutando de ello. nerviosa. ―Mis pensamientos. ― ¿Cómo haces eso? ―preguntó. Observé todos lados de una manera teatral. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Si es que te atreves hablé en su mente. Sonreí maliciosamente. Se puso rígida. ―Nooooora―Se escuchó la voz de Vee llamar sobre todas las voces y los sonidos electrónicos. ―Encuéntrame en el arcángel―le dije. Recliné un hombro contra la consola y bajé la vista hacia ella.Hush. ― ¿Cómo haces eso? ―Repitió. Y vaya que seré bueno contigo. ―Yo podría hacerte cambiar de opinión. ― ¿Qué pasa con ellos? ―Ya basta. dijo intentando aparentar calma: ―Tú me asustas y no estoy segura de que seas bueno para mí. Me burlé internamente. ―Dime qué es lo que se supone que estoy haciendo. ―No dirás que estoy hablándole a tu mente ¿cierto? ¿Sabes lo loco que suena eso? Tragando. como si tratara de hacerle una pregunta demasiado personal. Patch. Me acerqué por detrás y le susurré al oído: ―Te estaré esperando. ―No. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Se alejó un paso. Luego salí de los videojuegos.Hush. MARY ANN GRINTON . O al menos de eso trataba de convencerme. Me miró y parpadeó. al rebotar contra mi cuerpo. Me encaminé al arcángel y observé a lo lejos. Bajé la vista hasta sus piernas. Iba tras Nora. ―Perdone―dijo. pero no me daba resultados. sus pechos. Pareció desconcertada un par de segundos. Cerré mis ojos y me concentré plenamente en la presencia de Chauncey. No podía permitir eso. volviendo a subir por su estómago. Si él conseguía matar a esa chica primero que yo… me quedaría sin Nefilim que poseer en el Jeshvan. si es que realmente se encontraba aquí. Chauncey sabía que si yo mataba a Nora.Hush. como Nora platicaba con Vee. pero al percatarse que era yo. Sacudí la cabeza. ¿Qué pasa con que sea ella? Es igual para mí si es ella. Pasé una mano por mi cabello mientras imaginaba. ―gruñó. aunque sin verme. Y si moría. Apreté los puños mientras intensificaba la búsqueda. o alguna otra mujer de la calle. Una media sonrisa se abrió paso en mi rostro. Y no estaba dispuesto a correr ese riesgo. para dejar de pensar estupideces. ya que se le agotaba el tiempo. abrí completamente mis sentidos. Parecía un poco enojada. MARY ANN GRINTON . ―Déjame sola. Ella era mía. Nora se despidió de su amiga y comenzó a caminar en mi dirección. Me atravesé en su camino. sonriéndole morbosamente. ―Te perdono―le dije. Si tan solo… Si tan solo no fuera a ella a quien tuviera que sacrificar para ser humano. Si aquel tipo encapuchado era Chauncey. estaba lo suficientemente cerca de Nora como para matarla en cualquier momento. y a la vez nerviosa. El muy maldito estaba pensando en liberarse de su juramento. lo más probable es que jugara sus cartas rápido. No podía permitirlo. Vee. moriría en mis brazos. por milésima vez. y hacer mi juego esta misma noche. Así que. frunció el ceño. que se sentiría besarla. su rostro… y ese cabello. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Ocho En cuanto puse un pie fuera de la vista de Nora. No me quedaba más opción que hacer lo mismo. él moriría con ella. No podía percibirlo. ―Ven conmigo al arcángel―le pedí. ―Te invito a tomarte algo―Aferré el agarre en su codo y la llevé hasta el carrito de limonadas. pero al tratar de pasar por mi lado. Mald ita sea con mis pensamientos. y eso pareció hacerla enojar mucho más. se alisó el cabello. Con furia. Me gusta cuando está fuera de control. Intentó liberarse de mi agarre. muchas personas gritando. en la cual se soltó de mi agarre. E inmediatamente imaginé a Nora sin control. ― ¿Qué pasa? Parece que vas a vomitar―le dije. ―Amo tu cabello. Por una fracción de segundo pareció que se estaba arreglando para mí. Grrr. Pero era una oportunidad perfecta. sin ropa y cerca de mí. Reí. Lo aparté. ―Tienes ese efecto en mí―dijo bruscamente. y luego agregó: ―Supongo que te veré el lunes en clase. ―Me tengo que ir. y en el intento. la tomé por el codo. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Intentó esquivarme. Alturas. ―Dos personas en una silla―Le dije. Ella estiré el cuello para mirar hacia el Arcángel. ―De ninguna manera. ―No―se negó. Es como ver una parte de ti que necesita salir más a menudo―le dije. Gritos agudos hacían eco desde los carros que hacían estruendos en las vías. ― ¿Quieres ayudarme? aléjate de mí. un rizo mechón de cabello apareció en su rostro. al imaginar la sangre de Nora llenar el suelo. No quiso dar un paso más. y una inesperada falla en un solo carrito. Sonreí de una forma lenta y atrevida. lo cual provocó una extraña sensación en mi estómago. ¿Qué mejor manera para morir? Algo se removió en mi interior. Vee me está esperando―Hizo una pausa. la gata saca sus garras. MARY ANN GRINTON .Hush. Aún no había notado que era conmigo que había hablado. ―Yo podría ser más convincente que tú. ―Yo no grito―dijo. le diré al entrenador que nos cambie de silla. MARY ANN GRINTON . ―No en atracciones de carnavales. Vee me está esperando. Nora. Con ese comentario. para que subiera conmigo al arcángel. Nunca olvidas algo tan cautivante y hermoso. porque de haberla visto. Sabía exactamente que decir para picar su curiosidad. ya jamás lo notaría. debió haberse ido corriendo. Le tengo miedo a las alturas. Pero no lo hizo. mientras los carros se vaciaban y un nuevo par de buscadores de emoción se montaban. Una ráfaga de gritos se levantó y luego se apagó lejos en el cielo nocturno. Yo solía pasar varias noches de la semana en lo alto de la figura del arcángel. Y era cierto. Sabía qué decir en el momento correcto. ― ¿Vienes aquí seguido? ―Tengo una historia con este lugar. Maldición. nunca descubrirás qué es lo que está pasando de verdad. ―No te había visto antes en Delphic―dije. observando sin ser observado. Y nunca la había visto. Además. ―Ya lo intenté Él no va a cambiar de opinión. ― ¿Qué está pasando? ―Solo hay una manera para saberlo. ahora. jamás se me olvidaría.Hush. después de esta noche. ―Si aguantas toda la ronda sin gritar. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ―Si sigues huyendo de mí. ―No puedo. Llegamos hasta el principio de la fila. No te hagas de rogar. Por supuesto . ―Le dije. Juntos nos encaminamos hasta lo último de la fila de espera para el Arcángel. La siguiente pintura mostraba al ángel sin alas posado sobre una lápida. el ángel si n alas estaba parado cerca de los niños. Nuestros brazos se tocaron mientras nos acercábamos. estaré aterrada. Me dirige al primero. su sonrisa se había ido y le salieron cuernos como a los demonios de la primera pintura. ya que era más sencillo sabotear este. ―Parece que es nuestro turno―le dije. El carro que escogí tenía un grupo de cuatro pinturas. ― ¿Por qué? ¿Qué tiene de malo tu pasado? ―No creo que ahora sea un buen momento para hablar de eso. La prim era representaba una turba de demonios con cuernos arrancándole las alas a un ángel masculino que gritaba. Si. ―Las cosas que tengo que confesar no son el tipo de cosas que le cuentas a tu irrespetuosa compañera de biología―dije.Hush. Nora se deslizó en el carro junto a mí. temblando. lo sabía. más asustada de lo que ya deberías estar. el ángel se balanceó como un fantasma sobre el cuerpo de la niña. En la última pintura. y allí estaban de nuevos esas chispas que sentía en mi alma. ―Tu pasado no me asustará―Dijo. para que esta fuera a donde él. Una media luna colgaba sobre las pinturas. Moví bruscamente mi barbilla hacia la rampa. Empujé la salida giratoria. y fingí no notarlo. observando de lejos a unos niños jugando. haciendo señas con el dedo a una niña de ojos verdes. Vaya historia la que estaba grabada allí. En la tercera pintura. MARY ANN GRINTON . Estaba siendo sarcástica. Mi pasado podría asustarte. Cuando llegamos a la plataforma de abordar. ―El año pasado venías aquí en lugar de ir a la escuela. Se estremeció de miedo. pero sin embargo contesté: ―Contestar eso significaría dar pistas sobre mi pasado y prefiero mantenerlo en secreto. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ―Déjame adivinar―dijo. los únicos carros vacíos eran el que estaba al frente y el que estaba en lo último. Los ojos de la niña estaban negros. abrochándose el cinturón―Creo que más que nada. Y tocarla así. y que el carrito la aventaba al vacío. Y la ronda terminó en la plataforma de desembarque. no se sostuvo. Pero no pude hacerlo. había demasiadas personas. tan abiertamente. esa era la excusa que necesitaba creer. No podía estar más en lo cierto. nos alejamos de la plataforma. Nora se vio impulsada a un lado. ¿La mataba? ¿Así. hubo un momento de vacilación. No podía matarla aquí. ―Te ves pálida―Dije. Me introduje en su mente. y le daba un aspecto realmente encantador. ¿Por qué no me limité a lanzarla al vacío. escalando la montaña sin cesar. No solo la calentó. ángel? Soltó una risa nerviosa. a sangre fría? La observé por el rabillo del ojo. En la punta de la montaña. Entonces me miró y sonreí de oreja a oreja.Hush. De una manera no muy tranquila. inclinándome para poder ser escuchado a través del ruido de las vías. Nora gritó. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ―Aterrada―Repetí. Pero no pude permitir eso. en un movimiento brusco. La brisa alborotaba sus cabellos. y contuve un suspiro. moho y del agua salada que soplaba del mar. ― ¿Asustada. Realmente. Los carros comenzaron a moverse en reversa y luego dieron bandazos hacia delante. así que tenía que actuar rápido. y sentí que esa risa perforaba en mi interior. Le hice creer que su cinturón se había desabrochado. la hizo hervir hasta casi explotar de combustión espontánea. calentó mi alma en todos los sentidos. MARY ANN GRINTON . y ya está? No podía… ¡Maldición. de por sí ya desordenados. Si ella caía… si moría… La envolví en mis brazos. O bueno. mientras seguía observando las pinturas. por una fracción de segundo estuvo a punto de caer. no podía! Entonces. El arcángel ya estaba en la cima. aferrándola contra mi cuerpo. y al estar sumergida en lo que la hacía creer ver. El aire estaba lleno de olor a sudor. preparándome para saltar en el momento justo en que aflojara un par de tornillos del carrito. Seguía observándola. otra vez.Hush. la historia del carrito…―Mientras más alto estas. ―Creí… ― ¿Qué creíste? ―Pregunté. Literalmente. Sonreí a mi vez. mirando sobre mi hombro a la montaña rusa. Pero vaya que sabía qué había creído. ―Es un ángel de alto rango―le dije. creí que iba a morir―dijo. sonriéndole de oreja a oreja. dije: ―Te llevaré de regreso a los videojuegos. y se veía realmente asustada. No pude dejarte morir. MARY ANN GRINTON . Hush – Narrado Por Patch Cipriano ―Vaya. ―El arcángel…―Murmuró. ―Supongo que nos quedamos como compañeros. No pude… ―Mi cinturón… ―Comenzó. la cual estaba comenzando su siguiente ascenso. ―Dije. recordando de nuevo mi historia. Nora. ―Creí que me había caído del carro. eso sí que fue un grito―Dije. peor es la caída. Guiándola por el camino. ―Creo que apenas soy un ángel guardián―murmuró ella. fingiendo estar interesado. ―Creo que ese es el punto. ángel. Levanté mi soda. golpearla hasta que perdiera el conocimiento. al divisar a Vee y al otro chico a lo lejos. se me ocurrieron muchas maneras más sencillas de matarla ahora mismo: Asfixiarla. No veía a nadie. pensé en acercarme a ella aquí. Incluso. mientras sacaba su teléfono celular de su bolso. y supe que se acaloraba con solo pensar en poner su boca donde antes estuvo la mía. o simplemente entrar a su mente y destrozarla. pero me la había rechazado. La intensificación del rubor en sus mejillas la delató. y luego a mí. Necesitaba deshacerme de ella. ―Vee no me dejaría―Dijo ella. ―Parece que se fueron―Dije. No para MARY ANN GRINTON . ―Quizá estén en las máquinas de paintball―Le sugerí. pasando el mostrador de los premios y los baños. tomándome una soda que había comprado en el camino. antes de que afectara a un nivel más profundo todo mi organismo. Y yo también.Hush. tratando de no burlarme de ella. están jugando futbol todavía. ―Creo que necesitas a alguien que te lleve. Cuando estábamos llegando a las mesas de fútbol. ahora. y nadie la veía a ella. Ni siquiera tendría a la policía detrás de mí. maldita sea. No. Estaba enojándose. tomarla y secuestrarla. parada de puntas para ver sobre el gentío. dispararle. en señal de ofrecimiento y le pregunté: ― ¿Segura que no quieres tomar algo? Miró la soda. Nora llegó a otra de las mesas de juego. Seguía maldiciéndome una y otra vez por no haber matado a Nora cuando tuve la oportunidad. Su rostro estaba tornándose de un tono magenta. Sin embargo. ya que haría creer que sólo fue un accidente del carrito de la atracción del parque. Pero no podía. entré una vez más en la cabeza de Nora y le hice creer que la mesa estaba vacía. ―Probablemente estén jugando tenis de mesa. Recorrió por todos lados el lugar mientras la seguía. Mis escasos buenos modales me habían in ducido a ofrecerla una. pero mi truco funcionaba perfectamente. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Nueve Me abrí paso entre la gente de los videojuegos. Ni yo mismo comprendía ahora mismo de qué sería capaz. no. Una parte de ese razonamiento era cierto. Mordió su labio. ―Si eso es lo que quieres… MARY ANN GRINTON . y sopesó la única alternativa que le quedaba. no importaba si fuera un completo desconocido. En el tiempo que la estuve investigando. Haría cosas mucho más emocionantes con ella de prisionera.Hush. Y vaya que la pasaríamos bien. y mi cuerpo tranquilo. esperando el momento justo para hacerla pasar desapercibido el Neón de Vee. solo tenía que llevarla a casa. Se dio en la frente con la palma de mi mano. Bingo. Sabía que en estos momentos. que salir de allí conmigo. pero para estas horas. y causaba extraños espasmos en mi interior. Probablemente ella me está esperando en el estacionamiento. Así se quedaría hasta que tomara una decisión esta noche. Abrí su mente y borré las imágenes. Solo contaba con una anciana que hacía la limpieza. Sonó más como una pregunta que como una orden. Salimos de los videojuegos y caminamos hasta el estacionamiento. tratando de mantener mi rostro inexpresivo. Estuve a punto de pasar por alto el hecho de que. descubrí que su madre trabajaba un poco lejos. si finalmente iba a asesinarla. Pude ver en su rostro que estaba pensando que sería más seguro irse con cualquier otro hombre. Estaba sopesando seriamente lo del secuestro. ―Me llevarás directo a casa―Dijo. Sin embargo… la imagen de Nora sin vi da se repetía en mi cabeza. ¡tenía un celular en la mano para llamar a su amiga! Con un movimiento ligero de mis dedos. Hush – Narrado Por Patch Cipriano matarla. ―Su auto. Nora resopló. ― ¿Alguna otra opción? ―Le pregunté. ya debería estar ocupada en sus propios asuntos. Nora se veía realmente furiosa y desconcertada. apagué el celular. Yo la seguía desde atrás. claro que no. Así que. Ahí está. ―Mi oferta sigue en pie―le dije. Nora estaba sola en su casa. y me encaminé a la puerta para abrirla. que estaba toda cubierta de neblina. con Nora siguiéndome los pasos. Al encontrarla. y reí por lo bajo. tomé las llaves de su bolso. en un abrazo de oso al revés. para contenerme de frenar y tomarla allí mismo. Linda moto―Dijo.Hush. aceleré. Sonreí cuando envolvió sus brazos alrededor de mí. justo detrás de mí. como si quisiera evitar algún comentario de mi parte. Cuando llegamos a su casa. pero esa era una capacidad de la que carecían todos los ángeles caídos. y se lo entregué. Y pude percibir el miedo que le producía mi Ducati. Cuando salimos del estacionamiento. Relájate. había estado aguantándose de mi camisa. apagué el motor y me bajé de ella. Se veía un poco asustada. teniendo entre sus dedos la cantidad de tela necesaria para mantenerse en balance. con Nora siguiéndome los pasos. Mientras Nora se deshacía del casco. Nora. detuve la motocicleta en la entrada. y tuve que contener un gemi do al ver que sus piernas entraban en contacto con las mías. ―Vaya. ¿Quieres decir que si es peligroso? ―Que va― Dije. Sus piernas estaban aferrándose a las mías de manera inconsciente. Comencé a caminar al lugar dónde había dejado la moto. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Titubeó. Se subió a la moto. y apretó su cadera contra mí. Pero sin estar satisfecho con eso. Mi alma hervía a fuego lento con esa cercanía. Solo había un casco. Aceleré un poco más. la explosión de movimiento la sobresaltó. como si quisiera hacerme una pregunta. ―Estás tensa. ¿Cortesía? Tal vez. e incliné mi cabeza hacia el asiento trasero. contestando a sus dos preguntas. pero se contuvo. Me hubiese gustado desesperadamente poder sentir físicamente ese contacto. me subí a ella. la que dijo y la que no dijo. ―Me gusta la sensación el viento en mi cara―Continuó. ― ¿Es difícil conducirla? ―Preguntó. Apreté con fuerza el mando de la moto. MARY ANN GRINTON . ―Móntate―le dije. no muy seguro de saber el por qué. negro con la visera teñida. no me hagas esto tan difícil. ―Ella puede limpiar un inodoro por dentro y por fuera en menos de un minuto. arqueé de nuevo mis cejas como diciendo ¿Puedo? Mi corazón comenzó a latir con fuerza al imaginarme a solar con Nora. hice girar la llave. bajó su bolso del hombro y abrió el compartimiento en donde guardaba las llaves. En su casa. ―Vete. ―Devuélveme mis llaves―Dijo. Inténtalo. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Cuando me detuve frente a la puerta e introduje las llaves. ―Dorothea vendrá pronto―Mintió. con MARY ANN GRINTON . y me alejé de la puerta. ¡Devuélvemelas! Levanté mis manos. desconcertada por no saber cómo sus llaves habían parado en mis manos. ― ¿Toda la noche? ―Como si no supiera ya la respuesta. No abras Intentó girar la llave. No vas a entrar. Estaba pensando en lo mismo que yo. Muy fuerte―Intentó pasar y dejarme atrás. Señalé la cerradora y levanté las cejas en una silenciosa pregunta. La ponía nerviosa. pero no se movió. Lo sé. ― ¿Dorothea? ―La señora que limpia. Recosté un hombro contra los ladrillos y la observé acercarse hasta la cerradura.Hush. ―No me interesa en dónde las tiré. ―Se te cayeron en los videojuegos cuando estabas buscando tu celular―mentí. clamando inocencia. Notó que no estaban allí. Ella es vieja. Está atorada. ―Adelante. pero fuerte. Con un agudo clic. Me paré bajo el umbral. Sin testigos de nada. moviendo la llave. ―La atascaste―Dijo. pasó por mi lado con toda la intención de cerrar la puerta entre nosotros. sacando la llave de la cerradura y entregándosela. Más que aterrador―Tomando la llave. pero cuando lo iba a hacer. pero no la deje. Con la mano puesta en el picaporte. Estoy sola en casa―dijo. ―Suena aterrador―dije. me dirige a la izquierda. ―Es tarde―dije. Vamos. lechuga y tomate) y luego busqué en las gavetas hasta encontrar un cuchillo. saqué productos de aquí y allá (salsa. ―Sé lo que es un taco. ― ¿El rojo de tu cabello. queso. Sonreí. sí. Mi corazón se detuvo. Antes de que pudiese detenerme. busqué en la nevera. Nora. pero… Entonces entré a la casa. ―No. ― ¿No me vas a invitar a entrar? ―Pregunté. sonriendo. No te vas a deshacer tan fácilmente de mí. queso―le dije. Hush – Narrado Por Patch Cipriano mis brazos puestos en cada lado del marco. cerré la puerta. crucé la habitación a grandes zancadas y al final del pasillo. siguiéndola de cerca con mis ojos. A la cocina. ―Tomates. al menos sacaría provecho de lo que había aprendido en el Borderline. Fui hasta el fregadero y abrí el grifo mientras frotaba jabón hasta la mitad de mis brazos. Es más fácil matarte dentro. lechuga.Hush. ― ¿Te gusta la comida Mexicana? ―Yo… ― ¿Los Tacos? ― ¿Tacos? ―Repitió. y noté que estaba observando la maraña desordenada que era su cabello. Bueno. Sí. es natural? MARY ANN GRINTON . ―Debes de tener hambre. Fui a la despensa. En serio vas a hacerme cocinar. Qué divertida. Ella retrocedió tres pasos. ángel. empujándola con mí pié. Observé que Nora se llevaba una mano a la boca. Digo. ―No te voy a lastimar. Me quedé observando fijamente el cuchillo. Lo sostuve en alto y lo examiné. La imagen de Nora bañada en sangre comenzó a llenar mi cabeza. pero es rojo. mientras observaba esos ojos grises. Luego miré a Nora y luego una vez más al cuchillo. Puso una mano en su estómago. y miedo. Volví a ver a Nora ensangrentada. mientras mi mente daba vueltas. Paré de cortar con el cuchillo y la miré. No podía. ―Casi termino. tratando de sonar calmada. Creo que fue por la moto. pensando en qué haría con la nueva oportunidad que se me había presentado para matar a Nora. Noté que miraba el cuchillo con nerviosismo. sacándome de mis pensamientos.Hush. sonriendo por primera vez con lo que sería una sonrisa verdadera. saliendo de la cocina a toda prisa. Rebusqué de nuevo entre los gabinetes. ―Baja el cuchillo―Pidió. hasta hallar un cuchillo mucho más grande y afilado. Algo mucho más fuerte que el deseo de ser humano se había apoderado de mí. ―Odio ser el que te de la noticia. Comencé a picar algunos de los ingredientes. ―dijo ella. mientras la tenía indefensa frente a mí. La hoja brillaba bajo la luz. ―Es marrón. Podría prenderlo en fuego y no se pondría más rojo. ―Me siento algo mareada. cuando supe que jamás le haría daño. ― ¿Podemos dejar esto para otro momento? ―preguntó Nora. MARY ANN GRINTON . ―Eso es tranquilizador―dijo. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Se me quedó mirando. quizá sean las bombillas―dije. ¿Qué haría? ¿La mataría? Y fue justo allí. ―Regreso enseguida―dijo. con voz tensa y seca. ―No tengo pelo rojo. ―Es la luz. Nora―susurré. señalando que le estaba molestando. ―Sí. Dejé de mirar al cuchillo. acercando con cautelosa lentitud mi boca a su oído ―Bien hora.Hush. la miré cuidadosamente. ― ¿Qué tal un trato? Ayúdame a hacer tacos y contestaré algunas de tus preguntas―le ofrecí. En mi opinió n. ―Eso hago. ―Primero―Dije. ―Es natural. Sin decir nada más. ―Escoge un tomate. Mis ojos se desviaron. pero la necesidad de est ar con ella era mucho más fuerte. Es algo que tienes o no. y estando picada por la curiosidad. estaba a punto de dejarme llevar por mis impulsos. Agarra el cuchillo bien. Casi sonreí. y no pude percibir si le gustaba o le asustaba el hecho de que estuviera tan cerca de ella. agarra el cuchillo. ya no sabría qué podía hacerla confiar. Pude sentir que vacilaba. parándome detrás de ella y poniendo mis manos sobre la encimera. ―El cocinar es algo que no se aprende―Dije. y sabía cómo agarrar un cuchillo. Alejándome unos segundos. Quería agradarle. Si con eso no confiaba en mí. ―Agaché mi cabeza. Aún tenía ganas de matarla. ella sentía que realmente era peligroso estar conmigo. ― ¿El chef siempre tiene que estar así de cerca? ―Preguntó. recorriéndola de arriba a abajo y de aquí a allá. justo al lado de las suyas. sí. Podría decir que se veía realmente sexy. se acercó a mí. ― ¿Mis preguntas? ―Creo que sabes a qué me refiero―le dije. con el mango señalando hacia ella. Quería estar bien con ella. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Estaba asustada. Se veía perfecta. ―Cuando él está revelando secretos culinarios. y no sabía si era por la revelación que había tenido segundos atrás. como inspeccionando cualquier imperfección. Coloqué la tabla de picar frente a ella. ―Ven aquí Te voy a enseñar cómo hacer tacos. ―Bien. Como la química. Hice girar el cuchillo. pero ya no deseaba incomodarla. ¿Crees que estás lista para la química? MARY ANN GRINTON . Nora no era idiota. nada. yo seco. Eso pasa. aco modando mi gorra de beisbol hasta cubrirme parte del rostro. Pero maldita sea. ― ¿Qué? ―pregunté. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Presionó el cuchillo hasta atravesar el tomate. No nos tomó mucho tiempo en terminar de fregar los platos. ¿Estoy lista para la química? Dejé escapar un sonido bajo. Todo de todo. ―Tú dime. ―Comenzando con la noche en la biblioteca. Y ella también quería. Ahora mismo. ―Yo los limpio y tú los secas―le dije a Nora. Nada de nada. Estaba pensando en algo mucho más importante. mitad gemido. Arquee mis cejas. podí a sentirlo. No podía pensar en las preguntas de Nora. ―Eh. ¿Estaba coqueteando conmigo? Eso no ayudaba en nada a las ganas que tenía de subirla en mis brazos a la habitación. Nora. Sonreí. podía notarlo. Luego de cenar. ella se movió primero. y cuando lo hicimos. o esto se pondría rojo. Escuchaba esas súplicas silenciosas de su cuerpo. llevé nuestros platos al fregadero. Ninguno de los dos se movió. Una sonrisa tiraba de mis labios. Rebuscando en las gavetas al lado del fregadero. ¿Me seguiste? Me recosté despreocupadamente contra la encimera. ―Estoy lista para hacerte esas preguntas―Dijo. Tu limpias. ―No. Me moví p ara quitarle la toalla y nuestros cuerpos se tocaron.Hush. encontré una toalla y la lancé juguetonamente hacia ella. que desviara mi atención. mitad gruñido. No. ― ¿Asustada? ―pregunté en un murmullo. esperando que continuara hablando. y no de sangre precisamente. manteniendo el frágil enlace que nos mantenía unidos. el cual se dividió en dos y cada mitad rodó sutilmente en la tabla de picar. nos encontramos apretujados en el espacio al lado del fregadero. Quería besarla. MARY ANN GRINTON . Sonreí. agregó: ―Digo. ―La verdad es que parte de mi definitivamente no está cómoda contigo alrededor―Dije. ¿Qué le asustaba? ¿Qué le hiciera daño? ¿O podría ser…? ―Quizá tenga miedo a… a… ― ¿Qué yo te guste? ―Sí―y luego de haber confesado. después de todo. Nora. dejando sus manos capturadas y su boca abierta en protesta. y de que mi corazón se detuvi era un segundo. para que su rostro quedara al mismo nivel que el mío.Hush. hice lo mismo con la otra manga y sostuve su blusa por los puños. La jalé hasta tenerla cerca y no me detuve hasta que estuvo directamente en frente de mí. El contacto me superó. no. poniendo la visera hacia atrás. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ―Mentirosa. No mientas. así que no lo pensé dos veces. Definitivamente no. siento una aterradora atracción hacia ti. Eso no era lo que estaba intentando decir. Se me escapó una risita. ―Pero… Se aferró a la encimera que estaba justo detrás de ella. Sentí que su pulso se aceleraba. La levanté y la senté en la encimera. ―Pero al mismo tiempo. ¿Cómo no? ―Que creído eres―Dijo. MARY ANN GRINTON . empujándome con su mano. La giré. Su mano quedó atrapada contra mi pecho y bajé su manga hasta su muñeca. ―Tú no me asustas― ¿No? ―Tal vez solo me asusta… ―Y se quedó en blanco. Es que claro. Entonces era mutuo. cubriendo su mano con ella. preparándome ―Quítate la gorra―Dijo. Así de rápido. le sonreí. Su teléfono sonó. Saboree su piel mientras mi alma registraba el calor del momento. pero nos interrumpieron. y llevarla escaleras arriba. Si claro. Si antes dudaba del hecho de matarla. hasta su mandíbula. ―Mis piernas se están durmiendo―dijo. justo al lado de sus caderas y me acerqué inclinando la cabeza hacia un lado. y colocó sus piernas a cada lado de mis caderas. Cerró el celular. Nora. Ni siquiera aquella chica por la que había caído hace años. calentándome hasta un nivel que nadie nunca había logrado. ahora estaba completamente seguro de que no lo haría. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Se acercó más a mí. El corazón me latía con tanta fuerza. ―Deberías irte―Susurró. ―Ahora. y sonreí. Puse mis manos en la encimera. ¿Irme? Oh. no. Volví a girar la visera de mi gorra. ―Yo podría resolver eso―dije. Nora lograba meterse bajo mi piel. ―Definitivamente deberías irte. rozando ligeramente su piel con mi lengua. que me preocupaba que Nora pudiera escucharlo. notando algo. Estuve a punto de tomarla en mis brazos. ―Que tengas dulces sueños. cerrando mis manos sobre sus caderas. MARY ANN GRINTON . y maldije por no haberme asegurado de mantenerlo apagado. como no. y yo hice lo mismo. Moví mi boca lentamente hacia el norte. ― ¿Ir aquí? ―Llevé mi boca a su hombro. ―Debí haberlo olvidado.Hush. ― ¿Te puedo llamar después? ―le preguntó Nora a la pe rsona que estaba del otro lado de la línea. ―Tienes que irte―me dijo. No creo que pueda irme. ―No llevas maquillaje. ― ¿O aquí? ―La moví hasta su cuello. Nora inhaló. Supuse que era su madre. Ven sola.Hush. No hay problema. Sobre todo. salí de la casa de Nora con todas las intenciones de darme una ducha de agua fría. MARY ANN GRINTON . Hush – Narrado Por Patch Cipriano ―Seguro. Acepté eso. ―Sobre la fiesta de mañana en la noche… ―Lo pensaré―dijo.. no lleves a Vee. Te estaré buscando. ―Aquí está la dirección.. Guardé en su bolsillo un pedazo de papel. Luego de eso. ¿Qué quieres decirme? —le pregunté. no matándola. aparte de que ella quería que recuperara mis alas. negra también. Ya me iría luego de que dijera lo que tenía que decir. tratando de no mostrar signos que denotaran que odiaba estar aquí con ella. y en el trayecto observé largos segundos el arcángel. Pensé que había cerrado todo tipo de contacto aquella última vez que nos vimos. instándola a continuar. Enarqué mis cejas. estaba sentado en una mesa frente a mi ex novia. Tendría que ir a verla. Supe que e ra Dabria muchísimo antes de leer el remitente. tratando de estar calmado. Apreté los puños bajo la mesa. La mayoría de mi ropa era de color negro. Esa oración fue suficiente para que captara completamente mi atención. Si horas atrás me hubiesen preguntado cuál sería el momento que más quería evitar a toda costa. Aceleré en dirección al club de billar. para que fuera tan insistente. Guardé de nuevo el teléfono celular luego de haber leído el mensaje. Dabria sabía que iba tras Nora. Debía existir un motivo. claro. pensando en qué podría querer Dabria. Pues se llevaría una sorpresa al saber que había cambiado mis planes. El Delphic. Ahora me recordaba a Nora. Si es que se lo decía. como en cualquier otro día bañado por el sol. hace ocho meses. estaba completamente vacío. Tomé las llaves de mi moto que reposaban en la cama. Te estoy esperando. Solo había una manera de sacármela de encima. MARY ANN GRINTON . —Te escucho. Minutos luego de detenerme en el estacionamiento de Bo. mis botas negras y una camiseta.Hush.. diría que sería este. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Diez Salón de Bo. y suspiré de frustración. Me acerqué con pasos lentos a la moto. —Es sobre Nora—dijo. lo cual era una ventaja si querías pasar desapercibido en las noches. y salí de los túneles. —Volví a ver en su futuro. Me puse un pantalón de cuero negro. y entendía cual era mi objetivo. Si había algo que asustara a un ángel de la muerte. Me quedé frio. sin decir nada. —Te dejaré permanecer con las alas—le dije. — ¿Y bien? —pregunté. La fulminé con la mirada mientras se limitaba a observarme. Gemía. con una sonrisa. era la posibilidad de perder las alas y toda aquella visita al cielo. Muy lentamente. MARY ANN GRINTON . Hush – Narrado Por Patch Cipriano — ¿Y? —Nora va a morir. con toda tranquilidad. Tenía el poder de hacerlo. y los arcángeles no podían defender a aquellos que habían roto las reglas. — ¿Voy a asesinarla? —pregunté. por supuesto. Ella enarcó las cejas y se cruzo de brazos. —Mira de nuevo—le ordené. Lo más paciente que pude. esperé las palabras de ella. y la mandíbula. Apreté los puños de nuevo. —No puedo verlo. Estuve a punto de lanzármele encima. dejando salir el aire por entre los dientes. —Vas a salvarla. — ¿Qué me darás a cambio? —preguntó. ya que se suponía que Dabria no debería estar aquí. Dabria negó con la cabeza. Regresarás conmigo—dijo. Resoplé. Dabria apretó los labios en una clara muestra que decía que me creía capaz de unirla a los caídos y cerró los ojos.Hush. hacia muecas y apretaba los puños mientras observaba. los efectos fueron pasando y ella abrió los ojos. Patch. Días atrás. ¿Verdad? Es una humana. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Si la salvo. créeme. y supe que otra visión llegaba a ella. no recuerdo habértela pedido. Sonreí al ver lo exasperada que comenzaba a ponerse Dabria al darse cuenta. Ahora. Subí a la moto con el corazón repentinamente acelerado. Era la primera persona en todo el jodido mundo que me MARY ANN GRINTON . Me quede en silencio. —No estarás haciéndolo por Nora. entonces? —Preguntó. lo más probable es que estuviera sin vida ya. me miraba con una sonrisa. Está? —Victoria's Secrets. y ahora corría lo más rápido que podía solo para salvarla. —Va a morir. — ¿Por quién sino. Era extraño como las cosas cambiaban de un momento a otro. tomándola por el cuello y acercándola a mí. — ¿Dónde. Entonces su mirada se tornó oscura. Me levanté de un saltó. — ¿Qué pasa con eso? —No son compatibles. pero lo noté. estaba sediento de la sangre de esta chica. Si las miradas mataran.Hush. no será por ti. — ¿Dónde está? —demandé saber. Volvió a sonreír. Apreté el agarre en su cuello. estirando mis piernas y cruzando los braz os detrás de mi cabeza. — ¿Es tu opinión? Vaya. muy interesada en saber. Luego de eso. —No dejaré que estén juntos. sin decir absolutamente nada. La solté y salí corriendo de allí. Ahora si estaba mostrando mí enojo. Fue cuestión de segundos. Lo sabes. Más tarde escuché a Nora llamar a una ambulancia. y detuve la moto a escasos metros de ella. y no conocía su mente. la persona que se encontraba en el suelo podría pasar por Nora. Vee me miró por entre las rendijas que ahora eran sus ojos. Y me fui de allí. Pude sentir a alguien caminar hacia nosotros. y le daría la muerte más dolorosa que jamás habría podido imaginar. Estuvieron a punto de matar a Nora de nuevo. A la primera. y aceleré al Delphic. nos sumergimos en una pelea carnal. Un tipo vestido completamente de negro la golpeaba con furia.Hush. Me arrojé sobre él. Hush – Narrado Por Patch Cipriano hacía cambiar de opinión. Por unos segundos. así que me levante. Mi cuerpo se tensó y comencé a correr hacia un callejón oscuro que se encontraba a unos cuantos pasos. Encontraría al responsable de todo esto. se encontraba Nora sola. Se le ve ía preocupada. hasta llegar a mi moto. Él salió corriendo antes de poder descubrir de quien se trataba. Después de todo. Aceleré la Ducati en dirección al centro comercial y fijé mi vista en las calles. Maldije. Me estaba cansando de perseguir a un fantasma. y la localicé. así que nos detuvimos. Se me heló la sangre y corrí aún más rápido en su dirección. ¿Dónde se había metido Vee? Abrí completamente mis sentidos. Y a la tercera. con su chamarra puesta. Yo me mezcle entre ellos. o la dejaba aquí. pensando en si me la llevaba conmigo. Me arrodillé frente a Vee. Nora le entregaba a Vee su chamarra. tuve que alejar mis ojos de allí para tratar de evitar imaginar a Nora semidesnuda. Pasé varias veces frente a la tienda donde se encontraban. Nora estaba con ella Los pasos seguían acercándose. y a personas acercándose para ayudar. MARY ANN GRINTON . Subí a ella. A primera vista. Apreté los puños y la mandíbula. A la segunda. si es que hubiese sido ella la que saliera de la tienda. vi a Nora y a Vee mirando ropa interior. como si deseara acabar con ella. quitándolo de encima de ella. No lo notó. cada golpe resonaba con fuerza. esta vez con más velocidad. ya que la oscuridad no ayudaba mucho. — ¿Dices que era una mujer? No. Si sabía de mis planes. No recuerda ninguna característica relevante.Hush. se mantendría oculto hasta que fuese el momento indicado. Ella vio una mujer antes de encontrar a Vee. — ¿Pudiste detallarla? ¿Sabes qué aspecto tenía? ¿Sabes si Dabria…? Pero no era posible. Rixon levantó las manos en un claro gesto que rezaba que no podía hacer nada. No hay nada en los registros de las llegadas a Coldwater en los últimos seis meses. Tenía que reconocer que el muy maldito era astuto. —Tengo que encontrarlo. como me pediste. tampoco en hoteles. seguíamos con el tema del fantasma que perseguía a mi chica. qué planes tenía. — ¿Has sabido algo de Chauncey? —Nop. y ella me importaba a mí. pero le importaba a Nor a. No se puede esconder para siempre. Tenía que descubrir dónde estaba. —No pude detallarla plenamente. Los recuerdos en la mente de Nora son un poco difusos. Era un hombre. Pasé las manos por mi rostro. Y eso me enfurecía más. Yo lo vi. Además. Dabria estaba conmigo en ese momento. La vi en su mente. O puede que no se esté quedando en la ciudad. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Once A la mañana siguiente estaba realmente cabreado. nada puede mantenerlo oculto mucho tiempo—rugí entre dientes. Fui a ver a Nora. Había enviado a Rixon a cuidar de Nora mientras trataba de seguirle la pista al tipo que había agredido a Vee. a cualquiera en realidad. Peleamos—gruñí. No es que ella me importara. —dijo Rixon. lo cual me hace pensar que en realidad fue un truco mental. —No me refiero al agresor. No MARY ANN GRINTON . lo cual me hace pensar. con un deje de frustración. que es posible que no esté usando su nombre. No se me ocurre nada todavía. ¿Amor? ¿Por Nora? Ni hablar. ¿Qué crees? Vuelves a elegir a una humana por encima de ella. tampoco era que sabía exactamente que MARY ANN GRINTON . Yo solo… — ¿Estás enamorado de ella? Me quedé en silencio un par de segundos. Me atraía. Aunque. — ¡Siempre es él el que hace los movimientos. No hay ninguna mente que conozca. al ver que enarcaba ambas cejas esperando mi respuesta. observándolo fijamente a la espera que dijera que estaba bromeando. Está celosa de Nora. hombre. — ¿Y por qué no la has matado todavía? Tenía que reconocer que Rixon tenía sus momentos en los que se volvía realmente insoportable. —Lo estás aceptando. y ahora que regresa por ti. — ¿Qué esperabas? La dejaste por una humana. Pero. Me volvía loco en ocasiones. Rixon! Siempre el primero. Pero eso no era amor. cariñito. Siempre el último. ¿Amor? Eso no va conmigo. hombre. —Lo más viable sería que esperaras a que él hiciera el próximo movimiento. porque no me contesta las llamadas. — ¿Qué vas a hacer? —preguntó. —No estoy aceptando nada. Hush – Narrado Por Patch Cipriano podía simplemente basarme en intuiciones. No hay un rastro. Suspiré de exasperación. tratar de adivinar cuál sería su siguiente paso. supe que era en serio lo que preguntaba. Me está enfureciendo el hecho de que cree que soy su marioneta.Hush. —Por supuesto que no. ¡No tengo nada! Y Dabria no planea decirme dónde se encuentra. — ¿Entonces qué esperas de ella? —Ya lo sabes: un cuerpo humano. —Pues tiene que superar eso. ni de lejos. —No lo sé. se hería. tal vez mi cuerpo. Fin. ¿Ves lo que digo? No sintió el golpe físicamente. Estaba maldito. y podía espiarla sin que ella lo notara para cerciorarme de que estuviera bien. ¿Pero mi alma? ¿Mi esencia? ¿Lo que yo era realmente? No sentía absolutamente nada de eso. llevándolo a su espalda y manteniéndolo allí unos segundos antes de soltar: —No te atrevas a repetir que soy débil. y no lo seré. Intentó devolverme el golpe. la única razón que tenía para asistir era Nora. Lo liberé y me di la vuelta para alejarme. ¿no? —Sólo estoy esperando el momento adecuado—dije. ¿A esto era lo que llamaban "Sentirse confundido"? Porque si era así. era una verdadera mierda. pero eso no tenía nada que ver con lo físico. ser humano era lo que había deseado desde que me expulsaron. Lo cual no ayudaba a afirmar el hecho de que no me importaba. y era difícil que me emocionara a ese nivel. Jamás sabría lo que se siente. ¿Me importaba la chica o no? Claro que me importaba. De un solo golpe tiré a Rixon al suelo. — ¿Qué sería cuál? ¿Luego de que te acuestes con ella y hagan cosas divertidas ? Vamos hombre. Daba igual. pero yo no. Sin embargo. No soy débil. acéptalo: si no la has matado. Sólo una persona en la historia había sido capaz de hacer eso. y noté que ya era demasiado tarde para ir al instituto. aunque debía tenerla rota. Hush – Narrado Por Patch Cipriano era el amor. Había cambiado mi decisión de matarla la noche pasada. ya no estaba completamente seguro de esa decisión. es porque realmente no quieres hacerlo. MARY ANN GRINTON . cuando Nora invadió de lleno gran parte de mi alma. Se levantó al instante.Hush. Después de todo. Vi la hora. pero en sus ojos vaya que se veía la furia que eso le había causado. Lo que haga o deje de hacer con Nora no es de tu incumbencia. dándole un puñetazo en la mandíbula. Te mataré si vuelves a decirlo. Maldita sea. Sentía el contacto físico como a través de un cristal: mi cuerpo sentía. No me entendía últimamente. pero fui más rápido y desvié la dirección de su brazo. No lo fui. es decir ¿Y mi cuerpo humano? Pero venían de nuevo esas imágenes de Nora ensangrentada y se me revolvía el alma. Me emocionaba internamente. Estás permitiendo que esa chica te debilite. Mi verdadero yo sentía todo a un nivel puramente emocional. se calentaba o enfriaba. Hush. Si no tienes billetes. pero otro de ellos. No tienes nada que hacer contra mí. no entras—gruñó. Al llegar. —Aquí se juega con dinero. MARY ANN GRINTON . Siempre. Pero algo peculiarmente atractivo lo detuvo. Puse diez billetes de cien dólares en la mesa. Cuando juego. —Reparte las cartas—me limité a decir. Un par de chicas. Maldición. y puse mucha atención en destilar todo el peligro que representaba. — ¿Así es suficiente? ¿O tengo que sacar más? No entiendo esa necesidad de ver cuánto dinero tengo. Le sonreí cuando se levantó de la silla. Venga. Hizo el intento. bajé directamente y le hice señas a un grupo que estaba comenzando las apuestas de billar para que me integraran. Se detuvo. pero ya estaban listos. frunciendo el ceño. Rodé mis ojos. —No quieras hacerte el gracioso. y lo destrozaría. un tipo calvo. Diez minutos después y tenía siete mil dólares en el bolsillo. — ¿Qué propones? —Te doy una oportunidad para recuperar todo tu dinero. Ya lo veremos Le sonreí. Subí a la moto y aceleré todo lo que pude. ¿Sabes quién es el mejor? Yo lo soy. El tipo de traje estaba cabreado. que lo hiciera. trucos mentales y el humo del ambiente serían suficientes para despejar mi mente. uno de pelo rojizo con un traje bastante formal lo detuvo. Me acerqué a una mesa de póker y tomé asiento. y me miraba como si quisiera estrangularme. gano. con intenciones de saltarme encima. Dejé de respirar unos segundos. antes de que pudiera marcharse. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Decidí ir a jugar una partida de billar. metí la mano en el bolsillo trasero de mis pantalones y saqué mi billetera. y me miró. Todos me miraron. —Tengo un trato—dije. Era aquella pelirroja que tanto se parecía a Nora. — ¿Sabes jugar? —preguntó uno de ellos. La pelirroja frunció el ceño y lo sujetó de un brazo. parpadeando una y otra vez. Su mirada iba de mí a su acompañante. las repartieron. yo no soy un juguete que puedes apostar. Barajearon las cartas. luego de que el tipo del traje tirara la mesa y se fuera encabronado. MARY ANN GRINTON . señalando a la chica. No lo había hecho conmigo. — ¿Qué quieres? Moví mi cabeza.Hush. agachando la mirada. ¿entiendes? —le susurró el del traje. ¿Apostar a una mujer? Que imbéciles eran los humanos. Volví a sonreír. —A ella. Ella mi miró sorprendida. Sin embargo. —Yo no pido dinero a cambio. ¿De verdad lo estaba pensando? Maldito idiota. me giré y le dije a la chica: —Lárgate. y quince minutos después la chica ya era toda mía. pero de igual forma escuché. Y allí perdió todo lo que por un momento comparé con Nora. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —No me queda más para apostar. Ella nunca se haría sumisa de un tipo. Pero claro. y viceversa. y estaba seguro de que no lo haría con nadie. La chica se limitó a asentir. —le dijo. —Oye. estábamos hablando del dinero. —Tú haces lo que yo te ordeno. Su expresión decía algo así como: ¿Qué no querías acostarte conmigo? —Pero creí que nosotros… Me levanté y guardé el dinero en mis pantalones. —Hecho. me fui de allí. Te confundí con una chica. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —No hay un nosotros. Y sin nada más que decir.Hush. pero no te pareces en nada a ella. MARY ANN GRINTON . Como por ejemplo. Trabajo esta noche—informé. En cambio. Ángel. pero en serio necesito que cubras a mi hermano. fui a jugar al paintball con Rixon y otros caídos. odiaba trabajar. No le dolía a él.Hush. expliqué lo que había pasado con el chico que había solicitado que lo suplantara. llamado. Mierda. y busqué mi moto. Estaba seguro de que si Rixon entrara en mis pensamientos en estos momentos. antes de obsesionarme con el cuerpo de Nora. No creo que quiera volver. se partiría de risa y comenzaría MARY ANN GRINTON . Mierda. — dijo la voz al otro lado de la línea. irónicamente. Cuando llegué al Borderline. Mi teléfono comenzó a vibrar en mi bolsillo. —Tamara. por lo tan to me partía de risa ver como su organismo se doblaba cuando lograba pegarle. —Dicen que ha regresado al cielo. pero era obvio que a su cuerpo sí. —la saludé. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Doce Al día siguiente. las pelotas de mi mejor amigo que no tenían protección. —Sé que es tu día libre. tampoco fui a la escuela. No lograba sacar a la maldita Nora de mi cabeza. ¿Había dicho "Obsesionarme"? —No hay problema. —Patch—contesté. así que ir a la jodida escuela no iba a ayudar en nada. — ¿Qué has sabido de Dabria? —le pregunté a uno de los caídos. Me había acostado con esta chica un par de veces en el pasado. ¿Qué por qué no dejaba este jodido trabajo? Fácil: Nora casi siempre venía a él. No me entretenían demasiado. —Chicos. Ha tenido un problema con su apéndice y está en el hospital. Me dijeron que los arcángeles estuvieron a punto de descubrir que se escapaba para venir a la tierra. pero al menos tenía que concentrar mi mente en otro objetivo. y tomé unos segundos antes de meter la mano y sacarlo de allí. debo irme. él me pidió que te llamara. Colgué. con el rostro bajo. Inhaló un par de veces y luego esparció agua fría sobre su cara. ni tampoco parecía entretenido. Lo cual era genial. — ¿Qué estás haciendo aquí? —Preguntó. Ahí si la vi. si no ponía especial cuidado en dejar de mirarle las piernas. y entregué la orden. porque si lograba matarla allí dentro. ¿Complacido? Tal vez un poco. Nora se encontraba frente al lavamanos. y una minifalda que me obligaba a mantener mis ojos en ella. Eso demostraba que claramente estaba interesada en mí. —Creo que dejé el coche arrancado. Cuando finalmente cerró la llave y miró hacia arriba. Tuve que contener una carcajada al verla sentada en la barra con uno de los chicos que. Seguía sin descubrir cómo me sentía realmente. Y.Hush. O eso creía. iba a arrancarle los ojos. pero no la vi. Hasta ahí llegaba todo. Tenía una película estilo chabacano que le quedaba realmente horrible. vio mi cara reflejada en el espejo. buscando un par de pedidos para la mesa cuatro cuando sentí su presencia. —Trabajo aquí. La chica me gustaba. apresurándose en tomar sus cosas y levantándose del taburete. Pero… ¿Podría matarla finalmente? Ya dentro del baño de damas. No estaba sonriendo. ¿Furioso? Era claro. cerré la puerta detrás de mí. La busqué con la mirada a través de la ven tanilla del cocinero. Punto. cuando tocara la limpieza. porque luego de que él le dijera que me encontraba en la cocina. seguía con mi lucha interna sobre matar o no. Me adentré en la cocina. ¿Es que acaso no sabes leer? El símbolo de la puerta… MARY ANN GRINTON . —Me refiero a aquí. Gritó y me di media vuelta. ¡Pero fue genial hablar contigo! —dijo. se puso repentinamente nerviosa. y con una sonrisa malicio sa en el rostro se dirigió al baño. Rápidamente salí de allí con las bandejas en mano. jadeando. poniendo especial cuidado en que nadie pudiera abrirla. Con paso rápido se encaminó al baño. Aun no sabía cómo me sentía con el hecho de que realmente est aba indagando en mi pasado. Al parecer me estaba investigando. nadie lo notaría sino hasta dentro de un par de días. Hush – Narrado Por Patch Cipriano con ese montón de basura de que ella realmente me importa y todo eso. Bah. No antes que la matara. y la arrojó sobre la encimera del baño. tú estás ahí. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Estoy empezando a pensar que me estás siguiendo. Aún lo reconsidero. pero en cambio dije: — Jugando Paintball. Definitivamente estaba interesada en mí. Tal vez podría contarle todo. —Cada vez que me doy la vuelta. ¿Acaso es un crimen? Crimen si llegase a matarlo. Se arrancó la peluca con frustración. —Hablaba con el Barman. La observé de arriba abajo. — ¿Tiene Patch alguna orden de restricción? —Leí— ¿Es Patch un delincuente? — ¡Dá-me-lo! —Dijo entre dientes furiosamente. ¿Qué hacías en la barra? Provocando la muerte de uno de mis compañeros de trabajo con esa falda. — ¿Quieres explicar tu pelo chabacano? —le pregunté. —sonaba a la defensiva. lo cual claramente demostraba su culpa detectivesca. —Explicó—Estuvo en el hospital. sopesando seriamente que reacción tomar. La sostuve sobre mi cabeza para que no pudiera alcanzarla. Solté una risa por lo bajo. Quizás pudiera dejarlo pasar. como último deseo. Supuestamente estás en tu noche libre. Se arrodilló para tomarlo. levantó su pie para desabrochar un tacón de cuero de tiburón. — ¡Devuélvemela! —Me ordenó. Infantil. ¿Y de qué estás hablando? Cada vez que me doy la vuelta. después de todo. —Quería invitar a Vee a salir. Equilibrando una mano contra la encimera. —Nunca pensé en toparme contigo. MARY ANN GRINTON . lo más seguro. ante el descaro de la siguiente pregunta. jamás descubriría nada. Se inclinó ligeramente y tan pronto como lo hizo. un trozo de papel cayó al suelo. —la interrumpí. — ¿Quieres explicar dónde has estado? Has faltado los últimos dos días a la escuela. Miré su cabello falso. ¿Acaso me extrañaba? Estuve tentado de preguntarle.Hush. tú estás ahí. pero fui más rápido. Vaya noche. Traté de reprimir una sonrisa mientras recordaba aquel momento. Nora. y fue sincero. — ¿Novia? Sip. Vi en los ojos de Nora que estaba dispuesta a tomar el papel. —Ex novia. así que. sintiéndome repentinamente complacido. a pesar del lugar donde se encontraba. — ¿A qué te refieres con que no anda por aquí? —Se ha ido. está bien. Hablaran bien o mal de mí. incluyendo su gemido/suspiro. —Eso no es de tu incumbencia. pa ra mi felicidad. —Conozco tu letra. ahora formaba parte de la historia. preferí responder a sus preguntas. nunca dirían la verdad. nivelando nuestros ojos. Hush – Narrado Por Patch Cipriano — ¿Patch tiene novia? Puse el papel en mi bolsillo trasero. ok. O al menos eso esperaba. —Dije—No he cometido ningún delito. —Esas preguntas eran una broma. preferiría que me preguntaras a mí. así que me eché hacia atrás en la encimera. —le dije. Es su culpa. después de un momento. —Si vas a buscar información por ahí. Las personas podrían darle la idea equivocada. MARY ANN GRINTON . —No tengo ninguna orden de restricción. —se quedó en silencio en lo que supuse sería un intento desesperado por pensar algo que la librara del atolladero. Levantó la barbilla. ¿El enojo de sentirme acosado? Bueno. Recordé cada detalle de ese casi-beso. —Me recordó— Lo convertiste en algo de mi incumbencia. regreso al cielo—Pero ella no anda por aquí.Hush. —Dije. mientras perdía el tiempo. Vee las escribió. Recordé a Dabria y a su. Nunca volverá. —Trataste de besarme. —Bueno. definitivamente interesada. y me vi atrapado de nuevo más debajo de sus caderas. No lo negué. lo cual me recordó donde estaba. Y salí de allí. y en cambio continué trabajando. Me llevó toda la noche sacar la imagen de esas piernas de mi cabeza. —Necesito volver a trabajar. —Falda mortal. Hush – Narrado Por Patch Cipriano — ¿Te refieres a que… está muerta? —Pregunté. Visualicé a Nora un par de mesas más allá. MARY ANN GRINTON . Contuve el impulso de levantar mi mano y enseñarle el dedo del medio. La puerta del baño de damas sonó cuando alguien intentó entrar. Daba igual.Hush. Supuse que había visto a Nora entrar al baño. Piernas de infarto. Ella era un ángel de la muerte. y realmente la culpa de todo la habría tenido Vee. Volví a escanearla completamente. y a mí seguirla. No pude detallar muy bien al chico que la acompañaba . lo cual me hizo preguntarme si era cierto lo que Nora decía. después de todo. porque Frank me miraba desde la cocina con algo de enojo reflejado en sus ojos. —Dije. y ella se aproximó. tambaleándose sobre unos tacones de aguja demasiados altos. Media hora después de mi charla con Rixon ya estaba en el instituto. Yo lo vi.Hush. y no podía faltar. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Trece — ¿Estás seguro de eso? —pregunté. — ¿Lo seguiste? —Lo intenté. ¿Pudiste entrar en su mente? —pregunté. pero era un hombre. Hoy tenía Biología. sonriéndome. Estaba bloqueado. rubia y superficial. había desaparecido. Una de ellas. me miró directamente a los ojos. —Maldición. MARY ANN GRINTON . No había nada. Es como si supiese que podía mirar dentro de su cabeza y estuviese preparado para ello—respondió. —Lo hice. Me acerqué a una máquina para sacar una coca-cola. reposando en la esquina de mi cama recubierta de seda negra. enojado. como queriendo hacerme una invitación. había hecho realmente bien en asegurarse de que Nora estuviese bien. Rixon asintió. Rixon se desplazó por la habitación. apretando los puños. Maldita sea. siendo consciente de la mirada de multitudes de chicas sobre mi espalda. Supongo que él ya tenía claro algo que yo todavía luchaba por descubrir. Necesitaba ver a Nora. —Completamente. Fruncí el ceño. No podía reclamarle nada. Primero quise asegurarme primero de que Nora estuviese bien. Cuando volví mi atención al hombre. Estacioné la moto en el aparcamiento y me dirige al salón. —Lo cual quiere decir que… —Sabe que lo estamos acechando—terminó él por mí. Llevaba el rostro cubierto. Necesitaba saber todo con detalles. Seguramente has escuchado hablar sobre mí… —Lo siento. No estaba entendiendo nada. —Dijo—Elliot irrumpió en mi casa anoche. Esta vez mostrando libremente toda mi frustración. tú debes ser Patch—dijo. — ¿Me invitas una coca-cola? —preguntó. Como suponía. Tod a la clase estaba dividida en parejas. —Soy Marcie. Hice que reposara sobre la mesa mientras él me explicaba qué era lo que tenía que hacer. Vee rió a las espaldas del entrenador. — ¿Qué pasa? —preguntó. llegué un poco tarde. Me giré. Intenté. Millar. no. Asentí. MARY ANN GRINTON . ¿qué era lo que pensaba Nora? ¿Ella se imaginaba quien podría ser? Precisaba estar un poco más cerca de Nora para entrar a fondo en su mente. Dios mío. Ten. —Claro. y volví a sonreír. Mientras esperaba que pasaran los cinco minutos de reposo. finalmente. —Le entregué la que llevaba en la mano y. nuevamente. seguir mi camino. Iba a llegar tarde. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Hola. regalándole una última sonrisa y queriendo pasar de ella. pero me detuvo del brazo. me dejó seguir caminando. Robó el artículo. Contuve un suspiro. un sobresalto de Nora llamó mi atención. mis sentidos se agudizaron y escuché lo que tenía que decir… —Oh. ¿Artículo? ¿Qué artículo? —Whoa. fue él. el entrenador de acercó a ellas. encarándola. Posiblemente como castigo por encontrar el artículo en primer lugar. mientras Nora se ponía nerviosa. así que miré al entrenador y le ordené mentalmente "Busca la manera de separar a Nora y a Vee" Obedeciéndome. así que no me quedó de otra que hacer equipo con un niño lleno de acné llamado Errowl. y Nora ya estaba con Vee. Maldita sea. ¿qué? —Dijo Vee.Hush. y todos los ojos de la clase se posicionaron en dirección a su mesa. Haré el trabajo. —Dijo Vee. —Dijo Vee dulcemente y el Entrenador le disparó una mirada de alerta. Ponme con Nora. —Dijo Vee rápido— Aquí. El Entrenador hizo sonar su silbato. ¿Estás segura de que el sujeto se abstuvo de actividades. ella fingió un desmayo y se avivó a sí misma. después levantó sus hojas de laboratorio. dura como una roca. Nora. —El sujeto iguala el trabajo de Biología con una sobredosis de prescripción fuerte de sedantes. Ya basta. —No me hagas lamentarme de haber permitido que eligierais vuestro propio compañero. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Um… El sujeto no parece tener pulso. —Estaba bromeando.. —El sujeto luchó con la parte de no hablar. —Justo aquí. Mientras el Entrenador probó el pulso de Vee. —No me haga lamentarme de haber venido a la escuela hoy. —Por favor. —dijo el Entrenador. MARY ANN GRINTON . ordené. —Vee intervino— Y el sujeto tuvo un duro tiempo relajándose en la mesa de Biología. —Dijo. —Tendrías que haber pensado eso hace quince minutos. Al sujeto le gustaría proponer cambiar lugares para que Nora pueda ser el nuevo sujeto . El Entrenador miró a Nora.. —Dijo el Entrenador. — ¿Patch? —Dijo él— ¿Te importaría venir aquí? Parece que tenemos un problema de compañeros. Golpeando alto y fuerte. incluyendo hablar por los enteros cinco minutos? Su pulso no es tan lento como se esperaría que fuese. frunciendo el ceño.Hush.Vee usó su mano derecha para agarrar a Nora y empujarse a sí misma verticalmente. ¿perdóname? —Preguntó moviendo sus pestañas angelicalmente. Me acerqué rápidamente a ellos. — ¿Qué? —Preguntó. — ¿Con quién lo hiciste? Sin palabras por un momento. y los echaba de menos. como si pudiese romper el hielo. Vaya novedad. y se me escapó una media sonrisa. tratando de mantener una voz neutral. —Estaba recordando los zapatos de tiburón. La otra noche. —La tarea fue brutal. Supuse que aún sus aventuras de espionaje la hacían sentir incómoda. Sonreí. Hush – Narrado Por Patch Cipriano El Entrenador escondió su libro de notas bajo su brazo bueno. — ¿Cómo estuvo tu noche? —Preguntó. —Madura. —Interesante. —No hice la tarea. ¿y la tuya? —No mucho.Hush. ni zapatos altos. Un momento más tarde. Esta vez no tenía falda. tomé un lugar en la mesa al lado de Nora. Lo cual no ayudó en nada a concentrarme en lo que se suponía que debería estar investigando. MARY ANN GRINTON . Sonreí. Ella se ruborizó. No. — ¿Fue eso un sarcasmo? —Solo curiosidad de lo que mi competencia es. Mis manos vagamente entre mis rodillas y manteniendo mi constante mirada en ella. ¿huh? Me estaba burlando de ella. Se quedó ahí con la boca levemente abierta. —No. Unos minutos más tarde abrió sus ojos un poco. No estoy de humor para jugar a prob ar al sujeto. mi alma se calentó a un nivel altamente imposible.Hush. no realmente. hazme un favor y concéntrate en el trabajo. de alguna manera. sin ver nada. —dije. Levantó una muñeca hacia arriba para que pudiera tomar su pulso. Me hubiese gustado sentir la suavidad de su piel. No hablaba de ella. indefensa. Entonces. Tomé su mano y. expuesta. Antes de que pudiera protestar. estando allí. —Ya estoy caminando en delgado hielo con el Entrenador. —No escribas eso. Era como si estuviese durmiendo. Me hubiese gustado sentir el calor de su mano realmente. MARY ANN GRINTON . y ella cruzó sus manos sobre el estómago. No tengo corazón. —Afloja. —El tiempo pasó. Cerró sus ojos. si no te importa… —Miró convergentemente a la mesa. Así que no. Entonces. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Sonreí con ganas. Sonó como si estuviera reprimiendo una sonrisa. — ¿Qué quieres decir? —Preguntó. —El pulso del sujeto se incrementa al contacto. Era como si. —Avísame cuando hayan pasado los cinco minutos. definitivamente no. No sabía cómo reaccionaría con el hecho de estar tumbado en una mesa con las manos de Nora recorriéndome el cuerpo. una vez más. Por un largo rato me quedé de pie allí. —No puedo. observándola. ella demostrara confiar en mí. la bajé a la mesa. —Dije. —El Entrenador quiere que vayamos a fondo. —Ya sabes. Nora volvió a ruborizarse.. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Mis ojos se conectaron con los de ella. Elliot Saunders. En el interior. MARY ANN GRINTON . y aproveché ese momento para indagar en su mente.Hush. estaba sonriendo. —Insinué.. Pensamientos. Recuerdos. Y un nombre. y era. En lugar de bajar las escaleras como normalmente hacía. Había una razón por la cual lo llamaban barba. apareciendo detrás del imbécil que me bloqueaba el paso. y frunció el ceño. Golpee con mis nudillos una puerta de madera blanca que se encontraba al final. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Catorce Un par de horas después de dejar a Nora en el instituto. —Vamos. dónde seguramente encontraría a la persona que estaba necesitando en estos momentos. ni nada material. ¿Con quién se creía que estaba hablando? —No te estoy pidiendo permiso. era que sólo necesitaba de un nombre. Se trataba de un caído que había vivido entre los humanos más de doscientos años. Te estoy ordenando que me dejes pasar. Pero nunca era dinero. y los favores que en ocasiones te pedía resultaban asquerosos y pervertidos. Todo. Por alguna extraña e incómoda razón. Está ocupado. obviamente. y esperé. Un tipo ruso de unos cuarenta años me abrió. Sentía que necesitaba algo… o a alguien. encendí la moto y aceleré al salón de Bo.Hush. Siempre quería algo a cambio. Crucé la entrada con paso decidido. observar el crepúsculo me hacía sentir nostalgia. La buena noticia. Pero claro. y ya lo tenía. Estacioné a un par de metros de la entrada del club de billar. era que hacerlo hablar resultaba jodidamente difícil. depositando quince dólares en el bolsillo del guarda. Patch. justo como quería. Todavía. —respondió. —No puedes pasar. todo lo bueno tenía que tener algo malo. —Interrumpió el hombre que andaba buscando. me dirige a un pasillo oculto al fondo de la estancia del primer piso. porque la barba ne gra MARY ANN GRINTON . tratando de intimidarme con la mirada. Déjame entrar—le ordené. y observé a mí alrededor. Sólo él podría darme esa información de manera detallada. Maldito insolente estúpido. cuando morirían. —Estoy buscando a barba. La mala no ticia. El sol se estaba poniendo en el horizonte. y que había desarrollado el poder de saber todo sobre todos: quienes eran. si no quieres que yo mismo te haga volar al fondo de la habitación. Esperaba que recordara el hecho de que hace cin cuenta años lo salvé de ser asesinado por Nefilim en una ocasión. que no ha hecho nada malo.. qué hacían. así que no veo por qué he de darte esa información. — ¿Eres Patch? Regresé mi atención al tipo cuarentón. o peor aún. no podría revocar al trato porque el muy listo acabaría haciéndome jurar con sangre. Mientras lo hacía. Si aceptaba. comenzó a fumar antes de preguntar: — ¿Qué necesitas ahora? Directo al grano. — ¿Por qué he de ayudarte ahora? Me salvaste la vida sólo una vez. secuestraría chicas para que este pedófilo tuviera sexo con ellas. Salió de la estancia sin decir absolutamente nada. fulminándolo con la mirada. y yo te he dicho lo que querías saber sobre Nora Grey. haciéndoles creer mediante un truco mental que ellas sí querían. Maldito sea. y le mostré una de mis mejores sonrisas amenazadoras. —El tipo sólo seguía mis órdenes. Puse los pies dentro de la habitación y cerré la puerta. quizás con demasiada fuerza. Todo lo que puedas decirme. había olvidado completamente lo de Nora. Entrecerré mis ojos ante su sonrisa petulante y comencé a maquinar algún plan. Hush – Narrado Por Patch Cipriano que le colgaba hasta el pecho era su característica más resaltante. —Elliot Saunders.Hush. —Necesito que te largues y nos dejes a solas—le dije. que prefieras deberme un favor. Nada más. No me siento obligado o atado por nada. MARY ANN GRINTON . En ese caso. Me gustaba este tipo por eso. —Sonrió maliciosamente—A no ser. no tengo ningún problema. más de la necesaria. Si accedía a deberle un favor a este hombre acabaría arrancándole las alas a algún ángel inocente. barba sacó un cigarrillo y encendiéndolo. dándome libre acceso. y se cruzó de brazos. vejete? Retrocedió unos pasos. fui a sentarme en uno de los sillones de cuero negro que se encontraban alrededor del único escritorio del lugar. Sin esperar invitación. Un juramento que no podría romper. y se perdió entre la multit ud del primer piso. Dio una última calada al cigarrillo antes de aventarlo a la basura. ¿Te cagas de miedo. —Los adultos tenemos un par de cosas que platicar. burlonamente. Yo no puedo permitir que un ángel caído. barba tenía razón. Ya no estás seguro de matar a esa chica. levantándola levemente.Hush. — ¿Por qué? ¿Qué tiene que ver ella con lo que te pedí? —Ambos sabemos que Elliot está relacionado con Nora. Cuando barba terminó allí. dobló el papel por la mitad. y luego se encogió de hombros. Alejé la mano de mi cuerpo. Jodida mierda. Se acercó al ordenador. El estómago se me encogió. —Dijo. Sopesó la idea unos segundos. especialmente uno de tan alto poder como el tuyo. para tratar de leer. cumplirás tu objetivo. ¿Qué te hace pensar que confío en que harás el juramento lueg o de que te diga lo que sé? Muy listo. Lo tomé casi al instante. pierda el tiempo con una chiquilla humana. —He visto a esa chica de la cual viniste a preguntarme el otro día… N ora—Mi sangre se congeló en el momento en que mencionó su nombre. y respondí lo que él esperaba que hiciera. y me tendió un cuchillo de doble f ilo. a pesar de tus dudas. Traeré la sangre de Nora Grey. Si asesinas a Nora Grey. pero antes de jurar. que el propósito por el cual lo investigas no es el mismo por el cual viniste a mí aquella vez. aunque últimamente me había estado convenci endo que sí era así. recordé las imperfecciones que pueden invalidar un juramento. Maldición. te daré la información que necesitas. Por lo cual necesito una prueba de que. —Está bien. Suspiré. Soltó una risotada. Al contrario de eso. —Muy listo. es por eso que viniste a mí—dijo. quiero la información. haré el juramento. y recitando: MARY ANN GRINTON . —Si juras traerme su sangre cuando acabes con ella. y comenzó a teclear un montón de palabras. te daré la información que necesitas. ¿Pero por qué dudaba tanto? Era sencillo. Contuve el im pulso de acercarme a la pantalla como un idiota. El motivo por el que había venido no tenía nada que ver con mis planes de asesinar a Nora. Maldición. —Hazlo por escrito. —Pero siento. Casi sonreí. Pero demonios. Cuando vea el papel en tus manos. interrumpiendo mis pensamientos. e hice un corte limpio en la palma. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Te propongo un trato. es la sombra de Nora. ¿Quieres saber qué pasó? El chiquillo asesinó a una chica de su instituto. claro. y a ti no te importan. Fin de la historia. asesinar a Nora y liberarse del juramento que te hizo. es sólo un seudónimo de Chauncey Lengais. Aunque. así que de igual forma te quedas sin vasallo. —Bien. no sin antes mirarme con una mirada inquisidora. Finalmente. Veamos. Planea. Volví a regalarle una de mis últimas sonrisas perturbadoras. Sólo que antes de acelerar. mi queridísimo amigo: Jules. Estoy ansioso por la sangre de esa chica que tantos problemas atrae. La moto estaba justo en el lugar dónde la dejé. Sí. había avanzado un poco. prepárate para esto. lo sé. Ahora estamos a mano. Y cumpliría con el juramento que hice. había un número de teléfono y una dirección. y contuve el impulso de darle un puñetazo. Patch. debes matar a Nora con tus propias manos. sin despedirme. Se acabó la compasión. El tipo cuarentón volvió a la habitación en lo que notó que me marchaba. antes de que él lo haga. Recuerda que has hecho un juramento. de nuevo. Chauncey moriría. al igual que tú. Elliot Saunders. Hice un leve asentimiento. Nunca juré matarla. Adolescente con temperamento indescriptible. Le daría la sangre de Nora. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Juro que. o desangrarla por completo. moriré. Patch. Me tendió la hoja de papel. Supongo que una simple y minúscula gota hará efecto. No daré detalles. Es "amigo" de Jules. Debajo de la nota. y salí del club. Planea asesinarla por el simple hecho de que la chica descubrió algo de su pasado.Hush. desdoblé la hoja y leí. e hice mi camino de regreso al estacionamiento. Barba me regaló una sonrisa en la que mostraba todos sus dientes. Si no cumplo con mi juramento. cuando llegue el momento. yo mismo tomaré la sangre de Nora y la traeré personalmente ante ti. MARY ANN GRINTON . si Nora decidiera suicidarse. obviamente. Aunque. Si aún quieres convertirte en humano. así que subí a ella. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Iba a matar a esos malditos.Hush. MARY ANN GRINTON . me sorprendí. Una idea fugaz cruzó por mi cabeza: no llevaba ningún tipo de arma. continué revisando el lugar. de pie. MARY ANN GRINTON . que estaba roto y dejando correr el agua. al sur. Las ventanas estaban en buen estado. Aunque reconociéndolo ahora. y tampoco el humano llamado Elliot. Una bola de papel se encontraba a un par de pasos de distancia. descubrí que el lugar estaba completamente vacío: no había ningún nefilim a la vista. la puerta principal se veía completamente asegurada y firme. cerrando mis puños con fuerza y dejando salir toda la ira que había contenido todo este tiempo. A pesar de saber que no había nadie. eso explicaba el motivo por el cual no había registros de Chauncey por ninguna parte. Patee algunas cosas de frustración. Me encontraba en una pequeña casa abandonada a las afueras de Coldwater. luego de derribar la puerta principal y echar un vistazo a mí alrededor. Revisé la cocina. Sin embargo. pero solo encontré un montón de trastos en el lavadero. supuse que a causa de la falta de mantenimiento y las constantes lluvias que solían ser torrenciales. Comencé mi huida de allí. Caminé con paso silencioso hasta la casa. dejándolo reposar en el asiento trasero de la motocicleta. se me cayeron las llaves de la Ducati. Estacioné la moto detrás de un par de gruesos árboles. dónde no podrían visualizarla fácilmente. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Quince Cuando llegué a la dirección que barba me había entregado. Me agaché aún más. metí la mano debajo del sofá y tomé el papel. Ni siquiera en el estudio. o en la sala. y cuando leí el contenido. Me quedé un par de segundos allí. Tampoco había nada en las habitaciones. la pintura de las paredes estaban enmohecidas. Fruncí el ceño mientras lo desarrugaba. Decidí inclinarme. Sin embargo. o hacer que estas subieran a mi mano. furioso. volví a cerrar los puños con fuerza. Quizás habían dejado alguna pista de su paradero. mientras sopesaba la idea de agacharme a tomar las llaves. de seguro estaba preparado para el momento en que decidiera atacarlo "de sorpresa". rompí algunas figuras de barro y creo que también rompí una ventana. aunque muy gastadas.Hush. debajo de uno de los muebles que me rodeaban. Me quité el casco. Mierda. y justo cuando pasaba frente a la chimenea que se encontraba en el recibidor. y lo más probables es que si hasta ahora Chauncey había logrado evadirme. ser que obligó a mi persona. a pronunciar el Juramento de Lealtad) la deje completamente sola. *Frecuenta el Borderline con una chica llamada Vee Sky. (Investigación pendiente) *Actualmente cuenta con la protección de Patch Cipriano.Hush. ORDENES A SEGUIR: *Vigilar a Grey hasta estar completamente seguros de algún momento en que Patch Cipriano (Poderoso Arcángel Caído. *Infiltrar a Elliot Saunders en el instituto: de esta forma puedo tener un mejor acceso a la chica. Hush – Narrado Por Patch Cipriano CHAUNCEY LENGEAIS: DOCUMENTOS. es de una estatura mediana y sufre de anemia. *Mantenerme oculto hasta que Elliot encuentre la forma de alejar a Patch. (Por lo general se encuentra sola en las noches) *Tiene cabello castaño pelirrojo oscuro. MARY ANN GRINTON . Chauncey Lengais. ¿Anemia? ¿Era por eso que Nora tomaba aquellas pastillas tan asquerosas? Continué leyendo. *La procedencia de la chica rubia (Vee) aún se desconoce. INVESTIGACIONES. dónde finalmente conseguiré la ocasión de poder matar a Nora. No sabemos si definitivamente estará dispuesto a matarla. por lo que su madre y ella viven solas en una granja del siglo XVIII a las afueras de Coldwater. *No quedarme en un mismo lugar por más de dos días. ojos grises. Sobre mi descendiente: Nora Grey. como es posible que la raza haya saltado una generación y sea humana. Hay posibilidades de que sea nieta de otro Nefilim de sangre no tan pura. *Descendiente directa de un Nefilim de sangre pura. Fuentes aseguran que puede estar enamorado de la chica. *Hace solo un año que perdió a su padre en un terrible accidente. Iba a matar a ese maldito. junto con tu número de teléfono. por lo cual me dispuse a seguir buscando a fondo en la casa. Vete lejos. estoy saldando la deuda que tenía para contigo. me sabía a una mierda si era mucho más fuerte que yo. había unas palabras garabateadas a mano.Hush. Llevaba bastante tiempo vigilando a Nora. para que no pueda rastrearte. Estaba seguro de que en cualquier momento comenzaría a echar espuma por la boca de todo el enojo que sentía brotar desde mi interior. ya que es el medio más rápido que tengo de comunicarme contigo. Nadie. pero dado que realmente el provocador de todo esto eres tú. me sorprendí al ver que era un fax. Él me ha pedido información sobre Elliot Saunders. Déjame darte un par de consejos: MARY ANN GRINTON . que hace aproximadamente dos minutos que Patch Cipriano se ha marchado de mi despacho. Ya no te debo nada. y él me había traicionado. te recomendaría dejar todo l o que estés haciendo ahora mismo y marcharte. Seguía sin saber absolutamente nada sobre su paradero. puesto que estaba mucho más arrugado que el anterior. Desdoblé la hoja con cuidado. La caligrafía era pulcra y antigua. por lo cual la reconocí de inmediato. Si aceptas un consejo. Volví a arrugar el papel con más fuerza de la necesaria. Elliot Saunders. Maldito sea. Otros investigadores han renunciado a mi mandato. mientras vigilaba secretamente a Nora Grey. Esta letra era de computadora. Me había hecho jurarle algo. Retrasé mi retirada. En sus manos lleva un papel dónde está escrita la dirección de tu casa. Deja de número telefónico en cualquier lugar de la calle. le he facilitado la información. me ayuda con las investigaciones. quién imagina que sólo soy un chico de preparatoria. especialmente debajo de los inmuebles. Hush – Narrado Por Patch Cipriano NOTA: Los datos conseguidos hasta ahora han sido recolectados por mí mismo. aunque fuese lo último que hiciera. Nadie jugaba conmigo y quedaba vivo. Fue en una de las habitaciones principales dónde encontré otro pedazo de papel. ya que Patch planea arrancarte las partes del cuerpo una a una. Debajo de esa nota. Los mataría a los dos. Chauncey: Que quede claro primeramente que con esto. Te envío esta nota por fax. aunque me cabree muchísimo al leer el firmante de la nota. Maldito traidor. -Barba. en el espacio en blanco que quedaba. quizás esté más cerca de lo que te imaginas. tendré la delicadeza de no revelarle mi paradero a nadie. No voy a permitir que me encuentres. Cuida de tu espalda. Me sentía furioso. No vas a encontrarme. Quisiera matarte. y aceleré sin tener en claro qué dirección tomar. Con respecto a tu curiosidad sobre Elliot. Subí a ella. humillado y desesperado. Te odio. MARY ANN GRINTON . ya te lo he dicho. Patch. Hush – Narrado Por Patch Cipriano 1: No confíes en nadie para hacer tus movimientos estúpidos.L Tuve que respirar varias veces para contener el impulso de correr y matar todo lo que se atravesara en mi paso. todo lo que haces llega a mis oídos. Voy a matar a Nora para liberarme del juramento que te hice. y así no volveré a soportar la pérdida del control absoluto de mi cuerpo. -C. Dejé los papeles donde los había encontrado. La próxima vez. Llevo un par de meses huyendo de ti. Pero una persona importante como yo debe aprender a perdonar los errores de las personas. ¿La recuerdas. y gracias por tomarte la molestia de venir a uno de mis tantos escondites. Creo que lo logré de milagro. Maldito Nefilim. sólo es una de mis marionetas. 2: Trata de actuar discretamente.Hush. maldito caído. Patch? Sin Nora en la vida ganamos ambos. 3: No te enamores. Ahora mismo deberías estar cuidando de Nora. y no pienso dejar que vuelvas a encontrarme. pero me conformaré con el hecho de que morirá alguien que es importante para ti. y finalmente fui a buscar mi moto. como aquella chica que estuvo en mi calabozo. Oh. Patch. — ¡Venga! ¿Es tan raro? —le espeté. —Sí. Lo otro. Maldije por lo bajo. —No. el de Rixon. —Necesito que vigiles a Nora día y noche por las próximas semanas. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Saqué mi teléfono y marqué uno de los pocos números que tenía registrado en mi teléfono. —Bien. sin poder creerlo realmente. Cuando estuve a punto de colgar. ¿Me harás el favor o no? —pregunté. — ¿Qué pasa Patch? —preguntó. Solté un gruñido inentendible. exasperado. —Vamos… por favor. —Claro. —Tengo vida propia. Mi mundo no sólo gira a tu alrededor—gruñó. MARY ANN GRINTON .Hush. él dijo: — ¿Qué has dicho? —Que necesito un favor—repetí. —Genial. —Necesito un favor. Escuché claramente cómo escupía cualquiera que fuera la bebida que estuviese tomando en ese momento. ¿Me has dicho "Por favor"? —preguntó. no hay problema. eso no. —Si admites que te encanta esa chica. —Tú dirás. La línea telefónica se quedó en silencio un par de segundos que a mí me pare cieron toda una eternidad. o no hay trato. —Que Nora Grey me está volviendo loco. Hush – Narrado Por Patch Cipriano — ¿Qué estupideces estás diciendo. bien. Lo admito.Hush. — ¿Qué admites? —inquirió. o lo admites. Tú decides. MARY ANN GRINTON . Idiota. Rixon? —Mira amigo: Eso es lo que hay. como quien no quiere la cosa. —Bien. Subí a la Ducati y aceleré al instante. y le regalé una sonrisa astuta a su perseguidor. así que un túnel había sido excavado para conectar la librería con el Palacio de Justicia al otro lado de la calle. Estaba anocheciendo rápidamente. Sin embargo. desapareció. Ahora ella se encontraba bajando por el elevador. No pude detallarlo. Puedo ver al tipo que está persiguiéndola. Se me revolvía el estómago con solo pensarlo. Oye. fui a darme un baño. Me vestí con una camisa y jeans negros. y justo cuando terminé de atar una toalla en mi cintura. No faltó decir nada más. ni siquiera. Nora está en la biblioteca y esto está oscuro. MARY ANN GRINTON . y tenía el presentimiento de que Chauncey aprovecharía la oscuridad para atacar. Me detuve cuando la vi acercarse. El muy maldito sabía que si lo encontraba iba a acabar con él. ya que llevaba un pasamontañas negro. que en cuanto me vio. No lo pensé. al otro lado. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Dieciséis Luego de treinta minutos de sonoras carcajadas y un montón de "lo sabía" Rixon accedió a vigilar a Nora. El garaje ahora servía a ambos edificios. Tomé las llaves de la moto y corrí al lugar donde la había dejado estacionada. cuando llamé a su oficina me informaron de había salido de viaje. cuando conseguí una coca-cola. idiota. Lavé mi cuerpo y mi cabello rápidamente. Lleno de frustración. —Ya sé quién eres. Comencé a caminar en dirección a ella. paseando por el túnel que conectaba los edificios. tampoco pude entrar en su mente. Había visto a Nora discutir con la mujer que se había insinuado días atrás. Minutos después me encontraba en el estacionamiento de la biblioteca que se encontraba en un edificio histórico justo en el Viejo Centro de Coldwater. —Patch—contesté. Se disponía a hacer eso mientras yo trataba de localizar al traidor de Barba. y el edificio terminaba con una asquerosa cúpula romántica y una gran ventana para observar las embarcaciones llegar por el mar. y él acaba de verme también. El edificio no incluía un estacionamiento.Hush. El rojo ladrillo se remontaba a la década de los 1850. Considero oportuno que hagas acto de presencia—dijo Rixon. sonó mi celular. ya sabía quién podría ser. y mis botas negras con punta metalizada. Tenía una apariencia tan… — ¿Y si mis respuestas no tienen éxito. ¿Qué no confiaba en mí? La respuesta llegó solita: No. con el coche entre nosotros. ella también lo hizo. vas a escapar? —Pregunté. Nora era demasiado lista para creer todo lo que dijera.Hush. Pude deducir por la expresión de su rostro que le había descubierto el plan. Me moví hacía ella. no lo hacía. Supe que no me había creído. retirando un puñado de cabello de su cara y mirando más allá de la salida de automóviles en la superficie. —Tengo preguntas—Dijo—Muchas preguntas. lo que hacía difícil ver con claridad si había una violación. —Un buen presentimiento—mentí. La miré por encima del coche. puesto que así se saludan aquí. Cuando me detuve. — ¿Sobre qué? —Sobre todo. MARY ANN GRINTON . —Vamos a oír esas preguntas—dije. Chauncey la habría acorralado en el lugar perfecto. Torcí mis labios tratando de contener una sonrisa. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Nora notó mi presencia. encogiéndome de hombros. — ¿Como sabias que estaría en la biblioteca esta noche? Siempre haciendo las preguntas acertadas. Si yo no hubiese llegado. ¿No? Pero ella retrocedió. posicionándose en e l lado opuesto a donde yo estaba. Me lancé hacia la izquierda. Yo estaba en la parte delantera del coche y ella en la cola. pero ella contrarrestó mi movimiento corriendo hacia la parte trasera del coche. — ¿Qué estás haciendo aquí? —Preguntó. señalando con la cabeza en dirección a la salida del estacionamiento. Encontró un coche y se paseó alrededor. Yo sabía en lo que estaba pensando: varias de las fluorescentes luces en el techo estaban fuera de servicio. con las cejas levantadas. con toda la intención de simplemente darle un beso en la mejilla. asesinato o cualquier otra actividad corrupta mi mente. aunque eso me irritaba un poco. —Si yo te hubiera salvado. por cierto? ¿Compraron algo? —Tal vez—Dijo. Mierda. —Hemos hablado de esto… Noté que se irritaba. ¿Me habría visto? — ¿Me seguiste cuando fui de compras con Vee? No tuve de otra que mentir. — ¿Que sucedió en el arcángel? ¿Tú me salvaste? —Preguntó. — ¿Cómo qué? La había visto en Victoria Secret's. —Eso es porque tienes problemas de confianza—Extendí las dos manos en el coche. apoyándome en el capó. ¿Me diría Nora de qué color era la ropa interior que había comprado en ese momento? No. Hush – Narrado Por Patch Cipriano — ¿Donde estuviste el domingo en la tarde? —Preguntó. —No. MARY ANN GRINTON . ella se refería al ataque de Vee. ¿Era porque le molestaba que supiera las cosas que sabía de ella? ¿O porque había cambiado el foco de la conversación. —No es de tu incumbencia—Contuve una sonrisa. ¿Cómo les fue. —No te creo. era obvio. No me cansaría de decirlo nunca: muy lista. no.Hush. tratando de comprender su próximo movimiento. Nora volvió a escapar de mi alcance. apuntando hacia ella? Aproveché ese momento de debilidad y me abalancé hacia la derecha. con la guardia abajo. — ¿Tienes algo que decir? La respuesta vino clara y concisa: —No. por supuesto que no lo haría. no estaríamos parados aquí teniendo esta conversación. aunque no tuve muy claro el por qué. Ni aunq ue se lo rogara. Mientras estábamos en un punto muerto fijé mis ojos en los de ella. — ¿No tienes idea de lo que le ocurrió a Vee? —Otra vez. confundida. La hice girar y la apoyé contra un poste de cemento. Dejé que pasara tres coches antes de apoderarme de su brazo. Por extraño que pareciera. Mentira. con una tímida sonrisa. puso algo de distancia entre nosotros. — ¿Que está pasando? —Preguntó. —Una revelación completa…—Repetí. de nuevo me lancé hacia ella. — ¿Por qué no estaríamos parados aquí? —preguntó. ¿Qué no me había exigido respuestas? ¿Ya se iba? ¿Qué? —Tengo tarea. Pero. —Quiero la verdad—Escuché como tragó saliva. MARY ANN GRINTON . Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Te refieres a que si no me hubieras salvado no estaríamos aquí. en lugar de detenerme. trabajando duro para sonar agresiva. confundida por el momento. bordeé el coche.Hush. Nora. —Merezco una revelación completa. Yo estaría muerta. —Tengo que irme—dijo. este momento me recordaba al que vivimos en la cocina de su casa. —Yo probablemente no estaría. La miré. reaccionando finalmente. Nora se puso nerviosa. y porque dijiste que habías venido a la escuela por mí? Dije lo primero que se me vino a la cabeza: —Estaba cansado de admirar tus piernas a distancia. Lo cual era extraño— ¿Tiene esto algo que ver con la promesa que hici ste de exponerme? ¿Exactamente de que estamos hablando aquí? Supuse que mi mirada la puso nerviosa. salió corriendo apresuradamente por el estacionamiento. —Eso no fue lo que dije. — ¿Cómo es que puedo oír tu voz en mi cabeza. sonriendo. —Falta mucho para llevar a cabo ese plan—le dije. Antes de que ella pudiera comprender lo que estaba hablando. —Tu aun estarías aquí—hice una pausa. porque escondió sus manos detrás de su espalda e hizo el además de alejarse. esta vez atacando desde la derecha. Marcie Millar… Sip. Tenía la esperanza de que la historia fuese realmente larga.Hush. —Cuéntame acerca de la pelea—le pedí. —Tus nudillos están blancos—dije. entonces. — ¿Y? —Yo la llame cerda anoréxica. Hush – Narrado Por Patch Cipriano — ¿Que ocurrió allá? —Incliné la barbilla hacia los ascensores. Con toda la intención de conseguir lo que quería. ¿Nada? ¡¿Nada?! Maldición. Quería estar con ella. Nada que no fuera cierto. —Déjalo. primero por qué vas a Coldwater y segundo porque tienes un cromosoma Y. definitivamente era la tipa de la coca-cola. —Tuve una pelea con Marcie Millar— ¿Marcie… Millar? — ¿De acuerdo? ¿Satisfecho? ¿Me dejaras ir ahora? — ¿Marcie Millar? Trató de desatar nuestros dedos. —Nada. Esperaba no sonar demasiado ansioso por permanecer con ella. cerrándola contra mí. pero no se lo iba a permitir todavía. — ¿No conoces a Marcie Millar? —Dijo cínicamente —Difícil de creer. maldita sea. y que Nora estuviese dispuesta a contármela. pasando mi boca a través de ellos. El pulso de Nora se aceleró levemente—Y saliste luciendo alterada. Y no estoy de humor. —Nora—dije su nombre suavemente. presioné la palma de su mano contra mí. Antes de que pudiera detenerme. tengo que hacer tarea. formando una torre con nuestras manos. MARY ANN GRINTON . así que si me disculpas. Muy zorra la chica. Deslicé sus dedos entre los míos. —Ella llamo a Vee gorda. MARY ANN GRINTON . jalones de cabello? Entrecerró sus ojos y me miró. y mi motocicleta apareció a la vista. —Es tarde y está oscuro—insistí. —Yo puedo pelear. —Estamos solos aquí abajo—Mis botas tocaban sus zapatos. —Vamos a tener que enseñarte a pelear. Mejor muéstrame lo que tienes. ¿Era en serio? Tuve que luchar para no romper a reír en carcajadas. —No soy fanática de la violencia sin sentido. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Oh. acurrucándose y quedando cerca. Esta vez no refrené la sonrisa. —le dije. ¿No tuvo un insulto mejor? — ¿Eso es todo? ¿Sin puños? ¿Sin arañazos. y luego se inclinó hacia mí. Se alejó. —De hecho. lógico. Mentira. Pero que obstinada.Hush. —Déjame darte un aventón—le ofrecí. —Caminaré. De seguro fue a sólo una de esas clases. se colocó el casco. Sin embargo. extendí mi mano como un objetivo. he tenido clases de boxeo—agregó. Dios. maldición. Ángel. —Estoy empezando a pensar que la única razón por la que sigues ofreciendo llevarme es porque sabes que no me gustan estas cosas —Suspiró. —Dame un golpe. tan fuerte como puedas. Hice un sonido bajo de diversión. Contemplé una de sus tantas luchas internas. —Un chico como yo podría tomar ventaja de una chica como tú. JA. —No salgo con extraños—dijo. mierda. —Cancélalas —le dije. —Gracias por el aventón—Dijo. dirigiéndome hacia la salida. Había un puesto de cobro con una maquina de tiquetes roja y blanca que prohibía la salida. Hice una suave parada que la acercó aun mas a mi espalda. por ejemplo. Por un momento pensé que había un chico al que tendría qu e dejar paralítico. le pagué a la maquina y después manejé hacia la carretera. MARY ANN GRINTON . Mierda. Me entregó el casco. Pasaré por ti a las cinco. Sonreí. Paré la moto en la entrada de su granja Nora se sujetó en mis hombros para mantener el equilibrio mientras se bajaba. —Suerte que yo sí. Aceleré por el estacionamiento. Esperé realmente a que estuviera pensando. No querer dejarte sola. ¿qué quería decir? — ¿Lo habitual? —Tarea. Oh. — ¿Que vas a hacer el sábado en la noche? —solté de pronto.Hush. —Tengo una cita con lo habitual. Hubo un momento de pausa. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Puedo que tenga otro par de razones—dije. Hice un par de trucos mentales (Venga. Un hombre vestido con un ridículo traje negro se acercó a mí. puede que tengas razón—dijo. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Diecisiete Las cosas estaban así: En el póquer las jugadas se forman siempre con cinco cartas. Muchos. En fin. Claro que quería billetes de los grandes. no te ofendas" —Por eso. De los grandes. MARY ANN GRINTON . Billetes. te ofrezco una oportunidad para trabajar conmigo. independientemente de que la modalidad de póquer a que se juegue sea comunitaria o no. con voz gruesa al acercarse a mí. y si formaba esa escalera sería el hombre más jodidamente feliz del mundo porque obtendría un Jeep Commander. y mucho más si eran muchos. . y demonios si deseaba ese coche) y obtuve el Jeep. El dueño soltó un par de maldiciones las cuales me hicieron sonreír. sin duda siendo el único. chico—dijo. . claro mensaje que decía "Ve al grano. con dos hombres enormes como guardaespaldas. no estoy de humor para jodidos ricachones" —Soy más que "Bastante bueno". que al final el 10 me salió natural. ni objetos absurdos. fruncí el ceño y apreté los puños. O tenía pinta de algo así. Quizás se lo pidiera a Rixon. De seguro se sentía protegido con sus gigantescos hombres defensores. De los grandes. escaneándolo completamente con la mirada. levantando las manos como queriendo decir "Vamos hombre. y me levanté de la mesa con la mano tendida para que me entregara las llaves. ¿qué dices? Nada de coches. Sólo tuve que fijarme en su joyería para descubrir que el tipo era realmente importante. pero la A no me había llegado. —Bien. —Eres bastante bueno. Sólo billetes.Hush. Muchos. Lo miré en toda su altura. Necesitaba un 10 y una A de corazones rojas para poder formar una escalera real. El hombre soltó una risotada. pero no tenía una jodida idea de cómo me ponía cuando estaba realmente enojado. Me gustó como sonó eso. Ya arreglaríamos los papeles. Cuando me detuve en sus ojos. Soy impresionante—me limité a responder. Y que se riera de mí de esa forma me enojaba malditamente demasiado. Hush, Hush – Narrado Por Patch Cipriano — ¿Qué tengo que hacer? —pregunté, con un ligerísimo interés. El tipo de encogió de hombros. —Sólo jugaras donde te pida que juegues. Por ejemplo, hay un juego m uy importante en cuarenta minutos. El ganador se llama cien mil dólares. ¿Qué te parece? ¿Cien… qué? Santa mierda. ¿Todo ese dinero en una jodida noche? Mis ojos se desviaron al reloj de pared que se encontraba al fondo. Cuarenta minutos… Mierda, en ese tiempo tendría que estar con Nora. Aunque puedo llamar y cancelar… No. De ninguna jodida manera iba a cancelarla, no estaba loco. Pero podría decir que tardaría un par de minutos más en llegar… No. Las chicas verdaderamente odian esperar a los chicos. Joder. Así que mi elección se reducía a decidir entre Nora y los billetes. Nora y billetes. Nora. Billetes. Maldita sea. —Lo siento, pero tengo planes—dije. Sip, acababa de elegir a Nora. —Oh. ¿Estás seguro? Estamos hablando de una suma de dinero bastante e levada, y eso es sólo el principio. Por cada noche que pase la suma aumenta—insistió. Jodida. Mierda. —No pienso cambiar mis planes. Ya te he dicho que no—le espeté. Me aferré a las llaves del Commander y salí del salón. No estaba en Bo., sino en uno un par de calles más alejado. Lo más probable es que llevara a Nora a Bo., Porque definitivamente se veía jodidamente sexy al jugar billar. O al menos mientras estaba cerca de la mesa. Era casi lo mismo. Saqué mi teléfono del bolsillo y le marqué a Rixon pa ra que recogiera mi moto, y la dejara en Delphic. Debía estar lo bastante cerca del lugar como para llegar justo cuando arrancaba el Jeep, y me enseñó el dedo de en medio de su mano. Sonreí socarronamente y aceleré. Diez minutos después de salir del club estacioné el coche frente a la casa de Nora. Corrí en medio de la lluvia hasta el porche, cubriéndome lo poco que podía con las manos, sonriéndole a mi chica. ¿Había dicho "mi chica"? Sip. Lo había dicho. MARY ANN GRINTON Hush, Hush – Narrado Por Patch Cipriano — ¿Auto nuevo? —Preguntó después de que abrió la puerta. —Lo gané hace un par de noches en un juego de billar—Bien, no era que se viera de muy buena forma decirle que acababa de ganarlo y que estaba justo saliendo de un club de mala muerte antes de pasarme por aquí. Es como si le dijera que tuve que detenerme a elegir entre ella y volverme millonario. Claro. — ¿Alguien apostó su auto? —Él no estaba muy feliz al respecto. Estoy tratando de mantenerme alejado de los callejones oscuros por los próximos días. —bromeé mientras nos encaminábamos al coche. — ¿Escuchaste lo de Marcie Millar? —Preguntó de pronto. Fruncí el ceño. —No. ¿Qué pasó? —Alguien la golpeó. Bien, eso era extraño. Abroché mi cinturón. —Una pena—dije, sin que realmente me importara. — ¿Alguna idea de quién pudo haberlo hecho? Se escuchaba preocupada. ¿Estaba insinuando lo que creo que está insinuando? Espero que no. Me recosté contra el asiento y me pasé una mano por mi mandíbula pensativamente. —Nop. Un par de minutos después parqueé el Jeep detrás del salón de Bo. Cuando llegamos al frente de la fila, el cajero puso sus ojos primero sobre mí y después sobre Nora, una y otra vez, como tratando de encontrar la conexión. — ¿Qué pasa? —Pregunté, poniendo tres billetes sobre la mesa. El portero puso sobre Nora su mirada penetrante. De nuevo. El se dio cuenta que ella no podía dejar de mirar los tatuajes verde moho que cubrían cada pulgada de sus brazos. Entonces movió una bolita de tabaco de un lado al otro de su labio inferior y dijo: — ¿Se te perdió algo? MARY ANN GRINTON Hush, Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Me gusta tu tatoo—comenzó a decir. Contuve el impulso de reírme. —Creo que no le gusté mucho—Me susurró cuando estábamos a una distancia prudente. —A Bo no le gusta nadie—le dije, para consolarla. — ¿Ese es Bo? ¿El del salón de Bo? —Ese, es Bo Junior del salón de Bo. Bo padre murió hace unos años. — ¿Cómo? —Preguntó. Me encogí de hombros. —Pelea de bar bajo, supongo. Nora se tensó detrás de mí. — ¿Esto es seguro? —Preguntó. ¿Seguro? Si no fuese jodidamente seguro no la hubiese traído. La miré de medio lado. —Ángel… —Sólo preguntaba. Escogí la mesa más alejada de las escaleras. Pedí dos 7up del bar y las destapé con el borde de la mesa. Chico malo. —Nunca he jugado billar—confesó. —Escoge un taco—Le dije, señalando hacia el aparador de palos empotrado a la pared. Levantó uno y lo trajo hasta nuestra mesa. Tuve que pasarme una mano sobre mi boca para borrarme una sonrisa. Estaba agarrando el palo como un jodido bate de beisbol. — ¿Qué? —preguntó. MARY ANN GRINTON —Estás un poquito desviado—dijo. Empujé la punta del palo de billar a través del círculo y sobre el nudillo de su dedo del medio. puse mis manos sobre su cadera y la posicioné en frente de la mesa. y halé hacia atrás el palo de billar. — ¿Qué bola quieres golpear? —Le pregunté. Como un trípode. —Dobla tu cintura—le dije. Dirigí el palo hacia atrás y hacia delante a través del círculo. Sonreí. —Así se siente más cómodo… Me moví detrás de ella. ¿Qué no se daba cuenta? —Estás sosteniendo tu taco como un bate. Traté de ignorar el hecho de lo sensual que se veía la imagen. No lo había notado. —Sin Home Runes. Deslicé mis manos a su alrededor y tomé su palo de billar. —Así—le susurré al oído. —Y así—continué. practicando el golpe. apuntando a la bola blanca. MARY ANN GRINTON . Entendido. —La amarilla del frente parece una buena elección. Miró sus manos y sus cejas se alzaron.Hush. guiándolo a través del círculo. —Entonces la roja será. —El rojo es mi color favorito—le dije. exponiendo su cuello a mí boca. tomando su mano izquierda y formando un círculo con su pulgar y su dedo índice. Sip. Se inclinó hacia la mesa de billar. Entonces puse su mano izquierda en la mesa. reacomodando su mano derecha hacia arriba unos cuantos centímetros. Mi sonrisa se agrandó. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —No puedes marcar un Home Run en el billar—le dije. Bajé la vista a su cuerpo y me fijé en la chaqueta que odiosamente me impedía detallar su cuerpo. Hush – Narrado Por Patch Cipriano — ¿Cuanto quieres apostar? —Cinco dólares. Mierda. No creo que sea educado mencionarlo. esta golpeó a su vez la bola ocho y con el impulso metí la azul limpiamente. estaba separada de la bola blanca por un montón de bolas de otros colores. jodidamente perfecta. En el instante en que la bola blanca golpeó la verde. —Muy bonito—dije. seleccionándola a propósito. Jah. MARY ANN GRINTON . Tomé impulso y golpeé fuertemente la bola blanca. Oh. — ¿Entonces qué quieres? —Preguntó.Hush. —Cinco dólares a que no puedes meter la azul—dijo. —Tu chaqueta. quitándose su chaqueta de Jean—Tal vez esté un poco impresionada. Entonces. la bola blanca se disparó hacia delante. Sacudí la cabeza. Examiné su bufanda de seda/camisa Halter. Mi brazo se desplazo hacia atrás y el palo de billar se disparó entre mis dedos. Le quedaba realmente. Como si eso fuese a detenerme. Bajé el palo de billar hacia la mesa. Sacudí la cabeza suavemente. sin atreverme a decir "caliente". No iba a dejarla sin dinero. impactando la bola roja. — ¿Quieres mi chaqueta? —Quiero que te la quites. ¿Ahora mismo? Bien. dejando las bolas desordenadas en todas las direcciones. —Está bien—dijo. golpeando la bola blanca. destruyendo el triangulo. Me moví alrededor de la mesa. observando la posición en que quedaron las bolas. —No quiero tu dinero—le dije. Nuestros ojos se encontraron y le regalé una diminuta sonrisa. Jodida. Fuertes pisadas retumbaron en el suelo de las escaleras. —Eso quisieras. El chico se apoyó en la mesa de billar a junto a Nora y le ofreció su mano. con nariz aguileña y desordenado pelo negro-azulado apareció al fondo. Una pequeña mueca apareció en su cara mientras se estiraba y agarraba su 7Up. Se rió.Hush. —Mi nombre es Rixon. tal vez estoy más que un poco impresionada—dijo. limpiando su boca con el reverso de su mano. pero creo que eso es…—Comenzó a decir Nora. —Nunca llegamos a apostar nada—dijo. lo sabía. Algún día te lo voy a cobrar. Vaya. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Nora dejó escapar una risita nerviosa y trató de cubrirla sonando sus nudillos. pero fue un sonido fuera de tono. pero luego miró a Nora. Rixon primero fijó sus ojos en mí. —Tú no mencionaste que ella se viera tan bien—Me dijo Rixon en voz alta. Sexy. vaya. Un alto y fibroso chico. Cierra esa maldita boca y lárgate de aquí. Sus mejillas se sonrojaron levemente. —Tampoco le conté a ella lo mal que te ves tú—le respondí. supongo que de las cosas "indecorosas" sólo yo era consciente. —Discúlpeme. Bien. Aún estaba inclinado sobre la mesa cuando la miré. dije en su mente. —Me lo debes. Iba a joderme por el resto de la eternidad por esto. MARY ANN GRINTON . con un amago de sonrisa. La cual había dejado sobre el borde de la mesa de billar. amor. Por ahora . —Está bien. Miren nada más con quien está mi querido Jev Mierda. revelando una ceñida camisilla blanca que tenía debajo. Mientras deslizaba la camisa sobre mi cuerpo. — ¿Te contó el cómo obtuvo su sobrenombre? —le dijo. claro. Sólo quieres que me vaya. mi camisa rota se abrió totalmente. Quítate de encima—Gritó Rixon. le dije. Me balanceé y me puse de pie. —No—dijo Nora al mismo tiempo que yo decía: —Si. Entonces sentí que mi espalda quedaba desnuda. Escuché que Nora jadeaba. Te voy a dejar sin poder caminar en una semana. eh? De repente. Voy a desfigurar tu hermoso rostro. mirándonos inquisidoramente. y las manos de Rixon volaron hacia mis hombros. —Tranquilízate—dijo él retrocediendo. Me la arranqué del todo y la tiré a un bote de basura del mostrador. Se quito su camisa y me la pasó . puños conectando con piel y tela rompiéndose. amenazándolo con mi acercamiento. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ¡Deja de coquetear con ella. — ¿Qué crees. maldita sea! gruñí en sus pensamientos —Nora. Rixon le dirigió un guiño malvado a Nora. amorcito Se escuchaba el sonido de risas roncas. rodando y dándonos golpes. —Oye. Me coloqué encima de Rixon y sostuve su cuello con mis manos.Hush. y los dos caímos al suelo. joder. y supuse que había visto mis cicatrices. Rixon se dirigió hacia ella. Oh. —Dame tu camisa—le dije a Rixon. — ¿Estoy interrumpiendo algo aquí? —dijo Rixon. Mierda. MARY ANN GRINTON . Nora? ¿Deberíamos devolverle su camisa? Me acerqué juguetonamente a él. ¿Eh? ¿Para quedártela para ti solo? ¿Para seguir enamorándote. Rixon me empujó juguetonamente. Era un campeón de medalla de oro. Hush – Narrado Por Patch Cipriano — ¿Perdón? —Antes de que nuestro amigo Patch quedara enviciado con el billar. Señalé la escalera con mi cabeza y le ofrecí mi mano. —Salgamos de aquí—dije. le espeté en la mente. Rixon movió su cabeza. —Ya verás. y poco después todos comenzaron a llamarlo Patch. — ¿A dónde vamos? —preguntó. —La verdad sea dicha. amor. Mientras subíamos la escalera. MARY ANN GRINTON . el era realmente patético . Miré a Nora para aclararle (obviamente con la mirada) que no era cierto aquello. Era malditamente bueno.Hush. Yo pasé la mayoría de las noches remendándolo. Cierra la jodida boca. le gustaba el boxeo irlandés a puño limpio Y no era muy bueno en ello—continuó. Rixon le gritaba: —Buena suerte con él. Le dije que dejara de boxear pero nunca me escuchó. Vi una pequeña bola de cristal que estaba en venta. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Dieciocho En el camino de regreso. La chica me entregó la bolsa hiperventilando un poco. mucho antes de su remodelación. Tomé un sobre de azúcar de esos que reposaban en el mostrador para agregar a los cafés y lo puse en mi boca mientras esperaba la comida. y fijé la vista afuera. así que lo compré. Sí. Me abrí paso entre un par de niños que se encontraban en la entrada de un pobre restaurante de comida rápida. Todavía estaba lloviendo fuerte. Se ruborizó. Sonreí. Me deslicé hacía afuera. asentada a la orilla del río Androscogging. no le había comprado la cena a alguien desde hacía muchísimo tiempo. la fábrica había sido utilizada para convertir la pulpa del árbol en papel. —Veré que puedo hacer—le respondí. Pero sin pepinillos. Ahora un gran letrero de leía al del edificio: "Compañía de Elaboración de Cerveza Perro de Mar CO". iba a hacer que me mojara. La chica que me había atendido no me había quitado la mirada de encima. ni mayonesa. En un momento. Abrí la puerta del coche. Era el Delphic. El río era amplio y entrecortado. dejando que se quedara con el cambio. con árboles maduros que se alzaban a ambos lados. MARY ANN GRINTON .Hush. — ¿Alguna solicitud? —pregunté. tomé la salida Topsham y aparqué junto a la histórica fábrica de papel Topsham. —Un sándwich de pavo. Me sentía extraño. así que le sonreí y le guiñé. Ella tenía algo. Pobre chica. sólo por diez dólares. dejando las llaves en el coche. y le entregué un billete de cincuenta dólares. y la noche caía alrededor nuestro. y me acerqué a la dependienta para ordenar el pedido de Nora. — ¿Podemos salir? —preguntó Nora. justo cuando Nora preguntaba: — ¿Atacaste a Marcie Millar? —Casi escupí la bebida. arrojé la bola de cristal dentro de otra bolsa que estaba debajo del asiento. Destapé una de las 7UP y tomé un poco. y enseguida tapé su boca con mis manos. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Salí del sitio tarareando una canción de 30 Seconds To Mars. No quería que Nora desconfiara de mí. De igual forma la saqué.Hush. volví a ponerme mi gorra. lo cual era ilógico puesto que sólo había escuchado The Kill una sola vez en toma mi vida. MARY ANN GRINTON . Explícalo. sacudiéndome el cabello mojado por la lluvia. lo que encontré fue un arma. y al sentarme en mi sitio arrojé la gorra de beisbol hacia atrás. descubrí que esa linterna no era mía. Bajé la mirada a la linterna y sí. — ¿Crees que usé la linterna para golpear a Marcie? —pregunté. Luego. no ahora. pero no tanto. ahora. Nora gritó. —Jugaba a eso a principio de esta semana… Sería buena idea ir. ¿Pero qué demonios…? — ¿Qué? —Sólo me había enterado quien era esa chica hace nada. — ¡Es una pistola de Paintball! —mentí. —Un sándwich de pavo. ¿Por qué iba a golpearla? —La linterna en tu guantera. —También traje algo para beber. — ¿Miraste mi guantera? —pregunté. —Quiero la verdad. Sin mayonesa y pepinillos—le dije. ¿De dónde carajos había salido la sangre de esa linterna? Comencé a pensar… Recordar qué había sucedido los pasados días… Mientras Nora me contaba lo que había sucedido el día que golpearon a Marcie. En fin… Corrí en dirección al Jeep. efectivamente había sangre allí. sí. metiendo la mano detrás del asiento a ver si encontraba algo que me ayudara a salir de la situación. de seguro era del imbécil que había perdido hace unas horas. Sabía que personas con autos como este no se andaba n con rodeos al momento de matar a alguien. así que no tuve más opción que ingeniarme una respuesta. Mientras le entregaba la bolsa de la comida a Nora. Joder. Jodida mierda. Di la vuelta para subir directamente al lado del conductor. un poco irritado. con la bolsa en una mano y las dos bebidas en la otra. con un sonido medio en broma. Miré hacia adelante. cambiando el tema. Oh. y la vio. ¡gracias al cielo! —Estuvimos jugando a capturar la bandera—Sonaba verdaderamente estúpido. no era que no quisiera. Es pintura. imaginando unas posibles nueve mil formas de matar al imbécil que por un segundo puso en peligro mi relación con Nora. —Hablando del juego… Me gustaría saber cuándo y cómo me vas a cobrar lo que… te debo. con un hilo de voz. Aparté la vista y metí la mano debajo de mi asiento. Sus ojos se desviaron hacía la guantera. Su rostro reflejó alivio. sí. ¿Intentaba ser graciosa? —Vamos a tener que enseñarte a jugar billar. recordando el juego anterior. sin quitarle los ojos de encima. la explicaba. Bien. —No esta noche—le dije.Hush. Mi imaginación se desató en todas las posibles formas en que podría "cobrarme" lo que había ganado. así que cuando me detuve frent e a su casa la miré por debajo de la visera de la gorra y sonreí. pero comenzar a devorarme sus labios o algo parecido no era algo que tuviera pensado para este momento. suena como si ella tuviera muchos enemigos— dije. Parecía estar avergonzada—Lo siento. estoy bastante segura —dijo. Supuse que lo peor había pasado ya. el cual MARY ANN GRINTON . Saqué el obsequio que había comprado. así que me relajé. pero bueeh. Casi sonreí ante el reflejo de decepción que se asomó a sus ojos. —Vee y yo encabezamos la lista. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ¡Como si realmente me gustara ese juego! En fin… —Eso no explica la sangre en la linterna. —Mis ojos se desviaron a sus pies y. —Oh—dijo. Había estado conduciendo a casa de Nora. no es que mantuviéramos una relación. pero no se me ocurría algo mejor. ángel—le dije. —No es sangre. —Según tu descripción de Marcie. Aunque claro. luego a sus pies. La mujer se acercó aún más a nosotros. aunque ya sabía que lo haría. al menos no hace veinte minutos. inclinando la cabeza. era una bolsa del Borderline. con un hilo de voz— ¿Qué sucedió realmente esa noche que subimos juntos? Bien. ella querría matarme a mí. entregándole la bolsa de papel. MARY ANN GRINTON . para advertirle. vi a una mujer parada a pocos metros de nosotros. y se quedó con la mirada perdida en ella. —No quieres saber—dije. Mientras miraba por el vidrio del parabrisas. pero no sabría si podría alejarme de ella. Hush – Narrado Por Patch Cipriano se encontraba dentro de una bolsa de papel blanco con los Red Hot Chili Peppers. antes de su remodelación—le dije. Supuse que sería la madre de Nora. Detrás de la rueda de la fortuna un alambre delgado con cintas formaba las colinas y los valles del arcángel. —No estamos solos—dije. me hacía más creíble el hecho de que la había comprado hace mucho. Un ángel con alas rotas se situó en el punto más alto. en serio significa mucho. — ¿Qué es eso? —preguntó. —Ábrela. señalando la montaña rusa —Este es el arcángel. Sentí alivio al ver que le había gustado. con toda intención de hac er salir a Nora del Jeep. — ¿Qué fue lo que realmente pasó? —Preguntó ella. —Si me dices. ¿Tendrás que matarme? —preguntó. mirando sin ojos. medio en broma. me encanta. Bueno. —Es hermoso—susurró. Acerqué mi mano hasta el objeto. tocando el vidrio curvo. ahora mismo no me complacía mentirle.Hush. completa y absoluta. Genial. No era eso. Quería decirle la verdad. —Tengo algo para ti—le dije. cuando realmente quería decir: No quiero decirlo. —Gracias. Nora sacó la bola de cristal de la bolsa. Sin embargo. pero no sonó como tal. Imaginé que eso era conmigo. Sentía que ella estaba haciendo todo lo posible por mantenerme fuera de conversación. yo hablaré—dijo Nora. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Déjame hacerlo todo a mí. o en una liga de la ciudad? — siguió la mujer. pero lo intentaría. —Más bien de ocio—respondí. —No digas una palabra. Blythe Grey. Nora se puso nerviosa a mi lado. Hay muchos lagos por aquí. — ¿No te da frío? MARY ANN GRINTON . ¿Dónde nadas? ¿En el centro de recreación? —Soy más bien de los que están al aire libre. pude sentirlo. No pude evitarlo. o su madre lo había imaginado? —Pues es un deporte bastante bueno. —Fue algo así como de última hora—respondió. — ¿Estás en el equipo de natación de la escuela. mirando a Nora con curiosidad. Me perdí unas cuantas frases de la conversación mientras observaba los alrededores. reí con verdaderas ganas. Más bien parecía una mezcla de interrogación y afirmación. Nos encontramos con la mujer a mitad del camino a su casa. —Él es Patch—dijo Nora. —No sabía que ibas a salir—dijo ella. sonriéndole tensamente. —Nora me dijo que eras nadador—siguió Blythe.Hush. Necesitaba asegurarme de que ella estaba bien por esta noche. una peculiar frase captó de nuevo mi atención. —Un nadador—era una pregunta. —Soy la Mamá de Nora. No sabía si podía quedarme callado. ¡Ni una sola! Me bajé del coche y fui a abrirle la puerta. metiendo el regalo en la bolsa. ¿De verdad le había dicho que era un nadador. Bien. —Debes tener un buen trabajo—murmuró. —Limpio mesas en el Borderline. te acompaño. — ¿Te importa si te pregunto por tu promedio? — ¡Vaya que es tarde! —intervino Nora. Ya encontraría algo… MARY ANN GRINTON . —le expliqué. y ni mencionar los lagos. Maine no era un lugar cálido. —No ha sido un problema—le dije. No parecía demasiado cómoda. —Dos puntos—murmuré. No supe que decir. hubiese descubierto que estaba diciendo toda la verdad. Sí. recordando… —Patch está bromeando—agregó Nora. Aunque todavía no sabía cuáles. — ¿Jugar? —preguntó Blythe. y pool que jugar—dijo Nora. Vamos. cualquier piscina al exterior era fría. —Tienes un Jeep muy bonito—dijo Blythe. Tengo unas cuantas cosas por hacer—les dije. gracias a Dios—Patch debe ponerse en marcha. —Espero que el trabajo no se interponga en el camino del estudio. Nora me dio un empujón en dirección al Jeep que decía "Venga. confusa. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Bien. mostrando una sonrisa. La miré. —Nora se refiere el salón de Bo. lárgate ya. No estaba bromeando. esto era una manera indirecta de interrogarme. mi Jeep era estupendo. si hubiese estado prestando un poquito más de atención. —Muy bien—interrumpió Nora. ¿Y eso qué? — ¿Tus padres lo compraron para ti? —Lo obtuve yo mismo—respondí secamente. —Pero no es ahí donde me dirjo. por favor" —Patch tiene cosas que hacer. al ver la sorpresa en el rostro de su madre. Blythe frunció el ceño.Hush. —Insinuó ella. Miré a Nora. Me hubiese encantado hacerlas sentir más incómoda. así que no podía. —Sólo tenemos de vainilla. Sacudí la cabeza. —No te has perdido nada. — ¿Qué llevaste a hacer a Nora esta noche? —preguntó. antes de que pudiera decir algo más.Hush. y a qué se dedicaba. este interrogatorio me estaba irritando. no sabía qué debía responder a eso. —Tomamos la cena en Topsham—respondió ella rápidamente—Sándwiches y refrescos puramente inofensivos a las ocho. Pasaron unos segundos en los que Blythe supo qué era el salón. Sabía que ella no me quería ahí. fue agradable conocerla. pero la madre de Nora no parecía haber terminado aún. ¿Inofensivos? Nada de lo que sentí esta noche era inofensivo. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Nunca he estado en Bo. — ¿Te gustaría tomar un helado? —preguntó. MARY ANN GRINTON . Blythe. intentando ser cortés. tomando en cuenta que habíamos estado en el lugar del horror para ella. —No es tan excitante—intervino Nora. Pude ver su cara de horror en lo que se hubo enterado. Tal vez la próxima vez. Es de hace unas pocas semanas. —Me tengo que ir. pidiéndole ayuda en esto. pero se me había ocurrido algo para hacer. Bien. Tuve toda la intención de irme. Tenía la necesidad de permanecer con ella y protegerla. ¿Pero lo pensaste. Rixon reía. pero eso podía dejarlo en un segundo plano. Me miró. No todavía. —Oh. con voz aguda. con una media sonrisa burlona. él tarde o temprano aparecería a reclamar la sangre de Nora. Di un paso atrás y me preparé: Se abalanzó sobre mí. Conecté mi puño con su estómago. pajarito dije en su mente. junto a su madre. me enseñó el dedo del medio y bajó de un salto de la atracción. —No digas estupideces. —Estas no son horas de llegar. Tenía el estómago revuelto. —Estaba su madre. golpeando mi espalda. riendo todavía. Solté un gruñido y lo empuje. Rixon se encontraba en la cima del arcángel. recordando las veces en las que me reprochaba mis continuas visitas al lugar. Jovencito—dijo. Rixon. juguetonamente. algo no andaba bien. no me di cuenta cuando sucedió el cambio de papeles. Después de todo. Se acercó a mí con una sonrisa petulante en su rostro. tratando de alcanzar el punto crucial entre mis alas. ¿Desde cuándo me dejas tocar tu espalda? —preguntó. —Estás blando. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Diecinueve Llegué al Delphic unos minutos después de dejar a Nora en casa.Hush. y él enarcó las cejas. —Tal vez. MARY ANN GRINTON . Le empujé el brazo lejos. Sonreí. haciéndolo retroceder un par de pasos. También quería encontrar a barba. pero no podía hacer eso. — ¿No pudiste pasar la noche con Nora? Bufé. Rixon se acercó a mí y me dio un puñetazo en el hombro. amigo mío. Vuela. Tenía algo un poco más importante que hacer: descubrir el paradero de mi vasallo. si quiera? Sonreí. Él se encogió de hombros. — ¿Por qué? — ¿Por qué lo haría. así que todos los humanos pasaban a un par de metros de distancia de nosotros. con el labio sangrando. Di por terminada la pelea cuando lo dejé tendido en el piso. —Oh. pero ya quisieras. en tal caso. —Cuando puedas terminar una pelea sin ninguna herida.Hush. sujetándola. burlándome. Me tendió la mano y. —Ya. MARY ANN GRINTON . Nos sentamos en el suelo. ¿Mi hermanito menor está enojado? Buh. —Ella no me está enseñando nada. Pasando la mano por su boca. Entramos y salimos del cielo a la par. — ¿No vas a disculparte? —No. lo ayudé a ponerse de pie. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Oh. yo sería mayor que él. maldiciendo por lo bajo. — ¡Tenemos la misma edad. —Creo que me has roto un diente—dijo. El arcángel estaba cerrado por una falla técnica que supuse la había provocado Rixon. junto a la entrada que daba a los túneles mientras observábamos la noche alrededor. idiota! ¿Hermanito menor? Que no me joda. vuelve a enfrentarme —le dije. Y hablando humanamente… Bueno. Rixon se inclinó hacía un lado y escupió sangre. —Si esa chica te estaba enseñando a decir por favor. Rixon? —pregunté. supuse que también te enseñó a pedir perdón—dijo. Volvió a encogerse de hombros. y escupió de nuevo también. Con el deseo ferviente de que la historia que cuenta el libro de Enoch sea cierta. bebí. nadie que yo conozca. No me sorprendí. pero justo en ese momento. — ¿Qué cosa? Suspiró. pero no podía transmitirme las sensaciones. —Aún no estoy del todo seguro de que quiera morir en unos años. —He tratado. y luego nos quedamos repentinamente serios. pero nada conseguía llenarme. Y ya casi la encuentro. —A mí también me gustaría ser humano—dijo de pronto. — ¿Qué tiene de malo vivir unos pocos siglos más? —preguntó. Era injusto. como mi cuerpo recibía de buen grado mis emociones. le había causado una hemorragia. escupiendo por tercera vez. La muerte. compañero—murmuré. El gran final que nadie espera. —dijo. De sentir todo a través de una pared de hielo. Ni siquiera aquella chica que conocí al caer. Estaba cansado de no vivir. MARY ANN GRINTON . Sólo escuchábamos el rugido de las personas que subían a las atracciones. Por largos años deseé encontrar alguna manera de poder sentir… Tuve sexo. —Aún no estoy muy seguro. él. —Sin embargo…—dudó. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Le di un empujón al captar el doble sentido de sus palabras. normalmente lo hacían con el propósito de conseguir un cuerpo humano. Lo miré. sí. éramos invisibles. peleé. Imaginé que más que sacarle un diente. —Bien. Bueno. Era frustrante. Ni siquiera estaba seguro de que aceptaría morir al pasar unos años… Aunque lo más seguro es que aceptara la muerte con los brazos abiertos. Me enojaba ese hecho. Hay algo en toda esta idea de ser humano que no me agrada.Hush. —Sigo tratando. — ¿Has tratado de localizar el descendiente de Barnabas? —le pregunté. Nueve de cada diez ángeles que caían. —Hemos vivido demasiado. aposté. supongo. pero no. — ¿Lo estoy? —pregunté. —Nada. Asentí lentamente. — ¿A qué te refieres? —inquirí. compartiendo con él. Necesidad gana a deseo. ¿Qué harás entonces? —preguntó. Rixon—murmuré. pasando las manos por mi cabello. Exactamente. — ¿Vas a matar a Nora Grey? Es la única oportunidad que tendrás de ser humano— dijo. No habrá más oportunidades para ser humanos—murmuró. lo consideraba un hermano para mí. Ahora mismo. Por un momento creí que reiría. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Sonreí. ¿no? —La verdad es que no creo que pueda matarla. lo evalúo. —Estás enamorado—afirmó. sólo quería una cosa. —Ya. no habrá descendientes—le recordé. Me sorprendió que fuera una afirmación y no una pregunta. cambio de parecer. Llevaba años conociendo a Rixon. MARY ANN GRINTON . Pero también deseaba estar con Nora. Fruncí el ceño.Hush. lo planeo. como si evaluara algo. tampoco entré a su mente. mirándome fijamente. Pero en unos pocos siglos. Pero también solo necesitaba una. Es como si con sólo mirarme pudiera detener hasta la peor parte de mí. Me contuve de preguntarle. —Y tú. Si él necesitaba que yo supiera lo que pensaba me lo diría. —En ocasiones quiero. pero cuando llega el momento de llevar a cabo el plan. Se limitó a mirar al infinito. como si pensara. Yo todavía deseaba ser humano. Y él me respetaba a mí. no me sentía capaz de inmiscuirme en su vida así no más. Lo respetaba. no lo estoy. —Es inmortal. — ¿Planeas quitarme un brazo. mirándome. —No. —Que sí. riendo. Y Rixon tampoco. Sacudí la cabeza.Hush. —dijo él. No podía estarlo. causando que maldijera y volviera a escupir. también? Reí. ¿Se te olvida? —se burló. — ¿Y qué harás cuando lo encuentres? —Voy a matarlo. No estaba enamorado de Nora. —Ahí está. —Sí. MARY ANN GRINTON . así que él no tenía razón en esto de ninguna jodida manera. —insistí. —Que no. no de verdad. — ¿Qué plan tienes hasta ahora? —preguntó él. Pero lo estás. aunque realmente no lo sabía. —Corrección: No quieres estarlo. —No. Le di otro empujón. Nunca me había enamorado. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Lo estás. —No. —Encontrar a Chauncey. lo has aceptado—dijo. —Tiene que haber una manera—le espeté. Bueno. pero imaginé que estaba agotado. Me encogí de hombros. y suspiró. si tú no te conviertes en humano tampoco lo haré yo. No lo estoy. Bien. escupiendo sangre en el suelo una vez más. Ya Rixon no sangraba tanto. definitivamente no estaba enamorado. Ya me lo contaría en su momento. A pesar de saber que mentía. pero había algo en aquella sonrisa que no me convencía. —Ya lo sé. hermano. y ordenaré que quemen cada pieza que entregue. — ¿Y bien? ¿Te convertirás en humano? Se quedó en silencio el tiempo suficiente como para imaginar que no quería darme esa respuesta. o tal vez se había enamorado también de la chica. Tal vez era complicado.Hush. Sonrió. Desvió sus ojos de nuevo al infinito. voy a desmembrarle el cuerpo pieza por pieza. al menos no todavía. Luego enviaré cada caja a un país diferente. Algo que ocultaba. igual que yo. —Barnabas. Sin embargo. Punto. —No sé cómo se llama—dijo. Si eso no le causa la muerte. Otro minuto de silencio. Hush – Narrado Por Patch Cipriano — ¿Y si no la hay? ¿Siempre tenía que ser tan negativo. —Lo que tú vasallo piense de mí me importa una mierda. — ¿Quién? —Pregunté. —De todas formas. no quise insistir. si es que lo hacen. volvió a hablar: —Tiene una hija. encontraré otra forma—dije. MARY ANN GRINTON . y las encerraré cada una en un cajón para que no pueda regenerarse. —Barnabas va a odiarte por el resto de su vida—dijo Rixon. joder? —Si no la hay. —Bien. curioso. riendo. No lo estaba. Hush. —Oh. Se encogió de hombros. desviando el tema. era la vida de Nora la que corría peligro. ¿Por qué? —Pienso matarlo. MARY ANN GRINTON . también. —Sólo que se fue por una temporada. pero no era cierto. Después de todo. Por ella. sí. Hush – Narrado Por Patch Cipriano — ¿Has sabido algo de Barba? —le pregunté. — ¿Por la chica? Iba a decir que realmente era por mí. Sólo que ahora no tenía el efecto que tuvo alguna vez. pero su rostro no cambió ni un ápice. Me encogí de hombros. Pude notar cómo se ponía rígida sobre mí. Te pasas la eternidad acosándome—le espeté. Esta vez tenía que ser un beso completo. su sonrisita falsa se mantuvo intacta. —Tal vez. pero el hecho de que la mayoría de las cosas aquí fuesen de color negro. Sonreí ante el recuerdo de la noche en que estuve en casa de Nora. ¿Es cierto? —Sí. sin quitar esa estúpida sonrisita de su rostro—Lo sé todo. con una sonrisa. Lavé mi cabello rápidamente y salí envuelto en toallas. ¿se te olvida? —Corrección: Todo con respecto a mí. puesto que mi cuerpo registraría el contacto pero no me lo transmitiría como debiera ser: pero eso no disminuía el desearla. Me acerqué lentamente a la cocina y rebusqué en los cajones hasta conseguir un par de velas y encenderlas. justo como hacía en el cielo. —Bien… Yo puedo ayudarte a encontrarlo—dijo. preparando lo mismo. no ayudaba mucho. —dijo. puesto que Dabria me esperaba sentada en mi cama. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Veinte La habitación no estaba lo suficientemente oscura como para privarme de la vista y hacerme tropezar con los muebles. No entendía cual era mi afán por besarla. sin querer dar una respuesta directa. Si estaba aquí realmente debería saber algo. Apliqué mi gel de menta favorito y rasuré mi barba. Casi caigo al salir del baño. y se acercó a mí. MARY ANN GRINTON . y cómo entraste? —pregunté. Se levantó de la cama. meneando sus caderas más de lo necesario. Soltó una pequeña carcajada. ¿Quién sabe? —Yo lo sé. Pero esta vez tenía que ser mejor. Abrí los gabinetes y la nevera y saqué lo necesario para prepararme unos tacos. —Me han dicho que estás buscando a Chauncey Lengais—dijo. Ese casi-beso tenía que repetirse. tal vez no. Un Par de minutos después de comer fui a darme una ducha. que ya comenzaba a crecer. — ¿Qué mierda estás haciendo aquí. pero me aseguré de que mi rostro denotara solo fastidio.Hush. En los túneles rara vez funcionaba la electricidad. —Me he enterado de que quieres asesinar a Chauncey… para evitar que mate a Nora. me parecía ridículo. —Eres tan modesto… igual que siempre—Colocó sus manos en mi pecho y estuve a punto de arrancárselas. acercando su rostro al mío. ya me que quería apartar. después de todo. Bien. —Dime dónde está—susurré. Soltó un pequeño suspiro.Hush. joder? —En una cabaña detrás del Delphic—dijo. ¡Suéltalo. — ¿Es necesario hacerlo? —pregunté. nunca haría nada de gratis. — ¿Cuál es tu condición? —pregunté. Decidí llevar a cabo una pequeña actuación mientras hacía el intento por sacarle algo de información a Dabria. demonios. sacrificarás a Nora Grey. en la comisura de su boca. Posé mis manos alrededor de su cintura y la atraje más hacía mi cuerpo. y tu siempre andas asegurando que sí. Dabria. ¿Cómo no lo pude haber pensado antes? —Pero… Lo sabía. Quiero que se largue. Patch! —me gritó. seguía enamorada de mí y haría lo que fuera con tal de mantenerme a su lado. —Vas a jurarme que si asesinas a Chauncey. pasando mis labios por su cuello. enojado. finalmente. y amplió esa sonrisa que ya me estaba cabreando bastante. Le sonreí con perversidad. Me provecharía de ello. — ¿Me quieres? Sólo dilo… Venga. y me vestí frente a ella. —Eres una jodida ingenua. Cuando aún eres ángel. y me aparté cuando ella buscó más. ¡Por supuesto! Dabria podría concentrarse en el futuro de Chauncey y podría darme la información que necesitaba. cerca de sus labios. sólo sientes frío. Dabria! —Te quiero…—susurró. Necesitaba terminar esto pronto. puedes sentir un mínimo de sensaciones. Dabria. Pasó las manos por mi cuello. —Está en… Está en… Moví mi boca de nuevo a su cuello. Mierda. ya me esperaba algo así. Me he cansado de decirte que no te quiero. No realmente. no me importaba. —Porque podría ser que decidas quedarte con ella. —N-no… Rocé mis labios con los suyos ligeramente. Saqué una camiseta y un pantalón del armario junto a unas botas de cuero. la cual soltó un pequeño grito de sorpresa. ¿Estaba aquí cerca? ¡Joder! Empujé a Dabria lejos. ¡eso no! —Dime dónde está. Sonreí. — ¡Eres un jodido imbécil. que hable rápido. provocando que mi aliento chocara con el suyo. — ¿Dónde. Dabria—gruñí. —S-sí—susurró. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Mi turno de congelarme. y le di una suave caricia con mi lengua… Dios. Se estremeció. ¡Ya supérame! MARY ANN GRINTON . pero lo sientes. —Pues piensa. — ¿Cómo lo supo? —pregunté. es una de las habilidades no tan buenas de ser tan poderoso. en dirección a ella. Si en el cielo habían notado ya su ausencia. entrecortadamente. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Había comenzado a caminar en dirección a la salida cuando comenzó a reírse a carcajadas. Si esa noticia se supiera. obligándola a regresar al presente y a que me mirara. —Me estás haciendo daño—dijo. Cerró los ojos y se concentró. esperando a que hablara. Pero… ¿Cómo demonios pudo haber hecho eso? Capturar a un ángel de ese rango era casi imposible. Decidí MARY ANN GRINTON . y no quedaría ni el recuerdo de lo que fue. —Voy a matarte ahora mismo sino me dices como lo supo—gruñí. y en el pasado. Pude notar su cuerpo tensarse y relajarse a medida que investigaba en el futuro. hirviendo de furia. de nuevo. de eso estaba seguro. no tanto. y esta aprovechó el momento para salir huyendo. enseguida notó mi estado de ánimo y dio un paso hacia atrás. Ésta vez quería que notara lo enfurecido que estaba. Aflojé un poco el agarre. Con razón Chauncey lo tenía en el bolsillo. — ¡Es muy poco tiempo! —Y ya te quedan ocho. Casi me quedo paralizado de la sorpresa. debían preguntarse dónde demonios estaba.Hush. un poco más de presión y los arrancaría. Tienes diez segundos para decirme. sólo el suficiente para que pudiera respirar un poco mejor. Ya me estaba hartando esa mierda de que siempre estuviera por delante de mí. —Es un maldito…—susurró. —Tiene como prisionero a un arcángel—susurró. La sacudí con fuerza. Me detuve. porque iba a decir algo. Me giré lentamente. Pasé mis manos a su cuello. Solté a Dabria. Algo que a él no le interesa que se sepa— respondió con voz entrecortada y débil. — ¿Qué es? —insistí. —N-no… lo… s-sé. y lo peligroso que sería si me mentía. aún perdida. Apreté los puños y di un paso hacia adelante. ni actuar. Un arcángel no puede rastrearse. — ¿Por qué? —Chauncey conoce un secreto de él. alcanzándola en un santiamén y arrastrándola a la pared. enfurecido. —Barba está de su parte—dijo. —Se ha ido—dijo. Acerqué mi rostro al suyo. Mis manos apretaban con fuerza sus brazos. Dabria no era estúpida. Ésta vez no quería ser cuidadoso. — ¿Qué secreto? —pregunté. todos los arcángeles vendrían por Barba. Abrió los ojos justo cuando ya iba a decirle que hablara. Sí. para que no vaya a contárselo a los arcángeles. ya a esta altura sabría que me había enterado de su secreto. busqué su número entre los pocos contactos y presioné la tecla de llamada. —Patch—dijo. puesto que si no me equivocaba. Estaba seguro de que contestaría mi llamada esta vez. Saqué mi celular de mi bolsillo. Y ya sabía la respuesta. Ésta vez él tendría que decidir quién era su oponente más poderoso. En cuestión de segundos respondió. con voz afilada. MARY ANN GRINTON . ahora tenía la balanza igualada.Hush. Hush – Narrado Por Patch Cipriano que tenía que hablarlo con él. —Me pregunto qué vas a ofrecerme. ya lo sabía. y él sólo se limitó a abrirme la puerta. Bien. Desembucha. que lame botas. me coloqué una cazadora y salí de mi casa. estoy bastante cabreado por tu nota a Chauncey avisándole que iba a buscarle. Guardé el teléfono en el bolsillo trasero de mis pantalones. me recordaba a Nora. Barba. — Primero quiero que me hagas un juramento. Y colgué. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo 21 — ¿Qué quieres?—gruñó. —Bien. observándolo meter la bola cinco. —Bien. Barba me esperaba en la mesa de billar al fondo. Aplaudí. con toda la intención del mundo de hacerlo enojar. Le arranqué el palo de billar de las manos. Vaya. Recorrí el espacio hasta ponerme en una MARY ANN GRINTON . y un paso más cerca de matar al jodido imbécil que me estaba j ugando sucio: Barba. esta vez no caería en su juego. puesto que uno de sus matones esperaba afuera. Barba. Enarqué las cejas a modo de pregunta. Era hora de que bailara al ritmo de mí música. No sería para nada fácil. por saber que ahora podía ir un paso por delante de Chauncey. Donde yo pueda verte—Gruñí—En el Bo. Se quedó en silencio un par de segundos. Sabía que Barba me esperaba dentro. Ahora. Y funcionó. Directo al grano—le dije. Si te das prisa podrás alcanzarlo en un par de minutos—dijo. dónde el humo del cigarrillo no llegaba tanto. y me posicioné para meter la bola ocho—Verás. —Sí. Tenía una jodida sonrisa en mi rostro. La moto no sería lo suficientemente rápida como para llegar en cuestión de pocos minutos. --Detuve el Jeep en uno de los espacios vacíos del estacionamiento. en estos momentos está alimentándose en un restaurante que queda a las afueras de la ciudad. —Bien. Patch.Hush. Y por extraño que pareciera (Y confuso). En el reproductor del coche sonaba 12 Through 15 de Mayday Parade. no tengo todo el día. Así me gusta. El juramento me lo harás de rodillas. como si pensara en alguna forma de salir de este atolladero. eso. sí. Reí. Pero no se lo pondría fácil. Su reacción me dijo que no contaba con que yo me enterara de eso. No esperabas que él fuera tan despistado como para dejar algo tan importante atravesado por allí—dije. lo sé. —dijo. y bajé con toda la lentitud posible. con las llaves del Jeep en la mano. No todavía—le espeté. la verdad es que no es tan difícil adivinar qué quiero. —No te he pedido que me digas dónde está. —le dije. Soltó una maldición que débilmente logré escuchar. cuando estuve cerca. —Bien. ante mí. —Eso. ¿Qué quieres que jure? —No me trates como un jodido imbécil. Y. que no tengo todo el jodido día—gruñí. Hush – Narrado Por Patch Cipriano posición cómoda para golpear la bola tres—El hecho es que ahora sé tú secreto. rápidamente. Sin embargo. —No. Barba abrió los ojos de par en par. no intentarás darle doble sentido a las palabras. Rápido. Verás. —Oh. Cuando llevé mi teléfono al oído. — ¿Que pasa? —Dije. Parecía asustada. porque me había encargado de no dejar ningún cabo suelto. Solté una carcajada. Todo estaba perfectamente co ntrolado. —Oh. voy a hablar. te vas a arrodillar. Y sí. pero era suficiente. sin rodeos. — ¿Qué pasa si decido negarme? ¿Vas a llamar a los arcángeles sin ninguna prueba? —me retó. — ¿Nora? MARY ANN GRINTON . —Soy yo—susurró su voz. —Estoy esperando. no es nada Nazch. sólo lo hice para que Barba creyera que iba en serio. sin mentir. Ya imaginaba que me aborrecía. Ya sabes todo ese rollo de los ángeles de la muerte… Lo saben casi todo. pero lo que vi reflejado en sus ojos en este momento no era nada más que el odio puro y palpable. —Mmm. Sigue con lo tuyo—guardé mi teléfono. sin buscar escapatoria. y definitivamente no buscarás alguna forma de burlar el juramento—le ordené. El único número de arcángel que aún poseía. imaginando que sería Rixon. Lo juro. vas a cortar tu palma y me vas a jurar decirme toda y absolutamente toda la verdad sobre cada cosa que te pregunte. Estaba seguro de que en este preciso momento Barba estaba ideando unas quinientas posibles formas de matarme. Lo juro—dijo. — ¿Nazarach? —pregunté. Saqué mi teléfono del bolsillo y marqué un número. —Bien. Este arcángel por lo general estaba en la tierra. Él sabía tanto como yo que no había ninguna forma de desobedecer ese juramento. Se cruzó de brazos. Mi teléfono sonó. quizás más. Así que te conviene hacer ese juramento. tengo algo que contarte. como sé que eres buen colaborador. colgué. fingiendo que del otro lado me había contestado alguien. y me sobresalté un poco. bien—me encogí de hombros.Hush. ¿Pruebas? Déjame pensar… —me llevé las manos al mentón para darle un efecto más dramático— ¡Ah. No pensaré si quiera en algo como ello. Lo juro. No titubearás. Me arrancó el palo de billar de las manos y se posicionó para continuar su juego. —Juro solemnemente darte toda la información que necesites. sí! Tengo de mi lado a un ángel de la muerte que con una pequeña dosis de seducción hace todo lo que le pido—le espeté—Hay muchos más en el cielo que podrían comprobar lo que ella dice. estoy con Barba y… Rápidamente sacó un cuchillo y se abrió la palma. Barba—dije. encargándose de que todo estuviera en orden. — ¿Tienes tu celular? —Preguntó. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Estoy en P-Portland. No había ningún rastro de una fiesta. En la esquina de Hempshire y Nantucket. —La batería está baja. MARY ANN GRINTON . ¿Puedes recogerme? Es urgente—dijo. —Creo que me voy a enfermar—dijo. Saqué el Blackberry de mi bolsillo. —Recuerda que debes matarla. algo se removió dentro de mí. — ¿Estabas en medio de un juego de billar? —Preguntó. con toda la intención de correr al Jeep lo más rápido que podía. No sé si hará una llamada—le advertí. sentándose más alto para tener una mejor visión por las ventanas. saber qué tan suave era su piel. Me quité la cazadora y traté de ponérsela con cuidado. Aceleré el coche todo lo que podía. Pues… no. Hubiera odiado el lugar. Devolví el teléfono a su sitio y saqué las llaves del Jeep. Ni siquiera lo pensé. —No puedo recordarlo—Dijo. Esto es Highsmith. ¿Tienes una dirección? —pregunté. — ¿Un apartamento? —Uno de esos elegantes en el lago. apagando el jodido reproductor porque si seguía sonando esa jodida canción iba a quemar el Jeep. estaba haciendo jurar a un imbécil que no seguiría burlándose de mí. y odiaba verla así. Bueno. —Shh—la calmé. Un par de minutos y ya estaba bajándome del coche frente a Nora. que se encontraba acurrucada en el fondo de la cabina telefónica. ¿Qué carajos había pasado. —Estaba ganando un apartamento—me limité a contestar. maldita sea? Si alguien le había hecho daño… —Vamos a llevarte al auto—le dije. Mierda. <<Y siempre>> —Salgamos de aquí. y enterró su cara en el. Aquí estaban de nuevo esas ganas de ser humano. Nora podía ser demasiado lista. cambiando el tema. Quería sentir el calor de su cuerpo. Estoy aquí ahora. levantándola. como si no estuviese ya lo suficientemente aterrada.Hush. Todos los edificios parecían abandonados. Un gesto de asentimiento. Aunque no lo sentí. Se veía realmente aterrada. Ya. Le temblaba la voz. Patch—dijo Barba antes de perderme de vista. —Necesito mis píldoras de hierro. —Vas a estar bien. Ella rodeó mi cuello con sus brazos. realmente me importaba muy poco lo que pasara con Vee. sosteniéndola más fuerte contra mí. escuche a Nora titiritar haciendo. pero dado que era la mejor amiga de mí… de Nora… Mientras conducía el Jeep por la esquina. Imaginaba que sería la mejor sensación del mundo. —Ella está en una fiesta callejera. —Tenemos que llegar a Vee —Dijo. como suave veneno negro. —Que descanse en paz. desaparecí de la vista. el agua era azulada grisácea con mach as oscuras de verde donde el agua reflejaba las hojas de cedro. Otra vez algo se removió en mí interior. Ella dudó. Frené. —Malas noticias—Dije. Casi me reí con la expresión de “no tengo ni la menor idea de lo que me estás hablando” de Nora. —insinué. Mis ojos se desviaron a sus labios. Había estado en este camino antes. —Es el motor. La pantalla del celular se puso negra. Un minuto sería suficiente para hacerla creer que estaba revisando qué sucedía. maldita sea—Se llevó mi gorra también. y me acerqué a su ventana. —Vee está regresando a Coldwater. —Me perdí. <<Y nosotros estamos solos ahora Con nada que se interponga en nuestro camino Sin jurar que todo ha terminado El amor es nuestro secreto Que tarde o temprano saldrá a la luz. Estábamos a medio camino e ntre Portland y Coldwater. —Espera—Dije. Era de noche. —Se limpió la nariz con su mano y sollozó. así que tenía que evitar eso.Hush. a menos que también decidiera ponerle al Jeep el peso de un elefante. que se veían más suaves y delicados de lo normal. y una indigente me acorraló—dijo—Ella me hizo entregarle mi abrigo. admirándola. Sabía que tarde o temprano se ofrecería a empujarlo. pero no quería da rme ninguna. dejé caer la capota en su lugar. en un tramo de la carretera exuberante y despoblada. cuando le hice un truco mental a Nora para que creyera que salía humo del Jeep. — ¿No se moverá? —No a menos que lo empujemos. y eso me detuvo de entrar a su mente. Odiaba escucharla sollozar. Luego de contar. Levantando la capota del Jeep. ¿Crees que podrías dejarme en su casa? Minutos después estábamos en la carretera costera. — ¿Tienes el cargador? —No conmigo. MARY ANN GRINTON . Arqueé una ceja. y el océano estaba tranquilo. gesticulando para que se bajara. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Nora se quedó en silencio un momento mientras escribía. Me quedé observándola por el rabillo del ojo todo el rato. y cuando el sol salía. — ¿Vas a decirme lo que paso? —Pregunté. y dije que ya no podía seguir con esto. Por sus ojos vi pasar miles de posibles respuestas. >> Maldita canción. joder. fácilmente dirigiendo el Jeep a la orilla de la carretera. Sacudí las manos en mis pantalones. — ¿Qué estabas haciendo por aquí afuera? —Encontrarme con Vee en una fiesta. conduciendo directamente a lo largo de un precipicio sobre el océano. —Muerto—dijo. No sabía cómo Nora conocía el motel. ya no tendría ganas de matarla. comenzó a llover/granizar. se puso frente a mí. —Lo perdí—respondió. en realidad” emanar de su mente. estallaría a llorar. ¿No? Miré a mí alrededor. Me recosté contra el Jeep. Hush – Narrado Por Patch Cipriano — ¿Dónde está tu celular? —Pregunté. o podemos caminar a la siguiente salida y encontrar un teléfono—ofrecí. Tan pronto como estuviera completamente sola. lo más seguro es que fuera a matarlo mientras ella llamaba el taxi. podía verlo. Cruzando sus brazos. ese era el plan. salí ganando. ¿No tenía teléfono encima y el mío estaba muerto? Muchísimo mejor. ahora mismo no estaba seguro de desearlo. una oportunidad como esta no se daría de nuevo. En zapatos de tenis.Hush. Estar juntos. —T-t-tú espera aquí con el Jeep. tampoco. MARY ANN GRINTON . Y si se daba. Como de costumbre. Sonreí abiertamente. Ángel. —Creo que hay un motel en la próxima salida. Y no quería eso. dándole un efecto a mi nuevo truco mental—Pero esta tormenta está a punto de comenzar su segunda ventisca. y deduje que no quería saberlo. Sabía que estaba usando el enojo para enmascarar el miedo por el que había estado pasando hoy. sabiendo que cerca se encontraba un motel de mala muerte. Pateó el neumático delantero del Jeep. cerrando la puerta con fuerza detrás de ella. luego soltó un suspiro de enfado. Si ella ya había estado aquí con alguien. Te ves un poco trastornada. —Dos opciones: Podemos terminar el paseo. sus ojos llegaron al nivel de mis hombros. Iremo s juntos—además. —No voy a ir a ninguna parte cerca de un motel contigo—dijo. —Déjame adivinar: ¿En el bolsillo de tu chaqueta? La indigente realmente sacó provecho. Salió. Iré a lla -lla-llamar un ta-ta-taxi— dijo. —Podemos sentarnos aquí y debatir esto—miré al cielo. Y justo allí. También sopesé la idea de que matarla aquí era perfecto. — ¿Crees que nosotros dos y un motel apartado hacen una combinación peligrosa? —Casi escuché el “Sí. Me regaló su mirada más fría. Sonreí. sus dientes titiritando fuertemente. —No voy a dejarte fuera de mi vista. De por sí. Nora estaba en silencio. La puerta del lugar sonó cuando entramos. No habíamos intercambiado ni una sola palabra mientras trotábamos a través de la fría lluvia. sacudiendo las migas de Cheetos de su regazo. —No podrá ser. pero no hizo falta. Juro que si no fuera inmortal. y yo también. Rápidamente entré a la mente del tipo y confundí su memoria. Abrí la boca para pedir una habitación. El recepcionista digitó unas cuantas teclas en su computador. Él me miró. —Ella quiere una habitación para no fumadores—le dije. castañeando los dientes. “¿Estás demente?” articuló en mi dirección. caminamos como veinte minutos hasta detenernos en la entrada del motel barato que se encontraba cerca del lugar dónde habíamos dejado el Jeep. chupando sus dedos para limpiar el resto naranja. — ¿En qué puedo ayudarlos? —preguntó. —La tomaremos—le dije.Hush. —Parece ser que no tenemos… Esperen… ¡Bingo! Una habitación con cama doble para no fumadores—dijo él. Iba a adentrarme de nuevo en su mente. —N-necesitamos que nos prestes tu teléfono—dijo. pero en su lugar Nora se me adelantó. Las líneas están muertas. — ¿Qué quieres d-decir con que las l-líneas están m-muertas? ¿T-tienes un ccelular? —insistió ella. Suspiré. Nora me miró aterrada. y el recepcionista se levantó abruptamente. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Veintidós Bien. encogiéndose de hombros. sopesando el hecho de la oportunidad única que tenía de matarla aquí. La miré de reojo. tratando de contener una risa. su mirada me habría matado. de por fin besarla y… bien… en fin. antes de que Nora comenzara a protestar. MARY ANN GRINTON . Culpa a la tormenta—respondió. y de la otra oportunidad única. deseoso de tratar conmigo y no con ella. Mi mente estaba funcionando a mil por hora. —Aquí es una forma de pago popular—se acercó a nosotros. velas de larga duración. Éste manoteó bajo el escritorio. ¿Y su madre debía ser quien pagara la cuenta de su línea telefónica? Imbécil. Pongan una en el baño y la otra en el dormitorio y nunca notarán la diferencia. fácilmente podría borrarle la memoria al recepcionista.Hush. —Esto es una locura—susurró Nora. —Lo tenía hasta que ya no pude pagar la cuenta—respondió. estaba total y completamente loco. Nos quedamos en silencio por un momento antes de que el recepcionista buscara a tientas hasta accionar el interruptor de una linterna tamaño industrial. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Decidí llevar esto del truco mental un poco más lejos. el tipo debía tener unos cuarenta años. sin cargo extra. dejándonos en una completa oscuridad. Por Dios. —Qué puedo decir. hasta que se apagaron completamente. eso ya lo sabía. El recepcionista rió. Si no necesitan nada más. mi madre es una tacaña. Sí. dejando dos frente a nosotros. porque significaba matarla sin dejar pistas. —Solía ser un Boy Scout—explicó—Aprendí a estar preparado. Insté a las luces parpadear. También les dejaré la caja de cerillas. Sí. Encendiendo un fósforo. Era una locura en dos sentidos. Sentí a Nora poner los ojos en blanco. porque lo era. Eso era más loco todavía. a causa de ella—Tú. En el primero. prendió una de ellas. al borde de una sonrisa. sólo para que yo pudiera escucharlo. — ¿Cómo van a pagar? —preguntó. como si estuviera punto de contarnos un secreto—Tenemos a mucha gente que no desea que sus actividades extracurriculares sean rastreadas. —Van por la casa. ¿Cuánto por la linterna? —le pregunté al tipo. MARY ANN GRINTON . si entienden lo que quiero decir. —Estoy loco—le respondí. No es que no fuera común hacerlo. porque cada vez tenía menos ganas de matarla. que tengan una estadía memorable. y más de besarla y reclamarla como mía. —Dijo. —En efectivo—respondí. —Entonces deberías t-t-tener un c-c-celular—gruñó Nora. bueno. y luego desaparecería el cuerpo de Nora. En segundo lugar. —Tengo inclusive algo mejor. asintiendo con su cabeza. cerrando la puerta para quedar separada de mí. No tengo nada que ponerme—murmuró. y sacudí mi cabello como un perro mojado. Me quité los pantalones con lentitud. — ¿Huelo así de mal? —pregunté. así que la apagué. — ¿Patch? —susurró Nora. Por ahora. no quería hacerla incomodar del todo. deseoso de que fuese ella quien lo hiciera. Bien. Claro que podía retenerla aquí. —Esto es realmente incómodo—dijo. Claro.Hush. MARY ANN GRINTON . sonriendo. Me acerqué más a ella. Igual que había escuchado el chasquido de la ropa mojada al caer pesadamente al suelo. Y funcionó. como si eso fuese a pasar esta noche. Sonreí con picardía. Mi vista era más afinada de lo normal. Al menos. pero traté de no mirar hacia abajo. —Apaga la vela—Murmuró. no era humano pero era un hombre. Yo aún podía ver un poco. dónde todo estaba completamente oscuro. a través de la puerta. El agua caliente comenzó a fluir de la ducha. Ahora. como si no fuera obvio ya. para ella. ella también. Unos minutos después. ¿Qué hombre no deseaba ver a la chica que lo trae loco desnud a? En fin. Aproveché la oportunidad para quita rme la camisa. Ya lo sabía. tomando a Nora del codo y encaminándola hacia el hall. —Eso sonó más como una pregunta que como una afirmación—le dije. —Parecen ser una barra de jabón y dos toallas. No quería ducharme. Levanté mi gorra de béisbol. el agua dejó de fluir. Dios. — ¿Terminaste? —pregunté. —Ahora. e iría a dónde quiera que yo fuera. vamos. —Mis ropas están empapadas. Se me escapó una pequeña risa que esperé ella no escuchara. Coloqué la vela en la mesita de noche y la usé para encender la de repuesto. podía escucharla con claridad. Mi sonrisa se hizo aún más ancha. Ella era mía. Apagó la vela del baño y salió. casi con pereza. —Deberías ducharte—Dijo. —Es difícil concentrarse en respuestas cuando tú luces así—le dije. no quería hacerlo porque. Quería besarla. Estaba justo frente a ella. no demasiado. Ambos en ropa interior. ya que eso la haría incomodar. aunque ella llevaba una camiseta. Retrocediendo unos pasos. pero Nora no aceptaría ninguna de mis propuestas indecorosas. —Listo—susurré de vuelta. mirando su ropa mojada y pegada al cuerpo. Nora levantó su barbilla en un acto de rebeldía que me gustaba tanto. Si yo me quedaba. —Necesitas una ducha caliente—Le dije. Suficiente espacio para dos personas. Necesité de todo mi autocontrol para no entrar con ella. Nora se sonrojó y corrió al cuarto de baño. —No me puedes f-forzar a quedarme aquí. En la habitación 106. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Gracias—Le dije. asomé mi cabeza en el baño. cerré la puerta detrás de nosotros. —Entonces c-contéstala. Lo aceptaba. Podría acabar con ella fácilmente. La pregunta del millón oscilaba en ¿La dejaba vivir o no? Y si la mataba. sentir cada vez que penetraba a una mujer. Sopesé de nuevo la idea de que estábamos solos en una habitación de un motel dónde habitaban parejas de una sola noche. drogadictos. Hasta que mis cicatrices se tensaron con el roce de sus dedos. Se adentraba en mi mente. o ayudarme con el jabón. —Eres una pésima mentirosa—Dije. aún sonriendo. mi otra mitad. Ella deslizó sus manos por mi pecho hacia arriba. y pude sentir como su mente se sumergía en mí interior. tratando de sonar confiada. Puso sus manos en sus caderas y dio a entender un silencioso “¿Disculpa?” Seguía debatiéndome entra matarla o no. Hush – Narrado Por Patch Cipriano No esperé respuestas. mirándola a los ojos. y no sabía que iba a hacer. porque sabía cómo reaccionaría Nora si decidía quedarme desnudo. No tuve de otra que ponerme mis Jeans húmedos. Maldita sea. pero llegué a la conclusión de que un beso no supondría diferencia alguna. No entendía como Rixon podía conformarse con eso. Mantenía mis esperanzas. sentir sus arañazos en mi espalda. En mis recuerdos. MARY ANN GRINTON . estaba completamente loco por ella.Hush. enciendo la vela de nuevo y arrastrando mis jeans conmigo. era divertido. y creí que estaba accediendo. luego me concentré en sus labios. poniéndola de pie. —Ven aquí—le pedí. pero no era placentero. —La peor que he visto. obtener mi cuerpo humano. — ¿Nerviosa? —No—Dijo. ¿Podría seguir mi camino sin Nora en él? Cerré el grifo. Damas de compañía. La rodeé y entré al baño para ducharme. no sólo correrme con sus gritos y gemidos. cortando el agua y me sequé con la toalla que quedaba disponible. — ¿Qué lado de la cama quieres? —Pregunté. — ¿Eh? —parecía perdida. al salir. con la esperanza de que a ella no le molestara venir a hacerme compañía. Una sonrisa pícara se posó en mis labios. todo lo malo había pasado por estas paredes. ¿podría vivir con ello? Supuse que esa era la pregunta más importante de todas. traficantes de drogas. porque sí. La acerqué a mi cuerpo. Pero estaba el pequeño problema de que. Dejé la puerta entreabierta. las desconocía. Ya de por sí una parte de mí estaba sedienta de sangre. Eso hacía que odiara un poco a Nora. Aflojé un poco el agarre. una de esas que anuncian la muerte. —Quítate de encima—gruñó. tirándola en la cama con sus manos por encima de su cabeza. Alejé las manos de Nora. Tocarle las alas. Si no me estuviese hirviendo la sangre. MARY ANN GRINTON . era que supieran sobre mi pasado. como mínimo— ¿Qué viste? En un acto de valentía. Hice un poco más de presión en sus muñecas y la miré fijo a los ojos. eso quería decir que… — ¿Me quieres matar? —preguntó. Ya no creía muy probable que eso sucediera esta noche. Eran precisamente esas por las cuales me había convertido en un asesino. Y no vas a causar ninguna conmoción en este lugar. —Quítate de encima o gritaré—me espetó. Pero no había razón alguna para que ella cometiera semejante equivocación. —Me das asco—soltó— ¿Quién eres? ¿Quién eres realmente? Otra sonrisa macabra. En otras circunstancias. tratando de soltarse. este hecho le restaba un quince al cincuenta por ciento que la apoyaba. y un poco de l porcentaje perdido en un principio regresó a su antiguo hogar. Si no hubiese visto el acto. Si había algo que despreciara a sobremanera en este mundo. de aquí no saldría. aunque esta era peor que la anterior. —Ya estás gritando. y me contuve de soltarla del todo. haciendo todo mi esfuerzo por no abrirle la garganta en estos momentos y ponerme a gritar. levantó su rodilla y la impactó en mis costillas. Hush – Narrado Por Patch Cipriano CAPÍTULO VEINTITRÉS Las razones por la cual Nora había tocado mis cicatrices. No con lo que acababa de pasar. estaríamos en esta misma posición. y atravesado corazones por el simple hecho de hacer esas jodidas preguntas.Hush. Me senté sobre sus caderas. me hubiese reído a carcajadas. lo único que podía hacer era retorcerse. con la voz rota. —Nos estamos acercando—murmuré. No era muy saludable para ella. Ya ni podía recordar las veces en las que había arrancado cabezas. y con mi boca pegada a la suya. Pues no. Odiaba esas preguntas. pero mis manos en sus piernas y no sujetándola. —No se suponía que hicieras eso—le dije. o las cicatrices a un ángel. por si acaso. ni siquiera lo hubiese notado. o un caído estaba prohibido. Necesitaba saber qué había visto. La pena era la muerte. Con mis manos aun sujetando las suyas. haciendo presión para que dejara de moverse tanto y eliminando el uso de sus piernas. Si había hecho esa pregunta. Es más un prostíbulo que un motel—le mostré una de mis sonrisas letales. ¿Qué viste? Me di cuenta que estaba luchando con las lágrimas. sin parpadear—Última oportunidad Nora. luego a la izquierda. pero aún sostenía sus manos. —Apuesto a que esto te gusta—soltó. Eso fue lo que dijo Dabria que quieres hacer. nada de esto estaría pasando. —Mentiste. maldiciéndola para mis adentros. — ¿Qué significa eso? —su voz elevándose de nuevo. ¡Maldita sea. ¿Me vas a matar ahora? Trataba de hacerse la fuerte. Pero supuse que finalmente había comprendido que era algo imposible zafarse. ¿verdad? —preguntó. ¿No pudo ser el descendiente de Chauncey un hombre? ¿Tenía que serlo una guapa. Si no fuera por esa estúpida marca. Por primera vez en toda mi existencia tenía esa necesidad de contarle a alguien sobre MARY ANN GRINTON . Me bajé de sus caderas. y eso era algo que siempre admiraría en ella. y ver la manera en la que se encontraba no me hacía sentir muy cómodo. ardiente y terca mujer? — ¿Y qué de Dabria? —Preguntó. Rocé su marca de nacimiento con mi pulgar. se notaba desde lejos que hacía hasta lo imposible por tratar de no derramar una lágrima frente a mí. Escucharla hablar de ese tema. — ¡Sólo hazlo! —dijo. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Bien. no entendía mucho el “por ahora” puesto que hacía unos minutos tenía un sesenta y cinco por ciento de probabilidades de matarla. ¿cierto? Ambos son ángeles. — ¿Obtendré el resto de la historia cuando finalmente pierdas el control y me mates? —No tengo que perder el control para matarte. con tono retador. en cambio. El enojo comenzaba a desvanecerse. Seguía dudando. —Una buena apuesta. — ¿Matarte? Asintió. Intentó rodar a la derecha. sin duda. ¿por qué yo? —Malos genes—respondí. Nora se retorció debajo de mí. habrías muerto hace cinco minutos. ¿Qué esperas? Haz tratado de matarme todo este tiempo. — ¿Eso es todo? ¿Esa es la única explicación que me das? —Por ahora. pero en fin. Desde el inicio. y luego me desvié a su cuello… —Es tentador—murmuré. No era como si Nora me mantuviera en un estado normal. Miré su rostro fijamente. Si te hubiese querido matar hace cinco minutos. estaba mucho más concentrado en el hecho de que su cuerpo estaba debajo del mío. —Nunca dejaría de sorprenderme lo lista que llegaba a ser esta chica—Bueno. me trajiste aquí para matarme. —Pero primero quiero saber por qué. así que se detuvo. ahora mismo no podía darle respuesta a esa pregunta.Hush. nunca en mi vida dudaba! —El jeep no murió realmente esta noche. jadeando—Ella es lo mismo que tú. De los billones de personas en el mundo. Sin embargo. Bien. Luego me haré cargo. Se acurrucó contra mi pecho. o el hecho de que me había grita algo que me hacía sentir mal. ¿y le preocupara que Dabria todavía sea mi novia? —Lo fue. —le dije. pero eso sería una escena. — ¿Dabria es tú novia? —preguntó. Ella se entera de que quiero matarla. Pero la pregunta que me había hecho hace unos momentos retumbaba en mi cabeza de nuevo. Hush – Narrado Por Patch Cipriano mí. —No. —Si te suelto. tratando de reprimir una sonrisa estúpida que no entendía. — ¿Estás disfrutándolo en tu interior? ¿De eso se trata. que MARY ANN GRINTON . Supongo que imaginó que el minuto que le daba era para escapar. No sabría explicar exactamente qué fue lo que sentí. ¿Podría seguir mi camino sin Nora en él? No. la agarré en pleno vuelvo y la arrinconé contra la pared. —Tienes solo un minuto más—le dije—Para sacar toda la cólera de tu sistema. Supuse que debió parecer una extraña mueca o algo parecido—También fue un error. pero luego se lanzó hacia mí con toda la fuerza que tenía. Al menos era realista. Limpió una la lágrima que se atrevió a escaparse. Alguien que no corriera asustado. Deslicé mis manos por su cuello. Por tres minutos se quedó tendida en el colchón. Nuestras piernas estaban entrelazadas. inclinando su cabeza hacia atrás. —Quiero la verdad—dijo. ¿me vas a escuchar? —le pregunté. — ¡Estoy destrozada! —gritó. No puede ser. —Condujo su codo hacia mi muslo— ¿Qué pasa contigo? ¿No sientes nada? Se puso de pie para encontrar equilibrio sobre el colchón.Hush. probando su reacción. pero ni siquiera obtuvo de mí un leve tambaleo. no? ¡Convenciéndome para confiar en ti y así podrías gritarlo en mi cara! —Estás enojada—murmuré. — ¿Ya está? —pregunté. —Sí. Nada. Sin embargo. respirando pausadamente. No sabría decir si fueron sus lágrimas lo que causaron un efecto dramático y decisivo. definitivamente no . Presioné mis labios con los de ella tan fuerte. —Sí. pero no me agradó en absoluto. frente a frente a lo largo de nuestros muslos. — ¿Qué más da si echo a correr? Me atraparás y me arrastrarás de nuevo hasta aquí. porque enseguida se lanzó en dirección a la puerta. haciendo esfuerzos para no llorar— ¿Has venido a la escuela para matarte? ¿Fue ese tu objetivo desde el principio? Apreté la mandíbula. ni que me juzgara. y me pateó el estómago con lo que imaginé sería toda la fuerza que tenía. La persona a la que tendría que matar. Hace mucho tiempo. Y estaba comenzando a estar seguro de que ese alguien podría ser Nora. presionando mis pulgares suavemente en su garganta. solté sus brazos. Lentamente. antes de que cayera en el lado oscuro. —Majo—repetí—Será mejor que eso quede entre tú y yo. por si acaso. confía en mí. Hush – Narrado Por Patch Cipriano la detuve de decir lo que sea que fuese a decir. sonabas sinceramente dolido. No lo negué. Luego te hice pensar que tu celular estaba muerto. — ¿Todo es una broma para ti? Pasé mi lengua sobre mis labios de nuevo. Casi lo logro. —Oh. Apoyé mis manos contra la pared detrás de ella. —No te entiendo. MARY ANN GRINTON . pero la expresión de Nora me detuvo. en cambio. Dios mío—dijo. —Hice que el entrenador nos cambiara de sitio para estar cerca de ti. Las imágenes superponen la realidad. rozando sus brazos y llegando a descansar en la parte baja de su espalda. Mis manos cayeron en sus hombros. sintió la necesidad de morderme el labio. ¿no es así? Pero algo salió mal. así no podría llamar a Vee. —Sólo de los ángeles caídos. —No todo. ¿No es así? Jugando con mi mente. imágenes muy reales. En cambio me conformé con asustarte. pero no pude seguir adelante. fuiste majo. Ella tomó un fuerte suspiro. pero depende de ti si las crees. Es un enigma. Inclinó su barbilla y estrechó sus ojos. — ¿Ese es un poder especial de los ángeles? Sacudí mi cabeza. pero me detuve. Ella. O eso creí. Luego me hiciste pensar que mi teléfono celular estaba muerto. Cuando conociste a mi madre. Puedes poner más que palabras en mi cabeza. ¿Planeabas matarme de camino a casa? ¡Quiero saber cómo estás haciéndome ver lo que tú quieres! Mi cara estaba sin expresión alguna. —El arcángel—dijo. Mi cuerpo no registró el calor del suyo. Cuando te dije que mi padre fue asesinado.Hush. porque quería llevarte de vuelta a casa. — ¿Qué no es una broma? —Tú. —Pongo las palabras e imagines allí. ¿no? Puedes poner imágenes. porque era cierto. y tienes que averiguar cuál es real. Lamí mi labio inferior con la punta de mi lengua. Ningún otro ángel invadiría tu privacidad. Parecía bastante tensa. una a cada lad o de su cabeza. Te hice creer que caías del arcángel porque quería matarte. lujuria y admiración… algo que hacía que la necesitara más cerca de mí. Iba a matarte entonces—mi voz se suavizó—Pero lograste que cambiara de opinión. sobresaltada—Estás haciéndolo de nuevo. Estuve a punto de sonreír para aliviar la tensión. Cuando entré en tu casa cogí un cuchillo. como si acabara de comprenderlo—Intentaste matarme esa noche. — ¿Acabas de morderme? —Pregunté. pero había algo… algo que latía dentro de mí con necesidad. ni aunque pudiera. >> hablé en su mente. <<Relájate. apoyando sus manos sobre sus rodillas. —Ese es el punto. Maldita sea. pero bien. —Gracias—Dijo en voz baja. Suspiré. Sencillamente genial. Pues sí. —No – puedo – respirar—Se ahogaba. guiando su cabeza hacia abajo. —Mantén tu cabeza abajo y toma profundas respiraciones prolongadas—ordené. La tomé en mis brazos y la coloqué en la silla que había al otro lado de la habitación. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Sal de mi mente. —No estoy en tu mente. en voz baja. — ¿Por qué no? —No puedo controlar lo que ves. — ¡Aléjate! Apoyé un hombro en la pared y le di la cara. pidiendo aire. silenciosamente. La estudié silenciosamente por un largo rato. arañando la pared con una mano. Sus gemidos de frustración y asfixia fueron disminuyendo. Vaya. —Esa no es una buena idea—dije. Fui a sentarme en la esquina de la cama. hundiendo el colchón bajo mi peso. —No. pero el pasado no. después de un minuto. De inmediato. MARY ANN GRINTON . no podía seguir mintiéndole. — ¿Todavía no crees en mí? —Si quieres que confíe en ti. sofocándome? Intenté acercarme a ella. Bueno. —Pon tu cabeza entre tus rodillas—le ordené. No lo hice. —Ten en cuenta que la gente cambia. —Aléjate – de – mi —Jadeó. el punto es que Nora vería los distintos asesinatos que había cometido antes de conocerla. que genial. Su labio tembló. déjame tocar tu cicatriz de nuevo. —Adelante—le dije. —Dame una razón para confiar en ti—susurró. Nora—le dije. ¿Así es como vas a hacerlo. Se inclinó hacia adelante. Nora. ¿verdad? —Preguntó. —No quedare atrapada allí para siempre. —soltó. — ¿Tienes las píldoras férricas contigo? Sacudió su cabeza. pero sacó su mano de inmediato. —Sabes que no estoy escondiendo cosas—le dije. o eso creía. literalmente no lo estaba haciendo. ¿No? Lo que había sucedido antes de ella no tenía por qué incluirla. haciendo una mueca de preocupación. Ya le conté todo lo que había hecho. — ¿Mejor? —Pregunté. y agarrando su garganta con la otra.Hush. Te siento. apoyando mis antebrazos en mis rodillas. Lo más probable es que luego me arrepintiera de esto. al cabo de un momento. Me incliné hacia adelante. ya bastante preocupado. —Sí lo estás. MARY ANN GRINTON .Hush. y Nora se vio envuelta de nuevo por la oscuridad de mi pasado. Éstas volvieron a tensarse. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Pude sentir sus nervios mientras se sentaba junto a mí. su dedo rozo el borde de la cima de mi cicatriz. Por segunda vez esta noche. definitivamente no eres humano—murmuró—De verdad eres un ángel caído. Hush – Narrado Por Patch Cipriano CAPÍTULO VEINTICUATRO Estaba preparado para cualquier reacción que tuviera Nora al ver mis recuerdos. Dijo que posees el cuerpo de Chauncey por dos semanas cada año durante Jeshvan. —O mitad humano—soltó. Ella lo negó. Nora se alejó de mis cicatrices. esa pregunta me hizo aclarar muchas cosas en mi interior. de esa decisión no estaba muy seguro. — ¿Piensas que soy un chico malo? —Posees los cuerpos de otras personas. —Te escuche hablando con Rixon. ¿Viste a Chauncey? —pregunté. MARY ANN GRINTON . eso quería creer. —Entonces. Bueno. Pero claro. Me había tomado demasiado tiempo aceptar que sentía algo por ella como para dejarla escapar de buenas a primeras. —Cuando tocaste mis cicatrices. Creo que nunca antes había sido tan preciso o sincero. ligeramente desorientada. Yo no te experimento de la misma manera. pero esa no es una de ellas.Hush. quería decir que me había visto hacer jurar a un Nephilim. Correcto. Mi boca se endureció si poder evitarlo. y la única forma en la que puedo atravesar ese escudo es poseyendo un cuerpo humano. Es un Nephilim—Su última palabra salió de su boca en un susurro. —Mi cuerpo es muy parecido al vidrio. reflejando el mundo alrededor de mí. Asentí. llegué a pensar que si se diera el caso de que ella quisiera que la dejara en paz. pero externamente. hasta que regresó a la realidad y me miró. y yo te veo y escucho. — ¿Quieres poseer mi cuerpo? —preguntó. Si ella hablaba de eso. Pasó un par de segundos con la mirada perdida. Me ves y escuchas. pero decidí quedarme en silencio. — ¿Qué tiene de malo el cuerpo que tienes? Casi suspiré. Yo no te puedo sentir. —Quiero hacerle muchas cosas a tu cuerpo. Incluso. Dijo que Chauncey tampoco era humano. Cuando me tocas lo sientes. pero tiene todos los sentidos mortales. Sentí curiosidad por saber que visión había observado. lo haría. Sin embargo. Real. Debí suponer que vendría un interrogatorio. —Chauncey es un cruce entre un ángel caído y un humano Es inmortal como un ángel. Experimento todo a través de una hoja de vidrio. Un ángel caído que quiere sentir las sensaciones humanas puede hacerlo en el cuerpo de un Nephilim. No pude evitar darle una sonrisa contenida. Eso nunca. Un chico malo. ¿Ella también quiere ser humana? Todos mis músculos se contrajeron y me puse completamente rígido. Insinuó sobre tu pasado peligroso—Joder. —Algo sobre esto está mal. el cual golpeaba con fuerza como si buscara la oportunidad para salir de su pecho. y supe que tenía que agregar algo más. estaba loco por una chica humana. Der. Me he reunido con ella un par de veces—Mi estómago dio un giro difícil. Se detuvo unos segundos. —Dabria dijo que podrías tener tus alas de vueltas salvando la vida de un humano . C uando dejaron el cielo. perdería mis alas y me convertiría en humano. — ¿Codicia de dinero? Acaricié mi mandíbula. —No he perdido la habilidad de sentir emociones—La miré. —Obtuvo un trabajo en la escuela. —Otro tipo. Tuve que luchar con una sonrisa. Nora parecía querer estar calmada y controlada. Nuestra conexión emocional.Hush. Estaba completamente seguro de que esa bruja psicópata intentaría hacerle algo a Nora. la señorita Greene. — ¿Quieres decir que puedes sentirte felicidad. deteniéndome en su corazón. Creía que si caía. pienso que ella tomó el trabajo para estar cerca de ti. — Déjame ponerlo de otra manera. ¿No es cierto? —Preguntó. pero su respiración artificial y acelerada la delataba. me convertiría en humano. Era en privado. hacia el sur. Maldita Dabria. En ese tiempo. Jo. No sabía que sus alas eran arrancadas. ¿Por qué ella sigue aquí? Pensé que era un ángel normal. — ¿Qué pasa con Dabria? Si ustedes dos ya no están juntos. Dijo que serías un ángel guardián. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Si no puedes sentir. no es escasa. y había rumores de que perdieron sus alas y se convirtieron en humanos. —Codicia—admití. Los ángeles que tentaron a Eva habían sido desterrados a la tierra. en mi corazón—Dije quedamente. Dios. y el deseo de saber más sobre mí y lo que soy. — ¿Por qué caíste? Mis ojos se mantuvieron en los de ella por un largo tiempo. —Porque lo siento aquí. En sus ojos se veía reflejada una lucha interna entre el deseo de salir corriendo. — ¿Que dijo exactamente cuándo te reuniste con ella? —Que me alejara de ti. El dinero no significaba más para mí que un trozo de papel sin mucha importancia. no había una gran ceremonia a la que todos éramos invitados. — ¿Dabria todavía sigue en la tierra? —pregunté. MARY ANN GRINTON . ¿Tú no quieres eso? —Parecía confundida. que si caía. estupefacto. o que eran maldecidos a vagar por la tierra con la necesidad de poseer un cuerpo humano. <<O de ti>> pensé. —Después de lo que vi en tu memoria. después. Es la nueva psicóloga. claro que no. un cosquilleo ominoso recorría mi espina dorsal. o tristeza o…? —Deseo—Apenas una sonrisa. y parecía valer el riesgo—le confesé. Entonces eso tenía sentido en mi mente. ¿entonces por qué me besaste? Tracé un camino con mi dedo a lo largo de su clavícula. Permanece en el hotel hasta entonces. Prácticamente me gritaba ahor a. perturbador daba golpes dentro de mi cabeza los últimos minutos. tratando de llamar mi atención. —Todavía siente algo por ti. Un pensamiento. saldría a darle caza a un ángel de la muerte que desde hace tiempo me está jodiendo la existencia. Luego. frío. primero que nada. Me sentiré mejor cuando sepa que es lo que está planeando—Dije. quitando las cobijas de la cama. Nora parecía de piedra. al confundirla con Nora. Después de un rápido viaje al baño. —Envuélvete en esto—Se las ofrecí. Y estoy casi seguro de que le ha pasado otro par de cosillas que no me contó. MARY ANN GRINTON . Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Necesito llevarte a casa. —Lo pondré en la salida trasera en veinte minutos . La pondría a salvo. diciéndome que Dabria podría ser quién golpeó a Vee en el centro comercial. —Traeré el Jeep—Dije.Hush. —Cruzó por mi mente—admití. Después iré a la preparatoria a ver los archivos y ver si puedo encontrar algo útil. salí vistiendo mi camiseta mojada. Tal vez me quiere fuera de la jugada. Incluso en la oscuridad se veía hermosa. así que fue esa la que tomé. La lluvia había muerto. —Todo despejado. ni siquiera pude sentirla. No había ni una sola gota de luz que iluminara las ventanas o las puertas.Hush. Se encontraba vacío. Me agradaba sentirlo. En estos momentos. también. Hush – Narrado Por Patch Cipriano CAPÍTULO VEINTICINCO El pasillo seguía a oscuras cuando salí a buscar el Jeep. — ¿Crees que Dabria puede estar dentro? Sacudí la cabeza. No encontré nada. Tal vez haya dejado atrás algo útil. Quise llevarla en mis brazos hasta su habitación. hasta que finalmente me detuve en la oficina de la “Srta. Entrar sería pan comido. bajándome del coche. Tomé el Jeep justo dónde lo había dejado y conduje de nuevo al motel. Aunque no contaba con eso. su casa bien podría confundirse con la casa de Drácula. pero me dije a mí mismo que no era necesario entenderlo. tétrico y oscuro. —Le dije. aceleré en dirección al instituto. salí por la puerta principal. —Le dije —Yo voy a la escuela secundaria y volveré aquí tan pronto como registre su oficina. ni siquiera había cámaras de seguridad que estuviesen encendidas. Green” Patético. pero me quedaba un poco más cerca la puerta trasera. incluso aquellos lugares en los que ella podría esconderse . —Pero no me duele comprobarlo. Tenía la intención de revisar todas las carpetas que encontrara en la archivadora. —Voy a caminar alrededor. pero no había tiempo para cumplir con mis caprichos. y el intenso deseo que todavía me embargaba de pies a cabeza. Al cabo de unos minutos. claro. En cuanto ella hubo entrado en su casa. y la niebla apretaba contra el revestimiento y colgaba de los arbustos como guirnaldas de Navidad. pero encontré sólo una: La de Nora Grey. Encontré a Nora justo cuando salía de allí. recorriendo cada habitación vacía de la casa. Tuve que forzar un par de cerraduras. Era un escondite perfecto. Mientras caminaba pensaba en el beso que le había dado a Nora. Nora se bajó del Jeep con una expresión en su rostro que decía que le estaba gritando desesperadamente a sus piernas que se movieran con normalidad. Se subió al Jeep en silencio y no abrió la boca hasta que me detuve frente a su casa. “NORA GREY COLUMNISTA DE LA REVISTA DIGITAL MARY ANN GRINTON . Dabria sabía cómo moverse sin dejar rastro alguno. Hubiese salido por la puerta principal. Me adentré en la oscuridad del lugar. No lo entendía. Los árboles que salpicaban el camino de la entrada estaban permanentemente retorcidos y deformes por los constantes vientos del norte. —Me dijo. Luego otro. Me detuve frente a la ventana. no te vi a ti como el asesino. Toqué los calcetines y la ropa interior de ella. si sabes a lo que me refiero. Nos vemos en el infierno. llena de características. deseando desesperadamente que no fuera demasiado tarde. y espérame allí. estaba realmente aterrada. Levanté el peine de plata de su mueble. Iba a cerrar la carpeta cuando una nota al final llamó mi atención. en un cajón abierto. MARY ANN GRINTON . Sube. —Dabria está aquí. por cierto. conduce hasta Delphic. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ANÉMICA 16 AÑOS PADRE MUERTO PROBLEMAS TRAUMÁTICOS … Así continuaba la lista. Quizá tenga una plática con ella y le pida consejos de belleza. lo estudié. algún día querido” Introduje la nota en el bolsillo trasero de mis pantalones y corrí en dirección al Jeep. Pisé el acelerador a fondo. No quería ni pensar en lo que haría si Dabria llegaba a hacerle daño a Nora. para el momento que leas esta nota será demasiado tarde. Joder.Hush. “Querido Patch. podía sentirla. fortalezas y debilidades. ¿sabes por qué? Porque el día que te hablé de mi visión. No pude evitar jurar en voz baja cuando un tercer zapato salió de sus manos en mi dirección. el humo salía a raudales por la ventana. —Mi Jeep está aparcado en la calle. y por mi culpa. Bajé de un salto y corrí dentro. y trato de salir corriendo. — ¿Estás bien? —Murmuré en su oído. No conmigo aquí. sino a mí. Había fuego dentro. una plática a nivel espiritual. mirando hacia fuera. maldita sea. Nora estaba en su armario. Sabía que no ibas a matar la niña humana. bastante guapa. Ahora mismo. La atraje hacia mí. No podía permitir que se sintiera así. —Ella está quemando la casa. mi corazón se aceleró. pero al menos el fuego no había llegado hasta acá. La iluminación era escasa. Cuando me detuve frente a la casa. quizá esté arrancándole esos bonitos ojos con mis manos. Las consecuencias irían mucho más allá de la muerte. y ya imaginaba que la muy maldita me había hecho un truco mental para no sentirla en casa de Nora. apagando el fuego lo más pronto posible. Parece una buena chica. Le entregué las llaves del Jeep. envolviendo mis brazos a su alrededor. Bien. ¿Pero por qué demonios no salía ya? Las puertas del armario se abrieron y me encontré con un zapato volando a mi cara. cierra las puertas. Luego subí las escaleras siguiendo la esencia de Nora en su habitación. entre sollozos. ya sabes. Sólo había un lugar en el que podía estar ahora. Se puso de pie. y supe lo que iba a pasar. y luego lo devolví. sabiendo que era primera vez que me encontraba en su habitación. No por su textura. Conduce el Jeep a Delphic y espérame allí. Aunque de hecho. —Me haré cargo de Dabria. << ¿Quieres jugar. — ¿Has llamado a la policía? —Pensé que eras Dabria. Alcé su rostro y deposité un beso suave en s us labios que envió un flujo incesante de electricidad por mis venas. — ¿Cómo? Le lancé una mirada que decía “¿De verdad quieres detalles?” El sonido de las sirenas sonaron en la distancia. sino por el saber del simple hecho: Estaba besándola de nuevo. había algunas zonas un poco encendidas todavía. — ¿Qué vas a hacer? —Me preguntó. Hablé en la mente de Dabria. —Voy a ir tras ella. dónde sentía la presencia de Dabria. — ¿Qué pasa con el fuego? —La policía se encargará. ya lo había hecho yo.Hush. angelito? ¿Qué te parece si jugamos a “quitarle las alas al ángel”?>> MARY ANN GRINTON . Miré a la ventana. Comencé a subir a la terraza. Yo ya caminaba hacia la puerta. y un único objetivo nubló mi visión. pero me hacía falta algo. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Ya. Mi corazón se relajó un poco al escuchar al Jeep alejarse por la calzada. Sin embargo. Ella me hace sentir… vivo. Sabes que lo haré. —Te han expulsado. —Me dijiste que me querías. Cuando no sabía que significaba—le espeté. —Y mucho antes de conocer a Nora. que fue cubierta rápidamente por el sonido de la puerta de abajo siendo derrumbada. —Sí. Dabria. Su turno de reír a carcajadas. —No puedes hacerlo. Sólo había una razón para que las alas de un ángel estén en ese estado. ahí lo tienes. —Has sido más rápido de lo que imaginé—murmuró. Ella se giró. —Oh. dejémoslo en “me hace sentir”. Tú error fue creer que en algún momento yo te amé. Puedo perdonar tu error. Solté una carcajada sarcástica. No. Te quise. Me molestó bastante la manera en la que caían sus hombros. — ¿Mi error? No. —Me han descubierto. —No era una pregunta. igual que tú. creía que yo realmente no iba a hacerle nada. vaya. —Voy a matarla. Apreté mi mandíbula comenzando a exasperarme.Hush. —Vete al infierno. Punto. algo fácil. aún parecía tener un aspecto suave y delicado. —Podemos estar juntos. lo dije. Querer. como si no le importara lo enojado que estaba porque se sentía segura. —Encontraré la manera. —Vaya. Sabes a lo que me refiero. relajados. y así mismo se las llevó. Me acerqué lentamente. soy inmortal. te mataré yo a ti. Hush – Narrado Por Patch Cipriano CAPÍTULO VEINTISÉIS Dabria se encontraba en la orilla de la terraza. Lo hiciste una y otra vez—su voz era filosa. —Deberías comenzar a imaginar que no debes subestimarme—le dije. mirándome a los ojos. y apretó los puños con fuerza. Patch—me espetó. Algunas plumas estaban soltándose y cayendo al suelo con la frágil brisa. —Si la matas. ¿No lo ves? Seré una caída. Los policías iban a entrar. — ¿Nora? ¡Jesús! ¿Qué hay de esa chica por la cual caíste? —Ambos sabemos que aquello tampoco era amor. No realmente. Su mandíbula se tensó. relajado. No amar. como si lo que estaba a punto de hacer fuera algo que hacía todos los días. Escuché su ligera risa. Tú error. Ambos vagaremos por la tierra. pero se estaban deteriorando. ¿Y Nora te enseñó lo que era el amor? ¿Cómo? ¿Te escribió algunas líneas? —No seas ridícula. Dabria. Me fijé en sus alas. Saben que vine por ti. Sus palabras me las trajo el viento. Patch. Nunca te pedí que me siguieras. Saben que estoy en la tierra. y ella lo sabía. de espaldas a mí. MARY ANN GRINTON . aunque te duela. No se movió. así que me acerqué a ella. — ¿Acerca de que necesitas sacrificarme para conseguir un cuerpo humano? — Preguntó con un tono ligero mientras mis entrañas tenían la sensación de pesadez. El muy imbécil había dejado la llave al contacto. quizás el último vuelo que podría permitirse en el estado en el que estaban sus plumas. Barba. Mi voz no sonaba feliz. así que aproveché que todos se encontraban dentro para tomarla. —Necesito que me digas dónde encuentro a Nora Grey ahora mismo—le ordené. Uno de los policías tenía una moto. arranqué con brusquedad el ala izquierda. ¡Le había dicho que llegara al Delphic. manejando a toda la velocidad que me permitía la moto. —Patch—atendió la voz al otro lado. Colgué. señalando con mi mano—Tiene el cabello rojo rizado. tomándola por la parte baja de las alas y la bajé de vuelta a la terraza. —Sal de aquí. Te sigo. y no lo estaba. Nora no estaba. Dabria—le dije. sentándome a su lado. Es como de esta estatura—le dije. compré una caja de palomitas de maíz y entré. Haciendo presión en su espalda con una mano. Bien. hora de encontrar a Nora. Tuve la suficiente compasión como para dejarla tirada detrás de uno de los árboles cercanos. cambiando la posición de mis manos. —Así será el final feliz de nuestro cuento. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Se giró. —Podría ser lindo si pensaras que es verdad. Maldije por lo bajo y saqué mi teléfono rápidamente. extendiendo sus alas y preparándose para el vuelo. — ¡Creo que es verdad! MARY ANN GRINTON . Salté. Luego suspiró—Con respecto a Chauncey… —Ahora no. con ambas heridas abiertas en su espalda. para que la policía no pudiera encontrarla. Al menos. y es muy guapa. —Está en el cine—gruñó. y automáticamente me acerqué a la cajera. Subí de nuevo a la moto robada y aceleré en dirección al único cine que había en Coldwater. —Necesitamos hablar. Divisé a Nora fácilmente porque era la única que no le estaba prestando atención a la película. Ella frunció el ceño. Llegué al Delphic rápidamente. la cual sonrió complacida al verme. La coloqué boca abajo en el suelo. Luego hice lo mismo con la otra.Hush. — ¿Tienes hambre? —Pregunté. Dabria perdió el conocimiento rápidamente. —Repetí. —Está dentro. Me dio el ticket para la misma película. y me posicioné bien sobre ella. —Estoy buscando a Nora Grey. Corrí en su dirección y llegué a ella justo en el momento en el que se elevaba. Llegué. y asintió. joder! —Levántate y sal del cine. el único que yo conocía. que era la que tenía más cerca de mi mano disponible. Sonreí. Patch? Es domingo por la noche. Hice un truco mental. Esto parecía una especie de telenovela y ya me estaba exasperando. — ¿Qué te pasa con los baños de las chicas? —me preguntó. El chico estiró el cuello hacia atrás.. —finalizó. —Susurró la novia del chico inclinándose a su alrededor para confrontarla. —Le dijo. —No hay nadie allí. —Dijo una vez más señalándome. —Escucha. Esperaba que se diera cuenta que deseaba arrancarle esa cabezota. ¿cierto? —Me preguntó. toma mi refresco. Nora estaba apoyada en el lavabo. —Diles que él quiere matarme. —Estás enfadado porque no fui a Delphic. la aseguré y me recosté en ella. La conduje por la puerta. —La novia dijo. Ten. La miré fijamente a los ojos. Nora finalmente se levantó de su lugar y caminó por el pasillo. las palmas de sus manos escavaban en el borde. MARY ANN GRINTON . —Levantó un hombro completamente inestable — ¿Por qué Delphic. Desaparecí de la vista de todos los que nos rodeaban. y ella sigue creyendo que lo haré. —Dijo enfrentándose a ella de nuevo—Si no te calmas. conmigo siguiéndola de cerca pero sin tocarla. Así hasta que salimos de la sala de cine. llamaré a seguridad. pero su expresión era indescifrable. —La culpa es de él. deberás llamar a una ambulancia >> pensé. Ella miró a su novio con furia y le dijo — ¡Haz algo! —Necesito que pares de hablar. —El chico le dijo. <<Si no dejas de hablarle así. —Sal de aquí o te cargaré hacia fuera. Hush – Narrado Por Patch Cipriano ¡Estupendo! Todas las oportunidades que había desaprovechado para matarla. — ¡Oh. Hizo un gesto hacia la pantalla —Mira la película. enganché su brazo y la guié a través del vestíbulo hasta el baño de mujeres. cielos! —Dijo la novia alzando las manos al aire. ve y busca a seguridad. —Estás haciéndoles creer que no pueden verte. Pero no me moví.. un tanto frustrada. —Le dije. Diles que se lo lleven de aquí. En el otro lado de la puerta. señalándome. —Yo quiero matarte. —Bien. ¿Tienes alguna razón en especial para que me quieras conducir a un oscuro y abandonado parque de atracciones? —Caminé hacia ella hasta que quedamos tan cerca que la visera de mi gorra casi podría tocar su frente —Dabria me dijo que tienes que sacrificarme para obtener un cuerpo humano. pero apretaba las esquinas de mi boca. La ignoré.Hush. — ¿Perdón? — ¡Shh! —El chico a su lado susurró de nuevo. — ¡Shh! —Dijo un chico a su lado. — ¿Quién quiere matarte? —El chico preguntó todavía mirando por encima de su hombro. Delphic ce rrará pronto. todo lo que podía sentir era un deseo insaciable de estar dentro de sus cuerpos. sería expulsado del cielo y me convertiría en humano. MARY ANN GRINTON . excepto que haría lo que fuera para acercarme a ella. —Cuéntame. Por eso entré en tu vida. Lo desenterraré todo. No sabía nada de ella. — Pero fui peor. —Pero no. pero probablemente soy la única persona que conoce el resultado final. tienes que quererlo. —Admití. más momento de ser bueno y sincero. — ¿Eres la única persona que puede hacerme esto? —No. Bien. si bajaba a la tierra y poseía un cuerpo humano. así como así. tenía que afrontarlo. —La primera vez que la vi yo todavía era un ángel. Bajé a la tierra en una noche de agosto. La miré durante un momento y luego pensé que. Me di cuenta de que renuncié a todo. Esa es la razón por la que vine a la escuela. — ¿Y crees que lo haría? Tragó saliva. Todo este tiempo me he odiado a mí mismo por eso. Hasta el último detalle. Te diré todo. Esperé unos cuantos segundos antes de responder. ¿Eso es verdad? — ¿Quieres que te conteste? Sabía que para ella no era fácil enterarse que era descendiente de alguien que no era humano. —Tiene que ser un sacrificio intencional. —Dabria dijo que mi marca de nacimiento significa que estoy relacionada con Chauncey. y me odié a mí mismo por hacerla pasar por esto. no me gustaba hablar de eso. y el único que lo intentaría. —Entonces… ¿Es verdad? Nuestros ojos se encontraron. Bien. Alguien. Cuando miraba a los humanos. no te habría conocido. En mi camino de regreso al cielo. No era un humano. aquí vamos. Me echaron del cielo. —Pero. Me quitaron todos mis poderes y me convertí en esta débil y patética cosa. Fue un momento de posesiva lujuria. La cosa es que no sabía nada acerca del Jeshvan. Creí que lo había dado todo por nada. No soy un santo. Puedes ver quién fui o puedes ver quién soy ahora. — ¿Qué sucedió? Joder. Te necesitaba.Hush. pero no pude poseer el cuerpo. —Eso debió haber sido difícil para ti. Nora estaba luchando contra las lágrimas. —Dabria me dijo que te enamoraste de una chica. —Había un sentimiento oculto detrás de esas palabras. Simplemente matarte no hará nada. —Si quieres que me confiese. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Estaba en silencio. Pero ella era fuerte. Inmediatamente supe que algo andaba mal. un grupo de ángeles vengadores me detuvieron y arrancaron mis alas. ahora había encontrado algo. Era un caído. lo haré. Me volví loco. pero tenía que asimilarlo rápido. pero tienes que preguntarlo. Tenía que acercarme a ti. si no hubiera caído. Quién soy y qué he hecho. —Ella envejeció y murió. —Dijo. — ¿Dónde está Chauncey ahora? Me acerqué mucho más a ella. con mí peso inclinado sobre ella. Esto no es una buena idea. —Estás allanando mi espacio. lo cual me hacía querer abrazarla. Se dio la vuelta para enfrentarme. pero no me dejaría. Nora. Y yo estoy loco por ti. La tomé de los hombros y la inmovilicé contra la pared. —Dijo. Se metió algunos cabellos sueltos detrás de su oreja y dio un paso considerable hacia un lado. Hush – Narrado Por Patch Cipriano — ¿De qué parte de mi familia? —Dijo al fin. —Dije. Y todavía estamos en la zona segura. Bien. Muy buena pregunta. necesito espacio. MARY ANN GRINTON . Totalmente correcto. —No voy a matarte. bordeando el fregadero. sorprendido. Estábamos solos. Normalmente correcto. — ¿Por qué has hecho eso? —Pregunté. No dejaría que la palanca bajara. Tal vez correcto. — ¿Allanando? Esto no es el SAT. —No tienes ni idea de lo que me haces. — ¿Como cuáles? —Como la manera en la que me siento estando aquí encerrado contigo. —Hay muchas clases para definir correcto.Hush. —Seamos honestos. joder. No se lo di. — ¿Estás escondiendo algo más de mí? —Quiso saber. Intenté alejar mi mente del análisis que estaba haciendo sobre mis sentimientos y este lugar. Apenas quedaba espacio entre nosotros. Di escasamente una sonrisa. Nora. Se puso furiosa y empujó con fuerza mi pecho. Tú estás loca por mí. Sacudió su cabeza. Encerrados. pero conseguí eliminarla. Nora. La deseaba. —Le dije. No recordaba cuando fue la última vez que fui tan sincero . Definitivamente correcto. Le hice un truco mental en el que mostraba claramente lo que pasaría si lo intentara. La necesitaba. ya tenía suficiente. avanzando hacia atrás. —Sal de mi cabeza. —No lo creo. apoyando la mano contra el espejo. No mato a las personas que son importantes para mí. estabilizándome. —De tu padre. solo una delgada frontera de aire. Nora tenía rato observando la alarma contra incendios. Y tú encabezas la lista. Sus manos estaban presionadas contra mi estómago. —Me estás apretujando. No ahora. —No es una buena idea. —Por toda esta noche. Esto no es correcto. —Estoy escondiendo muchas cosas de ti. Di un paso atrás. sacudiendo la cabeza. Ángel.. respirando con dificultad. —La puerta está cerrada. Ahora sí iba a matarlo. y aún así Nora tuvo la voluntad de separarse. Afortunadamente ella no lo notó. —Buzón de voz. — ¿Hola? —Contestó. agarré el borde de su suéter y la atraje hacia mí. —Pero lo evitaría. — ¿Hola? ¿Elliot? ¿Vee? ¿Están ahí? Pero la conexión estaba muerta. Se sentía tan bien… El móvil en su bolsillo sonó. Su turno de congelarse. se las arrancaste? —Estaban deterioradas. alguno de ellos lo haría. — ¿Para qué te necesito? Me eché a reír. Esperó unos segundos. Se echó hacia atrás. Tú no me necesitas para eso. — ¿Qué significa eso exactamente? —Ella no iba a mantener sus alas después de que conspirara para matarte.. Estaba seguro de que podría rogarle. Tan rápido como un rayo. Le levanté de las caderas y ella envolvió sus piernas alrededor de mi cintura. Ya sabía dónde estaba Chauncey. Si se quedaba en la tierra mucho más tiempo sería una señal para cada ángel caído y verían que ella había caído. y allí estaba de nuevo ese calor recorriéndome entero. —Dije—Y tenemos asuntos pendientes. — Podrías hacerte cargo de ella. y pude sentir el calor de nuevo brotar dentro de mí. — ¿Ella hará alguna otra aparición no deseada en mi vida? —Es difícil de decir. y el móvil sonó por segunda vez. Pasó sus manos por mi pecho y enlazó sus brazos alrededor de mi cuello. Nuestros cuerpos se tocaron en lugares estratégicos. — ¿Así que tú. —le pedí. —No he terminado. pero yo sí lo noté. Apretó su boca con la mía. — ¿Dónde estás tú? ¿Sigues con Elliot y Jules? —Me congelé. Se apartó de mí. pero sí con un bajo deseo determinado. Te he visto en acción y mi apuesta es por ti. No de manera abrupta. Me ignoró. Si no lo hacía yo. Más segundos en silencio. Mis nudillos rozaron la piel de su ombligo. las plumas estaban rotas y delgadas. los ángeles vengadores se las arrancarían. MARY ANN GRINTON .Hush. ¿Qué sucedió con Dabria? —Todo solucionado.. Nora me miró con una expresión de horror en su cara y pude adivinar lo que estaba pasando. En el momento en que ella tratara de regresar al cielo. Ella tenía que verlo venir tarde o temprano.. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Puse mi boca sobre la de ella. Yo solo acabo de acelerar las cosas. —Vas a entregar a Vee por destrucción e invasión de propiedad privada. Él parece presumido y un poco agresivo. así que tenía que actuar acorde . Él estaba en el Arcade la noche que nos encontramos contigo. Metí la mano en su bolsillo delantero y saqué las llaves del Jeep. Se suponía que yo no los conocía. Abrí la puerta y ella me siguió fuera. Sacudí mi cabeza. ¿quién sabe qué puede pasarle a Vee? Ese es un riesgo que no estoy dispuesta a correr. —Elliot está esperándome a mí. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo Veintisiete Bien. — ¿Algo más que yo deba saber? —pregunté. Creo que él incluso se metió a mi habitación para llevarse el artículo de nuevo.Hush. MARY ANN GRINTON . ¿Quién es ese chico? —El amigo de Elliot. hay un árbol en el área común con el nombre de Vee en él” —Yo he visto a Elliot. eso no lo sabía. —Dijo —Si no voy. —Pareció pensarlo mejor—Creo que va a hacerle daño aún si voy. en la biblioteca. Otra cosa. pero no lo veo como un asesino. Lo tuve cerca. Ella fue colgada de un árbol. Una vibración realmente mala. Bien. Bien. —Y era cierto. e iba a descubrirlo. en el teléfono. Era él. Un encargado usando pantalones negros y una camisa de trabajo marrón estaba barriendo trozos de palomitas en el vestíbulo. pero no lo había reconocido. Querían que yo fuera con ellos. Él nos dio una segunda mirada cuando me vio saliendo del baño de mujeres. Creo que Elliot va a hacerle daño a Vee si no voy. Mi ceño se profundizó. Aquí había algo mucho más grande. —La chica que fue asesinada era la novia de Elliot. pero Nora sí. — Voy a conducir hasta allí a comprobarlo. encontré un artículo que decía que él había sido interrogado durante la investigación de un homicidio en su vieja escuela. él dijo “Si no vienes aquí. Jules. —Si había otro chico yo lo hubiera recordado. no a ti. en realidad no sabía dónde estaba. la preparatoria Kinghorn. ahora sabía dónde estaban. —Vee se metió en la escuela con Elliot y Jules. Desde esa noche he percibido una mala vibración de él. Y lo hacía. Justo ahora. Él entró a la sala de ordenadores y me vio leyéndolo. No me tardaré mucho. — ¿Quién era? —Le pregunté. Crucé mis brazos sobre mi pecho. esa noche lo había sentido. Necesitaba saber qué tanto sabía Nora. — ¿Elliot? —La semana pasada. —Creo que deberíamos llamar a la policía. joder. Joder. y era casi lo mismo. —Respondí. con una sonrisa —Trata de no quedarte en la escena del crimen más de lo necesario. Podrían ser los antiguos dueños del coche. —murmuré. —No puedo creerlo. Nora contuvo el aliento. Me acerqué hacia un coupé que se encontraba cerca. Sin embargo. — ¿Quién haría esto? Me levanté de nuevo. Barba. — ¿Qué estás haciendo? —Preguntó de pie al lado de la puerta. —Destornillador. — ¿Estás tratando de decirme que tienes muchos enemigos? —He molestado a unas cuantas personas. Un montón de hombres hacen apuestas que no pueden ganar. — ¿Si te digo que saltes? —Yo salto. Está mal. Nora me miró anonadada. —Las llantas. MARY ANN GRINTON . —Buscando una llave de repuesto. —Dijo— ¿Conduje hasta aquí sobre dos clavos? Me acerqué todavía más y me incliné. Me mantuve relajado en el asiento del conductor. Afuera. —Primera regla del robo de coches.Hush. podría nombrarlos todos y no terminar hoy. Mi mano encontró dos cables azules. — ¿Cuál es el problema? —Preguntó Nora. Esto fue un ataque intencionado. apunté con el llavero hacia el Jeep y las luces parpadearon. ellos no. —Dijo. —La lista es larga. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Si te dejo sola. Algún otro caído. —Espera un minuto. dado que ella estaba bien consciente de lo que hacía. Era una pérdida de aire. —No voy a robar un coche. —No sonó enteramente convencida. o más. Estaban pinchadas. —le dije. removí los extremos de los cables y los pegué juntos. abrí el lado del conductor y tomé asiento detrás del volante. Con cierta habilidad. en el estacionamiento del cine. —Si te dejo ir. incluso nerviosa. —Eso se llama robar. Nora se veía bastante preocupada. no quise decirle que esta no es la primera vez que lo hacía. —Dije. levantando un dedo. ellos me culpan por llevarme sus coches. Me encogí de hombros. Tenía toda la intención de subirme al coche cuando me fijé en las llantas del lado del conductor. ¿Quién sabe lo que te pueda pasar? Ese es un riesgo que no pienso correr. —Nosotros lo necesitamos. Después. apareciendo ante mi campo visual un objeto plateado. Bien. ¿vas a escuchar mis instrucciones y a seguirlas cuidadosamente? —Sí. Incluso Dabria. El motor se encendió (Lo aprendí de Rixon) y la miré—Cinturón de seguridad. Maldije silenciosamente. — ¿Si te digo que te quedes en el coche? —Me quedo en el coche. — ¿Cuál es el modelo y el color? —Pregunté. hasta quedar justo al lado de Nora. Alguna vez fue azul. pero esperaba que entendiera que lo mejor que podía hacer era seguirme el juego. Eso antes de que se oxidara y se pusiera naranja. Abrí mi billetera y le entregué tres billetes arrugados de cien dólares. funciona. atrapando las llaves. guardándose el dinero. Gané el dinero en un juego de billar hace un par de noches. ¿Vas a llenar e l tanque antes de devolverlo? —Preguntó. Contuve el impulso de pasar un brazo por su cintura y poner un cartel en su frente que dijera “Propiedad de Jev Cipriano”. —Dijo él. —De hecho sí—respondió Nora. Joder. —En caso de que nos olvidemos. Detuve el coche del chico que se salvó de quedarse sin ojos en el ala este del edificio y apagué el motor. — ¿Quieres tomar prestado mi coche? —decía él. sabía que lo haría. —Difícil decirlo. presionando su buena suerte. ¿para qué sirves mesas en el Borderline si eres millonario? Casi sonreí con sus palabras. Parte Volkswagen. —Es un pedazo de basura. Maldición. parte Chevette. Y por cierto. Supe lo que haría incluso antes de que lo dijera. —Dije. Saqué otros veinte. No es ningún Jeep Com mander. —Metí la llave en la cerradura y abrí el asiento del pasajero para ella—El banco está oficialmente cerrado. MARY ANN GRINTON . sí. —Si por funcionar te refieres a que las ruedas giren. Claro.Hush. Só lo necesitaba un poco más de tiempo. — ¿Funciona? —Preguntó ella. —Cambié mi opinión. —Él me miró directamente. sonando como si estuviera cruzando los dedos tras su espalda. Nora comenzó a platicar con un chico que la miraba de reojo arriba y abajo cada vez que podía. así que bajé del coupé antes de que alguien pudiera verme. —No lo soy. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Corrió de regreso al cine. Pero no está disponible para préstamos. Sentí la sorpresa de Nora. Buscó en sus bolsillos y me entregó un par de llaves. Afuera Nora me dijo: —Yo hubiera podido convencerlo de que me diera sus llaves. y me entraron ganas de sacarle esos horrendos ojos. Comencé a acercarme a ellos con lentitud. como si se estuviera disculpando. metiéndolos en el bolsillo delantero de la camisa. ***** Conduje a través del pueblo por las oscuras y silenciosas calles. no tenía tiempo para esto. las ramas se retorcían y sonaban en medio de la neblina. márchate. mirando los huecos oscuros de las ventanas de la escuela. La parte original del edificio había sido construida a finales del siglo XIX. Hush – Narrado Por Patch Cipriano El campus estaba empantanado. Inmediatamente sentí la presencia de Vee. sacando a Nora.Hush. volviéndome uno con la noche. Alguien más estaba en el piso superior. Crucé la calle y. me mezclé totalmente con la oscuridad. —Dijo Nora. Salí del coche. —Yo tengo un muy mal presentimiento. MARY ANN GRINTON . Muy gris. Y esos seríamos Vee y yo. Detrás de ellas se levantaba la Preparatoria Coldwater. Sólo dos podrían salir con vida. Seríamos cuatro esta noche en el edificio. Muy abandonada. y después del ocaso se parecía bastante a una catedral. Alguien la acompañaba. entregándole las llaves —Si alguien sale del edificio. Gris y pensativa. realmente aterrada. Parecía asustada. —Quédate en el coche y mantente fuera de vista. —Le dije. en cuestión de segundos. —Mirándote desde el segundo piso. mirando a su alrededor. Él si lo sintió. Joder. Luego colgó. — ¿Qué. seguramente había dicho algo para que Nora entrara. la sentía cerca. fulminándolo con la mirada. —E-está muerta.Hush. maldijo y escupió sangre. Crucé las puertas del instituto sin ningún problema. y comencé a escuchar la voz de alguien. el duro material con que estaban hechas casi rompe sus costillas. pero no tenía mucho problema para ver. Me adentré en los pasillos mientras susurraba el nombre de Vee. —Te lo juro. Yo sólo esperaba a Nora. pero no pude. él no puede morir. Lo agarré por el cuello y lo arrastré por los pasillos. Rápidamente y con toda la fuerza de la que fui capaz. Sus ojos se abrieron de par en par. —Repítelo. Jules estaba con ella. jamás—gruñí—Lo preguntaré una vez más. Él gritó. —Imposible. Él se giró un poco sobresaltado. — ¿Qué le has dicho? —exigí saber. arcángel—susurró—No sé dónde está. Está. Ya lo he matado. —Yo hago posible lo imposible. dónde lo tiré al suelo. ¿Dónde. como cuando vine a buscar alguna información de Dabria. estás esperando que aparezca Chauncey? —Él entrecerró los ojos—No vendrá. —Le espeté— ¿Dónde está Vee? —Muerta. MARY ANN GRINTON . hasta detenernos en la biblioteca. —le ordené. clavando sus ojos en mí un poco nervioso. Vee? —No lo sé—dijo. porque en el momento en que le di una patada. ya que miraba el coche d ónde se encontraba a través de la ventana del segundo piso. le di un puñetazo e n el estómago. Supuse que le hablaba a Nora. Agradecí llevar puestas mis botas. —No me mientas. entrecortadamente. Intenté encender las luces. los muy malditos. Subí al segundo piso. Me acerqué a él lentamente. — ¿Qué estás haciendo aquí? —preguntó. Sonreí maliciosamente. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo veintiocho El edificio estaba a oscuras. estamos jugando adentro—decía. Debían haber roto los cables. Se dobló tanto que su cabeza casi tocaba el piso. mis ojos apenas visibles por debajo de la gorra. Entonces escuché a Nora gritar. pero no había moros en la costa. Automáticamente miré hacia arriba. debajo de la cual se encontraban unos arbustos bastantes frondosos. Se escucharon golpes y gritos leves. también innumerables gemidos. Tuve que hacer un gran esfuerzo para mantener mi presencia lejos de la capacidad sensitiva de Chauncey. con un ligero susurro de las ramas. hasta que todo se quedó en silencio. Comencé a rodear el instituto y visualicé las ventanas. Jules abrió la puerta en el momento justo en el que pude escabullir me por la ventana lateral. Acaba de bajar del auto—le respondió él. No era nada cómodo correr o luchar con un miembro del cuerpo en mal estado. Sacudí mis pantalones y me dispuse a encontrar otra entrada al edificio. Elliot. Esperaba que no tuviera la idea de asomarse a echar un vistazo. —Muy bien. Si me veía aquí. sólo para descubrir que también se encontraba encadenada. MARY ANN GRINTON . El ruido llamaría la atención. Y otras más.Hush. para que no me descubriera aún. pero rápidamente desterré esa idea. Y otra. y obtuve el mismo resultado. Maldije en voz baja. maldita sea. y sopesé la idea de romper alguna de ellas. le puse imágenes de Nora diciéndole que se encontrarían aquí. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Búscala—le ordené—Sé que está por aquí cerca. Pero unos segundos después no era Vee a quién sentí. incluso ahora también por dónde había salido hace rato. Busqué otra. Corrí a la puerta trasera. Los dedos comenzaban a agarrotarse mientras me sostenía del alfeizar. porque me descubriría. Fue como si todas mis terminaciones nerviosas reaccionaran con ese sonido. No tenía la certeza de que Chauncey se había ido de la habitación. justo ahora. Mis piernas se movieron rápidamente a la puerta más cercana. Todas ellas estaban cerradas. Pero todas estaban bloqueadas. Tenía que admitir que esta no era una de mis ideas más grandiosas. esperando no romperme una pierna o algo. y supe que se alejaba. que era dónde se encontraba la biblioteca. así que para prevenir. No podía perder la oportunidad de detenerlo de una vez por todas. En su lugar. no me quedó más remedio que buscar la manera de saltar desde el segundo piso. Maravilloso—lo felicitó—Supongo que ya no te necesito para nada más. sería una dificultad. Me aventé. Mi corazón titubeo al sentir la presencia de Nora en el edificio. sabría que Nora estaba conmigo y se marcharía. Caí al suelo sin ninguna dificultad. Se escuchó una risa suave y peligrosa. Se escuchó un ruido. ¡Maldita sea! Le había dicho que se quedara en el jodido coche. para no caer. porque la que había utilizado anteriormente ahora se encontraba rodeada por unas fuertes cadenas. Has sido de bastante ayuda. Puedo sentirla. —Nora vendrá. Me orillé aún más a la pared y me arrastré a la izquierda. porque aunque no me dolería. — ¿Qué estás haciendo aquí? —le preguntó a Elliot— ¿Dónde está Nora? Me introduje en la mente de Elliot para borrar mi encuentro con él. Hush. y pasé detrás de Chauncey. tratando de encontrar la forma de entrar. Situaciones extremas requieres medidas extremas. Dio un paso adelante de repente y tiró de la muñeca de Nora. Pero no encontraba la manera. y di un paso adelante. —Da un paso más y este será su último aliento—Jules advirtió. Me deslicé con cuidado ventana abajo. Chauncey. con voz entrecortada. — ¿Y la ventana de mi dormitorio? ¿Me espiabas en mi casa mientras yo dormía? —Nada personal. —No lo intentes—dijo. El arma se hundió más. y Nora abrió la boca para gritar. La ira se removía en mi interior. MARY ANN GRINTON . “¿Lista para usar los movimientos de boxeo sobre los que siempre estás presumiendo?”Dije en la mente de Nora. —Las otras cinco cámaras están cargadas. pero era la única opción rápida que se me ocurría. Di un par de pasos más cerca. ahora sí estaba jodidamente cabreado. —Revolver—Explicó Jules. girándola alrededor delante de él. El arma hizo clic. pero con cautela firme mientras pensaba en la manera de tomar las riendas. —le dije. — ¿Q-qué? —Tartamudeó. todas las ventanas cerradas. —Quiero ver la expresión de tu cara cuando la mate. Bien. Tan impotente como yo fui acerca de hacer nada con el juramento que te hice a ti. Joder. No me agradaba lo que iba a hacer a continuación. Estaba asustada. Todas las puertas estaban bloqueadas. y la necesidad de sacar a Nora de aquí rápidamente. Pensé rápidamente. —No vas a disparar contra ella. —Elliot me dijo que hay mala sangre entre las dos. Sorpréndelo. Miré la distancia entre nosotros. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Continué corriendo a los alrededores. Patch. Con cuidado. — ¡Quítate la gorra! —Ordenó. y estuve a punto de caer ruidosamente dentro y descubrirme cuando visualicé a Chauncey frente a Nora. — ¿Tu atacaste a Marcie Millar? —Le preguntó a Jules. pero todo lo que salió fue un trémulo sollozo. Corrí en su dirección. Colocó una pistola en su nuca. — ¿No? —Jules apretó el gatillo. Estaba comenzando a desesperarme y a correr el riesgo de romper una de las ventanas de vidrio cuando visualicé la ventana del gimnasio entreabierta. Apreté los puños ante la frase “mi chica”. No me gustaba la idea de alguien más teniendo el placer de torturar a mi chica—le dijo él. Jules también lo vio. y yo hice una mueca. Me movía con facilidad. tratando de esconderme en la oscuridad. y calculé la rapidez con que podía cubrirlo. sí. Estuve a punto de saltarle encima cuando Jules se puso rígido. y mi corazón se detuvo. Tú eres impotente para salvarla. y ahora estaba MARY ANN GRINTON . y logré entreabrir un poco mis ojos.Hush.” Nora se concentró en mi voz. —susurré. --No sabía cuánto tiempo había pasado. ¿Cómo podía haberlo olvidado?) que podía tratar de hablarle en sus pensamientos. tratando de alejarse de Chauncey. Desmáyate. por lo cual no podía estar en su cuerpo por mucho tiempo. lancé una oleada de energía contra ella. Estaba tratando de hablar. y tenía una expresión de terror en su rostro... Corre. pero no me quedaba de otra. — ¡Ayuda! ¿Alguien puede oírme? ¡Ayuda! Intenté abrir mis ojos. Como dije. Las venas en el cuello de Jules saltaron y su cabeza se inclinaba hacia un lado. Jules estaba perdiendo la consciencia. no reaccionaba. Desmáyate. logró sacar de su cabeza a Chauncey. No es Jeshvan y no estoy permitido. joder. Sus ojos se abrieron. Cierra los ojos. y mi cuerpo quedó inconsciente. pero la voz de Nora retumbaba en mi cabeza una y otra vez.. Fijé la vista en ella y la observé caminar en la vida. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Sin previo aviso. a continuación. "No puedo". Escucha mi voz. su privacidad. y no te detengas. “No voy a poder estar dentro de ti mucho más tiempo”. Yo estaba comenzando a recuperar el control de mi cuerpo. Joder. El cuerpo de Nora finalmente me echó. no me agradaba. Un alto zumbido se quejó a través de Nora. Sigue subiendo. — ¡Ayuda! —Volvió a gritar. pero no podía. Jules tropezó. Sentía que invadía su libertad. Tan pronto como me eches fuera. Nora se encontraba subiendo las escaleras. saltaron. no se movía. No era Jeshvan. le dije a Nora en sus pensamientos. ¿Entiendes? Corre tan rápido como puedas. Él había subido rápidamente. pero no me detuve. Mi cuerpo estaba entumecido. y sentí que su cuerpo trataba de expulsarme. Golpeé el arma y cayo. Cerré su garganta rápidamente.. corre.” Le dije. Necesitaba ayudar a Nora. cayendo en ellas. aprovechando los pocos segundos que me quedaban. “Bloquéalo fuera. moviendo los labios ininteligible. y luego de unos minutos. La escalera está intacta. toda su fuerza y la libertad se perdió cuando tomé posesión de ella. Supe lo que pasaba al ver a Chauncey tratar de alcanzarla. lloró. Necesitaba terminar con esto rápido. Chauncey estará demasiado débil y aturdido para entrar en tu cabeza. —Vamos. Usé sus manos para golpear a Jules hacia atrás contra las gradas. Su cuerpo estaba completamente vulnerable a mí. ¡Y este maldito cuerpo no reaccionaba! Concentré toda mi fuerza en tratar de mover una parte de mi cuerpo. así que lancé su puño en dirección a la cara de Jules. resbaló por el suelo del gimnasio fuera de su alcance. Entonces se me ocurrió (Dios. joder. "¡Voy a caer!" “Bloquéalo fuera. Pero era demasiado tarde. Pero ya era demasiado tarde. joder. Hush. Un rubor en su rostro. pero me tenía bloqueado el muy maldito. Estaba desesperado. —Yo soy tu descendiente. Me levanté con un poco de esfuerzo. Chauncey la mataría en el trayecto. y susurré algo que había olvidado decir. —Tú y yo compartimos la misma sangre. Los ojos de Jules carecían de luz. MARY ANN GRINTON . —Levantó su mano precariamente. Sólo quedaba yo. —Te amo. si ya no sabía eso. mi pulso se detuvo. Sin tiempo para poder detenerla. Si subía. mientras el lugar se teñía de un oscuro silencio. Está escrito en el Libro de Enoch. Chauncey rió. Nora. Maldita sea. Mano sobre mano. Parecía triste. y la mirada que me estaba dando Nora era de despedida. porque ella estaría a salvo sin mí en su vida. Los dos estaban a caballo en la viga. Mis ojos se cerraron. al mismo tiempo llevando su mano al arma en su cintura. No sabía qué hacer. su voz pequeña. pero segura. sentados cara a cara. Quise no haber llegado a su vida nunca y no haber provocado nada de esto. Y él estaba fuera de mi alcance. y el equilibrio reclamó. Estaban enfocados en ella. Quise correr y sostenerla. a diez pies de distancia. No quería que fuera a cometer una estupidez. ¿para qué la buscaba? —Tú—farfulló. sin saber qué hacer. Quise muchísimas cosas en ese segundo en el que cayó. y yo sabía que le creyó. y una lágrima se deslizó por mi mejilla. Las lágrimas ardían en mis ojos. Me dolía todo. lo cual me volvía completamente loco. Patch se convierte en humano y tú vas a morir. —le dijo. — ¿Algunas últimas palabras? —Dijo él. Hush – Narrado Por Patch Cipriano a menos de quince pies de distancia de ella. Se subió a la viga. pero ninguna de esas cosas podía cumplirse. No pude salvarla. —Si hace una diferencia—le dijo ella. Me quedé en silencio mientras los observaba. absolutamente todo. mostrándole su marca de nacimiento. Mis piernas se desplomaron y caí de rodillas al momento en que escuché su cuerpo golpear el suelo . se arrastró hacia ella. se lanzó fuera de la viga. Podría decir por esa expresión que estaba pensando sus palabras. No pude moverme. Apoyé mi frente en el suelo. absorbiendo cada palabra que decía. Ya no existía Chaunce y. pero más que nada. Pero joder. Si sacrifico mi sangre. y las lágrimas fluyeron con facilidad. Tembló ligeramente. pero era difícil decirlo. Intenté entrar en su mente. —No hace ninguna diferencia para mí si te pego un tiro o te caes a la muerte. Ya no vivía Nora. Se deslizó hacia ella con velocidad frenética. parecía decidida. Y no quería que dejara de doler nunca. Mi corazón se paralizó. La sangre bañaba los alrededores con facilidad. me detuve en el jardín y miré al cielo. y luego asintió. —Sabes que te volverás un custodio con esa decisión. Nathan—le dije. Apreté mis puños con fuerza. sin vida. No pudo haberme importado menos. y el poder que destilaba. —No lo quiero—le dije. Reflejaban el poder que lo envolvía. Me sonrió tétricamente. Se quedó en silencio unos segundos que se me hicieron eternos. Sentía que el alma iba a abandonar mi cuerpo en cualquier momento. —Es por la chica. no lo aceptaba. — ¡Nathanael! —Grité. —Era. y él tampoco esperaba que se lo afirmara. —No quiero convertirme en humano. MARY ANN GRINTON . —Jev… Jev… Jev…—murmuró— ¿o debería llamarte Patch? Me han dicho que últimamente ese es el nombre que más te va. —No quiero regresar. Creo que se lo debo. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Capítulo veintinueve Un sollozo se escapó de mi garganta. Había muchos arcángeles encargados de la transacción caído-humano u otras transformaciones. — ¿Por qué? —preguntó. Dio un paso hacia atrás. Enamorarse de una humana estaba prohibido para nosotros. como restregándome en la cara lo que él es. me negaba a aceptar una vida a costa de ella. Ella se había sacrificado por mí. Suspiré. —Quiero estar con ella. —Quiero que ella viva—susurré.Hush. Pero yo sólo logré mantener conversaciones con uno. y lo que pude haber sido. Quiero cuidarla. Me acerqué a ella y la sostuve entre mis brazos. Especialmente ahora que sabía lo que pasaría si no aceptaba el sacrificio. No lo entendía. para luego entrecerrarse con sospecha. ¿Recuerdas? Ese era tu objetivo. —Fue por esa razón que caíste. recordando su viejo apodo. contemplando sus ojos cerrados. Me limpié las lágrimas con frustración y salí del gimnasio. ¿no? ¿Te has enamorado de ella? No lo negué. observando el gimnasio que se encontraba a oscuras. Sus ojos eran fríos. Él asintió. ¿verdad? Regresarás al cielo. Lanzó una mirada hacia arriba. sin alma. sin sentimientos. esperando que respondiera— ¡Nathanael! Las nubes se replegaron y el arcángel cayó frente a mí como un rayo. Sus ojos se abrieron ligeramente causa de la sorpresa. para no asustarla. — ¿Qué pasa si no puedo fingir nada? —pregunté. — ¿Qué pasará con Nora? —inquirí. —Tal vez. Sólo puedes mantener conversación con arcángeles. Mis labios se tensaron con sólo imaginar la cantidad de dolor que sentía ella ahora mismo. Congelaría el infierno y ardería el cielo si eso llegaba a suceder. Me acerqué de nuevo al gimnasio y pude distinguir a los otros dos arcángeles perderse en el cielo. Nathanael había dicho que en unos minutos despertaría. para romper el hielo—Pero creo que no te vendría mal algunas lecciones de boxeo. Desde ahora me aseguraría que jamás volviera a pasar por algo así. así que si lo estás. No era divertido. —Por favor. Regresarán tus alas. así que me recosté contra el marco de la puerta. Al menos. dime que me regresaste mis alas negras. mientras te mantengas atado a las reglas. está un poco lastimada. ¡Maldito! Dicho eso.Hush. sus ojos parpadearon hasta abrirse. alzó el vuelo y se perdió entre las nubes. parado en la puerta sin moverme. Urial y Nazarach la están vendando. allá en el gimnasio—le dije. Finalmente. pero no imaginé que serían tantos. y hazle creer a todos que no es así—dijo. Están jóvenes. a diferencia de que toda la sangre había regresado a su cuerpo. no las fuerces mucho. —Serás SÚ custodio. —Patch—Dijo con voz ronca por el desuso. No permitiremos que les des una mala influencia a los demás custodios—casi bufé. Nora se encontraba en el mismo lugar. pero no tendrás entera comunicación con el mundo angelical. —Esa fue una buena lucha. Jev. — ¿Qué pasó? ¿Dónde está Jules? ¿Cómo llegué aquí? —Su voz estaba llena de pánico —Yo me lancé de la viga. —dijo él—Tengo que regresar al cielo. ¿Quitármela? Nadie iba a quitármela. niégalo. Ahora sí sonrió completamente. alrededor de veinte minutos. No puedes enamorarte de ella. Y Jev—medio sonrió—No te emociones con tus alas. —Te la quitarán. En unos minutos despertará. Deberás descubrirlo. Me contuve de correr a su lado. también. No sabría decir si estaba más alegre porque había despertado. y una sensación de tranquilidad me inundó. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Serás su ángel custodio. Intentó sentarse y luego lanzó un amortiguado grito. o ángeles de la muerte. —Ve allá dentro. o porque era mi nombre lo primero que había salido de sus labios. Nadie iba a alejarla de mí. La tomé entre mis brazos. *** Había estado frente a ella. desplegué las alas y tuve con ella lo que sería el primer vuelo que dab a en muchos años. MARY ANN GRINTON . —Debieron abrir el puente.Hush. cuando regresaste. —Tú salvaste mi vida. ¿Es que no podía verlo? — ¿Para qué me serviría un cuerpo si no puedo tenerte? Lágrimas rodaron por sus mejillas y la acerqué a mí. Abajo. acomodando su cabeza contra mi pecho. Una boca que estaba desesperado por besar. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Tuviste mucho valor para hacer eso—Le dije. verdad? —Dijo en voz baja. y besé cada dedo. Sonreí pícaramente y obedecí a su orden. escuché el ruido sordo de la puerta del garaje abriéndose. con voz ronca y entrando a la habitación. pero significa que ya no estoy en la lista negra—o al menos eso creo. tomándome todo mi tiempo y manteniendo mi mirada fija en sus ojos. Ella Levantó mi playera hasta mis hombros. Cerré la puerta tras de mí. no tenía nada que reviviera su cuerpo. — ¿Ahora eres un ángel custodio? —Soy tu ángel custodio—corregí. — ¿Tengo mi propio ángel custodio? ¿Exactamente cuál es la descripción de tu trabajo? —Custodiar tu cuerpo—Sentí que mi sonrisa se hizo más ancha—Me tomo muy en serio mi trabajo. pero se detuvo. —No puedes ver mis alas—le dije—Están hechas de materia espiritual. — ¿Significa que ahora puedes sentir? No exactamente. Una mueca de asombro se formó en su boca. — ¿Estás diciendo que dejaste tu oportunidad de ser humano por mí? Tomé su mano vendada. Técnicamente. lo que significa que tendré que familiarizarme con el objeto en cuestión a un nivel personal. —Ella me matará si te encuentra aquí. Lo rechacé. Date la vuelta—Ordenó. ¿Cómo funciona todo este asunto del ángel custodio? ¿Soy la única persona que te puede ver? O sea ¿eres invisible para los demás? Me le quede mirando esperando que dijera que estaba bromeando. y me senté junto a ella en la cama— ¿Qué más recuerdas? — ¿Estoy muerta. — ¿Regresé? —No acepté tu sacrificio. De repente se alejó. La observé en silencio por un momento —No. pero estoy casi en las mismas. él también debió haberlo hecho. pero como él no tenía alma. ¿Puedes trepar árboles? ¡Dime que puedes trepar árboles! Sonreí de oreja a oreja MARY ANN GRINTON . el sacrificio mató a Jules. —Mi mamá—Gritó ahogadamente. — ¿No eres invisible? —Chilló— ¡Tienes que irte de aquí! Se movió para empujarme de la cama. llena de miedo— ¿Soy un fantasma? —Cuando saltaste. —Estoy aquí para instalar un sistema nuevo de alarma. —le dije. Los paramédicos salvaron a Elliot. pero no se me ocurría nada verdaderamente bueno. —Patch—contesté. Toqué al timbre. Llevaba media hora pensando en alguna excusa para visitar a Nora. ellos ya trataron de localizarte a través del celular de donde llamaste al 911. Diez minutos después estaba parado frente a la puerta de Nora. Abajo en el pasillo. —Patch—Respondió ella. y no fue Nora quién salió. No me importa lo que le digas a la policía. con unos jeans desgastados y una playera blanca. —Una última cosa. pero apreciaría que me dejes fuera de todo esto—Abrí la ventana de su habitación. —Lo supuse. Sra. Vee encontró a la policía a tiempo. —me espetó— ¿Vas a instalar el servicio de alarma tú. Me limitaba a rondar su casa y mirarla a través de las ventanas pero sin que me notara. así que desplegué mis alas y comencé a volar. Van a hacer unas cuantas preguntas. —La policía y los bomberos estuvieron aquí antes. Me figuro que la ciudad es demasiado pequeña para que existan demasiados Grey. hasta que mi teléfono sonó. —Buenas tardes. —Jules lo cogió. Había venido aquí con un único objetivo— ¿Puedes venir fuera? MARY ANN GRINTON . pero se pondrá bien. más incómoda que sorprendida— ¿Estás aquí para ver a Nora? Sonreí. escuché cerra rse la puerta de la entrada. —Calla. Él está en el hospital. Su mamá estaba adentro. ahora—le dije. —Tengo un trabajo nuevo—Le dije.Hush. *** La tarde transcurría lenta. La policía regresará. dice que necesita instalar un nuevo sistema de alarma para su casa. y colgué. que es mejor que el restaurante ese dónde trabajas tú. así que me supuse que se trataba de tu chica. Hush – Narrado Por Patch Cipriano —Puedo volar. Al menos. sosteniendo la caja de herramientas. Si no me equivoco. fijando la mirada en Nora. —Pensé que tenías otro trabajo—dijo ella—Pensé que limpiabas mesas en el Borderline. al fondo de las escaleras. chico? —le pregunté. Asentí. Grey—la saludé. en medio de una risa. o mando a uno de mis chicos? Y justo cuando esperaba la escusa perfecta… —Necesito que me envíes la caja de herramientas. —Cariño—saludó Rixon—Acaba de llamar una tal… Blythe Grey. El cuarto matrimonial tendrá que ser remodelado. — ¿En dónde demonios estás trabajando. pero impidieron que el fuego se extendiera. Más era mi nueva palabra favorita. —Más. era más como una advertencia.Hush. Fin. un toque juguetón y de tentadora suavidad. El primer toque fue solo eso. Me estaba muriendo de deseo. No era una pregunta. — ¿Más? —pregunté. esperando que no hablara en serio. Sonreí de oreja a oreja cuando no protestó y bajé mi boca hacia la de ella. Hush – Narrado Por Patch Cipriano Caminé hasta mi motocicleta y ella me siguió. pero no de deseos de hablar. Ella envolvió sus brazos en mi cuello. sosteniendo mi cabello y me atrajo más a ella. — ¿Hablar? —Le pregunté. —Todavía tenemos mucho de qué hablar—me dijo. susurré a sus pensamientos. Lamió sus labios y mi sonrisa se hizo aún más amplia. MARY ANN GRINTON . “¿Y si te beso?”.