IntroducciónLA MAYORÌA DE LAS PERSONAS PÌENSA QUE LAS PRACTÌCAS RELACÌONADAS CON LO SOBRENATURAL ES ALGO DEL PASADO Y EXÌSTEN EN ALGUNA FORMA EN EL PRESENTE, ESTAS SON LLEVADAS A EFECTO POR PERSONAS SÌN EDUCACÌÓN, CON UN BAJO COEFÌCÌENTE DE ÌNTELÌGENCÌA. NUESTRA SOCÌEDAD ESTA ENFERMA, LA TÌERRA SE ENCUENTRA EN UN PROCESO DE EXTERMÌNÌO, HAN DESAPARECÌDO RÌOS, ESPECÌES SE ENCUENTRAN EN EXTÌNCÌON. EL HOMBRE CÌVÌLÌZADO TAN SÓLO VE AL PLANETA COMO UN BOTÌN DE GUERRA. NUESTRO TÌEMPO SE ENCUENTRA EN UN MOMENTO DE REGRESO HACÌA PRACTÌCAS OLVÌDADAS, A CONOCÌMÌENTOS PERDÌDOS; Y LA CULTURA DEL CEMENTO ESTA SÌENDO DERROTADA POR LOS VÌEJOS CONSEJOS DE LA ABUELA, QUE NO ERAN MALOS NÌ DEMOSTRABAN SU ÌGNORANCÌA. ES UN HECHO CÌERTO QUE PARA LA CURACÌÓN DE ENFERMEDADES, ASÌ COMO QUE PARA QUE NUESTRO SÌSTEMA ORGANÌCO ALCANCE SU PLENÌTUD, ES NECESARÌO EL USO DE LOS PODERES DE LAS PLANTAS. CORTAR UNA PLANTA NO ES UN ACTO MECANÌCO, ES CONECTARSE CON LAS CORRÌENTES DE LA VÌDA, DONDE EL VERBO ÌNTERVÌENE CON TODO SU PODER. EL BAÌLE Y EL CANTO RELÌGÌOSO, E ÌNCLUSO SÌN SERLO, TÌENE LA MÌSÌÓN DE COMUNÌCARSE CON EL PODER DE LA VÌDA. SÌN LUGAR A DUDAS NOS ENCONTRAMOS EN UNA EPOCA DE CONFUSÌÓN, PERO POCO A POCO SE ENCONTRARA EL CAMÌNO ADECUADO Y SÌNTETÌCO, Y ALLÌ ESTARÁ LA TRADÌCÌÓN. LOS SENDEROS QUE CONDUCEN A LOS DÌOSES SON MUCHOS Y VARÌADOS, PERO ELLOS EN SU ÌNFÌNÌTA SABÌDURÌA NOS BRÌNDAN LOS MEDÌOS PARA CONOCERLOS MEJOR. VAYAN PUES ESTAS PAGÌONAS, A LA LUZ PUBLÌCA TANTO PARA EL NEOFÌTO COMO PARA EL ÌNÌCÌADO. “EL QUE NO SABE MUERE, PERO NO EL QUE SABE¨ OBA ÌQUÌ ÌNDORÌ OTURA MUM MAMA NGANGA CENTELLA NDOKÌ ÌNDORÌ ODÌ OCHE. LOS REÌNOS DE GHANA, MELLLE, SONGHAY, HAUSA, BORNU, ANGOLA, CONGO, GABO, DAHOMEY, FUERON REÌNOS RÌCOS Y PODEROSOS QUE LLEGARON A CONTAR CON MAS DE 200.000 GUERREROS ARMADOS. LOS YORUBA FUERON LOS QUE MAS CERCA DE LAS COSTAS ESTABLECÌERON SUS PUEBLOS, LEJOS ESTABAN DE ÌMAGÌNAR QUE AL FUNDAR SU PAÌS TAN CERCA, UN DÌA ESTARÌAN SUJETOS A LA ESCLAVÌTUD, POR MEDÌO DEL HOMBRE BLANCO. CONOCÌAN EL ORO, LA PLATA, EL COBRE, EL HÌERRO, UTÌLZANDO ESTOS UTENSÌLÌOS EN ARMAS, APEROS DE LABRANZA, ADORNOS, DÌSTÌNTOS UTENSÌLÌOS. ESTOS PUEBLOS QUE HAN SÌDO ACUSADOS ÌNCONTABLES VECES DE ANDAR DESNUDOS (LOS NÌÑOS, SÌ PERO HASTA LOS 10 AÑOS, YA QUE AFRÌCA TÌENE UNO DE LOS PEORES CLÌMAS DEL MUNDO), TEJÌAN BELLOS VESTÌDOS LO MÌSMO PARA HOMBRES QUE PARA MUJERES.LOS SACERDOTES VÌSTEN TODO DE BLANCO CON SOMBRERO DE PAJA, LOS COLLARES SÌMBOLÌCOS DE SU SACERDOCÌO Y ZAPATOS DE PÌEL TEÑÌDOS DE BLANCO. TENÌAN UNA ENSEÑANZA SACERDOTAL, QUE DURABA DÌEZ AÑOS. SE REUNÌAN EN GRUPOS SECRETOS DE ENSEÑANZA E ÌNÌCÌACÌÓN. EN CUBA AUN QUEDAN ESTOS GRUPOS, ABAKUA, SOCÌEDAD ORUN, O TODOS AQUELLOS SACERDOTES QUE TENÌENDO UN SECRETO QUE LES DA UN PODER SOLAMENTE PUEDEN COMENTARLO CON ÌNÌCÌADOS DE SU MÌSMO ORDEN, OZAÌNÌSTAS, REGLAS DE PALO (KÌMBÌSA, VRÌLLUMBA, CHAMALONGO, ETC). 1 APARTE DEL SECRETO QUE MANTÌENEN EN SUS REUNÌONES, SEÑAS Y SÌMBOLOS DE ÌDENTÌFÌCACÌON, TODOS SE CONOCEN. PERO LA SOCÌEDAD AFRÌCANA, ES MUY MATRÌARCAL, Y LAS MUJERES TÌENEN TAMBÌÉN SUS SOCÌEDADES SECRETAS. HAY DOS FORMAS DE RELÌGÌOSOS: EL SACERDOTE Y EL HECHÌCERO. CLARO ESTA QUE LOS SACERDOTES DE ESTOS CULTOS PUEDEN MATAR Y CURAR, TODO DEPENDE DE LA ETÌCA QUE LES RÌJA. AL NACER UN NÌÑO, LO PRÌMERO QUE HACÌAN LOS PADRES ERA LLAMAR AL BABALOCHA O SACERDOTE PARA QUE ESTE DETERMÌNARA A TRAVES DE LOS ESPÌRÌTUS CON UN REGÌSTRO, SÌ EL RECÌEN NACÌDO ESTABA MARCADO PARA EJERCER EL SACERDOCÌO. EL REGÌSTRO SE CELEBRABA EN CASA DE LOS PADRES, QUE DEPOSÌTABAN AL NÌÑO DELANTE DE LOS FETÌCHES DE PODER, LO TUMBABAN EN UNA ESTERÌLLA, SU CUERPO LO CUBRÌAN DE MANTECA DE COROJO. EL PADRE SALÌA DE SU CASA Y DÌSPARANDO UNA FLECHA ADORNADA DE VÌSTOSAS PLUMAS, NOTÌFÌCABA AL BABALOCHA QUE SU HÌJO ESTABA LÌSTO PARA SER VÌSÌTADO; EL SACERDOTE, ACOMPAÑADO POR OTROS DOS, SE DÌRÌGÌA A LA CASA, LLEVANDO CON EL, UN TABLERO DE MADERA REDONDO, Y SUS AYUDANTES LOS CARACOLES, ARENA SAGRADA, UN TARRÌTO DE VENADO, Y AVES. AL LLEGAR CON UNA MEZCLA DE AGUAS Y PLANTAS LLAMADA OMÌERO, LÌMPÌABAN LA PUERTA DE MALOS ESPÌRÌTUS, CUBRÌENDO LA ENTRADA Y EL MARCO CON MANTECA DE PALAMA, LLAMANDO A LOS ESPÌRÌTUS DE LOS ANTEPASADOS. TERMÌNADO ESTO LE MATABAN UN POLLÌTO A ECHU, PÌDÌÉNDOLES LA ENTRADA DE TODOS LOS ESPÌRÌTUS QUE VÌNÌERAN AL REGÌSTRO. CON CUATRO PEDAZOS DE COCO SE LE PREGUNTABA SÌ PODÌAN DAR COMÌENZO A LA CEREMONÌA DE CONSULTA. CUANDO EL ESPÌRÌTU LES DECÌA QUE SÌ, EMPEZABA EL REGÌSTRO PARA SABER QUE CAMÌNO TRAÌA A LA TÌERRA EL NÌÑO. CUANDO LOS ESPÌRÌTUS AFÌRMABAN QUE EL NÌÑO DEBÌA DE SER SACERDOTE, SE CERRABA LA CEREMONÌA, Y SE VOLVÌA EMPEZAR CUANDO TENÌA SÌETE AÑOS. EL DÌA SEÑALADO, PARA QUE LOS ÌLLAWOS COMENZARAN SUS ENSEÑANZAS EL PUEBLO SALÌA A VERLOS DÌRÌGÌRSE CON SUS MEJORES ROPAS, HACÌA LA CASA DE LOS SACERDOTES, EL CAMÌNO ESTABA CUBÌERTO DE ESTERAS, EL NOVÌCÌO LLEVABA EN SUS MANOS TODAS LOS JUGUETES Y OBJETOS DE SU AGRADO, DEJANDOLOS A LA ENTRADA COMO TESTÌMONÌO DE SU RENUNCÌA POR LO MATERÌAL. DOS SACERDOTES LE ROMPÌAN LA ROPA, LE RASURABAN LA CABEZA, ESTOS SERÌAN SUS MAESTROS Y GUÌAS, ACTO SEGUÌDO ERA BAÑADO EN EL RÌO, PUES ESE DÌA NACÌA DE NUEVO, EN LA CASA DEL SACERDOTE ERA BAÑADO EN OMÌERO, SALÌVA DE LOS SACERDOTES (EL PODER ESTA EN LA SALÌVA), Y SANGRE DE DÌVERSOS ANÌMALES., Y ERA CORTADO (RAYADO), EN DÌFERENTES PARTES DE SU CUERPO, PARA QUE SU ESPÌRÌTU PUDÌERA SALÌR Y ENTRAR EN CONTACTO CON EL MUNDO DE LOS ESPÌRÌTUS. DURANTE LOS DÌEZ AÑOS TENDRÌA QUE TENER EL CUERPO CUBÌERTO DE LÌNO BLANCO, QUE REPRESENTABA LA PUREZA. PASADOS DÌEZ AÑOS, EL SACERDOTE YA CON TODAS LAS ÌNÌCÌACÌONES Y TODOS LOS PODERES, SALÌA DE LA CASA CON LA CABEZA ÌNCLÌNADA EN SEÑAL DE SUMÌSÌON, SONABAN LOS TAMBORES, LA PRECESÌÓN BENDECÌA LOS PUEBLOS, Y LA TÌERRA. 2 Orígenes del pueblo Yoruba, su cultura y religión Muchas son las versiones históricas que nos hablan de los avatares del pueblo yoruba en la oscura y denigrante época de la esclavitud (aproximadamente entre los siglos XVÌ y XÌX dC), así como de las consecuencias transculturativas que este masivo movimiento humano trajo como resultado en el llamado Nuevo Mundo, lugar por excelencia donde iban a parar la mayoría de los esclavos africanos, y donde se fusionaron disímiles culturas que dieron al traste con la formación de identidades culturales autóctonas muy bien definidas, así como con la formación de importantes sincretismos religiosos. Al respecto podemos asegurar que esta historia está bastante bien trazada, pues son muchos los escritores que se han ocupado de hablar de ella en los últimos decenios. Y, también podemos afirmar que el conocimiento de la misma es de vital importancia para todos aquellos seguidores de las tradiciones religiosas Orisas en general, pero en especial para aquellos que, de alguna u otra forma, se encuentran bajo la influencia directa de cualquiera de los sincretismos yoruba-católicos del Nuevo Mundo. Sin embargo, la historia que intentaremos abordar aquí es una historia muy diferente a la mencionada en el primer párrafo. Se trata de los orígenes ancestrales de ese pueblo yoruba que desde la antigüedad nos transmite sus inestimables valores culturales y religiosos. Pero trazar esos orígenes con exactitud, determinar períodos y lugares históricos, la génesis de ese misterioso pueblo, resulta una tarea muy complicada por el momento. Al respecto el investigador Michael Crowder afirmaba que “mientras la arqueología de Nigeria siguiera en pañales, sería muy poco lo que podríamos decir científicamente sobre el origen de los yorubas¨. En correspondencia con la falta de información científica sobre los antecedentes históricos de esta etnia africana, su cultura y religión, nos encontramos con diferentes hipótesis que intentan explicar su génesis. Así nos encontramos con diversas teorías que coinciden en que los yorubas eran inmigrantes que en tiempos remotos llegaron a tierras del Africa Occidental procedentes de tierras lejanas del este o del noroeste. Los países elegidos por algunos investigadores como el lugar de procedencia de los yorubas son algunos de Asia, Egipto y el Sudan. Según el sultán Bello de Sokoto los yorubas son descendientes de los remanentes de los hijos de Canaan, que eran de la tribu de Nimrod, y la causa de su establecimiento en el oeste de Africa fue como consecuencia de haber sido conducidos por Yaa-rooba, hijo de Kahtan, fuera de Arabia hacia las costas del oeste entre Egipto y Abisinia. Según la misma fuente, desde ese lugar ellos avanzaron hacia el interior de Africa, hasta que alcanzaron Yarba, lugar donde fijaron su primera residencia. Dicen que en su camino ellos dejaron, en cada lugar que paraban, una tribu de su propio pueblo. De esta manera se supone que todas las tribus de Sudan, que habitan en las montañas, son descendientes de ellos, como también lo son los habitantes de Ya- ory. Sin embargo, para algunos esta hipótesis no se sustenta porque ni tan siquiera puede soportar un test histórico ni lingüístico. 3 A pesar del fantástico carácter de la opinión del sultán Bello, en general su declaración de que los yorubas descienden de los remanentes de los hijos de Canaan, que eran de la tribu de Nimrod, demanda una más profunda consideración. La investigadora Miss Mary Kingsley ha discutido tal declaración, y ha alegado evidencia conduciendo a la probable conclusión de que los Benins (y consecuentemente todos los yorubas), eran hijos de Canaan. El Dr. Farrow también ha recogido interesantes hechos sobre las tradiciones, mitos, costumbres, idiomas y sacrificios de los yorubas que muestran distintas huellas Semíticas. Comentando estos hechos dice: “aunque ellos no necesariamente presentan ningún rastro de origen Semítico, todo parece indicar que los hebreos Semíticos y los yorubas negros pertenecen a ramas que en el mismo primer período estaban unidas en un tronco común¨. Sir A. C. Burns, refiriéndose al profesor Leo Frobenius, el explorador alemán de Africa, dice que: “es probable que los yorubas no fueran originalmente de sangre negra¨. Esto sugiere que los yorubas estaban en un tiempo en Asia, y que ésta puede ser considerada su patria original. Y, la probabilidad se fortalece más por el hecho de que el nombre de Nimrod, corrompido por la lengua yoruba hasta “Lamurudu¨, figura destacadamente en la mitología yoruba. Otros consideran a Caldea como la patria original de los yorubas, poniendo énfasis en ciertas similitudes idiomáticas y costumbres entre hebreos y yorubas, y por ello sugieren de una manera indirecta que éstos también pudieran ser de origen palestino. Otras aseveraciones hablan también de que la patria original de los yorubas estaba en el territorio situado entre el Eúfrates y el Tigris. Pero, mientras es dudosa la teoría de que el origen asiático sea correcto, no puede haber duda de que los yorubas estaban en Africa desde una época muy temprana. Una cadena de evidencias lleva a la conclusión que ellos tienen que haberse establecido durante muchos años en aquella parte del continente conocido como el Antiguo Egipto. Y, los hechos que llevan a esta conclusión pueden ser agrupados bajo los siguientes antecedentes de irrefutable valor: A.- Similitud de lenguas entre egipcios y yorubas. B.- Similitud de creencias religiosas. C.- Similitud de ideas y prácticas religiosas. D.- Supervivencia de costumbres, de nombres de personas, lugares, objetos, etc. Como hemos visto, son múltiples las versiones que le atribuyen a los yorubas un origen árabe, partiendo de ciertas semejanzas con los egipcios en cuanto a la lengua, la religión, algunas tradiciones, el arte y otros elementos de la cultura, además del carácter de las ideas de gobierno. Al respecto el investigador inglés P. Amaury Talbot, en su libro “The Peoples of Southern Nigeria¨, describe la existencia de dos oleadas principales de emigrantes yorubas hacia Ìlé-Ìfé. La primera arribó al sur de Nigeria en el segundo milenio aC., Y según él, pudo haber sido debido a movimientos tribales que tuvieron lugar por la conquista egipcia de Arabia. Una rama de los yoruba, actualmente llamada Ìgara, se movió al sudeste hacia la confluencia del Níger y Benue; pero el grupo principal fue a parar a Ìlé-Ìfé. 4 Talbot sigue señalando que la segunda emigración oyó-yoruba, de raza negra, llegó a Ìlé-Ìfé entre el 600 y el 1000 dC. , Procedente del este y que trajeron entre otros utensilios el conocimiento del trabajo en bronce. Al parecer esta segunda ola trajo consigo un desarrollo cultural que dio lugar a las familias gobernantes entre los yorubas. Es el período de Oduduwa, a quien Talbot califica de “líder capaz, cuya personalidad fue tal que le permitió conquistar el pueblo Ìgbo, por aquel entonces habitante de Ìlé-Ìfé, afirmando que de esta forma se establece la primera dinastía yoruba¨. Esta última teoría coincide con la del investigador Basil Davidson el cual refiere que es muy posible que en el siglo VÌ dC., un grupo de emigrantes de la destruida civilización Meroita haya arribado al territorio de Nigeria. Dichos emigrantes, muy posiblemente arribaron a territorio yoruba a través del Sudan desde el Nilo medio al Níger medio. La civilización de Meroe, localizada al sur de Egipto estaba muy influenciada por la cultura de dicha civilización y se ha establecido arqueológicamente que la mayoría de los atributos de la religión egipcia están presentes también en la religión yoruba. La religión egipcia se cree que contenía elementos revelados por seres superiores a los iniciados de Egipto (Pauwels & Bergier, 1968.) Basil Davidson escribe: “Los pueblos migratorios probablemente utilizaban esta ruta (la del Nilo medio y el medio Níger), desde tiempos inmemoriales... hace dos mil años o más. El clima y la vegetación debieron de ser más suaves y acogedores para los viajeros transafricanos que en la actualidad. Y, llegaron por este camino desde el principio de los tiempos; y sus creencias y sus inventos llegaron con ellos¨. Paralelamente a la fuerte teoría del origen egipcio de los yorubas (a nuestro parecer la más sólida y probada de todas), existen otras hipótesis entre las cuales citamos la de M. Omoleya, quien asevera que como resultado de investigaciones arqueológicas llevadas a cabo en territorios de Nigeria, se deduce que la región fue habitada hace más de cuarenta mil años, o incluso, desde 65000 años aC. Lo cual proyecta mucho nuestra imaginación. A esta civilización se la ha considerado, en parte, la cultura No. Y, se asegura que esta cultura fue visitada por los yorubas, entre el 2000 y el 500 aC. También se especula que el grupo estaba dirigido por el rey Oduduwa, quien se asentó de un modo relativamente pacífico en la ya establecida Ìlé-Ìfé, la ciudad sagrada de los yorubas. A este período se le conoce como la Edad del Bronce. Otras teorías sobre el origen de los yorubas pueden ser citadas como por ejemplo la del profesor Babatunde A. Agire, quien sustenta la hipótesis de que el hombre yoruba vivió en algunas partes de Yorubaland, desde el final del período de la Edad de Piedra, y para ello se apoya en los estudios hechos en los restos de un esqueleto humano y artefactos encontrados en Ìwo Ìleru. Esto muestra que la zona fue habitada de manera permanente desde el 8000 aC. hasta el 500 dC. Las teorías que sitúan a los yorubas en Yorubaland o en territorios de Nigeria en épocas tan remotas (¡hasta 65000 años aC!.), temerosamente intentan responder a aquellas interrogantes que muchos egiptólogos se hacen, las cuales son relativas a los orígenes de los propios egipcios. Cómo se puede observar, quienes enfocan el tema yoruba desde este ángulo que pudiéramos llamar “prehistórico¨, insinúan claramente que, ¡los propios egipcios pudieran haber sido descendientes de los yorubas!. 5 Lo analizado anteriormente se refiere estrictamente a la vinculación histórica mirada desde un ángulo puramente científico-especulativo, desvinculado totalmente de las evidencias mitológicas. Si nos guiásemos por estas últimas tendríamos muchas versiones más sobre la génesis del pueblo que nos ocupa. Sin embargo, por considerar este tipo de evidencias “demasiado subjetivas¨, hemos preferido no abordarlas por el momento en el presente trabajo. Para concluir esta primera parte sobre la génesis yoruba nosotros preferimos volver sobre lo que a partir de ahora denominaremos “la conexión egipcia¨, porque defendemos íntegramente la teoría que habla del origen egipcio del pueblo, la cultura y la religión del legendario pueblo africano objeto del presente estudio. Por último, a continuación ofrecemos una relación de nombres de Orisas yorubas y sus deidades egipcias equivalentes, procedente de estudios realizados por J. Olumide Lucas, con lo cual podrá apreciarse claramente la estrecha vinculación existente entre ambos sistemas religiosos. • Oranyan, se relaciona con Ra. • Orisa Beku, se relaciona con Horus Bakhu. • Aje Saluga, se relaciona con Salug. • Olorun, se relaciona con Oni-Orun (Horu), Sr. Del cielo, título de Osiris. • Osun, relacionado con Osi, derivado de Shu y Osiris. • Osu, relacionado con la diosa de la luna Khonsu. • Olodumare, relacionado con Almighty, o Du, la montaña más alta, exaltando al personaje. • Esu, relacionado con Shu o Set. • Obalufon, relacionado con Tifón, Tuphon. • Orisa, relacionado con Horus-Set. • Elegbara, relacionado con Khepera. • Bara, relacionado con Ra. • Amunibuwa, relacionado con Amon. • Oke, relacionado con Horus-Bakhu, el dios de la montaña. • Sugudo, relacionado con Shu, Khu, y Du. • Ìfá, relacionado con Nefer, Openifa. • Orungan, relacionado con Horu. • Orunmila, relacionado con Hrum-la. • Odi, relacionado con Ot y Od. • Obatalá, relacionado con Khnum. • Oduduwa, relacionado con Du, Duat y Mut. • Yemoja, relacionado con una deidad del Nilo. • Olokun, relacionado con Okun, derivación de Khu. • Olosa, relacionado con Sa. • Ogun, relacionado con Khu. • Osun, relacionado con Shu. • Sopono, relacionado con Shu, Sut, Puanit y Punt. • Jakuta, relacionado con Khu y Ptah. • Osumare, derivado de la deidad egipcia Shu. • Orisa Oko, relacionado con Osiris y Min. • Oro, relacionado con Orion. 6 • Ìta, relacionado con Neter. • Eluku, relacionado con Khu. • Agemon, relacionado con Geb-Amon. • Egungun, relacionado con Khu. • Gelede, relacionado con Geb. • Ìbeji, relacionados con unas deidades gemelas egipcias. • Olori Merin, relacionado con la Cuatro Deidades Elementales Egipcias. • Osain, relacionado con Sahu. Los yoruba En la región forestal de la franja costera que se extiende entre el Volta y Camerún se asentaron alrededor del siglo V de nuestra era comunidades rurales que dominaban la técnica del hierro y organizaron una economía agrícola y formas de vida avanzadas y estables. Entre las más importantes estaban las comunidades yoruba, cuyo grupo central, localizado en las regiones de Ìfe, Ìlesha y Ekiti, parece ser el establecimiento más antiguo. Un movimiento de dispersión protagonizado por los grupos que impusieron su supremacía económica, política y cultural sobre los territorios ocupados por comunidades más débiles condujo, probablemente en el siglo XÌÌÌ (dC.), a la formación de los reinos yoruba. Debe resaltarse que la noción de 'reino' asociada a las sociedades africanas de tipo tradicional dista de la acepción occidental con que se designa, por ejemplo, al “reino de Luis XÌV¨. Reinos o estados Los reinos yoruba, constituidos en los territorios habitados por las comunidades de esa etnia -al sur de la actual Nigeria-, deben a ello su homogeneidad lingüística y cultural y el reconocimiento de sus antepasados fundadores. El esplendor alcanzado por dos de los reinos, Ìfe y Oyo, se extendió a las tradiciones de los demás reinos y nubló sus propios orígenes. Hay una cosmogonía basada en el mito de Ìfe que ubica en la ciudad de Ìle-Ìfe la creación de la Tierra y otra que se levanta sobre el mito de Oyo y atribuye a una migración proveniente del este los orígenes yoruba. Lo cierto es que la vida de estos reinos promovió la difusión de instituciones y prácticas entre sus poblaciones y que la ejecución satisfactoria de complejas funciones -agricultura extensiva, comercio de largas distancias, sistemas de tributación, expansión militar, políticas ciudadanas- fue posible por la existencia de estados bien provistos y debidamente organizados Aunque cada rey aspiraba a dejar a su sucesor un reino más extenso, una política tolerante favorecía un clima de intercambio del cual salían culturalmente enriquecidas las comunidades vencedoras y las asimiladas. Dicho intercambio explica, finalmente, la heterogeneidad que se aprecia en la civilización yoruba. Una cultura cuya unidad se realiza a través de la diferencia. Vida económica 7 Los estados yoruba tenían por lo general dimensiones modestas. A veces abarcaban una sola ciudad y sus aldeas vecinas. Es una excepción el reino de Oyo, que se extendió a vastos territorios y adquirió status imperial en el siglo XVÌÌ. Lo común era una población agrupada en asentamientos compactos en torno a la casa de los reyes y mayores en un área rodeada por una muralla que fijaba sus límites. Tenían recursos provenientes de la agricultura, de cierta actividad extractiva y de la artesanía. Concurrían a mercados locales organizados en días alternos para contrarrestar la competencia entre mercados vecinos. Pero artículos de lujo (oro que fluía a las cortes en forma de tributo, marfil, piezas artísticas, nueces, y otros) eran el objeto principal de un comercio de largas distancias, establecido, por ejemplo, con los estados haussa, de las zonas orientales, cuyos beneficiarios directos eran los estratos más ricos -los reyes y sus cortes, funcionarios, comerciantes y profesionales-. En las comunidades más desarrolladas había esclavos -a causa de crímenes y deudas- que trabajaban como servidores domésticos o como peones agrícolas en las tierras comunales. Entre los yoruba de las sociedades tradicionales no se practicó el comercio de esclavos. Sin embargo, la historiografía da cuenta de la existencia de un comercio de esclavos que probablemente se inició en el siglo XV bajo el gobierno de los reyes de Benín en los tiempos en que este reino había devenido un estado poderoso y expansionista. La cosmovisión Un antiguo mito, que revela cómo se transponen al tiempo mítico las determinaciones del tiempo histórico, supone que de Ìfe, ciudad sagrada, se dispersaron los nietos de Oduduwa -fundador legendario- y que sus nombres dieron a su vez nombre y origen a la primera generación de estados yoruba: Owu, Ketu, Benín, Ìlla, Sabe, Popo y Oyo. La cosmogonía yoruba se basa en la idea de una entidad superior, integrada por tres divinidades, Olofi, Oloddumare y Olorun. La primera de ellas creó el mundo, que inicialmente sólo estaba poblado por orixás o santos. Posteriormente repartió su poder (“aché¨) entre los santos (“orixás¨), que en adelante son los encargados de intervenir en los asuntos humanos y de abogar por los hombres ante Olofi gracias a la mediación del juez supremo o mensajero principal, Obatalá. Como en la mayoría de las lenguas del Africa Negra, “el poder¨ se expresa entre los yoruba mediante una palabra -aché-que significa “la fuerza¨, no en el sentido de violencia sino en el de energía vital que engendra una polivalencia de fuerzas y determina desde la integridad física y moral hasta la suerte. En todas las creaciones culturales del conjunto de sus pueblos está contenida la cosmovisión yoruba. Propia de sociedades donde toda acción es realizada, interpretada y vivida como parte de un todo ontológico orgánico -y no precisamente religioso-, esta cosmología encierra la idea de que el orden de las fuerzas cósmicas puede ser perturbado por acciones inmorales cuyo efecto es desequilibrante y perjudicial para la humanidad, para la naturaleza y para sus autores. La unidad entre naturaleza y ética constituye en estas culturas una determinación cósmica y consiguientemente un principio para el ejercicio del poder, una condición de su aplicación benéfica. Los cuentos tradicionales de la cultura yoruba entrañan 8 generalmente el castigo para los gobernantes despóticos y para los irreverentes con las fuerzas de la naturaleza. Vida comunitaria La noción de fuerza está presente además en el ideal que anima la vida de la comunidad y asimismo, la de cada uno de sus individuos: “Defenderse de toda disminución de su ser, acrecentar su salud, su forma física, la dimensión de sus campos, la magnitud de sus rebaños, el número de sus hijos, de sus mujeres, de sus aldeas¨ (Ki-Zerbo, 1979). La comunidad tenía mucho valor en las culturas tradicionales yoruba. Determinaba su concepción de la historia -identificada con la vida del grupo en continuo cambio- y del tiempo -concebido como el tiempo social, vivido por el grupo, que trasciende el tiempo de la persona y que es, a la vez, la dimensión donde el hombre puede y debe entablar incesantemente su lucha contra la decadencia y por el enriquecimiento de su energía vital. Los yoruba pensaban que a lo largo de la historia vivida por el grupo se acumulaba un aché que se encarnaba en objetos. En calidad de atributos de los orixás, estos objetos se trasmitían desde los ancestros a las comunidades sucesivas a través de sus patriarcas o reyes, intermediarios entre el mundo trascendental y el mundo visible. Aunque estaban encabezadas por reyes, las comunidades eran dirigidas por consejos de gobierno en los cuales entraban hombres de diversa condición y donde los ancianos gozaban de una dignidad merecida. Las yoruba, como la mayoría de las comunidades tradicionales africanas, eran sociedades de opinión pública, en las cuales la conducta de las autoridades era vigilada, espiada, y las violaciones de los principios que regían la vida comunitaria se denunciaban siempre mediante críticas y rumores verbales persistentes, tan agobiantes que, a la larga, su autor se encontraba en la obligación de explicarse o dimitir. No debe olvidarse el lugar de las mujeres, cuya autoridad era manifiesta en los límites de la comunidad. El arte yoruba El arte de las comunidades yoruba más antiguas se distinguió por sus creaciones escultóricas, alfareras y ceramistas. Sobresalen los bajorrelieves, las tallas en madera, y las máscaras y cabezas humanas creadas con la técnica del “moldeado a la cera perdida¨, celosamente conservada como herencia divina. Sin embargo, el lugar preponderante en el arte yoruba lo tiene la música. Aunque como forma de arte tiene una significación autónoma y profana, la música está indisolublemente unida a los cultos religiosos y a la liturgia yoruba. Lo más característico es el predominio de los tambores y especialmente la presencia de los tambores “batᨠ(familia), una creación exclusiva del pueblo yoruba. Es una orquesta de tres tambores -“Ìyᨠ(madre), “Ìtótele¨ y “Okóngolo¨- percutidos a la vez por tres tamboreros. Para los yoruba “los batás hablan lengua¨ y cada uno de sus 9 toques -sagrados (toques de batá) o no (toques de bembé)- se inspiran en leyendas atribuidas a los orixás. A la música de los batá se unen coros y danzas litúrgicas. Los coros secundan a los tambores y las danzas son ejecutadas por bailadores que imitan las fuerzas naturales y los poderes atribuidos a los orixás. La integridad sonora y sinfónica de los batá (sonoridad vegetal, por la madera de los tambores; animal, por los cueros con que se sujetan y afinan; mineral, por el conjunto de cascabeles y campanillas), unida a las voces humanas, obedece a un criterio mágico por medio del cual los yoruba evocaban la integridad de las potencias cósmicas. La religión La religión de las sociedades yorubas tradicionales se caracteriza por el culto a un dios superior y a un conjunto de divinidades intermedias, cuya intervención y voluntad rige la vida humana. Los orixás fueron ancestros que en vida acumularon un poder y un saber sobre las fuerzas naturales y humanas en virtud del cual transitaron un día de la condición de hombres a la de dioses. Cada uno personifica ciertas fuerzas de la naturaleza y se asocia a un culto que obliga a los creyentes a ofrecer alimentos, sacrificios y oraciones para aplacar sus iras y atraerse sus favores. La religión yoruba está ligada a la noción de familia en el sentido de que cada culto engendra una hermandad religiosa que se deriva justamente del orixá o antepasado común, la cual abarca a los vivos y a los muertos y supera los vínculos de sangre. Los dioses yoruba recuerdan a los del panteón helénico. Pero aquéllos, en la liturgia, se posesionan de los fieles. En estado de posesión, el dios baila con sus adoradores en complaciente camaradería y a veces habla, adivina, aconseja y profetiza. Entre los más conocidos orixás se cuentan Eleggua -el dios que abre el camino y que en las casas de Africa se coloca detrás de las puertas-; Oggún -inventor de la fragua, dios de los minerales y las montañas-; Oxosi -dios de la caza-; Xangó -el Marte de los yoruba, dios del fuego y de la guerra-; Oxún -la diosa del agua dulce, del amor y de toda dulzura-; Ìemanyá -la reina del mar- ... La trata de esclavos originó, a partir del siglo XVÌ, una migración forzosa hacia las Américas de las poblaciones africanas y de sus culturas. Un complejo de formas de pensamiento y de civilización de origen yoruba se desarrolló en Brasil, en Cuba y en otros pueblos de las Antillas. La Religión yoruba Los yorubas varían perceptiblemente a partir de una región a otra; la misma deidad puede ser masculino en una aldea y hembra en otra, o las características de dos dioses se pueden incorporar a una sola deidad en una región vecina. Estas variaciones se presentaron inevitablemente debido a que toda la mitología en su tiempo fue oral, y si a ello agregamos la incorporación de las diferentes religiones (cristianismo y Ìslam) llegadas del exterior, llegaremos a entender que es muy difícil de hecho él llegar a comprender la fe del YORUBA. Las religiones, sin embargo, 10 comparten una estructura similar, descrita por E. Bolaji Ìdowu como " MONOTEÌSMO DÌFUNDÌDO "; un solo creador-dios omnipotente gobierna el universo, junto con vario cientos dioses situados a un nivel inferior, teniendo cada uno un dominio específico en la vida del YORUBA y como ejemplo lo que se detalla a continuación: Shango, ocupa una posición importante en el panteón de la tribu Yoruba, aunque él lleva a cabo una posición menos importante en tribus vecinas. Shango (Sango y Sagoe también deletreados) se cree crea el trueno, el relámpago y el rayo, este último donde deja huella los sacerdotes, buscan en los alrededores las piedras que el rayo deforma. El Yoruba cree que estas piedras tienen poderes especiales, y dichas piedras son utilizadas en los templos dedicados a él. Para el YORUBA Shango tiene cuatro esposas, cada una personificada por un río nigeriano importante; el río Níger representa a su principal esposa, Oya. Un mito sobre Shango dice que cuando él era humano y gobernaba como el cuarto rey del antiguo Reino Yoruba de Oyo, mató inadvertidamente a su familia entera ( con un rayo) y el remordimiento le hizo suicidarse, convirtiéndose tras su muerte en deidad. Es por esto aunque es considerada deidad el Yoruba no lo considera el dios de más gran alcance o más importante; Se dice que Shangó es adorado para salvaguardar los pueblos de los tornados que frecuentemente asolan el África occidental. Curiosamente, en la adoración del pueblo Yoruba a Olorun (" el propietario del cielo ") u Olodumare (" el Todopoderoso "), entre muchos otros nombres. Contrariamente a lo que se piensa; así como Shango tiene numerosos templos construidos, al igual que se le hacen numerosos sacrificios y tiene un sinfín de sacerdotes; Olorun no tiene un solo templo dedicado a él, y el Yoruba nunca le hace sacrificios, y él no tiene ningún sacerdote. Olorun desempeña el mismo papel que tiene el DÌOS de los cristianos y el dios del Ìslam -- Olorun representa para el YORUBA " el creador de todas las cosas, el Todopoderoso, el donante de la vida y de la respiración y del juicio final de la humanidad ", pero aún a pesar de esto el Yoruba no hace caso al parecer de él en sus vidas cotidianas. Una teoría explica que quizás Olorun apareció y se convirtió para los YORUBAS en el Creador, El Todopoderoso por la influencia de los misioneros islámicos o cristianos, como simulacro de los dioses de esas religiones ( al igual que lo existente en la SANTERÌA). Esto encuentra argumento en el concepto de un dios todopoderoso sobre el cual no pueden relacionar con su realidad cotidiana. Algunas leyendas Yorubas hablan, de Orishala (Obatala, Orisa-nla) y de su esposa Odudua, como deidades que crea el supremo, independientes estas de Olorun el todopoderoso. Una leyenda tiene a Olorun como creador del mundo y este deja después a Obatala y a Odudua para que se encarguen de los detalles finales; otros intérpretes han considerado que Olorun y Obatala son uno e igual a la vez. Obatala es la deidad escultora del ser humano, mientras Olorun, sin embargo, se reserva el derecho de dar la vida a los cuerpos que Obatala. En algunos lugares, Obatala también gobierna sobre las demás deidades, o dioses de menor importancia, como rey, aunque subordinado a Olorun. El número existente de deidades Yorubas se cree existen 401; en verdad, hay más que éstos. La complejidad de su cosmología ha conducido a eruditos occidentales a compararlos a los Griegos antiguos y a su panteón impresionante. Las deidades Yorubas se conocen como orishas, y el dios alto es Olorun. El Yoruba cree que cuando mueren se incorporan el reino de los antepasados donde todavía pueden tener influencia en la tierra. Otros orishas 11 importantes incluyen Eshu, Ogun, el dios del hierro y de la tecnología moderna Entre estas deidades el YORUBA ve al orisha Ogun entre los más importantes. El dios de la guerra, de la caza, Ogun sirve como el patrón de herreros, de guerreros, y de todos que utilicen el metal en sus ocupaciones. Él también preside repartos y contratos; de hecho, en las cortes Yorubas, los devotos juran para decir la verdad besando un machete sagrado a Ogun. El Yoruba considera a Ogun temible y terrible en su venganza; Creen que si uno rompe un pacto hecho ante él, las circunstancias de este acto se verán rápidamente en contra de quien rompió dicho pacto. Una leyenda que ilustra la importancia de Ogun dice del orisha que intento construir un camino a través de la densa selva; Ogun era el único con los instrumentos apropiados para la tarea y fue así que se ganó el ser deidad. Él, sin embargo, no cuidó esa posición, y fue a Obatala quien se le consideró el derecho de ser la deidad más importante. Algunas regiones combinan Ogun con Eshu. Eshu, o Legba como también lo conocen, ha sido identificado equivocadamente por los europeos con el diablo en el pasado. El panteón Yoruba, sin embargo, no tiene ningún dios malvado. Un mito que trata de Eshu nos habla de que él también sirve como el guardián de las casas y de las aldeas. Cuando es adorado en esta forma- posición tutelar, sus seguidores lo llaman bizcocho borracho (" padre "). Shokpona, el dios de la viruela, en su momento un dios importante en las plagas de la viruela que fueron transmitidas por varias guerras entre tribus; el Yoruba también culpó a la cólera de Shokpona de ser el causante de las altas temperaturas, las ebulliciones, y otras enfermedades que se asemejan a síntomas de la viruela. Shokpona era tan temido para los Yorubasa que temían decir su nombre; utilizaron en su lugar otros nombres tales como Elegbana (" tierra caliente ") y A-soro-pelerum (" un nombre que no es propicio decir durante la estación seca "). Los sacerdotes de Shokpona tuvieron un poder inmenso; se creía que podían traer la plaga a sus enemigos, y de hecho los sacerdotes crearon una poción de los tapajuntas pulverizadas y de la piel seca de los que murieron de viruela. Verterían la poción en la casa o una aldea vecina de un enemigo para propagar la enfermedad. Algunos dioses, tales como Olokun, aparecen solamente en ciertas regiones. Olokun (" propietario del mar "), alternativamente un dios o una diosa; una leyenda popular dice de Olokun que intenta conquistar la tierra por medio de una gran inundación. La adoración de Olokun la encontramos en las regiones costeras meridionales. . Esclavitud CUANDO LOS CONQUÌSTADORES, EMPEZARON A LLEVAR A LOS ORGULLOSOS AFRÌCANOS PARA CUBA, REPUBLÌCA DOMÌNÌCANA, HAÌTÌ, BRASÌL Y OTRAS ZONAS, AL PRODRUCÌRSE ESTA GRAN ÌNMÌGRACÌON DE HOMBRES QUE EN SU PAÌS DE ORÌGEN, HABÌAN SÌDO MEDÌCOS, REYES, SACERDOTES, Y LÌBRES SOBRE TODO, SE VÌERON DE LA NOCHE A LA MAÑANA, REDUCÌDOS A LA PEOR FORMA DE EXÌSTENCÌA QUE UN SER HUMANO PUEDA CONOCER LA ESCLAVÌTUD, SEPARADOS DE SUS SERES QUERÌDOS, EN UNA TÌERRA EXTRAÑA, TRATADOS PEOR QUE ANÌMALES.PERO EN ESTOS “CARGAMENTOS¨, VÌNÌERON MUCHOS SACERDOTES QUE COMPRENDÌENDO LA NECESÌDAD DE PRESEVAR SUS CONOCÌMÌENTOS Y SU FE, COMO MEDÌO DE DARLES FUERZA MORAL PARA SOBREVÌVÌR, OPTARON POR UNÌR A TODAS LAS TRÌBUS, Y CULTURAS EN UNA MÌSMA SOCÌEDAD. Y ASÌ TODOS LOS AFRÌCANOS SE CONSÌDERABAN HERMANOS. SE SÌNCRETÌZARON LOS CULTOS, CAMBÌARON LOS NOMBRES PERO EL ESPÌRÌTU ERA Y ES EL MÌSMO. 12 Cuba EN CUBA, LA RELÌGÌÓN PASÓ A DENOMÌNARSE SANTERÌA, POR EL GRAN SÌNCRETÌSMO ENTRE LOS ORÌCHAS, PODEROSOS DÌOSES AFRÌCANOS CON EL PANTEON CATOLÌCO. TÌENE GRAN ÌNFLUENCÌA YORUBA Y BANTU. CONVÌVEN LA REGLA DE OCHA, LA REGLA DE PALO MONTE MAYOMBE (SUBDÌVÌDÌDA EN VRÌLLUMBA, MAYOMBYE, SANTO CRÌSTA DEL BUEN VÌAJE, GUÌNDAVELA, ETC.), ÑAÑÌGOS, SOCÌEDAD ORUN, OZAÌNÌSTAS, ETC. DENTRO DE LOS MÁS PODEROSOS EN LA RELÌGÌÓN ESTAN LOS BABALAWOS, SUMOS SACERDOTES, LOS OZAÌNÌSTAS, Y LOS PALEROS. JERARQUÌA EN CUBA, EN OCHA. 1.-BABALAWO. 2.-OBA. 3.-BABALORÌCHA // ÌYALORÌCHA. 4.-SANTEROS. 5.-ÌYAWOS U OWUROS. 6.-ÌKOFAS //AWOFAKAS. 7.-ALEYOS. Brasil DENTRO DE LAS DÌFERENTES LÌNEAS BRASÌLEÌRAS, ADEMAS DEL ESPÌRÌTÌSMO TAN ÌNFLUYENTE, SE ENCUENTRAN: EL CANDOMBLE, EL BATUQUE, EL CATÌMBO, LA PAGELANZA, LA UMBANDA, KÌMBANDA, ETC. COMO MÁS TEMÌDOS DENTRO DE LA MAGÌA BRASÌLEÌRA SE ENCUENTRA LA KÌMBANDA, QUE CÌERTA GENTE SÌN NÌNGUN CRÌTERÌO NÌ ÌNFORMACÌÓN, ASEGURA QUE SON CULTOS SATANÌCOS, Y EN AFRÌCA EL SATANÌSMO NO EXÌSTE COMO TAL, SÌ NO ECHU ESPÌRÌTU JUGUETÓN Y TRAVÌESO. JERARQUÌA,DENTRO DEL CANDOMBLÉ MAE DE SANTO, PAÌ DE SANTO ÌAKADERÉ BABALEKERÉ EKEDÉ OGAN DE TAMBOR AXOGUN DOFONA DOFONÌÑA ÌABASE MAE CRÌADEÌRA EBOMÌNS ÌAWOS ABÌANS. aití ES REAL, ORÌGÌNARÌO DE AFRÌCAM, DAHOMEY, SÌGNÌFÌCA ESPÌRÌTU, DÌOS, ENERGÌA DE LOS DÌOSES. 13 EL VUDU HAÌTÌANO, TÌENE MEZCLAS DE LOS CONGO, Y DE LOS ÌNDÌOS ARAWAK, Y TAMBÌÉN DEL CATOLÌCÌSMO, CONTÌENE TAMBÌÉN MUCHOS ASPECTOS DE LA FRANCMASONERÍA, DE LA KABALA, LA METAFÌSÌCA Y EL OCULTÌSMO. EJERCÌO UNA TREMENDA FUERZA, PARA QUE LOS HAÌTÌANOS SE DECLARARAN EN REBELDÌA CONTRA SUS AMOS, Y DESDE ESE MOMENTO HA CONTÌNUADO, APORTÁNDOLES ESPERANZA. ALLÌ LA MÌSERÌA POSEE EL RÌTMO ENCANTADO DEL MARENGUE. HASTA LOS CEMENTERÌOS SON OBRAS DE ARTE. LOS SACERDOTES DECLARARON LA GUERRA AL VUDU, HASTA QUE PAPA DOC (DUVALÌER), LA DECLARO RELÌGÌON OFÌCÌAL. JERARQUÌA. HOUGAN (HOMBRE) MAMBO (MUJER) O BOKOR (SACERDOTE VUDU) DEDÌCADO AL MAL PRÌSE DES YEUX HOUNSÌ LAVE-TETE El !incretismo en la Religión Yoruba En muchas oportunidades ha pasado que en las consultas con los oráculos yorubas, el santero o babalawo le dice a la persona que se consulta: "Te defiende Obatalá", y dicha persona pregunta: "¿Y quién es ese de los santos católicos?". Esa situación es una consecuencia del sincretismo yoruba, lo cual nació en la época esclavista cubana. El sincretismo es consecuencia directa de la imposición de los santos católicos por parte de la sociedad europea y se produjo por primera vez cuando los esclavos inteligentemente aparentaron aceptar las imágenes católicas para proteger sus creencias y hasta sus propias vidas, ya que el blanco no aceptaba su religión debido a que pensaban que eran cosas del demonio. Los Yorubas buscaron semejanzas entre sus deidades milenarias y los santos de los blancos y de allí que se diga que Changó es Santa Bárbara, Obatalá es la Virgen de las Mercedes, Elegguá es el Santo Niño de Atocha, Ochún es la Virgen de la Caridad del Cobre, Yemayá es La Virgen de Regla, y así sucesivamente. Es indudable que existen ciertas semejanzas entre la religión yoruba y el catolicismo ( ese es el motivo de que de una manera errada se le llame Santería), si tomamos en cuenta de que en las dos creencias existe un sólo Dios y una serie de santos que lo acompañan en su misión de actuar en beneficio de nuestro mundo y nosotros los humanos, pero manejar el concepto del sincretismo en la actualidad es totalmente erróneo, porque desde el punto de vista histórico, cultural y físico es imposible que los orichas sean llos mismos santos católicos. Pongamos como ejemplo a Changó y Santa Bárbara. El primero llegó a la Tierra en los comienzos de la Humanidad, su apariencia era totalmente africana y viril, además que historicamente se sabe que fue el cuarto Rey del imperio de Oyó. Estas características, además de otras, lo alejan infinitamente de Santa Bárbara, cuya historia publicamos en nuestro número anterior. Si analizamos las dos historias nos 14 percataremos de que hay ciertos detalles casuales como por ejemplo de que los dos tienen que ver con el rayo; por el lado de Changó es su esencia, mientras que en la historia de Santa Bárbara sabemos que un rayo fulminó a su padre luego de que éste la decapitó. Estos detalles fueron los que tomaron en cuenta los yorubas a la hora de disfrazar sus deidades con la imagen católica, pero no quiere decir que sean los mismos. Por otro lado si hacemos un breve análisis de las ceremonias que ocurren dentro del Ìgbodú o cuarto de consagraciones, nos percataremos que en los cantos rituales nunca se nombra a la Virgen de las Mercedes, ni a San Miguel Arcángel, ni a ninguno de los santos católicos, sólo se llaman a los orichas yorubas. Esto ocurre también en los toques de Batá y en cualquier otra ceremonia donde se les canta a los orichas. Este fenómeno del sincretismo tuvo su función en el colonialismo y sabemos que durante mucho tiempo se ha mantenido arraigado en Cuba producto del costumbrismo, pero es necesario que las nuevas generaciones aprendan ese fue un hecho histórico y que en la actualidad no se deben mezclar los orichas con los santos católicos a pesar de que se pueden creer en ambos en forma separada. !anteria Empezaremos por definir lo que significa Sincretismo: Sistema filosófico o religioso que pretende conciliar varias doctrinas diferentes. Esto es igual a fusión, unión, conciliación. Por lo que es preciso determinar que el Sincretismo religioso es el que permite identificar los dioses de una religión con los santos de otra. Nuestros cultos sincréticos son producto del proceso de «transculturación» que ha caracterizado la nacionalidad cubana, descrita en Antropología como «unión entre culturas». Esta no es otra que el proceso de difusión o de influencia de los rasgos culturales de una sociedad, cuando entra en contacto con otra que se encuentra bastante menos evolucionada. Se conforman partiendo de dos concepciones teológicas, legados culturales que heredamos del español y del africano (el menos evolucionado). Del componente español nos llega como religión oficial el Catolicismo y del componente africano nos llegan diversas religiones, por la diversidad de etnias de procedencia carabalí (los que venían de Calabar como los Ìbo, Bras, Ekoy, Brícamos, Oba, Ìbibios, y Efik), los congos (los procedentes de la enorme cuenca del Congo, los Mayombe, Mondongo, Mucaya, Bisongo, Agunga, Cabinda, Motembo, Banguela), los ararás (que venían de las regiones comprendidas entre la Costa de Oro y la de Marfil y se encontraban entre ellos los Ashantí, Fanti, Fon y Mina Popó) y los Yorubas (entre los que sobresalían los Ekiti, Eguadó, Yesa, Agicón, Sabalú, Oyó, Egba y Cuévanos). En sus creencias estaban mezcladas diferentes manifestaciones religiosas como el TOTEMÌSMO (creencia en algún animal como los Totems), el ANÌMÌSMO (culto de los espíritus), y el FETÌCHÌSMO (veneración excesiva y supersticiosa por una persona o cosa). 15 Además, son POLÌTEÌSTAS (adoran a más de un dios) aunque algunos antropólogos los catalogan de MONOTEÌSTAS. También tienen influencias de religiones universales de Sumer y de Egipto, y como el Ìslam, determinados por saludos, costumbres y parte de su vocabulario, etc. El régimen colonial les prohibió el culto de sus religiones a los esclavos, imponiendo oficialmente el catolicismo y de esta forma da comienzo al fenómeno de sincretización (conciliándose varias doctrinas diferentes) que con el tiempo y las difíciles condiciones en que vivían nuestros negros se convierte en una religión nacional de raíces africana y española. Hay quienes se refieren a todos estos cultos como Santería, que no es otra cosa que la cultura Yoruba, Regla Ocha-Lucumí, pero la Santería no lo abarca todo, existen la Cultura Bantú de la Regla Mayombe-Conga (Palo Monte) y la Regla Arará-Dajomi de Arará- Dahomey, de las que hablaremos en su momento. Cuando se emplea el término “Santería¨ en Cuba, no se hace referencia al culto a los santos de la Ìglesia Católica, sino a las creencias de que eran portadores los diferentes grupos étnicos de la cultura africana Yoruba, cuyos miembros fueron traídos a la Ìsla como esclavos. La Santería, también conocida como “Regla de Ocha¨ se conformó, con rasgos diferenciales, en las provincias occidentales de Cuba desde fines del siglo XÌX, y se extendió por la región oriental desde la década de 1930. En este credo, se rinde culto a los orishas - deidades- y a los antepasados, cuyas funciones principales son las de proteger a sus devotos y orientar sus vidas. Para tomar decisiones o mantener determinada conducta, los creyentes se valen de la interpretación de los diversos paradigmas conceptuales recogidos en mitos, leyendas, proverbios y sentencias que acompañan a cada deidad. Las ceremonias son variadas y cumplen determinados propósitos: iniciación, propiciatorias, adivinatorias y fúnebres. Mediante éstas se exteriorizan las concepciones, ideas y representaciones religiosas de los adeptos, quienes las realizan con cierta regularidad ya sea en grupos o individualmente, de acuerdo al caso. Con el culto, el creyente refuerza su vínculo con lo sobrenatural al tratar de lograr la armonía entre las fuerzas del bien y del mal, buscando conquistar la voluntad del objeto de devoción con fines espirituales y materiales. El Babalawo es él más alto representante de la jerarquía. Rinde culto al orisha “Orula¨ • Dueño de la adivinación- y es conocido como “Sacerdote de Ìfá¨. Le siguen en orden descendente otros iniciados que cumplen funciones específicas dentro del ritual, entre ellos, los Babalochas -padrinos santeros-, e Ìyalochas -madrinas santeras-, encargados de efectuar las ceremonias de consagración y de apadrinar a los nuevos adeptos. La Santería carece de templos como las iglesias católicas o protestantes. Sus prácticas religiosas se realizan en las casas-templos, locales generalmente compartidos con las viviendas de los dirigentes del culto, y en los que se conservan los objetos del ritual y las representaciones religiosas veneradas. 16 La trascendencia de la santería en la sociedad cubana no radica sólo en la cantidad de sus seguidores, sino por su aporte de símbolos, ideas, mitos, leyendas y procedimientos a la idiosincrasia y la cultura nacionales. La influencia fundamental de los yoruba sobre nosotros fue ejercida a través de su religión y su imaginación. Su panteón de deidades u orishas sigue siendo vivo e influyente, y motivo de interés por los estudiosos. En África cada orisha estaba vinculado a una región o aldea, ya que se trataba de pueblos distantes y autónomos que vivían en economías cerradas. Así, el culto a estos orishas era un culto local. En el territorio Yoruba se adoraba a Changó en Oyó, a Yemayá en Egba, a Oggún en Ekití y Oridó y a Ochún en Ìjebu. Además de estos cultos locales, había unos orishas que eran adorados por todas las tribus de una región, como Obatalá, de quien todos los gobernantes yoruba se consideran descendientes. La importancia o posición de un orisha depende de cuan grande era la tribu que lo adoraba, o de quanta tribus lo adoraban. En casi todos los casos, los orishas son hombres divinizados después de muertos. El orisha es una fuerza pura, inmaterial, que solo puede ser percibida por los humanos si se toma posesión de uno de ellos. El candidato a la posesión, elegido por el orisha, es uno de sus descendientes. Este es un parentesco espiritual aquí, mientras que entre los africanos era de sangre. "#$or %u& !antería'" Como en la Regla Ocha, de origen yoruba-lucumí, para todos sus actos y rezos se encomiendan a sus Santos-Orishas, se popularizó con el nombre de Santería, pero no por esto dejan de creer que existe un Dios Supremo. Este Dios para ellos es «infinito, inconcebible», pero ajeno a todo cuanto sucede en la tierra, aunque esta sea su obra. Muchos investigadores sostienen que antes de que los africanos se contagiaran con las religiones islámicas y cristianas creían en un sólo Dios, y que después al ser traídos como esclavos al nuevo mundo, e imponerles nuevas creencias sincretizaron al único Dios como Olodumare, considerando que creó el mundo. Algunos creyentes le llaman Olorun-Olodumare, otros creyentes nos dicen que Olofi es el creador de la tierra y todo lo que está en ella como los Orishas, que Olodumare (para Lydia Cabrera es Oloddumare y algunos de sus confidentes le nombraban Oloddumadyé) representa el universo, y hacia él nos dirigimos por medio de Olofi, que es como un «dios escondido» que funden con Jesucristo. Para mencionar su nombre deben primero tocar el suelo con la yema de los dedos y después besarlos (igual que se hace con Yewá, según nos indica Natalia Bolívar en «Los orishas en Cuba»). Olorun u Olorum es el sol, símbolo de energía universal. Cuando un creyente se refiere a Olofi y Olodumare, buscan el sol por ser la creación más visible de la humanidad, considerado él «sustento de la existencia en el plano terrestre», atribuyéndole a este trío una analogía con la Santísima Trinidad cristiana. La mayoría piensan que Olofi es el Creador, se limitó a crear y después a descansar y como es el Dios «más viejo» no se mete en nada, no trabaja, vive retirado, no pide nada; sólo respeto. No baja al mundo. Como lo consideran tan grande no cabe en cabeza de nadie, por lo que no se puede «asentar», y no se le rinde culto, como le hacen a los demás Orishas que comen simbólicamente y bailan a través de sus 17 hijos. Por eso carece aparentemente de gran importancia en las plegarias de los feligreses de este grupo, mencionándose en sus ceremonias mucho a los Santos y muy poco a Olofi. Según uno de sus patakies; Olofi creó el mundo, y la primera tierra que escogió fue Ìlé-Ìfé, que al principio estaba poblada por los Orishas (Santos), más tarde repartió su poder entre ellos, cada uno obtuvo «por méritos reconocidos» lo que le pertenecía: Olokun las profundidades del mar, Orisha Oko los campos sembrados, Oggún los metales, Osaín el secreto de las plantas, etc. Por esto, es que Olofi no interviene en el destino de los humanos, que nacieron después y se fueron expandiendo. Este es un concepto equivalente no sólo para la Regla Ocha, sino también para la Bantú que conocen a Dios por Nsambi, y los Abakuá le llaman Abasí. Cuando y seguidor de regla Ocha sé «hace santo» se le asienta su Eledá en su cabeza. Según relató Natalia Bolívar conjuntamente con Carmen González Díaz de Villegas en Ìtutu, «Eledá es la deidad de quien lo adorará de por vida, cuando se hace santo o ingresa en la Regla de Ocha (...) Eledá podía parangonarse, en cuanto a sus funciones y atribuciones, al Angel de la Guarda de los católicos.» Todos los Santeros y creyentes de la Santería tienen sus vidas sometidas a los caprichos de sus deidades (Orishas), y todo está impuesto a los designios de éstos: amores, enfermedades, accidentes, el nivel económico. Por lo que sí uno tiene problemas en el matrimonio tiene que encomendarse a Oshún, la Diosa del amor, para hacer los remedios que ella indique para el caso. O sea, que todos estos «remedios» o «trabajos» se hacen por mediación de un Santo determinado de acuerdo al problema, pero el creyente sabe que sus cosas se resuelven por la voluntad de Olofi. Según define el Reverendo padre Juan J. Sosa en el artículo «Religiosidad popular y sincretismo religioso» la «Santería es la adoración de dioses africanos bajo la apariencia de santos católicos, resultado de la transculturación y sincretismo religioso de los pueblos del Caribe.» Los Orishas (yorubas), los Mpungos (congos), e Ìnkísus (carabalíes) están por debajo de Dios, «él manda en todos». He aquí la esencia básica de la Regla Ocha y de ahí el nombre Santería puesto por el pueblo a ese culto tan extendido que adora a los Santos. "(uestros Cabildos" Cabildo es el cuerpo de eclesiásticos capitulares de una iglesia, su ayuntamiento y las juntas celebradas por ellos. Pero en Cuba tenemos además los Cabildos que representaban las congregaciones religiosas pertenecientes a una misma etnia, tribu, localidad o nación de negros africanos y sus descendientes criollos, sean esclavos o libres. Fueron como los 'grupos de oración' de las cofradías de los santos que vemos en la religión católica, (la más popular entre los cubanos «La Cofradía de la Caridad.») 18 Especifica José Ì. Lasaga en «Vidas Cubanas Ì» que en la América española la palabra 'cabildo' «se usó para designar, bien el conjunto de las autoridades locales de cada ciudad (alcalde y regidores), bien el edificio en que se reunían, bien él, acto mismo de reunirse. En los 'cabildos cerrados' no se reunían más que las autoridades; en los 'cabildos abiertos' se convocaba todo el pueblo.» Se mencionan en Cuba desde el año 1568. Las autoridades lo permitían, pretendiendo de esta forma fomentar la división cultural de sus esclavos, dificultando la unión entre ellos, pensando que era una simple reunión de los negros en casas determinadas para tocar sus tambores y bailar en los días festivos, invocando a sus 'orishas' o dioses supremos, como en las tradicionales fiestas del Día de Reyes, que los amos le daban el aguinaldo y les permitían salir a pedir a las puertas de las casas principales. Ese día cada tribu aparecía en La Habana con su traje típico y sus instrumentos de música e iban de ventana a ventana, bailando al estilo de su tribu y recibiendo el aguinaldo. Al atardecer todo se acababa como en los cuentos infantiles, el tambor dejaba de sonar y todos volvían a su casa, a su dura faena. El dinero recaudado se guardaba para subvenir los gastos del año entrante para tratar de celebrarlo más grande y más lucido. Relata Lasaga en el libro que antes les mencioné que «cada uno bailaba siguiendo las tradiciones tribales de sus antepasados (identidad tribal), pero era un día de fiesta que celebraban todos los negros (identidad racial) y en que se unía toda la población, negros y blancos, en una festividad religiosa común a todos los cristianos (identidad comunitaria).» Todas las «Naciones» tuvieron sus Cabildos, venían a ser templo de las tradiciones de cada grupo africano, y sociedades muy efectivas de mutuos socorros, pues así los obligaba un juramento religioso. Algunos de estos Cabildos eran realmente relevantes y celebraban ritos de iniciación, funerales, y fiestas abiertas con el simple propósito de diversión. En Cuba los Cabildos estaban en Secciones, por ejemplo: Cabildos de Matanzas, Cabildos de Pogoloti, de La Habana Vieja, de Regla. Todos los que profesaban las religiones Yoruba tenían sus Cabildos, también la doctrina secreta Abakuá, los Ìyesá, los Arará, etc. Los Cabildos se reúnen en fiestas especiales para rendirle Maferefún (homenaje) a un santo específico, por ejemplo el día 8 de septiembre que se celebra el día de Nuestra Señora de la Caridad del Cobre y Nuestra Señora de Regla. Estas ceremonias eran tan grandes que se necesitaban más de un juego de tambores Batá, para que toda la procesión pudiera ir al son de la música, como pasaba en el pueblo portuario de Regla, en la provincia de La Habana desde el día 7 de septiembre al día 8. El 31 de mayo de 1768 el gobernador Bucareli dispuso que se limitase el número de disfraces de 'diablitos' (los iremes de los abakuás que bailaban encapuchados) para despejar las calles de la procesión, y que los mismos debían tener permiso y nombramiento por escrito del mayordomo de la ciudad. En 1799 por orden del Capitán General se les situó a extramuros --lejos de la capital cubana, cuando aquello entre murallas--, por «ruidosas que eran sus fiestas, para evitar efectos nocivos a la población». Otras veces se les prohibían del todo, alegando que eran instituciones que propiciaban la brujería y hacían daño al desarrollo de la civilización, pero todo parecía indicar que algunos Cabildos sirvieron como medio de reunión para actividades independentistas clandestinas. 19 Después del triunfo de la revolución de Fidel desaparecieron totalmente, no sólo los Cabildos, sino que se han suspendido todo tipo de fiestas públicas religiosas, incluyendo las procesiones católicas que se realizaban libremente en las calles de toda Cuba, y en muy pocos casos, se les permite hacer sus toques de tambor en las casas bajo previo permiso de la policía y con horas limitadas. Su objetivo es extinguir todo vestigio de fe y religiosidad para implantar la única creencia posible en un estado totalitario; creer en su máximo líder, en el Partido Comunista y en la Revolución, aunque estos no ofrezcan pruebas de su valor, ni mejoren las condiciones del pueblo, por el contrario las empeoran. Oris)as* +ioses de la !antería El panteón de la Santería cubana es inmenso, más de 400 deidades se ubican a la derecha de “Olofin¨ -el supremo hacedor del universo- y constituyen la representación de los mejores principios morales y afectivos, aunque algunos poseen defectos de menor cuantía según el patrón de los humanos. Otros 200 orishas, francamente malignos y negativos, se encuentran a la izquierda del padre universal Yoruba. Los oris)as m,s conocidos, identi-icados con las -uer.as naturales elementales o -enómenos de la vida, son los siguientes* Eleggu,* Niño de atocha orisha de los caminos y del destino de los hombres. Es el primero de los cuatro guerreros (Elegguá. Oggún, Ochosi y Osun) y el primero entre todos, pues Olofi le dio esa potestad. Protege el hogar y es la personificación del azar. Forma pareja con Echu, el que está presente en todas las desgracias. Ambos se complementan, ya que no puede haber seguridad sin peligro, sosiego sin inquietud. Elegguá lleva collar rojo y negro y Echu, blanco y negro, lo mismo que sus atuendos, consistentes en chaquetilla, pantalón y sombrero. en la mano empuñan el “Garabato¨, una especie de gancho de madera de dos o tres pies de largo. Se sincretiza con el Santo Niño de Atocha o San Antonio de Padua, es el dueño de los caminos o encrucijadas. “Posee la llave del destino, abre y cierra las puertas a la desgracia y a la felicidad. Personificación del azar y la muerte¨. Sus ofrendas son infantiles, como dulces, paletas o juguetes, y significa el comienzo de todas las cosas en su color rojo o negro. Ogg/n* San Pedro Uno de los más antiguos del panteón Yoruba. Dios de los minerales y las herramientas. Patrón de los herreros y herrero él mismo, domina también los secretos del monte y sabe utilizarlos en encantamientos. De gran fortaleza física, personifica al guerrero por excelencia y al hombre irascible y violento. Sus hijos son los ideales para el sacrificio de animales, pues Oggún es el dueño del Kuanagdó (cuchillo). Se viste de mariwó (sayo de hojas de palma) y con una cinta en la cabeza. Empuña un machete con el que corta la maleza por donde transita. Sus collares son de cuentas verdes y negras, y en ocasiones se suman las moradas. Tiene similitud con San Pedro, es el dueño de todos los instrumentos de labranza, por lo que es dios de los metales, y domina la fragua, ostenta un machete el cual hace mover, representando así que corta la maleza, los obstáculos y los 20 impedimentos . Violento y astuto, es la deidad de los minerales, las montañas y las herramientas. Os)ósi * Es comparado con San Norberto, utiliza como atributo el arco y la flecha ya que representa la cacería, es venerado cuando los hombres tienen persecuciones legales o de autoridades. Es mago, adivino, guerrero, cazador y pescador. Obatal,* Virgen de las Mercedes Orisha mayor. Creador de la tierra y de los hombres, es la deidad pura por excelencia, dueña de toda la blancura, de los pensamientos y de los sueños. Hijo de OLOFÌ (Dios) y OLODUMARE (universo) Fue mandado a la tierra por Dios para hacer el bien y para que gobernara como rey del planeta, es misericordioso y amante de la paz y la armonía. Rige la buena conducta y es capaz de aplacar a sus hijos. Todos los Orishas lo respetan y buscan como abogado. No admite que nadie se desnude en su presencia, o se profieran frases duras e injuriosas. Su día es el 24 de Setiembre Deidad de la pureza y por ello dueño de todo lo blanco y de la plata. Creador de la tierra, culminó la obra de Olofin al terminar de formar la cabeza de los hombres, por lo que gobierna sobre los pensamientos y los sueños. Es misericordioso y amante de la paz y la armonía. Todos los demás orishas lo respetan y lo buscan como abogado, pues la misión a él encomendada por Olofin fue la de hacer el bien. Viste de blanco y su collar es del mismo color. Sólo Ayáguna, un Obatalá joven, lleva una cinta roja diagonal en el pecho, símbolo de cuando fue guerrero y limpió su espada para abandonar la violencia. Yemay,* Virgen de Regla Madre de la vida, es dueña de las aguas y representa al mar (en las costas, pues las profundidades del océano son de Olokun) fuente fundamental de la vida en el planeta. Considerada madre de casi todos los orishas, sus castigos son duros y su cólera terrible, aunque actúa con justicia. su vestido señorial es de un azul intenso, igual que las cuentas de su collar, donde se alternan con otras transparentes Representa la maternidad universal. Reina del mar y de las aguas, a ella pertenecen todas las riquezas marítimas. En Brasil se le asocia con la Virgen de la Aparecida y en Cuba con la Santísima Virgen de Regla; en sus danzas imita los movimientos del mar, el diseño de las olas o los violentos remolinos tormentosos de las aguas. Virgen de Regla, te llamo en mi canto, Virgen de Regla de mi devoción, madrecita santa que estás en el agua, que estás en la tierra y en mi corazón. ¡Oh mi Yemayá, quítame lo malo, quítame lo malo y échalo en el mar!* Oc)/n* Santísima virgen de la Caridad del Cobre, Patrona y reina de Cuba Diosa del amor, la feminidad y del río, con el que simboliza la purificación. Símbolo de la coquetería, la gracia y la sensualidad femeninas. Acompaña a Yemayá y fue la que trajo a los hombres el caracol (el primero que habló) para que los orientara por medio del oráculo y lo utilizaran como moneda. Por eso se dice que con ella viene la riqueza. Fiestera y alegre, viste un lujoso atuendo amarillo, con seis pulseras doradas. Su collar es también de cuentas amarillas y ámbar. 21 Señora del amor y la femineidad, dueña de los ríos y mantos fluviales, representa la dulzura, la belleza femenina, se manifiesta con coquetería y en sus danzas revive los suaves movimientos del río, engalanándose para presumir su belleza. El color amarillo y el oro le pertenecen. C)angó* Santa barbara bendita orisha del fuego, del rayo y del trueno; de la guerra; del baile, la música y labelleza viril. Representa el mayor número de virtudes e imperfecciones humanas: trabajador, valiente, buen amigo, pero también mentiroso, mujeriego, pendenciero, jactancioso y jugador. Gracias a un recurso secreto que le preparó Osain, el dios de la vegetación, podía despedir lenguaradas de fuego por la boca con lo que vencía a sus enemigos. De él se cuentan tantas historias que podrían llenar un grueso tomo de atractivas anécdotas. Usa camiseta holgada y pantalón hasta las pantorrillas, todo blanco con ribetes y adornos de color rojo intenso y en su collar se alternan ambos colores. Empuña siempre un hacha doble. Es una deidad mayor, de las más populares tanto en África como en América, en Cuba se le ha asimilado con Santa Bárbara (mártir, patrona de los artilleros). Es un dios del fuego, del rayo, la virilidad, el baile y los tambores y patrón de los guerreros. Su número es el 6 y todas las cosas de color rojo le pertenecen. "A Changó se le atribuyen muchas virtudes y defectos de los hombres. Es buen trabajador, muy valiente, amigo digno de apreciar, adivino; algo mentiroso, mujeriego; en algunas ocasiones jactancioso, pendenciero y jugador... Changó posee también innumerables amantes. Ello no le impide tener sus propias mujeres: Oyá, Obba Yurú y Ochún". Santa Bárbara bendita, para ti surge mi lira y con emoción se inspira ante tu imagen bonita. Virgen venerada y pura, Santa Bárbara bendita, nuestra oración favorita elevamos hasta tu altura.* Oy,* Diosa de las centellas, los temporales y los vientos. Violenta e impetuosa, ama la guerra y acompaña a Changó en sus batallas. Es también la dueña del cementerio, en cuya puerta vive, cerca de Obba y Yewá, las otras “muerteras¨. La distingue el colorido de su saya, de nueve colores menos el negro, y el iruke (especie de escobilla de fibras largas) que blande en su mano derecha. El collar es de cuentas marrones con listas blancas y otra negra más fina en el centro de éstas. 0ggay/ sol,* San Cristóbal Orisha de la tierra seca, del desierto. Patrón de los caminantes, de los automovilistas, de los aviadores y de los estibadores. Patrón de la ciudad de la Habana (Cuba). Su día es el 16 de noviembre. 22 Babal/ ay&* San Lazaro Orisha de las enfermedades venéreas, de la lepra, de la viruela, y en general de las dolencias y afecciones que parece el género humano. Su día es el 17 de diciembre. Ibeyis* San Cosme y San ami!n Los Gimaguas celestiales, quienes gozan del amor filial de todos los Orishas; patrones de barberos y cirujanos. Su día es el 27 de setiembre. Inle* "rcangel Ra#ael Medico de la Ocha. Dueño del río y de los peces; patrón de los médicos. Su día es el 24 de octubre. (an, buru1/* Algunos la consideran madre de Babalú Ayé; Otros, un camino de Obatalá. Es una deidad misteriosa y terrible que vive en ríos, manantiales y cañas bravas. Su día es el 26 de julio. Obba* dueña de lagos y lagunas; guardiana de las tumbas; símbolo de la fidelidad conyugal. Su día es el 25 de noviembre. Oc)umare* Orisha del arco iris. En Africa se le adora como una deidad única; en Cuba se le considera un camino de Yemayá. Oddua* Representa los secretos y los misterios de la muerte, es dueña de la soledad. Su día es el 1 y 2 de enero. Ogg&* Orisha compañero de Changó, patrón de los animales con astas y de los rebaños. O1e* Deidad tutelar de las montañas. Olo-i u Olodumare* Personificación de la divinidad; vive retirado y pocas veces baja al mundo. En Ìfá se recibe Olofi, según la letra que le salga al Babalawo iniciado. No se realiza ningún acto religioso sin la presencia de Olofi. Su día es él Olorun* Es el sol, manifestación más sensible y material de Olofi, porque es la fuerza vital de la existencia. Su día es él Orisdao1o u Oc)ao1o* San $sidro Labrador Deidad de la tierra, la agricultura y las cosechas; patrón de los labradores. Su día es el 22 de marzo. Osain* San Silvestre Es la naturaleza misma y su dueño; cazador y célibe; deidad de la farmacopea. Su día es el 31 de diciembre OYÁ Yansá: ( Virgen de la Candelaria) dueña de las centellas, los temporales y los vientos; dueña de los cementerios, en cuya puerta o alrededores vive. Su día es el 2 de febrero. Ye2,* N%estra señora de los desamparados Orisha que vive dentro del cementerio, entre las tumbas y los muertos. Su día es el 30 de octubre. Yemay, Olo1un* Virgen de Regla Orisha Mayor. Dueño de las profundidades del océano. Es andrógino, y en ocasiones se le representa mitad hombre, mitad pez, 23 aunque es indefinido. Siempre baja enmascarado. Es una deidad poderosa, terrible y sumamente misteriosa, encarna al mar en un aspecto aterrador y extraño al hombre. Según algunos, Obatalá lo mantiene atado en el fondo del mar para que no destruya al mundo; de cualquier forma, todas las riquezas del océano son suyas, por lo que es el Orishas más poderoso en cuanto a dinero, riqueza, etc. Sólo se le ve sin careta en sueños, y entonces, se aparece con la cara redonda, con rayas tribales, ojos saltones muy blancos, con las niñas pardas y las pestañas afiladas. Olokun es Orisha de los Babalawos. Según algunos, después de Oddua, es la más alta representación de Ocha. Se le adora en diferentes formas, según la rama de que se trate. Orula, Orunla u Or/nmila* San &rancisco de "sís Orisha mayor. A su alrededor se ha formado todo un complejo religioso que lo singulariza con relación a todos los demás Orishas. Es el gran benefactor de los hombres y su principal consejero, él les revela el futuro y les permite influir sobre él. Es el poseedor del secreto de ÌFÁ, el oráculo supremo mediante el cual se comunica con éste. Personifica a la sabiduría y a la posibilidad de influir sobre el destino, incluso al más adverso. También es considerado como un gran médico y como uno de los dueños de los 4 vientos, los 4 puntos cardinales y los 4 poderes fundamentales (el sol, el agua, el aire y el fuego). Orula fue el único santo que venció a ÌKÚ (la Muerte). Su día es el 4 de octubre. orisha de la adivinación y de la sabiduría. Rige el culto de Ìfá, el Benefactor, y es quien permite a éste comunicarse con los humanos mediante los babalawos -los sacerdotes de la Ocha-, quienes se apoyan en el Oráculo o Libro Sagrado. Como dueño de la sabiduría, tiene la posibilidad de influir sobre el destino, incluso el más adverso. También es considerado como gran médico y cuenta para ello con el auxilio de Osain, el dios de la vegetación y, por ende, de todos los remedios. Sus seguidores se distinguen por llevar una manilla de cuentas verdes y amarillas. Osun* San '%an (a%tista Representa la cabeza y el alma. Orisha Mayor, actúa como mensajero de Obatalá y de Olofi (Dios). Orula se apoya en él para tener los poderes de la adivinación y el conocimiento real y trascendente. Es el vigilante de la cabeza de los creyentes; no es Orisha de posesión sino de irradiación. No se sube ni se asienta; se recibe cuando se entregan los demás guerreros. No habla por letra del caracol, pero acompaña a los guerreros. Representa la vida misma, porque vive en posición vertical mientras la persona esté con vida, cuando ésta muere, se acuesta, pues pasa a una posición horizontal respecto al plano de la tierra. Su día es el jueves, sus números: 8, 16 y 24. Fecha de celebración 24 de junio. Vocabulario santero Regla de Os)a* Junto con la Regla Lucumi define las distintas vertientes de la santería. Término habitual para definir las prácticas religiosas llevadas por los esclavos africanos a Cuba. Los seguidores de la Osho se encuentran organizados en grupos independientes, sin la complejidad organizativa de otras religiones más jerarquizadas. Su estructura comienza en la relación padrino o madrina con sus ahijados. Continúa en la casa religiosa y llega hasta una rama o tronco independiente que puede llegar a tener o no contacto con otras ramas santeras. 24 Ile Os)a* Templo. El lugar de culto de la santería suele ser la propia vivienda, en la cual se disponen los objetos rituales y representación de los dioses u orishas. Las condiciones en las que llegaron los africanos a Cuba les impidieron construir edificaciones espaciosas al estilo de las catedrales o iglesias de otras religiones. Iya2o* Se denomina así al neófito o iniciado en los ritos de la santería. Durante un año mantienen su condición mientras son atendidos e instruidos por su padrino o madrina de culto. Se les distingue por vestir de blanco durante todo este tiempo y llevar la cabeza rapada y cubierta por un turbante o tapado del mismo color. Babolos)a e Iyalos)a* Son aquellos consagrados a la Regla santera que se dedican a iniciar a aquellos que lo piden o lo desean. Oriate* Es la figura máxima de la jerarquía santera; el sacerdote de la Regla Osha, condición que requiere muchos años de estudio y esfuerzo para penetrar en los recónditos recovecos rituales de la santería. El Oriate es el maestro de ceremonias y supervisor de las iniciaciones en las que actúa como Obá (Rey), encargándose entonces de leer al neófito el lta, o, lo que es lo mismo, el catálogo de preceptos y limitaciones que el iniciado deberá seguir en su futura vida social y religiosa. 3ambores Batas* Elementos de percusión esenciales en el toque de santo o ceremonias santeras. Son el puente de contacto entre los orishas (dioses) y los muertos, sus mensajeros. Los tambores bata acompañan a los cantos, oraciones y bailes rituales y se les tañe horizontalmente apoyados sobre las piernas de los ejecutantes sentados. Oris)as* Deidades afrocubanas. Emisarios de Olodumare o Supremo Creador. Ellos gobiernan las fuerzas de la naturaleza y las cosas de los hombres. Cada uno tiene sus colores favoritos y sus ofrendas y comidas predilectas, que se les debe ofrecer como reconocimiento, a sus favores. Algunos de los más frecuentes en los ritos santeros son: Oshun : Se encarga de los arroyos y ríos y canaliza su fuerza. Yemayá: Su hermana, Hace lo propio con las aguas de¡ mar. Elegba: Dueño de los caminos y puertas de este mundo. Ogún: Dios de¡ hierro y los inventos técnicos, Obatalá: padre bondadoso de todos los orishas y la humanidad. Changó: Dios irascible y astuto que representa la virilidad. Yamayá: Es la madre de todos. Domina la maternidad y la vida del hombre. ebbó, Sarayeye Paraldo: Rituales de diversos grados de complejidad, encaminados a alejar las malas influencias o para procurar el bienestar físico ó psíquico así como los éxitos en los proyectos o propósitos de los fieles. 25 La creación Cada religión tradicional tiene sus propios mitos de cómo Dios creó nuestro universo. Cada religión tradicional tiene sus propios mitos de cómo Dios creó al hombre. También dentro de la Religión Tradicional y/o Ancestral Yoruba existen varias versiones, pero todas ellas contienen los mismos elementos. Estas diferentes versiones pueden en realidad ser una simple firma de Griot, una historia contada mediante diversas formas de expresión, donde lo más importante es el centro de la historia. La historia que seleccionamos como representativa de La Creación y del advenimiento del hombre es una que ha sido generalmente aceptada a lo largo de toda la nación yoruba, aunque nos hemos tomado la libertad de abreviarla en parte. La leyenda dice que al principio, en lo que ahora denominamos Tierra, existía un acuoso pantano no habitable para la vida humana. Allí existían algunas especies de animales, que vivían en el pantano, y de cuando en cuando seres del cielo bajaban una escalera dorada para jugar. Un día Olodumare, quien estaba profundamente enfrascado en sus pensamientos, llamó a Obatalá, su arquitecto jefe y divinidad de más confianza, y le dio la tarea de la creación de La Tierra como hoy nosotros la conocemos. Obatalá, que había acudido previamente a Orunmila, jefe consejero y sabio celestial, para ser adivinado, antes de ser llamado, conocía de la tarea por anticipado. El oráculo avisó a Obatalá de que debía sacrificarse antes de aventurarse a La Tierra y que debían preguntar a Olodumare los términos específicos, si quería concluir su misión exitosamente. Aceptando esta premonición, Él le pidió a Olodumare una gallina de cinco dedos, una paloma, una concha de caracol conteniendo fango o lodo y alguna vegetación. Con el contenido, cuidadosamente puesto en un saco, Obatalá descendió al acuoso pantano. Cuando encontró un área donde reposar cómodamente, vació la suciedad del caracol en una pila. Soltó a la gallina, quien comenzó a diseminar la tierra, lo que cubrió una gran área. Entonces soltó a la paloma, quien dejó caer partículas de la vegetación la cual fue plantando en varios intervalos de tierra. Después de cuatro días, Obatalá regresó al cielo y le dijo a Olodumare que había concluido su labor. Entonces Dios envió al camaleón a caminar sobre La Tierra y examinar el trabajo que Obatalá había desarrollado. El camaleón regresó donde Olodumare y le dijo "Ìfe" (suficiente). El camaleón también le informó que La Tierra aún no estaba lo suficientemente seca y lista para ser habitada. Olodumare le pidió entonces a Obatalá que regresara de nuevo a La Tierra. Pero esta vez le entregó las semillas de algunos árboles para que fuesen plantados y éstos son ahora sagrados para los yorubas. Los árboles en cuestión fueron el "Ìgbe", "Ope", "Dodo", "Ìroko", "Peregun" y "Ayan". Cuando Obatalá se estableció en La Tierra, al sitio que Él habitó le llamó Ìlé-Ìfé, el cual se convirtió en la capital de yoruba, y en el lugar donde el hombre existió por primera vez. Obatalá regresó al cielo después de plantar los árboles y pidió a Olodumare que hiciera llover sobre La Tierra, lo cual Él hizo. Nuestros mayores nos cuentan que a Obatalá le fue asignada una segunda misión por el Todopoderoso, la cual consistió en darle forma a la vida racional que 26 eventualmente pudiera habitar en La Tierra. Las instrucciones específicas de Obatalá fueron para crear el ser físico. Obatalá pidió una vez más la ayuda de Orunmila, y esta vez preguntó a nuestro Padre cuál era la forma más adecuada para moldear a las criaturas. Fue orientado por el oráculo que las criaturas debían pertenecer a una raza, la raza humana, y que la misma pudiese reproducirse. El oráculo describió los órganos de reproducción que debían crearse. Obatalá fue avisado que debía hacer sacrificio para obtener éxito. Se dice que debido a su ansiedad y entusiasmo por comenzar este nuevo proyecto, a Obatalá se le olvidó hacer sacrificio. Obatalá pidió a Olorun la mejor arcilla, y Dios le instruyó que debía volver al cielo cuando la obra estuviese finalizada y que esta vez le daría vida a las formas humanas, dándole al hombre "Asé", y otros atributos, incluyendo el libre albedrío, para que pudiera sostener el hombre una vida limitada en la tierra, después de la cual los hombres debían volver a casa, a Orun (el cielo). Obatalá enérgicamente comenzó su labor, moldeando al hombre primero con un órgano masculino y a la mujer después, dándole sus pechos y sus órganos reproductores que les permitieran la procreación de la raza humana. Después de varios días de continua labor, Obatalá comenzó a tomar vino de palma para apagar su sed y pronto estuvo intoxicado. Con sus ojos medio cerrados y sus sentidos minimizados por la fatiga y el vino, Él valientemente luchó por terminar su labor, pero desgraciadamente, las formas eran ahora deformes e irregulares. Nuestro folklore dice que Oduduwa, quien después se convirtió en progenitor de Yoruba, vino a través de Obatalá en su estupor y decidió finalizar la labor. Cuando el trabajo estuvo finalmente completo, todas las divinidades se reunieron para testificar la creación del hombre. Olodumare llegó y pidió a las divinidades que se cubrieran los ojos para darle vida al hombre. Todas lo hicieron excepto Orunmila, quien fue elegido para ser testigo del destino del hombre. Olodumare entonces respiró vida dentro de las formas y algunas vinieron a la vida con deformidades. Olodumare en su infinita sabiduría cargó a Obatalá, el arquitecto del hombre, con ser el patrón de los lisiados, los jorobados, los ciegos, los albinos, enanos y todos los otros que pudieran estar afligidos por alguna deformidad física en cualquiera de sus manifestaciones. Él también dijo,; "de ahora en adelante será tabú para Obatalá tomar de espíritus fuertes". Poco tiempo después, Olodumare informó a sus divinidades que debían viajar hacia la tierra y establecerse allí. Eventualmente les fue dicho que debían cohabitar este planeta conjuntamente con el hombre. Obatalá fue nuevamente elegido para gobernar a los hombres y a las divinidades en La Tierra. Olodumare también envió a Orunmila para darle información, consejo y guía a Obatalá, las divinidades y el ser humano. (acimiento del mundo Olofi se paseaba por el espacio infinito donde solo había fuego, llamas y vapores. Sin embargo, aburrido de no tener a alguien con quien hablar, decidió que era el momento de embellecer este sitio, descargando su fuerza de tal forma que el 27 agua calló diluviando. Hubo partes sólidas que lucharon contra este ataque, así quedaron grandes huecos en las rocas, el océano, donde reside OLOKUN, deidad a la que nadie puede ver, y cuyas formas la mente humana no puede imaginar. En los lugares más accesibles del océano brotó Yemayá con sus algas, estrellas de mar, corales, peces de colores, coronada con Ochumare, el arco iris, y vibrando con sus colores azul y plata. Se la declaró madre universal, madre de todos los Orishas; de su vientre nacieron las estrelles y la luna; este fue el segundo paso de la creación. Olordumare, Obatalá, Olofi y Yemayá decidieron que el fuego extinguido por algunos lares y que por otros estaba en su apogeo, que fuera absorbido por las entrañas de la tierra, por el temido y venerado Aggayú Solá, en su representación del volcán y los misterios profundos. Mientras se apagaba el fuego, las cenizas se esparcieron por todas partes formando la tierra fértil, cuya representación es Orichaoko, que la fortaleció, y permitió cosechas y el nacimiento de los arboles, frutos e hierbas. Por sus bosques deambulaba Osain, con su sabiduría ancestral sobre las propiedades curativas de las hierbas, palos y maderas. Donde cayeron las cenizas, nacieron las ciénagas; de sus aguas estancadas surgieron las epidemias y enfermedades, personificada por Babalú Ayé, Sakpaná o Chapaná. Yemayá decidió darle venas a la tierra y creó los ríos, de agua dulce y potable, para que cuando Olofi quisiera creara al ser humano. Así surgió Ochún la dueña de los ríos, del amor, de la fertilidad, de la sexualidad. Las dos se hermanaron en un lazo inseparable de incalculable riqueza. Obatalá, heredero de las órdenes dadas por Olofi, cuando decidió vivir detrás de Olorun, el sol, creó al ser humano. Y aquí comenzó el caos; Obatalá, tan limpio y puro comenzó a sufrir los desmanes de los hombres, los niños se limpiaban en él, el humo de los hornos lo ensuciaban, como él era el todo, le arrancaban tiras pensando que era hierba. Obstinado por toda la suciedad, se elevó, y se alojó entre las nubes y el azul celeste. Desde allí observó el comportamiento del ser humano, se dio cuenta que el mundo se poblaba desmesuradamente, al no existir la muerte, decidió crearla, como había creado a los demás Orishas llamándola Ìkú. La primera población de La 3ierra La historia del primer intento de Dios por poblar La Tierra ya ha sido contada. Es una historia que se mantiene en un profundo secreto. Podemos encontrar que aún hoy en día, los babalawos , sacerdotes de Orunmila, hablan sobre estos temas en un susurro. Nosotros hemos sido avisados que nunca debemos revelar o escribir el nombre de las primeras divinidades que desobedecieron a Olodumare, ya que algunos hombres de mala naturaleza, las invocaron para alterar y destruir la magnifica vida que existía. Unos pocos escritores con acceso a sacerdotes de Ìfá han escrito alguna información sobre la desobediencia de estas divinidades, pero ninguno de ellos conoce o puede imaginar el fondo, no las consecuencias de su acto. Es a través de este guardado conjunto de eventos, que los poderes místicos dados por Dios a los seres sobrenaturales armados con el regalo del libre albedrío abordaron el propósito de Olodumare y finalmente dividieron sus fuerzas en campos opuestos. Este caos y desarmonía dificultó la alineación de La Naturaleza. 28 Fue a través de este conjunto de eventos que un peligroso mundo para el hombre fue creado y su viaje a través de él fue hecho peligroso. De acuerdo con la leyenda de Ìfá de Benin, doscientas divinidades viajaron del cielo a La Tierra, lo cual fue llamado Divinósfera. Antes de dejar el cielo, Olodumare les dio a ellas las siguientes reglas, a las cuales debían atenerse: No ir en contra de mis directivas porque no estoy físicamente presente. No olvidar que toda La Creación debe responder a mí. No hacer a otros lo que ustedes no quieran que les hagan a ustedes. No matar. No robar. No mentir. No tomar venganza contra algún otro. A medida que el tiempo corría, los conflictos se presentaban entre las divinidades. Estos conflictos no eran siempre amigables. Llegó un momento en que muchas de las divinidades fueron contra la carta de instrucciones de Dios. Ambos, Obatalá y Orunmila, sintieron que la situación se escapaba de sus manos, y después de algunas discusiones entre ellos, decidieron que Obatalá debería regresar al cielo y hacer un reporte de cuanto estaba sucediendo. Obatalá retornó al cielo y contó a Olodumare sobre los problemas en la Divinósfera. Después de escuchar el reporte de Obatalá, Olodumare envió a "Elenini" (El Obstáculo), una de las divinidades más poderosas, a verificar el relato de Obatalá. Al llegar a la Divinósfera, Él vio el comportamiento de las divinidades. No solo verificó lo que contó Obatalá sino que regresó asustado de que las divinidades pudiesen terminar en una guerra entre ellas. Con Obatalá ausente la situación había empeorado. La vida se hacía intolerable, ya que nada podía desarrollarse sin la cooperación de los otros. Ellos decidieron que debían pedir una audiencia con Olodumare. Ellos pedirían la autoridad divina (el Asé), con la cual ellos pudieran encausar el advenimiento de las cosas. También pedirían a Olodumare que permitiera al hombre venir a La Tierra a servirles. Uno por uno ellos regresaron al cielo y dejaron La Tierra. Una vez en el cielo, ellos pidieron estos favores a Olodumare, quien se los concedió. Él les recordó nuevamente que ese era el código de conducta que ellos debían seguir y que debían atenerse a ese código. Él habló con voz muy fuerte cuando dijo: "El fallar en atenerse a mis reglas les ha causado sufrir mi cólera". La mayoría de las divinidades quedó satisfecha con los resultados de esta reunión y estaban listas a regresar a La Tierra. Pero a algunas las advertencias de Olodumare les entraron por un oído y le salieron por el otro. Solo Esu estaba disgustado. Él sentía que las divinidades debían tener ese poder de "Asé", pero aquello debía de ser una dispensa. Él explicó sus razones a las divinidades, pero no le quisieron escuchar, entonces Él le planteó el caso a Olodumare, quien no estuvo de acuerdo. Él sintió que aquel no era el tiempo de aprovechar su poder místico. Esu derrotado, hizo voto de crear dificultades a cualquier divinidad que no le pidiera su apoyo en cualquiera de sus tentativas. 29 Las divinidades regresaron a La Tierra con sus seguidores, pero la situación no mejoró. Cada vez se ponía peor. Se hacían complots contra Obatalá y contra Orunmila. Talmente parecía que La Tierra entera era un campo de batalla por una parte u otra. Era claramente obvio que las divinidades estaban inadecuadamente preparadas para enfrentarse a los problemas de supervivencia de La Tierra. Esto disgustó mucho a Olodumare y ordenó a Ìkú (La Muerte), que viniera a La Tierra. Su misión era hacer regresar a aquellos quienes fueran responsables del conflicto. La Muerte no tuvo éxito en su misión, ya que estaba autorizado para hacer regresar a los seguidores de las divinidades pero no a las mismas divinidades. Con sus seguidores destruidos por La Muerte, las divinidades descubrieron que no podían desplegar su máximo potencial. En ese momento La Muerte había roto la columna vertebral de las divinidades negativas, quienes por ese tiempo ignoraban totalmente las leyes del cielo. Seguidamente Olodumare decidió enviar el Ìnfortunio para separar las divinidades obedientes de las desobedientes. El Ìnfortunio apareció en La Tierra con una estrella roja que descendió desde el cielo. Él visitó a cada una de las divinidades y a aquellas que encontró violando las leyes de Olodumare, las convirtió en una hoja y las echó en su bolsa. Al tercer día Él visitó a Obatalá y a Orunmila y les contó lo impresionado que estaba de las divinidades desobedientes. Él les dijo que Olodumare no había diseñado el mundo para ser una vergüenza del bienestar de la imagen y reflexión de Dios y que éste podía destruir el mundo antes de permitir que continuara existiendo de aquella manera. Cuando le preguntaron al Ìnfortunio qué había hecho con las divinidades descarriadas, Él respondió: "Yo no tengo el poder de destruirlas, por lo que las he apresado por toda la eternidad, a no ser que Olodumare decida lo contrario". Obatalá le pidió entonces al mensajero de Olorun, que fuera paciente y benevolente y que no fuera tan frío. Le explicó que esas divinidades erradas necesitaban un poquito más de tiempo para sentar la cabeza. El Ìnfortunio sonrió y le dio su bolsa a Obatalá, la cual contenía todas las divinidades erradas y le dijo: "Estuve hecho para comprender que este es tu dominio, así que estos son tus cargos. Si tú los liberas tú deberás afrontar las consecuencias de tus actos. Debes saber que Olodumare no está contento". Y con estas palabras Él desapareció en un pestañeo a reportar al cielo. Después de algunas horas, Obatalá liberó a las divinidades prisioneras, solo para descubrir que estaba cometiendo un gran error, Las divinidades mostraron hostilidad y enfado contra Obatalá, quien ellas pensaban que había conspirado con el Ìnfortunio para capturarlas. En lugar de agradecer y elogiar a Obatalá, le profirieron abusos y trataron de destruirlo. Las divinidades erradas declararon entonces una guerra abierta a las divinidades obedientes, con lo cual dejaron claro en el acto, que iban claramente en contra de las leyes de Dios. Olodumare entonces dijo: "¡No más! ¡Es suficiente!". Envió a Esu a decirle a las divinidades obedientes que subieran a la cima de una palmera que sorpresivamente apareció frente a la casa de Obatalá. Cuando estuvieron todas en la cima de la palmera, fueron succionadas por el cielo. Olodumare entonces desató una terrible lluvia día tras día sobre La Tierra, para anegarla y destruir el mundo. 30 Ese fue el final de la Divinósfera y del primer intento de habitar La Tierra. La leyenda dice que la ira de Olodumare destruyó a las divinidades desobedientes y a sus seguidores, pero su esencia sobrevivió. Y, es a partir de esta indestructible energía negativa, que se formaron las primeras fuerzas del mal. Oluwo Ìfayomi Odulana Agbede Epega Ogg/n O445( (San Pedro) Orisha mayor. Es un Santo violento y astuto, es el Dios de los minerales, las montañas y las herramientas. Patrón de los herreros, mecánicos, ingenieros, físicos, químicos y de los soldados. Representa al recolector, al cazador solitario y andariego, que vaga por el bosque y conoce todos sus secretos. Domina los misterios del monte como un brujo. Simboliza al guerrero comedor de carne, brusco, bárbaro, y bestial, que va evolucionando al agricultor sedentario. Comedor de animales domésticos, viandas y frutos. Es el dueño de las llaves, las cadenas y las cárceles. Sus números son el 3 y el 7 en combinación. Sus días el martes y el miércoles, también todos los días 4 de cada mes. En el Dilogún de la regla de Ocha es Ogundá (letra mayor que representa el Nº 3). Está considerado como una de las personificaciones más antiguas de los Yorubas. Sus colores son: verde, negro y morado. Oggun nos protege de todos los accidentes relacionados con metales. Nos libra de las operaciones quirúrgicas, de las guerras, y nos garantiza trabajo ya que es el único Orishas que se representa por 9 herramientas de trabajo. Es incansable, trabaja las 24 hs. Del día. Su día es el 29 de junio. Oggún, es el dueño del hierro. Se trata de un orisha irascible y solitario, que se encargó de abrir paso a los demás orishas cuando bajaron a la tierra. Con su machete infatigable cortaba cuantos troncos y malezas le salían al paso. Vivía con sus padres (Obatalá y Yemú) y sus hermanos Ochosi y Elegguá. Oggún estaba locamente enamorado de su madre y trató de violarla varias veces, cosa que siempre se encargó Elegguá de evitar. Al final Oggún se las arregló para conseguir su propósito, pero fue sorprendido por su padre Obatalá, y antes de que este pudiera decir nada, el propio Oggún dijo: "Yo mismo me voy a maldecir. Mientras el mundo sea mundo lo único que voy a hacer es trabajar para la Ocha." Después de esto se fue al monte con la única compañía de sus perros, se escondía de los hombres y solo su hermano Ochosi el cazador consiguió verle. Oggún trabajaba sin descanso produciendo hierros, pero estaba muy amargado y a disgusto consigo mismo y se dedicó a regar polvos ofoché para que la tragedia dominara el mundo. En esa época fue cuando Ochún se metió en el monte, lo atrajo a sí con sus cantos y le hizo probar la miel de la vida. Con esto Oggún perdió su amargura y dejó de hacer ofoché. Oggún es un orisha mayor. Violento y muy astuto, es el dios de los minerales, las montañas y las herramientas, así como el patrón de los herreros, mecánicos, ingenieros y soldados. Simboliza al guerrero comedor de carne, dominador de los misterios del monte. 31 Es el dueño de las llaves y las cárceles. Se considera una de las personificaciones más antigua de los yoruba. Sus colores son el negro, el verde y el morado. Sus collares llevan cuentas verdes y negras alternas de siete en siete. En Matanzas son rojas y moradas. Su ropa es de color morado, con un gorro aplastado y un cinto con fibras de palma que simboliza la protección contra lo malo. Sus hijos son los hombres violentos e impulsivos. Luchadores que nunca se dan por vencidos. Son imprevisibles y difíciles de tratar pero a la vez sinceros. Sus santos católicos son San Pedro, San Pablo, San Juan Bautista, San Miguel Arcángel y San Rafael Arcángel. En Brasil San Antonio de Padua y San Jorge (Río de Janeiro). En Haití San Jacobo el Mayor. Oggun violento y astuto guerrero máximo por exelencia. Su misión es guerrear por nosotros en la religión y en la vida. Se le considera el Orisha del hierro, nace de la entraña de la tierra. Es el dueño de las montañas y las herramientas. Solitario y andariego, es uno de los Orishas mas viejo y respetado en la religión Yoruba. Conocedor de los secretos del monte simboliza al guerrero comedor de carne, brusco, bárbaro y trabajador incansable que no perdona las ofensas y nunca abandona el combate ni pierde las esperanzas. Oggun esta condenado por su propia lengua a no domar ni de ida ni de noche mientras el mundo sea mundo. Oggun personifica al guerrero incansable capas de interceder para proteger a los suyos en los momentos más difíciles de los abatares de la vida. En la tierra vive con Ochosi en la puerta del ile para que nada malo entre en la casa sus días martes y miércoles y se sincretiza con San Pedro y San Miguel Alcanger. Re.o* Oggun Oggun Arere Oggun Susulona Oggun Fina Malu Okiala Kuelde Oggun Ala Juriowo Oggun Shibiriki Oggun Auya We Oggun Ala Jeriowo. Hablar de Oggún es hablar de justicia, de fortaleza y de rudeza. Es uno de los orishas más antiguos y en cierto momento fue el jefe de las demás deidades. Se cree que Oggún data de la edad prehistórica de los metales, elemento que le pertenece. Ìncluso las leyendas yorubas dicen que él fue el que abrió el camino con su machete para que los otros orishas vinieran a la Tierra. Es propietario de la esencia del trabajo, esto se origina en un patakí en donde Oggún era el hijo más rebelde de Obatalá y Yembó. Ellos vivían junto a Elegguá, Ochosi, Ozun y Dadá. Obatalá salía a trabajar todos los días y dejaba a sus hijos en la casa, siendo Ozun el encargado de vigilar todo lo que acontecía. Oggún era el que más trabajaba y por ello tenía cierta autoridad en la ausencia del padre, lo que aprovechaba para mantener a sus hermanos bajo su mando. Un día Oggún se enamoró de su madre y la forzó sexualmente, pero cómo Elegguá le decía a Ozun que lo vigilara y lo reprendiera, Oggún lo sacó de la casa y le dio mucha comida a Ozún, incluso la ración de Elegguá. Esto se repitió durante varios días hasta que 32 Elegguá esperó a Obatalá fuera de la casa y le dijo: "Hace días que no como". "¿Por qué?, le preguntó Obatalá. "Porque Oggún me botó de la casa para poder acostarse con mi madre". Al día siguiente Obatalá regresó a la casa más temprano y comprobó lo que Elegguá le había contado. Este lloró mucho y llamó a la puerta, Oggún abrió y Obatalá se disponía a maldecirle y éste se adelantó y le dijo: "Babá, no me maldiga porque yo mismo lo voy a hacer. Mientras el mundo sea mundo, yo Oggún, trabajaré sin descanso de día y de noche". A lo cual Obatalá respondió: "Ashé to". Por ello es que este santo es el apropiado para realizar trabajos en la religión yoruba, especialmente a la hora de quitar una brujería ya que para él es algo injusto y a partir de lo que sucedió con Obatalá y Yembó, se convirtió en un oricha justiciero para rectificar su error. Además es el que supervisa los juramentos y los pactos para que los mismos sean efectuados con rectitud. Oggún vive en los lugares más recónditos del monte y según las historias no gusta mucho de relacionarse con la civilización, de allí se origina su carácter iracundo. Sólo Ochún fue la que logró sacarlo de su territorio porque en los pueblos necesitaban de su arte en la construcción de las herramientas de trabajo. Por ello es que se deben realizar ciertas ceremonias en el monte antes de consagrar en ocha a uno de sus hijos, para sacar su energía de allí y que viva en el fundamento sagrado del nuevo iniciado. Cualquier persona puede tener el fundamento de Oggún, lo cual se recibe junto con Elegguá, Ochosi y Ozun y la ceremonia puede realizarse luego de que el novicio se haya iniciado con los collares de Ocha. Él, junto a los orichas nombrados anteriormente, conforman los llamados "guerreros", dicho nombre se debe a que estos santos son los que ayudan a las personas a guerrear en la vida cotidiana para alcanzar la estabilidad y la armonía. En las fiestas de santo, cuando hay tambores batá, en ocasiones posesiona a uno de sus hijos y baila de una manera violenta moviendo los brazos como si tuviera un machete en la mano. En esos momentos hay que dejarle el torso desnudo y vestirlo con un mariwó de palma. Dicen las historias que Oggún tuvo que vestir de esa forma luego de que Changó se apoderara de sus ropas en una de sus incontables batallas. Como ya hemos explicado, las personas asumen la personalidad de su ángel de la guarda u oricha tutelar. En el caso de Oggún sus hijos son de carácter fuerte, son voluntariosos y a veces gustan de la soledad. Cuando hay una situación que les disgusta no la admiten bajo ninguna circunstancia. Son muy dedicados al trabajo, a veces hasta en una forma exagerada. Son toscos y no piensan a la hora de enfrentarse en una pelea, sea discutiendo o a golpes. Estas son características naturales que los hijos de Oggún deben controlar cuando se presenten, por ello se les recomienda que no usen armas y que no abusen de las bebidas alcohólicas. Debido a su dominio sobre el hierro, es el protector de los herreros, carniceros, mecánicos y militares. En la tradición yoruba ningún cazador sale a la sabana sin rendirle tributo a Oggún, igualmente los guerreros que van a la guerra. Esta deidad rige también a los presos debido a que posee las llaves que abren y cierran las cárceles. En este sentido las personas deben cuidarse de no andar en situaciones ilícitas porque Oggún es el que encierra a las personas. Así como Elegguá y otros orichas tienen caminos, Oggún también los posee. Al 33 respecto podemos citar los siguientes: Oggún Onile: Es campesino y cría animales. Oggún Valenyé: Se dedica a la siembra. Oggún Alawedé: Es el más temperamental de todos y siempre anda de mal humor. Oggún Awanile: Es el que vive en el monte y nunca sale. Oggún Chivirikí: Es uno de los más feroces, es carnicero y no se le debe dar sangre muy frecuentemente. Es un eterno celoso de Changó por el amor de Yemayá. Oggún Aladá: El que vivía con Yemayá. Oggún Arere: Es el que forja los metales. Oggún Oke: Es el dueño de las montañas. El color emblemático de Oggún es el verde y el negro, con esos colores se hacen sus collares, su ropaje y se adornan todos sus atributos. Las personas que lo poseen deben hacerle ofrendas al igual que Elegguá. A este oricha le gusta el aguardiente de caña, el tabaco, la miel y las frutas, en especial las uvas y la patilla. En Africa Oggún es un oricha sumamente importante y entre los yorubas representa la justicia absoluta. Por ello es frecuente observar que cuando se realiza una corte de justicia se le pide al que va a declarar que jure que va a decir la verdad sobre un trozo de hierro, en lugar de hacerlo sobre una Biblia. Los yorubas creen con mucha firmeza que cualquiera que jure en falso o viole un convenio, Oggún impartirá su justicia lo cual termina en un horrible accidente. En esa lejana tierra los santuarios dedicados a Oggún se encuentran al aire libre al pie de árboles sagrados como el Peregún o el Akoko, allí se realizan ceremonias muy complejas en donde no faltan los bailes y la posesión de varios hijos del santo al mismo tiempo. En América el culto a esta deidad se ha perdido, sólo se hacen ceremoniales de envergadura cuando se va a consagrar en santo alguno de sus hijos. Lo que se realiza acá simplemente es la entrega de un fundamento en una cazuela de hierro, acompañada de siete herramientas del mismo metal que representan el trabajo bruto. 34 Eleggu, ELE4450 6EC57 (Niño de Atocha) Orisha mayor. Tiene las llaves del destino, abre y cierra las puertas a la desgracia o a la felicidad. Es la personificación del azar y la muerte. Portero del monte y la sabana, es el primero del grupo de los 4 guerreros. (Elegguá, Oggun, Ochosi, Osun) ganó con Olofi (Dios), Obatalá y Orula suficientes privilegios para ser el 1º . Ningún Orishas le antecede, porque el mismo Olofi dijo: "siendo tú el más pequeño y mi mensajero, serás el más grande en la tierra y en el cielo y sin contar contigo, nunca será posible hacer nada". Sus días son los lunes y los martes y todos los que, en el calendario, caigan en 3. Se le celebra el 6 de enero y el 13 de junio. La pareja Elegguá- Echú, constituye la expresión mística de la inevitable relación entre lo positivo y lo negativo. Para los Yorubas, la casa significa el refugio por excelencia, el lugar privilegiado contra los abatares del destino. En su misma puerta reside Elegguá, marcando con su presencia la frontera entre dos mundos: el interno de la seguridad, y el externo, del peligro. Pero no puede haber seguridad sin peligro, ni tranquilidad sin inquietud y, por eso, la pareja Elegguá Echú es indisoluble, a pesar de su oposición. Elegguá es hijo de Okuboro que era rey de Añagui. Un día siendo todavía un chaval, vio una luz brillante con tres ojos, que estaba en el suelo. Se acercó y vio que era un coco. Lo cogió y se lo llevó a palacio, contó a sus padres lo que había visto y luego tiró el coco detrás de una puerta. Al rato, todos se asombraron al ver la luz que salía del coco. Al cabo de tres días Elegguá murió. Todos le cogieron mucho respeto al coco, que seguía brillando. Pero el tiempo pasó y la gente se olvidó del coco. Con el tiempo, el pueblo iba cada vez a menos, hasta que llegó a una situación desesperada. Para hacer frente al mal momento, se reunieron los viejos del lugar para meditar sobre la causa de sus males y hallar la solución. La conclusión después de mucho meditar, fue que los males del pueblo se debían al abandono del coco, que al buscarlo, vieron efectivamente que se hallaba vacío y comido por los bichos. Los viejos acordaron hacer algo perdurable, y pensaron en colocar una piedra de santo en el lugar donde murió Elegguá y ese fue su nacimiento como orisha. Se trata de un orisha mayor, que tiene las llaves del destino y personifica el azar y la muerte. Como orisha es hijo de Obatalá y Yemú y es el primero de los cuatro guerreros (Elegguá, Oggún, Ochosi y Osun. Ganó con Olofi, Obatalá y Orula suficientes méritos para ser el primero y ningún orisha le antecede porqué el propio Olofi le djio: siendo t) el m!s chi*%itito y mi mensa+ero, ser!s el m!s grande en la tierra y en el cielo, y sin contar contigo n%nca ser- posible hacer nada. La figura de Elegguá se encuentra muy ligada a la de Echu. Echu es la encarnación de los problemas de los hombres, una especie de satán, pero no propiamente, 35 porque no debemos olvidar que ningún orisha representa conceptos puros y todos admiten contradicciones Así, la pareja Elegguá-Echu representa la mítica relación entre lo positivo y lo negativo. En la entrada de las casas reside Elegguá, para proteger el refugio familiar de la entrada de Echu, el vagabundo que lleva consigo los problemas. Los colores de Elegguá son el rojo y el negro, que representan la vida y la muerte. Sus ofrendas son ron, tabaco, maíz tostado, coco, pescado ahumado, etc... también es una ofrenda muy especial sacrificarle un ratón. Los hijos de Elegguá son inteligentes y hábiles pero poco escrupulosos. Se dan a la depravación y la corrupción. El timo, la estafa y las intrigas políticas les garantizan el éxito en la vida. Su santo católico equivalente es el Niño de Atocha y San Antonio de Padua. Eleggua es el Orisha que tiene las llaves del destino y abre o cierra la puerta a la desgracia o la felicidad. Eleggua es la personificación del azahar del futuro o el porvenir portero del monte y de la sabana es hijo de Obatala y Yemú. Cuenta la historia que cierto día estando Olofi muy enfermo y siendo infructíferas las medicinas de todos los orishas que trataron de aliviarlo. Eleggua pidió a su madre que lo llevara ante Olofi asegurando que él lo curaría. El pequeño Orisha escogió yerbas para preparar un brebaje que hizo que Olofi tomara con una larga mueca en su cara pero rápidamente Olofi comenzó a sanar y a fortalecerse. Agradecido Olofi le dijo siendo tú el mas chiquito y mi mensajero serás el mas grande en la tierra y en el cielo y sin contar contigo nunca será posible hacer nada. Ordeno a los orishas mayores que se dieran a Eleggua las primicias en todas las ofrendas y le entrego una llave haciéndolo dueño de todos los caminos que tiene la vida. Eleggua posee un carácter burlón e infantil que puede relacionare con los inesperados virajes del destino, las alternativas, las decisiones, unas veces con resultados felices y otros desgraciados. Elegua personifica ese carácter totalmente impredecible del azahar que nos abre o nos cierra los caminos de la vida. Su numero es el tres, su día el lunes y el martes. Su fiesta se celebra el 13 de julio. Se le sincretiza con el Santo niño de Atocha, San Antonio de Padua y el Anima Sola. Re.o* Ebua Eshu Alaguana Nikokoribilla Balatento No Maniko Maniko Endoro Ìku Yelete Barakillelu Eshu Afra LE DABAN CULTO EN LA REGÌÓN DE KETÚ, ES EL MENSAJERO DEL DÌOS PRÌMORDÌAL QUE PARA NOSOTROS SE LLAMA OLOFÌ. ABRE Y CÌERRA LOS CAMÌNOS DE LA VÌDA Y DEL DESENVOLVÌMÌENTO DE LA PERSONA, EL SACERDOTE PUEDE UTÌLÌZARLO PARA AMBAS COSAS. ES EL PORTERO DEL MONTE Y DE LA SABANA. SE REALÌZA (FUNDAMENTA) EN UNA CAZUELA, CARACOLA O FORMA CON OJOS Y NARÌZ, SUS CUENTAS SON DE COLOR ROJO Y NEGRO, REPRESENTANDO LA VÌDA Y LA MUERTE, EL PRÌNCÌPÌO Y EL FÌN. OFRENDAS, EL RON, TABACO, MAÌS TOSTADO, PESCADO AHUMANDO, MANTECA DE 36 COROJO, GOLOSÌNAS Y VELAS. VÌVE EN LAS ENCRUCÌJADAS. EN PALO SÌNCRETÌZA CON TATA NFÌNDA. ELEGUA CON LUCERO. Al igual que Changó, Elegguá es una de las deidades más conocidas dentro del panteón Yoruba. Sus poderes no tienen límites, aseveración que se fundamenta en la virtud que tiene de controlar los diferentes caminos existentes en el Universo. Por lo tanto, si hay un bien o una suerte para nosotros de parte de cualquiera de los diferentes Orichas que habitan las esferas superiores junto a Olofi, será imposible que esta suerte llegue si nuestras relaciones con Elegguá no se encuentran en armonía. En otras palabras, si Elegguá no está conforme con el trato que se le ha dado, no se podrá disfrutar del bien que los Orichas nos darán e incluso estaremos desprotegidos ante el ataque de las fuerzas espirituales negativas. Elegguá es un oricha sumamente controversia y lleno de infinitos misterios, y debido a su manera de manejar las situaciones, la mayoría de los creyentes le ha dado el calificativo de ser una deidad que hace tanto el bien como el mal. De esta manera se puede observar una dualidad en esta deidad siendo la parte positiva la esencia de Elegguá y la negativa su contraposición la cual es llamada Echu. Este tradicionalismo está aunado al hecho de que Elegguá, al igual que los demás Orichas, es uno solo pero tiene diferentes caminos o personalidades que desarrolló durante su pasantía por la Tierra. Basado en esto se asegura que los caminos de Elegguá van desde el príncipe, misericordioso y justo, siendo Echu el que se caracteriza por ser malvado y pendenciero. Gracias a este análisis podemos decir que Elegguá es la deidad que reside en la frontera entre el bien y el mal, dominando cualquiera de estos dos planos y, siendo fiscal e intermediario, mantiene el equilibrio para que todo marche bien. Cuando este equilibrio se rompe, Elegguá en su papel controlador, actúa en su forma positiva o como Echu para tornar todo a la normalidad. Muchos se preguntarán, ¿cómo puede Elegguá en su manifestación como Echu colaborar con el bien?, pues la respuesta está en los diversos patakíes de Ìfá donde podemos observar la acción de Echu haciendo cosas negativas, pero si analizamos en profundidad estas situaciones observaremos que estas maldades llevan a la reflexión produciendo al final efectos favorables en función de enaltecer el bien. Se puede decir entonces que Echu, dentro de su naturaleza negativa, colabora con Olofi y los Orichas a mejorar la calidad de vida de los humanos. Todo esto parece contradictorio pero esa es la esencia de Elegguá, ya que él es el "rey de las contradicciones". Para ilustrar esta dualidad Echu-Elegguá recordemos aquel famoso patakí de Eyiogbe en donde se separan dos grandes amigos. Allí Echu, a la vista lógica de nosotros los humanos, actuó de una manera malvada y despiadada separando a dos amigos que sentían que su amistad era tan profunda que nada ni nadie los podía separar. Ante esta situación Echu sembró una ilusión en sus mentes creando una confusión que luego se convirtió en una fuerte discusión que separó finalmente a los dos amigos. Echu con esta situación creó un ejemplo para la posteridad demostrando que el orgullo, la soberbia y la inmadurez son aspectos negativos que deterioran al ser humano. De esta manera podemos analizar lo antes expuesto como una maldad hecha por Echu para escarmentar a dos personas y buscar su 37 mejoramiento. Eleggu, y su relación con I-, La relación de Elegguá con Ìfá siempre a sido sumamente estrecha, quizás comienza cuando dicha deidad cuida y alimenta a Orula en el momento en que éste se encontraba enterrado al pie de un árbol como consecuencia de la furia de Obatalá. Elegguá le salvó la vida a Orula y a partir de ese momento se hicieron compañeros inseparables, llegando a serlo hasta en el manejo del oráculo de Ìfá en donde Orula consulta su rica sabiduría y Elegguá canaliza las soluciones de los problemas comunicándose con los demás Orichas y portando los mensajes entre el cielo y la tierra, además haciendo que los ebboses tengan resultados satisfactorios. Los diferentes caminos de Elegguá Como nos hemos referido en anteriores ocasiones, algunos Orichas poseen "caminos", los cuales son las diferentes manifestaciones o personalidades que tuvieron cuando habitaron la Tierra. Elegguá es uno de los que tienen más caminos los cuales pasan de la centena. A continuación citaremos algunos de ellos: - Elegguá Laroye: Vive detrás de las puertas de las casas en un envase de barro. Le agradan las ofrendas de frutas, dulces, aguardiente, tabaco, dinero, entre otras cosas. Es amante del baile y es burlón y malcriado. Es guardián de Ochún siendo además el que más anda con Oggún y Ochosi. Por su relación con Ochún, también se le puede encontrar en la orilla de los ríos, donde se puede hacer ebbó dándole de comer junto a la oricha dueña de las aguas dulces y la riqueza. Este Elegguá es gran hablador por lo tanto es el que normalmente se acerca a las consultas para definir el destino de las personas a través del oráculo de los caracoles de los santeros, aunque también acompaña a Orula mientras este trabaja con el oráculo de Ìfá. - Elegguá Abailé: Es el mensajero de las casas de santo y es el que se encarga de transportar los ebboses a los lugares que dictaminan Elegguá Laroye. - Elegguá Baralayiki: Este Elegguá es muy glotón, siempre hay que estarle haciendo ofrendas, en especial aguardiente. Es de la tierra de Oyó y también trabaja con Ìfá. Es tramposo y hace cualquier cosa por comida. Muestra de esto relata un patakí del signo Ogunda-Ìroso en donde Elegguá Baralayiki agobiado por el hambre se robo un chivo y se lo comió. Luego calumnió a Ozun, siendo este último culpado por el delito que cometió Elegguá. - Echu Achikuelú: Es un Elegguá que vive en las cuevas y en los túneles bajo tierra. La persona que recibe su fundamento debe ponerlo sobre tierra o dentro de un hoyo destapado y atenderlo allí. A él pertenece el oro y las piedras preciosas, elementos que no pueden faltarle. Este es uno de los pocos caminos de Elegguá que come palomas, pero hay que tener cuidado al dársela porque existe una ceremonia especial para hacerlo. - Echu Akileyó: Es el Elegguá que acompaña a Changó. Es alborotador, valiente y estimula a Changó para que pelee. 38 - Echu Alagwana: Este Elegguá tiene pacto con los muertos. Es el que castiga a losirresponsables, a los crueles y a los malvados. Cuando alguien que este o no dentro de la religión Yoruba hace algo indebido, Echu Alagwana lo castiga provocando accidentes, dolencias, trabas, mala suerte, etc. Es brujo y vive en los lugares más recónditos del monte, en los parajes solitarios y en las encrucijadas de los caminos. A pesar de sus características "malignas", este Echu siempre advierte antes de que ocurran los males que difunde. Así como es malvado también es benevolente lo cual demostró cuando ayudó a Babalú Ayé cuando éste fue castigado por Obatalá por querer difundir la viruela. En este patakí Echu Alagwana mostró el camino a Babalú para que se encontrara con Changó y Orula quienes lo ayudaron posteriormente. - Echu Afrá: Es el Elegguá que acompaña a Babalú Ayé. Es de la tierra Arará y es el que silba en las esquinas y en los lugares solitarios. - Elegguá Agbanuké: También es de la tierra Arará y es guardián de las casas brindando protección a sus habitantes. Trabaja con Ìfá al igual que Laroye y Barakinkeño. Es el protector de los Babalawos y lleva un Ochosi en la frente para identificarlo. Fue el que ayudó a Orula a demostrar su clarividencia ante Olofi. - Echu Alaketu: Fue el rey de la ciudad de Ketu, en Africa. - Echu Ñangui o Yangui: Es el padre de todos los Echu. Fue el hijo que Ochanlá le concedió a Orula. Este Echu es el que le brinda fortaleza, firmeza y estabilidad a Ìfá debido al pacto que este hizo con Orunmila. - Echu Baraiñé: Nace en Obara Melli y es el compadre de Changó. - Elegguá Barasuayo: Es el que a veces acompaña a Laroye detrás de las puertas de las casas. - Echu Beleké: Es brujo y tiene pacto con Ozain. - Echu Griyelú: Es el que mantiene vivo a los pueblos. Nace en el signo Okana-Fun y se desarrolla en Osa-Unle. Come una paloma al nacer que es el equivalente a las 101 que Olofi sacrificó para estabilizar el nacimiento de las primeras naciones que poblaron la tierra. Oric)a popular En la práctica de la regla de ocha, Elegguá es una deidad de profunda importancia, bien sea en las ceremonias generales o a la hora de las consultas, ya que él es el que habla a través del oráculo de los caracoles utilizado por el santero en la adivinación. Allí los orichas comunican a Elegguá los problemas que tiene la persona que se consulta así como las soluciones para resolver las situaciones. Los colores que identifican a este oricha son el rojo y el negro. Sus collares están hechos con cuentas de estos colores y también son rojas y negras las telas que se usan para hacer el traje y el trono que se usan el día en que se consagra un nuevo 39 santero que tiene como ángel de la guarda a Elegguá. Es importante que cualquier persona relacionada con la religión Yoruba reciba a Elegguá, para que pueda atenderlo y así poder recibir los beneficios que da este oricha, los cuales son básicamente abrir los caminos de la prosperidad, la salud y los aspectos positivos de la vida. Elegguá junto con Oggún y Ochosi forman la base donde se sostiene todo ser humano en el tránsito por la vida. Para recibir dicho fundamento se debe consultar los oráculos adivinatorios de la religión para saber el momento apropiado para recibirlo. Al igual que los collares de santo, Elegguá debe ser entregado en las ceremonias secretas de la regla de ocha por Babalawos o santeros debidamente consagrados, luego se debe atender diariamente ofreciéndole: manteca de corojo, aguardiente, humo de tabaco y una vela. También se le pueden ofrecer frutas, especialmente guayabas, cambures verdes y cocos, además se le ofrendan calabazas para la evolución económica, y no deben faltarle los dulces, las sardinas asadas, el maíz tostado, la miel y cualquier otra comida que se quiera compartir con él. Mientras se le hacen las ofrendas se le toca una maraca y se le pide por las soluciones a los problemas o simplemente por mejoras en la vida. En ese momento se debe pedir con mucha Fe evitando los caprichos porque a los orichas no se le debe molestar con peticiones banales. Elegguá es una deidad que vive generalmente en el monte, aunque también se le puede encontrar en las encrucijadas, los caminos y las esquinas. En las fiestas de santo, cuando se le ofrece un toque de tambor batá a los Orichas, en ocasiones posesiona a alguno de sus hijos convirtiéndose en el alma de la fiesta, en ese momento se divierte haciéndole bromas a los presentes mientras baila y come lo que le ofrecen. Después de ciertos estudios sociológicos se ha llegado a la conclusión de que las personas poseen ciertos aspectos de la personalidad de su ángel de la guarda u oricha regente, por lo tanto se puede decir que los hijos de Elegguá son abocados a las actividades comerciales en donde buscan las oportunidades para ganar dinero fácil y prontamente, por lo que deben tener cuidado en no caer en la tentación de realizar actividades ilegales o en el vicio del juego. Son sumamente intranquilos debido quizás a la gran energía que los envuelve, por lo que generalmente se les debe consagrar en ocha para canalizarlos. Poseen la característica de tener un apetito desmedido y no desperdician una oportunidad donde puedan crear una confusión o son irresistiblemente atraídos por la misma. #8ui&n es Eleggu,' Elegguá, es el Santo Niño que sostiene al mundo en su mano. Es Hijo directo de Olofi, Dios Todopoderoso y creador. Es el dueño del camino, es quien lo abre o lo cierra. Es la puerta que conduce a todas partes. Le están consagrados el número 3 y el Lunes como día de la semana. Como niño que es, caramelos, golosinas y frutas son ofrendas agradables a Él. Sus colores son el rojo y el negro; por lo cual también se le puede agradar vistiendo prendas de estos colores; aunque solo fuese en la ropa interior. Elegguá va acompañado por dos guerreros Oggun y Ochosi. Esta alianza se denomina "Los Tres Guerreros". Es especialmente protector con los niños y también con los animales, es extremadamente sensible a sus problemas y todo lo que les atañe, quizás porque son los seres más vulnerables de la creación. No 40 responde a peticiones que contengan en algún modo el mal o puedan desencadenarlo, Eleggua es un niño en estado puro, su inocencia es tal que el mal no puede alcanzarlo. Por esto los que se le acercan con fines perversos no pueden conectar con El, es más, cualquier petición que se le haga, y que a la postre pudiese ocasionar algún perjuicio a la persona objeto de la petición El no la concede aunque haya sido hecha de manera bien intencionada. Su sitio dentro de una casa esta detrás de la puerta, él la protege de todo lo que viene del exterior. Las virtudes más valoradas por Él son la Honestidad y la Fidelidad, y la FE es la fuerza que alimenta su poder. Oc)osi OCO!I (San Norberto) Orisha mayor. Hijo de Yemayá. Patrón de los que tienen problemas con la justicia, mago, adivino, guerrero, cazador y pescador. Su Nº es el 3 y habla en el Dilogún por el 2 (Eyioko) sus días son el lunes, miércoles, y los 4 de cada mes. Su nombre es Ochosi Ode Mata. Con Ochosi se hace ebbó para salir bien en las operaciones quirúrgicas, y para asuntos relacionados con la justicia, pues él tiene relación con Abata, Santo que es parte de ÌNLE (médico de la Ocha). Se le incorpora como atributo el bisturí, San Rafael, cuernos y patas de venado, etc. Vive en la puerta de la cárcel. Su día es el 6 de junio. Ochosi es el mejor de todos los cazadores y sus flechas no fallan nunca. Sin embargo en una época la espesura del monte le impedía llegar hasta sus presas. Desesperado por esto consultó a Orula y este le dijo que hiciera ebbó(*). Ochosi y Oggún eran enemigos porque Echu había sembrado cizaña entre ellos, pero ambos se encontraban con problemas similares, porque aunque Oggún era muy rápido habriéndose camino entre la maleza, los animales le oían y escapaban. Oggún también había consultado a Orula obteniendo la misma respuesta. Así estaban en el monte cada uno por su cuenta haciendo ebbó cuando se encontraron y se pusieron a hablar. Se contaron sus problemas mutuamente y entablaron amistad. Estaban hablando cuando a lo lejos pasó un venado. Rapidísimo Ochosi le lanzó una de sus flechas que le atravesó el cuello dejando muerto al animal. "Ya ves" suspiró Ochosi, lo he matado pero la espesura me impide llegar e él. Entonces Oggún cogió su machete y de forma veloz abrió camino entre ellos y el venado. Muy contentos llegaron al animal y lo compartieron. Desde entonces hicieron un pacto en casa de Orula, en el que expresaban que el uno sin el otro no era nada y que se necesitaban mutuamente par vivir. Por todo esto es que Ochosi, el cazador, siempre anda con Oggún, el dueño de los hierros. Ochosi es un orisha mayor, hijo de Yemayá. Patrón de los que tienen problemas con la justicia, es mago, adivino, guerrero, pescador y cazador. Con Ochosi se hace ebbó para salir bien en las operaciones quirúrgicas. Su collar más común es con cuentas de coral aunque a veces van alternadas con cuentas de color azul prúsia. 41 Sus hijos son el prototipo de cazador primitivo, hombres rápidos y siempre atentos. Amantes del cambio y las nuevas empresas. Sus santos católicos son San Alberto y San Norberto. En Santiago de Cuba es Santiago Arcángel. Su día es el nueve de Noviembre. (*) ebbó: Trabajo de Santería, ceremonia que puede ser de ofrenda o de sacrificio o de purificación. Los paraldos son ebbos para quitar la muerte. Los ebbos son para refrescar, cumplimentar, enamorar a los orishas en las cuestiones más sencillas, desde un baño con flores y yerbas hasta poner dulces a las deidades. Este trabajo va dirigido al bien y no es compromisorio. Tampoco se tiene que estar iniciado en la religión para realizarlo. shosi Orisha hijo de Yemayá patrón de los que tienen problemas con la justicia mago adivino guerrero, cazador y pescador. Se le nombra por invocarlo Ochosi Odemata. Su presencia es garantía para salir bien en las operaciones quirúrgicas, pues él tiene relación con Abata santo que es parte de Ìnle medico de la Osha. También Ochosi es conocido como el mejor de los cazadores, sus flechas certeras siempre dan en el blanco y es rápido como el rayo. Ochosi tiene pacto secreto ante Orula con Oggun y Elegua los cuales forman el trío inseparable, Los Guerreros . Su numero es el cuatro su día es el martes y se sincretiza con San Norberto. Re.o* Rezo: Oshosi Ode Mata Da Mata Figoru Oshosi. ORÌGÌNARÌO DE LA REGÌÓN DE KETU (NÌGERÌA), REPRESENTA EL GUERRERO, CAZADOR Y PESCADOR POR EXCELENCÌA. PROTEGE DE LOS PROBLEMAS DE JUSTÌCÌA. ES LA JUSTÌCÌA DÌVÌNA. FORMA PARTE DEL CONJUNTO DE GUERREROS Y VÌVE CON OGUN EN LA CAZUELA DE HÌERRO. SU FÌESTA SE CELBRA EL 6 DE JUNÌO. SUS COLLARES SON CUENTAS DE CORAR. SUS ATRÌBUTOS TODO LO RELACÌONADO CON LA CAZA Y LA PESCA. $0309I 6LEYE(+07 Hubo un tiempo en que Ochosi y Oggun vivían enfrentados porque Echu se había encargado de sembrar cizaña entre ellos. Ochosi era el mejor de los cazadores, pero la espesura del bosque le impedía recoger las presas. Oggun tenia un problema similar. Aunque era capaz de hacer un trillo más rápido que nadie, no conseguía matar a sus presas, ya que se le escapaban. Fueron a consultarse con el brujo de la tribu, y este le dijo a Ochosi, que tenía que hacer un trabajo, coger una piedra y tirarla al lado de un tronco. Ochosi cogió esta piedra y en el primer tronco que vio la tiro, dándole a Ogun en la cabeza. Al principio 42 discutieron, pero se sentaron a conversar sobre su problema. Mientras hablaban divisaron un venado. Ochosi tiro su flecha, atravesando al animal y Ogun cogió su machete y abrió un camino, para llegar hasta la pieza, la cuál disfrutaron juntos. Desde este momento pactaron que vivirían juntos. Entre los santos u orichas yorubas Ochosi representa la imagen del cazador, por lo tanto es el encargado de la manutención de los pueblos, esto se ha visto desde el principio de la historia porque la cacería fue la primera actividad que el hombre usó para subsistir, de este hecho se puede deducir la antigüedad de este oricha. Ochosi es el cazador por excelencia y su trabajo en la religión yoruba consiste en cazar las oportunidades y el bienestar para favorecer a las personas que poseen su fundamento, además de cazar a los malos espíritus y las brujerías para protegernos. Es uno de los orichas que conforman los llamados "guerreros" junto a Oggún y Ozun, de hecho es el compañero inseparable de Oggún, lo cual se ve reflejado en la siguiente historia: "En el principio de los tiempos, Oggún deambulaba solo por el mundo portando su machete y abriéndose camino por el monte. A pesar de que era hábil con su instrumento de trabajo pasaba hambre debido a que cuando cortaba el monte hacia tanto ruido que alertaba a los animales que tenía cerca y estos se alejaban rápidamente. Ochosi vivía cerca y también tenía un problema, este era muy buen cazador y siempre atinaba a sus presas pero cuando trataba de llegar al animal cazado se tardaba en llegar por lo tupido de la maleza y al llegar ya el animal no estaba, se lo había llevado otro animal rapiñero. Pero llegó el día de que Oggún y Ochosi decidieron unirse porque se dieron cuenta que cada uno tenía la solución del problema del otro. Así lo hicieron y mientras Ochosi cazaba lanzando sus flechas desde larga distancia, Oggún llegaba rápidamente a las presas gracias a la habilidad con que manejaba el machete abriéndose camino por el monte." En otro patakí se demuestra que Ochosi es el oricha encargado de impartir justicia, lo cual asume debido a un error cometido en contra de su madre cegado por la soberbia. El patakí dice lo siguiente: "Un día Ochosi llegó a su casa muy contento luego de cazar sus aves preferidas. Dichas aves estaban prisioneras en una jaula y cantaban sin cesar. Ochosi volvió a salir para continuar cazando y su madre llegó a la casa topándose con las aves prisioneras. Ella se centró tanto en el cantar de las aves que sintió su anhelo de libertad y las soltó de su cautiverio y se fue a la plaza de mercado a comprar alimento. Cuando Ochosi llegó a su casa y no encontró a sus aves fue tal la soberbia que lo invadió que lanzó una flecha al aire mientras decía: "Que se clave en el corazón de aquel que liberó a mis presas". La flecha viajó y viajó por los cielos hasta que alcanzó el corazón de su propia madre. Cuando este se dio cuenta de lo sucedido su arrepentimiento fue tal que juró que a partir de ese momento se encargaría de impartir justicia." Por esto Ochosi rige en las cárceles junto con Oggún, oricha del metal. Entre los dos se encargan de poner prisioneros a los que de verdad merecen estar tras las rejas. Muchos piensan que como Ochosi y Oggún se encargan de la justicia, ellos pueden 43 liberar a cualquier persona de la cárcel o evitar que entre en la misma y por ello hacen trabajos con estos dos orichas para conseguir la libertad de un preso, pero esto es muy relativo porque si la persona es culpable de un delito, de dichos trabajos lo que puede resultar es que la persona tarde más en salir o entre más rápido, a menos que ellos decidan darle la libertad midiendo el estado de conciencia del preso, o sea que estén seguros de que no va a involucrarse más en algún delito. Recordemos que ellos van a juzgar a las personas según los hechos, por el contrario si la persona está presa y no cometió delito alguno, Ochosi y Oggún lo sacarán rápidamente de su cautiverio. El símbolo de Ochosi es un arco preparado para lanzar una flecha, está hecho de hierro y siempre va en el caldero de Oggún. Este símbolo representa el pacto de unión entre estos dos orichas y se recibe junto con Elegguá luego de que la persona se inicia en la religión con los collares de ocha y junto a Ozun conforman los llamados "guerreros" que son los orichas que nos ayudan a "guerrear" en la vida cotidiana. Posteriormente se puede recibir el fundamento del oricha que lleva un proceso más elaborado, puede ser de Addimú o de cabecera, si la persona es hija de este oricha y este por supuesto lo recibirá el día que se consagre como santero u Olo Ochosi. Los hijos de Ochosi, al igual que los de Oggún y Oyá, son difíciles de ver consagrados en santo. Son personas muy tenaces y no están tranquilos hasta que alcanzan lo que se han propuesto. Tienen buenos sentimientos y son respetuosos de la religión. Ochosi come todo lo que se le ofrenda a Oggún y además pájaros cazados y aguardiente anisado. Sus collares son hechos con cuentas azules y color miel, además se le ponen caracoles, aunque hay personas que prefieren ponerle el símbolo del arco y la flecha del que hablamos anteriormente. A pesar de que muchos no le dan la importancia debida a este oricha, Ochosi es fundamental en el desarrollo de toda persona. El trabajo en conjunto con Oggún es innegable y como Oggún es el dueño del trabajo y su actividad es constante, podemos deducir que Ochosi trabaja en la misma proporción por lo que se debe tomar en cuenta en los momentos de premura. Osun O!5( (San Juan Bautista) Representa la cabeza y el alma. Orisha Mayor, actúa como mensajero de Obatalá y de Olofi (Dios). Orula se apoya en él para tener los poderes de la adivinación y el conocimiento real y trascendente. Es el vigilante de la cabeza de los creyentes; no es Orisha de posesión sino de irradiación. No se sube ni se asienta; se recibe cuando se entregan los demás guerreros. No habla por letra del caracol, pero acompaña a los guerreros. Representa la vida misma, porque vive en posición vertical mientras la persona esté con vida, cuando ésta muere, se acuesta, pues pasa a una posición horizontal respecto al plano de la tierra. Su día es el jueves, sus números: 8, 16 y 24. Fecha de celebración 24 de junio. 44 Osun era el vigilante de Obatalá, quien, como ya sabemos, vivía con su mujer Yemú y sus tres hijos Oggún, Ochosi y Elegguá. Resulta que Oggún era el preferido y los otros dos debían obedecerle. Ya sabemos que Oggún estaba enamorado de su madre y que varias veces había intentado violarla, pero Elegguá siempre avisaba a Osun el vigilante, quien iba y regañaba a Oggún. Entonces un ida Oggún ordenó salir de la casa a Elegguá y sobornó a Osun con maíz para que no le delatara mientras abusaba de su madre. Eleguá le contó todo a Obatalá, quien no podía creerlo, pero decidió ir a la casa y encontró a Osun durmiendo y a Oggún abusando de su madre. Entonces fue cuando Oggún se maldijo a sí mismo y Obatalá le dijo a Osun: "confíaba en ti y te vendiste por maíz" después Osun perdió su cargo y fue Elegguá quien se convirtió en el vigilante de su padre Obatalá. Osun es un orisha mayor, actúa como mensajero de Obatalá y Olofi. Orula se apoya en él para conseguir los poderes de la adivinación. Es el que vigila la cabeza de los creyentes. Se recibe a Osun cuando se entregan Los Guerreros (Elleguá, Oggún y Ochosi) Representa la vida misma. Sus colores son todos porqué Osun significa color o pintura. A veces se le atribuyen el blanco, azul, amarillo y rojo. Su santo católico es San Juan Bautista. DEÌDAD QUE ACTUA COMO MENSAJERO DE DÌOS. ES LA CUSTODÌA Y VÌGÌA DE LOS CREYENTES DE ESTA RELÌGÌÓN. SÌEMPRE VÌVE EN ALTO, Y SU CAÌDA SÌN NÌNGUN TÌPO ÌNDÌCA QUE LA MUERTE ESTA CERCA DE LA PERSONA. ORULA DÌOS DE LA ADÌVÌNACÌÓN, SE APOYA EN ÉL PARA TENER PODERES DE VÌDENCÌA Y ADÌVÌNACÌON. NO TÌENE COLLAR, TÌENE FORMA DE GALLO, VA ENCÌMA DE UNA COPA, QUE ES DONDE SE DEPOSÌTA EL SECRETO. OZUN EN YORUBA QUÌERE DECÌR PÌNTURA. Orula OR5L0, Orunla u Or/nmila (San Francisco de Asís) Orisha mayor. A su alrededor se ha formado todo un complejo religioso que lo singulariza con relación a todos los demás Orishas. Es el gran benefactor de los hombres y su principal consejero, él les revela el futuro y les permite influir sobre él. Es el poseedor del secreto de ÌFÁ, el oráculo supremo mediante el cual se comunica con éste. Personifica a la sabiduría y a la posibilidad de influir sobre el destino, incluso al más adverso. También es considerado como un gran médico y como uno de los dueños de los 4 vientos, los 4 puntos cardinales y los 4 poderes fundamentales (el sol, el agua, el aire y el fuego). Orula fue el único santo que venció a ÌKÚ (la Muerte). Su día es el 4 de octubre. Orula es hijo de Obatalá y Yemú. Sus mejores amigos son sus hermanos Changó y Elegguá. Cuando Obatalá descubrió a Oggún queriendo violar a su madre, su ira fue tanta que ordenó matar a todos los varones. 45 Cuando nació Changó, Elegguá compasivo lo llevó escondido a su hermana mayor para que lo criara. Después nació Orula y con el mismo propósito de salvarlo, Elegguá le enterró en el pie de la ceiba y le llevaba comida todos los días. Con el tiempo el viejo Obatalá enfermó y Elegguá buscó corriendo a Changó, el gran curandero, para que lo curara. Cuando Changó curó a su padre, Elegguá imploró el perdón de Changó y de Orula a Obatalá. El perdón fue concedido y entonces Changó, lleno de alegría cortó la ceiba y con ella labró un tablero espléndido y se lo regaló a su hermano Orula, a quién dio también el poder de la adivinación. Desde entonces Orula es el dueño del tablero, el adivinador del futuro y el consejero de los hombres, además de ser el intérprete del oráculo de Ìfá. Orula es un orisha mayor, alrededor del cual se ha formado todo un complejo religioso que lo singulariza frente a todos los demás orishas. Orula es el principal consejero de los hombres porque les revela el futuro y les permite influir sobre él. Es el poseedor del secreto de Ìfá, el oráculo supremo mediante el cual se comunica con todos. Personifica a la sabiduría y la capacidad de incluir sobre todo destino, por adverso que este sea. También se le considera un gran médico y dueño de los cuatro vientos. Quien no siga sus consejos, ya sea hombre o bien orisha, puede ser víctima de los osogbos inducidos por Echu. Su fiesta es el 4 de octubre pero le pertenecen todos los días del año. Sus colores son el verde y el amarillo. Para ser sacerdote de Ìfá o babalawo no es imprescindible ser santero aunque normalmente lo sean. Su poder es tan grande que cuando reclama a alguien para ser su hijo, el individuo tendrá que abandonar el culto a cualquier otro orisha y dedicarse por completo a Orula. El primer paso para ser babalawo es "recibir la mano de Orula" y solo pueden pasar por ello aquellos a quien se lo ha sugerido la adivinación. A Orula se le conoce por /isimba en Palo, /avanga en Kimbisa, adai en Brillumba y /imb%mb%la en Las Villas. Sus ofrendas son la chiva, la gallina negra, la paloma y el venado. Protege a sus hijos de la locura. Su santo católico es San Francisco de Asís. Obatala, divinidad creadora de la tierra y el hombre. Es puro por excelencia y dueño de las cabezas, pensamientos y sueños del hombre. Hijo de Olofi y Olordumare, cuyo mandato es hacer el bien. Orumila o Orula es el poseedor del secreto de Ìfá. El oráculo benefactor de los hombres, y su principal consejero. Ìboru, Ìboya y Ìbosheshe. Orula personifica la sabiduria y la posibilidad de influir sobre el destino de los hombres, incluso el más adverso. Quien no acate sus consejos, sea hombre u orisha será víctima de los ossobos inducidos por Eshu Orula es el dueño de los cuatro vientos y con la autorización de Olofi recibió de Shango el arte y el dominio de los secretos de la adivinación. Es hijo de Obatala y sus mejores amigos son sus hermanos Shango y Elegua. Orula sabio, viejo, 46 refunfuñón, es el poseedor de todos los poderes mágicos para influir en el porvenir de todas las personas y junto con Oddun y Oddua conforma una trinidad divina. Le pertenecen todos los días, su fiesta se celebra el 4 de octubre y se sincretiza con San Francisco de Asís. Re.o* Orumila, Orumila Ìboru , Ìboru Ìboya, Ìboru Ìbochiche. Obatala OB030L: (Virgen de las Mercedes) Orisha mayor. Creador de la tierra y de los hombres, es la deidad pura por excelencia, dueña de toda la blancura, de los pensamientos y de los sueños. Hijo de OLOFÌ (Dios) y OLODUMARE (universo) Fue mandado a la tierra por Dios para hacer el bien y para que gobernara como rey del planeta, es misericordioso y amante de la paz y la armonía. Rige la buena conducta y es capaz de aplacar a sus hijos. Todos los Orishas lo respetan y buscan como abogado. No admite que nadie se desnude en su presencia, o se profieran frases duras e injuriosas. Su día es el 24 de Setiembre. En Obatala nace la luz y la oscuridad, la vida y la muerte, lo bueno y lo malo. Amante de la paz y la armonía. Todos los orichas le respetan por su rectitud y autoridad. Muchos le solicitan como abogado. Sus hijos deben ser muy respetuosos pues no admite debilidades, irrespeto y mucho menos frases duras e injuriosas. Su color preferido es el blanco, representa la verdad, la sabiduría y la justicia. Obatala es rey del mundo, cabeza principal de la osha. Es recto y justiciero. Su numero es el 8 y se sincretiza con la Virgen de las Mercedes. Su día es el 24 de septiembre. Re.o* Gemu Obatala Obatala Birivigua Aligua Ligua Lano Yakuto Kabo Kabo Ke Dedere laboru Dedere la boshishe Doba lori meridilogun OBATALA, DÌVÌNÌDAD, CREADORA DEL HOMBRE, ES PURA POR EXCELENCÌA Y DUEÑA DE LA CABEZA, PENSAMÌENTOS, Y SUEÑOS DEL HOMBRE. SU MANDATO POR EL DÌVÌNO OLOFÌ ES HACER EL BÌEN, NACE EN ESTA DÌVÌNÌDAD LA LUZ Y LA OSCURÌDAD, LA VÌDA Y LA MUERTE, LO BUENO Y LO MALO. AMANTE DE LA PAZ Y LA ARMONÌA, TODOS LOS ORÌCHAS LE RESPETAN POR SU REXTÌTUD Y AUTORÌDAD. SUS HÌJOS DEBEN DE SER MUY RESPETUOSOS, ESTA DEÌDAD NO ADMÌTE DEBÌLÌDADES, ÌRRESPETO Y MUCHO MENOS FRASES DURAS E ÌNJURÌOSAS. SU COLOR PREFERÌDO ES EL BLANDO, REPRESENTA LA CABEZA PRÌNCÌPAL EN OSHA. SU NUMERO ES EL OCHO. SU DÌA ES EL 24 DE SEPTÌEMBRE. Obatala el padre de todos los oris)as A pesar de que cada oricha tiene su virtud, cada uno posee características que lo diferencian de los demás y allí se originan sus jerarquías. Tomando esto en cuenta se puede decir que Obatalá es el oricha mayor y por ello se le conoce como "el padre de todos los orichas". 47 Esto lo encontramos claramente en un patakí del oldun Ogbe - Di, en donde se relata que la Tierra estaba asediada por Echu a tal punto de que se metió en la mente de los orichas y los confundió tentándolos y volviéndolos destructores. Ante ésta situación Oloddumare reprendió a los orichas porque no estaban cumpliendo el mandamiento que les dio después de la Creación y les recordó queellos estaban en la Tierra para ayudarlo a perpetuar lo que Él era, la encarnación de la verdad, la bondad y la justicia. Para poner solución al problema Oloddumare tomó sus virtudes, hizo una imagen de si mismo y creó a Obatalá, quien no se dejó influenciarpor Echú y pudo controlar la Tierra convirtiéndose en el Jefe Supremo del concilio divino integrado por todos los orichas. El Oricha supremo Como ya explicamos Obatalá es el oricha mayor, es la creación de Oloddumare para poner control en la Tierra ante las maldades de Echu. Es el dueño de todas las cabezas, por ello rige en todos los seres humanos no imporando cual sea su oricha guardián. Obatalá también es el dueño de la pureza, por ello viste con ropaje blanco, color que lo identifica. Todas las ofrendas que se le hacen deben estar relacionadas con éste color, esto es bien importante para los yorubas y se puede ver en un poema histórico que dice: ";Inmenso en t/nicas blancas< =l duerme en ropa blanca, =l se levanta en ropa blanca> ;$adre venerable< ;Consorte de Yemo2o< Orisa me deleita cuando est, en ceremonia, en un lugar delicioso donde Orisa es colocado en el trono"> Obatalá es un oricha masculino de temperamento tranquilo y sosegado, sin embargo es sumamente poderoso y se caracteriza por su autoridad, a tal punto, que es el único oricha al que Changó respeta sin objeción. Los demás orichas también lo respetan profundamente por estar relacionado con la luz, la verdad, la justicia y la compasión. Es un oricha adorado en muchos lugares del mundo, pero uno de sus templos mayores está en la ciudad de Ìgbo, en la nación yoruba. Allí se hacen grandes festivales en su nombre, en donde los sacerdotes danzan por las calles vestidos de blanco, además de llevar el cuerpo pintado con símbolos del mismo color. El nombre de Obatalá viene de la conjunción de dos palabras yorubas; Obá, que significa Rey y N´la, que quiere decir grandeza. Por lo tanto nombre compuesto Obatalá u Obanlá significa "El Rey de la grandeza" o "El Rey grandioso". La filosofía yoruba interpreta ésta etimología como el Rey de todo el paisaje que se alcanza a ver cuando se está en la cima de una montaña, en otras palabras, el Rey de todo. Otra interpretación dice que etimológicamente el significado de Obá - ti - alá es: "El Rey vestido de blanco". Aunque ésta deidad es conocida comúnmente con el nombre de Obatalá, también se le conoce como Orichanlá. Además del ropaje blanco lo caracteríza una corona con 16 plumas de loro y un cetro de plata, ambos símbolos de autoridad. Sus devotos le hacen tributos cada 17 días en sus templos, costumbre que se mantiene desde tiempos inmemoriales. Dentro de la Naturaleza rige en las montañas, las lomas y los valles. Una creencia yoruba nos cuenta que Obatalá es el oricha escultor por excelencia y es el encargado de moldear a las personas antes de venir al mundo, por eso es que él protege a las personas deformes, los inválidos, los 48 mudos y los albinos. Estos son creados por Obatalá de ésta forma para hacerlos sagrados y por ello hay que respetarlos, porque son elegidos por el Oricha. Los caminos de Obatal, Ya hemos explicado anteriormente que cuando hablamos de los caminos de un oricha, nos referimos a las diversas personalidades que desarrolló en su tránsito por la Tierra. En el caso de Obatalá se conocen 16 caminos, aunque mientras estuvo errante por el mundo le dieron muchos nombres en los diversos lugares que visitó. Sus caminos más comunes son: ? 0y,gguna* Nombre que etimológicamente significa "perro de guerra". Es el öbatalá más joven y está relacionado con los conflictos bélicos desarrollados durante toda la historia de la Humanidad. Fue el Rey de la ciudad de Ketu, hijo de Ochagriñan y es un Obatalá muy parecido a Changó, se le ponen detalles rojos a su vestidura y a sus collares, incluso cuando "monta" la cabeza de alguno de sus hijos en un tambor, baila una danza guerrera como lo hace Changó. Se le representa montado a caballo con una espada en la mano izquierda, denotando que es zurdo. Su llegada a la Tierra se relata en el signo Babá Eyiogbe ? Oc)agri@,n u Osagrin,n* Obatalá también joven fue hijo de Oduduwa y Rey de las ciudades yoruba Agomoshe y Egugbo. Además del color blanco que caracteriza a todos los Obatalás, se le ponen cuentas de nacar y coral a sus collares. Es guerrero y vive al pie de los árboles, en especial de la Hiedra. ? Bab, 0s)ó* Fue Rey de Ìbadán y es fue el Obatalá que creó el telar para que los seres humanos hicieran telas y se vistieran. Se le pone un pedazo de seda en el fondo de la sopera. Cuando viene a la Tierra en los tambores baila en un sólo pie. Es hermano de Ayagguna e hijo de Ochagriñan, por eso se le pone una faja de tela roja en la cintura cuando baja. ? 0guema o 0laguema* Según una historia fue el primer Obatalá que vino a la Tierra, llegó en forma de camaleón. Vive en lo alto de la Ceiba. Su color, además del blanco, es el verde. Acompaña constantemente a Oduduwa como un guardián, incluso se dice que su piel es tan brillante que le sirve a Oduduwa como espejo para mirar la maldad de sus enemigos. ? Obamoro* Este Obatalá es muy viejo y se dice que sufrió mucho. Sus colores son el blanco y el violeta. ? Obalu-ón u Oc)alu-ón* A pesar de que éste Obatalá nació en Ìfón, se hizo grande en la ciudad de Oshogbo. Hay que pedirle todo al revés ?Bab, Aururu* Es el Obatalá que aconseja a los jóvenes. ? 0yal,* Es el que moldea las cabezas de los seres humanos en el Cielo. ? Otros caminos de Obatal,* Ayalúa, Yekú Yekú, Oggán, Eluaye, Elefuro, Akeylú, Yemu, Oloyú Okumí, Oyelé, entre otros. 49 Los hijos de Obatalá Las personas que tienen a Obatalá como ángel guardián u oricha tutelar son personas muy inteligentes, que generalmente se destacan en sus actividades. No obstante, suelen ser lentos en sus movimientos por lo que en ocasiones pierden las buenas oportunidades que les depara el destino. Obatalá siempre tiene pendiente de que sus hijos prosperen, haciéndolos poderosos y engrandeciéndolos con bienes materiales, sin embargo, ellos tiene el compromiso de seguir una vida recta, porque son los primeros que deben realzar las virtudes de su padre, o sea, los hijos de éste oricha deben ser siempre justos, benevolentes y estar constatemente apegados a las reglas morales. Esto se puede notar en el siguiente poema yoruba dedicado al oricha: "=l apoya a sus )iBos y los )ace prosperar, les da ra.ones para reir y ellos ríen> ;El poderoso< 3/ %ue )abitas con una persona y la )aces próspera> ;El Rey supremo< ;3/ %ue multiplicas uno solo en doscientas personas< Cultiplícame en cuatrocientos> Cultiplícame en mil cuatrocientas sesenta personas"> Los hijos de Obatalá son muy analíticos y tienden a ser líderes. Deben controlar la soberbia y el orgullo para que puedan progresar, además deben evitar el licor ya que es su peor enemigo debido a que el Oricha lo maldijo porque le causó serios problemas. Sus hijos deben vestir frecuentemente con ropa blanca en honor al oricha y para ser purificados y protegidos. Olo-i OLOAI Olofin u Olordumare: Personificación de la divinidad; vive retirado y pocas veces baja al mundo. En Ìfá se recibe Olofi, según la letra que le salga al Babalawo iniciado. No se realiza ningún acto religioso sin la presencia de Olofi. Olofi es la personificación de la divinidad, la causa y la razón de ser de todas las cosas. Nació de nadie, por si no tiene tratos directos con nadie, pero sin su ayuda nada se puede conseguir. Ya que todo se resuelve gracias a su soberana voluntad. Olofi también conocido como Olorun u Olodumare en diferentes etapas. Olofi hizo el mundo, los santos, los animales y los hombres. Fue él quien repatrío poderes a los Orishas para que se crearan todas las cosas. Olofi es el dueño de los secretos de la creación e hizo que Orula echara los secretos de la adivinación por la boca para pudieran que llegar a los hombres. Utiliza a los orichas como sus mensajeros, pero para predecir la muerte emplea a Ozun. Re.o* Bobo Okow Olwo Mode Abosi, 50 Olokun, Olofin, Olodumare Oris)aoco ORI!0O9O u Oc)ao1o (San Ìsidro Labrador) Deidad de la tierra, la agricultura y las cosechas; patrón de los labradores. Su día es el 22 de marzo. Orishaoco la deidad de la tierra y la agricultura. Rey de la tierra de Oyo, uno de los Orisha más poderosos de este mundo y uno de los mas venerados del panteon Yoruba, patrón de los labradores. Ese honorable anciano que hace de juez al celebrar los juicios y pleitos entre los Orishas y por tal él albitra de las disputas de los hombres aquí en la tierra. Es casto trabajador y posee los secretos de la tierra, las abejas son sus mensajeras y es el responsable de la prosperidad en la tierra. Es el dueño de las cosechas, las lluvias y de la fuerza interna que hace parir a la tierra, a los animales y al hombre. Fue marido de Olokun quien vive en el mar, por eso tierra y mar siempre están unidos. Orishaoco es fiel cumplidor de su palabra ya que existe un pacto secreto entre el y el Olodumare. Tiene dos características el día y la noche, el día representa al hombre perfecto y en la noche personifica a la muerte, pues de ella se disfraza. Poseedor del misterio de la vida y de la muerte. Su numero es el seis y se sincretiza con San Ìsidro Labrador. Re.o* Ago Baba Orishaoco Yomba Ele Misirereo Maferefun Kokoaro Oc)/n OC5( (Santísima virgen de la Caridad del Cobre, Patrona y reina de Cuba) Orisha mayor. Dueña del amor, de la feminidad, y del río. Es el símbolo de la coquetería, la gracia y la sexualidad femenina. Mujer de Changó e intima amiga de Elegguá que la protege. Siempre acompaña a Yemayá. Vive en el río y asiste a las gestantes y parturientas. Se la representa como una mulata bella simpática, buena bailadora, fiestera y alegre, con el persistente tintineo de sus campanillas. Es capaz de resolver, tanto como de provocar riñas entre Orishas y los hombres. Su día es el sábado y sus números: 5, 10, 15, y 25. Su día conmemorativo es el 8 de setiembre. Oshun, orisha dueña del Río, dueña de la feminidad, y diosa de la miel. Es símbolo de la coquetería, la gracia y la sensualidad femenina. Es capaz tanto como de resolver como de provocar riñas entre Orisha y Hombres. Bella entre la bella. Tiene pacto con Yemayá para cuidar los secretos de los ríos. Su majestuosidad de reina es trasmitida a su hijo quien serán Reyes en la tierra aunque estén pasando trabajo. 51 Oshun es considerada diosa afrodita lucumi. Es la representante de la esencia amorosa de la vida la bravura y el equilibrio. Su día es el sábado se sincretiza con la Virgen de la Caridad del Cobre, su numero el 5. Re.o* Oshun mori yeyeo, Obe yi moko, Abaganide eky maladu kiladua ke, Ybu wanale wanale, Aworubomasi, Oshun, Moriyeyeo Yeye DUEÑA DEL RÌO, DUEÑA DE LA FEMENEÌDAD Y DÌOSA DEL ORO Y LA MÌEL, ES EL SÌMOBOLO DE LA COQUETERÌA, DE LA GRACÌAY LA SENSUALÌDAD FEMENÌNA. ES CAPAZ DE RESOLVER, COMO DE PROVOCAR RÌÑAS ENTRE ORÌCHAS Y HOMBRE, BELLA, HERMOSA ENTRE LAS MÁS HERMOSAS, SU MAJESTAD ESTRANSMÌTÌDA A SUS HÌJOS, QUÌENES SERAN REYES EN LA TÌERRA. ES LA REPRESENTANTE DE LA ESENCÌA AMOROSA DE LA VÌDA, LA BRAVURA Y EL EQUÌLÌBRÌO, SU DÌA EL SABADO, SU NUMERO ES EL CÌNCO. Oya OY: Yansá: ( Virgen de la Candelaria) Dueña de las centellas, los temporales y los vientos; dueña de los cementerios, en cuya puerta o alrededores vive. Su día es el 2 de febrero. Oya dueña de la centella y vientos huracanados. Es también la dueña del cementerio y el aire. Secretaria de Olofi y es la primera que lo sabe todo en esta vida. Amante inseparable de Shango y cómplice en sus asuntos belicos. De carácter fuerte, violento, e impetuoso. Siempre anda en compañía de un ejercito de espíritus. Dispuesta a proteger y favorecer a sus contados y escogidos hijos, demostrando su poder y temperamento. Pero con sus hijos es dulce, pura, amable y bondadosa. Es temida y considerada una divinidad muertera. Su numero es el 9 y su día el viernes, día de pagar sus castigos. Su refrán dice "Su mejor amigo es su peor enemigo". Se sincretiza con la Virgen de la candelaria y Virgen del Carmen. Su fiesta se celebra el 2 de febrero. Re.o* Jecua Jey Jansa Biri piti oke iya mesa mesa Obini Dodo Jecua Jey Jansa O.ain O!0I( (San Silvestre) 52 Es la naturaleza misma y su dueño; cazador y célibe; deidad de la farmacopea. Su día es el 31 de diciembre Ozain, Orisha dueño de la naturaleza. Es la naturaleza misma tiene una sola mano, una sola pierna, un solo ojo. Es guardián, curandero y dueño de todas las plantas que tienen poderes mágicos Ashé y como tal es la deidad de la farmacopea. Ozain es respetado en la regla de la Osha porque atraves de las yerbas manifiesta el poder requerido a los otanes para la consagración. A la vez que posee un certero juicio realista sobre los hombres y los acontecimientos. Este Orisha cojo, manco y tuerto apareció no nació y posee en la desconcertante costumbre de hacerse visible a los trasnochadores para pedirle fuego. Su numero es el tres y su día es el viernes. Se sincretiza con San José. Re.o* Ozain Worenke Elese Ocan, Ozian Worenke Elese Meye. Orugo Onati Shango Nishe Wewe Tirunto Ware Nito Guarishe Olla Da Kere Kere Eni Oya Unanbo Tu TuteleOkuni Owan Suseye. Oya Unanbo Tu Tutele Okuni Owan Suseye. Oya Unambo Tu Tutele. !)ango C0(4D (Santa Bárbara Bendita) Orisha mayor: Dios del fuego, del rayo, del trueno, de la guerra, de los ÌLÚ BATÁ (tambores) del baile, la música, y la belleza viril. Patrón de los guerreros y de las tempestades. Su número es el 6 (Obbara). Sus días son los viernes y todos los 4 de cada mes. Su día es el 4 de diciembre. Representa el mayor número de virtudes e imperfecciones humanas. Es trabajador, valiente, buen amigo, adivino y curandero, pero también mentiroso, mujeriego, pendenciero, jactancioso y jugador. Es buen padre cuando su hijo obedece, pero no lo admite cobarde. Es el padre de los Ìbeyis (los Gimaguas). Shango, Dios del fuego, del rayo, del trueno, de la guerra y de los sagrados tambores bata. Héroe viril, patrón indiscutible de los guerreros. Es trabajador valiente y buen amigo. Adivino y curandero, representa el mayor numero de virtudes e imperfecciones humanas. Es buen padre con sus hijos, mientras el hijo obedese. Shango tiene pacto con Ozain quien es su padrino. A la vez tiene tres mensajeros, el trueno arrawa, el rayo mana mana y la obscuridad, binia y meye siempre lo acompaña un león que con aliento mata y salva. Shango es el guerrero más bravo de la religión. Su día es el viernes, su numero es el seis y se sincretiza con Santa Barbara. Su fiesta se celebra el cuatro de Diciembre. !e dice %ue C)angó es el due@o de la religión yoruba y esto se debe a %ue no )ay ceremonial %ue se realice sin la aprobación de &ste oric)a, incluyendo las ceremonias a Eggun> 53 Changó es una de las deidades principales en la regla de ocha. Es el primer hijo de Olofi en la tierra y está relacionado con la virilidad, la belleza masculina, el fuego, la electricidad, los rayos y la fortaleza de carácter. Se dice que es guerrero debido a las múltiples batallas que sostuvo en la vida, por ello se le pide para que nos ayude a salir victoriosos en la vida diaria. Nadie sabe cómo fue que realmente Changó llegó al mundo, existen múltiples versiones, una de ellas dice que llegó desde el cielo en forma de una bola de fuego, cayendo en una palma real. Otro relato manifiesta que nació del vientre de Yemayá, luego de ser procreado por Aggayú; ésta es la versión más aceptada. Changó es "el gran testigo de las consagraciones que se realizan en Ocha e Ìfá", por ello es quien tiene mayor influencia en el desarrollo de la religión yoruba. Debido a esto muchos religiosos dicen que es el dueño de la religión, y tienen razón porque no se puede realizar ningún ceremonial sin su presencia. Debido a su relación con el rayo, el trueno y el fuego, los yorubas lo han visto como el encargado de impartir justicia cuando alguien obra mal ante los ojos de Oloddumare. Existen muchos ejemplos de esto, pero podemos citar la historia de la Torre de Babel, la cual encontramos tanto en la Biblia como en el signo de ifá Ogbe Di, donde fue Changó con sus rayos quien destruyó la edificación con la que el hombre pretendía descubrir los secretos del Cielo. De todos los orichas, Changó es el que más posee características humanas, y quizás por ello es que las personas se identifican tanto con él, hasta el punto de que muchos quieren ser "hijos de Changó". Estas características podemos observarlas en los patakíes, y aunque en muchas historias vemos que Changó aparece como ladrón, tirano, promiscuo, mentiroso, borracho, pendenciero y vanidoso, debemos recordar que algunos orichas vivieron una etapa pagana mientras estuvieron en la tierra, desconociendo su esencia divina. Posterior a dicha etapa pagana, estos seres se convirtieron en deidades gracias a las aptitudes espirituales que desarrollaron. Como divinidad del panteón yoruba, Changó es valiente, gallardo, justiciero, guerrero, varonil, alegre, adivino, fuerte, violento y muy buen bailarín, virtud que adquirió de Orula haciendo un intercambio por el tablero de Ìfá. Al respecto, él no desperdicia ninguna posibilidad para demostrar sus condiciones de bailador cuando "se monta" en alguno de sus hijos al sonar los tambores sagrados. Los yorubas siempre dicen: "Oni Sango to jo ti ko tapaa, abuku ara re ni", lo que significa: "Un devoto de Changó que baila sin mover los pies y las piernas se deshonra a sí mismo". Más allá de ser solamente un ser místico-espiritual, Changó vivió en el plano terrenal. En muchos relatos los yorubas lo relacionan con el desarrollo de su pueblo, tal es el caso del territorio de Oyo donde se reconoce a Changó como el 4° Alafin (Rey) en su historia. Actualmente en los territorios yorubas, se mantiene la adoración a Changó y a sus descendientes que son reyes en algunos territorios, ellos preservan el linaje real que se ha mantenido durante siglos. La simpatía hacia éste oricha no 54 sólo la viven los seres humanos, el resto de los orichas mantienen una estrecha relación con Changó, tal es el caso de Yemayá, con quien Changó hizo un pacto de respeto cuando se enteró que era su madre. Otro de los orichas que recibe un trato de profundo respeto de parte de Changó es Obatalá, por ello el collar de Changó lleva cuentas blancas, siendo su color original el rojo. También con Elegguá hay una notable relación, se puede decir que estos dos orichas muestran la imagen de la amistad inquebrantable. Cuando Adsojano fue rechazado por su pueblo, debido a que tenía lepra, Changó fue quien lo ayudó, por ello cuando se realizan ceremonias con este oricha hay que rendirle tributo a Changó también. Orichas como Ochún, Oyá, Obba y Yeguá también se relacionan con esta deidad, ya que ellas vivieron momentos amorosos con el oricha de la virilidad. En el aspecto religioso Changó se identifica con el color rojo, los tambores batá, la piedra de rayo, la palma real y el oche, que es un hacha de doble filo que en ocasiones se pone sobre su corona. La relación de Changó con los tambores batá se debe a su gran condición de bailarín y a su gusto por las fiestas. Cuando el oricha baja en un güemilere, se puede observar la riqueza creativa que poseen los bailes que efectúa, igualmente esto se puede ver cuando sus hijos o sus devotos bailan. Los hijos de Changó son personas valerosas y voluntariosas. Gustan de las fiestas y del baile. Son impulsivos, lo que los hace a veces descuidados y olvidadizos. Rechazan plenamente las injusticias. Poseen una gran suerte natural especialmente para conseguir dinero. Son amantes de la buena vida y les gusta mucho comer. En ocasiones no pueden controlar las explosiones de cólera. Las mujeres normalmente presentan características varoniles. Re.o* Shango, Shango, lube bara lube Oba Oso Kiseku Olufina Koke Aya La Yiki Obanbio Yo Eleku Ase Ozain Akakamasi Ogodomasi Olufina Aya La Yiki DÌOS DEL FUEGO, DEL RAYO, DEL TRUENO, DE LA GUERRA, Y DE LOS SAGRADOS TAMBORES BATÁ. HEROE VÌRÌL. ES TRABAJADOR, VALÌENTE Y BUEN AMÌGO. ADÌVÌNO Y CURANDERO, REPRESENTA EL MAYOR NUMERO DE DEFECTOS Y VÌRTUDES. OZAÌN ES EL PADRÌNO DE CHANGO. Y SUS SAGRADOS MENSAJEROS SON ARRAWA, EL TRUENO, MANA MANA EL RAYO, Y BÌNÌA LA OBSUCRÌDAD, Y MEYE EL LEON. SU DÌA ES EL VÌERNES, SU NUMERO EL SEÌS. SU FÌESTA EL CUATRO DE DÌCÌEMBRE La verdadera )istoria de !anta Barbara La siguiente historia fue extraída de un antiguo manuscrito propiedad del escritor griego Simeón de Metafrasto, especialista en la investigación de la vida de los santos católicos. Dicho manuscrito fue expuesto a la luz pública a mediados del siglo VÌÌ y a continuación citaremos fragmentos del mismo: "Durante el reinado de Maximiano en la ciudad de Nicomedia (actualmente Ìzmit, Turquía) había un hombre muy rico llamado Dióscoro, quien era pagano, supersticioso y estaba abocado a seguir la errónea costumbre local de adorar 55 dioses irreales. Dicho personaje tenía una hija muy hermosa llamada Bárbara, a la cual celaba sin motivo alguno. Para evitar que Bárbara tuviera contacto con la gente, Dióscoro hizo construir una torre muy alta y allí encerró a su hija hasta que decidió entregarla en matrimonio a uno de los príncipes que la pretendían atraídos por el misterio que rodeaba su encierro. Ante la situación el padre de Bárbara un día se dirigió a ella y le dijo: "Hija mía, los príncipes de comarcar lejanas y cercanas han llegado hasta aquí para pedir tu mano, por ello te ruego que me digas que quieres hacer ante esta situación". Al escuchar a su padre Bárbara sintiéndose ofendida le contestó: "Padre mío, mi decisión es no casarme, pues nunca he pensado en ello, así que te ruego que no me obligues a hacerlo". Realmente hablaba en serio, ella vivía pensando en llevar una vida perfecta sumida en la búsqueda del verdadero y único Dios, por lo tanto pensaba que si accedía a las proposiciones de los príncipes se alejaría de su meta: el acercamiento al ser supremo. Esto decepcionó tanto a Dióscoro que fue a vivir a un país lejano por un tiempo. Bárbara ante la ausencia de su padre aprovechó para colocar una cruz en el baño y añadió una ventana más a las dos que ya tenía la torre para así simbolizar a la Santísima Trinidad. Luego de esto Bárbara fue bautizada y siguiendo una de las costumbres místicas de San Juan Bautista sólo comía miel y langostas. Luego del bautizo de Bárbara dicho baño, que estaba formado por una serie de piscinas, quedó consagrado y se sabe que allí los ciegos de nacimiento recobraban la vista. En ese momento ya Bárbara estaba fortalecida por su fe lo cual la ayudó a vencer al demonio y esto lo demostró cuando reaccionó ante los ídolos paganos de su padre escupiéndolos y diciéndoles: "Todos aquellos a los que vosotros habéis inducido en error y creen en vosotros serán como vosotros". Luego de ocurrir esto se retiro a orar y a venerar a Dios en la torre y en ese momento fue consagrada por el espíritu santo y adquirió la gloria espiritual que poseen todos los santos. En el año 235 D.C su padre regresó del viaje y ya había culminado la reestructuración de la torre y éste le preguntó a los obreros: "¿Por qué habéis hecho tres ventanas?, y ellos sorprendidos contestaron: "Porque su hija nos lo ordenó". Ante esto Dióscoro mandó a llamar a Bárbara para definitivamente conseguir una respuesta al dilema que se le había presentado con las tres ventanas. Cuando su hija se presentó le hizo la misma pregunta y la respuesta fue la siguiente: "Mandé a hacer una ventana más para que fueran tres, porque tres ventanas dan luz a todo el mundo y a todas las criaturas, en tanto que dos ensombrecen el Universo". Entonces se dirigió con ella a los baños y le preguntó, con gran ánimo de que le aclarara la situación, por qué una tercera ventana si con las dos que habían llegaba suficiente luz al lugar, y Bárbara respondió: "Esas tres ventanas representan claramente al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, los cuales son tres personas en un solo Dios, en el que debemos creer y al único que debemos adorar". La reacción de Dióscoro fue violenta, tanto así que saco su espada para matar a su hija allí mismo, pero la ya consagrada virgen comenzó a orar y milagrosamente levitó por los aires gracias a la protección divina y llegó volando a una lejana roca inmersa en las montañas. Testigos de esto fueron dos pastores que la vieron volar y a su padre persiguiéndola preso de la ira. Al llegar a las montañas Dióscoro la tomo por los cabellos y decidió llevarla para ser juzgada y limpiar su propio nombre ante la gente de la ciudad. Bárbara fue apresada y enjuiciada, en ese momento dándole una nueva oportunidad de que recapacitara ante su creencia de la existencia de un solo Dios, el juez le dijo: "Así pues, elige entre sacrificar a los dioses y salvar tu vida, o morir cruelmente torturada", y Santa Bárbara respondió: "Me ofrezco en sacrificio a mi Dios, Jesucristo, creador del cielo, 56 de la tierra y de todas las cosas". Esa fue su sentencia, después de ser apaleada y torturada durante días, la santa tuvo la visión del señor Jesucristo en la prisión. Pasaron los días y como Bárbara mantenía su posición ante el castigo, el juez decidió que fuese decapitada por la espada. En ese momento Dióscoro segado por la obsesión de limpiar su nombre arrebató a Bárbara de las manos del juez y la llevó a la cumbre de una montaña junto a otra mártir llamada Juliana. En el camino Santa Bárbara se alegró porque sentía que se aproximaba el premio a su devoción por Dios y mientras su padre la arrastraba hacia la montaña hizo la siguiente oración: "Señor Jesucristo, Creador del Cielo y de la Tierra, te ruego que me concedas tu gracia y escuches mi oración por todos aquellos que recuerdan tu nombre y mi martirio. Te suplico que olvides sus pecados, pues tu conoces nuestra fragilidad", en ese momento escuchó que desde el cielo provenía una voz que le decía: "Ven Bárbara, esposa mía, ven a descansar en la morada de mi padre, que está en los cielos, yo te concedo lo que acabas de pedirme". Después de esto fue decapitada por la mano de Dióscoro, su propio padre, junto a Juliana, recibiendo las dos en ese momento la corona del martirio. Luego de haber finalizado el horrendo crimen Dióscoro comenzó a bajar de la montaña y en el camino fue fulminado por un rayo que descendió de los cielos, cual fuego celestial. Santa Bárbara fue sepultada junto a Santa Juliana por un noble de nombre Valentino en un pequeño pueblo donde posteriormente ocurrieron muchos milagros". Yemay, YEC0Y: (Virgen de Regla) Orisha mayor: Madre de la vida, considerada como madre de todos los Orishas. Es la dueña de las aguas y representa al mar, fuente fundamental de la vida. Por eso se dice que " el santo nació del mar". Es indomable y astuta, sus castigos son duros y su cólera es terrible, pero justiciera. Yemayá es la Reina de la creatividad y la naturaleza madre de la vida. Dueña de las aguas y representa el mar, fuente fundamentar de la vida. En ella nace el amor. Yemayá es indomable y astuta sus castigos son duros y su cólera terrible pero justiciera, No obstante Yemayá es la preferida por ser diligente conciliadora y comprensiva con sus hijos. Es la madre de todos los orishas. Yemayá es modelo de madre, Diosa de la maternidad universal. En ella nace la naturaleza y la humanidad, Yemayá es la poderosa madre de todos los Orisha y la misericordiosa y milagrosa reina del mar de los hombres. Su numero es el siete su día es el sábado se sincretiza con la Virgen de Regla. Re.o* Omio Yemaya iya ami la teo ala marubo ,omi, Ìya awo yeda Ìya yetu yetu Acuakeye Ala sabayi Olokun. ES LA REÌNA DE LA CREATÌVÌDAD Y LA NATURALEZA MADRE DE LA VÌDA DUEÑA DE LAS AGUAS Y REPRESENTA AL MAR, FUENTE FUNDAMENTAL DE LA VÌDA, EN ELLA NACE EL 57 AMOR. YEMAYA ES ÌNDOMABLE Y ASTUTA, SUS CASTÌGOS SON DUROS Y SU COLERA TERRÌBLE, PERO JUSTÌCÌERA. PERO ANTE TODO ES CONCÌLÌADORA Y COMPRENSÌBLE CON SUS HÌJOS, ES MODELO DE MADRE.DÌOSA DE LA MATERNÌDAD UNÌVERSAL, EN ELLA NACE LA NATURALEZA Y LA HUMANÌDAD.YEMAYA ES LA PODEROSA MADRE DE TODOS LOS ORÌSHAS Y LA MÌSERÌCORDÌOSA Y MÌLAGROSA REÌNA DEL MAR Y DE LOS HOMBRES, SU NUMERO ES EL SÌETE, SU DÌA ES EL SABADO. 0@, El oris)a de los tambores Añá es el oricha que vive dentro de los tambores batá. Su presencia es fundamental dentro del desarrollo de la religión yoruba debido a que es el que informa a Olofi que una cabeza fue consagrada en la religión, además de ser el que avisa a los orichas cuando hay un festejo en honor a ellos aquí en la Tierra. relacionada con la madera y los árboles, por esto su afinidad con Ozain, el oricha de la vegetación. De allí se origina dichos Ya sabemos que el panteón yoruba, como comúnmente se le llama al grupo de orichas adorados en la religión lucumí, está conformado por aproximadamente 201 deidades, cada una de ellas relacionada con algún elemento de la Naturaleza. Debido a la trata de esclavos que ocurrió principalmente en el Caribe en el siglo, algunas de éstas deidades o santos vinieron a América y entre ellos Añá, el oricha de los tambores. A pesar de que no se le da la importancia debida, Añá es fundamental en el proceso religioso yoruba, ya que él informa a Olofi, gracias a los sonidos que emana el tambor, que el Olocha o santero fue consagrado en la Tierra como sacerdote de la religión. Visto desde otra perspectiva se puede decir que en la ceremonia del Kari Ocha Ochún informa a Olofi que un mortal va a ser consagrado y luego Añá confirma ante el Creador que la consagración fue efectuada. Por esto es importante que el santero sea presentado al tambor luego de que se le hace el santo. Definitivamente en ésta religión la música tiene un papel preponderante, no sólo en el cuarto de consagraciones y en los ceremoniales sino también a la hora de rendir tributo a los orichas en los festejos y es allí donde Añá cumple su papel fundamental. Añá es un santo sumamente delicado y vive dentro de los tambores batá. En Africa ésta deidad está como: "No hay tambor sin Ozain" o "No hhay Ocha sin Ozain", debido a que Ozain es la deidad que transmite la esencia de la Naturaleza a todos los atributos de la religión yoruba. Añá tiene la virtud de comunicarse con todos los orichas y los llama a través de una serie de sonidos que se producen cuando los omoalañas o "sacerdotes de Añá" tocan los batá en forma conjunta produciendo así una serie de sonidos que estimula al oricha y hace que se manifieste en la Tierra tanto en los festejos como en las honras fúnebres de los Olochas. Como dijimos antes, éste oricha vive dentro de un trío de tambores llamados Batá, los cuales son hechos de madera de cedro y cuero de chivo. Ellos llevan por nombre: Ìyá o tambor madre, que es el tambor más grande y se ubica en el medio entre los otros dos; el Ìtótele, que es el tambor mediano y el Okónkolo que es el más pequeño de los tres. Los Omoala@as Los omoalañas son los sacerdotes consagrados a Añá, llamados comúnmente en América, tamboreros. Ellos son los que tienen la potestad de manipular y tocar los 58 batá sagrados donde vive Añá. Ningún otra persona puede hacerlo si no está consagrada en la cofradía de los Omoalañas, consagración que requiere de ciertos requisitos. Lo primero es que la persona debe ser aceptada por Añá, esto se sabe a través de un ceremonial en donde se le pregunta al oricha si el individuo nació para ser omoalaña o si posee suficientes méritos morales para serlo. Por otro lado esta persona debe ser hombre, en todo el sentido de la palabra, o sea que no puede ser homosexual. Lo otro es que debe dominar el instrumento del tambor, aunque no es una condición obligatoria, aunque para algunos omoalañs si debe ser. Además, el individuo no puede ser "montador", o sea que no debe ser de aquellas personas que tienen la condición de ser posesionados por espíritus o santos. Después de agrupar estos requisitos la persona pasa por una serie de ceremonias empezando por la de "lavarse las manos", la cual le permite cargar, custodiar y tocar el tambor. Esta ceremonia debe ser ganada y dependerá del grado de responsabilidad y seriedad que tenga la persona en el ámbito religioso. Luego de esto el Yambokí o aprendiz puede ser juramentado en Añá. La diferencia entre tener las manos lavadas y ser juramentado es muy poca y se basa en ciertos detalles que se ejecutan dentro del cuarto de consagraciones, pero cualquiera de los dos ceremoniales permite que la persona pueda tocar el tambor. Luego de esto el omoalaña va adquiriendo jerarquías las cuales dependerán de su antigüedad como tamborero y del conocimiento en el campo de Añá, lo cual se fundamenta, entre otras cosas, en el estudio de los múltiples toques que se le hacen al tambor batá a la hora de usarlos en honor a los orichas. Las jerarquías también dependen de si la persona tiene santo hecho o es babalawo. Esto le puede dar mayor jerarquía al tamborero aunque es relativo, porque si la persona está consagrada en la regla de Ocha pero es aprendiz en la tierra de Añá tiene que respetar a los omoalañas más antiguos así éstos no tengan santo hecho. Esta es una condición establecida por Añá aunque siendo una hermandad muy estrecha estos personajes tratan de mantener la igualdad entre sus filas. Los omoalañas son personajes que gozan de una alta jerarquía en la sociedad africana, son tratados como altos dignatarios debido a la importancia que tiene el tambor en esta cultura ancestral. En nuestro continente han mantenido intacto las canciones y rezos que los primeros omoalañas dedicaban a los orichas en la época esclavista. Existe una anécdota que ilustra lo antes expuesto. "Una vez un grupo de tamboreros cubanos llegaron a la ciudad de Oyó, en Nigeria, con motivo de un intercambio cultural. En dicha ciudad, según cuenta la tradición yoruba, gobernó Changó como su cuarto Rey. En un momento en que se encontraban sin hacer nada los omoalañas cubanos comenzaron a tocar el batá y a cantar canciones de Changó sin saber que se encontraban frente al castillo del Alafin (Rey) de la ciudad. Luego de tocar y cantar varias canciones las ventanas del palacio comenzaron a abrirse e inmediatamente un emisario se les acercó y les comunicó que el Alafin quería recibirlos. Cuando llegaron al salón de protocolos el Alafin les pidió por medio de un intermediario (el Alafin usa intermediario porque jamás dirige la palabra a un extraño debido a su jerarquía que lo hace casi una deidad viviente) que lo honraran permitiendo que aceptaran sus atenciones mientras estuvieran en la ciudad, pues ellos lo habían honrado exaltando a su antepasado Changó con su propia música." 59 0@, en 0m&rica Todo en la religión yoruba viene marcado por el linaje. Los oriateses, los Olochas, los babalawos, en fin todo, viene de un árbol genealógico que se expande con el tiempo y que tuvo su origen en los mismos orichas. En el caso de los omoalañas se cumple también esto y si profundizamos más nos daremos cuenta que éstos sacerdotes forman una élite debido a que cualquier persona no puede ser omoalaña y ellos son muy celosos a la hora de que alguien entre a sus grupos, el nuevo integrante debe ser realmente un elegido de Añá. Por eso es que la familia de los omoalañas es pequeña en relación con la de Ocha o con la de Ìfá. La ocha se le puede hacer a cualquier persona que la necesite pero no se puede jurar en Añá a quien no lo tenga en su destino. Con la llegada de los esclavos a América, en especial a Cuba, llega también Añá gracias al conocimiento de dos yorubas que provenían de ese linaje de omoalañas auténticos, nos referimos a Añabí y Atandá. Estos dos yorubas poseían el secreto de Añá y al darse cuenta de que lo que lo que sonaba en los barracones no era Añá, decidieron fundamentar los primeros tambores consagrados a ese oricha. Con el tambor de Añabí y Atandá se transmite el linaje yoruba de Africa a Cuba y de dicho tambor provienen tambores de omoalañas reconocidos actualmente en Cuba como el de Aldofó, el de Julio Fantomas, el de Papo Angarica, el de Angel Bolaños, el de Chachá, el de Jesús Pérez, etc. Los verdaderos tambores 0@, En la religión yoruba se debe actuar con responsabilidad, y en el caso de Añá dicha responsabilidad no puede recaer sólo sobre los omoalañas, también los santeros y babalawos deben ser celosos de mantener las reglas tal y como lo enseña la tradición yoruba. Sabemos que dentro de la religión todo fundamento debe nacer de otro y así se va expandiendo la esencia del secreto original. En el campo de Añá también es así por lo que los tambores que no pertenezcan al linaje del primer tambor de Añabí y Atandá no poseen el secreto de Añá sembrado en ésta tierra por los primeros omoalañas que forzosamente estuvieron en el Caribe. La responsabilidad a la que nos referimos consiste en que todo santero debe averiguar el origen de cualquier tambor que suene pretendiendo tener Añá en su interior. Esto se debe hacer debido a que hay muchos juegos de batá que no tienen la consagración debida, o sea que no fueron paridos por otro tambor. Estos plagios han sucedido siempre y como ejemplo podemos citar la investigación hecha por el excelso etnólogo Fernando Ortiz en la década del 40 cuando hizo una investigación en Cuba y determinó que había 25 juegos de tambores batá entre los cuales 8 eran de procedencia dudosa. Esta situación se ha visto también actualmente por lo que hay que poner la cabeza de los recién consagrados en los tambores de omoalañas reconocidos como Papo Angarica, Aldofó, Jesús Perez, Chachá, Onelio Scul, Regino Jimenez, Miguel Urbina, Angel Bolaños, Farides Mijares, entre otros que vienen de los tambores de Nicolas Angarica, Pablo Roche, Trinidad Torregosa, Raul 60 Diaz, Giraldo Rodríguez y muchos otros que son genuinos omoalañas provenientes del primer Añá sembrado en América, el de Añabí y Atandá Oddua En varias ocasiones se ha demostrado que el hombre se originó en Africa, lugar donde también se erigió el pueblo Yoruba, uno de los más antiguos del planeta, creciendo posteriormente luego de ser organizados por el orisha Oddúa, tras lo cual alcanzaron formar un poderío político, económico y militar que los consagró como la nación dominante de la vasta región centro-occidental del continente africano. Desde siempre el Yoruba a estado arraigado a la adoración de un culto politeísta en donde aparece Oddúa como una de las 201 deidades que convivieron con ellos desde que se organizaron. Las escrituras sagradas, pertenecientes a este antiguo pueblo, hablan de cómo Oddúa participó en la creación del planeta junto a Oshanlá (un camino o manifestación de Obatalá) y luego de realizar el trabajo de la creación, seleccionó y reunió a 13 comunidades las cuales se establecieron en Ìlé-Ìfé, una ciudad de características sagradas en donde se adoraba a Oddúa como una deidad viviente. Para verificar cuán importante es la ciudad de Ìlé - Ìfé para los Yorubas citaremos parte de un poema extraído de sus enseñanzas más antiguas y transmitidas por los Orichas: Ìlé-Ìfé, la ciudad de los sobrevivientes y donde apareció el alma por primera vez. Ìlé-Ìfé, cabeza de todo el Universo. Ìlé-Ìfé, la tierra de los días más antiguos. Ìlé-Ìfé, la casa original de todas las casas y pueblos. Ìlé-Ìfé, la casa de las divinidades y espíritus misteriosos. Ìlé-Ìfé, la puerta del cielo. Posterior a Oddúa el pueblo Yoruba era gobernado por los descendientes de este orisha, reyes poseedores de un poder místico que debía prevalecer y que provenía del cielo. Cual linaje real cada vez que su rey moría era sustituido por quien lo seguía directamente siendo nombrado Ooni o rey gobernante, pasando el rey muerto a ser integrante del culto a los antepasados. 8ui&n era realmente Odd/a> La religión Yoruba, llamada actualmente Santería en nuestro continente, posee una filosofía muy profunda y en su totalidad se encuentra plasmada en las sagradas historias de Ìfá. Allí nos encontramos un relato que resalta la llegada de Oddúa a la tierra y su importante papel en la vida del ser humano: "...por mandato de Olodumare (Dios) se le indicó a Oddúa que bajara a la tierra a terminar el trabajo de la creación en compañía de Oshanlá. En esos tiempos sólo existía el mar por lo que Oddúa bajó desde el cielo por una cadena llevando consigo un caracol lleno de tierra, una gallina y una nuez kolá. La tierra fue vertida sobre el 61 océano y la gallina la regó con sus patas de forma irregular originándose así valles y montañas. Finalmente Oddúa plantó la nuez kolá tras lo cual nació un árbol de 16 brazos que simboliza la corona de su casa..." Existe otra historia en donde Oddúa llega a la tierra como hijo del rey de la Meca, Lamurudu, con la misión de organizar a los habitantes de la ciudad sagrada de Ìlé- Ìfé. Cuando era adolescente y dominaba el arte de la guerra, emigró hacia dicha ciudad y la conquistó mientras era gobernada por Oshanlá, posteriormente los hijos y nietos de Oddúa fundaron otras naciones Yorubas en diversas regiones haciendo crecer el imperio. De esta y otras historias se pueden extraer las características de la personalidad de este orisha que además de ser, en parte, la deidad poseedora de la responsabilidad de la creación, también actuó como rey fundador y conquistador motivando la expansión de un culto que llegó hasta nuestros tiempos. Esto también se puede contemplar en la etimología de su nombre, la cual se puede traducir como "el que existe por sí sólo" y también como "el jefe que crea a los seres". Se puede apreciar que los orishas, en los comienzos de la humanidad, funcionaron como "embajadores del cielo" en donde su papel fundamental era el organizar al ser humano, no sólo en el aspecto religioso sino también socialmente. La presencia de Oddúa fue de profunda relevancia, por ello la importancia de esta deidad dentro de la cultura Yoruba en donde alcanzó un gran poder a nivel religioso gracias a la mistificación a la que fue sometido. Se puede decir que se le dio la posición que realmente le correspondía, la de un Dios que gobernó a un pueblo elegido, ya que era considerado por los Yorubas como un Hombre-Dios. Odd/a en la !antería Oddúa viene a ser uno de los orishas principales dentro de la religión Yoruba a pesar de que no va a la cabeza de ningún ser humano, o sea que a nadie se le hace este Santo, sólo al Ooni de Nigeria se consagra con este Orisha debido a que es descendiente directo de él y se debe mantener el linaje real tanto en lo terrenal como en lo espiritual. Esta importante deidad tiene una estrecha relación con Ìfá y en Africa es considerado parte de una importante trilogía junto a Oshanlá y Orula. Esta mística unión de Oddúa-Oshanlá-Orula es llamada en el antiguo continente la trilogía de Ìlé- Ìfé y son identificados como los asistentes de Olodumare en el momento de la creación, teniendo Orula el papel de testigo en la misma. Por su relación con Ìfá el fundamento de Oddúa es entregado por los Babalawos. Estos sacerdotes poseen los secretos rituales respecto a la conformación del fundamento de este orisha, por lo tanto sólo ellos pueden entregarlo a la persona que lo necesite, según lo determinen los orishas a través de los oráculos de Ìfá o de los Caracoles. El recibir el fundamento de Oddúa dependerá del estado del interesado lo cual siempre tiende a manifestarse en torno a la salud, quizás por la marcada influencia que tiene el orisha sobre la vida y la muerte además del pacto que este tiene con la tierra. Oddúa habla a través de diversos signos en los oráculos antes mencionados, pero si queremos definir los principales citaremos a: Eyiogbe, Oyekun Melli, Oddí Melli, Osa Melli, Otura Melli, Ìrete Melli, Osha Melli, Ofún Melli y Odi-ka. 62 La persona que recibe el fundamento de Oddúa debe llevar una vida dedicada a las buenas costumbres, debido a que esta deidad representa la moralidad en la vida y la pureza de pensamiento, por lo tanto se le exige a la persona que lo recibe estabilidad de mente y espíritu, por ello generalmente es recibido por personas ya maduras. Por ser "el dueño de la soledad" este orisha debe colocarse dentro del Cuarto de Santo en un lugar aparte en donde este resguardado de los ojos profanos y de la actividad cotidiana de las personas, acompañado sólo por tres orishas guardieros: Bromú, Brosiá y Ozun. Otro de los calificativos que recibe Oddúa es el de "Rey de los muertos", gracias a la relación directa que tiene con estas entidades a la hora de realizar las ceremonias que dan nacimiento al fundamento que reciben sus devotos. También se le llama de esta forma debido a que este orisha fue el primero que se le rindió culto como muerto, debemos recordar que Oddúa llegó del cielo por mandato de Olordumare, pero vivió en la tierra en forma humana, muriendo posteriormente como todo en la naturaleza. Por lo tanto de ser adorado como un Rey-Dios paso a ser mistificado después de su muerte reinando entre los antepasados del pueblo Yoruba. Por esta característica religiosa este santo tiene la particularidad de ser mediador entre los muertos y Olofin, entre los muertos y los Orishas y entre los hombres y Olofin, por esto último es que en ciertas ceremonias de Ìfá, Oddúa puede sustituir la presencia de Olofin cuando el Babalawo no lo posee. Los caminos de Odd/a Como ya sabemos al citar los caminos de un orisha nos referimos a las diferentes facetas de su vida en el tránsito que tuvo en la tierra. En este aspecto Oddúa posee varios caminos, de los cuales citaremos algunos: Odd/a abelli lucosan* Vive en el techo de las casas, su fundamento es doble y sus herramientas están hechas en madera de ceiba. Odd/a odo-atolo* Este está relacionado directamente con el sol el cual se representa con una máscara con un único ojo. Come dos chivas al nacer y al cuero de estas se le colocan 16 plumas de loro africano lo cual sirve para adornarlo. Odd/a ay,gguna* Es sordo y entre sus piezas deben haber dos pitos que sirven para llamarlo. Sus caracoles van ensartados en alambre. Come y vive sobre una palma y se lava con cogollos de mariwó de Orula. Odd/a olucón* Es guerrero por lo que se le pone entre sus herramientas casco, espada y guadaña. Come 7 tipos diferentes de gallos y se le pone una cabeza de guinea adornada con cuentas blancas. Odd/a a1uesí* Tiene pacto con Babalú Ayé. Es el que lleva, fuera de su sopera, un esqueleto de plata adornado con cuentas. Otros caminos importantes son: Oddúa ataná, Oddúa apiticó-abelli, Oddúa obaibó y Oddúa akualosiña. Culto a Egun Es indudable que la atención a los antepasados es una actitud innata en los 63 feligreses de las mayorías de las religiones, y la Santería no es una excepción. Hablar de Egun es lo mismo que hablar de los espíritus y la atención que muestran los Yorubas a sus antepasados es una actitud característica de su cultura y va más allá de un reflejo religioso. Sus principios filosóficos se orienta a resaltar en forma fehaciente el valor que tenía la persona cuando vivía recordando sus aptitudes. De esta forma es casi obligado mantener una conexión con estos seres aún después de que partieron, como una especie de recompensa por lo bueno que hicieron en vida, además de mantener un canal abierto para ser protegidos, guiados y aconsejados desde el otro mundo. En la regla de Osha o Santería los requerimientos de Egun se conocen a través de los oráculos adivinatorios de la religión, gracias a ellos Egun puede manifestar sus necesidades con la finalidad de mantener una armonía entre el plano terrenal y el plano que ellos habitan y poder así mantener una relación de ayuda y guiatura para favorecer a sus protegidos aquí en la tierra. En los oráculos, Egun también puede resaltar la necesidad de realizar una “misa de investigación espiritual¨ para definir de manera más precisa algún problema o manifestar mensajes de importancia relevante. En dichas misas Egun puede manifestarse en el cuerpo de algún médium o en su defecto transmitir mensajes a través de la videncia de una persona receptora. La atención a Egun es de suma importancia si se quiere mantener la armonía y la eficacia a la hora de la realización de ceremoniales en la religión Yoruba. Una de las reglas principales de esta religión es la de atender a Egun o como se les llama comúnmente, a los muertos, antes de comenzar cualquier ceremonia. Esto resalta aquel proverbio religioso Yoruba que reza, “Ìkú lobi Osha¨, lo cual quiere decir, “el muerto parió al Santo¨. De esta manera podemos observar que antes de que comience cualquier ceremonia de envergadura como imposición de collares de fundamento, rezar un ozain para darle nacimiento a un fundamento o consagrar a una persona en santo, siempre se le pregunta al Egun con el oráculo de los cocos, si está conforme con lo que se está haciendo, algo que aprovechará para manifestar algún mensaje o necesidad, si así lo requiere. La atención a Egun es de suma importancia si se quiere mantener la armonía y la eficacia a la hora de la realización de ceremoniales en la religión Yoruba. Una de las reglas principales de esta religión es la de atender a Egun o como se les llama comúnmente, a los muertos, antes de comenzar cualquier ceremonia. Esto resalta aquel proverbio religioso Yoruba que reza, “Ìkú lobi Osha¨, lo cual quiere decir, “el muerto parió al Santo¨. De esta manera podemos observar que antes de que comience cualquier ceremonia de envergadura como imposición de collares de fundamento, rezar un ozain para darle nacimiento a un fundamento o consagrar a una persona en santo, siempre se le pregunta al Egun con el oráculo de los cocos, si está conforme con lo que se está haciendo, algo que aprovechará para manifestar algún mensaje o necesidad, si así lo requiere. Esta ideología Yoruba con respecto a los muertos parte de la idea de que algunos Santos fueron muertos antes de llegar al nivel de orisha, o seaque tuvieron que evolucionar sus imperfecciones aquí en la tierra a pesar de que poseían una esencia 64 divina dentro de su ser. En nuestro continente se acostumbra a atender a Egun a través de la bóveda espiritual, en donde se canaliza la energía de espíritus guías y familiares difuntos gracias a rezos, oraciones y peticiones en un pequeño altar compuesto por vasos con agua, la luz de un velón y ofrecimientos como tabaco, café, miel, aguardiente, frutas, flores y comidas de las que le gustaban a los difuntos. Entre los Santeros existe una manera muy usual de atención a Egun y es a través de una cazuela o tinaja de barro. Dentro de ella se depositan una variedad de elementos que al conjugarse mantienen la energía de los muertos en el lugar donde se coloca dicha cazuela, lo cual se hace generalmente al pie de la bóveda espiritual o si la persona vive en una casa el lugar adecuado podría ser el patio. En esta cazuela se atiende a los muertos afines con las ofrendas antes mencionadas, además de la sangre de algún animal sagrado cuando es necesario realizar algún trabajo de relevancia. Entre los Yorubas existen 3 agrupaciones o sociedades que se encargan de realizar ceremoniales de profunda envergadura a Egun. Estas sociedades datan de los tiempos más antiguos y llevan por nombre: Ogboni, Gelede y Egungun. !ociedad Ogboni Esta sociedad esta radicada en la ciudad sagrada de Ìlé-Ìfé y se dedica a practicar uno de los cultos más antiguos, basado en la preservación del espíritu de la tierra. Para los Yorubas la tierra es sagrada porque fue lo primero que creó el orisha Oddúa, por lo que los Ogboni enseñan como tratar a la misma de la mejor manera para mejorar su producción y así respetar el legado que Oddúa les dejó. Otra de las actividades de la sociedad Ogboni es la de detectar las ofensas hechas al espíritu de la tierra para luego penalizar rigurosamente a los culpables. Las ceremonias hechas por esta mística agrupación se realizan en un sitio sagrado y están signadas por la presencia de abundantes ofrendas y el toques de 4 tambores rituales que llevan por nombre Agba. Gracias a su poder espiritual, los Ogboni han podido escalar posiciones a nivel social y político, diferenciándose entre los demás gracias a un ornamento que los identifica, un bastón llamado Edán hecho de hierro y en cuyos extremos resaltan dos figuras, una femenina y otra masculina. !ociedad 4elede La sociedad Gelede está conformada sólo por mujeres y se desarrolla principalmente en los estados nigerianos de Keto, Ìfonyin, Shabe y Egbado. Su propósito principal es el de mantener la descendencia de la comunidad desde el origen de las familias y la preservación de la ética que debe imperar en sus comunidades. Para ello invocan a sus espíritus ancestrales a través de una ceremonia llamada Efe, en donde suenan constantemente los tambores rituales y las mujeres elegidas llamadas Ìyamí, bailan luciendo máscaras con figuras masculinas o en forma de monos, mientras recitan poemas que hablan sobre la historia del nacimiento de la ciudad de Keto, donde se cree que nació esta sociedad. Además hacen un recuentos sobre los eventos más importantes acaecidos en esta ciudad en sus aspectos social, histórico y espiritual, dando a su vez consejos para mantener la unión de sus comunidades. Generalmente las Ìyami son devotas del culto a Yemayá, la madre del mundo, 65 buscando quizás a través de ella la preservación de su ancestral organización social. Ellas infunden en sus comunidades un efecto de paz, tranquilidad y armonía en torno a la creencia de un poder femenino que enfrenta a la muerte permitiendo que prevalezca el milagro de la reproducción de la vida. !ociedad Egungun Esta sociedad fue creada en el imperio de Oyó y su fundamento principal es enaltecer a los espíritus de sus ancestros, los cuales son llamados Egun. Sus ceremonias se caracterizan por la posesión de uno o varios de sus miembros mientras usa una máscara ritual. La base de sus creencias es la de que los espíritus de sus ancestros pueden volver momentáneamente al cuerpo de los iniciados en esta sociedad para comunicarse con sus descendientes. Un Babalawo es el que le coloca la máscara al miembro de la sociedad que tomará el trance y quien lleva por nombre Agbagungun. Esta máscara lo ayuda a conectarse con el mundo donde habita Egun y a su vez no permite que el Agbagungun sea identificado mientras se desarrollan las festividades. Además de la máscara el individuo luce una vestimenta de variados colores que lo cubren de la cabeza a los pies. Las ceremonias de la sociedad Egungun se realizan entre los meses de Mayo y Junio en un festival llamado Ìkenlé, siendo una de las festividades nacionales más importantes dentro de la cultura Yoruba y respetada por los demás territorios debido al gran poder místico que representa. Este festival dura ocho días y comienza con ceremoniales secretos en donde sólo participan los sacerdotes Egungun. Entre estos sacerdotes no se permiten mujeres y su máximo representante recibe el nombre de Alagba, siendo éste asistido por otros de menor rango llamados Alaran, Ejorun y Aken. Estos personajes son identificados gracias a un bastón ritual con el cual indican el camino que debe seguir la procesión mientras los Egun, ya posesionados del cuerpo de los Agbagungun, van por la ciudad en dirección a la casa del rey. Cabe destacar que el simple hecho de tocar a un Agbagungun o a un sacerdote en ese importante momento, es incurrir en un grave delito que inmediatamente será duramente pagado. Luego de que el rey le rinde homenaje a los Egun, estos emprenden su rumbo a un lugar preparado para ser festejada su presencia en donde emitirán consejos y bendiciones a sus descendientes, todo desarrollado en un ambiente de regocijo en donde los tambores no dejan de sonar. Los collares de !anto La iniciación a la regla de Osha o Santería se logra con la imposición de los collares de Santo, también llamados Elekes o Ìñales en el dialecto lucumí. Estos collares sagrados son ceremoniados adecuadamente bajo los secretos de la regla de Osha, o sea que tanto los rituales para preparar los collares como la ceremonia de entrega de los mismos deben ser realizados por un Santero o Santera 66 consagrados; sólo ellos tienen el ashé para energizarlos ya que los mismos son ceremoniados en las soperas que contienen los fundamentos sagrados donde viven los Orishas. Si se realizan estrictamente estas ceremonias, la persona que los recibe puede obtener los beneficios que estos collares brindan. En dicha imposición se entregan cinco collares que representan, según sus colores, a los cinco Orishas fundamentales de la religión Yoruba: Elegguá, Obatalá, Yemayá, Shangó y Oshún. Hay otros collares que pueden ser entregados en ese momento trascendental y dependerá del "ángel de la guarda" u Orisha que rige a la persona. Esto quiere decir que si, por ejemplo, la persona ceremoniada es hija de Oyá debe recibir los cinco collares antes mencionados más el de Oyá. De esta forma se puede presentar el caso de que el ángel guardián de la persona sea: Babalú Ayé, Oggún, Oshosi, Aggayú, Ìnle, Olokun, Orishaoko, Obba, etc; si esto ocurre se ponen los cinco collares fundamentales más el del Santo u Orisha que rige a la persona. Debido a esta situación es recomendable llevar a la persona al "pie de Ìfá", antes de la ceremonia de imposición de collares, para determinar con exactitud cual es el Orisha que lo rige, no sólo por lo antes expuesto sino también para evitar la relación entre "Santos con Prohibición". Esta prohibición existe entre los hijos de Oyá y Shangó, los de Oyá y Yemayá, además entre los de Shangó y Oshún. Esta es una prohibición ritual y se debe respetar para evitar problemas serios que van desde la ruina económica hasta problemas mentales que puede presentar el agraviado. De esta forma un Santero o Santera que tenga coronado Oyá, y tenga cierto grado de responsabilidad, debe eximirse de realizar cualquier tipo de ceremonia a los hijos Yemayá y de Shangó. Ìgualmente un padrino o madrina hijos de Yemayá o Shangó no pueden hacer ningún tipo de ritual a los hijos de Oyá. Esto mismo sucede con los Santeros hijos de Oshún, los cuales no deben hacer nada a los hijos de Shangó y viceversa, aunque muchas "casas de santo" no le dan mucha importancia a esta prohibición entre Oshún y Shangó. $or %u& se ponen los collares Normalmente la necesidad de que una persona reciba los collares de Santo es manifestada a través de los oráculos adivinatorios de la religión. Allí el Santo define si la persona necesita los collares, por diferentes razones: para mejorar su salud, por protección, por una vocación espiritual que se va a desarrollar con el tiempo, porque la religión está en el camino de la persona la cual se hará Santo en el futuro, para mejorar las condiciones de vida de la persona, etc. Cualquiera que sea el caso, la persona debe seleccionar un Santero o Santera responsable con la cual se va a unir espiritualmente bajo el vínculo de padrino-ahijado (o madrina- ahijado) siendo los Orishas intermediarios en esta unión. Las ceremonias se realizan en un ambiente de tranquilidad y emotividad. Generalmente se efectúan en la casa del padrino o madrina, y con la ayuda de la Oyugbona, quien es un Santero o Santera que se desempeña como asistente en todo el ritual. Ese día se realizan varias ceremonias secretas que tienen la finalidad de preparar y armonizar los planos físico, mental y espiritual de la persona para que el encuentro con los Orishas sea óptimo. Las ceremonias son realizadas por el Padrino o la Madrina y la Oyugbona, y supervisadas por los Orishas y los espíritus guías de la persona que se va a iniciar. Ellos determinan, a través del "oráculo del coco", si 67 están conformes con los que se está haciendo y si la persona está lista para recibir los collares; si es así, se procede a la ceremonia final en donde se emiten cantos y rezos en dialecto Yoruba mientras se colocan uno a uno los collares al iniciado, ceremonia que se realiza en el cuarto de Santo del Padrino para que los Santos, en sus soperas, sirvan de testigo. Al finalizar el ritual, el Padrino y la Oyugbona explican las reglas que debe respetar el nuevo iniciado en el nuevo mundo donde a entrado. En ese momento se le explica lo que debe o no debe hacer con los collares, además del significado del compromiso de respeto que debe tener hacia sus padrinos y hacia la religión. Elemento de la cultura Yoruba En este artículo se ha querido explicar, sin entrar en los secretos ritualísticos de esta ceremonia, la verdadera manera de poner unos collares de Santo. Como se a podido apreciar, una persona que no tenga las consagraciones debidas no puede poner estos collares sagrados, que son la representación de los Orishas Yorubas a través de elementos decorativos de una cultura ancestral y sacramentados con la energía de estos, obtenida de las soperas en donde están los fundamentos sagrados que sólo los Santeros poseen. Se puede decir entonces que los actuales Santeros son los herederos de los antiguos secretos Yorubas, por lo tanto, ni espiritistas, ni brujos, ni el que hecha las cartas, ni espíritus posesionados, ni el que lee el tabaco, ni nadie que no sea Santero, puede hacer ceremonias para poner los collares de los Orishas Yorubas. Estos collares se diferencian uno del otro por los colores que representan a cada Orisha. De esta manera tenemos que el collar de Elegguá está hecho con los colores rojo y negro, el collar de Obatalá es básicamente de color blanco, el de Yemayá va desde el azul claro hasta el azul más oscuro, el de Shangó es rojo con blanco, el collar de Oshún puede tener variaciones entre los colores amarillo, naranja y miel, el de Oggún es verde con negro, el de Oshosi se hace con combinaciones de azul con miel, el de Oyá lleva cuentas marrones combinadas con cuentas marrones con rayas negras, etc. Estos son los colores básicos de los collares que representan a cada Orisha, teniendo una ligera variación en los Santos que tienen "caminos". Por ejemplo, al collar de Obatalá Ayágguna, que es guerrero, se le pone unas pocas cuentas rojas para diferenciarlo. En el caso de Obatalá Alaggema se le ponen, al collar blanco original, cuentas verdes para identificar el camino del primer Obatalá que llegó a la tierra en forma de camaleón para supervisar las primeras actividades que surgieron en el mundo después de ser creado. De esta forma se colocan cuentas de otros colores, según sea el caso, a los collares de los Orishas que tienen diferentes caminos, tales como: Obatalá, Yemayá, Oshún, Adsojano, etc. Muchos Santeros y Santeras entregan a sus ahijados collares con los colores del camino de sus Santos, por lo que siempre se observan ciertos detalles diferentes entre ellos a pesar de que son del mismo Santo. En otro artículo extenderemos más sobre tema de los caminos de los Santos para que se conozca más al respecto. Antiguamente no existían las cuentas plásticas que conocemos ahora, los Yorubas usaban cuentas hechas en madera y pintadas con extractos vegetales, dándole los múltiples colores que representan a cada Orisha. 68 Como ya se explicó anteriormente los collares de Santo son un fundamento sagrado de la religión Yoruba que merece un profundo respeto, tanto al momento de recibirlos como en su uso cotidiano. Los Yorubas los usaban, a la vista del mundo, como un adorno característico de su cultura, pero en realidad el verdadero sentido de su uso era el tener siempre consigo la poderosa energía de los Orishas. Las reglas que rigen la imposición y el uso de los Elekes de Osha se originan en la tradición Yoruba y estas no se pueden cambiar por capricho o desconocimiento, por lo tanto quienes que tengan interés de transitar por los caminos de la tradición religiosa Yoruba deben informarse con las personas que dominen el tema a fin de evitar errores como el de "lavar los collares con agua de coco para refrescarlos". Esta es una grave equivocación ya que el agua de coco le quita el ashé a los collares, lo único que se lava con agua de coco son los fundamentos de Babalú Ayé. Como este hay ciertos errores que se ven a diario en la práctica de la Santería, sobre todo en personas que no son consagradas y la practican sin la licencia de Olofi y los Orishas, creando problemas a las personas con fe. La imposición de collares es el primer paso que se da para obtener el beneficio de los Orishas. Las ceremonias para entregar este fundamento fueron creadas por Olofi y son supervisadas por los Santos, por lo tanto si no se realizan de la manera correcta, no tiene sentido hacerlas ya que no tendrán la aprobación de los Orishas ni de Dios mismo 9ari Oc)a* Ceremonia de )acerse !anto En muchas ocasiones ustedes habrán escuchado la expresión: "Esa persona tiene santo hecho" o "Tengo hecho Yemayá", también se puede escuchar frecuentemente cuando alguien dice: "Mi madrina le va a hacer santo a fulano". Estas y muchas otras expresiones se usan mucho en el ámbito de la santería y lo que quieren decir es que van a consagrar o están consagrados como olochas, en otras palabras, como santeros o santeras. De eso se trata el Kari Ocha, es la ceremonia que logra que la esencia de un oricha se integre al cuerpo y espíritu de una persona. Los motivos para consagrar a una persona en la regla de ocha son básicamente los mismos por lo que se le ponen los collares de fundamento: por salud, por devoción, por tradición, por vocación religiosa o porque un oricha reclama a su hijo para ser consagrado. Hay que regirse por los oráculos de Ìfá o por los caracoles para determinar el momento en que la persona debe consagrarse, no puede ser por capricho. Por más que la religión se vea llamativa, siempre hay que esperar el momento adecuado para hacerlo, además es bien sabido que la religión no es para los que no comparten ésta creencia religiosa, por lo tanto no se debe presionar a nadie para que se integre a ella sin motivos, sólo se debe hacer si los oráculos manifiestan la necesidad de realizar los rituales. Ìnclusive podemos citar el hecho de que en la antigüedad a los que realmente se les hacía santo era a los reyes yorubas, descendientes directos de Oduduwa, y a sus más cercanos contribuyentes. Cuando la religión llegó a América, traída por los esclavos, la situación cambió radicalmente, ya las consagraciones tenían una motivación fundamentada en la sobrevivencia. Actualmente las cosas han cambiado y las puertas de la religión 69 están abiertas para todo el que la necesite pero, como dijimos antes, hay que esperar a que los oráculos determinen el momento para la consagración. Lo primero que se debe hacer antes de consagrarse en santo es saber exactamente cuál es el ángel de la guarda u oricha regente del aleyo o iniciado, ese es el que va a su cabeza en el momento de la consagración, no puede ser otro, por lo que un padrino o madrina responsable debe llevar a su ahijado al "pie de Ìfá" para que Orula diga cuál es exactamente el oricha que va a ser coronado. Muchas casas de santo averiguan el ángel de la guarda del aleyo con los caracoles, cosa que no debe ser, debido a que Orula es el que tiene la potestad de hacerlo. Esto nace en el oldun "Osa - Ìroso", donde un patakí cuenta que Obatalá por ser el dueño de las cabezas cada vez que a alguien había que hacerle Kari Ocha, se le hacía Obatalá. Debido a esto los demás orichas se quejaron ante Olofi y éste determino que el ángel de la guarda de los humanos lo determinaría un oricha imparcial, o sea, un oricha que no fuera a la cabeza de nadie, por eso es que Orula es el que determina los ángeles de la guarda, porque Orula no se corona. Ya sabemos que muchas casas lo hacen con los caracoles en estera debido a una costumbre cubana fundamentada en el hecho de que en cierta época, en Cuba, escaseaban los Babalawos y tenían que resolver la situación con sus caracoles. Esta costumbre se ha mantenido en algunas casas pero hoy en día hay suficientes babalawos honestos para que se haga el registro de la manera debida. Luego de saber el oricha regente, el padrino o madrina y la Oyugbona prepara el santo, el cual va a durar 7 días. El primer día se hace un ceremonial en donde se le informa a Olofi que una cabeza va a ser consagrada en la Tierra y la que se encarga de dar la información es Ochún. Posteriormente, al día siguiente, se realiza la consagración en donde están presentes la madrina o padrino, la Oyugbona, varios Santeros, uno o más Babalawos y el Obá, quien es el que va a dirigir todo el ceremonial y se va a encargar de llamar, con cantos y rezos en lengua yoruba, a todos los orichas, conjuntamente con los elementos de la Naturaleza para que consagren esa cabeza. Ese día, además de la consagración, nacen los fundamentos secretos del nuevo olocha. Dice la historia que antiguamente se entregaba solamente el secreto del oricha tutelar y el de Elegguá, pero ahora se entregan los todos los orichas principales. El día siguiente es el llamado "día del medio" y es donde se corona al recién consagrado como un nuevo Rey Yoruba. Esto se realiza en un trono hecho con hermosas telas, y todas las personas presentes, consagradas o no, tendrán la oportunidad de compartir junto al Ìyawó, un festejo con música, tambores y un gran festín. Posteriormente al "día del medio" viene el "día del Ìtá" o "lectura del porvenir". Ese día está destinado para que los orichas hablen por medio de los caracoles y emitan los consejos que el Ìyawó deberá tener en cuenta durante el resto de su vida. Los siguientes días son de descanso hasta que llega el "día de la plaza", en donde el Ìyawó va al mercado acompañado de su Oyugbona para comprarle frutas a los orichas. Luego es acompañado hasta su casa, con sus orichas y a partir de ese momento deberá vestir de blanco durante un año, además de seguir y respetar ciertas reglas de las cuales hablaremos en uno de los artículos de nuestro próximo número. * 70 Hacerse el santo ayuda a las personas a encontrar la salud, el bienestar, la prosperidad y la evolución espiritual, pero hay que tener en cuenta que se adquiere un compromiso de respeto hacia los orichas, la religión, los mayores y hasta consigo mismo, porque seguir las normas y consejos que nos dan los orichas a la hora de consagrarnos nos ayudarán, como una eficaz guía para vivir una vida mejor. Bemb&* El Ritmo de los Oric)as Un bembé es una fiesta para los orishas. Durante un bembé los orisha son alabados, saludados e implorados para que se unan a la fiesta montando a uno de sus sacerdotes presentes. Esto se hace a través de una confluencia de la canción, el ritmo y el movimiento, llamando al orisha de forma que se reconozca a sí mismo en la lírica, ritmos y danzas que han sido interpretados para ellos quizás por miles de años. Los ritmos juegan una parte importante en esta ecuación y los tamboreros practican asiduamente por anos para poder tocar los intrincados ritmos correctamente. Esto es importante porque los tambores realmente le hablan a los orishas debido a que el lenguaje Yoruba es tonal, y los tambores han sido afinados de forma que toquen las diferentes tonalidades de la lengua Yoruba. Por esta razón algunos ritmos nunca se tocan a menos que sea dentro de un contexto Religioso u ofendería al orisha. Estos ritmos son en realidad rezos a los orishas, teniendo cada orisha sus propios ritmos asociados con ellos. El baile o danza también se convierte en oración dentro del contexto religioso de un bembé. Los movimientos de las danzas son los mismos movimientos que han sido asociados con los orishas por miles de anos. Como sucede con los ritmos que se tocan con los tambores, cada orisha tiene su propia danza, la danza de Yemayá emula el movimiento de las olas, la de Ogun él corte con el machete, la de Oshun representa la forma en que ella se acicala frente al espejo de mano, etc. Por tanto, estos movimientos se convierten mas en rezos bailables que lo que los europeos occidentales se referirían como a un baile. Todo lo que esta presente en un bembé, así sea canciones, bailes, ritmos o colores que se usen, forman parte de un intrincado tejido de oraciones, saludos, ruegos y llamados a los orishas, pidiéndoles que estén presentes y llamando a los orishas para que estén con nosotros. Ebo 6!acri-icio7 El sacrificio de animales es solo una pequeña parte de la definición mucho mas amplia de lo que es el ebo (sacrificio u ofrenda) en la religión. Hay muchas categorías de ebo. Estas son ofrendas como Addimú, que puede incluir velas, frutas, dulces o cualquier numero de artículos o acciones que puedan ser 71 apreciadas por las deidades u orishas en la religión. A través de adivinación, los orishas pueden pedir una fruta o platillo favorito, o pueden requerir que la persona le preste atención a un consejo que le hayan dado. A veces, pueden pedir que la persona deje de ingerir bebidas alcohólicas o cualquier otra practica que no sea aconsejable para este individuo. Pueden requerir que una persona use cierto tipo de joyas, reciba iniciaciones o cualquier numero de otras cosas. O pueden pedir el sacrificio de un animal, usualmente un pollo o una paloma, para que así el orisha venga en su socorro. Como regla, el sacrificio de animales se realiza solo en situaciones de envergadura, como por ejemplo enfermedad o serio infortunio. Los animales también son ofrecidos cuando un nuevo sacerdote es consagrado al servicio de su orisha durante el proceso de nacimiento o iniciación. En todo nacimiento, hay sangre. En nuestra sociedad moderna nos hemos distanciado del concepto de la muerte. Aun nuestros muertos son embalsamados para hacerlos lucir como vivos. Cuando compramos carnes para comer o piel para usar se han procesado de antemano para apartar del comprador el hecho de que una vida fue tomada para que otra pueda vivir. Las carnes son envueltas en plástico con un pequeño papel toalla para absorber la sangre que pueda recordar al comprador de la muerte del animal. Al comprador también se le mantiene ignorante de las circunstancias que rodearon la vida del pobre animal y, por supuesto, su muerte. Cuando los animales son sacrificados en el matadero hay muy poco respeto o consideración por ese animal, lo único que importa es que los animales sean sacrificados de una forma barata y en grandes cantidades para suplir el siempre creciente mercado de las carnes. En otras palabras, estos animales también son sacrificados, aunque la única deidad venerada en este caso es la ambición. También debemos tener en cuenta que solamente la industria avícola mata más animales en un día de lo que la religión ha sacrificado a través del mundo en los últimos siglos! Por otra parte, cuando un animal es sacrificado en La Regla Lucumi es hecho ante todo con el máximo respeto. Respeto por el Orisha al que se le ofrece el sacrificio de esta vida y respeto por la pequeña ave cuya vida es tomada para que nosotros podamos vivir mejor. Se debe cuidar bien al animal porque es propiedad del orisha. De hecho, algunas veces el orisha dirá que el animal no debe morir, sino vivir con la persona, y el orisha espera que ese animal como suyo, sea bien cuidado y mimado. Al comienzo del sacrificio, cuando se trae el animal, hay una canción y acción que interpretamos en reconocimiento que un día nuestras vidas serán tomadas de súbito de manera parecida a la de los animales. En este sentido nuestra Religión difiere muy poco a la de los indígenas americanos. En esto hay un respeto por toda vida, y un respeto por la muerte que debe llegarnos a todos, incluyendo a nosotros mismos. Después del sacrificio, si el animal no fue utilizado para limpiar a la persona de enfermedad o infortunio, es comido por todos los participantes. Si por lo contrario, fue utilizado para limpieza, el animal se lleva al lugar que el orisha solicite para completar el ofrecimiento. Este animal no debe ser comido porque estaríamos comiendo la enfermedad o el infortunio que fue removido de esa persona. 72 Así sea el ebo algo tan sencillo como una manzana o un pequeño pollo, siempre debe ser ofrecido con las dos manos y un corazón abierto. Rayamiento EN LA MAYORÌA DE LAS ÌNÌCÌACÌONES AFRÌCANAS, LO PRÌMERO QUE SE MARCA ES LAPÌEL. SE CREEE QUE LA PÌEL ES LA FRONTERA ENTRE LOS MUNDOS ÌNTERÌORES DEL ÌNDÌVÌDUO -EL CONSCÌENTE, EL SUBCONSCÌENTE, Y EL ÌNCONSCÌENTE - EL MUNDO DE LOS SUEÑOS, LAS EMOCÌONES, LA SEXUALÌDAD Y LAS CREENCÌAS, Y EL MUNDO EXTERÌOR, LA SOCÌEDAD EN LA QUE SE VÌVE EL MODO DE MARCAR LA PÌEL, CON CUHÌLLO, ESPOLÓN DE GALLO, E ÌNCLUSO A TRAVÉS DEL ASTRAL DEL PONTO REALÌZADO CON LAS PÌNTURAS RÌTUALES, EL PROPÓSÌTO ES EL MÌSMO; SE TRATA DE UN TALÌSMÁN, EL LENGUAJE GRAFÌCO DE LOS SÌGNOS, QUE PROTEGEN CONTRA LOS ESPÌRÌTUS MALEFÌCOS, Y QUE GANA EL FAOVR DE LOS DÌOSES, Y DEL FUMBÌ REPRESENTA LA MUERTE DEL ÌNDÌVÌDUO, QUE DA LUGAR AL RENACÌMÌENTO A UN ESTADO DÌFERENTE, MARCADO POR UN RÌTO DE PASAJE ES UN EMBLEMA MNEMOTECNÌCO (UNA ÌNDÌCACÌÓN VÌSUAL DEL DOLOR SOPORTADO EN EL MOMENTO DE MARCAR LA PÌEL, Y UN RECORDATORÌO CONSTANTE DE LAS ENSEÑANZAS RECÌBÌDAS Y DEL CONOCÌMÌENTO ADQUÌRÌDO DURANTE LA ÌNÌCÌACÌÓN SEÑALA LA PERTENENCÌA DEL ÌNÌCÌADO A UNA DETERMÌNADA FAMÌLÌA, CLAN O SOCÌEDAD Aoribale* !aludo Foribale es el saludo que se le da directamente a los orishas o a un Ìworo que ha "hecho Ocha" (que haya sido iniciado en el sacerdocio). Este saludo puede hacerlo cualquier persona que haya recibido los Ìlekes (collares). La palabra Foribale significa literalmente "poner la cabeza en el piso". Se refieren con esto al acto de postrarse ante el orisha, también se le conoce como "tirársele" o "el saludo del santero". Los Ìworos (santeros) son saludados también de esta forma porque ya ellos han pasado por el ritual del "kariocha" (ponerle al orisha en la cabeza). De esta forma la persona está saludando al orisha en la cabeza del Ìworo y no al ser humano. Es un acto de respeto al orisha y siempre debe hacerse cada vez que la persona se presente ante los orishas (o a un santero durante una ceremonia). Durante este saludo el Ìworo le dará la bendición de los orishas a la persona que lo está saludando. Siempre que haya una ceremonia, el iniciado de Ìlekes debe saludar primero a los orishas. Esto nunca debe hacerse en la ausencia de un Ìworo, pues es un santero el que debe levantarlo del piso después de darle la bendición. Después de saludar al orisha, el iniciado de Ìlekes se le "tirará" a la persona que lo ha bendecido mientras él estaba frente a los orishas. Después deberá saludar a sus padrinos de la misma forma, saludando a continuación a todos los sacerdotes presentes por orden de edad en la religión (una persona con 12 años de edad puede a veces tener 10 años "en Ocha"). Los santeros jóvenes también saludan a sus 73 mayores de esta misma forma, comenzando por sus padrinos que los parieron en la religión. Rendir Foribale o "tirarse" es hecho de una o dos formas, dependiendo de que el orisha tutelar de la persona sea masculino o femenino: Si el orisha es masculino (independientemente de que la persona sea hombre o mujer), la persona se tiende boca abajo en el piso, con la cara hacia abajo y los brazos a los costados del cuerpo. Si, en el caso contrario, el orisha es femenino (como Oshún o Yemayá), la persona se tira al piso de costado, primero del lado izquierdo recostada del codo, entonces se vira del lado derecho. Después que el iniciado de Ìlekes ha rendido foribale y ha sido bendecido o "levantado" del piso, se alzará y saludará al Ìworo cruzando los brazos en el pecho y acercándose al Ìworo diciendo "bendición" o "aché". Entonces se inclina primero hacia la izquierda y después a la derecha, tocando hombros con el sacerdote. Después que haya saludado a los santeros entonces se pueden saludar los unos a los otros haciendo el saludo de los brazos cruzados, sin decir "aché" o "bendición" pues ellos todavía no son sacerdotes. Saludar a un Babalawo o "Padre de los Secretos" es un caso especial. Ellos son saludados inclinándose la persona y tocando el piso con la punta de los dedos de su mano derecha, mientras dice "Ìború, Ìboya, Ìboshisé". Otro caso especial es el de un sacerdote de Ochosi, quien saluda a sus mayores hincándose sobre una rodilla, la mano derecha cruzada sobre el pecho, la izquierda hacia la espalda, con la cabeza inclinada. Este saludo muestra al mundo que es el hijo o hija del gran cazador Ochosi, pues este saludo evoca en cierta forma a un cazador de rodillas. $osesión* La Conta del Caballo La $osesión a trav&s del 3rance en La Regla de Oc)a La Posesión a través del Trance es una parte importante en nuestra religión. Durante un bembé o fiesta de tambores en honor de los orishas, un orisha puede ser convencido a unirse al festejo y entrar al cuerpo de uno de los sacerdotes consagrados a ese orisha. Nos referimos a esto como que la persona esta siendo "montada" por el orisha, o que el orisha "ha bajado" del cielo para estar con nosotros. Las canciones, ritmos y bailes son realmente una suplica deliberada a los orishas para que bajen y nos bendigan con sus consejos, limpiezas y su mera 74 presencia. Cuando un Orisha decide usar uno de nuestros cuerpos por un rato es, por supuesto, motivo de gran alegría para nosotros. Los orishas solo raramente montan a un aleyo o persona que no ha sido iniciada al sacerdocio, y en esas ocasiones usualmente señalan a esta persona como una persona que necesita ser iniciada en la religión como sacerdote o sacerdotisa. Esto no se le impone a las personas, ni tampoco es algo demoniaco como en el caso de películas como "El Exorcista", ni tampoco nadie escupe sopa de guisantes. Si alguien no esta listo, el orisha es delicadamente disuadido a alejarse hasta que la persona es iniciada y preparada para semejante ocasión. Y cualquiera que haya tenido la experiencia de haber sido "tocado" o realmente montado, le dirá los profundos sentimientos de alegría y sabiduría que acompaña a la presencia de esos grandes seres espirituales conocidos como orishas. Iya2o* La Esposa o Esposo del Oris)a El (uevo Iniciado En el primer día de la iniciación nacen el nuevo Ìyawo y sus orishas. Sus orishas son puestos en su cabeza, por lo tanto se reciben internamente de forma que el Ìyawo y sus orishas están inseparablemente unidos de por vida. En el segundo día, o Día del Medio, el Ìyawo es vestido en sedas y satines espléndidos, que insinúan la realeza ahora presente en el trono para recibir los visitantes que han venido a complacerse de la presencia del orisha y su nuevo esposo o esposa. En el tercer día, o Día del Ìta, el nuevo Ìyawo aprende lo que el futuro le depara. Uno a la vez, los orishas que el o ella han recibido le hablan dándole sus prudentes consejos. El Ìyawo se pasa el resto de la semana en el trono del orisha descansando y meditando acerca de la nueva vida que solo esta en sus comienzos. Por el resto del ano el Ìyawo se mantiene en un estado de protección que es lo conveniente para la esposa o esposo real del dios o la diosa. No deben permitir que nadie que no haya sido iniciado los toque o tome nada de sus manos. No pueden salir antes del mediodía o después de la caída del sol, y solo pueden vestir con ropas del mas puro color blanco. No pueden usar maquillaje ni ninguna joya, con la excepción de las pulseras y collares que recibieron durante su iniciación, y por los tres primeros meses deben comer sentados en una estera de paja la cual denota un espacio sagrado en la religión. También son bebes en esta nueva vida, por lo tanto no pueden utilizar cuchillo o tenedor para comer durante ese ano, o estar entre multitudes o ir a plazas de mercado. No deben mirarse en espejos o retratarse. Nada debe interferir con la comunión del Ìyawo con su orisha. A el o a ella se les debe llamar siempre por el nombre Ìyawo y no por su nombre propio y por cierto, cada vez que se les llama Ìyawo se les esta limpiando y separando un poco de la vieja vida que abandonaron en él momento de su iniciación. El Ìyawo es mimado y consentido por los santeros con los que entra en contacto. También son vigilados cuidadosamente porque el Ìyawo debe ser protegido a toda costa y no se les debe permitir que violen sus tabúes sagrados. Personas extrañas 75 o no iniciadas a menudo se confunden con los Ìyawoses, pues piensan acerca del Ìyawo como una persona que estuviese en el limbo, algo así como ser entre una "persona normal" y un santero, y no como el personaje sagrado que en realidad es. Durante el Ìyaworaje o ano durante el cual el Ìyawo sigue a su orisha, a medida que los dos se van conociendo el uno al otro íntimamente, se va formando la base de una vida "en Santo" y el entendimiento que son tan innatos de un santero. Un entendimiento basado en una comunión sagrada que dura para el resto de la vida..... y más. Las muBeres en la religión de i-a La religión de los Orisas Yorubas y sus Babaloshas (sacerdotes), apoyados en sus amplios conocimientos de botánica, mineralogía, zoología, etc., intentan conseguir el desenvolvimiento espiritual y material de los seres humanos, en la intención de evitar a éstos la mayor cantidad de tropezones en sus vidas, y para ello usan el oráculo de los Orisas denominado Diloggun. A los Babaloshas llegan constantemente personas de toda condición social en busca de solución a sus dificultades y, a través de las predicciones del Diloggun, además de señalarle las dificultades que se le avecinan, en la mayor parte de los casos ofrecen la ayuda a través de los Orisas, Eggun... para enfrentarlos positivamente; es decir, no sólo se usa para conocer lo que sucede, sino también para indicarnos que es lo que hay que hacer para solucionarlo. Puede decirse que es una forma de comunicarnos con las entidades superiores, con los Orisas, con nuestros ancestros, antepasados o Eggun, quienes proporcionan ayuda a nuestros problemas. En este artículo expongo las acciones litúrgicas directamente asociadas al Diloggun, a la vez que lo considero parte de mi humilde y personal colaboración para intentar erradicar la despiadada crítica que personas, sin el más mínimo conocimiento y sin haber sido parte personal de los ritos que en Osha se realizan, dicen que es una “secta¨ o que los rituales que en ella se practican son “magia negra¨. Por ello trato de exponer, con la mayor claridad posible, la apasionante, ancestral y profunda filosofía, liturgia y practica mágico-esotérica que se realiza en el Diloggun, ya que en ella no existe nada que no sea digno de ser expuesto. El Diloggun es la “boca¨ de los Orisas: 16 caracoles marinos que ellos utilizan para comunicarse, para enseñarnos la humildad, la caridad y el amor hacia el prójimo, tanto para no creyentes como para practicantes de Osha. Ayuda con sus consejos y nos advierte para enderezar nuestra vida, alivia nuestros corazones cuando estamos apenados, ayuda a vencer obstáculos... Requiere que quien lo use sea un Babalosha y que el Diloggun haya sido consagrado a través de las ceremonias de iniciación por las cuales estos tienen el “ashé¨ para que los Orichas, Eggun.... “hablen¨ por medio de ellos. 76 I-ismo el m&todo del dios i-a como adivinación EN CUBA, ESTE COMPLEJO METODO DE ADÌVÌNACÌÓN, PERTENECE EXCLUSÌVAMENTE A ORULA, DÌOS DEL FUTURO, Y DE LA VÌDENCÌA. EN AFRÌCA, BRASÌL, HAÌTÌ, PERTENECE A LA MAYORÌA DE LOS SACERDOTES, QUE SÌN SER BABALAWOS, (PADRE DE LOS SECRETOS), UTÌLÌZAN Y EMPLEAN ESTE METODO DE PENETRAR EN EL FUTURO. BOKONORS, VOUDUSÌS, OZAÌNÌSTAS, Y TATAS UTÌLÌZAN ESTE METODO, QUE NACÌDO EN LA LEGENDARÌA CÌUDAD DE ÌFE, TÌENE SUS ORÌGENES , EN DAHOMEY, AUNQUE PERFECCÌONADO POR LOS SACERDOTES EGÌPCÌOS DE HORUS. DE AHÌ LA PALABRA DE HORUS - RA (ORULA). ¿PERO QUE ES ÌFA?, ¿UN DÌOS?, ¿UN METODO?, ¿ORULA ES SU ÌNTERPRETE?, ESTAS DUDAS SE FORMULAN, POR MUCHAS PERSONAS, ESO SÌ EN SÌLENCÌO. NÌ LA MAYORÌA DE LOS BABALAWOS, HAN ANALÌZADO ESTAS CUESTÌONES, Y VER EL RESULTADO ANALÌTÌCO, DE LAS PREGUNTAS. EN EL POEMARÌO DE ÌFA, SOBRE EL QUE SE BASA EL ORACULO, HACE ENTREVER, QUE ORULA TÌENE LA POTESTAD ENTREGADA POR OLOFÌ (AUNQUE NO DEBEMOS OLVÌDARNOS, QUE EL PRÌMERO EN SER ADÌVÌNO FUE ONÌ CHANGO), DE VÌSLUMBRAR LA SÌTUACÌÓN DE LOS HOMBRES, SU PASADO Y SU FUTURO. EN AFRÌCA EL BABALAWO, ÌNTERPRETA ÌFA, A TRAVÉS DE LA NUEZ DE PALMA. PERO EL OPELÉ ES UN HERALDO DEL DÌOS DE ÌFA, QUE CREO DEBE DE SER UTÌLÌZADO, POR TODAS AQUELLAS PERSONAS (HOMBRES Y MUJERES), QUE CONOZCAN EL POEMARÌO DE ÌFA. ¿PERO QUE ES ÌFA? EN EL PRÌNCÌPÌO DE LOS TÌEMPOS HABÌA TRES DÌOSES PRÌMORÌDALES. - ECHU. - ORULA. - AGBONÌREGUN. -BARAÌFA. ORULA, DÌGAMOS, ES UN MEDÌADOR, UN PORTERO, QUE TÌENE LAS LLAVES DEL DÌOS SECRETO AGBONÌREGUN, EL DÌOS QUE SOSTÌENE AL MUNDO, DÌOS DUAL, BUENO Y MAL0 (BARAÌFA). REPRESENTA LA VÌSTA, EL PODER DE VER MAS ALLA, EN EL MUNDO DE LA ADÌVÌNACÌÓN. IFA ES ELA, HIJO DEL DIOS DE OLOFI, PERO SI NOS CEÑIMOS A LAS SAGRADAS ESCRITURAS DE IFA SOLAMENTE HA!LA!A CUANDO SE LE GOLPEA!A, "A #UE ERA MUDO ENTONCES COMO $A HA!LAR IFA, SI NO SE GOLPEA ELA SIGNIFICA SAL$ACI%N &POR#UE LAS MUJERES NO SE HACEN IFA' ACASO LOS HOM!RES TENEMOS MIEDO, DEL PODER DE ELLAS EN LA RELIGI%N LA TIERRA ES FEMENINA, LA LUNA TAMI!(N, RECORDEMOS #UE LA PRIMERA ORICHA, CON IFA, ES NANA !URU)U 8ue representa I-, Ìfá representa el pensamiento filosófico por excelencia, la sabiduría plena, el centro de ideas cosmogónicas y cosmológicas, la visión del mundo, las normas éticas que rigen las relaciones sociales de los hombres, la concepción de la 77 Naturaleza, la vida, la muerte, los preceptos orientadores de los hombres y su conducta frente a las fuerzas contrarias al bien. Ìfá como todo lenguaje de vida, simbólicamente se transmite por la vía de los Odu u Odun, signos o letras descifradores del mundo, observando el bien y el mal. Básicamente son 16, llamados Olodus o Mellis, a continuación los nombramos en el orden jerárquico dispuesto por los sacerdotes: Baba Eyiogbe, Oyekú, Ìwori, Oddí, Ìroso, Ojuani, Obara, Okana, Ogundá, Osá, Ìká, Otrupo, Oturá, Ìrete, Oché y Ofún. Asociados a cada signo hay un conjunto de versos, proverbios e historias ilustrativas llamados patakíes, donde se recrea el mundo simbolizado en tramas protagonizadas por los dioses yorubas, animales o personajes ligados al mismo signo. Ìfá habla en metáforas y parábolas. El diálogo que entabla el consultado con el sacerdote discurre en la estera perfilando la claridad del consejo de Orula. Existen otras letras del resultado de la combinación de los Odun básicos llamados Amulú o compuestos, en su totalidad serían 256 signos fundamentales que contiene este sistema adivinatorio. Del panteón de los dioses de la Santería o religión de los orichas, hay uno ligado al oráculo de Ìfá, Orula o Orunmila, el benefactor de los hombres, consejero y sabio, el encargado de interpretar Ìfá. Para la concepción de los creyentes, al nacer alguien, se debe presentar al Creador para saber su destino. Orula es testigo, por lo tanto es acreditado a orientar a los humanos para enfrentar la vida. Otra fundamentación estriba en que una vez concluida la Creación, Olofi (Dios), sube al Cielo cansado de trabajar, enviando posteriormente a Orula y a los otros Orichas a la Tierra a encargarse de los problemas humanos. Al principio el oricha Changó, dios del trueno y el fuego, era el encargado de la interpretación de Ìfá, pero a consecuencia de que sus permanentes batallas y guerras no le permitían consultar, le entregó los instrumentos de adivinación al viejo Orula. En otra versión es Elegguá, dios de las encrucijadas y los caminos, el que salva a Orula de la furia de su padre cuando era pequeño. En este patakí el padre de Orula ordena matar a todos los varones por la indignación que le produjo Oggún, dios del hierro y la guerra, al efectuar incesto contra su madre. Orula fue enterrado al pie de una ceiba y diariamente Elegguá la llevaba alimento. Con el tiempo fue perdonado y salvado de su entierro, luego Changó cortó de esa ceiba un tronco e hizo un tablero para adivinar y se lo entregó a Orula convirtiéndose éste en un famoso adivino entre la gente. Los argumentos anteriores son resúmenes forzados por razones de espacio de historia contenidas en el Oráculo de Ìfá, explicando el rol ocupado por Orula, así como los otros orichas, sus relaciones parentales, personalidades, caprichos e inconformidades. Los dioses africanos son distintos a lo acostumbrado, ellos se humanizan, poseen sexo, conciben, viven y tienen debilidades. Babala2os En analogía, Ìfá representaría la Biblia del cristiano o el Corán del Musulmán. Cada elemento del ceremonial y la ritualística de esta religión, su origen, la esencia de las ceremonias, en fin todo, Ìfá lo explica. No sólo en el campo de lo religioso, también en las normas que rigen la vida profana de los creyentes en los orichas. Para entablar un diálogo con Ìfá, los humanos se dirigen a los Babalawos, 78 sacerdotes del culto, únicos autorizados para consultar el ÌKÌN de Ìfá. Son seguidores de Orula, nombramiento que se recibe en una ceremonia de gran envergadura. Estos sacerdotes son fieles intérpretes de la máxima unidad sagrada, Ìfá-Orula. Son escogidos y privilegiados por este oricha entre los varones, ni siquiera los homosexuales tienen cabida entre ellos. Los hombres seleccionados pasan generalmente por una ceremonia primaria dirigida por babalawos, llamada "entrega de mano de Orula o Awofaca", donde la divinidad escogerá su futuro iniciado. En el caso de las mujeres esta ceremonia es un poco diferente y recibe el nombre de Ìcofá, lo cual es una representación de Orula, además de ser la mayor ceremonia de este culto para ellas, llegando al rango de Apeteví o ayudante de Orula. Las funciones de los sacerdotes están prescritas en Ìfá. Su autoridad para salvar a una persona de una muerte trágica repentina, colocándole el Ìldefá, pacto de Orula con la muerte, simbolizado en una pulsera de color amarillo y verde colocado en la mano izquierda. Otra función del Babalawo es la de iniciar a otra persona entregándole Elegguá, deidad principal junto a Oggún, Ochosi y Ozun. En conjunto son llamados los guerreros y de los que se dicen fueron iniciados en Ìfá, por lo tanto son entregados por los babalawos porque ellos conocen enteramente sus secretos, aunque el santero también tiene la potestad para entregarlos. Además de esto los Babalawos ejercen diversas funciones en la consagración de una persona con su oricha tutelar; averiguar con el oráculo cuál es su "ángel de la guarda" u oricha que le será consagrado, el ebbó de entrada y la matanza de los animales que confirmará la consagración del santo. La mencionada entrega de "Mano de Orula" y consagrar un nuevo Babalawo son órdenes de Orula y para esto se deben cumplir los requisitos antes mencionados, agregando una conducta moral intachable, ser varón definido y hacer cotidiana la humildad. No existe una organización jerárquica total en este culto, la circunstancia histórica no lo permitió. Existe un orden jerárquico por familias sagradas y relación de iniciados. Otro concepto jerárquico depende de la profundidad en el conocimiento del sistema de adivinación y ceremonias alcanzadas después de hacerse Babalawo. Las ceremonias posteriores a la consagración de Ìfá son recibir "cuchillo" u Wanaldo, autorización para efectuar matanza de animales de 4 patas, y la mayor consagración del babalawo, ser Omo-Odu, que es recibir Olofi. También se puede ser Oluo Babalawo, punto polémico entre nuestros informantes, ya que algunos afirman que es un Babalawo consagrado antes con su oricha tutelar, mientras que otros halan de que aquel Babalawo que consagra a otro hombre como Babalawo recibe el título de Oluo. Muchos colocan a los Oluos en la primera clasificación ya descrita, en fin el orden mencionado es respetado por la mayoría, agregándole el factor, tiempo de consagración o antigüedad, que es de mucho peso entre los sacerdotes. La representación material de Ìfá o los elementos simbólicos de su energía son los Ìkines o semillas sagradas, utilizadas en la adivinación conjuntamente con el tablero o Até, tabla de madera redonda. Al momento se le agrega un polvo sagrado, Ìyerosun, permitiendo visualizar las marcas hechas por el sacerdote en la manipulación de las semillas. Este acto memorable se denomina Tefar y es usado exclusivamente para ceremonias de mayor envergadura: la entrega de "Mano de Orula", las ceremonias de adivinación en la consagración de un Babalawo o en la "Apertura de Año". 79 Otro instrumento de permanente uso en la adivinación es el Opelé, una cadena de 8 cuentas, cada una con un lado oscuro y otro claro, y en donde se lee la letra u Odu luego de que el sacerdote la deja caer sobre el tablero. Hay otros instrumentos complementarios en ambos métodos de consulta, los denominados Ìbos: piedra pequeña, hueso, caracol, etc. Estos se utilizan en el proceso de la consulta para afirmar o negar las preguntas hechas por el Babalawo. Otro es el Ìruké, un rabo de caballo adornado usado para cubrir los Ìkines antes de tefar. Finalmente el Ìrofá, un tarro o cacho de venado que tiene múltiples usos: para la entrega del Ìldefá o para afirmar lo dicho por otro Babalawo, golpeando el tablero cuando se hace Ìtá, el arte de adivinar o leer el porvenir de una persona. Al referirnos a las jerarquías entre los Babalawos hablamos de las familias sagradas o la reinterpretación de los antiguos linajes interrumpidos por la esclavitud. Al llegar a Cuba estas familias se mantuvieron en la religión y se cree que los primeros Babalawos en esa tierra se remontan a la segunda mitad del Siglo XÌX, según datos aportados por la eminente investigadora Lic. Claudia Mola, Directora de la Casa de Africa en La Habana, y a quien agradezco parte de la información manejada. Estas ramas o familias de Ìfá aún se mantienen y algunas fueron lideradas por nombres de dignatarios como: Tata Gaytán (Ogunda-Fun), José Asunción Villalonga (Ogundá- Masá), Bernabé Menocal (Babá Eyiogbe), Bernardo Rojas (Ìrete-Dí), Ño Carlos Addebí (Ojuani-Chika), Quintín García (Oturaniko), Miguel Febles (Odi-ka) y muchos otros que agrandarían con sus nombres la historia de cómo permanece el culto de Ìfá en América. Como un aparte es importante aclarar que, sabiéndose del origen de este culto de Ìfá en Africa, algunos investigadores le ubican en el Siglo XÌ, similar a la geomancia desarrollada en el Medio Oriente y aún permanece. Llegado a Cuba entre finales del Siglo XVÌÌÌ y principios del XÌX, se expandió por parte de América encontrándose actualmente en Venezuela una gran cantidad de Babalawos. No representa internamente ninguna jerarquía haberse consagrado en Cuba, las razones del mismo Ìfá, su origen, las fundamentaciones de los lugares donde se ha expandido, entre otras cosas nos convencen que esta religión no pertenece a ninguna región o territorio especial, pertenecen al mundo. Sólo encontraríamos diferencias lógicamente, en la manera de efectuar algunas ceremonias, hecho que ocurre a menudo. Cómo investigadores no podemos impedir algunos cambios que ocurren. Nuestra función sería reseñarlos y analizar las distintas razones de estos cambios o si son oscuras intensiones para desvirtuar la esencia de este hermoso culto. A veces esto ocurre. 8ue es un Oba La regla de Ocha se caracteriza por la cantidad de ceremonias que se realizan en las diversas consagraciones que tienen objeto cuando una persona necesita del concurso de los orichas para estabilizar sus niveles de vida. En estas ceremonias deben estar presentes los padrinos y un grupo de santeros y santeras que trabajarán y serán testigos de las consagraciones. Puede ser que en estas consagraciones los santeros presentes y los padrinos constituyan un grupo de personas respetables y se hayan esmerado en la organización de los rituales a realizarse, pero si falta la presencia del Oriaté o Ìtalero, lamentablemente las ceremonias estarán incompletas. Con esto queremos decir que el Oriaté es un 80 personaje que debe estar presente en toda consagración de Ocha ya que él es el que dirige todos los ceremoniales gracias a los amplios conocimientos que tiene sobre la Santería o religión Yoruba. En pocas palabras podemos decir que el Oriaté es un santero que tiene extensos conocimientos sobre los cantos, rezos y ceremonias que se efectúan en el cuarto de santo a la hora de realizar las consagraciones. Este personaje tiene el conocimiento suficiente para estimular y llamar las fuerzas o energías de los orichas que van a participar en los rituales de ocha. La palabra Oriaté significa en lengua yoruba "cabeza sabia", etimológicamente podríamos descifrar dicha palabra como, Orí: Cabeza; y Até: Tablero de Ìfá. Recordemos que simbólicamente el Até o tablero de Ìfá representa el conocimiento y la sabiduría del mundo. Se sabe que todo el conocimiento no puede estar en una sola cabeza, como lo dice el signo Ogbe-Di, pero los oriateses deben instruirse cada día más para poder llevar con dignidad tan importante título, por lo cual deben mantener y ampliar sus conocimientos religiosos. La figura del Oriaté es respetada en cualquier casa de santo, sin importar su edad cronológica, ni su edad santoral, esto se debe a que es visto como un sacerdote mayor gracias a su gran conocimiento. Los conocimientos %ue tiene %ue tener un Oba La regla de Ocha se caracteriza por la cantidad de ceremonias que se realizan en las diversas consagraciones que tienen objeto cuando una persona necesita del concurso de los orichas para estabilizar sus niveles de vida. En estas ceremonias deben estar presentes los padrinos y un grupo de santeros y santeras que trabajarán y serán testigos de las consagraciones. Puede ser que en estas consagraciones los santeros presentes y los padrinos constituyan un grupo de personas respetables y se hayan esmerado en la organización de los rituales a realizarse, pero si falta la presencia del Oriaté o Ìtalero, lamentablemente las ceremonias estarán incompletas. Con esto queremos decir que el Oriaté es un personaje que debe estar presente en toda consagración de Ocha ya que él es el que dirige todos los ceremoniales gracias a los amplios conocimientos que tiene sobre la Santería o religión Yoruba. En pocas palabras podemos decir que el Oriaté es un santero que tiene extensos conocimientos sobre los cantos, rezos y ceremonias que se efectúan en el cuarto de santo a la hora de realizar las consagraciones. Este personaje tiene el conocimiento suficiente para estimular y llamar las fuerzas o energías de los orichas que van a participar en los rituales de ocha. La palabra Oriaté significa en lengua yoruba "cabeza sabia", etimológicamente podríamos descifrar dicha palabra como, Orí: Cabeza; y Até: Tablero de Ìfá. Recordemos que simbólicamente el Até o tablero de Ìfá representa el conocimiento y la sabiduría del mundo. Se sabe que todo el conocimiento no puede estar en una sola cabeza, como lo dice el signo Ogbe-Di, pero los oriateses deben instruirse cada día más para poder llevar con dignidad tan importante título, por lo cual deben mantener y ampliar sus conocimientos religiosos. La figura del Oriaté es respetada en cualquier casa de santo, sin importar su edad cronológica, ni su edad santoral, esto se debe a que es visto como un sacerdote mayor gracias a su gran conocimiento. Como ya se dijo, todas las ceremonias importantes deben ser conducidas por él, desde un Oro a Eggun hasta las ceremonias del Ìtuto o funeral yoruba, pasando por los cantos a 81 Ozain. Extendiéndonos en este último punto, una expresión popular entre santeros dice, "sin Ozain no hay santo", lo que significa que siempre se debe hacer un Ozain antes de cualquier consagración, esto consiste en realizar un mínimo de 16 cantos rituales a esta importante deidad para que bendiga el extracto de hiervas que se va a utilizar para purificar los elementos sagrados que se van a fundamentar en ese momento. Los cantos o suyeres son sumamente importantes en el trabajo del Oriaté, los debe realizar totalmente en lengua yoruba y cada uno va a tener una función específica en la consagración, por lo que debe conocer su significado para poder utilizarlos en el momento adecuado. Estos cantos van a variar según sea el caso, existen cantos para Egun (espíritus guías) en donde se le rinde tributo a los antepasados o a santeros, santeras o babalawos difuntos. Ya hablamos de los cantos de Ozain, los cuales deben hacerse un mínimo de 16 para poder consagrar las hiervas. También está el Oro de Ìgbodú o "cantos ceremoniales del cuarto de santo", los cuales son suyeres dedicados a los orichas. En el momento de la consagración el Oriaté canta en yoruba por lo menos tres suyeres a cada oricha, estos cantos son específicos y el Obá debe tener conocimiento de lo que está haciendo porque hay cantos para llamar a los santos y hay otros para calmarlos cuando se posesionan del santero y llegan aturdidos luego del largo viaje del cielo a la tierra. Además de los cantos, el Obá conoce con perfecta claridad todos los conceptos religiosos de los yorubas y el significado ritualístico de cada una de las ceremonias que realiza. Otra de las funciones del Obá-Oriaté (muchos piensan que así es como se debe llamar) es la de interpretar el mensaje de los orichas a través del "oráculo de los caracoles" en la ceremonia del Ìtá o "lectura del porvenir". Allí debe tener pleno dominio del oráculo además de los rezos de cada signo, los cantos del Nangareo (desayuno que se tiene con Olorun antes del Ìtá) y el "ebbó de estera", en donde el Ìyawó o recién consagrado, es limpiado gracias a la influencia de los signos y a los rezos que se hacen en cada uno de ellos. En el Ìtá el Obá-Oriaté manifestará su conocimiento sobre los patakíes o historias yorubas para extraer de ellos los mensajes que guiarán el camino del nuevo consagrado en una nueva perspectiva de vida. Como maestro de ceremonias en sus funciones también recae la responsabilidad de ayudar a los santeros desencarnados a encontrar el camino que los llevará a Olofi. En la ceremonia del Ìtuto, llamará a los oricha s y a los espíritus guías del santero difunto para que lo desprendan de la Tierra y lo lleven a planos superiores. LO! OR0C5LO! LO! OR0C5LO! YOR5B0! OBÌ. ORACULO DE BÌAGÜÉ. OBÌ APERE-TÍ. OBÌ ABATA. EL ORACULO DEL DÌLOGGUN. EL ORACULO DE ÌFA. Sabemos que a muchos les sorprenderá en lo que referente al ORACULO DEL OBÌ (COCO) aquí se expone y mas cuando se cree que solo existe una forma de adivinación a través de Él, cosa por cierto más lejos de la realidad ya que existen cuatro formas de consulta a través del OBÌ, y cada una tiene su propio nombre; siendo estos los siguientes: 82 EL ORACULO DEL OBÌ. EL ORACULO DE BÌAGÜÉ. EL ORACULO DEL OBÌ APERE-TÍ. EL ORACULO DEL OBÌ ABATA. De estos oráculos unos son utilizados por los BABALOSHAS e ÌYALOSHAS y otros por los BABALAWOS, pero esta aclaración la dejaremos para hablar extensamente de ella en otro artículo el cual llamaremos LAS CEREMONÌAS DE ÌFA-OSHA "SUS ORACULOS". Pero como adelanto del mismo en este artículo daremos a conocer las características de los oráculos mencionados anteriormente. 1.- EL ORACULO DEL OBÌ. En esta modalidad lo que conseguimos son respuestas simples de "SÌ" ó "NO", en las preguntas realizadas tanto a los ORÌSAS como a EGUN. Sabemos que la respuesta es positiva o negativa según en la posición en que caigan, teniendo las siguientes posibilidades: ALAFÌA= SÌ EJEÌFE= SÌ ÌTAWE= SÌ (aquí deberemos volver a repetir la pregunta, ya que el SÌ no es concreto.) OKANA= NO OKANA YEKUN= NO Debemos dejar muy bien claro, que en la modalidad del ORACULO del OBÌ, solo lo utilizamos para conseguir respuestas afirmativas o negativas a las preguntas realizadas. 2.- EL ORACULO DE BÌAGÜÉ ó ADÌATOTO. En esta modalidad se trata en mayor profundidad el registro o consulta, ya que en ella se buscará si la letra habla en ÌRE u OSOGBO, a la vez que se averigua por donde viene. El procedimiento es similar al registro con DÌLOGGUN, quizás no tan extenso como este, pero si podemos asegurar que es bastante efectivo. 3.- EL ORACULO DEL OBÌ APERE-TÍ. En esta modalidad nos encontramos 17 posibles posiciones y que a la vez en estas hablan en exclusividad una entidad, teniendo en cuenta el siguiente orden: 1.- ELEGBA 2.- OGGUN 3.- OSOOSÌ 4.- OBATALA 5.- SHANGO 6.- YEMAYA 7.- OSHUN 8.- OYA 9.- ORUNMÌLA 10.- ÌBEJÌS 11.- AGANJU 12.- YEWA 13.- OBBA 14.- NANA BURUKU 15.- EGUN 16.- ASOJANO 17.- OLOFÌN Como hemos dicho en este artículo denominado los ORACULOS, en otros articulos de nuestra revista daremos a conocer en toda su extensión este y los otros ORACULOS mencionados. 4.- EL ORACULO DEL OBÌ ABATA. Este es el oráculo más complejo en cuanto a las formas de registro en cuanto al OBÌ se refiere, siendo tan extenso y complejo como lo son EL DÌLOGGUN, EL OPELE y EL ATEPON ÌFA. Las posibilidades de combinaciones posibles son 4608. Podemos decir que este ORACULO es exclusivo de los BABALAWOS, ya que en él se encierra toda la sabiduría de ÌFA. También debemos de tener en cuenta que este oráculo se usa en consulta sobre el KEKEREOPON (Tablero propio del OBÌ ABATA) el cual simboliza el universo con sus fuerzas, elementos y puntos cardinales, incluyendo además en sí la representación del espíritu, el nacimiento ó renacimiento, la vida y la muerte respectivamente, lo cual está en plena correspondencia con la filosofía yoruba de la vida material y espiritual, que responde a un ciclo perfectamente reflejado en dicho tablero. (Del libro OBÌ del BABALAWO AWO 83 ÌFASHADE, el cual recomendamos, ya que creemos es el único libro que en toda su extensión trata el OBÌ ABATA). 5.- EL DÌLOGGUN. También conocido como EL LEGBA-KÌBA, de origen NAGO (yoruba). Muy utilizado por los adoradores de OSHUN y conocido en ÌLE ÌFE como LA ADÌVÌNACÌON DE ELEGBA. Este oráculo es usado también por otros grupos étnicos, pero su origen es NAGÓ al oeste de Nigeria y mas concretamente en LAGOS y en la porción Sur del estado de KWARA al SUR-OESTE de Nigeria y al ESTE de DAHOMEY. También se emplea este oráculo en el culto a ORÌSHANLA y a otras deidades denominadas blancas, así como rige en los cultos a ELEGBA (ESHU), OYA, SHANGO, OBA, YEMAYA, YEWA, OSOOSÌ, OGGUN.... es decir a todas las deidades del Panteon Yoruba excepto ORUNMÌLA. Podemos decir de Él que es un Oráculo tan prefecto como lo son los de ÌFA, con la diferencia que este ORACULO es propio y exclusivo de los BABALOSHAS e ÌYALOSHAS, al igual que el OPELE y el ATEPON ÌFA lo son de los BABALAWOS. Este oráculo lo componen 257 ODU. 6.- EL ORACULO DE ÌFA. Este sistema de adivinación es propio y exclusivo de los BABALAWOS, el cual a través de este oráculo hace de mediador entre los ORÌSAS y los seres humanos. Este oráculo lo componen 256 ODU los cuales prescriben y determinan la situación del individuo. Para llevar a cabo el registro con este oráculo el BABALAWO usa lo que se conoce como EL OPELE y también lo que se conoce como EL ÌKÌN. Como se ha dicho varias veces en este artículo, en próximos números los iremos tratando con detenimiento, dando a conocer en toda su extensión la forma de realizar registros con ellos, así como el significado de los diferentes ODU... El Or,culo de los Caracoles Uno de los oráculos adivinatorios más populares es el de los Caracoles. Este oráculo es utilizado por los Santeros y gracias a él se pueden determinar los problemas y situaciones cotidianas de la persona que lo consulte. A través de éste oráculo los Santos u Orishas Yorubas manifiestan al Santero o Santera los problemas, advertencias y mensajes en torno a la vida del paciente consultado y posteriormente, también en dicho oráculo, se sabrá la manera de solucionar o evitar las situaciones adversas. Se dice que los Caracoles son "la boca del Santo", y en efecto a través de ellos los Orishas se comunican con nosotros los mortales para aconsejarnos. Cada orisha posee un juego de Caracoles a través de los cuales habla, pero en una consulta cotidiana el Santero usa los Caracoles de Elegguá. En éste caso los Orishas transmiten los mensajes a Elegguá y éste posteriormente a través de sus Caracoles se comunica con el Santero quien descifrará los mensajes que ayudarán o guiarán al paciente que se consulta. Como todo lo de la religión Yoruba, estos Caracoles deben ser consagrados bajo ciertas reglas y sólo los Santeros pueden utilizarlos, ya que ellos tienen el ashé o poder divino para manejarlos adecuadamente y comunicarse con los Orishas. Antes de usarlos, los Santeros consagran estos Caracoles en unas ceremonias secretas en donde quedan impregnados con la energía del orisha con que se consagra. Estos peculiares caracoles Yorubas son de origen africano aunque también se pueden conseguir en la Ìndia. En la antigüedad 84 eran usados como dinero hasta que los Orishas decidieron adoptarlos como un elemento de conexión entre ellos y nosotros los humanos creando un oráculo para el bien de la Humanidad. Este oráculo está conformado por 21 caracoles de los cuales se usan 16 y a su vez se leen o interpretan 12. Al decir que se usan 16 caracoles nos sugiere que existen 16 signos principales, los cuales irán apareciendo según vayan cayendo los caracoles en la estera. De esta manera tenemos los signos: O1ana, Eyioco, Ogund,, Iro.o, Os)&, Obbara, Oddí, Eyeunle, Os,, O-/n, OBuani, Eyil,, Cetanl,, Cerinl,, Carunl, y Ceridilog/n. Cada una de estos signos tiene un significado específico y posee características muy precisas en cuanto a la relación entre los orishas y los seres humanos. Como dijimos anteriormente, el sacerdote Yoruba o Santero interpretará el oráculo de los Caracoles hasta el signo Eyilá, debido a que está prohibido leer los signos posteriores a él. Esta regla se deriva de una historia en donde aparece Orula como el Orisha que usaba los Caracoles, en esa época él tenía la facultad y la potestad de interpretarlos por completo con sus 16 signos. Un día salió de su casa y volvió antes de tiempo, encontrando a su mujer Yemayá sentada en la estera y dándole uso a su oráculo. En el momento en que se encuentran los dos orishas estaba el signo Eyilá en la estera tras lo cual Orula dijo: "0)ora mi or,culo te pertenece pero sólo lo leer,s )asta &ste signo, )asta Eyil,". Y a partir de ese momento Orula no usó más los Caracoles, para consultar usaba la mente hasta que llegó a sus manos la tabla de Ìfá. Los Caracoles fueron usados por Yemayá y luego por Oshún para luego ser legados a los Santeros, los cuales por siempre deberían respetar la regla de leerlos hasta el signo Eyilá. De esta manera si en algún momento el oráculo se extiende a los signos Metanlá, Merinlá, Marunlá y Meridilogún es obligación de todo Santero el llevar a la persona que se está consultando a la casa de un Babalawo, debido a que los Caracoles están indicando por medio de sus cuatro últimos signos, que Orula es el que quiere hablar con esa persona. Se dice que antiguamente el sacerdote que usaba el oráculo se limitaba a interpretar solamente un sólo signo, o sea que si al lanzar los Caracoles a la estera aparecía el signo Oddí, la consulta se limitaba a la interpretación de ese signo para resolver el caso que lo ocupaba; pero a través del tiempo el oráculo del Diloggún, como también se le conoce, sufrió profundas transformaciones haciéndose más amplio en cuanto a su manera de interpretarlo. Esto se logró cuando se fusionaron o se relacionaron los 16 signos entre sí, apareciendo otros signos con características propias y dándole mayor cobertura al oráculo. De esta forma aparecieron signos como Oddí?Obbara, Eyeunle?Eyioco, Os,?Ogund,, Os)&?O-/n, etc; por supuesto respetando siempre la prohibición de leerlo más allá del signo Eyilá. Se puede decir entonces que el oráculo del Caracol es una derivación del oráculo de Ìfá, siendo el del Caracol más limitado, ya que debido a la prohibición de la que ya hemos hablado, sólo se leen 144 signos de los 256 que tiene el oráculo. En estos signos aparecen fábulas, cuentos y leyendas en donde están plasmadas las diversas vicisitudes por las que el ser humano a pasado y pasará. Es obligado de que el Santero que maneja éste oráculo memorice estas historias para que en el momento en que aparezca algún signo, pueda interpretar y determinar la situación que envuelve a la persona que se consulta, para de esta forma poder ayudarla a resolver cualquier problema o canalizar situaciones gracias a los consejos dados por los Orishas. 85 Es obvio entonces que los Santos utilizan las historias o pattakíes del oráculo de los Caracoles para hablar con nosotros los humanos, por consiguiente la precisión de estos mensajes dependerá de la pericia del Santero a la hora de interpretar apropiadamente dichas historias. El uso del or,culo Gracias a éste oráculo los Orishas advierten de peligros por los que la persona puede pasar y a su vez la manera de evitarlos. También pueden dar consejos para evitar problemas de salud, situaciones con la justicia, cualquier problema cotidiano, pérdidas en los aspectos económico, social y amoroso o también pueden detectar problemas de índole espiritual, tales como la presencia de espíritus oscuros o brujerías. Otro aspecto que se maneja a través de éste oráculo es la guía de los Santos Yorubas para el mejoramiento de la persona, mejoramiento que puede ser material o espiritual. En él los Orishas indican los consejos y los ebboses para rectificar el camino de los que consultan el oráculo. En ese momento la persona puede enterarse de cierto aspectos de su personalidad que debe corregir, las cosas que debe o no debe hacer para mejorar su vida, qué Orisha lo está defendiendo, que ofrendas puede hacer para satisfacerlo, los trabajos que se deben hacer para limpiarse espiritualmente, además puede saber que le deparará el futuro con la finalidad de que la persona se prepare para enfrentarlo dependiendo si éste es positivo o negativo. Como citamos anteriormente, cada Orisha tiene una "mano de caracoles" con los cuales habla. Elegguá es el encargado de hacerlo en una consulta normal y los demás Orishas lo hacen en una de las ceremonias que se realizan para consagrar a un nuevo Santero. Dicha ceremonia lleva por nombre It, o "lectura del porvenir" y es en donde la persona consagrada tiene la oportunidad de que cada Orisha hable por separado a través de sus Caracoles expresando los consejos que tendrán influencia sobre el resto de su vida. La ceremonia del Ìtá debe ser realizada e interpretada por un Obá-Oriaté, ya que dicho personaje maneja todo el conocimiento que envuelven los Caracoles y es el único preparado para interpretar los mensajes y consejos que los Orishas emiten a través de éste antigüo oráculo. EL +ILO445( I(3RO+5CCIO( La religión de los Orisas Yorubas y sus Babaloshas (sacerdotes), apoyados en sus amplios conocimientos de botánica, mineralogía, zoología, etc., intentan conseguir el desenvolvimiento espiritual y material de los seres humanos, en la intención de evitar a éstos la mayor cantidad de tropezones en sus vidas, y para ello usan el oráculo de los Orisas denominado Diloggun. A los Babaloshas llegan constantemente personas de toda condición social en busca de solución a sus dificultades y, a través de las predicciones del Diloggun, además de señalarle las dificultades que se le avecinan, en la mayor parte de los casos ofrecen la ayuda a través de los Orisas, Eggun... para enfrentarlos positivamente; es 86 decir, no sólo se usa para conocer lo que sucede, sino también para indicarnos que es lo que hay que hacer para solucionarlo. Puede decirse que es una forma de comunicarnos con las entidades superiores, con los Orisas, con nuestros ancestros, antepasados o Eggun, quienes proporcionan ayuda a nuestros problemas. El Diloggun es la “boca¨ de los Orisas: 16 caracoles marinos que ellos utilizan para comunicarse, para enseñarnos la humildad, la caridad y el amor hacia el prójimo, tanto para no creyentes como para practicantes de Osha. Ayuda con sus consejos y nos advierte para enderezar nuestra vida, alivia nuestros corazones cuando estamos apenados, ayuda a vencer obstáculos... Requiere que quien lo use sea un Babalosha y que el Diloggun haya sido consagrado a través de las ceremonias de iniciación por las cuales estos tienen el “ashé¨ para que los Orichas, Eggun.... “hablen¨ por medio de ellos. CI3OLO4I0 E YEC0Y: Y EL +ILO445( F Yemayá estaba casada con Orúnmila, gran adivinador de la tierra de Ìfé, que hacía milagros y tenía una gran clientela. Por ese entonces, Orúnmila se hallaba íntimamente unido al secreto de los caracoles (diloggun) , pues Yemayá, dueña del mar, peces, caracoles y todo lo marino, se lo comunicaba; él, a su vez, interpretaba esos secretos a través de los Oddun y de las leyendas. Ocurrió que un día Orúnmila tuvo que hacer un viaje largo y tedioso para asistir a una reunión de los Awó que había convocado Olofí, y como se demoró más de lo que Yemayá imaginaba, ésta quedó sin dinero, así que decidió aplicar su técnica y su sabiduría para consultar por su cuenta a quienes precisaban de ayuda. Cuando alguien venia a buscar a Orúnmila para consultarse, ella le decía que no se preocupara y le tiraba el diloggun. Como era adivinadora de nacimiento, sus vaticinios tuvieron gran éxito y sus Ebó salvaron a mucha gente. Orúnmila, en camino hacia su casa, oyó decir que había una mujer adivinadora y milagrosa en su pueblo. Él, curioso -como todo ser humano-, se disfrazó y, preguntando por el lugar donde vivía aquella mujer, llegó a su propia casa. Yemayá, al descubrirlo, le dijo : “¿Tú creías que me iba a morir de hambre ?¨ Así que él, enfurecido, la llevó delante de Olofi, sabio entre los sabios, quien decidió que Orúnmila registrara con el Ekuele, los Ekines y el Até de Ìfá, y que Yemayá dominara el Diloggun. Pero le advirtió a Orúnmila que cuando Yemayá saliera en su Oddun, todos los Babalawos tendían que rendirle pleitesía, tocar con la frente el tablero y decir : Ebbo Fi Eboada. IBBO! También forman parte los elementos siguientes denominados Ìbbos . ( Diferentes accesorios que se utilizan para preguntar si el oddun viene hablando en Ìré u Osobo , y cual de los mismos es el que habla llegado el momento dentro de un registro) . Estos son: 87 EFÚN (Cascarilla), OTÁ (Piedra pequeña), AYÉ (Caracol marino mediano) , OWÓ (Dos caracoles de Ocha atados), ÌGBÌN (caracol de babosa), EGUNGÚN (vértebra o hueso pequeño), APADÍ (pedazo de loza) y OSÁN (semilla). LO! O++5( +EL +ILO445( Los Oddun del Diloggun son 17 y estos son sus respectivos nombres con su correspondiente nacimiento: Okana (1) nace de Ofún (10). Eyioco (2) nace de Ejiogbe (8). Ogundá (3) nace de Oddí (7). Ìroso (4) nace de Ojuani Shobe (11). Oshé (5) nace de Ejiogbe (8). Obara (6) nace de Ejilá Shebora (12). Oddí (7) nace de Okana (1). Ejiogbe (8) nace de Meridiloggún (16). Osá (9) nace de Oddí (7). Ofún (10) nace de Osá (9). Ojuani Shobe (11) nace de Oshé (5). Ejilá Shebora (12) nace de Ogundá (3). Metanlá (13) nace de Oshé-Ofún (5-10). Merinlá (14) nace de Eyioco-Obara (2-6). Marúnla (15) nace de Ejiogbe-Osá (9-8). Meridiloggún (16) nace de Ejiogbe Melli (8-8). Yecú Yecú u Opira (17) nace de Okana (1). A su vez estos se dividen en Oddun “mayores y menores¨. ( Debemos tener en cuenta que los “mayores¨ solo se tiran una vez, excepto en la apertura de un registro donde es obligatorio que se hayan sacado dos oddun. No así los “menores¨ donde existe la obligatoriedad de siempre que nos venga un “menor¨ delante, el volver a tirar para así como explicaremos mas adelante, pedir mano). Siendo la relación de los mismos la siguiente: O++5( C0YORE! Okana (1). Eyioco (2). Ogundá (3). Ìroso (4). Elleunle (8). Ofún (10). Ejilá Shebora (12). Metanlá (13). Merinlá (14). Marunlá (15). Meridiloggún (16). Yekú Yekú u Opira (17). O++5( CE(ORE! Oshé (5). Obara (6). Oddí (7). Osá (9). Ojuani Shobe (11). También debemos tener en cuenta en un registro, si el Oddun viene hablando por Ìré u Osobo, para ello a continuación exponemos las distintas clases de ambos : +I!3I(30! CL0!E! +E EIR=F Ìré Arikú ................... Bien por el mundo espiritual. Ìré Otonowá ................ Bien por el cielo. Ìré Elese Eggun........... Bien por un Eggun. Ìré Elese Osha ............ Bien por la Osha. Ìré Elese Ayé .............. Bien por el mundo. Ìré Elese Lowó ............ Bien por su propia mano. Ìré Elese Eledá ........... Bien por su cabeza o su inteligencia. Ìré Elese Omó ............. Bien por un hijo. 88 Ìré Elese Okuní .......... Bien por un hombre o esposo. Ìré Elese Obiní ........... Bien por una mujer o esposa. Ìré Elese Owó ............. Bien por una suerte de dinero. Ìré Elese Arubo .......... Bien por un anciano. Ìré Elese Abure .......... Bien por un hermano-a. Ìré Elese Ara-Onu ..... Bien del otro mundo. Ì ré Elese Eriyoko ....... Bien asentando Osha. Ìré Elese Okuta .......... Bien por una piedra. Ìré Achekun Otá ........ Vencimiento de enemigos. Ìré Dewantolokun ...... Bien por el mar o a través de él. +I!3I(30! CL0!E! +E EO!OBO!F Ìkú .............................. Muerte. Ano ............................. La enfermedad. Ofo ............................. Un mal repentino. Eyó ............................. Tragedia. Ona ............................ Vicisitudes, trastornos. Akoba ......................... Revolución. Fitiwo ........................ Muerte de repente. Ano Otonowa ............ Enfermedad del cielo. Ashelu ....................... Por la Justicia. Ìku Leri ..................... Muerte por su cabeza. Ano Elese Orisa ..... Enfermedad por la Osha. Ano Aleyo ................. Enfermedad por mano de un extraño. Ano Arayé ................. Enfermedad por gente mala. $0!O! $REVIO! 0L RE4I!3RO CO( +ILO445( Para el iniciado en Osha, el verdadero estudio de la teoría y la practica del Diloggun, comienza con el aprendizaje de la liturgia previa y los rezos en lengua Yoruba. Para quienes practican el oráculo como parte de su vida religiosa, es de vital importancia tener en cuenta el cumplimiento de estas normas. Los pasos previos que se deben tener en cuenta son los siguientes : 1.- Sentados en el suelo arriba de una estera y a nuestra derecha una jícara con agua, se vierten unas gotas en el piso y en el Diloggun, mientras se pronuncia el siguiente rezo : “Omi tuto,aná tuto,ilé tuto,Eggun tuto,tuto ashé,tuto kan,tuto Elegba,tuto Arikúbabagwa¨ 2.- A continuación se procede a Moyubar, con el siguiente rezo, comenzando por pedir la bendición de Dios Todopoderoso, la Naturaleza y el mundo espiritual de la forma siguiente : Moyuba Olofín, Olorun, Olodumare,Oro Ìña, Ará Onú. 89 Moyuba Aseddá, Moyuba Acoddá. Ìbae baen tonú Ayai ayuba, Amina ayuba, Adufa ayuba, Otoloña ayuba. Ìbae baen tonú Banboshé awapiticó ayuba, Tiyoco ayuba, Shailú ayuba. Ìbae baen tonú Obadimelli ayuba, Tate oyá tegún ayuba,Obilumi ayuba, Laimito ayuba. Ìbae baen tonú Ará onú Susana Cantero, Rosa Mordoche , Josefina Beltran, Delia Malecón, La Chinita Estevez. Ìbae baen tonú Ará onú Bogbo Eggun Ogun Bi, Talabi, Shango Dina, Yomi Yomi, Alaibodé, Oba Ìrawo, Aboy Ada. Ìbae baen tonú Ará Onú Bogbo Eggun Ìyalosha, Babalosha Aleyo, Oluo que Timbelese Olodumare. Ìbae baen tonú Ará Onú Bogbo Eggun ...... (de la persona que se consulta). Ìbae baen tonú Ará Onú Bogbo Eggun ...... ( de quien está consultando “registrando¨). 3 .- Al llegar a este punto se recoge el Diloggun de la estera y con él entre las manos y frotándolo se solicita las bendiciones y el permiso del Babatobí de Osha “padrino¨, de la Oyubona “madrina¨, de los Babaloshas “santeros¨ o de las Ìyaloshas “santeras¨ vivas que el que está consultando conozca, con el siguiente rezo : Kinkamashe mi Babá tobí de Osha...... Kinkamashe mi Oyubona...... Kinkamashe Ogun Bi, Talabi, Shango Dina, Yomi Yomi, Alaibode, Oba Ìrawo, Aboyo Ada. Kinkamashe Ìyalosha, Babalosha ,Aleyo Oluo Kowa Ìlé. Kinkamashe Eleri Emí. 4 .- Al llegar a este punto y manteniendo el Diloggun entre las manos a la vez que se frota, se procede a saludar a los Orishas con el siguiente rezo : Moyuba Elegba, Alaroye akiloyo barabá Eshu Ború, Ború Bi, Eshu Bochiché, Eshu Bara, Barakikeño. Mocué Eddún Aí Eddún Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Ogún Chibirikí alá oluakobu, Oké Babá mi, Suí Birikí kualotó ni güá, Osún duro gagho la bo sié. Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Ochosi, Ode Mata, Odede Odefa, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Ìnle, Ìnle Ayaya, Ìnle Abata, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Orishaoko, Afefé ikú, Ìkú enú ayé, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Asojano, yerberekuto chagüana lorde Babaluayé acrónica, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. 90 Moyuba Daddá, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Oggé, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Oké, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Corincoto, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Melli, okánan lú burukú salé, Melli Meta, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Argallú, Cholá kinigbao, Argallú Ìsolá macheraó, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Changó, efú ekó así Osaín, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Obatalá, Ayaguneleyibó, Obatalá, Obatalaisa, Obatalallano, Obatalá meridiloggún, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Yewá ayimayolá, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Oyá, Yansá Jekua Jei, Oriri Oyá, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Yemayá, Asaranagüa, Oló mio Yemayá, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Moyuba Ochún, Yalorde yeyé kare, apetebí Orúnmila, Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. 91 5.- Al llegar a este punto se vuelve a colocar el Diloggún en la estera y frotándolo se realiza el siguiente rezo : Moyuba Elegba, Alaroye akiloyo barabá Eshu Ború, Ború Bi, Eshu Bochiché, Eshu Bara, Barakikeño. Mocué Eddún Aí Eddún Umbo.... ( Debe decirse el nombre de la persona a quien se va a consultar “registrar¨ ) Kosi Ano, Kosi Ìkú, Kosi Arayé, Fitibó, Achelú, Ona, Aro, Akobá, Ofo Arikúbabagwa. Elegba Ìré Omó, Ìré Omá, Ìré Arikubabagwa. 6 .- A continuación tomamos el Diloggún en la mano y tocamos la frente, la nuca, el corazón, estómago, las manos y los pies de la persona que se está consultando y una vez se haga esto, decimos : Acheto, Achedike, Ebojin Ke Eboada. Ochareo...........Adaché. 7 .- Una vez dicho este rezo se tira el Diloggun arriba de la estera. Hasta aquí los pasos previos o preparativos que anteceden el registro con el Diloggun, los cuales forman parte de la liturgia religiosa que usualmente lleva a cabo el Babalosha. Es necesario aclarar que me he limitado a describir sólo uno de los procedimientos litúrgicos, pero lo que debe de saber el lector que existen infinitas variantes al respecto, pues cada grupo social ha establecido sus propias individualidades en tal sentido. Ìncluso hay ocasiones en que el procedimiento varía entre los propios templos, casas de culto, o Babaloshas. Ciertamente la esencia del acto religioso en sí es similar, aunque las liturgias sean diferentes. Deidades, Ancestros o Eggun principales son los mismos para todos, lo cual determina la homogeneidad de la estructura religiosa, a pesar de las distintas idiosincrasias de los grupos sociales. El Oriate Caestro de ceremonias La regla de Ocha se caracteriza por la cantidad de ceremonias que se realizan en las diversas consagraciones que tienen objeto cuando una persona necesita del concurso de los orichas para estabilizar sus niveles de vida. En estas ceremonias deben estar presentes los padrinos y un grupo de santeros y santeras que trabajarán y serán testigos de las consagraciones. Puede ser que en estas consagraciones los santeros presentes y los padrinos constituyan un grupo de personas respetables y se hayan esmerado en la organización de los rituales a realizarse, pero si falta la presencia del Oriaté o Ìtalero, lamentablemente las ceremonias estarán incompletas. Con esto queremos decir que el Oriaté es un personaje que debe estar presente en toda consagración de Ocha ya que él es el que dirige todos los ceremoniales gracias a los amplios conocimientos que tiene sobre la Santería o religión Yoruba. En pocas palabras podemos decir que el Oriaté es un santero que tiene extensos conocimientos sobre los cantos, rezos y ceremonias que se efectúan en el cuarto de santo a la hora de realizar las consagraciones. Este personaje tiene el conocimiento suficiente para estimular y llamar las fuerzas o energías de los orichas que van a participar en los rituales de ocha. La palabra Oriaté significa en lengua yoruba "cabeza sabia", etimológicamente podríamos descifrar dicha palabra como, Orí: Cabeza; y Até: Tablero de Ìfá. Recordemos que simbólicamente el Até o tablero de Ìfá representa el conocimiento y 92 la sabiduría del mundo. Se sabe que todo el conocimiento no puede estar en una sola cabeza, como lo dice el signo Ogbe-Di, pero los oriateses deben instruirse cada día más para poder llevar con dignidad tan importante título, por lo cual deben mantener y ampliar sus conocimientos religiosos. La figura del Oriaté es respetada en cualquier casa de santo, sin importar su edad cronológica, ni su edad santoral, esto se debe a que es visto como un sacerdote mayor gracias a su gran conocimiento. El conocimiento del oriat& El título de Oriaté no se entrega, llegar a serlo dependerá del estricto dominio de todo el conocimiento de la religión Yoruba en general. A nuestro juicio, para que un Oriaté comience a trabajar como tal, necesita la aprobación de otro experimentado, esto sería como una licencia para permitir que el nuevo sacerdote comience a ejercer sus funciones. El conocimiento que tiene el Oriaté lo convierte en Obá, o sea Rey, en lengua Yoruba. De esta manera se puede observar que gracias a su sabiduría el Obá-Oriaté es considerado un Rey dentro del ámbito de la Santería y como tal es tratado. Como ya se dijo, todas las ceremonias importantes deben ser conducidas por él, desde un Oro a Eggun hasta las ceremonias del Ìtuto o funeral yoruba, pasando por los cantos a Ozain. Extendiéndonos en este último punto, una expresión popular entre santeros dice, "sin Ozain no hay santo", lo que significa que siempre se debe hacer un Ozain antes de cualquier consagración, esto consiste en realizar un mínimo de 16 cantos rituales a esta importante deidad para que bendiga el extracto de hiervas que se va a utilizar para purificar los elementos sagrados que se van a fundamentar en ese momento. Los cantos o suyeres son sumamente importantes en el trabajo del Oriaté, los debe realizar totalmente en lengua yoruba y cada uno va a tener una función específica en la consagración, por lo que debe conocer su significado para poder utilizarlos en el momento adecuado. Estos cantos van a variar según sea el caso, existen cantos para Egun (espíritus guías) en donde se le rinde tributo a los antepasados o a santeros, santeras o babalawos difuntos. Ya hablamos de los cantos de Ozain, los cuales deben hacerse un mínimo de 16 para poder consagrar las hiervas. También está el Oro de Ìgbodú o "cantos ceremoniales del cuarto de santo", los cuales son suyeres dedicados a los orichas. En el momento de la consagración el Oriaté canta en yoruba por lo menos tres suyeres a cada oricha, estos cantos son específicos y el Obá debe tener conocimiento de lo que está haciendo porque hay cantos para llamar a los santos y hay otros para calmarlos cuando se posesionan del santero y llegan aturdidos luego del largo viaje del cielo a la tierra. Además de los cantos, el Obá conoce con perfecta claridad todos los conceptos religiosos de los yorubas y el significado ritualístico de cada una de las ceremonias que realiza. Otra de las funciones del Obá-Oriaté (muchos piensan que así es como se debe llamar) es la de interpretar el mensaje de los orichas a través del "oráculo de los caracoles" en la ceremonia del Ìtá o "lectura del porvenir". Allí debe tener pleno dominio del oráculo además de los rezos de cada signo, los cantos del Nangareo (desayuno que se tiene con Olorun antes del Ìtá) y el "ebbó de estera", en donde el Ìyawó o recién consagrado, es limpiado gracias a la influencia de los signos y a los rezos que se hacen en cada uno de ellos. En el Ìtá el Obá-Oriaté manifestará su conocimiento sobre los patakíes o historias yorubas para extraer de ellos los mensajes que guiarán el camino del nuevo consagrado en una nueva perspectiva de 93 vida. Como maestro de ceremonias en sus funciones también recae la responsabilidad de ayudar a los santeros desencarnados a encontrar el camino que los llevará a Olofi. En la ceremonia del Ìtuto, llamará a los oricha s y a los espíritus guías del santero difunto para que lo desprendan de la Tierra y lo lleven a planos superiores. Rey de reyes Como se puede ver las funciones del Obá-Oriaté son múltiples, para dominarlas este personaje debe tener un alto grado de vocación religiosa y así tener presente los profundos secretos de la religión yoruba. Su capacidad mental debe ser excelente para poder dominar el conocimiento de los ceremoniales de ocha, los cuales debe tener frescos con el estudio constante de cantos, rituales, patakíes y rezos. Además de todo el conocimiento su camino como sacerdote es predestinado en el Ìtá el día que es consagrado como santero. En ese momento, a través del oráculo del caracol, los orichas determinan si su camino es de Obá. Normalmente el Ìtá no se orienta a determinar estos designios, pero si se presenta el caso, el Oriaté que está oficiando la ceremonia podrá manifestar que está naciendo un nuevo Obá- Oriaté, tras lo cual debe prepararse para serlo con la ayuda de los mayores. Se observa entonces que los orichas señalan a un nuevo Oriaté, lo cual se puede observar en los signos: Obara Melli, Odi Melli, Eyeunle Melli, Odi-Unle, Unle- Oddi, Odi-Ìroso, Unle-Ogundá, Unle-Ìroso, Obara-Odi, Obara-Ofún, Unle-Osá, y Ofún-Ogundá. Obviamente los orichas son los que dirigen esta religión, por lo tanto se deben tomar muy en cuenta los signos u olduns de los caracoles para determinar si verdaderamente la persona tiene camino de Obá y así evitar que en el futuro el supuesto Oriaté haga consagraciones incompletas o mal hechas por falta de capacidades. Estos signos se pueden observar tanto en el Ìtá de santo como en el de Pinaldo, comúnmente llamado “ceremonia de cuchillo¨. Para muchos santeros con experiencia el Obá debe tener “cuchillo¨ para poder realizar ciertas ceremonias en el cuarto de santo. Además, ¿cómo un Obá-Oriaté puede dirigir una ceremonia de Pinaldo si no lo tiene? El título de Oriaté es muy anhelado en el mundo de la Santería pero hay que estar consciente de que no todos nacen para serlo. Como ya explicamos se deben reunir ciertas condiciones tales como ser escogido por lo Orichas en la ceremonia del Ìtá, tener ciertas capacidades para dominar cantos, rezos y ceremoniales, tener Pinaldo y gozar del visto bueno de los oriateses experimentados. Aumbi espíritus de muertos palo monte mayombe 94 EL PODER DE LOS CONGOS, ESTA BASADO EN EL PODER DEL MPUGO, DE LOS PALOS, LOS BÌCHOS Y EL FUMBÌ (MUERTO), AL CUAL ESCLAVÌZA O PACTA CON EL. CUANDO UN HECHÌCERO O BRUJO BANTU, QUE EN CUBA SE DENOMÌNAN PALEROS, Y CUYO MAXÌMO SACERDOTE, ADEMAS DEL TATA, ES EL QUE TÌENE COMO FUNDAMENTO A ÌGBO-FÌNDA (OZAÌN YORUBA), VA A ENTREGAR UN PODER, O VA A REALÌZAR UN MALONGO (BRUJERÌA NEGRA), ES DECÌR MANDA UNA ENVÌACÌÓN NEGATÌVA A UNA PERSONA. SÌ ES PARA MALO, ÌRA A POR EL MUERTO EL MARTES, JUEVES Y VÌERNES, A PARTÌR DE LAS DOCE Y CON LUNA LLENA. SÌ ES PARA BUENO EL RESTO DE LOS DÌAS, Y CON LUNA LLENA. LLEVARA A LA PERSONA QUE SE VA A ÌNÌCÌAR, ENTRARAN EN EL CEMTENTERÌO, PÌDÌENDO PERMÌSO A CENTELLA NDOKÌ, CONSULTARA CON EL ORACULO, SÌ EL MPUGO (DÌOS), DÌCE SÌ, ENTRARA EN EL. BUSCARA UNA TUMBA DE MAS DE SÌETE AÑOS, SÌ ES ANTERÌOR Y EL BRUJO ES UN ÌNEXPERTO, PODRÌA TENER PROBLEMAS AL NO SABER DOMÌNAR AL ESPÌRÌTU. SE PONDRÁ FRENTE A UNA TUMBA, Y CONSULTARA CON EL COCO O CARACOL, SÌ EL MUERTO QUÌERE VENÌRSE CON EL. SÌ ES ASÌ, LA PERSONA QUE SE VA A ÌNÌCÌAR, SE ACUESTA ENCÌMA, LE VENDAN LOS OJOS, Y SE ECHA RON ENCÌMA DE EL EN FORMA DE CRUZ, Y UNA VELA A SU CABEZA. EL MUERTO TOMARA POSESÌÓN DEL ÌNÌCÌADO, HABLANDO POR EL, ASÌ SE LLAGARÁ A UN ACUERDO. EL MUERTO DÌRA SÌ SE COGE UN POCO DE TÌERRA, O EL CUERPO DEL DÌFUNTO. SEGUN LO QUE DÌCTAMÌNE, ASÌ SE ACTUA.EN ESE MOMENTO EL MUERTO DEJA DE POSESÌONAR EL CUERPO. SE PAGA EL DERECHO AL CEMENTERÌO. TAMBÌEN SE PUEDE CONSULTAR CON EL ORACULO, NO ES TOTALMENTE NECESARÌA LA POSESÌÓN, PERO ES UNA MEDÌDA ATEMORÌZADORA PARA LOS ESCEPTÌCOS QUE QUÌERAN VERLO. HAY PALEROS QUE ESCOGEN EN VÌDA A SUS VÌCTÌMAS, LAS MATAN A TRAVES DE LA BRUJERÌA, Y TOMAN SU ESPÌRÌTU PARA ESCLAVÌZARLO Ceremonias anteriores al pacto ANTES DE ÌR POR EL MUERTO AL CEMENTERÌO, EL HECHÌCERO EN SU TEMPLO DEBE DE REALÌZAR CÌERTAS CEREMONÌAS, Y TOMAR CÌERTAS PRECAUCÌONES, PARA QUE LOS ESPÌRÌTUS DE LOS MUERTOS NO ACTUEN CONTRA EL. PRÌMERAMENTE DEBERÁ HACERSE UN PARALDO ROMPÌMÌENTO, ES DECÌR UNA LÌMPÌA PARA NO LLEVAR NÌNGUN TÌPO DE ENERGÍA AJENA AL CEMENTERÌO. DEBE LLEVAR LOS CUATRO CHAMALONGOS (COCOS), LAS SÌETE CARACOLAS, UN RAMO DE FLORES, ESTE PARA DEPOSÌTARLO EN LA TUMBA MAS POBRE, PARA QUE CENTELLA NDOKÌ LE DE TODA SU PROTECCÌÓN, Y LOS MUERTOS OSCUROS, Y DEMAS ENTÌDADES ESPÌRÌTUALES NO LE ATAQUEN. LLEVARÁ LOS COLLARES CONSAGRACÌONALES, DE SACERDOTE. 95 $0LO CO(3E Esta expresión religiosa tiene su raíz en los cultos practicados en los pueblos del Africa oriental, central y austral que hablaban esa lengua en cualquiera de sus variantes y que integraban las monarquías de origen Bantú. Conocida también como Mayombe, esta Regla fue el resultado inicial de la transculturación de los credos bantús a la sociedad cubana, en la que surgieron con la iniciación de los criollos otras vertientes como la Kimbisa y la Brillumba, hasta llegar a la Kimbisa del Santo Cristo del Buen Viaje, organizada en el siglo XÌX por Andrés Facundo de los Dolores Petit. La Regla Conga tiene como rasgos característicos la vinculación con las fuerzas de la naturaleza, algunos de cuyos elementos se consideran animados por espíritus a los que se ofrece albergue también en las profundidades de la tierra. En este culto, los antepasados están representados en el agua. El centro de la ceremonia en este credo es la "Nganga", recipiente donde se supone se encuentra el alma de un muerto sometida a la voluntad del iniciado a través de un pacto que los alimenta a ambos. La posesión de la Nganga o prenda, junto a la posibilidad de emplearla sin limitaciones, es el elemento que la distingue a la máxima jerarquía de esta expresión: el Tata Nganga o Tata Mkisi, quien puede realizar ceremonias de "rayamiento" (iniciación) y nuclear a su alrededor a su grupo religioso. Para sus funciones, el Tata se apoya en otras jerarquías menores de consagrados, como el Bakofula ayonfombe y el Ngueyo, quienes junto al resto de los "ahijados" forman la Casa, la cual es autónoma en la realización de los ritos o ceremonias. Un lugar destacado en la Regla de Palo lo ocupan los símbolos gráficos de carácter sagrado (firmas), para identificar a los espíritus, antepasados y orichas a los que se solicita el permiso para realizar las diferentes ceremonias del culto. Al trazar las firmas, los creyentes consideran que en ellas están representados lospoderes sobrenaturales y que los mismos responden por la efectividad de la labor realizada. Cada una de ellas adquiere una función personal para cada iniciado, que la emplea para identificarse ante su fundamento (nganga) y ante el resto de los creyentes; por otra parte, expresa la relación con el espíritu protector con el que ha realizado el pacto. En la regla Kimbisa existe un fuerte sincretismo y tolerancia entre el elemento congo, la Regla Ocha, el espiritismo, el catolicismo y las sociedades secretas masculinas Abakuá. De las creencias de origen bantú tomaron sus concepciones relacionadas con la naganga, el animismo de las plantas, las aguas y la tierra, así como la influencia de espíritus y antepasados. De la Ocha encontramos sus mismos orichas, pero con otros nombres, (por ejemplo: Elegguá se convierte en Lucero Mundo; Yemayá en Tiembla Tierra; Oyá en Centella), la asimilación del empleo del coco en la adivinación y la creencia de "alimentar" y "fortalecer" la prenda mediante sacrificios con efusión de sangre. Del espiritismo asimila la comunicación directa con los espíritus, sobre la base de que cuanto ocurre en la tierra está regido por fuerzas del más allá. La influencia del catolicismo se manifiesta a través de la adoración del espíritu santo y la utilización del crucifijo y oraciones del ritual católico. 96 Históricamente, las prácticas de la Regla Conga o Mayombe -como cualquier otra de origen africano- han recibido el calificativo de brujería, opinión que evidencia entre los no informados la sobreposición del componente mágico de esa expresión religiosa al resto de los elementos que la identifican. La magia es sólo el medio por el cual el iniciado equilibra las fuerzas del bien y del mal y evita cuanto frene el desarrollo normal de su vida diaria. A partir de la segunda mitad del siglo XVÌÌÌ, comienzan a formarse en Cuba los primeros asentamientos de la Cultura Bantú con carácter definido, que se unificaron al principio del siglo XÌX. Se decía que eran de origen Congo porque ellos, con sus fuertes rasgos, dominaron el resto de los grupos étnicos que eran Mondongo, Bisongo, Timbiseros, Mandingas, etc. de raíz Ìmbisa, traídos de lo que son los actuales estados de Zaire, el Congo, Angola y Mozambique. Ninguno conservó la pureza de su origen y, sin embargo, es el segundo grupo en importancia de los cultos de origen africano en Cuba. Lydia Cabrera escribió en el libro «La regla Kimbisa del Santo Cristo del Buen Viaje» que Petit, su creador, para proteger y defender de venganzas y maleficios a sus partidarios (de la secta abakuá principalmente) decide fundar la Regla Kimbisa, «dejándonos en ella el modelo más acabado de sincretismo religioso que se produce en Cuba (...) Petit hizo un ajiaco, un revoltillo, cogió de todo: trabajó con Palo, con Ocha, con Santo, metió el espiritismo, la brujería, la iglesia, cuanto encontró, para vencer (...) sin embargo (...) tomó más de los congos que de los lucumí.» De esto hablaremos más adelante en «Agrupaciones afrocubanas» y «El nacimiento de las Reglas Sincréticas.» Así como el jerarca mayor santero es el Babalawo, aquí el mayombero es el Tata Enkise, el Padre Nganga, el padrino, el que tiene los conocimientos para funcionar ante la «Prenda» (Nganga-Nkiso) o 'cazuela', que es como la casa de su muerto esclavizado, del cual se posesionan en medio de cantos, para predecir y aconsejar. Mediante un trato con el muerto que vive en la 'cazuela', ellos lo atienden, por ejemplo le derraman sangre de un pollo recién sacrificado y a cambio el muerto lo obedecerá y protegerá contra todo lo malo. El palero, emplea para adivinar el Mpakeo Mpaka Menso, que es un cuerno que tiene en su interior ingredientes mágicos y cuya abertura está tapada por un espejo que el brujo va ahumando y a través de él lee las figuras que aparecen de entre el humo. Para ellos es básico ver el futuro para arreglar la vida de manera rápida y eficaz. Los muertos forman parte de la vida diaria como miembros de la misma familia, y aunque no hay una rica mitología como en los Yorubas, sí tienen un conocimiento herbolario o botánico bien desarrollado, adorando las plantas (la presencia del Palo Monte es básica, es el elemento mágico), también adoran todas las fuerzas de la naturaleza: los vientos, el mar, los metales. Tienen una música y cantos pobres comparados con los Yorubas, pero con sus instrumentos musicales propios, usando como su lengua ritual una mezcla del «kilongo» con el español. 97 A la Regla Bantú como hemos visto en sus distintas Reglas, la enriquecieron además de los Yorubas y el catolicismo impuesto, algunos elementos de los ritos espiritistas, por lo que hace esta heterogeneidad étnica (lo mismo que los Santeros, hacen que los cultos africanos no sean tan exactos en Cuba como en su país de origen) que sea exclusiva de Cuba, con sus orígenes en el Congo. Ritual de palo Cayombe Un mulato de aspecto feroz, con el cuerpo decorado con llamativos tatuajes, firmas de los orichas, colocó ante mí el cuenco con la sangre del carnero que acababan de sacrificar. Poco antes había arrancado la cabeza de un gallo con los dientes y todavía tenía los labios enrojecidos por la sangre que le caía por la comisura de los labios hasta el pecho. A mis pies se encontraba la cabeza y las cuatro patas que acababan de arrancar del cordero sacrificado. Todos los ojos estaban clavados en mi. Rosa, la palera que nos había invitado a asistir al ritual me taladraba con su poderosa mirada. Vieja amiga, solo me había puesto una condición para permitirnos asistir y fotografiar la celebración: "Tienen que participar con nosotros en todos los actos". Y como uno solo tiene una palabra, tome el cuenco con las manos cruzadas como es rigor en Palo Monte, después inspiré, cerré los ojos y bebí la sangre. Y cuan Santo Sacramento de la Comunión la sangre del cordero nos "bautizó" permitiéndonos acercarnos un poco más a los secretos de la poderosa Regla de Palo Monte. Los imprevisibles acontecimientos que se suceden en toda investigación son los que llevan a uno a estas situaciones. Días atrás, y a más de 350 kilómetros de distancia, en Guanabacoa (la "mata" de la brujería cubana) habíamos tenido el privilegio de poder asistir a un ritual de tambor que iba a celebrarse ese día. A pesar de la entrañable amistad que nos une con el santero Esteban Valdés, nuestro padrino en la Regla de Ocha, no nos fue permitido fotografiar el secreto ritual. No es bueno que los secretos sean divulgados indiscriminadamente, y los tambores, tan sagrados en Santería como lo son en el vudú, el ñañiguismo u otros cultos africanos, no debían ser fotografiados. Como tampoco debían serlo los nuevos creyentes que se iniciaban esa tarde. Habría otros rituales, y otras celebraciones que podríamos fotografiar y filmar, como ya lo habíamos hecho en anteriores viajes a Cuba. Pero la diferencia entre un santero o un palero auténticos, como Esteban Valdés, y un falsario, es que el primero respeta los secretos de su religión, y el segundo no duda en vender esos secretos a cualquier turista curioso por un puñado de dólares. Durante más de seis horas, hasta bien entrada la noche, los tambores bramaron sin cesar, mientras casi un centenar de espíritus libres, descendientes de esclavos africanos, cantaban y bailaban en honor de los orichas (dioses del panteón yoruba). Y solemnes letanías en dialecto Lucumi, la lengua de los antiguos negros arrancados del continente negro en nombre de un dios blanco, y "civilizado", homenajeaban a Elegguá, Changó, Yemayá, Ochún, Babalé Aye, etc. Uno a uno los neófitos desfilaron ante el altar de Esteban Valdés, y después ante los tambores sagrados, a los que saludaban reverentemente echándose al suelo completamente, cuan sacerdote que recibe su ordenación. 98 Los espléndidos trajes rituales de Oya, Changó y Obatalá desfilaron ante nuestros ojos vestidos por los nuevos iniciados, cuyas edades oscilaban entre un niño de 11 años y una mujer de unos sesenta. En la Santería afro-cubana no hay edad mínima ni máxima para abrazar la religión. De pronto, entre la muchedumbre, alguien grita y comienza a moverse espasmódicamente. Ha sido cabalgado. Los orichas se comienzan a dejar sentir su presencia. Los animales que les habían sido sacrificados anteriormente, y cuyo sacrificio no nos fue permitido presenciar en esta ocasión, habían sido de su agrado. Una de las iniciadas, tocada con las ropas del temible Changó, Señor del Fuego y de la Guerra, había sido iniciada anteriormente en la Regla de Palo Monte o Palo Mayombe, una religión afro-cubana más dura y rígida, a ojos europeos, que la Santería. Aquella mujer, perteneciente a la clase social más acomodada de La Habana, y cuya identidad obviaremos por propia petición, no tubo inconveniente en mostrarnos su "rayado". El "rayado" es el rito de iniciación por excelencia en la Regla de Palo Monte, durante el cual el neófito es herido con un cuchillo en varias partes de su cuerpo. Las profundas cicatrices en el pecho, brazos y piernas de aquella aparentemente frágil burguesa cubana, resultaban temibles. Afortunadamente para ella, tras tan dura prueba, que había superado sin un lamento de dolor, como ha de ser entre paleros, había conseguido permiso para hacerse la cirugía estética y disimular así parcialmente las heridas del "rayado". No podía suponer yo en ese instante que pocos días más tarde podría asistir personalmente a algunos de los legendarios ritos secretos del Palo Mayombe, como el "baile de cuchillos", la suelta de palomas o la "alimentación" de una Nganga. Pero eso sería una semana más tarde. Ahora estábamos sumergidos en un ritual santero de tambor en Guanabacoa. Y de pronto me descubrí a mi mismo, absolutamente inmerso en el rito. Rodeado de docenas de negros, trigueños y mulatos, literalmente sumergido en la masa, me sorprendí siguiendo el lenguaje de los tambores. Mas de cien personas, apiñadas en un cuarto de no más de 20 metros cuadrados, nos movíamos al unísono conducidos mágicamente por la música. Y lo que más me fascinó es que, cuando quise darme cuenta, estaba flanqueado por montones de niños. "Pioneros" de 7 o 9 años que vibraban con los tambores entre risas, como si solo estuviesen jugando. Para ellos la Santería no tenía nada de morboso o terrible, una imagen a la que estamos habituados en Europa. Para los niños la Santería, la religión, es tan alegre, sana y divertida como la música o la danza caribeña, pero mucho más trascendente. Y así, bailando en espiral, como si fuésemos una gigantesca serpiente, nos dejamos llevar por los orichas. $0LO CO(3E E( 3RI(I+0+ 0chosi achó ni#%1e1 iy!2n iyeg%ire odemata ode bar% baroliyo a3i3o mosiere 3ama 2r2 $3) 3ama arene 3ama areyo 3ama aro#o. 4Sal%tación l%c%mí al 0richa 0chosi5 99 Rosa Sánchez es una de las paleras más importante de Trinidad, una hermosa villa colonial ubicada a unos 350 Km al sur de La Habana. Cuando nos dio su permiso para asistir y fotografiar un ritual de Palo Monte nos entusiasmamos. Muy pocos europeos han tenido la fortuna de presenciar, y menos aún de fotografiar, los ritos paleros. La condición para asistir a la reunión era que participásemos activamente en todos los actos, y tan solo se nos prohibió fotografiar a Rosa Sánchez al lado de su "prenda", la poderosa nganga (caldero mágico confeccionado con restos humanos y otros elementos), durante los sacrificios de los animales. Por razones que no podemos comprender eso, según Rosa, podría perjudicar su energía (?). Y a la hora establecida nos personamos puntualmente en el lugar acordado. Además de nuestra querida amiga, aproximadamente dos docenas de paleros y paleras, con los cuerpos decorados con pinturas rituales, aguardaban nuestra llegada para iniciar la ceremonia. Entre los presentes ancianos de 60 o 70 años, y niños que no pasaban de los 12. Siempre impresiona encontrarse niños de tan corta edad participando activamente en ritos tan duros, a nuestros ojos, como la Regla Conga, o Regla de Palo Monte. Pero la sonrisa de sus labios dejaba claro que no se sentían impresionados por aquel mágico contexto que, al fin y al cabo, es el mundo en que están acostumbrados a vivir. Por fin, Rosa reclamó la atención de todos, y desapareció tras una puerta. Había comenzado la celebración. En pocos minutos comenzaron a desfilar, uno por uno, todos los paleros frente a esa puerta que, al llegar nuestro turno, averiguaríamos que daba a un discreto patio trasero de la casa. Tres golpes en la puerta y seña y contraseña suenan respectivamente a un lado y otro de la puerta. Cada palero debe responder correctamente al rito cuya antigüedad se pierde en la noche de los tiempos, una noche oscura como la piel de los africanos esclavos que llegaron a cuba a bordo de los cargueros negreros trayendo como único equipaje permitido por los traficantes su religión. Mas tarde, bajo la opresión de "ministros de Cristo", se vieron obligados a disfrazar sus dioses con el santoral católico, convirtiendo al travieso Elegguá -Guardián de los caminos- en el Niño de Atocha; a la sensual Ochun en la Virgen de la Caridad del Cobre; al temible Changó en Santa Bárbara; al sabio Babalu Aye en San Lázaro; a la maternal Yemayá en la Virgen de Regla, y así un sinfín se orichás que tuvieron que ser sincretizados con los santos católicos a golpe de látigo. Pero en ese instante ya no hay látigos, ni torturas, ni asesinatos en el nombre de Dios, y los orichas podían descender libremente sobre los creyentes sin necesidad de sus disfraces católicos. Y los paleros comenzaron a cantar en dialecto Lucumi, al son de los tambores, los himnos y salutaciones para sus dioses. Cánticos yorubas heredados de generación en generación, desde los primeros esclavos arrancados de Africa hace casi 500 años, hasta sus descendientes, los paleros que nos rodeaban. Apenas a un metro de mí, tronada en una especie de altar lleno de ofrendas, se encontraba la temible nganga de Rosa Sanchez, su "caldero de poder". Según me había contado la veterana palera en un anterior viaje a Cuba, su nganga tenía extraordinarias facultades y mucha energía y, según afirmaban, había llegado "a 100 mover pesados objetos sin que nadie los tocase". Nganga, prenda, caldero, aquella especie de cacerola presentaba, desde su presidencia del ritual, un aspecto inquietante. Y más inquietante aún cuando se conoce su contenido: plantas y raíces, piedras mágicas, huesos de animales, fórmulas mágicas... y restos humanos... Había llegado el momento de "dar de comer a la prenda". La nganga "tenía hambre", y antes de continuar la invocación a los orichas había que contentar al "señor". Eso significaba que la sangre de los sacrificios estaba a punto de correr, y abundantemente. Algún desdichado animal estaba a punto de morir... C5ER3E Y $O!E!ID( E( $0LO CO(3E 0ba 3osó 3isi e3ó a3ama sía o3%ni b%b%r% b%b%r%3% 3i ton lo og%o oba chocotó 3a6g%ó cabo si ill7. 4Sal%tación l%c%mí al 0richa Changó5 Con ánimo de conseguir algunos planos generales en el reducido recinto crucé el patio, entre los paleros que bailaban ya agitadamente al son de los tambores. Y allí atrás, atado a un árbol, estaba el cordero cuya sangre alimentaría la nganga, y a nosotros, poco después. Balaba desesperadamente, como si adivinase la suerte que le aguardaba. Casi instantáneamente llegó Rosa quien, sin ápice de duda en sus manos, desató al animal y se lo colocó sobre los hombros. Con el desconcertado cordero en volandas, y bailando al son de la música, la palera cruzó todo el patio para depositar la víctima del sacrificio ante la nganga. Lo más sorprendente es que el cordero se quedó quieto, acostado en el suelo ante la prenda, sin mover un músculo, esperando la muerte. Poco a poco, casi imperceptiblemente, el ritmo de los tambores se acelera, y los cánticos en Lucumi siguen ese ritmo, igual que los pies de los paleros que bailan cada vez más frenética. Nosotros, torpes europeos, no estamos acostumbrados a ese ritmo. Además el calor nos empapa las camisetas. Hemos pillado la estación seca en Cuba, y estamos al borde de la deshidratación. El ron comienza a rodar. Mezclados con los paleros, tarareando al ritmo de las letanías lucumis que no entendemos, intentamos mantener la mente despejada para no perder detalle de la celebración. Sin embargo el ron de caña en fuerte. Duro de tragar. Al menos para nosotros. Los peleros, sin embargo, engullen del cuenco el ron como si fuese agua. Por supuesto, la nganga también "bebía" ron, escupido por los paleros sobre ella. Y "fumaba". Rosa "fumeaba" la nganga con un gran cigarro puro. Metiendo en la boca la parte encendida soplaba con fuerza proyectando una gran nube de humo -y con ella, en teoría, su energía- sobre la nganga. El humo del tabaco, y el ron, se sumaban al trepidante ritmo de tambores y al agobiante calor para crear una atmósfera casi onírica a nuestro alrededor. Por fín uno de los paleros tomó al cordero en brazos sobre la nganga, y otro sacó de algún sitio un largo y afilado cuchillo. Con habilidad de carnicero el improvisado matarife atravesó el cuello del animal rajando las venas. La sangre comenzó a manar a borbotones regando la nganga. Una vez había "bebido" la prenda, se llenaron unos cuencos de madera con la sangre que seguía manando del moribundo cordero. 101 Primero bebió la "madrina", y después nos pasaron el cuenco a los "invitados de honor". Vacilantes, pero obligados por el compromiso contraído, llevamos el cuenco a los labios. Y sentimos el dulce, y por dulce inesperado, sabor de la sangre. El ritmo de los tambores acelera aún más. La danza es frenética. El ron y el tabaco siguen corriendo, y por fin los orichas hacen su aparición. Uno de los paleros es poseído por los dioses. Con bruscas contracciones se revuelve por el patio. Toma un gallo y le arranca la cabeza con los dientes. La sangre le resbala por el rostro y cae sobre la nganga. El poseso no es un campesino, ni un ignorante lugareño. Se trata de Jesús Pérez Sánchez, un doctor en medicina que poco antes había estado examinando la mano que me había roto durante la visita a una zona selvática repleta de cuevas, que fueron utilizadas por Che Guevara y Fidel Castro durante la revolución contra el dictador Batista, y siglos antes por los indios taínos, que en sus paredes reflejaron con pinturas rupestres, sus leyendas sobre dioses blancos llegados del cielo... pero esa es otra historia. Es un tópico incierto, como casi todos los tópicos, afirmar que las religiones afro- cubanas están relegadas a la clase más humilde y menos culta, y la posesión del Dr. Pérez, a la sazón padrino de un conocido pintor y artista de Trinidad, es un buen ejemplo. Y mientras el médico-palero era poseído por los orichas, otro gallo es tomado por el matarife que le corta en dos la cabeza clavándole la hoja del cuchillo dentro de la boca. En medio del frenesí el poseído es izado sobre los hombros de algunos paleros entre gritos de alegría. Están contentos de poder saludar a los dioses. A diferencia de las grandes religiones en la Regla de Palo, como en el vudú, la Santería o el Candomblé, no hay un intermediario entre la divinidad y los creyentes. No hay un ministro, un sacerdote o un pastor que condicione el contacto con lo trascendente. El palero puede enfrentarse cara a cara con los dioses, e incluso puede llegar a recibirlo en su propio interior. Eso es la posesión. !0(4RE, !5+OR Y !O(RI!0! "g%anillí irebeyo ama 3an o3e ag%ana ashe irisha o37 oló mo#oribale o37. 4Sal%tación l%c%mí al 0richa 0g)n5 Para un observador extranjero, ante lo expuesto, el Palo Mayombe puede parecer un credo primitivo, sangriento y cruel. Y lo es. Pero es mucho más. Algo que nos sorprendió sobremanera fue observar la alegría y las sonrisas de los paleros. No había expresiones sobrias ni feroces durante los cánticos. Tan solo nosotros parecíamos sorprendidos, o hasta incómodos, por la sangre derramada. El baile, la música y la fiesta, que en definitiva es lo que supone toda celebración de Palo Monte, derrocha alegría. Y veíamos esa alegría reflejada en los ojos de los paleros, especialmente de los niños, que a pesar de su corta edad no se sentían impresionados por la crudeza del rito, y disfrutaban de él plenamente. Y ese carácter alegre y vital del Palo nos sería mostrada en otra etapa del ritual. Dando un giro de 180 grados la apariencia tenebrosa del rito se torna luminosa durante la celebración de la "suelta de las palomas". 102 Varias palomas son repartidas entre los paleros. El ritmo de los tambores varía, adquiere otro tono más sereno. Y al ritmo de la percusión se va formando una fila constituida por los paleros que portaban paloma y por nosotros. De esta forma, moviéndonos como una larga serpiente, cruzamos el patio y luego toda la vivienda, hasta salir a la calle. Siempre al ritmo de los tambores. Una vez fuera, y a una voz de Rosa Sánchez, todas las palomas son soltadas llevando en su vuelo las peticiones de los creyentes hasta los cielos donde moran los orichas. Y seguimos su vuelo hasta perderse en el cielo entre aplausos y gritos de júbilo. Todas las palomas han echado a volar y ninguna se ha quedado en tierra o en los tejados, y eso es un buen augurio. Ailín, la palera más joven, que no alcanzará los 11 añitos, da saltos de alegría gritándole a las palomas que vuelen, que vuelen hasta Yemayá, hasta Ochún y hasta Oya, hasta el trono del mismísimo Obatalá, y les trasmitan los saludos de los paleros de Trinidad. Pero la ceremonia no había terminado, nos quedaba todavía un último acto de la obra: el "baile de los cuchillos". No todos los paleros pueden celebrar esta operación, por el peligro que radica. Rosa nos invita a que uno de nosotros, concretamente mi compañero Miguel Blanco, vende firmemente los ojos del bailarín. Y así lo hace. Mientras Miguel procede al vendado de los ojos, asegurándose de que resulte imposible ver nada a través de la venda, el bailarín escucha los consejos de Rosa. La veterana palera le pide absoluta concentración en los que va a hacer. Después se encara con el responsable del tambor, un atlético prieto, y con dureza en el tono le recuerda su responsabilidad en este rito. "Si tu dejas de tocar, o aflojas él se va a cortar. Si tu te cortas el se corta". La escena se antoja casi absurda para el extranjero, pero así es el Palo Mayombe. El bailarín caería en una especie de trance y comenzaría a golpearse el cuerpo con dos afilados cuchillos -uno de los cuales había servido para matar a los animales del sacrificio. Si los tambores atraían a los orichas, y estos protegían al bailarín, este no se cortaría. Y no se cortaría ni al golpearse con los cuchillos ni al blandir un temible machete en una frenética danza que también presenciaríamos. Sin embargo, en un momento determinado, el esfuerzo requerido era mayor que las ya escasas energías, y el ritmo del tambor aflojó un poco. Tal vez los nervios de saberse observado por ojos extranjeros, los nuestros, hizo que el ritmo del tambor se alterase. Al final de la celebración me acerqué al bailarín que presentaba una herida en su brazo izquierdo. Por primera vez en su vida -según me dijo- se había cortado durante el "baile de los cuchillos". Las afiladas hojas del "baile de los cuchillos" son reales y auténticas, como los sacrificios rituales, la sangre que bebimos, las sonrisas de los niños, o la energía que se desprende del ritmo de los tambores sagrados. No hay hipocresía ni tabulación conformista. El Palo Mayombe es así; duro, vital, cruel, alegre, impecable... como la mezcla genética que llevan en la sangre los paleros cubanos. Mezcla de la salsa o el merengue, la esclavitud, el sol del Caribe, y la rememoranza de una patria africana perdida en la memoria, y en las cicatrices heredadas en el alma de los hijos y nietos de los guerreros congos que llegaron a las plantaciones de algodón hace 500 años. El Palo Mayombe es dulce y amargo, alegre y temible, vital y mortal... como la vida misma. 103 0ba1u,* Los G,@igos y sus !ecretos En el Municipio de Regla, frente a la bahía de La Habana, en la calle Perdomo, en 1836, se formó la primera corporación de los Ñáñigos criollos, bajo el amparo y protección del Cabildo de APAPA EFÌ procedente de Calabar, al sudeste de Nigeria, que tenía licencia del gobierno, previo pago a la contribución, y le llamaron Efí Acabatón. Ñáñigo es sinónimo de hombre valiente que no conoce el miedo. A su sociedad secreta que está compuesta por hombres exclusivamente se le conoce por el nombre de Abakuá, igualmente la lengua que hablan, posiblemente esta voz significa «aconcuá» que es gentilicio de Calabar. Tiene como propósito social (al igual que las logias y cofradías) la fraternidad y la reciprocidad, guardando y adorando sus secretos lo mismo que hicieron sus antepasados en Africa. Fue creada en un momento crucial frente a los maltratos y explotación de la sociedad esclavista, sincretizándose también con el catolicismo y los cultos ya existentes. Al igual que sucedió con los lucumís, los carabalís hablaban distintas lenguas como el suama, olugo, bibí, etc., pero todos se entendían, y a todo el conjunto se les llamó carabalí o bríkamos, pero los más notables fueron los Appapas Efor Efí. Los Ñáñigos, como suele decirse a los abakuás, juran Ekue como los santeros se hacen Santo y los paleros se rayan. Cuando un individuo se consagra, jura cumplir sus 7 mandamientos, que son los artículos de su ley. Si los incumple dentro de la Potencia, su justicia lo condena. No importa que sea ladrón o asesino mientras no peque contra su ley. El proceso de transculturación las afectó además de los oportunistas antisociales que se aprovecharon de los principios básicos de ayuda mutua y protección para escapar de la persecución, y nutrieron sus filas de delincuentes. Aunque la secta cuenta con muchos adeptos honestos que buscaban en la organización una realización personal que la sociedad les negaba. Entre sus integrantes se encuentran muchos mayomberos, santeros, hasta los que se dicen católicos, porque no tienen necesidad de apartarse de su creencia original. En 1863 se fundó en Guanabacoa, por Andrés Petit, la primera Sociedad Secreta Abakuá integrada por blancos y mulatos llamada Akanarán Efor, lo que trajo problemas con los originales integrantes que eran todos negros, de ahí las trifulcas históricas entre reglanos y guanabacoenses, especialmente en las fiestas patronales. (Lydia Cabrera dice que fue en La Habana, por los documentos que encontraron en dicha ciudad, pero lamentablemente los archivos del Registro Civil de Guanabacoa se perdieron en un fuego y lo que se sabe al respecto es por trasmisión oral y por las rencillas que quedaron). El ñañiguismo llegó a representar el mal, se le atribuían todas las violaciones de la moral y adquirió tamaños alarmantes, por eso se promulgó un decreto el 27 de agosto de 1876 que prohibía en absoluto sus reuniones. Por ser una secta secreta está rodeada de misterios, sus seguidores eran 104 constantemente perseguidos y detenidos sufriendo amenazas, torturas y sobornos para tratar de saber qué encerraba la misma. Es en 1882 que por primera vez se divulgó en la prensa datos generales de la organización, pero fue Lydia Cabrera la que los envolvió en un manto más benigno al penetrar con sutilidad en esa secta tan intrínseca que a toda costa ha querido conservar sus misterios. Su libro "Abakuá" es una joya literaria donde se describe con detalles los ritos y las leyes de esta agrupación Como su dialecto era fácil, nuestro pueblo ha incorporado muchas de sus voces a nuestro léxico vernacular. Tángana= riña, agresión, altercado. Ñampear= matar. Ferembeke= rasgo gallardo, gesto valeroso. Simiñocas= visiones. Ecobio= camarada. Sángana= Paciencia. Chébere= corrientemente oímos en la calle por bonito, bien, bueno, gracioso, elegante, hasta los extranjeros la aprenden, pero en su primera aceptación Chébere es el ñáñigo por autonomasia, el chébere Monina tan echao pa'lante, guapetón, jactancioso, impulsivo. Santeros, paleros, (abala1os, espiritistas, y dem!s persona+es *%e engloban la sincr7tica religión a#roc%bana coinciden en s% respeto y temor hacia %na sociedad secreta *%e, originada en los esclavos negros arrancados de "#rica d%rante el siglo 8V, ha persistido hasta n%estros días. 9n c%lto m!s temido *%e el v%d), m!s rígido *%e el Palo Mayombe, m!s sangriento *%e el Candombl7, m!s estricto *%e la Santería... el c%lto aba3%!. M%ndo Misterioso ha via+ado hasta el corazón de C%ba para in#ormar en primicia sobre esta in*%ietante sociedad secreta. "No debéis meteros en ese tema, si os interesa la religión hay muchas menos peligrosas para conocer. Los abakuá son muy estrictos, y no tienen reparos en matar a quien los ofende". Quien esto nos advertía era Esteban, un respetado babalawo de Guanabacoa. "Los abakuá son hombres muy hombres, y a veces tienen que demostrar su hombría matando. Además no les gustan los blancos, y menos españoles". Esta nueva advertencia nos la hacía Rosa, una veterana santera de Trinidad. "Aquí siempre se ha dicho que los abakuá sacrificaban niños en algunos de sus rituales. Y la verdad es que, cuando se acercaban las fechas de sus celebraciones, aquí desaparecían muchos niños...". Tan grabe acusación nos llegaba de Gonzalo, un aséptico anticuario de un pueblo a 300 kilómetros de La Habana. Yo soy abakuá, y se que si alguien me ofende o me hiere tendré que matarlo. Solo así los abakuás limpiamos nuestro honor". Esta afirmación nos la hacía León, un joven negro de 2 metros, amigo y "hermano" cuya ayuda fue inestimable en nuestra investigación. De todos los cultos y credos de origen africano que conviven en el Caribe; Santería, Vudú, Candomblé, Regla de Ocha, Palo Monte, etc, ninguno permanece tan secreto e inescrutable como la Sociedad Secreta abakuá o Ñañiguismo. Y ningún hechicero, brujo o chamán es tan temido y respetado como el abakuá o ñáñigo. Natalia Bolivar, prestigiosa investigadora cubana, autora del famoso estudio "Los Orishas en Cuba" escribía recientemente: "No pocos etnólogos y folkloristas cubanos y de otras latitudes han sentido alguna vez la compulsión de adentrarse en las prácticas y concepciones sacromágicas de la hermética y excluyente Sociedad Secreta Abakua, atípica respecto a otros exponentes de la religiosidad popular afrocubana en más de un sentido". Y dice bien, ya que son muchas las diferencias 105 entre el enigmático ñañiguismo y las demás religiones afrocaribeñas. Diferencias que se remontan al mismo origen histórico de los abakuás. 5( CI!3ERIO 85E LLE4D +E 0ARIC0 Hacia 1501 Portugal se convirtió en el primer importador de esclavos negros arrancados de sus países de origen en Africa, y vendidos como animales en el Nuevo Continente. Hombres, mujeres y niños de Nigeria, Costa de Marfil, la Cuenca del Congo, Senegal, Guinea Francesa, Dahomey, etc, fueron capturados y conducidos a países como Cuba, para ser vendidos como mano de obra a los civilizados hombres blancos. Componentes de tribus tan diferentes como los ashanti, fanti, mina, mondongo, bangueda, mucaya, bisongo, motembo, mayombe, mani, kono, bámbara o mandinga, entre otras muchas, eran entremezclados y desnacionalizados, pasando a convertirse simplemente en "negros", sin importar su rango social, tribu o nación de origen en Africa. Lacayos bámbara, guerreros congos, princesas lucumís... todos "disfrutaban" de un "socialismo" que los igualaba como individuos con las mismas obligaciones, todas, e idénticos derechos... ninguno. Sin embargo todas esas tribus se llevaron consigo sus cultos y religiones ancestrales en las bodegas de los barcos negreros. Una vez llegados a su nuevo y triste destino, los esclavos se vieron obligados a sincretizar los dioses de sus panteones africanos con los personajes del santoral católico, para así, disfrazando a los orishas con identidades cristianas poder adorarlos. Así, Changó se sincretizó con Santa Bárbara, Yemanya con la Virgen de Regla , Ochun con la Virgen de la Caridad, Aggayú Solá con San Cristobal, Eleggua con el Niño de Atocha, etc. Y poco a poco el sincretismo católico fue fagozitando las originales tradiciones africanas. Sin embargo un grupo de esclavos, provenientes de la región de Calabar (entre Camerún y el margen oriental del río Níger), especialmente indómitos y valerosos, portaban una religión especialmente estricta y radical; el ñañiguismo. Un ejemplo bastante elocuente de la crudeza de sus ritos iniciáticos en Africa era la costumbre de afilarse y partirse los dientes usando limas, martillos y cinceles. El rito de afilarse los incisivos en forma de V, usando limas triangulares o simplemente a golpe de martillo producía un dolor insufrible que, no obstante, los guerreros abakuás soportaban sin un solo lamento. Lo mismo ocurría con los "rayamientos" (heridas que se hacían durante la iniciación en distintas partes del cuerpo), así como la mutilación de otras partes como seña de identidad tribal. Como apunta sabiamente el historiador cubano Enrique Sosa "Estas costumbres -cicatrización y mutilación- no supervivieron en Cuba, y otras, como la antropofagia practicada por algunos grupos étnicos, solo se conservaron bajo la custodia del recuerdo". Los sacrificios humanos, y la antropofagia ritual, practicada en muchas tribus africanas incluidas tribus carabalíes, influyó sin duda en el terror y respeto que han inspirado e inspiran las sociedades abakuá en Cuba. Pero el origen exacto del credo ñáñigo hay que buscarlo en la leyenda mística que originó el misterio más celosamente guardado por los abakuás, llamada "Sikanekue". La Sikanekue relata la historia de la bella princesa Sikán, hija del rey del pueblo Efor, quien cierto día se acercó al río para buscar agua en su calabacín. Cuando lo 106 llenaba, accidentalmente atrapó y dio muerte al pez sagrado Tanze, voz de Abasí (la Deidad Suprema), y portador del Gran Misterio. Como castigo por su profanación, Sikán fue sacrificada ritualmente, y con su piel se cubrió el primer tambor sagrado (Ekwé), que solo podían ver unos pocos escogidos. A través del toque del sagrado Ekwé habla el mismísimo Abasí para trasmitir a los iniciados Abakua el Gran Misterio. A partir de entonces el Ekwé habría de ser periódicamente "alimentado", regándolo con sangre humana (generalmente de guerreros congos) sacrificados por los temibles y legendarios "hombres-leopardo" africanos en sus escalofriantes ritos abakuá. Por su dureza y fiereza, no es de extrañar que los guerreros abakuá capturados como esclavos y vendidos en Cuba con frecuencia escapasen de las plantaciones huyendo a los montes para vivir como en las selvas de Africa, llegando a veces a asesinar a sus amos blancos. Eran los cimarrones, negros rebeldes ocultos en las selvas y montes cubanos, que mantuvieron intactos los ritos y mitos ñáñigos traídos desde las tierras africanas, sin intoxicaciones católicas. Sin embargo otros muchos abakua, que continuaban como esclavos, tampoco renunciaron a su milenaria religión, y estructuraron las bases de la sociedad secreta ñáñiga que mantenían en el más sepulcral secreto, oculta al hombre blanco. El odio, la frustración y la rabia contenidas entre los grilletes de esclavo, canalizaban la energía de los negros abakua en pruebas iniciativas de gran crueldad y dureza. Y no es de extrañar que los cronistas de la época atribuyesen a los ñáñigos todo tipo de crímenes y pruebas sangrientas. En una noticia publicada el 10 de marzo de 1812 en el periódico El Popular se afirmaba que la iniciación ñáñiga consistía en demostrar el valor matando a un semejante. Popularmente se suponía que ese asesinato tenía más valor si era el de un blanco, y mejor aún si era un español -copartícipe de la esclavitud en Cuba-. En otro artículo de prensa, esta vez publicado en 1898 en El Figaro, se aseguraba que ningún negro o mulato podía ingresar en el ñañiguismo sin prestar el juramento de odio a la raza blanca. Y si algún blanco intentaba ingresar en Abakua, antes debería renegar de su raza jurando odiarla a muerte... 5(0 ERC0(+0+ !ECRE30 E( EL C0RIBE A pesar de que la esclavitud no se abolió oficialmente en Cuba hasta la vergonzosamente tardía fecha de 1880 (aunque nunca debió haber existido), hacia 1812 y siguiendo una práctica de uso en Sevilla el gobierno español autorizó la creación de una original institución en Cuba; el cabildo negro. Como detalla el profesor Enrique Sosa, el cabildo negro preservó y difundió creencias, costumbres, ritos, ritmos musicales, lenguas de varias etnias africanas, etc. Al amparo de esas asociaciones y "sindicatos" de negros se crearon también ordenes y sociedades secretas, como los Abakua. A partir de 1830 comenzaron a instituirse en la legalidad los primeros cabildos y sociedades Abakua, que se ocupaban de luchar contra la esclavitud recaudando fondos para liberar a los hermanos aún esclavizados, protegiendo a las familias y viudas de los compañeros, ayudando a los enfermos, etc. Matanzas y La Habana fueron los primeros lugares donde se asentaron los templos abakua legales. El número de "potencias" (asociaciones abakua) creció rápidamente. Entre 1830 y 1836 se constituyeron 40 "potencias", que en 1881 ya llegaron a 83. 107 Lo que había nacido como una hermandad mística de negros esclavos fue socializándose y abriéndose poco a poco. Y en 1855 se constituía la primera hermandad abakua de blancos. En su inmensa mayoría los componentes de estas potencias eran de las clases sociales más humildes que, sin embargo, demostraban el valor y la audacia más temerarios para poder ingresar en esta restringida hermandad. Como apunta Natalia Bolívar, el orden colonial, temeroso del potencial de rebeldía de los abakua, parece haber perseguido a los miembros de esta sociedad en la seudorrepública, en cuyo contexto fueron aún más vilipendiados y perseguidos que en la época colonial. A medida que crecía el poder de esta hermandad secreta, todo tipo de feroces crítica caían sobre ella, acusando a los abakua de antropofagia, sacrificios humanos, beber sangre de cristiano en sus rituales, etc. Sin embargo, y a pesar de que muchas de las afirmaciones vertidas sobre los abakua fueron calumnias y exageraciones, cuando el río suena... En un escalofriante Oficio del Gobernador General de Cuba, redactado por el Jefe de la Policía -D. Manuel Asensio- redactado en 1876 se afirmaba, entre otras cosas: "El ñáñigo al presentarse en el lugar del sacrificio jura vendado beber la sangre del que no sea su hermano, siempre que se lo ordene su jefe, y para probar su valor ese día tienen que asestar por la espalda una o dos heridas al primer blanco que encuentre descuidado...". A pesar de lo aterrador de estas afirmaciones, probablemente exageradas, uno de los abakua que conocimos, a quien no une una gran amistad, nos relataba que hace muchos años, en su iniciación, había tenido que herir a una persona tal y como afirma el oficio de 1876. Este joven abakua, un imponente prieto (negro) de más de 2 metros de altura, nos aseguró que su hermano murió cuando, a los 14 años, intentaba apuñalar a otro cubano durante su iniciación abakua, siendo correspondido en la agresión y perdiendo la vida en ella... (?) A mediados del siglo XÌX, en vista del temor que los antiesclavistas abakua despertaban en el gobierno español de Cuba, se prohibió oficialmente este culto a través de leyes como la del 14 de noviembre de 1842, la del 2 de agosto de 1872 o la del 8 de enero de 1877, sin embargo la asociación, más secreta que nunca, continuó existiendo en la clandestinidad. A pesar de que fueron detenidos y procesados cientos de ñáñigos, sus templos profanados por la policía y sus objetos rituales confiscados, el culto abakua continuó y continua perviviendo. Su lucha contra la esclavitud, mayormente enfocada en la ayuda a los hermanos abakua y sus familias, realizó alguna tímida incursión en el terreno político, siempre tras el más sepulcral secreto. Pero la extraordinaria dureza de sus ritos iniciáticos limitaba el acceso a los abakua a una elite de varones especialmente duros, inflexibles e intolerantes. Para los ñáñigos, la hermandad está por encima de todo. Sus secretos jamás pueden ser rebelados y la traición a ese pacto de silencio puede pagarse con la vida. Los ñáñigos honestos buscaban en abakua una realización personal que la sociedad les negaba, sin embargo el secretismo que rodeaba la orden atrajo hacia el ñañiguismo a numerosos delincuentes que encontraban en la radical discreción abakua cobijo a sus huidas de la justicia. No es de extrañar que a principios de los 108 años 70, según el investigador Arístides Sotonavarro, "más del 90% de los jóvenes que han acogido la secta (Abakua) poseen antecedentes penales o son buscados por las autoridades. Estos son quienes resuelven los problemas "de hombre a hombre" y buscan la ocasión de tener "historia" (hechos de sangre) y después "jurarse". Porque mientras no pisan "el talero" (la cárcel) no se consideran hombres "ranqueados" (probados)...". En este sentido Esteban, babalawo y palero de Guanabacoa, gran amigo y "Padrino" nos confesaba que hace muchos años se preparó para iniciarse en el ñañiguismo, pero precisamente la crueldad e intolerancia abakua fueron las que le hicieron cambiar de opinión y enfocar su inquietud religiosa por la Regla de Ocha y el Palo Mayombe. Con consternación los abakuas más veteranos ven con desagrado como individuos pendencieros y violentos se han afiliado a las nuevas generaciones ñáñigas, a pesar de la meticulosa investigación que preceda cada iniciación. En su obra más importante, "El Monte", Lidia Cabrera cita el testimonio de un ñáñigo iniciado en 1897 que comentaba con satisfacción: "El miedo que nos tenían. Nombrar un ñáñigo era nombrar al diablo. ¡Ah, era muy grande ser abakua!". En este sentido las cosas no han cambiado mucho. Un joven abakua de Alamar nos comentaba el inmenso respeto y temor que todavía hoy los cubanos sienten por los abakua. "Cualquier chica -decía a MAS ALLA- está encantada de ser la novia de un abakua, porque saben que así todo el mundo la respertará y nadie se atreverá a faltarla al respeto. Nadie se mete con la mujer de un abakua porque sabe que eso podría costarle la vida...". OCBRE! +E IERRO, COR0L +E 0CERO Los escasos conocimientos que se tiene sobre el culto abakua han disparado la imaginación de muchos autores en todo el mundo. Durante los años setenta varios actores norteamericanos fallecieron en Cuba mientras intentaban interpretar personajes inspirados en los abakuás. Nosotros mismos recibimos varias amenazas al respecto de nuestra investigación. Otro ejemplo, en la película "Señalado por la Muerte" de Steven Seagal se narra la historia de un grupo de narcotraficantes jamaicanos pertenecientes a la sociedad abakua, que no dudan en hacer sacrificios humanos en sus ritos. La historia de ese film está calcada de un lamentable caso real, el de un grupo de narcotraficantes que en 1989 asesinaron a más de una docena de personas en Matamoros (México) en ritos de magia negra. El líder era un joven cubano iniciado en la Santería y el Palo Monte (probablemente abakua) por su madre, Adolfo de Jesús Costazgo. No es de extrañar que tan extraordinarios personajes desaten la imaginación popular, ya que quien supera una iniciación ñáñiga es una especie de superhombre respetado y admirado por toda la comunidad. En Trinidad, una hermosa villa colonial de centroCuba, nos entrevistábamos con Rosa, una veterana santera que siendo una joven había podido presenciar, a escondidas, una iniciación abakua. Según nos narraba Rosa, había sabido que aquella noche se ordenaba un nuevo ndisime (de "ndisi" arrebato, y "me" ser paciente: ser paciente en el arrebato o soportar pacientemente los duros castigos de la iniciación), así que decidió esperar a la noche y esconderse entre unos arbustos 109 para presenciar iniciación abakua. Hacia la media noche hizo su aparición la comitiva abakua, y Rosa siguió la espectacular procesión hasta las mismísimas puertas del cementerio (ver recuadro "La Ìniciación"). Este valiosos testimonio nos permite comprender mejor la leyenda del abakua. Como Rosa repetía varias veces durante nuestra entrevista: "hay que ser hombre muy hombre para ser abakua...". El iniciado debe soportar seis, ocho, diez horas de rodillas sin moverse, debe "rayarse" infringiéndose heridas sangrantes en el cuerpo, debe beber la pócima ritual, y todo ello sin mostrar el mínimo temor. Su juramento de fidelidad a la sociedad secreta es de por vida. En caso de traición el castigo podría ser la muerte en vida, siendo ignorado por toda la comunidad, o podría sucumbir ante los efectivos venenos preparados por los hechiceros. Uno de los más crueles, afortunadamente apenas utilizado en la actualidad, tiene su ingrediente fundamental en la semilla del hermoso árbol framboyan (Delonix Regia), produciendo un auténtico destrozo del intestino. Al igual que los hungan y bokor del vodú o los chamanes soviéticos, los hechiceros de los "hombres-leopardo" africanos eran grandes conocedores de los venenos y secretos de las plantas. Los secretos de la sociedad jamás pueden ser revelados al profano, y menos si es blanco. "Los secretos no se dicen ni a la madre de uno" -nos espetaba Sixto Contreras, abakua de 72 años iniciado hace 50. La "extraña jerga tomada del dialecto africano carabalí" que utilizan para que nadie les entienda (según el Jefe de Policía Manuel Asensio) y que poco tiene que ver con el dialecto yoruba utilizado en las demás religiones afrocubanas; el extraño código de grafismos, firmas y señales con que se marcan los templos, rituales o nombres de espíritus (similar a los ve-ves vodú) o sobretodo el Gran Secreto de Ekwé, los tambores sagrados a través de los que se comunica el divino Abasí, jamás deben ser profanados por los no iniciados. Otra cosa son las procesiones públicas que, en fechas señaladas, las cofradías abakua de Cardenas, Matanzas, Guanabacoa, La Habana, etc, celebran. En Guanabacoa, principal enclave de la magia cubana, visitábamos el templo abakua de Gamaroró Efo. Esta "potencia" ñáñiga ha protagonizado espectaculares procesiones encabezadas por su "Diablo" o "Ìreme", recorriendo calles y plazas al ritmo de los tambores hasta llegar a la costa, donde se sacrifican carneros, pollos y palomas en una espectacular orgía de sangre. Sin embargo, bajo ningún concepto los tambores secretos, y los símbolos sagrados serán mostrados al profano. No obstante, en templo abakua de Uriabon Edi, en Matanzas, pudimos aprovechar un despiste del custodio (vigilante), para franquear una puerta y observar por unos instantes -lo que tardaron en descubrirnos- algunos de esos objetos sagrados, como los imponentes tambores rituales, los gráficos y firmas escritos en las alfombrillas del templo, o la cabeza de un macho cabrío negro entronada en una vitrina, y flanqueada por sendos muñecos de hechicería y un pequeño Ìrime o Diablito. Sin embargo, y pese a poder atisbar a hurtadillas -con un cierto nerviosismo- algunos objetos sagrados, el Gran Misterio de Ekwé continua siendo el secreto mejor guardado de los ñáñigos. El secreto de la comunicación de Dios (Abasí) con los hombres a través del tambor sagrado. Un tambor que al principio de la historia fue cubierto con la piel de la princesa Sikán, sacrificada por haber dado muerte al sagrado Tanze, el enviado de la Divinidad. La esencia del secretismo abakua para con esos grandes misterios la encontramos en un cuadro que presidía el templo de Uriabón Efí y que rezaba: "Lo que usted vea 110 aquí / lo que usted haga aquí / lo que usted oiga aquí / cuando usted se vaya de aquí / déjelo que se quede aquí." El Ritmo de los oris)as 3O85E BECBE +E+IC0+O 0 ELE450 Los bailarines representan al orisha de los caminos, travieso y juguetón, al toque de los ceremoniales tambores batá. Elegguá, primer Orisha del panteón yoruba, mensajero de Olofi (Dios supremo), es un niño con cara de viejo, jaranero y juguetón, amigo de hacer maldades, le gustan los caramelos, los juguetes , los niños y los ancianos, viste de rojo y negro y usa como atributo un garabato o gajo con el que aparta las yerbas del monte, es el orisha que abre y cierra los caminos (para el bien o para el mal), se le coloca detrás de la puerta o entrada principal en forma de coco seco (Obí). Forma con sus hermanos: "Oggún", "Ochosi" y "Changó" la tetralogía de orishas guerreros, baila en un solo pié hacia delante y retrocediendo. Pertenecen a la cultura Yorubá Lucumí. Son tambores unimembráfonos y reciben los nombres de Cachimbo, Mula y Capé , se percuten con palos y se reconocen como tambores de guerra; se tocan a todos los Orishas. 3O85E B03: YOR5B0 +E+IC0+O 0 !0(4O En el panteón Yorubá es Shangó, su danza es enérgica y sensual!)angó, due@o del rayo, de la virilidad, de la guerra y de los to%ues o -iestas 64Hemilere 7I +ios %uerido y respetado, consentido por los oris)as> L0 A5ERJ0 +E B030 6LO! 30CBORE!7 Los tambores Ìlamados Batá, con dos membranas o parches de diferente tamaño, el mayor Ìlamado Ìnu y el máspequeño Chacha, se golpean con las manos y se sostienen horizontalmente sobre las rodillas. Existen tres tambores detamaño diferente : (en orden decreciente) Ìyá o el Mayor (la madre), Ìtótele o el Segundo y Okónkolo. El tambormayor, Ìyá, está provisto de hileras de campanillas (Chaworó). El sonido de la membrana se modifica al pegarle en su centro un anillo o aditamento resinoso. Además de los tambores hay unas maracas (Atcheré o Güiro). Los Batá son utilizados en las fiestas religiosas presididas por un espíritu (Aña) que vive en los tambores y se encuentra simbolizado por un secreto (Fundamento) introducido en el interior de cada instrumento durante suconsagración. Existen varias intervenciones, por ejemplo, el Oru del Ìgbodú (u Oro Seco), donde los tambores Batá tocan solos enhonor de los Orishas. 111 Pero habitualmente, las percusiones acompañan a los cantos y danzas. Las fiestas en la Santeríasirven para expresar la gratitud o el descontento hacia uno u otro de los dioses. Hay también fiestas que se ÌlamanBembé. Durante estos acontecimientos festivos no se deben utilizar los tambores sagrados sino los Güiros (Ìlamadostambién Awes o Chekerés), un tambor más una guataca (tipo de pico). En las regiones rurales se utilizanfrecuentemente tambores Ìlamados Tambores Bembé. Existe un cierto número de Orishas más o menos importantesunos que otros y cada uno de ellos puede tener varios ritmos, cantos y danzas diferentes. Todas estas danzas puedenser clasificadas en independientes (los bailarines, agrupados frente a los tambores, bailan de manera introvertida y sinrelación entre ellos) y las colectivas (Aro de Yemayá), en círculo donde uno se desplaza en el sentido contrario a lasmanecillas del reloj. Las danzas se ejecutan durante la presentación de los iniciados delante de los tambores Batá, porel aniversario del dios y por el aniversario del día de la iniciación. Estas ceremonias se Ìlaman Wemilere. Los másimportantes durante la celebración de estas fiestas son los tocadores de Batá (0lubatá) y el cantante solista (Akpwón),al cual responde el coro (Ankorí). Los bailarines se desplazan con relación a los tambores según sus niveles en lajerarquía de la Santería. Las danzas de la Santería son sin dudas las más variadas. Los movimientos más importantesson los realizados con la ondulación de la espalda que se transmite a los brazos y hasta los dedos. Aparente monotonía de los pasos que esconde una verdadera riqueza de movimientos 3O85E 0R0R: +E+IC0+O 0 0ARO++5C 0ARE9E3E Pertenece al panteón Arará. Dueña del mar(agua salada), madre del universo y de lamaternidad. En sus bailes ejecuta cómo seencuentra en esos momentos el mar, encalma, agitada o en tempestad 3O85E IYE!!: +E+IC0+O 0 O445( Machete en mano, los danzantes representan al dios guerrero del hierro, poderoso y temperamental. Se acompaña con el sonido de campanas y los tambores Ìyyesá, únicos de Matanzas. RI3CO "IYE!:" CO( ORI!0! Con toques rápidos y alegresdel (a+o y las Ca+as brindamosla m)sica prodigiosa $yes!, las*%e transmiten consagrada porlos años la c%lt%ra de los esclavos provenientes de laregión Nigeriana de Llesh!.Con estos to*%es y cantos, serealiza la invocación a los0rishas y a los ante pasados#allecidos, como si se pidiera lamediación de 0lodd%mare paraimpartir paz y bienestar a todala h%manidad. 044E! 645IRO7 +E+IC0+O 0 O!5( Oshún, orisha perteneciente al panteón Yorubá, dueña de las aguas dulces, ríos, manantiales, del oro y piedras preciosas, protege a las parturientas, es la diosa de la sensualidad, con su cuerpo bañado de oñi (miel) conquista a la mayoría de los orishas masculinos. 112 30CBORE! B03: La sociedad secreta Abakuá para hombres procedentes del Calabar Nigeria occidental se funda en Cuba en 1836 en el ultramarino pueblo de Regla de la provincia de La Habana donde se constituye el JUEGO que se denominó "EFÌKE BUTÓN" por negros esclavos y libres que procedían de los mercados de abastos, el puerto, las construcciones y disímiles oficios manuales, esta sociedad secreta se establece por las mismas razones que en Africa, los motivos : explotación económica y represión a que fue sometida la esclavitud y en general la raza negra. Aunque no es una secta religiosa sino una asociación de ayuda mutua económica, adoran a un ser supremo denominado "ABASÍ" y tiene cada Juego una virgen (Orisha) patrona a quien rinde culto. Hablan una jerga compuesta por siete dialectos africanos, está constituida por plazas o jefes jerárquicos y miembros supernumerarios. En sus plantes o reuniones festivas realizan la ceremonia o leyenda de "SÌKÁN", donde se sacrifica un chivo, rememorando el sacrificio de la princesa "SÌKANEKUÉ" quien delató inconscientemente parte del secreto "Abakuá". que solicitan las plazas a "Abasí" para celebrar la fiesta, una vez concedido se hace el Nkame o dar gracias con el Npegó (tambor de ley). Comienza la música y los cantos y en su parte más alta entra el Moruá Yansá el que trae a los íremes conocidos por diablitos que son los personajes más famosos del folklore Afro-Cubano, quienes hacen sus bailes dirigidos por el Moruá a quién sólo obedecen, vienen encapuchados, descalzos y son espíritus reencarnados los que al terminar se llevan consigo a los músicos y cantantes a modo de procesión. 30CBORE! B0(3K O $0LO +E+IC0+O 0 L0 40(4: Para los Congos, en su ceremonia, el factor fundamental lo constituye "La $renda" (cazuela de hierro con tres patas donde se depositan los atributos, palos sagrados y yerbas del monte). Cuando el "Taita" (hombre de mayor edad) enciende La Fula, comienza con una fuerza mágica el baile alrededor de la Prenda, donde cada participante hace sus ofrecimientos, rinde tributo y canta loas a sus ancestros. El Taita , cuidador de la Prenda se la lleva a buen recaudo y comienza el baile Congo, el virtuosismo con su ritmo violento y contagioso se apodera de todos los presentes. Un frenético climax de movimientos y sonidos que invocan el espíritu Nganga (Olla Mágica) . R5CB0! Y0CBK 450450(CD COL5CBI0 113 R5CB0 Y0CBK Es la rumba más antigua conocida como rumba de los viejos, se toca con cajones comoantiguamente se realizaba en los solares urbanos (viviendas múltiples), su ritmo essuave, cadencioso donde la mujer se luce más que el hombre. R5CB0 450450(CD Rumba contemporánea de origen urbano originaria de Matanzas y La Habana, se toca con tumbadoras, su ritmo es más rápido que el Yambú , su baile se caracteriza porque el hombre persigue a la mujer y trata de poseerla sexualmente con movimientos eróticos con sus caderas, las manos, los pies, dirigidos al sexo femenino y en forma sorpresiva, ella trata de evitarlo tapando sus genitales con las manos o dando la espalda a su compañero. Si él lo logra o ella lo evita tendrá el espectador al mejor bailarín. R5CB0 COL5CBI0 Es la rumba competitiva por excelencia, ya que compiten los cantantes, los tocadores y los bailarines, y se entabla una conversación entre el bailarín y el tambor quinto realizando éste los movimientos del bailarín. Su ritmo es más rápido que el de las rumbas anteriores y sólo es bailado por hombres por su fuerza y peligrosidad, ya que se realiza con cuchillos y machetes, sobre una botella y movimientos acrobáticos muy fuertes y peligrosos. L0 CEIB0 CI3O Y 3R0+ICID( En la Villa de San Cristobal de La Habana , a escasos metros del puerto , radicaron los primeros pobladores de lo que es hoy la Ciudad de la Habana . Allí bajo una frondosa ceiba se celebró la primera misa y el primer Cabildo (reunión del Ayuntamiento) para conmemorar oficialmente la fundación de la Ciudad un 16 de noviembre de 1519 . La Ceiba simbólica se encuentra en los jardines del Templete . De acuerdo a la tradición , al amanecer de cada 16 de noviembre , las mujeres de la población salían sin pronunciar palabra alguna , hasta celebrar la misa en la Catedral a las seis de la mañana y de allí se dirigían a la ceiba del Templete para dar tres vueltas a su alrededor , hablándole y haciendo peticiones y ruegos . Es el ruego a San Cristóbal ( Patrón de la Villa ) simbolizado en esa ceiba , Aggayú en la religión yoruba . La ceiba es uno de los árboles más antiguos de Cuba y al igual que la Palma Real de los más sagrados y utilizados por los yorubas , abakuas y paleros . De la ceiba se utilizan todas sus partes , en sus raíces hay que dejar el derecho a pagar que en dinero ( owo ) . De la ceiba no debemos irnos dándole la espalda pues en ella albergan los santos , la ceiba es su morada . Desde la entrada a Cuba de los esclavos africanos se respeta . Nadie nunca se atreve a cortarla ; cortarla es desagradar a los santos y sus raíces están llenas de 114 fuerzas sobrenaturales . En la Regla de Ocha se conoce por Ìroko . Jamás se deja de invoar a Ìroko ( Ìroko , fumí arará iyawó ) . El iniciado en Ocha debe siempre rogarle a Ìroko . Bajo ella se sitúan las prendas de los nganguleros , cazuelas que encierran palos , machetes , clavos de linea , hierros y otros con los cuales trabajan . Estas se depositan bajo la ceiba para que se incorporen las virtudes de su sombra y se fortalezcan , así aprenden sus misterios . El 16 de noviembre resulta una fiesta para la siembra de la ceiba y también babalawos , paleros y santeros guardan ritos de ofrecimiento en éste día . Relato de un to%ue de !anto en la abana El muerto llega a las once La llegada del muerto es uno de los momentos más intensos de cualquier ceremonia santera. Algo así como un encuentro en la tercera fase con los orishas. La posesión a través del trance es una ceremonia esencial en la religión afrocubana. Se produce después de muchas horas de danza, cánticos y ritmos atronadores de los tambores batá, que contribuyen a la catarsis colectiva y a abrir la puerta de la percepción por la que entrará el muerto con el mensaje de los dioses. La monta del caballo o posesión en la Regla Ochá, puede producirse sobre cualquier persona presente en el toque de santo, pero suele ser el iniciado o santero el que presta su cuerpo para esta comunicación mágica. La monta del caballo hace que el santero se convierta en oráculo y hable por los orishas, repartiendo consejos adivinatorios o premoniciones entre los seguidores. La ceremonia nada tiene que ver con los exorcismos que se ven en las películas, en los que la poseída acaba vomitando una sustancia verdosa parecida a un puré de perejil o volteando la cabeza hasta que se le pasa de rosca. Es, por el contrario, una fiesta colectiva, en la que el anfitrión del bembé abre su casa a los vecinos e incluso a los extraños. Una ceremonia de celebración por los favores recibidos de los dioses y en la que la más gratificante experiencia de cualquier asistente es haber sido elegido como portavoz de los dioses. 3o%ue de santo 115 Llegué a La Habana dispuesto a no dejar de asistir en la primera oportunidad que se presentase a un bembé o toque de santo. Naturalmente, las reuniones santeras no se pregonan en la plaza pública: hay que conocer a alguien, y no precisamente desde hace dos minutos, para que te lleve de la mano. Las convocatorias se difunden de boca en boca entre los iniciados de una Regla, y por lo general el lugar de cita sólo se conoce con unos pocos días o incluso horas de antelación. Normalmente un bembé se celebra en la intimidad doméstica de la casa donde cualquier santero puede tener su altar dedicado a Ochún, Yemayá, Obatalá o Babalú Ayé. Pero también se puede convocar en un solar -que es como se denomina a la densa vecindad de las casas habaneras-, presididas por un patio central rodeado de balcones. Que te lleven a un toque de santo es sin duda una prueba de confianza, pues sólo así te franqueará el cubano el área íntima de su espiritualidad. Pero quien acude por primera vez a un bembé como neófito lo hace en un estado de general perplejidad, desbordado por la atmósfera de excitación y humo, música y ritmo que le rodea. Ritmo y melodía están indivisiblemente unidos al bembé, que se convierte de esta manera en un rezo bailable. En casa de Yemay, Los tambores africanos han empezado a sonar en la sala central de esta casa colonial del barrio de la Víbora de la Habana, a eso de las cuatro de la tarde. Para dejar espacio a los que llegan, los pocos muebles de la decadente cuartería han sido trasladados a las habitaciones del fondo. El ritmo de los tamboreros, que se turnarán cada dos horas, es estruendoso y se escapa por las rejas forjadas de las grandes ventanas. La estrecha calle hace de caja de resonancia. El sonido rebota en las fachadas y se cuela en las casas contiguas, pero nadie se queja. Al contrario; entre el catálogo de sonidos de la calle... este sin duda es el mejor, porque nos transporta a la oscura noche de los tiempos de la esclavitud africana y sus ceremonias espirituales. La negrura de boca de lobo que ha caído sobre la calle, aliviada por algún tenue farol, contribuye a reforzar la atmósfera de este barrio de una Habana fuera del tiempo. El ambiente se ha ido caldeando y las cuarenta o cincuenta personas congregadas en la casa están peregrinando hasta el altar de Yemayá -diosa de las aguas y madre de todos- que protege a los habitantes de esta vivienda. Yemayá es la diosa de los mares y los lagos, de la vida y la maternidad, pues la santería cifra el origen de las cosas en el gran vientre amniótico del mar donde se engendran las especies. Junto a la imagen de la diosa tocada por siete tules blancos y azules que recuerda la transparencia del agua, se diseminan distintos platos con ofrendas, dulces, vasijas de ron y pedazos de coco y otras frutas. Todos los allí reunidos acabarán comiendo exquisiteces como aquéllas; infrecuentes en la dieta actual de los cubanos, que se sirven hoy porque esta familia ha decidido tirar la casa por la ventana. En el momento álgido de la ceremonia, cuando ya empiezan a pesar en las piernas las tres horas de baile y calor sofocante que llevamos aguantando, la dueña de la casa obsequia a todos con un chocolate caliente y unos habanos. Un gesto de gran 116 hospitalidad que habrá obligado a los anfitriones a pedir prestado y que demuestra su enorme contento por las gracias recibidas de la diosa. Que, por cierto, no se comentan, aunque podrían tener que ver con la salud de un niño o incluso el futuro alumbramiento de alguien muy cercano a los habitantes de la casa. El muerto llega a las once Casi nos habíamos olvidado del muerto y sus augurios. No se hace esperar. Al filo de las once el muerto llega. Se instala en un negro gordo que había exhibido hasta entonces los torpes movimientos de sus muchos kilos. Se trata de un iniciado, conocido entre algunos de los que acuden a este toque de santo. Los primero indicios de que ha sido montado, se hacen evidentes, pues sus movimientos son ahora enérgicos, nerviosos, más gráciles que cuando le vimos bailar recién llegado unas horas antes. Los más próximos le sujetan, pues a veces su corpachón se revuelve con la gestualidad de un lagarto. Cuando parece más aplacado, le dejan solo. Entonces lanzan observaciones en lengua lucumí y, apuntando con el dedo a sus elegidos, les advierte con sus predicciones o les traslada consejos dictados por los orishas. Se expresa por boca del muerto que le ha montado. Bajo la mayor expectación cruza la sala, se acerca a otros, les saluda en un abrazo hombro con hombro y de la forma más confidencial les dicta un mensaje quedo al oído... que al instante demuda el rostro de quien lo recibe. La tía de este joven, una señora entrada en años, jura y perjura cuando le pregunto que su sobrino no habla lucumí, y que esta lengua ancestral que trajeron los negros esclavos a Cuba está siendo inspirada en ese momento por los orishas. Para hacer más fácil la comprensión de los mensajes, el muchachón oráculo introduce en su discurso palabras castellanas o de la jerga cubana. Pero más de un caso ha habido en que la interpretación del mensaje se ha retrasado meses mientras se buscaba por toda La Habana un traductor de lenguas yorubas antiguas. La fiesta se disgrega a ritmo lento. En la habitación del fondo, convertida en improvisado guardamuebles, el negro enorme regresa de su trance aliviado con los abanicazos de unos cuentos de sus familiares. Los dueños de la casa tienen ganas de despedirse, y para que no quede duda se ponen a baldear con agua el porche donde se aglutinan los rezagados. El problema viene ahora, pues a la complicación de encontrar un taxi a estas horas en este lugar perdido de La Habana, está la preocupación de afrontar el encargo del Orisha. Y más pronto que tarde... De momento, a Denís, mi buen amigo caricaturista, Yemayá le ha encomendado un trabajito si quiere obtener sin más complicaciones los papeles que necesita para regularizar su trabajo callejero junto a la Catedral. Denís tendrá que hacer un amarre con las indicaciones dictadas por el muerto. Parece que consiste en espolvorearse el cuerpo con los fragmentos de un pescado seco mezclado con cáscara de huevo machacada con un fragmento de piedra de un altar yoruba. Todo ello bajo la supervisión de su madrina o iniciadora santera. Bueno. Pues que sea para bien... 117 $ata1ies El tigre traicionó a su )ermano, el gato mont&s> Ogbo, el gato montés, tuvo un sueño que lo dejó intranquilo y decidió visitar a Orula para consultar el oráculo de ifá. Luego de la consulta, Orula le aconsejó que hiciera ebbó porque Ekun, su hermano, intentaría matarlo. También le dijo que no le sirviera la cabeza a nadie. Ogbo hizo el ebbó, y estuvo atentó a todo lo que le rodeaba, ya que ese fue otro de los consejos que Orunmila le dio. Ekun, el tigre, también fue donde Orula por adivinación para saber cómo podía salir victorioso en algo que quería hacer. El oráculo aconsejó que le diera un chivo a Echu, y aunque Ekun le prometió a Orula que lo haría, decidió que comer la carne del chivo sería más apetitosa que la de su hermano, el gato montés. A pesar de su decisión, Ekun mantenía en su mente la idea de aniquilar a su hermano, por lo que le dijo a todos los animales que estaban cerca que no mataría a quien lo ayudara a atrapar a Ogbo. La trampa consistía en que tenían que traer a Ogbo para que sirviera la cabeza de Ekun, y en ese momento éste lo atraparía. El leopardo, quien provenía de los mismos padres que procrearon a Ekun y a Ogbo, accedió junto con dos más de los suyos para convencer al gato montés de que se presentara ante su hermano el tigre. Mientras esperaba, Ekun se froto el cuerpo con aceite de palma y fingió estar enfermo. En eso el leopardo hablaba con Ogbo tratando de convencerlo de que tenía que ir donde Ekun porque estaba muriendo y el adivino había dicho que él, Ogbo, era el único que podía salvarlo sirviendo su cabeza. A pesar de que Orula le dijo que no sirviera la cabeza de nadie, Ogbo fue a encontrarse con su hermano Ekun y percibió la tristeza de todos los presentes, pero al mirar los ojos de su hermano se dio cuenta que estaba mintiendo. Ogbo propuso que se usara al chivo para hacer ebbó, pero tenía que matarlo otro animal. Todos estuvieron de acuerdo porque según la tradición la cabeza del chivo podría quitar los males si con ella se servía la cabeza de Ekun. Entonces la hiena saltó sobre el chivo y lo sacrificó, luego Ogbo tomó la cabeza entre sus manos y comenzó a bailar mientras cantaba una alabanza, pero mientras lo hacía fue dando pasos hacia atrás alejándose de Ekun, y cuando estaba suficientemente lejos, giró y salió huyendo.. Fue tanta la ira de Ekun cuando se dio cuenta de que Ogbo había escapado, que culpó a los animales que estaban presentes y los atacó comiéndose a varios. Así fue como Ogbo se salvó de la traición, mientras que a Ekun todo le salió mal por no hacer ebbó. Cómo llegó la ri%ue.a al mundo por primera ve.> En cierto momento de la historia, Elegguá ocultó todas las tortugas que habían en el Cielo y en la Tierra para favorecer a Etura. Cuando los guardianes celestiales volvieron al Cielo, le informaron a Oloddumare sobre el alto costo que tenían las pocas tortugas que quedaban en la Tierra, además de la gran pobreza que había. Ante tal situación, Oloddumare ordenó al tesorero celestial que abriera las bóvedas del tesoro para que el dinero cayera sobre la Tierra. En eso Elegguá fue donde Etura y le dijo que el dinero venía desde el Cielo en grandes cantidades, pero que sólo entraría en la casa que estuviera decorada con lo que le gustaba comer. Elegguá le aconsejó que extendiera una manta blanca frente a su casa y la llenara de ñame machacado para regarlo alrededor de la casa. Luego de darle el mensaje a Etura, Elegguá fue al encuentro de los portadores del dinero y les dijo que las 118 personas en el mundo eran muy desorganizadas y muy malos anfitriones, pero que él conocía a alguien llamado Etura que les proporcionaría un lugar digno. Los enviados de Oloddumare se dirigieron a la casa de Etura sin detenerse en ningún otro lugar, y al llegar al lugar se encontraron con un ambiente hospitalario. A partir de ese momento Etura se convirtió en el personaje más rico de su tiempo. El nacimiento de Os, Ceyi y sus primeras di-icultades> Estando en el Cielo, un día Osá Meyi huía de Ìyamí Ochooronga y se escondió en el vientre de la primera mujer que encontró. Éste no sabía que igualmente corría peligro porque la mujer era miembro del culto a Ìyamí Ochooronga (reina del mundo de la hechicería). Cuando Osá Meyi nació, lloraba todas las noches, y nadie sabía por qué lo hacía. Apenas comenzaba a llorar trataban de tranquilizarlo, pero sólo su madre conocía el secreto de por qué lloraba tanto, a excepción de su padre que sólo trataba de calmarlo, sin saber la verdad. El niño lloraba para interrumpir el ritual que preparaba la madre para sacrificar a su esposo al culto de los hechiceros. Esto se repitió todas las noches hasta que Osá Meyi creció lo suficiente para hablar. Llegó un día en que, en vez de llorar, gritaba el nombre de Ìyamí Ochooronga, lo cual desconcertaba a la madre cuando se disponía preparar el ritual de sacrificio. Esto ocurría en el mundo de los sueños. Una noche, los hechiceros se reunieron con la madre de Osá Meyi para preguntarle por qué siempre interrumpía abruptamente el sacrificio, y ella explicó que en ese preciso momento, su hijo gritaba el nombre de Ìyamí Ochooronga, la hechicera mayor. La madre recibió instrucciones para que llevara a su hijo a la próxima reunión, en donde se haría un banquete. Llegó el día de la asamblea, en donde todos los hechiceros habían colaborado con dinero para realizar ceremonial sobre sus cabezas esa noche. Todos recibieron el ritual, y cuando llegó el turno de Osá Meyi, este permitió que le hicieran el ceremonial pero no comió del chivo utilizado porque no había contribuido para comprarlo, ya que no pertenecía al culto de la hechicería. A la mañana siguiente, Osá Meyi se despertó y fue donde su padre para contarle sobre el sueño que había tenido y le aconsejó que hiciera un ceremonial a su cabeza con un chivo. Le dijo que haciéndolo se curaría, ya que había estado enfermo por mucho tiempo. El padre siguió el consejo del niño y compró un chivo para hacer la ceremonia. Después de hecho el sacrificio, Osá Meyi tomó parte de la carne del chivo y la puso en una olla, con aceite, sal y arena del suelo, poniendo todo al fuego. Esa fue la primera vez que un humano hizo una ofrenda a los Ancianos de la Noche. Después del ofrecimiento se acostaron a dormir, pero al día siguiente la madre no despertó y el padre se curó. Posteriormente Osá Meyi le contó al padre que su madre era la responsable de su enfermedad, que él había contactado el mundo de la hechicería a través de sus sueños, viendo todo lo que hacía. Desde ese día, las personas siempre respetaron a Osá Meyi y lo invitaban cada vez que hacían ceremonial a su cabeza para que él lo realizara El pacto entre la tierra y la muerte> La muerte se quejaba porque no sabía que hacer con los cuerpos luego de que les quitaba la vida a las personas; y por su parte, la tierra también se quejaba porque todos, tanto seres humanos como animales, caminaban sobre ella, además 119 tenía que repartir todo lo que producía. Un día la muerte se encontró con la tierra le propuso hacer un pacto. Entonces la tierra dijo: "Yo aceptaré el pacto, pero desde hoy todo el mundo tiene que pagarme un tributo, que consistirá en que tienen que ofrendarme de todo lo que comen, y el que no cumpla, tu te encargarás de cobrarle mis deudas." Y la muerte contestó: "Para poder cumplir con lo que propones, tenemos que dejar que participe mi esposa Arun (la enfermedad), pues ella será la que prepare todo para alcanzar lo que nos proponemos. Ella tiene poder sobre ricos, pobres, reyes, vasallos, sabios, orgullosos, ladrones, honestos, en fin, sobre todos por igual." :ste pata3í nos m%estra la importancia de ;darle de comer a la tierra;, ceremonia #%ndamental en la regla de ocha. Por ello los yor%bas resaltan %n proverbio *%e dice< ;Lo *%e la tierra da, la tierra se lo come;, hay *%e trib%tar a la tierra con todo lo *%e nos da d%rante el transc%rso de n%estra vida. $ata1í sobre la luc)a entre Oye1/ y Eyiogbe despu&s de la creación del mundo Cuando la tierra fue creada por la triada divina Olodumare-Olofi-Eledá, todo estaba sumido en la nada. En ese tiempo le fue entregado el mando del mundo a Oyekú por ser el mayor de los 16 reyes de Ìfá. Durante el reinado de Oyekú todo era silencio y oscuridad, sólo deambulaban por el mundo Ìkú y los espíritus no evolucionados, lo primero creado por Olodumare. Al pasar el tiempo la tierra ya cansada de no evolucionar debido a la presencia de la nada y de esos espíritus que no avanzaban, decidió hacer ebbó, con lo cual logró que Olorun (el sol) la escuchara y la atrajera cerca de él. Esto trajo como consecuencia que apareciera por primera vez sobre la tierra la luz del sol, con lo cual llegó Eyiogbe a nuestro planeta, quien era claridad y luz, todo lo contrario a Oyekú. De esta forma Oyekú fue destronado por Eyiogbe quien se convirtió en el primero de los reyes de Ìfá pasando Oyekú a ser el segundo. Tal fue la soberbia de Oyekú que se dirigió al castillo de Olofi a quejarse por lo sucedido y a informarle que Eyiogbe creaba vida pero también la destruía rápidamente debido a que el sol calentaba la tierra constantemente quemando todo lo existente y secando mares y ríos. Olofi dándose cuenta de que esto era verdad y mediando para que cesara la disputa entre los dos reyes, proclamó que la mitad del tiempo fuera reinado por Eyiogbe y la otra mitad por Oyekú, naciendo así el día y la noche. $ata1í sobre por %u& Os)/n siempre es bienvenida en el reino de Olo-i En los tiempos antiguos Oshún vivía en el castillo de Olofi, esta era su hija predilecta y era colmada siempre de halagos y atenciones por parte de su padre. Su relación era tan estrecha que se fue creando poco a poco un torbellino de celos en torno a la mujer de Olofi, quien no aceptaba que se le tratara en segundo orden. Ella logró crear una mala imagen de Oshún haciendo que Olofi la tratara en forma indiferente y con el tiempo, como no lograba sacarla del palacio, impulso a Olofi a que la matara. Cuando Oshún se enteró del plan de la mujer de su padre decidió marcharse del reino agobiada por un sentimiento de tristeza que la llevó a deambular por el mundo. Un día consiguió en su camino a Yemayá, quien se había enterado de su triste historia y la cobijó bajo su seno. Yemayá llevó a Oshún al fondo 120 de un río para ocultarla, diciéndole que ese era su reino y se lo entregaba porque ella se iría a reinar al mar. Al transcurrir el tiempo Olofi descubrió la trampa de su mujer y la alejó de su lado, dedicándose arrepentido a buscar a Oshún sin poderla encontrar. La impotencia de no conseguir a su hija no lo dejaba en paz y se la pasaba todo el tiempo llorando y esperando que apareciera. Su llanto creó una lluvia constante que mantuvo la tierra inundada por un tiempo por lo que apareció el pavo real y le dijo: "Tu tristeza me ha traído hasta ti, sé que no quieres mal para tu hija pero ella no lo sabe, por eso te diré dónde está. Ella está en aquel río, suena una campana en la orilla para llamarla y vierte miel en el agua, recuerda que le gusta mucho". Olofi siguió el consejo del pavo real y se dirigió al río en busca de su hija. Luego de hacer lo que el ave le dijo salió Oshún de las cristalinas aguas y antes de que huyera de nuevo, Olofi le dijo: "Hija perdóname, he cometido un gran error y quiero que vuelvas conmigo a casa", y Oshún le respondió: "El río es ahora mi hogar, siempre te he querido y siempre te querré, así que cada vez que quieras verme ya sabes dónde encontrarme y cómo hacer para llamarme". Olofi emocionado ante estas palabras se retiró diciendo: "Ìgual de bienvenida serás siempre en mi castillo y no tendrás necesidad de permiso alguno para entrar en él". Oggún premia la humildad de un extranjero Oggún vivía en el monte cerca de una próspera ciudad. Un día llegó un extranjero a dicha ciudad pidiendo hospitalidad y sus habitantes se la dieron. Sintiéndose bien, el extranjero decidió establecerse en la ciudad siendo aceptado y luego de un tiempo le otorgaron las tierras de una loma para que las cultivara. Así lo hizo teniendo un buen cultivo ya que ese año hizo un buen clima en las tierras altas. Al año siguiente los pobladores de la ciudad insistieron de que esta vez debía cultivar en el valle, el extranjero así lo hizo obteniendo una mejor cosecha debido a que ese año llovió mucho en las tierras altas, perjudicándolas y beneficiando las que él había trabajado en el valle. La hospitalidad de los pobladores se convirtió en intriga, envidia y mala intensión, y gestaron un plan en contra del extranjero para el siguiente año. Esta vez lo enviaron a sembrar al monte con la intensión de que Oggún lo matara al sentirse invadido por un extraño. Cuando se encontraron en el monte, el extranjero al contrario de asustarse, ofreció comida a Oggún y este en agradecimiento decidió premiarlo, diciéndole: "Te mandaron al monte para que te matara pero yo te voy a convertir en Rey". En el centro de la ciudad todos esperaban por la noticia de la muerte del extranjero y en eso apareció Oggún con su machete en la mano causando muerte y destrucción. Los delegados de la ciudad le preguntaron el motivo de su furia y este contestó: "Quiero que aquel que mandaron a mi territorio bajo engaño, lo conviertan en Gobernador de la ciudad". Cómo se hizo poderosa la Palma Real En el comienzo de los tiempos los árboles se estaban preparando para venir al mundo. Estando en el cielo fueron a visitar a Okorón Melli para que este les diera consejos, ya que él había estado en la tierra en varias oportunidades. Okorón Melli 121 estaba ocupado preparándose para volver a la tierra por lo que le pidió a uno de sus discípulos, Efún fun Zele, que leyera el oráculo a los árboles. Se realizó la adivinación y Efún fun Zele, les aconsejó que hicieran ofrendas a Eshu, a Oggún y a Shangó, además que hicieran ebbó rogándose la cabeza. Los árboles no hicieron caso de los consejos con excepción de la Palma Real. Todos se separaron y comenzaron a bajar a la tierra. Años después, la tierra prosperó y se embelleció, todas las noticias de cómo iban las cosas siempre llegaban al cielo y un día llegó la noticia de que había mucha maldad en el mundo. Los Orishas decidieron que Shangó bajara a la tierra a ver que era lo que estaba sucediendo. También se le ordenó a Efún fun Zele, el que adivinara para los árboles, que acompañara a Shangó en el viaje. Al llegar a Ayé, Shangó y Efún fun Zele descubrieron que los árboles estaban contaminados y comenzaron a destruirlos con rayos y vientos, pero al llegar a la morada de la Palma Real, esta empezó a cantar una alabanza a Efun fun Zele para que recordara que ella había hecho el ebbó que le habían marcado antes de ir a la tierra. Por lo tanto la Palma Real fue el único árbol perdonado y por eso siempre está libre de ser atacada por rayos y fuertes vientos. Patakí sobre la llegada de Elegguá a la tierra Cuando Ochanlá estaba trabajando en la creación del hombre, Orula le pidió que le concediera un hijo. Un día éste fue al palacio de Ochanlá y se encontró con la sorpresa de que la Oricha encargada de la creación no había culminado el encargo, manifestando a Orula que tuviera un poco de paciencia. Sin poder esperar Orula insistió y pidió a Ochanlá que no permitiera que llegara solo a Ayé (el mundo de los humanos) y que le permitiera llevarse una forma de vida que se encontraba sentada en el lado izquierdo de la entrada del palacio. Ochanlá trató en vano de explicar a Orula de lo imposible que era criar ese niño en Ayé, accediendo más tarde ante los constantes ruegos del Oricha dueño de la adivinación. Ochanlá le explicó que no se podía llevar al niño en ese momento, que lo tocara y que regresara a Ayé para tener relaciones con su esposa. Después de esto nació un niño a los 12 meses y lo llamaron Echu-Elegbara, nombre que significa "señor del poder de la transformación". Desde su nacimiento Echu-Elegbara hablaba y comía, siendo su apetito tan voraz que además del alimento que le daban sus padres se comía todo lo que conseguía: animales, piedras, hiervas, árboles, etc. Llegó tan lejos, que al no encontrar que comer se comió a su propia madre. Cuando Orula se dio cuenta de lo sucedido supo el por qué de las negativas de Ochanlá y trato de solucionar el problema armándose con una espada para matarlo, pero en un descuido Echu-Elegbara trató de comérselo a él también aprovechando esto Orula para ajusticiarlo cortando su cuerpo en pedazos. Esta acción no detuvo a Echu-Elegbara, por el contrario cada pedazo se convirtió en un Elegguá individual. Seguidamente todos los Elegguases creados por la furia de Orula huyeron a Orum (el reino de los Orichas) mientras Orula los perseguía. Al llegar a los límites de Orum y quedar sin alternativas, los Elegguases decidieron pactar con su padre. El pacto consistió en que Orula los perdonaría y ellos a cambio lo ayudarían con Ìfá en el momento en que él los necesitara, esto fue aceptado por el Oricha pero antes deberían devolver a su madre y todo lo que se habían comido. Desde ese momento Echu-Elegbara, con todos sus caminos o manifestaciones, comenzó a trabajar con Orula y todo volvió a ser normal en la ciudad de Ìworo. 122 Patakí sobre cuando y por qué fue creado el Oricha Obatalá Cuando Oloddumare descubrió que Echu se había apoderado de la mente de las primeros doscientos Orichas, decidió crear otra deidad y creó a Obatalá. La intención era la de encarnar en la nueva deidad la bondad y los buenos deseos de Oloddumare para restablecer la esencia de los Orichas. Esta situación ya la había advertido Echu en la Creación, determinó que tomaría posesión de las mentes de los Orichas para manipularlos y hacerlos malvados y destructores. Así fue que Echu demostró que aunque él era incapaz de crear, era capaz de transformar los productos de la obra de Oloddumare. Obatalá fue el único Oricha que no pudo ser influenciado por el malévolo poder de Echu, a pesar de que este intentó tentarlo en múltiples oportunidades. Esto lo lograba gracias a los ebboses que siempre hacía. Oloddumare siempre llamaba a las deidades para amonestarlas porque no estaban cumpliendo los mandamientos que Él les había encomendado después de la Creación. Les decía que al ser víctimas de Echu habían ayudado a que el mal triunfara sobre el bien y que eso no debía ser porque Él era la encarnación de la verdad, la bondad y la justicia, por lo tanto mientras más mal hacían se convertían en seguidores de Echu y no en sus hijos. Oggún que era la deidad más antigua y poderosa, le preguntó a Oloddumare la razón por la cual permitió que Echu desarrollara la autoridad y el poder que tenía, además le dijo que por qué no borraba las fuerzas del mal de una vez por todas de la faz de la tierra ya que él era el Creador. Luego de meditarlo, Oloddumare explicó que él no era un arquitecto del mal por lo tanto no podía destruir nada que se posara sobre la Tierra. Les preguntó, "si yo les pido que ustedes encierren a sus hijos dentro de una habitación y luego metan en ella a un lobo hambriento, ¿ustedes lo harían?". Todos los Orichas contestaron negativamente. Luego Oloddumare les reveló que él no había creado a Echu. Todos se sorprendieron y Orula dijo que siempre había creído que Oloddumare había creado a Echu para probar la firmeza de las deidades. Oloddumare les preguntó que si no se habían dado cuenta que Echu nunca iba a las reuniones diarias del Consejo Divino. Y todos dijeron que si, que lo recordaban. Ante esto Oloddumare les refirió que "el pavo desarrolla sus barbas desde la infancia", lo que quiso decir es que Echu siempre había existido en forma independiente y con su propio poder. Explicó que en el principio Echu y Él vivían en Aima u Orima antes de comenzar la Creación. Allí solo había oscuridad y sólo una mínima parte de luz estaba en el poder de Oloddumare. Dicha luz fue desarrollándose en la manos de él y cuando la oscuridad se fue acabando, Echu juró que quebrantaría toda creación que Oloddumare hiciera. Echu se jactaba diciendo que su poder funcionaría en todo lugar en el que Oloddumare creara bajo el cetro de la luz y que todo ser que estuviera allí sería su sirviente. Oloddumare le dijo finalmente a los Orichas que él aceptó el reto de Echu y creó a Obatalá a su imagen y semejanza para que enfretara la maldad de Echu, con sus propias virtudes, firmeza y determinación. Ante lo dicho por Oloddumare los Orichas estuvieron de acuerdo y reconocieron a Obatalá como el líder del Consejo Divino. 123 Patakí que explica el origen de la expresión "Obá Kosó" Un día Changó se convirtió en niño y fue a enfrentarse con el rey diciéndole que abandonara el trono ya que él era el verdadero monarca. El rey llamó a todo el pueblo y preguntó quién era el padre de aquel niño que estaba perturbando su tranquilidad, y nadie lo conocía. El rey ordenó a sus sirvientes que matarán al niño y estos lo lanzaron al río. Cuando regresaron el niño había reaparecido ante el trono. El rey estaba muy asombrado y dijo: "¿Cómo es posible esto? Estos hombres mataron al niño y este ha regresado, tendré que matarlo yo mismo". Pero cuando el niño oyó esto comenzó a saltar, jugar y hacer milagros, luego corrió hacia el bosque, encontró un gran árbol, se subió a él y se colgó con una cuerda. Las mujeres regresaron al palacio diciendo: "El niño se ha ahorcado". El rey ordenó que se hiciera sacrificio al pie de aquel árbol, que abrieran un hueco en el lugar y que depositaran en él una vaca, una tortuga, una gallina, un cordero, un gallo, una gallina de guinea, una paloma, un ganso salvaje, aceite, babosas y mantequilla. Al hacerlo cortaron la cuerda y el cuerpo del niño cayó del árbol recobrando la vida. Todos estaban asombrados y el niño dijo: "Yo no me ahorqué". Contaron lo sucedido al rey y este fue a la selva a verificar si lo sucedido era cierto. Pero cuando regresó al palacio el niño estaba sentado en el trono. El rey le ordenó que lo entregara pero el niño se negó diciendo: "Mi nombre es Obá Kosó (El rey no se ahorcó) y ahora me he convertido en el rey de este pueblo". Patakí sobre por qué Yemayá es la madre de los Orichas Yemayá no encontraba con quien casarse, pero un día Oggún decidió hacerlo y de esa unión nació un niño llamado Orungan. Un día Orungan trató de seducir a su madre y esta corrió despavorida mientras este insistía. Ya exhausta, Yemayá cayó en el suelo y de su cuerpo comenzaron a brotar chorros de agua formando un gran lago y de allí surgieron las deidades siguientes: Olosa (deidad de los lagos), Olokun (deidad del fondo de los mares), Dadá (deidad de los vegetales), Changó (deidad del fuego, el rayo y el trueno), Ochún (deidad de los ríos), Oyá (deidad de las tormentas), Obba (deidad del comercio), Orichaoko (deidad de la agricultura), Ochosi (deidad de la cacería), Oke (deidad de las montañas), Ajé Chaluga (deidad de las riquezas), Babalú Ayé (deidad de las enfermedades) y Orun (deidad del sol). Patakí sobre por qué los seres humanos deben consagrarse en Ocha Una vez Olofi quiso mandar a alguien a la Tierra para que lo representara y pusiera orden. Para ello mandó a buscar a Obatalá y dándole la orden le dijo: "Aquí tienes 7 virtudes y 7 pecados, ve a la Tierra y empléalos con sabiduría". Obatalá llegó a la Tierra y en vez de hacer lo que Olofi le dijo, dejó que el pecado se extendiera. Por lo tanto surgieron el crimen, el homosexualismo, las drogas, la trampa, la prostitución, el robo, los vicios, en fin, todo era confusión y desorden. Un día Orula miró el oráculo, se dio cuenta de lo que estaba sucediendo y mandó a buscar a Obatalá. Cuando este llegó a su casa, Orula le dijo que tenía que hacer ebbó para que las cosas se arreglaran y no lo rechazaran en la casa de las personas decentes. Obatalá le contestó que él era grande y poderoso y que eso nunca le pasaría. Cuando Babá salió de donde Orula y se dirigió a la primera casa que 124 encontró, le cerraron la puerta en sus narices. Lo mismo ocurrió en todas las casa decentes que consiguió. Al ver esto se dirigió de nuevo a la casa de Orunmila para hacer el ebbó y a los pocos días Olofi lo mandó a buscar y le reclamó por haber caído en el error de no haber usado equilibradamente las virtudes y los pecados que le había dado. Después de hablar con él, Olofi le dijo que tenía que limpiar esos errores y Obatalá le respondió que él iba a arreglar eso. Al poco tiempo llegó a la tierra y reunió a todos los pecadores para decapitarlos, ya que decía que todas las cabezas le pertenecían y que allí residía el problema. Ante esto Orula le dijo: "Mira Obatalá, tu creaste esta situación y hay que arreglarla lo mejor posible". Así le fue marcando santo a cada uno de los pecadores para salvarlos de la furia de Obatalá y para que con la consagración éste los limpiara de todo pecado. $ata1í sobre la avaricia y egoismo de un Rey Había una vez un rey que tenía siempre por costumbre consultarse con 4 babalawos a la vez. Cuando se realizó la consulta le dijeron que tenía problemas con su economía y que tenía que hacer ebbó para poder lograr lo que quería, lo cual era que las personas aportaran pronto los tributos que debían desde año pasado. No quedándole más remedio, el rey hizo el ebbó y pronto entró en la prosperidad y la abundancia. Al estar bien, el rey no llamó más a los 4 babalawos porque temía que tendría que repartir sus riquezas con ellos. Al pasar el tiempo, las cosas comenzaron a cambiar y empeoraron nuevamente, hasta tal punto que tuvo que llamar de nuevo a los 4 awoses. Ellos acudieron al llamado del rey y sabiendo la mezquindad de este, le pusieron como condición que tenían que darles una parte de los tributos que recogiera. Además le marcaron un ebbó grandísimo con una gran cantidad de carne cazada, jutía, pescado, kolá, ropa, aceite y agua. El monarca no tuvo más remedio que hacer lo que los babalawos le dijeron, por lo que fue víctima de su propia codicia. $ata1í sobre cómo Ec)u ayudó a %ue se multiplicara el maní> Cuando el maní venía al mundo estaba deseoso de tener muchos hijos en la Tierra para que ellos pudieran gozar de mucha popularidad en ésta, pero le dijeron que hiciera sacrificio para que después de tener los hijos, sus hermanos y hermanas no se volvieran contra ellos para destruirlos. Le aconsejaron que le diera a Ìfá un carnero y a Echu un chivo, él se negó a hacerlo y partió a recorrer el mundo sin hacer ningún sacrificio. Al llegar al mundo fue en realidad muy productivo, porque tuvo muchos hijos a la vez. Entre tanto Echu le comunicó esto a la coneja que había parido también y buscaba como alimentar a sus críos. El maní había ocultado a sus hijos recién nacidos bajo la tierra. Echu atrajo la atención del erizo y de la liebre, sobre el valor nutritivo del maní. Siguiendo los consejos de Echu, todos comenzaron a alimentar a sus hijos con maní. Cuando el maní descubrió que lo estaban dejando sin hijos, fue donde un sacerdote de Ìfá llamado Jemi Sudí para consultarse. Este le recordó lo del sacrificio que tenía pendiente del carnero a Ìfá y el chivo a Echu. Después de hechos los sacrificios Echu fue donde estaba un campesino y le aconsejó que pusiera trampas alrededor de sus fincas para atrapar a los animales que la devastaron. En consecuencia el campesino rodeó el lugar con trampas en la 125 que atrapó varios animales. Cuando los animales observaron que el maní se había fortificado, abandonaron la plantación y dejaron que este y sus hijos prosperaran y sobrevivieran, para que sus cosechas trajeran beneficios a la Humanidad. Más tarde el maní fue a agradecer a Ìfá por ayudarlo a salir victorioso de los ataques. $ata1í sobre cómo el camaleón de-endió a Oloddumare> El camaleón era el sirviente más fiel en el palacio de Oloddumare. Él estaba presente el día en que Olokun, la deidad de la profundidad de los mares y una de las más ricas, alardeaba diciendo que era más rico que su propio padre. Oloddumare le recordó que él había sido su creador y por lo tanto cualquier cosa suya le pertenecía. Olokun replicó que conocía la historia de su nacimiento pero argumentó que si una criatura o hijo se hace más próspero que su creador, el último debe aceptar con naturalidad el hecho consumado. Añadió que era una señal de progreso cuando un hijo se hacía más afortunado que su padre y este debería tener la cortesía de admitirlo. Puesto que Olokun mantuvo esta posición ante Oloddumare, este acordó que viniera en un plazo de siete días a demostrar la veracidad de su afirmación. Tan pronto como Olokun partió, Oloddumare dio la autoridad especial al camaleón para que desafiara a aquel hijo prepotente utilizando el poder que le había conferido de refutar cualquier argumento. No obstante, Alaggema decidió ir donde Orunmila para consultarse y realizar el sacrificio que le indicara Ìfá. El día señalado, el camaleón en el trono próximo a Oloddumare y le dijo a Olokun que el Padre Todopoderoso lo había autorizado a que él aceptara su desafío porque era el colmo de la provocación que el mismo Creador compitiera o concursara con sus criaturas. Olokun se presentó vestido espléndidamente con ropajes blancos y una corona de cuentas. Cuando se sentó donde le correspondía todo lo que llevaba puesto apareció en el cuerpo del camaleón y su confusión fue en aumento al comprobar que en catorce ocasiones se vistió y siempre la ropa aparecía en el cuerpo de Alaggema, hasta que agotó todos los vestidos y abatido pidió disculpas aceptando que había actuado mal menospreciando a Oloddumare, su padre. Patakí sobre la falta de sentimientos Había un hombre que quería mucho a su mujer, pero esta no lo quería a él. Un día la mujer se murió y el hombre la enterró en su propia casa porque no se quería separar de ella. Él se la pasaba lamentándose, casi no comía porque también quería morir y llamaba a la muerte para que se lo llevara, ya que sentía que no podía vivir sin la mujer. Tanto llamó a la muerte que esta se presentó y le dijo que esa mujer nunca lo había querido y que la dejara tranquila pero él insistió en que quería ver a su mujer y siguió llorando. Entonces Ìkú le dijo que cogiera un rabo de caballo blanco, otro de caballo negro y una hiervas y que a las 12 de la noche llamara a su mujer. Así lo hizo, la mujer se presentó y le dijo que la dejara tranquila que ella pertenecía a otro mundo y que en recompensa le daría una fortuna, señalándole un hoyo en donde había mucho dinero. $ata1í sobre el nacimiento de la traición 126 El Gato y el Perro vivían juntos en la misma casa pero llegó un día en que, por una escasez, el Perro se comió la comida del Gato y estos ya no podían estar en la casa porque siempre peleaban. El Gato decidió ir al monte para contarle lo sucedido al Leopardo, este llamó al León para buscarle una solución a la situación. Los dos felinos acordaron dar una fiesta con mucha comida para aclararlo todo. Ìnvitaron a muchos animales entre los cuales estaban el Mono y el Carnero, quienes eran grandes amigos. Pero el Carnero no quiso asistir porque decía que los animales mayores siempre estaban al acecho para comérselo y el Mono tampoco fue por ser solidario con su amigo, además dijo que a él también le tenían ganas porque se trepaba en los árboles y cogía los mejores frutos. El día de la comida los partidarios del León llegaron primero y gozaron de la mejor parte de la fiesta. Al llegar los partidarios del Leopardo empezó la guerra entre los animales, con excepción del elefante que llegó tarde. Ante esta situación Olofi preguntó que por qué se peleaban, ellos contestaron que todo era por la escasez de alimentos y que el mono tenía la culpa. Al escuchar esto Olofi mandó a buscar al mono y los animales mayores le dijeron al Carnero que no lo molestarían más si él los ayudaba a atrapar al Mono, ya que este era su amigo. El Carnero accedió e hizo una trampa con una cuerda, un palo y unos cocos. Pero el Mono, que tenía por costumbre verse siempre con Orula, había recibido de Ìfá el mensaje de que se rogara la cabeza por tres días seguidos y que no saliera de su casa por esos tres días porque había en su camino una trampa y una traición. Cuando el Carnero llegó a la casa del Mono, la mujer de este, sabiendo lo que le dijo Orula a su esposo, no lo dejó entrar. Le dijo que el Mono no estaba y que se fuera porque ella no sabía cuando llegaría. No obstante, el Carnero preparó la trampa en la puerta de la casa. El Mono estaba dentro y al escuchar a su amigo el Carnero salió a la puerta y lo saludó. El Carnero al verlo le dijo: "Vine a traerte estos cocos que sé que te gustan mucho". Cuando el Mono vio los cocos trató de tomarlos y cayó en la trampa. El Carnero lo amarró y amordazó y fue en búsqueda de los animales mayores. El Mono estuvo todo el camino lamentándose de su situación y cuando casi llegaban al lugar donde esperaban el Leopardo y el León, apareció Oyá en forma de volcán y liberó al Mono. Olofi, al enterarse de lo sucedido, mandó a llamar al Carnero y este tratando de evadir su responsabilidad le dijo a Olofi que él ya no quería buscar más al Carnero, pero Olofi sabía la verdad, que el Mono había sido traicionado por su mejor amigo, por lo que mandó a quitarle la cabeza al Carnero. $ata1í de cómo Babal/ 0y& evitó una revolución en el Cielo Cuando la Tierra fue poblada por segunda vez, Oloddumare creó cuatrocientas sesenta deidades menores. La Tierra crecía y prosperaba rápidamente pero al Cielo llegaban constantemente noticias de que se convertía prácticamente en el reino de Echu. Fue Ogbe Ogundá quien adivinó con el tablero de Ìfá para indicar a esas cuatrocientas sesenta deidades la manera de evitar que el mundo cayera en las garras de Echu. Este les recomendó que le dieran un chivo a Echu y que se rogaran sus cabezas con un carnero para evitar que se pelearan y se contradijeran constantemente. 127 Ellos se rogaron sus cabezas pero se negaron a dar el chivo a Echu, porque aquel era su gran enemigo a quien debían combatir. Después de comer la carne del carnero, cada uno decidió tomar un nombre antes de venir a la Tierra para combatir. Cuando aún no habían concluido la selección de los nombres, Echu tomó la mente de algunos de ellos, creando una ilusión en donde las deidades posesionadas por Echu iban a matar al cabeza de Ìgun, un lugar del Cielo. Sankpana (Babalú Ayé) retó a los equivocados y entabló una lucha en la que fue vencedor pero no evitó la división de las deidades en dos grupos, unos vinieron a la Tierra a luchar y los otros se quedaron en el Cielo. (adie escapa de la Busticia de Ogg/n Changó manifestó que él sólo sabía bailar, Eziza dijo que él sabía como transformar las cosas, mientras que Oro dijo que él sólo sabía luchar. Entre tanto los tres se dirigieron al mercado donde se encontraron con la madre de Eziza vendiendo artículos medicinales. También se encontraron con la madre de Changó que estaba vendiendo aceite de palma, mientras que a madre de oro vendía aguaa. Al poco tiempo de star allí sitieron hambre y fue e momento de poner a prueba sus capacidades confesas. Ellos propusieron que Eziza debía prepararse para robar algo de comer. Él se transfiguró rápidadmente en un viento con fuerza de galerna, el cual robó el agua de la madre de Oro, aceite de palma de la madre de Changó y carne de su propia madre, aunque sin conocer a las víctimas de su robo. Más tarde cuando se reunieron para comerse lo que Eziza había robado, hubo conmoción en el mercado y las tres mujeres estuvieron quejándose de que ladrones desconocidos les habían robado sus productos. Ellas decidieron ir a la casa para alertar a sus hijos de lo que les había sucedido. Entre tanto, los tres hijos estaban descansando después de comer en la confluencia de los tres caminos, cuando apareció ante ellos un cazador, quien al percibir lo que los tres hombres probablemente estuvieron haciendo, repitió el siguiente conjuro: Orita meta, amidi kugo. Bebe ondaamidi, gere gere. Misi aldufe. En el momento que el cazador llegó a la bifurcación del camino, su conjuro había sumido a los tres hombres en un profundo sueño. Después de que el cazador se había marchado, ellos se despertaron por los gritos de sus madres. Ninguno de ellos conocía a la madre del otro. Cada uno tomó uno de los tres caminos convergentes en la intersección. Según las mujeres se fueron acercando entre lamentos, Changó agarró a la madre de Oró, Oró capturó a la de Ezizá y Ezizá a la de Changó. La madre de Changó saludó a su hijo por su verdadero nombre, Aremú Olufinran y con ese llamado los tres hombres liberaron a sus respectivas cautivas. Las mujeres narraron cómo a las tres les habían robado sus artículos y ellos al percatarse de lo acontecido, se miraron con asombro y las miradas cayeron sobre Eziza al que le preguntaron si su valentía se manifestaba únicamente en robarle a sus propias madres. Él respondió que no había daño alguno porque ellos se comieron la comida de sus madres. En ese instante, el cazador, que desde entonces estaba observando oculto en un escondrijo, emergió para adjudicar sobre las acciones de los tres hombres. Él decidió que a partir de aquel momento, Ezizá sólo sería capaz de robar a cualquiera 128 en la selva, Changó debería continuar con su juerga danzaria, mientras que Oro debería desaparecer en la selva. La madre de Changó se molestó y decidió regresar al hogar de su padre, en el poblado de Takpa. Alafi Atiba, que se había convertido en el Rey de Oyó, fue entregado a la madre de Changó a cambio de Elenkre Adodo, el Rey de Takpa. Oro fue maldecido a no tener nunca un altar. El cazador era el mismo Oggún. Los prodigios de Eyiogbe La persona con Quien se encontró Eyiogbe cuando iba al mercado era un inválido llamado Aro. Al igual que hizo con una mujer embarazada, Eyiogbe le dijo a Aro que él tenía un problema, pero el inválido le respondió que el que tenía problemas era él. Eyiogbe entonces sacó su Ìroké (la vara de la autoridad) y la apuntó hacia las manos y las piernas del inválido, quien se levantó y caminó rápidamente. Fue entonces cuando Aro comprendió que delante de él no estaba un niño sino un verdadero sacerdote de Ìfá. Aro cayó de rodillas para agradecer a Eyiogbe por haberlo curado de la invalidez que lo había acompañado desde su nacimiento y este le aconsejó que le hiciera ofrendas a Orunmila y que en el futuro no ocultara sus problemas, porque sino nunca Oloddumare se enteraría y respondería a sus plegarias. Eyiogbe comentó que aquel que oculta sus males será enterrado con ellos. Después de esto Eyiogbe se encontró a un ciego y le preguntó si tenía algún problema. El ciego le respondió que no tenía nada en absoluto. Una vez que Eyiogbe apuntó su vara de adivininación hacia los ojos del hombre, inmediatamente recuperó la visión. El hombre estaba colmado de alegría pero Eyiogbe le aconsejó que se convirtiera en seguidor de Orunmila para reducir al mínimo su deuda con la Humanidad. También le dijo que le ofrendara un gallo a su cabeza al regresar a su casa. Dicho esto Eyiogbe siguió su camino Los oric)as protegen a los desvalidos Había una vez un hombre que tocaba el tambor en la calle mientras cantaba y decía que, mientras su ángel guardián no lo vendiera no habría Rey que pudiera hacerle nada. Su enemigo lo oyó un día y se lo contó al Rey de la ciudad, éste lo mandó a buscar y le dijo que le guardara un collar de coral que era muy preciado por él. El hombre que era ciego partió para su casa y su enemigo lo siguió con la intención de ver dónde guardaba el collar. Tan pronto como el ciego puso el collar en un lugar que creía seguro, su enemigo lo tomó y lo botó al mar. A los pocos días el Rey mandó a buscar al ciego y le pidió que le entregara el collar. El ciego llegó a su casa y cuando buscó el collar no lo encontró por lo que fue a visitar a Orula para que lo ayudara. Este le dijo que tenía que hacer ebbó dándole de comer a su cabeza un pescado grande y que después de la rogación abriera el pescado y lo registrara. El ciego así lo hizo y su sorpresa fue grande cuando al registrar el pescado después del ebbó apareció dentro el collar que había perdido, salvándose de la traición del Rey y su enemigo. 129 $ata1í sobre el por %u& Eleggu, no debe estar encerrado A Elegguá le gustaba mucho bailar y por ir a una fiesta hacía cualquier cosa. Un día se presento un festejo y no podía ir porque no tenía dinero. Hizo todos los esfuerzos posibles hasta que, como última alternativa, llegó a la casa de Obatalá y le prometió limpiarle la casa todos los días si lo sacaba de un gran apuro que tenía. Obatalá aceptó y le dió el dinero por adelantado por lo que Elegguá pudo ir a la fiesta esa noche. Estuvo muy contento y se divirtió muchísimo, estando tan cansado al otro día que le costo hacerle el trabajo a Obatalá como lo habían acordado. La limpieza la hacía de mala gana, ese y todos los días. Mientras sucedía esto Obatalá se enfermó repentinamente, a tal extremo que tuvo que enviar por Orula para registrarse. En la consulta le salió que en su casa había alguién que no era de allí y que era necesario que se fuera. Que apenas saliera de su casa ël mejoraría de salud, también le dijo que el que estaba en su casa se sentía preso y que esa era la razón de su enfermedad. Obatalá se acordó del muchacho que tenía en su casa para la limpieza, pero no lo despidió al momento, espero que hubiera otra fiesta en el pueblo y le dijo: "Toma este dinero y ve a la fiesta, ya no me debes nada, pero no me abandones y visítame cuando quieras". Elegguá se fue muy contento y desde ese momento obatalá comenzó a sentirse mejor y se curó del mal que tenía. $ata1í sobre el surgimiento del -errocarril Cuando Oggún comentaba que no tenía discípulos, el Babalawo Nija Ole adivinó para él y le recomendó que hiciera sacrificio con un cabra y un chivo. Después de hacer el ebbó le dijo que construyera una casa larga y que se sentara en la entrada de la misma. Mientras estaba sentado en la entrada de su nueva casa, venían a él muchos niños para jugar. Finalmente Echu convenció a la gente para que fueran ocupando las habitaciones de la casa hasta que fue totalmente ocupada. Oggún comenzó a mover la casa poco a poco mientras entonaba una canción y esta se fue alejando del pueblo. Al alejarse del pueblo comenzó a cantar más alegremente y la casa se fue moviendo con mayor velocidad. De esta manera nació el ferrocarril con el cual Oggún transportaba grandes cantidades de personas. +onde nace darle de comer a la tierra para evitar la bruBería y la muerte antes de tiempo Obatalá tenía dos lagos detrás de su casa. Uno de ellos solía quedar sin agua durante la época de sequía mientras el otro suministraba agua durante todo el año. Los dos lagos eran utilizados por todos porque Obatalá así lo disponía, pero un día las esposas de Babá le reclamaron que también permitía que los hechiceros usaran los lagos. Ante esto él ordenó que el lago que tenía agua durante todo el año fuera exclusivamente del uso de su hogar, mientras que el que quedaba sin agua en época de sequía podía ser usado por los hechiceros. Sabiendo que el lago que utilizaban no podía suministrarle agua durante la época de calor, los hechiceros fueron a consultar los oráculos para encontrar la respuesta de 130 cómo podían tener agua todo el año y se le aconsejó que le hicieran un sacrificio a Echu. Luego de que Echu recibiera su ofrenda se zambulló en el lago exclusivo de Obatalá y removió la piedra que hacía que el manantial surtiera de agua el lago y la removió al lago que utilizaban los hechiceros. Seguros de que su lago no se secaría más, los hechiceros designaron a dos pájaros, Ìkaare y Otuutu, para que alejaran a los intrusos. Cuando llegó la época de sequía, el lago de Obatalá se secó rápidamente mientras que el de los hechiceros se mantuvo con abundante agua. Los hechiceros enseñaron a los pájaros una señal para que le avisaran si alguien llegara al lago a tomar agua. Cuando la gente de Obatalá comenzó a quedarse sin agua, fueron al lago de los hechiceros. Los pájaros les permitieron coger agua pero las esposas de Obatalá entraron al lago a bañarse, por lo que los pájaros comenzaron a dar la señal para alertar a los hechiceros. Ìkaare fue el primero en decir: "Aya orisa weee" y Otuutu dijo: "Aya orisa Ponmi tu tu tu tu". De esta manera los intrusos se dieron cuenta de que había guardianes en el lago y huyeron apresuradamente a sus casas. Cuando los hechiceros llegaron al lugar y preguntaron que quienes eran los intrusos, los pájaros dijeron que eran de la familia de Obatalá y los hechiceros juraron que castigarían al oricha por permitir por contradecir su propio decreto y permitir que su familia usara el lago que no le correspondía. Los hechiceros marcharon a la casa de Babá entonando el siguiente canto: Eni Asoro, omo eronko aafobo oniyan To Orisa Taayare, Aarije, Aarimu. Hoy se desató la baraúnda. Todos los pájaros del bosque Hablarán como seres humanos. Hoy destruiremos a Obatalá y a sus esposas. Cuando Obatalá escuchó el canto de guerra a lo lejos, huyó de su casa para buscar refugio al lado de Oggún. Este se preparó para batallar y se sentó en la puerta de la casa a esperar a los hechiceros. Tan pronto como llegaron Oggún sacó su machete que escupía fuego pero los hechiceros se tragaron al oricha con su arma y Obatalá escapó por detrás de la casa hacia la casa de Changó. Allí sucedió lo mismo al igual que en la casa de otras divinidades en donde Obatalá solicitaba refugio. Finalmente corrió a la casa de Orunmila y este lo escondió debajo de su santuario cubriéndolo con una tela blanca. Orula rezó y marcó signos con sus polvos sagrados sobre el tablero de adivinación y luego los sopló por toda la casa mientras decía: "Ero, ero, ero, ero..." (Paz, paz, paz, paz...). Cuando los hechiceros llegaron a un cruce de caminos cercano se desorientaron pero enviaron a dos buscadores de caminos para que dieran con la pista de Obatalá. Estos llegaron a la casa de Orula y se encontraron con el hecho de que Orula les dijo que en efecto se encontraba allí pero muy flaco y que no valía la pena matarlo en ese momento, que le permitieran tenerlo 7 días para engordarlo y que luego compartirían su carne. Bajo los efectos del encantamiento que antes había hecho Orula, los rastreadores accedieron a la propuesta y se retiraron. Al día siguiente el oráculo le dijo a Orula que diera de comer una gallina negra a Ìfá y un chivo a Echu, él lo hizo sabiendo que los hechiceros acortarían la duración de las 131 noches y los días siguientes. También se le recomendó preparar un banquete con conejo, vino de palma envenenado adulterado con iyerosun y que dijera el encantamiento respectivo. Orula lo hizo todo y además preparó un recinto frente a la casa en donde puso una cerca embadurnada con una goma adhesiva. Puso en el recinto 16 asientos de madera alrededor de la comida y la bebida, estos también estaban embadurnados de pega. Tan pronto como llegaron los hechiceros comenzaron a comer y a beber. Una vez finalizado el banquete le dijeron a Orunmila que trajera ante ellos a Obatalá, pero antes de que Orula respondiera, uno de los vigías de los hechiceros vio a Obatalá debajo del recinto de Ìfá y cuando se dispusieron a atacar se dieron cuenta de que estaban pegados a sus asientos. Trataron de mover sus asientos para despegarse y en el intento sus alas se pegaron a la cerca quedando completamente inmovilizados. En ese momento Orula le dio a Obatalá un cuchillo consagrado de Ìfá y el oricha comenzó a acabar con los hechiceros uno a uno. Todos fueron exterminados menos uno que pudo escapar arrastrándose hasta el recinto de Ìfá donde Obatalá estaba escondido antes de la llegada de los hechiceros. Cuando Obatalá divisó al que se estaba escondiendo quiso darle muerte pero Orula se lo impidió alegando que no podía destruir a alguien que se refugiara debajo de su Ìfá. Entonces ellos sacaron al hechicero que era una mujer y quitaron la pega de su cuerpo. Cuando la examinaron con detalle descubrieron que estaba embarazada. Orunmila señaló entonces que estaba prohibido dar muerte a una mujer embarazada. Obatalá insistió en que si no se le daba muerte esta traería más hechiceros y estos destruirían a los hombres como lo habían intentado antes. No obstante, el oricha sugirió que se le obligara a jurar que no destruiría personas inocentes en la Tierra. En eso abrió un hueco en la tierra, lo llenó con muchos tipos de comida y luego lo selló con nueces de kola. Entonces ellos la hicieron jurar que el suelo le diera muerte a ella y a cualquiera de sus generaciones, si alguna vez mataran a un hijo de Oloddumare o de Orunmila sin justa causa. Ella hizo el juramento y comió las nueces de kola que estaba sobre la comida. El esclavo de Ogg/n Oggún nunca encontraba la manera de conservar la candela para terminar sus trabajos de herrería. Un día se lamentaba por lo que le sucedía y su amigo el fuelle pasaba por allí y preocupado le preguntó: "¿Amigo Oggún, que te sucede que te veo tan preocupado?". Y este le respondió: " Es que la fragua no se mantiene y tengo el trabajo atrasado". El fuelle se dio cuenta de lo sucedido y dijo: "No te preocupes que te voy a enseñar la manera de que salgas de tu apuro, amárrame en la boca de la fragua, con mi boca dentro de ella, dale a mis patas y verás que al yo soplar la candela no se apaga". De esta manera se hizo y Oggún obtuvo el resultado esperado. Al otro día el fuelle le dijo a su amigo: "Bueno, como ya sabes cual es el secreto suéltame y cuando me vuelvas a necesitar te serviré de nuevo". Pero Oggún respondió: "Liberarte, ni lo pienses. Yo te necesito a toda hora". Y desde ese momento el fuelle fue el esclavo de Oggún. (acimiento de la (ue. de 9ol, 132 Cuando Oloddumare descubrió que las deidades estaban peleando unas con otras, y antes de declarar que Echu era el responsable de eso, decidió invitar a las cuatro más ecuánimes de las deidades, es decir, la Paz, la Prosperidad, la Concordia y Aiyé, quien era la sirvienta de Obatalá. Ellos deliberaron finalmente sobre por qué los más jóvenes no estaban respetando a los mayores como estaba estipulado por el Consejo Divino. Empezaron a rezar por el progreso de la unanimidad y la armonía. Mientras ellos oraban, Oloddumare extendió su mano izquierda y tomó algo en el aire. También extendió su mano derecha y de nuevo atrapó algo. Después de eso, salió con sus puños cerrados y plantó el contenido de ambas manos en el suelo. Él había recogido las oraciones de las cuatro deidades y las había sembrado. Al día siguiente, creció un árbol donde Oloddumare plantó las oraciones que había atrapado en el aire. Pronto floreció, convirtiéndose en una gran planta que pronto comenzó a dar fruto. Cuando éstos estaban maduros y listos para la cosecha, empezaron a caer al suelo. Aiyé recogió alguna de las frutas y se las llevó a Oloddumare, quien les dijo que todos ellos podían hacer lo que quisieran con ellas. Ìndistintamente, todas las deidades fueron probando formas para comerse la fruta, pero no resultó ni asada, ni cocida. Después de simultáneas pruebas y sin resultado alguno, las deidades fueron eventualmente en grupos ante Oloddumare para informarle la imposibilidad de resolver aquella misión. Cuando nadie supo qué hacer con las frutas, Eleniní, la deidad del Obstáculo, quien cuida la Cámara de Oloddumare, se ofreció para hacerse cargo de las frutas y todas las que habían sido arrancadas anteriormente, le fueron entregadas a él. Entonces Eleniní, separó las envolturas, limpió y lavó las nueces y después las guardó con las hojas para que permanecieran frescas durante 14 días. Al cabo de ese tiempo comenzó a comérselas crudas. Esperó otros 14 días y permaneció fuerte y alegre. Él llevó las frutas posteriormente al Consejo Divino y les dijo a todos que el producto de la oración, o sea el Obi, podía ser comido crudo sin ningún efecto perjudicial. Fue entonces que Oloddumare decretó que, como había sido Eleniní la deidad mayor de su casa, quien codificó el rompecabezas del producto de la oración, la nuez de kolá debería desde entonces no sólo convertirse en una comida en el Cielo, sino que siempre que ésta se presentara, debía ser dada a la persona mayor que estuviera sentada en el medio de cualquier reunión y que su consumo siempre estaría precedido por oraciones y proclamó además que, como símbolo de la oración, solamente podría crecer en lugares donde las personas respetaran a sus superiores. El por %u& C)angó siempre protege a Ogbe Obara Ogbe Obara usó el oráculo para Changó y lo ayudó cuando éste era muy pobre en el Cielo. El mismo Ogbe Obara era muy pobre pero al terminar de hacer el ebbó invitó a Changó a su casa en la Tierra, pero éste no aceptó por no estar presentable, por lo que Ogbe Obara regresó solo. Changó vio desde el Cielo que el mundo de los humanos estaba sucio y era malvado por lo que juró eliminar a todos los malhechores de la faz de la Tierra. Cuando Changó se preparaba para librar la batalla lo primero que ocurrió fue que un tornado comenzó a levantar los techos de las casas en la Tierra. En ese momento Ogbe Obara no estaba en su casa porque andaba en otro lugar adivinando para el 133 necesitado pero su mujer si estaba y comenzó a cantar implorando clemencia al Cielo cuando vio que los árboles y las casa caían ante el paso de los vientos. La canción le indicó a Changó que en ese lugar se encontraba la casa de su benefactor por lo que el oricha abandonó su plan de destrucción y volvió al Cielo. La palabra de I-, nunca se pone en duda Un matrimonio vino a Ìfá porque la mujer estaba enferma y después de ver el oráculo se le marcó ebbó, pero los animales quedaron para la casa del awó. Al poco timepo el hombre desconfiado volvió a la casa del awó y le dijo que su mujer no se mejoraba por lo que se sentía engañado creyendo que los animales que le habían pedido eran para comérselos. El awó le dijo que tuviera paciencia y así pasó hasta que el hombre volvió otra vez y le dijo al awó que en vista de que él no había visto que sucediera nada, venía para que le devolviera el dinero junto con los animales. El awó no tuvo inconveniente, le dijo que estaba bien, pero que para devolvérselos tenía que traer a su mujer porque él los había entregado en presencia de ella. El hombre fue a buscar a la mujer pero esta se negó a ir y el hombre la obligó; cuando llegaron a la casa el awó cogió los animales y el dinero y mandó a que el hombre y la mujer se arrodillaran y cuando les fue a hacer a entrega la tierra se abrió delante de ellos. El dinero y los animales cayeron dentro del hoyo y fue tanta la soberbia del hombre que se metió dentro para sacarlos. En eso se cerró la tierra quedando este sepultado Las apariencias enga@an Un día tres amigos que estaban en el Cielo decidieron venir a la Tierra a vivir. Ellos eran Oriseku, hijo de Oggún; Orile Ìmere, hijo de Ozain y Afuwakpe, hijo de Orunmila Antes de realizar sus deseos fueron a consultar los oráculos para saber que debían hacer para prosperar en la Tierra. A cada uno se le aconsejó que hiciera sacrificio pero ninguno estuvo de acuerdo en realizarlo. La tradición del Cielo dice que todo aquel que viene al mundo debe visitar antes al moldeador de cabezas en el cielo llamado Ajala a comprar una cabeza. Todo aquel que hace sacrificio antes de comprar una cabeza tiene la suerte de escoger la afortunada mientras que los que no hacen el sacrificio en el Cielo tienen la desdicha de elegir una cabeza con mala suerte. Como ellos rehusaron hacer los sacrificios que les mandaron sufrieron los destinos siguientes: El mayor Oriseku, el hijo de Oggún, escogió una cabeza de pobreza, el siguiente, Orile Ìmele, escogió la cabeza de la enfermedad y el más joven, Afuwakpe, escogió una de sufrimiento. Al llegar al mundo sus experiencias fueron de acuerdo a las cabezas que escogieron. Después de luchar en vano para avanzar, cada uno murió a temprana edad y regresaron al Cielo a escoger una nueva cabeza. Una vez más fueron en busca de adivinación y se les aconsejó que hicieran sacrificio con tres bolsas de dinero y sal a la divinidad del obstáculo, Elenini, y que dieran un chivo a Echu. De nuevo rehusaron hacer el ebbó. Oriseku no se había percatado de que su mala suerte en la Tierra se debía a que no había hecho ebbó y 134 prefirió confiar en la fuerza de su padre Oggún quien lo dotó de todos los instrumentos para adquirir fuerza física. Por su parte el hijo de Ozain prefirió confiar en la fuerza embrujadora de su padre, quien preparó todo tipo de hechizo para él. Or último el hijo de Orunmila confió en la sabiduría de su padre que le aconsejó que no escogiera una cabeza o que no regresara a la Tierra sin hacer sacrificio. Así lo hizo y sirvió un chivo a Echu y obtuvo los materiales para servir a Elenini. Oriseku y Orile Ìmere regresaron al molino de Ajala a escoger nuevas cabezas y escogieron unas hermosas sin el consejo del moldeador debido a que éste estaba siendo retenido por la divinidad del obstáculo con quien estaba endeudado y no sería liberado hasta que saldara su cuenta. El hecho de que Ajala no estuviera en el molino no impidió que Oriseku y Orile Ìmere escogieran las cabezas por su apariencia externa y se fueran hacia la Tierra. Por el camino se encontraron con Afuwakpe que les admiró las nuevas cabezas. Cuando él llegó a la casa de Ajala, se encontró conque el fabricante aún se encontraba preso. Una vez más Ajala aconsejó que escogiera la que más le gustara, que él estaba preso y no lo podía ayudar a escoger. Afuwakpe rehusó hacer lo que Ajala le dijo, diciendo que él no tenía los medios de distinguir entre una buena y una mala. Luego le preguntó a Ayala que cuanto le debía a Elenini y éste le dijo que 3 bolsas de dinero, metió la mano en su bolsa y sacó el dinero del sacrificio que era la misma cantidad que le hacía falta a Ajala. Elenini soltó a Ajala quien le agradeció a Afuwakpe. Ajala recordó que no tenía sal para su sopa y debía ir al mercado y Afuwakpe le dijo que no se molestara que el tenía la sal que él necesitaba. Después jala le dijo a Afuwakpe que escogiera la cabeza, éste escogió la más llamativa, la mejor parecida del grupo, pero Ajala le dijo que los objetos más atractivos no eran los mejores. Él le escogió una cabeza fuerte, tolerante y próspera y se la dio al hijo de Orunmila quien regresó a la Tierra después de agradecerle a Ajala. Antes de que el hijo de Oggún y el de Ozain llegaran a la última colina antes de acercarse a la Tierra, ya había llovido con fuerza y las hermosas cabezas se rompieron. Ante esta situación los dos tuvieron que regresar al Cielo apara elegir un tercer par de cabezas, pero esta vez convencidos de que tenían que hacer el sacrificio señalado. En el camino de regreso al Cielo se encontraron con el hijo de Orunmila que iba hacia a Tierra con la cabeza nueva que se sostenía fuertemente en sus hombros. Cuando vieron a Ajala, éste les preguntó por las cabezas que habían escogido anteriormente y ellos le contestaron que se les había roto. Él les ordenó que pagaran por las cabezas anteriores primero. El hijo de Oggún tenía dinero suficiente para pagar la cabeza anterior y pagar la nueva, pero el hijo de Ozain tenía para pagar la anterior pero no para pagar la nueva. Ajala permitió que escogiera la nueva y se la pagara después. El adulterio siempre se descubre En una ocasión Orula se enfermó cuando regresaba de Ìjesa y tuvo que ser llevado lejos de su casa para hacerle el tratamiento que debía curarlo. Mientras estuvo fuera su esposa fue seducida por Ajija. 135 Según pasaban los días, la enfermedad se puso más seria y cuando habló el oráculo para él, le fue dicho que se curaría solamente si su esposa confesaba su adúltero comportamiento. No obstante, la adivinación reveló que la esposa nunca admitiría su infidelidad y que solamente Changó podría descifrar el misterio. Posteriormente Orunmila envió por Changó y éste fue por su esposa Oyá para que lo acompañara en la adivinación. Al llegar, Changó usó sus poderes para confirmar que akpetebí había cohabitado con otro hombre, pero agregó que el secreto de la acción de su esposa sólo se sabría cuando se cayera el árbol negro que estaba frente a su casa. Orunmila preguntó a Changó si podía ejecutar la tarea y éste respondió afirmativamente, pero se interesó por saber cuál sería su recompensa y Orula prometió ofrendarle un carnero. Changó regresó a casa, se vistió de guerrero y las nubes se juntaron. Su esposa Oyá chispó el cielo nublado para él y usó su hacha para despedazarlo de arriba abajo. Después de demoler el árbol, encontraron en su interior la estera sobre la cual Ajija y la esposa de Orunmila hicieron el amor. Cuando Changó llevó la estera al lugar donde Orunmila estaba recibiendo el tratamiento para su enfermedad, fue revelado que para ponerse bien definitivamente tendría que dormir en dicha estera toda la noche. Así o hizo y poco después comenzó a restablecerse Al llegar a la casa Changó comenzó a descuartizar el carnero para su ángel guardián y se formó un debate entre él y Oyá por la posesión de la cabeza del animal. Oyá argumentó que ella era la dueña del fuego que flameó desde la boca de Changó, además le dijo que sin la luz de su centella él nunca hubiese podido ver el árbol en la oscuridad. Changó le respondió que el poder de Oyá era meramente complementario y resultaba igual que el humo, que no hace daño. Luego le dijo que por ser su esposo era el amo y señor de todo lo que ella tenía, incluyendo sus poderes. De esta manera Oyá admitió que sus poderes estaban designados para complementar los de su esposo en el espíritu real de la unificación marital. El orgullo y la soberbia pueden causar la muerte Okorón Meyi realizó algunas obras importantes en el Cielo. Él hizo adivinación para la Aragba, la ceiba, y para Ìroko, la teca o caoba africana, antes de que ellos partieran al mundo. Aragba e Ìroko siempre fueron como el perro y el gato, nunca estuvieron completamente de acuerdo en ningún asunto. Por esa época Ìroko era tan fuerte y poderoso que todo el mundo le temía. El adivino le aconsejó a ambos que rindieran homenaje a Echu con un chivo, un gallo, un hacha y un machete. Aragba hizo el sacrificio, pero Ìroko rehusó hacerlo porque él se consideraba suficientemente fuerte para ser invulnerable. Después de festejar con las ofrendas hechas, Echu fue a aconsejar a los seres humanos sobre cuan robusto estaba Ìroko para que construyeran fuertes para su protección. Antes de eso el árbol de Ìroko lucía tan feroz que nadie se atrevió a pensar en atacarle de alguna forma. En primer lugar él es físicamente muy fuerte y enorme, y en segundo su casa es el punto de reunión de los Ancianos de la Noche. La intervención de Echu era para destruir el mito que abrigaba la imagen de Ìroko y para hacerle ver que era tan ordinario como cualquier otro árbol. Echu hasta ofreció guiar a seres humanos a la casa de Ìroko, dándole un hacha con la que podrían derribarlo. 136 Al principio la gente estaba renuente a usar el hacha sobre Ìroko, pero con el estímulo dado por Echu, lo atacaron con furia. La caída de Ìroko fue tan grandiosa que el eco resonó en todo el bosque. Cuando Aragba escuchó la caída, preguntó que estaba sucediendo y le dijeron que el gran Ìroko había caído bajo la fuerza del hacha humana. Comprendiendo que el destino de Ìroko era el resultado de su negación a hacer sacrificios, Aragba se felicitó por haber seguido el consejo de Okorón Meyi. $or %u& Oro vive en el mundo de la noc)e Oyigbo y Oro eran muy amigos. Un día Oyigbo visitó a Oro quien lo atendió con comida y la pierna de un animal cazado en el monte. Después de comerla, Oro le preguntó a Oyigbo si él sabía de qué animal era la carne que acababa de comerse. Oyigbo le respondió que no sabía. Oro alarmó a su amigo revelando que acababa de comerse la pata de un caracol de tierra y lejos de descubrir alguna consternación en su amigo, fue invitado por el a comer en su casa al día siguiente. Oro aceptó la invitación y cuando llegó a la casa de Oyigbo le fue servida una comida con carne de un animal del monte. Después de comerla, Oyigbo le preguntó a Oro si conocía la carne que había comido y ante su negativa, Oyigbo le reveló que había comido la mano de una serpiente. Sin darse cuenta de que su amigo lo que había hecho era pagarle con la misma moneda, Oro se puso paranoico y retó a Oyigbo a que demostrara cómo una serpiente podía tener manos y éste tratando de calmar a Oro le dijo que el mundo había cambiado tan dramáticamente que estaba produciendo caracoles de tierra y serpientes con manos y patas. Aún Oro no se había percatado de la paradoja porque continuaba muy disgustado demandando saber si Oyigbo lo había invitado para burlarse de él. Oyigbo tuvo que recordarle que recientemente el día anterior él lo había convidado a una pata de caracol, así que no entendía su asombro ante la mano de serpiente que le había ofrecido. Ese recordatorio fue suficiente para Oro, que se puso tan molesto que sobrevino una pelea. Cuando otras personas vinieron a intervenir para separarlos, la insistencia de Oro en seguir peleando obligó a que los llevaran ante la presencia del rey del pueblo. El rey decidió como final de la contienda que los dos amigos no debían encontrarse nunca más. Oro fue restringido a las actividades nocturnas mientras que Oyigbo fue limitado a las diurnas. Orunmila, que estaba presente en el palacio, adicionó su propia proclamación sugiriendo que desde ese momento Oyigbo no debía comer caracol de tierra y a Oro le quedaba prohibido comer serpientes. La leyenda de Oric)ao1o Orichaoko fue un campesino que vivió en el pueblo de Ìrawo. La gente lo concía como un hombre bien versado en medicina y erudito en hojas y hiervas. También era cazador y solía atrapar guineas con mallas puestas en la granja de un rico granjero. Tenía un perro y una flauta, y en varias ocasiones en que se perdió en los bosques, su perro lo encontraba al escuchar el silbido de la flauta. Vivió hasta avanzada edad y cuando ya no podía seguir cazando se dedicó a practicar la adivinación. 137 Se cuenta que una vez aparecieron tres grandes mirlos en Ìrawo, se posaron en los campos y se comieron todas las cosechas de los campesinos. Ese año hubo una gran hambruna. Al año siguiente aparecieron nuevamente los pájaros y ninguna flecha podía hacerles daño. La gente fue entonces donde Orichaoko y le pidieron que los ayudara a destruir a los pájaros. Orichaoko elaboró un poderoso preparado con el cual logró ahuyentar a los pájaros. Las cosechas crecieron maravillosamente y cuando llegó el tiempo de la recogida, la gente estaba contenta y agradecida a Orichaoko que lo hicieron su rey, pero tan pronto como lo instalaron en el trono de Ìrawo, la gente comenzó a temer: "¿No utilizará contra nosotros la medicina que usó contra los pájaros" Sospecharon más y más de él. Y aunque no les dio causa de quejas, el temor se hizo tan grande que un día se revelaron y lo expulsaron del pueblo. Al año siguiente vino el tiempo de la recolección, los mirlos regresaron y se comieron las cosechas. Entonces, toda la gente con el rostro entristecido marchó al bosque, a la cabaña de Orichaoko y le imploraron los ayudara una vez más. Prometieron reinstalarlo como el rey y nunca más revelarse. Pero esta vez Orichaoko se negó a ayudar. Tan desencantado estaba ante la insensibilidad y deslealtad de la gente que decidió abandonarlos definitivamente. Les dijo: -Los abandonaré para siempre, pero dejaré mi espada aquí y cada vez que se encuentren en peligro real pueden clavar la espada en el suelo y vendré a proteger vuestras cosechas, les advierto que no deben usarla a la ligera ni en vano y con estas palabras Orichaoko desapareció en la tierra. Actualmente su espada se encuentra en los templos en donde es venerado el oricha. $or %u& a veces no se debe )acer I-, Un hombre estaba en la tierra de Ìfá y tenía muchos problemas, por lo que fue a consultarse con Orula. Éste le dijo que su suerte estaba en otra tierra y que hiciera ebbó para lograr llegar a ella. El hombre así lo hizo y cuando andaba en la calle se lo llevaron preso a otro lugar, lejos de la tierra de Ìfá. Cuando llegaron a la otra tierra, el lugar donde nació, la justicia se dio cuenta de que no era quien estaban buscando y lo dejaron libre. Ìnmediatamente le dijeron que lo andaban buscando desde hace mucho tiempo para darle una herencia que le dejaron unos parientes, lo cual lo hizo inmensamente rico. Debido a ésto no regresó nunca más a la tierra de Ìfá. Cómo C)angó perdió el tablero de I-, A Changó le gustaba mucho el baile y lo hacía muy bien. Donde quiera que llegaba daba excelentes demostraciones con el baile y el tambor. Un día estando en la tierra de Mina lo invitaron a bailar meta en la tierra Tákua. No pudiendo resistirse al llamado de los tambores, se arregló y le dijo a la palma que le cuidara su tablero, en esa época Changó era el que adivinaba con el tablero de Ìfá. Mientras Changó disfrutaba del baile, Orula aprovechó que la palma se quedó dormida profundamente y se llevó el tablero para coronarse con él. Cuando Changó regresaba de la fiesta se encontró con Ozain y éste le señalo hacia la palma y ya no estaba el tablero. Alafi comprendió lo que había sucedido y le lanzó un rayo a la palma dormida haciéndola pedazos. 138 Por eso es que el rayo siempre le da a la palma, ese es el castigo que Changó le hace porque no defendió su tablero, ni impidió que Orula se lo llevara. El poder de la lluvia El Sol, la Luna, el Fuego y la Lluvia estaban enamorando a Epikpayemi. Sin saberlo entre ellos, cada uno quería casarse con ella. La mujer aceptó que los 4 la visitaran sin comprometerse con ninguno y cuando ellos comenzaron a desesperarse, Epikpayemi fue donde Orunmila para que el oráculo le dijera cual de ellos era el adecuado como esposo. Le dijeron que hiciera ebbó, además Orula le dijo que preparara tres platos con ñame machacado y que dejara uno vacío, además debía preparar una sopa con la carne de los animales sacrificados en el ebbó y que de igual manera pusiera tres recipientes con sopa y uno vacío. Antes de irse de la casa de Orunmila, éste le aconsejó que guardara un poco la coquetería porque su pretendiente favorito podría no ser el esposo. Cuando llegó a su casa, Epikpayemi preparó la comida y la sopa e hizo lo que Orula le dijo, luego se fue de la casa. Poco después se encontró con el Fuego y éste le preguntó si le había preparado comida y ella le dijo que fuera a su casa y comiera una porción que le había dejado. El Sol fue el siguiente, ella le dijo que fuera a su casa a comer y lo mismo sucedió con la Luna. La lluvia fue el último que llegó y consiguió la vasija vacía, regresando donde estaba Epikpayemi para preguntarle qué tipo de comida había hecho. Ella le dijo que había preparado cuatro platos de ñame machacado y cuatro envases con sopa condimentada con carne. A su vez se preguntaba así misma que quién se había comido la cuarta porción que estaba destinada para él. Al oir esto, la Lluvia salió furioso del lugar en busca de la respuesta, mientras que en el cielo comenzaban a formarse grandes nubes amenazando con caer una tormenta sobre el lugar. Pronto comenzó a llover y Lluvia acorraló al Sol y a la Luna en un rincón del cielo, mientras el Fuego se escondía en una piedra. (Esa es la razón por la que el Sol y la Luna se esconden cuando va a llover. De igual manera nos explicamos porque antiguamente se golpeaban dos piedras para extraer fuego). Luego de que la Lluvia venciera a sus tres rivales, Epikpayemi corrió hasta donde estaba él, lo abrazó y se alegró por haber descubierto a su verdadero esposo. Entonces cantó: Ojo moba koo dimba dona Una kpikpa beleje Ojo didu dere Ora ita ojo Okpenu fun Orunmila Significado: Yo había preferido el fuego al agua Antes de hacer sacrificio El sacrificio se manifestó Para proclamar la lluvia Como mi esposo Alabado sea Orunmila 139 Que hizo sacrificio para mi La ri%ue.a de C)angó Una vez Olofi invitó a todos los Orichas a una comida en su castillo. El único que no asistió fue Changó porque estaba muy pobre, además no tenía ropa presentable para ir a la casa de su padre. Changó en ese tiempo, estaba en su casa desmoralizado y su mujer al verlo de esa forma le aconsejó que, de cualquier manera, fuera a la reunión y así lo hizo. Mientras tanto en el castillo terminaba la cena y Olofi quiso hacerle un regalo a sus hijos, le dio a cada uno una calabaza. Ellos se fueron a sus casas muy inconformes con el regalo porque estaban acostumbrados a que Olofi les diera algo de valor y como Changó se acercaba al castillo por el mismo camino, se los encontró y los orichas le regalaron todas las calabazas porque sabían su situación. Alafi estaba tan contento porque tenía que comer, que no llegó hasta el castillo sino que fue en busca de su mujer para que cocinara las calabazas. Al picar la primera calabaza Changó y su mujer se asombraron porque estaba llena de oro y al abrir las otras cada una tenía inmensas riquezas dentro. Ese era realmente el regalo de Olofi para los orichas y Changó fue quien lo disfrutó, cambiándole la suerte repentinamente. Al poco tiempo Olofi volvió a reunir a los Orichas en otra comida y les preguntó que habían hecho con el regalo que les había dado anteriormente y ellos no hallaban que responder porque no se esperaban la pregunta. Hasta que uno a uno fueron respondiendo que las calabazas se las habían regalado a Changó porque ellos ya tenían suficiente. En ese momento Changó llegaba a la reunión vestido de blanco montado a caballo, parecía un príncipe y Olofi le dijo a los demás orichas: "Los regalos que estaban dentro de las calabazas y que ustedes despreciaron hicieron rico a mi hijo Changó y por eso de aquí en adelante siempre habrá riqueza para él". La llegada de Olo1un al mundo Cuando Olokun se disponía a venir al mundo, busco adivinación en el Cielo y le indicaron que tenía que hacer ebbó con muchos caracoles y cascarilla, además que tenía que hacerle ofrendas a Echu. Le dijeron que tendría muchos hijos en la Tierra pero que debía hacer el sacrificio para evitar perderlos ante la traición y la maldad del mundo. Él realizó el ebbó pero se le olvidó hacerle la ofrenda a Echu. Cuando llegó al mundo, tuvo muchos hijos y al ver ésto, Echu invitó a los seres humanos a que se alimentaran de ellos, que eran los peces del mar. Cuando Olokun vio que estaba perdiendo a sus hijos, busco adivinación y le dijeron que el ebbó que había hecho estaba incompleto porque no le hizo ofrecimiento a Echu antes de salir del Cielo y le añadieron otro ebbó. Despúes de que Olokun hizo el nuevo ebbó, Echu frotó el cuerpo de sus hijos con un líquido viscoso de oro que le dificultaba a cualquiera atraparlos con las manos, además les advirtió que no se alejaran de la casa de su padre para que evitaran ser víctima de sus numerosos enemigos. Esa es la razón por la que el cuerpo del pescado es resbaladizo y el porque los peces no salen del mar. Nadie es capaz de capturarlos con las manos en la casa de su padre, o sea en el mar. 140 Vocabulario Lucumí El lucumí o lacumí es el lenguaje yoruba como es hablado en Cuba y los Estados Unidos. El yoruba es un lenguaje tonal como el chino. Los acentos se utilizan para hacer énfasis en los tonos para aquellos de nosotros que no estamos familiarizados con el lenguaje tonal. También, algunos de los sonidos difíciles como el sonido de la letra "p" africana, el cual es pronunciado más o menos como el sonido de "kp" es aproximado utilizando "kp" o "cu". El siguiente vocabulario sigue la ortografía española con unas pocas excepciones para ayudar a los de habla inglesa: · La "ch" en español se usa sencillamente porque no existe el sonido "sh". En inglés se usa "sh". · La "y" en española tiene un sonido que se aproxima al sonido de la "j" en inglés y en yoruba. · El sonido de la "ñ" es usado muy escasamente aquí, y es usualmente substituído en la siguiente lista por la "y". · Como en el español, el acento es en la segunda o última sílaba a menos que haya un acento sobre otra sílaba. Debo aclarar que el lacumí es una tradición oral y que las versiones escritas fueron hechas más bien como "forros" o "trampas" y no como otra cosa, y no deben ser utilizadas como "prueba" de la descomposición del lenguaje. Los que hablan lukumí en Matanzas y otras áreas, lo hacen muy parecido a como hablaría un yoruba. He hablado en lacumí con personas que hablan yoruba nacidos en Nigeria sin ninguna clase de dificultad. De hecho, en una ocasión fuí saludado por un asombrado yoruba al que le estaba hablando, con la frase llena de sorpresa "tú hablas Yoruba!!!" 141 A continuación, una lista de palabras lucumí para que vaya aprendiendo: 0bó 0di&* Gallina 0bó* Carnero 0beb&* Abanico 0berin1ul,* Una persona o cosa no iniciada 0bure* Hermano, hermana 0d&* Corona 0-e-&* Viento 0gó* Pedir permiso, tocar a una puerta 0gogó* Campana, hora 0goya* Entre 0i1/* Salud, larga vida 0yuba* Nosotros le saludamos.... 01u1ó* Gallo 0la* Tela blanca 0la* Sueño 0lagba, 0gbalagba* Respetado 0leyo* Ìntruso, extraño 0n,* Camino 0ra* Trueno 0ray&* Envidia, mala fé 0run* Enfermedad 0c),* Cigarro, tabaco 0c)&* Así sea, El Poder Espiritual del Universo, Talento 0c)el/* Policía 0c)eog/n Ot,* Victoria Sobre Enemigos 0c)ere* Maraca, maruga 0c)o* Tela 0tan,: Vela 02ó* Secreto 0y,n* El Orisha de los Tambores Bab,* Padre Babala2o* Padre de los Secretos Babaloc)a* Padre de Orisha, Sacerdote Busi* Bendecir +id&* Levántese +udu* Obscuro Egun* Los Muertos Eiyele* Paloma EB,* Pescado EBe* Sangre EBo* Caso de Cortes E1ó* Harina de maíz E1/* Jutía, Hutía E1/n* Leopardo E1pó* Aceite de Palma Ení* Estera Ení* Persona Ese* Pie 142 Eyín* Huevo Ae* Amor Aoribale* Postrarse para saludar Aun* Para, dar Aun-/n* Blanco 4bogbo* Todos 4idigidi* Mucho I@,* Fuego Ib/* Arroyo, río Iba& Bay& 3Lor/n* Descanse en Paz (Saludo a los muertos) Igba* Calabaza I1/: Muerte Il&* Casa Il&* Tierra, suelo Ile1/n* Puerta Ir&* Bendiciones Ira2o* Estrella Ic)u* Boniato africano I2oro* Sacerdote Iy,* Madre Iyaloc)a* Madre de Orisha, Sacerdotisa Iya2ó* Esposo/Esposa 9osí* No haya 9unl&* Arrodillarse Lo* Ìr Ca-ere-/n* Alabado sea... Ci* Mi Co* Yo Coducu&* Gracias Co-oribale* Yo te saludo postrándome Coyuba* Yo te saludo (lo* Va Ob,* Rey Obí* Coco, Nuez Obí Kola Obirín* Mujer Odo* Río Ododó* Flor O-/n* Yeso (hecho de cáscaras de huevo) O-o* Pérdida Ogun* Brujería O1/n* Mar, Océano O1e* Montaña O1o* Hombre, esposo Olo* Dueño, el poseedor... Olu2o* Señor de los Awos (Babalawo que previamente fué un sacerdote de los orishas) Omí +udu* Café Omí* Agua Omo* Hijo, niño Ona* Camino 143 Oni* Dueño de... Opolopo* Suficiente Orí* Cabeza Orí* Manteca de Cacao Or/n* Cielo, Paraíso Or/n* Sol Os)e* Hacha doble Osogbo* Ìnfluencia negativa Otí* Ron O2ó* Dinero O2/* Algodón Oyín: Miel C)ic)&* Trabajo !ure-un* Bendecir 3emí* Mi, mío 3ie* Tu, su 3imbelese* Al pie de... 3obí* Que parió 3utu* Fresco Ma* Ven Maní* El que viene Yeye* Mama Yuba* Saludo 0ba,* Jobo. Arbol que pertenece a Changó. Su fruto es uno de los preferidos por el Oricha. 0badu* Maíz. 0baila* Alamo. Arbol sagrado que pertenece a Changó. Cuando se sacrifica el carnero a este santo, se acostumbra a dar a comer una hoja de Alamo al animal. 0ba1o* Cuchara. 0balac)&* Nombre que se le da a un hijo de Obatalá después de ser consagrado en Ocha. 0balon1&: Nombre que se le da a un hijo de Elegguá después de ser consagrado. 0b,n* Canasta que se usa cuando el Ìyawó o recién iniciado va al mercado a buscar frutas para los Orichas. 0ban2&* Ñame sagrado, específicamente el que es peludo. 0bani* Venado. Animal sagrado que pertenece a Orula. 0ba@a* Paño decorado con cuentas que se usa para adornar a Changó. También recibe ese nombre un hermano menor del Oricha. 0ba@e@e u Oba@e@e* Oricha hermana mayor de Changó, quien lo crió desde muy pequeño. 0bara* Melón, una de las frutas preferidas de Ochún. 0bayi-ó* Brujo. El que tiene el poder sobre las fuerzas desconocidas. 0bebe* Abanico. Atributo que pertenece a Ochún y a Yemayá. 0beguda* Palma. 0begud&* Nombre que también se le da al "Amalá Ìlá", comida preferida de Changó. 0begudi* Harina de maíz cruda. 0begued&* Harina de maíz cruda con quimbombó, una de las comidas de Changó. 0beo1uta* Nombre que se le da a una región de Africa en donde Yemayá fue reina. Esta tierra fue bautizada con ese nombre en honor a una loma que tiene forma de 144 cuchillo. 0bere* Aguja. 0bereb&* Otro de los nombres que se le da al abanico. 0beri1ol,* Lo que no está sagrado. 0beri Yeye* Cuando Ochún habla a través de los caracoles de consulta. 0beyamí* Pavo real. Ave sagrada que pertenece a Ochún y de la que se toman plumas para hacer abanicos que agradan a la Oricha. 0beyoó* Extranjero, que viene de otras tierras. 0bgna* Ancianos. "Abgna, Abgna Ta Lese Oba Ba Yeye", esto quiere decir: "Donde está el Rey y los ancianos se está bien". 0bi 02ó* Es la persona encargada de ir al monte a recoger hiervas que se necesitan para las ceremonias. 0bi1/* Espíritu perdido que encarna en los niños al momento de nacer. Se identifica cuando los niños afectados presentan problemas de salud como raquitismo y anemia, también se presenta en los niños que nacen prematuros. 0bila* Libertad. 0bil,* Los pies. 0bilola* Se refiere a las personas que por su condición social pertenecen a un estatus superior. 0binidina* Nombre que se le da a un hijo de Yemayá. 0biod/n* El niño que nace en una fecha importante para la sociedad o el primer día del año. "Abiodún Owero Koko Lowó", parte de un canto que expresa la alegría del pueblo y significa que al recién nacido le espera un destino signado por el poder y el dinero . Persona que se encarga de entonar los cantos y rezos a los Orichas en los 0bisas,* Escobilla que usa Babalú para limpiar las enfermedades. 0biso* Bautizo. 0b1uón* toques de tambor batá. 0bo* Carnero, animal que se le ofrece a Yemayá y a Changó. 0bola* Que tiene la mayoría de edad o que es mayor que los demás. 0bola Auni* Persona que adora a los Orichas. 0boreo* Cuero de carnero. 0bora* Amigo. 0botami* Chivo capado. 0boru* Nombre de una de las tres mujeres que se encontraron con Orula cuando éste se dirigía a la casa de Olofi a una reunión donde serían probados los Babalawos. 0boya* Nombre de una de las tres mujeres que ayudaron a Orula a superar las pruebas que le puso Olofi a los Babalawos. 0bua* Plato. 0bami oric)a* Darle un carnero al oricha. 0bure* Hermano o hermana. 0c),* Tabaco. 0c)ab,* Cadena. También es el nombre que se le da a uno de los caminos de Yemay,. Se dice que esta fue la Yemayá que vivió con Orula y consultaba con los caracoles en su ausencia. 0c)ab1u,* Jicotea o tortuga. 0c), eru* Ceniza de tabaco. 0c), i1i* Ceniza de leña. 0c)ale* Al oscurecer. 0c)atí* Lo que se tira. 145 0c), Yin,* Tabaco encendido. Aché: Según sea el caso esta palabra puede tener varios significados: gracia, virtud, bendición, amén, atributos que pertenecen a los orichas, comidas que pertenecen a los orichas. 0c)& oric)a* Bendición del oricha.. 0c)edín* Derecho que cobran los santeros por su trabajo. 0c)e&* La mitad del mundo, la que es alcanzada por el sol en la mañana. 0c)el/* La justicia, la policia. 0c)emí* Nombre que se le da a un hijo de Yemayá. 0c)& Olo-i* Por mandato de Dios. 0c)er&* Ìnstrumento sonoro que se toca en honor a los santos. También se le llama acheré a las maracas. 0c)es,* Desgracia. 0c)& si mi lemi* "Me puso aché en la lengua". Expresión que dicen los orichas cuando se les da el aché y comienzan a hablar luego de que posesionan a uno de sus hijos. 0c)& to* Que así sea. 0c)i,* Bandera. 0c)ibat,* Nombre de una hierva que comúnmente se le conoce con el nombre de "paragüita" y que pertenece a Yemayá y Ochún. 0c)i1u, belona lóde* Expresión que se le dice a una mujer cuando está menstruando. 0c)i1uel/* Nombre de un Elegguá muy antiguo, poco conocido y que pertenece a la orden de los viejos Babalawos. 0c)iri* Secreto. 0c)i2ere* Loco. 0c)ó* Nombre de uno de los caminos de Obatalá. el que inventó el telar y creó la ropa. Baila en un solo pie, tiembla mucho pero de frío, porque Achó es un Obatalá joven. Achó también significa tela o vestimenta. 0c)ó O1ó* Ropa de hombre. 0c)o 0ro* Traje azul. 0c)o bini* Enagüa, saya, falda, vestido. 0c)ó dodo* Traje de todos colores en honor a Oyá. 0c)ó dud/* Ropa negra. 0c)ó e@i* Ropa amarilla. 0c)ó 0c)o -elel&* Ropa de seda de la que suena. 0c)o-o* Guardián del campo. 0c)ó -/n -/n* Ropa blanca. 0c)og/n* Actitud de matar. Nombre que se les da a los hijos de Oggún, a aquellos que se encargan de sacrificar los animales a los orichas. 0c)ó gunsa* Calzoncillos. 0c)ó gHole* Ropa usada. 0c)ó 1ane1/* Tela de colores. 0c)ol,* Sábana. 0c)ó lese* Pantalón. 0c)ó lote* Camisón. 0c)ol/* La justicia, la autoridad. 0c)ón c)ón* Caminar. 0c)ó mí* Camisa. 0c)ó o-o* Traje de luto. 146 0c)ó omorisa* Traje de asiento o de Ìyawó. 0c)ó pupa* Ropa roja, la que viste en los rituales los hijos de Changó, Elegguá, Oyá y Aggayú.. 0c)ó pup/a* Tela roja. 0c)oremí* Mi mejor amigo. 0c)ótele* Nombre que se le daban antiguamennte a .los babalawos. 0c)up,* Menstruar. 0c)u& ití* Abanico. 0d,* Machete, espada. 0dade1e* Malhechor, malvado. 0dadó* Ìsla. 0dagbo* Hasta luego. 0dague* Majá. 0dagunla* La parte del mar donde vine Ìnle. 0da1a d,1e* Cierto tipo de collar. 0dal/* Masa hecha de frijol rojo, una de las ofrendas que se le hace a Oyá. 0dalum* Anima, espíritu errante que se le aparece a las personas. 0dam,* Almácigo. 0dam, lec)&* Persona malagradecida. 0d,mo* Lagartija. 0damó* Ateo. "El que no está ni con Dios, ni con el Diablo". 0d, mod,* Muy bien. 0dam/* Tinaja. 0dan* Murciélago. 0dani* Plato. 0dano* Verguenza..A veces también se llama de esa manera a las personas necesitadas. 0dano, iya mo-oribale arem/, a2a y&* "Madre nosotros los desgraciados te saludamos para que nos protejas". 0d, o iy& mo-oribale aremu a2ay,* Cuando Changó le pide ayuda a Obba para que pelee por él porque no pueder. 0d, olomi, ad, oric)a* "El machete es mi dueño y me hizo oricha". 0dasi i1/* Nombre de un hijo de Oyá. 0d&* Corona. 0deín* Aceite de comer. 0deina* Nombre propio. 0del&* Jefe. 0dele* Los caracoles que se apartan cuando en estera van a hablar los 16 del oráculo. 0dele* "Guardián que se queda cuidando". Se refiere a uno de los ikines de Ìfá, el que se aparta. 0demiy&* Avispa. 0dena* Guardián. 0det&* Lepra, sífilis. 0di* Aceite. 0di&* Gallina. 0dieió* Pollito. 0didón* Dulce, postre. 0digba&* Gritar, pedir socorro. 0di 9osí* Hoy no puedo. 147 0dim/* Ofrenda para los orichas. "Yé re yetún yeré su yeré", rezo que se hace al momento de ponerle un adimú a los orichas. 0dipulia* Caimito. 0diy,* Verguenza, bochorno. 0diyomí* "Hasta otro día". Lo que se le dice al oricha en el momento en que se despide después de hacer posesionado o "montado" a uno de sus hijos. 0diy,* Que no tiene verguenza. 0dó* Homosexual. 0dó* gofio, palanqueta o dulce de gofio. 0do-,* Hígado. 0do-í, ado-,, o1,n* Los órganos internos del animal. 0dogo* Barriga. 0do1oy&* Acto de infidelidad de la mujer. 0dola* Mañana. 0dol, mó 2í* "Mañana te contestaré" o "Mañana te hablaré" 0domay&* Llaga. 0doro ado-i* Víceras del animal sacrificado. I(+ICE • ÌNTRODUCCÌON 1 • ORÌGENES DEL PUEBLO YORUBA SU CULTURA Y RELÌGÌON 3 • LOS YORUBA 7 • LA RELÌGÌON YORUBA 10 • ESCLAVÌTUD 12 • EL SÌNCRETÌSMO EN LA RELÌGÌON YORUBA 14 • SANTERÌA 15 NUESTROS CABÌLDOS ORÌSHAS DÌOSES DE LA SANTERÌA • LA CREACÌON 26 • NACÌMÌENTO DEL MUNDO 27 • LA PRÌMERA POBLACÌON DE LA TÌERRA 28 • OGGUN 31 • ELEGGUA 35 • OCHOSÌ 41 • OSUN 44 • ORULA 45 • OBATALA 47 • OLOFÌ 50 • ORÌSHAOCO 51 • OCHUN 51 148 • OYA 52 • OZAÌN 53 • SHANGO 53 • YEMAYA 57 • AÑA EL ORHÌSA DE LOS TAMBORES 58 • ODDUA 61 • CULTO A EGUN 64 SOCÌEDAD OGBONÌ SOCÌEDAD GELEDE SOCÌEDAD EGUNGUN • LOS COLLARES DE LOS SANTOS 67 • KARÌ OCHA CEREMONÌA DE HACERSE SANTO 69 • BEMBE EL RÌTMO DE LOS ORÌSHAS 71 • EBO (SACRÌFÌCÌO) 72 • RAYAMÌENTO 73 • FORÌBALE (SALUDO) 73 • POSESÌON LA MONTA DEL CABALLO 75 • ÌYAWO LA ESPOSA O ESPOSO DEL ORÌSHA 75 • LAS MUJERES EN LA RELÌGÌON DE ÌFA 76 • ÌFÌSMO EL METODO DEL DÌOS ÌFA COMO ADÌVÌNACÌON 77 • QUE REPRESENTA ÌFA 78 • BABALAWOS 78 • QUE ES UN OBA 81 • LOS CONOCÌMÌENTOS QUE TÌENE QUE TENER UN OBA 81 • LOS ORACULOS 83 • EL ORACULO DE LOS CARACOLES 84 • EL DÌLOGGUN 87 • EL ORÌATE MAESTRO DE CEREMONÌAS 93 • FUMBÌ ESPÌRÌTUS DE MUERTOS PALO MONTE MAYOMBE 95 • PALO MONTE 96 • ABAKUA LOS ÑAÑÌGOS Y SUS SECRETOS 104 • EL RÌTMO DE LOS ORÌSHAS 111 • TAMBORES BATA 113 • TAMBORES BANTU 114 • RUMBAS YAMBU GUGUAGANCO COLUMBÌA 114 • LA CEÌBA MÌTO Y TRADÌCÌON 115 • RELATO DE UN TOQUE SANTO EN LA HABANA 115 • PATAKÌES 118 • VOCABULARÌO 142 149