Una década de cambios: la Geografía Humana y el estudio del turismohttp://www.ub.es/geocrit/sn/sn-270/sn-270-87.htm Menú principal Índice de Scripta Nova Scripta Nova REVISTA ELECTRÓNICA DE GEOGRAFÍA Y CIENCIAS SOCIALES Universidad de Barcelona. ISSN: 1138-9788. Depósito Legal: B. 21.741-98 Vol. XII, núm. 270 (87), 1 de agosto de 2008 [Nueva serie de Geo Crítica. Cuadernos Críticos de Geografía Humana] UNA DÉCADA DE CAMBIOS: LA GEOGRAFÍA HUMANA Y EL ESTUDIO DEL TURISMO Daniel Hiernaux Profesor Investigador titular de la Universidad Autónoma Metropolitana campus Iztapalapa, de la ciudad de México.
[email protected] Una década de cambios: la Geografía Humana y el estudio del turismo (Resumen) El turismo ha sido analizado esencial y tradicionalmente desde perspectivas estructurales, propias de cierta mirada geográfica. Sin embargo, dos tipos de procesos obligan a repensar esa orientación dominante: las transformaciones mismas de los procesos turísticos, así como la nueva mirada de la geografía humana, asociable al giro cultural. Este ensayo se propone entonces hacer hincapié sobre esta nueva mirada, esta constelación de cambios que hace pasar de un turismo visto como un proceso económico estructurante del territorio, a un proceso que construye el espacio a partir del una perspectiva individual individuo y de sus interacciones socio-espaciales. Palabras clave: geografía humana-giro cultural-turismo-ocio. Ten years of changes: Human Geography and tourism study (Abstract) Tourism has been analyzed essentially and traditionally from structural perspectives, typical of a certain geographical gaze. However, two kinds of processes force to review this dominant orientation: the very transformations of the touristic processes, and the new gaze of the human Geography, associated to the cultural turn. This essay will then try to make emphasis on this new gaze, this constellation of changes that provokes to pass from a tourism seen as an economic process structuring the territory, to a process that builds space from an individual perspective and his socio-spatial interactions. Key words: human geography, cultural turn, tourism-leisure. Por décadas, el turismo ha sido analizado solo marginalmente por la geografía humana. Esta herencia proveniente de prejuicios morales que han amputado a la geografía de la posibilidad de analizar un segmento de las actividades humanas de singular relevancia, en una época en la cual el mundo del ocio se hace cada vez más presente y trasparece en buen número de comportamientos sociales. Los estudios de la posmodernidad han entendido esta situación desde tiempo atrás, al grado de que el sociólogo inglés Zygmunt Bauman, usa al turista como metáfora del hombre posmoderno (Bauman, 2003). En este trabajo, nos centraremos sobre las facetas “oscuras” del turismo –oscuras por no haber sido divulgadas o analizadas- que cobran mayor importancia en la actualidad. En este recorrido, se hará evidente que para este tipo de análisis, no son aplicables los análisis estructurales del turismo, propios de una geografía 1 de 9 04/01/2009 9:34 tales como los imaginarios sociales o el Zeitgeist de una sociedad dada que influye sobre la valoración social de la movilidad. su “ciclo de vida” como “producto” económico. intervienen otros procesos societarios -no menos significativos. las 2 de 9 04/01/2009 9:34 . sea a nivel internacional como nacional. globalizada y fuertemente marcada por la (post) modernidad. conviene subrayar que va mucho más allá que la simple referencia al viaje turístico: es frecuente que se esté frente a sociedades “enamoradas” de la movilidad espacial bajo todas las formas. usando conceptos y aproximaciones metodológicas innovadoras.que el turismo es esencialmente una actividad económica (Christaller. el fenómeno turismo se volvió preso de la batería de enfoques que se han dedicado a determinar su localización. Este “error de nacimiento” de la geografía humana aplicada al turismo es simple y evidente.Una década de cambios: la Geografía Humana y el estudio del turismo http://www. sin duda. Para ejemplificar brevemente. las cuales no han reparado en aproximarse a esas dimensiones poco analizadas del turismo. Entre los imaginarios sociales más relevantes de la época actual. o la formación de polos de “desarrollo turístico” (véase entre otros. por el miedo a ataques terroristas). correo electrónico en el móvil. Entre estos procesos pueden mencionarse aquellos que son más evidentes y por ello. el acceso a las NTIC (teléfonos móviles. internet de alta velocidad de “desplazamiento” en el espacio virtual. Por lo mismo. una vez más. como la creación de empleos directos. podemos mencionar la “multi-residencia”. 1963). desde las que se fundan en el vehículo.es/geocrit/sn/sn-270/sn-270-87. sino que las usan como residencia “secundaria”. es decir la cerrazón o apertura de las fronteras. 1996. estos enfoques. Finalmente. Esto permite afirmar que el turismo es un acto societario. los más tradicionalmente reconocidos como son: la legalidad de la movilidad internacional de los individuos. a toda una serie de procesos que se derivan del funcionamiento mismo de la sociedad (Hiernaux. Con tal punto de arranque. por ejemplo. la cual.que pocas veces se ha puesto en tela de juicio: el punto de partida ha sido -conforme al Zeitgeist de la época. y por ende.) y todos aquellos instrumentos de la movilidad tecnológica que pretenden suplantar la movilidad física (Jaureguiberry. haremos. una gran consumidora de viajes y desplazamientos. entre otros factores. no sea un gran demandante de viajes. podemos señalar que una sociedad tradicional aun fuertemente rural. mientras que una sociedad metropolitana. o “terciaria” o “cuaternaria” según el nivel de ingresos del propietario. un llamado de auxilio a las demás ciencias sociales. Lo anterior. una décima parte de las viviendas sean propiedades de personas que no residen habitualmente en ellas. al ser suplantado el fordismo activo y dominante por una suerte de posfordismo flexible. Ahora bien. Obvio que ello se asocia al estatus social. etc. bien puede aplicarse en la geografía humana. entre otros en el resto de la economía. 2003). 1976. Pearce. 1987. saldrá cambiada del encuentro pero también reforzada y no disminuida como ciertas corrientes paseistas quisieran hacerlo creer. la estructuración social y los ingresos personales (que definen la disponibilidad de tiempo y recursos. dos sustentos imprescindibles para el viaje). por racionales y coherentes que puedan parecer en su estructuración conceptual. el eventual miedo a explorar otros espacios (entre otros y en fechas recientes. En otros términos. sin lugar a duda. ya que no son susceptibles de aportar conceptos o métodos para la revisión de estas nuevas facetas. debe ser analizado con esa referencia sociológica tanto como la geográfica. la generación de efectos multiplicadores de los mismos.ub. Los límites de los análisis geográficos estructurales del turismo Con Walter Christaller. 1999). 2006). será. y como tal responde. ejecutado en un contexto social. entre otras cuestiones. Al lado de estos procesos tradicionalmente reconocidos. la geografía humana inició un abordaje del turismo basado en una falsedad –o al menos una limitación. la formación de clusters turísticos y el análisis de los tan mencionados impactos del turismo. pero no por eso ha sido comprendido en la comunidad geográfica: el acto turístico es un acto individual. no dejan de partir de una falsedad o por lo menos. es una sociedad móvil. como lo ha señalado Milton Santos (1971). como valorización de la posibilidad de residencia en diversos lugares del mundo. que ha provocado que en la Unión Europea. primero que nada. lo que de paso. Miossec.htm pretérita. de un planteamiento incompleto. ya que se sabe que los ordenadores. lo que anteriormente era un simple fin de semana de “recuperación de la fuerza de trabajo” con pizza. Claro es. En este sentido. de los conceptos e instrumentos desarrollados por la primera. ligado ya sea a manifestaciones culturales derivadas de la oferta de las industrias culturales (grandes exposiciones. un contexto de este tipo ha favorecido las ofertas no convencionales de corta estancia. sino de manera más evidente e intensa. Las observaciones anteriores no son solo advertencias que no afectan la continuidad de los estudios estructurales del turismo: de hecho. o un fin de semana en Nueva York. Por una parte. Si le agregamos la reducción de los tiempos y costos de desplazamientos.es/geocrit/sn/sn-270/sn-270-87. quizás no con la intensidad de su primer gran despegue en los años dorados del fordismo. Un turismo diferente Las sociedades.) sea a prácticas consumistas urbanas. a pesar de todos los pronósticos. conciertos. la “entrada en el turismo” de países antes cerrados a él (como el antiguo Bloque del Este y recientemente China de manera muy particular). no solo en los últimos diez años. puede transformarse hoy en un escape para compras en Londres. supuestos instrumentos de productividad. su entrelazamiento en los contextos actuales. 1999). La última observación sobre la fusión de los tiempos. para su análisis. También. la llamada y poco desarrollada “geografía de la recreación”. se ha dado una expansión del proceso turístico. Hoy. integrándole. entre otros desde la perspectiva geográfica en la cual nos situamos. con frecuencia son usados para evadirse y sumergirse en mundos virtuales o. Esta circunstancia generaba el vaciamiento de las ciudades en agosto cuando cerraban las fábricas y las escuelas. E inclusive. los tiempos de no trabajo (es decir aquellos susceptibles de ser destinados a las actividades recreativas y turísticas) eran perfectamente delimitados en duración y calendarizados. por lo pronto en países desarrollados y semi-industrializados. que la última década ha sido portadora de cambios acelerados en las dimensiones políticas. una flexibilidad mayor aunque no total para definir los periodos vacacionales. pero aun así con cierto ritmo: se ha asiste a la aparición o al crecimiento del turismo de ciertos segmentos sociales beneficiados por la globalización y excesivamente móviles. partir de la premisa de que el turismo es antes que todo un fenómeno societario con ciertas facetas económicas. se ha podido observar una expansión sin precedentes del turismo urbano. estos fenómenos son tan relevantes que les restan sentido a aquellos estudios para entender la especificidad del mismo proceso turístico. cerveza y televisión. hablando de la necesidad de fundir en un solo agregado el ocio (Leisure) y el turismo. desde un cuarto de siglo aproximadamente. sus concepciones del mundo y muchos otros aspectos de la vida en colectividad. culturales. para hacer turismo virtual. es el traslape de los tiempos. El geógrafo inglés Crouch identificó muy bien esta situación. Más bien. como los tratamientos de Spa. sino también la geografía cultural en primera instancia. En efecto. una nueva oferta atractiva en esos 3 de 9 04/01/2009 9:34 . los tiempos sociales se han modificado: uno de los efectos de la desindustrialización. de una vez por todas. en la expresión “Leisure/tourism” (Crouch.htm actividades no productivas de los individuos se han trastornado de igual manera. en la época más “intensa” de la producción masiva de grande series. el turismo tradicional ha perdido mucho de su valoración positiva y se han presentado nuevos factores centrales que ayudan a redefinirlo. una prospección sobre lo que ocurre en las fábricas y las oficinas no sería sobrante. y económicas de las sociedades actuales. lleva a pensar que no solo es la geografía económica tradicional la que debe interesarse en el mismo. y una actividad casi nula en turismo fuera de las llamadas “temporadas altas”.ub. han sufrido profundas transformaciones. más exactamente. llama a reconsiderar el campo de la geografía del turismo. entre otros factores. sus tiempos y sus modos de vida. Asimismo. En este sentido. la fragmentación de los mismos.Una década de cambios: la Geografía Humana y el estudio del turismo http://www. podría ser más correcto hablar de una “geografía del ocio” que remita a todas las actividades que realiza un individuo fuera del ámbito de la producción. sin menosprecio de que ciertas dimensiones del turismo requieran. el turismo de aventura. etc. festivales. y hasta la creación de burbujas turísticas tropicales en medio del invierno europeo. sino entre “buenos y malos”. éste ha adquirido un mayor peso en la definición de los productos turísticos: la demanda se hace más exigente. En otro trabajo. 2007). como consumidor. No cabe duda. el peso de la reestructuración política del mundo. coloca en situación de hacer turismo a personas de la tercera edad. como algunas circunstancias que cabe tomar en cuenta.es/geocrit/sn/sn-270/sn-270-87. hemos mencionado por ejemplo. y en esta escala la geopolítica y la geografía política tienen un vasto tema de trabajo. y de los acontecimientos en las sociedades actuales (Hiernaux y Lindón.ub. sin por ello caer en una sobrevaloración. por lo que muchos de ellos suelen desempeñarse en el ámbito de los estudios turísticos. en consecuencia. Podemos entender esta situación.Una década de cambios: la Geografía Humana y el estudio del turismo http://www. Por otra parte. Finalmente. y se ha vuelto una suerte de constatación inicial en cualquier libro de geografía del turismo que se quiera innovador. lo que lo vació de su significado geográfico pero garantizó su popularidad. nuevos espacios o nueva organización de los espacios anteriores. nuevos imaginarios sociales y.htm mismos países. la relativa estabilidad de los precios de transporte aéreo. donde dominan los estudios esencialmente aplicados sobre la economía y la gestión del turismo. El mapa del turismo mundial se ha modificado.no cabe duda que se ha constituido ahora un complejo sistema turístico con opciones diferenciadas. sino que solamente pretendemos recalcar que la geografía del turismo debe efectuar este acercamiento que hasta ahora. tanto por el peso de la “ética protestante del capitalismo” como por el “prurito ético-moral” del marxismo. el envejecimiento de la población de los países desarrollados. Por otra parte. Aun si el turismo tradicional de mar y playa sigue siendo una componente dominante del turismo mundial –siendo la punta de lanza del turismo fordista. en el marco de una profunda reestructuración de la economía hacia una mayor toma en cuenta del usuario. que un acercamiento con las ciencias sociales no solo es necesario sino decisivo para el futuro de la geografía humana. Ya hemos mencionado que los tiempos sociales se han modificado y. salvo cuando éstos están ubicados en ciudades turísticas. más responsable socialmente o más sustentable como algunos quieren hacerlo ver. debe destacarse la mayor disponibilidad de tiempos para viajar a lo largo del año. No es momento para desarrollar esta idea que por lo demás no es nueva. que muchos geógrafos del turismo no resultan bien aceptados en los departamentos de geografía. para imprimir en la mente de los turistas potenciales. una forma de hacer turismo particularmente en auge. que el turismo. entre otras cuestiones por el hecho señalado por diversos autores. pero no por ello menos proclives a desplazarse o a mudarse de residencia por periodos largos a otros lugares. acabó mimetizándose con la corriente dominante de los estudios turísticos. nuevos productos impuestos en el mercado. sino un turismo marcado por nuevas preferencias. Hacia otra geografía del turismo En otros entornos hemos hablado de la necesidad de una refundación de la geografía humana. los productos suelen mejorarse y el individuo. movida por los prestadores de servicios. no por ello más equilibrado. ya no tanto entre Este y Oeste. conviene subrayar. entre “demócratas y terroristas dictatoriales” como se califican ahora los países en la paranoica verborrea geopolítica actual. Igualmente. el interés hacia nuevos destinos o nuevas formas de hacer turismo (MacCannell. parecería aun que enfrenta fuertes resistencias. 2006). la fusión excursión/turismo/recreación y la multiplicación de ofertas indiferenciadas para todas las posibilidades temporales. hemos repetido ya varias veces. sobre bases más acordes con el desarrollo de las ciencias sociales (en particular sus “giros” recientes). el crecimiento consecutivo del llamado “turismo urbano” de corta duración. en ese sentido. como lo señalábamos en la introducción. por 4 de 9 04/01/2009 9:34 . impone cada vez más sus dictados sobre los productos (entre los cuales las preferencias para los destinos) aun si es innegable el peso de la “imaginería” instituida. es algo pecaminoso. que el concepto del “ciclo de vida” inicialmente desarrollado bajo premisas geográficas por Richard Butler (2004). Afortunadamente. es que se ha podido constatar. dictadas por su deseo. efímera y fugaz” (Nogué y Romero. sino que debe ser convocado a interrogar al individuo en sus prácticas. y pasan más tiempo en la ciudad y en los alrededores del hotel. sino de encuentros que merecerían un análisis desde. como practica de ocio. pero con lentitud aun… La “otra geografía” del turismo y usamos el término en el sentido del título y contenido de la obra de Nogué y Romero (2006). es la que se refiere a “aquellas expresiones geográficas de la contemporaneidad poco estudiadas habitualmente por su intrínseca dificultad y accesibilidad. En este último apartado del texto. o por su apariencia invisible. Así. implica también que el geógrafo del turismo. son todos iguales o actúan de la misma manera. su interés? o ¿Qué peso tienen las limitaciones impuestas por los organizadores de viaje. entre otros. intangible. en otros términos. con preguntas tales como: ¿Hasta qué punto el turista ejerce prácticas espaciales inéditas. por ejemplo. por lo menos las ciencias sociales han sabido advertir con tiempo el cambio realmente estructural o de fondo que se está dando en este sentido: revalorizar el individuo implica. a intervenir. las visiones “macro” 5 de 9 04/01/2009 9:34 . no son muy diferentes de lo que en la sociología de la vida cotidiana se analiza desde la imposición/libertad en la misma. con nuevos temas. o en Michel de Certeau (1996). sobre la innovación en las prácticas turísticas individuales? Estas preguntas. su forma de enfrentar el mundo. en lo que los anglosajones llaman una lay-geography. Interrogarse sobre las prácticas socio-espaciales de los turistas. un desarrollo turístico visto “desde el aire” puede ofrecer a la vista ciertos procesos generales o se puede asumir que se presenten esos procesos. por lo menos en el caso mexicano. los hoteleros. expresado muy brevemente. 2002). En este sentido más que un “turismo de masa”. el intercambio simbólico. sin por ello plantear que lo positivo de las manifestaciones anteriores de la geografía del turismo deban ser eliminadas o satanizadas. En este sentido. por ejemplo. es la desintegración de la visión masificadora de la vida y de los procesos sociales. como una geografía renovada. que los turistas alojados en hotel de playa suelen acudir menos a la misma que por el pasado. etc. no es suficiente que el geógrafo se interrogue sobre los movimientos de tipo migratorios que efectúen los turistas. los transportistas.es/geocrit/sn/sn-270/sn-270-87. algo absolutamente olvidado por la geografía del turismo. analizar el turismo desde las prácticas socio-espaciales de los mismos turistas. puede inducir el reconocimiento de prácticas muy distintas de lo que se ve “desde el aire”: un ejemplo. como si fueran operarios industriales en la mejor época del fordismo autoritario (Equipe MIT. sea capaz de realizar una inmersión en los microespacios. el geógrafo humano debe también tomar en cuenta que en esta práctica y en ese espacio es donde el turista encuentra al “otro”: no se trata entonces de impactos sociales y de grandes puestas frente a frente de turistas versus habitantes locales a la manera de cierta antropología turística.htm lo que no es digno de estudiarse y quienes lo hacen. No estamos entonces frente a una “masa” humana que pretende divertirse. a las escalas micro. están llamados a actuar. tema caro a Henri Lefebvre en su crítica de la vida cotidiana (1972). saliéndose de la burbuja turística del establecimiento hotelero y buscando una mayor movilidad espacial dentro del destino (lo que provoca un consumo importante no centrado en la oferta “turística” tradicional). entonces. habrá que admitir que estas reticencias están evaporándose progresivamente. conceptos e instrumentos. sus imaginarios. sino frente a personas. visualizamos una “masa de turistas”. ya lo hemos afirmado. sobre la disponibilidad de cuartos de hoteles o la ocupación de los mismos. no son bienvenidos en los círculos “bien” de la geografía. en cualquier momento del acto turístico. Si bien ésta sigue siendo el pan de cada día en las organizaciones nacionales e internacionales del turismo. 2006: 11).. es justamente el hecho de que el turismo. Uno de los cambios más notorios. a manera de ejemplo. a actores. es ejecutada por individuos con sus particularidades. En el proceso de asimilación del planteamiento inicial de que el turismo es antes que todo una práctica sociocultural en microespacios. como congregación de individuos realizando prácticas turísticas que no por hacer cosas aparentemente similares.Una década de cambios: la Geografía Humana y el estudio del turismo http://www. entre otras maneras de actuar. Por ende. por tradición. nos centraremos sobre unas ideas que permiten repensar la geografía del turismo. acostumbrados. a presentarse frente al otro. etc. tendencia que no ha sido muy común entre los geógrafos. Una visión a ras del piso.ub. es decir a los meso y macroespacios. a individuos que. invisibles que son parte de la existencia real aunque poco captable del turismo. Nada es menos correcto. donde pueden privar. a partir de la experiencia de “otro” espacio.htm de los estudios de los impactos sociales que suelen satanizar al turista y plantearlo como intruso en un mundo idealizado de “buenos salvajes”. surge entonces un nuevo reto: frente al discurso dominante de la despersonalización del servicio turístico y de sus espacios -que de “tradicionales” en la fase “pre-turística”. interrogarnos sobre la posibilidad de que el turista desarrolle un sentido del lugar. es esencial para lograr el regreso del turista. Para el geógrafo. No crearía tampoco esa suerte de relación duradera que genere afectos y apego al territorio. además. mucho más frecuentes que lo que se suele reconocer oficialmente. turismo. solo se puede alcanzar a partir de una construcción que parta de las prácticas socioespaciales de los turistas y demás actores del turismo. el dedicado al turismo o el de los residentes en las localidades turísticas. excursión. a los cambios del medio natural. la derogación de las normas de separación entre prácticas públicas y privadas que se evidencian en los spring breakers. que puede darse un apego. En efecto. para no afectar a la imagen virtuosa del turismo como recreación y descanso sano y familiar. no estamos afirmando que es innecesaria una geografía más estructural del turismo. Sin embargo. el sentido del don y no solo la expoliación. Regresando a la definición de “otra geografía” tal y como fue planteada por Nogué y Romero. que no por ser artificios son menos efectivos para marcar el lugar de manera simbólica. Entre esas prácticas. en fin. etc. nosotros pensamos que el encuentro de lo micro y lo macro. pueden derivarse en prácticas espaciales diferentes por parte de los residentes: a manera de ejemplo. con los conceptos de “otra geografía” en construcción. un sentido del lugar susceptible de verificarse no solo en los momentos durante los cuales están presentes en el espacio turístico. ya que su estancia es efímera. de las largas pláticas de remembranza y de muchos artilugios. una que remita a las distribuciones de turistas y ofertas. en sus dimensiones 6 de 9 04/01/2009 9:34 . porque no. fugaces. que por fin. transforme el espacio en un verdadero lugar (Hiernaux. desde enfoques particularmente equívocos.el geógrafo debe ser capaz de demostrar. la agregación de datos cobra sentido a partir del momento en que no se parte de datos duros provenientes de un trabajo de campo tradicional y cuantitativo. la distribución y el consumo de las drogas. Sentido de lugar que. en sentido complementario. que por falta de espacio solo hemos esbozado en unos aspectos centrales. También. Con este tránsito por nuevas maneras de analizar el turismo desde la geografía. un apego.ub. con toda su carga simbólica. a muchos de los temas que han sido los habituales en la geografía estructural del turismo. Esta tentación proviene del hecho de que el carácter efímero de las prácticas induce a pensar que el turista no marca el espacio por lo menos físicamente. Fácil es decir. por ejemplo la presencia de turistas en ciertas cantidades y localizaciones. a las lógicas espaciales de las empresas y grupos turísticos. entonces los geógrafos del ocio (tiempo libre. prácticas recreativas. sino que también alimentan a través del souvenir. la seducción (no solo sexual sino por el “otro” diferente moderno o exótico). podrían ser reorganizadas y recentradas sobre esas relaciones interpersonales. por ejemplo. que el turismo genera solo “no-lugares” a la manera de Marc Augé (1993). el estudio del “impacto” entonces puede adquirir una dimensión diferente. Asumir la fugacidad del acto turístico.Una década de cambios: la Geografía Humana y el estudio del turismo http://www. de la fotografía. vistos integralmente) deben también considerar esas prácticas efímeras. la “repetitividad” del viaje. pero no menos real o menos significativo para la persona que lo experimenta. 2000). quizás distinto del que se tiene en el lugar de residencia habitual. que logre identificarse con el mismo. comentaremos el cambio de modelos arquitectónicos. desde cierta geografía. Para el geógrafo. se volvieron amorfos y no-lugares por la imposición del modelo turístico. no cabe duda que una suerte de “turistificación” se ha impuesto en los espacios de residencia. un sentimiento relacional entre turista y espacio que desemboca realmente en un sentido del lugar. sin olvidar otras más estructurales como la corrupción y el lavado de dinero. cuando examine de qué manera estos encuentros interpersonales. es evidente que muchos turistas han sabido desarrollar un afecto.es/geocrit/sn/sn-270/sn-270-87. sino de procesos reales. implica. Así. sugerimos que puede lograrse un enfoque totalmente distinto: mientras que la geografía estructural tradicional del turismo se plantea analizar los fenómenos a partir de información general. de prácticas de compras y de consumo y de las mismas prácticas de ocio de quienes residen en espacios fuertemente impregnados por el turismo. no podemos eludir las que tienen que ver con el mundo de la prostitución masculina y femenina. es decir según la jerga técnica. Desde una perspectiva metodológica. tratándolos como textos que permiten reconstruir los imaginarios y la construcción simbólica que guían las prácticas espaciales de quienes se involucran de una manera u otra en el turismo. pero mientras exista una geografía de la producción y de los intercambios donde no se distingue forzosamente entre el tipo de producto. Por ello. Los no lugares. El “tipo ideal” weberiano que retoma certeramente Alain Bourdin (2007) para analizar la relación entre el individuo y la metrópoli. como ya lo mencionamos. las palabras pero también los imaginarios que sustentan ese papel no escrito pero sí actuado por turistas y “locales”. Modernidad líquida. La geografía del ocio. analizar el discurso. por la ampliación de su campo de estudio a todas las manifestaciones del ocio. por oficiales que sean. In Lew. C. R. La distinción formal no tiene validez. 2007).. M. cara a los antropólogos. Williams.ub. los movimientos. el escenario donde se presentan las prácticas socio-espaciales de los turistas y de esos “otros” que con los que interactúan en el acto turístico. es susceptible de abrir nuevas reflexiones y hacer indudables aportes para la comprensión de una esfera central aunque con frecuencia mal entendida de las sociedades actuales: el mundo del ocio. sobre los cuales es posible construir generalizaciones o construcciones acerca del comportamiento colectivo. bien podría aplicarse al caso del turismo. Este es sin lugar a dudas un reto mayor. Malden: Blackwell Publishing.htm físicas y simbólicas. La renovación de la geografía del turismo pasa. The Tourism Area Life Cycle in the Twenty-First Century. bien también. realizar entrevistas y recoger historias de vida. BAUMAN. todo ello puede ser de utilidad para el propósito de una geografía renovada del turismo. Allan M. BUTLER. El “campo” es la materia prima. A. espacios de anonimato. 159-169. lo que no se puede negar es que los estudios del turismo no pueden seguirse alimentando solo de datos estadísticos. finalmente. Mover la geografía hacia estos abordajes implica también una valorización. entendida también como un campo de una geografía humana renovada.es/geocrit/sn/sn-270/sn-270-87. p. Es el escenario de una suerte de “performance” turística como la califican los anglosajones (por ejemplo: Ness. sean residentes o prestadores de servicios. donde el quehacer individual no se evapora por la medidas estadísticas que evacúan al turista como actor. Barcelona: GEDISA. 2007). puede ser de utilidad (Lindón. Bibliografía AUGÉ. Michael Hall. A Companion to Tourism. 2003. que conviene estudiar con más detenimiento y menos ambigüedad. donde es preciso reconocer los actores. Si son sedentarias o no se desarrollan sobre más de un día (lo que se llama excursión). no se ve por qué no puede ser posible analizar el ocio a partir del conjunto de las prácticas socioespaciales de los individuos. los nuevos derroteros que sigue la geografía cultural pueden ser de interés central: valorizar desde la geografía humana. concepto/método de los que proviene de la sociología y que Alicia Lindón ha aplicado al estudio geográfico como “hologramas socio-espaciales”. Igualmente el “holograma”. por distintas que aparezcan en una primera lectura. 1993. Allan A.Una década de cambios: la Geografía Humana y el estudio del turismo http://www. Puebla: Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. desde la misma. 2004. 7 de 9 04/01/2009 9:34 . 2007. tanto mejor. vista como extensión de la geografía del turismo y de la recreación. sino que representa solo una modalidad simple y cómoda de clasificación para fines estadísticos de procesos dotados de una gran complejidad social y espacial. La metrópolis de los individuos. Z. editors. BOURDIN. Si algunas de estas prácticas conducen a reconocer lo que tradicionalmente se ha llamado “turismo” (es decir prácticas del ocio ejercidas fuera del lugar de residencia con pernocta). una antropología de la sobremodernidad. México: Fondo de Cultura Económica. de conceptos y formas de trabajar que han sido útiles y reconocidos por otras ciencias sociales. la descripción densa. Sao Paulo: Editora Hucitec. C. Santiago de Chile. 1963. Allan M. D. In HIERNAUX y LINDÓN. Choreographies of Tourism in Yosemite Valley: Rethinking 'place' in terms of motility. D.htm CHRISTALLER. F & GODARD. editor. 1996. 2007. HIERNAUX. Dimitri IOANNIDES. Regional Science Association Papers. 2006. NESS. 1972. In LEW. WILLIAMS. F. M. Paris : Editions de l’Aube. y A. K.I. La vida cotidiana en el mundo moderno. Aix-en -Provence: Centre des Hautes Études Touristiques. mobile et pressé. Performance Research. Directores.recreational areas. 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