Cixous La Ciudad Perjura

March 24, 2018 | Author: Jose Fernando Duque Cárdenas | Category: Forgiveness, Greek Tragedy, Democracy, Religion And Belief


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EllagoEdicionesLa ciudad perjura o el despertar de las Erinias Hélène Cixous Traducción y prólogo de Joana Masó Colección Letras . . 1994 Prólogo ¿De qué somos contemporáneos? Comunidad democrática y comunidad de perdón . . . . [email protected] / www. . salvo excepción prevista por la ley. colección privada. . 17 Primera edición: diciembre 2010 © de la autora: Hélène Cixous Agradecemos especialmente la generosa colaboración de la autora en la presente edición. . . . . . . . . . . . fotografía de Alfonso Subyaga. L. .36140 Vilaboa (Pontevedra) Tel. . . . . . . . .com Cualquier forma de reproducción. 15 La ciudad perjura o el despertar de las Erinias . . 5 . .cedro. .Director de la Colección Letras Francisco Villegas Belmonte Índice Título original: La ville parjure ou le réveil des Érinyes © de la editorial: Théâtre du Soleil. . . . . . comunicación pública o transformación de esta obra solo puede ser realizada con autorización de los titulares. . 36 x 25 in. . . . Diríjanse a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos. 7 Presentación de la autora Nuestras malas sangres . . © de la traducción y el prólogo: Joana Masó © de la imagen de la portada: Elena del Rivero. . . escanear o hacer copias digitales de algún fragmento de esta obra. . . . . . .12002 Castellón (Edicións do Cumio. . . . S.com Donat. . .ellagoediciones. . . . . . . .cumio. 2008. . . .) A Ramalleira. www.com / www. Maquetación: Natalia Susavila Moares © de la edición Ellago Ediciones. A. . . . Gold leaf and thread on Japanese paper.: 986 679 035 cumio@cumio. . . . distribución. . . . ISBN: 978-84-92965-04-5 Impresión: Mongraf Artes Gráficas Depósito legal: xxxxxxx Impreso en España 5 . S. . .org) si precisan fotocopiar. 13 . Wound #17. . . Desde los griegos. 2004. La presente edición ha sido realizada en el marco del proyecto de investigación «Representaciones de la comunidad en las escritoras y cineastas de la postmodernidad (Francia y países francófonos)». prescriben por razones legales y parecen ya no merecer más castigo . quien será exculpado de su crimen por la justicia ateniense a finales del s . la posibilidad de perdonar se presenta como un reto a toda institución de justicia2 . el teatro ha sido una escena política que ha puesto en su centro el debate sobre el crimen y la idea de justicia. 1 Quiero agradecer especialmente a Montserrat Jufresa sus precisiones concerniendo las obras griegas y a Javier Bassas su lectura atenta del manuscrito . Jacques Derrida apuntaba que el perdón excede cualquier lógica penal y que. Es quizás este perdón radicalmente heterogéneo y extranjero a la justicia el que pone magistralmente en escena Hélène Cixous en su obra de teatro . El primer acontecimiento es fundacional: el asesinato de Clitemnestra en manos de su hijo Orestes. París. V a . Un perdón que no es una noción jurídica. al cabo de cierto tiempo. Cahier de L’Herne. C . En su obra. L’Herne. ni con esos delitos que. para escribir la tragedia contemporánea La ciudad perjura o el despertar de las Erinias . Es este legado el que recoge Hélène Cixous al inspirarse de Las euménides de Esquilo. «Pardonner: l’impardonnable et l’imprescriptible». conferencia pronunciada en 1997 y publicada posteriormente en Derrida. financiado por el Ministerio de Ciencia y Tecnología FFI 2008 – 03621 .Prólogo ¿De qué somos contemporáneos? Comunidad democrática y comunidad de perdón1 Joana Masó A finales de los años 90. por ello. al no identificarse en ningún caso ni con la gracia que conceden algunos jefes de estado como ocurre todavía hoy en Francia. Jacques Derrida. 2 7 . así como sobre la noción de responsabilidad en el seno de la comunidad . 541-560 . Cixous hilvana dos acontecimientos trágicos que ponen en cuestión la democracia como garante de la justicia y permiten pensar el perdón como una crítica al sistema democrático . Marie-Louise Mallet y Ginette Michaud eds .. El segundo acontecimiento es extremadamente contemporáneo: el escándalo de las trasfusiones de sangre portadora del virus del Sida durante los años 80 que contaminaron a más de mil hemofílicos en Francia y por el que los médicos y políticos inculpados fueron finalmente declarados inocentes . pp . en La ciudad perjura Cixous privilegia el cambio de paradigma simbólico que se opera en Grecia y que juzgará dichos asesinatos trágicos. y. Por ello. tr . la sangre derramada por Orestes que las viejas Erinias habrían castigado tiempo atrás no es delito en democracia . La Erinia cixousiana es aquí una especie de pesadilla que ataca a los culpables protegidos por el poder democrático desde la impotencia y la exterioridad radical a la comunidad democrática . En La ciudad perjura. Una Erinia que se despierta a principios de los años 90 para gritar una nueva injusticia democrática: la contaminación y la muerte de hemofílicos que no encontrará pena alguna para los responsables políticos en la justicia francesa. así pues. aunque en la tragedia de Cixous la madre no está muerta. su crimen no es delito .»5 Es la Atenea ejecutante de la ley del padre la que pone límites legales a la fuerza vengadora de las Erinias. Ciertamente. Les euménides. Éste. 11 . En la vasta producción literaria de Cixous. el matricidio de Clitemnestra que las Erinias deberían haber vengado queda impune . «estar furioso» (Pausanias. Dicho tribunal cuenta con el apoyo del nuevo panteón olímpico encabezado por Zeus. Hélène Cixous hace revivir el célebre matricidio de Clitemnestra como fin del orden simbólico materno llevado a cabo por Orestes . Hélène Cixous. así pues. En Las euménides.PRÓLOGO JOANA MASÓ Despertando la voz de Esquilo. p . 2001. C . Ciertamente. Atenea pone fin al mal que las Erinias cometían en nombre de la venganza de la víctima muerta . es ella la que sigue siendo 5 6 Ibid . instigador del crimen . primer ministro del gobierno de Mitterrand entre 1984 y 1986 . El olvido en la memoria de Atenas. la Atenea patriarcal nacida de la cabeza de Zeus preside el nuevo tribunal democrático que juzgará y dejará impune el matricidio de Clitemnestra . De ahora en adelante. introducción a la traducción francesa de la tragedia de Esquilo realizada por la autora. 2008. Orestes no hacía sino vengar al padre y. en la relectura que hace aquí Cixous. a la mitología arcaica encargada de velar por una experiencia predemocrática de la justicia . Hélène Cixous. «Le coup». p . V . la Erinia es ya la de la época clásica. escribe Cixous en el prólogo de su traducción libre de la tragedia de Esquilo . Atenea enuncia «el fin brutal de una era de insondable antigüedad» . Como recuerda la helenista Nicole Loraux. La ciudad dividida. las Erinias eran esas divinidades monstruosas que escuchaban la llamada de la víctima y la vengaban en su ausencia sin necesidad alguna de deliberación judicial . echada de la polis democrática . París. esp . la fuerza trágica del cambio simbólico que deriva del nacimiento de la justicia democrática y patriarcal . con él. 6)– se convertirán en su nuevo epíteto: euménides. dejando impunes a aquéllos que han puesto fin al orden matriarcal y. pp . V a . Le Griffon d’argilePug. de Anna Maria Moix. pretende castigar el asesinato de Agamenón. 6-7 . Barcelona. garantes del orden y de la paz democráticos . Anthropos. apunta Cixous. representados principalmente por Laurent Fabius. Es esta bisagra entre dos justicias. 70-81. VIII. 25. infligiéndoles castigos hasta la extenuación y la muerte . el olvido de una forma de inconsciente interior ajena a la retórica jurídica dominante . Quebec-Grenoble. la genealogía matriarcal se encuentra expulsada de la naciente organización democrática que protege únicamente a su orden patriarcal –de Agamenón a ese Orestes favorito de la propia Atenea y de Apolo. los asesinatos familiares de la Orestiada constituyen ejemplos paradigmáticos del problema de la culpabilidad y de la inocencia humanas condicionadas por un contexto de fatalidad –divina. Hasta el s . mujeres divinas del mundo ceden . la reforma del tribunal del Areópago en el s . histórica. esa Erinia destituida de sus funciones de vengadora y justiciera. Du féminin.. recogido en el célebre La risa de la Medusa. a . Sin embargo. de Sara Vassallo. Théâtre du Soleil. Mireille Calle-Gruber ed . 1992. atizado por la cólera de Apolo. desde el momento en que las Erinias son reemplazadas en su rol de justicieras en favor de la nueva justicia democrática. esp . 1992. que destierra la figura de las Erinias como viejas divinidades justicieras . Con la exclusión de las Erinias y la muerte de Clitemnestra. C . Con el fin de la «época-de-las-Erinias». para nuestra gran emoción. 8 9 . «las benévolas» . Los atenienses pasan una página importante de su historia al «inventa[r]» la noción de amnistía y «jurar que “no volverán a recordar los males del pasado”»6 . la polis griega se encontrará bajo la protección de Atenea y el Ares emphylos. y aparecen en un gran número de ficciones y ensayos de la autora3 . Cixous recupera. Pero «de repente. tiene graves consecuencias para la democracia . las más viejas 3 Cf . pp . Ella es el remordimiento de la consciencia que se despierta tras tantos siglos de destierro para acompañar nuevamente la causa de la madre . 4 Nicole Loraux. Dichas consecuencias serán el olvido del matricidio y de las Erinias o. «La joven nacida». Dicho de otro modo. cometido por Clitemnestra y que se proponía vengar el sacrificio de Ifigenia . el panteón de dioses apadrina a aquél que ha cometido el homicidio materno: matando a la madre.. Es aquí donde las espantosas Erinias de la memoria. sostienen. así como a la obsesión fantasmal que producían en el inconsciente del culpable durante largos e interminables años . las Erinias eran terribles divinidades que perseguían a los culpables de los crímenes de sangre. su padre. En la nueva institución judicial. entre muchos otros. Buenos Aires. el Ares de la familia. cuyo nombre evoca la cólera –el verbo erinyein es equivalente de thymoi khreesthai. Katz editores. política–. en la mitología preclásica. Es el fin de aquellas que «formaban parte del paisaje interior del Crimen»4. 113-137 . la que se encarna en La ciudad perjura . tr . una arcaica y la otra democrática. Hélène Cixous. 66 y pp . «En octobre 1991…». es Apolo/Quien ha matado a mi madre . El sueño que intentan prefigurar la Noche y la Madre de La ciudad perjura es quizás éste: que la justicia no se acabe en el tribunal. El Aleph.PRÓLOGO JOANA MASÓ la víctima de la ley democrática. Cixous establece una analogía entre ese Orestes que mató a la madre cumpliendo la voluntad de Apolo en la tragedia de Esquilo y algunos de esos médicos franceses que. Es quizás el perdón derridiano –como noción radicalmente heterogénea a la justicia– el que hace posible pensar ese afuera de la justicia democrática . y por desgracia nuestra. Vladimir Jankélévitch. las Erinias no son sino el espectro o el recuerdo de una época que albergaba la posibilidad de una justicia no institucional . En La ciudad perjura.» Cixous se sitúa aquí muy lejos de las coordenadas judiciales y./No es gran cosa . Seix Barral. Barcelona. tanto el tribunal democrático como la venganza de las Erinias tienen como finalidad principal el castigo de la falta y. la sangre contaminada que provocará la muerte de los niños en Francia y el fantasma de la pureza de la sangre que causó el exterminio de los judíos en Europa . sobrepasan toda medida humana y son irreparables . sino que la autora intenta pensar una exterioridad con respecto al modelo estrictamente jurídico . Barcelona. que la palabra justa no se reduzca a la retórica de los letrados o que el culpable pueda pedir perdón sin ser por ello inmediatamente procesado ni encontrar un equivalente jurídico de la expresión de su falta .”/Ésta es la palabra que quiero oír (…) La Madre y nosotros. El Coro cixousiano evoca a lo largo de la obra el espectro de los campos. Las Erinias son para Cixous las figuras femeninas y olvidadas de un afuera de la justicia institucional que le permiten orquestar un cara a cara entre dos paradigmas –sin por ello adherir a ese arcaico «ojo por ojo. para quien el perdón sólo es posible mientras la culpa puede ser expiada y se convierte en irrealizable cuando la falta o el crimen. Cixous no establece un correlato entre la culpa y el perdón: la Madre en la tragedia de Cixous no rechazará en ningún momento el perdón a los médicos que sabe ciertamente culpables . Cito a las Erinias dirigiéndose a uno de los médicos: «Hablas exactamente como me habló el horrible Orestes/Cuando. en el sentido estricto de la palabra . he ahí la primera palabra del racismo .» Sin embargo. siguiendo a Derrida. el Estado francés viene a ocupar el lugar del nuevo panteón democrático en Grecia y.XX. niños. será la propia figura de la Madre la que en La ciudad perjura solicite a los culpables que pidan perdón . 10 11 . Ambos están muy lejos de las reflexiones de V . Cito a Cixous: «la Historia entera no es sino una hemorragia». El perdón.(…) Acuso al Estado de los pies a la cabeza/Por haberme manipulado . evidentemente . Tanto para Derrida como para Cixous sólo lo imperdonable puede ser objeto de perdón./Me decía: “No he sido yo. judíos . tr . Jankélévitch7. en ningún caso. incluyendo los crímenes contra la humanidad . Cixous concibe una Madre que formula y pide lo imposible: «“Perdón . 1987 . Un perdón que nunca será expresado por boca de los culpables en la tragedia de Cixous y que se inscribe explícitamente en el horizonte de las grandes tragedias del s . Cixous pretende escenificar no una justicia cuya verdad es la venganza llevada a cabo por las Erinias a falta de una institución jurídica más justa –puesto que Cixous también deconstruye la venganza a lo largo de su obra–. esp . puesto que La ciudad perjura pone en escena una madre enloquecida de dolor por no haber conseguido ninguna confesión en boca de los responsables de las transfusiones sanguíneas que han matado a sus dos hijos ./Con las manos manchadas de sangre/Vosotros decís que no habéis matado . la deportación y la inocencia de las víctimas como trauma fundacional de la conciencia de Europa: «Hace cincuenta años la consciencia de Europa/Fue gravemente herida . 1989. con la figura de una madre que también complicará y pondrá en cuestión el modelo de venganza que defienden las Erinias. esp .» En el imaginario cixousiano. Cabe subrayar que. Es más. Todo el mundo lo sabe . Ante esta redundancia. la fuerza de La ciudad perjura es ante todo literaria. con los dedos pringosos de sangre materna. lo que queremos. es la propia víctima a quien no basta el veredicto de la justicia la que requiere el perdón en una escena alejada de los magistrados y los tribunales . ¿de quién es la culpa?/¿Quién va a responder de ella?» Respuesta de X1: «Si hay alguna culpa es la del Estado. Puesto que aquello que ya es perdonable no requiere en ningún momento la prueba del perdón . /…………………/ Y desde entonces. deshace la simetría entre la falta y el perdón . tr . Es la expresión del remordimiento . de Núñez del Rincón. «Decimos: “la sangre”. conociendo las posibilidades de contaminación del virus VIH.» La gran fuerza de la tragedia de Cixous reside en haber tejido magistralmente un hilo histórico entre la sangre vertida en el matricidio de la Orestiada.” (…) Todos nuestros niños han sido privados de su florecimiento ./Entonces. la expresión o la formulación del perdón en boca del culpable . entre 1984 y 1986. La metonimia de la sangre aúna el legado de la tragedia griega. de Mario Muchnik. siguieron realizando las transfusiones y comercializando la sangre hasta que el ministerio de salud francés no prohibió su distribución de manera oficial . aquí. como en el caso del exterminio nazi. las negligencias del sistema democrático contemporáneo y el auge del antisemitismo en los años 30. ha fallecido por completo . Aquí. Pobre sangre. tu figura comunica con los peores fantasmas de nuestro siglo . y Lo imprescriptible. así como también a todas sus víctimas: madres. puesto que a Esquilo se añadirán todos aquellos escritores y obras que han cantado la «podredumbre de los reinos» como el Hamlet de Shakespeare: 7 Cf . diente por diente» que la obra deconstruye sin cesar con las críticas dirigidas por el personaje de la Madre a las Erinias . obra de teatro en la que se narra la historia de Camboya. 11 Jacques Derrida. sobre los resistentes franceses . 9. ¿Cuál es la enfermedad del reino en cada momento de la Historia?. Ámsterdam. Kristeva. «Le coup». Madrid. Su herida de oro sobre papel es aquí una imagen de la rasgadura democrática en relación profunda con la figura de la madre . Y es justamente la memoria de una palabra ante terceros que habla de la propia contemporaneidad poniéndola en relación con los fantasmas de la tragedia y de la historia la que Ariane Mnouchkine puso en escena por primera vez el 18 de mayo de 1994 en el Teatro de La Cartoucherie de París en estrecha colaboración con Hélène Cixous . las anteriores y posteriores experiencias de Cixous con el teatro establecen también una estrecha relación con la denuncia. Cixous y Mnouchkine se asociaron a las breves representaciones del GIP (Groupe d’Information sur les Prisons) fundado por Michel Foucault y que realizaba actos de protesta ante las prisiones de París para luchar contra la exclusión y la indiferencia. Balzac. 235 . a este horizonte de repetición de una humanidad trágica y altamente literaria que enmarca La ciudad perjura. la segunda. Le Coeur critique: Butor. Asimismo. en 2001 Hélène Cixous escribe Rouen. La ciudad perjura o el despertar de las Erinias representó ante los espectadores de La Cartoucherie una palabra contemporánea que critica y fortalece simultáneamente la experiencia de la propia comunidad. abriendo frente a la comunidad democrática la posibilidad de una comunidad nacida de la experiencia del perdón . en particular. la reivindicación o la protesta políticas: a principios de los años 70. En este mismo volumen puede leerse el texto de Hélène Cixous. Hugo. Barcelona. entrevista recogida en el volumen ¡Palabra! Instantáneas filosóficas. país que sufrió la proximidad de la guerra de Vietnam. Cixous escribe L’histoire terrible mais inachevée de Norodom Sihanouk. y.101-102 (traducción ligeramente modificada) . Eric Prenowitz (ed . El lector interesado por el teatro de Hélène Cixous puede remitirse igualmente al artículo de Eric Prenowitz en el volumen crítico dedicado a la autora en lengua española: Marta Segarra (ed . Rodopi. op. New York.PRÓLOGO JOANA MASÓ «Oíd cómo gimen el himno indignado. roi de Cambodge. Aunque el proyecto nunca llegó a ver la luz. Hélène Cixous. en 1985. p . atreviéndose a esperar para la palabra justa otro porvenir . tanto si se acepta como si no. No estamos muy lejos aquí de la pregunta formulada por Cixous concerniendo la relación entre literatura y política: «¿De qué somos contemporáneos?»9 . Simon. 8 en 1987. Icaria. lo que Cixous llama «el espíritu de la Resistencia»10 ejerció una gran influencia durante la concepción de esta obra sobre la democracia y la justicia . para citar tan sólo un último ejemplo. abre la comunidad: «en esa singularidad de la experiencia del cara a cara entre criminal y víctima. como consecuencia de ello. y también para Derrida. Cixous. Publicaciones de la Asociación de Directores de Escena de España. tr . esp . la guerra fría y el posterior genocidio de los jémeres rojos.. por consiguiente. la primera. hasta el fin de sus días.). 2004. se suma el singular proyecto político de Hélène Cixous y Ariane Mnouchkine. entrevista con Eric Prenowitz titulada «On Theatre». Son estas dos comunidades las que encara la escritura trágica de Cixous: una ciudad perjura y una ciudad de muertos y supervivientes. 2006 . Y ello porque la escritura cixousiana es contemporánea justamente de esta literatura que pone en evidencia la repetición de la tragedia humana . trentième nuit de mai’31. el teatro. cit. pregunta que Shakespeare no ha cesado de formular en su teatro y que Cixous hace resonar en la presente obra . respectivamente. obra en la que desarrolla una larga escena entre una Juana de Arco indefensa en su última noche de vida y el hombre que simboliza el poder . diálogo con la autora del libro incluido en Françoise van Rossum-Guyon. de Elisabeth Burgos. p . así como la presentación de su obra de teatro La toma de la escuela de Madhubai. terriblemente fascinados por las matanzas cuyo autor es el hombre. pp . Ver con Hélène Cixous. esp . un perdón. Cixous y Mnouchkine entrevistaron durante un año a numerosos supervivientes de la Resistencia francesa y la propia Cixous subraya que el período de gestación de La ciudad perjura siguió inmediatamente a este proyecto de temática explícitamente política . y «Nuestras malas sangres». «Enter the Theatre».). «Justicia y perdón». escribe Cixous en su prefacio . L’indiade ou l’Inde de mes rêves toma como punto de partida la división de la India tras la época colonial y.»11 La democracia como sistema político de las comunidades europeas se cimienta sobre el archivo de esa palabra o relato que denuncian el crimen y que encuentran un testigo –lector o espectador . está presente un tercero y se anuncia algo parecido a una comunidad (…). 2004. la que pone en escena de manera paradigmática esa palabra política y poética que para Cixous. desde el momento en que se anuncia. 9 10 Hélène Cixous. de cierta colectividad . Trotta. la división de la comunidad musulmana y de la comunidad hindú. incluida en el volumen Selected plays of Hélène Cixous. tr . Quiero agradecer a Elena del Rivero su generosidad al cedernos una de sus obras para la portada de la edición española . 12 13 . Madrid. 2001. temiendo y protegiéndose de los castigos de la justicia. De igual modo. directora del Théâtre du Soleil. pp . hay implicación de la comunidad y. recogido en el presente libro . p . de Cristina de Peretti y Paco Vidarte. Shakespeare. 16 . Hélène Cixous. Esquilo. Es entonces la literatura y. Por ello. «Poésie e(s)t politique». Routledge. con la ciudad»8. donde la autora expone las principales líneas de fuerza de su concepción teatral. 15-18 . hierve. que. Balzac.Presentación de la autora Nuestras malas sangres Hélène Cixous «La sangre […]. la sangre que había que proteger dentro de sus fronteras y no mezclarla . 261-263 La sangre vertida ya no se vuelve a verter . la parte de nosotros que debe quedar escondida y que nos pueden arrancar Una sangre con propiedades religiosas. En el borde del rojo río de destino angustiante se han inclinado todos los poetas que no han podido retener la vida que se va. Ni todos los perfumes de Arabia suavizarían la pequeña mano que ha matado . Pobre sangre. 15 . terriblemente fascinados por las matanzas cuyo autor es el hombre. se agria. que se consideraba azul y que no podía mentir. vertida en el altar siguiendo los ritos. de siglo en siglo. que tiene un precio. Una irreversibilidad que Esquilo cantaba y denunciaba . ¡ay! ¡El rápido líquido que se ha derramado por el suelo se va!» Las Euménides. por el otro. la sangre contamina. Hugo. la sangre es contaminable y está contaminada . ennegrece . vv . Hoy siguen oliendo a sangre inocente . Ni borrable para el asesino . Irreversible es la pérdida de la sangre derramada por el asesinato . el hilo del horror trágico . Decimos «sangre» y enseguida se aglutina en esta vieja palabra de vida la palabra «contaminada» . y por desgracia nuestra. La sangre hoy siempre está descolorida y repintada y trae malos pensamientos y malos recuerdos . tu figura comunica con los peores fantasmas de nuestro siglo . La sangre: la consideramos el alma sustancial. he ahí la primera palabra del racismo . salvajes. Shakespeare. una vez se ha derramado. Por un lado. Es muy difícil hacerla volver. Decimos: «la sangre». Oíd cómo gimen el himno indignado. el principio vital que rodea nuestro país interior. No reversible para la víctima . tiene el poder de redimir crímenes y pecados Una sangre que llamaban pura. Esquilo. Por la sangre pasan. inunda. se sube a la cabeza. junto con la ciudad . La sangre: cómo se hiela. Las manos de los Macbeths nunca más serán purificadas . Por las calles se hunden hasta los tobillos en el lodo rojo . y veían cómo corre. Pero bueno. y donde está de moda repetir todo el día la palabra «ética»? ¿Y si ese extraño y monstruoso crimen hubiera nacido justamente de nuestra época? ¿Justamente de numerosas injusticias y justas imprecisiones enredadas de nuestro propio tiempo? ¿No será el síntoma de una nueva enfermedad del reino? Ni todos los perfumes de Arabia suavizarían las blancas manos manchadas . C. Además. Un grito que despierta a muchos personajes de nuestra obra . Los acontecimientos de este relato se produjeron entre el año 3500 a. Y ya sabemos que Fulanito de Tal asoció el Sida con los judíos . Hasta el día en que un grito perfora las pesadas capas de silencio . 16 17 . en la realidad. Pero esto no es una fábula . Se sabe que el miedo a la contaminación a través de la sangre es un reflejo antisemita . La ciudad perjura o el despertar de las Erinias Esta obra fue escrita entre diciembre de 1992 y septiembre de 1993. y la tierra repleta de asesinatos no tiembla . ¿Cómo. los judíos. hechos que se parecían a éstos. de alarma. precipitándose hacia los banquetes donde se sirven a mansalva los manjares que drogan sus ambiciones . en cambio. y el año 1993. viendo a las víctimas apagándose una a una. dormían bajo tierra desde hace cinco mil años. No toman demasiadas precauciones contra la peste moral . podrían infectar las sangres de las razas nobles . los negros… ¡Se hacen cruzadas contra los cruces! ¡¡A cada cual su sangre!! ¡Qué profundamente extendido está el insidioso miedo de la contaminación de la sangre a través de la sangre! Pero. Algunas sangres de entrada se consideran odiosas. Un grito de horror. debemos acabar admitiendo lo peor con temor y estupefacción: unos pastores degolladores . de revuelta . Hemos sido testigos de ello. ¿los han matado los que cuidaban de ellos? ¡¿No?! ¡Sí! ¿Quién puede imaginar una cosa así? Incluso nosotros. Que tiene que ver con el mito de la pureza de la sangre . El Sida. Pero hay un olor agrio en las cortinas de los palacios –¿lo reconocéis? Es la «podredumbre de los reinos» . Luego tuvieron lugar. pierden sangre. unos corderos descubren a su pesar que sus pastores eran lobos . desde hace sólo ocho días . ésos que están asustados no tienen miedo de la contaminación del alma a través de los malos ejemplos y las malas compañías . proferida en presente e intemporalmente. por qué un crimen a tal punto impensable? ¿Especialmente en nuestros países orgullosos de ser avanzados. otros. Pero quizás nuestros seguros reinos han inventado medios para desvitalizar las narices . a través de él nos llega la peste del Sida . Esta hediondez es un grito . como las Erinias. Los millones de gritos no se oyen . agonizan . La que se olía en el reino de Dinamarca . es profética por definición. ¿Quizás el de un niño abatido? ¿O de una madre golpeada por una increíble desgracia? Y entonces la muralla se agrieta . Vemos a esa gente precipitándose por el gusto de unos venenos que les chiflan –me refiero al oro y al poder–. Heridos. se puede convertir en polvo a millones de criaturas humanas durante decenas y decenas de años. He aquí la historia: un día. Y ello porque la palabra en el Teatro. y para colmar la historia de este líquido precioso. Algunos.PRESENTACIÓN DE LA AUTORA nuestro amor y nuestro odio . te hendiré! Grito: «¡Desprecio! ¡Desprecio!» Contra tus orejas cuidadosamente tapadas Con un espeso barro chorreando de oro . ¡La inspiración no me falta! Es tu inmensa infamia la que me insufla Gritos más fuertes que yo .LA CIUDAD PERJURA O EL DESPERTAR DE LAS ERINIAS HÉLÈNE CIXOUS Lista de personajes. devoradora de niños. los niños Las Erinias Tesalónica Elestiércol X1 X2 El Rey La Reina El Ujier El Ministro El Mantenimiento Forzza Señor Capitán Abel Eliminado Profesor Cornudo-Máximo Profesor Anselmo Doctor Berthier Doctor Gemelo Profesora León Doctor Brulard El cementerio Escena I (Entra la Madre) la madre Hoy te abandono. una mujer. Tu mal olor llegará a reventar las narinas de las generaciones futuras . Atroz pandilla muy diplomada . Sorda impostora. tú que entierras nuestras confianzas. Pero. por orden de aparición en la escena La Madre Esquilo. sociedad de feroces . con todas mis fuerzas lanzo mi furor sobre tu frente de piedra . 18 19 . abogado La Noche El Coro Daniel y Benjamín Ezequiel. ¡No! Soy yo quien te repudia Y marchándome la madre te planta cara . abogado Letrado Marguerre. Sigue cerrado estrechamente sobre ti mismo. un reino? ¡No! No eres más que una enorme carnicería gestionada Por devoradores honorables. Trágate tus propios mocos infecciosos . Que son lobos vestidos de blanco . vigilante del Cementerio Letrado Brackmann. tan honorables. Y no volveré nunca más . ¿qué estoy diciendo? ¿Esto. A esta mujer nada le frena los dientes . Con las mandíbulas apretadas contra tu lengua Que se erige envenenada dentro de la Ciudad Como un monumento de mentira. Reino totalmente frecuentado por eminentes doctores. Escucha. ¡Yo te atravesaré! Al irme lanzo contra tu fachada La última mirada de horror de una mujer Que te conoció hasta los huesos . También tengo una maldición para ti. ciudad maldita. Me largo sin huir de ti. ¡Yo. Castillo que hormiguea de lobos-serpientes. No hay un solo lugar en ti Ni un solo órgano de tu salud Que no esté afectado de pequeña o gran podredumbre . Hospital-Capital. mujeres sin odio. Los rizos estirados. Tolerancia. Pero por otro lado. tú que quitas a las lágrimas la amargura de su sal. ¿Por qué la habría tenido que creer? ¿Por qué me tendrían que creer? ¡Han matado a mi hijo! ¡A comer! Un médico lo pone en su plato. ¿Sabes que este cementerio. Demasiado tarde para mí. gato coronado gris oscuro Que levanta tu embotamiento frío Entre la multitud temblando de inquietud Te odio. Es a ti a quien odio primero. Historias. me gustaría decirte. Había pensado vivir en el campo de mis queridos Que se extiende bajo tu protección . la mirada obediente en sus ojos redondos . Sería lo natural . convertirme en una trompeta rebelde. ¿Me oís? ¡No quieren creerme! ¡Ah! Dios. Rey ordinario. Y a este otro. desirritas las almas Ausencia de voz. Oh. fuera de tus murallas. Amenaza para el planeta. 20 21 . siniestra ley del frío. ¡Sordina! Tú que cepillas. Niños vírgenes de maldades. Ojalá pudiera. Te odio. yo te los traía Dóciles. pero no demasiado tarde para ti Ni para ti ni para nosotros . cuentos de mujeres . Con acentos intolerables para las orejas de los lobos . Envuelto con una sólida red de serenidad Mientras corren los grandes ríos Hinchados de cadáveres de niños Y en tus ojos córneos ningún reflejo . ¿Quién dice la verdad? Te odio. Todos enfriados por igual y terriblemente apaciguados. mis hijos muertos . yo tampoco oí nada . ¿realmente te vas? ¿Y adónde irás? la madre Voy… Voy a… Todavía no lo sé . cerda. Demonio que vierte unas gotas de aliento tibio En las altas trompetas de alarma Y convierte los ángeles voceadores totalmente en inaudibles . El imperio pertenece a las bestias . este país en el que vivís Está lleno de razas difíciles de imaginar . le pedía al verdugo Yo misma abastecía a las fieras Y les daba las gracias . Un apartamento de arcilla es lo que conviene A la madre que rechaza la fatalidad . Oigo cómo me llaman mis hijos muertos. dirán. sé mi invitada. cruelmente. Una morada en tu ciudad de muertos. Okupado por una amplia vanguardia de amigos de la libertad. a los gritos la nota aguda. gris Reyfriado. Habitado por los muertos más venerables. Frecuentado por los espectros más nobles. Quiero vivir junto a mis fantasmas . Cuídeme a los niños. Temible tormenta de fuerzas petrificantes. que ayer fue magnífico. Ay de mí que dejé demasiado tiempo Oh. Pues bien . Hermanos sin movimiento. No es verdad . Madres demasiado blandas junto a la almohada. Y ahora ¿dónde viviré? ¿Adónde van las madres que han perdido a sus hijos? (Entra el vigilante) el vigilante Entonces. ¿Qué te parece. Es verdad . Estandartes de indiferencias . Vuestros amigos son vuestros peores enemigos . con el cuello amablemente al desnudo. garganta vacía. ¡Temed las apariencias! Os lo aviso. A las lágrimas su vigilancia. Tengo una buena tumba para ti . ¡Cuidado. Te odio.LA CIUDAD PERJURA O EL DESPERTAR DE LAS ERINIAS HÉLÈNE CIXOUS Ahora lo sé y demasiado tarde Y no salvé a mis pequeños de tu trinchante . debo confesártelo. Saco de polvo que te aguantas sobre piernas de polvo. y a éste. Una madre golpeada a dos pasos de mí Quizás gritó y yo no la creí . padres sin desconfianza. demasiado. frío gris rey. Vigilad. vigilante? el vigilante Por un lado. mis corderos bajo tu custodia . madres! madres con retoños que una suerte ciega Todavía no os ha robado. Ese zumbido enorme de gusanos? el vigilante ¡Recobro la esperanza! No. ¿No temblarás viviendo con las piedras? la madre Las cosas van muy rápido . Pero lo que sí sé es que los muertos Nunca están tan muertos como uno cree. Han recibido en el oído El grito de guerra materno .LA CIUDAD PERJURA O EL DESPERTAR DE LAS ERINIAS HÉLÈNE CIXOUS Camaradas de la muerte. Voy a dar la mano a los que he perdido . amantes del aire libre. Entiendo que cambies de opinión. (Sonido de pasos) el vigilante Sí. ¿lo oyes? ¿Ese chirrido del despeñadero? la madre el vigilante Entonces entra . todo me da igual . ciudad tan segura de ti misma. Te vendré a buscar más tarde . Sueñan pasionalmente un asombroso porvenir . Tus vastas victorias no han aniquilado a la madre . el vigilante Ya bajo . sin coches. es él . algunos que viven ahí abajo. Estás en tu casa . ¡Aprisa! ¡Se caza! ¡Vete! ¡Vete! Escóndete entre los escondidos. la madre ¿Era él? ¿Ese sollozo en la piedra. Donde pastan mis corderos todavía hambrientos de la leche de la atención humana. Escena II (Entran el Letrado Brackmann y el Letrado Marguerre) letrado brackmann No . Lo que haré contra ti Todavía no lo sé . Los vientos se agitan. Por mucho que hayan descendido bajo tierra . Y que algunos que caminan y se mueven duros como el hierro sobre la tierra Están mucho más muertos que los que. En apartamentos elevados. Prefiero avisarte… Ahí. El dique. No estaré sola . Ya veremos . Éste es el país más allá del país . de pie bajo la tierra. Las banderas ondean . Y la Ciudad se precipita . Aquí se acaba la separación . la muerte. Pero que nadie cuente con que me vaya a esfumar . Toda una gloria humana rebelde al poder de la ciudad mentirosa. es normal . Los huéspedes de mi arca cada vez son menos . Ya nada sobre esta tierra hará estremecer La madre cuyos hijitos viven en una tumba . la madre ¡Silencio! ¡Escucha! ¡Ah! ¡Ya! ¡En la pista! ¿Oyes esos pasos? ¡Se busca! ¡Se tantea! Se olfatea . Mira a tu alrededor . Sabes que hoy se encuentra muy gravemente abandonado? Desde que el dique podrido Que levanta su cadalso podrido Por encima de nuestro campamento Deja oír día y noche Esos angustiantes crujidos en el techo celeste. atrasados proféticos. No hay duda. sin violenta circulación. el vigilante (Ella sale) Entonces serás bienvenida en mi ruda ciudad Sin carretera. ¿Sabe usted dónde se encuentran los niños Ezequiel? 22 23 . Los gritos del dique me dan fuerzas . la madre ¿Yo? Todo lo contrario .
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