En defensa del lenguajePedro Salinas Motivos ¿Por qué he escogido este tema? Si nos atenemos a esa propensión, tan frecuente hoy día, de considerar la especialización en una rama de estudios como requisito indispensable para poder hablar de cosa alguna, yo no debía hablar del lenguaje. No soy filólogo ni lingüista. Nunca he mirado el idioma desde la vertiente científica. Pero tres motivos coincidentes me llevaron a escoger este tema. Uno, el primero, la emoción sentida, después de varios años de residencia en país de habla inglesa, al encontrarme en un aire, digámoslo así, en un aire lingüístico español. Cuando se siente uno rodeado de su mismo aire lingüístico, de nuestra misma manera de hablar, ocurre en nuestro ánimo un cambio análogo al de la respiración pulmonar; tomamos de la atmósfera algo, impalpable, invisible, que adentramos en nuestro ser, que se nos entra en nuestra persona y cumple en ella una función vivificadora, que nos ayuda a seguir viviendo. Sí, he vuelto a respirar español en las calles de San Juan, en los pueblos de la isla. Y he sentido una gratitud, no sé a quien, al pasado, al presente, a todos y a ninguno en particular, gratitud a los que me dieron mi idioma al nacer yo, a los que siguen hablándolo a mi lado. EI segundo motivo no nace como el anterior de la intimidad de mi ser: procede de la observación, repetida en estos años últimos innúmeras veces, de un fenómeno que se me representa como universal dentro de los pueblos cultos, y es la intensificación de la atención concedida a la reflexión sobre la lengua. No ya en el aspecto científico, no; no aludo a los progresos de la filología y la linglüística, a los esfuerzos cada día más fecundos de los especialistas, que han hecho objeto principal de su vida el estudio del idioma; me refiero al creciente movimiento de la atención del público medio, en general del hombre no especializado, hacia el idioma. Excelente síntoma de nuestros días. Al hombre le preocupa su lengua. ¿Por qué será? ¿Por pura curiosidad intelectual, por urgencia desinteresada de su mente? No lo creo. Poder de la palabra Le preocupa por una motivación profundamente vital. Le preocupa porque se ha dado cuenta del poder fabuloso, y en cierto modo misterioso, contenido en esas leves celdillas sonoras de la palabra. Porque las palabras, las más grandes y significativas, encierran en sí una fuerza de expansión, una potencia irradiadora, de mayor alcance que la fuerza física inclusa en la bomba, en la granada. Por ejemplo, cuando los revolucionarios franceses lanzaron desde lo alto de las ruinas de la Bastilla al mundo entero su lema trino, «libertad, igualdad, fraternidad», estos tres vocablos provocaron, no en París, no en Francia, no en Europa, sino en el mundo entero, una deflagración tal en las capas de aire de la histotia, que desde entonces millones de hombres vivieron o murieron, por ellos o contra ellos; y ellos siguen haciendo vivir o morir hoy día. Ha percibido el hombre moderno, quizá un poco tarde, acaso todavía a tiempo, que las palabras poseen doble potencia: una letal y otra vivificante. Un secreto poder de muerte, parejo con otro poder de vida; que contienen, inseparables, dos realidades contrarias: la verdad y la mentira y por eso ofrecen a los hombres, lo mismo la ocasión de engañar que la de aclarar, igual la capacidad de confundir y extraviar que la de iluminar y encaminar. En la materia amorfa de los vocablos se libra, como en todo el vasto campo de la naturaleza humana, la lucha entre los dos principios, de Ormuz y Ariman, el del bien y el mal. Acaso sienten hoy muchos hombres que se les ha empujado al margen del derrumbadero en que hoy está el mundo, sino de un desorden. Hablar es comprender. a veces. Porque el individuo se posee a sí mismo. tan’trágicamente mundial? Que uno. y no de un orden. oír hablar a alguien que pugna. originales. en vano. Y todos deseamos. y comprenderse es construirse a sí mismo y construir el mundo. Luz que alguien en el aire oscuro lleva. Porque siguiendo esa luz. porque no supieron distinguir el poder de engaño. vieron que el espíritu es lenguaje y se hace por el lenguaje. a conocerle en sus fondos y delicadezas. no en su verdad. Todo depende de la recta o torcida intención del que la maneja. por las falacias deliberadas de políticos que envolvían designios viles en palabras nobles. para. la subversión de valores. la brutalidad. Porque si así fuera. En realidad. es decir. vivirse. Ojalá sea cierto que las gentes han descubierto ya. oídas sin discernimiento. afán al que apunta ese vocablo: nuevo. Esto es. de impropiedad en impropiedad. ¿No nos causa pena. se conoce. han aceptado el sonido de las palabras o. A medida que se desenvuelve este razonamiento y se advierte esa fuerza extraordinaria del lenguaje en modelar nuestra misma persona. ¡y a que costo!. el hombre contemporáneo se decidiría ya de una vez a cobrar plena conciencia de su idioma. la opresión de muchos por unos pocos. nunca en la imposición violenta de un conjunto de abstenciones de las facultades del hombre. Por eso quiero creer que ese notorio aumento en el interés por la lengua va más o menos oscuramente impelido por el deseo del hombre de no dejarse engañar. dándose golpazos. que a la muerte. el cainismo. sí. basada en una sucia jugada verbal. prevenirse contra todos los embaucadores de mayor o menor cuantía que deseen prevalerse de su inconsciencia idiomática para empujarle a la acción errónea. Porque no saben en verdad lo que significan. por el diestro manejo del espejuelo. vive a medias. se les atrae a la muerte. poco más. EI hombre conoce la facultad guiadora de la luz. ¡Cuánta desgracia ha caído sobre los humanos por ese tristemente célebre lema de Hitler: el «nuevo orden»! ¿Quién puede negarse a la seducción de esas dos palabras? Todos ansiamos superponer a las formas de vida que heredamos otras. el hombre que no conoce su lengua vive pobremente. su significación vaga y aproximada. el cazador. aun menos. implícita en esa jugada política. Es decir. de morir por lo que quiere y por aquello que le hacen creer que quiere a través de esas tropelias del lenguaje. tan henchidas de valor positivo. avanza a trompicones. sin un grado avanzado de posesión de su lengua. que al querer explicarse. dando por buena la causa que las echa al aire programáticamente. que con las palabras. vistas solo por un lado. El hombre se posee en la medida que posee su lengua No habrá ser humano completo. es decir. en formarnos. las unció el canciller teutón al servicio de la causa más siniestra que puede concebirse: de una guerra por cosas tan viejas como la tiranía. Pero he aquí que esas dos palabras. expresarse.por el uso vicioso de las palabras. como atrae al pájaro. por dar con las palabras. se aprecia la enorme responsabilidad de una sociedad humana que deja al individuo en estado de incultura lingüística. que nuestras adiciones al pasado se ajusten a él armoniosamente. sin pensar un momento en si corresponden ceñidamente o no a lo que presumen de representar. ante nosotros. nuestras. comprendidas a medias. Ya Lazarus y Steinthal. en la concordia de los espíritus. La palabra es luz. igualmente podemos arribar a lugar salvo. ya que sólo cabe orden en la aceptación voluntaria. y esa expresión sólo se cumple por el medio del lenguaje. ¿Qué ha sucedido en este caso. en su resón. ¿Adónde llega? Adonde quiera la voluntad del hombre que empuña el farol. expresando lo que lleva dentro. filólogos germanos. que se conozca y se dé a conocer. muchos. de ese modo. en una ordenación humana noble e inteligente. y sólo entrega al final una deforme semejanza de lo que hubiese querido decirnos? Esa persona . se han dejado engañar por insuficiencia de sentido crítico ante esas dos palabras. Porque las conocen remotamente en su más leve apariencia. a la par. se va tras ella. Una de las mayores penas que conozco es la de encontrarme con un mozo joven. El alma humana es misteriosa y en todos nosotros una parte de ella. tullidos de la expresión. No. en The Merchant of Venice.sufre como de una rebaja de su dignidad humana. de luz. Pero ¡que hermoso! Hombre que mal conozca su idioma no sabrá. parte de nosotros. es a la vez el símbolo y slavaguardia de su comunidad. a lo que es en el uso de las fuerzas de su cuerpo. los que lo recrean. Only my blood speaks to you in my veins. fuerte. convivida. ser precísamente contrario. lo que en él había desde dentro es el ardor de su sangre en las venas. you have bereft me of all words. Puede existir lo más hermoso de un alma sin palabras. Hasta lo inefable lleva nombre: necesita llamarse lo inefable. es decir. comprendida por los demás. en el seno de lo social. ágil. se transforma de pronto en un baldado espiritual. es reconocimiento y posesión de su alma. “¡Pobrecito!”. ni dónde se alegra. «No sabe dónde le duele». por ausencia de formas bellas. en su función más trascendental. El viejo consejo de Píndaro: «Sé lo que eres». esto es. Esto no es rigurosamente exacto. no materia. Y el lenguaje nos sirve de método de exploración interior. tantas veces callado en escondrijos aún sin habla de la persona. consentida. es decir. sus empujones a ciegas por las nieblas de su oscura conciencia de la lengua. Hay muchos. por torpeza técnica. lo que ha puesto de mejor en nosotros». Nos duele mucho más adentro. aprovechar lo que la naturaleza ha querido hacer de nosotros. cuando sea mayor. hablar de lonja: es liberación del hombre. Pero no llegará a tomar forma humana completa. dónde le duele. mancos. nos duele en lo humano. que ilustran esa paradoja de lo inefable: Madam. hay muchos cojos. porque ese hombre denota con sus tanteos. acaso. muchísimos inválidos del habla. y el lenguaje. pero hay una circunstancia que no debemos olvidar. “¿Hay algún instrumento más eficaz que la . no es técnica de comunicación. curtido en los ejercicios gimnásticos. aclarándonos más y más. dicen los mayores cuando ven a un niño que llora y se queja de un dolor sin poder precisarlo. Es el lazo más fuerte que une a sus miembros. con la que vamos iluminando nuestros senos oscuros. y es que el personaje nos cuenta que no tiene palabras. la visión de la hermosura le ha hecho perder el habla. de nuestra propia vida. No nos hiere su deficiencia por vanas razones de bien hablar. No lo sé. el más reciente de Goethe: «Sepamos descubrir. Todo está muy bien. “En el grupo social…la lengua desempeña un papel de importancia capital. casi no hay que hablar. los poetas. que no llega a ser completamente. La palabra es espíritu. Lengua y comunidad Sobre el valor del lenguaje para la vida del hombre en su comunidad. de su ser. se recata entre sombras. Podrán aquí salirme al camino los defensores de lo inefable. por tan sabido. Recuerdo unos versos de Shakespeare. pueden cumplirse tan sólo por 1a posesión del lenguaje. Los supremos conocedores del lenguaje. pueden definirse como los seres que saben decir mejor que nadie dónde les duele. que no sabremos nosotros encontrarlo. y que sólo porque las tiene sabemos que no las tiene. incapaz casi de moverse entre sus pensamientos. El ser humano es inseparable de su lenguaje. dueño de su cuerpo. Es decir. con su cuento de que lo más hermoso del alma se expresa sin palabras. cumpliendo ese deber de nuestro destino de conocer lo mejor que somos. en el ejercicio de las potencias de su alma. Me aconsejo a mí mismo una cierta precaución ante eso de lo inefable. pero que cuando llega al instante de contar algo. ya hablemos con nosotros mismos o con los demás. por medio de las palabras. no. Es lo que Unamuno ha llamado el secreto de la vida. de explicar algo. a sumarse a las bellezas acumuladas de la lengua escrita. el individuo y el tiempo. deben poder difundirse en seguida entre todos. Sí. Y un historiador. se nutre. pero no viven alejadas una de otra. Ahora nos referimos especialmente a la lengua escrita. nacen continuamente novedades . a otra persona. con mayor o menor conciencia. Pero es errónea por extensión desmesurada de una verdad: el aspecto social del lenguaje. cómo las dos se necesitan. sin cesar. en un lugar público. y es que según Vendryes ha dicho: “en la actividad lingüística de un hombre civilizado normal están en juego todas las formas del lenguaje a la vez”. la mano. pero los une algo superior al sentir de clase y nación. Sería insensatez oponer las dos formas del habla. Lengua hablada y escrita Pensemos ahora en otra cualidad del valor social del lenguaje. Hay una poderosa corriente de filología moderna que acentúa tan exclusivamente lo social del lenguaje. y de ella suben energía. el conjunto de todas las posibles formas de decir una cosa. Es una obra social que viene a inscribirse en el espíritu de cada individuo. lenguaje. porque perteneciendo las dos al espíritu del hombre. como una raealidad imponente. en palabra dicha. Sería imposible. aun cuando sea con acento distinto. o de un libro. un español acaudalado oye. lo más probable es que sienta el deseo de acercarse a él y trabar conversación. más que como la herramienta dócil del hablar. vamos a operar sobre él. o cubano. en distintas órbitas. De lengua hablada. la escritura acabaría en lengua muerta. Existe en virtud de una especie de contrato. En la relación del lenguaje. Frase que evidencia cómo el habla popular admira y envidia al habla literaria. su familiaridad con él. Lenguaje es comunicación. Henri Berr. escribirmos con cuidado. Si las dos lenguas se separan. a veces. dice Amado Alonso. Cuando escribimos se siente.lengua para asegurar la existencia del grupo?” escribe Vendryes. de dos naciones distintas. las lenguas hablada y escrita son diferentes. chileno. El idioma se le parece. en lo que tiene de exclusivo. Ya afirmó De Saussure que la lengua es una institución. han de reunirse siempre en la unidad del hombre. hablar su lengua. Igual sucede esto al poeta que al muchacho que empieza una carta a la novia. y toda educación como es debido debe ponerse como finalidad una integración profunda del lenguaje hablado y el escrito. y es su conciencia de pertenecer a un mismo grupo lingüístico. se fortifica. de traza modesta. la fraternidad misteriosa que crea el hecho de llamar desde niños las mismas cosas con los mismos nombres. Es ésta muy diferente de la hablada. Y de ésta. En suma. Así. que no ve en el hablar otra cosa que un fenómeno social. por mi parte. furezas instintivas del pueblo. Una lengua. con la que el que escribe tendrá que luchar hasta que halle su modo. Casi todo el mundo pierde confianza con el lenguaje. Porque la actitud del ser humano cuando escribe. la lengua escrita. en la calle. Son dos personas de clase social muy dispar. es distinta de cuando habla. y lazo espiritual. lo que llamaría yo la resonsabilidad ante la hoja en blanco. conforme a Delacroix. Si en una ciudad extranjera. hablamos casi siempre con descuido. Es el pueblo el que ha dicho: “Habla como un libro”. comunidad. apenas coge una pluma. no sé. de la escritura. vamos a elevar el lenguaje a un plano distinto del hablar. Y yo. distinguir si una frase feliz que está en mi memoria. la . la adquirí de unos labios. para aumento de su capacidad expresiva. su actitud psicológica. es un sistema fuertemente organizado que se impone a los parlantes como un conjunto de hábitos lingüísticos propios de una masa parlante. de la palabra impresa. me parece errónea. es porque percibimos que ahora en el acto de escribir. aciertos que. Técnica material. ha caracterizado a la humanidad en esta forma: la humanidad es mano y lenguaje. con nuestra personalidad psíquica más poderosamente que en el hablar. en toda sociedad bien organizada culturalmente. hablada en patois. . en dialecto. sin valor general.
Report "Aprecio y Defensa Del Lenguaje-Pedro Salinas"