Acebal Maidana Los EstLos estereotipos verbales y visualesereotipos Verbales y Visuales

March 24, 2018 | Author: rebeccafroy | Category: Stereotypes, Rhetoric, Perception, Image, Argument


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Los estereotipos verbales y visuales, continuidades y especificidades1 Prof. Martín Acebal Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo. Facultad de Humanidades y Ciencias Universidad Nacional del Litoral Universidad Nacional de Tres de Febrero Prof. Nidia Maidana Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo Universidad Nacional del Litoral Introducción El presente artículo propone una revisión de la noción de estereotipo en el lenguaje verbal y en el visual. En relación con el primero de ellos, el punto de partida consiste en la exploración de tres acepciones que ha recibido el término topos o lugar común, como recurso de la técnica retórica para la creación de argumentos, como uso repetitivo de una expresión verbal y como principio argumentativo que genera diferentes efectos conclusivos en el discurso. El estereotipo visual, por su parte, será estudiado en relación con la problemática de los códigos representacionales y perceptivos; como veremos, uno de los efectos del estereotipo es reforzar la interdependencia entre estos dos aspectos dentro de una cultura visual. Uno de los objetivos de este trabajo es hacer evidente que un abordaje complementario de la estereotipación verbal y la visual permite explicitar las continuidades, así como las diferencias, entre los lenguajes. Otro de los objetivos es demostrar la eficacia de un abordaje lógicosemiótico de esta clase de conceptos, en tanto permite integrar y establecer relaciones entre aspectos que, de otra manera, podrían pensarse en términos discretos o clasificatorios. Finalmente, el artículo propone una reflexión sobre la atención necesaria al momento de analizar piezas comunicacionales con elementos estereotipados, así como al producir piezas destinadas a cuestionar los estereotipos y a denunciar los efectos nocivos que pueden generar en el espacio social. El topos en la invención oratoria La noción de lugar o, en su forma griega, topos forma parte de un conjunto de instrumentos constitutivos del arte, en tanto tekhné, de la retórica, desarrollados para la elaboración de un discurso persuasivo. Su primera formulación corresponde a Aristóteles, quien la inscribe primero en marco de la dialéctica y luego en el de la práctica retórica. Los lugares o topoi pueden definirse como enunciados muy generales que colaboran a la invención de los argumentos persuasivos. En este sentido, forman parte de una serie de procedimientos destinados, como dirá Barthes (1985 [1993]: 121), a transformar fragmentos brutos de razonamiento en un pieza oratoria persuasiva. Aristóteles reconoce dos clases de lugares: a) los comunes, susceptibles de ser aplicados a cualquier discurso; b) los especiales, relacionados con temas y ámbitos particulares (fundamentalmente con los tres géneros de la retórica: epidíctico, judicial y deliberativo). Los comunes pueden ser enumerados también según una formulación más moderna, como es la que 1 El presente artículo se encuentra disponible en la publicación digital Arqchile.cl, Portal de Arquitectura de la Comunidad Regional Latinoamericana (www.arqchile.cl/publicacion_acebal.htm/). Septiembre de 2010. 1 ofrece Perelman y Olbrecht-Tyteca (1958 [1989]). Estos autores mencionan: el lugar de la cantidad, el de la cualidad, el del orden, el de lo existente, el de la esencia y el de la persona. Si tomamos como ejemplo el de la cantidad, su enunciación podría ser la siguiente: algo vale más que otra cosa por razones cuantitativas. Rápidamente se reconoce el nivel de abstracción que el enunciado supone: ¿qué es ese algo? ¿cuál es la otra cosa?, y, lo que es más importantes, ¿qué es lo que se va a cuantificar? Esta vaguedad es lo que le hará decir a Cicerón que los lugares o loci, en latín, son “«como las letras para la palabra que es necesario escribir»”, a lo que agregará Barthes, “un cuerpo de formas privadas de sentido en sí mismas, pero que concurren al sentido mediante selección, combinación, actualización” (1985 [1993]:135). Los lugares comunes constituyen, así, la pura posibilidad para el surgimiento de un argumento persuasivo, el cual no puede tampoco funcionar hasta que no es puesto en forma por uno o varios topoi, loci o lugares. Los lugares especiales consisten en esa primera actualización de la que hablaba Barthes, el pasaje de la pura posibilidad a la de un enunciado capaz de dar forma a un argumento. Lo anterior puede pensarse en el siguiente ejemplo: LUGAR COMÚN: LUGAR ESPECIAL: topos de la cantidad relacionado con temas y ámbitos particulares algo vale más que otra cosa es preferible el apoyo de la mayoría por razones cuantitativas al de la minoría Formulación abstracta. Pura posibilidad para la formación del argumento Actualización primera. El apoyo es in-formado cuantitativamente Pero esta actualización sólo es posible por la intervención de un determinado contexto, que funciona como un criterio para la selección, la combinación y la consecuente actualización. Por esto es que Aristóteles relacionaba a los lugares especiales con los tres grandes géneros de la retórica griega, esto es, los tres grandes ámbitos institucionales en los cuales el uso persuasivo de la palabra era necesario. En el ejemplo que hemos dado, la actualización parece posible en el contexto de la asamblea, contexto político del género retórico deliberativo. Además de esta contextualización primera, cabe decir que en tanto dimensión formal de los argumentos, los lugares son sensibles a las valoraciones formales presentes en ese contexto, esto es, a las estéticas disponibles en un momento dado. Así, Perelman y Olbrecht-Tyteca reconocen en el clasicismo un lugar (especial) formulable de la siguiente manera: es preferible lo que es más duradero y más estable, a lo que es menos. El enunciado, dependiente del lugar de la cantidad, todavía conserva su generalidad -no se especifican los términos comparados-, pero ya se produjo una primera actualización que arrancó al topos del sinsentido o la trivialidad: el tiempo y la estabilidad aparecen como aquello que puede ser cuantificado. Para estos autores, una selección diferente ocurriría según una estética romántica, la cual seleccionaría el topos de la calidad para la construcción de sus argumentos y acentuaría así el valor de experiencias, relaciones y construcciones por su calidad antes que por su durabilidad; la estética romántica contrarresta de este modo lo que una mirada más clásica consideraría, en clave cuantitativa, efímero. En relación con nuestro ejemplo, no es difícil imaginar que el ámbito deliberativo clásico o el género político más contemporáneo también ha desarrollado sus propias estéticas. Así, nuestro enunciado todavía general como es preferible el apoyo de la mayoría al de la minoría puede analizarse como una selección del topos de la cantidad según una estética a la que podríamos llamar, con todos los reparos que el término demanda, populista. El topos y su cristalización en el cliché Además de su uso productivo en ámbito retórico, los lugares también han sido entendidos como actualizaciones en existentes cristalizados: formulaciones repetitivas y comunes que durante el S. XIX adquieren la denominación de cliché y, en la actualidad, de estereotipo. Ambos términos comparten la misma connotación peyorativa y crítica actual. El término cliché, para designar a expresiones verbales desgastadas, surge al establecerse un paralelismo con un nuevo procedimiento de la imprenta diseñado a media- 2 Es posible.” (en Amossy y Herschberg 1997 [2003]:16). La TAL consiste en una refutación de cierta concepción tradicional de la argumentación según la cual el movimiento argumentativo supone dos pasos independientes: en primer lugar. la que por entonces ofrece la tecnología y el incipiente surgimiento de las industrias culturales. logra ponerse en evidencia que la argumentación está determinada por las elecciones lingüísticas. El topos como garante de la argumentación Uno de los últimos usos del término topoi corresponde a Oswald Ducrot y Jean-Claude Anscombre en los años 80‟. que son informativamente equivalentes. sin dudas. entonces. no se le atribuye a la lengua ningún rol esencial en la argumentación. XIX consistente en la reproducción masiva de un modelo fijo. en esta concepción. una expresión como “El artículo hace una presentación sencilla de la teoría” habilite conclusiones como “Es conveniente para los alumnos” y “No conviene citarlo como fuente”. mejor. de una producción discursiva en la que prima la eficiencia antes que la búsqueda estética y la eficacia persuasiva. aún resta explicar para estos autores qué es lo que permite que. no autorizan la misma conclusión. De Gourmont consideraba que el cliché representaba la materialidad de la frase y el lugar común. la cual propicia toda forma de repetición. la prensa escrita. en cierta medida. (…) deberíamos castigarlos con mano más firme. el lugar común deja de ser una herramienta formal en la elaboración del proceso productivo y. de la literatura de folletines.implica la verdad o la validez de la conclusión C. sustituto de los caracteres móviles. Es desde este punto de vista que la reflexión sobre el lugar común y el estereotipo en la cultura contemporánea necesita atender a los procesos de fijación discursiva que realizan los medios masivos de comunicación de hoy. capaces de instaurar expresiones y usos lingüísticos en grandes sectores de la población. a aspectos cuantitativos relativos a su repetición. en segundo lugar. es decir. por ejemplo. creativo de la actividad discursiva. que transforman en clichés sus procedimientos. vinculados a los desarrollos tecnológicos que permiten la puesta en circulación de los discursos. Para esto es que Ducrot y Anscombre postulan el concepto de topos. así como en la relación que mantiene este desarrollo con la producción discursiva y su puesta en circulación. la suposición que hace el sujeto hablante de que el hecho F –y no su representación lingüística. su recurrencia en diferentes discursos. la publicidad.. el topos o. TAL). En este sentido. En esta nueva acepción. En la misma época se emplea también para designar al negativo fotográfico del cual se podían obtener un número indefinido de copias (Amossy y Herschberg 1997 [2003]:15). multiplicando tanto la igualdad (esto es. quienes lo inscribieron dentro de lo que se llamó la Teoría de la Argumentación en la Lengua (en adelante. que parece un „cerebro anónimo‟ y de los imitadores de los grandes escritores. el lugar común se vuelve sensible a las necesidades de un consumo masivo. El lugar común y el cliché aparecen. Sin embargo. la indicación que realiza un enunciado argumento A de cierto hecho F de la realidad. entonces. cuando es posible demostrar que dos de esos enunciados que realizan el mismo señalamiento de un hecho factual. El lenguaje de la prensa también está en la mira. se valen de los clichés para cubrir una demanda de lectura cada vez mayor a partir de lo cual contribuyen a su difusión y fijación.dos del S. Todo esto hace pensar en la estrecha relación que establece este nueva noción con el nivel desarrollo tecnológico de la cultura en el cual pretende estudiarse. Ahora bien. El término recoge la tradición aristotélica (Ducrot y Anscombre 1988 [1994]:217) y en su formulación general alude a un principio argumentativo que permite el paso del argu- 3 . Como señala Ducrot (1988:66). la trivialidad de la idea y lo vinculaba con la reproducción masiva: “No nos hemos ocupado lo suficiente de los malos escritores. Un actividad representativa de esta capacidad de los medios la constituye. Ya hacia finales del XIX R. La literatura de folletín. La tesis central de esta teoría consiste en afirmar el carácter inherentemente argumentativo y no informacional de la lengua.. para asociarse a su materialización en concretos existentes. las mismas palabras expresan la misma idea). como la de equivalencia (palabras similares expresan una misma idea) (Block de Behar 1973 [1992]: 83). establecer continuidades entre la reproductibilidad de fórmulas lingüísticas. sin embargo. Como hemos visto en este desarrollo.” (2003: 160) 4 . Este filósofo y lógico inglés define al garante (warrant) o la garantía como aquella ley o regla que permite el paso de los datos (grounds) a las conclusiones (claims). cultural. compartidos por una comunidad lingüística más o menos extensa. mejor. la posibilidad de relacionar los dos primeros enunciados que acabamos de mencionar se debe a que el hablante presupone la existencia de un topos que establece que lo sencillo es conveniente para los aquellos que se están formando. Existencia (por fundamento) y Valor (por intepretante). Junto con esta cualidad. Como puede verse. forma habilitante. entre expresiones idiomáticas y argumentación. dos gradaciones. por ende. en el marco de la TAL. como las paremias y los proverbios. Lo que presentaremos a continuación es una sistematización e integración de los diferentes aspectos o acepciones del topos que hemos desarrollado en esta primera parte del artículo. y se transformó en la instancia habilitante para el surgimiento de concretos argumentos. Dicha metodología parte de la noción triádica de signo propuesta por Charles Sanders Peirce (CP 2. también ha sido desarrollada por De Creus (2005). con cierta intensidad dentro de la escala gradual. 4 Dice Guerri: “El cambio de terminología se propone también con el objeto de disponer de expresiones más descriptivas de las relaciones internas del modelo y. Ducrot reconoce dos más. Desde un punto de vista lingüístico-argumentativo. fundamento (por algo) e interpretante (para alguien). y que (…) sirven para la construcción arbitraria de representaciones ideológicas. Por esto. “ponen en relación dos escalas. como serían las frases genéricas. parte de la operación de construcción metodológica que realiza el nonágono semiótico consiste en la modificación de la terminología original por otra que se considera más operativa y transpolable a diferentes objetos de análisis. esto significa que debe ser considerado válido para una multitud de situaciones análogas (1988:72). Como es sabido. Por otra parte. esto es. Como puede verse.” (1995:301). la noción de topos ha alternado y superpuesto su función de forma y de contexto de los discursos. los topoi son graduales. La relación entre refranes o. Para esto. Desde un punto de vista retórico permitió dar forma a razonamientos crudos. cualidad que compartiría. los exis4 tenciales o materiales y los valorativos . el signo admite así un primer abordaje en el que se despliegan los problemas formales.2 mento A a la conclusión C. En este 3 sentido. lejos de anular el formal lo incorporaba en su carácter general y su trascendencia a situaciones análogas. Así. entre las que establecen una correspondencia (…) monótona” (Ducrot.228). La siguiente operación consiste en recuperar el principio de recu- 2 La noción de garante está tomada de Stephen Toulmin (1958 [2007]). a una vez. El topos funciona como un garante (Nicolet 1993) entre A y C. 3 Anscombre plantea una relación entre topoi y refranes. Así es que Guerri junto con Magariños de Morentin (1984: 195) renombran la tríada peirceana con los términos Forma (por representamen). 1988:73). más prácticas para su aplicación como modelo descriptivo y operativo de los procesos cognitivos y proyectuales. es decir. el topos argumental también comparte rasgos con estas nociones y puede asociarse a cristalizaciones igualmente repetitivas. cada uno de estos tres aspectos son nombrados por Peirce como representamen (en alguna relación). Por una parte. Lo que Ducrot llama la “aprehensión argumentativa” de una situación consiste en la elección de un topos que habilitará determinados encadenamientos y cancelará otros. argumentar tiene el mismo grado de repetición y de falta de innovación que la frase hecha . A esto es a lo que Ducrot denomina la “banalidad” y el carácter “anti-poético” de la argumentación (1988:72). la noción funcionó como el contexto ideológico presupuesto por el hablante para el encadenamiento de sus discursos. denominada nonágono semiótico (Guerri 2003). Síntesis y sistematización: el ordenamiento lógico-semiótico de los aspectos del topos La noción de topos nos permite revisar cualquier reificación o sustancialización de las nociones dentro del par forma / contexto. el topos es general. Y la representación lingüística lo que hace es evocarlos. dado que se considera a estos últimos como una materialización de características lingüísticas de una clase mayor. Así el topos puede pensarse. hacerlo entrar en una determinada categoría. los topoi no aspiran a una irrefutabilidad. sino que hacen manifiesto su carácter parcial. entonces. y así inscribir a esa situación en el contexto de un determinado sistema de creencias. nos valdremos de una metodología de análisis lógico semiótica. práctica económica-tecnológica y estrategia político-argumental de los discursos persuasivos. Otro tanto podría decirse del lugar como cliché o estereotipo. con la acepción de topos o de estereotipo trabajada en el apartado anterior. Pero este funcionamiento contextual. Anscombre dirá que son “principios ideológicos. Tal como lo señala Anscombre (1995:303-306). Y.247. etc. uno existencial. despliega sus propias tríadas (Tabla 1). dice Guerri: “Puede construirse de este modo un cuadro de doble entrada que da cuenta de los distintos aspectos de cualquier signo y de su compleja e interactuante estructura conceptual. FORMA Lugares especiales. y tecnologías para fijación de frases hechas Estéticas presentes (clasicismo/ romanticismo. tres aspectos: uno formal. En este sentido. actualizaciones según temas o ámbitos específicos. VALOR Sistemas de ideas disponibles en una comunidad o en grupos particulares. Segundidad Forma de la Existencia Existencia de la Existencia Valor de la Existencia Prácticas discursivas. del orden. 2. Este primer desarrollo de la tríada del signo ya fue señalado por Peirce y las agrupó en sus tres tricotomías (CP 2. correspondiente al topos retóricooratorio. Necesidades de circulación masiva Terceridad Forma del Valor: Existencia del Valor: Valor del Valor: V. EXISTENCIA Actualización Mat. uno valorativo. EXISTENCIA V. si todo puede ser pensado como signo. uno de los aportes centrales del nonágono semiótico es el de representar en el plano las interrelaciones y la interdependencia lógica de los nueve subaspectos en que puede de analizarse un signo.244. por el principio de recurrencia antes referido. de la cantidad. VALOR Primeridad Segundidad Terceridad Posibilidad Actualización Necesidad.rrencia planteado por Peirce para el signo y para cada uno de los aspectos de que lo componen. Estrategias de uso del topos: normativas. Concretas frases hechas. El mismo no debe entenderse como una mera clasificación de entes agrupables en clases de objetos. correspondiente al cliché o frase hecha. En relación con esto. podríamos tomar el correlato de la Forma (la lectura horizontal de la tabla) y decir que: dado un repertorio de lugares comunes posibles (FF). frase hecha o estereotipo como un signo que despliega. Necesidad o Ley Tabla 1: Nonágono semiótico del Topos: organización lógico semiótica de sus componentes Si buscáramos discursivizar uno de los posibles recorridos del cuadro. clichés fijados en una comunidad discursiva Contrastación con otros discursos E. Así. concesivas y paradójicas o cuestionadotas. etc). Posibilidad Lugares comunes. 2.” (Guerri 2005: 28) De acuerdo con este planteo. FORMA E. cada uno de los aspectos del signo también lo puede ser. según el criterio o la necesidad establecida por un determinado géne- 5 . podemos comprender al topos. cada uno de estos aspectos. Géneros retóricos. de lo existente. correspondiente al principio argumentativo o garante. a su vez. Ley Primeridad Forma de la Forma: Existencia de la Forma: Forma del Valor: F. Topos garante de la argumentación y generador de un efecto conclusivo. en principio. F.250). se actualiza uno de ellos (EF). de la cualidad. sino como un diagrama que organiza las relaciones de un proceso semiótico. entonces. Y por último se les pedía que identificaran cada una de estas identidades sociales con los retratos. si ante una serie de retratos de grandes filósofos (cuyo aspecto se desconozca) y de regulares pero atractivos pedagogos. Más allá de lo antes sugerido acerca de las diferencias entre lo verbal y lo visual. En 1923. en mostrar a 258 estudiantes universitarios del Dartmouth College nueve retratos aparecidos en las noticias de la edición del 15 de diciembre de 1924 del Boston Herald. en primera instancia. sino en términos argumentales. en los productos análogos elaborados por el lenguaje o los lenguajes visuales. a los discursos verbales. al vice-presidente de la Federación Norteamericana del Trabajo. como lo es el de Stuart Rice en un artículo de 1926. la significación de las palabras no se explica en términos informacionales (en este caso. Así. Así. En dicho artículo. Junto con estos comentarios. visuales) de determinados sectores o roles sociales. nos interesa rescatar de ese experimento el modo en que la estereotipación todavía aparecía como un problema que reunía. Esto es. en este sentido. Mientras el primer término remite directamente al proceso revolucionario de toma del poder en 1917. el argumento. 5 Más allá de resultados que hoy pueden parecernos simpáticos . o se encuentran estrechamente ligados. Luego se les indicaba que entre los retratos había: un contrabandista. a una persona arrestada por contrabando (de alcohol). finalmente. 6 . el cual será aquí calificativo además de “visual”. un senador de los Estados Unidos. identificativos). el segundo remite a una institucionalización de dicho proceso y al modo en que el nuevo gobierno establece sus relaciones internacionales. una estrategia cuestionadora de la frase hecha debería poder hacer evidente las elecciones formales. Los retratos mostraban al entonces Primer Ministro de Francia. materiales y valorativas asociadas a ella. El experimento pretende demostrar la existencia de estereotipos sobre la apariencia (esto es. el cual funciona como macrocriterio de las decisiones tomadas a en la totalidad de los correlatos. por ejemplo. de los comentarios realizados sobre el topos o frase hecha del lenguaje verbal. El primer problema que se presenta es de orden terminológico. a un productor de alimentos y al senador de Pensilvania. en el segundo caso. pero utiliza para su identificación el código lingüístico. sumamente hipotética. correlacionarla con una estética diferente. Del estereotipo verbal al visual: En esta segunda parte propondremos una proyección. el modelo permite anticipar las relaciones de los correlatos entre sí. al embajador soviético en París.ro retórico (o discursivo) o una determinada estética (VF). Así. a través de una exploración somera sobre las problemáticas del “estereotipo visual” buscaremos recuperar muchas de las observaciones ya señaladas en la primera parte. el término “bolchevique” probablemente haya activado por ese entonces valores y. un cronista político. nos referimos al de “estereotipo”. se le pidiera a una persona común que los ordenara por mérito e inteligencia. Tal como lo planteaba la Teoría de la Argumentación en la Lengua. un bolchevique. valerse de recursos de puesta en circulación alternativos y. Downey señalaba que. La solución que hemos propuesto es la de actualizar un término que hemos deslizado en la primera parte de este trabajo como equivalente a los antes referidos. como también identificar algunas particularidades del funcionamiento de la estereotipia en el lenguaje visual. al Interventor Adjunto de la producción de papel moneda. más provocativos que rigurosos. uno de los lugares lógicos más relevantes en el análisis lo constituye el Valor del Valor o. representaciones visuales bastante diferentes de las que pudo sugerir “embajador de la URSS”. A su vez. es posible encontrar un trabajo más sistemático. por los encadenamien- 5 Como por ejemplo el hecho de que la misma cantidad de entrevistados que reconoció al senador de Pensilvania como tal lo identificó también como “bolchevique”. esto es. habilitar conclusiones opuestas o diferentes a las sugeridas por las expresiones estereotípicas. en especial al primero. a un integrante de United States Steel Corporation. un líder laboral. el autor describe un experimento diseñado para mostrar la existencia de estereotipos acerca de la supuesta apariencia de personas de varios tipos sociales o con una función social definida (Rice 1926: 268). en el primer caso. lo que es más importante. En este sentido. las primeras reflexiones sistemáticas acerca de la estereotipación no ofrecen una clara distancia entre lo verbal y lo visual. El experimento consistía. en términos de Peirce. sincréticamente. cuestione lingüísticas. los segundos ocuparían seguramente los primeros puestos (y agrega que Condillac y Comte caerían al final de la lista). a un antiguo gobernador de New York. dos productores y un financista. las expresiones “frase hecha” o “topos” son términos que remiten directamente. visuales y psico-sociológicas. un primer ministro europeo. El estereotipo visual en sus tres aspectos sígnicos. y una segunda que realiza la atribución de valores o de prejuicios sobre este rol o estatus. Umberto Eco señala el carácter parcial de la actividad representacional que realiza esta clase de signos. ¿Dónde se encontraría el error? 7 .e. de su aspecto icónico y representacional. los valores son selectivos y tendientes a una mayor univocidad. la estereotipación visual. cuya puesta en circulación y fijación garantiza su eficacia. al igual que la estereotipación lingüística. presumably based upon the features portrayed. Y luego agrega: “[el contrabandista] Es mostrado en un pesado sobretodo con el cuello levantado. parece ofrecer tres aspectos intervinientes: uno de carácter formal y posibilitante. no aporta mayores comentarios sobre la aparente facilidad que ofrecía la fotografía del contrabandista de licor para los participantes del experimento. los elementos que reconocemos inmediatamente (y que retenemos en la memoria) son las rayas y no la mandíbula. i. En esta primera observación. estereotipia lingüística y visual se encuentran unidas al intervenir la doble codificación en el experimento. Nos gustaría en esta segunda parte ofrecer algunos elementos teóricos para poder desentrañar lo que en la segunda década del siglo veinte aún se encontraba enmarañado. Existencia: El estereotipo visual requiere de concretas materializaciones visuales. parte de la cual se debe al mismo proceso perceptivo: “Seleccionamos los aspectos fundamentales de lo percibido basándonos en códigos de reconocimiento: cuando vemos una cebra en el parque zoológico. by the stereotype of the supposed occupational or social status held in the mind of the examiner. le otorga un rol determinante a algunos elementos y vuelve irrelevantes otros. jui6 cios que él considera incorrectos . el estereotipo visual despliega así tres problemáticas integradas: Forma: El estereotipo visual establece una percepción selectiva de la imagen. Este es un aspecto que intentaremos abordar esquemáticamente en esta segunda parte de nuestro trabajo. al igual que en sus otros aspecto. que se parece vagamente a la del 6 Dice Rice: “Estimates of intelligence and craftiness.tos que es capaz de activar o de obturar.” (Rice 1926: 270. El estereotipo visual y los códigos de reconocimiento: En su capítulo destinado al signo icónico.. Rice señala que el mayor número de identificaciones correctas son las que refieren al contrabandista de licor. Valor: El estereotipo visual produce efectos de sentido asociados sobre el individuo o la clase que representa. Lo que parecía dejar de lado el experimento de Rice es el hecho de que junto con esos encadenamientos o topoi que activaba la elección lingüística también se actualizaban imágenes mentales asociadas al término. are in reality influenced by the supposed identity of the portrait. anteojos de carey y un cigarro fuertemente agarrado entre sus labios. El contrabandista de licor: En un momento dado de su artículo. Ante todo. que colabora al proceso de reconocimiento y atribución de rol o estatus social. Para esto debemos reflexionar sobre algunos aspectos específicos del lenguaje visual y. otro de carácter existencial y actualizador y otro de carácter valorativo o regulador. Dada la preocupación del autor por el modo en que estos estereotipos anticipan. la primera visual. la traducción es nuestra). en especial. en muchos casos. una gorra.” En este cita se ve claramente la existencia de una doble concepción de la estereotipación. Así. se leen en los objetos que escogió para rodearse. Al parecer existía una determinada tribu que conseguía ver el planeta Venus a la luz del día. que ya hemos visto.” (Kanizsa 1980 [1986]:47) 8 . sino de un recorte y construcción histórico-cultural del campo visual. ¿cuál es el criterio que establece la selección de determinados aspectos y descarta otros? Y. no es siempre una condición suficiente para que esa característica se dé también en el plano fenoménico. provoca por nuestra parte reacciones favorables o desfavorables. la actitud que adoptó respecto del mundo y del ser exterior. En palabras del autor: “…la existencia de una característica determinada en el plano físico (por ejemplo la forma.” (1978 [1986]: 39) A la vez. la segmentación del campo [visual] se daría también en función de nuestras experiencias pasadas. nosotros no lo logramos pero que atendiendo a la cantidad de luz emitida por el planeta Venus durante el día realmente no es inconcebible que algunas personas puedan detectarlo.” (1974 [1986]:175) Frente a este código de reconocimiento se establecen algunas preguntas: ¿Cuáles son los elementos que entran en el orden de lo perceptible y de los cuales se seleccionan algunos?. podríamos decir que cada cultura recorta del mundo empírico un conjunto de objetos fenoménicos. como lo planteaban.asno o del mulo.” (Kanizsa 1980 [1986]: 20) Las condiciones de las que habla el autor han sido objeto de debate por las diferentes teorías que han buscado explicar la percepción. (…) La reconocibilidad del signo icónico depende de la selección de estos aspectos. también nosotros podríamos lograrlo si tuviésemos la vista entrenada. Cuando expuse el problema a astrónomos profesionales me respondieron que. perceptibles posibles. reproducimos a continuación una interesante experiencia referida por Lévi-Strauss. ese campo visual culturalmente coordenado no está formado por objetos o cualidades indiferentes. nos la evoca. cuya individualización y análisis constituyen la tarea fundamental del estudio de la percepción. Probablemente. cosa que además de increíble me parecía materialmente imposible. sobre los elementos que entran en el orden de lo perceptible. en su obra Mito y significado: “En la actualidad (…) hacemos un uso considerablemente menor de nuestras percepciones sensoriales. ¿de qué modo intervienen las representaciones visuales ya resueltas en la construcción de esta percepción selectiva? En relación con la primera de estas preguntas. y todo indica que los marineros de esa época eran perfectamente capaces de ver el planeta Venus a la luz del día. la concepción que el sentido común tiene de la cuestión: la relación no directa entre el plano físico y el fenoménico y la interdependencia entre las cualidades percibidas. en cierto sentido. los aspectos seleccionados por el código de reconocimiento no parten de una capacidad perceptiva biológica. Gaetano Kanizsa sugiere considerar dos aspectos que refutan. el código de reconocimiento. frente a esta pura posibilidad perceptiva cultural. informacional y objetiva.” (1948 [2006]: 30) De este modo. su carácter. Sea que lo pensemos desde un punto de vista innatista. en los paseos que hace. de manera que se preferiría la constitución de objetos con los cuales tenemos familiaridad. y por eso los gustos de un hombre. al menos como lo plantea Eco. el tamaño o el color de un objeto). antes que formas desconocidas o poco familiares. efectivamente. por último. parece establecer relaciones puntuales entre temas. los cuales adquieren así el carácter de rasgos pertinentes: las rayas de la 7 “…en igualdad de las demás condiciones. Sin embargo. En última instancia. los teóricos de la Gestalt. y consideremos que la percepción está condicionada por determinados principios o leyes. sea que incorporemos a esta perspectiva el componente empírico de la “experiencia pasa7 da” . en los colores que prefiere. Más tarde consulté viejos tratados de navegación pertenecientes a nuestra propia civilización. Sobre esto. Dice Merlau-Ponty: “…las cosas no son simples objetos neutros que contemplamos. Es necesaria la presencia de otras condiciones. Cuando me disponía a redactar la primera versión de Mitológicas me topé con una cuestión en apariencia extremadamente misteriosa. cada una de ellas simboliza para nosotros cierta conducta. objetos o cualidades y sus aspectos perceptivos. debemos entender que la percepción no es un fenómeno transparente y sin mediaciones. su carácter representacional. Dicha actualización se establece por la existencia. objetos o cualidades percibidas. Ahora bien. éste es. de aquél considerado como “inherente”. los bigotes de Hitler. Los rasgos pertinentes son. así como la construcción de una representación que se difunde. Se trata de las valoraciones sociales que vuelven a determinados elementos perceptivos irrelevante y a otros inherentes e insoslayables para el proceso de reconocimiento. han identificado y aislado rasgos pertinentes del objeto representado. y una de cuyas características centrales es prolongar su existencia en el tiempo (Zunzunegui 1989 [1995]: 22). es decir. en este sentido. objetos. los lentes de John Lennon. ya que permite su fijación y asegura la continuidad temporal. Conjunto de elementos que entran en el rango de “perceptible” en una determinada cultura y sociedad. como un proceso previo a la representación que. Forma de la Forma: Existencia de la Forma: Forma del Valor: Campo visual cultural e históricamente coordenado. Lo anterior puede desarrollarse de la siguiente manera (Tabla 2) en lo que constituiría el primer correlato de un nonágono semiótico del estereotipo visual. el cigarro entre los dientes del contrabandista de licor. La relación entre objeto o cualidad y aspecto perceptivo pertinente constituye la estética perceptiva y el concreto código que regula la selección.cebra. la segunda a la de la actualización y la tercera a la necesidad o ley que funciona como criterio de selección de la actualización. un doble carácter: por una parte idea. en un momento dado de la historia de una determinada sociedad. etc. a su vez. Las rayas de la cebra. etc. el estereotipo visual. para constituirse así en imagen material. esos rasgos perceptivos pertinentes que señaláramos en el punto anterior necesitan ser capturados y materializados. La primera columna corresponde a la posibilidad. a los que Eco (1974 [1986]) llama „artificios gráficos‟. actualizaciones de algunos aspectos perceptivos culturalmente disponibles. De este modo. En este caso. relativo al aspecto formal-posibilitante del signo. influenciado por coordenadas culturales. se instala y se acepta en el cuerpo social. la melena del león. el primer correlato. en su aspecto perceptivo. se desarrolla en la mente de los sujetos. objeto o cualidad necesarios para su reconocimiento. Estéticas perceptivas que regulan las relaciones de correspondencia entre un determinado tema. Tal como señalamos en el caso del topos. nos desplazamos hacia el segundo aspecto del estereotipo visual. Semejante pasaje es posible por la existencia en la cultura de ciertos mecanismos de traducción. el estereotipo visual comporta. Conjunto de “rasgos perceptivos pertinentes” asociados a un determinado tema. en la sociedad. por otra parte imagen. sostiene su eficacia en la existencia de códigos de reconocimiento que. sujetos. De este modo. El estereotipo visual y las prácticas representacionales Hasta aquí el estereotipo visual ha sido planteado en su instancia puramente perceptiva. dichas estéticas establecen expectativas acerca de los modos en que se perciben los temas. “insoslayable” para un eficaz reconocimiento. de determinados aspectos que se consideran inherentes a los temas. el bigote de Hitler. En palabras de Araujo Espejel: 9 . objeto o cualidad y determinado rasgo perceptivo. Resulta oportuno remarcar la idea de materialización en un soporte. Tabla 2: Organización triádica del correlato de la percepción de los estereotipos visuales Al interrogarnos sobre el modo en que se forjan estos códigos y llegan a constituirse en efectivos recursos cognitivos con los cuales los sujetos logran procesar su experiencia perceptiva y transformarla así en una experiencia cultural e ideológica. se presenta como sensible a las estéticas disponibles en el momento de la producción del signo. etcétera que se constituyen en objeto de representación. entre los elementos disponibles en el campo visual. entendida como la materialización en un soporte de ese fragmento del mundo perceptivo que el estereotipo recorta. mientras la selección de rasgos perceptivos y las imágenes mentales que éstos constituyen tienden a ser flexibles y cambiantes en su instancia mental. Pero. transcribimos un fragmento de John Berger: “…intenté dibujar a Bogena. Éstas quizás sean algunas de sus fotos más difundidas. las cuales se constituyen en sistemas de representación capaces de transponer la información perceptiva. cogí el menos malo de todos los dibujos y empecé a trabajar en él con colores. En términos materiales tecnológicos. Nunca lo consigo porque su cara es muy cambiante y yo no puedo olvidar su belleza…. el dibujo. bastaba con sacarlo fuera. En este proceso. por ejemplo. Como señala Eco: “…hay casos en que la representación icónica instaura una verdadera enervación de la percepción. En este sentido. No era la primera vez que lo intentaba. Tenía ahora su “parecido” en la cabeza: ya no tenía que buscarlo. queremos hacer algunas observaciones respecto a la imagen de John Lennon. citado por el autor). en una lectura crítica e ideológica podríamos reflexionar sobre los intereses que mueven a determinados sectores sociales a “fijar” una imagen visual estereotipada antes que otra en la memoria de una determinada sociedad. de acuerdo a lo planteado. ambos sólo logran fijarse de modo más definitivo una vez que pasan por el tamiz de los sistemas de representación. Además es posible advertir que se produce una mutua influencia entre rasgos perceptivos. el marcado es nuestro) 10 . contribuyen a permear y condicionar la percepción de modo tal que impactan posteriormente en la selección de rasgos perceptivos pertinentes. 8 La idea de “fijación” está retomada del uso que hace Magariños de Morentin (2008) de la noción de Fuster (1995: 101. por distintos artistas. el detalle y la pose. en las cuales es posible detectar una serie de regularidades. en tanto logran instalar imágenes que se constituyen como modelos de representación. Aplicaba a veces la pintura espesa como un ungüento.Al irse ellos (Bogena y Robert). sobre todo en las sociedades actuales: la capacidad tecnológica de reproducir las imágenes. acrílicos. dibujándolo. elegir y simplificar los datos percibidos en el entorno y por otro lado. la existencia de esta imagen en la memoria visual constituía la condición cognitiva de posibilidad del reconocimiento de los estereotipos visuales.“La imagen (resultado definitivo de todas sus especulaciones) será producto. de una particular forma de ver. en el caso de los estereotipos visuales. la pintura. por un lado. El papel se rasgó. el retrato empezó a parecerse a algo.25.” (2000: 275) Es decir. la cara empezó a prestarse. como una veleta que gira al cambiar el viento. de tal manera que tendemos a las cosas según las han venido representando los signos icónicos. dice Magariños de Morentin que la permanencia de una imagen en la memoria puede ser el producto de su relativa reiteración o constricción psicológica u operación voluntaria de fijación. sistemas de representación e imágenes materiales estereotípicas. lo que contribuye a la multipli8 cación de las mismas y que. garantiza aún más su fijación social . de la forma con la que esta información es traducida gráficamente conformando sucesivamente los diferentes estratos de la realidad representacional. proveniente de la neurología. En relación con esto. cobra relevancia la posibilidad de reiteración que ofrecen los medios actuales. En otro trabajo (Acebal 2003) hemos señalado que desde una perspectiva psico-semiótica. Así.” (2004: 24. De pronto. los sistemas de notación gráfica contribuyen a la exploración del nivel perceptivo visual proponiendo modalidades 9 de representación con sus respectivas posibilidades y limitaciones . como los que estamos analizando en este apartado. a esta primera observación general se le suma otro aspecto que entra en juego. Hacia las cuatro de la mañana.” (1974 [1986]: 180) Atendiendo a lo expuesto. tales como la toma frontal del retrato. En primer término la técnica fotográfica permite la materialización de su imagen y su reproducción masiva. las técnicas de reproducción. a sonreír a su propia representación. las sociedades disponen de diversas técnicas. la fotografía etcétera. 9 Para ilustrar lo que decimos respecto a la exploración que mediante sistemas de notación realizan los artistas en ese esfuerzo de transcripción de rasgos pertinentes. hippie. 11 . De ahí que es posible especular que una vez que la imagen estereotípica ha sido instalada y difundida socialmente por medio de la técnica fotográfica. es dable suponer que estas fotos provocan efectos de sentidos en los individuos que van más allá del Lennon biográfico. la cual se instala como estereotipo visual fuertemente adherido. egocéntrico. sin dejar de mantener el mismo grado de reconocimiento y su asociación con el plano de significación. A su vez. la presencia de los anteojos. suponemos. a valores ideológicos y sobre la que se han realizados innumerables operaciones de simplificación. En estos casos resulta oportuno señalar que la técnica empleada (la cual dispone de ciertos „artificios gráficos‟ específicos) influye posteriormente en la selección de los rasgos que se consideran pertinentes para dicho reconocimiento. La perspectiva. que se trabaja mediante líneas curvas. Así es como estas fotos no se vinculan con sentidos asociados al Lennon violento. se produzcan operaciones sobre estas imágenes que tiendan a su mayor simplificación. así como con los procedimientos de reproducción masiva. Además. peleador callejero. guarda las similitudes necesarias con la foto. pacifista. Quizás su imagen más emblemática sea la fotografía Korda de 1960. los estereotipos visuales se caracterizan por la economía de sus elementos. etcétera. al que jamás vieron personalmente. poseedor de una triste infancia. cómo se produce el pasaje de la fotografía a la representación gráfica. entonces. los fijan en una organización más estable y recortan determinados sentidos que se actualizan en la interpretación y excluyen otros. describe Rosa Montero en su libro Pasiones (2003: 147156). En ésta se retoman elementos que la técnica fotográfica fijó previamente y se traducen con un tratamiento extremadamente simplificado: el pelo. ciertos rasgos pertinentes. podemos pensar en cómo estas fotografías posibilitaron en miles de sujetos la asociación de una imagen con su referente. lo que permite realizar la comparación y la asociación. En ellas se encarnan los valores sociales a los que Lennon suscribía públicamente y por los cuales se lo reconoce como un ídolo popular: músico innovador. a su vez. adicto. detalles como la forma oval del rostro. y dos círculos unidos por un segmento para los anteojos resultan elementos suficientes para el reconocimiento. las características del cabello) se puede advertir la coincidencia de rasgos perceptivos pertinentes seleccionados por los distintos fotógrafos en distintos momentos de la vida de Lennon.La fotografía tiene la capacidad de otorgar a la imagen un alto grado de iconicidad. famoso. pose. a partir de las regularidades presentes en estas imágenes (toma. además. como señalamos más arriba. Vemos. excéntrico. que. resulta sencillo establecer las correspondencias entre las imágenes mentales que los respectivos fotógrafos tenían de Lennon y estas fotos que tomaron. Es por esto que podemos considerarlas estereotipos visuales: imágenes que recuperan. por lo cual. Y a la vez. por ejemplo. Otro ejemplo semejante es la difundida imagen de Ernesto (Che) Guevara. Dada su estrecha relación con los mecanismos de procesamiento eficiente de la información sensorial. mediante técnicas de reproducción. líder de la juventud. La primera problemática que surge sobre este punto atañe a la asociación entre estereotipo y prejuicio. hippie. líder de la juventud. sino por un determinado efecto de sentido que genera en los destinatarios. la mayoría de los auto- 12 . ni por una efectiva representación visual. Tabla 3: Organización triádica del correlato de la representación de los estereotipos visuales El estereotipo visual y sus efectos de sentido Al momento de referir el proceso de estereotipación de la imagen de John Lennon señalamos que además de proponer una representación visual esquemática del cantante. tales como músico innovador. y de la facilidad de su reproducción. el estereotipo también le atribuía determinados sentidos. de fácil reproductibilidad (según los sistemas tecnológicos para su materialización y puesta en circulación) y aprehensión. Forma de la Existencia Existencia de la Existencia Valor de la Existencia Sistemas de representación (que permiten diferentes grados de iconicidad y complejidad representacional). La eficacia representacional de los mismos dependerá de la simplificación de las imágenes. por lo que muchos de los comentarios que podríamos hacer en relación a él son compartidos por los estudios sobre estereotipación realizados sobre otros códigos. Valores de eficacia y eficiencia de la representación para constituir una imagen simplificada (según los sistemas de representación disponibles). Todo lo cual puede organizarse de la siguiente manera (Tabla 3) en lo que constituiría el segundo correlato de un nonágono semiótico del estereotipo visual. para constituirse en elementos fuertemente pregnantes.En síntesis: la materialización de estereotipos visuales depende de la transposición de rasgos perceptivos pertinentes mediante sistemas de representación y su reproducción mediante técnicas que posibilitan su materialización y circulación. Sin embargo. el estereotipo ya no se manifiesta por una percepción selectiva de rasgos pertinentes. En este sentido. En esta instancia. famoso. Este aspecto parece ser el menos específico en relación de con el estereotipo visual. Contrastación de estereotipos en relación a grados complejidad representacional y de reproductibilidad técnica. excéntrico. Técnicas de reproducción que permiten la materialización y posibilitan la circulación y difusión. Configuración de estereotipos visuales mediante la transposición de rasgos perceptivos pertinentes según sistemas de representación seleccionados. el estereotipo movilizaría representaciones y valoraciones generalmente negativas y despectivas sobre un determinado sujeto o grupo social. pacifista. En el marco del estudio de los efectos de sentido generados por un estereotipo visual (sea que los consideremos como una sensación. exhaustiva y coherentemente explicada. un contenido informacional o una pauta de conducta). un estereotipo visual es capaz de generar. en La Nature du préjugé (1954). El nonágono semiótico es un modelo que ordena y. Levinson y Nevitt Sanford. Este tema ha sido objeto de diferentes disciplinas y su exposición demandaría un desarrollo extenso.” (1997 [2003]: 39) La particularidad del estereotipo. así como los otros significados con los cuales se relaciona de un modo más o menos coherente. es decir la discriminación o el hecho de desfavorecer a un negro por su pertenencia a esa categoría. la separación que se propone entre los diferentes efectos de sentido posibles sólo tiene fines analíticos. atrayente o repulsiva. A esto se refieren Amossy y Herschberg Pierrot cuando señalan: “Esto no quiere decir que no exista ninguna relación entre nuestro comportamiento. Una reorganización de las mismas que nos interesa señalar aquí es la referida por Amossy y Herschberg Pierrot: “En los ‟60 se impuso una tripartición que luego de un breve eclipse reaparecería en los años ‟80. el sujeto (como los referidos acerca de Lennon) o el grupo. existencial o valorati10 vamente el signo. La primera de ellas se encuentra en la perspectiva llamada psicodinámica y lo que postula es la posibilidad de relacionar la tendencia a los prejuicios y a los estereotipos en los sujetos con el dinamismo psíquico y la estructura profunda de la personalidad. al menos. En este último caso. el interrogante sobre las posibilidades entre las cuales se ha seleccionado dicho efecto nos remite a las condiciones en las cuales surge el estereotipo. emocionales. elegida según un determinado criterio. sujeto o grupo. (…) Es decir que no son los atributos del grupo los que llevan a una actitud desfavorable respecto a éste. nuestra actitud respecto de un grupo y la imagen que nos hacemos de éste. la identificación y descripción de un estereotipo es apenas la primera instancia en el proceso de análisis lógico-semiótico que hemos utilizado como marco teórico de referencia.res dentro de las ciencias sociales se han preocupado por disociar estas nociones. De acuerdo con esto. En tal sentido. el afectivo. una determinada reacción destinada a generar un comportamiento de los destinatarios en relación con determinado objeto. estima que el estereotipo legitima a menudo una antipatía preexistente. en lugar de ser la causa de ésta. el estereotipo aspira a funcionar como un regulador de la conducta. finalmente. La descripción es el modo en que se nos manifiesta formal. compele a la organización coherente de una interpretación. pero de ninguna manera pretende clausurar las otras lecturas posibles de los signos estudiados. La personalidad autoritaria (1950 [2006]). Simplemente. Frenkel-Brunswik. Tal como hemos planteado a lo largo de este trabajo. Dicha tripartición establece una distinción entre el componente cognitivo (el estereotipo del negro). Según 10 Esto es. sino el rechazo a priori el que lleva a buscar justificaciones movilizando todos los estereotipos disponibles. en relación a su eficacia de sentido. parece responder a aspectos puramente cualitativos. mientras que el comportamental como el más pragmático. pasa por su capacidad para controlar la significación y orientar hacia una interpretación unívoca de la imagen. pero dicha manifestación puede ser plenamente explicada cuando es considerada como la actualización de una de las opciones posibles.(…) (1997 [2003]: 39) En una reorganización triádica peirceana de la tripartición. haremos una referencia muy general a tres propuestas diferentes destinadas a la explicación del surgimiento del estereotipo. sin tener en cuenta sus capacidades ni sus méritos individuales. placentera o displacentera. La obra clave de esta perspectiva es la desarrollada por Adorno. una determinada atribución de valores más o menos precisos acerca del objeto. podemos ver que el componente cognitivo se presenta como el más informacional. esta relación es a veces más compleja de lo que creemos. Gordon Allport. y el componente comportamental. situación o grupo. en cierta medida. el componente afectivo (el prejuicio o la hostilidad experimentada con respecto a él). hacia un determinado objeto. dicha estabilidad significativa no es otra cosa que la correspondencia en el plano valorativo de los aspectos esquemáticos y estables del estereotipo que hemos desarrollado en los dos apartados anteriores. y dado que esto constituye apenas un aspecto de los que pretendemos desplegar en este artículo. esto es. 13 . Como suele señalarse en estos casos. tres efectos de sentido: una sensación. Así. puramente formales. los sujetos pertenecientes a las culturas sometidas se ven obligados a realizar un proceso de reorganización de sus estereotipos de origen (en el caso de inmigrantes. frente a alguna clase de amenaza exterior. aquellos individuos que se han formado en un contexto familiar con una autoridad – generalmente paterna. una relación padre-hijo. Así. o lo valorativos. aunque deseables. si se quiere. cuya validez reside en hacer evidente la probable inadecuación del estereotipo. el más recurrente en la bibliografía. el sentido común. sea de sus esquemas perceptivos. de carácter fundamentalmente jerárquico. en especial en aquellas de aculturación. De un modo muy general. autoritario y explotador. destinado a la afirmación de sus sentidos originales y. En la segunda. La segunda perspectiva es de orden sociológico y considera que son determinadas condiciones sociales las que favorecen el surgimiento de los estereotipos. Frente a esta relación diferente con las representaciones y los valores más previsibles surgen dos actitudes posibles. las leyes. la actualización.” (1950 [2006]: 195) Sin duda que estos autores consideran la relevancia de los factores sociales en la formación del autoritarismo y de su aceptación. Tales criterios no son otra cosa que las estrategias que guían a los actores sociales a la construcción o al uso particular de los estereotipos. a los criterios según los cuales se pasa de la virtualidad a la concreción. Dicen los autores: “De este modo. Así. por ende. En su lectura más generalizada. En esta perspectiva. Finalmente. los estereotipos forman parte de la identidad social y cultural del sujeto (Amossy y Herschberg Pierrot 1997 [2003]: 49). los grupos tienden generar una actitud hostil y una imagen simplificada y despreciativa de los demás grupos. pero también reconocen la resistencia que estas personalidades pueden 11 ofrecer a los cambios sociales y la necesidad de atender también a esta perspectiva .atender a las necesidades. sociológicos y psicológicos de sus condiciones de surgimiento. y puede culminar en una filosofía política y en una perspectiva social que sólo dé cabida a un desesperado aferramiento a lo que parece fuerte y un desdeñoso rechazo a todo lo relegado a posiciones inferiores. pero aspira a señalar cierta limitación que ofrece su carácter rígido y unívoco. Una es la concesiva y la otra es la paradójica o cuestionadora. en suma. ineficaces para cambiar la estructura de la personalidad prejuiciosa. esto es. la estrategia reproductiva o normativa del estereotipo. esto es. b) el 14 . Esto explicaría que los estereotipos se forjen con mayor frecuencia en situaciones sociales polarizadas o. Fuera de este posicionamiento convencional del estereotipo. En la primera. explotación y deseo de dominio respecto a la pareja o a Dios. la reproducción de la doxa. puede derivar en una actitud de dependencia. esto constituye.aplastante son más propensos a adoptar una personalidad autoritaria y por ende. se despliegan otros posibles. pueden llegar a ser. Si las diferentes explicaciones para el surgimiento de los valores asociados a los estereotipos constituyen la instancia de la posibilidad y los más o menos precisos sentidos por él generados en los destinatarios. los estereotipos son entendidos como representaciones colectivas cristalizadas que juegan un papel fundamental en la cultura y en la cohesión de los grupos. el estereotipo visual se encuentra asociado a un uso puramente reproductivo. corresponde –en el marco de la lógica que hemos planteado en este artículo. tendiente a la fácil formación de prejuicios y estereotipos. y que las reformas sociales. en las situaciones de contacto cultural. la pieza comunicacional no pretende hacer un cuestionamiento al estereotipo. incluso las amplias y radicales. 11 Dicen estos autores: “Creemos que la comprensión científica de la sociedad debe incluir el estudio de los efectos que ésta produce en la gente. desde una perspectiva más antropológica y ligada a la psicología cultural. La relevancia del contraejemplo o la acumulación de usos cuestionadores de 12 este tipo puede llegar a generar una revisión del estereotipo en una comunidad o en un grupo particular .” (1950 [2006]: 199) 12 Vázquez Rodríguez y Martínez Martínez (2008) refieren tres posibles modelos sociocognitivos para la modificación de los estereotipos: a) el de contabilidad (el estereotipo se modifica por la sumatoria de la información contraria). a los comportamientos predecibles según los planteos antropológicos. tal como nos ocurría con el topos. sea de los representativos.estos autores. o también a los hábitos. en especial aquellas que presentan un determinado conflicto social. deliberadamente polarizadas. pero también las condiciones materiales y representacionales que han cristalizado al estereotipo. la pieza aspira a señalar cierta inadecuación o falta de correspondencia entre los valores comportados por el estereotipo y los que pretenden señalarse para el objeto de representación. por ejemplo) y una asimilación de los de la cultura que los “recibe”. las condiciones sociales. que demanden el surgimiento de una nueva categoría o tipificación que reemplace al estereotipo). objeto o tema.Antropológicas: representaciones colectivas cristalizadas. sino sumamente relevante. .Atribución de valores a un sujeto.Sociológicas: producto de situaciones sociales conflictivas. sujeto. objeto o tema. Las autoras también señalan la incidencia de los factores endógenos y exógenos en las posibilidades de intervención para el cambio de los estereotipos.Todo el desarrollo de este último apartado puede organizarse de la siguiente manera (Tabla 4): Forma del Valor: Existencia del Valor: Valor del Valor: Explicaciones de las condiciones de surgimiento y funcionalidad del estereotipo: Efectos de sentido generados por el estereotipo: Estrategias de uso posibles de los estereotipos: . . . . Cuestionadora o paradójica: denuncia o falsación del estereotipo. grupo.Reproductivas o normativas: promoción o reproducción de sus sensaciones.Sensaciones placenteras o displacenteras en relación a un sujeto. etc. . 15 . concreto. la empresa Dove presenta la siguiente imagen: de conversión (la información desconfirmatoria no debe ser mucha. grupo. y / o pautas de conducta. . grupo. objeto o tema. c) el de subtipos (la información contraria debe presentarse con ejemplos dispersos. valores.Pauta de conducta en relación con un sujeto. Tabla 4: Organización triádica del correlato de la valoración de los estereotipos visuales El uso concesivo y cuestionador del estereotipo: el caso del modelaje femenino publicitario En una campaña publicitaria de una de sus cremas.Psicológicas: propensión de individuos con particulares estructuras profundas de personalidad. Concesivas o exceptivas: señalamiento de la inadecuación del estereotipo a un situación. debe poseer la fuerza necesaria para contradecir el estereotipo imperante). la pauta de conducta. El carácter concesivo de la estrategia se establece en que la pieza no pretende cuestionar la estereotipación del modo de representar la belleza femenina en el código publicitario. Es una pro-edad. en un plano interpretativo. la metonimia proyectaba sus cualidades a otro grupo. Algo diferente ocurriría con la campaña realizada por la empresa italiana de ropa Nolita. e incorpora otros. la sinécdoque reempla- 13 El texto de la publicidad se desglosa en dos partes. la campaña presentaba piezas como la siguiente: La joven que aparece en la fotografía tiene 27 años y pesa alrededor de 31 kilos. un grupo etario diferente. Sin embargo. La primera: “¿Demasiadas manchas de edad para estar en una publicidad anti-edad?”. en especial mujeres jóvenes. la pieza visual logra sugerir el estereotipo y modificarlo. La belleza no tiene límite de edad. esto es. en especial la posibilidad de proyectar estos valores a otro grupo etario. Una nueva línea para el cuidado de la piel de Dove. conserva ciertos valores. nuevamente. la puesta en valor de la belleza de este grupo etario sólo es posible si aceptamos al estereotipo como modo de representación adecuado de la belleza femenina. al menos en el ámbito publicitario. La segunda: “Pero esto no es una publicidad anti-edad. la percepción selectiva del estereotipo y los valores que moviliza no son recuperados para su proyección hacia otro grupo social. en la iluminación de la fotografía y el fondo de estudio. a la compra del producto. en el caso anterior. Así. el fondo neutro de estudio y la mirada de la modelo se dirige a la cámara. sino que considera que esos mismos esquemas representacionales (o al menos muchos de ellos) pueden proyectarse sobre una clase o grupo diferente. en este caso. en un segundo nivel. una pose actuada. Y esta proyección sólo es posible si se posee el estereotipo. la imagen logra reconstruir la sensación placentera del estereotipo original. las cualidades seductoras del estereotipo del modelaje publicitario se proyectan sobre este otro grupo. por una operación retórica de metonimia. finalmente. entre 13 otros elementos) y lo modifica al reemplazar a la modelo joven por una de mayor edad . por medio de cierta estetización de un cuerpo que difiere de los parámetros culturales de la belleza. Así.” 16 . que sufren anorexia. Por medio de una operación retórica. sino para ser objeto de denuncia. Con fotografías de Oliverio Toscani (conocido por sus polémicas imágenes para la empresa Benetton). en la pose adoptada. podemos precisar la operación concesiva. Tal como señalamos en el caso anterior. y si recuperamos la tríada que organizaba los posibles efectos de sentido generados por el estereotipo. En relación con este último punto. si el dominio de estas imágenes nos guían en la percepción selectiva de la imagen. Dicha campaña estaba destinada a la denuncia de los efectos nocivos de la publicidad en las personas. la interpretación de la imagen demanda el dominio del estereotipo visual del modelaje femenino publicitario: nuevamente hay una desnudez sugerida. el componente persuasivo del estereotipo no parece variar demasiado: la imagen sigue aspirando a la imitación de sus destinatarios y. A la vez. Pasamos así de una estrategia concesiva a una de cuestionamiento. en este caso. como los relativos a la seducción y a la mujer como objeto de deseo. si disponemos de imágenes semejantes en nuestra memoria visual.La publicidad se vale del estereotipo visual del modelaje femenino publicitario (identificable en la desnudez de la modelo. de displacer y de dificultad para sostener la mirada. destinadas más acentuar las diferentes propuestas argumentales en relación con el estereotipo.za la causa (el estereotipo en su uso convencional o normativo) por la consecuencia (la joven cuya imitación del estereotipo la ha llevado a la anorexia). son reemplazadas por 14 valores asociados a un cuerpo enfermo.php). la imagen también actualiza las fotografías obtenidas por los primeros fotógrafos llegados a lo campos de concentración nazis. Presentamos. que a reponer con precisión los efectos de sentido generados por la puesta en circulación de estas imágenes. demanda un uso cuidadoso de sus esquemas. por último. interrelaciones entre los aspectos involucrados. Muchos de estos significados.com/viewtopic. Algunas instituciones relacionadas con la lucha en contra de la anorexia han señalado que este modo de presentar a la enfermedad lejos de generar el rechazo y una toma de conciencia. de atracción y hasta cierto poder seductor y seguridad. su funcionalidad originaria parece capaz de volver y de generar ambigüedades no deseadas. como los de indefensión. la atracción y el placer que genera el estereotipo –en términos de sensaciones primarias. 15 Una de las intervenciones en el foro dice en relación a la joven: “She looks great! At the naked picture where she grabs her leg you can see that there is practically no fat on her thighs and butt! I'M JEALOUS!!!” (http://board. tal sería el caso del recorrido ascendente. 15 remiten a foros de internet en los cuales los participantes expresan su admiración por la joven . es posible preguntarse hasta qué punto el estereotipo cede a las manipulaciones que pretenden hacerse de él. a una persona en situación de debilidad y precariedad . la reunión de los tres correlatos del estereotipo visual desarrollados (Tabla 5). sólo consigue un refuerzo de la imitación y la identificación. La reunión y la presentación en el cuadro de doble entrada facilita la comprensión de la recorridos explicativos diferentes a los que hemos propuesto aquí. Así. Por último. 17 . Retomando nuevamente la tríada de la significación. vemos que la crítica al estereotipo parece alcanzar los tres estratos del efecto de sentido. probablemente también estereotipadas. El nivel valorativo informacional. a la vez que permite imaginar 14 Sin dudas. Más allá de estas interpretaciones.son reemplazados por una sensación de repulsión. Como prueba de esto. En el mismo sitio también es posible encontrar imágenes de jóvenes con contexturas físicas semejantes que adoptan poses de modelaje. la pauta de conducta que llevaba a la imitación y el consumo parece reemplazarse por la del rechazo y la no identificación con la modelo. son recuperados de estas otras imágenes. que pondría en evidencia el modo en que una necesidad social o una determinada significación va forjando su representación visual y adquiriendo así precisión y corporeidad. especialmente en las campañas de concientización o de denuncia sobre temas polémicos. Todo hace pensar que la rigidez del estereotipo. que le atribuía a la mujer las cualidades de objeto de deseo. hasta finalmente instalarse (no sin violencia ni conflictos) en la memoria visual de una sociedad. motivo de rechazo en la búsqueda estética y de parodia y cuestionamiento en otros ámbitos.ringsworld. En cuanto a la opción metodológica.Psicológica. Terceridad V. existenciales y valorativos y reconocer las relaciones lógicas que se establecen entre ellas. Primeridad F. el nonágono semiótico posibilitó pensar estas nociones en tanto signos.Sociológicas. EXISTENCIA Actualización Técnicas de reproducción. Si bien no lo hemos planteado en el inicio de este artículo. VALOR Primeridad Segundidad Terceridad Posibilidad Actualización Necesidad.Pauta de conducta. con lo cual pudimos desbrozar la problemática en aspectos formales. Cuestionadora o paradójica. . Ley Forma de la Forma: Existencia de la Forma: Forma del Valor: Posibilidad Campo visual cultural e históricamente coordenado. Forma del Valor: Existencia del Valor: Valor del Valor: Explicaciones de las condiciones de surgimiento y funcionalidad del estereotipo: . Segundidad Forma de la Existencia Existencia de la Existencia Valor de la Existencia Sistemas de representación Configuración de estereotipos visuales mediante la transposición de rasgos perceptivos pertinentes según sistemas de representación seleccionados.Antropológica. . lo que permitió establecer el pasaje de las formulaciones elaboradas para el lenguaje verbal al campo de lo visual. Estéticas perceptivas que regulan las relaciones de correspondencia entre un determinado tema. consistió en asociar los términos „topos‟ / „lugar común‟ con „estereotipo‟. Efectos de sentido generados por el estereotipo: Estrategias de uso posibles de los estereotipos: . a lo largo de estas páginas. Eficacia y eficiencia de la representación. pero a la vez nos permitió discriminar cuestiones específicas de cada uno de estos lenguajes. objeto o cualidad y determinado rasgo perceptivo. Conjunto de “rasgos perceptivos pertinentes” asociados a un determinado tema.Atribución de valores. entonces. . de carácter epistemológico. Fácil reproductibilidad y aprehensión. FORMA E. que tanto la 18 . . Hemos observado. EXISTENCIA V. Tabla 5: Nonágono semiótico del estereotipo visual: organización lógico semiótica de sus componentes Conclusión Hemos abordado.Sensaciones Reproductivas o normativas. recuperando algunas características comunes de las reflexiones sobre el lenguaje verbal susceptibles de ser extendidas al visual.F. FORMA E. VALOR Necesidad o Ley . Contrastación de estereotipos con otras representaciones disponibles. una de las primeras opciones. el verbal y el visual e inscribiéndola en diversos marcos teóricos. las nociones de „topos‟ o „lugar común‟ y „esteriotipo‟ analizando la operatividad de la noción aplicada a dos lenguajes. Concesivas o exceptiva. objeto o cualidad. Madrid: Taurus. contextualizamos la problemática en relación a los códigos que rigen la cultura visual: el código perceptivo. U. pp. Barcelona: Paidós. (1995) “Semántica y Léxico: topoi. 2. (1988) “Argumentación y topoi argumentativos”. estereotipos. Este recorrido.2003. (1974) La estructura ausente. C. que da cuenta del pasaje de la percepción común a la representación. Eco. sistemas de representación. el código de la representación. pp 273-280. así como en los distintos aspectos que del lenguaje verbal se han ocupado en Occidente las ciencias del lenguaje y de la comunicación. a formas de reproducción tecnológicas propias de la modernidad.. Buenos Aires: Siglo XXI. Iniciamos nuestro recorrido refiriéndonos a la idea de „topos‟ o „lugar común‟ que la Retórica Antigua postuló para el lenguaje verbal. en Arte. Ducrot. usos repetitivos de formas lingüísticas cristalizadas que vinculamos. Buenos Aires: Eudeba. que posibilita la asociación de las imágenes con diversos campos de significación. Ducrot. individuo y sociedad. L.html Adorno. 25. (1997) Estereotipos y clichés. luego planteamos una segunda acepción. y frases genéricas. El dibujo y la visión”. Introducción a la semiótica. 1994. y contrastamos esto con los estudios respecto de los lenguajes visuales. en EMPIRIA. 63-84. (1988) La argumentación en la lengua. M. De ahí que se considere que cierto imperialismo lingüístico invade el terreno de los estudios sobre el lenguaje visual. pensamos en el topos como garante de la argumentación. cómo responde al orden cronológico asociado a la gestación de las ideas. no es arbitrario y vemos en la pervivencia de algunos conceptos. (2004) El tamaño de una bolsa. Levinson. y técnicas de reproducción. Frenkel Brunswik. (1973) El lenguaje de la publicidad. Anscombre.. (2000) “La percepción. sitio dirigido por Juan Angel Magariños de Morentin. (2003) “El nonágono semiótico: un ícono diagramático y tres niveles de iconicidad” en deSignis 4. Nº12. 19 . y Herschberg A. pp 157-174. de 1926. Madrid:Gredos. 1. Guerri. O. que fundamentalmente se desarrollan a lo largo del siglo XX. pp 155-200. 1993. http://www. pero que a la vez impactan e influencian la percepción común. 1993. En este caso.archivosemiotica. visuales y psico-sociales. más allá de que las reflexiones sobre el lenguaje verbal resultan insumos propicios para pensar lo visual. J-C. Barcelona: Lumen. Amossy R. R. Si pensamos en la Retórica como la primera disciplina que emprende una sistematización de los estudios del lenguaje articulado y que cuenta con una tradición de cerca de 2500 años. J. Tal es el caso del estudio respecto de estereotipo realizado por Downey en 1923 y que hemos citado como así también el de Rice. esto es. O. Araujo Espejel. y finalmente el código cognitivo. realizado mediante diversas técnicas de „traducción‟. en Archivo Virtual de Semiótica . la de topos asociada a la idea de cliché. Nº 12. D.ar/Acebal. en Revista Española de Lingüística.com.. otro de carácter existencial y actualizador y otro de carácter valorativo o regulador. J-C.esterotipación lingüística como la visual comprenden tres aspectos que las conforman: uno de carácter formal y posibilitante. Berger. donde puede observarse un abordaje en que se trabajan indiscriminadamente aspectos lingüísticos. 297-310. Referencias Bibliográficas Acebal. W. En cuanto al estereotipo visual. por analogía. I. Nevitt Sanford. donde era considerado un recurso posibilitante del surgimiento de argumentos concretos. y Anscombre. nuestro análisis comprendió básicamente la relación de nexo o puente entre el código perceptivo y representacional para lo cual apelamos como ejemplificación a algunas imágenes fuertemente estereotipadas. (1985) La aventura semiológica. R. E. que está en la base y posibilita hipotetizar respecto de cómo se construye la percepción común. T. por último en el marco de la TAL. 1986. en Lenguaje en Contexto. (1950) “La personalidad autoritaria”. (2003) “Los estereotipos visuales y las imágenes estereotipadas”. Barthes. Revista de Metodología de Ciencias Sociales. veremos la ventaja que mantienen los primeros respecto de los segundos y lo incipiente que son los estudios sobre el lenguaje visual. julio-diciembre 2006. Block de Behar. Topoi. G. (2008) “Factores implicados en el cambio de estereotipos: variables endógenas y exógenas”. J. Rice. Universidad Nacional del Litoral. en Anales de Psicología. en Journal of Personnel Research 5. Universidad de Murcia. VII-VIII [A. Ch. C. (2008) Semiótica de los bordes. Buenos Aires: Alianza. (dir) Lieux communs. (1926) “«Stereotypes»: A Source of Error in Judging Human Character”. Percepción y pensamiento. La nueva retórica. S. 1989. 24. Merleau-Ponty. 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