Aborto y Subjetividad Elina Carril

March 28, 2018 | Author: Betty Ocaño | Category: Birth Control, Abortion, Subjectivity, Woman, Condom


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     IX JORNADAS DE ACTUALIZACIÓN DEL FORO DE PSICOANALISIS Y GÉNERO DE LA ASOCIACION DE PSICOLOGOS DE BUENOS AIRES “Crisis en la Post-Modernidad: el sistema de géneros y las nuevas subjetividades” Noviembre 2009- Buenos Aires   Aborto y  subjetividad. Un  estudio  uruguayo  Lic. Elina Carril Berro*  Lic. Alejandra López Gómez**    *Psicóloga, psicoanalista. Profesora Adjunta e investigadora en la Cátedra Libre en Salud Reproductiva, Sexualidad y Género y en el Área de Psicoanálisis, Facultad de Psicología de la Universidad de la República. Miembro Habilitante y docente de la Asociación Uruguaya de Psicoterapia Psicoanalítica. Publicó numerosos trabajos sobre género, subjetividad, psicoanálisis y salud reproductiva en revistas y libros a nivel nacional e internacional. **Psicóloga. Profesora adjunta, investigadora y coordinadora de la Cátedra Libre en Salud Reproductiva, Sexualidad y Género de la Facultad de Psicología, Universidad de la República. Investigadora activa del Sistema Nacional de Investigadores (SNI, Agencia Nacional de Investigación e Innovación). Miembro del Consejo del Global Forum for Health Research desde 2004. Fundadora y directora ejecutiva de MYSU, Mujer y Salud en Uruguay. Cuenta con numerosas publicaciones a nivel nacional e   internacional en temas de salud sexual y reproductiva, género y derechos.    Cátedra Libre en Salud Reproductiva. para que una mujer opte por interrumpir un embarazo que no desea. como los sentidos que cada mujer en particular le asigna y los modos singulares con que lo procesa psicológicamente.  Se desarrolló un estudio de tipo cualitativo en base a entrevistas en profundidad con mujeres que transitaron por la experiencia de aborto voluntario. situación al margen de lo legal. han sido escasamente explorados por quienes investigan en este campo. generando efectos de diferente tipo en las mujeres (y/o parejas) que por él transitan. han documentar la existencia de un “síndrome post aborto” (SPA) como intentado el efecto universalmente mórbido del aborto. Quienes se oponen al aborto o a su despenalización. así como mostrar cómo la ilegalidad del aborto y los sentidos y representaciones que tienen de la maternidad. 2007).sobre los aspectos médicos. decide arriesgarse a los efectos de la clandestinidad exponiendo su salud y su vida. de justicia social o de violación de los derechos reproductivos. sociales y éticos del aborto voluntario. políticos. banal e inocuo para quien lo practica. desde posiciones radicalmente opuestas aparece en ocasiones un discurso que minimiza la experiencia. En ambos casos se toma como sujeto a la práctica en sí (Rosenberg. A partir de una investigación que realizamos con mujeres residentes en Montevideo de diferentes edades y niveles educativos 1 (Carril. jurídicos.  1 2    . lo que redunda entonces en representaciones de un acto producto de la pura racionalidad. cinco años y hasta diez años). El universo de estudio incluyó a mujeres montevideanas jóvenes y adultas comprendidas entre edades de 20 a 59 años y de diferentes niveles educativos. 2004) y queda por fuera la consideración tanto de las significaciones sociales sobre el aborto.En el Uruguay como en el resto de la región el aborto es un proceso y una práctica que se dirime y se resuelve en la clandestinidad. queda relegado o ausente el conocimiento y la posterior reflexión acerca de las condiciones de subjetivación de las mujeres en este contexto y en los efectos psicológicos que eventualmente resulten de la práctica. Sexualidad y Género. centraremos nuestra exposición en torno algunas de las dimensiones subjetivas presentes en los embarazos no intencionales. construyen sus                                                                “Aspectos psicológicos del aborto voluntario en contextos de ilegalidad y penalización. ocultamiento y aislamiento. Una mujer que aborta lo hace porque no encuentra otra salida ante un embarazo no planificado o no deseado y al hacerlo. Facultad de Psicología con el apoyo de la Comisión Sectorial de Investigación Científica (CSIC). pero las dimensiones subjetivas y los posible efectos psicológicos derivados del aborto inseguro. Prácticas y significados en mujeres uruguayas”. que hubieran vivido la experiencia personal del aborto voluntario en los últimos 10 años (considerando los plazos de un año. con sus características de secreto. Son numerosos los estudios –tanto en el ámbito uruguayo como en el regional.Existen razones más poderosas que la sanción jurídico – legal y la censura moral. Cuando en contextos legales restrictivos se considera el aborto voluntario fundamental o únicamente como un problema de salud pública. de la Universidad de la República. López. 2 3 El peso de las representaciones de género y las                                                              El estudio incluyó la exploración de los significados acerca de la maternidad. algunas no los usaron o lo hicieron de forma incorrecta. quiebres en la representación hegemónica de la mujer como madre. la coexistencia de representaciones sociales que ya no definen a la mujer por la maternidad. CSIC.significaciones sobre el aborto y determinan el mayor o menor grado de sufrimiento psíquico. El agenciamiento de otras prácticas fuera del ámbito doméstico. instituyen nuevas significaciones imaginarias produciendo cambios en la subjetividad. 3  En el estudio recientemente concluido”Aborto voluntario. se enfrentan a una maternidad posible o para algunas. sociales y relacionales en que desarrollan sus vidas. También las significaciones que cada mujer le da al aborto. el embarazo. la inseguridad. López. y en algunos casos les fue difícil negociar el uso del preservativo con el compañero sexual. condiciona el posicionamiento subjetivo frente a la maternidad. la anticoncepción y el deseo/no deseo de hijos. Pero cabe preguntarse cómo a pesar de que la mayoría de las mujeres -en este estudiopusieron en evidencia un discurso informado y articulado acerca de los métodos anticonceptivos. Las condiciones de clandestinidad ligadas a la penalización determinan por su parte. a pesar de las campañas que promueven su uso para prevenir las Enfermedades 3    . han producido fisuras. (Carril. 2 El embarazo no intencional El embarazo no deseado o no intencional es un hecho frecuente en mujeres en edad reproductiva de cualquier condición social y una situación crítica que obliga a tomar una decisión. la consistencia o fragilidad de estos cambios y el grado de tensión entre el mandato atávico y las nuevas ofertas identitarias. el diseño de una escenografía subjetiva signada por el secreto. están en relación directa con lo anteriormente expuesto y emergen de un contexto en que el aborto es ilegal y por lo tanto clandestino y punible. Las transformaciones sociales y culturales. que han tenido desde mediados del siglo XX a la mujer como la gran protagonista. 2007-2009) encontramos que el uso del preservativo sigue siendo problemático. la condena moral y el temor al riesgo. imposible. Por la función biológica que permite la reproducción quienes no han buscado voluntaria y concientemente un embarazo. escasas barreras para su acceso y una relativa apropiación de sus derechos sexuales y reproductivos. que toman la decisión de abortar o seguir adelante con el embarazo. con otras más tradicionales. Por lo tanto. el temor. la perspectiva de los varones”. Es desde este posicionamiento subjetivo y/o de las condiciones económicas. por mi desorden. Además de estas reacciones. nunca me había pasado. la no infalibilidad de los métodos anticonceptivos y/o los factores subjetivos asociado a su uso incorrecto. desorganizando el proceso de pensamiento y poniendo en marcha mecanismos de defensa: de negación y/ o de renegación y de regresión. estos embarazos pueden expresar la                                                                                                                                                               de Trasmisión Sexual en particular el VIH-SIDA. Irrumpe en la existencia de las mujeres y subvierte su continuidad actual. toma el desafío de redefinir los términos que dominan la constitución de nuestra subjetividad. o por el desequilibrio de poder en las parejas heterosexuales. Pero al mismo tiempo.” (2004:s/p) El embarazo se significa generalmente como un hecho inesperado... Estas opiniones fueron más frecuentes en varones mayores. así como las dificultades para el no uso o el uso incorrecto de anticonceptivos. 4    . ponele que la primera bueno. 22.” (Noelia. no alcanza para comprender la realidad de los embarazos no deseados. porque si me dijeras: no me tuve que hacer ninguno. los relatos de las mujeres dejaron en evidencia por un lado la Martha ambivalencia respecto al autocuidado y la posibilidad de un embarazo y por otro. sí. pero ya el primero había sido patético. yo sentí mucha rabia por mi descuido. NEM) “Me dio rabia conmigo misma.relaciones de poder entre varones y mujeres.. se puede decir que por boludos los dos. pueden iluminarse si tomamos en cuenta la fuerza de las motivaciones inconscientes. concientemente no buscado y al que no puede darse un sentido. ta. 47. Como dice Rosenberg:   “El feminismo. Así lo expresan algunas de las entrevistadas: “Por boluda.. que no aprendas. no sé. que develar qué deseos inconscientes nos implican y actúan en nuestras prácticas sexuales cuando éstas son potencialmente fértiles. Pero este eje de análisis que resulta imprescindible para comprender tanto las prácticas sexuales (heterosexuales) como los comportamientos reproductivos en clave de derechos. la segunda y la tercera sí. quienes asocian el uso del preservativo a una merma del placer sexual.me dio mucha rabia ¡qué pelotuda!” (María. se prefiere pensar que los embarazos involuntarios ocurren sólo porque los anticonceptivos fallan. imponen posicionamientos y prácticas diferenciadas respecto a la sexualidad que inciden en estas conductas y permiten comprender la no utilización de medidas preventivas de ITS. NEA) Estos casos de embarazos no buscados o no intencionales que ocurrieron como consecuencia del no cuidado. generando montos de ansiedad muy grandes. que era chica… pero si ya sabía lo que hacía… Pero ya ahí. Parafraseando a Spinoza: “nadie sabe lo que puede el inconsciente”… En muchas ocasiones. por efecto de la inercia de los valores patriarcales. el aborto era considerado fundamentalmente una cuestión de mujeres. así como también lo eran la gravidez y el parto. la información. La observación. se dan a conocer las primeras fotografías de fetos vivos in utero que permiten a través de una cámara registrar imágenes del proceso de formación de un ser humano (Lamas. la educación y el acceso universal a métodos anticonceptivos como componentes centrales de una estrategia de prevención de embarazos no deseados/esperados. pero deberán pasar varios siglos más para que se teorice y se pueda ubicar el momento en que tiene lugar la animación del feto. cuando los movimientos feministas comienzan a realizar un trabajo de concientización y reivindicación que tiene en su centro los derechos de las mujeres y su capacidad para decidir qué hacer con su cuerpo. una forma de cumplir el destino establecido por sus madres y/o la expresión de una conducta punitiva por el ejercicio de la sexualidad (el embarazo como un castigo). El feto era representado como una especie de apéndice del cuerpo de la madre. y en muchos casos como parte de sus vísceras. Luego de la Revolución francesa. cada vez más detallada y documentada de la vitalidad del embrión ha dado pie al argumento de 5    . cuando empieza a equipararse el aborto con un homicidio. que sin “quererlo”. estos (u otros) significados están ocultos para la protagonista. el “futuro ciudadano” debería ser preservado y las mujeres comienzan a ser severamente castigadas por abortar. el Estado se constituye en el árbitro que define qué vida es más importante: ¿la de la madre o la del futuro niño/a? En épocas de escasez de recursos disponibles para las guerras y el desarrollo productivo de los nuevos estados. Entre los siglos XVII y XVIII el feto adquiere su autonomía gracias a los descubrimientos científicos y después de 1789. Como sea.confirmación de la potencialidad fértil. quiere. Es a partir de la diseminación en Occidente de la doctrina cristiana. 2003). Esta contradicción aparente. Precisamente cuando se trata de la condición humana. el diseño de las políticas no puede soslayar las dimensiones subjetivas implicadas en la sexualidad y la reproducción. Según Galloti (2004) este paradigma permaneció inalterable hasta los años 70 del siglo XX. Contemporáneamente a la lucha de las mujeres y a la paulatina incorporación del paradigma de Derechos Reproductivos.   El embrión-bebé-niño y la culpa En la Antigüedad. que escapa a la intencionalidad conciente deja en evidencia que el tema del aborto. ingresa en la esfera pública. no son suficientes para impedir que éstos se produzcan. una manera (vicaria) de terminar una relación afectiva. El feto como persona –y por lo tanto entidad separada de la madre. al óvulo fecundado. ¿por qué me mataste’”.es uno de los principales argumentos de los movimientos antiabortistas que apelan a una noción biológica que define que el hecho de estar vivo y tener el ADN propio de la especie humana.como un niño capaz de comunicarse con su madre. dejame vivir”. no me mates” o “mamita. obvio que no es legal. Un bebito que estaba enterito y que se ve que era un hermoso niño. inundaron las calles de Montevideo mientras tenían lugar los dos últimos debates parlamentarios. están diseñados para ser captados e incorporados a la subjetividad como prueba de realidades materiales tangibles. sino que sustentados en argumentos supuestamente científicos. “Pero la verdad que como mujer me sentí horrible. yo sabía que iba matar a un niño. una vida que está adentro tuyo pero ya vive. Esta entrevistada lo ejemplifica: 6    . 35. mami. ya diez semanas yo sentía al niño.niño. tiene su corazoncito. o de un bebito. al privilegiar al embrión o al feto y visualizarlo como alguien separado de la madre (Cornell. (Josefina.) El feto como persona completa que piensa y siente. No desarrollaremos acá por razones de espacio. estatuto de persona. por eso soñaba que el niño me hablaba y me decía ‘mami. Ah! fue horrible. que se me movía aparte. es razón suficiente para adscribirle al embrión y antes aún. de cuáles representaciones se hacen eco las mujeres cuando imaginan al embrión como una persona completa? En los últimos años y como parte de la campaña en contra de la despenalización del aborto.que el feto es una persona. denota una entidad que habla. fue horrible hacerlo porque sabía que iba a matar un niño. No son éstos mensajes inocuos. siente y culpabiliza con sus reproches. ¿De qué discursos. Este es el efecto de un movimiento que tiende hacia el borramiento de la madre como sujeto. porque yo me hice la ecografía y el corazoncito latía todo como una persona. se constituye así en una construcción imaginaria que le da un sentido particular a la experiencia de aborto de muchas mujeres y que traza el camino hacia la culpa y el autorreproche. todo. los grupos “pro-vida” han llevado a cabo una intensa difusión acerca de las características del embrión. estás matando una vida. Folletos con fotografías intrauterinas donde se ve al feto ya formado (correspondientes a 20 semanas de embarazo) con leyendas que rezan “mamá. la extensa y actual discusión ética y filosófica en torno a este concepto y en qué momento de la vida humana es dable enunciarlo. 1985. Una de esas “realidades” es la caracterización del feto como un ser humano física y psicológicamente completo o la del cigoto o el embrión –según la etapa de gestación de que se trate. NEB) La cadena semántica: embrión-bebito. porque yo pensaba que cuándo yo me colocarla las pastillas ¿no? y expulsará algo nunca me imagine que iba a expulsar a mi hijo porque era mi hijo el que estaba ahí. Muchas mujeres que optaron por abortar y cuya decisión estuvo signada por el conflicto entre sus creencias. Es razonable suponer que sus percepciones acerca de lo que observan durante el sangrado vaginal (en los casos de abortos con medicamento) hayan estado contaminadas por estos discursos. dudaron y algunas resolvieron el dilema transformando el sentido de la conducta adoptada en la única solución posible. mandatos de género y posiciones éticas y sus realidades familiares o económicas. no surgen automáticamente en el sujeto por su sola condición humana. siempre singulares. En algunos casos pudo ser la expresión de un conflicto entre el (los) deseo(s) y el mandato prohibidor. los ideales. producto de la identificación con padres culposos (Bleichmar. 1998). según el momento histórico. Los sentimientos de culpa se originan en diferentes fuentes: podrán depender entre otros factores. quienes transmiten las significaciones acerca de lo permitido y lo prohibido. Es por ello que. estaba formadito ¿no? piernitas. 38. quise agarrarlo y ahí reaccioné que era yo la que había provocado eso. profesional. del monto de agresividad permitida o prohibida. Podría resumirse la negociación entre estos dos 7    . con escasos recursos simbólicos y materiales que han escuchado a personas que por su investidura (religiosa.” (Gimena. lo que es legítimo y lo que no lo es. generalmente sus otros hijos. tomamos el recaudo de no suponer que en su origen hubo un denominador común. Resulta simplificador adscribir a todas las personas una génesis similar.“Siento que quede con mi moral rota. todo y fue es-pan-to-so. Pero los mandatos. de la cualidad de los deseos (lícitos o ilícitos). que lo había abortado. al referirnos a los sentimientos de culpa que directa o indirectamente surgieron del discurso de las mujeres. de la no satisfacción de las exigencias del superyo o resultar de una identificación básica de culpable. El significado del aborto quedó convertido de acción condenable a conducta/sacrificio tomada por el bien de los demás. bracitos. Ellas “ven” lo que les aseguran se ve. sino que fueron el resultado de diferentes y complejos procesos subjetivos. porque yo quise agarrarlo por instinto de madre creo que fue. tomando como referencia única la fenomenología de la culpa. política o moral) suponen poseedoras de un conocimiento único y verdadero. sino que son el resultado de un proceso de subjetivación que se realiza siempre con otros desde los primeros momentos de la vida. NEB) Este tipo de respuestas provinieron fundamentalmente de mujeres de sectores pobres. en otros la convicción de estar transgrediendo un ideal. Y son estos otros. la sociedad y la cultura en la que se constituyen como sujetos. Sentimientos y respuestas emocionales esperables frente a una situación vital difícil. este hallazgo es consistente con otras investigaciones (Zamudio. pero que él tenía que darse cuenta. et al. Esta negociación interna que intenta restablecer el balance narcisista (Bleichmar. se atenúa al sobreinvestir una representación de sí mismas como madres sobrevaluadas en sus atributos de sacrificio y renuncia. Salcedo H. haberme hecho el aborto y todo eso. 1998) que también reportan que las mujeres sienten en primera instancia alivio al concluir el proceso. NEB) De todas maneras y a pesar de sus debates internos. penalización y clandestinidad del aborto. el aborto no es una excepción. la angustia o la vivencia de pérdida. Luego.. crítica y en ese sentido.” (Alicia. después. haberme sacado. las mujeres entrevistadas refirieron que lo primero que sintieron una vez abortado. Major B. fueron esas diferencias las que determinaron los sentimientos posteriores como la tristeza. Es esperable que surja la culpa que muchas veces reclama un castigo: para algunas será en el más allá para otras en el tormento cotidiano de la vida terrenal. 1987) no se resuelve sin costo psíquico. las relaciones desiguales de poder entre los géneros. prohibiciones y mandatos de género que. L. pero seré mejor y más madre para los que ya tengo”. Viveros. Entonces por eso yo le decía a Dios que me perdonara por lo que había hecho. después que lo hice le pedí a Dios que perdonara todo lo que había hecho.. Las significaciones que cada mujer le da al aborto no son entonces ni homogéneas ni lineales y de ellas dependen que la experiencia se viva como un 8    . es porque yo creo en Dios. cuerpos (Amuchástegui. logran apropiarse de la decisión sobre sus cuerpos al reconocer y legitimar las razones para realizarse el aborto. asesiné a mi hijo. 31 años. Gilchrist. ya estaba creciendo dentro de mí.. a partir de la capacidad reproductiva de las mujeres como la función más trascendente en sus vidas. A. 2002 Lee.términos: “soy pecadora.1999. 1997. En este sentido. Amuchástegui. entonces claro para mi yo cometí un pecado. Rubiano N. Como dice una de nuestra entrevistadas: “Ay. las prescripciones. La representación del self desvalorizada y descalificada por el juicio superyoico por el filicidio (supuesto). 2005) Con historias y condiciones de vida diversas. sin angustia. haberme hecho un aborto ¿verdad? porque sea lo que sea era una vida. fue alivio. La ilegalidad.. Porque me sentí con mucha culpa (…) es por creencia. centrados en un modelo hegemónico de femineidad ubican a la maternidad. Rivas. E. es el texto en el que tienen lugar las condiciones de subjetivación de las mujeres. M. que yo no lo podía traer al mundo porque no lo iba a poder mantener. ______________________________ 9    .evento crítico pero superable o un drama que conmociona y desestabiliza su equilibrio psíquico. 27. A. S (Comp) Las mujeres y la salud. Facultad de Filosofía y Letras. En: González Montes. Carril. G. L: López Gómez. The Imaginary Domain. Montevideo Abracinskas. A.(2003) “Aborto: entre el no de la religión y el sí de las mujeres”. Setiembre-diciembre.. Ed.” En: Debate Feminista. A. Denman. M. Briozzo. Trilce. Barcelona. Amuchástegui.” En: Estudios Demográficos y urbanos. A. En: Arch Gen Psychiatry.gire. M. UBA. Avances en psicoterapia psicoanalítica. en Mora. Lamas. González. (2004) Mortalidad Materna. Cornell. L. M. 2003. Abortion. En: Revista Médica del Uruguay. (2003): “Aborto y Derechos Sexuales y Reproductivos. Contera. L. MYSU – DAWN. 57: 777-784 Rosenberg. Temas y Debates. En: Bronfman.org. (2003) Aborto provocado: un problema humano.. Sexualidad y Género. A. 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