39 EL CONOCIMIENTO BÍBLICO, UN COMENTARIO EXPOSITIVO, TOMO 6, (MALAQUÍAS).docx

May 20, 2018 | Author: Ojilver Lopez | Category: Book Of Malachi, Tetragrammaton, Book Of Job, Priest, Prophet


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MALAQUÍASCraig A. Blaising Traducción: Bernardino Vázquez INTRODUCCIÓN Trasfondo histórico. Malaquías ministró en el s. V a.C., ca. 100 años después de que en 538 a.C. Ciro publicara su decreto permitiendo a los judíos retornar del exilio. En respuesta a los ministerios proféticos de Hageo y Zacarías, los repatriados reconstruyeron tanto el templo, terminándolo en 515 a.C., como sus casas. Muy probablemente, en tiempos de Malaquías se estaba reedificando o ya se había terminado el muro de Jerusalén (por la gente de Nehemías). La vida no era fácil. Políticamente, los judíos estaban dominados por Persia (peḥâh, “príncipe” o “gobernador”, Mal. 1:8, era un título persa, que también se usa en Esd. 5:3, 6, 14; 6:6–7, 13; Dn. 3:2–3, 27; 6:7). Las cosechas era pobres y estaban expuestas a plagas de langostas (Mal. 3:11). La mayoría de judíos era indiferente o tenía resentimientos contra Dios. Tanto los sacerdotes como la gente violaban las estipulaciones de la ley mosaica acerca de los sacrificios, diezmos y ofrendas. La esperanza del pueblo en las promesas de Dios se había debilitado, como se evidencia en: (a) matrimonios con paganos, (b) divorcios, y (c) ambivalencia moral generalizada. Fecha. La referencia de Malaquías al gobernador persa (Mal. 1:8) muestra que el libro se escribió después de 538 a.C., aunque la mayoría de los eruditos bíblicos concuerdan en que fue escrito entre 450–430 a.C., por las siguientes razones: (1) La amonestación de Malaquías a los sacerdotes por sus malas prácticas en el templo muestran que éste ya se había reconstruido y se había restablecido el sacerdocio. (2) La condiciones morales y espirituales que Malaquías denunció eran similares a las que enfrentó Esdras, que retornó en 458, y Nehemías, que regresó en 444. Esas condiciones incluían matrimonios con gentiles (2:10–11; cf. Esd. 9:1–2; Neh. 13:1–3, 23–28), falta de sostén para los levitas (Mal. 3:10; cf. Neh. 13:10), y opresión de los pobres (Mal. 3:5; cf. Neh. 5:4–5). Tal vez Malaquías habló a la misma generación de Esdras y Nehemías, o bien pudo ser que hablara a una generación posterior poco tiempo después del trabajo de ellos. Autor. Tradicionalmente, a Malaquías (mal’āḵî, lit., “mi mensajero”) se le ha considerado como el último profeta del A.T., antes del ministerio de Juan el bautista, que predijo Malaquías (Mal. 3:1). Sin embargo, muchos han argumentado que mal’āḵî es un título anónimo, no un nombre propio. Para ello dan cuatro razones: (1) Mal’āḵî no tiene la forma de nombre propio. No obstante, en la Biblia, ningún otro libro es anónimo. Quizá mal’āḵî es un apócope de mal’āḵiyyâh (cf. ’ăḇi [’ăḇî] en 2 R. 18:2, con Ābías [’ăḇiyyâh] en 2 Cr. 29:1 [nota mar. BLA], y Uri [’ūrî] en 1 R. 4:19 con Urías [’ûriyyâh] en 1 Cr. 11:41). (2) En 1:1 el Targúm (trad. aramea parafraseada del A.T.) no considera que “Malaquías” sea La base de esa teoría es que la palabra maśśā’ (“carga u oráculo”) introduce cada una de esas tres partes de las Escrituras (Zac. asimismo participaba de las bendiciones estipuladas en el pacto abrahámico incondicional. Introduction to the Old Testament as Scripture. a fin de cuentas. 1:1). El juicio de Edom (1:3b–5) III. Advertencia a los sacerdotes (2:1–9) 1. y desobediencia descarada. 1979. Brevard Childs. 489–492). (4) La teoría de otros eruditos es que Malaquías fue una de tres profecías anónimas (las otras dos son Zac. En la medida en que cada generación obedecía los mandatos del pacto mosaico. pues son el pueblo del pacto (2:10–16) . presentó cada uno de sus seis mensajes (V. oportunismo. Acusación: Habían deshonrando a Dios (1:6a) B. y futuro. recuperar la esperanza. Tercera denuncia: Sean fieles.nombre propio. La advertencia (2:1–4) 2. Pero. Ese estilo fue muy apropiado para confrontar a los apáticos israelitas. Entonces Malaquías definió a la gente como disputando y cuestionando cinco de sus seis acusaciones (todas excepto la tercera. Normativa para los sacerdotes (2:5–9) IV.. como Escritura”. En la antigua dispensación ese pacto fue el que normó la relación de Israel con Dios Malaquías aplicó el pacto mosaico a los problemas del Israel posexílico—negligencia. “Introducción del A. En cambio. teoría que tiene poco apoyo. Dios prefirió a Israel sobre Edom (1:2c–3a) 2. es más probable que el mensajero anónimo mal’āḵî de 3:1 sea un juego de palabras basado en el nombre del profeta citado en 1:1. “Profecía de la palabra de Jehová contra Israel. puntos II–VII en el Bosquejo) dirigiendo una amonestación o mandato al pueblo. págs. Afirmación del amor de Dios por Israel (1:2a) B. la desobediencia producía maldiciones y. En lugar de presentar discursos directos. Sin embargo. Dios prueba su denuncia: Sus sacrificios eran aborrecibles (1:7–14) D. Primera denuncia: Respondan al amor de Dios (1:2–5) A. utilizó un estilo dialéctico o controversial. El contenido del libro de Malaquías claramente indica que fue escrito por un profeta. el exilio. Malaquías señaló los tratos de Dios con Israel en el pasado. (3) Debido a que mal’āḵî es una designación anónima en Malaquías 3:1. punto IV del Bosquejo). la manera en que Malaquías introduce su libro (lit. En el fondo de esos problemas estaba la inadecuada perspectiva que tenía el pueblo acerca de la fidelidad de Dios al pacto y su pérdida de esperanza en cuanto a que se establecería el reino divino. El estilo de Malaquías difiere de otros profetas. El mensaje de Malaquías es similar al de otros profetas: las bendiciones del pacto requieren obediencia a éste. por medio de Malaquías”) difiere de la forma en que Zacarías introduce sus dos oráculos (V. entonces debe ser lo mismo en 1:1. Mal. Así. Introducción: Encargo a Malaquías (1:1) II. con el fin de renovar la perspectiva del pueblo. Mensaje. Pero nada se sabe de su familia ni se menciona por nombre en ningún otro pasaje de la Biblia. Esto produjo una infidelidad generalizada y afectó la adoración del pueblo en el templo y las relaciones maritales en los hogares. Segunda denuncia: Honren a Dios (1:6–2:9) A. BOSQUEJO I. añade que ese mensajero era Esdras. Sin embargo. La obediencia a la ley se premiaba con bendición en la tierra prometida.T. Israel cuestiona la acusación (1:6b) C. 9:1. 9–11 y 12–14) anexadas como apéndice al libro de los 12 profetas menores. Luego probó que cada una de sus acusaciones era correcta. Reivindicación del reclamo divino (1:2c–5) 1. Estilo. y motivarlo a ser fiel al pacto. Filadelfia: Fortress Press. presente. Israel cuestiona la acusación (1:2b) C. 11:1. Acusación contra su fastidioso hablar (2:17a) B. Israel cuestiona la acusación (3:7b) C. Quinta denuncia: Obedezcan a Dios (3:7–12) A. Acusación contra la desobediencia (3:7a) B. Advertencia divina (3:1–5) 1. La palabra maśśā’ (“carga”). En los libros proféticos.A. Primera evidencia: Matrimonios ilícitos (2:11–12) 1. el nombre de Dios que evoca su relación con el pacto que hizo con Israel en Sinaí. 15:1. 12:1. Prueba de la amonestación: Apoyaban la maldad (3:14–15) D. El pecado: No dar los diezmos y ofrendas (3:8c) 2. los problemas en la relación pactada sólo podrían deberse a la infidelidad de Israel. La RVR60 trad. Is. 9:1–8. esta palabra como profecía. 14:28. Sexta denuncia: Temed a Dios (3:13–4:3) A. Promesa de bendición (3:10–12) VII.g. Se especifica la denuncia: Robo (3:8a) D. 1:1. establece un tono severo. la carga de este discurso tiene que ver con problemas en la relación pactada entre Dios e Israel. 9:1. Israel cuestiona la acusación (3:13b) C. 13:1. La razón de la esperanza en Dios (3:6) VI. El pecado (2:14–16a) D. la palabra maśśā’ da a todo el mensaje del profeta un sentido preocupante y ominoso. Debido a que Jehová es el Dios fiel que guarda el pacto. Nah. el comentario acerca de maśśā’ en Zac.. Sus consecuencias (2:13) 2. Prueba de la denuncia: No hay esperanza en la justicia de Dios (2:17c) D. Israel vuelve cuestionar la acusación (3:8b) E. Puesto que la palabra se dirige contra Israel. V. Hab. Sus consecuencias (2:12) C. La venida del Señor en juicio (3:1b–5) E. “Jehová” (Yahweh) es. Exhortación a que fueran fieles (2:16b) V. Advertencia y promesa de Dios (3:17–4:3) VIII. Conclusión: Estad preparados para la venida del Señor (4:4–6) A. Preparación presente (4:4) B. Israel cuestiona la acusación (2:17b) C. 1:1. El pecado (2:11) 2. Preparación futura (4:5–6) COMENTARIO I. Zac.) Por estar sola al principio de Malaquías. El hecho de que esa carga del Señor vino por medio de Malaquías debió intensificar en la mente de los lectores originales la sensación de . maśśā’ introduce mensajes amenazantes en 27 ocasiones (e. Con frecuencia la frase la palabra de Jehová aparece en la introducción de un libro profético para identificarlo como una revelación de Dios que tiene su autoridad. Respuesta del remanente fiel (3:16) E. Acusación por blasfemar (3:13a) B. La maldición (3:9) F. Segunda evidencia: Los divorcios (2:13–16a) 1. Acusación por su infidelidad (2:10) B. Cuarta denuncia: Pongan su esperanza en Dios (2:17–3:6) A. Introducción: Encargo a Malaquías (1:1) 1:1. por supuesto. Prueba de la amonestación (3:8c–9) 1. La venida del precursor (3:1a) 2. con que inicia el libro. 14:26). Primero. Esto iba en contra de la costumbre de elegir al hijo mayor. 11). Lc. lo cuidó y formó (cf. El reclamo del Señor a Israel se justifica de dos maneras. 2:17. 8) y tenía graves crisis económicas (2:2. Una pregunta similar de Israel en los vv. estas palabras no determinan el destino eterno de Jacob y Esaú. Primera denuncia: Respondan al amor de Dios (1:2–5) Quienes leen estos vv. Los sacerdotes debieron ser los mensajeros de Dios (cf. Sin embargo. el pueblo seguía dominado por gobernadores extranjeros (v. 21:15. C. La frase yo os he amado no es una declaración general del amor universal que Dios tiene por la gente.que se avecinaba una amonestación. 139:21). como Edom. Las palabras hebr.) y por tanto connotan tanto los tratos que Dios tuvo con Israel y Edom en el pasado. 9:10–13). llamado después Israel (Gn. 2b–3a) están en tiempo pretérito perfecto (hebr. Dios había escogido como heredero a Jacob. El amor era la esencia de su relación pactada. Mas bien. A. pero ellos debían oir a uno cuyo nombre significaba “mi mensajero”. Esto se reveló claramente en los tiempos en que se concertó el pacto (Dt. Afirmación del amor de Dios por Israel (1:2a) 1:2a. Esto es evidente en las exhortaciones que siguen a las declaraciones del amor divino (Dt. Israel cuestiona la acusación (1:2b) 1:2b. sino por no haber correspondido al amor de Dios. 29:31–35. Israel debió responder amándolo y obedeciendo sus mandatos (Dt. Esa no era la primera vez que el Señor lo había dicho. expresó su amor al elegir libremente a Jacob y sus descendientes (incluyendo a esa generación que lo cuestionaba) para que heredaran sus promesas. El pueblo era el objeto de su amor (v. Dt. De haber leído con cuidado el pacto en Deuteronomio se habrían dado cuenta que esas desgracias eran la consecuencia—y no la causa—de su desobediencia. 6:4–9). se refieren a los actos de Dios en la historia hacia las dos naciones que surgieron de ellos. Al reconocer el amor de Dios por él. 2:7). DIOS PREFIRIÓ A ISRAEL SOBRE EDOM (1:2C–3A) 1:2c–3a. Aunque más adelante Malaquías indicó que un remanente fiel que temía a Dios todavía existía en ese tiempo (3:16– 18). Al introducir su profecía como una carga (v. 17. la nación entera necesitaba arrepentirse de su pecado de incredulidad y volver a enamorarse del Señor con todo su corazón. 25:21– 34. no hubiera sido elegido para . 2c). 5:10. Con todo. Los vbs. Esaú. el primer mensaje no comienza con una acusación por haber obrado mal. 8–9. sino de la fidelidad de Dios a su pacto. Mas bien. Ro. El Dios de Israel habló: Él le dio existencia. también llamado Edom y padre de los edomitas (Gn. “amé” y “aborrecí” (vv. y las tiernas palabras divinas de Isaías 43:4. II. Gn. 13. B. hoy podrían sentirse algo incómodos y a la vez fascinados. 3–4. La expresión “yo os he amado” tiene una gran carga sentimental. 3:7–8. 1). Después de todo. Israel manifestaba desconfianza en Dios y falta de fe en su palabra—no sólo desconfiaba del dicho de Malaquías (1:2a). antes de que nacieran. 2. Aborrecer a alguien significa rechazarlo y no tener ningún tipo de relación afectiva con él (cf. Viene a la mente Oseas 11:1. ya habían pasado cerca de cien años desde que el pueblo había regresado del exilio y el reino predicho por los profetas todavía no se materializaba. 6–7. 7:6–9). como los que se dieron en la historia hasta el tiempo de Malaquías. Malaquías había preparado a sus lectores para que esperaran una acusación y amonestación. como si estuvieran presenciando una conversación intensamente personal entre dos partes que se conocen desde hace mucho.) Al cuestionar el reclamo divino. 4:39–40. Mal. fue el primero de dos hermanos gemelos. La falla de Israel al no creer en la palabra de Dios provocó que no lo amara y le fuera hostil. 4:37. amé y aborrecí no se refieren a las emociones de Dios sino a su elección de uno de los dos para establecer con él una relación pactal (cf. Sal. los vbs. Israel preguntó a Dios: ¿en qué nos amaste? (Cf.36:1). 6) durante más de mil años con base en su pacto. Reivindicación del reclamo divino (1:2c–5) 1. v. Esto provee una segunda razón para justificar el reclamo divino. la amó al elegirla por su gracia para ser posesión suya. Quizá Israel pensó que su inconformidad era legítima. 7:9–15). 3:9. Por sí mismas. Israel necesitaba considerar cuál hubiera sido su destino si. EL JUICIO DE EDOM (1:3b–5) 1:3b–4a. Pero su amor por Israel era anterior a la existencia de la nación. 44:1–2). ¿Si los sacerdotes no honraban a Dios. 6:3).hacer un pacto con Dios. los sacerdotes eran los responsables de enseñar a los israelitas el pacto y convertir sus corazones a Dios (Neh. Acusación: Habían deshonrado a Dios (1:6a) 1:6a. y los hijos que se rebelaban contra la disciplina debían ser lapidados (Dt. algo que Israel ciertamente quería promover. 4:22. A. 30:1–10). Is. 6:5) y temerlo (Dt. Por el otro. V. Malaquías habló de las relaciones consideradas correctas en la sociedad. VI a. es doblemente triste porque tras el retorno del exilio. Israel debía tener una mejor comprensión no sólo del amor divino. En las Escrituras se habla con frecuencia de la gloria de Dios (incluso se le llama “el rey de gloria” Sal.. (Jer.T. vosotros menospreciáis mi nombre. Jehová de los ejércitos (título divino usado 24 veces en este breve libro) frustraría sus más grandes esfuerzos de reconstruir lo arruinado. Segunda denuncia: Honren a Dios (1:6–2:9) La primera profecía terminó con una afirmación acerca de la grandeza de Dios dentro y fuera de Israel.) Ellos habían menospreciado al Señor que es Jehová de los ejércitos. 11 [tres]. 27:2–8). 6:5 con Dt. 11:1). lo destruiría con su ira. Abd.C. sino rendirle el respeto y reverencia que proceden de la obediencia y adoración del pueblo. 20:12. de modo que las fronteras de Israel también delimitaban la bendición divina. Así que Dios convirtió los montes de Edom en desolación. Dt. ¿debía ser menos obediente el pueblo que se consideraba a sí mismo “hijo de Dios”? El cuestionamiento divino se presenta con agudeza: si. la gravedad de su condición era más que evidente. la segunda señala que Israel no honró a Dios en forma correcta. estaba Israel a quien Dios amó y apartó para sí (“santo” significa apartar) para que recibiera las bendiciones pactales. a quien Dios no escogió. El quinto de los diez mandamientos afirma que los hijos deben honrar a sus padres (Éx. sólo los chacales del desierto vivirían en esa tierra para darla a sus “descendientes”. los nabateos también capturaron Idumea. Por un lado. V. Tanto Israel como Edom recibieron el castigo de Dios por mano de los babilonios en el s. aparecen 10 referencias al “nombre” de Dios: 1:6 [dos]. Quizá algunos israelitas consideraban que Dios era el amo de Israel. ¿dónde está mi temor? No hay contradicción entre la admonición de amar a Dios (que se implica en el primer discurso. 63:16. En el s. Esd. (Acerca de la maldad de Edom. El territorio de impiedad contrasta con la “tierra santa” (Zac. la tribu árabe de los nabateos ocupó Edom (localizada al sur y oriente de Judea) y forzó a los edomitas a huir al desierto hacia el oeste a una región conocida después como Idumea. Por tanto. En el s. Mal. 21:18–21). Puesto que Israel debía amar a Dios de todo corazón (Dt. 2:2. para “honra” (kāḇôḏ) también significa “gloria”. 35). 7:10). Temer a Dios no significa aterrorizarse ante él.) Al ver los tratos soberanos de Dios con Edom. . Is. Ez. y es indiscutible que a él le pertenecen toda la gloria y el honor. 1:4b–5. 5. 49:7–22. IV. porque esta analogía ya se había citado en el A. Os. 2:12). 1:2– 5) y la exhortación a temerlo. La pregunta natural que esto provocó fue: ¿Qué tipo de relación consideraba Israel similar a su relación con Dios? Algunos pudieron opinar que Dios era como un padre para la nación. Dios reiteradamente prometió restaurar a Israel (debido a sus promesas pactales Dt. 3:16. 6:16–22. 6:13). yo soy padre ¿dónde está mi honra y gloria? (Cf. 8–14. y el siervo a su Señor. Ambas aparecen en el pacto (cf. La acusación: Oh sacerdotes. Aún así. (En Mal. El hijo honra al padre. pero condenó a Edom a la destrucción total para no ser restaurado jamás (Jer. pues. ¿cómo era posible que la nación que era su sierva no lo honrara? La segunda pregunta del Señor es ominosa: si soy señor. 64:8. 1:2.) La palabra hebr. cf. Dt. En agudo contraste. Por tanto. estaba Edom. que se podía esperar del pueblo? Las palabras “mi nombre” representan a Dios mismo. 9:38–10:39. 4:2. (Éx. 4:29–31. 5:16). Sin lugar a duda la Biblia presenta a Israel como siervo del Señor (Is. Más bien. 14. 24:7–10). sino también de la grandeza de Dios sobre toda la tierra: ¡Sea Jehová engrandecido más allá de los límites Israel! III. que Malaquías los describió como desafiando a Dios a que les dijera sus fallas. porque tenían instrucciones precisas acerca de los sacrificios defectuosos (Lv. cojo o enfermo. Ciertamente el gobernador (peḥâh. Si se trata del tiempo presente. Neh. Quizá la mesa se refiere metafóricamente a todo el conjunto de ofrendas presentadas en el altar (cf. del A. Se les advirtió que no ofrecieran tales sacrificios para que no profanaran y contaminaran el nombre de Dios (Lv. La menospreciaban porque tenían en poco los mandatos divinos acerca de los sacrificios que se debían poner en ella. Ez. 10). 8–9). cojo y enfermo (cf. Para remarcar este punto. Para vergüenza de ellos se señalaban estas cosas. Malaquías contestó que ellos habían menospreciado a Dios diciendo: en que pensáis que la mesa de Jehová es despreciable. 1:8–10. Éx. 12 son los únicos dos vv. La referencia de Dios al pan inmundo debió ser suficiente para que los sacerdotes se arrepintieran de su pecado. Y les preguntó: ¿no es malo? Su respuesta según Levítico 22:18–25 y Deuteronomio 15:21. Su menosprecio se agravó al comer de los sacrificios inaceptables (los sacerdotes comían de lo ofrendado. 1:8). Mal. Esto los hacía culpables y merecedores de la pena de muerte (Lv. Malaquías atribuyó a los sacerdotes el cuestionamiento de las palabras de Dios: ¿En qué hemos menospreciado tu nombre? Del lenguaje que se usa en la acusación que sigue (vv. 13). En ese caso. las ofrendas pueden ser las que presentaban los judíos dispersos entre las naciones o las que ofrecían los gentiles. Lv. 1:6) al ofrecer “pan inmundo” (v. Dios prueba su denuncia: Sus sacrificios eran aborrecibles (1:7–14) 1:7. Por eso dijo: ni de vuestra mano aceptaré ofrenda. presente). mūggāš debe trad. Malaquías dijo que el ministerio del templo sería también suspendido. 44:15– 16). donde aparece la frase “la mesa de Jehová”. 7:48. Malaquías señaló que los sacerdotes ofrecían en sacrificio al animal ciego. 1:7) y habló acerca de sacrificios animales (v. a causa de”). debió ser afirmativa. 2 Cr.. Lo cual indica que lo que sigue es la razón por la que el Señor rechazó las ofrendas de los sacerdotes (v. ¿por qué se llama a los sacrificios “pan”? Porque a las ofrendas se les llamaba “pan de … Dios” (Lv. Malaquías sugirió: ¡Preséntalo. 24:5–9). Los eruditos difieren en cuanto a si el participio pasivo hebr. Él no los aceptaría. 32). 8). Irónicamente. 1:4) con esos sacrificios. este v. v. 22:17–30). se deduce que los sacerdotes eran insensibles a su pecado. 40:6) porque Malaquías ya lo había mencionado (Mal. 32. 38:1. Probablemente no se refiere a la mesa donde se colocaba el pan de la proposición (Éx. inicia con kî (“porque. “se ofrecerá” (tiempo futuro) o se ofrece (RVR60. La primera de estas posibilidades debe rechazarse porque la expresión desde donde nace el sol hasta donde se pone y en todo lugar indica que había una práctica más generalizada de . 7). Ni siquiera tendría sentido encender el fuego del altar del holocausto. La acusación de que los sacerdotes afirmaban que la mesa del Señor era indigna se sustentaba en sus acciones (Mal. 21:6). Cuánto más absurdo era esperar el favor de Jehová de los ejércitos (cf. C. Los sacerdotes preguntaron: ¿En qué te hemos deshonrado (contaminado)? Ellos no dijeron: “No te hemos deshonrado” porque no podían argumentar ignorancia de la ley. 7–14).B. 13:10–11). 25:23–30. Así que preguntaron cómo habían profanado el nombre de Dios. entonces Malaquías hablaba de las ofrendas de su tiempo.T. Pero. Dios estaba disgustado. 1 R. Malaquías 1:7. los sacerdotes eran culpables de haber menospreciado su nombre (Mal. 22:9). pues. El hecho de que entendieron la acusación de ofrecer sacrificios incorrectos como una profanación del nombre de Dios muestra que estaban familiarizados con Levítico 22:2. a tu príncipe (gobernador)! La “mesa” del gobernador estaba llena de platillos suculentos (cf. sino al altar del holocausto (cf. Evidentemente se habían endurecido tanto y justificaban de tal manera su pecado. 1:11. En hebr. Aún así. 22:2. 5:17) incluyendo las “ofrendas” del pueblo. ni tampoco a los sacerdotes (vv. porque es obvio—y sorprende—que no se dieran cuenta de que habían desechado a Dios. un título persa) no se hubiera complacido ni aceptaría la carne de un animal ciego. Israel cuestiona la acusación (1:6b) 1:6b. Además. si se toma mūggāš en futuro (“se ofrecerá”). El Mesías será rey sobre toda la tierra. Malaquías se refirió de nuevo a la condición de los sacerdotes de su tiempo. v. Advertencia a los sacerdotes (2:1–9) 1. se le exigía pagarlos (Dt. Prometer votos a Dios no era obligatorio. (No hay evidencia de que los judíos de la diáspora ofrecieran sacrificios. Tras hablar de las ofrendas limpias del reino futuro (v. esto debe rechazarse por varias razones. mūggāš normalmente escogen la segunda de las dos opciones arriba descritas.”. 28:15–68). LA ADVERTENCIA (2:1–4) 2:1–2.T. concuerda con otros pasajes del A. 7:13–14.presentar ofrendas que la que se daba dentro de la limitada diáspora judía. Sal. 27:15– 26. 96:5. Pero no les importaba poner las cosas en orden. Malaquías también habló del día futuro en que el Señor regresará y purificará el culto en Israel (Mal. Pero.T. entonces sería el único lugar de la Biblia donde se considera legítimo el culto pagano. parece preferible asociar el culto gentil “limpio” mencionado en 1:11 con el culto israelita puro. porque afirmaron que la mesa del Señor (cf. que remarca con fuerza la necesidad de obedecer el pacto mosaico. Este problema se aclara si la preposición be (que normalmente significa “en”) antes de “todo lugar” se trad. 16). 1:87). en tiempo presente del vb. Sof. 11). Moisés (Lv. Hab. 1980. Chicago: Moody Press. Para ellos ofrecer los sacrificios era un fastidio.) Los que apoyan la trad. tanto las . Esa respuesta era una forma de desprecio (cf. 2:11. v. Al analizar sus fallas y estudiar cómo era el perfil bíblico del sacerdote (2:7). 13:6–11. aquí sus actitudes. Repitió la acusación de que estaban profanando el nombre de Dios (cf. Malaquías cap. Además. Si se diera por cierta. cuyo nombre deben temer todas las naciones. y con el libro de Malaquías. Tampoco debían tratar de engañar al Gran Rey. 9. Después de enunciar y sustentar su acusación contra los sacerdotes. 1 termina remarcando la suprema autoridad de Dios. D. 48:5. Entonces. 29:17.g. 1:14. 4): Debían dar gloria a Dios (mi nombre equivale a decir “yo. esa interpretación tampoco concuerda con el resto de Malaquías. “desde” como en Isaías 21:1 (cf. mí”). El pacto mosaico incluía maldiciones para quienes desobedecieran la ley (V. Éx. lo cual contradice muchos pasajes que específicamente lo condenan (e. Estaba mal prometer un animal aceptable y luego entregar uno dañado. “Diccionario teológico de palabras del A. Esas maldiciones tenían que ver con el bienestar físico. En cambio. Stg. porque ésta solo se podía ofrecer en Jerusalén.. No honrarlo traería como consecuencia sufrir la maldición pactal (sufrimientos). Evidentemente los sacerdotes reconocerían que los sacrificios se presentaban de manera irregular. ¿presentarán los gentiles de la época del reino sacrificios “en todo lugar”? No. 23:21–23). 32–33. Dn. 3:1–4). 23:24. 17:22–31) apoya la interpretación de que los paganos rinden culto al “nombre” de Dios con “ofrenda limpia”. y que Dios se negaba a aceptarlos también. 3:8–11. v. Dt. Zac. 22:17–25) dio a los sacerdotes instrucciones precisas acerca de los sacrificios que se aceptaban en pago de los votos. afirman que Dios apoyaba los sacrificios paganos. 18:19–46. 8–10. En los vv. 2:18–20). mental y material del pueblo de Dios. debía resultar claro cómo debían dar gloria a Dios (1:6–14). 27–28. 4:17). Ni siquiera la referencia de Pablo al culto en Atenas al dios no conocido (Hch. Sin embargo. 8). De esta manera. 2 vols. En Malaquías 1:13 se repite que los sacerdotes presentaban sacrificios inaceptables (cf. que eran de menosprecio. Seguramente nadie trataría de engañar a un rey o gobernador haciendo eso por temor a sufrir una represalia o el castigo de la autoridad. 6). Is. 11:3–4. 7–8 se condenan las acciones de los sacerdotes. 45:22–25. Dt. 7) era inmunda y su alimento … despreciable. pero si alguien lo hacía. 59:19). 49:5–7. sub verbo “be”. 14:9. Malaquías les dio un mandamiento (cf. La maldición a la que se refiere Malaquías afectaría las bendiciones de los sacerdotes. 1:12–13. Aquí Malaquías pasó de hablar de los sacrificios en general a discutir el tema del pago de votos. Los creyentes de todas las naciones le adorarán (Is. Theological Wordbook of the Old Testament. que es una repetición de los vv. Los profetas predijeron que vendrá un tiempo en que los gentiles verán la luz y se convertirán en adoradores del Señor (Is. 66:3. 1 R. v. los sacrificios que presentaban los judíos de la diáspora no se podían llamar ofrenda limpia. 11. 2:7–9. Os. Así como éste se desechaba. 18:19. El Señor dijo que él echaría sobre sus rostros el estiércol de los animales sacrificados. En lugar de una acusación inicial seguida de una pregunta proveniente de una fingida inocencia. que es el punto principal de la exhortación de este discurso. 14–16) trad. La frase pacto de vida y paz parece evocar la forma en que el celo de Finees hizo que el Señor no castigara al pueblo (cf. es un juego de palabras con zera‛ (“simiente”) que eran los descendientes objeto de la reprensión divina (v. 18:32). 4). la palabra bāgaḏ. serviría de trasfondo para el problema que Malaquías trataría enseguida (Mal. se discute ahora con más detalle. 2:31. 6:22–27). Su enseñanza había hecho tropezar a muchos porque se habían apartado del camino. Dios hizo un pacto similar con Finees (Nm. pues son el pueblo del pacto (2:10–16) A. como algunos sugieren. “poder”. Echaré. En otras palabras. 25:11 con Mal. La referencia a un … padre es probablemente paralela a un mismo Dios. Los sacerdotes llegarían a ser tan inmundos como el estiércol. Igualmente. NVI99). El interés de este discurso es tratar el asunto de la deslealtad del pueblo en sus tratos entre ellos. Debido a la condición de sus corazones. del vb. Además la enseñanza de Leví fue verdad y su conducta. La amenaza que sigue. 33:10). Algunos han sugerido qu (2:7) e en lugar de zera‛. La expresión nos portamos deslealmente el uno contra el otro (cf. 2. El pacto con Leví (v. 3). “mi mensajero”. Israel fue a Dios como su primogénito (Éx. NORMATIVA PARA LOS SACERDOTES (2:5–9) 2:5–6. 2:3–4. 4:22. así se haría con los sacerdotes. 5). El hecho de que Dios había creado a Israel para ser un pueblo singular (cf.. Aquí se advierte a los sacerdotes que su descendencia recibiría una reprensión. “actuar deslealmente en relación con un acuerdo o pacto previo”. así que son sinónimas (cf. porque su castigo debió haber sido la muerte (Nm. a muchos hizo apartar de la iniquidad). debido a que no estaban dando la instrucción verdadera. Sin embargo. serían removidos del ministerio. La palabra ley tôrâh. recibieron la reprensión del profeta cuyo nombre significaba. esas maldiciones ya estaban en operación (aun las he maldecido).e. 1:6). De hecho. irónicamente. Entonces sabrían que el Señor había hablado. El nombre tribal de Leví se usa para referirse a sus descendientes. esta fue una sanción leve. el tema principal se expresó directamente. 19–21). cada uno debía ser mensajero (mal’ak). como hizo al principio de cada discurso. que formaban la clase sacerdotal. Los sacerdotes debían enseñar la ley (Dt. y no una alusión a Abraham. Lo más importante es que él honró a Dios (v. Tercera denuncia: Sean fieles. éste comienza con tres preguntas del profeta. los sacerdotes fueron humillados y menospreciados (viles y bajos) delante de todo el pueblo. que irónicamente se dice que eran como días de fiesta. hace más probable la segunda opción. justa. que significa “brazo”. zārâh. Nm. Mal. Esa situación era otra forma (además de la acusación del discurso anterior) en que estaban profanando el pacto. Su propósito al amonestarlos era purificarlos de manera que se mantuviera el pacto con Leví. 3:2). Esto puede referirse a la interpretación (cf. 2:6. el cual se concertaba con un individuo (y a veces con sus descendientes) por un servicio que realizaba el receptor. Sin embargo. El estilo del tercer discurso difiere de los demás. 25:10–13). El pacto mencionado aquí se puede considerar un pacto de concesión o regalo (llamado “de sal” en Nm. 18:7–8. vv. también significa “instrucción” (NVI99). 2:1–2) de que la maldición se relaciona con las bendiciones que los sacerdotes pronunciaban sobre el pueblo. 2:10–16).que ellos mismos recibían (i. Como maestros. “brazo”. Reprender el brazo de alguien metafóricamente significa dejarlo sin poder (1 S. los ingresos derivados de los diezmos y ofrendas del pueblo) como las bendiciones que ellos pronunciaban sobre las personas (Nm. el texto debe decir zerōa‛. Acusación por su infidelidad (2:10) 2:10. IV. Am. 11:1). Esta palabra frecuentemente g se trad. . “actuar traicioneramente”. Al decir que los sacrificios inmundos eran aceptables violaban el pacto divino con Leví (V. Nm. que trata de la remoción de los sacerdotes. 21). Zera‛ (sementera) se refiere tanto al grano como a los descendientes (NVI99) físicos. SUS CONSECUENCIAS (2:13) 2:13. “tu pacto”) posiblemente podría referirse al pacto entre Dios e Israel (cf. 31:50. 15–16). 13:23–27). 2. De nuevo. ¿De quién eran esas lágrimas? Algunos proponen que eran de las mujeres divorciadas que buscaban la justicia divina. La abominable desobediencia que profanaba la santidad de Israel era debida a los matrimonios con paganos. i. pues implicaba una falta de consideración a la naturaleza corporativa de Israel y desobedecer a Dios.B. la palabra berîṯekā (lit. En ese caso. Malaquías puso de relieve la insensibilidad espiritual de los israelitas. (Si qōḏeš se refiere al “santuario”. 10) aquí se declara como un hecho y se explica. Jos.) Tales matrimonios se habían prohibido explícitamente porque arrastrarían al pueblo a la idolatría (Éx. esa abominable infidelidad incluía una profanación de su santidad. 13). Este “testimonio” podría tener un significado legal o general. SUS CONSECUENCIAS (2:12) 2:12. Gn.14) y descubrieron que Dios no recibía más su ofrenda. Dt. Mal. algo aborrecible para Dios. v. Es chocante advertir que a pesar de la abominación que esas personas cometían. 7:3–4.e. entonces el Señor fue requerido como testigo y juez en un acuerdo legal. Segunda evidencia: Los divorcios (2:13–16a) 1. Quizá este era un proverbio. Malaquías afirmó que algunos habían cubierto el altar de Jehová de lágrimas. 10) era una abominación. La expresión hija de Dios extraño se refiere a una mujer pagana que adoraba a dioses falsos. dependiendo del pacto con que se relacionara. luego se declara el pecado en sí (vv. Debido a que ellos increíblemente no se imaginaban cuál era el problema (mas diréis. 10–11. La última cláusula—y al que ofrece ofrenda a Jehová—remarca la actitud hipócrita e insensible de quienes se casaron con paganos. Sin embargo. Las dos líneas de evidencia de este discurso se organizan en forma de quiasmo de tal modo que aquí se invierte la estructura temática del pecado—consecuencia del v. Los matrimonios mixtos constituyeron un gran problema después del exilio (cf Esd. C. El profeta lanzó una maldición sobre todo judío que pecara habiéndose casado o pensara casarse con una persona pagana. 12). 14–16a). 34:11–16. EL PECADO (2:11) 2:11. EL PECADO (2:14–16A) 2:14. el pacto. Lo que se había señalado en forma de pregunta (v. El problema de infidelidad que Malaquías tenía en mente (v. 10–12. Pero la segunda mitad del v. como a veces se hacía en tiempos antiguos (cf. Ser cortado de las tiendas de Jacob puede significar que la persona moriría. Debido a que el interés de este discurso se centra en la singularidad y unidad del pueblo (“¿No nos ha creado un mismo Dios?” [v. o simplemente a esa virtud. el pueblo. al hombre que hiciere esto. Esto concuerda naturalmente con el v. Si berîṯekā significa la mujer de tu pacto. entonces el testimonio del Señor tendría un sentido legal. La consecuencia o síntoma del pecado se presenta primero (v. cuyo significado no es claro. 13 indica que eran de los hombres (después que se casaron con paganas. i. 9:1–2. 23:12–13). La frase ’ēr we‛ōneh es difícil de trad. 12. o que su linaje terminaría y que ya no tendría descendientes en Israel. Los judíos debían casarse con sus connacionales.. apartar”) puede referirse al santuario. de quien se había divorciado. Si se toma en sentido legal. 2:10). “separar. No hacerlo constituía una deslealtad hacia ellos mismos y Dios. La palabra para “santidad” (qōḏeš. Más aún. Primera evidencia: Matrimonios ilícitos (2:11–12) 1. la santidad puede referirse a la condición de singularidad y separación que el Señor quería ver en Israel. 53). Porque Jehová actuó como testigo entre el esposo y su mujer con quien había sido desleal (cf. entonces la profanación consistía en el involucramiento de esas mujeres en el culto del templo. vv. Él había sido testigo del pacto matrimonial entre el hombre y su mujer. La RVR60 la trad. anterior (v. ¿por qué?). el profeta tuvo que decírselos. Neh.. 10]). 2. el Señor era testigo en sentido general de que él conoce todo lo que . todavía presentaban ofrendas para buscar el favor de Dios.e.. 11 “Judá” e “Israel” se usan indistintamente.) D. Este contraste ya se había mostrado en el v. Ellos podían ser su remanente “espiritual” sólo por razón de que los llenaría con su Espíritu. Aunque Judá e Israel estaban unidos en tiempos de Malaquías. 11). posteridad de Dios”. (Esto difiere de la palabra hebr. 14) parece enfatizar la relación matrimonial (cf. “¿no uno los hizo?” o “¿no hizo él (el Señor) uno?” La primera remarca la obra creativa y soberana del único Dios (v. en cuanto a lo que Dios piensa del divorcio. 37). “Descendencia” se refiere al pueblo que corporativamente es heredero de la promesa pactal (cf. El hecho de que esto lo dice el Señor se repite aquí para remarcarlo (dijo Jehová de los ejércitos). 5:31–32. no debe practicarse. guardaos. afirmó Malaquías. Malaquías usó un lenguaje fuerte para remarcar el desagrado divino hacia el divorcio. pues. a un hijo de Abraham (Isaac). v. Ez. Debido a que la nación era una.T. 14) ni divorciarse de ella (cf. (En el v. la razón primordial de esta opción es la suposición de que la primera frase alude a Génesis 2:24.) Por lo tanto. Gn. la afirmación siendo ella tu compañera (v. 16) con la mujer de su juventud (cf. reza: “aunque tenía el remanente del Espíritu” (BLA nota mar). Exhortación a que fueran fieles (2:16b) . 2:14) se refiere tanto al pacto nacional entre Dios e Israel como al pacto matrimonial. El hincapié en la unidad del pueblo debió haber tenido especial significado en el período posexílico.15 se refiere a Israel como un pueblo. Aunque el divorcio se permitía. 10–11. 10:1–12. Este es el v. una carne (la unión en matrimonio de un hombre y una mujer).sucede. La primera frase puede trad. Esto evoca el hecho de que él es el soberano juez y dador de la ley a Israel. cuando ya había desaparecido la división entre Judá e Israel. Aunque el contexto anterior parece apoyar esta segunda interpretación. ¿Por qué se preocupaba Dios por la unidad de su pueblo? (¿Y por qué uno?) Porque Dios buscaba una descendencia piadosa (lit. La segunda afirmación del v. que habla del hombre y la mujer que llegan a ser una sola carne en el matrimonio. alude al matrimonio (cf. Jesús enseñó que esas concesiones de Moisés se dieron por la dureza del corazón humano. 16). 2:16a. 19:1–12. Una teoría más probable es que el profeta contrastaba la fidelidad de Dios hacia su pueblo (su nación pactada) con la deslealtad de los israelitas. Sin embargo. La segunda tiene varias posibilidades. “Aborrecer” (de śānē’) significa detestar. pero enfatizó que Dios no aprueba el divorcio (Mt.. 14. debía ser desleal (vv. Malaquías dijo que esa declaración venía de Jehová Dios de Israel. el comentario de Mt. las instrucciones dadas (Deut. 2:16) habla del mismo deseo de mantener la unidad pactal que procura el Espíritu Santo lo cual significaría no romper el pacto matrimonial. 24:1–4) tenían el propósito de proteger a la mujer si ocurría la separación. Mr. Si Dios aborrece determinada conducta. 2:15. Pr. 7:10–24. 17:7) y es paralela a la frase “remanente espiritual”. Otras versiones siguen la teoría de muchos comentaristas y ponen “carne”. BJ). Lit. 15 es más compleja aún. Más probablemente la palabra “pacto” (Mal. y 1 Co. que es lo que hace el divorcio. algunos eruditos bíblicos encuentran base para hacer excepciones a ese ideal (cf. Cubrir de iniquidad ese vestido significaba violar la relación matrimonial. Este punto de vista es posible porque en Malaquías 2:10–16 se discute el tema del matrimonio. es el más explícito del A. El mandato de Malaquías. el derramamiento del Espíritu Santo sobre el remanente aún era futuro (Ez. v. En esa teoría uno de la primera cláusula del v. Este v. la primera frase quizá se refiere a dos cosas: “¿No ha hecho él un pueblo?” y “¿no ha hecho del pueblo uno?” La segunda oración podría rezar: “y los hizo su remanente espiritual”. Puede referirse a una esposa. 2:17). “cuerpo”. (BJ. de Malaquías más difícil de trad. Rt. 3:9. Empero. La expresión: cubre … su vestido. pero se describe desde el punto de vista divino como si ya hubiese ocurrido. 10). 16:8).) Para subrayar este punto. ningún esposo. 10 en relación con la discusión acerca del pecado de casarse con paganos (v. NVI99) en lugar de “remanente”. “odiar” que se usa en 1:3. 19:7–9). o una nación pactada. en vuestro espíritu (que se repite en Mal. Entonces “la mujer de tu pacto” se estaría refiriendo al hecho de que ella había sido escogida entre el pueblo del pacto. Dijo que Dios … aborrece el repudio. y establecerá a los justos en su reino para siempre. Sin embargo. También sufren tanto los justos como los impíos como consecuencia de la caída del hombre (Gn 3:16–19. 73:1–14. 2:17–23). 3:1–5). como testimonio de sí mismo (Mt. Advertencia divina (3:1–5) 1. había la posibilidad de confundirlas o malentenderlas en casos individuales. Prueba de la denuncia: No hay esperanza en la justicia de Dios (2:17c) 2:17c. Hab. B. La segunda sería el primer advenimiento del Señor. Ec. 1:6–7. 44:24) C. Is. y en una sociedad donde justos e impíos estaban mezclados. 73:16–20. Jer. Job agrega otra dimensión al dilema del sufrimiento humano: los tratos de Dios con Satanás. Hab. 12:7–17. La venida del mensajero sería la primera de dos partes de un evento escatológico. 2:14): ¿En qué le hemos cansado? (cf. Jesús explícitamente identificó a esa persona con Juan el bautista (Mt. 10–11. independientemente del pecado que pueda haber en la persona. 43:24). 1:23). en vuestro Espíritu y no seáis desleales (cf. 1). la fe y esperanza de Israel debían estabilizarse. La evidente prosperidad de los impíos (cualquiera que hace mal agrada a Jehová) y porqué sufren los justos son problemas muy antiguos. La exhortación del v. el Señor no cambia (3:6) y tampoco altera sus promesas pactales. Jehová cuya palabra a su pueblo es que él no cambia ni se cansa (cf. Esta profecía marca un impactante contraste entre el primero y último v. Jn. Israel cuestiona la acusación (2:17b) 2:17b. 2. Sal. De nuevo se describe al pueblo como si estuviera inconsciente de su pecado (cf. Sal. Aunado a lo anterior. 11). armoniza con Isaías 40:3 (cf. Hch. LA VENIDA DEL SEÑOR EN JUICIO (3:1B–5) . vv. El hecho de que ese mensajero prepararía el camino del Señor. Aunque algunos entienden la frase mi mensajero (mal’āḵî) como referencia al autor humano o a un ángel. Los judíos del tiempo de Malaquías no habían adquirido esa esperanza de las Escrituras. a diferencia de las respuestas de los escritores bíblicos mencionados antes. El Señor también respondió refiriéndose a su juicio venidero (Mal. parece mejor considerarlo como un profeta futuro. en cada caso se desvanecen los cuestionamientos de la justicia divina ante la perspectiva futura de que Dios vendrá. 8:14. porque eran desleales a Dios. La prosperidad de los impíos también causa perplejidad y la tratan al menos cinco autores bíblicos (Job 21:7–26. 14:17). Todo esto dificulta saber porqué sufren los justos. 40:28). 27:13–23. Is. Sin embargo. el pueblo actuaba y hablaba como si no tuviera un Dios en quién creer o poner su esperanza. En el A. 8:12– 13. 2:3. 16b: Guardaos. porque Dios había prometido a Israel prosperidad material en recompensa por la obediencia a su ley (Dt. el problema era más grave que ahora. ellos estarían actuando según el propósito divino y ayudando a preservar la unidad del pueblo así como sus matrimonios. Irónicamente. 11:7–10). Ec. el juicio al que Malaquías se refirió era también contra los hipócritas que cuestionaban la justicia divina. Ellos cuestionaban la justicia de Dios al decir que él se complace con la gente impía. V. l5b se repite en v. Por tanto. ahora estaba supuestamente cansado al ver la falta de fe y esperanza en las palabras de su pueblo (cf. Cuarta denuncia: Pongan su esperanza en Dios (2:17–3:6) A. 24:1–17. LA VENIDA DEL PRECURSOR (3:1A) 3:1a. 12:1–4. Protegiendo (guardando) su espíritu. Por eso preguntaban: ¿dónde está el Dios de justicia? Ellos eran los culpables. Jer. Malaquías dirigió la atención de los cuestionadores faltos de fe y esperanza (2:17) hacia el futuro. Is. D. los castigará (Job 24:22–24. pues profanaba la promesa pactal que Dios dio a Israel. Muchas de esas promesas se habían dado a toda la nación. Acusación contra su fastidioso hablar (2:17a) 2:17a. 3:2–19). Los israelitas no debían ser desleales divorciándose de sus esposas judías para casarse con paganas (v.T. 14). 5:45. 28). estaba el hecho de que Dios en su soberanía bendice al impío y al justo. Aunque el pueblo había cambiado su perspectiva de la justicia de Dios (2:17). Aunque en esos pasajes no se dan respuestas al problema. pues.2:16b. Ec. 2:17). El resultado sería un grupo purificado de los hijos de Leví. 43:13–27. estuvo muy activo en la historia temprana de Israel (cf. Los profetas a menudo hablaron del día del Señor en relación con el castigo que se derramaría sobre las naciones y que produciría la liberación de Israel (V. 2:17). Gn. Acusación contra la desobediencia (3:7a) . 4:31. 3:11–16. y Jue. Ezequiel predijo el regreso de la gloria de Dios al templo (Ez. el Señor a quien … buscáis y a quien deseáis reflejan la expectativa general de la venida del Señor. La pregunta que hicieron indica la superficialidad de la esperanza de Israel (Mal. porque como otros profetas habían predicho. La venida del Señor será como fuego purificador sobre Israel y quitará de él a los impíos. el comentario de “Principales problemas de interpretación” en la Introducción de Joel. 9:6. 16:10. Las frases paralelas. se presentará ofrenda en el reino (cf. Estas frases también contienen un tono sarcástico. Ez. El juicio de Israel no se limitará a los levitas. El ángel de Jehová. Todos esos crímenes estaban prohibidos en la ley mosaica. traerán … ofrenda en justicia … como en los días pasados. 56:7. 13:21–22). Éx. 5:18–21. La remoción de esos pecadores de Israel sería la respuesta divina al cuestionamiento que Israel había hecho de su justicia (Mal. Pero a pesar de ello. Ez. 36:22–32). Resulta significativo que Pablo se basa en la misma razón para describir el futuro de Israel (Ro. Los hijos de Jacob no serían consumidos debido a la promesa pactal de Dios. 3:3–4. VI. La venida del Señor en su primera venida es un tema extensamente tratado por los profetas. Ez. que es una manifestación de Dios. adulterio. 66:20–23. sino que incluirá a toda la nación (cf. Una promesa es segura dependiendo de quién la haga. Tras ser refinados como oro y plata. he aquí el Señor viene. El día del Señor sería de juicio universal. 33:14 con Is. así que la venida del Señor contestaría la pregunta acerca de su justicia y tendría un significado amenazador para los sacerdotes (Mal. Zacarías dijo que vendría a Sion y moraría allí (Zac. 3:2–4. 22:17–22). 5:12). ¿Destruiría a Israel el castigo divino? ¿Sería consumido el pueblo por el fuego del refinador? No. 6:29–30. Tras la preparación hecha por el mensajero. los levitas. Zac. “ángel” (RVR60). 2:12. 2:17). perjurio. Dios cumplirá su promesa a Israel—Yo Jehová no cambio— porque tanto su palabra como él. día de desastre y muerte (Is. Jer. Am. los que defraudan en su salario al jornalero. Los dos mensajes anteriores de Malaquías hablan de que había serios problemas en el culto. El título el ángel (mensajero) del pacto aparece sólo aquí en toda la Biblia. Esto contrastará con las ofrendas inaceptables de las que habló Malaquías (Mal. sus maestros y líderes. 11:1–5. 1:25. Malaquías habló de ese día como de un fuego que consumiría a los impíos (Mal. Is. 22:15–18. E. Purificará a la nación de los que practican la hechicería (cf. Jl. 1:14–18). 33:18. 3:5. y cf. Mi. vendrá súbitamente a su templo el Señor. son inmutables. La palabra “mensajero” puede trad. 43:1–5). Más probablemente. Ez. 4:1). se debe identificar a este mensajero con el Señor mismo. Zac. 3:2. 25–29). 20:34–38). Dios vendrá a Israel para juicio. 63:9. 14). Sin embargo. 2:12–13). Zac. 14:16–21). como la predijeron muchos otros profetas. 8:3). Más adelante.3:1b. Esa es la base de la esperanza de la nación (cf. así como a los que oprimen a la viuda y al huérfano y maltratan al extranjero—los que no tienen temor de Dios. Después del retorno del Señor y el juicio de Israel. porque vendría después de él. Este no es el mismo que se identifica como “mi mensajero” en 3:1. Malaquías afirmó que Israel sería salvado en el día de Jehová. Dt. Las figuras de fuego purificador (que quema la escoria del metal) y jabón de lavadores remarcan la efectividad de la limpieza espiritual de Dios sobre la nación (cf. 40:38–43. Él se centró en ese día remarcando que será de juicio contra Israel y especialmente contra los levitas. Jer. Así que la respuesta a las dos preguntas: ¿Y quién podrá soportar el tiempo de su venida? ¿o quién podrá estar en pie cuando él se manifieste? es que ninguno de los impíos permanecerá. Malaquías no mencionó a las demás naciones. Is. Quinta denuncia: Obedezcan a Dios (3:7–12) A. La razón de la esperanza en Dios (3:6) 3:6. extranjeros. Dicho de forma llana. Israel fue acusado de ladrón. 13. “todos los diezmos”. Si Israel se volvía a él (volveos a mí en fe y obediencia). De nuevo Malaquías puso en boca de Israel un cuestionamiento acerca de la amonestación de Dios: ¿En qué hemos de volvernos? Sólo el que sabe por dónde va. El segundo discurso (1:6–2:9) trató el asunto de no honrar a Dios (1:6 lo cual causó que se profanaran las ofrendas (1:7–14). 32:7–9). 23–24.”. El quinto mensaje de Malaquías comienza con una franca condena por la desobediencia de la nación a las leyes divinas a través de la historia. E. Se especifica la denuncia: Robo (3:8a) 3:8a. C. 2:838). el error de no sostenerlo se consideraba equivalente a robar a Dios. 30:1–10). Israel vuelve a cuestionar la acusación (3:8b) 3:8b. 14:27–29). Ninguna otra nación tenía tales promesas divinas. EL PECADO: NO DAR LOS DIEZMOS Y OFRENDAS (3:8C) 3:8c. Prueba de la amonestación (3:8c–9) 1. Aquí se cuestiona la cantidad (cf. él cumpliría cabalmente su parte del pacto. “Alfolí” se refiere a los depósitos que . Dt. Esta promesa es una reafirmación de la relación del binomio obediencia—bendición que se especifica en la ley mosaica (Dt. Si los levitas y sacerdotes no recibían los diezmos y ofrendas. pero robar a Dios era insensato. éste externó el llamado y promesa de Dios a la nación. 3:10).) Esto trae a la memoria el mensaje divino acerca de la necedad de Israel en Sinaí (Ex. 14:22–26). Allá se cuestionó la calidad de los sacrificios. 28:1–14). que Moisés repitió ante la nación cuando entró a Canaán (Dt. 9:6–8. 8) Este recurso literario sirve para presentar la naturaleza general y específica de las amonestaciones. Esta promesa se basaba en el pacto hecho con Israel (cf. 28:15–68). (Lo cual contrasta con la nota positiva acerca de la inmutable fidelidad de Dios con que termina el discurso anterior. F. A continuación. Además. El quinto discurso es semejante al segundo en que tiene dos preguntas: “¿en qué hemos de volvernos?” (v. La naturaleza de esa maldición contra la nación se observa en el v. 12:5–18. Promesa de bendición (3:10–12) 3:10–12. Lo que el pueblo experimentaba era consecuencia de la desobediencia—maldición que también se había establecido en el pacto (Dt. 2. LA MALDICIÓN (3:9) 3:9. El diezmo era lit. Entonces el Señor apeló a sus promesas pactales retando a Israel a que trajera todos los diezmos al alfolí para que hubiera alimento para los sacerdotes. 32). tendrían que buscar otra forma de sostenerse. Los israelitas también debían dar un diezmo de sus productos y ganado y comerlo con los levitas delante del Señor en Jerusalén como un acto de adoración (Dt. 27:30. D. Debido a que el templo era la casa de Dios (v. De nuevo. Robar a la gente era muy malo. 4:30–31. y huérfanos (Dt. B. 10). Debía darse a los levitas. ésta era la acusación específica contra Israel. por lo que el ministerio del templo sufriría. Ese pacto fue una bondadosa provisión para Israel. Dios respondió que la nación le robaba al no traer todos los diezmos y ofrendas. 28:38–40). Debido a que la palabra de Dios es segura. el diez por ciento de todo el producto del campo y ganado que poseían (Lv. viudas. Ciertamente la historia de Israel desde los días de sus padres hasta los de Malaquías respaldaba la amonestación del profeta. Dt. “Diccionario teológico de palabras del A. 3:8c) alude a las porciones de las ofrendas (así como las porciones de los diezmos) designadas para los sacerdotes (Theological Wordbook of the Old Testament.3:7a. 11: Hambruna por la invasión de plagas (langostas) que se comerían las vides y uvas (cf. 31:27–29). 7b) y ¿en qué te hemos robado? (v. quienes a su vez daban el diezmo del diezmo a los sacerdotes (Nm. sub verbo “terûmâh”.T. parece que aquí (Mal. el problema de la nación tenía que ver con las ofrendas. 6. Israel cuestiona la acusación (3:7b) 3:7b. entonces también Dios se volvería (me volveré a vosotros) a su pueblo. Mientras que la palabra “ofrendas” puede referirse a las ofrendas en general. Israel podría confirmar esto porque estaba experimentando algunas maldiciones a causa de su desobediencia a la ley en cuanto al diezmo. puede enmendar el camino. cada tres años debía reservarse en cada ciudad un diezmo para los levitas. 18:21–32). Pero Israel fingía no darse cuenta de su conducta veleidosa. v. Dios por su parte abriría las ventanas de los cielos y derramaría bendición hasta que sobreabundara. es consecuencia de la confrontación del pasaje anterior. 7:51. Gá. 23:1–36). Acusación por blasfemar (3:13a) 3:13a.T. 3:15. El pueblo afirmó: por demás es servir a Dios. Por eso preguntaban: ¿qué aprovecha? Se jactaban de que habían sido fieles a Dios guardando su ley. B. “Por demás” (šāwe’) también puede trad. 8:13). Neh. Los creyentes de hoy están en mejor posición que los del A. Se debe ser cuidadoso al aplicar esas promesas a los cristianos de la actualidad porque ya no está vigente el pacto mosaico con sus promesas de bendición material a Israel a cambio de su obediencia (Ef. inútil y sin provecho. Esto era algo más que un tono abrupto de lenguaje. Sin embargo. 2 Co. 2:14–15. Es obvio que Dios no era el problema. He. al cuarto (2:17–3:6). 12). el comentario de 2:17c. 3:14. La palabra entonces (’āz) es muy enfática. el N. las palabras violentas del pueblo contradecían las promesas divinas reafirmadas en los vv. 4:14–19). Sin embargo. y los que tentaban a Dios escapaban de su juicio. Sin embargo. Malaquías ya había demostrado que Dios los estaba tratando de acuerdo a su pacto. e indica que la acción descrita en este v.T. sí enseña que Dios bendice a quienes dan generosamente para suplir las necesidades de la iglesia y especialmente de los que trabajan ministrando la palabra (Hch. Pensaban que lo único que hacía falta era que Dios cumpliera su parte y los bendijera. Así que consideraban que en nada les había beneficiado servirlo. Gá.C. Ro. Respuesta del remanente fiel (3:16) 3:16. el N. Aunque no se exige el diezmo a los cristianos de hoy. De nueva cuenta. los que hacían impiedad eran prosperados. Fil. Por eso preguntaron: ¿qué hemos hablado contra ti? C. porque como miembros del cuerpo de Cristo son morada permanente del Espíritu. En contraste con las bendiciones concedidas a Israel (v. 5:20–48. Fil. 5:16–26. VII. Así que sus obras no serían aceptadas como manifestación de su obediencia al pacto. Esas bendiciones incluirían prosperidad agrícola—abundante fruto que la plaga no destruiría y vides intactas (Mal. 10:4. Si de alguna . Los soberbios eran bienaventurados. Hay dos razones que explican esto: (1) El corazón del pueblo estaba mal. 1 R. En un sentido irónico. De esa manera. como Malaquías señalaría después (4:1). los soberbios e impíos serían castigados. se describe la indiferencia espiritual del pueblo hacia su propio pecado. (2) Algunos de los que se quejaban (3:14) eran culpables de una miopía legalista que fue la que produjo el fariseísmo judío del s. Es difícil determinar si ese remanente (los que temían a Jehová) es distinto de los cuestionadores (vv. Israel cuestiona la acusación (3:13b) 3:13b. su respuesta no sería la bendición que esperaban. 2:17). pero esta debe surgir del corazón. Al hacer esto. o parte de él. (Acerca del dilema de la prosperidad de los impíos. el pueblo se estaba acusando a sí mismo al afirmar que su adoración y servicio al Señor era vacío. siguiendo el típico estilo literario de Malaquías. Aquí alcanzan su clímax los cuestionamientos del pueblo acerca de la justicia de Dios debido al sufrimiento que experimentaban los que se consideraban justos en contraste con la prosperidad de los impíos (cf.había en el templo para guardar el grano que se había diezmado (cf. el cual les permite vencer a la carne y manifestar la justicia divina (Ro. 3:11)—así como una buena reputación ante todas las naciones (v. o el mismo. había sido desobediente. 10–12. Prueba de la amonestación: Apoyaban la maldad (3:14–15) Este sexto discurso es paralelo. 13:12). V. en muchas maneras. 2:12–13). I d. no para demostrar la justicia propia sino la de Dios.) D. Israel seguía preocupado porque no se castigaba a los pecadores. Esas bendiciones sólo requerían obediencia del pueblo. “vano”. 4:31–35. Sexta denuncia: Temed a Dios (3:13–4:3) A. pero en realidad reprimían la expresión de la justicia personal e interna que Dios exigía (Mt. Esos legalistas se dedicaban a realizar ciertos ritos estrictos y se abstenían de algunas cosas para reivindicarse ante Dios. afligiéndose como enlutados en presencia del Señor. 13–15). 9:6–12. 12).T. el sexto discurso acusa al pueblo de hablar palabras … violentas contra Jehová. 10:38. sugerían de forma sutil que Dios era quien no había cumplido sus promesas. Hacían alarde de que se habían arrepentido de sus malas obras. 6:6. habla de dar y ser generoso. Dios sí espera una obediencia externa. 8:1–17. mencionada en este oráculo. Dt. Esto indica no sólo que el juicio de los impíos será inescapable. acordaos (zāḵar) se usa 14 veces en Deuteronomio para exhortar al pueblo a cumplir la ley. 7:6. entonces la actitud y hablar de ese grupo contrasta con la gente que se describe en los vv. E. pero quizá tenía que ver con renovar la perspectiva de la fidelidad de Dios. Dn. será como la luz del mediodía para los justos. Mal. Israel había visto a Dios intervenir decisivamente juzgando y liberando (e. 66:15. el día de Jehová que será como fuego para los impíos. 19:5–6. dejar de existir por completo (porque los impíos resucitarán. cf. 4:1. En el reino. “salud o restauración”) que traerá en sus alas (o “rayos”. de los levitas). Este mandato puede . 3:8). que es semejante a los saludables rayos del sol. como sucedió en otras polémicas relacionadas con el mismo tema (cf. esta exhortación final es directa y certera. Se desconoce lo que cada uno dijo a su compañero. se comparan con estopa a la que no le queda raíz ni rama. 73. sino aporta una contundente conclusión a la cínica pregunta de los infieles. 12:13–14). La frase el Sol de justicia aparece sólo aquí en la Biblia. En el pasado. de la misma palabra hebr. Advertencia y promesa de Dios (3:17–4:3) 3:17–18. El libro de memoria destaca el hecho de que hay en el cielo un memorial permanente con la respuesta fiel y reverente de los que temen a Dios. Esta esperanza anima a los justos y fortalece su temor de Dios. El pueblo de Dios será restaurado y renovado espiritualmente. No obstante. La imagen de los becerros que pastan felices después de ser recogidos (como manada) en el establo. El temor reverente a Dios ejemplifica el tipo de respuesta que Jehová esperaba de los oyentes de este discurso. 3:19–20). Sof. Pero si no. El hecho de que será ardiente remarca no sólo su intensidad. En contraste. Preparación presente (4:4) 4:4. 14:4–7. parecen referirse de manera general al tema del día de Jehová. sino también su propósito purificador. Aunque muchos comentaristas aplican estas palabras a Cristo. expresa la futura satisfacción y regocijo de los justos (cf. Ec. 13–15. que decían: “¿qué aprovecha que guardemos su ley?” (3:14) VIII. 14:2. 1:18. la justicia resplandecerá como el sol. Mt. Is. así como su amor por los suyos. Esos eventos marcaban la distinción entre los justos y los impíos. aquí se remarca la destrucción de los impíos (cf. A los justos se les denomina los que teméis mi nombre (cf.e. el éxodo. Malaquías da más detalles acerca del día de Jehová. A la luz de todo lo dicho en relación con el pacto mosaico y la preocupación de Malaquías de que el pueblo fuera fiel y obediente al pacto. el futuro día de Jehová traerá un juicio mucho más amplio contra los malignos y los justos serán su “especial tesoro” cuando sean liberados y resucitados en el reino. el comentario acerca de “mi nombre” en 1:6). 9:13–15.g. 135:4). cf. 25:46). “temor” en 3:5 y “temen” en 3:16. La salvación (marpē’. entonces los justos se arrepintieron de sus palabras violentas y fueron fortalecidos en su fe. Am. que aparece como “temible” en 1:14. Sof. Los que temen a Dios (v. Conclusión: Estad preparados para la venida del Señor (4:4–6) A. Esto no significa la aniquilación.. Os. 12:2). Sal. 65:17–25. y el retorno). Temer a Dios contrasta totalmente con las palabras violentas dichas contra él en 3:13. Is. que hace hincapié en la purificación de Israel (en particular. “el día” en 4:5) es el día de Jehová. el exilio. cumpliéndose así el propósito original de Dios para Israel (Éx. El hecho de que el mensaje se dirige a los justos y no a los impíos. Esto nos brinda la seguridad de que cuando Dios trate con ellos no olvidará su sumisión a él. i. Tan completo será el juicio. Será un tiempo de castigo contra los impíos y liberación de los justos (y los perdonaré). sino una absoluta exclusión del reino de Dios para los impíos (cf. 4:3. No será un fuego que arda sin control. Los justos hollarán a los malos como ceniza bajo las plantas de sus pies. A diferencia de 3:2–3. 26:18. Sal.manera los dos grupos son idénticos. ellos podrán discernir la diferencia entre el justo y el malo. “Teméis” es trad. Como en 3:2–3. indica el desagrado de Dios contra los malos. NVI99) se refiere al poder restaurador de su justicia. 4:2. El vb. el juicio de ese día se describe como un horno. 3:15). que los impíos (los soberbios y los que hacen maldad. 16) llegarán a ser su especial tesoro en el día que él actúe. Como consecuencia. “El día” (que también se menciona en 3:2 y 4:1. Mateo (Mt. 106:19).”. para hacer volver los corazones de los padres a los hijos. evocar y obedecer). Como resultado del ministerio de los dos testigos. aunque admitió que él había sido enviado a preparar el camino del Señor (Is. 17:11) o alguien que tendrá su espíritu y poder (como Juan. Dios prometió a través de Malaquías que el profeta Elías vendría y ministraría al mundo antes del día de Jehová.) Este es el único pasaje en los profetas que habla del ministerio futuro de Elías. Elías viene primero y restaurará todas las cosas” (Mt. “Diccionario teológico de palabras del A. Jesús añadió: “Mas os digo que Elías ya vino. En Mateo 17 se presenta una solución a este problema. o (c) repetir o recitar algo (Theological Wordbook of the Old Testament. obviamente hablando después de la muerte de Juan (cf. Esto parece unir las dos profecías (Mal. 17:11). Juan explícitamente rechazó que él fuera Elías (Jn. Muchos comentaristas han vinculado esta profecía con 3:1. (V. afirmó: “A la verdad. 5:23–31). a ese futuro Elías está en Apocalipsis 11:1–13. . para preparar al Señor un pueblo bien dispuesto” (Lc. Incluso cuando Cristo lo llamó “Elías quien había de venir”. Sin embargo.11:14). La última opción parece preferible. 1:17). 14:1–2). No obstante. que habla de los dos testigos que aparecerán en el tiempo de la tribulación. 40:3. Mt. Esa expectativa futura indica que Malaquías 4:5–6 no se cumplió en el ministerio de Juan. A la luz de la insistencia de Malaquías en la obediencia del pueblo. 3:1) que preparó la venida del Señor. Jesús. Él bondadosamente aceptó la función de Moisés como mediador profético en la revelación de su ley (Dt. La solución a todo esto parece ser que aunque Juan no cumplió cabalmente la profecía de Malaquías 4:5–6 (porque Elías todavía está por venir). y sus discípulos entendieron que hablaba de Juan el bautista (Mt. 17:12).T. así que otro precursor parecido a Elías vendrá antes del día de Jehová. el comentario de Ap. Después que Elías apareció con Cristo en la transfiguración.T. Es difícil determinar si el personaje que vendrá es Elías mismo (como quizá se indica en Mt. B. un ángel predijo que él ministraría “con el espíritu y el poder de Elías. 1:21–23). 3:1. 3:1 y 4:5–6) y aceptar que se cumplen en Juan el bautista. Sal. 5:2. Israel no aceptó a Juan el bautista como Elías. 11:3–6. la opción (b) parece ser la que da fuerza a este mandato: “¡Recuerden y obedezcan!” La referencia a Moisés mi siervo no sólo habla de la lealtad de ese legislador (He. 3:5) sino también recuerda al lector que el Dios Todopoderoso (Mal. ya que Cristo se refirió a él simplemente como Elías. 17:12). (b) acordarse y actuar externamente en consecuencia (i. sub verbo “zāḵar”. Mal. 3:1). Pero ¿se debe considerar a Juan el bautista como el que cumple a cabalidad la profecía acerca de Elías? (Mal. También es el Dios vivo que dio los diez mandamientos en Horeb (antiguo nombre del monte Sinaí. 1:241). 4:5–6) Antes de que Juan naciera. Preparación futura (4:5–6) 4:5–6. Mt.e. Dt. Elías fue un tipo de Juan en virtud de la gran similitud que hay entre el Elías de 4:5–6 y el mensajero (Juan el bautista) de 3:1..referirse a: (a) Recordar o poner atención mental en algo. el restaurador de todas las cosas. 4:3) es el mismo que manifestó sus juicios y salvación en tiempos del éxodo. Quizá Juan estaba ampliando la expectativa de Elías para presentarla más bien como un ministerio como el de Elías-Eliseo (cf. de tal modo que el corazón de los padres se unirá con el corazón de los hijos. donde habla del mensajero que prepararía el camino del Señor. mucha gente se arrepentirá. y de los rebeldes a la prudencia de los justos. el comentario en “Principales problemas de interpretación” en la Introducción a Joel. 11:7–10) específicamente afirma que Juan el bautista era ese mensajero (Mal. La más cercana referencia del N.). los discípulos preguntaron acerca de la futura venida de ese Elías. Tal arrepentimiento le traería beneficios y no sufrimientos en el día venidero de Jehová. Éx. y no le conocieron” (Mt. Ese arrepentimiento significa que no experimentarán el juicio de Dios en el día del Señor. 17:13). El pueblo de tiempos de Malaquías necesitaba renovar su temor de Dios así como arrepentirse y ser fiel al pacto. Sin embargo. condicionó esa designación con la frase “si queréis recibirlo” (Mt. ). “El Mensaje de Malaquías para hoy”. Oswalt. “Malaquías: El Inmutable Amor de Dios”. “Introducción a los profetas del A. Chicago: Moody Press. (3 vols. C. Joyce G.P.F. Reimp. John. . Reimp. 1976. Downers Grove. BIBLIOGRAFÍA Baldwin. The Minor Prophets. Wheaton. “Los profetas menores”. J. Herbert. Vol. 1982. Ill. Ese juicio. en 10 volúmenes”. Victor Books. Grand Rapids: Zondervan Publishing House. Zechariah. Grand Rapids: Wm. Smith. Kaiser. T. Chicago: Moody Press. 1972. Charles L. así como en el pacto ofrecido por gracia. 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