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March 17, 2018 | Author: Briam Sting Mallqui Espiritu | Category: Forests, Spain, Taxonomy (Biology), Aluminium, Ecology


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Invest Agrar: Sist Recur For (2006) Fuera de serie, 111-123Estudio comparado de la diversidad florística en masas de origen natural y repoblado de Pinus sylvestris L. en la Sierra de Guadarrama (Sistema Central) L. Jiménez Bailón1*, F. Martínez García2 y M. Costa Tenorio3 Centro de Investigaciones Ambientales de la Comunidad de Madrid «Fernando González Bernáldez». Almendro, 1. 28791 Soto del Real (Madrid). España 2 Instituto Pirenaico de Ecología CSIC. Avda. Regimiento de Galicia, s/n. 22700 Jaca (Huesca). España Departamento de Biología Vegetal I. Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad Complutense de Madrid. José Antonio Novais, 2. 28040 Madrid. España 1 3 Resumen El presente estudio tiene como objetivo principal el análisis de las consecuencias ecológicas de las repoblaciones forestales de pino albar desde una perspectiva botánica. Con ello se pretende, además, aportar valiosa información que pueda servir como un elemento más de base para la gestión y restauración forestal encaminadas a alcanzar objetivos de sostenibilidad. A partir de la información existente se han delimitado con precisión las masas naturales y de origen repoblado de pino albar (Pinus sylvestris L.) en la Sierra de Guadarrama. Se ha diseñado un dispositivo de muestreo contemplando ambas situaciones con el fin de estudiar su diversidad, tanto florística como estructural. En el presente trabajo se ofrecen los resultados relativos al estudio comparado de la composición florística de los dos tipos de masas forestales, los cuales apuntan a una mayor diversidad sistemática global de los pinares naturales, así como a una mayor complejidad estructural. Palabras clave: Pinus sylvestris, flora, repoblación, restauración, gestión sostenible. Abstract Comparative study of floristic diversity in original and reforested woods of Pinus sylvestris L. in the Guadarrama mountains (Sistema Central Range) The main aim of this study is to analyse the ecological consequences of reforestation with Scots pine from a botanical standpoint. We also attempt to provide valuable information to be used in forest management and restoration based upon criteria of sustainability. Using the available information, we accurately demarcated the natural and reforested woods of Scots pine (Pinus sylvestris L.) in the Guadarrama mountains. We designed a sampling device taking into consideration both types of populations in order to study the floristic and structural diversity thereof. This paper provides the results of a comparative study of the floristic composition of both types of forests, which would appear to indicate greater global systematic diversity of the natural pine forests and a higher degree of structural complexity. Key words: Pinus sylvestris, flora, reforestation, restoration, sustainable management. Introducción En la Sierra de Guadarrama aparece una de las representaciones más importantes de pino albar de la península Ibérica (Rojo y Montero, 1996), a pesar de * Autor para la correspondencia: [email protected] Recibido: 19-04-06; Aceptado: 11-10-06. lo cual estas masas han sido objeto de pocos estudios botánicos, debido a que, históricamente, han sido consideradas como masas repobladas. Lejos de esta idea, los datos paleobotánicos e históricos de los que se dispone han demostrado la presencia de formaciones naturales de pino silvestre en todo el Sistema Central, cuya extensión habría ido disminuyendo progresivamente a causa de la deforestación . al tratarse de un posible espacio protegido en el que la gestión forestal debe estar especialmente encaminada a la conservación de los ecosistemas (Arrechea. 2005).s.. 2002). 1990).n. Además.m. 111-123 provocada por actividades humanas (Martínez García. en la Sierra de Guadarrama. con estas actuaciones. y más concretamente el análisis de la biodiversidad y la estructura de los ecosistemas. el área de estudio pertenece a los subtipos VI (IV)2 o Nemoromediterráneo genuino. Han sido muestreadas las masas de Pinus sylvestris de las vertientes sureste y noroeste de dicha sierra. trascurrido más de medio siglo. Hofstede et al. ya que habían sido previamente desarboladas como consecuencia de las actividades antropozoógenas tradicionales (Martínez García. desde el punto de vista florístico y ecológico. 2002). y si se ha conseguido. 2004.s. parte del área de estudio ha sido propuesta por las comunidades de Castilla y León y Madrid para formar parte del Espacio Natural Protegido «Sierra de Guadarrama» (BOCL. Como consecuencia se produjo un incremento en la superficie de las masas artificiales. en las zonas de media montaña.n. especialmente si se tiene en cuenta que las masas de pinares de Pinus sylvestris son la formación más abundante de todo el área. que corresponde con parte de los pisos supramediterráneo y oromediterráneo. La idea clásica apoyada por Rivas-Martínez (1987) del origen artificial de las masas de Pinus sylvestris presentes en cotas inferiores a. los estudios botánicos realizados en masas artificiales constituyen un elemento importante de cara a su gestión presente y futura así como frente a próximas actuaciones en áreas de condiciones ecológicas análogas.m. La mayoría de estas repoblaciones se realizaron en áreas en las que principalmente había pasto o piorno (Cytisus oromediterraneus). dominadas por granitos y gneises. 1700 m. contrasta con la tesis sostenida y demostrada por Martínez García (1999) de la existencia de masas de origen natural de pino albar en cotas más bajas. 1999). Actualmente. en áreas de cumbre (Allué. Por ello. 1990). 2002). si bien realmente no se han realizado estudios botánicos exhaustivos en el área mediterránea encaminados a evaluar las consecuencias y la evolución de estas masas artificiales. En ella se distinguen las masas consideradas tanto naturales como artificiales por gran parte de la comunidad científica (Martínez García. Material y Métodos El área de estudio se localiza en el centro del Sistema Central español. VIII (VI) u Oroborealoide subnemoral. aspectos que necesariamente han de ser tenidos en cuenta a la hora de evaluar el impacto de las repoblaciones forestales (Zavala et al. un bosque maduro (Arrechea. las consecuencias y evolución de las masas forestales repobladas con Pinus sylvestris en áreas de distribución natural de la especie. Altitudinalmente se localiza entre los 1. Para la identificación de masas repobladas y naturales de Pinus sylvestris se ha seguido el criterio presentado por Martínez García (1999). las nuevas perspectivas en restauración y gestión del bosque en el área mediterránea consideran el estudio de la respuesta de los ecosistemas forestales desde el punto de vista ecológico. hasta las efectuadas a finales del siglo XIX y a lo largo del XX. Geológicamente está constituida por rocas de carácter ácido. el principal objetivo del presente estudio es analizar. en el cual se parte de la cartografía forestal elaborada por Ceballos et al. Estos resultados aportarán valiosa información que sirva de base ecológica para el diseño de estrategias encaminadas a una gestión sostenible de las masas repobladas preexistentes así como para nuevas actuaciones restauradoras. De todo lo anteriormente expuesto puede deducirse que la elección de la especie utilizada para repoblar fue correcta. BOCM. Actualmente. en 1966.112 L. De este modo. 1999). 2002). el estudio de las consecuencias ecológicas de los pinares artificiales en la Sierra de Guadarrama adquiere mayor relevancia. . La repoblación forestal ha sido la práctica de restauración a gran escala más extendida en la mayoría de los países mediterráneos (Vilagrosa. / Invest Agrar: Sist Recur For (2006) Fuera de serie. en este contexto. aproximadamente. Jiménez Bailón et al. 2002). ..940 m.240 y los 1. Además de las formaciones naturales. Desde el punto de vista fitoclimático. pertenecientes administrativamente a las provincias de Madrid. en zonas más elevadas que el anterior y X (IX)2 u Oroborealoide termoxérico. A partir de la década de los sesenta del siglo XX la mecanización de las labores forestales repercutió en una mayor eficacia en las tareas repobladoras (Groome. Por ello. Segovia y Ávila. Las primeras fueron de escasa relevancia. 2003. podemos evaluar sus repercusiones y saber cómo ha sido la evolución de estas masas en un periodo de tiempo suficientemente amplio. en la Sierra de Guadarrama existe una gran extensión de masas de origen antrópico originadas por sucesivas campañas de repoblación. En total se han recogido 252 inventarios de vegetación. que consiste en el listado completo de las especies de plantas vasculares que vivían en el interior de la parcela. entre otras. Muestreo Se ha realizado un muestreo diferenciando a priori. Flora der Schweiz (Heß et al. masas de pinares naturales y repoblados. para aquellas familias recogidas en los tomos actualmente publicados. . En éstas se ha recogido información biótica. han sido utilizadas diversas revisiones de géneros. Además. 1967-1972) o Flora Vascular de Andalucía Occidental (Valdés et al. El procedimiento seguido para la elección de las parcelas puede otorgar cierta subjetividad. . 1964-1980). 1). I-VIII. Localización de los inventarios de los pinares naturales y de repoblación realizados. 1982). entre otros. Flora d’Italia (Pignatti.. Los realizados en pinares repoblados se efectuaron durante los meses de primavera y verano del año 2001. si bien este inconveniente se ha tratado de paliar realizando un número elevado de inventarios. intentando recoger la máxima representatividad en cuanto a la diversidad fisonómica de los pinares así como a la proporcionalidad en cuanto a la superficie ocupada. la inestimable Prádena Matabuena Navafría Sotosalbos Torrecaballeros Palazuelos de Eresma San Ildefonso Lozoya Alameda del Valle Canencia Rascafría Bustarviejo Miraflores de la sierra El Espinar Cercedilla Navacerrada Guadarrama Peguerinos San Lorenzo de El Escorial La Acebeda Braojos Gascones Parcelas de pinares de repoblación Parcelas de pinares naturales Figura 1. Asimismo. y los pertenecientes a masas naturales han sido extraídos de la tesis doctoral de Martínez García (1999). La elección de la ubicación de los inventarios en cada tipo de pinar se realizó sobre el terreno. El trabajo de campo se llevó a cabo en parcelas cuadradas de 20 m de lado. utilizando el índice de abundancia-dominancia. 1995a. 1986-2005). I-V (Tutin et al. Para la determinación del material herborizado ha sido utilizada como obra de referencia Flora Iberica vols.. A cada una se le asignó un valor de cobertura. 1987). X y XIV (Castroviejo et al. de los cuales 137 corresponden a pinares naturales y 115 a masas de repoblación (Fig. el origen artificial de las masas consideradas como repobladas ha sido cotejado mediante los proyectos de ordenación y el II Inventario Nacional Forestal (varios autores.Consecuencias ecológicas de las repoblaciones de pino albar en la Sierra de Guadarrama 113 Por otro lado. según la escala propuesta por Braun. 1973-1984). así como Flore de France (Guinochet. Para las restantes se ha seguido principalmente el criterio de Flora Europaea vols. . 1995c).Blanquet (1979). 1995b. H’cobertura = –Σ pi · lnpi ci siendo pi = — — — Ci siendo: ci = cobertura de la especie i en el inventario Ci = cobertura total del inventario Los espectros taxonómico y corológico se analizan desde un punto de vista tanto cualitativo como cuantitativo. El análisis de la diversidad se elabora por un lado a partir de la riqueza de especies y por otro mediante el índice de diversidad de Shanon-Weaver (ver expresión 1). una diferencia significativa para la altitud media a la que aparecen (naturales = 1. Sin embargo. repoblados = 1.200 y 1. Además.83. Estos resultados indican que dichas repoblaciones se han llevado a cabo áreas de distribución natural de Pinus sylvestris. se analiza la abundancia. Por otro lado. Por otro lado.s. considera las repoblaciones de pinar en altitudes entre los 1.5% y finalmente al índice 5 (entre 75 y 100%).. 111-123 colaboración de especialistas. la escala de Braun-Blanquet ha sido transformada asignando a cada índice el valor medio del intervalo que comprende. se le asigna 87.s.º de inventarios por rango altitudinal Repoblados Naturales 25 Figura 2. de una manera más precisa.s.n. por un lado una mayor amplitud en el rango de distribución altitudinal de las masas naturales muestreadas (Fig. calculado en función de la cobertura de las especies (H’cobertura) (Cabello et al. mientras en el segundo. y en segundo lugar se lleva a cabo un análisis estructural. a 4 (entre 50 y 75%).5%. Jiménez Bailón et al. Rivas-Martínez (1987). p = 0. se realiza un análisis por estratos y por biotipos en aras de detectar. / Invest Agrar: Sist Recur For (2006) Fuera de serie. Número de inventarios por cada rango altitudinal en pinares naturales y artificiales. co1900-1950 1850-1900 1800-1850 1750-1800 1700-1750 Rango altitudinal (m) 1650-1700 1600-1650 1550-1600 1500-1550 1450-1500 1400-1450 1350-1400 1300-1350 1250-1300 1200-1250 0 5 10 15 20 N. se le asigna 5%.608.700 m.n. Análisis de los datos En un primer apartado se ofrecen los resultados referentes tanto a la distribución altitudinal como geográfica en masas naturales y repobladas. además. [1] Resultados y Discusión Análisis de la distribución altitudinal y geográfica La distribución altitudinal de las masas de Pinus sylvestris pone de manifiesto.m. a 2 (entre 10 y 25%). existiendo. En este análisis se evalúan las coberturas de Pinus sylvestris. 2). 1991).555. expresión particularmente adecuada para el estudio de la vegetación en términos de cobertura (Margalef. ha hecho posible la identificación del material de grupos con problemas taxonómicos.5% (Gounot. se le asigna 62. se le asigna 17. a 1 (entre 1 y 10%).5%. así como las de los táxones que forman parte del cortejo florístico del pinar en cada inventario. se le asigna 0. se le asigna 37.n. Para ello. se observa que las masas artificiales muestreadas se presentan con mayor frecuencia en cotas altitudinales superiores.. La estructura de la formación se ha analizado a partir de los valores de cobertura de todos los táxones. calculada como el sumatorio de los valores de cobertura de cada taxon. aproximadamente.30 m. .5%.. en el cual se valoran la diversidad florística y los espectros taxonómico y corológico. 1969).114 L..29 m. t = 2.. 1998). a 3 (entre 25 y 50%). se ha elaborado un listado completo con todos los táxones identificados en las 252 parcelas muestreadas. así al índice + (cobertura menor de 1%). las diferencias estructurales existentes entre ambos tipos de masas. En primer lugar se realiza un análisis florístico.m. El primero hace referencia al número de táxones.005).m. Dev. aproximadamente a partir del Puerto del Reventón. N ± 1. Dado que los muestreos pueden considerarse cuantitativamente representativos.53 para naturales y 30. . Comparación de valores medios del número de táxones por inventario en masas repobladas (R) y naturales (N). la localización de las masas artificiales del área de estudio en zonas de distribución natural de pino albar.000012). mientras que las naturales predominan hacia el SO del mismo.Consecuencias ecológicas de las repoblaciones de pino albar en la Sierra de Guadarrama 115 mo «posiblemente negativas». Así. Dev. pero los valores por parcela sean semejantes entre ambos tipos de masas. cuyo valor medio es de 2. ya que no se han detectado diferencias significativas en cuanto a la riqueza de especies por parcela.001).00 * Std. En los pinares repoblados. En el análisis de la diversidad se constataron diferencias estadísticas signif icativas (t = –4. Análisis florístico Análisis de la diversidad En total han sido identificados 404 táxones. el número de táxones encontrados suma 288.73) (Fig. Además se ha comprobado que existe un efecto estadísticamente significativo de la cobertura de pino albar sobre la riqueza de especies (F = 3. Esta menor diversidad en masas repobladas estaría relacionada con la abundancia de los táxones. 3). Figura 4.34.0 2. frente al de repoblados que es de 1. Mean Figura 3. de los cuales 403 han sido identificados a nivel infragenérico.52. Estos resultados concuerdan con las teorías sostenidas por Navarro Re- 65 55 Gráfico de valores medios 3.2 1.96 * Std. Dev.08. debido a la dificultad en la determinación de parte del material herborizado.00 * Std. p = 0. Dev. siendo mayor la diversidad en masas naturales.6 Gráfico de valores medios 45 35 25 15 5 -5 R ± 1. hemos creído más riguroso tratarlo a nivel genérico.0 0. mientras que en las masas naturales 342. siendo mucho más acusado en coberturas de de pino silvestre entre el 75 y el 100%. El hecho de que la riqueza global de los pinares naturales sea mayor que la de los repoblados. Según Margalef (1991) existe una correlación negativa entre la diversidad y la manifestación de dominancia de algunos táxones. Comparación de valores medios de diversificación de Shannon-Weaver en masas repobladas (R) y naturales (N).11 para repoblados. N ± 1. 4). Por tanto. la dominancia en términos cuantitativos de unos pocos táxones frente al resto de especies que componen el cortejo florístico en masas repobladas. mientras que uno Taraxacum Weber.6 R ± 1. En ambos casos el efecto de la cobertura de pino es negativo. si tenemos en cuenta el número de táxones presentes por inventario no existen diferencias estadísticas significativas para un test de la t de Student (t = 0. Mean 2. no supone un impedimento de cara a su integración en el paisaje vegetal de la Sierra de Guadarrama. p = 0. p = 0.96 * Std. En cuanto a la distribución geográfica se observa un predominio de las masas de repoblación en la zona NE de la sierra. Sin embargo.82 (Fig.4 1. Este hecho estaría asociado a una mayor heterogeneidad ambiental presente en las masas naturales. indicaría que dentro de las masas naturales aparece una variabilidad florística mayor.8 1. es decir 54 especies más que en los anteriores. p < 0.015) y sobre la diversidad florística (F = 61. los resultados que subyacen del análisis altitudinal de las masas muestreadas refutarían esta teoría.86. explicaría la menor diversidad de éstos en comparación con las masas naturales.46. siendo los va- lores medios para esta variable 29. 5 534.08 1.10 100 Compositae Gramineae Leguminosae Caryophyllaceae Rosaceae Scrophulariaceae Lamiaceae Rubiaceae Umbelliferae Cruciferae Crassulaceae Campanulaceae Violaceae Cistaceae Liliaceae Geraniaceae Ranunculaceae Total general 48 45 30 28 24 16 14 12 11 10 9 7 6 6 5 4 4 342 14.25 0.08 1.68 4.01 1. Huesa et al.04 2. si bien el orden de éstas. Lo mismo ocurre con las gramíneas.81 4.29 8.5 272.5 1. Jiménez Bailón et al.19 7.0 83.40 100 7.0 2. Cytisus oromediterraneus es el taxon que mayor cobertura ocupa.0 3.81 0. las familias más diversas corresponden a Compositae. 111-123 yes (1998).02 4.0 245.46 1.5 3.796.89 17.20 2.0 567.82 2.0 1.5 170.0 307.74 100 .60 6.42 1.56 8.75 1.68 2.5 125.22 1.5 2.0 554.105. podría atenuar la diferencia en cuanto a la diversidad florística. (1998) entre otros. Gramineae. existente entre ambos tipos de masas. por orden descendente. es una de las principales consecuencias ecológicas de las repoblaciones forestales estudiadas.04 1. cuya cobertura de pino albar es menor.5 697.. / Invest Agrar: Sist Recur For (2006) Fuera de serie.89 2. rubra.77 8. el manejo de estas masas artificiales encaminado a alcanzar un modelo estructural similar a las formaciones naturales adultas. Espectro taxonómico Espectro corológico En la Tabla 1 se relacionan.62 0.5 244.09 3.54 15.90 0. Tanto en masas naturales como en repobladas Pinus sylvestris y Pteridium aquilinum son los táxones de mayor relevancia cuantitativa de las familias Pinaceae e Hypolepidaceae respectivamente.63 2.0 33.50 2.47 5. Esta menor diversidad.39 1. Para Leguminosas. en cuanto al número de táxones que aporta cada una varía ligeramente.5 174.5 189. En ambos casos.75 1. Cualitativamente.63 7. Para ello se han agrupado todos los táxones identificados en ocho unidades corológicas.51 3.14 3.17 1.052. Leguminosae y Caryophyllaceae.56 0. A partir de estos datos se desprende que cuantitativamente no existen diferencias significativas entre ambos tipos de pinar.35 17.5 810.39 2.0 433.5 431. las familias mejor representadas cuantitativamente.07 2.22 2.08 1.6840. que consideran la elevada densidad de plantación de pinos como uno de los factores que determina la pérdida de diversidad en estos ecosistemas.74 3.0 770. ya que este parámetro ha sido reconocido como un importante criterio para valorar la sostenibilidad del manejo forestal (Castillo et al.5 395. En este sentido.5 525.5 211.666.17 100 39 45 21 24 19 10 15 10 5 11 6 4 6 3 6 4 5 288 13.0 507.0 461.0 45.04 13.05 1. Gramineae.37 2.963.49 14.47 1.5 1.116 L. 2003).76 1.33 6.5 20.92 2.41 4. tanto en los pinares de repoblación como en los naturales.05 1.º de táxones N %N R %R Pinaceae Gramineae Leguminosae Hypolepidaceae Cuppresaceae Juncaceae Caryophyllaceae Compositae Fagaceae Rubiaceae Cistaceae Polygonaceae Ericaceae Lamiaceae Scrophulariaceae Rosaceae Cruciferae Total 7. Leguminosae y posteriormente Hypolepidaceae como las Con objeto de poner de manifiesto la participación de los diferentes elementos corológicos en los dos tipos de pinares muestreados se ha realizado un análisis de la distribución geográfica de las especies.16 8.963.75 1. seguido de Genista florida en masas naturales y Adenocarpus hispanicus en repobladas.0 177.55 1.079.5 185.0 128. Por un lado se ofrece el número total de táxones presentes en cada uno de los Tabla 1.29 3.6 3.57 3.5 206.637. Valores cuantitativos y cualitativos de las familias más representativas de pinares naturales (N) y repoblados (R) Cobertura Familia N %N R %R Familia N. destacan Pinaceae. en las que destacan Deschampsia flexuosa y Festuca gr.17 0.21 3.17 1. familias más importantes en la estructura de las masas.47 1. 0 34. Luzula lactea.713. Análisis corológico cuantitativo. El elemento euroasiático es el segundo en número de especies. Como táxones importantes cuantitativamente del elemento mediterráneo aparecen. Otros 0 .0 2.0 20. que es ligeramente superior en pinares naturales.3 1. 5 y 6).6 0.2 3.1 9.0 568.4 51.6 36.2 100.3 4.0 1.930.963.2 7.0 46. A continuación sigue el elemento mediterráneo.3% del catálogo.º de táxones Euroasiático Mediterráneo Circumboreal Cosmopolita Mediterráneo-Atlántico Paleotemplado Paleotropical Otros Total 8. Los pinares naturales presentan más táxones circumboreales que los pina60 50 Porcentaje N. Esto es debido principalmente a los valores de cobertura de Pinus sylvestris.5 320.1 7.5 100. en repoblados: Deschampsia flexuosa . Análisis corológico cualitativo.5 1.5 445.288.172.083. Además se muestran los valores porcentuales relativos a cada tipo de pinar (Tabla 2 y Figs. Tanto cualitativa como cuantitativamente no se han detectado diferencias importantes entre ambos tipos de pinares.0% del catálogo). es el elemento euroasiático el más abundante en ambos casos.4 4.3 49.0 80 175 25 15 14 26 2 5 342 23.6 9.6840.0 grupos y por otro el sumatorio de sus coberturas correspondientes. el mayor número de especies presentan una distribución mediterránea: alrededor del 50% de los táxones de cada tipo de pinar son mediterráneos (175 táxones para naturales. y en especial de estos táxones. cosmopolita y mediterráneo-atlántico.2 100.8 31.1 0. Cuantitativamente.9 5.4 7. lo que supone un 49.6 1. mediterráneo-atlánticos y paleotemplados.0 0.0 4. Cytisus oromediterraneus .0 42.5 13. y como cabía esperar.º de taxones res repoblados. Valores cualitativos y cuantitativos de cada uno de los elementos corológicos presentes en pinares naturales (N) y de repoblación (R) Cobertura Elemento corológico N %N R %R N %N R %R N.Consecuencias ecológicas de las repoblaciones de pino albar en la Sierra de Guadarrama 117 Tabla 2. 80 para naturales o el 23.6 5.1 0. si bien en repoblados aparecen más cosmopolitas.247.2% y 141 en repoblados.4% y 70 táxones en repoblados lo que supone el 24.0 9.0 70 141 14 16 16 26 1 4 288 24.8 6. y en menor medida Juniperus communis subsp. lo que supone un 51.9 2.1 0. si bien la abundancia de este elemento.0 426.5 7. al igual que los elementos circumboreal.0 20.1 2.0 5.0 1.5 0.5 1.9 2. alpina . al contrario de lo que ocurre con el número de especies. Figura 6. es mayor en masas repobladas.052. Cualitativamente. Avenula sulcata y 60 50 Porcentaje 40 30 20 10 Análisis cuantitativo 40 30 20 10 MediterráneoAtlántico Paleotropical Paleotemplado Otros Circumboreal Mediterráneo Euroasiático Cosmopolita 0 MediterráneoAtlántico Paleotemplado Paleotropical Circumboreal Mediterráneo Euroasiático Repoblados Naturales Cosmopolita Repoblados Naturales Figura 5.0 53.4 100.0 443. Comparación de valores medios de cobertura de Pinus sylvestris L. Figura 8.96 * Std.00 * Std. siendo la cobertura media por inventario en las masas naturales de 51. Deschampsia flexuosa. Comparación de valores medios de cobertura del cortejo florísico en masas repobladas (R) y naturales (N). siendo la media de 101. resultaría revelador un análisis de distintos grupos de edad y tipos de maGráfico de valores medios 130 110 90 180 140 100 70 50 30 10 R ± 1.6% de los pinares repoblados presentan una cobertura de cortejo menor del 50%. Este hecho podría explicarse por los requerimientos ecológicos de este tipo de especies. y en naturales: Cytisus oromediterraneus.96 * Std. La cobertura del cortejo florístico también presenta diferencias signif icativas (t = –4. Por otro lado se ha comprobado que existe un efecto estadísticamente significativo de la cobertura de pino albar sobre la cobertura del cortejo florístico (F = 20. El elemento circumboreal es más abundante en naturales debido a que los valores de Festuca gr.17. 8). Dev. N ± 1. rubra alcanzan el doble en naturales que en repoblados. No obstante. la diferencia entre ambos tipos de pinares no es sustancial. principalmente circumboreales. 111-123 Tabla 3. Jiménez Bailón et al. así como endémicos. en cuanto al enriquecimiento de este tipo de táxones. si bien es algo mayor en masas naturales (Tabla 3). que presentan un mayor grado de madurez y una menor alteración del medio que las de origen artificial. Pteridium aquilinum presenta una cobertura de casi el doble en naturales. Luzula lactea y Cistus laurifolius.118 L. N ± 1. El efecto de esta variable es negativo. Con el elemento cosmopolita sucede lo mismo. / Invest Agrar: Sist Recur For (2006) Fuera de serie. y una menor cantidad de especies cosmopolitas. 7). Así.33% Análisis estructural En cuanto a la cobertura de pino. Además. Las elevadas densidades de pino existentes en general en las repoblaciones dan lugar a una disminución drástica de la raGráfico de valores medios Cerastium ramosissima.46 para naturales y 80. Mean Figura 7.025.88.001) (Fig. Quercus pyrenaica. Dev. Los datos anteriores muestran una tendencia de las masas naturales a presentar un mayor número de táxones relictos. Porcentaje de táxones endémicos en cada tipo de pinar Endemicidad Repoblados Naturales nejo de las masas repobladas que pueda reflejar si éstas presentan una tendencia. siendo mucho más acusado en coberturas de pino silvestre entre el 75 y el 100%.001) (Fig. Endemismo de la Península Ibérica + Endemismo Ibero-Francés + Endemismo Norteafricano 19. en masas repobladas (R) y naturales (N).00 * Std. mientras que en los naturales esto ocurre sólo en el 3% de los inventarios. la menor importancia cuantitativa del cortejo en masas artificiales se refleja en que un 22. y por otro a la ausencia en muchos casos de las labores selvícolas posteriores encaminadas a obtener masas de menor densidad de pino albar.4% Endemismos de la Península Ibérica 13. Este sería el caso de las masas naturales.001). Genista florida.24. p < 0. Esto se debe por un lado al elevado número de pies por hectárea que habitualmente se plantan en las repoblaciones. p < 0. sí aparecen diferencias estadísticamente signif icativas (t = 6.76% 14. .20 para repoblados.55 y en las repobladas de 66. p < 0. los táxones relictos y endémicos suelen requerir ambientes ecológicamente más conservados. Mean 60 20 -20 R ± 1. al no existir diferencias significativas. Dev. Dev. Para el número de endemismos. Genista cinerascens.54% 20. 27 58. Los pinares artificiales presentan una mayor cobertura en el estrato arbóreo.00 244.76 40. Cistus laurifolius.95 0.01 146.01 68. Cerastium ramosissima.53 146. Este hecho impide el establecimiento y supervivencia de las plántulas.50 991.17 1. lo que provoca una disminución en cuanto a la abundancia de táxones así como una disminución en la diversidad (Navarro Reyes. ballota. rubra.840. Sorbus aucuparia y Acer monspessulanum .00 789.43 Arbóreo Arbustivo Herbáceo 56.24 8. No obstante.523.00 1. para poder explicar las diferencias detectadas entre ambos tipos de masas.717.512. Pteridium aquilinum subsp. hemisphaerica. la diferencia se invierte.62 0.14 en repoblados y 4. En la Tabla 4 se presentan los datos de cobertura de estos grupos.00 16. los valores cuantitativos de cada biotipo (Figs.50 1. lo cual se debe a la mayor abundancia de pino albar.971.33 35.75 68. Sin embargo.13 39. expresada como la suma de porcentajes de cada parcela procedentes de la transformación de la escala de Braun-Blanquet.43 diación solar que penetra bajo el dosel arbóreo. Los táxones más abundantes estadísticamente en repoblaciones son entre otros.76 153. 9 y 10).00 143. de manera que cuantitativamente este estrato es más de 2 veces más abundante en masas naturales.25 9.095. Si eliminamos del análisis la especie Pinus sylvestris.00 1. Análisis cuantitativo por estratos.407.37 19. diferenciando además. De ellos.00 20. 1998). Analizando más exhaustivamente las diferencias estructurales se comprueba que existen 65 táxones cuyas coberturas presentan diferencias estadísticas significativas entre ambos tipos de masas.16 0. mientras que en el caso de los táxones más abundantes en repoblaciones.50 56. Esta simplificación en la estructura de las masas repobladas frente a las naturales.00 Total 153.00 77. florida.50 4. Espectro de biotipos Un análisis cuantitativo por estratos del cortejo florístico nos permite ver realmente donde se encuentran las diferencias estructurales entre los dos tipos de pinares. junto a la pérdida de diversidad y riqueza. estos táxones presentan coberturas hasta un 13% mayores en masas naturales que repobladas. Ilex aquifolium . Algunos ejemplos de especies significativamente más importantes en pinares naturales son Quercus pyrenaica.00 4.862. Quercus ilex subsp. Esta diferencia se debe a una mayor abundancia de táxones tales como Quercus pyrenaica.911.50 515.56 5. si bien únicamente el melojo presenta diferencias estadísticamente significativas en cuanto a la abundancia en ambos tipos de pinares (co80 Porcentaje 60 40 20 0 Arbóreo Arbustivo Repoblados Herbáceo Análisis cuantitativo por estratos Naturales Figura 9.37 17. . entre otras.50 7.31 13.33 32.50 5.80 20. Genista cinerascens.963.17 3. siendo las coberturas medias por estrato de 2. el incremento en cobertura no supera el 1. Genista florida subsp.6%. es uno de los impactos de mayor relevancia en este tipo de reforestaciones. Cobertura. Así. las diferencias de cobertura son mucho más notables en los táxones cuantitativamente más relevantes en masas naturales.93 60. ya comentada anteriormente.78 en naturales. 33 especies presentan mayor cobertura en masas artificiales y 32 en naturales. aquilinum y Festuca gr.14 2. Arrhenatherum album y Juniperus communis subsp. sería conveniente estudiar la relación de estos parámetros con otras variables tales como la edad de la masa o los trabajos selvícolas realizados.Consecuencias ecológicas de las repoblaciones de pino albar en la Sierra de Guadarrama 119 Tabla 4.50 22. por biotipo y estrato en masas naturales (N) y repobladas (R) Cobertura total Biotipo N R N R N R Cobertura media Cobertura media por estratos Fanerófito Nanofanerófito Caméfito Hemicriptófito Geófito Caméfito-Hemicriptófito Hemicriptófito-Terófito Terófito Total general 7. Rubus radula. como Pseudotsuga menziesii . ya que. Rosa blondaeana. Arctostaphylos uva-ursi. Éstas son especies que caracterizan los pastizales anuales. Por un lado. p = 0.09. Este hecho tiene ciertas implicaciones si se pretende llevar a cabo una gestión sostenible de estas masas. no aparecen diferencias significativas. menos exigentes desde el punto de vista edáfico y con una mayor afinidad a los terrenos menos húmedos y estructurados. si bien. Estas suelen ser especies más exigentes. En cambio. Prunus avium y Malus sylvestris. t = –2. desglosando este estrato en los distintos biotipos éstas sí que se aprecian. brachyanthus y Helichrysum stoechas subsp. se han encontra- . actúa como factor limitante para este tipo de táxones. discolores. 111-123 Análisis cuantitativo 60 Porcentaje 40 20 0 CarméfitoHemicriptófito HemicriptófitoTerófito Nanofanerófito Hemicriptófito Fanefófito Geófito Caméfito Terófito Repoblados Naturales Figura 10.55. florida. como parte integrante de la estructura del pinar más conservado. Vaccinium myrtillus. que indican un mejor estado de conservación del ecosistema. Rosa micrantha y Juniperus communis subsp. muchas de ellas de lugares húmedos y protegidos. Adenocarpus complicatus. Thymus x viciosoi. Daphne gnidium. según Navarro Reyes (1998).95 frente a 8. lo que otorga mayor riqueza de arbustos a los pinares naturales. 2004). En cuanto al estrato arbustivo. la realización de trabajos selvícolas encaminados a obtener masas de menor densidad de pino albar. siendo su valor medio de cobertura 19.120 80 L. Los seis primeros táxones son estadísticamente más abundantes en masas naturales. Rubus ser. viscosum. estos táxones deberían ser eliminados.53 frente a 5. hystrix. Según Hofstede (2002). Cistus laurifolius. tales como Cistus laurifolius. stoechas no aparecen en los pinares naturales. Rosa squarrosa. como refleja el análisis estructural de masas naturales. Analizando estadísticamente los valores cuantitativos de cada una de las especies del estrato arbustivo. este es cuantitativamente mucho menor en masas artificiales. Cytisus scoparius subsp. si bien la mayoría de éstas han sido introducidas junto al pino albar en las repoblaciones. Rubus ser. por lo cual era sistemáticamente eliminado. Rosa agrestis.012). ausentes en masas artificiales. discolores.54. por tratarse de especies alóctonas del Sistema Central. Existen algunas especies arbóreas más abundantes en las masas artificiales. Además en masas naturales aparecen otros táxones como Taxus baccata. Rosa sicula. Cualitativamente se observa que hay 21 táxones ausentes en masas artificiales. se observa que presentan una cobertura significativamente diferente en ambos tipos de pinares Genista florida subsp.. Pinus uncinata y Tilia cordata. Esto se debe a que tradicionalmente se ha considerado a la vegetación arbustiva presente en la zona a repoblar como un factor de competencia con el plantón sembrado (Zavala et al. La importancia cuantitativa de los geófitos es mayor en pinares naturales.76 en pinares naturales. son los terófitos las herbáceas que más dominan en los pinares repoblados. la escasez de luz en el interior de estas masas ya adultas. Las principales diferencias se encuentran tanto en geófitos como en terófitos. presentando una cobertura media de 9. En cuanto a los valores de cobertura del estrato herbáceo. podría atenuar las diferencias estructurales existentes entre las masas artificiales en comparación con las naturales. En este sentido. Halimium umbellatum subsp. Dianthus pungens subsp. bertura media repoblados = 1. / Invest Agrar: Sist Recur For (2006) Fuera de serie. Cistus ladanifer. ya que son especies ecológicamente más exigentes. capitatum. Thymus x bractichina. Rumex suffruticosus.62 en masas artificiales. naturales = 3. Genista cinerascens. scoparius. Rubus ser. Además. glutinosa. Análisis cuantiativo del espectro de biotipos.93 en naturales. el mantenimiento de un estrato arbustivo supondría una minimización del impacto ecológico de las repoblaciones. de sustratos más ricos y evolucionados y con mayor humedad edáfica. y por otro lado como elemento protector edáfico ante la erosión. Jiménez Bailón et al. Teucrium polium subsp. y únicamente los tres últimos lo son en masas repobladas.27 frente al 35. donde encontramos una cobertura media de 13. Helianthemum nummularium x apenninum y Artemisia campestris subsp. Rubus ulmifolius. características todas ellas más típicas de bosques naturales que de masas repobladas. Únicamente Rosa canina. Además. hemisphaerica. . Teesdalia nudicaulis. Hispidella hispanica. son Cerastium ramosissima. Para ello. por la que se declara la iniciación del procedimiento de tramitación del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales de la Sierra de Guadarrama. y cuya cobertura es significativamente diferente en ambos tipos de pinar. Taxonomías. IMBERT J. Orden 2173/2002. Filago lutescens subsp. así como repercute negativamente en su diversidad florística.L. 2003. Orden MAM/195/2003. BOC y L. BOLETÍN OFICIAL DE LA COMUNIDAD DE MADRID. Ministerio de Agricultura..B. BLANCO J. Hepatica nobilis y Senecio adonidifolius presentan una cobertura significativamente mayor en pinares naturales. Sólo Leontodon saxatilis subsp. BOLETÍN OFICIAL DE CASTILLA Y LEÓN. Pesca y Alimentación. CABELLO J. Senecio sylvaticus. — En el estrato arbóreo se detecta una mayor cobertura del mismo en masas artificiales. Bases para el estudio de las comunidades vegetales. — Las masas repobladas presentan una menor complejidad estructural frente a las masas naturales. — En el estrato herbáceo aparecen diferencias en cuanto a la importancia cuantitativa de los biotipos que lo componen.. BRAUN-BLANQUET J. 2002. 04/03/2003. Fitosociología.. mientras que en masas artificiales los terófitos son el biotipo dominante. Ecosistemas Año XI. España. Pteridium aquilinum es el geófito más abundante. Crucianella angustifolia y Anthriscus caucalis presentan coberturas signif icativamente mayores en masas naturales. Instituto Nacional de Investigaciones Agrarias. Encuentro Medioambiental Almeriense. 221 pp. La gestión forestal de los espacios naturales protegidos: el ejemplo del Parque Natural del Moncayo. n. de 10 de Septiembre. Galium aparine. La elevada cobertura de pino presente en masas artificiales aumenta la competencia e impide que la formación aumente su complejidad estructural. Diversidad ecológica en comunidades de matorral mediterráneas-semiáridas del sureste de la Península Ibérica. Atlas fitoclimático de España. Madrid. En masas naturales son los geófitos los que adquieren mayor relevancia en la estructura.Consecuencias ecológicas de las repoblaciones de pino albar en la Sierra de Guadarrama 121 do ciertas tendencias que muestran que los suelos bajo repoblaciones son más secos y menos orgánicos. BOCM n.. Almería 78 marzo.J. Alyssum minutum y Geranium molle los táxones cuya importancia cuantitativa es mayor en masas repobladas. Valladolid.A. Petrorhagia nanteuilli. Veronica hederifolia subsp. Madrid. En cuanto a los terófitos. Cynosurus elegans. 820 pp. ARRECHEA E. por la que se acuerda la iniciación del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales del Espacio Natural «Sierra de Guadarrama» (Ávila y Segovia). España. 1979. hederifolia. hispidus. la riqueza de especies y la complejidad estructural de estas masas.. de 24 de febrero. — En el estrato arbustivo se observa una menor riqueza y abundancia de táxones con respecto a las masas naturales. TRABER C.htm CASTILLO F. 2003. n. así como un empobrecimiento en especies de ambientes ecológicos bien conservados.º 2 (mayo-agosto). Disponible en: http://www.gem. Geranium lucidum. — En el estudio de los espectros corológico y sistemático no se detectaron diferencias importantes entre las masas estudiadas. Conopodium subcarneum. debido a la abundante presencia de pino albar. PUERTAS F. La implementación de labores selvícolas encaminadas a reducir las elevadas coberturas de pino albar podrían atenuar las diferencias entre masas naturales y repobladas que demuestran los datos obtenidos en el presente estudio. presentando cerca del doble de cobertura en masas naturales.M. con los estratos arbóreo.. lutescens. 2002.. MOTA J. Gestión Forestal Sostenible de Conclusiones — En la Sierra de Guadarrama se observa que las masas de repoblación se encuentran principalmente en áreas de distribución natural de Pinus sylvestris.. 23/09/2002. fuera del dominio del melojar (Quercus pyrenaica). del Consejero de Medio Ambiente. Ediciones Blume. Vicia angustifolia. 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